Las Artes Marciales Clásicas Japonesas en Occidente
Las Artes Marciales Clásicas Japonesas en Occidente
Las Artes Marciales Clásicas Japonesas en Occidente
PROBLEMAS DE TRANSMISIN
Escrito por Dave Lowry
Traducido por Francisco Casas
JO-JUTSU
Introduccin al SMR JO-DO
Como agarrar el jo
KORYU
Manual de Koryu
Experimentar Koryu Bujutsu
La transmisin de las artes clsicas
Qu es un Ryu?
Verdadera o falsa?
Problemas de transmisin
Una pequea puesta en antecedentes
Avistando al Grizzly
Fundamentos histricos del Bushido
Soke
BUDO
Moderno vs Clsico
Uchidachi y Shidachi
Bscate una nueva esposa
Entrenando en Japn
BIOGRAFAS
Nishioka Sensei
En el caso de dichas artes marciales en EEUU, si rastreamos su presencia lo bastante
atrs en el tiempo, podemos observar que el problema ha sido que no han habido las
suficientes colinas, verdes o no, a nuestro alrededor. En los 50, el judo era
extremadamente extico. Fuera de algunos enclaves japones-americanos, era poco
conocido, y an menos practicado y enseado. E incluso en tales comunidades tnicas,
el karate era tan poco comn que cuando se hizo una demostracin pblica en Hawaii
en 1927, el evento ocasion la aparicin de un artculo en el peridico de Honolulu.
En una dcada, todo cambio. En los 60, el karate se haba vuelto comn. Alrededor de
finales de la segunda mitad de la dcada la mayor parte de las ciudades tenan varios
dojos, 'estudios' o YMCAs que ofrecan entrenamiento en dicho arte. En los 70, las
verdes praderas disponibles para pastar de las artes marciales se haban vuelto aun mas
numerosas y variadas. Se aadi el Kung-fu al igual que varias otras artes marciales de
diversas partes de Asia. La mayor parte de ellas resultaban mas atractivas (debido a ser
mas "novedosas" o mas exticas, principalmente) alternativas al karate o al judo, que se
haban vuelto, por aquel entonces, prosaicas.
Para encajar con los apetitos pastoriles del publico interesado, no hubo falta de artes que
fueron mas o menos elaboradas, como por ejemplo, el "ninjutsu", creadas a partir del
folklore o de ambiciosas ficciones. En los 80, esta tendencia continu, y los entusiastas
de las artes marciales se encontraron con un buffet de silat, muay thai, savate, y tantas
otras disciplinas.
La moda del Bujutsu?
A la luz de toda esta bsqueda por algo nuevo, por no mencionar los instintos
empresariales que la alimentan, es poco sorprendente que la dcada de los noventa
encontrara su atencin dirigida a otro frtil campo de artes marciales. Los 90 dieron
paso a la apertura de nuevos pastos con el bujutsu, las tcnicas marciales clsicas del
periodo feudal de Japn (1400 al 1867 aprox.)
El bujutsu, tambin conocido como koryu (literalmente, "viejas" o "antiguas
tradiciones") ofrecen muchos atractivos a los entusiastas en bsqueda de pastos mas
frondosos. Entre las razones obvias por las que los occidentales del siglo 20 pueden
verse atrados a artes que fueron destinadas a la casta guerrera japonesa, estaran:
Venerabilidad. A pesar de nuestro apetito moderno por todo lo que es nuevo o esta en
boga, un considerable nmero de nosotros siente respeto por los meritos de la
antigedad. Cualquier cosa tan antigua como un koryu, siguiendo este razonamiento,
debe tener algn valor.
Romanticismo. El cine y la literatura populares han idealizado la "esgrima samurai"
hasta niveles mejor descritos como "de capa y espada". El mismo samurai, un guerrero
vestido con finas sedas que practicaba la poesa y la ceremonia del te, con una vida de
sangre y belleza; estas son imgenes que resultan tremendamente atrayentes para
muchas personas. Basta con observar la popularidad de grupos que "recrean" la cultura
medieval y que escenifican batallas fingidas, justas y dems. Si se le aade el supuesto
misticismo de "oriente", se puede ver cuanto pueden llegar a fascinar artes como el
bujutsu. Una falta de informacin contrastable que coloque estas artes en un contexto
histrico realista ha dejado un agujero que los romnticos han sido libres de llenar con
sus propias nociones de caballera, gestas, y dems.
Elitismo. Lo poco comn de un koryu supone una atraccin para muchos de aquellos
individuos que disfrutan destacndose de la mayora, o al menos que aprecian no
seguirla ciegamente. Pueden haber tres o cuatro "cinturones negros de karate" de media
en cada manzana de la mayora de las ciudades de EEUU, pero cuantos "maestro
espadachines" o "samurais modernos" se pueden encontrar?
Eficacia. Teniendo en cuenta que estas artes han sido probadas en el campo de batalla,
se asume que un koryu contiene muchos "secretos" o tcnicas particularmente letales
que lo haran ms efectivo en un situacin moderna de autodefensa.
Integridad. Cualquiera involucrado aunque sea de manera tangencial con una
organizacin tpica de aikido, judo, karate o algn otro arte marcial se ha visto expuesto
a mentiras, avaricia, e incompetencia gestora de un nivel realmente enorme. Los koryu
se perciben (incorrectamente) como entes por encima de las luchas organizativas, la
preocupacin por el rango, y la infinita bsqueda por el poder y el dinero que parecen
comprometer e infectar la filosofa y objetivos de las formas de budo mas populares y
modernas.
Estos, generalmente, son los puntos de vista que los entusiastas occidentales que se han
documentado tienen del bujutsu clsico (y la literatura esta entre las pocas fuentes
remotamente fiables de las cuales pueden obtener informacin, habida cuenta de la
escasez de practicantes de koryu con experiencia que no sean japoneses). Muy
resumidamente, el koryu bujutsu puede ser definido de manera ms objetiva como
aquellas formas de combate directa o indirectamente originadas en el campo de batalla,
que fueron del dominio exclusivo del soldado profesional del Japon pre-moderno. Son
datadas, como se menciono anteriormente, desde aproximadamente el siglo XV al siglo
XVII. Se diferencian de las formas de budo del siglo XX (mantengamos en mente que
los apelativos de "bujutsu" y "budo" son extremadamente arbitrarios, mas por
distinciones generales que por una definicin exacta) de varias maneras.
Los bujutsu son:
--Diseados para ser usados por una clase militar profesional (de la era feudal) mas que
por la poblacin general.
--Mucho menos influidos por el Budismo Zen que formas posteriores de budo. Los
cimientos espirituales de un koryu tienden a ser los del mikkyo, una forma de Budismo
esotrico.
--Invariablemente y sin excepcin, organizados bajo el eje de un ryu, una institucin
feudal del Japn antiguo, con aspectos pedaggicos, polticos y culturales
completamente diferentes de los mtodos comerciales modernos.
--Obviamente, carentes por completo del elemento deportivo, las competiciones, o el
sistema de grados de kyu/dan que son centrales para las formas de budo modernas.
Indudablemente, los koryu son atrayentes para la audiencia occidental. A riesgo de
llevar mi analoga sobre los "pastos mas verdes" demasiado lejos, sin embargo, estas
audiencias haran bien en recordar que el color del prado no es una indicacin positiva
de que la hierba sea comestible, alimenticia, o de que sea saludable para quienes la
consuman. Varios occidentales han ido a Japn para investigar los koryu. Algunos han
conseguido ser aceptados en un ryu clsico. Unos pocos los han practicado a un nivel
tan intenso y prolongado que han conseguido un entendimiento completo de estas artes.
A aun menos se les ha concedido permiso para ensear una parte o el curriculum entero
del ryu al que pertenecen. (Como veremos, este permiso es absolutamente crucial si el
ryu ha de mantenerse viable; nadie comienza a ensear un koryu sin el permiso
explcito, a menudo escrito, de un profesor cualificado.)
Casi todos estos individuos siguieron la estela dejada a mediados de los sesenta en
Japn por el ya fallecido Donn Draeger. Draeger, un antiguo oficial de los marines,
tom un inters terico y prctico en las artes marciales practicadas en el Japn de la
posguerra. Su actividad le llevo eventualmente a un koryu. La habilidad de Draeger
sirvi no solo para impresionar lo bastante a varios expertos japoneses en un koryu
como para que permitieran a extranjeros entrar en sus ryus, adems, el mismo Draeger
apoy con entusiasmo la educacin de muchos adeptos extranjeros jvenes que vivieron
y entrenaron en Japn durante los sesenta y los setenta.
Debemos mantener en mente que, y no de manera accidental, el nmero de practicantes
occidentales de un koryu de los cuales estamos hablando, era durante esa poca, y sigue
siendo, minsculo en comparacin a los miles de extranjeros que estudian formas de
budo modernas en Japn. Una estimacin generosa de los no-japoneses que han
obtenido una instruccin seria en un koryu sera de no mas de unas pocas docenas. Sus
intereses y experiencias tienden a crear un cierto ambiente de exclusivismo. Se conocen
entre si de una forma completamente ajena para las enormes y principalmente annimas
organizaciones relacionadas con el budo moderno. Esta consideracin es importante,
teniendo en cuenta que los representantes de un koryu que declaren ser legtimos pero
que sean desconocidos para esta fraternidad de practicantes, sern vistos con
considerable suspicacia por estos.
No hay ms ciego que el que no quiere ver.
En contraposicin a este grupo de practicantes extranjeros de koryu estn aquellas
personas interesadas en estas artes que han intentado involucrarse con el bujutsu de
diferentes maneras. Hay muchas de estas personas. Hay, de hecho, las suficientes como
para crear un gran mercado de artes marciales clsicas, y como con cualquier apetito, ha
habido aquellos dispuestos para satisfacerlo, para presentar un producto. Como
resultado, hay muchos, muchos individuos en occidente a los que se les ha hecho creer
que estn aprendiendo las tcnicas de un koryu u otro. Estn, con mas exactitud, siendo
engaados para que lo crean. El fraude y el engao relacionados con el bujutsu clsico
se han vuelto un aspecto triste y censurable del panorama de las artes marciales en
EEUU. No tan despreciable pero igualmente lamentable ha sido la cantidad de
confusin y desinformacin que ha caracterizado las percepciones occidentales de estas
tradiciones marciales.
