La Deidad de Cristo
La Deidad de Cristo
La Deidad de Cristo
Cristo
Por Jess Briseo Sanchez
INTRODUCCION
La base fundamental del cristianismo, la piedra angular del edificio de la
salvacin, es la creencia de que Jesucristo es el Hijo de Dios, el Verbo
Encarnado; Omnipresente, Omnisciente, Omnipotente y Eterno. Plenamente
Dios y Uno con el Padre y el Espritu Santo.
LA VOZ DE LA PROFECIA
Contrario a lo que pudiera pensarse, la naturaleza divina de Nuestro Seor
Jesucristo no es una doctrina originada en la iglesia o producto exclusivamente
del Nuevo Testamento. Que el Mesas esperado por el pueblo de Israel era Dios
mismo esta patente en las proclamaciones de los profetas del Antiguo
Testamento.
Por ejemplo, el profeta Isaas, aproximadamente setecientos aos antes del
nacimiento de Cristo, anuncio as su encarnacin:
Porque un nio nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su
hombro; y se llamar su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre
Eterno, Prncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrn lmite,
sobre el trono de David y sobre su reino, disponindolo y confirmndolo en
juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehov de los
ejrcitos har esto. Isaas 9.6-7
Aunque este pasaje tiene su lugar en los acontecimientos que sucederan en
Israel, por supuesto que la mayora de estas predicciones solo pueden ser
reservadas tanto para el Mesas como para su reino eterno.
El nio que sera dado a los judos mediante un nacimiento especial, seria
conocido como Dios Fuerte, Padre Eterno, la paz de este prncipe divino no
tendra fin, reinara sobre el trono del rey David, y esto sera para siempre, y con
el poder de Jehov. A nadie sino a Cristo y a su iglesia se pueden otorgar
semejantes referencias.
De igual manera, el profeta Jeremas, seis siglos antes del ministerio de Jess, lo
predice de esta manera:
He aqu que vienen das, dice Jehov, en que levantar a David renuevo justo,
y reinar como Rey, el cual ser dichoso, y har juicio y justicia en la tierra. En
sus das ser salvo Jud, e Israel habitar confiado; y este ser su nombre con
el cual le llamarn: Jehov, justicia nuestra. Jeremas 23.5-6
Este pasaje habla del retoo de David, osea Cristo, de su reino y de su ministerio
justificador, de la salvacin que traera y, sobre todo, del nombre de ese
Redentor: Jehov, justicia nuestra. La palabra Jess significa Dios salva.
Estos textos demuestran la divinidad del Redentor esperado por los judos.
SU IDENTIFICACION CON JEHOV
Diversos pasajes del Antiguo Testamento, que se refieren expresamente a
Jehov, son conferidos a Jess de Nazaret, identificndolo con la Divinidad.
Por ejemplo, Zacaras 12.10 dice:
Y derramar sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusaln,
espritu de gracia y de oracin; y mirarn a m, a quien traspasaron, y llorarn
como se llora por hijo unignito, afligindose por l como quien se aflige por el
primognito.
En este texto mesinico, Jehov Dios est hablando de los moradores de
Jerusaln, quienes lo miraran a l, a quien traspasaron, habla del llanto por hijo
unignito, de la afliccin por el primognito.
Este texto es aplicado a Cristo en la cruz por el discpulo amado, quien en Juan
19.36-37 dice:
Porque estas cosas sucedieron para que se cumpliese la Escritura: No ser
quebrado hueso suyo. Y tambin otra Escritura dice: Mirarn al que
traspasaron.
En la crucifixin de Jess, el apstol inspirado Juan vera el cumplimiento de la
profeca mesinica de Zacaras. Juan est diciendo, que Jess en la cruz es el
mismo Jehov que sera traspasado.
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Y
aquel Verbo fue hecho carne, y habit entre nosotros (y vimos su gloria, gloria
como del unignito del Padre), lleno de gracia y de verdad. Juan 1.1, 14
Ms que decir que el Verbo era Dios, segn el griego original, dice que Dios era
el Verbo. Todas las versiones de la Biblia traducen as este versculo, salvo la
Traduccin del Nuevo Mundo, inventada por los Testigos de Jehov y que aade
la palabra un. Con ello, los Testigos de Jehov se convierten en politestas,
pues creen que Jess es un dios aparte de Jehov.
