La Victoria de Las 300 Familias
La Victoria de Las 300 Familias
La Victoria de Las 300 Familias
espaas
La victoria de las
300 familias
por Eduardo Luque
obre los sentimientos, los sueos, las ilusiones, nada que objetar. Cada uno tiene los que tiene, y punto. Y es
muy libre de perseguirlos. Lo malo es que, a veces, los forjadores de sueos ajenos lo que en realidad hacen
es encubrir con ellos sus propias apetencias, y para ello manipulan, deforman, mienten, envueltos en banderas.
acabando su discurso con un Viva Espaa! Mientras, nacionalistas y obreros de izquierdas moran o eran encarcelados.
Posteriormente, Gil Robles afirmara en las Cortes espaolas
que l, Gil Robles, propici el levantamiento de Companys; si
eso fuera cierto, Dencs habra trabajado para la derecha fascista espaola. En plena Guerra Civil sigui teniendo fluidas
relaciones con la Italia fascista de Mussolini, que le consideraba como un fascista cataln2. Gerald Brenan, en El Laberinto
espaol, le atribuye connivencias muy importantes con la
CEDA y el nazismo alemn. Acab organizando un partido denominado Nosaltres sols, con claras influencias fascistas, que
adopt por bandera la actual estelada nacionalista.
Algunas de esas trescientas familias no dudaron en financiar
al propio general Franco. En plena Guerra Civil, voluntarios catalanes organizaron el Tercio de Nuestra Seora de Montserrat, que combati contra la Repblica y la Generalitat de Catalunya en Belchite o en el Ebro. Apellidos tan catalanes como
Ciurana, Amiel o Sopena fueron condecorados con la Laureada
de San Fernando3. Mientras, miles de catalanes de la columna
Llibertat combatan contra Franco en la defensa de la Ciudad
Universitaria de Madrid. Por ello, cuando el establishment meditico y algn renombrado poltico hablan de la Guerra Civil
espaola como una guerra de Espaa contra Catalua, no slo
faltan a la verdad, sino que provocan autntica repugnancia.
Este intento de reescribir la historia y adaptarla a la visin par-
espaas
Y ahora?
Las trescientas familias y sus representantes polticos siempre estuvieron cerca del poder o directamente en l, tanto en
Madrid como en Barcelona. La democracia no modific esta
realidad: Pujol, Artur Mas, no son sino representantes de ese
poder tanto como lo fueron, en mayor o menor medida, Montilla o Maragall. Incluso esa clase adinerada que presume de
races catalanas nunca tuvo ningn reparo, bien al contrario,
en ser ennoblecida por los Reyes de Espaa, como lo fue, sin ir
Una eficaz cortina de humo
ms lejos, el Conde de Gell, con el marquesado de Comillas,
El estallido independentista es hijo fundamentalmente de la
que tambin recal en su familia, o el Conde de God, nomcrisis econmica, de unas clases medias empobrecidas, temebrado en 2008 Grande de Espaa por Juan Carlos I.
rosas, que pretenden soluciones cuasi mgicas en una vuelta a
La llegada del tripartito fue un momento de esperanza en
un irracionalismo romntico de buenos patriotas catalanes
un cambio que se haca imprescindible. Se crey que represencontra malos espaoles, de blanco y negro. En 2012, los recortara un revulsivo. El balance en realidad fue tan pobre para las
tes brutales llevados a cabo por Artur Mas provocan una enorclases populares como lo fue la accin conservadora de CiU.
me desafeccin hacia las polticas de CiU. La solucin para el
Tanto es as que la accin del ejecutivo de Maragall y Montilla
gobierno conservador es lanzar la pelota hacia delante, e inicia
acab perdindose en un laberinto, que bien pudiera parafrauna campaa de exaltacin nacionalista. El objetivo era la vicsear a Marcel Proust5 en la bsqueda de una entidad nacional
toria electoral en el mes de noviembre del 2012, saldada con un
en abstracto. La situacin actual se gesta precisamente en ese
enorme fracaso. Ahorquillado por la presin de ERC, incapaz
momento. La votacin del nuevo
de articular ninguna alternativa
Estatut de Catalunya el 18 de ju ms all de profundizar los recornio del 2006 fue el clmax de la
tes, con una poblacin que se maEl debate sobre independencia s o no oculaccin del ejecutivo de izquiernifiesta da s da tambin contra
ta todos los dems debates.
