Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Eucalyptus de Glup Ta

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 5

200

20 N
0
20 S
10 N.
10 S
AUSTRALIA
FILIPINAS
INDONESIA
POBLACION NATIVA
NUEVA GUINEA
John K. Francis
Eucalyptus deglupta Blume, conocido como kamarere en
Papua Nueva Guinea, bagras en las Filipinas y leda en Indo-
nesia (35), es un rbol alto y elegante con una corteza
atractiva y de muchos colores (fig. 1).
HABITAT
Area de Distribucin Natural y de Naturalizacin
La distribucin natural del kamerere, que se encuentra
entre las latitudes 9 N. y 11 S., cubre el rea de Mindanao
en las Filipinas; Sulawesi, Ceram e Irian Jaya en Indonesia
y Papua Nueva Guinea, incluyendo Nueva Bretaa (12, 20,
fig. 2). Es una de solamente dos especies de Eucalyptus cuya
distribucin natural se extiende ms all de Australia (la
otra es E. urophylla S.T.Blake) y es la nica que no ocurre de
manera natural en Australia (4, 41). El kamarere ha sido
plantado a travs de los trpicos hmedos, en particular en
las Islas Salomn, Fiji, Samoa, Taiwan, Malasia, la Costa de
Marfil, Costa Rica, Honduras, Brasil, Cuba y Puerto Rico (17,
38).
Clima
Los rodales naturales de kamarere crecen en reas en
donde la precipitacin anual vara entre 2000 y 5000 mm
(41), pero la mayora de los rodales comerciales se encuentran
en donde la precipitacin anual promedio es de entre 2500 y
3500 mm (12). La precipitacin en estas reas tiende a ser
uniforme a travs de todo el ao, con slo unos pocos meses
con un promedio de menos de 150 mm (20). Las temporadas
secas prolongadas ocurren muy rara vez (12) y la humedad
relativa es por lo usual alta, entre el 70 y el 80 por ciento
(19). En las elevaciones bajas, las temperaturas mensuales
mximas promedio varan entre 24 y 33 C, mientras que en
Eucalyptus deglupta Blume Kamarere
Myrtaceae Familia del mirto
las elevaciones de ms de 300 m, las temperaturas mensuales
promedio varan entre 13 y 27 C (12). La especie no se
encuentra expuesta a las heladas en su rea de distribucin
natural.
Suelos y Topografa
El kamarere crece bien en margas arenosas profundas y
moderadamente frtiles, pero tambin crece en ceniza
volcnica y suelos areniscos (35). La especie se puede
encontrar en sus reas nativas desde el nivel del mar hasta
los 1,800 m (26). Los mejores rodales se desarrollan en los
bancos y terraplenes de los ros a menos de 150 m sobre el
nivel del mar (12). Se requiere de un buen drenaje en el suelo
(21). En los suelos pobres y a mayores elevaciones, los rboles
tienen un crecimiento mucho ms lento. El kamarere coloniza
a menudo los depsitos aluviales recientes, las reas de
derrumbes y la ceniza volcnica recin depositada (12, 19).
Cobertura Forestal Asociada
Por lo general, el kamarere se reproduce en rodales puros
(19). Sin embargo, ocasionalmente forma una asociacin con
Octomeles sumatrana Miq., una especie secundaria agresiva
(43). Cuando los rodales llegan ms all de la madurez, se
ven invadidos por especies forestales primarias tales como
Pometia pinnata (Taun), Dracontomelum mangiferum Bl.,
Homalium spp., Celtis spp. y Pterocarpus indicus Willd. (19).
Figura 1.Arboles de kamarere, Eucalyptus deglupta, de 15 aos
de edad en una plantacin en Puerto Rico.
Figura 2.La distribucin natural del kamerere, Eucalyptus
deglupta.
201
CICLO VITAL
Reproduccin y Crecimiento Inicial
Flores y Fruto.El kamarere comienza a florecer a una
edad temprana, usualmente en 3 4 aos en las plantaciones
(19). Las flores de color crema aparecen en las panculas
terminales o axilares de umbelas, cada una con entre tres y
siete flores (12). La florescencia ocurre durante la mayora
de los meses (41). Las semillas se maduran en cpsulas de 3
a 5 mm de largo en un perodo de 5 a 6 meses (19, 35).
