Ariel Dorfman y Alicia en el Pas de las Maravillas / Entrevista a Axel Krygier / Adis a James Salter / El documental de Nina Simone

RADAR
5.7.15 / N981 / AO18

MIRNDONOS
LO MEJOR DE ASTERISCO, EL FESTIV AL DE CINE INTERNACIONAL SOBRE DIVERSIDAD SEXUAL

VALEDECIR

FISURA RESIGNIFICADA
Hay quienes afirman y reafirman que el artista callejero
Oak Oak no ve la realidad como el resto de los mortales, y, de cara a su obra, es fcil comprender a qu se
refieren. Finalmente, donde una vasta mayora solo
observara una grieta, l contempla el comienzo de
una historia. Relatos donde bloques de cementos
devienen en gritos munchianos; caos torcidos acaban siendo obra del patadn de Bruce Lee o, por qu
no, el puo de Astroboy; fisuras de estructuras se
convierten en tela del mismsimo Hombre Araa.

Dondequiera que vaya, el muchacho deja su marca: de

Bangkok a Toulouse, Newcastle o Pars, dando segunda vida a objetos a menudo devaluados. Oriundo de la
industrial Saint Etienne, donde ha pertrechado buena
porcin de sus ocurrentes y jocosas piezas de 2006 a
la fecha, el joven francs rastrea intrascendentes detalles del paisaje urbano y, ldico pensamiento lateral
mediante, les da nuevo significado. Con sobradas
referencias a iconos de la cultura pop (Los Simpson,
South Park, el universo Marvel, Mortal Kombat, etcte-

ra), dicho sea de paso. As, sus pequeas bromas

visuales que interactan con espacio y forma no
slo le han valido una saludable famita viral; tambin
le han permitido exhibir obra en galeras numerosas
oportunidades y editar libros como Urban Diversion
(2014) y Oak Oak (2011), que renen parte de una
serie que l contina engordando. Despus de todo, si
su trabajo esencialmente consiste en encontrar
imperfecciones en las calles y jugar con ellas, ha de
tener inspiracin para rato.

EL ESCUADRN Y LA TERAPIA

ADIS AL HROE KITSCH

Aunque falte ms de un ao para su estreno, el film Suicide Squad (en criollo, Escuadrn
Suicida) s que sabe cmo levantar polvareda. Y no precisamente por su argumento (aunque la historia de un grupo de megavillanos de DC Comics ejecutando misiones suicidas
para el gobierno a cambio reducir sus condenas tiene suficiente chispa para empezar un
pequeo incendio). Ocurre que, solo en los ltimos das, dos curiosos trascendidos (confirmados por miembros del elenco, dicho sea de paso) han puesto a la venidera pelcula en
el candelero. El primero? Que el premiado actor Jared Leto, que interpreta al Guasn, se
ha tomado el rol tan pero tan en serio que no ha tuvo mejor idea que enviar peculiares
obsequios a varios de sus compaeros. A Margot Robbie (en el papel de Harley Quinn, su
malfica noviecita), una carta de amor, acompaada por una cajita negra con una rata viva.
A Will Smith (Deadshot), una
caja con balas. Y al resto, un
video carioso y, claro, un
cerdo muerto.
Voil entonces la segunda
novedad. Acaso inquietado
por dichos acontecimientos,
el realizador David Ayer, a
cargo de la cinta, decidi
contratar un terapeuta para
que acompae a los actores
en el (temible, francamente)
proceso de encarnadura. As
lo explic Adam Beach
(Slipknot) en una intervi con
canal E!, al develar que el
coach de vida est en el
set para evitar que se nos
desacomoden los jugadores
y nos volvamos verdaderos
villanos. Claro que, en ese
sentido, el director Ayer no
es precisamente inocente.
Tan concentrado est en la
intensidad y crudeza del
proyecto que, como Beach
destac, quiere que nos
atormentemos a nosotros
mismos, quiere verdad. Todo
se basa en el realismo.
Mientras no salgan a cometer fechoras...

El arte kitsch est de luto, llora lgrimas de purpurina frente a la reciente muerte de uno
de sus ms grandes e involuntarios contribuidores. Se trata del norteamericano
Donald Featherstone, quien disease en la dcada del 50 uno de los objetos decorativos
ms intiles, estticamente cuestionables y populares de la historia de Estados Unidos: el
flamenco rosa, plstico pjaro que engalan jardines a diestra y siniestra desde que la
empresa Union Products comenzase a venderlos en el 57. Por muy poco dinero, le ofrecamos a la gente elegancia tropical en una caja. Hasta ese momento, solo los ricos podan darse el lujo de tener mal gusto, ironizaba el propio Featherstone en una intervi de
2007, sin dejar de recordar que su creacin fue inspirada por imgenes de flamencos
publicadas en National Geographic. En la dcada del 60, el suburbano flamenco barato,
producido en masa, artificial, inexplicable color rosa
nen era ampliamente vilipendiado como una escoria
de psimo gusto. Razn
por la cual John Waters lo
am, y llam a su rupturista
film Pink Flamingos, deleitndose con la indignacin
de la crtica. En los 70, la
generacin rebelde adopt
a la chuchera para desafiar
los lmites del arte; y la
subcultura gay lo convirti
en su mascota. El ave se
haba convertido en un smbolo de transgresin social.
En los 80, tantsimas instalaciones lo tenan de protagonista en galeras avantgarde. En los 90, era un
popular regalo de mudanza, historiza el New York
Times sobre el objeto trash
que supo transformarse en
alta cultura. Mis flamencos
han sido acusados de ser
ordinarios, pero han entretenido a ms de una generacin, ofreci en cierta
ocasin su idelogo, muerto a los 79.

5.7.15

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CON UN
MISMO
CUERPO

POR TOM LUPO

acido en el Chaco, mi primer

amigo ser un indio toba. A los
doce, familia y yo mudarse a
Buenos Aires porque la educacin ser
mejor. De la primera semana, lo que
ms recuerdo es una frase de mi padre segn la cual iba a tener que aprender a
usar las llaves, cosa que no usbamos en
mi pueblo. en donde las puertas no se cerraban, en donde nadie pasaba hambre.
Viva en un paraso sin saberlo o
pueblo chico, infierno grande?
En el secundario tuve de profe a Haroldo Conti que en vez de Educacin
Democrtica nos ley todo el ao cuentos sudamericanos y esa torcedura de
destino no pudo sino hacer lo suyo.
Despus prob con medicina y abogaca
y finalmente el destino hizo que terminara psicologa a donde recal siguiendo una mujer.
Antes de eso era redactor publicitario,
un trabajo buensimo, bien pago y mal
visto. Que dej para ser psiclogo, o ese
imposible llamado psicoanalista, pero
nunca ms de dos veces por semana.
En cuanto al esoterismo me pas que
alquil la casa de una periodista y termin haciendo una revista de rock,
Twist y gritos, una feminista, Alfonsina y
una modernosa, Banana, que prohibi
la dictadura del Proceso porque alguien
se tom el trabajo de leer el segundo
nmero y descubri que en una versin
actualizada de Blancanieves, se la llevaban en un Ford Falcon.
Hice radio y un poco de TV. Me toc
impulsar la msica y la poesa de por
aqu, pero por cosas del destino, neurosis y una pelea con un mandams del
guiso, nunca llegu a triunfar y ser famoso y tal vez ese sea mi mayor agradecimiento.

Me dedico de distintas maneras a la

poesa. Enseando, leyendo, recitando.
Soy un hijo ilegtimo del lenguaje. O
un operador. O ms bien, una operacin del mismo. Siendo muy joven, alguien en el lugar del maestro, me dijo
con un mismo cuerpo, muchas vidas. Y
tal vez vengo hacindole caso. Tuve 14
oficios. Ah... s, en cuanto a algunos
emblemas que legalicen este objeto, fui
profesor universitario, me cas siete veces, publiqu en revistas y diarios y tengo un libro anterior. Pero lo ms importante es el pequeo susurro, chisme
y secreto de este libro.
Que Dios desve vuestro camino y
podis encontraros con el mismo.

Con esta breve y concisa autobiografa se

presentaba Tom Lupo desde la solapa de
su libro Entre muebles y sombras, editado
por la editorial Grgola en 2004. Es el nico libro que Lupo firm con ese nombre,
ya que el otro al que hace referencia sin
nombrarlo es Palabras para la esfinge, cuyo subttulo es Poesa y psicoanlisis. Se
public en 1979 y lo firm con el nombre
que aparece en su documento: Carlos Galanternik. Desde hace dos semanas que
Tom Lupo se encuentra internado en estado delicado, bajo coma inducido, tras un
accidente automovilstico. La noticia se dio
a conocer a travs de un breve comunicado de radio Del Plata, la emisora en la que
estaba realizando un programa nocturno
de lunes a viernes, El Pez Nufrago. All se
seala apenas que la internacin se lleva a
cabo en un sanatorio de Capital Federal, y
que el periodista y poeta es acompaado
por su familia. El comunicado de la radio
cierra con una frase que desde Radar
compartimos: Esperamos y deseamos su
pronta recuperacin.

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5.7.15

La segunda edicin del festival internacional de cine

sobre diversidad sexual Asterisco, que se llevar a
cabo del 14 al 19 de julio, no slo busca reafirmar la
exitosa convocatoria del ao pasado, sino tambin
ampliar sus propuestas estticas y polticas. En tal
sentido, se destacan las secciones competitivas en las
que se ofrece un panorama sobre el presente de las
discusiones sobre gnero, identidades, estilos y vida
cotidiana. Se podrn ver films como El hombre
nuevo, del uruguayo Aldo Garay, reciente ganador
del premio Teddy de Berln, y la experimental y
radical Heterofobia, del argentino Goyo Anchou, y
un foco sobre la obra del espaol Eloy de la Iglesia,
verdadero pionero del cine gay durante la transicin
espaola de los aos 70.

ASIGNATURA
PENDIENTE
POR MARIANO KAIRUZ

Descubr mi condicin de homosexual cuando tena 15 aos. Lo que

supuso una crisis terrible, al sentir
una inclinacin de la que siempre haba odo hablar como algo monstruoso y antinatural. Al principio slo tuve unos contactos
fugaces y srdidos: en los vagones del metro, en las sesiones matinales del cine Carretas, o en aquellos urinarios sucios y malolientes de la plaza Tirso de Molina. Sin
embargo, cuando tena 19 aos me acost
con una compaera de estudios y descubr
que poda tener relaciones con mujeres, lo
cual me tranquiliz. Hasta que hice el servicio militar no tuve una autntica relacin
homosexual. All conoc a aquel muchacho, tuvimos unas relaciones completas y
prolongadas que duraron todo el perodo
del servicio. Al salir de la mili conoc a
Carmen. Era una camarada del partido
que militaba en la misma clula. Nos enamoramos, y esperaba que mis relaciones
con Carmen me haran olvidar mis inclinaciones homosexuales y me salvaran de
ser toda la vida un marginado.
Con estas palabras sinceras y de brutal
elocuencia se presenta Roberto Orbea Salaverry, el protagonista de El diputado,
film quiz no del todo conocido y apreciado por aqu pero fundamental en el
contexto del cine de la transicin espao4

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la. Orbea estaba interpretado por un Jos

Sacristn al borde de los 40, y su director
era una figura discutida, durante aos
ninguneada y hasta despreciada por la
crtica pero hoy de culto, dueo de una
obra arriesgada y a veces sensacionalista,
llamado Eloy de la Iglesia. Homosexual y
militante comunista en una poca primero con Franco al poder, y aun despus
de la muerte del dictador en que manifestar pblicamente cualquiera de sus dos
inclinaciones implicaba poner en riesgo
su integridad fsica y su libertad, De la
Iglesia incorpor ambas identidades a su
cine convirtindolas ms de una vez en
sus temas centrales. Han sido tantos
aos de clandestinidad, dir ms adelante Orbea, refirindose no slo a la militancia de izquierda durante el franquismo, que se ha terminado hace poco, sino
tambin a esa vida sexual que supo reprimir en su juventud y que de algn modo,
por azar o por destino, ha redescubierto,
y a la que ahora ha decidido entregarse
aunque sabe que no habr de ser aceptada ni por ajenos ni por propios, en un
momento clave de su carrera poltica.
Al combinar de manera intensa y crtica estos dos espacios que supieron ser
irreconciliables en los aos 70, El diputado funciona como una va de entrada
perfecta a la filmografa de Eloy de la
Iglesia. Hace unos pocos aos varias de

sus pelculas se vieron en las trasnoches

del ciclo Filmoteca TV; pero quienes an
lo desconozcan tendrn la oportunidad
inmejorable de asomarse a su obra a travs de esta pelcula con Sacristn, y de
otra bien distinta, anterior, titulada Una
gota de sangre para morir amando, ambas
proyectadas en pantalla grande como
parte de un foco que le dedicar al director el festival de cine lgbtiq Asterisco,
que el prximo martes 14 de julio arranca su segunda edicin.
NOTA AL PIE
Asterisco es una pelcula de ciento cincuenta horas, realizada en found footage,
que celebra una forma de estar en el mundo que tenemos las personas trans, lesbianas, gay, bisexuales, intersexuales y queers,
y que tuve el honor de codirigir con dos de
las personas que ms saben de cine, libertad y desparpajo en Argentina: Diego Trerotola y Fernando Martn Pea. As defina el festival su directora artstica, la cineasta Albertina Carri (directora de Los rubios) en su primera edicin, la del ao pasado. Este ao el equipo se repite, el festival consolida su espacio tras la exitosa convocatoria del 2014 y Carri reafirma su voluntad, como puede leerse en el sitio oficial
www.festivalasterisco.gob.ar, de dar vida a
un festival internacional de cine sobre diversidad sexual que viene a celebrar las di-

versas y mltiples maneras de ser, de amar

y de estar en el mundo; de relacionarse y
formar familias, de convivir en equidad y
respeto por las diferencias. Regresan, con
Asterisco que esta vez se desplegar a lo
largo de seis das en mltiples sedes que incluyen, entre otras, el Malba, la sala de la
Enerc en Moreno 1199, el cine Incaa Gaumont en Congreso, el BAMA Cine Arte
en Roque Senz Pea 1150 y la Casa Brandon, sus competencias internacionales de
largometrajes y cortos (en su mayora
inditos en el pas), las secciones La piel
que habito y Vampiras lesbianas y otros
monstruos homoerticos, las numerosas
actividades especiales, y los focos de autores, este aos dedicados a realizadores secretos como Jenny Olson y Hans Scheugl,
y a, por supuesto, el citado e ineludible
Eloy de la Iglesia.
LAS DOS BANDERAS
En su momento, los crticos de su propio pas no valoraron el mpetu y el riesgo de su cine; recin a mediados de los
90, cuando ya haba desaparecido del
mapa por una dcada (la que sigui a su
destructivo perodo de adiccin a la herona), fue reivindicado por el festival de
San Sebastin con una retrospectiva y el
nico libro que se le ha dedicado hasta
ahora, Conocer a Eloy de la Iglesia. Nacido
en Zarauz en 1944, criado y educado en

Madrid primero y luego (en materia de

cine) en Pars, Eloy Germn de la Iglesia
Diguez fue un autor precoz y prolfico
que ya llevaba medio centenar de ttulos
escritos, dirigidos o producidos para la
televisin a sus veinte aos. Como escribe Fernando Martn Pea en la introduccin al foco dedicado a este director, toda su obra es una extraa mezcla entre cine de explotacin y una mirada personal
y comprometida; as logr pelculas que
son tan extremas y escandalosas como reflexivas y, sobre todo, honestas. Su combinacin de imgenes chocantes, lenguaje
crudo, msica popular y actores no profesionales recogidos de los bajos fondos le
hicieron ganar el desprecio de la crtica
polticamente correcta, que siempre lo
tild de ordinario.
En la segunda parte de su impresionante
filmografa prcticamente invent un gnero propio, el llamado cine quinqui, que
puso en primer plano el mundo de los pequeos delincuentes con una voluntad de
realismo inslita en el cine espaol.
Aunque para entonces ya era, efectivamente, una suerte de cronista de mundos marginales, tras la muerte de Franco, en 1975, De la Iglesia se convirti en
el primer director abiertamente gay de la
transicin con films como Los placeres
ocultos (que cuenta la relacin entre el gerente de un banco y un chico heterosexual, proveniente de un barrio obrero,
del que se enamora y al que contrata para
tenerlo cerca); lo que como suele sealarse, no era poca cosa, teniendo en cuenta
que an estaba vigente en los primeros
aos de la democracia la Ley de Peligrosidad Social, que aprobada en los ltimos
aos de franquismo, se aplic con saa
para reprimir tanto la mendicidad y el
trfico y consumo de drogas como los
delitos llamados sexuales: homosexualidad, venta de pornografa y prostitucin.
Es precisamente el retrato de estos resabios de la represin institucional y social

que se registraban ya en democracia lo

que hace de El diputado una pelcula notable y valiosa, as como su reflejo de la
profunda contradiccin que lata en el
ncleo mismo del Partido Comunista
(espaol e internacional), que no supo
conciliar en su interior su pretendida militancia en favor de un ideario de liberacin con las luchas por la libertad sexual.
Como se deca al comienzo, queda
planteado de entrada que el protagonista
de El diputado acaba de despertar de su
larga negacin, y que por aos, con la
complicidad de su mujer, ha estado construyndose la fachada pblica de respetabilidad que le permiti avanzar en su
carrera poltica. El drama se desencadena
cuando Orbea empieza a involucrarse sexual y sentimentalmente con el joven taxi
boy Juanito, sin sospechar que ste ha sido reclutado extorsivamente por sus enemigos polticos con el propsito de destruir su bancada exponiendo su relacin
clandestina al pblico. En ese sentido, y
sin abandonar el desarrollo de la parte
sentimental de la historia, El diputado
funciona en parte como un thriller poltico que retrata un aspecto especialmente
oscuro de aquellos aos; para defenderse
de quienes buscan destruirlo, el protagonista deber antes exponer su situacin
ante el casi seguro rechazo de su propio
partido, el PCE. Haba un juego no del
todo sincero dira el propio De la Iglesia
unos cuantos aos despus de la pelcula,
consultado sobre ese conflicto entre homosexualidad y militancia comunista que
l mismo haba vivido en carne propia.
En aquella poca el Partido quera ser tolerante, emerger como un grupo abierto
donde no existan dogmatismos. Quera
ser moderno, en el peor sentido de la palabra. Y yo lo que trataba era..., bueno,
pues de llevarles contra las tablas de eso.
De hecho, logr que Santiago Carrillo y
todo el Comit Ejecutivo del PC, ya
muerto Franco, fueran al estreno de una

de mis pelculas ms polmicas, El diputado, donde la poltica y la homosexualidad jugaban a partes iguales. Lo de ellos
era un juego para buscar votos. Luego el
Partido se dio cuenta de que los votos estaban realmente en las masas conservadoras, es decir, no yendo a ver El diputado,
sino asistiendo a misa o a alguna procesin. Mirando atrs te das cuenta de que
fueron muy crueles. No hay que olvidar
que durante muchos aos llevaron una
poltica de represin y tiro en la nuca. La
dialctica se redujo enseguida. Para De
la Iglesia, el desengao despus de aos
dursimos de militancia en la clandestinidad fue atroz. Dej de creer en ellos, sin
ms. Simplemente hay que negarse en redondo a ser dogmtico.
La coyuntura poltica estuvo presente
en otros films de De la Iglesia como La
otra alcoba y Miedo a salir de noche, as como los conflictos sexuales (en la aventura
zooflica de La criatura, o en Juego de
amor prohibido), y tambin fue ganando
terreno en su obra un srdido retrato de
la delincuencia juvenil, pintura de un
universo marginal y de los destrozos sociales que la herona estaba provocando
en Madrid a principios de los 80 (de esa
veta surgen dos de sus pelculas ms taquilleras y recordadas: El pico y El pico 2).
Varias de estas cuestiones (poltica, sexualidad, delincuencia y marginalidad) ya
aparecan en la otra pelcula de De la Iglesia que se ver en el marco de Asterisco,
Una gota de sangre para morir amando,
que es de 1973 y que, aunque haca referencias explcitas a La naranja mecnica,
fue recibida originalmente como si tratara
ms de un acto de robo y explotacin del
film de Kubrick basado en la novela de
Anthony Burgess que un intento de plasmar un reflejo local de preocupaciones similares a las de aquel film. Coescrita con
Jos Luis Garci (contemporneo de De la
Iglesia pero ms prestigioso; director de
Asignatura pendiente, Solos en la madruga-

da y El crack, entre otros clsicos de la

transicin), protagonizada por Sue Lyon
(la Lolita de Kubrick) y Chris Mitchum
(el hijo de Robert), Una gota... le sirvi a
De la Iglesia, seala Pea, para formular
sus propias ideas sobre una distopa violenta, profetizar con mordacidad algunas
frivolidades que se cumplieron, hablar sobre lo que nadie hablaba y, desde luego,
introducir sus caractersticas obsesiones.
Sus ideas son tpicamente punzantes, como la terapia elctrica que transforma a
criminales y asesinos en ciudadanos respetables, o la secreta ocupacin de la enfermera protagonista que interpreta Lyon.
Siempre ha habido en m una osada
que, ms que osada, ha sido insensatez,
deca De la Iglesia. Por ejemplo, cuando
tena que sortear la censura para hacer cine. Me pareca tan aberrante aquello que
no me poda creer que intentar burlarla se
pudiera volver en contra de uno. Pero la
censura estaba ah y terminabas dndote la
hostia. Era un mundo ideolgicamente tan
homologado que no acababas de darte
cuenta de tu diferencia. Cmo te ibas a
cuestionar que t no debes ser como eres?
LOS PICOS
As como antes de sus pelculas ms explcitamente polticas De la Iglesia haba
realizado algunos thrillers y films de terror como Nadie oy gritar, con los que
asumi bastante temprano que nunca iba
a gustarles a los crticos (lo cual de algn
modo le sirvi, segn reconocera ms
tarde, de impulso liberador) entre fines
de los 70 y principios de los 80 hizo
una serie de pelculas en las que explor
la delincuencia y la drogadiccin de un
modo que, fiel al carcter irrenunciablemente personal de la mayor parte de su
obra, terminara por hacerlo caer a l
mismo. Cuando aos ms tarde ya haba
conseguido liberarse de las drogas duras,
De la Iglesia sola contar que slo haba
sido adicto a la herona por cuatro aos,
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RADAR

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entre 1983 (ao en que estren El pico,

uno de sus films ms taquilleros) y 1987,
pero que en ese lapso se le haba ido volviendo progresivamente imposible seguir
al mando de un rodaje, y el verdadero
costo lo haba pagado despus de limpiarse, con su aislamiento, un profundo
emprobecimiento econmico, la comn
discriminacin del yonqui y la depresin por la prdida de varios de sus mejores amigos por sobredosis, entre ellos sus
actores-fetiche Jos Luis Fernndez, alias
El Pirri (en 1988), y con especial dureza
Jos Luis Manzano, un no profesional al
que haba reclutado de los barrios obreros, un chico de 17 aos, casi iletrado, al
que le haba creado una carrera en base a
un trabajo intuitivo e hiperrealista en el
film Navajeros (1980) y que a pesar de la
pequea fortuna que hicieron juntos
nunca escap del todo de su esencial
lumpenaje. Manzano muri en 1992 con
una jeringa clavada en el brazo, en casa
de De la Iglesia.
Cuando en 1996 el festival de San Sebastin le dedic el citado homenaje,
Eloy llevaba ms de diez aos sin filmar.
Tiempo despus de aquella retrospectiva, tuvo la oportunidad de dirigir una
versin del Calgula de Albert Camus para la televisin, y de completar el film Los
novios blgaros, historia de amor gay inspirada en la novela del mismo ttulo de

Eduardo Mendicutti. Para ese entonces

poda decir, con dignidad: No creo que
haya hecho ningn trabajo, a pesar de la
presin ideolgica de mis comienzos, que
no responda a mi visin personal de las
cosas, a mi apetencia de hacer o no una
historia determinada. Siempre he buscado una interactividad entre el espectador
y lo que contaba. Hablar de la libertad en
el sexo, de las dificultades que tiene el
hombre de incorporarse a un medio y vivir dentro de ese medio...
Esto era en 2003, tres aos antes de
morir en un hospital, a los 62, tras la ciruga en la que deban extirparle un tumor. Hasta ese entonces, mantuvo sus esperanzas de volver a hacer pelculas con
la conviccin de sus comienzos. He tenido pasiones mayores que la droga; por
ejemplo, el cine. Ni me voy a convencer
a m mismo de que estoy bien ni a los dems hasta que no haga una pelcula. Todo lo dems van a ser divagaciones, y
quedar la sombra de la duda. Incluso
para m mismo. Pero s que mi adiccin
a la droga ha sido muy pequea comparada con mi adiccin al cine.

