El guila del Imperio

Captulo I
Antes de introducirme en el primer captulo el libro al inicio nos
habla de cmo se organizaban socialmente y de las obligaciones o
papeles que se jugaban dentro de su comunidad.
En el captulo uno se inicia con un hombre que es centurin de dicha
legin y que lleva por nombre Macro, en aquel momento l estaba
encargado de la guardia de su centuria y para ello tenia personas a
su cargo para que as pudiera cuidar y resguardar la integridad de su
gente, aquel da ya era noche y soplaba el viento muy fuerte mientras
que el cielo oscureca, esa noche se esperaba a un convoy el cual
llegara con soldados reclutas, como ya se comentaba el clima no
favoreca a la visibilidad y fue as que de pronto se escucharon
ruidos mientras Macro vigilaba y observ movimiento a lo lejos, eran
unos hombres precisamente era las personas a las que esperaban, era
otro centurin de nombre Bestia el cual traa a los nuevos reclutas
para que fueran entrenados e iniciaran su carrera militar, Bestia
tena un carcter muy fuerte y era prepotente, entre los hombres
reclutados llego uno de cortes finos en su capa el cual fue humillado
por Bestia le tiro sus cosas y las pateo, entre ellas traa unos
pergaminos y cosas para escribir las cuales avent al desage pero
poco despus lograron recoger, era precisamente un mensaje privado
para el legado (Perona encargada de la legin).
Este personaje se llama Quinto Licinio Cato y es hijo de un esclavo
el cual ya muri, Bestia encargo a Macro que llevara al muchacho a
entregarle ese mensaje tan importante y fuera de lo comn, durante el
camino Macro y Cato conversaban sobre ellos, Cato se haba adentrado
al ejrcito tras un tratado el cual consista en dejar libre a Cato a
cambio de que siguiera sirviendo a Roma as como lo hizo su padre.

Captulo II
Macro y Cato llegan al lugar donde se resguarda el Legado donde
tienen que ser interceptados por los guardias corpulentos que ah
cuidan, como ya se dijo, Cato no era un joven que estuviera
orientado a lo militar puesto que su vida haba sido diferente a
la de todo perfil militar, Cato y sus acciones lo delataban como
un novato ante los dems soldados, tiempo despus de la revisin
los dejaron entrar a entregar ese pergamino, se encontraron con un
tribuno al cual Macro ya conoca solo de vista su nombre era Aulo
Vitelo el cual les pidi la carta e intento retirarlos tras
obtenerla, Cato exigi que se le regresara la carta puesto que se
le haba ordenado por decreto del emperador Claudio de que el
mismo se la entregara en sus manos el

legado, el tribuno enojado

decidi llevarlos a ver al legado el cual tambin estaba enojado

puesto

que

al

insignificante

recibir
comparado

el

mensaje

noto

con

lo

que

que
haca

era
ya

algo
que

muy
se

encargaba de organizar toda la legin, regao a Macro por no estar

en

la

guardia

que

le

corresponda

hablo

con

el

muchacho

explicndole que si el mensaje venia del emperador l lo tena que

respetar y le dio a entender que l era algo especial incluso le
hizo sentir que era algo especial puesto que no a cualquiera le
hacan llegar una carta de presentacin, el legado no dudo mucho y
decidi preguntarle la edad al joven para ver si poda ser un
centurin, pero resulta que el solo tena diecisis aos y no
tena experiencia en la milicia as que el legado decidi hacerlo
el optio (Auxiliar del centurin) del centurin Macro ya que a l
le haca falta uno, pronto Cato fue con los dems centuriones a
que lo anunciaran como su optio de Macro, todos los centuriones
sintieron envidia de este chico y a su vez Cato se asqueaba de
verlos y olerlos ya que ellos eran sucios y mujeriegos.

Captulo III
En esta parte Cato sufre muchas interrogantes e indiferencia por
parte

de

los

dems

soldados,

en

especial

Pirax

le

hace

interrogante y le comenta que un hombre como el no aguantara mucho

en el ejrcito, lo tachaban de tonto e incompetente por la misma
razn de que Cato era un hombre dbil y no estaba en condiciones
de ser un soldado puesto que l no tena las caractersticas para
serlo sin embargo eso mismo le cost su libertad, incluso a Cato
le arrebataban sus cosas y se burlaban de l, Cato era un hombre
muy racional y culto, en cambio para entrar al ejercito bastaba
con ser fuerte y valiente, pronto salieron los soldados a recibir
rdenes para su capacitacin, Cato era un hombre de complexin
pequea y en el ejrcito por lo regular todos los hombres eran
grandes y fornidos as que se les fue entregado un uniforme el
cual deban ponerse todos para as poder ser parte del ejrcito y
su ropa propia tena que ser vendida a la gente incluso su capa y
sus botas que eran tan caras y especiales, Cato rezongo al ver su
traje ya que era muy grande para el sin embargo todos se burlaron
de l y fue obligado a colocrselo, Cato encontr algo muy raro y
peculiar en su ropa, tena una cinta blanca en el hombro y
observaba a sus compaeros pero al parecer era nica, no le dio
importancia y sali a la capacitacin, Bestia al mirarlo le grito
con rencor, Cato asustado se preguntaba qu tan especial era ese
parche blanco que portaba en su hombro, Bestia saba que ese
parche solo lo portaban los Optios y se sorprendi al saber que
Cato un simple novato era Optio tan rpido y sin ninguna prueba,
posteriormente se les fue entregado un escudo y una espada los
cuales eran de fantasa, Cato vea todo de manera cmica puesto
que a su parecer las espadas parecan juguetes.

Captulo IV
En este episodio Cato es llevado a recibir su iniciacin ante los
ojos del Legado, Vespasiano dice un discurso ante los futuros
soldado de la Legin y ante tal discurso Cato se siente desanimado
pues en l le mencionan que perder muchos de sus privilegios para
poder servir a su nacin, l tiene una forma muy distinta de
pensar a comparacin de los dems puesto que l era una persona
culta y tranquila, mas no una persona violenta y brusca, el piensa
que su vida solo vale para defender un pedazo de metal sostenido
por un pedazo de madera, el ya no perteneca a la sociedad como
tal ahora pasaba a ser parte de los soldados, a Cato le daba mucha
risa el hecho de las espadas de madera puesto que las consideraba
u juguete, a esta le llamaban ceremonia de alistamiento y estaba
en gran parte dirigida por Bestia el cual como ya hemos visto
trataba con la punta del pie a todos los nuevos reclutas en
especial a Cato por obvias razones, Cato entro a su habitacin e
intentaba dormir cuando en eso entra Pulsher un recluta ms y le
insista a ser violento lo toma del cuello y con un pual le
apunta a la cara y lo amenaza puesto que gracias al error de Cato
a l le impusieron un castigo, Cato se abalanzo contra l y le
pego una mordida en el antebrazo para que lo dejara en paz, en ese
momento entro Macro y les pidi una explicacin de la pelea, a
Cato no le quedo de otra ms que decir una mentira y salvarse as
los dos de un castigo y por otra parte se gan el perdn de
Pulsher.

Macro

mostrarle

que

se
es

llev
lo

que

Cato
iba

para

que

platicar

ser

como

Optio,

con
pero

Macro

consideraba que Cato no estaba en condiciones para rendir de

manera responsable el cargo por lo cual lo coloco en la zona de

administracin y lo mando con Piso para que l lo ayudara y le

explicara sus nuevas encomiendas.

Captulo V
Cato no estaba acostumbrado a hacer muchas tareas en un solo da
como ya he mencionado el solo era una persona culta e inteligente,
los instructores eran muy estrictos pero sin dudas el peor de
todos era Bestia quien daba golpes tremendos cuando no marchaban
bien o tenan problemas, Cato corri con la suerte de tener
desatada la correa de su casco en una ocasin y fue ah cuando
Bestia se abalanz encima de l y con un buena fuerza lanzo su
bastn al hombro del chico el cual se asust y lo resinti, a Cato
no le gustaba la disciplina de esta manera el entenda las cosas
gracias a la razn y en el ejrcito se las hacan entender a
golpes,

tenan

que

ensayar

las

diferentes

alineaciones

para

marchar y Cato se alejaba del mismo Pulsher con el cual haba

tenido problemas por haber tenido un roce mientras marchaban,
Pulsher era muy superior a Cato en fuerza y Cato tema por su
seguridad y es por eso que durante los entrenamientos l se alejaba
lo ms que poda de l, pero saba que las personas como el
buscaban venganza y fue as que decidi ir por un buen vino y
tomarlo para ponerse muy borracho y as adormecer su cuerpo y de
esta manera no sentira los golpes tan fuertes y dejara al mismo
tiempo que ese resentimiento en Pulsher desapareciera, pero Pirax
le comentaba que el no solo deba dejarse pegar porque si lo haca
as ya todos sabran que sera un cobarde y un dbil que no se
defiende y todos los dems lo tomaran por cobarde.
Cato tena la encomienda de ser optio y haba acordado con Macro
ser el encargado de administrar las cosas en el ejrcito, Cato

tena ms actividades que los dems y con esto demostraba que era
capaz de ms cosas de las que los dems esperaban de l.
Piso era el encargado de ensear a Cato a realizar esas labores.

