La psicopata y los diferentes tipos de psicpatas

En la parte de este blog dedicada a la ponerologa, ya introdujimos al psicpata.

En las prximas entradas vamos a desarrollar los diferentes tipos de personalidad

psicoptica de la mano de Robert Hare.
Paul Babiak nos ayudar, a continuacin, a entender uno de las personalidades psicopticas
ms peligrosas: el psicpata organizacional, que es el que prospera en organizaciones
humanas estructuradas y jerarquizadas.
En la entrada anterior de este blog, hemos descrito los diferentes trastornos de la
personalidad segn son clasificados por el DSM-IV.
Desde el punto de vista del DSM-IV, la personalidad psicoptica es una forma compleja de
trastorno del grupo B (patrn permanente e insuperable de violacin de las pautas de
conducta humanas aceptables, narcisismo y comportamiento antisocial) a lo que se aade la
caracterstica esencial que hace al psicpata diferente del resto: la frialdad emocional y la
falta de empata.
Los verdaderos psicpatas, diagnosticados, apenas sobrepasan entre el 1% y el 3% de la
poblacin general.
Pero esto no debe llevarnos a engao: para hacernos una idea de su capacidad de causar
dao, basta observar que su porcentaje entre los reclusos supera el 15-20%, y entre los
criminales ms peligrosos (asesinos, violadores y ladrones), este porcentaje es an mayor.
De este modo, un diagnstico de psicopata es un de los indicios ms fuertes para
predecir un comportamiento delictivo y peligroso en el futuro.
Checkley propuso, por primera vez, una lista exhaustiva con las caractersticas mas
representativas de la personalidad psicoptica y acu el trmino de "mscara de la
normalidad".
Ya en los aos 70, Robert Hare realiz, a partir de su experiencia con reclusos peligrosos en
Vancouver, un intento de sistematizar el diagnstico forense de la psicopata.
Robert Hare propuso evaluar una serie de rasgos de la personalidad entre 0 y 2, segn fuesen
muy prevalentes en un individuo (nota 2) o nada prevalentes (nota 0). Mediante anlisis
factorial estadstico, aisl 20 caractersticas que, cuando eran puntuadas con notas altas,
discriminaban claramente a los psicpatas de los que no lo eran.
Estas caractersticas se encuadran dentro de 4 grandes grupos. Estos puntos son:

Faceta de las relaciones interpersonales:

1. Tienen gran oratoria y encanto. Son simpticos y conquistadores en primera
instancia.
2. Poseen una autoestima exagerada. Se creen mejores que el resto.
3. Mienten patolgicamente. Engaan sobre todo para conseguir beneficios o justificar
sus conductas.
4. Se comportan manipuladoramente. Y, si son lo suficientemente inteligentes, los
dems no notarn estas conductas psicopticas.

Faceta del dominio afectivo:

5. No sienten remordimiento o culpa. Jams se sienten en deuda.
6. Afectivamente son frvolos y superficiales. No conciben emociones, aunque pueden
simularlas llegado el caso.
7. Les falta empata. Son indiferentes. Y hasta pueden manifestar crueldad.
8. Tienen una incapacidad patolgica para asumir su responsabilidad en los hechos.
No aceptan sus errores. Por ello raramente solicitan una asistencia psicolgica, ya que
para ellos el problema siempre lo tienen los otros.

Faceta del estilo de vida:

9. Necesitan constantemente estmulos. Caen con facilidad en el aburrimiento.
10. Les gusta un estilo de vida parasitario.
11. Actan descontroladamente.
12. Carecen de metas realistas a largo plazo. Viven como nmadas, sin direccin.
13. Se comportan impulsivamente. Con recurrentes actos no premeditados. Sumada
una falta de reflexin sobre las consecuencias de sus acciones.
14. Son irresponsables.

Faceta antisocial:
15. Tienden a delinquir durante la juventud.
16. Muestran problemas de conducta desde la niez.
17. Padecieron la revocacin de su libertad condicional.
18. Cuentan con versatilidad para la accin criminal. Tienen predileccin por las estafas
y los delitos que requieran de la manipulacin del otro.

