15 M.Seco (Cap. 9, 13)
15 M.Seco (Cap. 9, 13)
15 M.Seco (Cap. 9, 13)
9. Las proposiciones
9.1. La proposicin adjetiva.
9.1.1. Proposiciones. Proposicin adjetiva
En las tres oraciones que siguen viene a decirse una misma cosa:
1. Un obrero parado pasa hambre;
2. Un obrero sin trabajo pasa hambre;
3. Un obrero que no tiene trabajo pasa hambre.
Las tres oraciones tienen igual predicado: pasa hambre. En cuanto a los sujetos, el ncleo y su primer
adjunto son tambin comunes: un obrero. Slo hay diferencia en el segundo acompaante de ese ncleo: en la
oracin nmero 1 se trata de un adjetivo, parado. en la oracin nmero 2 es sin trabajo, un sustantivo con
preposicin, el cual, precisamente por llevar preposicin, es capaz de funcionar, y funciona, como adjetivo (caso
corriente de traslacin que ya estudiamos en el captulo 7); y, por ltimo, en la oracin nmero 3, hay un
conjunto de palabras, que no tiene trabajo, conjunto que, igual que los acompaantes vistos en las oraciones
anteriores, funciona como adjetivo.
Cmo est constituido este conjunto de palabras que funciona como adjetivo? Vemos que est formado por
un verbo, tiene, acompaado de dos complementos: uno, adverbial (no); el otro, directo (trabajo); y que todo el
grupo se une al nombre obrero ncleo del sujeto por medio de la palabra que. Observemos que no tiene
trabajo ofrece, con su verbo y sus complementos, la forma de un predicado. Su sujeto pensado sera el mismo
obrero de quien decimos que pasa hambre; pero su sujeto real es la palabra que, con la cual hacemos
referencia al citado obrero. Tememos, pues, una oracin constituida por un sujeto (la palabra que) y un predicado
(no tiene trabajo). En conjunto es, ms o menos, como si dijramos: El obrero (este obrero no tiene trabajo)
pasa hambre. Pero esa oracin que no tiene trabajo no funciona como oracin, sino como adjetivo dentro de
otra oracin; y el factor que realiza esta traslacin es la palabra de enlace, que, llamada relativo.
Las oraciones que no funcionan como tales oraciones, sino que slo desempean una funcin (de adjetivo u
otra) dentro de otra oracin, se llaman proposiciones1.
9.1.2. Palabra de enlace: pronombre relativo.
En las proposiciones adjetivas, la palabra de enlace no siempre es el escueto relativo que que hemos visto en
el ejemplo comentado. Puede ir el relativo precedido de una preposicin, y en este caso llevar tambin artculo:
1.
2.
3.
4.
5.
Tradicionalmente reciben el nombre de oraciones subordinadas; pero, puesto que no funcionan como oraciones, no
parece apropiado seguir llamndolas as. El nombre de proposiciones ha sido usado por varios gramticos de nuestro idioma
para designar estas oraciones que han sido desprovistas de su carcter de tales oraciones para funcionar slo como
elementos dentro de otra oracin.
5. AL QUE he llamado,
las cuales, si fueran oraciones y no proposiciones, es decir, si estuvieran libres de la funcin que realizan dentro
de las oraciones en que se encuentran, seran:
1.
2.
3.
4.
5.
Vemos as que, en las cinco proposiciones, el relativo (con preposicin y con o sin artculo) hace un papel
que no es ya el de sujeto, sino el de complemento: adverbial en las tres primeras, indirecto en la cuarta y directo
en la quinta. Claro es que en el caso ltimo, esto es, cuando el relativo es complemento directo dentro de la
proposicin, no siempre va precedido de a: Las tierras QUE ha vendido no daban fruto (la proposicin es que ha
vendido, equivalente a una supuesta oracin ESTAS TIERRAS (las) ha vendido). La falta de preposicin ante el
relativo complemento directo se produce incluso ms a menudo que cuando el complemento directo es un
nombre cuando ese relativo designa persona : El amigo QUE he llamado vendr esta tarde.