Captulo VI
Los romanos se dedicaban a conquistar territorios de sus enemigos
los germanos principalmente y a Cato le haba llegado el momento
de salir a enfrentar a una aldea la cual sera saqueada, los
grupos

de

reclutas

de

toda

la

cohorte

deban

alistarse

prepararse para salir, mientras se formaban en un gran patio a la

luz de la fra maana, Cato como ya hemos dicho era un hombre que
se quejaba de las condiciones poco humanas a las que exponan a
los soldaos, pero poco a poco el frio fue desapareciendo al salir
el sol deslumbrando con un amanecer anaranjado y amarillo erizando
la piel de los que lo reciban, a Macro varios compaeros le
preguntaban quin era su optio a lo cual sealaba a Cato, muchos
lo vean pequeo y dbil, momentos despus el convoy parti con
rumbo a la aldea germana y marcharon entre una vereda el camino
estaba marcado por los grandes rboles y durante el transcurso
Cato demostr todo lo que haba aprendido marchando de buena
forma, llegaron a una cima en donde solo el lder de comandaba al
convoy fue junto con un grupo de hombres a hacer su mandato, Cato
es un hombre muy listo y por lo tanto usaba mucho su lgica y
capacidad para razonar, el haca muchas preguntas a Macro puesto
que era el optio y Macro al que le tena que servir, llego el
momento en el que le pregunto que por qu no podan ir todo o
mnimo rodear la cima, Macro saba que tena razn pero el lder
ya haba dado rdenes de que se quedaran ah por lo cual era
intil desobedecer de esa manera las ordenes de los superiores.

Al llegar a los muros de la aldea se toparon con la sorpresa de

que haban unos hombres intentando hacerles dao y Cato se percat
de ellos, tena una vista joven y por supuesto una forma distinta
de analizar las cosas, as que los soldados llamaron la atencin
de ellos y fue as como se pudieron salvar de un ataque.

Captulo VII
Se sabe que Roma tena ideales de expansionismo y que en su afn
por engrandecer a su nacin deban derrocar a otras ciudades y
conquistarlas para que de esta manera tuvieran ms materias primas
y lugares para sus viviendas.
En esta ocasin Vespasiano reciba una propuesta por el emperador
Claudio el cual quera limpiar su imagen y engrandecer su carrera
poltica, recordemos que a los polticos se les reconoce por las
cosas buenas que hacen y en este caso una de las mejores cosas que
se

le

reconocan

como

buenas

era

la

conquista

de

nuevos

territorios, Claudio tena la idea de conquistar el territorio de

Britania y le iba a encargar a Vespasiano esta tarea, para l era
como una gran aventura sin embargo tena problemas polticos con
ciertas personas, en especial con Vitelio porque en el notaba algo
raro y simplemente no era de su agrado, tena muchos roses con l
y por otro lado tena una preocupacin sobre un delito que se
haba cometido y estaban buscando a un responsable de tal manera
que haban personas encerradas en espera de que declararan los
nombres de los culpables y Vespasiano esperaba que fuera Vitelio
porque as acabara con sus dudas e intrigas.
Vespasiano tena que alistar a todos por ser el legado, deba dar
rdenes de prepararse para invadir Britania, la segunda legin y
las otras tres, junto con cohortes, estaban en el plan para
invadir dicha ciudad en verano.

Este plan haba sido redactado por las personas que administraban
la gestin del emperador, esto les caera bien a todos en especial
a la carrera diplomtica y militar de Claudio y por consiguiente
si las cosas salan bien tambin a la carrera de Vespasiano.

Captulo VIII
Continua la batalla por la conquista y defensa de la aldea, la
batalla

entre

Romanos

Germanos

se

engrandece

pues

ambos

contingentes de ambos bandos siguen llegando a apoyar, a Macro le

han encargado junto con su centuria ir a ayudar a los legionarios,
al llegar a la entrada de la aldea y entrar por la gran puerta los
soldados romanos gritaban, era un grito de guerra desgarrador que
incitaba a la batalla y alentaba a los suyos mientras asustaba a
los aldeanos y los hacan esconder, Macro al par de unas casas se
encontr con un grupo de germanos que no hizo ms que correr y
dispersarse sin embargo, Macro giro la orden de arrojar aquellas
jabalinas

que

unos

los

atravesaban

mataban

al

instante

mientras a otros solo los dejaba heridos.

Cato no era una persona fra y vea a los muertos por todos lados
y estaba un poco asustado pues aunque no se separaba de Macro
tena la sensacin de que algo malo pasara, incluso Cato en una
accin desenfrenada y desesperada arrojo su jabalina pero es obvio
que el chico es un poco dbil y no tiene experiencia con armas, al
arrojarla no la llego ni a 5 metros de distancia y le cay a Macro
en la cabeza, Cato no poda ni sostener su espada y su casco le
quedaba grande as que al correr deba sostenerse todo el traje
para evitar tropezar o tirar algo, a la centuria se le encargo
bloquear una puerta en la cual los germanos queran entrar, se
dieron bajas por parte de Roma al menos una cuarta parte estaba

muerta o herida, los soldados seguan aventando las jabalinas que

quedaban y tomaban piedras para arrojrselas a los germanos, Cato
junto

con

otros

hombres

coloco

un

gran

bloque

de

madera

en

transversal a la puerta para as evitar que se abrieran las

puertas, en acciones paralelas a esta ms centurias luchaban por
dominar a los germanos.

Captulo IX
La lucha por la permanencia en la aldea era cada vez ms difcil
puesto que la centuria de Macro tena ya tan solo entre setenta
hombres aproximadamente, llego la noche y una gran nube tapaba la
aldea, pareca que vendra una tormenta, comenz a nevar y el
aguante era ms difcil, los soldados estaban cansados y con un
helado anochecer, incluso Macro estaba herido de un brazo y fue
Cato quien le hizo un vendaje, el chico fue en busca de comida y
agua para la centuria hambrienta, mientras tanto los germanos
comenzaban a hacer sus planes y desde el interior de la aldea
todos

miraban

como

los

germanos

cortaban

arboles

para

hacer

escaleras provisionales y sobre todo para elaborar un ariete el

cual es una especie de tubo hecho para atravesar puertas, en este
caso era un gran tronco, mientras tanto la centuria de Macro solo
observaba y aguantaba en la gran puerta, al mismo tiempo tuvieron
la

visita

del

Tribuno

Vitelio

el

cual

llego

por

ayuda

para

llevarse a una persona que dirigiera a la centuria de cuatrato el

cual haba fallecido junto con su Optio, Cato pensaba que por ser
la segunda ms importante de su centuria se lo llevaran a l, al
mismo tiempo se llenaba de miedo pues saba que no sera capaz de
tal cosa, Macro dijo que su Optio no poda ir pues el solo era un
chico inexperto, Cato se llen de vergenza y se sinti humillado,
pero se dio cuenta que solo lo haca por protegerlo, mandaron a un
portaestandartes y su lugar fue sustituido por Cato.

Los germanos finalmente se levantaron al ataque de la puerta y fue

as como comenzaron a atacar la puerta y Cato tuvo la grandiosa
idea de combatirlos con fuego el cual de alguna manera los hara
ganar tiempo siempre y cuando tuviera duracin, pero despus de un
rato el fuego sali de control y alcanzo a los muros.

