De la restauracin monumental a la conservacin integral: una experiencia prctica en el Claustro de San Pedro Claver en Cartagena de Indias.

Gonzalo Correal Ospina

padre Claver, adalid de la defensa de los derechos humanos de los esclavos y Santo Patrono de la ciudad1. Este edificio, parte del cual se edific sobre el lienzo de muralla, ha combinado diversos usos a lo largo de la historia, como los de colegio, vivienda para los religiosos, comercio, hospital, y cuartel. Desde finales del XVIII el conjunto se dividi en dos partes, completamente independientes, en una de las cuales funciona actualmente el Museo Naval del Caribe y en la otra, que incluye el templo del siglo XVIII y el Claustro, la Casa de la Compaa de Jess. El proyecto para la Conservacin integral del Claustro nace de la iniciativa de la Provincia de la Compaa en Cartagena, particularmente del Padre Ministro del Claustro, Tulio Aristizabal Giraldo S.J., siendo desarrollado con recursos de la Compaa y de la Pontificia Universidad Javeriana por el Instituto de Investigaciones Estticas Carlos Arbelez Camacho, Unidad Acadmica adscrita a la Facultad de Arquitectura y Diseo de esta Universidad, que desde su fundacin en 1963, trabaja en la identificacin, interpretacin y valoracin del patrimonio construido, buscando la formacin terica por medio de experiencias prcticas (proyectos de intervencin). Para su elaboracin y desarrollo se conform un equipo interdisciplinario que particip durante todas las fases del proyecto, apoyando desde cada una de las reas del conocimiento la toma de decisiones con respecto a la actuacin sobre el edificio.2

Vista area del antiguo Colegio de la Compaa desde el Oriente. Fotografa de Gonzalo Correal Ospina,

El Claustro de San Pedro Claver en Cartagena de Indias, se ubica en el centro histrico de la ciudad, dentro del primer cinturn amurallado construido sobre la isla de Calamar, lugar de la primera fundacin de Cartagena. Hace parte de lo que fuera, desde comienzos del siglo XVII hasta finales del XVIII el Colegio de la Compaa de Jess, desde donde los Jesuitas proyectaron su misin educativa, evanglica y social hacia la ciudad y su regin. En el vivi por espacio de treinta y nueve aos, hasta su muerte en 1654, el
Arquitecto, Magister en Planeacin Urbana y Regional con estudios de Maestra en Restauracin arquitectnica en la Escuela Nacional de Conservacin, Restauracin y Museografa Manuel del Castillo Negrete, Mxico . Director del proyecto para la conservacin integral del Claustro de San Pedro Claver en Cartagena de Indias, como consultor contratista del Instituto de Investigaciones Estticas de la U. Javeriana

Sacerdote Jesuita nacido en Verd, Catalua, canonizado por Len XIII el 15 de Enero de 1888. 2 En el equipo de trabajo participaron el arquitecto Andrs Gaviria V., Director del Instituto de Investigaciones Estticas, la arqueloga Monika Therrien, la arquitecta Patricia Rentera S., la antroploga Magdalena Peuela U., los restauradores Salim Osta L. y Temstocles Suarez, el ingeniero Hernan Sandoval y los arquitectos Mauricio Hernandez, Jimena Rueda y Juan Carlos Cancino.

