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Su1010 08

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Sentencia SU.

1010/08

ACCION DE TUTELA CONTRA EMPRESAS DE ENERGIA


ELECTRICA

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-No tienen


facultad para imponer sanciones a los usuarios por falta de norma legal

A travs de diversas disposiciones de la Ley 142 de 1994 el legislador le otorg


determinadas facultades y prerrogativas a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, las cuales resultan necesarias para asegurar su prestacin
eficiente a todos los habitantes del territorio nacional. As, en caso de
incumplimiento del contrato, tal como se anot con anterioridad, dichas
facultades se relacionan con la suspensin del servicio y la resolucin del
contrato y, en caso de que el incumplimiento se d en el pago de la factura, se
permite adems que puedan cobrar unilateralmente el servicio consumido y no
facturado y los intereses moratorios sobre los saldos insolutos. No sucede lo
mismo con la posibilidad de que las empresas de servicios pblicos domiciliarios
impongan sanciones de tipo pecuniario a los usuarios del servicio, ya que
ninguna disposicin de la Ley 142 de 1994, mediante la cual el legislador regul
de manera especial el tema de los servicios pblicos domiciliarios, establece una
facultad en tal sentido, ni consagra conductas frente a las cuales las empresas
puedan ejercer dicha potestad, como tampoco el procedimiento a seguir. En
efecto, en dicho Estatuto, ni expresa ni implcitamente, el legislador le reconoce
facultades a las empresas de servicios pblicos domiciliarios para imponer
sanciones pecuniarias, por razn del incumplimiento del contrato, y por tanto,
tampoco regul un procedimiento para ejercer dicha facultad. Por lo tanto, de la
Ley 142 de 1994 no se deriva la competencia de las empresas de servicios
pblicos para imponer sanciones pecuniarias a los usuarios.

REGIMEN CONSTITUCIONAL DE LOS SERVICIOS PUBLICOS

REGIMEN LEGAL DE LOS SERVICIOS PUBLICOS


DOMICILIARIOS

POTESTAD SANCIONATORIA DE LA ADMINISTRACION

CONTRATO DE CONDICIONES UNIFORMES PARA LA


PRESTACION DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-
Facultades de las empresas de servicios pblicos domiciliarios frente al
incumplimiento

JURISPRUDENCIA CONSTITUCIONAL RESPECTO DE LA


POTESTAD DE LAS EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS
DOMICILIARIOS PARA IMPONER SANCIONES DE TIPO
PECUNIARIO

RESERVA DE LEY-Principio fundante del ejercicio de la potestad


administrativa sancionatoria
Sentencia SU-1010 de 2008

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS NO GOZAN DE


POTESTAD SANCIONATORIA-No pueden imponer sanciones
pecuniarias a los usuarios

Las empresas de servicios pblicos domiciliarios no tienen facultad para imponer


sanciones de tipo pecuniario a los usuarios, por cuanto el legislador no las ha
legitimado para ello. En este sentido, la imposicin de cobros a ese ttulo ha
comportado una vulneracin del derecho al debido proceso de los usuarios y
suscriptores, por desconocer los principios de reserva de ley, legalidad y
tipicidad, en cuanto las conductas, las sanciones y el procedimiento que informan
el ejercicio de la potestad sancionadora y la regulacin de los servicios pblicos
domiciliarios, deban estar contenidos en la ley.

CONTRATO DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-


Caractersticas

EMPRESA PRESTADORA DE SERVICIOS PUBLICOS


DOMICILIARIOS-No pueden imponer sanciones de tipo pecuniario ni por
ejercicio de potestad sancionatoria ni ejercicio de clusulas penales

Para la Corte es claro que las empresas de servicios pblicos domiciliarios no


estn facultadas para imponer sanciones de tipo pecuniario a los usuarios, ni por
la va del ejercicio de una potestad administrativa sancionatoria, ni tampoco
como consecuencia del ejercicio de una potestad de las previstas en el derecho
privado, esto, a travs de las clusulas penales. En consecuencia, los cobros que
se han hecho a ttulo de sancin comportan una clara y evidente violacin de los
artculos 6, 29 y 210 constitucionales, en tanto constituyen una extralimitacin de
las funciones y prerrogativas que les han sido reconocidas por la ley a las
empresas de servicios pblicos domiciliarios, independientemente de su
naturaleza jurdica, ya sean pblicas o privadas. Estas actuaciones, han
comportado una vulneracin del derecho al debido proceso de los usuarios, por
haber sido impuestas con absoluto desconocimiento de los principios de reserva
de ley y de los principios de legalidad y tipicidad, en cuanto las conductas, la
sancin y el procedimiento que informan el ejercicio de la potestad sancionadora
y la regulacin de los servicios pblicos domiciliarios, deban estar contenidos
en la ley.

ACCION DE TUTELA CONTRA EMPRESAS DE SERVICIOS


PUBLICOS DOMICILIARIOS-Procedencia

Cuando quiera que la actuacin de las empresas de servicios pblicos


domiciliarios frente a los usuarios se torne arbitraria y contraria al orden
jurdico, valindose de su posicin de privilegio, la accin de tutela resulta
procedente como mecanismo de proteccin de los derechos fundamentales del
usuario, frente a la ineficacia de los medios ordinarios de defensa judicial para
proteger de manera inmediata los derechos conculcados. En los casos objeto de
estudio, las entidades accionadas han impuesto sanciones de contenido

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Sentencia SU-1010 de 2008

pecuniario a los usuarios frente al incumplimiento del contrato de condiciones


uniformes. A pesar de que la mayora de ellos ejercieron el recurso de
reposicin ante la propia entidad, e incluso en algunos casos, los recursos de
apelacin y queja ante la Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios,
lo cierto es que stos fueron decididos bajo la consideracin de que las
empresas de servicios pblicos domiciliarios s estn facultadas para imponer
sanciones de contenido pecuniario, conclusin que, de acuerdo a lo
anteriormente expuesto, resulta inaceptable. En este sentido, es claro que los
recursos administrativos con los que cuentan los accionantes no resultan
eficaces como mecanismo para solicitar la proteccin de sus derechos
fundamentales, puesto que el encargado de decidirlos tiene como parmetro
una interpretacin errada del ordenamiento que regula la materia.

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-


Legislador s las facult para recuperar el costo del servicio que se ha
consumido, pero respecto del cual no se ha recibido el pago

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-El


usuario debe ser informado de las razones por las cuales se efecta
determinado cobro y de la forma en que fue calculado

En algunas de estas decisiones no se presentaron de manera clara, expresa y


especfica, las frmulas que se utilizaron para calcular las sumas de dinero cuyo
cobro se impuso y el clculo de cada uno de los rubros incluidos en los actos
administrativos sancionatorios, situacin que impidi que los usuarios ejercieran
con el pleno de garantas sus derechos de defensa y contradiccin, al desconocer
los fundamentos tcnicos y jurdicos de los mismos. La necesidad de que el
usuario sea informado por la empresa prestadora de las razones por las cuales se
efecta determinado cobro y de la forma en que ste fue calculado, constituye
precisamente uno de los derechos reconocidos por la Ley de servicios pblicos
domiciliarios a los suscriptores y/o usuarios de los servicios. En efecto, de
acuerdo con el artculo 148 de la Ley 142 de 1994, las facturas que expidan las
empresas deben cumplir con unos requisitos mnimos, dentro de los cuales se
encuentra la necesidad de consignar en ellas la informacin requerida para que
el usuario pueda establecer con facilidad los fundamentos del cobro y ejercer los
derechos que el ordenamiento jurdico les reconoce.

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-


Decisiones empresariales no constituyen en estricto sentido un acto de
facturacin

Si bien las decisiones empresariales no constituyen en estricto sentido un acto


de facturacin, lo cierto es que ellas son el fundamento para que, posteriormente,
las empresas incluyan dentro de las facturas cobros adicionales al valor del
consumo del servicio y, adems, constituyen actos administrativos susceptibles
tanto de recursos en la va gubernativa como de acciones ante la jurisdiccin
contenciosa, razones por las que resulta necesario que para su expedicin las

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Sentencia SU-1010 de 2008

empresas cumplan con los mismos requisitos de precisin, suficiencia y


especificidad que el artculo 148 de la Ley 142 de 1994 exige para los actos de
facturacin. Por todo lo anterior, la proteccin de los derechos de los
accionantes exige que las decisiones administrativas referidas a los grupos i) y ii)
aqu sealados, sean dejadas sin efectos, por constituir una extralimitacin de las
prerrogativas reconocidas por la ley a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios -al imponer el cobro de una suma de dinero por concepto de
sancin pecuniaria- y por cuanto ellas no contienen los elementos necesarios
para establecer con claridad y precisin, cul es el valor correspondiente al
servicio efectivamente consumido pero no facturado. De igual forma, se le
ordenar a las empresas accionadas que eliminen de las cuentas de los usuarios
los valores all consignados en virtud de los actos administrativos en mencin.

DERECHO DE LOS USUARIOS DE EMPRESAS DE SERVICIOS


PUBLICOS DOMICILIARIOS-Casos en que hubieren cancelado las
sumas impuestas y dejadas sin efecto por sta providencia

En caso de que para la fecha de notificacin de esta sentencia, los accionantes ya


hubieren cancelado las sumas impuestas por las empresas demandadas mediante
las decisiones administrativas que sern dejadas sin efectos en esta providencia,
las empresas debern realizar la compensacin de saldos entre las sumas que ya
fueron pagadas por los usuarios y las que resulten de la nueva reliquidacin. En
caso de que las sumas pagadas hayan respondido al nico concepto de sancin
pecuniaria, las accionadas debern devolver estos dineros a los actores.
Mientras se realizan los procesos de reliquidacin a los que haya lugar, las
empresas accionadas debern efectuar la reconexin inmediata de los servicios
pblicos domiciliarios respectivos, en los inmuebles en los cuales stos se hayan
suspendido como consecuencia de las decisiones administrativas que sern
dejadas sin efectos en la parte resolutiva de esta providencia. Del cumplimiento
de las rdenes aqu consignadas, sern responsables los representantes legales
de las entidades accionadas, quienes debern dar cuenta de ello a los jueces que
conocieron de las acciones de tutela de la referencia en primera instancia.

DERECHO DE LOS USUARIOS Y SUSCRIPTORES A NO SER


AFECTADOS CON COBROS QUE NO CORRESPONDEN A LOS
CONSUMOS DE SERVICIOS Y QUE NO ESTAN AUTORIZADOS
POR EL ORDENAMIENTO JURIDICO

La Corte debe dejar en claro que la decisin adoptada en esta sentencia no busca
patrocinar la cultura del no pago ni tampoco el fraude en los servicios pblicos.
El pago de los servicios pblicos recibidos y consumidos constituye sin duda una
obligacin a cargo de los usuarios y suscriptores, que encuentra un claro
fundamento constitucional en los artculos 95-2-9, 365 y 367 de la Constitucin
Poltica, y en la propia ley de servicios pblicos (Ley 142 de 1994). Por su parte,
el fraude en tales servicios o cualquier otra conducta contraria a la ley que
afecte su prestacin, puede ser perseguida a travs de las respectivas acciones
penales, a solicitud no solo de las empresas de servicios pblicos sino tambin de

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Sentencia SU-1010 de 2008

los mismos usuarios. Lo que en esta sentencia se protege, es el derecho de los


usuarios y suscriptores a no ser afectados con cobros que no corresponde a los
consumos de servicios y que no estn autorizados por el ordenamiento jurdico.

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-Casos en


que no se ha instalado el medidor de consumo del servicio en los inmuebles

Obsrvese cmo, en relacin con este asunto, es claro que en el ordenamiento


jurdico existen otros mecanismos de defensa judicial que resultan eficaces e
idneos para solicitar la proteccin de los derechos que los accionantes estiman
vulnerados. En efecto, los actos de facturacin de las empresas de servicios
pblicos domiciliarios son susceptibles de demanda ante la jurisdiccin de lo
contencioso administrativo, mediante el ejercicio de las acciones de nulidad o
de nulidad y restablecimiento del derecho segn el caso. En este escenario,
frente a la existencia de mecanismos judiciales apropiados para solucionar el
conflicto planteado, la procedencia excepcional y transitoria de la accin de
amparo constitucional estara ligada a la ocurrencia real y cierta de un
perjuicio irremediable que haga necesario que el juez de tutela ampare los
derechos fundamentales de los actores, perjuicio que esta Corporacin no
encuentra demostrado en los casos sub examine, tal como se pasa a establecer.