Existen otros relativos que pueden desempear las mismas funciones que el que de los anteriores ejemplos;
son cual y quien. Los dos tienen formas singular y plural (cual, cuales; quien, quienes). El primero se usa
siempre con artculo; el segundo nunca lo lleva. De quien hay que decir, adems, que en proposiciones adjetivas
slo se presenta precedido de preposicin, y que normalmente hace referencia a persona. Ejemplos: Las hijas de
nuestros vecinos, LAS CUALES nos visitaban todas las tardes, dejaron de venir (las cuales funciona como sujeto
en la proposicin las cuales nos visitaban todas las tardes); Las personas EN QUIENES ms confibamos nos
defraudaron (en quienes funciona como complemento adverbial en la proposicin en quienes ms confibamos).
Un tercer relativo, cuanto, aparece en proposicin adjetiva solamente cuando sta es adjunta del pronombre
todo: Todo CUANTO tengo es tuyo (cuanto funciona como complemento directo en la proposicin cuanto tengo).
Estos tres relativos, cual, quien y cuanto, se pueden sustituir por que (con o sin artculo, segn los casos) en
las proposiciones adjetivas en que se presentan: Las hijas de nuestros vecinos, QUE nos visitaban todas las
tardes, dejaron de venir; Las personas EN LAS QUE (o EN QUE) ms confibamos nos defraudaron; Todo LO QUE
tengo es tuyo. Que, vlido para todos los casos, es el ms usado: los otros, que exigen determinadas condiciones
para su empleo, son por ello ms raros, pero ofrecen la ventaja de una precisin y una expresividad mayores.
Los cuatro relativos que hemos visto hasta ahora que, cual, quien, cuanto coinciden en su capacidad de
desempear (dentro de la proposicin) funciones propias de sustantivo, como son las de sujeto, complemento
directo y complemento indirecto aparte de la funcin de complemento adverbial, que realizan mediante la
traslacin con preposicin. Son. pues, verdaderos sustantivos; pero no son nombres, ya que su significado no
corresponde a seres o tipos de seres fijos y determinados; sino que. son pronombres, al ser su significado
totalmente dependiente del sustantivo que los precede en cada caso.
9.1.3. Adjetivo relativo
Una proposicin adjetiva puede estar tambin introducida por el relativo cuyo, que no funciona en ella como
sustantivo, sino como adjetivo: La casa CUYO arquitecto fue procesado es sta. En esta oracin, el sujeto es la
casa cuyo arquitecto fue procesado; el predicado, es sta. Dentro del sujeto hay una proposicin: cuyo
arquitecto fue procesado, que funciona como adjetivo de casa. La proposicin lleva como palabra de enlace el
relativo cuyo, que se junta al nombre arquitecto para indicar de quin o de qu es el arquitecto (lo mismo que
hara el adjetivo su si la proposicin fuese oracin independiente: SU arquitecto fue procesado).
Notemos que este adjetivo relativo, dotado de formas distintas para masculino y femenino, singular y plural
(cuyo, cuya, cuyos, cuyas), presenta siempre concordancia con el nombre al que se une, igual que hacen todos
los adjetivos: El nio CUYOS PADRES murieron en el accidente vive ahora con unos tos suyos; El hombre CUYAS
OBRAS no responden a las palabras es un hipcrita.
Otras palabras de enlace, introductoras de proposiciones adjetivas, son las que vemos en estas dos oraciones:
1. El pueblo DONDE nac est muy lejos;
2. El modo COMO lo consiguieron fue muy extrao.
En el primer ejemplo, la proposicin donde nac va introducida por el relativo donde, y sirve de adjetivo a
pueblo. En la segunda oracin, la proposicin es como lo consiguieron, introducida por el relativo como, y acta
como adjetivo del nombre modo. Qu papel desempean, dentro de sus respectivas proposiciones, los relativos
donde y como? Observemos que la oracin nmero 1, El pueblo donde nac est muy lejos, equivale a El pueblo
EN QUE nac est muy lejos; y que la nmero 2, El modo como lo consiguieron fue muy extrao, equivale a El
modo EN (o CON) QUE lo consiguieron fue muy extrao. Es decir, en ambos casos el relativo tiene una funcin de
complemento adverbial. Lo mismo ocurrir en cualquier otro ejemplo que busquemos de proposicin adjetiva
introducida por alguno de estos dos relativos, que no pueden desempear funcin de sujeto, ni de complemento
directo, ni de complemento indirecto, ni de adjunto de un nombre; sino slo la de complemento adverbial. Estos
relativos son, pues, adverbios.