Captulo X
El

fuego

cualquier

contino
lado

principalmente

mucho

se
de

la

ms

poda
puerta

tiempo

ver
la

la
cual

se

intensifico,

gran

llama

se

miraba

que

desde

brotaba

tremendamente

envuelta en el fuego y a punto de caer, las chispas o brisas del

fuego llegaban a los tejados de las casas y poco a poco Macro
observaba que el fuego iba avanzando y que no tendran de otra ms
que cederle terreno a los germanos.
Macro se lamentaba de haber prendido en fuego el ariete pero era
algo necesario en el momento y no tena contemplado el descontrol
de las llamas, de inmediato y sin pensarlo ante el temor de quedar
atrapados entre las llamas, Macro ordeno retirarse ms espacio
hacia atrs para as poder descansar mientras las llamas seguan
incendiadas, pero notaron que la nieve que caa poco a poco se
converta en agua y de alguna manera debilitaba las llamas, a lo
lejos Macro observo que un grupo de germanos estaba arrojando
nieve a las llamas de la puerta para as poder entrar, Macro de
inmediato se le ocurri que mientras mantuvieran fuego entre ellos
nunca pasara nada as que ordeno a Castor hacer un fuerte con
paja y escombros para as poder ocultarse detrs de las llamas
mientras ellos lo hacan Macro parti junto con Cato y ms hombres
a hacer frente a los pocos germanos que intentaran entrar a
pelear, Castor pronto acabo de hacer el fuerte y Macro mato a los
pocos germanos que se atrevieron a entrar pero muy pronto se

resguardaron dentro del fuerte con fuego hecho de los escombros y

la paja de las cabaas.
Al correr hacia el fuerte un germano arrojo una espada la cual
alcanzo a impactar en la pierna de Macro tumbndolo en el suelo,
de inmediato Cato corri a socorrerlo aunque Macro se negaba a
recibir ayuda y peda que lo dejaran y se salvaran los dems junto
con el estandarte, pero Cato corri gritando hacia el centurin.

Captulo XI
Vespasiano de alguna manera era una persona con mucha autoridad
entre las figuras polticas que tenan en Roma, el legado tena
muchas tareas y responsabilidades por cumplir entonces debido a
esto eran personas ocupadas.
Vespasiano tena un hijo de nombre Tito y una esposa de nombre
Flavia, el legado consideraba muy valioso a su hijo puesto que
anteriormente su esposa haba tenido problemas y haba perdido a
dos bebes, Tito como hijo nico era muy consentido por su madre
sin embargo Vespasiano no tena el tiempo suficiente como para
convivir con su familia y mucho menos para cuidar a un bebe.
Flavia esposa de Vespasiano viva con las dems esposas de los
militares y ellas no tenan lugar en el ejrcito, el legado tena
la idea de adentrar a su hijo a que iniciara una carrera militar y
a su vez una carrera poltica, la madre estaba en contra puesto
que en el ejrcito se corran muchos riesgos y l era hijo nico
as que una prdida del chico sera fatal, sin embargo l bebe era
tan solo un crio que no pasaba de los 2 aos.
Vespasiano no saba que su esposa ya estaba enterada de la prxima
gran hazaa que se estaba preparando y cuyo nombre era Britania

as que le pidi al legado que tuviera mucho cuidado pues sera

algo peligroso.
Vespasiano

tendra

que

elegir

entre

engrandecer

su

carrera

poltica o encargarse del cuidado de su hijo, a la puerta toco un

centinela el cual quera hablar con el legado para informarle
sobre el incendio en donde estaba la cohorte, a Vespasiano pareca
no importarle mucho hasta que se enter que la cohorte estaba en
ese incendio as que decidi mandar a la caballera en ayuda de lo
dems.

Captulo XII
Volvemos a la escena en donde los romanos abandonan el campo de
batalla debido a que los germanos doblaban el nmero de soldados,
Macro desafortunadamente fue herido por una lanza en una de sus
piernas, Cato al verlo tirado corri para salvarlo pero al mismo
tiempo dos germanos corran hacia el para rematarlo, Cato portaba
en su brazo el estandarte y decidi

enfrentar a ese par de

germanos, Macro logro golpear a uno tirndolo, Cato iba muy rpido
y no pudo detenerse al ver el cuerpo del germano tirado, tropez y
ante tal acto el otro soldado comenz a burlarse de su falta de
habilidad, pero Cato se enardeci y golpeo con el estandarte al
germano.
Cato le retiro la flecha a Macro y al mismo tiempo broto mucha
sangre, comenz a sentir mareos, nuseas y mucho dolor, no quera
seguir perdiendo ms sangre as que se amarro una correa que traa
en su espalda para cortar la hemorragia lo ayudo a levantarse pero
era tal la herida que los estaban alcanzando los dems soldados y
era imposible llegar del otro lado.

Encontraron una puerta dura y resistente en donde pareca ser un

refugio as que decidieron atrincherarse ah pero al cabo de unos
momentos llegaron ms soldados y comenzaron a golpear la puerta.
Cato encontr una salida as que decidi abrirse paso y quemar la
entrada de la puerta y as fue como salieron, saltaron hacia un
establo donde haba unos cerdos los cuales hirieron con la espada,
comenzaron a hacer mucho ruido al retorcerse del dolor los cerdos,
y los soldados por poco y los descubren.
Finalmente

terminaron

de

pasar

los

soldados

no

descubiertos pero Macro empez a buscar entre la paja

fueron
y los

escombros y no encontraba rastro alguno de Cato.

Captulo XIII
Macro luchaba por no ser descubierto entre la paja, entre ruidos
extraos

voces

de

germanos

ambos

mantenan

su

postura

contenan las enormes ganas de toser que les daban debido al humo
que dejaban las llamas, los germanos enloquecidos enterraban las
lanzas en la paja para buscarlos, ellos nunca se movieron e
instantes despus el humo y las llamas eran ms fuertes as que
los soldados decidieron irse, Cato se arrastr evadiendo el humo
pues entra ms abajo estuviera su cabeza menos humo inhalara,
llego al exterior de la casa y aspiro todo el aire frio de la
noche que pudo para sobrevivir, se encontr con el cuerpo tirado
del germano al que antes ya le haba dado con el estandarte,
decidi quitarle la armadura y ponrsela para que de esta manera
pasara un poco desapercibido, no pareca germano pero al menos ya
no pareca romano.
Mientras tanto Macro luchaba por cruzar del otro lado de la caza
arrastrndose entre los fluidos mal olientes de los cerdos, nunca

solt el estandarte e incluso lo uso para apoyar el cuerpo sobre

el mismo.
Macro hacia la lucha por pasar desapercibido entre los aldeanos
germanos que sacaban sus cosas de sus casas y huan ante el
peligro

de

las

llamas

los

romanos,

los

aldeanos

lo

vean

indiferente y de pronto vio venir un soldado germano que se lanz

sobre l y lo desarmo, era Cato quien vena a ayudarlo y lo llevo
a otra casa la cual estaba pegada a la plaza, atreves de ella Cato
golpeaba en la pared para poder cruzar por ah a donde estaba la
cohorte.
Llegaron con todos los dems, se encontraron al tribuno, curaron a
Macro y despus toda la cohorte se vio invadida por los germanos y
las llamas, pareca todo perdido pero a su rescate llego la
caballera que Vespasiano les haba mandado en su rescate.

Captulo XIV
Macro fue llevado con los dems heridos, haba una persona que
se le atribua el nombre de ordenanza era como un enfermero,
Macro gozaba de muchos privilegios por ser el centurin, tena
el privilegio de tener una cama para l solo, una habitacin
personal y atencin mdica para cuando l quisiera. A diferencia
de los dems que deban estar aglomerados en una habitacin por
ser solo unos simples soldados.
Macro

deba

tocar

una

campana

para

tener

la

atencin

del

ordenanza el cual no estaba muy a gusto de atender al centurin,

tena cierto resentimiento pues no le gustaba recibir rdenes. A
su habitacin llego Cato preguntndole al centurin por su
estado, entablaron una pltica donde hablaban de las ultimas
noticias en la cohorte.

Cato en este ltimo tiempo se encarg de organizar a la centuria

sin embargo se quejaba puesto que muchos no lo respetaban,
comento que para l era un poco difcil pues por la forma en la
que llego a ser Optio no fue muy buena, puesto que se gan el
odio de muchos y la envidia de todos, dijo que Piso le ayudaba
con el papeleo puesto que lo mismo hacia el centurin, toda la
parte administrativa y papeleo se la encargaban a Piso.
Mientras tanto Macro sigui internado y con problemas serios en
su pierna deba pasar ah muchsimo tiempo y la espera seria
larga pues l es un hombre de batalla activo y apurado, no un
hombre

tranquilo,

Cato

se

march

despus

de

escuchar

los

consejos de Macro.