Otras no incluidas en ningn factor ni faceta:

19. Tienden a una vida sexual promiscua. Con varias relaciones breves y mantenidas
simultneamente. Les gusta compartir abiertamente sus proezas sexuales y
conquistas.
20. Acumulan muchos matrimonios de corta duracin. No se comprometen a largo
plazo, por la informalidad con la que se plantean el vnculo.

Una puntuacin por encima de 30 en el test revisado de Hare (PCL-R o Psychopathy Check
List - Revised) se considera una evidencia muy fuerte de comportamiento antisocial,
narcisista, manipulador, y de falta de remordimientos, es decir, de psicopata.
Existe tambin una versin simplificada (PCL-SV) que evala 12 caractersticas, encuadradas
tambin en los 4 grandes grupos:

Relaciones interpersonales
o Superficialidad
o Grandiosidad
o Tendencia al engao

Dominio afectivo
o Falta de remordimiento
o Falta de empata
o Incapaz de asumir las consecuencias de sus actos

Caractersticas del estilo de vida

o Impulsividad
o Falta de objetivos vitales
o Irresponsabilidad

Caractersticas antisociales
o Escaso control de la conducta (que se pone de manifiesto, por ejemplo, al
beber demasiado)
o Comportamiento antisocial en la adolescencia
o Comportamiento antisocial adulto

De nuevo, una puntuacin alta o muy alta (superior a 18) en la mayora de estas caractersticas
es un indicio fuerte de personalidad psicoptica.
Llegados a este punto, hay que hacer dos aclaraciones importantes:

La evaluacin de estas caractersticas debe ser hecha por un profesional

cualificado.
Y dicha evaluacin debe tener en cuenta la globalidad de la persona. Todos
podemos mostrar en algn grado y en algunas circunstancias los comportamientos
anteriores. La caracterstica del psicpata es que muestra fuertemente la mayor
parte de estas caractersticas durante todo el tiempo.

La lista de Hare ha dado origen a abundante bibliografa al respecto, y se han identificado

varios subgrupos de psicpatas.
Prcticamente todos los psicpatas puntan alto en el dominio afectivo, de modo que la
diferencia entre unos y otros tipos de psicpatas se da en aquellos dominios
(interpersonal, estilo de vida y antisocial) en los que puntan menos (es decir, en qu
aspectos de sus vidas son ms "normales").
Podemos hacer cuatro grandes grupos:

El "psicpata perfecto", que es el que punta alto en todos los aspectos del test, es
incapaz de logros a medio o largo plazo, suscita el rechazo inmediato de la mayor
parte de la sociedad y su destino es convertirse en un delincuente solitario, o pasar a
formar parte de un grupo pequeo de delincuentes (lo que Lobaczewski llama una
"organizacin ponerognica primaria").

El "psicpata maquiavlico", que punta ms bajo en relaciones interpersonales, es

el manipulador que sabe conseguir de los dems lo que desea sin importarle las
consecuencias de sus actos. En ciertas circunstancias, puede ser el titiritero (en
ingls "puppetmaster") que mueve los hilos detrs de las bambalinas, en situaciones
nocivas para los dems (lo que ms adelante presentaremos como el "drama
psicoptico").

El "psicpata organizacional", que punta bajo en estilo de vida. Debido a su

capacidad de plantearse objetivos y controlar su impulsividad, es capaz de
presentar ante la sociedad una mscara de normalidad ms eficaz. Ms
inteligente, Quiz por ello es mucho ms peligroso que el resto. Verdadero lobo con
piel de cordero, puede infiltrarse en una organizacin o una sociedad en crisis o que
no disponga de los medios de defensa adecuados y causar estragos en su seno. Es
uno de los principales agentes de lo que Lobaczewski denomina "ponerizacin
secundaria".

El "psicpata narcisista", que punta bajo en caractersticas antisociales, es el

histrinico, que vive centrado en s mismo, necesitado de atencin, de ser el centro

de todo sin hacerse responsable de nada. Puede ser un buen actor y alcanzar
notoriedad pblica.