Los problemas encontrados por el aspirante a bugeisha, el practicante de un bujutsu, son
variados. A un extremo del espectro, encontramos a aquellos estudiantes aprendiendo un
sistema legtimo de combate de la era feudal, pero que lo hacen con un 'maestro' que
carece del permiso de un maestro previo que le haya concedido una licencia para
transmitir el sistema (Tambin a este lado del espectro hay al menos un caso donde el
maestro en realidad ha recibido un permiso oficial para ensear mas por razones
sentimentales o polticas que por su habilidad tcnica, siendo, simplemente,
incompetente como instructor.) Al otro extremo estn aquellos charlatanes que han
inventado sus propios sistemas, transmitindolos con linajes falsificados y otras pruebas
falsas. Todos estos problemas comparten una fuente comn, relacionada con algunos
malentendidos fundamentales acerca de la naturaleza del bujutsu y los koryu, que han
sustentado y alimentado estos problemas.
Los Koryu
El ryu en si es algo misterioso para el mundo moderno. Es una institucin
completamente feudal. Su historia es fascinante. Como con cualquier combate
organizado, el tipo de penalidades enfrentadas en la batalla por el samurai del antiguo
Japn requera de una cohesin virtualmente inviolable entre los guerreros individuales
para crear una unidad efectiva, funcional. En no poca medida, el ryu serva para
establecer esta conexin. Lealtad, identificacin con el grupo, la voluntad para situar los
objetivos del conjunto por encima de los propios (especficamente, el instinto de
supervivencia); estas cualidades era tan cruciales para el mantenimiento y la
supervivencia del ryu como la transmisin de la habilidad tcnica. En consecuencia, el
ryu puede ser entendido en trminos de "familia" tanto como de escuela, o tradicin
distintiva.
Era y es muy distinto del las formas modernas de budo dojo comercial, en al menos tres
aspectos importantes:
Uno: en el koryu no hay "campeones." Una escuela de karate puede mostrar una o dos
estrellas que brillan en las competiciones (y que a menudo usan a otros miembros de la
escuela como poco mas que sparrings con los que entrenar). Pero el koryu es, acorde a
lo demostrado en el campo de batalla, solo tan fuerte como el ms dbil de sus
eslabones. Por tanto, hay un sentimiento de responsabilidad entre sus miembros
respecto al desarrollo y aprendizaje de todos y cada uno.
En este sentido, los koryu no son tan egocntricos como los budos modernos. Si el dojo
de budo actual realmente quisiera hacer las cosas "al estilo samurai" como a menudo
imaginan o publicitan, podran empezar de esta manera: en el prximo torneo, cada
competidor representante de la escuela debera dejar de lado todos sus trofeos a no ser
que la mayora de sus compaeros de dojo hayan ganado tambin sus combates.
Despus de todo, en el campo de batalla, donde el verdadero camino del samurai se
pona en practica, los logros individuales eran relativamente insignificantes a no ser que
la mayor parte del grupo triunfara.
En segundo lugar, el ryu depende de un mtodo pedaggico muy diferente del que se
usa para ensear judo, aikido o karate actualmente. El practicante de budo moderno
sigue una forma de entrenamiento estandarizada. Es forzado a realizar numerosas
concesiones para aprender en una clase numerosa. Con cuarenta o cincuenta estudiantes,
pueden pasar meses antes de que el estudiante de karate o aikido, por ejemplo, pueda
esperar cualquier tipo de atencin individual por parte de su maestro. (Un conocido
instructor de aikido americano, ha explicado claramente en varias entrevistas que no
todas las personas que practican en su dojo son sus alumnos. Solo despus de haber
perseverado lo suficiente como para alcanzar un nivel tcnico determinado les ha
considerado autnticamente suyos).
El practicante de un koryu sigue una forma fija tambin en su entrenamiento,
aprendiendo tcnicas o katas de una forma vagamente prescrita. Pero su maestro, debido
a la misma naturaleza del ryu, confina sus enseanzas a un grupo reducido. Desde el
principio de su enseanza, el estudiante de un koryu recibe una instruccin muy
individualizada. Un epigrama de un koryu lo explica de esta manera: "Diez estudiantes
distintos, diez artes distintas." El profesor se adapta al alumno.
A veces, en aquellos koryu en cuyo curriculum se ve envuelta ms de una nica arma,
un estudiante puede empezar aprendiendo un arma mientras que a otro que empieza
simultneamente se le ensea otra distinta. Esta instruccin virtualmente personalizada
implica que el sensei de un koryu puede tener en cuenta diferencias en el fsico,
temperamento y transfondo de sus estudiantes y ensearles de acuerdo a estos rasgos.
Todos acabaran por aprender las mismas cosas si continan practicando. No las
aprendern, sin embargo, a la vez o de la misma manera. Esta enseanza individualizada
es casi imposible en un dojo de budo con docenas y docenas de miembros los cuales
debern, por cuestiones logsticas, aprender lo mismo al mismo tiempo.
Aun mas importante, sin embargo, es que el koryu individual existe como un grupo
social propio. Es, como se ha dicho anteriormente, muy parecido a una familia. Esto
implica una disponibilidad limitada hacia las personas ajenas, al igual que una familia
tiene una flexibilidad limitada, si pretende mantenerse como unidad familiar, para
aceptar la entrada de extraos.
Hay que considerar lo siguiente: aparte de haber nacido o ser adoptado dentro de una,
para entrar en una familia solo es posible hacerlo mediante el matrimonio. Pensemos
durante un momento cuan prolongado es este proceso. Cuanto tiempo puede llevarle a
un cnyuge o cuado/a para estar plenamente integrado dentro de la familia? Cuanto
tiempo antes de que se aprenda todos los motes, historias familiares, aprenda en que
armario se colocan los platos en su casa, o cual es la mejor manera de tratar al to Henry
cuando se emborracha y empieza a contar relatos descoloridos de sus visitas a los
burdeles de Manila durante la guerra? Es un proceso largo, que no se puede apresurar.
No hay atajos para ser absorbido dentro de la familia, formar parte de un grupo reducido
as sin mas. Y la mayor parte de nosotros hemos tenido experiencias, en nuestras propias
familias, de aquellos que desean entrar pero sencillamente no pueden. Debido a su
personalidad o debido a la misma naturaleza de la familia, algunas personas nunca
encajaran del todo. No se puede hacer un "seminario" para ensear a estas personas lo
que necesitan saber, o como han de comportarse para ser aceptados. No se puede forzar
a alguien a encajar dentro de una familia si esto no se produce de forma natural.
Esta analoga es completamente vlida para describir a un koryu tpico. Su estructura les
hace inapropiados para el acceso de un nmero extenso de gente ajena. Haba una
pelcula de hace unos aos, que quizs haya podido ver en televisin o video, llamada
"The challenge". Contaba con Toshiro Mifune y el actor Scott Glenn, y contena escenas
de un entrenamiento en grupo de lo que se supona era una escuela de koryu. Parejas de
compaeros de prctica se situaban ordenadamente alineados en la pelcula, y
simultneamente realizaban movimientos coreografiados. Esta puede ser la manera que
alguien que no haya visitado nunca uno piense que se lleva un grupo de koryu.
Pero para aquellos que hayan visitado o entrenado en un koryu real, estas escenas les
parecern particularmente falsas. La instruccin en masa nunca ha sido un rasgo de
estas artes y nunca lo podr ser. Son necesarios aos para instruir e impartir todas las
tcnicas, el conocimiento, y la historia de un koryu a un solo estudiante. Es una
inversin considerable de tiempo, e implica mas una relacin maestro-aprendiz, que la
imagen del profesor al frente de la clase en el modelo educativo moderno. Es una
relacin extremadamente cercana, y la personalidad del sensei afectara, sin duda alguna,
al carcter de sus estudiantes. Este vnculo solo puede desarrollarse apropiadamente por
una interaccin casi diaria entre ambos, tanto en el entrenamiento como en otras
actividades.
Una vez que una persona tiene este conocimiento bsico de la naturaleza de 'familia' de
un koryu legtimo, y como la instruccin individualizada limita la participacin masiva,
puede ver cuan largo y cuan cercano es el proceso a inculcar a alguien dentro de un ryu,
los mtodo que tipifican a un ryu falso parecern bastante inapropiados, como poco.
Puede entenderse pues el desden con el que se reciben anuncios de 'seminarios'
abiertos a todos los que paguen una tarifa, que proponen la enseanza de un arte marcial
clsico?
Comercialismo de los Koryu?
Todo el asunto del comercialismo en el koryu es algo difcil de entender para nosotros
en el siglo XX, con nuestras sociedades basadas en el mercantilismo. Cuando surge el
tema, aquellos que declaran ensear un sistema clsico a cambio de una remuneracin
invariablemente sealan un nico episodio de la historia de las artes marciales para
justificar sus acciones. Citan el caso de Ueshiba Morihei, fundador del aikido, que pago
una suma especifica a cambio de ciertas tcnicas particulares enseadas por su a veces
maestro, Takeda Sokaku, instructor de Daito-ryu. Esto resulta ser un non sequitor
debido a que: a) Ueshiba ni siquiera haba nacido hasta despus del final del periodo
feudal de Japon; b) Daito-ryu no se corresponde con un los estndares de un koryu de
forma estricta, y c) Takeda Sokaku puede apenas ser considerado un maestro tpico en la
tradicin de un koryu.