La etapa inicial del proyecto correspondi al estudio de la materialidad fsica del objeto y su entorno, en su composicin y condicin material y en su ubicacin en un contexto espaciotemporal. Una segunda fase correspondi a la calificacin del edificio, es decir a la valoracin de sus alteraciones y deterioros, y a la identificacin y el reconocimiento de su conjunto de valores, y la tercera fase, como sntesis del proceso, a la elaboracin de una propuesta de intervencin fundamentada en criterios y principios de orden tcnico y terico. La etapa de investigacin, apoyada en los trabajos de levantamiento arquitectnico, de evaluacin estructural, de anlisis estratigrfico de materiales de soporte, de investigacin histrica para la valoracin arquitectnica y en el estudio de los aspectos sociales y antropolgicos, busc proporcionar herramientas para la valoracin objetiva del proceso de evolucin histrica del inmueble como base para la confrontacin de datos, la interpretacin de las evidencias y la toma de decisiones a nivel proyectual. La investigacin histrica permiti establecer, de forma sinttica, un panorama general que comienza en 1604, cuando llegan a Cartagena de Indias algunos jesuitas con el fin de fundar un colegio en el Nuevo Reino. Estos religiosos se instalan en una casa cedida por el obispo fray Juan de Ladrada cerca de la Plaza Mayor, en donde abren, en 1608, un exiguo colegio con setenta alumnos. Considerando pronto inapropiado este lugar, la Comunidad adquiere unas casa en la plaza del muelle, iniciando, en 1615 la construccin del colegio de la Compaa, a donde se trasladan en 1618. De acuerdo a la investigacin histrica, esta primera obra fue desarrollada por el hermano coadjutor Andrs Alonso, quien despus de trabajar en la construccin de los colegios de

Logroo y de Palencia en Espaa, y de disear y construir en Panam, viaja a la Nueva Granada, en donde participa en el diseo y la construccin del Colegio y el templo de San Ignacio de Tunja, y posiblemente, junto a Coluccini, en el proyecto para el conjunto de San Ignacio en Bogot. Esta primera iglesia constaba de una capilla mayor y coro y al lado un corredor para solo hombres rematado en dos altares3. El testero del templo ubicado hacia la muralla y los pies hacia la hoy conocida como calle de San Juan de Dios. En 1620 se traza la construccin de la muralla de la ciudad sobre el lote del colegio, dejndole sin posibilidad de ensanche. Esta circunstancia genera un conflicto que lleva a la Compaa, con autorizacin del Gobernador Francisco de Murga, a construir sobre la muralla parte de su Colegio en 1629, a partir de una traza del arquitecto Juan Meja del Valle. Debido a la debilidad que esta construccin signific para el adecuado funcionamiento del sistema defensivo, mediante cdula real se ordena, en 1638, la demolicin de la parte del colegio

construida sobre la muralla. El proceso de conciliacin culmina con la construccin, a costa de la Compaa, de un nuevo tramo de muralla, dejando entre esta y el colegio una calle, y de los baluartes ahora conocidos como de San Ignacio y San Francisco Javier, de acuerdo a la

Juan Manuel Pacheco S.J, Los Jesuitas en Colombia, Bogot, 1959, citado por Rentera, op. cit

propuesta del Ingeniero Somovilla y Tejada.

Juan

de

En 1695 se empieza a construir un nuevo templo (la Iglesia actual) sobre la traza del arquitecto holands, hermano Lorenzo Knick, con el apoyo de el hermano alemn Miguel Schlesinger. Esta obra, terminada hacia 1735, complet el desarrollo en el terreno de la Compaa, haciendo necesario articular el conjunto del colegio con la nueva iglesia, adecuando para tal efecto, las edificaciones existentes a esta traza. Como parte de estas obras en busca de la unidad de lectura del conjunto se remodel el patio oriental del edificio, (que hoy corresponde al Claustro de San Pedro Claver) y se avanz en la construccin del tercer piso. Este proceso fue interrumpido por la expulsin de los Jesuitas del Nuevo Reino de Granada, en 1767. El edificio pasa entonces a manos de los hermanos de San Juan de Dios, quienes le habilitan como Hospital, dividido en el Real Hospital de San Carlos, ocupando la parte occidental del edificio y el hospital de los pobres de San Juan de Dios, en la parte que hoy se conoce como el Claustro de San Pedro. En 1861, por disposicin de Toms Cipriano de Mosquera, en desarrollo de su Ley de expropiacin de manos muertas, el edificio es ocupado como cuartel, y el templo se utiliza como caballeriza y depsito de vveres. En 1885 el Presidente Rafael Nuez entrega el templo y parte del edificio a Monseor Biffi, en aquel entonces Obispo de la dicesis de Cartagena, quien realiza algunas obras de reparacin y de enlucimiento de ambos edificios. Para completar su misin, en 1897 Monseor