9.1.5. Proposicin adjetiva como adjunto de un nombre.
En todos los ejemplos que hemos mostrado, las proposiciones adjetivas actan como adjuntos de nombres
que son ncleos de sujeto. Pero, como el adjetivo es adjunto del nombre, sea cual sea la funcin que este ltimo
desempee en la oracin, podremos encontrar, naturalmente, abundantes casos en que una proposicin adjetiva
acompae a un nombre que sea complemento dentro del sujeto o dentro del predicado: Los muebles de la casa
QUE HEMOS VISITADO me han gustado mucho; Vamos a ver la pelcula QUE ME RECOMENDASTE (los nombres
casa y pelcula, a los que se unen las proposiciones adjetivas sealadas en VERSALITA, desempean en sus
oraciones respectivas las funciones de complemento de nombre y complemento directo).
9.1.6. Proposicin adjetiva como adjunto de un pronombre.
No slo a un nombre, tambin a un pronombre puede adherirse una proposicin adjetiva: Aquellos QUE
DESOBEDEZCAN sern castigados; Estos QUE HAS COMPRADO no parecen buenos; T, QUE ERES MI AMIGO, no
me abandonars. Aquellos, estos y t son pronombres que van acompaados cada uno por una proposicin
adjetiva.
9.1.7. Proposicin adjetiva referida a toda una oracin.
Igualmente puede agregarse la proposicin adjetiva, no ya a un elemento de la oracin, sino a toda la
oracin: Trabaja mucho, LO CUAL ACABAR CON SU SALUD; El jefe no ha venido hoy, POR LO QUE AQU SE HA
TRABAJADO POCO; Me han mandado una felicitacin muy amable, DE DONDE DEDUZCO UNA COSA. La
adherencia habitual de la proposicin adjetiva con respecto al sustantivo antecedente, al estar en este caso diluida
para toda una oracin y no centrada en un sustantivo, se hace ms floja, permitiendo cuando la oracin es
larga una pausa marcada antes de la proposicin. Por ello, tambin son construcciones fcilmente disociables
en dos oraciones independientes, es decir, son transformables en una coordinacin: Trabaja mucho, Y ESTO
acabar con su salud; El jefe no ha venido hoy, Y POR ESO aqu se ha trabajado poco; Me han mandado una
felicitacin muy amable, Y DE AQU deduzco una cosa. Esta tendencia a la disociacin ocurre igualmente cuando
la proposicin adjetiva se refiere a un nombre que, funcionando como aposicin, resume la oracin que precede:
Trabaja mucho, COSA QUE acabar con su salud. Como se ve, en este caso la pausa se produce antes del nombre
resumidor.
9.1.8. Proposicin adjetiva de participio
Un tipo especial de proposicin adjetiva es aquella en que el verbo se presenta en la forma de participio, que
es, precisamente, la forma en que el verbo, sin auxilio de ninguna palabra de enlace, funciona como adjetivo:
Las participaciones de lotera VENDIDAS POR AQUELLA MUJER eran falsas. El participio, que, en cuanto verbo,
admite complementos de verbo (aqu, por ejemplo, el complemento adverbial de agente por aquella mujer), en
cuanto adjetivo tiene que coincidir en gnero (masculino/femenino) y nmero (singular/plural) con el sustantivo
al que se une: aqu, vendidas tiene concordancia con participaciones.
La forma mnima de estas proposiciones es la constituida por un simple participio sin complementos: Las
participaciones VENDIDAS eran falsas. En este caso la proposicin viene a confundirse externamente con un
puro adjetivo, y, sintcticamente, como simple adjetivo debemos considerarla. Se diferencia el participio del
adjetivo, no en la forma, que a veces coincide (honrado, participio de honrar / honrado honesto), sino en la
posibilidad que tiene el primero de recibir complementos de verbo (Un hombre HONRADO POR SUS SUPERIORES
trabajar con ms empeo; Un hombre HONRADO trabaja con empeo), aparte del significado, que en el
participio es el de que al ser designado por el sustantivo le ha ocurrido la accin expresada por el verbo (las
participaciones han sido vendidas, el hombre ha sido honrado), mientras que en el adjetivo es el de mera
cualidad.
