El pino de Navidad

Y el pino de Navidad cuntos problemas me da!...

Era 23 de diciembre y a mi cabecita todava infantil le haba entrado la moda escandinava o el capricho novedoso del rbol de Navidad. No contento con el musgo del monte, del ro con sus puentes, los pastores y las ove itas alrededor del Nacimiento, ahora deseaba engalanar la cocina!comedor con un hermoso pino decorado con guirnaldas, campanitas, bolones, bombillitas, algunos regalos", y en esta ocasi#n, la estrella blanca no brillara sobre el establo de $el%n, sino en la copa bien alta del rbol de Navidad. Esa ma&ana prenavide&a me propuse de ai'(olari )cortador de madera* y mi ob etivo era un hermoso pino de metro y medio, ms o menos, o en su caso, una esbelta copa de pino grande para lucir la me or de las Navidades entre todas las casas del pueblo. ! +,na gran campanada-".se di o bien convencido! /omo 0ue estoy a0u, los vecinos se van a 0uedar con la boca abierta con tanta novedad navide&a. 1 mis nueve a&os de edad reci%n cumplidos no les daba miedo el hacha al hombro, ni les daba miedo subir al monte y menos miedo a2n la trepada a cual0uier rbol por alto 0ue fuese3 las tres cosas estaban en mi plan para esa ma&ana del 23 de diciembre. 4or eso me vi caminando cuesta arriba, solo y con el hacha al hombro5 mis hermanos se haban desentendido de esta aventura3 a ellos les molaba muy poco la nueva moda de los arbolitos adornados y luminosos. 4ero a m s me tena muy interesado y no daba abasto a mi ansiedad5 en esa ruta campo adentro y monte arriba estaba mi gran ob etivo3 un pino para la Nochebuena en familia. En mis correras anteriores por 6endiberri, 7ardapia y la t8ola de 6arcial siempre me haban llamado la atenci#n unos rboles de p2as verdes en ve' de ho as planas y redondeadas5 crecan desparramados por la ladera sur de 1pit8eln3 el pinar de Eleta5 no me gustaban gran cosa pues los senta como visitantes e8tra&os, e8tran eros, a nuestro paisa e de toda la vida. 4ero con la nueva moda navide&a, a0uellos artilugios verdes tomaron tama&a importancia para m3 los pinos de Eleta se parecan muchsimo a los rboles de Navidad, tan hermosos en los anuncios de la televisi#n o en los programas de un santo gordinfl#n con sus renos volando por el aire.

9aca fresco de invierno esa ma&ana camino de :doia, la ;e era y <an 6iguel3 sobre el portillo de la loma, el viento aceleraba el flu o de los mocos, siempre abundantes en mis narices5 pero nada, por encima de todo, el pino de Navidad5 recorr 1ulsu de parte a parte cua ado por el roco invernal5 tras el camino llano, la cuesta casi vertical de <an /rist#bal, empe&ada siempre en provocar sofocos y calores con las temperaturas a ras de cero3 helado por fuera, sudando por dentro" +,n desastre de cuesta4ero desde la cima y un poco ms, alcanc% a divisar mi ob etivo3 1pit8eln al otro lado de la vaguada5 el pe0ue&o pinar de los Eleta frente a mis o os ansiosos y en mi mente alocada, una sola obstinaci#n3 el pino de Navidad. Entre in0uieto y ansioso descend el camino de la 0uebrada3 a un lado rumoraba la fuente de los ,rra, los olivos y la vi&a, a la otra5 la estrecha senda me condu o entre hierbas altas y ollagas pinchosas hasta el lie(o de los Eleta, hoy convertido en un bos0ue de leyenda" 9aba pinos para todos los gustos, grandes, pe0ue&os, medianos, pero bastante deformes3 crecan en plan salva e. Ninguno me convenca de verdad3 ! +=iantre, no son tan rectos como yo pensaba- >amos a ver, vamos a ver" +6ecachis-.. /omo no sea la copa de ese pino grande 0ue domina todo el paisa e. +Eso mismo-..., la copa de ese pino es la soluci#n a mi problema. 1h est lo 0ue yo busco"
Esa rama est muy buena pal rbol de Navidad! Esa rama de madera, tralarero, tralar!... Con mis pies y con mi manos me subir asta el pico, y a !olpes duros del ac a me cortar el arbolito"