Histricamente, el pago por la instruccin en un koryu era mayormente un hecho
histrico dudoso. El ryu habra sido financiado por un clan o un daimyo (jefe del clan)
al que perteneca su director (cabeza del ryu), que a su vez podra haber tenido otras
labores administrativas que realizar en aadidura a sus responsabilidades de enseanza
de artes marciales. Otros maestros de bujutsu enseaban bajo los auspicios de un templo
Budista que serva como hogar espiritual de un ryu en particular. A da de hoy, casi
nadie en Japn se gana la vida enseando un koryu legtimo, se trata de una vocacin.
Las tarifas de entrenamiento de un dojo son mnimas, y se usan normalmente para el
mantenimiento de las instalaciones de entrenamiento. Cualquiera que declare ensear un
bujutsu clsico y que cobre unas sumas exhorbitadas debera ser sometido al mas
cuidadoso escrutinio. De las crudamente, media docena de autoridades que conozco que
instruyen algn tipo de sistema de koryu en los EEUU, ninguna cobra por sus
enseanzas u obtiene un beneficio econmico.
El Koryu y su lugar en la sociedad Japonesa.
Otro aspecto histrico del koryu que causa malentendidos afecta a su lugar en la
sociedad japonesa. Mas de un sucedneo de "ryu clsico de artes marciales" que se
vende en EEUU intenta explicar su linaje como un sistema "secreto" que escapo a la
atencin, deliberadamente o de manera inadvertida, de los investigadores que
cuidadosamente han catalogado a los ryus marciales japoneses, existentes o extintos.
Hace no mucho, se me envi una extremadamente entretenida coleccin de cartas entre
un investigador de bujutsu en Japn y un estudiante de alto grado de un supuesto koryu
practicado nicamente en los EEUU. El investigador preguntaba sobre la historia del
ryu. El estudiante tena toda clase de las mas 'curiosas' explicaciones para que su ryu no
hubiera llamado la atencin de cualquier investigador serio de artes marciales del
mundo. El linaje del ryu haba sido dejado fuera de este u otro libro por accidente, dijo
al principio. El instructor jefe del ryu fue forzado a vivir annimamente despus de la
segunda guerra mundial debido a las polticas anti- artes marciales durante la ocupacin,
dijo mas tarde. Sigui y sigui de esta manera y el investigador de manera tranquila y
lgica, refut cada uno de sus inventos.
Cierto, dijo, los libros han dejado fuera algn ryu accidentalmente. Pero resulta poco
probable que cada diccionario de koryus japoneses deje fuera al mismo ryu debido al
mismo error. Y por qu otros maestros no se vieron forzados a vivir en la
clandestinidad y ocultar su ryu? El intercambio termin cuando el estudiante fue llevado
a sugerir que toda la historia es subjetiva y que en ningn caso la historia de los
distintos koryus es del todo fiable desde la perspectiva acadmica. Esta postura es
bastante cercana, intelectualmente, a la de aquellos que insisten que el holocausto nunca
ocurri, y uno nunca sabe si continuar intentando razonar con ellos, o meramente
apenarse por ellos y sus tristes delirios.
El "ryu secreto" es una historia conveniente para explicar la falta de documentacin
histrica externa o de pruebas que puedan ser verificadas independientemente. Pero la
verdad es, que en los trminos de un koryu, se trata de una historia que no tiene mucha
credibilidad. Recordemos este hecho: El ryu marcial en el Japn feudal era una unidad
poltica. El ryu exista para proteger los intereses de un clan o un daimyo. Un "ryu
clandestino" habra sido tan viable y tan efectivo como un partido poltico clandestino
en una democracia. Es imaginable intentar persuadir a los votantes de que apoyen a un
partido al tiempo que se oculta el hecho de que dicho partido existe? No. Tarde o
temprano, para que el partido sea eficiente, su presencia ha de darse a conocer. Un ryu
no era tan distinto en la era feudal (Aunque por supuesto, hoy puede serlo: muy, muy
pocos japoneses son conscientes de la existencia del koryu) Ciertamente todos los ryus
de bujutsu tienen sus secretos. Pero un ryu secreto? No en Japn. Si no es exactamente
secreto, otros impostores declaran, su ryu es sencillamente tan desconocido que ha sido
pasado por alto por los numerosos expertos e historiadores en artes marciales. Se trata
de una declaracin interesante - No porque sea cierta; casi invariablemente no lo es -
sino porque revela como una cultura (la nuestra, en este caso) puede mezclar su propia
historia y costumbres sociales con la de otra (en esta instancia, la de Japn).
Contextos mal entendidos
Estados unidos es un pas grande, muy grande. Siempre ha sido un pas que permita, en
comparacin al resto del mundo, una igualmente enorme libertad en la vida personal de
sus ciudadanos. Daniel Boone no tuvo que consultar con ninguna autoridad o agencia
gubernamental para abandonar Pennsylvania e ir a la lejana frontera de Kentucky. Se
fue de la misma manera en la que uno puede irse de vacaciones un fin de semana. Ni
nosotros ni el necesitamos permiso para viajar o decir a las autoridades a donde vamos y
cuando se espera nuestro regreso.
Boone no relleno ningn formulario o llevo ningn tipo de documentacin oficial
consigo. Para la frustracin de muchos genealogistas, el mantenimiento de tales
registros es escaso. Si yo dijera que mis antepasados empezaron una tradicin alfarera
en la zona norte de Georgia y que yo sigo haciendo a da de hoy el mismo tipo de
alfarera en mi casa de Oregn, habra muy pocas pruebas para disputar mi relato.
Como podra hacerse? Se podra preguntar si hay cualquier mencin de la ocupacin
de mis antepasados como alfareros en la Georgia colonial en cualquier censo antiguo.
Pero podra alegar que no, ya que vivan en los bosques de los Apalaches donde los
encuestadores del censos nunca llegaron. Nunca se les obligo a "registrar" su oficio, ni
tuvieron que tener ningn tipo de documentacin para su posterior emigracin a
Oregn.
Resumiendo, mi relato es perfectamente creble en el contexto de la historia y cultura
americana. Un japons declarando un tipo similar de pasado artstico, sin embargo, no
podra falsificarlo desde el momento en que un grupo interesado comprobara registros
voluminosos y extenso que son fcilmente disponibles de manera publica en Japn.
Japn es un pas pequeo. Casi siempre ha sido sedentario a la hora de hablar de la
poblacin. Y debido al control de los daimyos sobre virtualmente el pas entero, haba
registros de casi cada persona en los dominios de dichos lderes. Seria altamente
posible, si yo fuera un japons con races ancestrales en el arte de la alfarera, establecer
el inventorio de la cermica de mis predecesores para un ao determinado, descubrir
exactamente donde estaban situados sus hornos de cermica, y sin duda descubrir si se
haban mudado a otra parte del pas; estos seran, en la mayor parte de los casos, hechos
sencillos de descubrir. Habra anotaciones de stos en registros locales y provinciales.
Esta situacin es muy similar a la que se puede encontrar entre los practicantes de artes
marciales en Japn. La informacin disponible para los investigadores y acadmicos de
las artes marciales es asombrosa. Si hay cualquier problema para reconstruir la historia
de los distintos koryus es que a menudo hay un exceso de informacin. Requiere
paciencia el cohesionarla por entero. Escarbando un poco, no es solo posible descubrir
los hechos bsicos acerca de los miles de koryus que han existido, sino sus linajes,
completos o casi, al igual que todo tipo de detalles cotidianos acerca de las vidas y
actividades de antiguos maestros. Es posible que un koryu se haya colado a travs de
esta red tan estrecha y extensa de informacin. Pero si un estudiante potencial de una
tradicin tal esta considerando unirse a ella y estudiarla en EEUU, debe estar dispuesto
a apostar por dos hechos improbables. Debe creer que el ryu ha pasado sin detectar por
la estrecha red del escrutinio e investigacin histrica. Tambin debe creer que un
americano fue capaz de entrar y aprender un sistema tan poco conocido, y que ahora
tiene legitimidad para ensear un ryu del que los japoneses ni siquiera han odo hablar.
No quiero exagerar la situacin. Es posible que un arte haya crecido en la oscuridad,
rodeado de unas tinieblas tan profundas que todos los dems practicantes de artes
relacionadas se hayan mantenido desconocedores de su existencia. Y los registros de
Japn se vieron sometidos a una guerra mundial que destruyo todo tipo de documentos.
Pero resumamos todo el tema de los koryus secretos o extraos que se ensean en
EEUU. Los relatos que rodean a estos sistemas son sin duda atrayentes. Evocan escenas
romnticas y emocionantes de fortalezas montaosas pobladas por arrugados maestros
que ensean profundos y mortales misterios a sus leales aclitos. Miremos, sin
embargo, a los hechos histricos. Un daimyo gobernaba sus tierras a travs de los
impuestos que someta a sus sbditos. Se preocupaba constantemente por posibles
insurrecciones o movimientos polticos clandestinos. Parece plausible que no fuera
consciente de tal clan de maestros ocultos viviendo en sus tierras, su propiedad, sin que
pagaran impuestos?, Les permitira seguir practicando en secreto un arte marcial que
podra, con toda seguridad, ser usado contra sus propios samuris si permitiera que
continuara?
Los daimyo normalmente ascendan al poder, y casi siempre se mantenan en el,
mediante el control de las cosas. Las carreteras, los viaductos, la gente bajo su gobierno.
Y no es como si existiera una lejana frontera a la que su autoridad no llegara. Los
castigos eran estrictos y duros incluso para amenazas pequeas para su mandato. No se
los dems, pero yo tendra serias dudas acerca de las historias sobre ryus marciales
"secretos" que pueden haber sobrevivido en estas condiciones.
Transmisin de un Koryu
La forma en la cual un koryu se mantiene y se transfiere, es aun otra fuente de
malentendidos para los entusiastas occidentales de las disciplinas marciales japonesas
clsicas. Los bujutsu de Japn comparten una estructura interna casi idntica a la de
aquellos ryu dedicados al arte del cuidado de las flores (ikebana), la ceremonia del te
(chado), y otras artes del periodo feudal. La estructura se conoce como sistema iemoto.