LAS IMPERDIBLES DE ASTERISCO

La segunda edicin del festival Asterisco se

realizar del martes 14 al domingo 19 de
julio. Informacin completa, con sedes y
horarios de proyecciones y actividades, en
www.festivalasterisco.gob.ar

AMANTES
DEL RELATO
POR ALBERTINA CARRI

o nos importa el cupo. No nos preocupa la representatividad. No hay temas

ms importantes que otros. No estamos desesperados por explicar cada una de
las letras (lgbtiq) y sus mltiples diferencias. Lo que nos importa, nos preocupa, nos desespera y nos desvela, es el cine, y la representacin, o mejor dicho la representacin cinematogrfica de un punto de vista; que nunca es uno sino muchos que
convergen en una esttica, la tica de la insolencia. Lo que nos importa es eso, la utopa de libertad, la necesidad del desparpajo narrativo para hablar de un modo de vida,
de una forma de ser y estar en este mundo y que esa forma se pueda leer en la puesta
en escena y no en una enumeracin de temas. Creo que con estas palabras comenzamos, con Diego Trerotola y Fernando Martn Pea, las reuniones de programacin de
Asterisco I, all por agosto de 2013, y como no puede ser de otro modo, el tiempo nos
fue modificando, moldeando esa idea de la representacin insolente y celebratoria de
las identidades lgbtiq. El ensaado paso del tiempo y la acumulacin de imgenes que
trajo consigo, fue rectificando nuestro camino hacia esta segunda edicin de Asterisco,
y nos encontramos con que lo narrado en la pantalla desbordaba nuestra expectativa
primaria: la de mostrar un cine que no se suele estrenar comercialmente en Argentina
y al que tampoco los festivales de moda dan mucho lugar pero que adems se entrega
al relato de los afectos, la intimidad y los goces de una comunidad tan diversa como
sus narrativas. Para dar cuenta de esto en la primera edicin de Asterisco hablamos de
found footage esa tcnica que el cine de terror tom como propia aunque vena del
underground o cine experimental como si con todas las pelculas se pudiera editar
una gran y ambiciosa obra de ciento cincuenta horas o se pudiera encontrar all al menos una pica de lo tribal, tomando como propios incluso los relatos que nos representan como abyectas, monstruosos, atroces o perversas para reivindicarlos como parte de
esa tica de la insolencia.
Ahora Asterisco cumple dos aos y con esa rozagante juventud declara(mos) que no
va(mos) a dejar de tomar la teta pero s empezar(emos) a balbucear palabras ms
complejas y a formar frases ms largas que trasciendan en el tiempo y se instalen en la
memoria. As, con esa alegra que da la boca llena de leche y el cuerpo gozoso luego de
recibir su alimento, esta edicin ampla su horizonte a relatos homo-proto-punk-hardcore, al romance criollo, a pelculas de crcel de mujeres, a cortos, largos y medios de
todos los continentes y de todas las especies y gneros, a protagonistas adolescentes,
adultos mayores, trans, queer, lesbianas vampiras y de las otras, gays e intersex; felices, amargados, desterradas y festivas. Y se da el lujo de tener obras de directores ocultos como Eloy de la Iglesia o Jenni Olson y de culto como Leonardo Favio o Peter
Greenaway. En esta transformacin necesaria e inevitable es que el festival se convierte
en cine expandido, rebasando su propia identidad y convirtindose en cita obligada
para los amantes de la cinefilia, para las amantes del relato, para todos y todas aquellos
y aquellas que estn dispuestos a ser atravesados y atravesadas por narraciones que desafan los cnones de las relaciones cis htero patriarcales capitalistas. El binario de gnero y la heterosexualidad obligatoria son una forma de dominacin por la que estamos dispuestas y dispuestos a seguir narrando hasta lograr su destruccin y empezar a
narrar de nuevo en un mar de entraable disidencia y amoroso entendimiento.

5.7.15

RADAR

SEED MONEY:
THE CHUCK
HOLMES STORY
Poca gente ha tenido una influencia tan grande sobre la cultura
gay como Chuck Holmes y sin embargo, fuera de ciertos crculos
pocos saben quin fue, dice el director Michael Stabile. Lo cierto
es que, aunque lo desconozcan hasta los cinflos ms curtidos, a lo
largo de casi tres dcadas los Estudios Falcon la exitosa empresa
fundada por Holmes fueron una mquina de hacer dinero; el mayor productor mundial de pornografa gay y, se ha dicho por ah,
los responsables de cambiar la manera en que una generacin entera de hombres homosexuales se vieron a s mismos y a su sexualidad. El documental financiado parcialmente por crowdfunding
de Stabile cuenta varias historias: la del pionero y entrepreneur
Holmes, la de Falcon, la de un gnero y una industria. Estrenado
apenas un par de meses atrs en el Boston LGBT Film Festival, Seed Money rastrea el camino de Holmes desde que era un joven
campesino de Indiana recin llegado a las calles San Francisco en
los 70, para desplegar el relato de cmo fue que dio vuelta lo que
se haca hasta entonces en el porno gay, sacndolo del limitado circuito de los cortos en super 8 para consumo en peep shows y pasar a realizar largometrajes vagamente argumentales, de un profesionalismo tcnico irreprochable, y protagonizados ya no por los
viejos leadores de mostacho sino por chicos jvenes, casi siempre
blancos y a menudo rubios y atlticos (tipo el hijo del vecino, segn algunos de los testimonios que presenta el film, aunque cualquiera dira que la mayora de estos muchachos iban al gimnasio
ms seguido que el vecino y sus hijos). Con la aparicin del video
hogareo, Holmes amas una fortuna, pero cuando se propuso
destinar una parte de lo que haba ganado a financiar el creciente
movimiento de derechos gays de su pas, se top con el prejuicio
de los militantes hacia un tipo de cine que, crean, los desprestigiaba y vulneraba sus reclamos. El porno es una parte importante de
la comunidad gay dice Stabile Desde chico me ayud a entender
quin era. Mi intencin con esta pelcula era contar la historia de
cmo la comunidad gay ha cambiado, de ser un grupo de marginales a los pasillos del Poder. Hablan, entre otros, algunas de las
estrellas de sus producciones (como Jeff Stryker, John Rutherford,
Chi Chi LaRue) y a varios de los fans de Falcon, entre ellos Jake
Shears y John Waters quien, como siempre, con su humor y tranquilo desparpajo levanta la pelcula hasta el infinito.

EL HOMBRE NUEVO

DE GRAVATA E UNHA VERMELHA

Cuando naci, en Nicaragua, lo llamaron Roberto; cuando pudo elegir, se llam a s

misma Stephania. De chico, lo adopt una pareja de militantes tupamaros en medio de
la revolucin sandinista; pero ms tarde, cuando adopt su identidad de mujer, fue expulsada de la familia. A partir de ah conoci la indigencia y la vida marginal en la capital uruguaya (donde sobrevive trabajando como cuidacoches). El hombre nuevo, la ms
reciente pelcula del cineasta uruguayo Aldo Garay, sigue a Stephania en su presente, y
la acompaa a su reencuentro con su pas natal, donde alguna vez fue indica la presentacin oficial del film hijo, hermano y nio alfabetizador de adultos, y donde hoy
desea ser aceptada como la mujer que es. Tambin incluye algunas grabaciones que el
director guard de ella, realizadas cuando la conoci, veinte aos atrs. Sin nfasis pero
con la crudeza de lo que se expone por s mismo, aparecen la discriminacin, el sexo pago, el trabajo ms que informal en la edad adulta y la aoranza por aquellos sueos revolucionarios de los que Stephania fue parte, escribe Marta Dillon en el catlogo de
Asterisco. Sin embargo, el supuesto hombre nuevo de los ideales de las dcadas del sesenta y setenta se revela con la crueldad que impone ese masculino hegemnico que slo deja para ella exclusin y desarraigo.
De Garay (Montevideo, 1969) se conoci en Buenos Aires parte de su filmografa a
travs del Bafici, y hace unos meses su pelcula anterior, El casamiento sobre el amor
entre un hombre de 70 aos y una transexual de 65 tuvo un paso fugaz por salas comerciales locales. El hombre nuevo viene de estrenarse en el Festival de Berln, donde
gan el premio Teddy al mejor documental lgbt. Lo que ac estamos viendo son muchas historias dijo el director en una entrevista en el festival alemn. No es solamente el hecho de ser trans: ac estamos hablando de abusos, de madres y padres que no se
hacen cargo, del abandono, del fracaso ideolgico del proyecto de la construccin de
un hombre diferente. Hay muchas cosas. Y quizs en el conjunto de todas estas cosas
pueda entrar la agenda de derechos. (Pero) me parece ms interesante que cada uno se
enfrente con esta pelcula y tome el punto que quiera. Que tengo una curiosidad natural, sobre todo del lugar donde vivo, porque creo que Uruguay, como casi todos los
pases, est lleno de marquesinas y cosas que realmente nunca dejan ver lo que somos,
porque lo ms interesante no se ve.

A los lectores argentinos tal vez su nombre no les diga mucho, pero lo cierto es que el
historietista y guionista Laerte Coutinho (1951), ms conocido como Laerte a secas, era
ya bastante famoso en Brasil por sus publicaciones en Balo, O Pasquim, Chiclete com
Banana y la Folha de S. Paulo cuando hace tres aos volvi a presentarse al mundo, ahora como mujer transgnero. La primera parte de su obra est marcada por el compromiso
poltico y en los 80 form parte de la escena under de los comics de su pas, junto con
personajes como Angeli y Glauco (con quienes hizo la tira Los tres amigos). En 1985 public su primer libro, O Tamanho da Coisa, una coleccin de sus historietas. En 1991, la
Folha de S. Paulo empez publicar su tiras cmicas Piratas do Tiet, que dieron paso a
su propia revista. Tena 58 aos cuando se declar travesti, declaracin de identidad que
lo puso en las tapas de las revistas. En una entrevista con Maitena publicada dos aos atrs
en el suplemento SOY, Laerte cont cmo, tras una vida de heterosexual casado y con hijos, a fines del siglo XX reconoc y acept mi deseo exclusivo por los hombres y cmo en
su personaje de historieta Hugo, que siempre haba sido su alter-ego, empez a volcar los
cambios que estaba experimentando en su vida: A veces Hugo se travesta, pero siempre
con una justificacin ms o menos consistente, como por ejemplo escaparse de la mafia.
Pero en 2004 aparece en una historieta travistindose sin razn obligada, digamos que se
traviste por nada, por el puro placer de la cosa. All fue que una amiga me contact por
email y me pregunt si eso que estaba haciendo Hugo no podra tratarse de un deseo mo,
me pregunt si no me interesara conocer a otras personas con el mismo deseo. All comprend que no se trataba de una ficcin sino de un deseo real y lo mejor posible! Todo
eso represent un salto muy grande en mi vida y una abertura enorme para mi modo de
ver las cosas y tambin de crear, de trabajar. Laerte es hoy, adems, uno de los artistas famosos que la psicoanalista y doctora en artes de la Universidad de San Pablo (y cineasta)
Miriam Chnaiderman ha convocado para las entrevistas que conforman su pelcula De
gravata e unha vermelha, junto con Ney Matogrosso y la estrella Rogria, y varios jvenes
diseadores de indumentaria, performers, maestros y fotgrafos, que han asumido diversas identidades sexuales y que componen, a partir de sus historias de vida individuales, un
retrato colectivo de adversidades, prejuicios, sufrimientos y alegras.
Laerte estar presente el prximo viernes 17 para mantener un dilogo abierto con Maitena
en el que ambas estrellas del comic analizarn los gneros del relato en vietas hoy.

THE DUKE OF BURGUNDY

La naturaleza de la relacin entre Cynthia (Sidse Babett Knudsen) y Evelyn (Berberians Chiara
DAnna) puede no ser del todo sencilla de discernir en un principio. A simple vista, la primera es el
ama de la casa y la otra su aparentemente sufrida mucama, a quien Cynthia humilla con encargos
domsticos. Pero si las seguimos un rato veremos que a veces el orden de mando y dominacin se
invierte, o vacila. Tardaremos un poco en comprender las reglas de esta amistad/ sociedad/ amoro
sadomaso, entre dos que llevan un tiempo indefinido pero en apariencia de largos aos juntas, en la
misma casa, y que Evelyn no slo no es una vctima de este juego ertico de sumisin sino que es de
hecho la que lleva las riendas, la que escribe (literalmente) el meticuloso guin por el que ambas
guan sus juegos. Alguien ha definido la convivencia entre las dos protagonistas de The Duke of Burgundy, tercera pelcula del ingls Peter Strickland (el de Katalyn Varga y Berberian Sound Studio) como un paraso de perversin, y aunque la definicin parece cargarla de negatividad, toda la crueldad y el sufrimiento que marcan su dinmica son a la vez muy cercanos al placer y la pulsin sexual.
No estoy interesado en el hecho de que Cynthia y Evelyn sean gays, me refiero a como contrapunto a los heterosexuales. Son todas mujeres en la pelcula, as que no hay contrapunto. No estoy interesado en saber por qu Evelyn es como es; es una pelcula acerca de cmo funciona esta pareja, cmo encuentran su comn acuerdo, ha dicho Strickland. He intentado crear un mundo. Un mundo en el que puede ser increblemente ertico para Evelyn que le ordenen que frote la espalda de su
amante, pero que cuando Cynthia necesite de verdad que la froten por razones mdicas, Evelyn
simplemente no estar interesada en hacerlo. Creo que hay que cierta similitud entre los masoquistas y los cineastas en lo que hace a los niveles de control (que se detentan en ambas especialidades),
y en cmo, cuando todo se est desmoronando, ellas an se aferran a sus guiones. En otras palabras, otra pelcula de Strickland sobre el cine (como Berberian), y tambin sobre mariposas muertas
coleccionadas como fetiches, sobre ropa interior sucia, lluvias doradas (en el sentido ms porno de
la expresin) y homenajes a Jess Franco y al erotismo del cine europeo de los 70, que nos mete literalmente entre las piernas de sus protagonistas, en lo ms profundo y lo ms oscuro.

RADAR

5.7.15

SER O
NO SER
Hijo de inmigrantes cultos y bohemios, Axel Krygier fue al colegio con Diego Frenkel y Kevin
Johansen y, a los dieciocho aos, ya estaba componiendo msica para El Cl del Claun en el Parakultural y
subindose al escenario con Luca Prodan. Desde entonces no par de hacer msica, como parte de La Portuaria, y
colaboraciones con Soda Stereo, adems de trabajos para publicidad. Pero recin a los treinta aos public su primer
trabajo solista y defini su estilo inclasificable, eclctico, con letras absurdas, llenas de inteligencia y humor. Ahora
acaba de editar Hombre de piedra, su nuevo y notable disco de canciones impredecibles en el que tocan y colaboran,
entre otros, Fernando Samalea, Sofa Viola, Juan Ravioli, Ezequiel Cutaia, Mara Ezquiaga o Daniel Melingo.
E N T R E V I S TA

POR JUAN IGNACIO BABINO

os Krygier son de Polonia. Se casaron los abuelos, en el barco, en viaje,

escapando de la guerra. Ioine que
aqu enseguida pas a ser Juan vendi estampitas, tuvo un bar en Paysand, tambin compra y venta de oro. La rama materna tiene alguna raz en Suiza y Rusia.
De ah vienen, entonces, los padres de
Axel, que vivieron en el centro de Buenos
Aires hasta que se mudaron a una casa a
punto de demoler en Belgrano R.
Y en esa casa naci Axel en 1969. A la
vuelta su pap tena la oficina era psiclogo y trabajaba en seleccin de personal y
al lado haba funcionado, hasta su demolicin, el Hotel Melancola, lugar bohemio
por donde haba pasado su padre y, entre
otros, Violeta Parra. Yo viv en un barrio
que de a poco fue desintegrndose cuenta. No era el Belgrano paquete. Lindo barrio, que disfrut y sigo disfrutando porque
de Colegiales me voy caminando a las plazas que hay por all. Mi viejo era corte intelectual rebelde, beatnik. Y mi vieja es
otro palo. Es la parte ms burguesa de la
familia, sobre todo ms cultivada, no burgus en el sentido conservador, sino ms libre pensador, ideas humanistas. Mis otros
abuelos eran socialistas, tipo obrero y ste
era ms tipo intelectual. Tengo esos dos lados. Con el tiempo uno va entendiendo
esas cosas. Pero creo que cualquier persona
de Buenos Aires es como que pierde su
cultura originaria, por decirlo de alguna
manera. Y si sos de la ciudad te mezcls
con todo. Suizo? S, yo puedo comer la
fondue y tener cosas que me vinieron de
ah pero mi cultura es la de Buenos Aires,
urbana. Mis padres por ejemplo no tomaban mate. Yo s, claro.

5.7.15

RADAR

A los diez aos, despus de ver a Egberto Gismonti haba ido con sus padres,
que tenan la posibilidad y eran habites
de la msica en vivo pidi que le regalaran una flauta. Me acuerdo de ver y pensar quiero eso, necesito eso!. Y all empez a estudiar. En la secundaria coincidi
con Alejandro Tern y Diego Frenkel, entre otros, con quienes compartira a lo largo de su vida ms de un proyecto musical.
Y tambin fue en la secundaria que particip de cuanto grupo o banda hubiera.
Estuve en la banda de Diego Clemente,
un grupo folclrico onda lo que sera hoy
Aca Seca Tro, que se llamaba Rama y estaba buensima. Despus de ver a Ua Ramos en vivo qued prendido de la msica
andina y al poco tiempo me vinieron a
buscar otros pibes del colegio que tocaban
esa onda y yo no lo poda creer. Estuve en
Instruccin Cvica con Kevin Johansen
tambin. A los dieciocho se compr una
porta estudio ya tocaba flauta, saxo y algunos otros instrumentos de viento y
cuenta: A esa edad empec a grabar msica y a los diecinueve hice mi primer trabajo que fue para una obra en el Parakultural
para El Cl del Claun con Batato Barea y
dems. Tremendo, ochentoso. Ah tuve
que componer por encargo por primera
vez en mi vida y despus lo segu haciendo
durante mucho tiempo.
UNA ESTTICA PUNTIAGUDA
Es alguna tarde de 1987 y Axel en colectivo, auriculares puestos escucha que
en el programa al que l estaba llevando
(Submarino Amarillo con Tom Lupo), por
segunda vez, uno de esos casettes que el
mismo grababa, est Luca Prodan. Hablando, jodiendo. Al llegar, Luca ya no estaba pero, como l haba llegado tarde, lo

dejaron para el final del programa. Prodan

vuelve y dice, escuchando esos temas de
Axel: est buensimo. Yo estaba mucho
con el absurdo, dibujaba, una esttica muy
puntiaguda, entre cmico y truculento.
Eso lo quise llevar a la msica modificando
la altura, poniendo la voz al revs, variando
velocidades. Ese cassette tena un tema que
se llamaba Cucucu chuchu, que era algo
que se repeta durante todo el tema y arriba una letra que deca como ests, cmo
ests, pulgas y mosquitos ya no molestan
ms, es la msica que avanza y retrocede a
la vez. Nos volvimos a encontrar un par de
veces, ah lo conoc a Marcelo Albiser que
era pianista clsico. Recuerdo que Luca le
deca: pero no sabe tocar blues. Luca era
malsimo y a m me daba miedo. Me trataba con deferencia, lo que para m era increble. Una noche me invitaron a tocar en el
Parakultural y fui con el saxo y despus de
presentarme en el escenario bajamos y el
pblico nos rode y empez a corear Oh,
oh oh oh... peace and love y yo con el saxo
y Luca cantando. Ese fue el momento mgico con l. Despus me dijo que se iba a
Crdoba y que cuando volva nos juntbamos. Y a los pocos das muri. Vale la pena buscar en Internet el audio donde Luca,
en algn programa de radio y pocos das
antes de morirse, dice: Hay un tipo ac
que no es conocido para nada, que se llama Axel. El toca saxfono (as lo pronuncia) y en su casa hace cosas con teclados y
batera electrnica que no son blanditas e
insignificantes como Los Encargados. Son
cosas con humor y muy buenas cosas. Seguro que va a llegar a ser muy famoso (...)
Y encima es un sper buen tipo.
ECHALE SEMILLA
Fue entonces que, desde aquel trabajo

para El Cl del Claun, Axel no par de hacer msica. Despus de ah hice cosas menos heroicas, como pelculas y obras de
danza.Ya tocaba teclados ah. Hice mucho
danza y cine. No le dira laburo como se
entiende el laburo de msica para. En un
momento lo que s hice entre los veinticinco y los treinta, fue trabajar bastante en
publicidad. Siempre desde un lado autogestionado, nunca tuve empleados, aunque
los podra haber tenido. La vi y dije ni en
pedo. Es otro tipo de aproximacin a la vida, no te digo que a veces no me arrepienta, pero eleg un camino un poco ms
complicado que es el de hacer tu propia
msica. Entre 1992 y 1995 form parte
de La Portuaria eso tom mucho tiempo, un par de aos de giras intensas que lo
aprovech bien, creo que en ese momento
me profesionaliz. Empec a cantar un poco ms y qued algo ah que me interes
seguir, empec a cantar y a bailar y me gust. En 1997 particip de la gira El ltimo concierto de Soda Stereo, a la vez que
participaba como colaborador y/o sesionista de varios proyectos y empezaba a animarse con algunas cosas propias; como por
ejemplo Mulo, brevsimo grupo que formaron con Alejandro Tern para tocar sus
canciones y que tuvieron una nica pero
muy buena presentacin en vivo en 1993
donde se acompaaron por los msicos de
La Portuaria; y tambin Rosas del Hampa,
banda que comparti con, entre otros, Divina Gloria, Sebastin Schachtel y Christian Basso. Iba tibiamente acercndome a
hacer algo donde estuviera ms expuesto y
comprometido, dice.
Ms all de todo el recorrido que llevabas encima, es recin a tus treinta aos
que edits tu primer trabajo propio...

S. Mientras pasaba todo eso segua

FOTO: NORA LEZANO

No soy purista. Los estilos

me entusiasman pero la
identidad de la msica no te
representa completamente.
En mi base hay Beatles,
la primera psicodelia de Pink
Floyd, el primer rock nacional.
AXEL KRYGIER

dndole por el lado de la edicin, el

copy y paste que me enloqueca. Trabaj
en eso hasta que s, en un momento dado tena un material del que poda decir
bueno, esto es un disco. Gracias a gente
como Fernando Samalea, que me empuj mucho a que me jugara. Tard bastante y hay una especie de disco que hice
pero que no edit. Pens mucho, demasiado quizs, y en ese momento la posibilidad era sacarlo en cassette. Ao 92
ms o menos, ya tena un material, una
cantidad de temas como para editar pero
no me decid. Es difcil. Es un paso que
tens que dar y siempre te pregunts:
vale lo mo, hay tantas cosas buenas que
por qu lo mo va a valer? Si yo no s
esto y no se aquello, si sueno mal o no se
tocar bien? Despus, entre justificaciones, me anim.
En cuestin, su primer disco Echale Semilla fue editado en 1999 a travs de Los
Aos Luz y consigui rpidamente sus repliques en Europa: lo editaron en Espaa y
muchas de sus canciones aparecieron en
varios compilados que se colaban en ese
continente y en Asia. Y durante ese tiempo, si bien no se radic en Europa, s pas
buena parte del tiempo all, ms precisamente en Espaa. Le siguieron Secreto y
Malib (2003), Zorzal (2005) y Pesebre
(2009), todos editados aqu por el mismo
sello. Y tuvo el tiempo y las ganas y se dio
el gusto de armar junto a Christian Basso
el Sexteto Irreal, proyecto que en su idea
primera era poder tocar los temas solistas
de ambos pero dada la conformacin total
la banda se completa con Alejandro Tern
en vientos y cuerdas; Fernando Samalea,
batera, percusiones y bandonen y Manuel Schaller, theremin y samplers el grupo termin editando un disco propio Jog-

ging (2010) de un vuelo y una musicalidad

poderosa. El grupo est y no est y siempre fue as y seguir as y espero que sigamos tocando porque pasan cosas que no
pasan en nuestros shows independientes de
cada uno. Es muy divertido ver a esos campeones tocar, dice.
Los discos y las canciones de Axel
Krygier son tan eclcticas como inclasificables. Canciones sin bordes. En ellas
pueden sonar cosas como la chanson,
msicas de races criollas, afros, clsicas
o barrocas, tango, funk y msica disco,
voces distorsionadas, sampleos y ruidos
de los ms diversos, silbidos y dems: cadveres exquisitos que vienen de un lugar que no se sabe cul es, que van hacia
otro igual de desconocido y que, en su
punto equidistante hay algo: el goce.
No soy purista. En absoluto. Digamos
que los estilos me entusiasman hasta el
punto que me choco con algo que no
soy yo. Por ejemplo, el jazz. Me encanta
y hay que tener un talento especial para
tocarlo pero la identidad de la msica,
en un punto, no te representa completamente. Yo he buscado algo que me represente ms cabalmente. En la base de
mi msica hay Beatles a fondo, la primera psicodelia de Pink Floyd, que se escuchaba mucho en casa, el primer rock nacional. Axel recuerda algunos juegos
que hacan con su hermano (Ruy, tambin msico): cada uno se ubicaba en
una habitacin diferente de la casa y
componan, a lo lejos, las partes de una
misma cancin. As, por ejemplo, podan llegar a cantar era un msico famoso, pero se dej llevar y ahora est tirado
en medio de la calle y ya no puede ni
cantar imitando corporal y gestualmente a Sandro. El explica: En casa haba

una mucama que escuchaba la radio, y

no era la msica que escuchaban mis viejos: escuchaba Camilo Sesto, por ejemplo. Dick el Demasiado dice que l se influenci por la cumbia escuchando la
msica que le gustaba la mucama en su
casa. Y eso es completamente cierto. Nos
influencia lo que est cerca nuestro. No
hace falta que venga o que estemos culturalmente preparados. Eso siempre estuvo ah como una materia rica. No algo
que est ah para burlarse sino que le da
un condimento a las cosas que por su
contraste produce placer. Al mate y al
folclore lo llev yo a mi casa.
PALEOLTICO
Este es el primer y unico disco mo
que podra ser el de una banda. Axel se
refiere a su nueva y notable produccin
Hombre de Piedra y a la banda que lo
acompaa: Diego Arcaute (batera),
Juan Ravioli (guitarras), Ezequiel Cutaia
(bajo) y Manuel Schaller (theremin). El
disco adems cuenta con la participacin de Sofa Viola, Daniel Melingo,
Rodrigo Muhamad Habibi el Rodra
Guerra, Mara Ezquiaga. Juda Warsky,
Samalea, entre otros. Hombre de piedra
es, de alguna manera, el disco ms cauto, ms moderado en toda la discografa
de Axel. No slo por su duracin once
canciones, menos de cuarenta minutos
sino tambin por su sonoridad. Es un
disco mucho ms discreto que los otros
a nivel tmbrico, dice l. Hay s, otra
vez, una variedad de cosas: lo disco y
funk en Lo tendr que adivinar, lo
balcnico en Changarn, esa especie de
dub que es Esa paz, tan hipntica en
su comienzo; el spaghetti western en
Mosquito, el reggae que luego se

vuelve medio guajira en su msica y tan

bolero en su letra en Alcohol. Entender a este disco como una obra conceptual resulta un poco exagerado aunque
s se puede y se debe sealar que hay
cierta idea que lo subyace y cruza: por
un lado el nombre, el arte de tapa, algunas de las canciones y de los dibujos hechos por el propio Axel se deben a algunas obsesiones que siguieron al msico
durante un buen tiempo: el libro El pensamiento salvaje de Claude Lvi-Strauss
y un documental sobre La Caverna de
Lascoux: Vi las esculturas que haba,
las pinturas, que se correspondan con
constelaciones como la osa mayor, con
mapas de la luna, el recorrido de la luna
pero hace 35 mil aos. Entonces, la
historia que venimos hacindonos del
uga uga uga de dnde viene?.
La cancin Tiempo y tierra puede vincularse con eso que dijiste hace algunos
aos, a tu vuelta de estar un buen tiempo afuera: Asum mi pueblo?