Biffi dona a perpetuidad el Claustro y el templo a la Compaa de Jess, que entonces reinicia sus labores en la Ciudad, mientras la parte occidental del edificio continua funcionando como cuartel del ejercito hasta 1956, fecha a partir de la cual se abandona gradualmente, hasta que en 1992, con el apoyo de la Agencia de Cooperacin Internacional Espaola, se inician las obras de restauracin tendientes a adecuar esta parte del edificio al Museo Naval del Caribe. Con el apoyo de las investigaciones histrica, arqueolgica y estratigrfica fue posible identificar las alteraciones espaciales y formales practicadas al edificio a travs de su historia, en momentos claramente definidos: El primero de ellos corresponde al periodo de definicin y conformacin del proyecto por parte de los religiosos de la Compaa de Jess, y comprende, de forma general, dos fases: la primera abarca desde 1615 hasta 1670 aproximadamente, y corresponde al proceso de conformacin del conjunto. La segunda fase, en la cual se construye el nuevo templo y se ejecutan obras de integracin del conjunto en busca de una unidad de lenguaje, se inicia en la ltima dcada del siglo XVII y concluye en 1767, cuando son expulsados los Jesuitas del Nuevo Reino. En este periodo, de forma coherente con un programa definido por la misin educativa y social de la compaa, se conform y articul el conjunto dentro de una clara visin del proyecto en sus escalas local y regional, que permiti, con el apoyo de las haciendas de la Compaa, la irradiacin de su accin en el territorio.4 Un segundo momento
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En este caso en particular, la Hacienda de San Bernab, en la Isla de Tierrabomba, contribuy de manera significativa en la consolidacin del proyecto evanglico proporcionando desde su tejar, no solo materiales de construccin para el Colegio de la Compaa, sino tambin ingresos econmicos para solventar su actividad misional.

corresponde al periodo de utilizacin del edificio como Hospital. Gracias al sistema de organizacin espacial del conjunto en aulas y habitaciones para los religiosos, su adecuacin a este nuevo uso no implic mayores alteraciones al partido del edificio. Sin embargo, en este momento se divide al conjunto en los hospitales de San Carlos y de San Juan de Dios, sin que a la fecha haya podido recuperarse la unidad e integridad del edificio. Durante el periodo de ocupacin del conjunto como cuartel se agregaron algunos muros y se remodelaron, ya en el siglo XX, la cruja norte del edificio y la que hoy se conoce como la cruja republicana, que separa al Claustro de el Museo Naval del Caribe. Un cuarto momento lo constituye, el conjunto de intervenciones practicadas en los aos sesenta del siglo XX, con las cuales se pretendi revitalizar el edificio, y que incluyen una serie de agregados pseudocoloniales. El resto de intervenciones en el Claustro, especialmente las practicadas durante los ltimos 10 aos, han sido obras de reparaciones locativas, como cambio de vigas de madera deterioradas y sustitucin de materiales de piso. Bastante diferente ha sido el proceso de la parte occidental del antiguo colegio. Si bien desde finales del siglo XVIII se diferenciaron las dos partes del edificio por la construccin de un tercer piso, obra que solo se realiz en la parte correspondiente al Claustro, la divisin desde la poca de su funcionamiento como hospital contribuy a acrecentar sus diferencias. La restauracin del sector occidental evidencia claramente esta