Han pensado alguna vez sobre quien "posee" en realidad un arte marcial? Hay leyes de
copyright que evitan el uso del nombre 'Japan Karate Association', cierto. Pero no se te
puede castigar legalmente por ensear todas las katas u otros mtodos de la JKA,
incluso aunque los hayas aprendido viendo videos y nunca hayas recibido el beneplcito
de la JKA en absoluto. Lo mismo es cierto para las distintas escuelas de aikido o
cualquier tipo de budo japons.
Un ryu marcial clsico, sin embargo, fue de hecho posedo, en cierto sentido. Era la
propiedad, literalmente, de su fundador y sus descendientes. El creador, o iemoto,
designaba a su sucesor, que seria el siguiente director o 'poseedor' del sistema. La lnea
de sucesin era a menudo familiar, de padre a hijo mayor. En ocasiones la adopcin
poda haber sido necesaria para continuar con el linaje. Otros ryus fueron pasados a
discpulos de confianza de fuera de la familia. El hecho principal de cara a entender el
sistema iemoto, es que la responsabilidad, el privilegio de ensear y transmitir un koryu
fue y sigue siendo controlada estrechamente. Es completamente diferente de un budo
moderno como el karate-do, donde cualquiera en cualquier momento es libre de
empezar a ensear.
Los diferentes koryus que existen hoy en da tienen posturas distintas sobre el tema de a
quien le esta permitido ensearlos. En la mayora, una licencia de maestra no es
necesariamente en si misma un permiso para ensear. Para poder impartir una
instruccin, se debe de buscar un permiso especfico (o serle dado) por el actual director
o lder del sistema. En otros, la designacin de maestra es una declaracin oficial de
que el poseedor del titulo tiene un permiso de facto para impartir instruccin de el ryu.
En algunos casos, a aquellos que hayan obtenido la maestra del ryu, se les dar un
permiso limitado para ensear ciertos aspectos del curriculum, con el entendimiento de
que los estudiantes de este maestro buscaran eventualmente la tutela del director
(headmaster) u otro maestro mas veterano. (Este es precisamente el caso de un
exponente de un koryu que es enseado actualmente en los EEUU. El 'maestro' dejo
Japn para perseguir una oportunidad de negocio. Carecia de una instruccin avanzada
en el ryu, aunque deseaba continuar con su entrenamiento. El lder de el ryu le dio un
permiso informal para ensear algunos rudimentos del arte a un nmero limitado de
estudiantes. Pero es importante reconocer que tal instruccin no puede considerarse el
equivalente a ser miembro de un ryu ni aquellos que reciben estas enseanzas tener
ningn tipo de falsas concepciones respecto a su estatus en el sistema). El aspirante a
practicante de un koryu debe hacer todo esfuerzo posible para aprender como se
mantiene la jerarqua de enseanza de un koryu en particular antes de empezar su
asociacin con este. Esto es vital si la enseanza se imparte fuera de Japn. Si esta
satisfecho al haber entendido el criterio de enseanza y cree que su posible maestro lo
cumple, debera sentirse confiado en comenzar el aprendizaje del arte bajo dicho
tutelaje.
Un buen ejemplo es el de Katori Shinto-ryu. El mas antiguo de los koryus marciales
practicados aun en Japn. El actual iemoto es Izasa Yasusada, un descendiente de la 20
generacin del fundador del ryu, Iizasa Choisai lenao. Su mala salud impide que el
actual cabeza del ryu pueda seguir ensendolo. Tal responsabilidad ha cado en los
hombros del instructor jefe designado, Otake Risuke, que ensea en su dojo en Narita.
La mayor parte de los lectores conocern esto. Hay, sin embargo, al menos otras tres
personas que ensean actualmente el curriculum de Shinto-ryu. Estos tres maestros
tienen varios grados de experiencia en el arte. Ciertamente todos ellos pueden probar
que han estudiado Shinto-ryu. Ninguno de los tres, sin embargo, puede declarar o
declara que se le haya otorgado permiso por parte del director del ryu para hacer lo que
hacen. Para algunos aspirantes, la experiencia de estos tres puede ser suficiente. Todos
tienen estudiantes en los EEUU. Otros aspirantes, por el contrario, pueden declinar el
practicar cualquier tipo de Shinto-ryu a no ser que sean aceptados por el linaje principal
del ryu. Pero todos deben ser conocedores de los hechos y tomar sus decisiones
consecuentemente.
Es el conocimiento de los hechos lo que es mas crucial para un potencial estudiante de
un koryu. Necesita de los hechos para aprovechar la oportunidad (y es una
extremadamente rara) para empezar a estudiar un koryu que pueda ser disponible en
occidente. Mas probablemente, necesitara de los hechos para apartarse de los koryus
fraudulentos, o de aquellos maestros que sinceramente crean estar impartiendo un
autntico sistema clsico de estrategia de combate cuando no es as. Aun mas
importante, conocer los hechos que rodean al bujutsu es la mejor manera de ver a estos
maravillosos artes antiguos no como a otros les gustara verlos, de una manera
romntica, sino como son en realidad. Una razn por la que los koryus fraudulentos y
los sucedneos de 'maestro' han proliferado en occidente es una (a riesgo de sonar
sexista) caballerosa renuncia a criticar de manera oral o escrita a otros en nombre de los
miembros y las autoridades legtimas de un koryu. Tambin ha habido una actitud de
'cualquiera lo bastante tonto como para involucrarse con un koryu falso se merece lo
que obtenga'. Sin duda parte de esta reticencia a hablar brota del obstinado, casi
religioso fervor con el cual los adherentes de estos koryu fingidos los apoyan y
defienden.
Mi propia experiencia en el trato con estos individuos ha sido ilustrativa. Al igual que la
correspondencia que mencionaba anteriormente, entre el investigador de Japn y el
estudiante avanzado de un falso 'maestro' en los Estados Unidos, frente a la
aplastantemente objetiva evidencia que se les presenta para mostrarles que el sistema
que estn estudiando no tiene una realidad histrica, su respuesta, patticamente, es a
menudo 'mi profesor dice que es as'. Llegados a este punto, el investigador debe de
concluir en que esta tratando con una persona atrapada en un sistema de creencias. Los
hechos no son tan importantes para estas personas como las imgenes, tanto las propias
como las de sus profesores, que afirman una particular visin de las cosas.
Afortunadamente, no todos los individuos que entrenan en un koryu falso son tan
dogmticos. Algunos, a travs de sus propios esfuerzos o aproximndose a los expertos
con sus preguntas, acaban por descubrir que estn siendo engaados. Una valerosa y
refrescantemente honesta confesin apareci recientemente en una publicacin de artes
marciales. El escritor admiti haber cado en las redes de un de un deshonesto instructor
de un koryu falso y que el haba contribuido al problema mediante la creacin de katas y
otros aspectos del entrenamiento por su cuenta. A diferencia de otros que se aferran al
falso ryu, este individuo, de acuerdo a lo que escriba, vino a darse cuenta de que nunca
alcanzara las metas que le haban llevado a la bsqueda del bujutsu en primer lugar si
continuaba por ese camino. En mi opinin, esta persona ha dado un enorme paso
adelante en su aproximacin a las artes marciales clsicas y de cara a la maestra
personal.
La intencin de este artculo no es ridiculizar ni despreciar injustamente. Si el lector
tiene la oportunidad de entrenar en un autntico koryu en este pas y siente la
motivacin de hacerlo, entonces debera hacerlo por todos los medios. (Como ya debe
ser evidente, esta es una oportunidad de lo ms improbable para la mayora. Comente
anteriormente que solo recuerdo media docena de expertos reales en un koryu viviendo
en EEUU. Todos mantienen una perfil bajo. Algunos no tienen un solo estudiante en la
actualidad, otros no tienen mas de tres o cuatro. Ninguno - y este es un punto crucial -
ninguno de ellos es en lo mas mnimo evasivo respecto a su historial de entrenamiento o
sus cualificaciones si se les pregunta. Cada uno de ellos puede dar las direcciones de sus
maestros y el dojo en el que entrenaron en Japn y puede mostrar documentacin y
genealogas que pueden verificarse con facilidad en ese pas).
Las disciplinas marciales clsicas japonesas son una rica fuente de valor fsico,
espiritual y social. Son un tesoro tan precioso como cualquier obra de arte. Si el
aspirante a practicante no debe apresurase para acabar por entrar en un ryu de
legitimidad cuestionable, tampoco debe adoptar una actitud de cinismo que le lleve a
obviar la oportunidad de unirse a un koryu. (Me recuerda a la quizs principal autoridad
en temas de koryu fuera de Japn, un acadmico, escritor, y autntico maestro que
supervisa a un pequeo grupo de alumnos de su arte en Hawaii. Le ha ocurrido en mas
de una ocasin que un espectador de las sesiones de entrenamiento al aire libre ha
preguntado sobre la posibilidad de unirse, solo para perder inters cuando se le explica
que el maestro es de origen caucsico en lugar de japons).
Para volver, si se me permite, en resumen, a la analoga de los verdes pastos. El bujutsu
es una verde pradera para todos aquellos dispuestos y capaces de entrar en ella. Los que
no puedan entrar pueden mostrar una verdadera apreciacin y respeto por estas artes al
evitar comprometerlas aceptando una imitacin barata. Si se trata de un paisaje que solo
puede admirarse en la distancia, aquellos que realmente admiren el bujutsu en occidente
mostraran la naturaleza de su carcter haciendo exactamente eso.
Dave Lowry es un colaborador habitual de Furyu y otras publicaciones de artes
marciales. Su ultimo libro es 'Clouds in the West', publicado por Lyons Perss; este
ensayo aparece en el en formato revisado. Copyright 1998 Dave Lowry. Todos los
derechos reservados.
Desde el barrio Alfonso Lpez de Cali donde vive, Johan Fernndez se alista para
cumplir el sueo que lo desvela: ser el mejor en una disciplina que pocos conocen
pero que exige tanto como cualquier otra, las Artes Marciales Mixtas (MMA por sus
siglas en ingls).