S. Es una cancin al barrio. Esa sensacin de estar pisando las mismas calles de
hace cuntos aos. Planchando la tierra
curvando el espacio eso de ir en un planeta redondo pisando y pisando. La letra podra ser un tango. Pero en eso me gusta
ms el rock and roll que el tango para expresarme. No me pongo el jopo de Elvis,
pero estoy ms cerca del jopo de Elvis que
del funyi del tango. Despus de Manal qu
se puede decir. O sea, est todo ah.
En algunas canciones se escuchan algunos pasos de fondo. Pasos que bien podran ser los del propio Axel que, como
deca en esa cancin que a Luca le gust,
avanzan retrocediendo. Como dice en este disco: de adelante para atrs iluminando milenios.

RADAR

5.7.15

LUNES 6

MARTES 7

Boris Big Band

Fan

Marcelo Pombo

Nora Lezano es una artista que se expresa a travs del lenguaje fotogrfico, con el foco puesto,
aunque no exclusivamente, en el universo del
rock. No es reportera grfica: la msica y los msicos son el tema de su obra artstica y su valor
no radica en haber estado en el momento justo, sino en lo que ella decidi hacer en ese momento. La muestra resume en 400 fotos extraordinarias un mundo de historias que anudan la
poca que va de 1990 a la actualidad, del backstage al escenario, de la imagen autntica a la
verdad del artificio. Hasta el 26 de julio.
En el Centro Cultural Recoleta, Junn 1930.
Gratis.

La exhibicin rene un conjunto de obras del artista seleccionadas por la curadora Ins Katzenstein desde sus inicios en la dcada del 80 hasta
la actualidad. La produccin de Marcelo Pombo
es recorrida a travs de los distintos lenguajes
que el artista adopt en su carrera. Dice la curadora que el artista "propone una comunin esttica y emocional con los procedimientos, lenguajes y materiales de las llamadas "artes menores"
y de los grupos sociales que estn ms devaluados en las jerarquas sociales y estticas.
Hasta el 16 de agosto.
En la Coleccin de Arte Amalia Lacroze de Fortabat, Olga Cossettini 141. Entrada: $ 60.

FOTOGRAFA

ETCTERA

FOTOGRAFA

AGENDA

DOMINGO 5

Fundada en 2011, contina por quinto ao consecutivo presentndose cada domingo. En sus
shows transita a travs del repertorio la historia
estilstica de las grandes Big Bands de jazz, abarcando una seleccin de temas tradicionales de
los aos 30 y 40 hasta la actualidad. La banda
est integrada por 3 trompetas, 2 trombones, 5
saxofones, guitarra, piano, bajo y batera. Entre
los msicos que la integran se destacan Mariano
Svori, Gustavo Musso, Richard Nant, Juan Cruz
de Urquiza y Cirilo Fernandez, entre otros. Director: Daniel Camelo. Hoy: Especial Thad Jones.
A las 20.30, en Boris, Gorriti 5568.
Entrada: $ 120.

Haciendo escuela en blanco, negro y

gris. Inaugura la muestra conjunta de Diego Ortiz

Mugica, Cecilia Basualdo, Sofa Bensadon, Pablo
Miarro y Francisco Provedo; todos ellos profesores de la Escuela de Fotografa dirigida por Ortiz
Mugica. La muestra comienza hoy y el sbado 11
de julio, a las 15.30 hs, se realizar una recorrida
junto a los autores. Hasta el 9 de agosto.
En el Museo Lucy Mattos,
Av. del Libertador 17426, Beccar (San Isidro).

CINE
Anton Corbijn

En el marco del Festival de

Cine Holands, ciclo que rene un conjunto de
films relacionados a artistas y museos; y que revisita la obra de directores como Heddy Honigmann, Pim van Hoeve, y Hans Pool, entre otros.
Este documental subtitulado Inside Out, de
Klaartje Quirijns, sigue al artista mientras desarrolla su trabajo como fotgrafo y cineasta.
A las 19, en el Museo Nacional de Bellas Artes,
Av. Figueroa Alcorta 2280. Entrada: $ 30.

Sraphine Du Cinma Cinma contina su

ciclo de Accin Interior con el film de Martin Provost, biopic dedicada a la vida de la pintora francesa Sraphine de Senlis. A comienzos del siglo
XX, un marchant de arte alemn alquila una casa
en Senlis para poder escribir y descansar. All
descubre que la mujer de la limpieza, Sraphine,
de origen humilde y ya entrada en los cuarenta,
pinta cuadros en su tiempo libre.
A las 18.30, en Fundacin Columbia,
Jorge Luis Borges 2020. Entrada: $ 40.

Jodorowsky`s Dune Al igual que el

Quijote de Terry Gilliam, o tantos otros proyectos

que quedaron en el tintero, la adaptacin que Alejandro Jodorowsy quiso hacer de Dune sucumbi
a una suerte de maldicin. Eso s, ms all de los
dos aos de trabajo y los millones de dlares gastados, lo que queda de aquella pelcula que pudo
ser es la huella de algunos de sus geniales participantes: desde Giger al propio Jodorowsky. ltima
funcin de esta versin dirigida por Frank Pavich.
A las 20.30, en BAMA,
Av. Roque Senz Pea 1150. Entrada: $ 50.

l
Para aparecer en estas pginas se
debe enviar la informacin a la redaccin de Pgina/12, Sols 1525, o por
Fax al 4012-4450 o por e-mail a

agendaderadar@gmail.com

Para que sta pueda ser publicada

debe figurar en forma clara una
descripcin de la actividad, direccin,
das, horarios y precio, a lo que se
puede agregar material fotogrfico. El
cierre es el da mircoles, por lo que
para una mejor clasificacin del material se recomienda que ste llegue
los das lunes y martes.

10

5.7.15

RADAR

MSICA
Jacinto y Flores Grandes referentes del

jazz argentino, el pianista Hernn Jacinto y el

multiinstrumentista Ramiro Flores forman un do
que domingo a domingo decide romper las casillas de los gneros y reinterpretarlo todo junto a
un msico invitado. Hoy une fuerzas junto al do
el pianista y compositor Carlos Negro Aguirre.
A las 20.30, en Vuela el Pez, Av. Crdoba 4379.
Entradas: $ 100.

Playmobil

"Cuando mi hija tena dos aitos,

le entregu un par de figuras de Playmobil y fue
conmovedor verla comenzar a hilvanar una hermosa historia. Ella contina jugando con algunas
de mi poca y otras ms nuevas", afirm Juan
Dethloff, dueo de esta exhaustiva coleccin de
Playmobils que podr visitarse hasta el 31 de julio.
En el Museo del Banco Provincia,
Sarmiento 364. Gratis.

Jornadas Joyce

Celebrando los 70
aos de la primera traduccin del Ulises de Joyce al castellano, y una nueva traduccin argentina de esa obra, estas jornadas que comienza
hoy y continuar maana contarn con la presencia de especialistas y traductores nacionales
y extranjeros, quienes discutirn cmo fueron
traducidas ambas versiones, su importancia respecto de las realizadas en Espaa y cmo es la
lectura irlandesa del libro.
A partir de las 18, en la Biblioteca Nacional,
Agero 2502. Gratis.

Jaime Serra A todo el mundo le encanta

hablar de m, es una conferencia a cargo del artista multidisciplinario y periodista espaol, en el

marco de MediaLab CCEBA. Destacado en el terreno de las prcticas artsticas mediante el uso
de la infografa como herramienta y los datos como materia prima, aqu presenta una charla tambin titulada Infografa, datos y verdades.
A las 19, en CCEBA, Florida 943.
Gratis.

CINE
Avec Dd

En el marco del ciclo de documentales Esperando al DocBuenosAires 2015,

organizado por la Alianza Francesa y el Festival
DocBuenosAires, es proyectado Con Dd, de
Christian Rouaud. El film de 2012 presenta a Dd le Meut, un msico virtuoso, burlesco, enamorado del idioma bretn.
A las 19, en la Alianza Francesa, Av. Crdoba
946. Entrada: $5.

MSICA
La Bomba de Tiempo

En su dcima
temporada de presentaciones de lunes, el grupo
de percusin contina experimentando con los
sonidos, guiados por la improvisacin con seas.
Este seleccionado de percusionistas crea conciertos nicos e irrepetibles, ya que su msica va
generndose a travs del dilogo entre los msicos y el director. En cada presentacin, la Bomba
interacta con el pblico, que aporta su energa
desde el baile y la escucha, creando as un verdadero ritual del ritmo y la percusin.
A las 19, en Ciudad Cultural Konex,
Sarmiento 3131. Entrada: $ 90.

El alma de La Boca

La muestra del fotgrafo Eduardo Grossman presenta ms de treinta

retratos de pintores y escultores del barrio. Una serie de fotografas tomadas en los ltimos dos aos,
en los lugares de trabajo, en los talleres de cada
uno de ellos, a quienes Grossman describe como
herederos de una dinasta de artistas de estirpe
bohemia y popular que se inspiraron en esta encrucijada nica de suburbio, inmigrantes, arrabal, puerto y ciudad para ofrecernos su universo creativo.
En el Museo Benito Quinquela Martn,
Av. Don Pedro de Mendoza 1835. Gratis.

ARTE
Situaciones breves El ciclo, tambin ti-

tulado Acciones, poesa y ritual, inaugura esta tarde,

proponiendo una nueva dinmica. El ttulo, a su vez,
remite a una obra de Liliana Porter a quien citan a
modo de agradecimiento y homenaje. El artista
plstico Daniel Joglar es el primero del ciclo y quien
propone una Lectura en accin: notas, declaraciones, registros y poemas se incorporan al espacio.
A las 17, en Ruth Benzacar,
Juan Ramrez de Velasco 1287. Gratis.

Miquel Barcel

La cermica como lenguaje es el nombre de la conferencia que presenta al gran artista espaol. Barcel, siempre en
continua experimentacin con todos los lenguajes del arte, ha hecho de la cermica o el barro
cocido su forma, al punto de considerarlos una
nueva forma de pintura. En dilogo con Francisca
Llad Pol (Universidad de las Islas Baleares) analizarn las producciones ms radicales, que van
desde las efectuadas en Mali hasta su intervencin en la Catedral de Mallorca.
A las 18.30, en el Centro Cultural Recoleta, Junn 1930. Gratis.

MSICA
Cecilia Pahl

La cantante interpreta la nueva escena musical del litoral en Litor Neo, su segundo disco. Una decena de canciones compuestas por autores consagrados como Coqui
Ortiz, Jorge Fandermole, Guillermo Klein, a los
que se suman jvenes compositores como Sebastin Macchi. En la interpretacin de estas
composiciones la acompaan Macchi, en piano;
Matas Arriazu en guitarra y arreglos; Fernando
Silva en el contrabajo y bajo elctrico, y Mariano
Tiki Cantero, en percusin y batera
A las 21, en Caf Vinilo, Gorriti 3780.
Entrada: $ 100.

Brian Anadon Junto a Ezequias Aquino en

saxo alto, Leo Tegli en guitarra, Horacio Acosta en

piano y sintetizador, Ramiro Rey en bajo y Anadon
en batera suben al escenario a presentar la primera produccin del quinteto, Brocken Chances.
A las 21.30, en Boris Club, Gorriti 5568.
Entradas desde $ 70.

MIRCOLES 8

JUEVES 9

VIERNES 10

SBADO 11

Rimon

Traigo un pueblo en mi voz

Cine mudo

De vez en cuando, corresponde revisar el canon

y comprobar que los clsicos lo son por algo.
Durante julio, Malba Cine presenta un ciclo compuesto por una serie de films indispensables del
perodo mudo. Se vern obras de Carl T. Dreyer,
Sergei Eisenstein, Jean Epstein, Buster Keaton,
Fritz Lang, F. W. Murnau y Vsevolod Pudovkin,
entre otros. La gran mayora se exhibir en copias nuevas y con acompaamiento de msica
en vivo, compuesta e interpretada por la National
Film Chamber Orchestra. Hoy, Octubre, de Sergei Eisenstein; y Tab, de F. W. Murnau.
A las 18 y 20, en Malba,
Av. Figueroa Alcorta 3415. Entrada: $ 45.

El castillo en el cielo

Un concierto en homenaje y recuerdo de Mercedes Sosa que contar con la participacin de la

Orquesta Nacional de Msica Argentina Juan de
Dios Filiberto, el Coro Polifnico Nacional, las
voces de Ramona Galarza, Julia Zenko, Liliana
Herrero, Lidia Borda, Luciana Jury, Fabiana Cantilo, Hilda Lizarazu, Lorena Astudillo, Nadia Larcher, Lilian Saba en el piano, Micaela Chauque
en aerfonos, y un grupo de nueve excelentes
msicos populares que forman la base del espectculo.La direccin musical y arreglos estarn a cargo de Popi Spatocco.
A las 21, en Centro Cultural Kirchner,
Bouchard 350. Gratis.

El ciclo rene los clsicos del realizador japons

Hayao Miyazaki. Considerado el gran maestro del
cine de animacin, por su prodigiosa imaginacin
y un abordaje del cine a travs de sus temas favoritos: el poder de los sueos, los mundos paralelos y sus apelaciones al pacifismo y al cuidado
de la naturaleza. Esta pelcula de 1986 presenta a
Muska, un agente secreto del gobierno, quien
acompaa a la joven Sheeta a la fortaleza de Tedis. La nave es atacada por los piratas que, al
igual que el gobierno, busca el secreto de la piedra mgica que Sheeta lleva en su cuello.
A las 15.30, en el Museo Nacional de Bellas Artes, Av. Figueroa Alcorta 2280. Entrada: $ 30.

MSICA

CINE

TEATRO

TEATRO

Festival Invierno

El retrato postergado En el marco

Ensayo sobre La Gaviota

Emilio Garca Wehbi El director, per-

Con un equipo reducidsimo, el nuevo film de Rodrigo Moreno sigue el trabajo y las horas de Marcela Das: una empleada domstica que tarda tres
horas en llegar a su trabajo y otras tantas para
volver a su casa en Florencio Varela. A partir de
una estructura tomada de su vida real se incorpora tambin una trama de ficcin, en la que Rimon
(Dias) interpreta a una mucama que pasa la mayor parte de su da trabajando. En una de las casas en las que trabaja, un grupo de estudiantes se
rene a leer, significativamente, El Capital, de
Marx. Podr verse hasta hoy en la Sala Lugones.
A las 22, en la sala Lugones,
Av. Corrientes 1530. Entrada: $ 30.

Con la idea de celebrar

un festival por estacin que nuclee a diferentes
bandas de diversos estilos, el encuentro dedica
dos das (hoy y el viernes) a la msica emergente.
La noche la abrir un acstico a cargo de Karina
Vismara. Ya en el escenario estarn Una Fbrica,
Roco; ms tarde ser el turno de Ok Pirmides; y
el cierre ser de pista de baile, cuando Los Coming Soon tomen en escenario.
A las 22, en el Club Cultural Matienzo,
Pringles 1249. Entrada: $ 90.

O. T. Almagro Una de las orquestas tpi-

cas ms reconocidas del circuito milonguero sube al escenario del club. Esta noche interpretarn
una discografa que comenz junto al cantor Osvaldo Peredo en el ao 2013; continu con Ahora
nosotros (2014); y seguir con el disco que compartirn junto al otro cantor de la orquesta, Hernn Cucuza Castiello, con quien adelantarn el
repertorio de ese disco por venir.
A las 21, en el CAFF,
Snchez de Bustamante 764. Entrada: $ 100.

CINE
Amar es bendito

El Cineclub Comunidad Cinfila invita una proyeccin debate de la

pelcula de Liliana Paolinelli, que contar con la
presencia de la directora cordobesa. La trama
presenta a Mecha y Ofelia, quienes atraviesan
una crisis de pareja que estalla con la aparicin
de una tercera mujer.
A las 19, en Espacio Incaa Artecinema,
Salta 1620. Gratis.

DANZA
Moralamoralinmoral Interpretado por

Brenda Luca Carlini, Agustina Fitzsimons, Milva Leonardi y Marta Salinas, propone un ensayo de prueba y error en la bsqueda de respuestas a inquietudes sobre la moral y las formas contemporneas de
composicin escnica. Analiza con humor algunos
estereotipos del canon masculino y la construccin
que desde esa ptica se hace de la mujer.
A las 21.30, en el ElKafka Teatro, Lambar 866.
Entrada: $ 140.

del ciclo Escritores argentinos, propuesta que entre el documental y la ficcin traza un puente entre clsicos y contemporneos de la literatura. De
esta forma, repasa vida, obra y contexto creativo
de un grupo de escritores argentinos. Escrito y dirigido por Andrs Nicols Cuervo, este documental de 2009 gira en torno a la relacin que tuvo el
escritor Haroldo Conti con un joven realizador cinematogrfico llamado Roberto Cuervo, a mediados de la dcada del 70.
A las 19, en la Casa Nacional del Bicentenario,
Riobamba 985. Gratis.

ARTE
Arellano, Bhtlingk, Londaibere
En el marco del ciclo Filiaciones, encuentros que
convocan a un artista para que l mismo filie su
obra con la de otros dos, vnculo que establece de
acuerdo a sus propios criterios. En esta oportunidad, la artista invitada Florencia Bhtlingky filia su
obra con Alfredo Londaibere y Ernesto Arellano.
En la Casa de la Cultura del Fondo Nacional de
las Artes, Rufino de Elizalde 2831. Gratis.

MSICA
Soema Montenegro Nueva noche del

ciclo Border Music, msica original en los bordes

de los gneros interpretada en forma acstica. En
esta ocasin, la cantante de hipntica y espiritual
voz estar acompaada por El Conjuro, un grupo
compuesto por Jorge Sottile en batera y bandonen, Eduardo Herrera en guitarra y acorden, y
Facundo Soto en contrabajo; cada uno sumar
sus voces al cuatro venezolano, la guitarra, la caja y la voz de Soema. ltima presentacin antes
de su gira europea.
A las 21, en Pista Urbana, Chacabuco 874.
Entrada: $ 80.

Mauricio Dawid

FOTOGRAFA

En un cuarteto integrado por Ernesto Jodos en piano, Pablo Moser en

saxo, Fermn Merlo en batera, y Dawid en contrabajo; comienza a despedir las canciones de Sonora de 2013 y a dar la bienvenida a los temas de
su prximo disco.
A las 21.30, en Virasoro Bar, Guatemala 4328.
Entrada: $ 80.

Dj vu Patricia Parodi y Federico Parodi

Ros & Lew Walter Ros en bandonen y

presentan una muestra conjunta: a travs de la

pintura y la fotografa, aluden a la historia del
arte, partiendo de la premisa de la evocacin y
la cita. Patricia expone una serie de fotografas
que presentan encuentros espontneos. Federico, presenta una seleccin de cuadros que remiten a maestros del gnero.
A las 20, en Espacio Modos,
Nicaragua 5041. Gratis.

Ricardo Lew en guitarra unen fuerzas para celebrar parte del repertorio que les dio un lugar privilegiado en su vida artstica. Ambos dialogan debajo del escenario y cuando suben siguen la conversacin con sus instrumentos. Seguramente
improvisarn temas de diversos autores como
Piazzolla, Troilo, Atahualpa, el Cuchi Leguizamn,
o Bill Evans , Jobim, Vinicius, entre otros.
A las 21, en el Centro Cultural Torquato Tasso,
Defensa 1575. Entrada: $ 200.

Respetuosa y audaz bsqueda tanto por los senderos

de la obra original de Chjov como por El cuaderno de Trigorin, de Tennessee Williams, la obra
pretende elevar la potica de la actuacin y conjugar nuestro presente apoyada en la contemporaneidad del lenguaje. Esta relectura aporta un
componente ldico y dinmico caracterstico de
los montajes de Marcelo Savignone.
A las 22.30, en La Carpintera Teatro,
Jean Jaurs 858. Entrada: $ 100.

Augusto Boal A partir del lanzamiento del

libro Teatro del oprimido, este encuentro invita a
celebrarlo profundizando en su obra. Todo comenzar con un acercamiento al material terico
de Boal, seguir con la proyeccin del documental Tras las huellas de Augusto y escenas y fragmentos musicales de la obra El Gran Acuerdo Internacional del To Patilludo.
A partir de las 15, en el Centro Cultural de la
Cooperacin, Av. Corrientes 1543. Gratis.

MSICA
Julio & Agosto La banda promete repa-

sar sus siete aos de trayectoria. Sus siete msicos volvern a los himnos de una discografa
marcada por un sonido fino y acstico, por la
suavidad de sus voces y melodas. Entre las sorpresas de la fecha, habr canciones de su prximo trabajo, msicos invitados, ex integrantes de
la banda y una escenografa especial.
A las 21, en Caras y Caretas 2037,
Sarmiento 2037. Entrada: $ 100.

Flavio Romero

El contrabajista edit dos

discos, Umbral (2010) e Ideario (2013), ambos integrados por msica original, composiciones con
las que recorri el circuito local y los festivales internacionales de jazz. Ofrece este nuevo proyecto
de formato camarstico: un quinteto integrado
por contrabajo, piano, flauta, saxo tenor y violn.
A las 22, en Borges 1975, J. L. Borges 1975.
Entrada: $ 80.

Pablo Daz

El baterista y compositor trabaja

sobre composiciones propias, muy sencillas, y con
un gran espacio para la improvisacin. Bajo este
concepto, ha trabajado con diferentes formaciones
que dieron sus frutos en tres discos. Lo acompaan en esta bsqueda Enrique Norris en corneta,
Pablo Moser en saxo tenor, Paula Shocron en piano, y Germn Lamonega en contrabajo.
A las 23.59, en Virasoro Bar, Guatemala 4328.
Entrada: $ 60.

Marcelo Dellamea El joven guitarrista

chaqueo presenta por primera vez un ciclo exclusivo de jazz acompaado por Hernn Jacinto
en piano, Ezequiel Dutil en contrabajo, y Bruno
Varela en batera.
A las 21.30, en Salta y Resto, Salta 755.
Entrada: $ 100.

former, escritor y dramaturgo se presenta en el

marco del ciclo Direccionario, un programa de
conferencias performticas que se propone reflexionar sobre el director teatral y su accionar como
artista. En esta conferencia, Wehbi, acompaado
de intrpretes de distintas procedencias, har un
remix de su obra: un random tanto que volver a
poner de relieve sus creaciones.
A las 18, en Fundacin Proa,
Av. Pedro de Mendoza 1929. Entrada: $ 25.

CINE
Beatriz Portinari

El documental sobre
Aurora Venturini dirigido por Agustina Massa y
Fernando Krapp se podr ver nuevamente en el
marco del ciclo peras Primas Argentinas Contemporneas. El film repasa la vida y obra de Aurora Venturini. El film se adentra en el mundo (cargado de ancdotas y grandes momentos) de Aurora, al punto de cansarla y terminar por echar a
los realizadores de la pelcula.
A las 19, en el Palais de Glace,
Posadas 1725. Gratis.

MSICA
Rubn Rada Continua revisitando en vivo

la historia y la msica negra del Ro de la Plata,

esos ritmos tradicionales que nacieron del mestizaje cultural, de la fusin entre emigrantes europeos, descendientes de esclavos africanos y los
nativos. Esa historia est condensada en su flamante produccin, disco doble que presenta esta
tarde, Tango-Milonga-Candombe.
A las 19, en el Parque Centenario,
Leopoldo Marechal y Lillo. Gratis.

Festival Saudade Primera edicin de

esta celebracin de todo el bagaje cultural del Brasil. Este encuentro rene a ms de 30 artistas, de
diversos orgenes y gneros, quienes llenarn los
ambientes de msica y aroma brasileo. En su
programacin habr proyecciones; las presentaciones en vivo de Liza Casullo, Manuel Embalse,
Paula Maffia, Sambeleza y Ezequiel Borra, entre
otros; exposiciones como las de Renato Dos Santos, Salvia Divinorium, Trmula Convico en un
homenaje a Clarice Lispector.
A las 21, en el Club Cultural Matienzo,
Pringles 1249. Entrada: $ 80.

Yoga Rave

Ultima de una serie de fiestas

basadas en los elementos, esta vez, dedicada al
fuego. La msica a cargo de So What!, grupo integrado por Rodrigo Bustos y Nicols Pucci, llevan los mantras al plano de la electrnica, rock, y
tecno, entre otros gneros. Un sonido acompaado por la prctica Yoga y la meditacin, que hacen del fuego una experiencia colectiva.
A las 19, en el Teatro Vorterix,
Av. Federico Lacroze 3455. Entrada: $ 160.