9.1.9. Proposicin adjetiva de gerundio
Existen tambin proposiciones adjetivas en que el verbo, sin palabra de enlace, va en la forma de gerundio:
Haba un chico VENDIENDO POSTALES; Hoy publica el Boletn una orden PROHIBIENDO LA FABRICACIN DE
ESTOS JUGUETES. Observemos que en estas proposiciones el gerundio es sustituible por una forma personal del
verbo precedida del relativo que: un chico VENDIENDO = un chico QUE VENDA; una orden PROHIBIENDO = una
orden QUE PROHBE. En los casos en que la proposicin se agrega a un nombre de cosa como en el ltimo
ejemplo citado, una orden se considera preferible emplear la construccin que + verbo (que prohbe).
9.1.10. Proposicin adjetiva de infinitivo
Hay, por ltimo, proposiciones adjetivas en que el verbo va en la forma de infinitivo; pero stas, a diferencia
de las de participio y de gerundio, llevan una palabra de enlace, el relativo que: Tenemos muchas cosas QUE
HACER; No faltan algunas enseanzas QUE TOMAR DE LOS DEMS. Tambin, en lugar de esa palabra de enlace,
puede aparecer precedido el infinitivo de la preposicin por: Quedan muchas cosas POR HACER; Hay todava
medio milln de nios POR LLEVAR A LA ESCUELA. Es tachado de poco correcto, aunque cada vez est ms
extendido, el empleo de la preposicin a: Las etapas A CUBRIR son cinco; stos son los aspectos A CONSIDERAR.
El sentido de las proposiciones que acabamos de ver es el de obligacin o necesidad de realizar, sobre el
objeto designado por el nombre, la accin expresada por el infinitivo. Naturalmente, otras proposiciones
adjetivas con infinitivo, con preposiciones distintas, expresan distintos sentidos: He comprado una mquina DE
COSER; Han inventado un dispositivo PARA EVITAR ERRORES EN LA TRANSMISIN.
9.1.11. Proposiciones adjetivas especificativas y explicativas
Volviendo ahora a las proposiciones adjetivas introducidas por un relativo o constituidas por un participio,
conviene que observemos que estas proposiciones, aunque todas desempean una misma funcin la de
adjetivo dentro de la oracin, pueden precisar de dos maneras distintas el significado del sustantivo al que van
unidas. En estos dos ejemplos,
1. Los soldados QUE IGNORABAN ESTO cayeron en la trampa;
2. Los soldados, QUE IGNORABAN ESTO, cayeron en la trampa,
las palabras son exactamente las mismas, pero no lo es el sentido. En la primera oracin decimos que no todos
los soldados, slo aquellos que ignoraban determinada cosa, fueron los que cayeron en la trampa; en la
segunda, lo que decimos es que todos los soldados ignoraban esto y todos cayeron en la trampa. La diferencia
entre estos dos sentidos est marcada solamente por la pausa que se produce, en la segunda oracin, entre el
nombre y la proposicin adjetiva, y que en la escritura se indica por medio de una coma. En la primera oracin
no hay pausa (ni coma) ninguna entre el nombre y la proposicin. Cuando no hay pausa, la proposicin adjetiva
aporta un fundamental detalle especificador o limitador del significado del nombre (proposicin especificativa);
cuando hay pausa, la proposicin adjetiva es slo un desarrollo o suplemento de ese significado, y podra
suprimirse sin que se alterase lo esencial del mensaje comunicado por la oracin (proposicin explicativa).