El psicpata sofisticado y su "modus operandi"

depredador
En la entrada anterior describimos a los cuatro grandes tipos de psicpatas: el psicpata
perfecto, el maquiavlico, el organizacional y el simple narcisista.
Para un psicpata, la sociedad humana se divide de forma muy simple: primero estn ellos, y
luego, a mucha distancia y en un escaln inferior, estn "los dems".
El "modus operandi", es decir, la forma habitual de proceder de estas personas est basada
en la depredacin.
Un psicpata normalmente se cree superior a los dems, con derechos sobre ellos (la
expresin en ingls es "entitlement").
De alguna forma, se creen con "patente de corso" para dar cumplimiento a sus deseos,
pulsiones o impulsos sin hacerse responsable de las consecuencias:
"Patente de corso es un documento entregado por los monarcas de las naciones o los alcaldes
de las ciudades (en su caso las corporaciones municipales) por el cual el propietario de un
navo tena permiso de la autoridad para atacar barcos y poblaciones de naciones
enemigas."
Esta forma de ser predadora y parasitaria slo se detiene ante las amenazas fsicas (prisin,
venganzas, desenmascaramiento y dao fsico en general) pero no ante las apelaciones a la
tica, la moral o la simple reciprocidad, que para ellos carecen en absoluto de sentido.

Los psicpatas ms primitivos caen fcilmente en la delincuencia individual u organizada

y difcilmente engaan a personas con un inteligencia normal.
Otro caso muy diferente ocurre con los ms sofisticados: los maquiavlicos, organizacionales y
narcisistas.
Paul Babiak expone en "Serpientes con trajes", de forma extensa, el proceso en los psicpatas
ms inteligentes siguen para conseguir de sus vctimas lo que quieren.
En primer lugar hay que entender que el psicpata inteligente adopta mltiples mscaras de
normalidad, cada una de ellas adecuada a un contexto.
Ya comentamos en las entradas dedicadas a la ponerologa que una de las habilidades

sobresalientes de los psicpatas es adquirir un cierto conocimiento, aunque sea

"particular" y deforme, de la psicologa de sus vctimas y de sus puntos dbiles, que les
resulta til para obtener de ellas lo que esperan.
Si algo teme un psicpata es ser puesto en evidencia delante de sus vctimas y que la
farsa acabe, y las posibilidades de que esto ocurra se multiplican a medida que se ve
expuesto simultneamente a ms de una de sus vctimas.
Por este motivo, un psicpata se encuentra ms confortable en un encuentro "cara a
cara", de modo que pueda utilizar la mscara adecuada y desplegar todo su encanto o su
poder de persuasin.
Desarrollaremos ms este punto en una entrada posterior, dedicada al "drama psicoptico".
Las fases del ataque psicoptico, segn Paul Babiak, son tres:

Evaluacin de potenciales vctimas ("assessment phase"). Ya sabemos que los

psicpatas tienen un olfato especial para detectar las debilidades y los puntos
calientes de los dems (o "hot spots", que son temas con una gran carga emocional
para una persona). Una viuda solitaria quiz desee la compaa de un hombre ms
joven, un empresario con problemas quiz est tentado de contratar a un "empleado
estrella" que le prometa la solucin a todos sus problemas ...etc. Las pocas de caos
y cambios rpidos, donde la gente ms reacia y peor adaptada sufre
especialmente, o bien las personas que han sufrido graves reveses en sus vidas,
son especialmente provechosas para estos "buscadores de oportunidades"
permanentes.

Manipulacin ("manipulation phase"), donde:

o

En primer lugar, se crea la ficcin psicoptica. El psicpata crea una

mscara, una especie de "segunda piel" postiza, un "personaje social" que se
adapta perfectamente a las necesidades de su vctima. El psicpata intenta
transmitirle un mensaje claro e irresistible: "yo soy la persona que necesitas",
"yo soy la persona en quien puedes confiar", "yo soy el candidato ideal para el
puesto de trabajo que buscas", "yo soy el/la compaero/a perfecto que
anhelabas"...etc. Algunas construcciones (que, en el fondo, son burdas
imposturas) son extremadamente elaboradas y pueden tardar aos en ser
desmontadas y puestas en evidencia.
Una vez la vctima cae en las redes de engao del psicpata, convencida de
la autenticidad de lo que slo es una mscara, es engaada, estafada y, en
general, utilizada sin su conocimiento. El psicpata puede ser incluso
desconsiderado, grosero o violento. La vctima le disculpar. Slo alguien
que, desde fuera, perciba imparcialmente la situacin, se da cuenta de lo
que realmente est ocurriendo. Pero sus esfuerzos para quitar la mscara al
abusador son intiles: la vctima se niega a dar crdito a los comentarios
negativos sobre una persona que considera intachable, recta y honesta. El
psicpata, a su vez, habr hecho las modificaciones necesarias en su
mscara para quitar veracidad a dichos comentarios, al menos, a ojos de su
vctima. De este modo, la fascinacin se mantiene.