RADAR

5.7.15

11

UNA NIA
LLAMADA
TRISTEZA
Quiso ser la primera concertista de piano negra, pero el racismo no le permiti estudiar en
academias de prestigio y margin su enorme talento. Aun as, Nina Simone se convirti en uno de los
nombres ms importantes y ms rabiosos de la msica popular norteamericana: era capaz de todo, desde
Gerswhin hasta msica folk, y todo lo haca con una intensidad y un desamparo que la llev a la radicalizacin
poltica, los problemas psiquitricos, la violencia domstica, hacia el final la soledad. Su historia y su msica
nunca haban sido tan bien contadas como en What happened, Miss Simone?, el documental dirigido por Liz
Garbus que acaba de estrenar Netflix, al mismo tiempo que su figura atraviesa un rescate consagratorio con el
disco que le dedicar Lauryn Hill, la pelcula de ficcin sobre su vida protagonizada por Zoe Saldaa para los
estudios y la edicin, a fin de ao, de sus cartas y diarios personales.
R E S C AT E S

POR FERNANDO KRAPP

onny Rollins dijo una vez que si

Nina Simone estaba en un festival
de jazz, entonces l no entenda lo
que era el jazz. Ella misma tampoco estaba cmoda con el rtulo. Su canciones
podan ser standards, viejos blues, soul,
pero tambin haca folk y pop. Eso explica su versatilidad para adaptarse en gran
escala a la gran bolsa que es la msica
popular norteamericana: puede ser mashapeada en Yeezus, el ltimo disco de
Kanye West, reverenciada por Nick Cave
desde el otro lado del planeta, formar
parte de la icnica banda de sonido de
las pelculas de James Bond, y hasta
transfigurarse en un clsico bailable de
los aos 80. Referente insoslayable para
pensar en algunas voces tan dismiles como Eykah Badu o Cassandra Wilson,
despus de su muerte en el ao 2003, la
figura de Nina Simone fue rescatada del
olvido tanto voluntario como involuntario al que fue sometida en vida, para reclamar el lugar que le corresponde dentro de las grandes cantantes y compositoras del siglo XX.
En estos das, a propsito del estreno
por Netflix del documental What happened, Miss Simone?, dirigido por Liz Garbus, otra cantante inclasificable del hip
hop, soul y jazz, Lauryn Hill, est sacando un disco homenaje a Nina. Si bien su
intencin era participar en un par de temas (Feeling Good iba a ser su corte
inicial), Hill termin hacindose cargo
de la produccin del disco y reversionando seis canciones. Adems est previsto
para fines de ao, una pelcula de ficcin
sobre su vida (al estilo Hollywood para la
que sus familiares expresaron ya varios
reparos, desde el casting hasta el guin:
la protagoniza Zoe Saldaa) y en noviembre de este ao se publicarn sus
cartas y diarios personales.
12

5.7.15

RADAR

Cuenta Liz Garbus, la directora del extraordinario What happened, Miss Simone? que la primera vez que vio parte del
material que tena para trabajar no lo pudo creer: cajas y cajas llenas de hojas escritas a mano, que su hija, Lisa Simone,
se haba trado del sur de Francia despus
de la muerte de su madre. All se revela
el da a da: la violencia familiar en su
hogar, su relacin bipolar con su hija y
su marido, su amor/odio por la msica
que ella misma tocaba. Lisa tambin haba intentado hacer un documental sobre
su madre pocos aos despus de su
muerte junto con su padre, Andrew
Stroud, pero las cicatrices estaban todava demasiado abiertas, y enfrentarse con
el espejo roto de su pasado les result a
ambos insoportable. Despus de diez
aos, tras la muerte del padre tambin,
Lisa pudo lograr despegarse de todas esas
fotos, todo ese audio grabado en horas y
horas de cintas, y entregrselo a Liz Garbus, realizadora de otros documentales
de personajes con un arco de transformacin dramtica bastante marcado como
Bobby Fisher y Marilyn Monroe, para
que mantuviera una mirada objetiva.
Si bien ya se haba estrenado a mediados de 1993 un documental producido
por la BBC titulado The Legend, quiz
menos informativo aunque con algo ms
de ambicin cinematogrfica ya que se la
puede ver a Nina en situacin (algunas
un poco pretenciosas), no se haba logrado una proximidad tan ntima como en
What happened, Miss Simone?: ms all de
los vaivenes de la escena musical o de su
compromiso poltico por la lucha de
igualdad de derechos de la comunidad negra, nunca se haba hecho tan palpable el
infierno de su vida privada. El documental gira entonces en esa rbita: familiares,
amigos, militantes, intenta contenerla de
las opiniones de especialistas, musiclogos
o socilogos (algo que se agradece).

Como lo dijo la propia Nina Simone:

Soy yo la que tiene que convivir con
Nina.
HAZ LO TUYO, NINA
Cuando Miles Davis se suba a un escenario no saludaba. Apenas presentaba a
los msicos y los temas, tocaba dndole
la espalda al pblico. Su clsica postura
encorvada y arrogante esconda un sentido poltico: Miles no se consideraba a s
mismo un entertainer, esa figura clave
para entender la cultura popular norteamericana y sus resabios. El no era el mono que iba a saltar para divertir a los
blancos. Algo que le reprochaba a sus
dos referentes: Louis Armstrong y Dizzy
Gillispie, que con sus grandes sonrisas y
sus chistes haban cautivado al pblico
ms all de su msica. Por eso, cuando
en el documental que estren Netflix vemos a Hugh Hefner presentar a una joven Nina Simone en plena Mansin
Playboy, rodeada de piernas blancas tomando champn y de smokings fumando cigarros, ella dice: Qu quieren escuchar? I Love You Porgy? Ah... ok...
Nina a mediados de los cincuenta, con
apenas 24 aos, ya haba recorrido los
hot spots de la escena jazzera de Nueva
York, el Village Vanguard y el Festival de
Newport, pero a diferencia de Miles, y
de los msicos avant garde del jazz, quiz
por su condicin de cantante popular, s
se haba convertido en la entertainer de
una clase media blanca.
En parte, era su propia bsqueda inconsciente, al menos en un principio.
Nacida en pleno crack de Wall Street en
la Carolina del Norte de la poca del Jim
Crow (las leyes conocidas bajo ese nombre fueron las que dictaron la segregacin racial del sur de los Estados Unidos), Eunice Kathleen Waymon fue la
sexta hija de ocho hermanos. Su padre
fue peluquero, tintorero y predicador. Su

madre, tambin predicadora y pastora, la

llevaba a la iglesia para que tocara el piano en las clsicas misas bautistas y le recordaba a cada rato que su talento innato
era obra de Dios. Al poco tiempo, recibi clases de Muriel Massinovitch, una
vieja profesora de msica clsica que vio
condiciones en la pequea Eunice y decidi ayudarla a perseguir el sueo de convertirse en la primera concertista negra.
Amaba a Bach, a Chopin, a Debussy, a
los grandes compositores del piano, pero
la consecuencia de ese amor no correspondido era una soledad perpetua. Al ser
rechazada su postulacin en el prestigioso Instituto Curtis de Msica en Filadelfia por su color de piel, Eugene se vio
obligaba a tocar en los nightclubs, y a
cambiarse el nombre para que su madre
no se enterara que estaba tocando la
msica del diablo. Nina por nia, y Simone porque le sonaba francs. No solo
cambi su nombre, sino que descubri
otra cosa: el poder de su voz.
A veces hay que usar todo lo que tens para hacer un sonido suave, y a veces
tens que esforzarte para cantar, y hacer
sonidos graves. Quiz su voz no tena la
simpleza de Billie Holliday, o la calidez
de Ella Fitzgerald, o el monstruoso despliegue tcnico de Sarah Vaughan, pero
se fue imponiendo por la fuerza de su
dramatismo y la profundidad emotiva de
su fraseo. Lograba con una pasmosa naturalidad lo que todo estudiante de canto anhela en sus desvelos; que la cancin
se adapte a la voz, y no a la inversa. En
cada nota, Nina variaba de un registro a
otro; su voz pareca no venir de las cuerdas vocales sino de la transpiracin de su
voluminoso cuerpo. Su rostro de piedra
poda transformar el clima de un concierto con un leve movimiento de sus labios. En su primer disco Little Girl Called Blue (la empresa discogrfica la estaf al pagarle las sesiones como intrprete

sin dejarle regalas) sorprende por la naturalidad con la que se asumi como
cantante, y cmo, en consecuencia, asumi su fama casi inmediata despus del
batacazo que dio su versin del mencionado clsico de la pera Porgy and Bess
de Gershwin. Nina entonces se cas con
un respetado ex polica del Harlem que
se convirti en su manager, tuvo una hija
y se mud a las afueras de Nueva York.
Corran tiempos de xitos, los cmodos aos 50 de la edad dorada del capitalismo; Nina llevaba casi la vida de una
mujer blanca de los suburbios que se
desmoronaba lentamente detrs de la
pantalla del feeling good. Trabajaba
mucho, su marido le programaba una
gran cantidad de conciertos en poco
tiempo, y ejerca sobre ella la violencia
fsica. Con una escritura que tambin
sorprende por su calidad potica (como
un laboratorio estilstico que volcara
despus en sus letras ms agudas), los
diarios revelan la contradictoria relacin
con Andrew Stroud: cmo poda ser el
tipo ms protocolar en el momento de
cerrar contratos, para abrir la puerta la
casa y golpearla a fuerza de puos cuando algo no le gustaba. Y cmo, aos
despus, ejercera ella misma esa violencia fsica cotidiana en su hija Lisa (que
en documental prefiere entenderla
desde un reduccionismo psicolgico al
clasificarla como bipolar y manaco
depresiva).
Por otro lado, su fama le permiti cumplir un sueo dorado de infancia como estudiante de piano: tocar en el Carnegie
Hall. No del modo en el que ella hubiera
querido como la primera pianista clsica
negra, pero s como una referente de la
msica popular norteamericana. Mote
que la ubicaba frente al reflejo de su conflictiva relacin con el pblico. Porque, en
definitiva, para quin estaba cantando? O
mejor dicho, para qu estaba cantando?

LA CANCIN NO ES LA MISMA
En un clebre artculo de 1963 Leroi
Jones quien, convertido al Islam tom
el nombre Amiri Baraka aseguraba que
no se puede analizar la msica negra con
herramientas de la crtica blanca. Jones
fue uno de los primeros crticos negros
en contextualizar los procesos vanguardistas de John Coltrane, Don Cherry y
del recientemente fallecido Ornette Coleman: La msica es el resultado de la
actitud, de la postura, aseguraba. Para
Jones, hay una diferencia entre la msica
negra y la msica blanca, y una diferencia en la ejecucin de la misma msica
que resulta difcil y por momentos imposible de comparar. Nina Simone de a
poco fue dndole la espalda a ese pblico festivo que escuchaba su msica como fondo para sus cocktails.
En su biografa I Put A Spell on You,
publicada en el ao 1991, Nina seala
ese cambio en relacin a su propio pblico: Fue para esta poca, a mediados
de los aos 60, que por primera vez empec a sentir el poder y a conectarme
con la espiritualidad mientras estaba tocando ante mi pblico. Haba estado tocando por diez aos, pero fue en esos
tiempos que pude sentir un estado de
gracia en aquellas ocasiones donde todo
pareca encajar a la perfeccin. Esos momentos son muy difciles de explicar. Me
senta transportada a una iglesia; algo
que descenda sobre m y me haca desaparecer, un espritu que me sacaba de
m. Resulta difcil ya despegar la figura
de Nina Simone sin considerar el calor
de los hechos. Compone Mississipi
Goddam en homenaje a Megdar Ever,
asesinado en Mississippi y a los cuatro
chicos muertos en un bombardeo a una
iglesia bautista en Alabama donde murieron cuatro chicos negros. Era la primera vez que se usaba una mala palabra
en el ttulo de una cancin. La cancin

fue presentada y grabada en una serie de

conciertos que grab en el Carnegie
Hall y tocada con una guitarrita ante 40
mil personas en la famosa marcha de
Selma a Montgomery, donde 40 mil
personas, entre ellos James Baldwin,
Harry Bellafonte y Sammy Davis Jr. pidieron la igualdad de derechos para la
comunidad negra.
De esos aos son sus grandes clsicos
activistas: su desgarradora versin de
Strange Fruit, ms solemne, hipntica
y visceral que la melanclica y dolorosa
versin de Billie Holliday y Tour Women. Nina tena la cualidad de componer y cantar como si cada frase tuviera el
poder de convertirse automticamente
en un himno. Young, Gifted and
Black, con letra de Weldon Irvine (que
tambin hara famosa Aretha Franklin
cuando las papas ya parecan no estar
tan calientes) se convirti en la cancin
que aun a toda una generacin de universitarios negros. Fue tambin el momento culminante de una poca, ya que
partir de los asesinatos de Luther King y
de Malcolm X (cuyas hijas jugaban en el
jardn con su propia hija) las aguas se dividan ms y el racismo se intensificaba.
Incluso hoy, casi cincuenta aos despus, con un presidente negro electo, la
sociedad norteamericana no puede solucionar una problemtica social an vigente que deriv en los recientes casos
de violencia en Baltimore y en Carolina
del Sur. De ah la amargura y frustracin
de Nina despus de la muerte de los dos
lderes ms emblemticos. Su activismo
se volvi ms visceral; se volc al fundamentalismo. Proclamaba en cada presentacin por un Estado negro separado (lo
hizo hasta en las ltimas entrevistas), y
llam a las armas a los negros para que
aprendieran a matar blancos.
Toda esa ira que haba sabido canalizar en su msica, y en su magnetismo

arriba del escenario se volva en contra;

creaba sus propios fantasmas. Despus
de una serie de episodios paranoicos
(aunque era muy probable que el FBI y
la CIA la tuvieran en la mira), con un
exceso de alcohol y alucinaciones (en el
documental se la ve tocar despus de un
brote sictico totalmente ida de s), Nina abandona a su familia y viaja a Africa. Comienza su largo periplo hacia el
olvido. Ignorada por los magnates de la
msica quienes vean en ella una amenaza, no slo por su activismo sino por lo
ataques de su personalidad, el final de
Nina parece salido de un blues; su arco
va de los nightclubs de Filadelfia a los vodevils franceses. Donde finalmente pudo
encontrar una paz relativa para todo ese
dolor, toda esa amargura y, tambin, todo ese amor espinoso que haba arrastrado durante todos esos aos.
En un momento del documental que
puede verse en Netflix, Nina Simone
toca My Baby Just Cares for Me.
Cancin que se convirti en un jingle
publicitario de una campaa de Chanel
y que la termin de sacar de la miseria
que la asol en el ltimo tramo de su
vida. Nina hace algo maravilloso con el
tema. Como una bruja del icnico sur,
parece conjurar sobre las teclas blancas
y negras de un fino piano alemn. Sus
largas y hermosas manos vuelan por
arriba de los acordes, saltando de una
octava a otra, hasta convertir una cancin pop en una fuga al estilo de Bach.
La llena de trinos, de adornos barrocos,
cambia el tempo, copia las lneas meldicas una sobre las otras en contrapunto con su voz, que sale impvida de su
boca sin arrancarle un gesto a la cara.
No parece jazz, no parece soul, no parece blues, pero parece todo eso junto a la
vez. Es ms: parece lo que ella siempre
quiso tocar; la verdadera msica clsica
negra.
RADAR

5.7.15

13

COMO DECIR ADIS

La reedicin de Vidas rebeldes (Tusquets), la nica novela corta de Arthur Miller y uno de sus
pocos trabajos fuera de la dramaturgia, permite revisitar la clsica pelcula de John Huston, Los inadaptados (The
Misfits). Y reconocer en esos desiertos una suerte de carta de despedida: Miller escribi la novela y el guin para
Marilyn Monroe, la mujer de quien se divorciara apenas meses despus. La escribi pensando en que iba a ser
filmada. Sera, adems, la ltima pelcula de Marilyn y de Clark Gable: una obra maestra marcada por la
muerte, por un paisaje de decadencia y desolacin, por una inexorable tristeza.

HITOS

POR PAULA VZQUEZ PRIETO

n el prlogo de la nueva edicin de

Vidas rebeldes (cuyo ttulo original es
The Misfits), Arthur Miller confirma
lo intuido en la lectura de las primeras lneas de la novela: que la obra ha sido pensada para el cine, pero sobre todo para Marilyn Monroe. No es novela, ni obra de
teatro, ni guin de cine, nos aclara en primera persona, y de all que esta forma peculiar de narrativa necesite cierto grado de
presentacin por parte del autor. Dramaturgo, ensayista y lcido observador de los
cambios brutales del siglo XX, Miller tambin comprendi la capacidad del cine para hacer vvidas esas transformaciones, la
de sus figuras mticas para encarnarlas, y la
de toda forma artstica popular para nutrir
de una inusual claridad aquello que se torna opaco al intentar hacerlo accesible. Vidas rebeldes, nos confiesa, utiliza las perspectivas flmicas con el propsito de crear
una ficcin que quiz posea la peculiar inmediatez de la imagen y las posibilidades
reflexivas de la palabra escrita.
En los primeros aos 60, el famoso escritor, acusado en la Amrica del macartismo por su resistencia a sumar compaeros escritores a las listas negras, cuestionador implacable del vacuo sueo americano y merecedor de premios y celebraciones en el mundo intelectual de la nueva era Kennedy, estaba en la tapa de todos
los diarios por su matrimonio con Marilyn, el menos pensado, el que refera
chistes y miserables especulaciones sobre
la turbulenta vida ntima de dos emergentes de mundos aparentemente dispares.
Ms all de toda contradiccin, Miller
pens cada una de sus palabras, aun preadas de la conciencia de su propio estilo,

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RADAR

para el encuentro de sus personajes con la

cmara, para el recuerdo de una Monroe
nica y autntica, para que el Reno de sus
marginados cobrara vida en esos planos
desrticos que John Huston inmortaliz
en una de sus obras bisagra, puente imaginario entre el Hollywood que se hunda
en las tinieblas de su propia decadencia y
el que emerga entre las cenizas de un
tiempo amargo pero recobrado.
La pelcula The Misfits (conocida por
aqu como Los inadaptados), se estren en
1961 tras un rodaje arduo y conflictivo
en el ardiente verano de 1960. Clark Gable, Marilyn Monroe, Eli Wallach y
Montgomery Clift pasaron extensas jornadas de rodaje en pleno desierto de Reno, sumidos en eternas demoras por el
clima, los encontronazos, las borracheras
y las deficiencias de una maquinaria, como lo era el Hollywood industrial, que ya
mostraba evidentes signos de agotamiento. Como cuenta Huston en sus memorias, A corazn abierto, entonces no haba
comparacin entre Reno y Las Vegas; Reno todava tena el sabor del Viejo Oeste
como The Misfits tiene el sabor del viejo
cine clsico que se extingue lentamente
entre los retazos de su vieja gloria y los
golpes mortales de los nuevos tiempos.
No hay pelcula que transmitiera entonces, y de manera ms angustiante, esa dolorosa sensacin de decadencia como la
obra pensada por Miller para la mujer de
la que se divorciara apenas unos meses
despus. Todo en ella exuda tristeza y melancola, emociones desgarradas y sentidas
en carne viva, puestas en el papel tras una
experiencia imaginaria recreada nicamente mediante el lenguaje. Miller piensa
en cine todo el tiempo y su escritura escapa al esqueleto del guin para convertirse

en un trnsito entre la forma teatral y la

novelada, eco de una visin que parece albergarse para siempre en su interior.
Todo comienza con un cartel: Bienvenidos a Reno, la ciudad pequea ms
grande del mundo. Ciudad de trnsito,
de esperas prolongadas, de falsas libertades. Estamos siguiendo el remolque de
Guido (Eli Wallach), un ex piloto de la
Fuerza Area, hoy mecnico asalariado que
deambula por las calles esperando la prxima aventura, penando por la muerte de su
esposa, por la vida que no fue. All se encuentra con Roslyn (Marilyn Monroe),
que ha venido a divorciarse, que asoma radiante en la ventana mientras se prepara
para una ms de sus despedidas, con sus
ojos tristes y su ilusin intacta. Ms tarde,
en un bar, se encuentran con Guy (Clark
Gable), cowboy solitario como lo fueron
todos los protagonistas del cine de John
Huston, aventureros a destiempo, atrapados entre los escombros de un orden que
se derrumba sin respiro ni remedio. El
cuadro se completa con Perce Howland
(Montgomery Clift), un ya no tan joven
vagabundo, estrella temeraria del rodeo
cuya fama local se erige a golpes y tumbos
por la arena, desclasado y eterno penitente
como el mismo Clift, marginal de un star
system que agoniza a expensas de las almas
que le dieron vida.
Tanto Miller como Huston conciben
la Amrica profunda como un espacio
hermtico y aislado donde se conservan
los valores de una sociedad que se desgrana lentamente, asediada por una
modernidad que ofrece su rostro ms
oscuro e implacable. Miller ofrece el
cruel retrato de un mundo que se torna
extrao y autodestructivo para quienes
lo habitan, en el que los vnculos verda-

deros desaparecen y los sentimientos se

revelan vacos e innecesarios.
En este escenario, Roslyn es nuestro instrumento de acceso, de iniciacin; con ella
llegamos a ese universo, compartimos su
dolor y su confusin ante la insensibilidad
de los hombres, y es ella quien expresa una
vulnerabilidad que pareca otrora silenciada. Roslyn es capaz de ponerse en el lugar
del otro, todo la conmueve y la emociona,
vive el peligro como algo concreto y la vida
es para ella un tesoro que puede perderse
en cualquier momento. Es notable la escena en la que percibe el verdadero destino
de esos caballos prisioneros, la ambigua expresin de su rostro, que Miller describe
con precisin en el papel y Marilyn Monroe anima con sorprendente complejidad
en la pelcula. Cuando se le caen las lgrimas y se disculpa diciendo que es demasiado nerviosa, Elli Wallach reflexiona: Si no
fuera por la gente nerviosa, nos comeramos los unos a los otros.
La pelcula The Misfits no fue un gran
xito en su estreno y hoy es recordada muchas veces por ser la ltima aparicin en
pantalla de Clark Gable y Marilyn Monroe. Pese a esa aura mortuoria, es tambin
una obra clave del final de una poca, habitada por un decadentismo inusual en el
cine estadounidense, notable en la autoconciencia de sus interpretaciones e imborrable por el aura desgarradora de su puesta en escena. Fue una de las pocas veces en
que Arthur Miller escribi pensando en el
cine y en ese camino hbrido y escarpado
se concentra su espritu, como en la ferocidad de las imgenes del desierto infinito,
habitado por caballos pequeos e incansables, solitarios en la inmensidad de un
abismo que se abre de una vez y para siempre ante nuestros ojos.

TODAS
LAS
MAANAS
DEL
MUNDO

Se presenta los domingos por la maana y el

texto es de un joven dramaturgo croata. Dichas as, las
coordenadas de la pieza Mi hijo camina solo un
poco ms lento, de Ivor Martinic, suenan a
propuesta excntrica. Pero la obra dirigida por
Guillermo Cacace viene recogiendo crticas efusivas y
muchsimo pblico gracias a su densidad emotiva, los
extraordinarios actores que van de los 20 a los 80 aos y
el despojo total de una puesta a luz del da.

T E AT R O

POR MERCEDES HALFON

omingo de lluvia torrencial en Capital Federal. El gris afea las veredas de Monserrat, pero adentro de
la sala Apacheta el clima que se vive es diametralmente opuesto. Hay msica en portugus y, sobre una barra, infusiones humeantes, chip y galletitas. La luz de la maana entra por las ventanas. Los actores
deambulan por el espacio escnico en jogging, cebando mates, conversando entre
ellos, como si estuvieran en el living de su
casa. Los espectadores tomamos asiento en
unas gradas pequeas, sin darnos cuenta,
inmersos en esa reunin de la que somos
de algn modo partcipes. Hasta que lentamente la ficcin comienza a hacerse lugar
en la maana. La obra es Mi hijo camina
solo un poco ms lento, un texto de Ivor
Martinic, joven dramaturgo croata que lleg a nuestro pas en el marco del festival
Dramaturgia Europa + Amrica en 2014.
La versin local tiene direccin de Guillermo Cacace y desde el ao pasado est generando impresiones, impacto, cosechando una gran adhesin en el pblico local.
La obra lleva a escena una familia cuyo
centro es un muchachito llamado Branco,
afectado por una enfermedad que lo ha dejado en silla de ruedas para siempre. Su familia es como un lago donde cay una piedra grande y las ondulaciones siguen llegando hasta la orilla. Alrededor de Branco
estn: su madre, quien no hay un da en

que no llore por esto; su hermana, que parece estar enamorndose, pero todo se torna menor en comparacin con Branco; su
abuela que olvida la mitad de su vida e inventa la otra mitad; su ta, en conflicto eterno con su madre. Y tambin estn los hombres de la familia: el padre ausente, el abuelo prescindente, el to ninguneado, que
ocupan una posicin lateral en el dibujo de
la familia. Todo transcurre el da que Branco cumple 25 aos, su hermana trae una
amiga a casa que quedar prendada del chico. Con esta ya son cinco las parejas arriba
del escenario. Claro que nada de esto es lineal en el texto y mucho menos en la puesta. Vamos entendiendo los vnculos de a
poco y apenas, cada personaje tiene una
enorme complejidad en s mismo y en el
modo que se relaciona con los otros.
Gran parte del impacto de Mi hijo camina solo un poco ms lento radica en que toda esa complejidad emocional se manifiesta en escenario vaco. Solo algunas sillas
desperdigadas donde descansar. La desnudez del espacio pone de relieve la humanidad sobre la escena: los personajes en ropa
de calle, interpretados por actores que van
de los ochenta a los veinte aos, brillan en
todo su esplendor. Y en ese arco etario
tambin se da todo un mundo de diferentes tonalidades expresivas. As lo explica
Guillermo Cacace: La mezcla de edades es
parte de lo entraable de la experiencia y
eso evidenci lo diferente desde el instante
cero. Sea por edades o por registros de ac-

tuacin tan distintos en apariencia apost a

un mximo nivel de escucha entre ellos como todo procedimiento. A que se afecten
unos con otros desde lo que hacen sin homogeneizar en un mismo estilo de actuacin las improntas que singularizan a cada
uno. Lo importante era encontrar formas
de estar juntos y no de parecernos. La tarea
era poner de relieve lo que hay, trabajar sin
ocultamientos estetizantes, cuenta.
Es toda una rareza ver una obra a las once de la maana. Hay algo del ritual con
que se va al teatro nocturno, vinculado a
la pizza posterior que se modifica totalmente al cambiar el horario. Ver esos actores con ropas de ensayo, expuestos a la luz
del da, ver sus rostros sin el tono anaranjado de los focos teatrales, los acerca mucho
a la verdad. Como dice Cacace: Muy en
lnea con no ocultar nada qued esta luz y
este vestuario. Ensaybamos por la maana
y con esta ropa. Si esa claridad del da y esa
indumentaria fueron el instrumental de
parto de lo que hoy acontece, por qu luego hacer las funciones cambiando las condiciones en las que algo fue posible? Para
qu? Para hacer lo que se suele hacer en teatro? Es absurdo y lo digo incluso sabiendo
que habr otras oportunidades donde no lo
pueda evitar. No intenta ser una frmula:
se dio as y nos rendimos ante la evidencia.
Ayud a tomar la decisin de que as deba
ser, que la obra para nosotros es tambin
muy luminosa y que los equipos de gimnasia arman algo muy familia. Tiempo ms
tarde nos dimos cuenta que todos comienzan corriendo en una obra donde caminar
es el signo de la dificultad. Todos estn vestidos para correr y la nica escenografa son
seis lugares donde sentarse.
A veces los actores necesitan sentarse para detener un poco el flujo de emociones
que parecen estar atravesndolos permanentemente. Cmo reacciona una familia
cuando uno de sus integrantes, el ms joven, est condicionado fsicamente en su
forma de estar en el mundo? Es realmente
tan grave lo que le pasa a Branco? Cmo
ese amor excesivo al hijo repercute en el
resto de la familia? Cmo conviven el
principio de endogamia con el de exogamia en el seno de una familia en crisis?