En unas cuantas 'ancadas me encontr% a la sombra sin sombra del gran pino dominante5 un poco atrs 0ued# la mochilla, recostada sobre un pe&asco, y con el hacha en la mano me dispuse a trepar por el recio tronco hasta lo ms alto3 hermosa copa de pino para la Navidad. ! ?a vers"., esto est pan comid" ! 4ero" @0u% vas hacer conmigo, muchachitoA

1l or a0uella e8tra&a vo' de madera se me parali'# la respiraci#n", el hacha vol# de mi mano derecha camino del dedo gordo de mi pie i'0uierdo y" entonces despert% de la sorpresa viendo todas las estrellas del valle5 como un resorte disparado ech% a correr por el camino de vuelta. Be os ya de la influencia del pino hablador me detuve e8hausto del todo, las manos sobre los muslos y" me arda de dolor el dedo gordo de mi pie i'0uierdo5 descans% as un rato y, a base de respiraciones continuadas, pude e0uilibrar la situaci#n del momento3 atrs se me 0uedaron el hacha unto al tronco del pino grande y la mochila, unto a la piedra. =espu%s de mucho pensarlo, decid volver atrs para no perderlo todo, adems" ! Esa cosa de madera hablante ha podido ser fruto de la imaginaci#n, del viento, +0u% se yo-... .hablando as refor'aba mi vuelta al escenario embru ado. /on ms miedo 0ue otra cosa fui retornando al lugar de la vo' misteriosa5 all todo apareca normal, como si nada hubiera sucedido3 a un lado, la mochila con el almuer'o5 el hacha de las estrellas tirada por ah", mientras, el pino, el gran pino me miraba impasible desde su altura celestial. ! 9e debido so&ar esta ve'5 no tengo remedio3 siempre me vencen las fantasas" Entonces volv a mirar hacia arriba de a0uella gran mole de madera3 en lo ms alto de todo, la punta3 la copa del pino me atraa de manera irresistible5 necesitaba convertirla en el me or rbol de Navidad de todas las casas del pueblo, del >alle y hasta de la /uenca. =ecidido3 ! ;engo 0ue subir a como d% lugar" Envain% mi pe0ue&a hacha por dentro de la correa del pantal#n y ya" :nseguro todava palp% el fornido tronco3 ! $ien, normal, no pasa nada5 todo han sido alucinaciones" ? me puse a trepar por el spero palo del gran pino" ! Cste es mi oficio preferido"

En un peri0uete peri0uet#n ya me encontraba a media altura, con todo el panorama del >alle a lo le os y la brisa oliendo a nieve5 para desenvolverme con ms soltura entre las enrevesadas ramas del gran pino e8tra e mi hacha del cintur#n y la clav% en el tronco, ms arriba de mi posici#n actual. ! ++1aaay--..., pero @0u% te propones conmigo, so bruto del cop#nA .la misma vo' del principio. Dtro susto de improviso y de muerte5 me de % arrastrar por el tranco hasta el suelo, con el ersey hecho tri'as y las dos piernas abrasadas con todo tipo de raspaduras. En cuatro saltos me encontr% fuera de la influencia del enorme vegetal, pero no muy le os. 6is o os se fueron a un lado, al otro, por todos lados escrutaban mis o os y" no vea nada anormal3 el gran pino ah enfrente y la mochila con el almuer'o, a mis pies5 pero el miedo agarrotaba mi cuerpo y le impeda moverme. ! +=iantre-... @Eu% hago ahoraA ,n poco ms tran0uili'ado, decid sentarme un momento sobre la piedra de la mochila5 la decisi#n lleg# enseguida3 ! /orto alguna ara del lie(o y me vuelvo camino del pueblo. +,na ma&ana con dos sustos de muerte4uesto en pie, cargu% la mochila a mi espalda y cuando fui a tomar el hacha" ! +Fec#rcholis-... El hacha se 0ued# clavada bien arriba en el tronco del pino. 4ero ese pino habla y el hacha est en su poder, clavada en sus costillas5 debe estar de muy mal genio. 6e sent del todo confundido, sin saber 0u% decisi#n tomar" ! 1 casa no puedo volver sin esa maldita hacha, no puedo. +En 0u% lo me he metido, no tengo a nadie 0ue me ayude y todo por un pino de Navidad-" 4ara acertar con una buena decisi#n, la menos mala de todas, volv a sentarme en la piedra, cerca pero le os del misterioso pino5 all me 'amp% el almuer'o entre miradas golosas a la tortilla con patatas y al pino 0ue habla, con bastante desconfian'a todava.