Y abandono ("abandonment phase") cuando la vctima ya ha dado al psicpata todo

lo que esperaba de ella, o bien cuando ste descubre otra vctima potencial ms
interesante, el psicpata simplemente desaparece, dejando a la vctima sumida en
el caos, con una mezcla de sentimientos de culpabilidad, vergenza y deseo de
venganza. Muchas vctimas sienten demasiado rubor para confesar que han sido
vctimas de un estafador de este tipo y esto juega a favor del psicpata, que ve
cmo muchas veces sus propias vctimas son su mejor aliado y su mejor
coartada.

El proceso se desarrollar con algunas particularidades, dependiendo del tipo de psicpata

y del grado de dependencia y engao de la(s) vctima(s).
En los casos ms patolgicos, la vctima acaba devastada, con su salud fsica y mental
comprometidas.
Y lo peor es que, quiz, no acabe de enter exactamente qu es lo que le ha ocurrido.
Por supuesto, esto trae sin cuidado al abusador, que probablemente ha olvidado este
episodio y se encuentra ocupado en crear su siguiente ficcin para extraer todo el jugo a
una nueva vctima.

Psicpatas, cmo protegerse de ellos

Despus de describir el "modus operandi" de los psicpatas sofisticados (es decir, de los
psicpatas maquiavlico y organizacional) llegamos a la pregunta lgica:
"Qu podemos hacer para evitar o, al menos, minimizar el riesgo y las consecuencias de caer
en las redes de estas personas sin escrpulos?"
En "Serpientes con trajes", Paul Babiak y Robert Hare nos dan una extensa lista de consejos
y buenas prcticas. Aqu haremos un breve resumen de ellas y aadiremos algunas ms.

En primer lugar, la mejor forma de no correr un riesgo es evitarlo. Si evitamos o

reducimos al mnimo indispensable el contacto con las personas que den pistas
claras de puntuar alto en los test de psicopata de Hare, tanto el completo, PCL-R,
como el simplificado, PCL-S, estaremos haciendo una labor preventiva fundamental.

No obstante, debemos tener en cuenta que la psicopata es un diagnstico realizado

por un profesional y, por tanto, debemos evitar usar este calificativo de forma
indiscriminada. Podemos hablar, en su lugar, de "personas difciles", "manipuladoras",
"narcisistas", "sin escrpulos" ...etc. aunque internamente tengamos el
convencimiento de estar ante un psicpata genuino.

No obstante, a veces resulta imprescindible convivir o, al menos, dividir espacio con una
de estas personas. En estos casos, las recomendaciones van por el lado de mitigar el riesgo
y las consecuencias de su actividad nociva:

En primer lugar, debemos entender que la mentalidad de un psicpata es

depredadora, y que una de sus actividades consiste en la bsqueda de nuevas
vctimas. Si tenemos el potencial de ser de utilidad para una personalidad
psicoptica, debemos ser los primeros en asumirlo y prepararnos para repeler sus
ataques. Ya comentamos que quienes tienen cotas de poder formal o informal,
capacidad de influencia sobre los dems o bien acceso directo a los centros de
poder son blancos preferentes de los ataques de psicpatas sin escrpulos. Por
tanto, si estamos en alguna de estas posiciones, podemos esperar que estas
personas se sientan atradas hacia nosotros de la misma forma que los osos se
sienten atrados hacia la miel.

Debemos ser tambin conscientes de nuestras debilidades y nuestros "puntos

calientes" emocionales. Igual que una brecha en un muro atrae al enemigo, nuestros
miedos, fobias, debilidades de carcter, carencias y disonancias cognitivas son
verdaderas "minas del tesoro" donde un psicpata puede intentar hacer fortuna y
manipularnos. Una de las tcticas mas habituales es lo que se conoce como "fraude de
afinidad" ("affinity fraud" en ingls), al que dedicaremos una entrada de este blog. En
resumen, aplicar el aforismo griego "concete a ti mismo". La vctima ms fcil para
un psicpata es un neurtico.