Todas esas cuestiones aparecen y tensionan Mi hijo camina solo un poco ms lento,
sin terminar de resolverse. Es particular que
toda esta problemtica provenga de un autor de una latitud tan lejana. Un poco poniendo a prueba ciertas ideas preconcebidas
sobre lo cercano y lo lejano. Cacace dice:
Creo que en la historia de la literatura dramtica hay cuatro o cinco grandes temas y
el resto son agenciamientos particulares. En
esa singularidad aparece lo extranjero. Si la
accin desarrolla la tensin de un hijo enfrentando a su madre, como es el caso de
nuestra obra, nos encontramos frente a una
situacin universal y all se inscriben Orestes, Hamlet, y la lista no tiene fin. Ahora
bien, los condicionantes de esa accin son
los que ponen de manifiesto la particularidad, el rasgo identitario. Y ese rasgo tiene
un efecto potico que hoy es difcil dejarlo
ligado a que la obra proceda de otro pas.
Dentro de un mismo pas unas obras son
muy distintas en relacin a otras y ac incluso tenemos casos donde algunas obras
argentinas parecen concebidas afuera o con
una fuerte impronta europea. Pero curiosamente esa impronta europea es una falacia
porque conocemos de Europa, o de otros
lugares del mundo, lo que los circuitos de
legitimacin facilitan que circule. As ha sido siempre. En todo caso celebro que algo
de todo este movimiento haya permitido
que me encuentre con este texto de una
sensibilidad tan exquisita. As como tambin celebro cualquier principio de exogamia. La primera vez que le este texto de
Ivor Martinic llor.
Algo de esa conmocin sigue recorriendo el cuerpo de los actores en la obra. Aldo Alessandrini, Antonio Bax, Luis Blanco, Elsa Bloise, Paula Fernandez Mbarak,
Pilar Boyle, Clarisa Korovsky, Romina
Padoan, Juan Andrs Romanazzi, Gonzalo San Millan, Juan Tupac Soler, todos
potentsimos, continan emocionndonos, a lo largo de sus funciones, de los das de lluvia y sol que se dejan ver en la
obra, a travs de la ventana.
Los domingos a las 11.30 y 14 y los sbados a
las 16.30 en Apacheta Sala Estudio, Pasco 623.
Entrada: $ 120.

RADAR

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15

3
1. ATLAS (CARLAO), DE LA SERIE IMGENES DE
BASURA, 2008, 129,5 X 101,6. C-PRINT DIGITAL

POSTALES DEL PRESENTE

La retrospectiva de 25 aos de obra del brasileo
Vik Muniz, que se expone en el Hotel de los
Inmigrantes, es, adems de un recorrido por la carrera de
este hombre nacido cerca de San Pablo, una invitacin a
pensar en la reproduccin del arte frente a las
posibilidades de las tecnologas actuales. En esta
entrevista, Muniz recuerda su infancia, sus variados
trabajos juveniles, repasa los experimentos en sus estudios
de Brasil y Nueva York y tambin explica por qu se
considera un productor profesional de media antes que un
artista.
ARTE

POR EUGENIA VIA

ubo un momento, fue un abrir y

cerrar de ojos, en que lo que era
canchero pas a ser dmod. El arte se subi al tren de la historia (alguna
vez fue diferente?) y el gesto sensible de la
materia, la huella de la pincelada y el aura
de la obra original se parecieron a la arqueologa de un mundo perdido. Warhol
y Duchamp haban marcado el camino.
Pero era solo el comienzo. En un vagn de
una velocidad incalculable, la industria

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cultural de la sociedad de masas se transform en una sociedad autodefinida y

aorada como del conocimiento y la informacin, en la que los mapas y las geografas dejaron de coincidir para intentar
borrar las fronteras entre lo pblico y privado, lo global y local, como en la postal
Buenos Aires. Postcard From Nowhere
(2015) donde la memoria y la imagen se
construyen como un rompecabezas colectivo, como cualquier lugar, a no ser por
esos mnimos rasgos que la hacen ser
quien es.

La obra del brasileo Vik Muniz nos

obliga a repasar el glosario posmoderno
con las TIC y el universo que habilitan:
redes de informacin, mass media, reproduccin digital, cibachrome, impresiones
C-print digital. Ni realidad, ni representacin, ni lienzos ni fotos. No hay momentos cuasi sagrados que el artista, en
su genialidad, debe aprehender para eternizarlos, sino que hay estudios que se
asemejan a laboratorios, asistentes buscando imgenes a travs de experimentos,
y la figura del artista como un profesional. Veinte aos de trayectoria a travs de
90 obras en distintos soportes estn presentes en Vik Muniz. Buenos Aires, con,
entre ellas sus obras ms representativas
The Best of Life, Imgenes de basura, Despus de Warhol, y la proyeccin de su instalacin flotante Lampedusa realizada para la ltima Bienal de Venecia. Explica el
artista: Despus de 25 aos, la relacin
con mi obra es profesional. No soy muy
ambicioso. En definitiva, soy un productor de media. Estos productos, estas obras
son para circular, para ser vistas y tiene
una desventaja: estn hechas para ser percibidas por el cuerpo, demandan una experiencia fsica (Nota: sus obras tienen
tamaos aproximados de 150 x 300 cm)
por eso hay toda una logstica de transporte y de produccin. Toda obra de arte, sigue el paradigma de la fsica: hay
una relacin entre la partcula material
y la onda inmaterial. La imagen tiene

un aspecto fsico, requiere una experiencia fsica, pero tambin necesita del contexto, la decisin de participar en un ritual, de tomar un mnibus o un taxi e ir
al museo o galera, dedicar espacio y
tiempo para estar en frente de algo que
est ah para pensar. El otro aspecto es la
distribucin de elementos eficientes, que
dan una idea, transmiten una filosofa,
una lgica de la produccin pero no una
experiencia. Los dos aspectos son muy
importantes y para que se alimentan el
uno y el otro tiene que haber un equilibrio. Hay que mirar la obra, la imagen,
pensarla, pero para eso hay que estar fsicamente presente, para poder tener esa
experiencia de la obra.
Muniz naci y se cri en las favelas de
los mrgenes de San Pablo hace 54 aos,
bordeando Jardim Gramacho, el basural
presente en Wasteland (2010), el documental nominado al Oscar que protagoniza. Nac muy pobre cuenta, en una favela cerca de San Pablo. En Wasteland aparece la casa y la favela donde yo crec, mi
pap tambin est ah. Tengo recuerdos
muy lindos de mi infancia, fue muy rica
en experiencias. Antes de ser artista haba
intentado hacer todas las cosas del mundo: limpiaba escritorios, cargaba en puestos de gasolina, fui mecnico de autos y
bartender. En ese marco parece natural
que, a pesar de Hollywood y de Venecia,
Muniz mantenga la mirada, en simultneo, en otro lugar: Algn da se va a en-

2. CERDITO, DE LA SERIE EQUIVALENTES, 1993,

22,8 X 33. IMPRESIN EN GELATINA DE PLATA.
3. ELIZABETH TAYLOR, DE LA SERIE IMGENES DE
DIAMANTES, 2004, 152,4 X 106,7. C-PRINT DIGITAL

tender que mis obras terminen en una coleccin pblica. Porque no tengo un pblico especfico. Funciona tanto para el director del museo que est ahora aqu como para la gente de mantenimiento. Para
m es lo mismo, dice el artista, que este
ao inaugur un proyecto educativo de
vanguardia, la Escola Vidigal, escuela de
arte y tecnologa para nios de bajos recursos en Ro de Janeiro.
En su permanente homenaje a la filosofa y obra de Andy Warhol, quien prefera
la serigrafa y la fotografa a otros soportes
porque no dejan huella, el artista brasileo camina desafiando esos mismos bordes: la obra digital invoca figuras icnicas
de la historia en las que el chocolate, la sal
o la basura s hacen de huella, inscribiendo en la materia con sus tiempos de vida que son tiempos de muerte nuevos
espacios e invitando al cuerpo a activar
sentidos: El mo es un arte de ambigedades. Lo que quiero es crear ms modalidades, es decir, crear arte procurando cada vez ms clasificaciones. El arte influencia la poltica no como una iniciativa bsica sino al estar relacionado con cuestiones ms atvicas, ms primitivas, como la
idea de representacin, la idea de transformacin simblica. El arte est ah dentro del lenguaje, dentro de la semntica y
esto tiene proporciones polticas grandes
que tienen que ver con la imagen del
mundo, la claridad con la que podemos
llegar a ver el mundo. Cuando estamos en

un museo o en una galera, estamos haciendo dos cosas en paralelo: estamos

viendo arte y estamos pensando cmo estamos viendo, de qu manera estamos
viendo. Es una actividad muy importante: all se unen la percepcin y el discernimiento. Y a partir de esa frmula pods
actuar de una forma distinta en todos los
aspectos de la vida.
En la sede del Hotel de los Inmigrantes,
con su arquitectura inamovible de ms de
cien aos y sus monumentales espacios
que miran al ro, all cuelgan La Mona Lisa doble, pintada con mantequilla de man
y jalea sobre cibachrome, un tipo de papel
fotogrfico para positivado directo a partir
de diapositivas; el Che a la manera de Alberto Korda, baado por frijoles negros, en
un soporte C-print digital o el retrato de
Elizabeth Taylor, construido a partir de
diamantes virtuales. Tambin hay nubes
como cerditos, la potica flota en impresiones de gelatina de plata, en pleno cielo
de Manhattan.
Al preguntarle al artista sobre la funcin de la fotografa en su obra, Muniz
da un giro y confiesa que tiene una obsesin, pero ...Con la idea papel, con el
cambio de la utilizacin del papel como
media, como medio de comunicacin,
que en s mismo no comunica ms pero
conserva en su forma fsica la idea de
tiempo. La reproduccin digital extermin la idea de un documento visual. Las
fotos, por ejemplo, no son aceptadas

ahora de la misma forma en los tribunales, ya no sirven como prueba de algo.

Estamos en las puertas de un proceso
post histrico y las implicancias de eso
son muy interesantes porque hasta ahora
siempre tuvimos formas de representacin que nos permitieron de una forma
sentimental desencadenar, desarrollar los
conceptos de acumulacin, de narrativa
histrica. Cmo vamos a hacer, de aqu
en adelante, que no tendremos documentos fsicos? Mi trabajo cuestiona la
obra como documento fsico. Porque en
un tiempo no podremos poner una cosa
sobre la otra, lo digital no tiene estructura fsica. Y esta situacin demanda un
discernimiento muy grande. Quien no
tiene una educacin determinada, no
tiene instrumentos. Le cabe al artista visual contemporneo decir, hacer algo al
respecto, es una funcin tica-poltica.
Mi obra tiene que con ver con esto: estar
ah, creando esas situaciones de discernimiento visual entre la obra y el espectador, siempre en una situacin de contemporaneidad. Esta preocupacin por
el papel tiene que ver con que mi obra
funde el documento con la obra. Siempre estos elementos estn en una situacin paradigmtica de ambigedad, que
es buena. Una imagen ya de por s tiene
ambigedad, una cosa de gestalt. Y el
cerebro tiende a resolver esto. Es la imagen como un rompecabezas; es muy importante.

Entre su estudio en Brasil y el de

Brooklyn, sus asistentes experimentan con
la materia hasta dar con el efecto que el artista busca. Experimentos surrealistas enmarcados en mapas intelectuales de bsquedas y cuyos pasos Muniz sigue de cerca:
Mis asistentes sobre todo experimentan
con cosas para las cuales yo no tengo tiempo. El 50 por ciento de su trabajo es buscar
y experimentar con distintos materiales.
Porque hay que probarlos hasta encontrar el
momento en que funcionan, hasta que aparece el efecto que quers. Como yo no tengo tiempo para hacer los experimentos, ellos
lo hacen. Ahora por ejemplo estoy intentando hacer una imagen 3D de una radiografa
con burbujas de aire. Entonces, una asistente colombiana inyecta aire en un acuario
que tenemos en el estudio, cada 3 o 4 das,
para ver cunto tiempo tarda en subir y desarmarse la burbuja.
Hacer del experimento una tcnica,
rescatar la mirada como un ancla que,
aun en medio de la inmediatez digital, el
consumo y la descomposicin, sigue proponiendo al arte como espacio privilegiado de interpretacin y como remedio
contra el olvido.
Vik Muniz Buenos Aires se puede visitar en
Muntref Centro de Arte Contemporneo,
Sede Hotel de Inmigrantes, Av. Antrtida Argentina
1355 (entre Direccin Nacional de Migraciones y
Buquebus). Entrada por Apostadero Naval,
Drsena Norte. Los martes a domingos de 11 a 19.

RADAR

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INE
VITA
BLES

TEATRO

MSICA

Prueba y error

Sticky Fingers

Sergio Grey est ciego a todo lo que pasa a su alrededor: el desamparo de su mejor amigo, la relacin con su hermana y el cuidado de la nia. Estos vnculos conforman un universo familiar tal
como el director John Cassavettes los presentaba: el maltrato a
los ms dbiles nacido de la frustracin, los hijos como testigos
de la furia de sus padres, el deterioro psquico de los personajes y
una ansiedad generalizada por vivir. Estas relaciones, al igual que
el rompecabezas de la historia, se encuentran partidas: todo ocurre en velocidad y a la vez. Es la mirada del espectador la que
recorre la trama para, juntando los pedazos, construir esta historia. Luego de cuatro aos de Un Hueco, la compaa que lleva el
nombre de aquella obra presenta un nuevo espectculo. Siempre
con direccin de Juan Pablo Gmez y el tro de actores Alejandro
Hener, Nahuel Cano y Patricio Aramburu. Esta vez se suman a la
escena Anabella Bacigaluppo, la jovencsima actriz Luna
Etchegaray, los bailarines Ezequiel Snchez, Manon Cotte y el pianista Santiago Torricelli.
Jueves a las 21, en Timbre 4, Mxico 3554. Entrada: $ 120.

Zoom

Esta es una historia que narra la Tierra sobre los hombres que la
habitan. Pero vistos desde cerca, de muy cerca. Se trata de una
obra en donde la combinacin de imagen, sonido, relato y actuacin buscan potenciar la puesta en escena. La Tierra es personificada por una mujer cuyo cuerpo ha sido intervenido con diversos
paisajes en miniatura: ciudades, campos, islas, desiertos. Del
mismo modo que los hombres se ven interpelados por los paisajes, Zoom tambin puede pensarse como un viaje a travs de distintos escenarios, de las personas que los habitan, de sus pensamientos y sentimientos, y de las resonancias que todo eso produce en el espectador. Acta Claudia Mac Auliffe. Texto y direccin
de Luz Lassizuk.
Sbados a las 22.30 en Elefante Club de Teatro, Guardia Vieja
4257. Entrada: $ 100.

SAL GRANDES TRADICIONES

5.7.15

RADAR

Nacido en Entre Ros pero instalado desde muy joven en Buenos

Aires, Sebastin Salvador se sum al Nuevo Rock Argentino de
los 90 con su banda Electra, y luego supo cambiar de siglo al
frente de Interama, con los que edit cinco discos. Sin dejar de
volver a intentar con una banda Mil Pjaros comenz un
camino en solitario con el EP acstico Pastillas en el aire, y luego
lleg su primer disco propiamente dicho, Como una niebla de
cristales (2012). Para su sucesor, un sonido que honra su historia
rocker esconde cierto folklore detrs, que honra nuevas bsquedas y tambin orgenes.

TRATTORIA SICILIANA

ncender el fuego, mezcla de quebracho colorado y carbn. Tirar la carne sobre las brasas. Sentir el crepitar y
su aroma. Una postal viva de la gran tradicin argentina: la parrilla. A eso apunta El Estrebe, local de barrio en Recoleta. Y lo hace con las mejores armas posibles: carne de alta
calidad (madurada in situ por unas dos semanas), cortes propios y generosos, respeto a ultranza por el punto pedido, vinos
guardados a temperatura controlada y un servicio comandado
por los propios dueos.
El Estrebe abri en 2008, de la mano de dos camareros (Leonardo y Alejandra), que trabajaron antes en El Pobre Luis, la
muy famosa parrilla de Belgrano. Hoy honran aquella herencia en un ambiente familiar, que suma detalles de decoracin
regionales y toques vintage (carta amplia y clsica, con decenas
de opciones; servilletas acomodadas en forma de abanico).
Lo que ms sale es el chuletn, asegura Alejandra, un tremendo ojo de bife con hueso, de cinco centmetros de altura y
700 gramos de peso (900 gramos con el hueso, $ 360). No es
el nico corte especial de la casa: tambin sirven vaco del fino
(es la parte ms delgada, de 3 cm), bife de rionada de cuadril (con papas fritas y dos huevos fritos, $ 240), adems de
pamplonas de pollo o cerdo, riones a la tela con panceta y
provenzal ($ 110), mollejas de corazn ($ 160 la media porcin), brochettes, colita de cuadril (entera o en porcin individual), entraa ($ 210), asado y todos aquellos cortes que hacen al ser carnvoro nacional.
Como buen restaurante de barrio, suma pastas caseras, pescados, entradas como los buuelos de verdura, infinitas guarniciones (verduras al plomo, morrones rellenos, espinacas salteadas), postres de bodegn. En la semana alternan carnes por
fuera de carta (patita de cordero entera, chivito, cochinillo) y
ofrecen men promocional (entrada, plato, postre, lemoncello
y vino de 375 ml, por $ 215).
Paraso ciudadano para los amantes de la mejor carne, El Estrebe demuestra que tradicin y calidad van de la mano.

El rbol secreto

POR
RODOLFO
REICH

EL CHULETN AL PLATO

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No hay mucho ms que se pueda decir de Sticky Fingers, tal vez

el mejor disco de una banda llamada The Rolling Stones.
Abriendo con la ya clsica Brown Sugar y cerrando con
Moonlight Mile, no hay desperdicio en un disco que tiene cumbres como Wild Horses, Sister Morphine o Dead Flowers.
Presentacin de Mick Taylor como miembro estable de la banda,
el lbum de la bragueta warholiana en portada forma parte de la
poca en que se consagraron como la banda de rock ms grande
del mundo, y eso que an no se haban convertido en una fuerza
corporativa, sino que apenas eran unos drogadictos fugitivos. Y a
mucha honra. De Beggars Banquet (1968) a Exile on Main St.
(1972), no hubo nada que los Stones hicieran mal, al menos musicalmente. Casi sin inditos para agregar para esta reedicin porque los incluyeron todos en la de Exile, segundo disco la versin doble es la que tiene edicin local incluye un set de temas
en vivo grabados en el Roundhouse, en 1971, y versiones alternativas varias, entre ellas Cant You Hear Me Knocking sin su riff
caracterstico, un Wild Horses acstico y la gema del lote:
Brown Sugar, con Eric Clapton como invitado. Hay una edicin
con un tercer CD, integrado por un concierto grabado en la
Universidad de Leeds de la misma poca, conocido por ser uno
de los mejores piratas del grupo.

El Estrebe queda en Pea 2475. Telfono: 4803-0282/0283.

Horario de atencin: todos los das, medioda y noche.

or largas dcadas, la cocina italiana en Argentina se entendi como un todo. Un universo compacto, traducido y aporteado a lo largo de sucesivas inmigraciones.
Pero, de a poco, esto est cambiando: hoy Buenos Aires es
hogar de un puado de cocineros llegados en los ltimos aos
al pas, que muestran fidelidad por sus orgenes regionales,
sean del norte o sur de la pennsula, e incluso de las islas. Justamente de la isla italiana ms grande proviene Giovanni Ferlino (luego lo siguieron su madre Rita y su hermana Mara), y
entre los tres abrieron Zagara, en San Telmo, donde ofrecen
una cucina 100% siciliana.
Zagara es una trattoria, un local informal, relajado, que deambula por platos sabrosos, apoyados en un buen producto y en
ciertas materias primas claves: el aceite de oliva, la dupla omnipresente de tomate (cherry, entero, en salsa) y berenjena, un rico queso rallado y la pastasciutta Divella. Todo servido con presentaciones simples, sobre manteles cuadrill rojo y blanco, en
una casona centenaria, de techos altos y paredes de ladrillo.
Para comer: entradas como las parmigiana alla palermitana (berenjena, salsa de tomate, queso parmigiano y albahaca, a $ 80),
clsicos arancine (unas croquetas de arroz fritas, rellenas de bolognesa, tomate y arvejas, $ 60) o el antipasto con quesos y
fiambres nacionales e importados ($ 140). Entre los platos
principales, un ortodoxo dente en la pasta seca (con frutos de
mar a $ 125; con bolognesa, tomate, crema y hongos a $ 110),
pizzas individuales (desde $ 70), carnes y pescados. Los briocioletti di vitello muestran las influencias orientales de la historia de la isla, con uno arrolladitos de ternera rellenos de queso,
tomate, pan, pasa de uvas y especias ($ 125).
La carta es breve pero completa. Canolo siciliano relleno de
ricota o una golosa torta con crema de pistacho y chocolate
blanco, algunos vinos italianos y unas pocas bodegas argentinas, ambas a buen precio, terminan de cerrar un viaje que
parte de las costas sicilianas y desembarca en el casco histrico de San Telmo.

DVD

CINE

TELEVISIN

Mar negro

La vida de alguien

Ripper Street

Retrospectiva Miyazaki

Sons of Liberty

No pas por los cines esta pelcula protagonizada por el un

poco devaluado Jude Law y dirigida por Kevin Macdonald, el
autor de Un da en septiembre, y la notable El ltimo rey de
Escocia. El Capitn Robinson un recio capitn escocs de
submarino interpretado por Law acaba de ser brutalmente
descartado de una compaa de salvamento tras una dcada
de servicio. Rene entonces una tripulacin de inadaptados,
con un objetivo si no del todo noble al menos atractivo:
emprender la bsqueda de un tesoro hundido en las profundidades del Mar Negro. Por supuesto y como corresponde al
subgnero submarino, la claustrofobia gana cuerpo a medida
que avanza la trama y de pronto la cosa se convierte en un
apretujado e irrespirable todos contra todos. Scoot McNairy
(Argo), Ben Mendelsohn (la gran revelacin de la serie
Bloodline) y David Threlfall son los que le ponen tensin al
asunto, que debera haberse visto en cine pero no.

50 a 1

Un grupo de vaqueros poco civilizados de Nuevo Mxico

pone en marcha la aventura de sus vidas cuando su caballo
de carreras con patas chuecas califica para el superclsico
burrero, el Derby de Kentucky. La cosa est basada en la historia verdadera de Mine That Bird, leyenda cuadrpeda que
con ese nombre extico tan comn entre los amantes de
turf es el autntico protagonista (antes que los humanos que
lo rodean, como el malogrado Skeet Ulrich, a quien algunos
recuerdan por Scream y Mejor imposible); su accidentado
viaje a Churchill Downs. No es Seabiscuit, no es Secretariat,
no es Hidalgo, pero galopa.

Dnde estaba Ezequiel Acua? Cuatro aos despus de

Excursiones vuelve con otra sensible y autntica exploracin de
lanaturaleza de la amistad, las prdidas afectivas y el paso del
tiempo. Una dcada despus de la desaparicin de su mejor
amigo y compaero musical, Guille (Santiago Pedrero) recibe la
propuesta para editar a travs de un sello independiente el disco
indito de aquella banda que qued trunca. Mientras rene a lo
que queda del grupo, Guille transita su camino solitario, acorralado por los recuerdos. La edicin del disco podra ayudarlo a hacer
las paces con el pasado, mientras que el encuentro algo fortuito
con Luciana (una encantadora Ailn Salas) se convierte en su
conexin ms slida con el presente. Un tipo de pelcula que parece volverse cada vez ms atpica en el cine argentino, filmada en
el cada vez menos usual formato de 35mm; y que ahora se estrena comercialmente tras su paso por la competencia internacional
del festival de Mar del Plata, y un par de proyecciones en Bafici.
Sbados 4, 11, 25 de julio y 1 de agosto a las 22, en el Malba
(Av. Figueroa Alcorta 3415), varios horarios en Incaa Gaumont,
Av. Rivadavia 1635) y otras salas.

Hace menos de dos aos el ltimo maestro de la animacin nipona, el cofundador del estudio Ghibli, anunci que se retiraba del
cine. De todo eso y de su film de despedida, Se levanta el
viento, ya se habl en estas pginas; la buena nueva es esta
oportunidad de revisar su obra previa en proyeccin en pantalla
grande, apreciando sus hermosas imgenes en las que se despliegan el poder de los sueos. Se vern Nausicaa del valle del
viento (1984); El castillo en el cielo (1986); Nicky la aprendiz de
bruja (1989; tambin conocida como Kiki) y La princesa Mononoke
(1997), adems de las ms conocidas El viaje de Chihiro, El increble castillo vagabundo y Ponyo, la sirenita.
Sbados y domingos a las 15.30 y 18, en el Museo Nacional
de Bellas Artes, Av. Figueroa Alcorta 2280.

