Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Carlos Ruiz

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 6

REVISTA CHILENA DE LITERATURA

Septiembre 2013, Nmero 84, 163-168


HUMANIDADES Y EDUCACIN: EL PAPEL DE LA
CRTICA
1
Carlos Ruiz Schneider
Departamento de Filosofa
Universidad de Chile
Me propongo tratar el tema de Humanidades y educacin, limitndome, en
primer lugar a la Universidad, y luego, a algunos aspectos que tienen que
ver con el sistema educacional en general.
Argumentar brevemente en lo que sigue, en favor de la necesidad de una
presencia muy signifcativa de las humanidades en el currculo universitario
y escolar, y por eso mismo tam bin en la formacin de los futuros
maestros.
Abordar el tema a partir de los trabajos de dos flsofas norteamericanas
contemporneas, Amy Gutmann y Martha Nussbaum, cuyos escritos sobre
las humanidades, la flosofa y la educacin me parecen notables.
En un brillante artculo de 1982 titulado Para qu sirve ir a la escuela?
El problema de la educacin en las teoras utilitarias y las teoras de los
derechos, publicado en un clebre libro colectivo sobre el utilitarismo
editado por Amartya Sen y Bernard Williams, la flsofa estadounidense
Amy Gutmann se propone analizar cmo se justifca la educacin para las
dos flosofas polticas liberales ms importantes en el mundo anglo sajn,
el utilitarismo y las teoras de los derechos al estilo de John Rawls o Ronald
Dworkin.
1
Discurso inaugural Escuela de Postgrado, Facultad de Filosofa y Humanidades,
Universidad de Chile, Santiago 2010.
164 REVISTA CHILENA DE LITERATURA N 84, 2013
Propone como marco general de su investigacin la idea de que las teoras
utilitarias tienen como concepto central el de felicidad, mientras que las
teoras de los derechos remiten al concepto de libertad.
Ambos paradigmas, seala Gutmann, concebidos de una manera muy
sesgada: la felicidad, entendida como maximizacin de utilidades a travs
de un clculo de costos y benefcios, y la libertad, entendida a la manera
neo-liberal, como una libertad sin trabas para los individuos y los grupos de
escoger y de fundar establecimientos educacionales sin intervencin de la
comunidad poltica, se han utilizado en Chile para justifcar un rol preponderante
del mercado en educacin, especialmente en la educacin superior, como
lo subrayan muchos de los informes sobre la educacin chilena, en especial
los de la OECD, e incluso el Banco Mundial
2
.
Para ilustrar los resultados que tiene aplicar la mirada utilitaria, Amy
Gutmann cita algunos textos de Jeremy Bentham y de James Mill, los
fundadores del utilitarismo, textos que resultan particularmente expresivos.
QU EXIGE LA IDEA DE UTILIDAD COMO FIN DE LA EDUCACIN?
Para James Mill, uno de los pensadores utilitaristas ms importantes, la
educacin debiera hacer de la mente de cada individuo en la medida de lo
posible un instrumento de la felicidad, primero de la propia y luego tambin
de la de otros seres. Pero la felicidad, comenta Gutmann, es, de seguro, un
fn demasiado indeterminado. Es por esto, tal vez, que Bentham propone en
su Chrestomathia, su texto clsico sobre educacin, un conjunto de fnes
secundarios que supone son constitutivos de la felicidad futura de cada nio.
La educacin debiera entonces proveer a los nios con medios para 1) evitar
una sensualidad desordenada (y sus dainas consecuencias), 2) asegurarles
empleos que les procuren buenos ingresos, 3) asegurar la admisin a buenas
2
Como un ejemplo del primer tipo de fundamentacin, podra sealarse el artculo
de Gerardo Jofr El sistema de subvenciones en educacin: la experiencia chilena. Estudios
Pblicos, 1988. Los mejores ejemplos del segundo tipo son los ensayos de Milton Friedman El
rol del gobierno en la educacin en Capitalismo y Libertad, Madrid: RIALP, 1968 y Qu
falla en nuestras escuelas? en Libertad de elegir. Hacia un nuevo liberalismo econmico,
(con Rose Friedman), Mxico: Grijalbo, 1980, ambos vastamente conocidos en Chile. El
informe de la OECD sobre la educacin chilena del ao 2004 recalca este fuerte sesgo de una
ideologa del mercado. El Informe del Banco Mundial del ao 2008 destaca lo mismo.
Humanidades y educacin: el papel de la crtica 165
compaas a partir de las cuales se podra obtener los fnes anteriores, 4)
evitar el tedio y el dolor de la vacuidad mental y 5) ganar una proporcin