Produccin de Semillas y su Diseminacin.Cada
cpsula contiene de 12 a 48 semillas (2), las que constituyen
alrededor del 2 por ciento del peso en seco de la cpsula (41).
Las semillas son pequeas, alrededor de 15,000 a 18,000 por
gramo (12). Por lo usual, entre 2,000 y 3,000 semillas por
gramo son viables (39). Sin embargo, la germinacin de las
semillas de alta calidad puede ser de hasta el 90 por ciento
(41). Nueve rboles semilleros de 10 aos de edad en Malasia
produjeron un promedio de 87 g de semillas por rbol en una
sola recoleccin (5). Las cpsulas se pueden recoger cuando
verdes y se abrirn para liberar las semillas despus de 2 3
das de secado al sol (41). Despus de secas, las semillas se
pueden almacenar por hasta 2 aos mediante la refrigeracin
en contenedores hermticos (39). Las semillas del kamarere
son aladas y esto, junto con el pequeo tamao de las semillas,
les permite ser llevadas a las reas perturbadas cercanas.
Las semillas viajarn un poco ms all de una distancia igual
a la altura del rbol con un viento de 10 km/hr (20). El agua
es el vehculo ms importante para la dispersin de las
semillas ya que los sitios en donde crece el kamerere se
encuentran en planicies inundadas por los ros (19).
Desarrollo de las Plntulas.La germinacin del
kamerere es epigea (12) y tiene lugar en un perodo de 4 a 20
das (39). La temperatura ptima para la germinacin es de
35 C (32). El tratamiento previo de las semillas no parece
ser necesario. Tpicamente, el primer paso en el proceso de
produccin de las plntulas es la siembra de las semillas en
bandejas de germinacin sombreadas y cubiertas con vidrio.
Las semillas germinarn sobre una superficie hmeda, pero
se recomienda el espolvorear una capa fina de arena o de
marga colada por encima (41). La arena, el suelo margo-
arenoso, el aserrn y el musgo Sphagnum molido usados como
substratos han dado resultados ms o menos iguales en la
germinacin (23). El medio para la germinacin se esteriliza
por lo usual con el objeto de evitar el mal del vivero que
afecta a las plntulas (41). Las plntulas se transplantan a
tubos o tiestos cuando tienen de dos a tres pares de hojas por
encima de los cotiledones. Las provisiones con las races
desnudas y las plntulas con las races desnudas y sus hojas
removidas no son usadas debido a sus bajas tasas de
supervivencia (2). Las plntulas alcanzan un tamao
plantable de 20 a 30 cm entre 3 y 4 meses despus de la
germinacin (41). La sombra deber ser reducida de manera
gradual, desde la plena sombra durante la germinacin a un
cuarto de sombra y hasta el sol pleno al final de la fase del
vivero (19, 33). Ya que las plntulas de kamarere son muy
susceptibles a la sequa (que causa el marchitamiento), el
plantado deber efectuarse durante una etapa lluviosa.
Despus de un mes en el campo, las plntulas son capaces
de resistir el estrs usual por falta de agua (14). Los
procedimientos para la preparacin exitosa del sitio incluyen
el arado de surcos (1) y la quema de la vegetacin cortada
que quede despus de las operaciones madereras (40). Si se
controla al principio, la vegetacin leosa en competencia se
ve rpidamente cubierta por el kamarere, pero si las
gramneas se convierten en un problema, debern ser
controladas durante el primer y segundo ao mediante el
roco de herbicidas o el labrado de la tierra alrededor de los
rboles jvenes con un azadn (41). Se usa a veces un abono
colocado cerca de, pero no en contacto con, las races al mismo
tiempo que tiene lugar el plantado, con el objeto de ayudar a
las plntulas a dominar a las malas hierbas en competencia
(33). El crecimiento inicial es muy rpido. En Nueva Bretaa
un crecimiento de 4.5 a 6 m es la norma durante el primer
ao (19).
Reproduccin Vegetativa.El rebrote del kamarere al
ser cortado es demasiado pobre como para ser usado como
un mtodo para la regeneracin de las plantaciones (20). Sin
embargo, las estacas del kamarere se arraigan con facilidad.
Ms del 99 por ciento de las estacas de kamarere a partir de
los tallos de plntulas se arraigarn comenzando alrededor
de 5 das despus del tratamiento al ser tratadas con una
pasta de hormonas y rociadas (13). Las races se pueden
utilizar tambin para reproducir el kamarere (39). Los
injertos en parche son lo suficientemente efectivos como para
ser usados en la reproduccin (11).