Captulo XV
Cato regresaba a lo cotidiano una da ms en el entrenamiento
que

imparta

el

centurin

Bestia,

esta

vez

el

centurin

interrogaba a Cato por su nuevo logro sobre Hroe de Guerra el

mismo que le haban otorgado por salvar a Macro, pero no todos
la vean como un logro al contrario muchos pensaban que se la
haba ganado al igual que su puesto, llegaba el momento de la
alineacin y revisin de las vestiduras y herramientas limpias,
Bestia tena la labor de revisar uno a unos los elementos del
uniforme, tenan que estar limpios y relucientes, Cato haba
estado ocupado una noche antes y obviamente no haba tenido el
tiempo necesario de pulir su uniforme, solo le dio tiempo de
darle un par de brochazos con barniz, pero Bestia era muy listo

y exigente as que Cato temblaba de miedo porque tal vez sera

descubierto.
Le cuestionaron a Cato sobre su logro principalmente Bestia, que
ahora lo trae ms cuidado, sin embargo se marcharon a seguir con
el entrenamiento y esta vez tocaba construir una zanja a las
afueras del fuerte, desgraciadamente a Cato le toco cercas de
Pirax

soldado

con

el

que

mantiene

mucha

ria,

Pulsher

cuestionaba a Cato sobre el ttulo de hroe de guerra incluso le

insinu que si haba dado su cuerpo a alguien para recibirlo,
Cato

se qued en

silencio pero

Pulsher no

contuvo que lo

ignorara y le arrojo tierra a la cara, pronto llego Bestia a

supervisar y noto a Cato lleno de tierra, y de castigo por
notarse cansado le toco limpiar las letrinas.
Cato estaba ms que enfurecido por que se perdera la cena con
Vespasiano si no se daba prisa a limpiar por la noche las
letrinas.

Captulo XVI
Llego al fin la cena de Vespasiano, Cato haba quedado castigado
a limpiar el desage de los baos, tena que limpiar y dejar
relucientes, si no los limpiaba tendra que vrselas con Bestia.
Cato anduvo entre el excremento de toda la centuria y por lo
tanto su olor no sera tan agradable, pero tuvo la idea de
echarse perfume de Una Prostituta.
Llego corriendo a la cena y al llegar se encontr con dos
grandes guardias que le cerraron el paso y le pidieron su
nombre,

el

respondi

los

guardias

con

un

gesto

de

desaprobacin abrieron camino y lo dejaron pasar, se deca en

ese entonces que una de las cosas con mas falta de educacin era
llegar tarde a una fiesta o cena, finalmente Cato se adentr a
un gran patio y vio la gran puerta a la que entro, se encontr a
mucha gente importante y logro ver a Macro y Vespasiano los
cuales le preguntaban sobre su impuntualidad, hablaron de la
comida y le ofrecieron a Cato algunas exquisiteces del lugar,
toda esa comida era muchsimo comparado con las

pobrezas que se

tenan en la centuria.
Cato platico con Macro sobre su pierna y hablo sobre su tardanza
le conto que se haba echado encima un perfume que le haba dado
Pirax.
En otra escena Vitelio hablaba con Flavia sobre el emperador
Claudio el cual apenas se desempeaba en el cargo y estaba bajo
los ojos del juicio social pues dependiendo de su forma de
gobernar se le atribuira una imagen o etiqueta sobre su manera
de gobernar.
Macro no saba leer y lo confeso en secreto a su Optio Cato.

Captulo XVII
Llego el momento de partir de la fortaleza puesto que ya se
haba girado la orden por parte de Vespasiano, el ataque tan
esperado y con ansias hacia Britania, el campamento que se tena
ah era ya de hace ya bastante tiempo, pero desgraciadamente al
partir no podran llevar muchas cosas como ellos quisieran, solo
podan llevar cosas necesarias, herramientas de ingeniera y
solo el centurin podra llevar lo que el necesitara.

Por otro lado una vez que Cato se haba comprometido con Macro a
ensearle a leer para no ser descubierto y destituido de su
cargo deba aprender cuanto ms rpido pudiera, fue ah que
mandaron a Cato por libros de historia de guerra al mercado.
En esta poca de retirada a Britania todos los romanos que se
iran tendran que vender sus cosas puesto que no podran llevar
todas sus cosas.
Cato en camino al mercado por los libros se encontr con una
chica muy linda y delgada sentada en uno de los puestos de los
mercaderes, colgaba de ella un letrero que deca en venta, la
chica volteo y asombro a Cato con sus ojos verdes.
Cato corri a comprar los libros que le haban pedido los compro
y al regresar esperaba volver a ver a esa chica tan hermosa que
le haba cautivado, volteo al lugar y no encontr nada, pero
llego un mercader y le dijo que la haba vendido a una mujer,
Cato

corri

hasta

el

lugar

donde

se

hallaba

la

seora

descubri que era la misma Flavia quien la haba comprado,

intercambio miradas coquetas con la esclava pero se tuvo que
retirar puesto que tena que llevar los libros con Macro.

Captulo XVIII
Flavia hacia todos los arreglos puesto que se tendran que ir de
aquel lugar, todos los esclavos trataban con mucho cuidado las
cosas tratando de no daarlas puesto que la seora era demasiado
estricta, a su puerta tocaba un chico para ser especficos era
el Optio quien luca una gran sonrisa, le hicieron pasar y
enseguida

Flavia

lo

invito

escoger

cualquiera

de

sus

manuscritos poticos que tena en su biblioteca, Cato decidi

tomar unos para el disimulando que solo iba en busca de la

chica.
La esposa de Vespasiano le interrogo sobre si quera ver a la
chica y si tena

algn inters especial en ella,

Cato se

sonrojaba y prefera no contestar.

Pero Flavia no era la nica que lo cuestionaba, al llegar con
Macro le conto que vio a la chica Lavinia y que le gustaba,
Macro sin dudarlo le comenz a dar consejos de como ligar a la
chica y de cul era el precio aproximado para tener una noche
con ella, Macro tena mucha experiencia con las chicas y saba
que haba que darles algo para poder tenerlas, pero Cato le
confeso que lo que el senta por ella iba ms all de solo
atraccin fsica.
Cato se senta muy atrado y senta algo diferente, pensaba que
la poda hacer su esposa, eran sueos guajiros pero el senta
eso, Macro no pudo ms que respetar la decisin de su Optio y
desearle suerte.
Por otra parte Cato haba dejado a su centurin aprenderse las
letras para poder empezar a leer, sin embargo Macro no pareca
tener mucho entusiasmo con las clases para aprender a leer sin
embargo estaba obligado por su cargo poltico.

Captulo XIX
Toda la legin se encontraba en pleno movimiento pues ya tenan
aos asentados en aquel lugar, era muy difcil tener que dejar
tantas cosas y amistades, sobre todo dejara de existir esa
derrama econmica de parte de los soldados.

En casa de Flavia se volva a encontrar el Optio quien la haba

estado visitando muy seguido, claro que Flavia sospechaba que
sus intenciones solo eran las de ir a ver a Liviana, sin embargo
a Flavia desde su forma de ver las cosas y por su edad no le
pareca muy apropiado que Cato tuvieras intenciones ms grandes
que llevarla a la cama.
Y fue as como comenzaron a platicar de la estrecha relacin de
Lavinia con gente de la poltica, su origen habra sido a lado
de un legado y a su vez un breve romance con Vitelio, la chica
no era ms que una persona sentimentalmente inestable que poda
andar de all ac sin preocupaciones pues su papel de esclava
era lo que la tena como un objeto.
Cato le contaba que de hecho el mercader le haba contado un
poco de ella sin embargo no haba profundizado, pero aun as y
con todo lo que le haban contado Cato se mantuvo firme y
decidi ver a la chica aunque todo estuviera en su contra.
Por otro lado Vespasiano sala de su casa para observar el
trabajo de toda la legin y

se

top

con

unos

chicos

que

trabajaban arduamente en un trabajo que el mismo encargo pero al

sentir culpa decidi darles el da y regalarles un poco de oro,
por otro lado Vespasiano comenzaba a observar que Vitelio no
sala de su oficina desde hace bastante tiempo y comenzaba a
levantar sospechas.