divisin, particularmente en su fachada. Mientras el Claustro conserva sus puertaventanas, balcones y tejadillos, en el Museo Naval estos fueron suprimidos, siendo sustituidos por ventanas con canceles de madera y cornisas en su parte superior. Esta tarea de identificacin de alteraciones espaciales y formales, permiti con el apoyo de la arqueologa, confirmar la hiptesis sobre el acceso original al edificio, ubicado en el espacio entre el testero del templo y la muralla, que avanzando en diagonal desde el noroccidente, gener un acceso al conjunto por el oriente. De igual manera se pudo comprobar la disposicin de la primera iglesia de conformidad a la informacin documental, es decir con la cabecera hacia el sur y los pies a la calle de San Juan de Dios. Estas investigaciones, permitieron, adems rebatir algunos de los supuestos sobre la historia del edificio. En primer lugar, la escalera de piedra de la cruja oriental del Claustro, siempre considerada como original, parece corresponder al siglo XVIII, puesto que una cala de exploracin arqueolgica permiti identificar un pilar del primer templo que se extiende por debajo de ella. Igualmente se localiz una junta de construccin en el extremo oriental de la cruja construida sobre la muralla, evidencia que sugiere, en esta fase preliminar del proyecto, que el remate de la cruja (en donde se ha ubicado una reconstruccin museogrfica del aposento del padre Claver), es un agregado posterior al siglo XVII. De acuerdo con un plano de 1656, atribuido a Juan de Somovilla y Tejada (AGI:Santa

Fe,221;TL,71)5, esta cruja terminaba en una torre rematada con un agudo chapitel que evocaba con su severidad felipesca las construcciones castellanas del siglo XVII 6. El nmero actual de arcadas (43), corresponde al dibujo de Somovilla, realizado dos aos despus de la muerte del padre Claver y en consecuencia el aposento del santo no pudo estar ubicado all.

De forma paralela al estudio de las alteraciones, se identificaron y registraron los procesos de deterioro presentes en el edificio. Gracias al mantenimiento regular, la mayor parte del Claustro se encuentra en buenas condiciones. Sin embargo, en la cruja que hoy en da separa el Claustro de San Pedro del Museo Naval del Caribe, la armadura de la placas de hormign del entrepiso y de la cubierta, agregadas cerca de 1930, se encuentra en avanzado estado de corrosin, evidenciando el riesgo de un colapso. Otro factor importante es la deformacin por flexin de las vigas en madera de la cruja construida sobre la muralla. El resto de los deterioros, todos ellos de menor cuanta corresponden a la disgregacin de algunos paetes, presencia de sales solubles y de hongos y lquenes. Con el fin de complementar la ubicacin espacial y temporal del edificio en su contexto, fue preciso profundizar en el estudio de los valores simblicos y los
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procesos de apropiacin de sus significantes por parte de los grupos humanos asociados al edificio. De esta manera el trabajo de investigacin coadyuv en la tarea de identificar las representaciones asociadas al Claustro, confrontando, desde las mentalidades, pero en la cotidianidad, los macroprocesos y los microsucesos (Signorelli, 1999)7. Desde esta perspectiva, fue posible definir de forma coherente, el conjunto de relaciones sociales y espaciales que denominamos como espacio-temporales (Lefebvre, 1986)8, permitiendo una lectura del Claustro de San Pedro Claver en su contexto. Parte de este estudio antropolgico fue orientado a comprender como se articula el proyecto jesutico, y como el edificio expresa su capacidad de transformacin, gestin y convocatoria social en la memoria de los diferentes estamentos de la ciudad. Para tal efecto, fue necesario estudiar la mentalidad esclavista de los siglos XVII y XVIII, desde una ptica aun ms amplia. Esta aproximacin permiti identificar asociaciones histricas que ponen de relieve la importancia del trabajo del Padre Alonso Sandoval, y su influencia en la vida y obra del esclavo de los esclavos, como sola auto denominarse el padre Claver. As mismo, aport elementos crticos para la interpretacin de la misin evanglica y social de la Compaa de Jess en Cartagena, que an se proyecta desde el claustro y es capaz de congregar significados e irradiar, a travs de sus misiones, el verdadero sentido del proyecto Jesutico. La vigencia de la obra de Sandoval y Claver, como tristemente nos lo recuerda la historia presencial colombiana es evidente: la intolerancia es la

forma
7

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de

la

Marco Dorta, Enrique (1988) Cartagena de Indias, puerto y plaza fuerte, Fondo Cultural Cafetero, Bogot. 6 Angulo Iiguez, Diego. Planos de monumentos arquitectnicos de Amrica y Filipinas existentes en el Archivo de Indias. Sevilla, 1933-1939, citado por Marco Dorta, Enrique (1988) op. cit. p. 112

Signorelli, Amalia, (1999) Antropologa Urbana, Mxico, Antropos. 8 Lefebvre, Henri, (1986) La production de lesoace, Paris, Antropos, citado por Signorelli (1999), op. cit.

injusticia social.