Etapa del Brinzal hasta la Madurez
Crecimiento y Rendimiento.El kamarere se
considera como uno de los rboles de ms rpido crecimiento
(35). Es tambin capaz de crecer hasta alcanzar un tamao
extraordinario. Se han registrado individuos de hasta 72 m
de alto y 1 m de dimetro a la altura del pecho (d.a.p.) (29).
El mayor incremento anual en altura se observa por lo usual
durante el primer ao y disminuye gradualmente durante
los siguientes 25 30 aos. La figura 3 muestra el potencial
60
50
40
30
20
10
0
0 5 10 15 20 25
A
L
T
U
R
A

(
m
e
t
r
o
s
)
EDAD (aos)
1 PUERTO RICO (16)
2 COSTA DE MARFIL (18)
3 NUEVA BRETAA (19)
4 BRASIL (42)
5 FILIPINAS (32)
6 MALASIA (2)
COSTA RICA (27)
COSTA RICA (35)
BRASIL (3)
PAPUA (28)
HONDURAS (38)
FILIPINAS (34)
ISLAS SALOMON (17)
SIMB. LOCALIDAD REF.
2
6
1
3
2
2
2
5
4
1
Figura 3.La altura promedio a varias edades para varias
plantaciones excepcionales de kamerere, Eucalyptus
deglupta, a nivel mundial.
202
Figura 4. Mediciones de la produccin anual promedio en volumen
a la edad indicada (*) de plantaciones de kamerere,
Eucalyptus deglupta, en varios pases (referencias en
parntesis).
para el crecimiento en altura en plantaciones en varias
localidades alrededor del mundo. Se indica solamente la mejor
plantacin para cada edad en cada localidad. Se han
preparado curvas de ndice de sitio para el kamarere de
plantacin para las islas de Sabah (6) y Mindanao (34) y
para Costa Rica (36). Sin embargo, el kamarere es una especie
sensitiva al sitio; cuando se planta en sitios pobres, el
kamarere podr crecer de manera tan lenta que nunca
producir maderos de tamao utilizable. Esto ha ocurrido
en sitios elevados y pobres en nutrientes en Puerto Rico. El
crecimiento en dimetro depende del espaciamiento, pero
unos incrementos anuales de 2 a 3 cm/ao no son raros en
las rotaciones para pulpa (de 5 a 12 aos).
Un rodal natural de kamarere cosechado en Nueva
Bretaa contuvo 940 m
3
/ha de volumen maderero (19). Otra
plantacin en Nueva Bretaa alcanz un volumen de 520
m
3
/ha en 20 aos (17). Se han preparado una tabla de
rendimiento basada en el ndice del sitio y la edad del rodal
(34) y ecuaciones para el volumen de un solo rbol basadas
en los dimetros y las alturas (27, 36). Los incrementos
anuales promedio en volumen en las plantaciones en buenos
sitios variaron entre 15 y 37 m
3
/ha (fig. 4). Si se desean, las
cosechas de entresacado pueden comenzar al final del primer
ao para estaquillas y continuar subsecuentemente, pasando
por postes, pulpa y maderos aserrables a medida que la
plantacin envejece. La edad de la rotacin para pulpa, la
cual es el producto ms importante en las plantaciones, es
de 5 a 12 aos (17). La edad de la rotacin para maderos
aserrables en Sabah es de 16 a 18 aos (6) y en Papua Nueva
Guinea, de 25 aos con entresacados a los 5, 10 y 15 aos
(17).
Comportamiento Radical.Las plntulas desarrollan
unos sistemas radicales tanto verticales como horizontales
de manera agresiva, y la raz pivotante se ramifica a una
edad temprana. Los rboles maduros tienen unas races
pivotantes verticales y ramificadas y un sistema radical
lateral superficial cuya longitud es de un cuarto a un tercio
de la altura del rbol (12). Sin embargo, el desarrollo de las
races depende de las condiciones del suelo y la competencia
entre los rboles. Las races por lo general no son una amenaza
para las aceras y los cimientos. Las micorrizas ectotrficas se
COSTA DE
MARFIL (18)
SABAH (6)
COSTA
RICA (27)
COSTA
RICA (36)
FIJI (17)
NUEVA
BRETAA (17)
0 10 20 30 40
6*
5 (PROMEDIO)
5 (MAXIMO)
8
4.5
3.5
10
10
15
20
5
PRODUCCION ANUAL PROMEDIO (m
3
/ha)
forman en los vellos de las races del kamarere (3). El rbol a
menudo desarrolla unos contrafuertes de 3 a 4 m de altura
en los suelos inestables y en los aluvios de ros (12).