importante de respeto general
3
.
Observa Amy Gutmann que si uno acepta la realidad econmica
prevaleciente entonces aparentemente los fnes de la educacin segn
Bentham son los correctos. Lo que le preocupa es que los resultados de
este razonamiento son incompatibles con el liberalismo. Y esto, porque
una teora que en principio es neutral en lo que se refere a una arco muy
diverso de modos de vida, resulta ser parcial hacia aquellos modos de vida
que producen ingresos altos y aprobacin social. El utilitarismo parece
ser nos dice Gutmann, en este sentido no liberal y tener consecuencias
conservadoras cuando se aplica a la educacin: los nios tendran que ser
educados de manera que puedan encajar bien en la sociedad tal como es
4
.
Como lo deca al comenzar, creo que el modelo educacional actual en
Chile cabe muy bien en el marco de una concepcin utilitarista de este
tipo, sobre todo si uno piensa que la educacin en nuestro pas es pensada
fundamentalmente desde la dictadura, en base a fnalidades econmicas al
estilo de los anlisis costo/benefcio y, en el caso de la educacin superior,
en trminos de tasas de retorno de la inversin y capital humano.
Segn Gutmann, una aproximacin a la educacin en trminos del concepto
de libertad es ms promisoria y resulta compatible con una funcin de la
educacin que va ms all de preparar a los nios y a los estudiantes para ser
ciudadanos obedientes de las leyes, buscar su felicidad o escoger ocupaciones.
Aqu hay que aclarar que en las consideraciones que siguen, Amy Gutmann
est pensando en el concepto de libertad implcito en lo que podramos
llamar liberalismo igualitario, y no en el neo-liberalismo, que entiende por
libertad, fundamentalmente, la ausencia de coaccin por parte del Estado
5
. La
educacin, nos dice Gutmann, debiera tambin proveer a los nios habilidades
para concebir y evaluar modos de vida y los sistemas polticos que se les
adecen, que sean diferentes de los que encuentran en su propia sociedad
3
Jeremy Bentham Chrestomathia, Obras, 1843, Vol. 8.
4
Amy Gurmann, Art. Cit. Utilitarianism and beyond, Sen y Williams, p. 265.
5
Ernst Tugendhat, por ejemplo, destaca esta distincin, siguiendo al flsofo Thomas
Nagel y precisamente a Amy Gutmann, en su artculo Liberalismo, libertad y el asunto de
los derechos humanos econmicos, publicado en su libro Ser-Verdad-Accin. Barcelona:
Gedisa, 1998.
166 REVISTA CHILENA DE LITERATURA N 84, 2013
o en cualquier sociedad. Este fn educacional se basa a menudo en la idea
de que el conocimiento debiera tambin buscarse por s mismo, es decir, en
funcin del desarrollo del intelecto y sus capacidades lgicas e imaginativas.
Segn nuestra flsofa, la educacin en literatura, historia, antropologa
y flosofa poltica (por ejemplo) nos da un tipo de libertad para pensar ms
all de las formas establecidas de la vida poltica y privada. Tal conocimiento
es necesario para apreciar completamente y para criticar el sistema poltico
y la eleccin de modos de vida que hemos heredado. Uno debiera entonces
concluir de esto que este conocimiento es un prerrequisito para ser un buen
ciudadano democrtico, pero que no es el tipo de conocimiento en base al
cual cualquier gobierno democrtico existente es probable que dependa para
su (mera) supervivencia
6
.
Me parece que refexiones como las de Gutmann son muy necesarias
como fundamento para la existencia en la sociedad de saberes crticos como
la flosofa y las humanidades. Pero lo son tambin para permitirnos ver lo
que puede ganarse con el uso del saber flosfco para aclarar los propios
fnes de las instituciones del saber, antes de preocuparnos unilateralmente
por su gestin o su rentabilidad.
Como lo dije al comienzo, querra comentar brevemente, para terminar,
algunas ideas que desarrolla Martha Nussbaum en su libro El cultivo de la
humanidad. Una defensa clsica de la reforma en la educacin liberal, de
1997. Sostiene Martha Nussbaum que un graduado de una universidad o de
una escuela superior tiene que ser el tipo de ciudadano capaz de actuar como
un participante inteligente en los debates que involucran las diferencias (que
se producen en un mundo crecientemente multicultural y multinacional) ya
sea como profesional o simplemente como elector, jurado o amigo
7
.
En el mundo actual, contina dicindonos Nussbaum, esto parece requerir