Ser necesario en este estudio referirnos constantemente a la Sociedad
Watchtower, a su Biblia falsa, as como a los resultados absurdos de su psima
gramtica y traduccin.
De la misma manera, el apstol Pablo, refirindose a los israelitas, dice:
De quienes son los patriarcas, y de los cuales, segn la carne, vino Cristo, el
cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amn. Romanos 9.5
Nuevamente los creadores de la Traduccin del Nuevo Mundo, aaden una
pequea palabra que cambia todo el sentido de la frase, su falsificacin dice: a
quienes pertenecen los antepasados y de quienes [provino] el Cristo segn la
carne: Dios, que est sobre todos, [sea] bendito para siempre. Amn.
La palabra sea no aparece en ninguna versin de la Biblia, en ningn texto
griego, ni siquiera en el utilizado por la Sociedad Watchtower, el interlineal
Westcott y Hort y la traduccin inglesa Emphatic Diaglott.
Los guas del Atalaya afirman que intercalan palabras en el texto para hacer ms
claro el sentido. Sin embargo, sus interpolaciones modifican y alteran
totalmente el sentido y significado del texto sagrado.
En otra epstola, hablando del Hijo, afirma:
Porque en l habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad, Colosenses
2.9
Igualmente dice:
Aqu cabe hacer notar, que la Traduccin del Nuevo Mundo vierte correctamente
este pasaje, pero ellos afirman que se est hablando del Padre, y no del Hijo.
El interlineal de Westcott y Hort en el que los Testigos de Jehov presumen
basar su Biblia, dice: Hemos sabido pero que el Hijo de el Dios ha venido y ha
dado a nosotros percepcin mental para que estamos conociendo a el
Verdadero y estamos siendo en el Verdadero en el Hijo de l Jess Ungido Este
est siendo el Verdadero Dios y vida eterna.
Haciendo una lectura normal, as como traducen todas las versiones de la Biblia,
Jess es el verdadero Dios y la vida eterna.
Concluimos tambin, que el Nuevo Testamento, como el Antiguo, proclama y
afirma, sin lugar a dudas, la divinidad de Cristo.
LA ADORACIN DE CRISTO
Las Santas Escrituras ensean y ordenan que solo a Dios se debe adorar:
Respondiendo Jess, le dijo: Vete de m, Satans, porque escrito est: Al
Seor tu Dios adorars, y a l solo servirs. Lucas 4.8
Dios prohbe la adoracin a los ngeles:
Yo Juan soy el que oy y vio estas cosas. Y despus que las hube odo y visto,
me postr para adorar a los pies del ngel que me mostraba estas cosas. Pero
l me dijo: Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos
los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios.
Apocalipsis 22.8-9
Con toda claridad, el texto bblico reserva y ordena la adoracin solo para Dios.
Igualmente significativo es Hechos 10.25-26:
Cuando Pedro entr, sali Cornelio a recibirle, y postrndose a sus pies, ador.
Mas Pedro le levant, diciendo: Levntate, pues yo mismo tambin soy
hombre.
Que los judos comprendan, y muy bien, el significado de las palabras yo soy
es evidente por su reaccin en este momento como en el del texto siguiente:
Le respondieron: A Jess nazareno. Jess les dijo: Yo soy. Y estaba tambin
con ellos Judas, el que le entregaba. Cuando les dijo: Yo soy, retrocedieron, y
cayeron a tierra. Juan 18.5-6
Tanto las palabras de Cristo como las reacciones de los judos a ellas, son prueba
irrefutable tanto de la deidad de Cristo como de su conciencia de la misma, es
decir, Jess no solo es y era Dios, sino que El saba y afirmaba claramente ser
Dios.
El ttulo de Hijo de Dios posee asimismo caractersticas divinas.