Captulo XX
Ya haban emprendido el camino tan largo que les esperaba, y
toda la legin iba en un convoy muy organizado, se daban ordenes
de parar y estas tenan que ser repetidas para que se escucharan

al final de la misma, pronto se dio la orden de parar a tomar un

descanso, Vespasiano haba contratado a unos hombres que tenan
la encomienda de hacer el viaje ms ameno y esta vez llevaban
vino rebajado con agua para aliviar la sed de los soldados, a
todos se les serva un poco para que recuperaran el aliento.
Cato era el encargado de cuidar a la gente de su centuria y
checar que no hubiera rezagados y si as fuera tenan que
presentarse cargos, Cato no estaba acostumbrado a este ritmo de
vida, y por mas cansado que se senta l no deba dejar de
apretar el paso puesto que l era uno de los que por el cargo
deba aguantar al final.
La herida de Macro ya sanaba esta vez no se haba profundizado
tanto como antes, ya haba mejorado bastante aunque de pronto
senta dolor era ya tan solo porque tena un enorme moretn.
El centurin observaba al Optio y recordaba lo que para el
significaba antes, pensaba que l haba valido la pena despus
de todo puesto que haba sido un soldado muy til para la
centuria y de muchsima ayuda para el por qu ahora ya tenan
clases de lectura, es decir, Macro estaba agradecido con el
chico por haber salvado su vida y ahora por ayudarle a leer.
Por otra parte el Optio en ocasiones no lograba concentrarse en
sus tareas debido a que solo pensaba en esa chica que le robo el
corazn, y por tanto pronto llego a l un mensajero con una
carta.

Captulo XXI

El hijo de Flavia y Vespasiano se llamaba Tito y no era ms

que un nio encaprichado, molesto y travieso, esta vez se
encontraban todos los tribunos en una junta muy importante con
el legado, en ella se encontraba el nio inquieto hijo del
legado y esta vez se meti debajo de las mesas y logro llevarse
unos pergaminos con informacin muy importante proveniente del
Emperador

Claudio.

Fue as que el chico corri hasta que fue alcanzado por su madre
y enseguida llego Vespasiano a tomar el documento y proseguir
con la junta.
Vespasiano comento sobre aquellos rumores que se corran sobre
que en algunos ejrcitos los soldados se estaban rebelando en
contra de sus centuriones y realizaban motines al no querer
zarpar rumbo a Britania, porque se deca que al llegar all
nadie saba lo que esperaba, se deca que haba dragones y
monstros que escupan fuego, pero todos ellos saban que nada de
ellos era cierto por lo tanto a todos les favoreca no informar
para nada a los dems sobre esa situacin, pronto Vespasiano dio
las ordenes de salir de aquella tienda de campaa y les dijo que
estuvieran preparados para el da siguiente.
Vespasiano dio un pequeo discurso ante el grupo de tribunos,
comentaba sobre una posible conspiracin de una manera tenue
porque saba que podra levantar sospechas y que el conspirador
podra percatarse y dar aviso, as que Vespasiano despus de
todo decidi dejar de lado esa intriga y poner ms empeo a la
forma de organizar a su legin, as que por ahora el conspirador
que para l era Vitelio pasaba a segundo plano.

Captulo XXII

Cato recibi un mensaje de Lavinia, deca que la chica asistira

en la noche a un lugar detrs de las tiendas de campaa y as
fue como Cato guiado por el amor y la excitacin se atrevi a
ir.
Llego Cato muy nervioso al lugar, silencioso para que los
centinelas no pudieran verlo camino despacio y se logr esconder
detrs de un carro, se agacho y espero la llegada de la chica,
de pronto sinti una mano en su hombro, Cato se asust y solt
un grito se sorpresa, voltio para observar quien era y resulto
ser que era aquella chica, Lavinia lo nico que pudo hacer fue
taparle la boca. Instantes despus escucharon las voces de unos
guardias acercndose y sospechando que haba un ladrn o un
intruso detrs de los carros, mientras ms se acercaban Cato
tomo iniciativa llevado por el deseo y le tomo la mano a la
joven, la apret y acerco su cuerpo hacia l, Cato no poda
creer que estuviera pasando, entonces se acostaron y llevados
por

la

pasin

se

besaron

tocaron

sus

cuerpos

en

plena

obscuridad.
Decidieron irse de aquel lugar y fueron a casa de Flavia, entre
la obscuridad y llenos de excitacin decidieron hacerlo pero no
sin antes usar algo para que no quedara embarazada, entonces
Lavinia sali corriendo entre la obscuridad mientras que Cato se
qued tumbado en un triclinio, pero entonces escucho los pasos
de alguien, Cato se

levant

y tuvo una pelea con aquella

persona, pronto llego un guardia tras los gritos de auxilio de

Cato, y se le cay una antorcha la cual provoc un incendio,
Cato como pudo corri hasta su tienda de campaa donde se

encontr despierto a Pirax quien le cuestiono porque estaba

afuera y que pasaba.

Captulo XXIII
Vespasiano

se

encontraba

furioso,

no

comprenda

como

haba

pasado esto siendo que la guardia de la tienda principal estaba

a cargo de varias personas organizadas, pero se entero que
ciertos centinelas no se encontraban en esos momentos por que
los mando a llamar Plinio para mencionarles sobre las horribles
bestias que se encontraran al llegar a Britania, por supuesto
Vespasiano tuvo que regaar a sus soldados que aquella noche no
cuidaron como debieran y presento cargos hacia ellos adems de
haber rebajado de su cargo al lder de ellos.
Por otro lado durante las investigaciones se dieron cuenta de
que faltaba un pergamino y que se haban hecho unas rajadas a la
tienda del legado y sobre todo se encontraron restos de sangre
en el triclinio lo cual indicaba que el culpable estaba herido.
Por otro lado Cato fue despertado por Pirax quien le cuestiono
sobre restos de sangre en su mano,

se encontraba nervioso

incluso despert ms tarde que todos y no desayuno, pronto le

dijeron que Macro ya le esperaba en su tienda, sali disparado
hacia all, llego y encontr a Piso junto al centurin, pronto
se le comento al Optio que zarparan a hacer guardia y escoltar
a un pez gordo administrativo.
Pronto Pulsher llego a la casa de un tribuno sangrando de un
muslo y quejndose de la persona que le haba causado la herida,
pero para su sorpresa el tribuno que le haba encomendado la
tarea desenvolvi el pergamino y le hizo notar a Pulsher que

estaba vaco, Pulsher solo haba robado un pergamino en blanco,

haba sido engaado por el legado o alguien ya lo haba tomado.

Captulo XXIV
La sexta

centuria de Macro tena que salir

aquel da del

campamento, tenan que llevar acabo esa tarea tan especial,

todos en el campamento los miraban con mucho entusiasmo pues
saban que se encargaran de una tarea especial para la legin,
sin embargo todos tenan cierta intriga al preguntarse qu es lo
que haran y a donde iran, solo el centurin, el optio y el
secretario podan estar enterados de las tareas que realizaran.
Ya en camino al lugar Macro pareca muy feliz, tena mucha
fortaleza, no a cualquiera lo mandan a cubrir tareas especiales
como aquella, por tanto Macro caminaba decidido pero al voltear
a su alrededor miro a Cato muy desdichado, le pregunto el porqu
de su nimo y enseguida el chico se sorprendi, el solo iba
pensando en que iba a pasar cuando las investigaciones llegaran
a l.
Por un momento Cato le hizo pensar a su centurin que estaba as
por que la chica Lavinia no haba tenido relaciones sexuales con
el chico, le tuvo que contar que l estaba cercas del lugar
donde fue la quema de la tienda, pero le aseguro que en lo que
al concierne no haba visto exactamente qu haba pasado.
Pera ya entrados en el tema de encargo, el centurin preguntaba
a su optio sobre aquel Narciso al que recogern y escoltaran,
Macro saba que l poda ser una de las personas muy allegadas
al emperador as que deban tener un trato distinto, Cato pens
antes de contestarle y no le dijo todo lo que saba, nicamente

le mencion que la persona era seria y fra que se le tratara

bien y no habra problemas, siempre y cuando se mantuviera a
distancia y con profesionalismo.