tres habilidades. La primera es la habilidad para un examen crtico de uno
mismo y de las propias tradiciones. (Esto) requiere el desarrollo de la habilidad
de razonar lgicamente, de poner a prueba lo que uno lee o dice desde el
punto de vista de la solidez del razonamiento, de la exactitud de los hechos
6
Amy Gutmann, art. cit. p. 272.
7
Marta Naussbaum. El cultivo de la humanidad. Una defensa clsica de la reforma
en la educacin liberal. Santiago: Editorial Andrs Bello, 2001, pp. 27-28.
Humanidades y educacin: el papel de la crtica 167
y la precisin del juicio
8
. Es ms o menos a lo que se refera Amy Gutmann
y que corresponde tambin al ideal socrtico de una vida examinada.
En segundo lugar, sostiene Nussbaum, los ciudadanos necesitan adems
la capacidad de verse a s mismos no solo como ciudadanos pertenecientes
a alguna regin o grupo, sino tambin y por sobre todo como seres humanos
vinculados a los dems seres humanos por lazos de reconocimiento y mutua
preocupacin...
9
.
Pero me interesa sobre todo la tercera cualidad que subraya Nussbaum y a
la que denomina imaginacin narrativa. Dice: Esto signifca la capacidad
de pensar cmo sera estar en el lugar de otra persona; ser un lector inteligente
de la historia de esa persona, y comprender las emociones, deseos y anhelos
que alguien as pudiera experimentars (la tercera capacidad que nuestros
estudiantes deben alcanzar es la de descifrar los signifcados de la accin
de los dems mediante la imaginacin)
10
.
En el captulo en que trata este ltimo tema con ms detalle, Nussbaum
cita a su vez un hermoso texto de un jurista, Alexander Meiklejohn, en donde
este nos dice que: Existen muchas formas de pensamiento y de expresin, en
la amplia gama de manifestaciones humanas, de las cuales el votante deriva
el conocimiento, la comprensin y la sensibilidad a los valores humanos, la
capacidad de emitir un juicio sano y objetivo que, en lo posible, el voto debera
expresar. Y concluye que por esto el pueblo necesita de las novelas y del
teatro, de las pinturas y de los poemas agregara tal vez, del cine porque
ser llamado a votar
11
.
Con esto, ambas autoras defenden la necesidad de las humanidades y
la flosofa para la educacin, desde una concepcin liberal y que est sin
duda muy alejada del neoliberalismo actual. Nos queda sin embargo una
tarea pendiente, Cmo asegurar, adems, el acceso a las humanidades y la
flosofa no solo de una lite, sino de estudiantes provenientes de todas las
8
Ibd., p. 29.
9
Ibd., p. 30.
10
Ibd., p. 31.
11
Ibd., p. 121. La autora ha defendido ms recientemente, y de una manera notable,
este papel crtico de las humanidades frente a las concepciones de la educacin y de la
formacin universitaria que la vinculan unilateralmente con el crecimiento econmico y con
la formacin de competencias funcionales para la produccin, en su libro Not for proft. Why
democracy needs the humanities, que ha sido traducido de una manera muy actual como Sin
fnes de lucro. Por qu la democracia necesita de las humanidades.
168 REVISTA CHILENA DE LITERATURA N 84, 2013
clases sociales, o, por lo menos, en que la clase social no sea impedimento
alguno para el acceso a estos saberes crticos?
Jacques Rancire y Jacques Derrida han hablado ltimamente, a propsito
de este desafo igualitario, de un derecho a la flosofa, podramos decir de
un derecho igualitario a los saberes crticos.
Naturalmente esto no es tarea de una sola facultad ni tal vez de una sola
universidad, sino de un sistema escolar y universitario democrtico, de una
poltica educacional pensada desde la democracia y la formacin de sujetos
democrticos. Pero representa tambin desafos muy importantes para nosotros,
me parece, en particular en lo que tiene que ver con nuestra concepcin de la
formacin de los profesores, que han de contribuir, a su vez, a la formacin
de estudiantes crticos y de sujetos democrticos.
BIBLIOGRAFA
Guttman, Amy. Whats the use of going to school, en Amartya Sen y Bernard Williams
(comp.). Utilitarianism and beyond. London and Paris, 1982.
Nussbaum, Martha. El cultivo de la humanidad. Una defensa clsica de la reforma en la
educacin liberal. Santiago: Editorial Andrs Bello, 1997.
________ Not for proft. Why democracy needs the humanities. New Jersey: Princeton
University Press, 2010.

También podría gustarte