Reaccin a la Competencia.El kamarere es
intolerante a la sombra. Se necesita de una luz vertical plena
para el desarrollo ms all de la etapa de plntula (41). La
especie no se reproduce bajo sombra y necesita de claros natu-
rales o artificiales. Tpicamente, el kamarere forma rodales
puros; o encuentra unas condiciones adecuadas,
reproducindose en grandes cantidades y dominando, o
fracasa por completo. En pruebas iniciales, unos
espaciamientos de 2 por 2 m resultaron en rboles estancados
al final del segundo ao (10), de manera que se adoptaron
unos espaciamientos mayores. Al presente el espaciamiento
ms comn es probablemente de 4 por 4 m sin entresacado
para una rotacin de pulpa (17). El reemplazo para llenar
huecos causados por la mortalidad deber efectuarse antes
del final de la primera temporada de crecimiento para evitar
que las nuevas plntulas sean suprimidas por los rboles
cercanos de mayor edad (41). Un rea basal de 26 m
2
/ha se
report para una plantacin de 20 aos de edad en Nueva
Bretaa (17). Una plantacin de Eucalyptus spp. mixta, de
15 aos de edad en Puerto Rico sostuvo un rea basal total
de 38 m
2
/ha, de la cual 12 m
2
/ha fueron de kamarere. Se
reportaron unos incrementos anuales promedio en rea basal
de 2.6 y 2.8 m
2
/ha para unas plantaciones de 4 y 9 aos de
edad en Nueva Bretaa y Java, respectivamente (19). La copa
de los rboles jvenes es cnica, con un lder bien definido y
ramas horizontales (12). Las hojas se presentan de manera
horizontal, lo que maximiza la intercepcin de la luz solar
(20). A medida que el rbol envejece se pierde la dominancia
apical y las copas adquieren una parte superior plana. Los
rodales cerrados tienen una longitud de copa promedio igual
a un cuarto a un tercio de la altura promedio del rbol (12).
Agentes Dainos.Existen varias plagas serias del
kamarere. Una falena hapilida que barrena en anillos y una
falena csida son las dos plagas de insectos principales en
Sabah (6). Estos barrenadores reducen significativamente
el valor de los rboles como maderos aserrables. Unas
prdidas de hasta el 40 por ciento de las plntulas han
resultado en unas plantaciones debido al ataque por el caracol
gigante (Achatina fulica Bowdich) que se alimenta de la
corteza, y las plntulas pueden quebrarse con el peso de estos
caracoles (19, 41). Estos caracoles se pueden controlar con
carnada de metaldehido. Las termitas son tambin una plaga
severa del kamarere (19). Estas atacan al rbol desde la etapa
de plntula hasta la madurez, a veces consumiendo el
duramen en su totalidad. La quema previa al plantado ayuda
a reducir la actividad de las termitas (40). En Papua Nueva
Guinea, la larva de la falena csida, Zeuzera coffeae Nietner,
taladra el cmbium y la albura de los rboles jvenes,
dejndolos susceptibles a quebrarse con los vientos fuertes.
En una plantacin, el tres por ciento de los rboles se vieron
afectados (17). El anillador de los tallos, Agrilus opulentus
Ker., ataca los rboles suprimidos en Papua Nueva Guinea
(24). En las Filipinas, Agrilus sp. mata rboles en algunas
plantaciones (37). La pudricin del duramen probablemente
afecta al kamarere a nivel mundial. Una investigacin en
una plantacin en Papua Nueva Guinea encontr que del 38
al 83 por ciento de los rboles se encontraban afectados, pero
la cantidad de pudricin presente en cada rbol era en
general tan pequea que la calidad de la pulpa no se vi
afectada (22). En la Amrica Central y en Brasil se han
reportado unos problemas serios con las hormigas
203
defoliadoras (Atta spp.) (26, 36). Se demostr que la necrosis
terminal en las Islas Salomn, causada por el hemptero
Amblypelta coophaza cocophaga China, se puede reducir
mediante la corta de la vegetacin entre los rboles de Euca-
lyptus spp. y la introduccin de la hormiga Oecophylla
smaragdina (25).