Aunque las races de este deporte llegaron hasta los antiguos Juegos Olmpicos,
actualmente esta disciplina an no tiene su espacio de difusin en las
competencias olmpicas modernas.
En Brasil, uno sus grandes difusores, las Artes Marciales Mixtas son conocidas
tradicionalmente como Vale Tudo. Este pas suramericano es cuna de uno de los
ms grandes referentes actuales de la disciplina: Anderson Da Silva.
Por su parte, Johan cuenta que esta disciplina lo conquist desde los 16 aos,
cuando viva en Espaa, y que pese a ser amante del ftbol encontr en este
deporte algo que ningn otro le ofreci: la forma de desahogar sus impulsos de
pelea.
"Lo que nos hace falta ac en Colombia es tener una Liga. Ac organizan
torneos pero cada uno independiente. Hacen falta recursos y patrocinio. Si
tuviramos el apoyo habra mucha ms gente entrenando y dedicada a
esto", asegur Johan.
A ello, se suma, que muchas personas tienen an una mirada equivocada de esta
disciplina. "La visin errnea es que lo ven como peleas callejeras. No es
rudo, si no tcnico", afirm.
Panam ser un gran salto internacional para este deportista caleo, que aunque
en una ocasin particip en una competencia de Muai Tai en Venezuela, la de
ahora es de gran trascendencia por ser parte de una de las ligas de mayor nivel
mundial.
Johan espera darle gran visibilidad a Colombia en este deporte, el cual como le
decan en Espaa "tiene grandes referentes surameniranos". l espera ser uno de
ellos porque, dice, "uno pelea por la motivacin de representar a su tierra".
La tica en el Jiu-Jitsu
Introduccin:
Existe un viejo dicho con respecto a las Artes Marciales: Antes de aprender el Arte, se
debe aprender primero civilidad, y antes de conocer sus destrezas uno debe conocer su
Etica.
La civilidad en este caso se entiende por buenos modales, la cortesa, el respeto y la
consideracin hacia los otros. La Etica es un conjunto fundamental de comportamientos
aceptables que reglamenta el espritu de las Artes Marciales y en donde estas ultimas
depositan su confianza para cultivar su cuerpo y mente, y para guiar sus acciones
cotidianas y conservar el sano juicio.
Al estudiar las Artes Marciales, no podemos omitir el estudio de la Etica, ya que
establece una gua del tipo moral para ellas. Los principios ticos sirven como un
modelo tradicional, cultural y social para el cual los practicantes de esta Arte Marcial
son entrenados. Muy importantes son los principios de no-violencia, respeto hacia uno
mismo y sus semejantes, lealtad hacia la familia y hacia la patria y por ultimo, el
concepto de seguir cada uno nuestro camino natural.
El respeto hacia la tica es una obligacin moral tanto hacia la sociedad y el prjimo
como hacia la naturaleza que nos rodea. El comportamiento social y moral de quien
practica el arte. Uno debera respetar la tica desde el punto de vista de los hechos y
tambin desde el de las palabras.
LA ETICA EN EL JIU-JITSU:
Tradicionalmente, el aprendizaje del Jiu-Jitsu consiste en la prctica de las destrezas y el
respeto a la tica como dijimos en prrafos anteriores. Las destrezas aprendidas en la
prctica de este Arte pulen nuestro estado fsico, afilan nuestros reflejos y refuerzan
nuestras decisiones, a la vez que debemos reforzar todo esto con buena conducta.
La filosofa de Jiu-Jitsu se basa en el encuentro con los valores armnicos de los
individuos que viven por la paz, la sabidura, la moral, el amor y la autodisciplina a
travs de la mente del intelecto. La principal meta del Jiu-Jitsu es convertir a quien lo
practica en un ser mas comprensivo, que tiene como expectativa inmediata una vida
sincera.
Vale decir que una buena calidad de vida requiere la salud desde los puntos de vistas
fsico y mental. El Arte del Jiu-Jitsu no toma vida si no se centra en la mente, que es de
donde las mejoras fsicas se planifican y se construyen. Jiu-Jitsu es mucho ms que
entrenamiento y fuerza, es la alteracin o cambio fsico y mental, del estilo de vida que
hasta entonces uno llevaba y que habr de perdurar hasta nuestra muerte. Vendra a
conformar un medio para coordinar, unir y complementar nuestras acciones con la
mente o para la integracin de la pelea con la filosofa.
Cualquier meta que para nosotros valga la pena, requiere un mnimo de esfuerzo,
dedicacin y disciplina. Esto no es menos evidente en el entrenamiento por el Jiu-Jitsu,
cada aspecto de este Deporte requiere la armonizacin del cuerpo y de la mente. Esta
ltima se logra mediante la meditacin combinada con la respiracin y tcnicas fsicas
precisas.
Uno de los otros objetivos del Jiu-Jitsu es la seguridad personal de quien lo practica. No
solamente las tcnicas de Defensa Personal deben ser aprobadas, sino que es mas
importante centrarse en el desarrollo del carcter individual.
As tenemos como objetivo cultivar nuestro cuerpo y mente y no calmar nuestra ira,
frustracin o u otros conflictos emocionales. Debemos aceptar como serios practicantes
de este Arte la filosofa de no-violencia. Cualquier confrontacin fsica debe ser
impedida en la medida de lo posible. El uso de la violencia solo se puede llegar a
justificar como defensa propia o para defender a aquellos que no pueden hacerlo.
Debemos desplegar nuestro coraje para satisfacer nuestras demandas ticas en defensa
de nuestra Patria o de nuestros prjimos contra cualquier acto injusto de violencia, hasta
el punto del supremo sacrificio si es necesario.
El practicante de Jiu-Jitsu debera utilizar sus conocimientos solo para proteger a los
dems y a si mismo de la agresin y luego solo hasta el punto en que pueda protegerse y
salir de la situacin.
En el caso de ser necesario, el uso del Jiu-Jitsu, contra un adversario, el practicante
debera aun, utilizar su autocontrol y sano juicio. Un practicante de Jiu-Jitsu entrenado
apropiadamente hara todo lo posible por evitar la confrontacin fsica, no solo porque
sabe que tal confrontacin es innecesaria, sino que tambin sabe que tiene mas
posibilidades de defenderse efectivamente y porque la confrontacin fsica es
filosficamente degradante. Siendo perceptible y que todas las otras formas de evasin
han fallado.
El practicante de Jiu-Jitsu debera adoptar tambin una actitud de auto-control. Todo
esto lo ayudara a convertirse en una mejor persona y, al mismo tiempo, a evitar
confrontaciones innecesarias. Es la paz interior y confianza que el practicante desarrolla
que hace esto posible. La paciencia es la clave.
La disciplina es el ejercicio del auto-control. En Jiu-Jitsu este concepto abarca las
emociones, acciones y actividades mentales de sus practicantes. Es uno de los pilares
desde el cual se alcanza la Maestra.
La habilidad de defenderse a uno mismo, incrementa la auto-confianza combinada con
un mejor juicio, integridad y por sobre todo mejorar el estilo de vida, trae consigo una
actitud positiva.
Los aspectos mentales del Jiu-Jitsu no se manifiestan tan rpidamente en comparacin
con las casi inmediatas mejoras fsicas. Mejoras en la habilidad fsica adquirida del
entrenamiento, sern inmediatamente visibles para el practicante mismo, mientras que
las mejoras en su aspecto mental sern reconocidas por las personas que lo rodean.
Las actividades fsicas destinadas a mejorar las condiciones mentales son tiles, para
desarrollar una imagen propia positiva. El aspecto fsico del entrenamiento es un espejo
directo de cuanta energa esta poniendo el individuo en su propio conocimiento interno.
Cuanto ms duro se entrena el cuerpo, mayor es el crecimiento espiritual.
Como ya fue dicho, el objetivo principal de la prctica del Jiu-Jitsu, es alcanzar la
perfeccin del carcter. Entonces para lograr perfeccionar el carcter, uno debera
agradecer las abundantes bendiciones de la naturaleza como as tambin valorar el gran
amor que nos brindan nuestros padres, uno debera devolverle la enorme deuda a los
Maestros siendo siempre responsables de sus obligaciones con todas las personas.
Cada practicante de Jiu-Jitsu debera darse cuenta que la base de todas las virtudes es la
honestidad. La buena voluntad es el secreto de la prosperidad en los negocios. La
amabilidad es la esencia de xito, trabajar amenamente es la madre de la salud.
El esfuerzo tenaz y con diligencia supera circunstancias adversas. Simplicidad, fortaleza
y hombra son las claves de la alegra y buen humor, y servir a la humanidad es la fuente
de la existencia mutua y prosperidad comn. Cortesa, respeto, modestia, lealtad,
generosidad y dedicacin son no solo el origen sino tambin la recompensa del
entrenamiento.
Los practicantes de Jiu-Jitsu, procuran continuamente vivir respetando los siete
principios del Cdigo de BUSHIDO El camino del Guerrero . El cdigo de Bushido
nos ensea Humildad, Veracidad, Valenta, Benevolencia, Compasin, Sinceridad,
Lealtad, y Devocin a nuestra familia, amigos, Pas, as como tambin en cada aspecto
de nuestras vidas. Como practicantes de Jiu-Jitsu creemos que el Cdigo de Bushido
sirve como recordatorio constante para perfeccionar nuestro carcter.
La Etica en el Jiu-Jitsu, considerada desde una perspectiva moderna, se manifiesta de
las siguientes maneras:
Primero. La Humildad: Siempre es fcil situarse en un pedestal y desde all arriba a
observar despectivamente a quienes no han logrado todava alcanzar el mismo nivel que
nosotros. Este acto nos convierte en arrogantes y egocntricos. No nos permite ver que
siendo humildes estamos capacitados para aprender. Cuanto ms humildes son las
personas, ms ganas tienen de incorporar nuevos conocimientos. As como un
recipiente vaco esta listo para que lo llenen, una mente abierta esta decididamente
preparada para aprender.