9.1.12. Adjetivos especificativos y explicativos
Esta distincin, en realidad, no es exclusiva de las proposiciones adjetivas; puede sealarse igualmente en los
adjetivos calificativos normales. Para comprobar esto nos basta comparar las dos oraciones que acabamos de ver
En las cuatro, el sujeto (sealado en VERSALITA) es una proposicin. Cada una de estas proposiciones tiene, a
su vez, su sujeto (1, quien; 2, el que; 3, [yo]; 4, [ellos]) y su predicado (l, mal anda; 2, ha dicho esto; 3, lo que
he ganado en el negocio; 4, cuanto nos dijeron); y en cada una de ellas hay una palabra de enlace que la inserta
dentro de la oracin total y que la hace funcionar como un elemento componente de sta. La palabra de enlace es
en las cuatro proposiciones un relativo (que, precedido de artculo; quien, cuanto).
Las cuatro proposiciones hacen ya lo hemos visto papel de sujeto dentro de su respectiva oracin. Como,
segn sabemos ya, la funcin de sujeto es una funcin propia de sustantivos, las proposiciones que desempean
esa funcin es natural que se llamen proposiciones sustantivas2.
No slo la funcin de sujeto, sino otras funciones propias del sustantivo, como son la de complemento
directo, la de complemento indirecto, la de predicativo, pueden estar desempeadas por proposiciones, segn
vemos en estos ejemplos:
1.
2.
3.
4.
5.
2
En los ejemplos nmeros 2 y 3 vemos que para que la proposicin pueda desempear su papel sustantivo en la oracin
tiene que ir precedida de artculo; si no lo llevara, se quedara en proposicin adjetiva, que no podra funcionar sin adherirse
a un sustantivo (por ejemplo, El HOMBRE que ha dicho esto; El DINERO que he ganado en el negocio). As pues, en
ciertos casos (los del relativo que) una proposicin adjetiva se traslada a la funcin sustantiva por medio de la anteposicin
de artculo, igual que como vimos en 7.6.2 ocurre con los adjetivos. Esta traslacin tambin es posible en las
proposiciones de participio: LOS AGRACIADOS POR LA FORTUNA no se acuerdan de los pobre; LOS EXPULSADOS DEL PAS
son inocentes.
Conviene, sin embargo, no confundir el caso de las ltimas oraciones, nmeros 3 y 4, con el de otras en que la
proposicin presenta construccin semejante a las que ah figuran, pero tiene funcin puramente adjetiva: Los
compaeros DE QUIENES HABLAMOS son magnficos; Los compaeros DE LOS QUE HABLAMOS son magnficos.
En estos casos, los relativos (quienes, que) hacen referencia a los sustantivos que los preceden (de esos
compaeros hablamos), cosa que no ocurre cuando la proposicin es sustantiva.
Las proposiciones sustantivas que hemos visto hasta ahora van todas introducidas por un pronombre relativo,
esto es, una palabra que, adems de servir de entrada de la proposicin insertando sta en la oracin total,
desempea un papel de sustantivo (sujeto, complemento directo, etc.) dentro de la misma proposicin por ella
introducida. As, en la oracin No creas a quien te diga eso, la palabra quien, aparte de ser la introductora de la
proposicin a quien te diga eso, hace el papel, dentro de esta proposicin, de sujeto; en la oracin No creas lo
que te digan, el pronombre relativo que sirve de empalme de la proposicin lo que te digan, y adems
desempea la funcin de complemento directo dentro de esta misma proposicin.
Puede haber proposiciones sustantivas introducidas por un relativo que no es pronombre, sino adjetivo. La
palabra cuanto (que hemos visto como pronombre relativo en la oracin La indignacin DE CUANTOS LO VEAN
era inmensa) funciona como adjetivo relativo en La indignacin DE CUANTAS PERSONAS LO VEAN era inmensa;
CUANTO DINERO TENGO es tuyo.
9.2.2. Proposicin introducida por la conjuncin que.
Pero tambin son muchas las proposiciones sustantivas que no van introducidas por un relativo, sino por una
palabra que se diferencia de los relativos en no desempear en la proposicin ninguna otra funcin que la de
simple empalme. Esta palabra pertenece a la categora de las conjunciones y tiene la misma forma que uno de los
relativos: que. He aqu algunos ejemplos de proposiciones sustantivas iniciadas por la conjuncin que:
1. Te ruego QUE ME LO DES EN SEGUIDA. (La proposicin hace de complemento directo.)
2. Mi deseo es QUE ME LO DES EN SEGUIDA. (La proposicin hace de predicativo.)
3. Me interesa QUE ME LO DES EN SEGUIDA. (La proposicin hace de sujeto.)
La proposicin sustantiva iniciada por la conjuncin que puede tambin funcionar, precedida de una
preposicin, como complemento de un nombre o un adjetivo: La alegra DE QUE HAYAS VENIDO me hace
olvidarlo todo; El miedo A QUE SE ESCAPE me tiene aqu inmovilizado; Estoy seguro DE QUE NO ME HAS
ENTENDIDO.