$ien almor'ado y bastante ms tran0uilo, despacio me puse de pie, la mochila 0ued# sobre la piedra, por si acaso, y retorn% con precauci#n a donde el pino hablador. ! En la escuela nunca nos han dicho 0ue los pinos hablan, por muy e8tran eros 0ue sean5 si no hablan el macho, el perro, los gatos o la vaca de casa, con menos ra'#n ese pringao de pino" +9uuumm6irando y oteando hacia arriba", all descubr el hacha en poder del gran pino 0ue ya me haba regalado dos buenos sustos con su vo' de madera5 despacio me puse unto a %l", palp% su tronco escamoso", y nada3 no 0uiso hablarme por tercera ve'. ! =ebo estar so&ando con esas palabras3 los pinos no hablan5 si no, do&a 4aca nos lo hubiera advertido. >olv a tocarlo otra ve', con ms seguridad", ni palabras, ni calambra'os o alguna tos de madera5 di una vuelta al completo sobre su recio tronco, a ver si encontraba alguna boca especial por donde me hubiera hablado", pero nada3 un pino como todos lo pinos del mundo. ! 4or lo menos tengo 0ue subir otra ve' para recuperar mi hacha5 si no, +buena me espera en casa- <in pino de Navidad y" sin hacha. +6enudo negocio el de esta ma&ana=i unos golpecitos alrededor del grueso y spero tronco. ? nada. ! +Eeeh-... +1aaah-... +Doooh- @Dye, pinoA... @6e oyes, pinoA... .le grit% varias veces. ? nada, no respondi# nada. 6e hice con un poco de valenta y escal% el rbol en menos de un 1ve 6ara3 all estaba otra ve', unto al hacha clavada sobre el tronco. Entonces me entraron las dudas3 todo haba salido bien en este tercer intento" ! @Eu% hago ahoraA... @<ubo o no subo hasta la copaA... 4ara eso he caminado hasta 1pit8eln" @noA 9e venido para cortar y llevarme la rama 2ltima de este endiablado pino3 ella ser el pino de Navidad en casa E'(urra. 6s seguro de m, desatran0u% el hacha, la puse dentro de la pretina y a seguir con la escalada5 a la altura deseada me detengo todo sudoroso3 es una buena altura y la brisa uega con todo el entramado, incluso con mi e8periencia de escalador de rboles en busca de nidos no me siento del todo seguro.

1fianc% lo me or 0ue pude mi pie derecho5 al i'0uierdo lo de % un poco ms a su aire y a su dolor5 mi mano i'0uierda aferrada al tronco central y con la derecha desenvain% mi hacha de guerra entre el lo de ramas cru'adas y ho as puntiagudas. /on el filo del hacha hice una muesca donde debiera ir el corte de ese precioso pino de Navidad y me dispuse a reventar el primer golpe seco y contundente" ! @Eu% vas hacer conmigo, muchachito del diabloA 1h mismo se me cay# el hacha, y cay# y cay# hasta chocar all aba o contra el suelo. 4ero en ese momento el hacha es lo 0ue menos me importaba3 hubiera 0uerido tener alas para volar y ale arme sin riesgo alguno de a0uel rbol mgico y peligroso. /on las prisas y los nervios desatados intentaba descender a la carrera, pero una rama se me col# por el cintur#n, otra me atraves# el ersey roto y a mi dolorido pie i'0uierdo lo sent preso entre un lo de ramas cru'adas. 1ll arriba me sent ms preso 0ue Gesucristo en la /ru' del /alvario /on el cuerpo amarrado por todos sus miembros y el cora'#n a punto de estallar, 0uise gritar desesperado, medio loco, pero las palabras no me salan de la boca5 ni si0uiera sent 0ue se me humedecan mis gastados pantalones. 1l rato de seme ante tortura, subieron los gritos por la garganta3 ! ++<ocorro, au8ilio--... ++<ocorro, au8ilio, este pino me 0uiere matar, me 0uiere matar--... ++1u8ilio, socorro--... +6e 0uiere matar-... +mataaaar! 4ero" @0u% t2 dices, muchacho malandrnA .la vo' eno ada con tonos a madera de pino. ? me 0ued% bo0uiabierto5 no me ca de tan arriba por lo preso 0ue el condenado me tena. ! 10u el 2nico 0ue 0uiere matar eres t25 @me oyesA ;2 me 0uieres matar a m y no yo a ti, enano de las narices" @me entiendes bienA 4ero yo segua mudo, incapa' de pronunciar ni una letra.

