Ruiz Marianetti 2005
Ruiz Marianetti 2005
Ruiz Marianetti 2005
RAIMUNDO
MARIO
C/
MARIANETTI, DANIEL
Y GUTIERREZ, TERESA
S/
DAOS
PERJUICIOS.CAUSA N: 398/1.R.S.D:
26 /05.-
Folio N:245
01
Roberto Alonso, Jos Nicols Taraborrelli y Ramn Domingo Posca, para dictar
pronunciamiento en los autos caratulados "RUIZ, RAIMUNDO MARIO C/
MARIANETTI, DANIEL Y GUTIERREZ, TERESA S/ DAOS Y
PERJUICIOS CAUSA Nro: 398/1 ,habindose practicado el sorteo pertinente
-art.168 de la Constitucin de la Provincia de Buenos Aires-, result que deba
ser
observado
el
siguiente
RUIZ, RAIMUNDO
MARIO C/ MARIANETTI,
DANIEL Y GUTIERREZ,
TERESA
S/
DAOS
PERJUICIOS.
CUESTION
Es justa la sentencia apelada ?
A LA CUESTION PLANTEADA el Dr. RAMON DOMINGO POSCA
dijo:
I. La sentencia.
El seor juez de primera instancia dicta sentencia a fs. 294/300 vta.,
haciendo lugar a la excepcin planteada por Teresa Catalina Gutierrez. Asimismo
rechaza la demanda promovida por Raimundo Mario Ruiz contra Daniel
Marianetti y Teresa Catalina Gutierrez. Impone las costas a la parte vencida y
regula los honorarios de los profesionales intervinientes.
II. Los recursos.
A fs. 302 apela la parte actora. El recurso es concedido libremente a fs.
303. A fs. 307 la Dra. Ana Mara Telechea apela los honorarios regulados a su
favor, por bajos. Dicho recurso se concede en relacin a fs. 329.
A fs. 355 se llama a expresar agravios.
A fs. 362/365 expresa agravios la parte actora. A fs. 369/370 Teresa
Catalina Gutierrez contesta la expresin de agravios.
III. Los agravios.
IV. La solucin.
1. Primer Agravio. El boleto de compraventa de fs. 8, de fecha Junio de
1995, ha sido suscripto por el seor Daniel Marianetti en su carcter exclusivo de
propietario, de modo que como se afirma en la sentencia apelada, la cnyuge del
vendedor resulta ajena a la relacin contractual. (doct. arts. 1137, 1197 CCivil).
La circunstancia relacionada con el eventual conocimiento que la cnyuge
no propietaria pudiera tener con referencia a la venta o a la hipottica percepcin
del precio, no le dan el carcter de legitimada pasiva en las presentes actuaciones.
La jurisprudencia ha expresado: El rgimen de bienes propios del
matrimonio no altera aqul que a stos les corresponde intrnsecamente. A ese
rgimen propio de los bienes en general, se agrega extrnsecamente para las
personas casadas el que corresponde a lo que en nuestro derecho, se da el
nombre de sociedad conyugal. De ah qu, en el caso de los bienes
gananciales (los propios quedan fuera de cuestin) el sistema bsico de
propiedad no se altera: ser su propietario aqul de los cnyuges en cabeza del
cual se haya constituido el derecho, ya se trate de bienes en general o de cosas;
la titularidad es pues la que determina el derecho, junto a las obligaciones y las
responsabilidades anejas. La interferencia del rgimen propio (externo) de la
sociedad conyugal aparece como proteccin de los derechos patrimoniales del
cnyuge no titular que, frente a los actos de disposicin que realiza el esposo
propietario, se concreta en una limitacin a la facultad de disponer libremente,
instrumentada legalmente a travs del asentimiento que debe prestar el cnyuge
no disponente (no titular) lmite a tutela que en manera alguna altera aqul
rgimen intrnseco de los bienes. Nada obsta en la ley a que el asentimiento
conyugal sea prestado coetneamente con el acto de disposicin, o por
anticipado (pero especfico); el no disponente (no titular) no es parte en el
objeto de ste litigio (ver escrito de demanda fs. 21/vta., con cargo de Receptora
de fecha 12 de abril de 1996).
A fs. 63 obra copia del oficio respectivo, diligencindose la medida con
fecha 25 de Junio de 1996 (ver fs. 83/89) y tomndose nota del embargo con
fecha 8 de Julio de 1996 (ver fs. 84 vta).
Tambin tengo a la vista copias certificadas de la causa: Gutierrez,
Teresa Catalina c/ Marianetti, Daniel s/ Divorcio Vincular. A fs. 100/102
obra acuerdo de fecha 1 de Julio de 1999 y en lo que concierne al automotor
controvertido, la clusula Tercera expresa: En razn del convenio que se celebra
por el presente la Sra. Marianetti en autos Gutierrez, Teresa C. c/ Marianetti,
Daniel s/ Medidas cautelares en trmite por ante este mismo Juzgado,
comprometindose a suscribir la documentacin necesaria a tal fin y corriendo los
gastos que demande el levantamiento de esta medida a cargo exclusivo del Sr.
Marianetti (ver fs. 101 vta).
Con relacin al levantamiento del embargo, ello se ha evidenciado en la
causa con la documentacin de fs. 201/202, de fecha 15 de Abril de 2002 (ver
oficio de fs. 203). El informe de Dominio expedido por el Registro Nacional de la
Propiedad del Automotor expresa que el automvil controvertido no registra
prenda, embargos o inhibiciones.