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-Cobro


promedio por falta de instalacin del medidor del consumo

En los asuntos sub examine, la Sala no encuentra elementos que permitan


concluir que se est frente a la configuracin de un perjuicio de carcter
irremediable, ya que, en primer lugar, la actuacin adelantada por las empresas
accionadas no se observa arbitraria, ya que en todos los casos objeto de revisin,
salvo en el identificado con el nmero T-1.836.549, los actores aceptan que han
efectuado conexiones fraudulentas para recibir el servicio, por lo que, frente a
esta situacin, el mecanismo que la ley prev para que las empresas puedan
calcular el valor a pagar por los usuarios de estos inmuebles, es el del cobro
estimado a partir del promedio del consumo. Y, en segundo trmino, por cuanto,
ms all de la controversia econmica que plantean los asuntos objeto de
revisin, lo cierto es que en ninguno de estos casos se observa, en principio, que
se encuentre comprometido un derecho fundamental que haga procedente la
accin de tutela. As, segn afirman los propios accionantes, ellos continan
recibiendo los servicios pblicos domiciliarios que prestan las accionadas en los
inmuebles en los que residen, razn por la cual en este momento no existe una
amenaza o vulneracin de derechos de rango fundamental como, por ejemplo, el
derecho a la vida en condiciones dignas o a la salud. Cabe sealar que en el caso
del expediente T-1.836.549 si bien el accionante afirma que el predio respecto del
cual se est efectuando el cobro por parte de Electricaribe S.A., E.S.P., no cuenta
con el servicio de energa elctrica, tambin manifiesta que ste se encuentra
desocupado, por lo que tampoco en este asunto se observa comprometido un
derecho de carcter fundamental. En este sentido, ante la ausencia de elementos
probatorios que permitan demostrar la existencia de un perjuicio de tales

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Sentencia SU-1010 de 2008

caractersticas, el debate planteado por las acciones de tutela de la referencia se


restringe al mbito puramente legal, al no evidenciarse las razones de
procedencia del amparo tutelar en los trminos previstos en los artculos 86 de la
Constitucin Poltica y 6 del Decreto 2591 de 1991.- Adicionalmente, existe otra
circunstancia de la cual se infiere que la situacin planteada por las acciones de
tutela sealadas, no implica la configuracin de un perjuicio irremediable y que
se relaciona con la conducta desplegada por los accionantes de estos procesos.

EMPRESAS DE SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS-Casos en


que facturaciones se han venido efectuando con base en el cobro promedio
desde hace ms de cinco aos

A pesar de que en todos los expedientes de la referencia las empresas han venido
efectuando las facturaciones con base en estimados de consumos promedio desde
hace ms de cinco aos, slo hasta ahora los actores manifiestan su
inconformidad con el hecho de que no se les hayan instalado los aparatos de
medicin, sin que durante dicho lapso hayan elevado reclamaciones formales
ante las accionadas, ni tampoco hayan solicitado la intervencin de la
Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios para exigir de parte de las
demandadas el acatamiento de la obligacin legal que estiman incumplida, lo
que pone de manifiesto la actitud displicente y pasiva con la que los actores han
asumido las mnimas cargas que les corresponden para lograr la solucin del
problema planteado. De tal manera que si durante ms de cinco aos los actores
no estimaron vulnerados sus derechos fundamentales, ni actuaron de manera
diligente para obtener la instalacin de los equipos de medicin, no pueden
pretender ahora, luego de un prolongado tiempo en el que se han mantenido
inactivos y mediante el ejercicio de la accin de amparo constitucional, que el
juez de tutela elimine de sus cuentas las deudas que presentan por un servicio
que efectivamente han consumido. Se destaca, adems, el hecho de que aun
cuando los accionantes tenan la posibilidad de interponer el recurso de
reposicin contra los actos de facturacin expedidos por las empresas
accionadas y el de apelacin ante la Superintendencia de Servicios Pblicos
Domiciliarios, en los trminos del artculo 154 de la Ley 142 de 1994, los actores
no lo han hecho, omitiendo as el ejercicio de los mecanismos que el
ordenamiento jurdico prev para estos eventos, lo que evidencia una conducta
pasiva de parte de los demandantes.

SERVICIOS PUBLICOS DOMICILIARIOS Y PRINCIPIO DE


ONEROSIDAD

Los servicios pblicos domiciliarios se rigen por el principio de onerosidad, lo


que implica que los usuarios deben pagar por el servicio prestado, cumpliendo
as el deber constitucional de contribuir con el financiamiento de los gastos e
inversiones del Estado y con la satisfaccin de sus propias necesidades. En este
orden de ideas, no existe justificacin alguna para que se promueva una cultura
de no pago entre los usuarios, situacin que, a la postre, terminara por afectar

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Sentencia SU-1010 de 2008

la posibilidad de que ellos mismos continen siendo beneficiarios de los servicios


prestados. En consecuencia, todo lo anteriormente expuesto muestra que el
problema jurdico planteado, debe ser resuelto a travs de los mecanismos
ordinarios de proteccin judicial, por no existir motivo alguno que justifique la
intervencin inmediata del juez constitucional para solucionar los conflictos
econmicos que han planteado los usuarios.

Sala Plena

Referencia: Expedientes T-1.410.120,


T-1.540.637, T-1.541.417, T-1.541.805, T-
1.546.704, T-1.546.830, T-1.548.002, T-
1.550.439, T-1.550.854, T-1.553.717, T-
1.557.174, T-1.559.660, T-1.570.640, T-
1.572.628, T-1.572.853, T-1.573.598, T-
1.573.600, T-1.573.681, T-1.573.787, T-
1.574.070, T-1.574.078, T-1.574.079, T-
1.575.094, T-1.575.659, T-1.579.196, T-
1.618.168, T-1.619.105, T-1.619.182, T-
1.621.210, T-1.621.497, T-1.621.898, T-
1.621.963, T-1.622.627, T-1.622.802, T-
1.622.835, T-1.622.894, T-1.623.944, T-
1.624.749, T-1.625.827, T-1.631.213, T-
1.632.319, T-1.632.544, T-1.635.364, T-
1.639.727, T-1.639.736, T-1.828.809, T-
1.828.810, T-1.828.811, T-1.836.549.

Peticionarios:
Armando Dazgranados Pretel y otros.

Entidades accionadas:
ELECTRICARIBE S.A., E.S.P. y otras.

Magistrado Ponente:

Dr. RODRIGO ESCOBAR GIL

Bogot, D.C., dieseis (16) de octubre de dos mil ocho (2008).

La Sala Plena de la Corte Constitucional, en ejercicio de sus competencias


constitucionales y legales, ha proferido la siguiente,

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Sentencia SU-1010 de 2008

SENTENCIA

en el proceso de revisin de los fallos adoptados por los respectivos juzgados


de instancia, dentro de los asuntos de la referencia.

I. ANTECEDENTES

De acuerdo con lo dispuesto en los artculos 86 de la Constitucin Poltica y 33


del Decreto 2591 de 1991, la Sala Octava de Seleccin de la Corte
Constitucional, mediante Auto del treinta y uno (31) de agosto de dos mil seis
(2006), resolvi seleccionar para revisin el proceso de tutela T-1.410.120 y
repartirlo a la Sala Quinta de Revisin.

En cuanto el tema planteado en dicha accin, relacionado con la facultad


sancionatoria de las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios,
no haba recibido un tratamiento uniforme por las distintas Salas de Revisin de
la Corte Constitucional que decidieron casos similares, la Sala Quinta de
Revisin puso el asunto a disposicin de la Sala Plena para que fuera decidido
mediante sentencia de unificacin de jurisprudencia.

En sesin celebrada el da veintids (22) de noviembre de dos mil seis (2006),


la Sala Plena decidi asumir el conocimiento de dicho expediente, con
fundamento en lo dispuesto en el artculo 54 A del Acuerdo 05 de 1992 1. De
igual manera, dispuso que todos los asuntos de tutela relacionados con el
mismo tema fueran acumulados por las distintas Salas de Seleccin al
expediente T-1.410.120, ordenando la suspensin de trminos hasta que la Sala
Plena adoptara la decisin de unificacin.

1. Delimitacin temtica del presente pronunciamiento

De acuerdo con lo dispuesto por el artculo 86 de la Constitucin Poltica, la


revisin que le corresponde efectuar a la Corte Constitucional sobre los fallos
de tutela, tiene carcter eventual y cumple con el fin primordial de delimitar el
alcance de los derechos fundamentales. Por tal razn, esta Corporacin ha
sealado que es posible que la Corte limite o circunscriba el estudio de las
sentencias objeto de revisin, a determinados temas de inters, con el fin de
unificar la jurisprudencia constitucional en torno al alcance de los derechos
fundamentales, sin que ello implique dejar de lado el deber de proteccin de
tales derechos en el caso concreto.
1 Artculo 54. Cuando a juicio de la Sala Plena, por solicitud de cualquiera magistrado, un proceso de
tutela d lugar a un fallo de unificacin de jurisprudencia o la trascendencia del tema amerite su estudio por
todos los magistrados, se dispondr que la sentencia correspondiente sea proferida por la Sala Plena.

8
Sentencia SU-1010 de 2008

Al respecto ha establecido esta Corporacin que en el trmite de revisin de los


fallos de tutela, la Corte Constitucional no tiene el deber de estudiar en
detalle todos los aspectos y puntos planteados por el actor en su solicitud (),
pues no constituye una tercera instancia en la resolucin de esta clase de
controversias. En efecto, si una funcin bsica de la revisin es unificar la
doctrina constitucional sobre los derechos fundamentales, y si la Corte tiene la
potestad discrecional de seleccionar qu casos merecen revisin para tal
efecto, entonces es claro que la Corte goza tambin de una razonable
discrecionalidad para delimitar los temas que en el caso concreto ameritan un
examen en sede de revisin. 2

La posibilidad de delimitar el tema a ser debatido en las sentencias de revisin,


como lo ha sealado la jurisprudencia constitucional, puede hacerse de dos
formas: (i) a travs de referencia expresa en la sentencia, cuando en ella se
circunscribe claramente el objeto de estudio, o (ii) de manera tcita, cuando en
el cuerpo de la sentencia se abstiene de pronunciarse en relacin con algunos
aspectos que no tienen relevancia constitucional.

En el presente asunto y en ejercicio de la facultad en mencin, la Sala Plena de


esta Corporacin limitar el estudio de los casos objeto de revisin al tema de
la facultad de las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios para
imponer sanciones de contenido pecuniario, no solo por cuanto ste constituye
el debate central en torno al cual giran todas las acciones de tutela acumuladas,
sino adems, porque la razn que llev al Pleno de la Corte a asumir el
conocimiento de tales procesos, fue la necesidad de consolidar la jurisprudencia
constitucional en torno a ese tema.

En consecuencia, la exposicin que a continuacin se efecta de los hechos de


las demandas de tutela, de las intervenciones de las empresas de servicios
pblicos accionadas, y de los pronunciamientos de los jueces de instancia, se
limitar al asunto atrs sealado.

2.Identificacin de los asuntos objeto de revisin

En cumplimiento a lo dispuesto por la Sala Plena de la Corte Constitucional,


cuarenta y ocho (48) expedientes fueron acumulados al proceso de tutela T-
1.410.120.

2 Auto 031A de 2002, Magistrado Ponente: Eduardo Montealegre Lynett.

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Sentencia SU-1010 de 2008

El nmero de radicacin de las acciones de tutela que fueron acumuladas por


las distintas Salas de Seleccin, el nombre de los peticionarios y la
identificacin de los demandados se presentan a continuacin:

Expediente Demandante Demandado

1 T-1.410.120 Armando Diazgranados Pretel. Electrificadora del Caribe,


Electricaribe S.A., E.S.P.
2 T-1.540.637 Armando Nel Pachn Can. Gas Natural S.A.
3 T-1.541.417 Everardo Aragn Jaramillo. Electrificadora del Meta
S.A., E.S.P. (EMSA)
4 T-1.541.805 Rafael Gonzlez. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
5 T-1.546.704 Martha Luca Durn, actuando Compaa Energtica del
como agente oficiosa de su Tolima, Enertolima S.A.,
madre, Licelia Varn de E.S.P.
Durn.
6 T-1.546.830 Lus Arturo Mndez Ortiz, Codensa S.A., E.S.P.
actuando como agente oficioso
de su madre, Lelia Ortiz de
Mndez.
7 T-1.548.002 Fanny Rodrguez lvarez. Electrificadora de la Costa
Atlntica, Electrocosta S.A.,
E.S.P.
8 T-1.550.439 Rosa Lilia Vargas de Crdenas.Compaa Energtica del
Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
9 T-1.550.854 Sandra Mara CasabuenasCompaa Energtica del
Pinzn. Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
10 T-1.553.717 Toribia Cueto Ospino. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
11 T-1.557.174 Jos Edgar Rengifo Acosta. Compaa Energtica del
Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
12 T-1.559.660 William Ramiro BarragnCompaa Energtica del
Molina. Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
13 T-1.570.640 Mara Ortiz de Oyola. Compaa Energtica del
Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
14 T-1.572.628 lvaro Casas Murcia. Codensa S.A., E.S.P.
15 T-1.572.853 Orlando Vives Campo, Electrificadora del Caribe,
representante legal de la Electricaribe S.A., E.S.P.
sociedad ORLANDESCA S.A.
16 T-1.573.598 Enrique Otero Ramrez. Gases del Caribe S.A. E.S.P.