Por eso Pedro Claver fue un conciliador de partes en conflicto. El Claustro de San Pedro Claver expresa claramente la practicidad, austeridad y esencialidad que caracteriza a la arquitectura de la Contrarreforma Catlica, y que se expres en el Tipo, establecido a travs del circuito internacional del mundo catlico. 9 De esta forma, los aspectos prcticos y tcnicos prevalecen sobre los conceptos de estilo, permitiendo la interpretacin de unos principios que para el modo nostro se resumen en el manejo de la proporcin y gracia de las formas en edificios de arquitecturas fuertes, cmodas, simples y entendidas a partir de la supresin de todo lo superfluo y en la perfecta conformidad de cada elemento con su fin lgico (Rentera 98:4). Bien ha definido el historiador Marco Dorta estos principios refirindose al templo, que son sin embargo, aplicables al claustro, de sencilla traza con arcos de medio punto sobre pilares de seccin cuadrada: Sin ms decoracin que las molduras de los capiteles y del entablamento, que se quiebra en saliente sobre las pilastras, el conjunto tiene un empaque monumental y una serena sencillez, que constituyen su caracterstica ms interesante. es la obra de un verdadero arquitecto, que se planteaba problemas constructivos y los resuelve con facilidad y con arte, logrando al mismo tiempo efectos estticos. (Marco Dorta, 1988) Estos principios de racionalidad adquieren mayor importancia si se tiene en cuenta que han sido interpretados en unas condiciones particularmente exigentes, que obligan a integrar al conjunto una muralla para resolver un programa comn
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a otros colegios de la Compaa: la ubicacin de las aulas en el primer piso, precedidas por un amplio prtico cubierto y dispuesta alrededor de un patio reservado para los estudiantes, y las habitaciones de la comunidad religiosa en el segundo piso. El mismo proceso de evolucin histrica del edificio confiere a esta circunstancia especial relevancia, si se tiene en cuenta el valor de uso de un edificio que fue cinco cosas en tres siglos: Colegio, Hospital, Cuartel, Casa del Obispo y Residencia de los Jesuitas 10 Una siguiente escala de aproximacin al edificio ha permitido identificar un conjunto de valores a nivel urbano como la alta densidad de espacios pblicos, algunos de ellos constituidos en nodos por su capacidad de congregacin o en hitos urbanos, que subrayan la vocacin cultural de este sector (en la misma manzana coexisten el Museo Naval del Caribe y el Claustro de San Pedro Claver, con su museo de arte religioso y un pequeo museo arqueolgico; al frente del Claustro, sobre la plaza, se ubica el Museo de Arte Moderno de Cartagena). El antiguo colegio de la Compaa contribuye de manera significativa en la conformacin espacial del conjunto, ya que articula las plazas de San Pedro Claver y de Santa Teresa con el Parque de La Marina a travs de la calle de Ronda, habilitada como prolongacin al exterior del Museo Naval del Caribe. A su vez, la plaza de San Pedro, frente al Claustro se articula con la plaza de la Aduana, conformando un circuito que continua hacia la Plaza de los Coches, y a travs de la torre del reloj, hacia el Parque del Centenario. De igual manera, La Plaza de Santa Teresa, frente al Museo Naval, se conecta con los recodos de la muralla actualmente habilitados como plazas a la vez que remata y articula los recorridos sobre la muralla mediante el Baluarte de San Francisco Javier.
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Investigacin histrica para la valoracin arquitectnica y espacial del Claustro de San Pedro Claver de la Compaa de Jess, trabajo de consultora para el proyecto de conservacin integral, elaborado por Patricia Rentera Salazar, 1998.