!@6e entiendes o no me entiendes, ai'(olari sin fundamentoA Fesp#ndeme3 @0ui%n 0uiere matar a 0ui%nA ?o a ti o t2 a m" +>amos, resp#ndeme, o no sales vivo de a0u,n hilo de vo' comen'# a desli'arse entre mis dientes casta&eteantes3 ! ?oaaa'i" ! @Eu% ests diciendoA +9abla ms alto! +?oati-" ! @/#moA ! ++?D 1 ;:-! ?a a ti" @0u%A ! <#lo" 0uera" una rama" tuya" para" el rbol de" ! 4ero" ++hi o de tu padre-- .Estall# con su vo'arr#n de pino dominante! <i me cortas la copa de arriba me matas la vida de aba o. @No lo entiendesA ! ?o" s#lo" 0uera" ! <i yo te corto la cabe'a a ti, enano escalador, @0u% puedes hacer t2 sin cabe'aA +Eeeeh, dime-... <in cabe'a, @0u% tu harasA... ! ?o" s#lo" 0uera" ! ;2 s#lo 0ueras matarme, ni&o entrometido. ! 4ero" ! No hay pero 0ue valga" 4or esta ve' te de o con vida, s#lo por0ue estamos en Navidad" ?a los sabes3 no 0uiero verte ms por a0u" +>ete, vete, vete, muchacho entrometido-... Entonces despert% como de un e8tra&o e infernal sue&o. Estaba cado a los pies del gran pino, el hacha a un lado5 al otro, mi cuerpo lleno de rasgu&os, moretones y ara&a'os5 mis o os vean, mis odos oan, mi boca respiraba y mis pies los senta vivos, aun0ue el dedo gordo a2n me dola como al principio de esta ins#lita aventura.

9umillado en mi amor propio, me senta adolorido a lo largo y ancho del cuerpo, pero contento por estar vivo5 alcanc% a levantarme como pude, luego tom% el hacha, la mochila y" a2n tuve fuer'as para una 2ltima mirada al pino 0ue habl# conmigo y me haba perdonado la vida. 1l menos as lo crea en a0uellos confusos momentos. ? me volv camino del pueblo. ! +=iantre-... El pino me ha dado un buen serm#n y menudas amena'as, pero estoy vivo para contarlo. 1lg2n da prometo contar esta increble aventura" /uando llegu% a casa, mi madre casi se vuelve loca al verme lleno de rosetones, rayas anaran adas y promontorios a'ulados5 el ersey roto, el pantal#n para la basura y el rostro, de un puro vagabundo. ! 4ero, mi hi o, @con 0ui%n te has peleado de esa maneraA ! /on un pino 0ue me atac#" ! @/on 0ui%n dicesA... ! Nada mam3 me ca de un pino. ! @;e has cado de un pinoA +4ero 0u% poco fundamento tienes! Es verdad, mam, fundamento poco y fantasa demasiada. ! ? el rbol de Navidad @d#nde est tu famoso pino navide&oA ! No hay rbol ni pino de Navidad, mam5 en esta casa seguiremos con el musgo, las ove itas, el ro con el puente, los pastores y el portal de $el%n. ! @? 0u% te di e yo, so cabe'a duraA Nada de pino ni de rbol5 lo nuestro es el Nacimiento del Ni&o Ges2s en Navidad. ! ;ienes ra'#n, mam, tienes toda la ra'#n" )"? si no, preg2ntale al pino de 1pit8eln*

13 abendua 2013 Almirante Ostirala

Una aventura con mucho de fantasa y algunos detalles infantiles de la ms pura realidad
xabierpatxigoikoetxeavillanueva