Captulo XXV
La esposa del legado se encontraba en casa, haciendo cartas y
encargndose un poco de la administracin del legado, escriba
una carta especial y secreta cuando escucho una voz a la entrada
de la oficina y era Vespasiano su esposo quien le peda que ya
recogiera sus cosas porque partiran nuevamente para continuar
el largo camino que les esperaba.
Tener

que

recoger

estar

en

movilizacin

continua

no

le

agradaba del todo a Flavia as que en un tono de reclamo

cuestionaba

Vespasiano

sobre

un

descanso

extra

sobre

el

incidente de ayer, incluso dijo que debi haberse casado con

algn senador por que ella no perteneca al ejrcito.
Vespasiano cuestiono a Flavia sobre un listn que casualmente
encontr en el triclinio, se preguntaba de su origen y cmo fue
que llego ah, mientras su esposa trataba de controlarlo para
hacerle ver que haba sido un simple accidente sin embargo el
legado saba que por muy accidental que fuera esto le costara
su puesto si esa persona haba robado algo importante, se
encontraba

preocupado

incluso

triste

tras

pensar

en

su

destino.
Finalmente hablaron sobre el centinela y su estado fsico y
vieron que perda mucha sangre, se preguntaban si deban o no
llevarlo

la

batalla,

acordaron

llevar

una

camilla

provisional y dejar que un mdico se encargara de su salud, sin

duda su estado estaba mal pero era descorts dejarlo atrs tras
haber arriesgado su vida por defender el patrimonio del legado.

Captulo XXVI
Llegaron con aquel hombre, Narciso, un hombre que al parecer
nada tena que ver con la guerra y la milicia, sino todo lo
contrario, era un hombre con buen porte y muy inmiscuido en la
poltica de Roma.
Enseguida el hombre ubico a Macro puesto que era el nico chico
flaco y pequeo, le

pregunto sobre

cmo se

senta

con su

libertad en la milicia, platicaron brevemente y posteriormente

hablo con Macro al cual no le gustaba mucho la idea de escoltar
a un tipo engredo y patn.
Hablo con Macro con este personaje incluso lo hizo sentir menos,
a simple vista por la forma de hablar de Narciso se notaba su
ignorancia sobre temas de soldados, no saba que era un optio,
pero Macro deba ser frio ante tal situacin ya que era su tarea
ser una persona servicial ante los ojos del mismo.
Pronto Narciso dio la orden de acelerar las cosas y comentaba
que

deba

llegar

lo

ms

antes

posible

puesto

que

muchos

polticos de oposicin a sus ideas iban a intentar que l no

llegara a cumplir su objetivo, todos se alistaron y se dio la
orden de buscar a cinco personas a peticin de Narciso para
ocupar el lugar de algunos de sus mozos ya que los de l estaban
enfermos. Fue asi que se gir la orden y de pronto sali una
camilla grande que mas bien era una plataforma en donde viajara

el poltico, como si fuese un rey, junto a el ira su guarda

espaldas.
Macro no muy contento de su cargo que ahora desempeaba dio la
orden de partir rumbo al objetivo encomendado.

Captulo XXVII
La legin llegaba a Durocortoro, necesitaban un descanso muy
forzado, pero era medio da y las cosas se complicaban cada
vez ms, un grupo de nios le arrojaba piedras a los animales
que tiraban de los carros e hirieron a un buey muy grande,
este salto hacia atrs y creo un caos al comienzo del convoy,
el descanso fue forzado aunque Vespasiano estaba consiente
que esto le traera problemas, mando al animal a un grupo de
animales preparados para ser comida y ah ordenaron a todos
detenerse.
Pronto Vespasiano fue a su tienda donde mando a llamar a
Lavinia, la interrogo sobre lo sucedido el da de anoche y le
mostro

el

listn

que

siempre

cuelga

de

su

pelo,

fue

inevitable negarse a hacerse responsable, tuvo que contar y

aceptar

que

la

noche

de

ayer

estuvo

en

la

oficina

de

Vespasiano, pero no conto la realidad, resulta que antes

haba hablado con Flavia sobre la situacin y le dijo que le
echara la culpa a Vitelo para proteger a Cato. La chica dijo
que se haba quedado de ver en la tienda de campaa de
Vespasiano porque tendran intimidad, tambin confeso haber
sido esclava de Plinio, todo comenzaba a cuadrar para el
legado, pareciera que haba una conspiracin en su contra por

parte de esos dos, Vespasiano le crey todo a Lavinia porque

lo dijo de una manera servil y noble, pareca que todo
encajaba, en ningn momento comentaron algo de Cato, despus
la chica se pudo retirar y al salir ya la esperaba Flavia
para preguntarle qu tal le haba ido y que senta, en un
momento pareca que era un plan de Flavia.

Captulo XXVIII
Tan pronto caa la noche la sexta centuria decidi dar un
descanso a la marcha para poder comer y dormir con tranquilidad.
Sin embargo cuando tendran un brindis final una flecha atraves
la copa del secretario imperial y este a su vez pego un grito de
pnico y agona, Macro y Cato comenzaron a girar ordenes de
defensa, una parte de la centuria ya descansaba as que el
retraso fue inminente, Narciso salto de su camilla y se coloc
debajo del carro de la centuria tras ver ms flechas acercarse a
l, pronto Macro ordeno crear una lnea de defensa alrededor del
secretario, entre la oscuridad nadie poda ver nada pero a lo
lejos

se

escuchaban

caballos

gritos

de

guerra,

los

legionarios no les dio tiempo de ponerse las armaduras y no

tuvieron ms remedio que esconderse en sus escudos por completo,
Cato tambin estaba en la batalla incluso mato a un hombre muy
fornido, las cosas se calmaban cuando vieron caer a muchos
enemigos que tenan las caras barbudas, pero tiempo despus
volvieron a atacarlos, ahora si vendran los caballos y todos se
amurallaron al borde del carro donde se esconda el secretario
pero nada contuvo la ira de los enemigos quienes a todo lo que
daba intentaban abrirse paso, pero no contaban con la inesperada
desesperacin de los romanos de defenderse, saltaron todos al

mismo

tiempo

dejaron

perplejos

los

enemigos

quienes

comenzaron a caer, al paso del tiempo pareca una victoria

romana en donde por rdenes de narciso a los heridos enemigos se
les tomo como rehenes y se les llevo con ellos. Pronto la
centuria

llego

al

campamento

general

donde

se

encontraban

alrededor de cincuenta mil soldados romanos y fue ah donde

termino la tarea de la centuria como protectores de Narciso.

Captulo XXIX
Pronto ese mismo da llego la legin instalndose justo alado
de la centuria de Macro, Vespasiano observaba feliz a su
mujer

pues

ella

saba

que

el

recorrido

al

fin

haba

concluido, Vespasiano no tardo en ir al campamento general en

busca de los dems legados, se encontr a Narciso y a Plautio
con quienes se reuni en una junta extraordinaria, que ms
bien

pareca

polticos

que

una

pltica

ocurran

de
su

todos

los

alrededor,

acontecimientos
hablaron

de

lo

importante que era tener de su lado al ejrcito, planearon

acciones y se despidieron.
Al salir mando Vespasiano a llamar a Macro para que se
rindiera un informe detallado de todo lo que haba ocurrido y
las bajas, le pregunto especficamente cul era su opinin
crtica acerca de Britania, muchas cosa se hablan sobre ella
y por ella es que se haba hecho el motn antes de zarpar a
los barcos.
Macro no pudo ser ms sincero, l no saba muchas cosas y
tena un ligero temor pero todo era normal, le hizo ver que
l poda ser servicial y que era leal al ejrcito, comentaba

que

todos

sus

soldados

incluso

pensaban

que

haba

cosas

horribles debajo del agua pero que no tenan nada cierto, por
otra parte le comento que haba un rumor sobre un motn de
soldados.
Vespasiano quedo tranquilo despus de saber que su ejrcito
an era leal y que sera un poco difcil que se dejaran
influenciar por los dems, pero sin duda tena mucha intriga
sobre quienes podran ser los traidores al emperador y tena
un poco de miedo que todo se viniera abajo gracias a ellos.