En los ms oscuros y srdidos callejones de la Londres victoriana, un equipo liderado por el inspector Edmund Reid (Matthew
MacFadyen) intenta detener al Terror mismo e identificar su origen. Quienes lo acompaan son el sargento de Reid, Bennet
Drake (Jerome Flynn), un hombre duro, y el capitn Homer
Jackson (Adam Rothenberg), un verdadero aficionado a pasar
largas noches en el burdel de Long Susan, de donde salen
algunas de las chicas que cada tanto se desangran acuchilladas por Jack el Destripador. Y es que de este personaje siniestro y misterioso cuya identidad nunca fue desculada se trata
esta serie de la BBC, suerte de versin clsica y moderna de la
leyenda para tiempos del boom del policial forense. Como ha
sealado la crtica de su pas, parte de lo que hace de Ripper
Street un programa muy interesante no es lo que uno esperara:
el concepto central es que el destripador ha desaparecido, y
ahora la gente lucra con la leyenda, alimentada por la prensa.
Algo trillado pero irresistible, Watson.
Hoy a las 22 (repeticiones el mircoles a las 22), por Film
& Arts.

Esta miniserie producida por History sobre los padres de la

patria estadounidenses cuenta la historia de un grupo de
jvenes rebeldes. En el primer episodio, que se ver esta
noche con el ttulo Juego peligroso, Sam Adams, tras provocar accidentalmente la destruccin de la mansin del
Gobernador Realen Boston, se une a John Hancock y juntos
inician un negocio de contrabando. Las calles de Boston se
entregan al caos, y tras el asesinato de un nio a manos de un
defensor de los britnicos, el conflicto pasa de una simple disputa por el dinero y los impuestos a la guerra por la libertad y la
independencia.
Del domingo 5 de julio al martes 7 de julio, por History
Channel.

DESDE RUSIA CON AMOR

Trattoria Zagara queda en Balcarce 983. Telfono 4300-3410.

Horario: lunes a sbados, medioda y noche; domingos, medioda. Mediodas de semana: men ejecutivo a $ 125.

FOTOS: PABLO MEHANNA

ara ellos, la cocina fue siempre un hobby, una manera

de rememorar los sabores del hogar. Andrey y Vera nacieron en Sochi (Rusia), viven en Argentina hace dos
dcadas, y en noviembre del ao pasado transformaron su
hobby en un emprendimiento familiar, abriendo La Comidera, una rotisera ubicada en el barrio de Belgrano. Preparamos las comidas caseras de mi familia, dice Vera en un espaol fluido pero con acento marcado, en medio del ajetreo de la
cocina antes de abrir. Y explica: Es una cocina fusin. Sochi
tiene frontera con los pases caucsicos, est frente a Turqua,
por all pas la ruta de las especias. Hay muchas influencias
distintas, especias, aromas.
El folleto que sirve de carta deambula por nombres extraos al
paladar local, como la kapusta, una suerte de chucrut a base de
repollo ($ 8,90 los 100 gramos), los muy intensos pepinos
agridulces (mucho ms salados que sus pares alemanes) o la
kotleta, uno de los platos ms pedidos, que consiste en una
hamburguesa de carne de vaca y cerdo ($ 14 los 100 gramos,
tambin hay de pescado picado a cuchillo).
El local es prolijo, limpio y austero, con los platos expuestos en
un mostrador vitrina. Todos los das hay platos calientes; salen
mucho las sopas, como una borscht, que puede ser en versin
tradicional, pero tambin una verde, con espinaca y huevo batido ($ 35 los 500 ml). Y, entre las especialidades fras, destaca
el jolodets, similar al tradicional spic, que se prepara haciendo
primero un caldo muy perfumado con especias, hierbas y carnes mixtas; luego las carnes se quitan, se deshacen y se vuelven
a colocar en el caldo que, al enfriarse, gelatiniza.
Por suerte, no todo es extico: muchos platos son fciles de entender y disfrutar, desde unas papas al horno con pimentn y
queso hasta unas milanesas de cerdo pasando por los vareniki
(pasta rellena) de papa con cebolla o carne. Hoy, uno de cada tres
de sus clientes son de la comunidad rusa, pero cada da ms locales aprovechan los sabores caseros y precios amables de La Comidera para adentrarse en una gastronoma y cultura distintas.

La Comidera queda en Olazbal 2734. Telfono: 4781-0996.

Horario de atencin: martes a sbados de 11 a 22.

RADAR

5.7.15

19

MEMORIAS
DEL MUNDO
La aplicacin de los mtodos de la historia oral a la diplomacia y sus protagonistas tiene
un particular inters, ya que se puede acceder de primera mano a los momentos ms cruciales de
la historia del siglo XX. Bajo esta premisa, Mario Rapoport dirigi el volumen Historia oral de
la poltica exterior argentina (1930-1966) (editorial Octubre), un libro que sin dudas marca un
hito en la materia. Aqu se reproducen fragmentos de la entrevista realizada en noviembre de
1987 a Carlos Florit quien con 29 aos fue el canciller ms joven de la Argentina y donde se
pasa revista a los aos de Frondizi, los Kennedy y las figuras de Fidel Castro y el Che Guevara,
en medio de la crisis geopoltica provocada por la Revolucin Cubana.

LIBROS

POR MARIO RAPOPORT

Y GRACIELA SNCHEZ CIMETTI

Cul fue su origen familiar, social,

estudios, militancia poltica juvenil,
etctera?

Nac el 13 de abril de 1929 en Gnova, Italia. Mi padre era marino profesional e ingeniero y estaba destinado en la
misin naval en Italia, donde se estaban
construyendo en ese momento los cruceros 25 de Mayo y Almirante Brown, en
los astilleros Ansaldo que quedan cerca
de Gnova. Por eso soy argentino por
opcin, no argentino nativo aunque en
esa poca no exista la categora, excepto
para los hijos de diplomticos, y mi padre era un militar en comisin externa, y
la comisin naval no tena rango diplomtico. Vine a la Argentina a los 4 o 5
aos de edad y por esa razn el primer
idioma que aprend fue el italiano. Mi
padre era oficial, se retir como capitn
de fragata.
Su padre era marino de familia?

No, mi padre era hijo de un inmigrante espaol, una familia de vida decorosa pero de muy poco dinero. Vivan
con el retiro militar. Hice la escuela p-

20

5.7.15

RADAR

blica en un colegio muy bueno en Belgrano. Luego entr al Liceo Militar, fundado
por uno de mis tos, el general Ernesto
Florit, hermano de pap, que posteriormente fue intendente de Buenos Aires.
Soy de la quinta camada del Liceo...

tante universitario. No estaba contento

ni con la oposicin a Pern ni con el rgimen peronista, aunque hacia 1950 pude tener una conciencia clara del peronismo, justo cuando ya iniciaba su cada,
perda fuerza. (...)

Entonces, es una familia de militares?

Vamos a rebobinar, un poco antes de

llegar al Ministerio de Relaciones exteriores, quisiera que nos relatara el
clima intelectual de ese grupo que se
rene en torno a Frigerio. Haba algunas figuras muy conocidas, como
Scalabrini.

Claro, mi to y mi padre, y tambin algunos primos, uno de ellos, fue capitn de

navo. Pero no era una familia de origen
militar, mi abuelo fue empleado del Banco
Espaol. Estuve en el Liceo Militar hasta
tercer ao, me fui porque no me gustaba la
carrera militar, finalic mis estudios en el
Mitre, que quedaba sobre Valentn Gmez, en el Abasto, muy buen colegio, y
tengo muy buenos amigos.
El mismo colegio de mis estudios
secundarios. El Nacional N 5.

Exacto. Y bueno, despus entr en la

Facultad de Derecho.
Eso en qu ao fue?

Entr en la facultad en el ao 47,

posteriormente fui ayudante del Instituto
de Filosofa del Derecho, donde me incorpor a la carrera universitaria. Fui jefe
de investigaciones del Instituto Gioja
despus de la cada de Pern. Era antiperonista como estudiante aunque no mili-

S, Ral Scalabrini Ortiz.

Estaba Arturo Jauretche?

Estaba Jauretche, pero trabajaba ms

que nada en la parte periodstica.
Puede relatar ese famoso encuentro
Frondizi-Frigerio, al que se han referido tanto, pero quiero que nos d su
versin. Cmo se form ese grupo
poltico?

Yo primero trabaj ms con Frigerio

que con Frondizi, despus mucho con
Frondizi, no solamente a travs de Frigerio sino tambin directamente con l,
pero en principio trabaj con Rogelio.
Me parece claro que Frondizi tena las
caractersticas que ya son pblicas, de
un eminente poltico nacional, tradicional, con un gran prestigio en todo el
pas, era importante porque haba sido
el lder de la oposicin durante toda la
poca de Pern, pero es uno de los pocos que le acerca una mano a Pern
cuando cay en desgracia, quizs el nico de los dirigentes con proyeccin nacional; pensemos que era uno de los
cuatro o cinco presidenciables del pas.
El otro tema es el sistema, la capacidad
de anlisis y la tendencia a la prctica
poltica por parte de Rogelio Frigerio
sobre la base de la unin de dos elementos de praxis que han sido, a mi
juicio, los que desde el punto de vista
intelectual los han unido, es decir, la

nocin de inters nacional y la nocin

de desarrollo econmico, subsumidas
las dos en una sola, dentro de esa coyuntura argentina. Es decir, esos dos
elementos, una nocin determinada del
inters nacional y cmo hacer una poltica de desarrollo econmico, primordialmente, fueron, creo, los dos elementos que permitieron a Frigerio, ir desarrollando y ejecutando la estrategia
que se explicita en la revista Qu y en
todos los discursos de Frondizi de la
poca, e incluso en la poltica que desarrolla la UCRI antes de las convencionales y despus, cuando llegan las elecciones. Yo formaba parte de un equipo
muy cercano a Frondizi en esa poca,
trabajbamos en los discursos, en las
conferencias de prensa, en la relacin
con los medios. Me acuerdo que Frondizi se rea y deca que yo, tcnicamente, era radical del pueblo, y era cierto,
porque nunca me haba afiliado a la
UCR, no me haba preocupado tampoco por eso, mi funcin no era partidaria
sino acompandolo a Frondizi en el
gabinete o fuera de l; era una funcin
eminentemente nacional, de entrega a
una idea nacional, la del desarrollo econmico y el inters nacional.
LOS KENNEDY
Conoci a Kennedy?

Lo conoc en casa de Amadeo, quien

era embajador argentino en Naciones
Unidas, y Kennedy en ese entonces era
senador por Massachusetts.
Cul es su impresin personal?

Era un hombre muy franco, tena

cierta grandeza personal, no era un idelogo, posea una suficiente dosis de empirismo como para ser un lder nacional a
diferencia de sus otros hermanos que
tambin conoc, especialmente a Bobby;
a Edward lo trat muy poco.
Bobby era un idelogo?

DE IZQUIERDA A DERECHA:
JULIO AMOEDO (EMBAJADOR
ARGENTINO EN CUBA), FIDEL
CASTRO, ARTURO FRONDIZI Y
CARLOS FLORIT. VISITA DE
CASTRO A LA ARGENTINA,
MAYO DE 1959, CINCO MESES
DESPUES DEL TRIUNFO DE LA
REVOLUCION CUBANA.

Bobby era un Kennedy, como dicen

los americanos, un liberal muy entusiasta, con una gran capacidad de actuacin, pero no un lder nacional comprensivo y representativo de esa sociedad tan compleja, tan proteica como es
la norteamericana. En cambio John pareca ser un lder para todos los americanos, y sobre todo con la suficiente autoridad de pensamiento para enfocar los
problemas ms delicados, as como para
ser presidente de los Estados Unidos,
que no debe ser tarea fcil, sa es la impresin que me dio. Lo que no tena era
una gran capacidad de gobierno. Tuvo
enormes dificultades internas que evidentemente lo superaron, a tal punto
que lo mandaron a la fosa.
FIDEL Y EL CHE GUEVARA
Pasemos a un tema ms controvertido, el tema cubano durante la poca
de sus funciones. El conocido libro de
Conil Paz y Ferrari sobre la poltica
exterior argentina, editado por el
Crculo Militar, titula el captulo dedicado al gobierno de Frondizi Entre
Oriente y Occidente, y califica esa
conducta, de un modo sumamente crtico, como la poltica de la cornisa.

No solamente ellos, sino tambin

Grondona en La Nacin. Nos acusaban
de practicar nuevamente el neutralismo.
Pero son dbiles mentales por la forma de
pensar. El pobre Grondona, como vive
de determinada cosa, tiene que sobrevivir
en distintos perodos de su vida. El caso
de esos dos muchachos, los conozco bien.
Conil Paz asesor a Zavala Ortiz cuando
firm el tratado bilateral militar con Estados Unidos. (...)
Y cules fueron las primeras reacciones militares en torno al tema de la
Revolucin Cubana?

Bueno, con mucha reserva. Ac haba una exaltacin tremenda en los ser-

vicios de seguridad cuando vino Fidel

en mayo de 1959. Conoc a Ernesto
Guevara muy bien, era muy amigo del
hermano, Roberto, desde chico, estudibamos juntos, ellos tenan diferencias notorias. Conozco muy bien a Castro como a Guevara. Fidel no era un
militante comunista.
Explqueme el contenido de la reunin
con Fidel en Buenos Aires.

Hubo varias reuniones. Fidel fue

bien recibido, lo haban transformado
casi en un hroe. De modo que al principio tuvo buena prensa. Nosotros tenamos un embajador ah, asignado durante la poca de Battista, que nos haca
llegar que las cosas venan muy mal.
Nuestra opinin era que Castro tena
que conservar el mercado americano a
todo precio; haba conseguido esa patriada, ganarle a un ejrcito regular con
los irregulares, era un producto autntico de la sociedad cubana. Nadie lo puso
ah, ni Mosc, estaba ah porque tuvo
que ser, hizo su guerra con los campesinos, con su propio pueblo. El tena todo para poder manejarse bien, pero
cuando comenz con los fusilamientos,
se equivoc fiero. Al llegar aqu no
comprenda, porque vena un poquito
entonado por el xito personal, militar
y poltico de su campaa, por lo cual
pensaba que todo el mundo iba a gritar
La vida por Fidel, y no que haba carteles que decan And a fusilar lombrices. Y me preguntaba: qu es eso?.
Le digo: Fijate, la gente ac a vos no te
quiere. Por intermedio de algunos
amigos del movimiento peronista consegu que algunos se pudieran entrevistar con l, porque aqu Fidel quiso acaparar a parte del PC, a Petrone y al viejo Guevara Lynch. Francisco Petrone, el
actor, era parte del PC, tena el circo y
haba hecho una poblada con toda la
gente del PC.

El viejo Guevara Lynch,

el pap, no estaba en
poltica, la que militaba era
la madre, Celia Guevara.
Era marxista, de slida
formacin, y le escribi una
carta a Ernesto que es
excelente, una de las
ltimas que publica Ricardo
Rojo en su libro. La madre
era medio trotskista.
CARLOS FLORIT

Y el viejo Guevara Lynch estaba en

poltica?

El viejo Guevara Lynch, el pap, no,

la que militaba era la madre, Celia Guevara. Era marxista, de slida formacin,
y le escribi una carta a Ernesto que es
excelente, una de las ltimas que publica Ricardo Rojo en su libro. La madre
era medio trotskista, y curiosamente el
viejo Guevara era amigo de Rojas, el almirante, y le haban hecho tambin una
fiesta en el Luna Park. Eran todas seoras gordas que estaban alrededor de Fi-

del. Entonces, yo le explicaba y Fidel

me deca: Ustedes son un pas de locos. No entenda nada, haba sectores
populares que lo mandaban a fusilar
lombrices y la gente que lo aplauda
eran todas seoras gordas. El capitn
Francisco Manrique hablaba de el hroe de Sierra Maestra en su diario Correo de la tarde. Le expliqu a Fidel cmo era la situacin en la Argentina y
cmo veamos su actuacin militar, sobre todo en funcin al tema de los fusilamientos, y reconoci que s, que los
fusilamientos fueron en gran parte disparatados.
Ya en esta poca, cuando usted conoci a Fidel, tenda a convencer al otro
y a escuchar poco?

No, escuchaba mucho. Cienfuegos

se fue con ciento cincuenta tipos y dos
lanchas de desembarco, quiso tomar Panam, y desde el hotel Alvear Fidel par
la invasin, les dijo: Ustedes son locos? Qu quieren hacer? Quieren exportar la revolucin?. Sobre la teora
de la exportacin de la revolucin, deca que la misma era una emergencia de
las propias sociedades, si no no funcionan. Lo habl por telfono con Cienfuegos y le dijo claramente: Eso es
contrarrevolucin pura, y los voy a
mandar al paredn, levanten eso y vyanse. Luego habl con Ral para que
discutiera sobre el tema, pusiera en claro la cosa de la extensin de la revolucin al istmo.
Qu diferencias encontr entre Fidel
y el Che?

Fidel es un lder nacional y el Che es

un gran muchacho con gran valor individual y atractivo personal, con ms testculos que cerebro, que adems le daba
por pelear en Cuba y era argentino. Era
una especie de revolucionario permanente... no profesional, amateur, un condotiero amateur.
RADAR

5.7.15

21

MSICA

Entrevista al Sr. Chinarro, un clsico del indie espaol

HABA UNA VEZ UN CIRCO

POR MARTN PREZ

l salir de La Biela, el bar donde antes de viajar a Buenos Aires le dijeron que tena que sentarse a tomar
un caf, Antonio Luque confirma que el
extrao nombre de su proyecto grupal es
una suerte de homenaje al show de Gaby,
Fof y Miliki, aquellos payasos espaoles
que tuvieron un programa televisivo propio, y acompaaron la infancia de varias
generaciones de nios tanto en Espaa como en Amrica. El Sr. Chinarro era el
nombre del actor que intentaba poner orden en el circo, explica con una sonrisa.
Y agrega, encogindose de hombros:
Aqu me ves, intentando hacer el mismo
trabajo. Clsico del indie espaol a pesar
del curioso nombre, despus de un cuarto
de siglo y una veintena de discos el Sr.
Chinarro ya es definitivamente Luque, el
nico miembro original, autor e intrprete de todas las canciones. El actual Chinarro confiesa no haberse encontrado nunca
personalmente con el original, pero tiene
amigos que lo han tratado, y le han contado que el veterano actor est satisfecho
con el homenaje. Es ms: Miliki ya muri, pero le lleg a decir que incluso le tena cierta envidia, porque l nunca haba
tenido una banda que llevase su nombre.
Un par de semanas atrs, Luque disfrut
de su debut porteo en el Centro Cultural
Recoleta, prcticamente frente al bar donde se sent a contar su historia, firme ante
una cerveza en un feroz medioda invernal
al que an le faltaba el almuerzo. En realidad sera la cerveza de las tres de la tarde.
O de las cinco. Pero con esto del cambio
de horario, me cuesta llevar la cuenta.
22

5.7.15

RADAR

La historia del Sr. Chinarro coincide

prcticamente con la del indie espaol
de los 90, una generacin rocker que
reinvent el gnero por all, despus del
xito y el posterior ocaso de la Movida.
Son las bandas que yo escuchaba, pero
es como pasa siempre: o tocan en estadios o se separan. As que los que vinimos detrs tuvimos que volver a inventar el circuito de clubes y bares para tocar. Adems, no sabamos tocar muy
bien, y ramos conscientes de eso, recuerda Luque, cuyo grupo fue uno de
los pocos que intent cantar desde el comienzo en castellano. No ramos los
nicos, pero es cierto que hubo algunos
que ni les interesaba, y se contentaban
con hacerlo slo en ingls. Si es que se le
poda llamar as, claro. El gesto era un
homenaje a los referentes norteamericanos y britnicos de la poca, que dentro
de la generacin de Luque haban reemplazado a los hroes de la infancia locales. Despus de haber escuchado sin parar con catorce aos grupos como Aviador Dro, Ilegales o Golpes Bajos, me pas a Sonic Youth o My Bloody Valentine.
Y aunque aquella msica hoy ya no est
tan bien vista, sigo diciendo que uno de
los mejores conciertos que vi en mi vida
fue uno de Dinosaur Jr, en el que tocaron temas de sus tres primeros discos:
Una maravilla.
Nacido en la trmicamente insoportable Sevilla, pero criado en Aljaraz, un
suburbio que al tener un poco ms de
altura por las noches disfruta de un cierto alivio de temperatura, el padre de Luque era dueo de una planta de envasado de aceite, por lo que el hijo se dedic

a lo mismo cuando tuvo edad de hacerlo. Y mientras tanto sigui con lo de la

msica, algo en lo que haba descubierto ser bueno gracias a la fiebre de los
Casiotones, esos pequeos teclados que
asegura estaban en todas las casas cuando nio. As como quien juega bien al
futbol y tiene una pelota propone todo
el tiempo salir a jugar, yo me di cuenta
de que sacaba fcil todas las canciones,
as que propona jugar con los Casiotones. Un da propuse armar una banda, y
es lo que vengo haciendo desde entonces, resume Luque, que recin se plante dedicarse a pleno a la msica a sugerencia de J, el lder de Los Planetas,
cuando le produjo El fuego amigo
(2005), un disco que parte al medio su
discografa, dejando de un lado la etapa
indie y del otro una poca ms profesional, cada vez mejor producida y con la
voz bien al frente. La atraves en un
principio acompaado por quienes luego formaran el grupo Maga (Los mejores msicos de Sevilla, asegura), y
ms tarde ayudado por grupos valencianos como La Habitacin Roja o Maronda. Los ahora ex Maga estn de regreso
en el mundo Chinarro, y con ellos toc
en el Emergente porteo y tambin en
Rosario y Crdoba un extraordinario
repertorio basado en Perspectiva caballera (2014), su ltimo disco, pero tambin en temas que son a esta altura clsicos como el pegadizo y cmplice Una
llamada a la accin, de Presidente
(2011) o el extraordinario Los amores
reidos, de Ronroneando (2008).
Con la zanahoria por delante as es
como denomina tener un contrato dis-

cogrfico en ciernes y un nuevo repertorio por componer, Luque ha dejado de

lado la literatura, a la que lleg por lo
que l llama una burbuja editorial, que
llev a los editores a salir a buscar talentos. A partir de lo que leyeron en su
blog de la megalibrera Fnac recibi una
propuesta, y decidi intentarlo durante
un tiempo en que no se meti a grabar
discos, entre 2008 y 2011. Edit una
novela y un libro de cuentos, pero segu
viviendo de los recitales, confiesa, y
con eso explica las razones del regreso a
un oficio que le da ms satisfacciones
pero en el que an se confiesa inseguro,
a pesar de que viene publicando un disco por ao desde su regreso. Creo que
lo hago para romper esa inseguridad,
asegura Luque, que intenta sobrevivir
apostando por un estilo en un medio en
el que acaba de cerrar la versin espaola de Rolling Stone. Me preocupa ms
que para un site como Jennaispop, que
supuestamente cubra este tipo de cultura, sea noticia el disco de algn jovencito que aparece en un programa de televisin. Y peor an cuando esa noticia es
la ms vista del site. Porque entonces todo se iguala hacia abajo. Estamos yendo
hacia la ruina cultural ms increble en
Espaa, se indigna Luque, empinando
su cerveza del medioda, de las tres, de
las cinco, decidido sin embargo a seguir
haciendo canciones. Mi nica preocupacin es hacer una buena cancin,
asegura. Ese es mi trabajo, a eso me dedico. Todos los das cojo la guitarra como quien coge un cedazo y busca oro
en el ro. Yo voy a seguir buscando oro,
lo encuentre o no.

valedecir

PALAHNIUK PARA NIOS

Hola, mi nombre es Chuck Palahniuk y soy autor de ttulos como... bueno, en realidad, solo de El club de la pelea. Como mis lectores estn envejeciendo y muriendo,
decid presentar mi obra a una nueva generacin. Por eso, la he versionado para
nios; se llama Fight Club 4 Kids. Con dicha introduccin, el visceral, controvertido,
insolente, amado y odiado por igual escritor comienza la (auto)parodia viral de la
semana. Obra y gracia del sitio Mashable, que invit al responsable de Snuff, Nana,
Haunted o Pigmeo a imaginar su libro ms famoso para los lectores ms improbables, Palahniuk procede luego a leer el presunto tomo para nios: una edicin ilustrada, adaptada; casi, casi ATP. Casi porque, tras unas pocas lneas, el artista y
periodista independiente termina por irse al demonio. A saber: Haba una vez un
chico sin nombre que no poda dormir, una pena. Entonces se hizo amigo de un
joven con pelo puntiagudo. Puede que su amigo no estuviera realmente all. En fin, a
veces su amigo le deca cosas tontas como Deja tu trabajo, Peleate!, Demostr
que ests vivo, Pegame lo ms fuerte que puedas; no sos un jodido.... Perdn,
perdn, se supone que esto es para chicos. Djenme intentarlo de nuevo.
Y s que lo intenta aunque de poco sirva; porque hacia el final del cuento (con rima
y la afable cadencia de Chuky), el hombre vuelve a desmadrarse, relatando con
caracterstica descripcin cmo el nio sin nombre acaba matando a golpazos a
un secundario que, al menos, sonre. Y (casi) todos viven felices, comiendo perdices. Salvo el purrete que yace en una, ejem, amable mancha de sangre. Ahora
pods compartir tus momentos favoritos de la novela con tus hijos, sin el miedo
de traumatizarlos de por vida. Qu gran idea, festeja Mashable, y aclara que el
asunto no es precisamente real. Como si fuera necesario...

RADAR

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FA N

Un msico y actor elige su cancin favorita: Nicols Pauls y Orao ao tempo, de Caetano Veloso

LA MELODA
DEL TIEMPO
POR NICOLS PAULS

aetano vuelve a su casa de la infancia. Est en Santo Amaro da Purificao, en la casa de sus padres. Se
acerca a un inmenso rbol y lo abraza un
largo rato. Luego pide que le acerquen a
su pequeo hijo porque quiere presentarle
al tiempo, dice. Zeca est durmiendo?
Dmelo as, dormido, slo voy a presentarle al tiempo. Se enfrenta al rbol con
su hijo en brazos. Ambos, padre e hijo, estn ante el Arbore do tempo.
De fondo se lo escucha a Caetano tararear algo, una meloda que sistemticamente dice tempo, tempo, tempo.
En un viaje de la adolescencia a Brasil,
destino fijo en esa poca de mi vida, compr
un VHS. Era Circulado, un video de 1992
que homenajeaba al maestro cuando cumpla 50 aos. Recin lo vi al volver a Buenos
Aires, un mes despus. Recuerdo estar vindolo y que apareciera esa escena. Desde ese
momento, Orao ao tempo qued impregnada en mi piel. Al tiempo supe que estaba en el disco Cinema transcendental, de
1979, y me volv un gran amante de ella. La
cancin es una meloda que se repite y se re-

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RADAR

pite como un mantra, pero las frases nunca

son iguales a la anterior. Palabras que no se
repiten y que nos llevan hacia todos lados.
Tempo, tempo, tempo. A qu y a quin le
cantar Caetano?
Para m habla de los hijos, del tiempo,
de las separaciones, de las partidas. Y sucede como en una letana la frase tempo,
tempo, tempo, repitindose. Es una de
las primeras canciones que Gonzalo Aloras
y yo empezamos a hacer juntos en encuentros en casas, en fogones, y luego en conciertos suyos. Y fue la primera que grabamos de lo que hoy es mi primer disco solo, Comienzo. Este disco, el mo, habla de
eso, de los hijos, del tiempo, de las separaciones, del amor, de las partidas, y decid
incluir en l Orao porque todo eso est en ella. No pensaba incluirla, pero finalmente lo hice porque creo que es un buen
hilo entre todas las otras, como el sistema
nervioso autnomo.
He visto muchos conciertos de Caetano,
pero an no tuve la dicha de escucharlo
cantarla en vivo. Busco diferentes versiones de la cancin esperando que me emocionen como lo hace la versin original.
Hace unos aos Djavan la grab en su dis-

co Aria y me gusta la versin de Maria Bethnia, pero Caetano, Caetano, ay Caetano, maestro... Ainda assim acredito/ ser
possivel reunirmo-nos/ Tempo tempo
tempo/ num outro nivel de vincula/ Tempo tempo tempo.
Soy un gran amante de su obra, as como
eleg Orao ao tempo podra haber elegido el disco Joia (1975) completo. Me fascina. Me gusta mucho esa poca suya, en
donde vena de la experimentacin de Araa
azul y pensaba sacar un disco doble, pero finalmente saca dos discos individuales, Joia
(ms experimental) y Qualquer coisa.
Pero volviendo a Orao, sobre la
que alguna vez cont: De las letras del
LP Cinema transcendental, slo una la escrib parcialmente en el papel antes que
la msica, fue Orao ao tempo. Escrib
unas estrofas y, en seguida, se me ocurri
una meloda para la primera estrofa.
Despus resolv repetir esa meloda para
el resto del texto, quera que todo tuviera
esa misma mtrica, ese mismo ritmo.
Fue la nica, por lo tanto, que escrib en
papel. Caetano querido, nosotros tambin volamos con esas estrofas y esa meloda repetida. Gracias.

A la par de su carrera de actor en

television y cine, Nicols Pauls
tambin se abri paso como baterista de
distintos grupos, como Las 4
estaciones, La terminal, 4 espacio y,
actualmente, Horizonte. Con su aire
entre acstico e ntimo, mechado con
algunas rfagas de electricidad,
Comienzo es su primer disco solista. Las
canciones son de su autora o fueron
escritas en colaboracin con Gonzalo
Aloras, Daniel Ferrn y Julin Teubal.
Adems de Aloras y Ferrn, algunos de
los msicos que lo acompaaron en la
grabacin son Sebastin Lpez (Los
Tekis), Matas Camisani, Pol Medina y
Ricky Leguizamn. La presentacin de
las nuevas canciones de Pauls tendr
lugar en el marco del Festival
Internacional de Cine Ventana Andina,
el mircoles 8 de julio a las 22 en Centro
Cultural Macedonio Graz, en San
Salvador de Jujuy.

RADARLIBROS

TODO LO QUE HUBO

Cuando en 2013 dio a conocer Todo lo que hay, su ltima novela y primera que public en 35 aos, era
esperable que finalmente abandonara su puesto de escritor secreto. Pero no sin pasar por un breve y
resonante momento de fama, pronto volvera a ocupar el digno lugar que lo haba caracterizado a lo largo de
su vida: el de escritor de escritores. A pocos das de cumplir los 90, James Salter muri el pasado 19 de
junio. Piloto de aviacin, haba abandonado la Fuerza Area tras dar a conocer su primer libro. Con el
tiempo, se convertira en un escritor realista, elegante y refinado, clsico y a la vez ligado a cierta tradicin
secreta de la literatura norteamericana, como un extrao eslabn perdido entre Ernest Hemingway y Francis
Scott Fitzgerald. Rodrigo Fresn lo despide haciendo un recorrido por sus obras ms significativas.
POR RODRIGO FRESN

n su introduccin a The Collected

Stories of James Salter (2013), el irlands John Banville arranca celebrando la maestra del norteamericano
para conseguir uno de los efectos ms
complejos de la literatura: describir la realidad de todos los das. Banville con
quien Salter compiti cabeza a cabeza por
el premio Prncipe de Asturias del 2014
lo ubica junto a Chejov, Flaubert y al cotidiano y epifnico Joyce de Dublineses.
Pero, tambin, dentro de un contexto
Made in USA, Salter (1925-2015, nacido
como James Arnold Horowitz, el alias fue
adoptado para esconder su identidad ante
camaradas y superiores de la fuerza area,
donde pas ms de quince aos) resulta
alguien an ms interesante.

Ya lo dije, lo repito: Salter es el tercer

hombre. Aquel que combina lo mejor de
Ernest Hemingway y Francis Scott Fitzgerald. Prosa lrica y dilogos exactos, la
guerra y el extranjero, la muerte del
amor y la fascinacin por los ricos. Pero
mientras Hemingway es un aventurero
de lo macho y Fitzgerald un sentimental
de lo masculino, Salter se consagra como
el gran romntico de la hombra alcanzando, adems, una apasionada sexualidad que Nick Adams o Jay Gatsby jams
soaron con experimentar (alguien coment, con tan burlona como deslumbrada gracia, que en los libros de Salter
los hombres son hombres y las mujeres
no trabajan, todos beben Chateau Margaux y Kirs y Calvados, ellas le lanzan a
ellos entrecerradas y largas miradas y,
cuando se juntan para hacer el amor, la

tierra no se conforma con moverse; se

estremece bajo el ms poderoso de los
terremotos). Y Salter, sin caer en la bravuconada hemingwayana o en el crackup fitzgeraldiano (nada cuesta imaginar
a Salter fumando y escribiendo tranquilo
en una mesa mientras contempla cmo
Hemingway se agarra a golpes con el
barman y Fitzgerald cae borracho al suelo), es un narrador mucho ms sabio y
preciso a la hora de establecer las justas
coordenadas de las acciones y reacciones
de sus personajes. La literatura de Salter
es, al mismo tiempo, familiar en sus temas pero siempre novedosa en su maestra. Su prosa de mot juste Salter atribuye esto a su lectura constante de Kawabata, Tanizaki, Mishima, Babel y Gogol;
pero los escritores que me influyeron ya
no importan, porque han sido absorbi-

dos es en apariencia de una soberana

placidez para descubrirnos, enseguida,
que ese lago en perfecta calma es en realidad mucho ms profundo de lo que en
principio pensbamos. No es casual su
formacin con japons porque, de un
extrao modo, su cadencia, aunque tan
diferente, produce un efecto similar en
el lector a la de Haruki Murakami: una
especie de ensueo opiceo que, al principio, suena un tanto imposible y hasta
absurdo pero que en seguida te gana y te
convierte en adicto a esa mezcla de maravilla constante y dolor inminente y obsesin por inmensas pequeeces. Banville describe: Sus personajes son afilados
y conocedores del ambiente en el que se
mueven, y se usan los unos a los otros.
Es la segunda mitad del siglo americano
y las Torres Gemelas an estn dibujadas
>> >

RADAR

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25

>> >

en los planos. Acaso algo puede salir

mal? Y, sin embargo, casi todo sale
mal... Y tan a menudo la atencin del
lector se atora en un detalle revelador,
como una ua en la seda.
Pero esa familiaridad es engaosa y
esconde algo mucho ms fino. Salter
absorbente cum laude empieza y termina en s mismo y su pericia al pilotear lo suyo queda en evidencia en los
planeos de posibles aprendices que slo
parecen poder disparar sobre aspectos
parciales de lo de su capitn. Por ejemplo: Michael Ondaatje se pasa en lo potico, Mark Helprin se pasa en lo cursi,
Richard Ford se pasa en lo parco, David
Gates se pasa en lo srdido. Salter, en
cambio, mantiene un perfecto equilibrio con todas las bolas en el aire.
Soy, en verdad, un romntico y un
clasicista. Casi me enamor dos veces,
proclama un personaje en uno de los
cuentos de Salter.
Pues eso.
As, Salter como mutacin para mejor
y a ubicar como eslabn extraviado entre
la Generacin Perdida y cerca, pero no
al lado, de John Cheever y Richard Yates el Realismo Sucio que, en su caso,
siempre aparece impecable y bien vestido
para la hora de los cocktails.
Y en sus memorias o, como prefiere
definirlas, recollection, Quemar los das
(1997), Salter recuerda con modales
muy parecidos a los de sus ficciones y
donde apenas se detiene en su faceta de
escritor y lo que escribi entre avin y
avin y festejo y festejo una vida que
Papa Hem y Scott Fitz ya hubiesen querido para ellos. Y, s, no hay hombre que
si es honesto consigo mismo pueda
evitar el sentir envidia ante la biografa
de Salter, admiti John Irving. A saber:
piloto de combate en Corea, muy apuesto e infiel seductor en serie (lo que, en
ocasiones, en sus libros, se manifiesta como una misoginia delicada), guionista de
cine de cierto prestigio (suyo es el guin
del film de culto Downhill Racer, dirigido
por Michael Ritchie, con Robert Redford
como un esquiador casi existencialista),
alma de toda fiesta, turista profesional,
sibarita (lleg a recopilar un volumen de
recetas propias y de amigos junto a sus
esposa) y last but not least adorado por
Susan Sontag, Julian Barnes, Edmund
White, Tim OBrien, Joseph Heller, Graham Greene, Harold Bloom, Tobias
Wolff, Michael Ondaatje y Richard Ford,
quien lo defini como el mejor escritor
de oraciones entre todos nosotros. Un
bon vivant con todas las (mejores) letras
capaz de evocar con todos los sentidos
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5.7.15

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cuando haca el amor mientras el hombre

llegaba a la luna en un televisor con el volumen bajo o (una hija de Salter muri
electrocutada en un accidente domstico,
a eso le dedica apenas un puado de lneas bruscas e incmodas y como anestesiadas) el dolor imposible de transferir y de
poner por escrito: Puede recitarse la
muerte de reyes pero no la agona de perder a un hijo.
UN REALISMO VINTAGE
Todo lo que hay (2013), su ltima y primera novela en treinta y cinco aos Mi
piano todava suena afinado y me gustara
hacer sonar una ltima nota. Ya saben, los
escritores nunca se retiran. El nico modo de detenerlos es arrastrarlos afuera y
pegarles un tiro, sonri en una entrevista volvi a poner en evidencia el mtodo
y estilo de un escritor mucho ms raro de
lo que parece. Un realista practicando un
realismo no anticuado pero s vintage que
tampoco es tan real y que volva a esconder y revelar esquirlas de rareza singular y slo suya. All, por ms que parezca
apenas un casi naturalista, hay un rasgo
sutil pero autnticamente vanguardista en
el modo en que se (des) ordena el paso
del tiempo, se hace entrar y salir caprichosamente a secundarios de primera o,
en determinados tramos, el personaje incluye tanto al narrador de la accin como
al autor que contempla todo. Entonces,
en Salter, la paradoja de valerse del realismo como de algo experimental: no el realismo clsico y calculado e irreal de Madame Bovary o Anna Karenina sino algo
que escala los picos dramticos pero tambin se demora en las llanuras inocurrentes y muertas y grises de esa travesa espasmdico que es toda una vida.
Conocemos a Bowman como hijo abnegado, soldado en la Segunda Guerra
Mundial, editor querido por sus editados
(con ms de un rasgo del legendario Richard Seaver cuyas brillantes memorias
pstumas, The Tender Hour of Twilight, se
publicaron hace un par de aos con prefacio de Salter), conocido y conocedor de
celebridades (abundan los nombres propios que ya son de todos) y, por encima
de todo y de todas, marido/amante en serie. Porque en lo que hace a la cuestin
sexual, Bowman es una especie de contemplativo pero zen-sual depredador:
ninguna se le escapa por ms que luego lo
abandonen. Lo suyo, hasta en el otoo y
en el invierno de su satisfecho descontento, es una suerte de Cuan verde era y sigue siendo mi lecho. As que, madres e
hijas, estn advertidas: donde el erotmano Bowman siempre al mando en la ca-

ma pone el ojo, pone la bala sin importarle que en ms de un affaire el tiro le

salga por la culata. Y es de estos casi compulsivos pasajes romnticos y sexuales de
donde la novela deja escapar sus risitas
ms bobas y nerviosas y renuncia a la perfeccin que llega a tocar, como a un cuerpo caliente, con la punta de los dedos.
Una historia que en pginas consigue iluminarnos con esa luz verde al otro lado de
su muelle (Salter y sus Homo Salter son
siempre la luz verde; las mujeres son la luz
roja a atravesar veloces pero que, sin embargo, pueden lanzar cuchillos del tipo
Oh, mi teora... Mi teora es que ellos te
recuerdan por ms tiempo si t no los recuerdas) o con el coraje producto de la
gracia bajo presin navegando el Gran
Ro de Dos Corazones y por otros nos encandila con los fulgores artificiales de un
episodio de Mad Men de esos que parecen
como pensados por aliengenas retroadictos a ciertos tiempos y modas de
nuestra historia y especie. El resto como
siempre es una maravilla. Volver entonces a disfrutar y paladear el modo en que
Salter recupera a una Manhattan que ya
no existe pero sigue all, los gajes del oficio literario y los gajos de amistades y
enemistades que se desprenden de l, el
sabor de una comida o el perfume de un
paisaje, la manera ms de pintor que de
escritor con que se nos describe la cada
de una noche o el ascenso de un avin
para que todos y todo se eleven, el calibrado preciso de un sentimiento con el
que un hombre sienta cada vez ms inalcanzable a su patria y ms semejante a lo
extranjero que no es otra cosa que, finalmente, la cada vez ms inminente travesa
hacia la muerte.
Cabe pensar que ciertos pasajes y reincidencias de Todo lo que hay (su ttulo es,
claro, una declaracin de intenciones totalizadoras, de resumen de lo publicado,
de summa tica y esttica) podran haber
sido pulidos o recortados. Pero, de haberlo hecho, Todo lo que hay sera una novela
menos rara. As, como qued y como nos
recibe y nos deja, Todo lo que hay no es
una obra maestra sino nada ms y nada
menos que acaso por ltima vez, gracias
por todo otra obra de un maestro.
Todo lo que hay de algn modo limitando con el universo de la ya mencionada y, en inmediata perspectiva, cada vez
ms absurda y sobrevalorada Mad Men
hizo pensar en que Salter, finalmente, disfrutara de una despedida por todo lo
grande y que dejara de ser, como lo defini un crtico, el ms secreto de los escritores secretos. Y, de acuerdo, fue muy
bien reseada (con alguno de esos reparos

especialmente dolorosos). Y hasta ara

durante una semana la lista de best-sellers
de The New York Times. Pero luego todo
volvi a ser como era, como haba sido
hasta entonces. Y Salter a quien siempre
le preocup el que no le fuese mejor de lo
que le iba; ahora, por un rato, justicia
potica?, sus obituarios y revalorizaciones
han disparado las ventas de sus libros en
Amazon.com hasta lo ms alto y compiten cuerpo a cuerpo con los jadeos torpes
y posiciones absurdas del Grey de E. L.
James debi conformarse con seguir
siendo un escritor de escritores y de lectores a los que les gustan los escritores de
verdad.
JUEGO Y LUZ
Antes de esto, Salter ya haba ido afinando su arte en novelas y relatos de tramas muy norteamericanas pero de resonancias universales y textura inconfundiblemente salteriana. La experiencia del
soldado en combate (Pilotos de caza,
1957, y The Arm of Flesh, 1961, ambas
reescritas a fondo a finales del siglo pasado para su reedicin, contienen, seguro,
las mejores descripciones del acto de volar
junto a las de Antoine de Saint-Exupry),
el narrador poco confiable en el erotizante Viejo Mundo (la ya clsica Juego y distraccin, 1967), el crepsculo matrimonial (Aos luz, 1975), los espacios abiertos
y el deporte como rito de paso (En solitario, 1979, que sali de un guin sin filmar y que a Salter nunca le convenci demasiado pero que es, seguro, una ms que
lograda aproximacin a la literatura de
hombres en pugna). Especialmente interesante es en tndem con Todo lo que
hay la relectura de Juego y distraccin, para muchos su obra maestra, y su primera
gran pirueta formal con el manejo del
punto de vista.
La muy carnal y sudorosa Juego y distraccin, publicada sin pena ni gloria en
1967 (la editorial la lanz en su momento
con una pegatina en la portada donde se
adverta: Atencin, lectores, no es un libro sobre baseball), ha ido adquiriendo,
sin prisa ni pausa, la categora de pequeo-gran clsico norteamericano. Un privilegio y condena que su inclusin en 1995
en la prestigiosa Modern Library as como su creciente nmero de admiradores
casi consigui cambiar por la de clsico a
secas. Aqu, Salter aparentemente abarca
muy poco el romance caliente entre un
turista norteamericano y una joven francesa; Juego y distraccin es una de las cumbres y un tour de force del erotismo elegante y no por eso menos explcito, sexo
anal incluido para acabar apretndolo

todo con una maestra que no hace ms

que confirmar el logro de lo que el autor,
humilde, se haba propuesto en un principio: Escribir un libro que fuera seductor en todas y cada una de sus pginas y
que contrastara lo ordinario con aunque
suene ilcito lo divino. Salter lo consigui de sobra plantando una trama simple a la que rarifica o vuelve tcnicamente admirable a partir de un narrador
en primera persona que se define como
agent provocateur o doble agente y
persigue desde fuera la historia de un
hombre y una mujer a travs de lo que ve,
pero, tambin, de lo que intuye o, quin
sabe, de lo que se inventa porque entiende a sus sueos como el esqueleto de la
realidad. As, en sus primeras pginas, se
nos advierte: Nada de esto es verdad. He
dicho Autun, pero igualmente podra haber dicho Auxerre. Estoy seguro que acabarn por darse cuenta de ello. Tan solo
estoy asentando los detalles que me han
atravesado, fragmentos que fueron capaces de abrir mi carne. Es la historia de cosas que jams han existido aunque la ms
leve duda en cuanto a ello, la ms pequea posibilidad, arroja todo a las tinieblas.
Tan solo quiero que todo aquel que lea
esto lo haga con mi misma resignacin.
Ya hay suficiente pasin en el mundo.
La maniobra es brillante y, de este modo, el lector de la novela lee a su vez a ese
otro lector que es quien se la cuenta y
que, quin sabe, tal vez no sea otro que el
joven enamorado mirndose a s mismo a
travs del tiempo y del espacio, desde

muy lejos pero tan cerca. No falta ni sobra una palabra en esta novela cuyo nico
defecto el nico que se suele sealar a las
autnticas e inequvocas obras maestras
es el de tener un final, el de terminar. Y
que, en su amplitud y poder retroactivo,
hasta nos permite pensar que el Phillip
Dean de veinticuatro aos que persigue y
alcanza a Anne-Marie Costallat de dieciocho bien puede llegar a ser (con otro
alias) un temprano Philip Bowman recordndose desde sus ltimas pginas, las
que siguen a Todo lo que hay.
Su tercer libro imprescindible entre todos sus libros imprescindibles, y para muchos salteristas el mejor de todos, es Aos
luz (1975). Actualizacin tanto en teora
como en prctica del Suave es la noche de
Fitzgerald Salter alguna vez tuvo el coraje de afirmar que El gran Gatsby estaba
sobrevalorado y la sorpresa de elogiar a
George Saunders y a David Foster Wallace, el trgico joven prncipe del posmodernismo para narrar el ocaso del amor
de un matrimonio y las mareas de una familia que obliga como explica en uno de
sus relatos a acostumbrarse al plural de
las cosas. Entonces, Salter se nutri de
los Rosenthal, un matrimonio amigo, para (como Fitzgerald lo hiciese con los
Murphy) retratar su propia percepcin
del modo en que se acerca el otoo y el
invierno de la pasin. Los Rosenthal, como los Murphy, se sintieron traicionados
por su amigo con ojos de rayos x (quien
los convirti en los casi divinos y cados
Viri y Nedra Berland) y, claro, se divor-

ciaron al poco tiempo casi siguiendo al

detalle las instrucciones de la novela. Salter, por supuesto, tambin. Pero, ah, las
rupturas y grietas (por ah tiene un cameo
Irwin Shaw, mentor y compaero de
juergas europeas) se proyectan sobre un
paisaje casi paradisaco donde el infierno
apenas se percibe como fuego ardiendo
en las chimeneas. En el Mondo Salter suceden, siempre, cosas terribles pero consoladas por los placeres de un mundo ideal. Y lo que queda de todo es un perfume
triunfal a prdida, a aceptar que todo lo
que viene lo hace slo para poder irse:
No hay una vida completa. Hay slo
fragmentos. Hemos nacido para no tener
nada, para que todo se nos escurra entre
los dedos. Y, sin embargo, esta prdida,
este diluvio de encuentros, luchas, sueos... Hay que ser irreflexivo, como una
tortuga. Hay que ser resuelto, ciego. Porque cualquier cosa que hagamos, incluso
que no hagamos, nos impide hacer la cosa opuesta. Los actos demuelen sus alternativas, he aqu la paradoja. La vida, por
tanto, consiste en elecciones, cada cual
definitiva y de poca trascendencia, como
tirar piedras al mar. Hemos tenido hijos,
pens; nunca podremos no tener hijos.
Hemos sido mesurados, jams sabremos
lo que es derrochar nuestra vida, concluye uno de los protagonistas de la sombra
Aos luz cuyo final es de los ms desgarradores pero reposados de toda la historia
de la literatura y que incluye a la lentitud
de una tortuga poniendo en evidencia lo
rpido que pasa y se pasa todo.

LAS LTIMAS PREGUNTAS

En una conversacin con el escritor
Dan Pope, primero publicada en la revista The Believer y ms tarde incluida en el
imprescindible The Believer Book of Writers Talking to Writers (2005), James Salter se refiere a lo que para l constituye lo
mejor y lo peor del oficio de escritor.
Lo peor es: Tener que hacerlo. Cualquiera te responder lo mismo. O haberlo hecho y haber fallado.
Lo mejor es: La grandeza de ese mundo y sentirte parte de l. Hay una realidad en el mundo de la escritura que es
mucho ms grande que otras realidades,
aunque no pueda reemplazarlas. Cuando
lees algo que te parece maravilloso, no
existe esa incmoda sensacin de haber
agotado algo. Siempre estar all, esperando a que regreses. La emocin jams
desaparece.
La muerte de Salter puntilloso hasta
el final, se inform de que su fallecimiento se produjo durante una visita al mdico para un chequeo de rutina hace de
nuestro mundo un sitio ms vaco y menos luminoso. Se extraar esa perturbacin al leerlo y provocando en uno, como tembl alguien, la desconsoladora
sensacin de no haber vivido lo suficiente
y con la suficiente intensidad la grandeza
de este mundo.
A falta de vida, la obra. Eso a lo que
Salter se refera como a juntar palabras.
En The Paris Review explic que me
gusta frotar a las palabras entre ellas, como si las tuviera en una mano cerrada.
Sentirlas dar vuelta, chocar, y despus
elegir nada ms que a las mejores.
Charisma, el relato indito tal vez lo
ltimo que escribi, incluido en la antologa mencionada al principio de estas lneas vuelve a ser buena muestra de esa
inmejorable eleccin a la que, en el adis,
slo cabe volver a agradecerle. Este cuento concluye con la voluntad de partir
hacia donde nunca puedan encontrarte
y de escapar a las ltimas preguntas.
Buen viaje y nada pendiente a lo que
responder, James Salter.
Todo lo que hubo fue bien vivido, mejor dicho, y perfectamente escrito.
En un momento de Quemar los das,
una mujer, un tanto exasperada, le pregunta a Salter Qu es lo que quieres?
Ser inmortal, responde Salter sin dudarlo un segundo.
De nosotros depende ahora el placer
ser nuestro y la recompensa ser para
nosotros que ese deseo sea, al menos en
parte, concedido y hecho realidad.
James Salter se lo merece.
RADAR

5.7.15

27

PAZ Y
HUMOR

En Gran Cabaret, su ltima novela, David Grossman

imagina un monlogo de humor tan cruel como
liberador, que condensa el drama de un hombre que ms
all de su subjetividad entronca con la realidad social e
histrica de Israel, el enfrentamiento con Palestina y la
bsqueda que el propio Grossman sostiene en forma
inclaudicable con su militancia de la paz.
POR LAURA GALARZA

Supongamos que hay un grupo de nios que vuelve de la escuela. Los nios van rindose, charlando, gritando. Como nios que son. Uno de ellos se
agacha para atarse el cordn de la bota.
Ahora bien, si el grupo se para al instante,
todo el grupo, hasta los que estn de espaldas a l y no ven que se ha agachado, si
todos se paran al momento y lo esperan,
quiere decir que pertenece al grupo, que es
popular. Pero si ni siquiera se dan cuenta
de que se ha parado y slo cuando estn
en la fiesta de fin de curso de octavo uno
se pregunta: qu fue de aqul que se par
a atarse la bota? Entonces deberan saber
que se soy yo.
Despus de leer a David Grossman, el
lector necesitara alguna especie de retiro
espiritual. Un tiempo y espacio para el
despliegue irrestricto del goce que deja su
lectura. Que las palabras terminen de horadar el alma y moldear al hombre nuevo
que acaba de cerrar el libro. Y al final de
ese viaje a las profundidades que implica
cada vez adentrarse en la obra de Grossman, volver al mundo de manera ms vital y consciente.
Aquel nio que se ata los cordones y
por el que nadie se detiene es Dvaleh, el
personaje de Gran Cabaret, ltima novela
de Grossman. Dvaleh es ahora un cmico que hace stand up en un local nocturno de la costa de Israel. Dentro de ese reducto asfixiante, el lector en sintona con
los espectadores puede sentirse, en un
primer momento, desconcertado. Porque
como el lobo vestido de cordero, este
hombre, ms que contar chistes, manipula
a su pblico hacindolo pasar de la risa al
llanto, de la prepotencia a la desolacin,
como un titiritero con su mueco.