Debemos mejorar las habilidades de comunicacin y la capacidad de expresarnos

asertivamente (sin pasividad pero sin agresividad), sobre todo en pblico. Ya
hemos comentado cmo una de las tcticas del psicpata es aislar a sus vctimas del
entorno y ponerlo en contra de ellas. Aprendamos a reconocer a tiempo las primeras
seales de que nos estamos convirtiendo en un chivo expiatorio, en una "patsy".

Complementario a esto, mantengamos un contacto fluido y peridico con las

personas importantes de nuestro entorno, quienes pueden tomar decisiones que
nos afectan o informar a otros sobre lo que decimos y hacemos. De esta forma,
podremos desmentir los rumores a tiempo.

Tampoco debemos dar pbulo a rumores sin fundamento, por ms atractivos y

verosmiles que parezcan, ya que podemos estar colaborando involuntariamente con
la actividad de personas sin escrpulos. Los rumores son el veneno de las
organizaciones.

Si ocupamos una posicin de poder o de influencia, debemos sistematizar las vas de

comunicacin aceptables y vlidas, de modo que los destinatarios de nuestros
mensajes sepan reconocerlos y distinguirlos de las falsificaciones. Evitar la
desinformacin intencional.

Si nos vemos obligados a trabajar o a convivir habitualmente con alguien

sospechoso de ser un psicpata, debemos extremar las precauciones y tomar el
hbito de reunir evidencias de nuestra actividad, nuestras comunicaciones y
conservar una copia personal en lugar seguro (con seguridad fsica, es decir, una
llave, y lgica, es decir, una contrasea), por si hiciese falta desmentir alguna
maquinacin o tergiversacin contra nosotros en el futuro. Conviene que los contactos
con esta persona se realicen, siempre que sea posible, en presencia de testigos
de confianza y pedir que las comunicaciones importantes (instrucciones, rdenes,
informes) se hagan por un canal formal, escrito (y guardar, por supuesto, una copia
de ellas).

Por supuesto, debemos aprender sobre la personalidad psicoptica, para

reconocerla a tiempo y conocer su modo de funcionar.

Evitar caer en la tentacin de involucrarse emocionalmente con un psicpata. Por

mas atractiva y seductora que parezca, en principio, su mscara, tenemos que tener
presente en todo momento que se trata slo de eso: una mscara hecha por
inters.

Si somos vctimas de un engao, debemos vencer los sentimientos de culpa,

fracaso, vergenza e inutilidad y denunciarlo.

Y, en el aspecto del orden pblico:

Las condenas judiciales tienen que ser pblicas y publicitadas en todos sus
detalles. Un psicpata teme, sobre todo, ser puesto en evidencia delante de sus
vctimas y de la sociedad en general, pues en ese preciso momento la ficcin
desaparece y su verdadera naturaleza queda expuesta ante los dems.

No pienses en un elefante!
Ya hemos comentado que el lenguaje es una metfora de la realidad, y que, al mismo tiempo,
es una de las armas de engao ms poderosas.
George Lakoff (Berkeley, 1941) es un investigador en lingstica cognitiva. Su enfoque hacia
el lenguaje humano (el lenguaje natural) y el proceso de comunicacin parte de la idea que
toda comunicacin entre seres humanos se realiza a travs de metforas.

Esto no es un elefante:

Es una metfora de un elefante.

Las metfora, ms all de ser un aspecto formal del lenguaje, nos permiten estructurar el
pensamiento y crear conceptos nuevos a partir de metforas ya existentes.
La esencia de una metfora es entender y experimentar un tipo de cosa en trminos de otra
Sin un lenguaje, es muy difcil, por no decir imposible, pensar y expresarse.
"Lo que no se puede expresar, no se puede pensar"
En su ensayo sobre Metforas de la vida cotidiana, Lakoff presenta una buena coleccin de
ejemplos de esto:

La nocin de tiempo, como ya vimos, es posterior y ms abstracta que la de espacio.

Por eso, el tiempo es estructurado con metforas propias del espacio: hablamos de
pasado como algo que est detrs y de futuro como algo que est delante.