Aristizabal S.J., Tulio. Retazos de historia los jesuitas en Cartagena de Indias-, Cartagena, 1995 p.177

Proyecto. El desarrollo de las fases de investigacin y calificacin permiti establecer, como criterio general, que el proyecto, ms que aplicar nicamente un conjunto de operaciones tendientes a mantener el edificio en condiciones de servicio, deba orientarse a la contextualizacin del conjunto de valores del cual es portador, promoviendo nuevas formas de percibir y apropiar su significado. Para tal efecto fue indispensable partir del reconocimiento del Claustro como parte del Colegio de la Compaa, buscando recuperar la lectura de un conjunto cuya integridad se ha perdido en la memoria de los cartageneros. Esta intencin no pretende desconocer el proceso de estratificacin histrica del edificio, sino por el contrario, evidenciar de forma coherente, la evolucin de un inmueble que es capaz de adaptarse a las necesidades cambiantes de la sociedad permitiendo una gran diversidad de usos desde finales del siglo XVIII. De esta manera se interpreta al objeto en relacin a su entorno, respetando y valorando el proceso de conformacin urbana de una ciudad que es Patrimonio de la Humanidad. En consecuencia, y como eje central del proyecto se pretende recuperar, con acciones puntuales en el Claustro, la lectura del proceso evolutivo del conjunto, a travs del adecuado manejo de su articulacin al tejido urbano.

Como operacin estratgica se propone articular las relaciones entre el interior del Claustro y su espacio urbano, recuperando las relaciones con la calle de la ronda mediante la apertura de los vanos tapiados y la asignacin de un uso pblico (despacho parroquial) a los espacios vinculados. Igualmente se busca establecer una dinmica de relacin espacial con la plaza de San Pedro Claver, mediante la asignacin de usos que contribuyan a vitalizar este espacio urbano. En cuanto a la organizacin espacial interna, en concordancia con los principios de racionalidad de la arquitectura jesutica, se propone enfatizar la circulacin interna colateral a la muralla, que vincul dos porciones de ciudad a travs de un Colegio de la Compaa de Jess. A nivel urbano, y como complemento indispensable para la articulacin del tejido en esta zona de la ciudad, se propone posibilitar la continuidad de los recorridos sobre el lienzo de la muralla, fortaleciendo las relaciones con el borde, en la zona del parque de la Marina. En relacin al programa se mantiene, en trminos generales, la zonificacin actual. La planta baja se destina a los usos de museo de arte religioso, museo arqueolgico, despacho parroquial, taller de conservacin y servicios higinicos, y se suprimen los de garaje (ubicado hasta ahora en lo que fuera el presbiterio del primer templo), y depsito de materiales de construccin (en la cruja republicana). En la propuesta se incluye como complemento, un saln mltiple para actividades culturales. La planta de entresuelo continua dedicada a la obra del Padre Claver, con la enfermera, restaurada hace poco tiempo y un saln dedicado a la historia de Pedro Claver y Alonso Sandoval. La primera planta, destinada al uso pblico en la galera de circulacin y en su crujas oriental y occidental, se habilita para un Centro de Cultura Afrocaribe, una biblioteca

especializada y un aula, mientras que la cruja sur, con un acceso independiente, continua destinada a habitaciones para religiosos y visitantes de la Compaa. La ltima planta, con un acceso privado desde la planta baja se destina al uso exclusivo de la Comunidad de Cartagena, y en ella se ubican habitaciones, sala de descanso y una capilla conectada con el segundo piso del templo de San Pedro Claver. Se propone adems hacer transitables la cubiertas de la cruja sur, que es un mirador privilegiado del centro histrico, y la de la cruja republicana, que articula el Claustro con el Museo Naval. En sta ltima, nica con acceso pblico y menor altura (2 pisos), se propone un caf-mirador que permite entender la relacin entre las dos partes del Conjunto. En algunos de los casos se participa, a travs de un diseo respetuoso pero abiertamente contemporneo, en su adecuacin a las necesidades y requerimientos actuales. Otras intervenciones propuestas se fundamentan en el respeto a la sustancia antigua, y pretenden evidenciar un conjunto de valores histricos, simblicos o estticos del Claustro. Una de ellas es la recuperacin del acceso original, ubicado entre las crujas sur (edificada sobre la muralla) y oriente (donde se ubic el primer templo) liberando en la planta baja el espacio entre el testero del templo -cuya integridad pudimos comprobar con las exploraciones estratigrficas- y la antigua portera. Esta intencin pretende, sobre cualquier criterio de reversin histrica a un momento determinado (siglo XVII), favorecer la lectura del eje orienteoccidente conformado por la galera de circulacin que vincul todo el conjunto,