28

5.7.15

RADAR

Si rerse es tomar conciencia, eso es lo

que hace magistralmente Grossman a
travs del hbil provocador, Dvaleh,
que empieza bien arriba y con el chiste
fcil, pasando por el humor poltico y
de denuncia.
Quin puede hacer humor con el horror? Grossman puede. Desde Sigmund
Freud hasta Slavoj Zizek, que acaba de publicar Fragmentos de mis chistes, mi
filosofa, se sabe que el chiste, ms all de
ayudarnos a digerir la cruel realidad, tiene
el estatuto de formacin del inconsciente.
Al igual que un lapsus, un sueo o un sntoma, tiene estatuto de verdad. En este caso no slo para un sujeto, sino para toda
una sociedad. Una verdad revelada a travs de un efecto de desconcierto e iluminacin, que logra hacer evidente la fealdad
escondida en el mundo de los pensamientos, dice Freud. Y que puede aplicarse de
punta a punta para Gran Cabaret.
Ahora bien, como para hacer humor se
necesitan dos, es que desde una mesa cercana al escenario, Grossman sentar a
quien ser la contrafigura de Dvaleh: el
juez Avishai Lazar, amigo de la infancia
del personaje. Han pasado treinta aos
desde que se separaron en Beer Ora, un
campamento militar para adolescentes, y
desde entonces no volvieron a verse. Dvaleh busc y encontr a su amigo slo
para pedirle rogarle casi que vaya a su
show. Es as que por fuera de la escena,
pero siendo la pieza fundamental para la
construccin de conciencia de la novela,
el juez amigo pasar esa noche por todos
los estados (un poco como el lector) desde pedir la cuenta y querer irse, hasta llegar a replantearse todo. La soledad egosta
en la que vive desde que muri su mujer.
O tambin por qu, aqul da en que vio
cmo en el campamento tres nios forni-

dos se lanzaban una bolsa militar con Dvaleh adentro, no hizo nada por su amigo.
Se sabe: los payasos esa lgrima pintada
debajo del ojo son tristes. As es que las
humoradas se van convirtiendo en pequeas agujas alrededor de lo que va revelndose al juez y a los pocos espectadores que
quedan en el recinto (algunos no lo toleran): el pasado de Dvaleh. Mientras mi
padre me pegaba yo me imaginaba que
vena una caravana de hormigas para llevarse el dolor de la cara o del estmago,
triturarlo y distribuir las miguitas por
otras partes del cuerpo menos sensibles al
dolor. Dvaleh aviva la llama del fuego
que le quema por dentro. La llama de la
infancia. Porque lo que duele sin excepcin es el pasado. Aquellas tardes en que
Dvaleh de pequeo empieza siendo payaso para su madre, intentando divertirla
cuando ella llega de la fbrica de armas en
Jerusaln donde clasifica municiones:
nueve horas por da manipulando balas
de metralleta. Entre el pblico tambin
hay una mujer que conoci a Dvaleh.
Vivan en el mismo barrio. As que recuerda cmo olvidarlo a ese chico caminando con las manos. Porque cada vez
que Dvaleh nio se desespera, se pone
cabeza abajo. Y la imagen de un nio caminando detrs de su madre patas para
arriba opera como el pathos de esta historia: el mundo est dado vuelta. Porque si
no, cmo es posible que manden de viaje
a un chico al entierro de uno de sus padres sin decirle cul de los dos es el que
muri y que l se vea obligado a un juego
macabro donde se encuentra eligiendo en
su cabeza quin preferrira que fuera?
Conocer al otro por dentro. As define la literatura Grossman en el ensayo que
lleva esa frase por ttulo. Ver y hacer ver
qu hay detrs de la armadura de un hombre. Qu hay detrs de este cmico que
incomoda a su pblico llegndose a pegar
trompadas a s mismo, que los lleva a
aplaudir la muerte?
La sonrisa del cordero (1983), Vase:
amor (1986), El libro de la gramtica interna (1991), La vida entera (2010) y Delirio (2011) son algunas destacadas novelas de David Grossman. Desde su literatura, pero tambin en entrevistas, conferencias y columnas en peridicos de todo
el mundo, viene militando sin descanso
por la paz entre Israel y Palestina. Incluso

antes de haber perdido a su hijo Uri, de

21 aos, en agosto de 2006, cuando el
tanque fue alcanzado por un misil de
Hezbol en el Lbano. Dos das antes,
Grossman, junto con los escritores Amos
Oz y A.B. Yehoshua, haba formulado un
llamamiento al gobierno israel a aceptar
un cese del fuego. La noticia de la muerte
de su hijo encontr a Grossman finalizando La vida entera. Aquel momento se
vuelve poesa en su siguiente libro, Ms
all del tiempo (2011): En un instante
fuimos arrojados/ al destierro./ Llegaron
por la noche, llamaron a nuestra puerta,
dijeron: a tal y tal hora,/ en tal y tal lugar,
vuestro hijo, esto y lo otro./ Enseguida tejieron/ una tupida red, la hora/ el minuto
y el lugar exacto,/ pero la red tena un
agujero,/ lo entiendes? La red,/ tan tupida, tena/ por lo visto un agujero/ y nuestro hijo/ cay/al abismo. La literatura como posibilidad de situarse frente a la realidad como sujetos. La manera de no rendirse a lo injusto.
Despus de conocer ntimamente a
otro, ya no se puede ser indiferente con l.
Ahora somos parte de la tragedia de Dvaleh. Y Grossman hace ver cmo el que
ataca est asustado. Entonces llega la revelacin de Gran Cabaret: Cmo sera un
mundo sin enemigos? Cmo sera ese estado de gracia donde ya sin otro en quien
fijarnos, quedramos en compaa de nosotros mismos, con toda esa fuerza y energa dirigida hacia el interior?
Grossman hace del chiste un monumento por la paz. Se vale del humor para
expresar el dolor humano en su vertiente
ms profunda. Con ecos que se expanden
hacia adentro. Y forman olas. Que rompen, inundan y habitan para siempre.

Gran Cabaret
David Grossman
Lumen
236 pginas

CONFESIONES DE INVIERNO
Dos voces, dos destinos diferentes pero emparentados por el desarraigo, van hacia un encuentro tan marginal
como potente y fugaz. Un cubano exiliado en Nueva York y una mexicana perdida en Pars confluyen en algo
ms: una reflexin sobre la vulnerabilidad de los vnculos en el desarraigo. Esta confluencia y esta reflexin
estructuran Despus del invierno, la novela con la que Guadalupe Nettel gan el premio Herralde.
POR ANA FORNARO

n cubano cartesiano y obsesivo,

lleno de resentimiento con su isla
revolucionaria, vive en un departamento neoyorquino tan oscuro y estrecho como un atad. Y le gusta. En otra
punta del mundo, una mexicana solitaria
se radica en Pars para continuar sus estudios de literatura y empezar un romance,
entre cementerios, con su vecino moribundo. A partir de estas dos voces, la de
Claudio y la de Cecilia, se va armando
Despus del invierno, la tercera novela de
la mexicana Guadalupe Nettel donde
vuelve a los temas que suele visitar: la soledad, el autoexilio y la dificultad de los
vnculos cuando la alienacin domina.
Estructurada a la manera de El diceElla dice, cada captulo ahonda en las
vidas de los dos protagonistas que avanzan como lneas paralelas pudiendo ser
ledas, en principio, como dos novelas
independientes. Claudio sobrevive en
Manhattan su isla de adopcin gracias a su trabajo como editor y a un desapego exagerado que lo mantiene en
una situacin de aparente control. Slo
tiene un amigo de su pasado cubano, al
que ve poco, y una relacin con Ruth,
una mujer mayor que l, refinada y discreta, que no le exige ms que sexo con
un poco de cario.
Ruth tomaba antidepresivos tres veces al da y ansiolticos por las noches.
Ese era el secreto de su inquebrantable
tranquilidad y yo no poda sino agradecer a la farmacologa moderna por haber
inventado la receta de la mujer adecuada a mi temperamento. Es mucho ms
confiable una reaccin qumica provo-

cada por medicinas que una actitud basada en circunstancias vitales, siempre
tan impredecibles.
Mientras Claudio se refugia en su burbuja de cemento con Keith Jarret, libros
de Csar Vallejo y una prolijidad asctica, Cecilia comienza a vivir su viaje inicitico envuelta en la niebla y la mugre
parisina, primero con una cubana vital y
extrovertida que la saca por un Pars que
ella no fue a buscar el de las fiestas, el
de los latinos, luego viviendo sola y deprimida como la herona de un poema de
Baudelaire, ms cerca de los muertos que
de los vivos; un lugar que le resulta ms
doloroso pero menos incmodo.
Otra vez haba amanecido lloviendo y
as continu durante toda la maana. En
diez minutos cerraba la panadera y el
resto de los comercios. Tena hambre pero no lograba decidirme a salir. Si alcanzaba a llegar a la panadera antes de que
cerraran, me iba a llevar un regao por
aparecer tan tarde. Con su voz aguda e
irritada, la empleada me preguntara una
vez ms si en Per la gente no conoce los
horarios comerciales. Lejos de considerarlo un insulto, me tranquilizaba que la
gente no supiera situar en un mapa ni mi
ciudad ni mi pas de origen.
Cuando parece que Despus del invierno ser eso, dos vidas narradas en primera persona y en paralelo, el infinito aparece y Claudio y Cecilia se cruzan finalmente. Pero el encuentro se parece ms a
un choque de dos extraos por la calle
que a una historia de amor. Y la novela
termina resultando una excusa y ste es
su punto fuerte para hablar sobre la vulnerabilidad de las personas que estn fuera de contexto, algo que sucede en cual-

quier tipo de migracin, sea forzada como buscada. El migrante se queda sin
pasado (pero como el inconsciente, aflora
sin que lo llamen) y termina siendo
siempre una mala traduccin de s mismo, obligado al desdoblamiento permanente. Experiencia a la que Nettel, quien
vivi entre Mxico y Francia gran parte
de su vida, conoce perfectamente.
Quiz sea por esto que el personaje de
Cecilia, que vive a travs de la literatura,
sea tan palpable, y la parte parisina de la
novela, la ms lograda. Las descripciones de la vida en esa ciudad donde el
pasado est ms vivo que el presente y
los muertos parecen salir de entre las
baldosas brillan por encima del acartonamiento neoyorquino de Claudio, personaje que adquiere espesor slo cuando
se conecta con su pasado isleo y se encapricha con Cecilia.
El vnculo entre Claudio y Cecilia es
efmero e imposible. Slo conectan desde la idealizacin del cubano, quien encuentra en la jovencita tmida una buena excusa para romper la coraza que se
fue construyendo para atosigarla con
cartas, discos y obligaciones estticas
que la mexicana nunca pidi. La relacin se transforma en una reflexin
acerca de las razones del amor, visto ms
como actos de voluntad o necesidades
convertidas en decisin que como locas pasiones. Pero adems, qu puede
resultar de bueno entre un obsesivo
compulsivo controlador y una melanclica enamorada de un fantasma? La respuesta est al final de la novela, que se
alarga con algunos tropiezos, como si
hubiera algo que resolver, que no terminan de opacar lo anterior.

Mientras que escriba esta novela, Nettel empez y termin El cuerpo en que
nac (2011), una obra autobiogrfica
donde recrea su infancia tambin desde
la perspectiva del exilio. Porque su obsesin por las obsesiones ha llevado a la escritora mexicana a volver varias veces a
los mismos temas, a bordearlos como
quien pasa un dedo por distintas circunferencias. A veces cambia el registro, otra
veces el gnero. Pero es fcil reconocerla.
Y no es slo una cuestin de estilo, o de
mirada. Hay una lnea que va desde su
primera novela El Husped (2003), donde
se mete con la figura del doble desde lo
parasitario que luego retomar en el
cuento Hongos hasta Despus del invierno, donde la falta, o cierta rotura, es
lo que hace que sus personajes no avancen sino que escarben y a travs de sus
huecos se vayan reconociendo. Y es justamente eso ms que las tramas y vueltas
de tuerca lo que hace que el lector quede prendado a sus textos. En este sentido
su ltima novela, que le vali el premio
Herralde, no es la excepcin.

Despus del invierno

Guadalupe Nettel
Anagrama
268 pginas

RADAR

5.7.15

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A L I C I A E N E L PA S
DE LAS CONSIGNAS
Un da de julio de 1865, una nia lea a los
pies de su padre un libro recin aparecido. Mientras
tanto, su padre escriba otro gran libro del futuro. La
nia, Tussy, lea Alicia en el pas de las maravillas, y su
padre, Marx, redactaba El capital. A partir de esta escena
ineludible, y a 150 aos de la publicacin de la magistral
obra de Lewis Carroll, Ariel Dorfman reflexiona sobre el
destino de la izquierda, las utopas, y las potencialidades
an intactas del pas de Alicia.

EN FOCO

POR ARIEL DORFMAN

Calla, calla, criatura dijo la Duquesa. Todo tiene una moraleja, slo falta saber encontrarla.
Lewis Carroll, Alicia en el
Pas de las Maravillas.

o lejos de donde se public por

primera vez Alicia en el Pas de las
Maravillas, en julio de 1865, y
poco tiempo despus de la aparicin del
libro, una jovencita lo lea vidamente a
los pies de su padre mientras l labraba en
su estudio londinense un manuscrito enteramente diferente, un anlisis que iba a
cambiar el mundo. La nia se llamaba
Eleanor, aunque todos en la familia la conocan con el apodo de Tussy. Su pap no
era otro que Karl Marx y escriba Das Kapital bajo circunstancias desfavorables:
perpetuamente endeudado, una fila de
acreedores golpeando a su puerta, viviendo nicamente gracias a la casa de empeos, como lo confiesa a su benefactor Federico Engels en una carta que data de fines de julio de ese ao, tal vez en los momentos mismos en que Tussy se dispona
a leer la obra maestra de Lewis Carroll.
En vista de lo mucho que Marx amaba
a su pequea Eleanor (Tussy soy yo,

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RADAR

anunci en cierta ocasin), no sera extrao si el inspirador de la mayora de las

grandes revoluciones de los siguientes
ciento cincuenta aos tambin hubiera ledo el clsico infantil que tanto encant a
su hija. En cuanto a los hombres y mujeres que dirigieron y participaron y a menudo sufrieron en aquellos trastornos, es
probable que muchos de ellos gozaron de
Alicia, un libro extraordinariamente popular (entre los lectores de habla inglesa se
dice que solo lo superan la Biblia y Shakespeare). Es una lstima, por ende, que
aquellos revolucionarios y reformadores
del siguiente siglo y medio hicieran caso
omiso de las lecciones escondidas en el
texto que los hubieran auxiliado en su
bsqueda de paz y justicia y libertad, las
intuiciones y joyas literarias que los hubieran ayudado a evitar tantas trampas, errores y derrotas, una pena que ignoraran las
advertencias en cuanto a aceptar invitaciones a las mltiples Meriendas de Locos,
los Mad Tea Parties, que conduciran al
infierno, en vez del prometido paraso.
La partida haba llegado a tal punto de
confusin que le era imposible saber cundo
le tocaba jugar y cundo no.
Haba ledo yo el libro de Lewis Ca-

rroll cantidad de veces de nio y luego a

mis propios hijos y ms recientemente
con mi mujer Anglica, simplemente para regocijarnos con su humor catico,
pero volver a descender por la madriguera del Conejo, adoptando como perspectiva ciento cincuenta aos de lucha por
un mundo mejor, me result sorprendentemente revelador y a menudo angustioso, topndome con una abundancia de
frases y situaciones que resonaban con mi
propia experiencia de compromiso y activismo progresista durante las ltimas cinco dcadas.
No haba gastado yo, junto a tantos luminosos compaeros, innumerables horas
fervientemente pintando de rojo las rosas
blancas? No le habamos exclamado una
y otra vez a los que queran sentarse a
nuestra mesa, No hay sitio! No hay sitio!, cuando haba, de hecho, un montn
de sitio? Y no nos es familiar la siguiente
escena: Los jugadores jugaban todos a su
vez, sin esperar su turno, discutiendo sin
cesar y disputndose entre s? Recordando
reuniones interminables con militantes de
una cadena de organizaciones de izquierda
y facciones que, como el Ratn, se ofendan tan fcilmente; habiendo discutido en
forma ardiente acerca de detalles minsculos y enrarecidos, as como en torno a teoras abstrusas y enredadas, no puedo desentenderme de la observacin de Alicia de
que las palabras del Sombrerero carecan
de todo sentido por mucho que cada una
de ellas fuera reconocible. Y tampoco tuve
problemas en identificarme con Alicia
cuando musita: Es como para enloquecer,
ver cmo estas criaturas se pelean.
Pedira, eso s, a quienes, como yo, se divierten ante tales referencias, reconociendo
en ellas sus propias malaventuranzas en el
Pas de las Consignas, que velemos por no
darnos un aire de superioridad. El mismo
Lewis Carroll nos recuerda que nadie es inmune, que todos somos corresponsables.
Cuando Alicia, siempre corts y razonable,

presume como muchos de sus lectores

colocarse por encima del delirio circundante, al Gato de Cheshire no le cuesta
probar que ella es tan luntica como todos
los dems: Tienes que estar loca, declara
el irrefutable Gato, o no habras venido a
este lugar.
A veces esa locura generalizada se manifiesta en disparates y tonteras inocentes pero tambin se encarna en forma insistente en una violencia de pesadilla
que envenena ese Pas de las Maravillas.
Primero la sentencia, comanda la Reina
de Corazones, a la peor usanza de Stalin
o Mao, despus el veredicto! Golpizas,
juicios simulados, amenazas de ejecucin
inminente, trato inhumano de dependientes y, sobre todo, decapitaciones incesantes de quienes cometen la menor
equivocacin: Aqu todo lo arreglan cortando cabezas observa Alicia. Lo extrao es que quede alguien con vida! Como si Lewis Carroll estuviese, sin percatarse de ello, previniendo a sus aficionados de los peligros apremiantes de las
dictaduras venideras, sea regentadas por
los revolucionarios del siglo XX que asaltan el cielo en nombre del pueblo o por
regmenes tratando de salvar al capitalismo y los privilegios contra el asalto de
ese pueblo sufriente y hurfano. Justificando la carrera insana hacia el porvenir
debido a la urgencia de las necesidades
impostergables del momento presente, la
certidumbre de que no hay que perder
ni un momento, de manera que una y
otra vez los izquierdistas nos encontramos bajando impulsivamente por la madriguera ms cercana, sin jams considerar cmo diablos... vamos a encontrar
una salida.
Puedes decirme, por favor, qu camino
tengo que seguir para salir de aqu?
Eso depende en gran parte del sitio a que
quieras llegar dijo el Gato de Cheshire.
Cabe preguntarse, entonces, dnde
quiero llegar con esta sombra medita-

ILUSTRACIONES CLSICAS DE LA PRIMERA EDICIN DE ALICIA EN EL PAS DE LAS MARAVILLAS (1865) REALIZADAS POR SIR JOHN TENNIEL.

cin acerca de Alicia y sus aventuras hipotticas en el Pas de las Izquierdas? Es

justo convertir un libro tan vivaracho y
liviano en una crtica ominosa de proyectos y mtodos insurgentes? Al imitar
deprimentemente a la lgubre Liebre de
Marzo, seleccionando slo lamentaciones para ilustrar la contemporaneidad de
Alicia, acaso no estoy desechando lo
que es esencial, perdurable, gracioso,
emancipador, en la narracin y personajes de Lewis Carroll?
Porque Alicia en el Pas de las Maravillas tambin puede leerse como un texto
sedicioso, desbordado de impulsos utpicos. Por qu no enfatizar la conviccin
de Alicia de que son muy pocas las cosas
de veras imposibles, un credo que ha alimentado el fuego de tantas cruzadas sociales, como lo evidencia recientemente
la lucha por los derechos homosexuales y
la ola de iniciativas y protestas ecolgicas?
Por qu no escribir con letras maysculas las palabras de la Duquesa: Mientras
ms tengo yo, menos tienes t? un dicho que, hoy, servira para disparar contra los ejecutivos de empresas que cosechan salarios millonarios mientras rechazan un alza del sueldo mnimo a los asalariados. El libro celebra la rebelin y la
desobediencia (la cocinera le lanza sartenes a la Duquesa, la Duquesa la da sopetones a la Reina, el Jaco se roba las tartas,
Alicia se rehsa a cooperar, los conejillos
de indias aplauden pese a ser reprimidos), mientras que las figuras despticas
son ridiculizadas como inefectivas e incompetentes.
Lo que hay que rescatar, sobre todo, de
Alicia en el Pas de las Maravillas es su hu-

mor subversivo y bullicioso, el mismo

descaro y cuestionamiento cardinal de la
autoridad que ha iluminado la insurreccin y resistencia y disidencia de millones a lo largo del ltimo siglo y medio, el
hecho de imaginar una realidad paralela
posible que no obedece las reglas de una
sociedad que requiere transformaciones
profundas. Es esta energa carnavalesca,
esta actitud eminentemente juguetona
que tenemos que reconocer y abrazar como nuestra, una parte crucial de nuestra
identidad progresista.
Existe en la izquierda, por cierto, una
tendencia a emplear un lenguaje y estilo
diametralmente opuesto: una solemnidad pesada y ponderada, como si cargramos con todas las tragedias del mundo.
Creemos y con razn que stos son
asuntos serios que requieren, en consecuencia, un discurso tambin serio. El
sufrimiento es inmenso, la injusticia intolerable, la estupidez ilimitada, el planeta a punto del apocalipsis, las depredaciones de corporaciones dedicadas a fabricar armas e instrumentos de vigilancia
contra la ciudadana expandindose hacia un futuro oscuro y distpico.
Con ms razn, entonces, tendramos
que exaltar nuestra propia liberacin cada vez que sea posible, disfrutar las ocasiones en que se fracturan las convenciones y se interrogan nuestras creencias bsicas. Con ms razn reconocer el encantamiento que renace con cada pequeo
acto de esperanza y solidaridad, con razn enaltecer la desnuda alegra que
acompaa la certidumbre de que no tenemos para qu dejar el mundo tal como
lo encontramos.

Debe de ser un baile muy precioso dijo

Alicia tmidamente.
Te gustara ver un poquito como se
baila? propuso la Falsa Tortuga.
Claro, me gustara muchsimo dijo
Alicia.
Durante la revolucin chilena
(1970-73), el pueblo de mi pas march
inagotablemente, asistiendo a manifestaciones sin fin en defensa del gobierno democrtico de Salvador Allende. La energa de estos hermanos y hermanas, su flexibilidad y fortaleza e inventiva, sus irrefrenables agudezas y los ingeniosos afiches caseros, me han movido y motivado
a lo largo de la vida. Lo que tambin rememoro es que esos hombres y mujeres
en las calles de Santiago eran mucho ms
vibrantes y creativos que aquellos hombres (en su mayora de sexo masculino)
que, arriba del podio, peroraban durante
horas, exhortando, analizando, jurando
que las masas eran invencibles. Me pregunt entonces, como lo hago ahora tantas dcadas ms tarde, por qu el entusiasmo y el desafo de esas multitudes democrticas no se esparcieron atrevidamente por la sociedad, por qu un tal
contraste entre los lderes y el pueblo? Y
me duele que nuestra revolucin pacfica
culminara en un cataclismo, con Allende
muerto y tantos torturados, perseguidos,
exiliados, tantos sueos que llegaron a su
fin, que parecan haber llegado a su fin.
El Rey en Alicia en el Pas de las Maravillas aconseja al Conejo Blanco, en forma
grave y lgica, cmo se ha de contar una
historia: Empieza por el principio y sigue
hasta que llegues al fin. Y all te detienes.
Se equivoca.

Quienes anhelamos un mundo diferente, buscando horizontes alternativos,

sabemos que uno no se detiene cuando
hayamos llegado al fin, que no hay fin
posible para nuestra ansia de justicia, que
los rebeldes nunca desaparecen, del todo, como una vela. Somos, ms bien,
como el Gato de Cheshire. Aunque su
cuerpo se haya esfumado, su sonrisa
siempre permanecer obstinadamente
tras s, una presencia fantasmagrica, que
prueba que alguna vez ocupamos un espacio de rebelda y que es perfectamente
posible volver a surgir algn da. En efecto, aunque no podamos seguir, como lo
comprendi Samuel Beckett, el heredero
de Lewis Carroll, tendremos, sin embargo, que seguir.
En definitiva, para quienes todava creemos que hacen falta cambios perentorios como nica respuesta a las guerras
perpetuas y la avaricia rida de nuestra
poca autodestructiva, es esto lo que debemos aprender y celebrar de Alicia en el
Pas de las Maravillas, lo que necesitamos
para preparar los prximos ciento cincuenta aos de lucha por la justicia, el reto que nos proporciona este texto tan
fantstico como absurdo.
Despus de tantos trabajos las tribulaciones que hemos sobrevivido y las
que an nos aguardan tenemos el coraje como para responder una y otra vez
a la invitacin de la Falsa Tortuga: Baila, venga, baila, venga, baila, venga, y
djate llevar!.
Creo que no se equivoca la Falsa Tortuga cuando canta, cuando promete
mientras baila que existe otra orilla, sabes, al otro lado del mar.
RADAR

5.7.15

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