Una discusin es una guerra. Las discusiones se vencen, los argumentos se

destruyen, las crticas dan en el blanco y se usa una estrategia.

El tiempo es dinero, se pierde el tiempo, se gasta, se dedica o se invierte en algo,

se dispone o no de tiempo suficiente para algo, se vive de prestado y se agradece el
tiempo dedicado.

La felicidad es arriba y la tristeza, abajo, nos sentimos a tope o tenemos un bajn,

caemos en la depresin o subimos a las nubes, la moral est alta o cae por los
suelos.

El poder y el control son arriba y el sometimiento, es abajo. Se tiene poder sobre

algo o alguien, un subordinado est debajo de un jefe o responsable, las cosas estn
bajo control y se asciende o se cae del poder.

Lo virtuoso es arriba y lo vicioso abajo. Caemos en el vicio y nos levantamos. En

el extremo, el cielo est arriba y el infierno, abajo.

La mente es una mquina, funciona a tope de revoluciones o est lenta, a la gente le

falta un tornillo o est un poco oxidada.

Y las cosas se antropomorfizan, es decir, adquieren cualidades humanas: los

hechos hablan por s mismos, las enfermedades nos alcanzan, la realidad estafa, el
tiempo premia y castiga, la religin permite y prohibe y la economa sufre o se
levanta.

Para Lakoff, de forma totalmente lgica, una discusin es una guerra de estructuras, una
guerra de marcos de referencia, de metforas.
Quien impone su marco, gana toda la discusin, pues todas las conclusiones que quiere
establecer como verdad se siguen automticamente de su marco de referencia.
Y, como en las guerras, quien golpea primero, golpea dos veces. Si alguien nos dice, como
Lakoff en su libro No pienses en un elefante no podemos evitar pensar justamente en un
elefante, porque para entender la oracin, nuestro cerebro activa, precisamente en primer
lugar, el concepto de elefante y con l toda su estructura metafrica.

Hombres de paja y testaferros

El poder se ejerce, normalmente, a travs de terceros.
Hombres de paja suelen ser usados como blancos de las iras populares, mientras que
testaferros (personas que emulan el papel social de un mandante, a quien en el fondo
representan) y agentes a sueldo ejecutan, cual muecos teledirigidos, las instrucciones que
reciben de quien les ha puesto en el lugar que ocupan.
La versin empresarial de los testaferros son las sociedades instrumentales, que se crean
para ejecutar ciertas actividades de modo que no puedan ser directamente asociadas a la
organizacin matriz.
Esto se conoce genricamente como "poder distante".

La historia de Thomas Beckett ofrece un ejemplo clsico de testaferro (en este caso, fallido).
Enrique II de Inglaterra deseaba ser el soberano absoluto, tanto de su reino como de la

Iglesia local. Quera eliminar, para ello, los privilegios del clero y ponerlo bajo su autoridad.
Para conseguirlo, utiliz a su amigo, un joven Thomas Beckett, como pen. Impuso a Beckett
como arzobispo de Canterbury.
Beckett se haba mostrado, hasta la fecha, como un fiel servidor suyo, y Enrique esperaba, a
cambio de su nombramiento, una reciprocidad en forma de favores e influencia, pero se
encontr justo todo lo contrario.
Beckett pas a defender al Papa, Alejandro III, en todos los asuntos. Esto enfureci
sobremanera a Enrique II, que finalmente encarg su asesinato.
La aparicin de los medios de comunicacin de masas, los servicios de inteligencia y las
grandes bases de datos han provocado cambios sustanciales en la forma en que los
delincuentes actan.
Ya no se pueden exponer de forma tan directa que puedan ser relacionados con actividades
sospechosas.
Al igual que en el ejercicio del poder, quien desea hacer mal, puede decidir hacerlo a travs de
terceros. De esta forma, se arriesga menos y se mantiene, al menos en apariencia, al margen
de todo.
Una de las cosas que hace el crimen organizado es tratar de sabotear las instituciones
encargadas de mantenerlo a raya: polica, sistema judicial, auditores, interventores, fiscales,
inspectores ...
Para ello, se infiltra en esas estructuras y trata de colocar a sus peones: agentes que
sabotean el funcionamiento y de camino les dan informacin privilegiada sobre la actividad
de estas instituciones.
Cuando estos agentes saboteadores o testaferros llegan a puestos de responsabilidad, el
dao causado es enorme: las instituciones se pervierten, se vuelven inoperantes o incluso
actan facilitando la actividad ilegal.