rematando en la Plaza de Santa Teresa, frente al Museo Naval. Para reforzar esta integracin se propone liberar un vano tapiado permitiendo una relacin visual con la galera del Museo Naval del Caribe. La intencin de recuperar el acceso original busca adems, evidenciar uno de los aspectos ms interesantes del conjunto: el aprovechamiento de los muros de la muralla y la contramuralla como base para la edificacin de la cruja sur. Con el fin de enriquecer la relacin con la Plaza de San Pedro, y a la vez promover la lectura del proceso de estratificacin histrica del edificio, se propone habilitar la planta baja de la cruja oriental (en donde se construy el primer templo) para el museo de arte religioso, que funciona actualmente en la cruja oriental, liberando los muros y el cieloraso agregados con el fin de sugerir la lectura de una nave, que se refuerza con una coleccin de pinturas y esculturas que expresan la dimensin esttica de la experiencia mstica. Con respecto a las circulaciones verticales, se conserva en la propuesta la escalera del XVIII, habilitando un acceso y una escalera privada para los religiosos y sus visitantes en el extremo occidental de la cruja norte, contiguo al Museo Naval. El circuito de circulaciones se completa con una escalera abiertamente contempornea ubicada dentro de la cruja republicana, permitiendo el acceso a la primera planta, en donde se complementa el programa de usos pblicos con actividades relacionadas con la reflexin y la investigacin sobre la situacin actual de las comunidades afrocaribes, (Centro de Cultura Afrocaribe, que actualmente funciona en el Claustro), complementado con una biblioteca especializada sobre literatura afroamericana, que complementar la coleccin bibliogrfica de la Comunidad, actualmente ubicada en un rincn del

segundo piso del templo de San Pedro Claver. Junto a un saln en forma de hemiciclo propuesto en la cruja republicana, se busca poner de relieve la proyeccin educativa, social y misional de la Compaa de Jess. Consideraciones finales. Del desarrollo del proyecto para la conservacin integral del Claustro de San Pedro Claver se desprenden las siguientes consideraciones: Si bien la ciudad es un fenmeno dialctico en el cual el movimiento y la mutacin entretejen una estructura espacial histrica que se articula con la estructura social, los problemas de conservacin de un bien cultural deben abordarse desde una perspectiva objetiva que establezca una relacin dinmica entre valores y formas en funcin de la ciudad. Esto implica fortalecer la implantacin y articulacin del edificio al tejido urbano, ya que la lectura de la ciudad no se hace como una sumatoria de inmuebles individuales sino a partir de la integracin de los mismos. Desde esta perspectiva un proyecto integral para la conservacin de un bien cultural requiere adems, de la adecuada articulacin de su conjunto de valores con nuevas formas de vida contempornea. En consecuencia, la accin debe orientarse al redimensionamiento de la participacin del edificio en los procesos histricos, a partir de las relaciones espaciotemporales que el establece. De esta forma, la historia, apoyada por la antropologa y la arqueologa, ms que un recuento de hechos y procesos, constituye una valiosa herramienta para la interpretacin de los bienes en el contexto de las estructuras fsicas y sociales. La conservacin, entendida de esta manera, es mucho ms que la accin de continuar la permanencia de los objetos culturales: busca conservar, pero como el principio de un proceso de identificacin

de los valores propios de nuestra cultura; que slo adquieren su verdadero poder de significacin en la medida que puedan contextualizarse en el marco de nuestra problemtica actual, permitiendo activar procesos alternos de conservacin de los fundamentos que definen nuestra identidad.

Vista de la Baha desde el centro histrico de Catagena