Captulo XXX
Cato segua en busca de la chica Lavinia porque tena mucha
incertidumbre de que le haba pasado a ella y a su vez tena
miedo

por

el

centinela

que

haba

quedado

herido,

espero

afuera de las tiendas del legado y vio pasar a la chica con

el pequeo Tito en manos, y detrs Flavia, pareca que todos
iba bien y el chico se retir a la cena, ese da le tocaba
hacer guardia y recibi la invitacin de Macro para salir a
divertirse y echarse unas copas.
Tiempo despus llego a los campamentos de la centuria dos
tipos altos misteriosos, pidieron entrar para ver al legado y
despus de bastante tiempo de discusin lograron entrar y al
llegar a la tienda principal resulto que era Narciso y su
guardaespaldas, entro a platicar sobre los planes que les
aguardaban y a interrogarle sobre lo ocurrido la noche del
incendio, amenazo a Vespasiano y le hizo saber que el que
manda es el por ser ntimo amigo del emperador Claudio, hizo

que Vespasiano se tragara su orgullo por miedo a que le

pasara algo.
Le

confeso

todo

lo

que

dijo

Lavinia

incluso

menciono

Vitelio, al retirarse de su tienda, Narciso visito la casa de

un tribuno, y resulto que Vitelio era el

espa, era la

persona que haban mandado para espiar al legado, nadie saba

esto pero despus Narciso le cuestiono que por que haba
asistido el mismo dia que se robaron el pergamino a la tienda
de Vespasiano, le comento que la chica lo acus de haberla
citado ah y haberla hecho esperar a lo que Vitelio se neg a
reconocer y tacho de mentira.

Captulo XXXI
El joven Cato llego al lugar en donde se encontr con Flavia,
a quien saludo de una manera muy alegre, le pregunto por
Lavinia

le

dijo

que

se

encontraba

haciendo

un

lugar

especial donde la pasara Tito y que ella estaba al mando de

ms esclavos.
Pronto Cato sin ms que decir corri al lugar donde se
situaba la joven, tomo aire y entro a la habitacin donde
sorprendi a la chica quien se encontraba dibujando en una
mampara un mural de una vaca, la chica se levant emocionada
y

le

dijo

que

se

alegraba

de

verle,

Cato

enseguida

le

pregunto por qu no haba llegado a la cita aquel da,

Lavinia dijo que en camino a su tienda se encontr con Flavia
quien le ordeno que cuidara a Tito porque pareca estar
enfermo

lo

cual

era

falso,

Cato

asombrado

le

dijo

al

centinela

lo

haba

matado

otro

hombre

que

tambin

se

encontraba en la tienda de Vespasiano, la joven no saba de

esta situacin y se qued extraada.
Por otro lado se besaron al saber que ambos estaban a salvo y
despus

comento

Lavinia

que

le

haba

echado

la

culpa

Vitelio de haberla citado en esa tienda, todo esto tras

ordenes de Flavia quien al parecer ya tramaba algo, Cato
estaba preocupado pues por su culpa otra persona pagara
acciones que no haba cometido, pero por otra parte agradeca
de que ahora las sospechas ya no recaan en l,

pronto

Lavinia jalo al chico a un lugar escondido lejos de los dems

y lo recost sobre un colchn hecho de tapetes mientras se
quitaba

la

tnica

que

llevaba

Cato

con

su

corazn

palpitante solo la miraba, mientras la chica deca En que

nos quedamos?.

Captulo XXXII
En un teatro improvisado se encontraban todos los jefes de
los

ejrcitos

algunos

soldados,

legionarios

eran

de

varias cohortes, se dio una lucha entre gladiadores, los

romanos gozaban de ellos y al mismo tiempo tomaban vino, de
pronto al rea de batalla salto Narciso quien con una actitud
prepotente peda a los legionarios no fueran unos cobardes y
afrontaran las cosas, los haca sentir menos pero todo era
actuado, incluso pidi que entregaran sus armas y lloraba
para hacer esto ms real, nadie lo tomaba enserio puesto que
no era un ciudadano romano y era dbil.

Al trmino de su actuacin Narciso pens que habra un cambio

en

su

pensar

borrachos

pero

tirados

la
en

fiesta
varios

sigui

lugares,

todos
este

terminaron
momento

fue

aprovechado por Vitelio y Pulsher quienes pasaron y dieron un

recorrido con un carro para recoger a varios legionarios que
no hacan nada por defenderse puesto que estaban tomados,
para Pulsher fue fcil amarrarlos y llevrselos dentro del
bosque,

los

amenazaron

con

dar

nombres

de

sus

amigos,

instantes despus los degollaba.

Pero al trmino de su trabajo Pulsher llevo a Vitelio una
lista de nombres que haban dado los legionarios, Vitelio la
tomo y miro si haba algn conocido pero tiempo despus vio
resaltar el nombre de Aurelio a quien le atribuan los planes
conspiratorios en contra del emperador.
Todos estos legionarios se consideraban de oposicin debido a
que ya eran viejos y amigos de los emperadores anteriores.

Captulo XXXIII
Sali el barco rumbo a Britania, todos estaban muy asustados
debido a que ellos eran hombres de guerra en tierra mas no
marineros, se mareaban incluso vomitaban por la borda, todos
se sorprendieron cuando lograron ver aquella isla a lo lejos
con barcos en la costa, al parecer no haba muestra de
resistencia ni de guerra.
Durante el transcurso Macro venia recordando lo que haba
pasado la noche anterior, Vespasiano le haba encargado una
misin en la que solo podra llevar a diez hombres y a su

optio, la tarea consista en recuperar un arcn que se haba

hundido junto con un carro en la isla de Britania, nadie
deba enterarse por que posiblemente era un tesoro con muchos
metales

preciosos,

al

emperador

le

resultaba

beneficio

regalar oro a sus jefes del ejrcito para as tenerlos de su

lado si todo sala bien Macro se llevara un buen premio,
entonces de esta manera se motivaba.
Al llegar a desembarcar de la isla se enteraron que Aurelio
haba desaparecido, tambin se le haba dado un mapa al
centurin para que le fuera fcil llegar pero sin duda se
tendran que enfrentar a los pobladores y nativos del lugar,
era una tarea peligrosa pero era Vespasiano, y tal vez ah
haba influencias de Narciso quien haba dado el espectculo
para levantar el motn.
Todos se vean sorprendidos al saber que esa misma noche
saldran

en

busca

del

carro

enfrentndose

incluso

lo

desconocida que era la isla para ellos.

Captulo XXXIV
Ya haban ido en busca del carro, era una noche llena de
neblina, al salir del campamento se les cuestiono el porqu
de

su

salida

incluso

se

le

pregunto

al

legado

el

cual

contesto que era desertores del ejrcito puesto que si ellos

fallaban o les pasaba algo sera fcil esconderlos.
Salieron del campamento, caminaron un buen rato hasta hacer
una parada y decidieron colocar su tienda, saban que deban
descansar aunque el trabajo deba ser rpido si queran estar

a salvo, pasaron la noche en medio de la nada, donde se

mantena un silencio absoluto y para Cato que gran parte
vivi en la ciudad era desesperante y agobiante, solo se
escuchaba el resoplido de las mulas y el ruido de las llantas
del carro, pronto llego la maana con un sol abrazador aunque
por la gran capa de neblina no se lograba ver bien, pero
Macro enseguida dio la orden de recoger y avanzar. Pasado un
momento y debido al cansancio Macro se dio cuenta que sus
soldados no daban para ms y an tenan que caminar, por
tanto Macro decidi tomar un descanso en lo que se mandaba a
Cato a reconocer la zona, Cato se resbalo al subirse en un
musgo que se destroz, pero al caer se dio cuenta de que
debajo de ellos haba partes de rboles los cuales eran una
seal de que ya andaban cercas del objetivo pero no le
creyeron y decidieron quedarse a descansar, pero al momento
que el chico se recargo en lo que pareca un tronco resbalo y
no era nada ms y nada menos que uno de los ejes del carro el
cual corroboro Macro al ver una de las abrazaderas de

hierro

que sostenan al carro.

Captulo XXXV
Los hombres de Macro siguieron desenterrando el arcn, pero al
terminar se dieron cuenta de que estaba muy pesado pero en buen
estado, algo importante deba estar ah, la noche comenzara a
caer y sin avisar se escuch llegar unos caballos, era Vitelio y
Pulsher

junto

otros

seis

sirios,

quienes

les

pidieron

entregaran el arcn para llevarlo al legado, Macro se neg y

pidi que se fueran pues esta era una tarea especial encargada
por Vespasiano personalmente, al ver la negativa Vitelio decidi

marcharse pero instantes despus tras alejarse regreso lanzando

flechas a los legionarios pero todos se tiraron al suelo con
excepcin de uno, todos se cubrieron detrs de la carreta y
mientras las flechas caan a su alrededor y otras lograron
impactar en las piernas de un par de legionarios, la situacin
sigui as por un tiempo
enfrentarlos

sigilosamente

hasta que Cato tuvo la idea de

al

dejar

de

cesar

las

flechas.