El mal en los medios de comunicacin

Una cosa es la realidad y otra la verdad.
La realidad es emprica, verificable, objetiva, dura, implacable, indiferente ... y muy esquiva!
La verdad es lo que un grupo social o cultural considera correcto, bueno, adecuado,
reconfortante, tranquilizador ... es un convenio. Una versin de la realidad para consumo de
un grupo de personas.
En su novela, 1984, Orwell describe un hipottico futuro estado totalitario, dirigido por 4
ministerios:
1.
2.
3.
4.

El ministerio de la paz, encargado de organizar la guerra.

El ministerio de la abundancia, encargado de provocar y gestionar la escasez.
El ministerio del amor, encargado de administrar la tortura y la represin.
Y el ministerio de la verdad, encargado de mantener una versin "oficial" de la
verdad, una verdad que se cambia tantas veces como convenga al partido.

En este post, hablaremos del ministerio de la verdad, es decir, de los (o "la mayora de los")
medios de comunicacin.
Los medios de comunicacin, y especialmente la TV con su aparente inmediatez, parecen la
realidad, pero no lo son.

Son ms parecidos a una obra de teatro, preparada y ensayada hasta en los mnimos detalles
y donde cada actor conoce perfectamente su papel.
Jugar con las palabras, jugar con la eleccin de los temas, el orden que se presentan, los
tiempos dedicados a cada uno, adoptar el enfoque ms conveniente (siempre hay que mirar las
cosas desde un punto de vista) ... son estrategias fundamentales para transmitir el mensaje
que se desea transmitir.
Muchos son, en realidad, los medios de propaganda de sus dueos, es decir, del poder.
Si no ests prevenido ante los Medios de Comunicacin, te harn amar al opresor y odiar al
oprimido (Malcolm X)

No subestimemos la capacidad de la TV y los dems medios de comunicacin de masas para

crear una realidad virtual, paralela, una hiperrealidad ... pero con efectos muy "reales".
A la hora de aproximarse a los medios de comunicacin es necesario distinguir la opinin de
la informacin.
Algo que, en general, no es fcil.
La informacin es objetiva y contrastable mediante testigos y fuentes diversificadas:
"La temperatura en el centro de la ciudad hoy es de 30 grados"
La opinin es algo subjetivo y que, por supuesto, no todo el mundo tiene por qu compartir:
"Hoy hace mucho calor en el centro de la ciudad"
Noam Chomsky enumera 10 estrategias de los medios de comunicacin ("mass media") para
manipular al pblico:
1. Distraccin, que consiste en desviar la atencin del pblico de los problemas
importantes, mediante la tcnica del diluvio de informaciones insignificantes, cultivar
temas sin relevancia, mantenerlo ocupado ... en cosas intrascendentes.
2. Crear problemas para ofrecer soluciones (tcnica del problema-reaccin-solucin).
Para elo, se crea o se magnifica un problema para que el propio pblico reaccione y

3.
4.

5.

6.

7.

8.
9.
10.

demande la solucin propuesta (por ejemplo, se magnifica la sensacin de inseguridad