A veces la proposicin, subrayando su carcter sustantivo, va precedida del artculo el. Esto es ms frecuente
cuando la proposicin funciona como sujeto, y ms an si va al comienzo de la oracin: Le preocupaba mucho
EL QUE ALGUIEN SE ENTERARA; EL QUE LLEGUIS A TIEMPO es fundamental.
9.2.3. Proposicin sin conjuncin.
En la lengua escrita, especialmente en las cartas, ocurre a veces que la proposicin se introduce sola, sin
conjuncin: Te ruego ME LO DES EN SEGUIDA.
el verbo expresa pregunta o desconocimiento, va introducida por una conjuncin especial, si: Le preguntaron SI
SABA LEER; No s SI ME ENTIENDES. En ambos ejemplos, la proposicin hace de complemento directo 3.
9.2.5. Proposicin introducida por un interrogativo.
Puede ocurrir que lo que presente como ignorado la proposicin no sea un hecho, sino algo (persona, cosa,
circunstancia) relacionado con el hecho. Entonces la palabra de enlace, siempre tnica (es decir, con acento, que
en estos casos aparece representado grficamente por medio de tilde), es un interrogativo. Los interrogativos, sin
preposicin o con ella, pueden ser pronombres (qu, cul, quin, cunto):
Le preguntaron
QU LE HABAN DADO;
QUINES SE LO HABAN DADO;
CUL LE HABAN DADO;
CUNTO LE HABAN DADO;
A QUIN SE LO HABAN DADO;
POR QU SE LO HABAN DADO;
PARA QU SE LO HABAN DADO;
Cuando la proposicin no presenta el hecho como ignorado, sino como dudoso, dependiendo por tanto de un verbo que
expresa duda, la conjuncin utilizada es que: Dudo QUE ME ENTIENDAS; No creo QUE ME ENTIENDAS.
comparemos Necesitaba COMER con Necesitaba COMIDA; Quiero TRABAJAR con Quiero TRABAJO. La distincin
est en que el verdadero nombre admite artculo y adjetivos (Necesitaba UNA BUENA COMIDA; Quiero ALGN
TRABAJO), mientras que el infinitivo slo admite complementos propios de verbo (Necesitaba COMER PAN;
Quiero TRABAJAR BIEN; vase, no obstante, ms abajo). Cuando encontremos una palabra con apariencia de
infinitivo acompaada de adjuntos propios de nombre y capaz de ponerse en plural, tendremos ya, no un verbo
funcionando como nombre, sino un verbo en infinitivo que ha pasado a ser un verdadero nombre: Estudiemos EL
ACONTECER HISTRICO; Mi vicio es EL BUEN COMER: UN CANTAR ANTIGUO deca as.
No debemos confundir, sin embargo, estos infinitivos que se han hecho nombres y que, como tales, llevan
artculo, con e1 uso, que en ocasiones se presenta, del artculo el delante de una proposicin de infinitivo: EL
COMER BIEN puede ser malo; Me gusta mucho EL PASEAR POR LA NOCHE. Notemos que, en estas oraciones, los
infinitivos comer y pasear llevan complementos propios de verbo (bien y por la noche, complementos
adverbiales), y que el artculo el destaca el carcter sustantivo, no del infinitivo que le sigue, sino de toda la
proposicin formada por el infinitivo y sus acompaantes. Es un caso idntico al que vimos algunos prrafos
ms arriba (Le preocupaba mucho EL QUE ALGUIEN SE ENTERARA; EL QUE LLEGUIS A TIEMPO es fundamental).