Segundo. El Coraje: El deseo de defender la verdad y la justicia es una de las virtudes
tradicionales de las Artes Marciales. El coraje aqu referido no es aquel que nos lleva a
una confrontacin fsica sin sentido, es el que nos lleva al auto sacrificio a favor de la
verdad, sin importar el costo. Este sentido del coraje prueba el verdadero valor de una
persona. En momentos de peligro o crisis, un artista marcial debe mantenerse firme y
listo. La voluntad de sacrificarse es una caracterstica importante de un artista marcial.
Nada es imposible sin sacrificio.
Tercero. La Integridad: Un verdadero Artista Marcial debe tener una conducta moral
apropiada para no ser intimidada por el poder, corrompido por el dinero, o debilitado
por el deseo, nunca debemos ser soberbios, pero tampoco debemos perder el orgullo. Un
verdadero artista marcial debe tener el orgullo al actuar as demostraremos nuestra
fuerza interior y logramos tener la conciencia limpia.
Por ultimo, pero no por ello menos importante. El Respeto: Respeto y sensibilidad
hacia los otros logran un efecto en nuestras relaciones personales, incluso en el trabajo o
en la Escuela y tambin con amigos y familiares. Si guardamos una buena conexin con
nuestros semejantes podemos estar atentos a ellos y sus necesidades.
El respeto por los mayores y de quienes aprendemos, es esencial para el aprendizaje, sin
este elemento bsico el Maestro no puede ensear ni el Alumno puede aprender. Los
practicantes de Jiu-Jitsu, no solo deberan aplicar el ceremonial para el sistema seorial
y los Honorables Maestros antiguos (Shomen), sino que tambin deberan mostrarse
respetuosos consigo mismos, otros practicantes y todos los seres humanos.
Deberamos honrar siempre a nuestras familias, y dar sin esperar recibir algo a cambio.
Esforzarse para honrar a la familia es una responsabilidad de por vida. Como miembro
de una familia, nuestra primera tarea es ser filial hacia nuestros padres, ser solidario y
armonioso con nuestro cnyuge y ser afectuoso con nuestros hermanos y hermanas, de
tal manera que nuestra familia sea un sonido satisfactorio y armonioso de nuestra
comunidad. Como miembro de una Nacin uno debe ser agradecido por la proteccin
que uno recibe como ciudadano, uno debe procurar el bien comn y fomentar un
espritu de servicio social.
Este principio, puede ser tambin extensible para incluir respeto por otros seres
humanos, respeto por la sociedad, instituciones, otras naciones, culturas y todos los
aspectos de la vida y la naturaleza. Solo cuando hay un nmero suficiente de personas
que comparten este principio, podemos esperar un cambio en nuestro mundo de
violencia y caos a un mundo de paz y orden.
El respeto tambin debera aplicarse a la naturaleza, la cual siempre debe ser vista como
el sustento de nuestra vida y energa, y muchas veces, como nuestra inspiracin y
ejemplo de balance y orden.
Como practicantes de Jiu-Jitsu tambin deberamos utilizar la tica como sistema de eje
de coordenadas para nuestro comportamiento da a da y actividades: Nosotros somos
responsables de demostrar los Cdigos dentro y fuera del rea de entrenamiento. Este
ejemplo muestra que no consideramos nuestra arte separada de nuestra vida diaria. Esto
demuestra la fuerza de nuestro arte y nos hace buenos practicantes y maestros.
Como una pintura en tinta del susurro del viento entre los pinos, los secretos del Jiu-
Jitus, solo pueden ser enumerados. Solo a travs de la experiencia personal puede uno
comprender el xtasis mstico de semejante secretos, y solo cultivando un estado
receptivo de la mente, sin ideas ni pensamientos preconcebidos, uno puede manejar el
secreto arte de reaccionar espontnea y naturalmente sin hesitar y sin resistencia
innecesaria.
El significado de las virtudes y principios ticos en el Jiu-Jitsu:
(Las interpretaciones de algunas palabras son a veces tan personales y diferentes
(subjetivas) que es necesario establecer una idea comn bsica que se ha ido formando
con la evolucin en la prctica del Jiu-Jitsu).
BENEVOLENCIA: Buscare el bien para toda la gente y los har sentir valiosos.
Mostrare compasin hacia la naturaleza y hacia los seres vivientes que la habitan.
Carcter: Ser el reflejo del honor y del respeto hacia la Artes Marciales manteniendo
una vida limpia y ejemplar. No por medio de mis palabras, sino por medio de mis
acciones que dar un buen ejemplo a seguir para los otros.
CORAJE: Desarrollare coraje combatiendo las malas influencias que pudieran
llevarme al fracaso o perjudicarme mental, fsica o espiritualmente. Defender la
justicia y la verdad.
CORTESIA: Tendr buenos modales con aquellos que me encuentre en el camino de
la vida.
ESTIMULO: Festejare el xito de las otras personas como si fueran mis propios
logros.
PERSEVERANCIA: Intentare sortear todos los obstculos y desafos en mi vida. No
perder la fe en m ni tampoco en ellos a quien amo.
DEDICACION A LA FAMILIA: Trabajare y me esforzare para brindar amor, felicidad
y lealtad para mi familia y reconocer que ningn otro xito puede compensar un
fracaso en el hogar.
IMPORTANCIA DEL PERDON: Olvidare los errores del pasado y me concentrare en
mis metas para el futuro.
SALUD: Proteger mis destrezas evitando prcticas perjudiciales para la salud como
fumar, drogas, o el uso excesivo del alcohol. Nunca manipulare o me garantizare un
buen rendimiento en competiciones o entrenamientos a travs del uso de substancias
prohibidas.
HONESTIDAD: Mi vida personal, mis negocios y mi vida familiar sern conducidos
honestamente y no aceptaran la mentira, el chantaje o el robo.
HUMILDAD: Invertir tanto tiempo para conseguir mi objetivo que no encontrare
momento para criticar a otros. Continuare humildemente mi propio crecimiento.
INTEGRIDAD: Ser sincero y frontal en mis relaciones con el resto y mantendr un
alto nivel de moral en mis acciones cotidianas. No ser manipulado o intimidado por el
poder, corrompido por el dinero, ni debilitado por el deseo. Demostrare sinceridad
respetando el reglamento fuera de mi escuela y del club, as como tambin en todos los
aspectos de mi vida.
NO A LA CRITICA: Si no tengo nada positivo para decir sobre una persona, no dir
una palabra.
MENTE ABIERTA: Mantendr mi mente abierta hacia los puntos de vista de las
dems personas, sin dejar de lado mis principios de verdad y honestidad.
OPTIMISMO: Siempre tendr una actitud positiva en mi vida y en mi relacin con los
dems.
PACIENCIA: No menospreciare a aquellos que no han alcanzado mi nivel de
habilidades o comprensin. Me inspirare en los dems para comprender que todos
progresamos en diferentes niveles. Ser paciente conmigo mismo y reconocer que soy
imperfecto.
RESPETO: Respetare el sistema de ascenso de niveles del Jiu-Jitsu, a los miembros de
la familia del Jiu-Jitsu y de otras Artes Marciales, a todos los seres humanos, a la
sociedad, a otras naciones, culturas y todos los aspectos de la vida y la naturaleza.
AUTO CONFIANZA: Tendr confianza en mi mismo y en mis habilidades. Cuando
llegue la hora de ayudar, lo har sin dudar de mis capacidades. Tendr confianza en
aquellos que me rodean y les dar mi apoyo.
AUTO CONTROL: Mantendr mi compostura y calma en situaciones estresantes, sin
importar el comportamiento que tengan los dems para conmigo. No agredir verbal o
fsicamente sin una razn valedera. Es mi responsabilidad auto controlarme y usar mis
habilidades especiales correctamente. Los principiantes van a enmascarar sus
emociones. Los practicantes avanzados controlaran y disciplinaran sus emociones y
actos por medio del auto control. Actuare, no reaccionare.
AUTO DESARROLLO: Me desarrollare al mximo de mi potencial en todos los
sentidos. Desarrollare un hbito de aprendizaje durante toda mi vida y aplicare estos
principios en mi vida cotidiana.
AUTO DISCIPLINA: El ingrediente clave para el xito en la vida es la disciplina
mental y fsica. Estableciendo objetivos y alcanzndolos con mucha dedicacin y
esfuerzo crean la auto disciplina. Cualquiera que sea mi objetivo, primero debo
visualizar en mi mente que es lo quiero alcanzar, luego debo tener la determinacin y
persistencia suficiente como para superar los obstculos que puedan llegar a surgir sin
pasar por encima de los intereses de los dems. Luego entrenare o estudiare de acuerdo
a lo que mis objetivos requieran.
SERVICIO: Ayudare desinteresadamente y alentare a los dems estudiantes,
participando en las actividades y proyectos del colegio o club; y demostrare orgullo
manteniendo limpio y ordenado el lugar de entrenamiento o estudio.
Estos cdigos de principios, deberan incentivar a los individuos a vivir impecablemente
y con ms felicidad, mayor eleccin y paz. Este no es un camino sin riesgos, pero
tampoco es un camino sin recompensas. Vivir de acuerdo al Bushido Cdigo del
Guerrero enriquecer nuestra vida cotidiana en nuestros propios trminos.
1) LA ETICA EN LA DEFENSA:
Todos tienen el derecho a defenderse, no obstante, el practicante de Jiu-Jitsu debe ser
guiado por principios ticos con la opcin de defenderse sin lastimar a terceros. Debe
respetar la integridad fsica de su oponente. Con la prctica, la defensa personal efectiva
es posible sin la necesidad de infringir heridas al agresor. La verdadera victoria es si
nadie pierde.
Existen cuatro niveles de comportamiento tico en el combate.
El ataque no provocado que resulta en una herida de muerte es el nivel ms bajo y es
moralmente imperdonable y reprensible.
La provocacin de un ataque por medio de un insulto o una actitud altanera o el
consecuente ataque a la otra persona como represalia: El instigador es responsable por
iniciar el ataque y hay una muy pequea diferencia tica entre este nivel y el anterior.
La defensa ante un ataque no provocado, en donde el atacante resulta herido o muerto.