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Sentencia SU-1010 de 2008

17 T-1.573.600 Darly Beatriz Gonzlez. Electrificadora del Caribe,


Electricaribe S.A., E.S.P.
18 T-1.573.681 Rosa Mara Echavarra Usura. Etaservicios S.A. E.S.P.
19 T-1.573.787 Sara Coavas Gmez. Electrificadora de la Costa
Atlntica, Electrocosta S.A.,
E.S.P.
20 T-1.574.070 Gustavo Adolfo Hernndez Electrificadora del Caribe,
Araque. Electricaribe S.A., E.S.P.
21 T-1.574.078 Eduardo Noriega Herrera. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
22 T-1.574.079 Miguel Salas. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
23 T-1.575.094 Edgar Penagos Berrio. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
24 T-1.575.659 lvaro Osma Rodrguez. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P. y
Superintendencia de
Servicios Pblicos
Domiciliarios.
25 T-1.579.196 Arstides Bello Castellanos. Electrificadora del Meta
S.A., E.S.P. (EMSA)
26 T-1.618.168 Cenayda Medina Arias. Electrificadora del Tolima
S.A., E.S.P. en liquidacin.
(Electrolima S.A., E.S.P.) y
Superintendencia de
Servicios Pblicos
Domiciliarios.
27 T-1.619.105 Oscar Marn Rodrguez. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
28 T-1.619.182 Jaime Trujillo Cortes. Compaa Energtica del
Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
29 T-1.621.210 Ricardo Vergara Snchez. Codensa S.A., E.S.P.
30 T-1.621.497 Alba Marina Palma. Compaa Energtica del
Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
31 T-1.621.898 Amilcar Rafael Carrillo Empresa de servicios
Baquero. pblicos de Valledupar,
Emdupar S.A., E.S.P.
32 T-1.621.963 Adiela Esther Hinojosa. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
33 T-1.622.627 Pedro David Lizarazo Rubio. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
34 T-1.622.802 Marino Montes Bravo. Electrificadora de la Costa
Atlntica, Electrocosta S.A.,
E.S.P.

11
Sentencia SU-1010 de 2008

35 T-1.622.835 Yudit del Carmen Ortiz Garca.Electrificadora de la Costa


Atlntica, Electrocosta S.A.,
E.S.P.
36 T-1.622.894 Hernando Devia. Compaa Energtica del
Tolima, Enertolima S.A.,
E.S.P.
37 T-1.623.944 Jos Angel Serna Arriaga. Sociedad de Acueducto,
Alcantarillado y Aseo de
Barranquilla S.A., E.S.P.
38 T-1.624.749 Luis Hernndez Guilln. Codensa S.A., E.S.P.
39 T-1.625.827 Martha Giraldo Orjuela. Empresas Municipales de
Cali, EMCALI E.I.C.E.,
E.S.P.
40 T-1.631.213 Leopoldo Villadiego Cantillo. Electrificadora de la Costa
Atlntica, Electrocosta S.A.,
E.S.P.
41 T-1.632.319 Rumualdo Turizo Galvis. Electrificadora de la Costa
Atlntica, Electrocosta S.A.,
E.S.P.
42 T-1.632.544 Stella Jaramillo de Martnez. Electrificadora de Santander
S.A., E.S.P.
43 T-1.635.364 Pedro Joaqun MartnezElectrificadora de Santander
Naranjo. S.A., E.S.P.
44 T-1.639.727 Ana Luca Daz Sarmiento. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.
45 T-1.639.736 Jess Emilio Vergara. Aguas de Girardot, Ricaurte
y la Regin S.A., E.S.P.
46 T-1.828.809 Rosa Isabel Tern de Castillo. Empresa de servicios
pblicos de Valledupar,
Emdupar S.A., E.S.P.
47 T-1.828.810 Lester Quintana. Empresa de servicios
pblicos de Valledupar,
Emdupar S.A., E.S.P.
48 T-1.828.811 Deudis Quintana. Empresa de servicios
pblicos de Valledupar,
Emdupar S.A., E.S.P.
49 T-1.836.549 Navis Alberto Oviedo. Electrificadora del Caribe,
Electricaribe S.A., E.S.P.

Debido a la gran cantidad de procesos de tutela que fueron acumulados al


expediente T-1.410.120, la informacin relacionada con las autoridades
judiciales que intervinieron en primera y en segunda instancia, junto con el
sentido de las decisiones proferidas y la indicacin de algunas observaciones
particulares relevantes en cada caso, aparecen especificados en el cuadro que se
anexa a esta sentencia, el cual hace parte integral de la misma.

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Sentencia SU-1010 de 2008

3. Hechos relevantes. Relacin temtica de los expedientes acumulados

Como se seal con anterioridad, la Sala Plena de la Corte Constitucional


decidi asumir el conocimiento de estos procesos frente a la necesidad de
consolidar la jurisprudencia constitucional en torno a la facultad que tienen las
empresas de servicios pblicos domiciliarios para imponer sanciones de
contenido pecuniario a los usuarios del servicio.

Por esta razn, en todos los procesos de tutela sub exmine, salvo en cinco
expedientes a los que se har referencia con posterioridad 3, se plantea una
controversia entre usuarios de servicios pblicos domiciliarios y determinadas
empresas prestadoras de los mismos, como consecuencia del cobro de sumas de
dinero que, segn alegan los actores, corresponden a la imposicin de una
sancin pecuniaria por parte de las empresas accionadas.

En los asuntos objeto de revisin, las demandadas decidieron realizar unas


inspecciones tcnicas de los aparatos de medicin de consumo de los servicios
pblicos domiciliarios que prestan, en los inmuebles de propiedad de los
peticionarios o que se encuentran bajo su tenencia en calidad de arrendatarios.

Como consecuencia de lo encontrado en dichas revisiones, las empresas


iniciaron procesos administrativos en contra de los usuarios del servicio, con el
fin de determinar si stos haban incurrido en un incumplimiento del contrato
de condiciones uniformes. Dichos procesos terminaron con la expedicin de
Decisiones Empresariales en las que se impuso el pago de sumas de dinero a
los usuarios.

Las razones por las cuales los accionantes estiman vulnerados sus derechos, se
relacionan fundamentalmente con dos argumentos: en primer lugar, todos los
demandantes sostienen que los cobros que les fueron imputados corresponden a
la imposicin de sanciones de contenido pecuniario, en ejercicio de una
potestad que el legislador no le ha reconocido expresamente a las empresas
prestadoras de servicios pblicos domiciliarios, lo que constituye, en su sentir,
una vulneracin de su derecho fundamental al debido proceso; en segundo
trmino, algunos accionantes afirman que durante el trmite del proceso
administrativo, las empresas demandadas incurrieron en distintas
irregularidades generadas por la inobservancia de los requisitos establecidos
para este tipo de procesos, tanto en el contrato de condiciones uniformes como
en diversos pronunciamientos de la Corte Constitucional sobre el tema.

3 Estos expedientes son los identificados bajo los radicados T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-
1.828.811 y T-1.836.549.

13
Sentencia SU-1010 de 2008

Teniendo en cuenta que, tal como ya se estableci, la presente providencia tiene


por objeto unificar la jurisprudencia constitucional en torno a la facultad de las
empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios para imponer
sanciones de contenido pecuniario, y, en consecuencia, el pronunciamiento de
la Corte se limitar a este asunto, a continuacin se expondrn las razones en
las que los accionantes fundamentan su posicin en relacin con este tema. Por
su parte, en el cuadro anexo a la presente providencia se encuentran los
argumentos aducidos por los actores en referencia a las supuestas
irregularidades procesales en las que incurrieron las empresas accionadas.

De manera general, los accionantes afirman, con fundamento en algunas


sentencias proferidas por la Corte Constitucional4, que las empresas de
servicios pblicos domiciliarios no tienen facultad legal para imponer sanciones
de tipo pecuniario a sus usuarios.

En efecto, sostienen que no existe ninguna norma de carcter legal que las
autorice para el ejercicio de dicha prerrogativa, lo que, a su juicio, resulta
necesario como quiera que sta constituye una manifestacin del poder punitivo
del Estado. Por tal razn, consideran que no es de recibo que las empresas
pretendan fundamentar este tipo de actuaciones en las clusulas del contrato de
condiciones uniformes o en normas de carcter reglamentario.

Adicionalmente, estiman que el hecho de que no exista ninguna norma legal


que habilite a las empresas de servicios pblicos domiciliarios en tal sentido y
que establezca los presupuestos mnimos para su ejercicio, implica que la
determinacin de las conductas a sancionar y el procedimiento a seguir en estos
casos, quede al arbitrio de las empresas, lo que, en su criterio, constituye un
abuso de posicin dominante frente a los usuarios del servicio.

Por tal razn, consideran que las decisiones empresariales mediante las cuales
se les han impuesto sanciones de contenido pecuniario, constituyen vas de
hecho frente a las cuales la accin de tutela resulta procedente, en aras de
proteger el derecho fundamental al debido proceso de los usuarios.

Finalmente, algunos peticionarios sostienen, adems, que, de aceptar que las


empresas de servicios pblicos domiciliarios tienen facultad para imponer
sanciones por el uso no autorizado o fraudulento del servicio, se estara
sometiendo a los usuarios a una doble sancin de contenido pecuniario: por un
lado, la impuesta por la empresa y, por el otro, la multa establecida en el
artculo 256 del Cdigo Penal, el cual consagra el delito de defraudacin de
fluidos.

4 Particularmente las Sentencias T-720 y T-558 de 2006, Magistrado Ponente: Humberto Antonio Sierra
Porto.

14
Sentencia SU-1010 de 2008

Cabe sealar que en los expedientes T-1.548.002, T-1.618.168 T-1.619.105 y T-


1.632.544, los accionantes firmaron con las empresas de servicios pblicos
accionadas acuerdos de pago, en los tres primeros casos, y un contrato de
transaccin, en el ltimo expediente referido, en relacin con el valor de la
sancin impuesta.

Por su parte, en los expedientes T-1.410.120, T-1.550.439, T-1.618.168 y T-


1.619.182, las decisiones administrativas que se acusan de ser violatorias del
derecho al debido proceso de los accionantes, fueron objeto de
pronunciamiento por parte de la Superintendencia de Servicios Pblicos
Domiciliarios.

Ahora bien, respecto de los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810,


T-1.828.811 y T-1.836.549, la Sala encuentra que la situacin fctica en ellos
planteada difiere sustancialmente de la causa general de los casos objeto de
estudio en esta providencia, esto es, del debate respecto de la facultad de las
empresas de servicios pblicos domiciliarios para la imposicin de sanciones.

En efecto, a pesar de haber sido acumulados al expediente T-1.410.120, lo


cierto es que el problema jurdico de estos procesos se relaciona, en realidad,
con el cobro promedio que realizan las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, en aquellos casos en los que no se ha instalado el medidor de
consumo del servicio en los inmuebles.

Por tal razn, a continuacin se presenta un resumen general de los argumentos


expuestos por los accionantes en estos expedientes:

Los demandantes, quienes aducen ser usuarios de los servicios pblicos


domiciliarios que prestan las accionadas, sostienen que las empresas no han
instalado los medidores de consumo en sus inmuebles, razn por la cual desde
hace un largo tiempo las facturas de cobro del servicio se han expedido con
fundamento en un promedio mensual que ha sido definido por las propias
entidades. Segn afirman, esta situacin constituye un incumplimiento de la
obligacin que tienen las empresas de instalar los equipos de medicin en un
plazo mximo de seis (06) meses contados a partir de la instalacin de la
acometida.

As las cosas, en su criterio, la conducta desplegada por las accionadas se


enmarca dentro del supuesto establecido en el artculo 146 de la Ley 142 de
1994, segn el cual la falta de medicin del consumo, por accin u omisin de
la empresa, le har perder el derecho a recibir el precio. Por tal razn estiman
que, independientemente de que se hayan realizado conexiones fraudulentas por
parte de los usuarios, las entidades accionadas no pueden cobrar las facturas

15
Sentencia SU-1010 de 2008

que adeudan, ya que el valor en ellas establecido corresponde a un estimado del


consumo promedio y no a la medicin real del servicio prestado5.

En relacin con el expediente T-1.836.549, el usuario afirma, adems, que el


predio respecto del cual se est efectuando el cobro por parte de Electricaribe
S.A., E.S.P., no cuenta con el servicio de energa elctrica y que, actualmente,
se encuentra deshabitado.

4.Pretensiones formuladas por los accionantes

4.1. Con fundamento en los hechos atrs relacionados, los demandantes


solicitan que el juez constitucional disponga dejar sin efectos las decisiones
empresariales mediante las cuales se les impuso el pago de unas sumas de
dinero que, segn afirman, se realizaron a ttulo de sancin pecuniaria.

En relacin con los expedientes T-1.575.659 y T-1.618.168, en los cuales se


demanda tanto a las empresas prestadoras como a la Superintendencia de
Servicios Pblicos Domiciliarios, el accionante del primero de ellos solicita que
se le ordene a dicha autoridad que le d trmite al recurso de apelacin que
interpuso en contra del acto administrativo sancionador; por su parte, la
demandante del proceso referenciado con el nmero T-1.618.168, pretende que
la decisin mediante la cual la Superintendencia confirm el acto apelado, sea
dejada sin efectos.

Por su parte, en el expediente T-1.572.853 el actor solicita a la autoridad


judicial, adems de dejar sin efectos las decisiones sancionatorias que ha
expedido la entidad, la proteccin de su derecho de peticin, como quiera que a
pesar de haber requerido a la empresa para que le entregara copia de algunos
documentos que hacen parte del trmite adelantado por la entidad, sta no ha
dado respuesta a su solicitud.

5 De acuerdo con lo manifestado por los actores en los escritos de tutela, las sumas a las que ascienden las
deudas con las empresas accionadas son:
- Expediente T-1.621.898: dos millones ciento setenta y siete mil seiscientos treinta y cinco pesos ($ 2.177.635),
correspondiente a ochenta y tres (83) facturas no canceladas.
- Expediente T-18.28.809: un milln setenta y cinco mil ochocientos sesenta pesos ($1.075.860), valor que
corresponde a sesenta y seis (66) facturas insolutas.
- Expediente T-1.828.810: un milln ciento treinta y ocho mil setecientos ochenta y seis pesos ($1.138.786),
correspondiente a sesenta y seis (66) facturas no canceladas.
- Expediente T-1828.811: cuatrocientos sesenta y un mil novecientos noventa y siete ($461.997), valor que
corresponde a cuarenta y un (41) facturas insolutas.
- Expediente T-1.836.549: un milln cuatrocientos sesenta mil novecientos cincuenta y seis ($1.460.956),
correspondiente a sesenta (60) facturas insolutas.

16
Sentencia SU-1010 de 2008

4.2. En relacin con los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-


1.828.811 y T-1.836.549, los demandantes solicitan que sean anuladas las
facturas mediante las cuales las empresas accionadas pretenden efectuar el
cobro del servicio prestado durante el tiempo que no se haba instalado el
medidor.

5. Respuesta de las entidades accionadas

5.1. Argumentos expuestos por las empresas de servicios pblicos


accionadas

Las empresas de servicios pblicos domiciliarios demandadas solicitan que se


denieguen las pretensiones de los accionantes, con fundamento en las siguientes
consideraciones.

- En primer lugar, todas las empresas accionadas sostienen que ellas estn
facultadas para imponer sanciones de tipo pecuniario a los usuarios, frente al
uso no autorizado o fraudulento del servicio respectivo.

A su juicio, dicha facultad encuentra sustento, de manera particular, en el


artculo 142 de la Ley 142 de 1994, segn el cual, cuando la entidad ha
procedido a suspender o cortar el servicio por causas imputables al usuario, ste
deber eliminar la razn de la medida, pagar todos los gastos que genere la
reconexin y satisfacer las dems sanciones previstas (), de lo que se
deriva que ellas s tienen la facultad de imponer sanciones, dentro de las cuales
se encuentran las de contenido pecuniario.

Las entidades accionadas sostienen, adems, que dicha potestad se encuentra


establecida en el Decreto 1303 de 1989. Respecto de esta norma, afirman que a
pesar de la discusin que se ha presentado en torno a su vigencia, lo cierto es
que, tal como lo sostuvo el Consejo de Estado en sentencia de ocho (8) de
septiembre de dos mil cinco (2005)6, sta no fue derogada por la Ley 142 de
1994, ya que se trata de una norma especial que no resulta contradictoria con
los mandatos establecidos en el actual rgimen de los servicios pblicos
domiciliarios.

Dicha prerrogativa, segn afirman, ha sido avalada por algunas sentencias


proferidas por la Corte Constitucional, particularmente la sentencia T-224 de
2006, y por diversos conceptos emanados de la Superintendencia de Servicios
Pblicos Domiciliarios.

6 Expediente No. 00323.

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Sentencia SU-1010 de 2008

De esta manera, y frente a algunos pronunciamientos de la Corte Constitucional


en donde se ha sostenido que las empresas de servicios pblicos domiciliarios
no tienen facultad legal para imponer sanciones pecuniarias, las accionadas
afirman que stos no pueden constituir el fundamento para determinar que ellas
carecen de tal prerrogativa como quiera que, de una parte, su alcance es
simplemente inter partes y, de otra, no existe un criterio unificado al interior de
la Corporacin.

Ahora bien, en el caso de las empresas que prestan los servicios de energa
elctrica y gas, las accionadas sostienen que la imposicin de sanciones
pecuniarias a los usuarios encuentra fundamento tanto en las normas atrs
mencionadas, como en la Resolucin 108 de 1997, expedida por la Comisin
de Regulacin de Energa y Gas -CREG-, por la cual se sealan criterios
generales sobre proteccin de los derechos de los usuarios de los servicios
pblicos domiciliarios de energa elctrica y gas combustible por red fsica, en
relacin con la facturacin, comercializacin y dems asuntos relativos a la
relacin entre la empresa y el usuario, y se dictan otras disposiciones. En
efecto, las accionadas aluden al contenido normativo del artculo 57 de la
Resolucin en cita, el cual establece que para proceder a la reconexin del
servicio, el usuario deber satisfacer las sanciones que, en estos eventos, se
hayan establecido en el contrato de condiciones uniformes.

Pero, adicionalmente, las empresas accionadas aducen que aun cuando se


concluyera que ellas carecen de facultad legal para imponer sanciones
pecuniarias, la potestad de cobrar sumas de dinero a ttulo de sancin se deriva
legtimamente de los contratos de condiciones uniformes celebrados con los
usuarios del servicio.

As, afirman que la prestacin de los servicios pblicos domiciliarios no


corresponde, esencialmente, al ejercicio de una funcin administrativa, ya que
se trata de una actividad que es en parte estatutaria y en parte contractual. As
las cosas, sostienen que, si bien la relacin existente en este tipo de contratos se
encuentra regulada por la Ley 142 de 1994, tambin se sujeta a las normas de
derecho privado, tal y como lo dispone el artculo 132 de la citada ley.

En este sentido, afirman que tanto en el Cdigo de Comercio como en el


Cdigo Civil se encuentra establecida la posibilidad de pactar la imposicin de
clusulas penales de contenido pecuniario frente al incumplimiento en el que
incurra uno de los contratantes. En consecuencia, en el marco del contrato de
condiciones uniformes es posible que los usuarios y las empresas prestadoras
celebren este tipo de acuerdos, por lo que, en estos casos, no se trata en realidad
del ejercicio de una funcin administrativa, sino de una facultad para imponer
sanciones que tiene asidero en la rbita del derecho privado.

De esta manera, la suscripcin del contrato por parte de los usuarios implica
que ellos han aceptado la posibilidad de que las empresas inicien actuaciones

18
Sentencia SU-1010 de 2008

administrativas para determinar el incumplimiento del contrato de servicios


pblicos domiciliarios y la procedencia del cobro de las sanciones que
correspondan.

A pesar de las anteriores consideraciones, las empresas accionadas afirman que


no hay lugar a debatir mediante el mecanismo de amparo constitucional si en
efecto ellas se encuentran habilitadas o no para la imposicin de sanciones,
asunto que, a su juicio, debe ser definido por la jurisdiccin contencioso
administrativa.

- Por su parte, algunas de las empresas demandadas sostienen que los cobros
que han efectuado no han sido a ttulo de sancin, sino que se trata simplemente
de la recuperacin del servicio consumido y dejado de facturar, posibilidad que
se encuentra legalmente establecida en los artculos 149 y 150 de la Ley 142 de
1994; respecto de dicha facultad, afirman, la jurisprudencia de la Corte
Constitucional ha sido pacfica en torno a su reconocimiento.

- En torno a las supuestas irregularidades que los peticionarios manifiestan que


se presentaron en los procedimientos adelantados por las empresas accionadas,
todas coinciden en afirmar que en el desarrollo de dichos trmites no se incurri
en ningn tipo de actuacin que comportara una violacin del derecho al debido
proceso de los afectados; por el contrario, sostienen que siempre se respetaron
integralmente todas las garantas establecidas en la Constitucin y en la ley a
favor de los usuarios.

- Finalmente, las empresas accionadas sostienen que cualquier inconformidad


de los afectados respecto de los cobros que ellas estn efectuando, debe ser
controvertida a travs del ejercicio de los recursos de que disponen en la va
gubernativa y de las acciones judiciales ordinarias que se han previsto en el
ordenamiento jurdico para el efecto. En este sentido, a su juicio, la accin de
tutela no es procedente para definir los debates aqu planteados, por tratarse de
asuntos de contenido netamente patrimonial.

- Ahora bien, frente a algunos casos particulares, las empresas expusieron los
siguientes argumentos:

En relacin con el expediente T-1.618.168, la Electrificadora del Tolima afirma


que de producirse en sede de tutela una decisin adversa a sus intereses, sta no
podra cumplirse por cuanto dicha entidad se encuentra en proceso de
liquidacin, por orden de la Superintendencia de Servicios Pblicos
Domiciliarios. En este sentido, manifiesta, para satisfacer cualquier
reclamacin de contenido econmico, el acreedor debi hacerse parte dentro
del proceso liquidatorio desde el 17 de septiembre al 17 de octubre de 2003,

19
Sentencia SU-1010 de 2008

termino que expir y que por tanto no podra hacerse efectiva una orden de
pago a la accionante.

Por su parte, EMCALI E.I.C.E. E.S.P., demandada en el proceso de tutela T-


1.625.827, asevera que si bien la Corte Constitucional se ha pronunciado acerca
de la potestad sancionatoria de las empresas de servicios pblicos, en el sentido
de indicar que stas carecen de dicha facultad, este pronunciamiento se hizo
respecto de las empresas de carcter privado, por lo que dichos fallos no tienen
alcances frente al caso en concreto, como quiera que EMCALI deriva la
facultad de imponer sanciones de su calidad de persona jurdica de derecho
pblico.

- Expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-1.828.811 y T-


1.836.549:

En relacin con estos expedientes, las empresas de servicios pblicos


domiciliarios accionadas, sostienen que el hecho de que los predios no cuenten
con medidores no se debe a una causa atribuible a ellas, sino a la actuacin
desplegada por los accionantes, quienes han incumplido con sus obligaciones
contractuales de manera reiterada.

As, sostienen que la Ley 142 de 1994 establece que en caso de mora del
usuario la empresa debe proceder a suspender el servicio, retirar el equipo de
medicin del inmueble y realizar todas las gestiones pertinentes para lograr la
recuperacin de la cartera. En aplicacin de tal disposicin y frente a la falta de
pago por parte de los usuarios, las empresas han retirado los medidores de los
predios y suspendido el servicio; sin embargo, stos han efectuado
reconexiones directas del mismo, lo que las ha obligado a realizar las
facturaciones del mismo con base en los promedios de consumo registrados.

Sealan, adems, que los actores no han sido diligentes en la defensa de sus
derechos econmicos, por cuanto no ejercieron los recursos para cuestionar las
facturas expedidas por la empresa. En este orden, aun cuando contaban con un
trmino mximo de cinco (05) meses para efectuar dichas reclamaciones, los
usuarios no manifestaron ninguna inconformidad respecto de las facturas sino
que decidieron acudir directamente a la accin de tutela.

Sostienen, adems, que los actores no demostraron que las empresas hayan
incurrido en una vulneracin de sus derechos fundamentales, ni tampoco la
ocurrencia de un perjuicio de carcter irremediable, razn por la cual, frente a
la existencia de otros medios de defensa judicial, la accin de tutela es
improcedente para controvertir los actos administrativos de cobro.

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Sentencia SU-1010 de 2008

Por su parte, la empresa EMDUPAR S.A., E.S.P. aclara que dentro de las
facturas que ellos expiden se incluyen los servicios de acueducto, alcantarillado
y aseo, los dos primeros prestados por ella y el ltimo por la empresa Interaseo,
entidad absolutamente independiente, por lo que si los accionantes se
encuentran inconformes con los cobros efectuados en relacin con el servicio
de aseo, es necesario que dirijan su reclamo tambin en contra de sta.

De la misma forma, explica que, de acuerdo con lo dispuesto en el Decreto


1713 de 2002, el valor facturado por los servicios de alcantarillado y aseo no se
encuentra ligado a ningn instrumento de medicin y no pueden ser objeto de
suspensin.

Finalmente y respecto del expediente T-1.828.811, la empresa sostiene que no


existe legitimacin para actuar en la demandante, ya que quien figura como
usuario del servicio es una persona distinta.

5.2. Respuesta de la Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios

La Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios fue demandada por


los accionantes de los procesos T-1.575.659 y T-1.618.168.

En relacin con el primero de dichos expedientes la entidad no dio respuesta a


la accin; sin embargo, s particip en el trmite del expediente T-1.618.168,
solicitando que se denieguen las pretensiones del accionante ya que, a su juicio,
la potestad de las empresas de servicios pblicos domiciliarios encuentra
sustento jurdico especficamente en la Resolucin No. 108 de 1997, expedida
por la Comisin de Regulacin de Energa y Gas, Por la cual se sealan
criterios generales sobre proteccin de los derechos de los usuarios de los
servicios pblicos domiciliarios de energa elctrica y gas combustible por red
fsica, en relacin con la facturacin, comercializacin y dems asuntos
relativos a la relacin entre la empresa y el usuario, y se dictan otras
disposiciones.

En este sentido, la Superintendencia se refiere en particular al artculo 54 de


dicha Resolucin, en el cual se hace referencia expresa a la facultad que tienen
las empresas de servicios pblicos domiciliarios para la imposicin de
sanciones de contenido pecuniario, norma en la que, a su juicio, encuentra
sustento la actuacin de las entidades accionadas.

En consecuencia, la Superintendencia solicita denegar el amparo solicitado, ya


que, segn afirma, ni su actuacin ni la adelantada por la empresa accionada
comportaron una vulneracin de los derechos fundamentales del actor.

II. DECISIONES JUDICIALES QUE SE REVISAN

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Sentencia SU-1010 de 2008

1. Tal como se anot en el acpite correspondiente a la identificacin de los


asuntos objeto de revisin, en el cuadro anexo a esta sentencia aparecen las
decisiones adoptadas por los diferentes despachos judiciales que conocieron en
primera y en segunda instancia de las acciones de tutela objeto de este
pronunciamiento. De manera que, para efectos de verificar las determinaciones
que fueron adoptadas en cada caso concreto, habr que remitirse al mencionado
cuadro.

No obstante lo anterior, como quiera que en gran medida las decisiones


judiciales coincidieron en denegar o rechazar las pretensiones invocadas
utilizando los mismos fundamentos de derecho, la Corte estima necesario
referirse brevemente a ellas, haciendo nfasis en los casos que difieren del
planteamiento general y en los pocos que concedieron la tutela.

- La mayora de las autoridades judiciales que denegaron o declararon


improcedentes las acciones de tutela de la referencia, no entraron a analizar el
fondo de las cuestiones planteadas por los demandantes, ya que, a su juicio, la
accin de tutela resulta improcedente frente a la existencia de otros mecanismos
ordinarios de defensa judicial en la jurisdiccin contencioso administrativa, los
cuales se muestran idneos para solicitar la proteccin de los derechos que los
accionantes estiman conculcados.

Por su parte, algunos jueces efectuaron un anlisis de fondo del asunto


planteado y negaron las acciones de tutela por considerar, de una parte, que las
empresas de servicios pblicos domiciliarios se encuentran facultadas
legalmente para imponer sanciones de tipo pecuniario y, de otra, que en los
procedimientos adelantados por las entidades accionadas no se haba incurrido
en irregularidades que comportaran la vulneracin de derecho al debido proceso
de los peticionarios.

En los procesos T-1.548.002, T-1.619.105 y T-1.632.544 las autoridades


judiciales estimaron que al existir acuerdos de pago entre los usuarios del
servicio y las empresas accionadas, dicha controversia deba ser llevada a
conocimiento de la jurisdiccin ordinaria para debatir all la validez de estos
convenios.

En los expedientes T-1.574.078, T-1.621.210, T-1.622.802, T-1.631.213 y T-


1.639.727 los jueces que decidieron negar la solicitud de proteccin del derecho
al debido proceso, consideraron que el cobro efectuado no corresponde a la
imposicin de una sancin pecuniaria, sino a la recuperacin de la energa
consumida y no facturada.

De otro lado, en el expediente T-1.625.827 las autoridades judiciales


consideraron que las sentencias en las cuales la Corte Constitucional ha
sostenido que las empresas de servicios pblicos domiciliarios no tienen
facultad para imponer sanciones pecuniarias, slo se refieren a las prestadores
de naturaleza privada y no a las personas jurdicas de derecho pblico que

22
Sentencia SU-1010 de 2008

prestan estos servicios. En consecuencia, los jueces negaron la proteccin


solicitada.

- Cabe resaltar que en los procesos T-1.410.120, T-1.541.805, T-1.550.854, T-


1.559.660, T-1.570.640, T-1.572.853, T-1.574.078, T-1.618.168, T-1.621.497, T-
1.621.963, T-1.622.627, T-1.622.894 y T-1.632.319 las acciones de tutela
fueron concedidas en primera instancia, bajo la consideracin de que las
empresas de servicios pblicos domiciliarios no se encuentran facultadas para
imponer sanciones de contenido pecuniario, ya que no existe ninguna norma
legal que de manera expresa les permita ejercer una prerrogativa en tal sentido.

No obstante lo anterior, luego de surtida la impugnacin los fallos fueron


revocados por el ad quem con base en los argumentos atrs sintetizados.

Slo en uno de los expedientes objeto de revisin, el radicado bajo el nmero T-


1.573.600, las autoridades judiciales concedieron el amparo solicitado por el
accionante, aunque por razones distintas. As, mientras el fallador de primera
instancia consider que las empresas de servicios pblicos domiciliarios no
tienen competencia para imponer sanciones pecuniarias, el juez que conoci en
segunda instancia de este asunto estim que ellas s estn facultadas legalmente
para el efecto, pero que la empresa haba incurrido en la vulneracin del
derecho al debido proceso del actor por cuanto la accionante no pudo ejercer
debidamente su derecho a la defensa.

2. Por ltimo, en relacin con los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-


1.828.810, T-1.828.811 y T-1.836.549, la mayora de las autoridades judiciales,
salvo una, decidieron negar el amparo tutelar solicitado.

De manera general, los jueces consideraron que en estos casos el problema


jurdico se relacionaba de manera directa con asuntos de naturaleza puramente
contractual y econmica, debate que debe ser resuelto a travs de los
mecanismos ordinarios de defensa judicial. En consecuencia, sostuvieron que la
accin de tutela resulta improcedente para la definicin de estos casos,
adicionalmente, por cuanto los actores no demostraron la existencia de un
perjuicio de carcter irremediable que justificara la intervencin del juez
constitucional.

Por su parte, la autoridad judicial que decidi conceder el amparo tutelar


sostuvo que la empresa accionada haba incumplido con su obligacin de
suspender el servicio frente a la mora del usuario. No obstante lo anterior, dicha
decisin fue revocada en segunda instancia con fundamento en las razones
anotadas con anterioridad.

III. FUNDAMENTOS JURDICOS

1. Competencia

23
Sentencia SU-1010 de 2008

La Sala Plena de la Corte Constitucional es competente para revisar las


sentencias proferidas en los procesos de la referencia, con fundamento en lo
dispuesto por los artculos 86 y 241 numeral 9 de la Constitucin Poltica, en
concordancia con los artculos 31 a 36 del Decreto 2591 de 1991 y 54A del
Acuerdo 05 de 1992, Reglamento Interno de la Corte Constitucional7.

2.Problema jurdico

A travs de los procesos de tutela bajo estudio, los distintos actores, en su


condicin de usuarios de los servicios pblicos prestados por las empresas
demandadas, solicitan la proteccin de sus derechos al debido proceso y a la
defensa, presuntamente vulnerados por tales empresas, en razn a las distintas
irregularidades en las incurrieron dentro de los procesos administrativos de
revisin tcnica que les adelantaron y que culminaron con la imposicin de
sanciones pecuniarias.

Haciendo abstraccin de los defectos menores mencionados en las distintas


demandas, el punto de relevancia constitucional radica en la acusacin en que
coinciden todos los actores, quienes cuestionan la facultad de las empresas
prestadoras de servicios pblicos domiciliarios para imponer sanciones
pecuniarias, bajo la consideracin de que la misma no se encuentra prevista de
manera expresa en la ley y, por tanto, no poda ser ejercida por tales empresas.

Las entidades accionadas rechazaron la acusacin afirmando que los procesos


sancionatorios que se adelantaron en contra de los actores se originaron en el
incumplimiento por parte de stos del contrato de condiciones uniformes,
habindose sujetado las actuaciones al procedimiento establecido en la ley y el
respectivo contrato. Sobre esto ltimo afirmaron que de acuerdo con el
ordenamiento jurdico, ellas s se encuentran facultadas para imponer sanciones
pecuniarias cuando se presenta un incumplimiento del contrato de condiciones
uniformes por parte del suscriptor o usuario.

La mayora de autoridades judiciales que conocieron en primera y segunda


instancia las referidas solicitudes de amparo, de manera general, coincidieron
en declararlas improcedentes, sosteniendo que la controversia planteada puede
ser resuelta por los vas judiciales ordinarias previstas para el efecto. Un grupo
minoritario de jueces se pronunciaron de fondo, procediendo a negar las
acciones de tutela por considerar que las empresas de servicios pblicos
domiciliarios s se encuentran facultadas legalmente para imponer sanciones de
tipo pecuniario, y en dichas actuaciones se sujetaron estrictamente al
procedimiento fijado en la ley.

7 Dispone la norma en cita: Cuando a juicio de la Sala Plena, por solicitud de cualquier Magistrado, un
proceso de tutela d lugar a un fallo de unificacin de jurisprudencia o la trascendencia del tema amerite su
estudio por todos los magistrados, se dispondr que la sentencia correspondiente sea proferida por la Sala
Plena (...).

24
Sentencia SU-1010 de 2008

En sede de Revisin ante la Corte Constitucional, el conocimiento de estos


procesos fue inicialmente asignado por reparto a la Sala Quinta de Revisin.
Sin embargo, en la medida en que la posicin de la Corte en torno al tema del
rgimen sancionatorio en los servicios pblicos no era uniforme, la Sala Plena
decidi asumir el conocimiento con el fin de dictar una sentencia de unificacin
sobre la materia.

Vistas las circunstancias fcticas del caso, le corresponde entonces a la Corte en


esta oportunidad, determinar si las empresas de servicios pblicos domiciliarios
estn o no facultadas para imponer sanciones pecuniarias a los usuarios cuando
stos incumplen el contrato de prestaciones uniformes.

Para resolver el problema jurdico planteado, la Sala har referencia a los


siguientes temas: (i) aproximacin conceptual y rgimen constitucional de los
servicios pblicos; (ii) rgimen legal de los servicios pblicos domiciliarios;
(iii) el contrato de servicios pblicos domiciliarios; (iv) la potestad
sancionatoria de la Administracin; (v) las facultades de las empresas de
servicios pblicos domiciliarios frente al incumplimiento del contrato de
condiciones uniformes; (vi) jurisprudencia constitucional respecto de la
potestad de las empresas de servicios pblicos domiciliarios para imponer
sanciones de tipo pecuniario y, finalmente, (vii) proceder a unificar la posicin
de esta Corporacin en torno a si las empresas de servicios pblicos
domiciliarios gozan o no de facultad sancionatoria.

Lo anterior le permitir a esta Corte dar solucin al problema jurdico planteado


y efectuar el anlisis de los asuntos bajo examen.

3. Aproximacin conceptual y rgimen constitucional de los servicios


pblicos.

3.1. El concepto de servicios pblicos ha sido objeto de un constante proceso de


evolucin y desarrollo, ligado a las distintas concepciones polticas y
doctrinales y a las profundas transformaciones del Estado.

Con el paso del tiempo, diversas corrientes doctrinales han intentado


aproximarse a una definicin, a partir de establecer cul es el elemento que
permite fijar el carcter pblico de un determinado servicio. Mientras que para
un sector de la doctrina lo que permita definir esa cuestin era el hecho de que
el prestador fuera una autoridad pblica, alinendose as en el criterio orgnico
o subjetivo, para otro sector la calificacin de la actividad se encontraba en la
naturaleza misma del servicio que se presta, identificndose con el llamado
criterio material o funcional.

Dentro del denominado criterio orgnico, se inscriben entonces los seguidores


de la teora del socialismo clsico, para quienes la propiedad sobre los bienes
destinados a la prestacin de los servicios pblicos debe ser del Estado, como

25
Sentencia SU-1010 de 2008

quiera que ellos resultan esenciales para lograr el bienestar general; en ese
sentido, las empresas dedicadas a estas actividades deben ser exclusivamente
nacionales. Por su parte, unidos a la corriente del llamado criterio material o
funcional, aparecen los partidarios de la denominada teora clsica -cuyos
principales exponentes fueron los juristas franceses, Len Duguit y Gastn
Jze-, para quienes el servicio pblico es toda actividad cuyo cumplimiento
debe ser asegurado y controlado por los gobernantes, porque el cumplimiento
de esta actividad es indispensable para la realizacin y el desenvolvimiento de
la interdependencia social, y porque, adems es de tal naturaleza que no puede
ser completamente asegurada sino mediante la intervencin de la fuerza
gobernante8, nocin que no excluye la participacin de particulares en su
prestacin.

A la luz de las doctrinas existentes, en Colombia el tema tambin ha sido objeto


de un amplio debate que adquiere claridad conceptual a partir de la expedicin
de la Constitucin Poltica de 1991, en la que se precisa: (i) que los servicios
pblicos son inherentes a la finalidad social del Estado; (ii) que es deber del
Estado asegurar su prestacin eficiente a todos los habitantes del territorio
nacional; (iii) que pueden ser prestados por el Estado de forma directa o
indirecta, por comunidades organizadas o por particulares; y (iv) que en todo
caso se reserva para el Estado las funciones de regulacin, inspeccin y
vigilancia sobre tales servicios (C.P. art. 365).

Bajo ese contexto, la jurisprudencia constitucional ha considerado el fenmeno


de los servicios pblicos como un hecho, ms all de la problemtica de su
determinacin jurdico-conceptual. Sobre el particular, ha sealado que el
servicio pblico no es simplemente un concepto jurdico; es ante todo un
hecho, una realidad. Las manifestaciones de la autoridad pblica declarando
que tal o cual actividad es un servicio pblico, no pasarn de meras
declaraciones arbitrarias en el supuesto de que no exista de por medio la
satisfaccin efectiva de una necesidad de inters general. Tal declaracin
cuando ella concuerde con la realidad, tendr indiscutiblemente su valor en el
orden jurdico910.

En ese contexto, la Corporacin ha definido los servicios pblicos como


aquellas actividades que el Estado tiene el deber de prestar a todos los
habitantes del territorio nacional, de manera eficiente, regular y continua, en
igualdad de condiciones, en forma directa, o mediante el concurso de los
particulares, con el propsito de satisfacer las necesidades de inters general
que la sociedad demanda.11.

Tal como se observa, la jurisprudencia constitucional establece una serie de


elementos que le son propios al concepto de servicios pblicos: (i) se trata de
8 DUGUIT, Len, Manual de derecho constitucional.
9 MARIENHOFF, Miguel S. Tratado de Derecho Administrativo, Tomo II, Tercera Edicin, Editorial
Abeledo-Perrot. Buenos Aires. 1.988, pg 27.
10 Sentencia T-578 de 1992, Magistrado Ponente: Alejandro Martnez Caballero.
11 Sentencia C-075 de 1997, Magistrado Ponente: Hernando Herrera Vergara.

26
Sentencia SU-1010 de 2008

un conjunto de actividades a travs de las cuales se busca satisfacer necesidades


de inters general; (ii) el Estado tiene el deber de asegurar su prestacin
eficiente, regular y continua, en igualdad de condiciones para toda la sociedad y
(iii) la obligacin estatal puede ser satisfecha de forma directa o mediante el
concurso de los particulares o de comunidades organizadas.

Estos elementos se encuentran expresamente reconocidos en la Carta Poltica


de 1991; en efecto, como ya se mencion, en su artculo 365 la Constitucin
consagra que los servicios pblicos son inherentes a la finalidad social del
Estado, y que ste se encuentra obligado a asegurar su prestacin eficiente a
todos los habitantes del territorio nacional, bien sea que asuma de manera
directa o indirecta dicha tarea, o a travs de comunidades organizadas o de los
particulares.

La relacin inescindible que existe entre la prestacin eficiente de los mismos y


la satisfaccin de las necesidades de inters general, tal y como lo ha
establecido esta Corporacin, se explica en tanto () por una parte, la
realizacin de los derechos fundamentales de las personas depende en gran
medida de la adecuada prestacin de los servicios pblicos p.ej. de agua,
salud, saneamiento bsico, energa, transporte, etc. y (...), por otra, el
Constituyente ha optado por una forma estatal, el Estado social de derecho,
destinada a corregir la deuda social existente en el pas con los sectores
sociales ms desfavorecidos mediante un sistema poltico que busca la
progresiva inclusin de todos en los beneficios del progreso.12

Debido a su importancia como mecanismo para asegurar las condiciones de


vida digna de todos los habitantes del territorio nacional, su prestacin se rige
por los principios de eficiencia, regularidad, continuidad e igualdad, a travs de
los cuales se busca lograr la satisfaccin de las necesidades de inters general y
la efectiva realizacin de los fines estatales. Sobre el tema, la Corporacin ha
sealado que:

"Se busca a travs de los servicios pblicos satisfacer necesidades de inters


general en forma regular y continua. Son adems, el medio por el cual el
Estado realiza los fines esenciales de servir a la comunidad, promover la
prosperidad general y garantizar la efectividad de los principios, derechos y
deberes constitucionales. La razn de ser de los poderes constituidos es el
servicio a la comunidad, la satisfaccin de sus necesidades y la proteccin de
los derechos individuales de sus miembros.

En este sentido los servicios pblicos deben mantener un nivel de eficiencia


aceptable para dar respuesta a las necesidades sociales, en orden a la
realizacin de los fines esenciales del Estado, a la justicia social y a promover
la igualdad en forma real y efectiva.

12 Ibdem.

27
Sentencia SU-1010 de 2008

Habindose dado al Estado colombiano por parte del constituyente de 1991


un carcter social, se hace indispensable que ste acometa acciones positivas
en favor de la comunidad. En este contexto, la prestacin de los servicios
pblicos para asegurar en forma igualitaria y sin interrupcin el
cumplimiento de actividades encaminadas a la realizacin de derechos
fundamentales de los individuos que hacen parte de la comunidad, es una de
las actuaciones positivas a las que est obligado el Estado colombiano. El
carcter solidario de los servicios pblicos se suma a la necesidad de que
estos sean prestados ininterrumpidamente: es decir, que los inconvenientes
particulares no tengan como efecto la suspensin en la prestacin del
servicio.13 (Se subraya).

De esta manera, la obligacin del Estado no se limita a garantizar la prestacin


de los servicios pblicos, sino a llevar a cabo tal deber en condiciones de
eficiencia, continuidad, regularidad e igualdad, de manera que se logre el
cometido de atender en forma ptima las necesidades bsicas de la poblacin en
general.

3.2. Ahora bien, el concepto moderno de servicios pblicos comprende una


categora especial referida a aquellos servicios que se califican como
domiciliarios. El Constituyente de 1991 se refiri a esa categora especial en
distintas disposiciones del Ordenamiento Superior, en particular, en el artculo
367 que expresamente dispone:

ARTCULO 367. La ley fijar las competencias y responsabilidades relativas


a la prestacin de los servicios pblicos domiciliarios, su cobertura, calidad y
financiacin, y el rgimen tarifario que tendr en cuenta adems de los
criterios de costos, los de solidaridad y redistribucin de ingresos.

Los servicios pblicos domiciliarios se prestarn directamente por cada


municipio cuando las caractersticas tcnicas y econmicas del servicio y las
conveniencias generales lo permitan y aconsejen, y los departamentos
cumplirn de apoyo y coordinacin.

La ley determinar las entidades competentes para fijar las tarifas.

De acuerdo con la jurisprudencia constitucional, los servicios pblicos


domiciliarios son aquellos que se prestan a travs del sistema de redes fsicas
o humanas con puntos terminales en las viviendas o sitios de trabajo de los
usuarios y cumplen la finalidad especfica de satisfacer las necesidades
esenciales de las personas14. A partir de un criterio finalista, la Corte ha
identificado como rasgos fundamentales de los mismos los siguientes:

13 Sentencia T-380 de 1994, Magistrado Ponente: Hernando Herrera Vergara.


14 Sentencia T-578 de 1992. Magistrado Ponente: Alejandro Martnez Caballero.

28
Sentencia SU-1010 de 2008

a) De conformidad con el artculo 365 de la Carta, el servicio pblico


domiciliario puede ser prestado de manera directa o indirecta por el
Estado, por comunidades organizadas o por particulares, manteniendo
ste la regulacin, el control y la vigilancia sobre los mismos.

b) Tiene un punto terminal en las viviendas o en los sitios de trabajo de


los usuarios, entendiendo por usuario la persona que usa ciertos
servicios, es decir quien disfruta el uso de cierta cosa.

c) Est destinado a satisfacer las necesidades bsicas de las personas en


concreto y de manera directa, atendiendo a las reales circunstancias
fcticas en las que se encuentra15.

As, se trata de aquellos servicios que tienden a satisfacer las necesidades ms


esenciales de la poblacin y que se reciben directamente en los hogares o
lugares de trabajo de las personas. Por esa razn, constituyen instrumentos que
permiten asegurar la realizacin de los fines del Estado Social de Derecho, al
encontrar una relacin inescindible entre stos y la satisfaccin de necesidades
que comprometen de manera directa derechos de rango constitucional y la
posibilidad de garantizar una existencia en condiciones dignas de todos los
habitantes.

3.3. Dada la trascendencia del tema y la importancia que reviste en un Estado


Social de Derecho como el nuestro, la Constitucin de 1991 estableci diversas
disposiciones especficas en materia de servicios pblicos, incluidos los
domiciliarios, mandatos que configuran el marco constitucional en la materia.

- As, tal como se seal con anterioridad, la Carta prev que los servicios
pblicos podrn ser prestados por el Estado, directa o indirectamente, a travs
de comunidades organizadas o por particulares, an cuando, en todo caso, el
Estado mantiene la regulacin, el control y la vigilancia de dichos servicios
(art. 365 C.P.). En este punto, debe sealarse que, de acuerdo con la
jurisprudencia constitucional, cuando el artculo 365 utiliza el trmino Estado,
significa que la competencia de regulacin en este asunto es genricamente
estatal, an cuando ello no significa que cualquier entidad pueda ejercer dicha
potestad, toda vez que la Constitucin establece una serie de competencias
especficas en este mbito. As, refirindose a tal disposicin constitucional, la
Corte sostuvo que:

Ntese que esta norma atribuye genricamente esa funcin de regulacin al


Estado, sin sealar explcitamente que sta corresponde a una determinada
institucin especfica. Ahora bien, esta Corte ha sealado que en general la
palabra Estado se emplea en la Carta para designar al conjunto de rganos
que realizan las diversas funciones y servicios estatales, ya sea en el orden
nacional, o ya sea en los otros niveles territoriales. Por ende, cuando una
15 As, por ejemplo, esta Corporacin ha sealado que la conexin de redes de acueducto y alcantarillado en
un predio que no se encuentre habitado, no puede considerarse como servicio pblico domiciliario.

29
Sentencia SU-1010 de 2008

disposicin constitucional se refiere al Estado, y le impone un deber, o le


confiere una atribucin, debe entenderse prima facie que la norma
constitucional habla genricamente de las autoridades estatales de los
distintos rdenes territoriales16. Por ende, la competencia de regulacin de
los servicios pblicos es genricamente estatal, lo cual obviamente no
significa que esa facultad pueda ser atribuida por la ley a cualquier entidad
estatal, por cuanto la Constitucin delimita, en materia de servicios pblicos
domiciliarios, algunas rbitas especficas de actuacin de las distintas ramas
de poder, las cuales deben ser respetadas.17 (Negrilla fuera de texto).

El mandato de artculo 365 Superior, armoniza con la facultad general que el


artculo 334 del mismo ordenamiento le atribuye tambin al Estado, en el
sentido de asignarle la direccin general de la economa, y la facultad de
intervenir en los servicios pblicos y privados, potestad que, adems, constituye
un mandato constitucional de intervencin en esta materia, mediante el cual se
busca asegurar el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes, la
distribucin equitativa de las oportunidades y de los beneficios del desarrollo,
la preservacin de un ambiente sano y el acceso efectivo de todas las personas a
los bienes y servicios bsicos, en particular, de los habitantes que perciban
menores ingresos. Cabe sealar que, como lo ha dicho la Corte, en materia de
servicios pblicos, la intervencin estatal se justifica no solamente en aras de
garantizar el cumplimiento de los fines sociales, sino tambin para corregir las
imperfecciones del mercado y establecer relaciones jurdicas equilibradas entre
los usuarios y las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios18.

- Ahora bien, de acuerdo con la Constitucin Poltica, cabe entonces


preguntarse cules son las competencias especficas en materia de regulacin y
establecimiento del rgimen de los servicios pblicos en Colombia?

a. En primer lugar, por mandato expreso del artculo 150, numeral 23 de la


Carta, el Congreso de la Repblica tiene a su cargo la funcin de expedir las
normas que regirn la prestacin de los servicios pblicos. Dicho mandato
armoniza con el previsto en el artculo 365 del mismo ordenamiento que a su
vez le atribuye al legislador la tarea especfica de establecer el rgimen jurdico
de los servicios pblicos.

En el mismo sentido, la Constitucin prev, en materia de servicios pblicos


domiciliarios, los aspectos especficos que deber contener la normatividad que
profiera el legislador. A este respecto, el artculo 367 de la Carta, arriba citado,
dispone que la ley debe fijar las competencias y responsabilidades relativas a la

16 Sentencia C-221 de 1997, Magistrado Ponente: Alejandro Martnez Caballero.


17 Sentencia C-272 de 1998, Magistrado Ponente: Alejandro Martnez Caballero.
18 De esta manera, la Corte ha sealado: la regulacin del mercado por parte de los rganos respectivos, es
uno de los mecanismos de los que dispone el Estado para proporcionar respuestas giles a las necesidades
de sectores que, como el de los servicios pblicos, se encuentran sujetos a permanentes variaciones. La
correccin del mercado por medio de la regulacin es una tarea entre cuyas funciones -adems de perseguir
condiciones bsicas de equidad y solidaridad (...)- se encuentra la de propender por unas condiciones
adecuadas de competitividad. (Sentencia C-272 de 1998, M.P. Alejandro Martnez Caballero).

30
Sentencia SU-1010 de 2008

prestacin de los servicios pblicos domiciliarios, su cobertura, calidad y


financiacin, y el rgimen tarifario que tendr en cuenta adems de los criterios
de costos, los de solidaridad y redistribucin de ingresos. La misma norma
precisa, adems, que la ley determinar las entidades competentes para fijar las
tarifas de tales servicios.

Adicionalmente, el artculo 369 de la Constitucin establece que el legislador


determinar los deberes y derechos de los usuarios, el rgimen de su
proteccin y sus formas de participacin en la gestin y fiscalizacin de las
empresas estatales que presten el servicio, as como tambin definir la
participacin de los municipios o de sus representantes, en las entidades y
empresas que les presten servicios pblicos domiciliarios.

Con fundamento en los mandatos constitucionales referidos, no queda duda que


en Colombia, a quien se le atribuye la competencia para definir el rgimen
jurdico de los servicios pblicos, dentro de los cuales se encuentran los
llamados servicios pblicos domiciliarios, es a la Rama Legislativa del Poder
Pblico, es decir, al Congreso de la Repblica.

De acuerdo con dicha interpretacin, esta Corporacin ha sostenido que en


materia de servicios pblicos existe entonces un principio de reserva de ley, el
cual obedece a la importancia que ellos revisten dentro de la forma de Estado
Social de Derecho, en la medida en que constituyen instrumentos de amparo y
proteccin de los derechos y garantas fundamentales de las personas, y un
mecanismo mediante el cual se procura concentrar la atencin del Estado en la
satisfaccin de las necesidades bsicas de toda la poblacin. Dichas razones
imponen, por tanto, que el rgimen de los servicios pblicos sea el resultado de
un proceso de deliberacin pblica, pluralista, abierto a la participacin de
todos los interesados y responsable ante los usuarios y suscriptores, propsito
que se logra por la va de atribuirle al Congreso la aludida funcin, pues es ste
el rgano democrtico por antonomasia.

En esa orientacin, esta Corporacin afirm que:

() de conformidad con los artculos 150.8, 150.23, 365,367 y 369 de la


Constitucin, corresponde a la ley establecer el rgimen jurdico de dichos
servicios [los servicios pblicos], definir las pautas, parmetros generales y
los aspectos estructurales de los mismos, reservarse algunos de esos servicios
segn las necesidades y conveniencias del Estado, definir reas prioritarias
de inversin social, determinar el rgimen de participacin ciudadana y
municipal e incluir en los planes y presupuestos de la Nacin el gasto social.

() 6- Esta importancia de la ley en la regulacin de los servicios pblicos


se explica no slo por la centralidad del principio democrtico en la Carta

31
Sentencia SU-1010 de 2008

(CP art. 3), por lo cual es natural que sean los representantes del pueblo
quienes organicen jurdicamente estos servicios, sino adems por la
voluntad explcita que tuvo el Constituyente en su momento, y que se refleja
en el artculo 365 de la Carta, de evitar constitucionalizar toda la
ordenacin jurdica de los servicios pblicos, ya que ello poda ser
excesivamente rgido e ir en contra de los principios de eficiencia y calidad
del servicio pblico, al poner un obstculo al posterior desarrollo normativo
de un campo que esta sujeto a cambios muy dinmicos. 19 (Negrilla fuera de
texto)

En el mismo sentido, la Corte Constitucional reiter que:

La Constitucin extiende el principio de reserva de ley a la determinacin


del rgimen de regulacin de la prestacin de los servicios pblicos. Ello
obedece a la importancia de tales servicios no slo en el mbito econmico
sino social, en especial en cuanto al acceso a ellos es necesario para que las
personas puedan gozar efectivamente de sus derechos. La reserva de ley en
estos mbitos, como expresin del principio democrtico, busca que el
rgimen de los servicios pblicos sea el resultado de un proceso de
deliberacin pluralista, pblico, abierto a la participacin de todos y
responsable ante las personas que sean usuarios de dichos servicios.20 (Se
resalta)

No obstante lo anterior, la Corte Constitucional ha establecido que el alcance de


la potestad de configuracin del legislador en materia de servicios pblicos no
es absoluta. En este sentido, la facultad legislativa se encuentra limitada por la
consideracin de los servicios pblicos como actividades inherentes a la
finalidad social del Estado, por la bsqueda de la consecucin de los objetivos
de la intervencin del Estado en la economa establecidos en el artculo 334 de
la Carta21 y por los mandatos expresos que el constituyente plasm en esta
materia, los cuales se relacionan con (i) el deber de asegurar su prestacin
eficiente a todos los habitantes del territorio nacional (Artculo 365 CP); (ii) el
deber de dar solucin a las necesidades bsicas insatisfechas de saneamiento
ambiental y de agua potable (Artculo 366, CP); (iii) el deber de garantizar la
universalidad de la cobertura y la calidad en la prestacin de los servicios

19 Ibdem.
20 Sentencia C-150 de 2003, Magistrado Ponente: Manuel Jos Cepeda Espinosa.
21 Ver entre otras, las sentencias C-263 de 1996 y C-284 de 1997, Magistrado Ponente: Antonio Barrera
Carbonell y C-517 de 1992, Magistrado Ponente: Ciro Angarita Barn.

32
Sentencia SU-1010 de 2008

pblicos domiciliarios (Artculos 365 y 367, CP); y (iv) el deber de garantizar


los derechos y deberes de los usuarios (Artculo 369, CP)22.

De esta manera, a partir de los mandatos anteriormente reseados y teniendo en


cuenta las dems disposiciones del Texto Superior aplicables, la jurisprudencia
de esta Corte ha definido el contenido del marco constitucional al cual se
encuentra sujeto el legislador al momento de determinar el rgimen de los
servicios pblicos.

En primer lugar, desde el punto de vista dogmtico, dicho marco est


conformado por:

(i) Por los principios fundamentales consagrados en el Ttulo I de la


Constitucin Poltica (C.P. arts. 1, 2 y 5), que le imponen al Estado la
obligacin positiva de adoptar las medidas que resulten necesarias para
proteger a los residentes en Colombia, en su vida, honra, bienes y dems
derechos inalienables; (ii) por ciertos derechos especficos consagrados en el
Ttulo II del mismo Texto Superior, los cuales se orientan primordialmente a
velar por la efectividad de las condiciones mnimas que hacen posible la
existencia digna de todas las personas, como ocurre, por ejemplo, con los
derechos a la vida, a la salud y al saneamiento ambiental (C.P. arts. 11, 12,
13, 49, 78 y 79) al igual que por aquellas reglas y cnones normativos que
garantizan el mandato constitucional de la democratizacin en la
administracin y en la propiedad de las empresas (C.P. arts. 38, 58, 60 y 64).
23

Y, en segundo trmino, hacen parte de l los mandatos especficos que se


relacionan con la intervencin econmica y con la distribucin de competencias
en materia de servicios pblicos; stos son:

() (iii) los mandatos constitucionales previstos en el rgimen econmico y


de la hacienda pblica (C.P. art. 333 y 334) que aparte de reconocer los
derechos a la libertad econmica, libertad de empresa, libre competencia
econmica y libre iniciativa privada, le atribuyen al Estado la potestad de
intervenir en su ejercicio, entre otras, para asegurar que todas las personas,
en particular las de menores ingresos, tengan acceso efectivo a los bienes y
servicios bsicos; (iv) las normas relativas a las competencias de las
entidades territoriales en materia de servicios pblicos (C.P. arts. 106, 289,
302, 311 y 319); (v) las disposiciones del Ttulo XII, captulo 5 de la
Constitucin, que definen la Finalidad Social del Estado y de los Servicios
Pblicos (C.P. arts. 265 a 370); y por ltimo (vi) las normas que le atribuyen
al Presidente de la Repblica la potestad de ejercer la inspeccin y vigilancia
de los servicios pblicos (C.P. art. 189. num. 22), as como aquellas que le

22 Sentencia C-741 de 2003, Magistrado Ponente: Manuel Jos Cepeda Espinosa.


23 Sentencia C-075 de 2006, Magistrado Ponente: Rodrigo Escobar Gil.

33
Sentencia SU-1010 de 2008

otorgan la potestad reglamentaria para proceder al sealamiento de las


polticas generales de administracin y control de eficiencia de los servicios
pblicos domiciliarios24 (C.P. art. 370)25.

As, si bien el alcance de la potestad de configuracin del legislador en materia


de servicios pblicos es amplio, toda vez que se extiende a todos los aspectos
relativos a su prestacin, esta facultad no es ilimitada, ya que su ejercicio debe
estar encaminado a la consecucin de los fines, principios y deberes
constitucionales que precisamente le prestan fundamento.

b. Pero adems del legislador, el Presidente de la Repblica tambin participa


en la configuracin de algunos aspectos relativos a la prestacin de los
servicios pblicos.

Sobre el particular, cabe advertir que, adems de ejercer la potestad


reglamentaria sobre las leyes que en materia de servicios pblicos expida el
legislador (C.P. art. 189-11), el Presidente de la Repblica tiene a su cargo las
funciones especficas de Ejercer la inspeccin y vigilancia de la prestacin de
los servicios pblicos (C.P. art. 189-22 y 370), y de sealar, con sujecin a
la ley, las polticas generales de administracin y control de eficiencia de los
servicios pblicos domiciliarios... (C.P. art. 370).

Como se advierte por la propia Constitucin, estas funciones presidenciales se


encuentran sujetas a la observancia de los mandatos constitucionales en esta
materia y a las disposiciones normativas que establezca el legislador. En
relacin con la funcin de inspeccin, vigilancia y control, la Corte
Constitucional ha sealado:

Ahora bien, como se infiere de distintos mandatos constitucionales, las


funciones de inspeccin, control y vigilancia asignadas al Presidente de la
Repblica, deben ser desarrolladas con la anuencia y participacin del
rgano legislativo a quien le corresponde definir el fundamento jurdico de su
ejercicio. En efecto, segn lo preceptuado en el numeral 8 del artculo 150
Superior, al Congreso le compete Expedir las normas a las cuales debe
sujetarse el Gobierno para el ejercicio de las funciones de inspeccin y
vigilancia que le seale la Constitucin. En el caso especfico de los servicios
pblicos, tambin el numeral 23 de la norma antes citada, le asigna al
legislador la funcin de Expedir las leyes que regirn el ejercicio de las
funciones pblicas y la prestacin de los servicios pblicos, al tiempo que el

24 Sentencia C-1162 de 2000. Magistrado Ponente: Jos Gregorio Hernndez Galindo. En la doctrina se
puede consultar: POLO. Miguel. De la Comisin de Regulacin de Telecomunicaciones. (Un acercamiento a
su naturaleza jurdica, a sus principales funciones y a la problemtica en cuanto a su ubicacin en la
estructura del Estado). Revista de la Maestra en Derecho Econmico No. 2. Pontificia Universidad
Javeriana. 2004.
25 Sentencia C-075 de 2006, Magistrado Ponente: Rodrigo Escobar Gil.

34
Sentencia SU-1010 de 2008

inciso segundo del articulo 365 ibidem seala que stos estarn sometidos al
rgimen jurdico que fije le ley.

Bajo estas condiciones, ha de considerarse que el Congreso es el organismo


encargado de fijar las directrices que gobiernan las funciones de inspeccin,
vigilancia y control de los servicios pblicos, y que el Presidente es la
autoridad llamada a desarrollarlas y ejecutarlas. Sobre esto ltimo, en cuanto
el ejercicio de tales funciones es ante todo de carcter administrativo, puede
sostenerse que el Presidente de la Repblica obra y acta como suprema
autoridad administrativa, circunstancia que a su vez habilita al Congreso
para disponer la desconcentracin y prever la delegacin de tales actividades,
mediante la creacin de instituciones especializadas que, bajo la direccin y
orientacin del Gobierno, ejecuten las labores de vigilancia y control. 26 (Se
resalta)

De igual manera, la funcin de fijacin de polticas generales de administracin


y control de eficiencia de los servicios pblicos domiciliarios, debe ser ejercida
conforme a los parmetros generales que establezca el legislador27.

De todo lo expuesto se concluye que es el legislador la autoridad pblica


encargada de establecer el rgimen jurdico de los servicios pblicos, facultad
que debe ejercer dentro de los precisos y estrictos trminos establecidos en la
Carta Poltica y con sujecin al marco constitucional anteriormente sealado.
Por su parte, teniendo en cuenta el rgimen legal, al Presidente de la Repblica
le corresponde ejercer la inspeccin, la vigilancia y el control de la prestacin
de estos servicios y fijar las polticas generales de administracin y control de
eficiencia de los servicios pblicos domiciliarios.

As las cosas, cabe aclarar que, aun cuando por expreso mandato constitucional,
a la prestacin de los servicios pblicos -y en particular a los domiciliarios-
concurren las Ramas Legislativa y Ejecutiva del Poder Pblico, en este ltimo
caso con la participacin de los particulares, las competencias asignadas a cada
una de ellas se encuentran claramente definidas, determinas y delimitadas, con
lo cual se busca no slo garantizar la prestacin eficiente y ordenada de tales
servicios a toda la poblacin, sino tambin impedir una posible usurpacin de
funciones que afecte los derechos e intereses de los usuarios y suscriptores.

4.Rgimen legal de los servicios pblicos domiciliarios: la Ley 142 de 1994.

En cumplimiento del mandato constitucional que le atribuye al legislador la


facultad para expedir el rgimen jurdico de los servicios pblicos
domiciliarios, el Congreso de la Repblica expidi la Ley 142 de julio 11 de

26 Sentencia C-199 de 2001, Magistrado Ponente: Rodrigo Escobar Gil.


27 Sentencia C-242 de 1997, Magistrado Ponente: Hernando Herrera Vergara.

35
Sentencia SU-1010 de 2008

199428, Por la cual se establece el rgimen de los servicios pblicos


domiciliarios y se dictan otras disposiciones.29

- Conforme lo anuncia en el ttulo, dicha ley se aplica a los servicios pblicos


domiciliarios, y aun cuando en sus disposiciones no hace referencia alguna a
los rasgos caractersticos que los identifican, textualmente menciona como
servicios pblicos domiciliarios los de acueducto, alcantarillado, aseo,
energa elctrica, distribucin de gas combustible, telefona fija pblica bsica
conmutada y telefona local mvil en el sector rural. La misma ley dispone
que su mbito de aplicacin se extiende tambin a las actividades que llevan a
cabo las personas autorizadas para prestar los servicios pblicos, a las
actividades complementarias y a otros servicios que de manera especial
menciona la ley (art. 1).

Los servicios pblicos domiciliarios a los que hace referencia la Ley 142,
aparecen definidos en su artculo 14, en los siguientes trminos:

14.22. SERVICIO PBLICO DOMICILIARIO DE ACUEDUCTO. Llamado


tambin servicio pblico domiciliario de agua potable. Es la distribucin municipal
de agua apta para el consumo humano, incluida su conexin y medicin. Tambin se
aplicar esta ley a las actividades complementarias tales como captacin de agua y
su procesamiento, tratamiento, almacenamiento, conduccin y transporte.