para que la gente pida ms medidas de seguridad).
Principio de gradualidad: para que se pueda aplicar una medida inaceptable, se hace
poco a poco, a cuenta gotas, en un proceso lento pero imparable.
Diferir, presentar una medida como dolorosa y necesaria, para aplicarla en el futuro.
La gente tiende a pensar que ese sacrificio se podr evitar y, cuando toque aplicar
esas medidas, ya se habr mentalizado para ello.
Dirigirse al pblico como a nios pequeos. La mayor parte de la publicidad usa
modelos, situaciones, incluso entonacin que son infantilizantes. Si tratas a la gente
como nios, los acostumbras a comportarse y responder como nios: sin sentido
crtico.
Enfatizar el aspecto emocional por encima del racional, para cortocircuitarlo y evitar
el anlisis fro de los hechos. De este modo, adems, se obtiene acceso al
inconsciente para implantar deseos, miedos e inducir los comportamientos deseados.
Mantener a la gente en la ignorancia y la mediocridad, para que no entiendan los
mtodos que se usan contra ellos, especialmente a las clases inferiores, de modo que
el salto de conocimiento necesario para entender los medios que se usan contra ellos
sea inalcanzable.
Estimular a la gente a ser condescendiente con la mediocridad. Estimularla,
incentivarla y ponerla de moda.
Estimular la culpabilidad. El individuo acaba pensando que es el nico responsable
de su situacin, y as se auto-invalida, se deprime y no acta.
Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen. Los avances
recientes el psicologa, sociologa, biologa ...etc. han creado una brecha creciente
entre los conocimientos de la gente normal y los de las lites. El sistema conoce mejor
al individuo comn de lo que el propio individuo se conoce a s mismo. El sistema los
controla mejor que ellos mismos.

Humo y espejos
En ingls, "smoke and mirrors", es una expresin que hace referencia a explicaciones poco
claras, engaosas, insubstanciales o claramente fraudulentas.
Proviene de una metfora que las compara con la actuacin de un mago (en las actuaciones
de los ilusionistas suele haber humo y espejos).

En general, hablamos de situaciones poco claras, donde se quiere dar la impresin de algo
que realmente no existe, o que existe pero es totalmente diferente a la imagen que se
desea proyectar.
Es como un juego de sombras chinescas:
"Sabemos que hay truco, aunque no sepamos cul es"

El discurso oficial, sobre todo si versa sobre temas espinosos, delicados o que requieren
discrecin, suele ser un ejemplo perfecto de humo y espejos. Si hay que dar explicaciones,
se dan (normalmente, a la fuerza, presionados por las circunstancias) pero de forma que tales
explicaciones dejan an ms confuso a quien las escucha !
Suelen usarse a propsito frases que son calculadamente ambiguas. As:
1. cada uno podr entender lo que quiera entender
2. no habr dos personas que entiendan lo mismo
3. y casi nadie entender correctamente de qu va la cosa.

Muchas personas, y hasta instituciones, tienen ese comportamiento tpico: defender al mismo
tiempo una cosa y la contraria segn convenga, dnde y cundo convenga.
"Manipulando los conceptos, se manipulan los cerebros"
Es lo que Bauman llama "identidad lquida".
"En la modernidad lquida, las identidades son semejantes a una costra volcnica que se
endurece, vuelve a fundirse y cambia constantemente de forma."
Bauman plantea que las identidades modernas parecen estables desde un punto de vista
externo, pero que al ser miradas por el propio sujeto, aparecen frgiles y desgarradas.
Nuestro universo poltico est lleno de falsas ideologas!
Como parte del discurso anual ante la Asociacin de la Prensa que el Presidente de los EE.UU
J.F. Kennedy ofreci en ao 1961 cabra destacar este prrafo:
Sin debate, sin crtica, ninguna Administracin y ningn pas pueden triunfar y ninguna
Repblica puede sobrevivir. Por eso, el legislador ateniense Soln decret como delito que
cualquier ciudadano eludiese su responsabilidad de aclarar la controversia. Y es por eso que
nuestra prensa fue protegida por la Primera Enmienda, el nico negocio en Amrica
especficamente protegido por la Constitucin; no principalmente para divertir y entretener, no
para enfatizar lo trivial y lo sentimental, no simplemente dar al pblico lo que quiere , sino
para informar, para despertar, para reflexionar, para afirmar nuestros peligros y nuestras
oportunidades, para indicar nuestras crisis y nuestras opciones, para liderar, moldear, educar e
incluso a veces crear un estado de indignacin en la opinin pblica
En su obra "La opinin pblica", Walter Lippmann critica la tendencia de la opinin
mayoritaria a guiarse por estereotipos (algo que es muy bien aprovechado por los
manipuladores profesionales) y propone como alternativa formar la opinin pblica a travs
de una crtica incisiva al sistema democrtico actual.
Porque es realmente tan democrtico nuestro sistema?
O es tambin un juego de humo y espejos, donde unos poderes que estn a la sombra
hacen y deshacen mientras la gente piensa que son los polticos votados por ellos quienes
deciden?