La doctrina ha expresado: Quien ha cumplido con las obligaciones a su
cargo tiene derecho a exigir el cumplimiento con ms daos y perjuicios o
resolver el contrato, en cuyo caso debe retrotraerse la situacin al estado
anterior y obviamente restituir a la otra parte lo recibido. (Jorge Mosset
Iturraspe-Miguel A. Piedecasas: Cdigo Civil Comentado- Contratos. Parte
General Rubinzal-Culzoni Editores, Santa Fe 2004, pg. 452); (CNCom., Sala
E, LL 1992-E-193). Los autores citados, con relacin a los pretensos daos y
perjuicios, dicen La resolucin da derecho al acreedor al resarcimiento de los
daos y perjuicios y ese derecho nace con la mora en el cumplimiento del
contrato, y si bien es cierto que la devolucin de las sumas adelantadas para el
8va.pos), sin que ello agote la falta de admisin de los rubros restantes al anticipar
que tampoco han sido objeto de prueba concreta.
Todo dao debe ser cierto y no meramente hipottico o conjetural.
2.1. Privacin de uso.
En base a ello he de desestimar la pretensin de privacin de uso,
siguiendo la doctrina legal del Superior Tribunal Provincial, sustentada en el
criterio que la mera privacin de uso de un bien no resulta suficiente per se para
acreditar el perjuicio sufrido desde que, por no tratarse de un dao in re ipsa,
debe demostrarse su existencia fehacientemente para ser indemnizable.(SCBA,
Ac. 40095 s 22-8-1989, AyS 1989-III-56; B15001, JUBA). Digo ello no obstante
que la jurisprudencia ha reconocido que la falta de transferencia del rodado al
menos representa una restriccin para su utilizacin.. En el caso el actor ha
reconocido que utiliz el automvil parcialmente ya que: Por el hecho de no
producirse la transferencia tena temor del robo (6ta. pos., fs. 175). Al respecto,
el testigo de fs. 177/vta., expresa que el actor se negaba a utilizarlo o se limitaba,
como consecuencia del estado es decir anormal de la transferencia, por temor a los
inconvenientes que le hubiera acaecido por la anormalidad existente.(5ta, resp).
Sin perjuicio de ello, el rubro se aprecia an con mayor rigurosidad cuando
se trata de responsabilidad contractual. As se ha sealado: No obstante, en el
rgimen de la responsabilidad contractual, slo se indemnizan las
consecuencias inmediatas y necesarias, extendindose la indemnizacin a las
consecuencias mediatas cuando media incumplimiento malicioso (lo que sera
un dolo calificado, segn las enseanzas de Borda: Tratado, Obligaciones,
t. I, p. 157, ns. 143/145...).
Ahora bien, la doctrina segn la cual la mera privacin de un bien
(automvil en el caso) es indemnizable ha sido desarrollada en materia de
responsabilidad extracontractual. En cambio, en materia contractual y sea
4. La imposicin de costas.
Las costas de ambas instancias deben ser impuestas, por el principal, a la
parte demandada vencida. (art. 68 CPCC) y los relativos a la excepcin de falta de
legitimacin pasiva opuesta por la codemandada, a la actora vencida. (art. 69
CPCC).
Las costas de Alzada, atento a la forma en que prospera el recurso deben
ser impuestas en un 70% a la parte demandada y en un 30% a la parte actora. (art.
68 2da. Parte CPCC).
Deben diferirse las respectivas regulaciones de honorarios para su
oportunidad. (arts. 31, 51 Decreto Ley 8904/77).
Por todo lo expuesto, voto esta cuestin PARCIALMENTE POR LA
NEGATIVA.
CONCLUSIN.
Por todo lo expuesto deben admitirse parcialmente los agravios, y
establecer: 1) Corresponde confirmar la sentencia apelada en cuanto hace lugar a
la excepcin de falta de legitimacin pasiva. 2) Revocar la sentencia apelada en
cuanto rechaza la demanda, la que se admite y en consecuencia corresponde
decretar la resolucin del contrato, condenando a la parte demandada a abonar al
actor la suma de pesos once mil quinientos ($ 11.500) dentro de los diez das de
quedar firme la presente, con ms sus intereses a la tasa pasiva es decir aquella
que pague el Banco de la Provincia de Buenos Aires en los depsitos a treinta
das, vigente durante los distintos perodos de aplicacin y por aquellos das que
no alcancen a cubrir el lapso sealado, el clculo ser diario con igual tasa. (doct.
arts. 622 Cdigo Civil), desde la fecha de la notificacin de la demanda 3 de
Octubre de 2000 (ver. fs. 58), y hasta el efectivo pago, debiendo el primero
restituir el automvil, objeto de litigio, todo ello bajo apercibimiento de ejecucin.
3) Desestimar los rubros privacin de uso, lucro cesante y dao moral
reclamados. 4) Declarar abstracto el recurso de apelacin interpuesto a fas. 307.
5) Las costas de primera instancia deben ser impuestas, por el principal, a la
parte demandada vencida. (art. 68 CPCC) y los relativos a la excepcin de falta de
legitimacin pasiva opuesta por la codemandada, a la actora vencida. (art. 69
CPCC). Las costas de Alzada, atento a la forma en que prospera el recurso deben
ser impuestas en un 70% a la parte demandada y en un 30% a la parte actora. (art.
68 2da. Parte CPCC). Deben diferirse las respectivas regulaciones de honorarios
para su oportunidad. (Arts. 31, 51 Decreto Ley 8904/77).
En consecuencia y de conformidad con los argumentos vertidos
precedentemente, a la CUESTION planteada VOTO PARCIALMENTE POR
LA NEGATIVA.
A la misma CUESTION planteada, los Dres. TARABORRELLI y
ALONSO, por iguales consideraciones e idnticos fundamentos, adhieren al
criterio del Seor Juez preopinante, VOTANDO PARCIALMENTE POR LA
NEGATIVA.
Con lo que se termin el Acuerdo dictndose la siguiente:
SENTENCIA
AUTOS
VISTOS: