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Ella Wheeler Wilcox

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EL LENGUAJE DEL AMOR En la semejanza donde los ojos

trazan
Cmo habla el Amor? En todas las cosas justas el rostro
Sobre una mejilla en su tenue rubor, amado;
Y en la palidez que le sucede, en En el tmido roce de las manos que
aquel se estremecen,
Temblor de unos ojos que huyen, -en los labios y las miradas que ya
-la sonrisa que se convierte en no disimulan-
suspiro- As habla el Amor.
As habla el Amor.
Cmo habla el Amor?
Cmo habla el Amor? Cuando las palabras pronunciadas
Por la desigualdad de dos corazones parecen tan dbiles
que palpitan, Que se someten al silencio; en el
Monstruo que en el pulso vibra, fuego
inmvil ante el dolor, Que abate las miradas, destellos
Mientras nuevas emociones, como rpidos y ms altos,
inslitas barcas Como relmpagos que preceden la
Que a lo largo de las venas trazan furia de la tormenta;
su inquietante curso; En lo profundo: sentimental quietud;
-como el amanecer, con la fuerza En la clida marea apasionada que
sbita del amanecer- barre las venas
As habla el Amor. Entre las orillas del deleite y el
dolor;
Cmo habla el Amor? En el abrazo que se derrite en la
Cuando evitamos aquello que locura del placer,
buscamos, -en el arrebato convulsivo de un
El silencio repentino que nos asalta beso-
cuando As habla el Amor.
Contemplamos el ojo que brilla con
su lgrima esquiva, ANGEL O DEMONIO
Cuando la alegra nos arrebata el
corazn del pecho Usted me llama ngel de Amor y
-conociendo de memoria los luz,
nombres divinos- un ser de bondad y eterno fuego,
As habla el Amor. enviado desde el Cielo para guiar
vuestros pasos
Cmo habla el Amor? por senderos donde los espritus
En el orgulloso espritu que crece ansan caminar.
mansamente, Dices que brillo como un astro en el
En el corazn altanero creciendo firmamento;
humilde; en la clida como un rayo en el crepsculo, una
Luz sin nombre que inunda el chispa de la Fuente.
mundo con su esplendor;
Ahora escucha mi respuesta, y deja
que el mundo la oiga: que arde como dulce incienso slo
Hablo sin temor sobre lo que para usted,
conozco; hoy ser el estigma de mi
El puro, el fervoroso Amor es el vergenza.
espritu creador Ha torturado mi espritu con su
que hace de las mujeres ngeles. falsedad,
Yo vivo, existo slo por usted, slo ignominia que todo lo pervierte;
en usted. los ngeles y los Demonios nacen
Nuestras almas juntas yacen atadas del mismo vientre
por las antiguas leyes sagradas, hasta que la Pasin los gua hacia
y si yo soy un ngel, usted es la abajo,
causa. o por el camino ascendente.

Mientras mi bote agitaba las Yo les advierto, a todas las mujeres


espumas del mar, que habitan bajo la mscara de
observ en calma desde la proa: esposas,
Encantador el Amor brillaba, y a las dulces y tiernas madres,
el pulso firme sobre el timn; que el destino nunca es justo.
iluminado en sus bellas formas. Son las damas las que abandonan
Maldecir entonces la barca que en sus vidas
la noche fue naufragio, por la locura que brota de la
pues el infame navegante abandon desesperacin.
su puesto Como la brasa que en la chimenea
envuelto en radiantes sombras? consume su calor,
Mi propio bote no es ajeno, el desdn derriba todos las
pues l tambin se ha perdido. murallas.
Ha desertado el marinero
o se ha dormido en su puesto? El mundo es cruel al juzgar estas
cosas,
He dejado los tesoros de mi alma a un gran mal y un gran bien
vuestros pies, se alimentan del mismo seno.
(s que algunas damas lo hacen El Amor nos convoca y nos
cada da). desgarra,
No hay criatura que camine por esta cubriendo nuestros hombros con sus
calle alas;
que posea el negro corazn que yo Y lo mejor bien puede ser lo peor,
anhelo. y lo odioso ser lo deseable.
Usted ha despreciado todos los Usted debera agradecer que esta
tesoros, pena se haya ensaado as,
as como muchos caballeros con el pues el Demonio ha enterrado al
corazn de hielo. ngel que hay en m.