Jess se presenta como el unignito Hijo de Dios:
Porque de tal manera am Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unignito,
para que todo aquel que en l cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan
3.16
Sus discpulos as lo reconocieron, y lo adoraron:
Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo:
Verdaderamente eres Hijo de Dios. Mateo 14.33
Pedro hace la gran confesin, que vendr a ser la roca sobre la que Cristo
edificara su iglesia:
Respondiendo Simn Pedro, dijo: T eres el Cristo, el Hijo del Dios Viviente.
Mateo 16.16
Dicha confesin es necesaria para proceder al bautismo:
Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aqu hay agua;
qu impide que yo sea bautizado? Felipe dijo: Si crees de todo corazn, bien
puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. Hechos
8.36-37
Que su afirmacin de ser Hijo de Dios es entendida por los judos como blasfema
queda claro por su reaccin:
Por esto los judos aun ms procuraban matarle, porque no slo quebrantaba
el da de reposo, sino que tambin deca que Dios era su propio Padre,
hacindose igual a Dios. Juan 5.18
La prueba fundamental de que Jess reclamaba la igualdad con el Padre al
llamarse Hijo de Dios es que esa fue la causa de su ejecucin:
Los judos le respondieron: Nosotros tenemos una ley, y segn nuestra ley
debe morir, porque se hizo a s mismo Hijo de Dios. Juan 19.7
Los judos eran el pueblo creado y elegido por Dios, instruido y guiado
directamente por El, escritor y depositario de las Santas Escrituras; era un
pueblo erudito en la Palabra de Dios. Si alguien sabia el significado de las
pretensiones de Jess de Nazaret ese era el pueblo israelita.
Por eso lo rechazaron y asesinaron, porque reclamaba ser el Hijo de Dios, el
Verbo Divino, Dios Encarnado.
El Seor dijo a Felipe:
Jess le dijo: Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has
conocido, Felipe? El que me ha visto a m, ha visto al Padre; cmo, pues,
dices t: Mustranos el Padre? Juan 14.9
La Traduccin del Nuevo Mundo aade una palabra, para que diga: El que me
ha visto a m ha visto al Padre [tambin].
El que los Testigos de Jehov tergiversen la Palabra de Dios para que diga otra
cosa distinta, se constituye en prueba irrefutable de que el texto traducido
naturalmente como el Espritu Santo lo revel, afirma expresamente la deidad
de Jess de Nazaret y su igualdad con el Padre.
Las palabras de Jess llegan al mximo:
Yo y el Padre uno somos. Juan 10.30
Jess as lo asegura:
Jess le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre,
sino por m. Juan 14.6
Pablo deca acerca de la roca que guardaba a los israelitas:
Y todos bebieron la misma bebida espiritual; porque beban de la roca
espiritual que los segua, y la roca era Cristo. (1Corintios 10.4)
Dios es la nica roca de la salvacin y el nico Salvador. Jesucristo es la roca de
la salvacin y el nico Salvador. Si Cristo no es Dios, se contradice la Escritura?
Aun siendo el ngel ms excelso, Cristo no podra salvar ni ser la roca de
salvacin.
La Palabra de Dios nos da la respuesta:
Y clamaban a gran voz, diciendo: La salvacin pertenece a nuestro Dios que
est sentado en el trono, y al Cordero. Apocalipsis 7.10
Jess es el nico Salvador porque es el Hijo de Dios, porque participa de su
naturaleza divina y:
Porque todo lo que el Padre hace, tambin lo hace el Hijo igualmente. Juan
5.19
CRISTO COMO CREADOR Y FUENTE DE VIDA
Existen dentro del texto bblico abundantes referencias a Jess de Nazaret que
serian impropias tratndose de un simple maestro, o incluso de un ngel. Por
ejemplo, las Sagradas Escrituras le atribuyen parte activa en la Creacin:
Todas las cosas por l fueron hechas, y sin l nada de lo que ha sido hecho, fue
hecho. Juan 1.3
En el mundo estaba, y el mundo por l fue hecho; pero el mundo no le
conoci. Juan 1.10