das. La sentencia del Tribunal
las polticas del gobierno, Mas
Constitucional el 27 de junio del
pone en marcha una cortina de
2010 anulando varios artculos
humo en la exaltacin nacionalista
del Estatut, por cierto votado por
del Espaa nos roba. El tratamenos de la mitad de la poblaTV3 se ha convertido en un modelo de mani- miento que se est dando a la Guecin catalana, insufl nuevos aipulacin informativa tal, que incluso suscita rra de Sucesin de 1714 es reflejo
res al victimismo. El Maragallis de este dualismo simplista: se basa
comentarios poco favorables de la prensa
mo, con la complacencia de ERC
en una enorme manipulacin hisextranjera.
y ICV-EUiA, lo haba conseguido,
trica que ha contado con la inestiel cambio de modelo econmico
mable ayudada de sectores intelec-
espaas
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Y la izquierda?
Mientras, la izquierda, que ha bra de funcionar al menos como
contrapeso, ni est ni se la espera.
La confusin es la norma, la divisin la regla. Las llamadas a la unidad son la condicin para crear
ms y ms chiringuitos. Hoy hasta
el ms tonto hace relojes. Nuevos
grupos de izquierda aparecen en
el escenario, apoyados, curiosamente, por los medios afines a la
derecha. Disputan el espacio electoral alternativo amparndose en
la visibilidad televisiva de una o dos figuras relevantes. Su discurso es parecido al de todos. Qu aportan de nuevo?
Confusin y divisin. Otros pequeos grupos, que se pretendan diferentes y alternativos, no se plantean la cuestin nacional sencillamente porque divide a la propia organizacin. Grupos minoritarios anticapitalistas hablan de autodeterminacin
basndose, supuestamente, en textos clsicos. Olvidan que el
mismo Marx, o Rosa Luxemburg, no apoyaban todas las formas
de autodeterminacin per se, sino aquellas que representaban avances para las clases populares.
Lo fundamental, la respuesta a la cuestin central (qu catalanismo queremos o a qu Catalunya
aspiramos?) no se aborda, se oculta.
Mientras, las fuerzas de la derecha fijan
su hoja de ruta en un camino que no
conduce a ninguna parte. Ni Artur Mas
ni Oriol Junqueras, polticos mediocres
sin visin de pas pero al frente del proceso, saben realmente adnde vamos.
El modelo que se dibuja es una Catalunya independiente neoliberal, con
recortes, bajos salarios, inscrita en el euro, dependiente de la OTAN con bases militares en Barcelona
y Tarragona. Seremos independientes de Espaa pero dependientes de la OTAN y de la Europa de la Troika. Esta es la propuesta dominante.
No es cierto que el soberanismo gire hacia la izquierda, bien
al contrario. Nace del miedo y de la desesperanza. Y no plantea
respuestas sociales al neoliberalismo rampante, sino que pretende una solucin individual de pas (dinero para Catalunya
porque Espaa nos roba), no pretende procesos de integracin
social, sino que se asienta en la exclusin de los dems (ya
hemos odo a algn prcer econmico pedir la expulsin de los
inmigrantes para reducir la tasa de
paro, aunque el conferenciante se
Bajo el paraguas de la bandera, el conflicto cuid mucho de definir quin era
para l un inmigrante).
entre los poseedores y los desposedos queda
El movimiento social que apoya
subsumido y desdibujado.
la independencia, cada da ms
transversal, tiene una base muy
conservadora. Est dominado por
la derecha, que ha visto en esta au Mientras, la izquierda, que habra de funcio- toproclamacin nacionalista la
frmula para distraer la atencin
nar al menos como contrapeso, ni est ni se
sobre hechos brutales que podran
la espera. La confusin es la norma, la divi- poner en cuestin su forma de dosin la regla.
minacin: el Sndic de Greuges6
denunciaba hace unos meses que
espaas