El kamarere posee la corteza ms delgada (3 mm) de todos
los eucaliptos y por lo tanto es extremadamente sensitivo a
los incendios (30). Los incendios de toda clase debern
excluirse de las plantaciones de kamarere. Un cancro asociado
con las heridas en los rboles, en particular las causadas por
machetes durante la remocin de enredaderas, es comn en
ciertas reas de Puerto Rico. Los rboles de ornamento en
Puerto Rico sufren con frecuencia de la quiebra de sus ramas
con las rfagas de viento. Se ha reportado que las plntulas
de kamerere pueden sobrevivir unas temperaturas de -2 C,
pero que mueren a temperaturas ms bajas (19).
USOS
El duramen del kamerere es de un color marrn rojizo y
con una fibra tosca. La albura es blanca o de un rosado plido.
La madera del kamerere se seca fcilmente con poca
degradacin y un encogimiento moderado durante el proceso
(de 3.9 por ciento radial y 7.8 por ciento tangencial) (7). Tiene
una fibra listada distintiva y un buen lustre. La madera se
aserra y se trabaja a mquina con facilidad, a excepcin de
cierto grado de rajado en la madera asserada radialmente
(12, 19). El peso especfico es mayor para el material
procedente de los bosques antiguos (de 0.45 a 0.65 g por cm
3
)
que para el material procedente de las plantaciones jvenes
(de 0.35 a 0.40 g por cm
3
) (7). El duramen es resistente a
Lyctus spp. (los escarabajos de polvo de salvadera) (14), pero
no es resistente a las termitas. La madera no es durable
cuando se encuentra en contacto con el suelo (35).
La madera del kamerere es usada para muebles, molduras,
pisos, construcciones y botes (14). La mayora del kamerere
de plantacin alrededor del mundo se cultiva para la
obtencin de pulpa. De la madera del kamerere se obtiene
tambin una pulpa fuertemente sulfatada que se puede
blanquear hasta alcanzar un gran brillo (6). El kamarere se
usa tambin, de manera limitada, para lea y para hacer
carbn (26). Los aceites aromticos del kamerere han sido
estudiados, pero ocurren en cantidades tan pequeas (del
0.2 por ciento en el follaje, 29), que no poseen un inters in-
dustrial. La especie se planta a menudo como un rbol de
ornamento y de sombra, debido a su muy atractiva corteza y
a su crecimiento rpido.
GENETICA
El gnero Eucalyptus contiene ms de 500 especies (29).
El kamarere, E. deglupta Blume (E. naudiniana F. Muell. es
un sinnimo botnico) ha sido colocado en la serie Degluptae
junto con E. raveretiana F. Muell y E. bachyandra F. Muell.
(31). La densidad de la madera se correlaciona con un 70 por
ciento de la variacin en la calidad de la madera y es
altamente hereditaria (9). La seleccin deber efectuarse con
la meta de una mayor densidad y una mayor uniformidad en
la misma. Existen hoy en da programas de seleccin y
procedencia en varios pases (15).
1. Acosta, R.; Morejn, J.M.1981. Influencia de la
preparacin de los suelos cenagosos sobre el crecimiento
del Eucalyptus deglupta. Habana, Cuba: Instituto de
Investigaciones de Mecanizacin Agropecuaria; Ciencia
y Tcnica en la Agricultura. 4(2): 57-63.
2. Barnard, R.C. 1953. Experience with exotic tree species
in Malaya. The Malayan Forester. 16: 29-40.
3. Batista, M.P.; Gorges, J.F.; Franco, M.A.B. 1982.
Avaliacao do crescimiento inicial de una essencia nativa
en comparacao con outras exticas, no nordeste do Para,
Brasil. Sao Paulo, Brasil: Instituto Florestal; Campos
do Jordao 16A, Parte 2. 1395 p.
4. Boland, D.J.; Brooker, M.I.H.; Chippendale, G.M. [y
otros]. 1984. Forest trees of Australia. Melbourne, Aus-
tralia: Nelson CSIRO. 687 p.
5. Bowen, M.R.; Eusebio, T.V. 1982. Seed handling prac-
tices: four fast-growing hardwoods for humid tropical
plantations in the eighties. The Malaysian Forester.
45(4): 534-547.