Vitelio peda que se rindieran pero para sorpresa de ellos Macro

ya haba llegado por un costado a las espalda de ellos quienes
atacaron, pelearon incluso Cato al ver los movimientos decidi
atacar para defender a sus hombres eran ocho de cada lado los
legionarios lograron matar a unos y hacer correr a otros,
Vitelio enseguida sali a galope sobre su caballo junto con
Pulsher y se desvaneci su silueta en la niebla.

Ms tarde ellos se recuperaban mientras escucharon a otro

caballo

se

escondieron,

al

acercarse

lo

tumbaron

del

caballo resulto ser Vitelio quien vena escondindose de los

Togodumbos y tena la tarea de avisar a Vespasiano para estar
atento y no perder a medio ejrcito, entonces solo con esa
condicin

los

legionarios

lo

dejan

libre

pero

se

las

cobraran.

Captulo XXXVI
Haban dejado escapar a Vitelio confiando en el al perdonarle la
vida porque saban que los enemigos se acercaban y alguien deba
avisarle

al

ejercito

romano,

ellos

mientras

pensaban

como

ocultarse para no ser vistos por el ejrcito britano, a Macro se

le ocurri meterse en una zanja que pareca cueva y tena una
pendiente, as que ordeno mover la carreta hacia la pendiente

con todo y animales para que no fueran descubiertos por los

enemigos, una vez adentro Cato y Macro se asomaban lentamente
para observar a los soldados que hablaban una lengua rara, se
sorprendieron al ver que eran cerca de nueve mil hombres los que
acababan de pasar frente a sus ojos con caballera carretas y
carros de guerra.
Vespasiano sigui su camino para lograr llegar con el legado
pero su caballo ya no poda ms, haba hecho una pausa para
dejarlo descansar, pero de pronto escucho ruido y la ligera
sensacin de que alguien se diriga hacia su ubicacin, salto
del susto y al ver a su caballo nervioso pero listo para correr
de

nuevo

intento

montarlo,

el

ruido

del

caballo

llamo

la

atencin de las personas que se acercaban curiosas. Sali a

galope y llegaron unos tipos con un decurin, parecan ser los
exploradores que haban mandado para reconocer la zona.
Vespasiano recordaba lo mucho que lograra si tuviera el arcn
en sus manos pero no fue as, mientras tanto Macro y Cato
salieron en busca de encontrar los campamentos y cuando afn
vieron a los suyos caminaron hacia ellos para saber si ya
estaban enterados de que haba soldados en camino, por otra
parte se notaba que en ese entonces ya haba una gran ambicin
por el oro, incluso poda corromper a las personas y estaba por
encima de todo segn unos.

Captulo XXXVII
Vespasiano se encontraba en su tienda recordando a su esposa
y a su hijo y el tiempo que pasara para volver a verlos,
pero estaba decidido a hacer bien su trabajo pues mientras

mejor y ms rpido lo hiciera seria bien remunerado, sali de

su cama para tener todos los preparativos para el ejercito
que saldra hoy en busca de los britanos.
Mientras tanto Cato fue mandado por su centurin a caballo
para avisarle a Vespasiano sobre la invasin, ya que dudaban
en

que

Vitelio

lo

haya

hecho,

Cato

dejo

atrs

sus

compaeros heridos y dems, fue a galope en busca del legado,

pero para su sorpresa un par de britanos, corran en caballo
tras l, pareca que lo alcanzaban, sin embargo Cato golpeaba
al caballo para indicarle que tena que ser ms rpido,
pronto llego la hora de subir la ltima colina y fue ah
donde casi era alcanzado por los enemigos, al llegar a la
cima Cato imaginaba que sera alcanzado por una flecha o una
jabalina entonces decidi sacar su espada y enfrentarlos al
mismo tiempo que a lo lejos vea una patrulla romana por lo
cual se sinti aliviado, volteo para ver a los enemigos pero
para su sorpresa ellos ya no estaban. La patrulla lo retuvo y
le pregunto su nombre que al ser escuchado de inmediato fue
detenido

por

que

se

le

consideraba

buscado

por

ser

un

desertor, Cato repeta que solo buscaba darle un mensaje a

Vespasiano, al llevarlo ante Plautio el chico repiti lo
mismo, Plautio dudaba del pero saba que si el chico tena la
razn sobre la emboscada su carrera se vendra abajo si no le
hacan caso, as que dejaron ir al chico a darle el mensaje.

Captulo XXXVIII
El legado sali del campamento con una gran parte de
ejrcito para dar una vuelta por las tierras en plan de

instruccin,

no

iban

preparados

para

luchar

incluso

Vespasiano admiraba la naturaleza, llegaban marchando a

un lugar que se haca muy estrecho debido a los rboles y
por lo tanto deban romper la lnea, pasaban en pequeas
columnas desorganizadas y desconcentradas, Vespasiano iba
al frente para dar rdenes y observaba a un ciervo que se
encontraba parado a la mitad del bosque,

lo intento

matar un general pero el siervo sali corriendo tras el

bosque con neblina, y detrs de l fue el general quien
desapareci y al instante vieron salir a un grupo de
hombres

en

silencio,

eran

los

britanos

estaban

emboscando a los legionarios despistados, nadie estaba

preparado para la guerra as que corrieron un poco hacia
atrs pero el enemigo lanzo una primer oleada de flechas,
pocos fueron los impactados y tras ellos sali otra
lluvia de flechas pero esta vez los romanos ya estaban en
posicin de guerra.
Pronto llego Cato pero demasiado tarde la emboscada ya
estaba dando bajas romanas y todo pintaba para que esta
fuera una masacre, Cato se incorpor a la lnea de guerra
junto a el tambin estaban sus compaeros de guerra
incluso

Vespasiano

haba

decidido

morir

junto

su

ejrcito, pero en ningn momento los soldados romanos

pensaban retroceder.
Captulo IXL

La

batalla

continuaba

pero

con

desventaja

de

los

romanos, pero a lo lejos se escuchaba un ruido, era

Togodumno el jefe de todos aquellos enemigos, salto en un
carro para intentar matar algunos romanos, paso mucho
tiempo en lucha cuando se escucharon unas trompetas que
parecan relevos para una de las dos tropas haba mucha
incertidumbre pero todos mantenan el pie en la batalla,
eran ms romanos que venan detrs de los britanos, al
saber esto los britanos saltaron a correr tras el primer
lugar que les condujera a un buen lugar.
Vespasiano alzo un grito de guerra y dijo que deban ser
alcanzados y el legado se centraba principalmente en
Togodumno quien se abri paso a toda prisa para salir del
problema, pareca que estaban salvados y se vea como
toda una victoria.
Por otro lado Macro a lo lejos poda ver que se acercaban
hacia l un Macro organizo a sus hombres y fueron contra
ellos, los hombres parecan sorprendidos y fue as como
uno por uno era eliminado.
Haba un guerrero grande, quien reto a Macro y peleo con
l a muerte, el hombre intento asfixiar sin xito al
centurin pues este le termino encajando la espada en un
costado y Macro sali superviviente.
Captulo XL

Todos llegaban al campamento despus de la cansada

lucha incluso Macro haba prometido un brindis, todo
pareca felicidad sin embargo estaban a la espera de un
nuevo ataque, se le reconoca a Macro que all matado a
Togodumno, tambin haba trado el arcn con todo el
tesoro que traa dentro, y se le haba reconocido como
uno de los grandes y tendra el agradecimiento especial
puesto

que

sus

acciones

le

ayudaran

incluso

al

emperador, posteriormente tambin le haban comentado

sobre lo que haba pasado con Vitelio.
Momentos despus Vitelio y Vespasiano se encontraban en
la tienda y se le hizo al tribuno un gran interroga
miento sobre lo que le haba ocurrido.
Todo sali bien sin embargo las cosas con Vitelio no
quedaban bien se negaba a escuchar las acusaciones en
su

contra

las

tomaba

por

falsas

eran

solo

acusaciones de palabras.
Macro y Cato se encontraban felices de la vida mientras
vean a sus prisioneros de guerra que seran enviados a
Roma junto con el botn que ya se tena pues el arcn
sera enviado al emperador en barco, y pensaban que
podra
esclavo.

haber

pasado

si

Cato

hubiera

seguido

como