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La liturgia cotidiana

Domingo 19 de Octubre de 2014


29 domingo durante el ao
Verde

(Santos Juan Brbeuf e Isaac Jogues, presbteros y compaeros mrtires.


San Pablo de la Cruz, presbtero).
Da de la madre.
La Sociedad de San Pablo editora de La Liturgia Cotidiana celebra hoy al
beato Timoteo Giaccardo, presbtero, primer sacerdote paulino (1896-1948).
El beato Timoteo Giaccardo fue un hombre de Dios consagrado a la difusin del evangelio con los medios de
comunicacin social, inscrito como publicista, primer sacerdote de la Sociedad de San Pablo. Fue fiel colaborador del
beato Santiago Alberione, fundador de la Familia Paulina, de l dijo que fue como el corazn y el alma de la familia. Fue
el maestro que a todos preceda, a todos aconsejaba, y todo lo construa con su piedad iluminada y fervorosa. Su vida es
un ejemplo actual de cmo es posible conciliar la ms profunda vida espiritual con la ms intensa vida apostlica.

Antfona de entrada

Sal 16, 6. 8

Yo te invoco, Dios mo, porque t me respondes: inclina t odo hacia m y escucha mis palabras. Protgeme como a la
pupila de tus ojos; escndeme a la sombra de tus alas.

Oracin colecta

Dios todopoderoso y eterno, concdenos permanecer fieles a tu santa voluntad y servirte con un corazn sincero.
Por nuestro Seor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espritu Santo, y es Dios, por los siglos
de los siglos.

1 lectura

Is 45, 1. 4-6

Lectura del libro de Isaas.

As habla el Seor a su ungido, a Ciro, a quien tom de la mano derecha, para someter ante l a las naciones y
desarmar a los reyes, para abrir ante l las puertas de las ciudades, de manera que no puedan cerrarse. Por amor a
Jacob, mi servidor, y a Israel, mi elegido, yo te llam por tu nombre, te di un ttulo insigne, sin que t me conocieras.
Yo soy el Seor, y no hay otro, no hay ningn Dios fuera de m. Yo te hice empuar las armas, sin que t me
conocieras, para que se conozca, desde el Oriente y el Occidente, que no hay nada fuera de m. Yo soy el Seor, y no
hay otro.
Palabra de Dios.

Comentario
En un contexto politesta, Dios afirma por boca del profeta: Yo soy el Seor. Este Dios nico reclama un amor total.
Toda nuestra vida es para l, todas nuestras acciones son para l. En Dios se ana lo disperso de nuestra vida. Por l
tienen sentido hasta las mnimas acciones de nuestro devenir cotidiano.

Salmo 95, 1. 3-5. 7-10ac

R. Aclamen la gloria y el poder del Seor.


Canten al Seor un canto nuevo, cante al Seor toda la tierra; anuncien su gloria entre las naciones, y sus maravillas

entre los pueblos. R.


Porque el Seor es grande y muy digno de alabanza, ms temible que todos los dioses. Los dioses de los pueblos no
son ms que apariencia, pero el Seor hizo el cielo. R.
Aclamen al Seor, familias de los pueblos, aclamen la gloria y el poder del Seor; aclamen la gloria del nombre del
Seor. Entren en sus atrios trayendo una ofrenda. R.
Adoren al Seor al manifestarse su santidad: Que toda la tierra tiemble ante l! Digan entre las naciones: El Seor
reina! El Seor juzgar a los pueblos con rectitud. R.

2 lectura

1Tes 1, 1-5b

Lectura de la primera carta del apstol san Pablo a los cristianos de Tesalnica.
Pablo, Silvano y Timoteo saludan a la Iglesia de Tesalnica, que est unida a Dios Padre y al Seor Jesucristo. Llegue
a ustedes la gracia y la paz. Siempre damos gracias a Dios por todos ustedes, cuando los recordamos en nuestras
oraciones, y sin cesar tenemos presente delante de Dios, nuestro Padre, cmo ustedes han manifestado su fe con
obras, su amor con fatigas y su esperanza en nuestro Seor Jesucristo con una firme constancia. Sabemos,
hermanos amados por Dios, que ustedes han sido elegidos. Porque la Buena Noticia que les hemos anunciado lleg
hasta ustedes, no solamente con palabras, sino acompaada de poder, de la accin del Espritu Santo y de toda
clase de dones.
Palabra de Dios.

Comentario
San Pablo conoce bien a esta comunidad, por eso puede escribirles con toda confianza y dar gracias a Dios por los
dones con que la ha enriquecido. Tambin nosotros pongamos nuestra mirada en las personas que nos rodean.
Seguramente encontraremos muchos de quienes podremos decir que ponen en obras su fe, hacen activa su caridad y
mantienen su vida en la esperanza. Demos gracias a Dios porque el testimonio de estos hermanos y hermanas sostiene
nuestra vida.

Aleluya

Flp 2, 15-16

Aleluya. Ustedes brillan como rayos de luz en el mundo, mostrando la Palabra de Vida. Aleluya.

Evangelio

Mt 22, 15-21

Evangelio de nuestro Seor Jesucristo segn san Mateo.


Los fariseos se reunieron para sorprender a Jess en alguna de sus afirmaciones. Y le enviaron a varios discpulos con
unos herodianos, para decirle: Maestro, sabemos que eres sincero y que enseas con toda fidelidad el camino de
Dios, sin tener en cuenta la condicin de las personas, porque t no te fijas en la categora de nadie. Dinos qu te
parece: Est permitido pagar el impuesto al Csar o no?. Pero Jess, conociendo su malicia, les dijo: Hipcritas,
por qu me tienden una trampa? Mustrenme la moneda con que pagan el impuesto. Ellos le presentaron un
denario. Y l les pregunt:De quin es esta figura y esta inscripcin?. Le respondieron: Del Csar. Jess les dijo:
Den al Csar lo que es del Csar, y a Dios, lo que es de Dios.
Palabra del Seor.

Comentario
Los emperadores buscaban ser venerados como dioses. Su imagen se grababa sobre el dinero y era una forma de que
todos sus sbditos los tuvieran presentes. Pero por encima de ese seoro que los emperadores quieren imponer, est el
seoro de Dios. Somos de Dios, nuestra vida le pertenece, est entregada a l y no a un poder temporal.

Oracin sobre las ofrendas

Te ofrecemos, Seor, estos dones, con un corazn libre y generoso, para que tu gracia nos purifique por estos
misterios que ahora celebramos. Por Jesucristo, nuestro Seor.

Antfona de comunin

cf. Sal 32, 18-19

Los ojos del Seor estn fijos sobre sus fieles, sobre los que esperan en su misericordia, para librar sus vidas de la
muerte y sustentarlos en el tiempo de indigencia.

O bien:

Mc 10, 45

El Hijo del hombre vino para dar su vida en rescate por una multitud.

Oracin despus de la comunin

Concdenos Padre, que la participacin en esta eucarista nos ayude para aprovechar los bienes temporales y
alcanzar los bienes eternos. Por Jesucristo, nuestro Seor.
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