6. Chong, T.K; Jones, N. 1982. Fast growing hardwood plan-
tations on logged-over forest sites in Sabah. The Malay-
sian Forester. 45(4): 558-575.
7. Chudnoff, M. 1984. Tropical timbers of the world. Agric.
Handb. 607. Madison, WI: Forest Products Laboratory,
U.S. Department of Agriculture, Forest Service. 464 p.
8. Dalton, J.; Davidson, J. 1974. Time of establishment of
seedlings of Eucalyptus deglupta at two locations in
Papua New Guinea. Tropical Forestry Res. Note RS-25.
Bulolo, Papua New Guinea: Department of Forestry. 19
p.
9. Davidson, J. 1972. Variation, association, and inherit-
ance of morphological and wood characters in an im-
provement program for Eucalyptus deglupta Blume.
Bulolo, Papua New Guinea: Australian National Uni-
versity. 263 p. Disertacin doctoral.
10. Davidson, J. 1973. Forest tree improvement-kamarere.
Tropical Forestry Res. Note SR.6. Bulolo, Papua New
Guinea: Department of Forests. 13 p.
11. Davidson, J. 1973. Techniques of grafting Eucalyptus
deglupta Blume. Tropical Forestry Res. Note SR.9.
Bulolo, Papua New Guinea: Department of Forests. 9 p.
12. Davidson, John. 1973. A description of Eucalyptus
deglupta. Tropical Forestry Res. Note SR-7. Bulolo,
Papua New Guinea: Forest Research Station, Depart-
ment of Forests. 23 p.
13. Davidson, John. 1973. A technique for rooting seedling
cuttings of Eucalyptus deglupta Blume. Tropical Forestry
Res. Note SR-8. Bulolo, Papua New Guinea: Department
of Forests. 10 p.
14. Division of Utilization. 1970. Properties and uses of
Papua and New Guinea timbers. Boroka, Papua New
Guinea: Forest Products Research Center, Department
of Forests. 44 p.
15. Fenton, R.; Roper, R.E.; Watt, G.R. 1977. Lowland tropi-
cal hardwoods: an annotated bibliography of species with
plantation potential. Wellington, New Zealand: Exter-
nal Aid Division, Ministry of Foreign Affairs. 498 p.
16. Figueroa, J.C.; Whitmore, J.L. 1980. Three species of
Eucalyptus tested in Puerto Rico: five years after
outplanting. Southern Journal of Applied Forestry. 4(4):
169-174.
17. Food and Agriculture Organization. 1979. Eucalyptus
for planting. FAO. Forestry Series 11. Rome, Italy: Food
and Agriculture Organization of the United Nations. 677
p.
LITERATURA CITADA
204
Previamente publicado en ingls: Francis, John K. 1988. Eucalyptus deglupta Blume. Kamarere. SO-ITF-SM-16. New Orleans,
LA: U.S. Department of Agriculture, Forest Service, Southern Forest Experiment Station. 5 p.
18. Goudet, J.P. 1974. Plantacins experimentales despeces
papetieres dans la rgion de San Pedro (1971-1974).
Abidjan, Cote d Ivoire: Centre Tecnique Forestier Tropi-
cal. 84 p.
19. Heather, W.A. 1955. The kamarere forests of New Brit-
ain. Empire Forestry Review. 34(1): 255-278.
20. Hillis, W.E.; Brown, A.G. 1978. Eucalyptus for wood pro-
duction. Melbourne, Australia: Commonwealth Scien-
tific and Industrial Research Organization. 434 p.
21. Lama, G. de la G. 1976. Atlas de eucalipto. Sevilla,
Espaa: Ministerio de Agricultura. 680 p. Vol. 1.
22. Lamb, D.; Lago, D.; Mosimbi, M. 1974. Heart rot in plan-
tation stands of Eucalyptus deglupta Blume growing on
alluvial soils. Tropical Forestry Res. Note SR-20. Bulolo,
Papua New Guinea: Department of Forests. 10 p.
23. Leon-Boado, E. de. 1976. Germination of bagras (Euca-
lyptus deglupta) using different soil media. Philippine
Forestry Journal. 1: 34-37.
24. Luton, J.R.; Roberts, H. 1980. Preliminary assessment
of provenance susceptibility in Eucalyptus deglupta to
Agrilus opulentos attack. Tropical Forestry Res. Note SR-
38. Bulolo, Papua New Guinea: Office of Forests. 5 p.
25. MacFarlane, R.; Jackson, G.V.H.; Marten, K.D. 1976. Die-
back of eucalyptus in the Solomon Islands. Common-
wealth Forestry Review. 55(1): 133-139.