El hecho de que el que se defiende no es responsable del ataque es ms justificable
desde el punto de vista tico que los niveles anteriores; no obstante el resultado es
igualmente grave.
La defensa controlada ante un ataque no provocado, en donde ni el atacante ni aquel
que se defiende resultan heridos. Este es el ltimo nivel tico de la defensa personal.
Requiere, adems de una excelente tcnica, principios ticos fuertes y un deseo sincero
de defenderse sin herir a los otros. Este es el objetivo de toda verdadera tcnica de
defensa Personal y debe convertirse en la meta a alcanzar de todo aquel que practique
Jiu-Jitsu y desee superarse en su empeo y tcnicas fsicas.
ARTICULO 4to. PLAZOS. Los plazos que establece este Reglamento se contaran a
partir de la hora 0 (cero) del da siguiente a la notificacin de la Resolucin respectiva y
se extinguir a las 24 (veinticuatro) horas de la fecha de su vencimiento.
ARTICULO 9no. IN DUBIO PRO REO. En caso de duda se estar siempre a lo que
resulte ms
favorable al inculpado.
ARTICULO 11ro. ACTUACION. Las infracciones que prevn los reglamentos y que no
fueran por hechos ocurridos en una competencia, Continental u otra actividad de jiu-
jitsu, podrn ser iniciadas por las autoridades correspondientes.
ARTICULO 12do. INFORMES. En todos los casos los informes debern presentarse en
la por escrito y dentro de los 3 (tres) das siguientes a la fecha en que se hubiera
realizado la competencia o actividad, o producido el hecho.
c) Pases Afiliados.
1) Las entidades, jujitsukas o rbitros que participen en actividades de Jiu-Jitsu sin la
autorizacin de la Federacin correspondiente de su Pas cuando esta correspondiere,
merecern desde amonestacin o apercibimiento hasta 12 meses de inhabilitacin o
suspensin.
2) Cualquiera sea el motivo por el cual un Pas decidiera por intermedio de su Delegado
o Tcnico, retirar total o parcialmente su plantel en una competencia o en cualquier acto
de Jiu-Jitsu, ser considerada como una actitud antideportiva y carente de consideracin
y respeto hacia el publico, y motivara la automtica inhabilitacin del responsable por el
termino de 12 meses, pudiendo hacerse acreedor el Pas a la suspensin de derechos
como Entidad afiliada desde 1 (un) ao hasta 3 (tres) aos.
3) Las Entidades cuyos simpatizantes ( hecho comprobado fehacientemente) promuevan
desordenes durante el desarrollo de una competencia, profieran amenazas a los rbitros
o a autoridades del certamen o en cualquier otro acto de Jiu-Jitsu, y que no acaten la
advertencia de sus autoridades, se harn pasibles de penas graduales que irn desde la
amonestacin, multa por una cifra equivalente a cinco veces el pago de la inscripcin,
descuento del puntaje acumulado por todos sus representantes si lo hubiera, hasta la
inhabilitacin por 1 ao. Respecto a los desordenes provocados por los simpatizantes, el
Director del torneo tendr la facultad de hacer retirar del recinto a la o las personas
causantes del desorden, con la participacin de la fuerza publica.
4) Las Entidades, autoridades, delegados, etc. (cualquier persona vinculada a la Unin
Panamericana de Jiu-Jitsu que realicen publicas manifestaciones que puedan afectar el
buen nombre y prestigio de la Unin Panamericana de Jiu-Jitsu, en cualquier nivel,
sern pasibles de penas que van desde amonestacin hasta 3 (tres) aos de inhabilitacin
o suspensin.
d) rbitros y Jueces.
1) Sern pasibles desde apercibimiento hasta suspensin para actuar en sus funciones
por 2 (dos) fechas de torneos nacionales, Sudamericanos o Panamericanos, los rbitros
y Jueces que:
1 a) Estn desactualizados del Reglamento Internacional de Arbitraje al punto tal que no
sepan aplicar correctamente las ultimas reformas introducidas al mismo.
1 b) Ejerzan "vedetismo", es decir acten de tal forma exagerada que mediante su
accionar
(sealizaciones, gestos) se promuevan en la figura principalsima de la competencia.
1 c) No solicitaren autorizacin para retirarse de su sector y por esta causa dificultaren
el normal desarrollo del torneo.
1 d) Llegaren tarde tanto al torneo como al llamado de la mesa de control, salvo que
hubiere un aviso anterior.
1 e) Hicieren gestos o movimientos que reprueben un fallo de otra terna.
1 f) Dieren instrucciones a los combatientes de su Pas.
1 g) Se comportaren dentro de su sector, de tal manera, que hagan perder a sus
compaeros, la atencin y compostura que debe mantener siempre un rbitro oficial.
2) Sern pasibles desde apercibimiento hasta suspensin para actuar en sus funciones
por 2 (dos) aos de torneos Panamericanos o 1 (un) ao los jueces que:
2 a) Manifestaren una incompetencia tal en sus funciones, que puedan perjudicar no
solo a los
combatientes sino a toda la competencia y desvirten toda justicia que debe imperar en
el desarrollo de la misma.
2 b) No acataren las disposiciones del Director de rbitros.
3) Sern pasibles de 5 (cinco) aos de suspensin o inhabilitacin para actuar en sus
funciones los rbitros y los jueces que:
3 a) Injuriaren de palabra o de hecho a alguno de los dos jujitsukas combatientes o
participantes en la competencia, promoviendo un escndalo publico.
3 b) Soliviantaren a la barra o tribuna, promoviendo desordenes y desprestigiando al
cuerpo de rbitros y / o dirigentes.
3 c) Injuriaren de palabra o de hecho a algn dirigente de la Unin Panamericana de Jiu-
Jitsu o de alguna otra Institucin o Federacin participante del torneo oficial.
3 d) Injuriaren de palabra o de hecho a alguno de sus pares promoviendo escndalo
publico.
3 e) Actuaren de tal manera parcialmente que perjudiquen notablemente a uno de los
jujitsukas de algn Pas o Institucin con sus fallos arbitrarios e intencionados,
desvirten la justicia que debe imperar en las competencias.
3 f) Si en alguna competencia Continental o internacional se comportaren de tal manera
en contra de la moral y las buenas costumbres, no acataren las disposiciones de la
Direccin de Arbitraje promoviendo escndalos, fuera notoriamente parcial en sus
fallos, etc.
4) Adems de los casos expuestos, la Comisin Tcnica Educativa en conjunto con el
Consejo Directivo de la Unin Panamericana de Jiu-Jitsu informara al Consejo
Directivo de la Federacin Internacional de Ju-Jitsu de los rbitros y jueces que
cometieren infracciones graves, expuestas o no en el presente reglamento de disciplina,
solicitando la baja de su categora.
e) Pblico.
1) Toda persona que acte en una competencia como pblico y que no se encuentre
comprendida en ninguna de las clasificaciones anteriores deber guardar el mayor orden
durante el desarrollo de la misma, pudiendo alentar a sus representantes en forma
correcta, no ampulosa y de manera tal que no enerve a otros parciales. Los que no
cumplan con lo antes expuesto se harn pasibles a la prohibicin de entrada a los
campeonatos por el tiempo que se determinara de acuerdo a la gravedad de la falta
cometida.
Nota: todo caso, infraccin o interpretacin no prevista en el presente Reglamento de
Disciplina, ser resuelto por el Tribunal. En todos los casos la sancin impuesta, ser
inscripta en la carpeta de afiliacin y se dar aviso al Pas afiliado.
A principio del siglo pasado el brasilero Hlio Gracie decidi ensear jiu
jitsu, un arte marcial japons, en Brasil. La disciplina trata de llevar al
oponente al suelo y dominarlo con llaves y palancas en distintas
articulaciones o con estrangulaciones. Pero Gracie no slo ense el
viejo arte oriental, lo transform de manera radical: cre una disciplina sui
generis aldesarrollar el combate en el suelo.
En 1925 se abri la primera academia de jiu jitsu brasilero (BJJ, por las
siglas en ingls) en Ro de Janeiro. La forma de promocionarlo era
retando a cualquier competidor, de cualquier disciplina y peso a pelear.
La propaganda era buena. Los de BJJ siempre ganaban.
Gracie dijo que Dios hizo a algunos hombres ms fuertes que otros y
que esta tcnica igualaba o minimizaba esa diferencia. El BJJ segua
sumando algunos adeptos, pero la fama lleg en 1993 cuando en
Estados Unidos se organiz una pelea en la que Royce, uno de los hijos
de Gracie, retaba a peleadores de cualquier peso y disciplina en un
combate casi sin reglas. A pesar de competir contra gente mucho ms
pesada, que haca boxeo, tae kwon do y lucha libre, gan. El evento se
llam Ultimate Fighting Championship, que se podra traducir como
Torneo del Supremo Luchador, el ltimo que queda en pie.
Cuando los competidores de artes marciales y deportes de combate
tradicionales vean que no podan defenderse ante el jiu jitsu brasilero,
comenzaron a aprenderlo. Los que lo practicaban comenzaron a entrenar
para pelear de pie.
Al principio, en 1993, una de las pocas cosas que no se poda hacer era
meter los dedos en los ojos. No haba rounds ni tiempo: se peleaba hasta
el K.O. o hasta que alguno se rindiera o cayera muerto. Con los aos
empez a haber diferencias de categoras, ms reglas, equivalencia
deportiva (que ambos tengan una cantidad similar de participaciones en
competencias), un mdico y una ambulancia en el lugar.
Tambin hay un extenso listado de prohibiciones; hay cdigos no escritos
de respeto. El rbitro puede parar la pelea cuando uno no puede
defenderse o cuando los participantes estn tan anudados que no hay
accin.Se compite en tres rounds de cinco minutos cada uno. Los
competidores se saludan antes y despus de la pelea.
El nombre original fue brasilero: Vale Tudo cuando vala casi todo.