9.3. La proposicin adverbial.
9.3.1. Proposicin adverbial: proposicin sustantiva trasladada.
El verbo, segn vimos en el captulo 8, tiene unos complementos propios que hemos llamado directo,
indirecto y adverbial. Los dos primeros son funciones propias del sustantivo, y, cuando estas funciones son
desempeadas por una proposicin, sta se llama, como hemos visto en el apartado anterior, proposicin
sustantiva. El tercer complemento, adverbial, es una palabra destinada habitualmente a esta funcin: el adverbio
(Hemos llegado TARDE), o bien un sustantivo trasladado a ella, que suele ir precedido de una preposicin
(Hemos llegado CON RETRASO).
Tambin, como el sustantivo normal, una proposicin sustantiva puede ser trasladada a la funcin de
complemento adverbial por medio da una preposicin: Entraron SIN QUE NADIE SE ENTERASE; Entraron SIN
HACER RUIDO. (Comprese con Entraron SIN RUIDO donde un sustantivo con preposicin hace de complemento
adverbial y con Entraron SILENCIOSAMENTE donde el complemento adverbial es un puro adverbio.) Cuando la
preposicin es por, se escribe unida a la conjuncin que Lo hicieron PORQUE QUISIERON. (Comprese con Lo
hicieron POR SU PROPIA VOLUNTAD; Lo hicieron VOLUNTARIAMENTE.)
9.3.2. Proposicin introducida por conjuncin.
Pero hay igualmente proposiciones adverbiales que no se han formado anteponiendo una preposicin a una
proposicin sustantiva, sino que van introducidas directamente por una conjuncin. Esta conjuncin puede ser
que (la misma usada en las proposiciones sustantivas tpicas) o puede ser otra palabra o grupo de palabras (si,
aunque, como, con tal que, tan pronto como, etc.)4.
9.3.3. Nociones expresadas.
He aqu las nociones principalmente expresadas por las proposiciones adverbiales:
1. Lugar: Este seor est siempre DONDE NO DEBE.
2. Tiempo: Iremos CUANDO NOS PAREZCA; Sal EN CUANTO PUEDAS; MIENTRAS HAY VIDA hay
esperanza; DESPUS DE TOMAR UN BOCADILLO, siguieron su camino; Me levanto AL SALIR EL
SOL.
3. Paralelismo: Aprendemos SEGN CAMINAMOS; CUANTO MS LUCHA, menos consigue; SI TONTO
ERA EL PADRE, el hijo lo era ms.
4
Hay un caso, no obstante, en que no se usa conjuncin introductora. Es cuando la proposicin expone una
alternativa entre dos hiptesis que de cualquier modo son incapaces de impedir el hecho enunciado por el verbo
principal: Q UIERAS O NO [quieras], te nombrarn; F UERAN STOS SUS PROPSITOS, FUERAN OTROS , lo cierto es que
se march; S EA POR ENVIDIA , SEA POR VENGANZA , est decidido a hacerlo. En estos casos la proposicin est
formada a su vez por lo suma de dos proposiciones que son coordinadas entre s (v. 10.2 y 10.3.2).
4.
5.
6.
7.
Las proposiciones de comparacin llevan casi siempre un verbo idntico al de la oracin; ejemplos como T
pintas mejor QUE YO ESCRIBO son poco frecuentes, Por ello es muy corriente que, por evitar la repeticin de una
palabra, la proposicin aparezca sin verbo (que no significa que no lo tenga): Me gusta ms el teatro QUE EL CINE .
No obstante, el verbo se repite, entre otros casos, cuando se quiere marcar con l una diferencia de tiempo: El
teatro me gusta ms QUE ME GUSTABA .
6
Pero no es imposible, sobre todo en la lengua literaria: PORQUE ELLA LE RECHAZABA , la mat.
7
Como que, en posicin posterior, aparte de tener un matiz especial (naturalmente: la explicacin es que...), no
introduce proposicin, sino oracin coordinada (v. 10.2): El taller estaba cerrado; COMO QUE era sbado. Lo mismo ocurre
con pues y puesto que cuando van en segunda posicin.
mayor, menor): Mejor QUE LO HIZO L no lo hars t; Igual QUE ME LO CONTARON, lo cuento yo; Lo mismo QUE
L [SE MARCHA], nos marcharamos todos.