26. National Academy of Science. 1983. Firewood crops:
shrub and tree species for energy production. Washing-
ton, DC: National Academy Press. 92 p. Vol. 2.
27. Navarro, C. 1985. Produccin de biomasa de Eucalyptus
deglupta en una plantacin de ocho aos en Turrialba,
Costa Rica. Silvoenerga 8. Turrialba, Costa Rica:
CATTLE ROCAP. 4 p.
28. Pape, R.1973. New horizons: forestry in Papua New
Guinea. Port Moresby, Papua New Guinea: Ministry of
Forests. 70 p.
29. Penfold, A.R.; Willis, J.J. 1961. The eucalyptus: botany,
cultivation, chemistry, and utilization. London, England:
Leonard Hill [Libros] Limited. 551 p.
30. Pryor, L.D. 1976. The biology of Eucalyptus. Institute of
Biologys Studies in Biology 61. London, England: Ed-
ward Arnold Limited. 82 p.
31. Pryor, L.D.; Johnson, L.A.S. 1971. A classification of the
eucalypts. Canberra, Australia: The Australian National
University. 82 p.
32. Scott, L. 1983. Germinating eucalypt seed. En: Combined
Proceedings, International Plant Propagators Society.
32: 357-362. Auckland, New Zealand: Plant Diseases Di-
vision, DSIR.
33. Tagudar, E.T.; Gianan, N. 1970. Development of a Euca-
lyptus deglupta (Blume) plantation inside the Bislig Bay
Lumber Company, Inc. Occasional Paper 40. Manila,
Philippines: Forest Research Division, Bureau of For-
estry. 5 p.
34. Tomboc, C.C. 1977. Growth, yield and economic rotation
of bagras (Eucalyptus deglupta) pulpwood in the PICOP
plantation (Mindanao) Part 2: Yield prediction method.
Silvatrop Philippines Forestry Research Journal. 2(2):
117-126.
35. Turnbull, J. 1974. Kamarere, Eucalyptus deglupta
Blume. Forest Tree Series 175. Canberra, Australia: De-
partment of Primary Industry, Forestry and Timber
Bureau. 4 p.
36. Ugalde A., L.A. 1980. Rendimiento y aprovechamiento
de dos intensidades de raleos selectivos en Eucalyptus
deglupta Blume en Turrialba, Costa Rica. Turrialba,
Costa Rica: Universidad de Costa Rica. 127 p. Tesis de
M.S.
37. Viado, G.B. 1979. The varicose borer, Agrilus sp. (Co-
leoptera: Buprestidea), of bagras (Eucalyptus deglupta).
Sylvatrop Philippine Forestry Research Journal. 4(1):
45-47.
38. Wadsworth, F.H. 1960. Records of forest plantation
growth in Mexico, the West Indies, and Central and
South America. Caribbean Forester. 21(Supp.): 10, 11,
17.
39. Webb, D.B.; Wood, P.J.; Smith, J.P.; Henman, G.S. 1984.
A guide to species selection for tropical and subtropical
plantations. Tropical Forestry Pap. 15. Oxford, England:
Unit of Tropical Silviculture, Commonwealth Forestry
Institute. 256 p.
40. Webb, L.J. 1977. Ecological considerations and safe-
guards in the modern use of tropical lowland rain for-
ests as a source of pulpwood: example, the Madan Area,
PNG. Indooroopilly, Queensland: Rain Forest Ecology
Section, Commonwealth Scientific and Industrial Orga-
nization. 36 p.
41. White, K.J.; Cameron, K.J. [s.f.]. Silvicultural techniques
in Papua New Guinea forest plantations. Bull. 1. Port
Moresby, Papua New Guinea: Division of Silviculture,
Department of Forests. 99 p.
42. Woessner, R.A.; Lopes, O.M.N. 1981. Growth of Euca-
lyptus deglupta Bl. at Jari on different soils up through
age three. Internal Memo. Jari, Brasil: Jari Florestal. 9
p.
43. Wormsley, J.S.; McAdams, J.B. 1975. The forests and for-
est conditions in the territories of Papua New Guinea.
Bulolo, Papua New Guinea: Department of Forests. 62
p.

También podría gustarte