Luego fue Freestyle (estilo libre), porque era libre el estilo de pelea: no
estaba regido por un solo arte marcial o deporte de combate. Ahora (y
desde hace varios aos) se lo llama Artes Marciales Mixtas o MMA.
Si bien el nombre del indica que es una combinacin de tcnicas, el MMA
no es un arte marcial. Segn los formalistas rusos, arte era cualquier
expresin cuya funcin dominante sea la esttica. Las artes de la guerra
son aquellos sistemas de combate que adems de la defensa personal
pretenden un fin esttico y un desarrollo espiritual. El MMA hoy da tiene
ms de deporte que de arte, de hecho involucra ms deportes de
combate que artes marciales, sin embargo hay muchos peleadores que
buscan dar un buen espectculo adems de ganar, dice Fabrykant.
El combate se alterna entre la lucha de pie, contra la reja y en el piso. No
se detiene cuando un luchador cae. Se podra decir que la pelea ideal es
aquella donde las situaciones de combate se suceden de manera
continua. Por eso el refer interviene cuando los luchadores se hallan tan
anudados que se detiene la accin. Alguien que se especialice en tae
kwon do va a pensar dos veces antes de lanzar una patada a un
contrincante si sabe que el otro conoce de Judo o Jiu Jitsu y puede
aprovechar la situacin de desequilibrio para derribarlo. Un especialista
en jiu jitsu brasilero va a pensar antes de hacer una tcnica para tirar al
rival si sabe que ste conoce de muay thai y puede utilizar la rodilla para
frenarlo. En un ring de boxeo los contrincantes no esperan patadas, ni
rodillazos, ni derribos por eso un boxeador que no domina en lo absoluto
el piso es presa fcil de un luchador de MMA. En las Artes Marciales
Mixtas uno puede esperar cualquier tipo de golpe o agarre en una amplia
variedad de situaciones. El combate se transforma en un juego
estratgico y reflexivo en el que hay que pensar y elegir rpidamente
entre muchas opciones posibles de ataques y defensas.
Para Sebastin Sampacho, profesor de jiu jitsu brasilero, que tambin
practic judo y tae kwon do, el MMA en el suelo se parece al ajedrez.
Cuando sos avanzado, no ests pensando en el primer movimiento, si
no en el segundo y el tercero. Viste cuando entregs una ficha porque
quers ganar otra? Si te entregan algo, ten cuidado. A la jaula slo sube
gente preparada despus de aos de entrenamiento. Guido Astengo,
profesor del dojo GOA, tiene unos 20 30 alumnos, de cinturn violeta
hacia arriba, que entrenan de manera diferenciada para competir. A se
cinturn se llega slo despus de cuatro aos de entrenamiento.
Entrar en una pelea es un sacrificio. Hay que hacer dieta, entrenar
mucho, y hacer un proceso de deshidratacin. Para bajar de peso y
entrar en una determinada categora, unos das antes, casi todos los
luchadores hacen un rgimen extremo y toman diurticos. As logran
perder kilos en poco tiempo. Van al pesaje y tienen 36 horas para
recuperarlos antes de la pelea. Es comer, comer y comer. Hay que
hacerlo bien.
Para el nutricionista Federico Cillo el proceso de deshidratacin puede
afectar el equilibrio del cuerpo por la prdida de lquido y de electrolitos
(sodio, cloro, magnesio, potasio).
Al repetir la deshidratacin aparece un acostumbramiento que a
simple vista no parece acarrear muchos inconvenientes.
Antes de subir a la jaula y una vez arriba, no hay miedo al dolor. Dicen
todos: a ninguno le preocupa recibir golpes, estn acostumbrados.
Guido Canetti, uno de los peleadores ms conocidos, tiene miedo a
fracasar o a perder, no a los golpes.
Para Quique Denegri el miedo est en lesionarse. Pero a medida que se
gana experiencia es ms difcil que suceda porque el rival conoce los
lmites, y si bien todos buscan ganar la pelea tambin se cuidan de no
lesionar ms de lo necesario.
Si te rompen un brazo es porque vos quers que te rompan un brazo,
porque vos no te rendiste dice Sebastin Sampacho. Un cinturn
marrn o negro no te va a romper por romper.
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existe/#sthash.wEcsvg2V.dpuf
Cada pelea es a tres rounds de cinco minutos cada uno. De las 8 peleas
de hoy, siete terminarn en el primer round, y una sola completar el
tiempo reglamentario y se definir por voto de los jueces. De las siete
que terminen antes, una ser K.O., otra K.O. tcnico, y las otras cinco
terminarn por sumisin. Uno de los peleadores va a rendirse.
La quinta pelea se gana por una llave en el cuello. El que est siendo
asfixiado da las dos palmadas y se desmaya. Entran a la jaula el mdico,
entrenadores, y junto con el rbitro lo ayudan a reanimarse. Son
segundos, quizs un minuto. Cuando el luchador se levanta, el pblico
aplaude eufrico.
Un rato ms tarde, la pelea principal de la noche. Para el pblico no est
en juego la rivalidad entre gimnasios o el puro gusto por el combate sino
adems el orgullo nacional. Se enfrentan Jack Guzmn de Per y Guido
el Ninja Canetti de Argentina.
Guzmn sube primero a la jaula. Cuando se lo ve a Canetti parece ms
fuerte y pesado que el peruano. En la fecha del pasaje, tres das antes,
slo haba cinco gramos de diferencia entre ambos a favor de Canetti.
As como sucede con la construccin de un blido de carreras, el
entrenamiento de un luchador pone en juego un conjunto de saberes y
tecnologas que tienen por objeto a esa mquina que es el cuerpo. Para
Guido Astengo no se trata de una persona sino de un equipo: trabajan
con nutricionistas, mdicos deportlogos, traumatlogos, cirujanos.
Quizs Guzmn piensa que es pura apariencia mientras mira subir a su
oponente al ring. En ocasiones es posible esperar que la tcnica
minimice, iguale y hasta venza a la fuerza. Pero Canetti tambin domina
en cuanto a experiencia y, adems, juega de local.
El refer llama a los peleadores al centro del hexgono. Cumplidos los
ltimos ritos y precauciones comienza la pelea. Trompadas, patadas,
llaves, intentos de golpes y Guzmn cae por una trompada de izquierda
en la mandbula. Canetti al verlo desplomarse se abalanza sobre l, pero
es evidente que su oponente esta Knock Out. El rbitro interviene, agarra
a Canetti por la cintura y lo aparta de su rival. En seguida se comprende
por qu al peleador argentino le dicen el ninja. Corre hacia la reja, se
trepa al travesao, saluda al pblico y salta hacia afuera. Desaparece
corriendo hacia el camarn. Para el momento en que se pierde de vista
su contrincante Guzmn ya se recuper. Sin embargo, el Knock Out est
decidido.
Llueve mucho. Cerca del medioda, Quique Denegri espera clientes para
tatuar en su local Hurlingham. A la maana estuvo entrenando alumnos
en Palermo y ahora dedica el resto del da a su otro oficio.
Cree que para ser bueno en Artes Marciales Mixtas no influye la
personalidad. Todo es cuestin de disciplina. Tampoco hace falta ser
agresivo porque no hay nada personal con el que est al frente. Lo que s
hace falta es dominar alguna forma de pelea en el suelo, como el jiu jitsu
brasilero, y otra para hacerlo de pie.
Un televisor prendido muestra un partido de tenis de las olimpadas.
Cada tanto entra algn cliente y Quique, todo amabilidad, atiende, da un
turno. Cuesta imaginar a este hombre de dedos gruesos y 120 kilos,
dibujando sobre el cuerpo de alguien. Es extrao ver al mismo hombre
luchar con rudeza, tatuar con paciencia y precisin.
Encontrs alguna relacin entre el tatuaje y el MMA?
Algunos digan que es una autoflagelacin, tatuarse es embellecer el
cuerpo. Con el MMA o con entrenar fuerte pasa lo mismo.
No puede decir cuntos tatuajes tiene porque hay algunos mezclados.
Llegado cierto punto, se habla de porcentajes. l tiene entre el 60 y el
70% del cuerpo tatuado. En el cuello se distinguen dos estrellas, en los
dedos de una mano dice hate, en los otros love. Est la fecha en la
que falleci su pap, el nombre de su mam y de sus hijas. Tiene escrito
jiu jitsu en japons y en castellano. Son muchos los que apelan a tatuajes
de la academia o del arte marcial que practican. Como en tribus donde el
tatuaje representaba el universo simblico al que uno adscriba, tatuarse
sigue siendo un modo de pertenecer. Un modo de recordar siempre
quin es uno, de dnde viene y dnde quiere estar.
Sebastin Sampacho, profesor de jiu jitsu brasilero y MMA, tiene 40 aos
y ningn tatuaje. Ahora quiere tatuarse un samuri y un dragn. El
primero, por los cdigos que representa: el compaerismo, la amistad; el
dragn como smbolo de fuerza y voluntad. El tatuaje le ocupara casi
toda la espalda.
El tatuaje se ve ms en deportes de combate que en artes marciales
tradicionales. Lo que casi siempre queda tatuado es el nombre del arte
marcial, del deporte o de la academia a la que pertenecen. Otras veces
son smbolos: un samuri o el famoso pez koi que sube por la cascada.
Cuando alguien entra a su local por un tatuaje, Quique lo tata. Es el
trabajo. Pero con las clases de jiu jitsu brasilero o de MMA no es igual: si
no hay buena qumica con un alumno le pide que no vaya ms.
Dedica quince horas por da a sus dos oficios que son sus dos pasiones.
Con una rigurosidad marcial entrena, ensea, tata. Son dos trabajos
que en sus orgenes salieron de las sombras, del tab.
Ests en medio de dos oficios un poco mal vistos.
S, debe ser mi propio estigma tener estas dos mierdas que me
gustan. Por suerte a las peleas ahora las transmiten por Fox y Space. Y
que los tipos con plata como (Marcelo) Tinelli o (Ricardo) Fort se hayan
dibujado tambin ayuda. La caja boba nos rige mucho, no?
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