Las proposiciones que denotan consecuencia, aunque coinciden con las de comparacin en poseer
normalmente un trmino anunciador de la proposicin (tal, tan, tanto), no basta que vayan despus de ste; han
de ir, forzosamente, al final de la oracin.
9.3.5. Proposicin adverbial de gerundio.
Adems de las constituidas por una oracin precedida de conjuncin, o por una proposicin sustantiva
precedida de preposicin, hay otras proposiciones adverbiales, que son las formadas con un gerundio.
El gerundio caracterizado por la terminacin -ando o iendo es la forma adverbial del verbo, es el
adverbio formado directamente sobre un verbo (aunque ya hemos visto que en algunos casos funciona como
adjetivo). La funcin de adverbio no impide al gerundio disponer pues no ha perdido toda su naturaleza verbal
de complementos propios de verbo e incluso de sujeto propio. Las nociones expresadas por las proposiciones de
gerundio no son todas las que pueden darse por medio de las otras formas de proposicin adverbial, ni se
muestran con tanta precisin como en stas. Las proposiciones constituidas con gerundio denotan,
principalmente, tiempo y modo, y tambin condicin, concesin y causa:
1. ESTANDO EN EL CINE, se sinti enfermo. (La proposicin expresa tiempo: cuando estaba en el
cine.)
2. Se divierten HACIENDO SALVAJADAS. (La proposicin expresa modo: en hacer salvajadas.)
3. ESTANDO T CONFORME, no hay problema. (La proposicin expresa condicin: si t ests
conforme.)
4. AUN AGOTNDOSE DE TRABAJO, gana muy poco. (La proposicin expresa concesin: aunque se
agota de trabajo.)
5. HABINDOSE TERMINADO EL CUPO DE HOY, no se despachan ms localidades. (La proposicin
expresa causa: como se ha terminado el cupo de hoy.)
Notemos que la nocin expresada por la proposicin de gerundio, salvo, en general, cuando es de tiempo,
queda ms o menos teida de otras nociones posibles, de manera que a veces, sin conocer la situacin a que
alude la oracin, no es fcil seleccionar la que se quiso exponer, As, en el ejemplo 3, estando t conforme,
aparte de si t ests conforme condicin, puede ser cuando t ests conforme tiempo puesto que t
ests conforme causa.
9.3.6. Proposicin adverbial de participio.
Tambin un participio puede formar proposicin adverbial. El participio (caracterizado normalmente por la
terminacin -ado o -ido) es, como sabemos, la forma que toma el verbo para funcionar como adjetivo, y, en
efecto, como base de proposiciones adjetivas lo hemos visto en el apartado 1 de este captulo. Pero puede ocurrir
que no acte como adjetivo referido a un nombre que es sujeto o complemento de la oracin, sino que se refiera
y acompae a un nombre que no desempea otra funcin que la de sujeto del propio participio, con el cual (y
con los complementos que puedan llevar) forma una construccin unitaria incrustada dentro de la oracin. Esta
construccin funciona como complemento del verbo (o del verbo y sus acompaantes), no directo ni indirecto,
es decir, no sustantivo, sino adverbial, con idea fundamental de tiempo:
TERMINADA LA FIESTA, todos se fueron a casa;
MUERTO EL PERRO, se acab lo rabia;
El rebelde, REUNIDAS TODAS SUS FUERZAS, intent un ltimo ataque.
La nocin de tiempo puede ir reforzada o precisada por algn adverbio antepuesto al participio (apenas, una
vez, recin...): APENAS TERMINADA LA FIESTA, apagaron las luces; Por fin, UNA VEZ CUMPLIDOS TODOS LOS
REQUISITOS, se celebr la representacin; RECIN EMPEZADA LA GUERRA , fueron detenidos. O por la
preposicin despus de: DESPUS DE HECHO EL MAL, se arrepienten.
9.4. La proposicin dentro de otra proposicin.
Este fenmeno de embutirse una proposicin dentro de otra que a su vez est instalada dentro de otra
(etctera) que funciona como un elemento del sujeto o del predicado se da con suma frecuencia, tanto en la
lengua hablada como en la escrita.