Esta llama del altar de Dios, DESPUS DEL AMOR


este fuego sagrado del Amor,
Se han consumido en cenizas, han Pero, ay! por la esperanza que
expirado estaba condenada a la
En la intensidad de su propio calor, desesperacin,
All arriba la suavidad, leve, del da Era slo el Reino de los Sueos.
de San Martn, A continuacin le pregunt a un
Coronada con la calma de la paz, alegre caballero,
triste y brumosa. Y l me dijo: "Sgueme, sgueme".
El despus del amor nos ha llevado, Y con la risa y el canto a toda
cansado velocidad partimos
De la agona y los tormentosos A las costas del hermoso mar de la
deseos, vida,
Hasta una larga mirada de amistad:
ojo fugaz Hasta que llegamos a un valle
Que nos invita a seguirlo, y a cruzar tropical
Los frescos y verdes valles que Ms lejano que el maravilloso Valle
vagan sin cuidado. de Cachemira,
Es un toque de nieve el que se Y vi desde una enramada una cara
encuentra en el aire? como una flor
Por qu nos acosa este sentido de Sonrindole al caballero alegre,
prdida? Y l dijo: "Hemos llegado a la meta
No deseamos que retorne el dolor, de la humanidad,
el calor obsoleto; Aqu el amor y el placer son
Sin embargo, sin embargo, estos intensos".
das son incompletos. Pero, ay! ay de m! por la
esperanza de mi alma
EL REINO DEL AMOR Era slo el Reino de la Sensacin.
En el amanecer del da, cuando el
mar y la tierra Mientras viajaba ms despacio, me
Reflejan la salida del sol encima, encontr en el camino
Avanc, con el corazn lleno de Un carruaje con rezagados detrs,
coraje y alegra, Y ellos dijeron: "Sguenos, pues la
Para buscar el reino del amor. morada de nuestra Dama
Le pregunt a un poeta que conoc Pertenece al reino que debes
en el camino, encontrar."
Qu encrucijada me llevara Fue una gran seora de la moda,
correctamente, una novia recin casada;
Y l dijo: "Sgueme, y dentro de Los segu, atrevida y llena de coraje.
poco vers Pero mi esperanza se desvaneci, al
Sus torres resplandecientes de luz." igual que los ltimos rayos del da,
Porque arribamos al Reino de Oro.
Y pronto a la distancia brillaba una
ciudad; En la puerta de una casa le
"Mira hacia all", dijo, "ah pregunt a una hermosa doncella.
resplandece!" "He odo hablar de ese Reino,"
contest ella, historias,
"Pero nunca mis pies vagan por el l dijo que mis cabellos le fueron
Reino del Hogar, arrebatados al sol,
Y no conozco el camino", suspir. y mis ojos a la maana gloriosa.
Mir dentro de la casa, cun Abuela dice que no debo creer
acogedora pareca! las amargas palabras del hombre,
Y la doncella era tan bella como una pues son odiosas;
paloma. Pero estoy segura de que sus labios
Una gran luz glorific mi alma no engaan,
mientras yo lloraba, y nada fuera de su clida meloda
Por qu el hogar es el Reino del realmente importa.
Amor!
Anoche estaba triste, y el mundo
EL SECRETO DE LA DONCELLA me pareca
He marcado este da en lo profundo una vivienda solitaria y sombra;
de mi corazn pero entonces nadie me haba
como la ms dulce de las jornadas; pedido que sea
-Separado del resto de mis tristes la plida musa de sus das.
horas, l existe ahora! Ms debo callar,
Aunque no dir la razn, por ahora, sellar mis labios ante la pasin
pues ese es mi Secreto- No debo impa,
decirlo; silenciarlos aunque la pena me
sin embargo, los cielos son suaves y consuma.
tiernos, Y ningn mortal sabr entonces,
y nunca antes, lo s muy bien, porqu mi corazn es ligero como
la Tierra se llen de tanto esplendor. una pluma.

SOLEDAD
Canto en mi labor a lo largo del da,
mi corazn es ligero como una Rie, y el mundo rie contigo:
pluma, Llora, y llorars solo.
y hay una razn para mi alegre Lo que la triste vieja tierra debe
cancin, prestar es alegra
ms all de la belleza de la Pero ella misma tiene suficientes
estacin. problemas.
Pero no os lo dir, aunque sensible Canta, y las colinas te contestarn;
sea Suspira, y se perder en el aire.
la corteza del arce, gritara en voz Los ecos rebotan en un alegre
alta si pudiese; sonido,
Pero lo s, l no tiene el don de la Pero se encogen sin considerar la
palabra. voz.

Donde mis dedos de nia cosan, Algrate, y los hombres te


lleg Uno buscarn:
que me arrull con las ms bellas Aflgete, y ellos darn la vuelta y se
irn. la nieve fresca;
Ellos quieren por completo tu placer y jur solemne, que mi cuello era la
entero, desesperacin
Pero no necesitan tu infortunio. de Psique, la envidia de Venus.
Mustrate feliz y muchos sern tus
amigos; El Tiempo y el cuidado
Mustrate triste y los perders a desvanecern estas ternuras.
todos. El Dios Alegre, lo s,
No hay nadie que decline tu nctar no usa cuerdas en su arco.
de vino, Cmo podra hacerlo, cuando yo,
Pero debes beber la hiel de la vida decrpita,
en soledad. suplique por un beso en la mejilla?
La helada nieve de mi piel se
Festeja, y tus salones estarn derretir,
repletos, La rosa que cae morir,
Ayuna, y el mundo te ignorar. y sobre su tumba cetrina yacern
Ten xito y da, y eso te ayuda a las huellas profundas de la vida,
vivir, y las garras del descarnado cuervo.
Pero nadie puede ayudarte a morir.
Hay espacio en los salones del Cuando este altivo cuello se
placer desgarre,
Para un largo y digno tren, cuando su tersura se pierda en
Pero uno por uno todos tenemos infinitos pliegues,
que desfilar como una fruta madura expulsada
Por los estrechos pasillos del dolor. del rbol,
o como un cansado y abandonado
UNA DAMA A SU ESPEJO acorden,
Ha dicho que me ama! Luego llam cuya ltima meloda ha exhalado...
a mis cabellos el Amor... tambin se volver
hilos de seda, donde Cupido tensa helado?
su arco; Ella Wheeler Wilcox
a mi mejilla, una rosa que cae sobre

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