14.23. SERVICIO PBLICO DOMICILIARIO DE ALCANTARILLADO. Es


la recoleccin municipal de residuos, principalmente lquidos, por medio de tuberas
y conductos. Tambin se aplicar esta ley a las actividades complementarias de
transporte, tratamiento y disposicin final de tales residuos.

14.24. SERVICIO PBLICO DE ASEO. (Numeral modificado por el artculo 1de


la Ley 689 de 2001). Es el servicio de recoleccin municipal de residuos,
principalmente slidos. Tambin se aplicar esta ley a las actividades
complementarias de transporte, tratamiento, aprovechamiento y disposicin final de
tales residuos.

Igualmente incluye, entre otras, las actividades complementarias de corte de csped


y poda de rboles ubicados en las vas y reas pblicas; de lavado de estas reas,
transferencia, tratamiento y aprovechamiento.

14.25. SERVICIO PBLICO DOMICILIARIO DE ENERGA ELCTRICA.


Es el transporte de energa elctrica desde las redes regionales de transmisin hasta
el domicilio del usuario final, incluida su conexin y medicin.

28 Publicada en el Diario Oficial Diario Oficial No. 41.433 de 11 de julio de 1994. Esta ley ha sido objeto de
modificaciones, principalmente introducidas por las Leyes 286 de 1996, 632 de 2000 y 689 de 2001.
29 En relacin con el servicio pblico domiciliario de energa elctrica, el legislador profiri adems la ley
143 de 1994, por la cual se establece el rgimen para la generacin, interconexin, transmisin,
distribucin y comercializacin de electricidad en el territorio nacional, se conceden unas autorizaciones y
se dictan otras disposiciones en materia energtica.

36
Sentencia SU-1010 de 2008

Tambin se aplicar esta ley a las actividades complementarias de generacin, de


comercializacin, de transformacin, interconexin y transmisin.

14.26. SERVICIO PBLICO DOMICILIARIO DE TELEFONA PBLICA


BSICA CONMUTADA. Es el servicio bsico de telecomunicaciones, uno de
cuyos objetos es la transmisin conmutada de voz a travs de la red telefnica
conmutada con acceso generalizado al pblico, en un mismo municipio. Tambin se
aplicar esta ley a la actividad complementaria de telefona mvil rural y al servicio
de larga distancia nacional e internacional. Exceptase la telefona mvil celular, la
cual se regir, en todos sus aspectos por la ley 37 de 1993 y sus decretos
reglamentarios o las normas que los modifiquen, complementen o sustituyen.

14.27. SERVICIO PBLICO DE LARGA DISTANCIA NACIONAL E


INTERNACIONAL. Es el servicio pblico de telefona bsica conmutada que se
presta entre localidades del territorio nacional o entre estas en conexin con el
exterior.

14.28. SERVICIO PBLICO DOMICILIARIO DE GAS COMBUSTIBLE. Es


el conjunto de actividades ordenadas a la distribucin de gas combustible, por
tubera u otro medio, desde un sitio de acopio de grandes volmenes o desde un
gasoducto central hasta la instalacin de un consumidor final, incluyendo su
conexin y medicin. Tambin se aplicar esta ley a las actividades
complementarias de comercializacin desde la produccin y transporte de gas por un
gasoducto principal, o por otros medios, desde el sitio de generacin hasta aquel en
donde se conecte a una red secundaria.

Respecto a quienes estn habilitados para prestar servicios pblicos, la ley


dispone que pueden prestarlos: (i) las empresas de servicios pblicos; (ii) las
personas naturales o jurdicas que produzcan para ellas mismas, o como
consecuencia o complemento de su actividad principal, los bienes y servicios
propios del objeto de las empresas de servicios pblicos; (iii) los municipios
cuando asuman en forma directa, a travs de su administracin central, la
prestacin de los servicios pblicos, conforme a lo dispuesto en esta ley; (iv)
las organizaciones autorizadas conforme a la ley para prestar servicios pblicos
en municipios menores en zonas rurales y en reas o zonas urbanas especficas;
(v) las entidades autorizadas para prestar servicios pblicos durante los
perodos de transicin previstos en la ley; y (vi) las entidades descentralizadas
de cualquier orden territorial o nacional que al momento de expedirse esta ley
estn prestando cualquiera de los servicios pblicos (art. 15).

- De manera general, hay que destacar que la Ley 142 de 1994 fija el rgimen
de los servicios pblicos domiciliarios a travs de un ttulo preliminar y diez
ttulos ms. El Ttulo Preliminar de la Ley 142 de 1994 contiene: (i) los
principios generales aplicables al rgimen de los servicios pblicos, los cuales
se relacionan con los fines e instrumentos de la intervencin estatal en este
tema; (ii) la competencia de las entidades territoriales en la prestacin de los
mismos y (iii) los derechos de los usuarios.

37
Sentencia SU-1010 de 2008

Por su parte, los Ttulos I, II y III se refieren a: (i) el rgimen de las personas
que prestan los servicios pblicos domiciliarios; (ii) a las normas especiales
sobre los actos y contratos que celebren estas empresas y (iii) a la regulacin de
las relaciones laborales dentro de las mismas.

La regulacin, el control y la vigilancia del Estado en los servicios pblicos


domiciliarios, es el tema del Ttulo V de la Ley. All, el legislador desarroll la
facultad del Presidente de la Repblica para sealar las polticas generales de
administracin y control de eficiencia de los servicios pblicos domiciliarios,
mediante la creacin de las Comisiones de Regulacin, las cuales son unidades
administrativas especiales, con independencia administrativa, tcnica y
patrimonial y adscritas al Ministerio respectivo dependiendo del servicio
regulado; dentro de las Comisiones que fueron creadas por la Ley 142 de 1994,
se encuentra la Comisin de Regulacin de Agua Potable y Saneamiento
Bsico, adscrita al Ministerio de Desarrollo Econmico, hoy Ministerio de
Comercio, Industria y Turismo, y la Comisin de Regulacin de Energa y Gas
Combustible, adscrita al Ministerio de Minas y Energa (art. 69).

De esta manera, el artculo 68 establece que el Presidente de la Repblica puede


delegar en las Comisiones el sealamiento de las polticas generales de
administracin y control de eficiencia de los servicios pblicos domiciliarios
que le encomienda el artculo 370 Superior; facultad que fue avalada por esta
Corporacin en la Sentencia C-272 de 1998, en la que se sostuvo sobre el
particular:

Conforme a lo anterior, el Legislador tena competencia constitucional


(artculos 365, 367 y 370 de la C.P) para atribuir a las comisiones, si el
Presidente lo estimaba conveniente y proceda a efectuar dicha delegacin,
las funciones relativas a sealar las polticas generales de control de
eficiencia de los servicios pblicos domiciliarios. Tambin por expresa
disposicin constitucional, stas eran competentes para recibir esas
funciones, producto de la delegacin, en su calidad de agencias del estado
fijadas por la Ley. Adems, esas funciones, cuya naturaleza es tpicamente de
la Administracin, podan, por razones de eficiencia y efectividad real de los
servicios pblicos, recaer perfectamente en los organismos especializados que
conocieran especficamente del sector, como lo pretenda el Constituyente y
como lo plasm el Legislador. Por consiguiente, la Corte no encuentra ningn
vicio de inconstitucionalidad en el artculo 68 de la ley 142 de 1994, por lo
cual declarar su exequibilidad.
Bajo la consideracin de que la potestad de fijar las polticas generales de
administracin en materia de servicios pblicos domiciliarios constituye una
funcin de orden administrativo, eminentemente gubernamental, que el
Presidente de la Repblica ejerce en forma autnoma, es decir, sin compartirla
con el legislador pero dentro de la rbita fijada por aqul, la Corte
Constitucional consider que esta facultad puede ser objeto de delegacin. Los
actos de las Comisiones estn en un todo sujetos a la ley, a los decretos

38
Sentencia SU-1010 de 2008

reglamentarios que expida el Presidente y a las polticas que fije el Gobierno


Nacional en el rea respectiva; adems, al estar adscritas a los Ministerios
correspondientes, cada una de ellas est subordinada a las orientaciones y
polticas que dicte el respectivo Ministro30.

Por ltimo, la Ley 142 de 1994 consagra el rgimen tarifario de las empresas de
servicios pblicos, en el Ttulo VI; las reglas a las que deben sujetarse los
procedimientos administrativos que stas adelantan, en el Ttulo VII; las
normas que rigen el contrato de condiciones uniformes, en el Ttulo VIII;
algunos aspectos particulares de los servicios pblicos de agua potable y
saneamiento bsico, energa elctrica y gas combustible, en el Ttulo IX; y,
finalmente, las disposiciones referentes al rgimen de transicin, en el Ttulo X.

A continuacin, la Sala se detendr en el estudio del contrato de condiciones


uniformes de servicios pblicos, por resultar relevante para la solucin del
problema jurdico planteado en la presente providencia.

5. El contrato de servicios pblicos domiciliarios.

Esta Corporacin ha sealado en distintas oportunidades, que aun cuando el


vnculo que surge entre las empresas de servicios pblicos domiciliarios y los
usuarios y suscriptores encuentra su fuente directa en el contrato, la relacin
jurdica que surge entre ellos no solamente se rige por las condiciones pactadas
en el contrato de prestaciones uniformes, sino tambin por los estrictos
mandatos establecidos en la Constitucin, ley y los reglamentos.

La obligatoria sujecin del contrato de servicios pblicos domiciliarios al


ordenamiento jurdico, concretamente a normas de derecho pblico, constituye,
sin lugar a dudas, un lmite a la libertad contractual y a la autonoma de la
voluntad de las partes, claramente justificado en la necesidad de evitar que las
empresas prestadoras abusen de su posicin dominante, y en el hecho de ser los
servicios pblicos domiciliarios inherentes a la finalidad social del Estado y
tener como fin principal y ltimo, satisfacer las necesidades esenciales de las
personas y garantizar el goce efectivo de sus derechos constitucionales -vida,
salud, educacin, seguridad social, etc-.

Haciendo expresa referencia al tema, la Corte haba precisado que dicha


relacin jurdica no slo se gobierna por las estipulaciones contractuales y el
derecho privado, sino por el derecho pblico, contenido en las normas de la
Constitucin y de la ley que establecen el rgimen o estatuto jurdico de los
servicios pblicos domiciliarios, las cuales son de orden pblico y de
imperativo cumplimiento, porque estn destinadas a asegurar la calidad y la
eficiencia en la prestacin de los servicios, el ejercicio, la efectividad y la

30 Al respecto, puede consultarse la sentencia C-1162 de 2000, Magistrado Ponente: Jos Gregorio
Hernndez Galindo.

39
Sentencia SU-1010 de 2008

proteccin de los derechos de los usuarios, y a impedir que las empresas de


servicios pblicos abusen de su posicin dominante.31

En esos trminos, la jurisprudencia viene puntualizando que La relacin


jurdica entre el usuario y las empresas de servicios pblicos domiciliarios es,
en algunos aspectos y respecto de ciertos servicios, una relacin legal y
reglamentaria, estrictamente objetiva, que se concreta en un derecho a la
prestacin legal del servicio en los trminos precisos de su reglamentacin, sin
que se excluya la aplicacin de normas de derecho privado en materias no
reguladas por la ley.32

Conforme con tal interpretacin, el artculo 13233 de la Ley 142 de 1994


dispone que el contrato de servicios pblicos est regido por: (i) las
disposiciones de esa misma Ley; (ii) las condiciones especiales que se pacten
con los usuarios; (iii) las condiciones uniformes que sealen las empresas de
servicios pblicos y (iv) por las normas del Cdigo de Comercio y del Cdigo
Civil. Respecto del alcance de dicha norma, la jurisprudencia ha precisado que
la misma impone una regla hermenutica tendiente a la armonizacin
jerrquica de esta ley con las condiciones especiales que se pacten con los
usuarios, con las condiciones uniformes que sealen las empresas de servicios
pblicos y con las normas de los cdigos de comercio y civil 34, lo cual deja en
evidencia la naturaleza dual, contractual y legal, de la relacin existente entre
los usuarios y las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios.

5.1. El carcter contractual de la relacin que surge entre el usuario y el


prestador del servicio.

En cuanto al carcter contractual de la relacin que surge entre el usuario y el


prestador del servicio, es claro que ella tiene origen en un contrato de
condiciones uniformes cuyas clusulas, a partir de lo previsto en el artculo 128
de la Ley 142 de 1994, son concebidas y elaboradas previamente por las
empresas prestadoras35.

En efecto, el citado artculo define este negocio jurdico como un contrato


uniforme, consensual, en virtud del cual una empresa de servicios pblicos los
31 Sentencia C-4963 de 1997, Magistrado Ponente: Fabio Morn Daz.
32 Sentencia T-540 de 1996, Magistrado Ponente: Eduardo Cifuentes Muoz. Esta posicin ha sido reiterada,
entre otras, en las sentencias C-558 de 2001, Magistrado Ponente: Jaime Araujo Rentera y C-389 de 2002,
Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.
33 ARTCULO 132. RGIMEN LEGAL DEL CONTRATO DE SERVICIOS PBLICOS. El contrato de
servicios pblicos se regir por lo dispuesto en esta ley, por las condiciones especiales que se pacten con los
usuarios, por las condiciones uniformes que sealen las empresas de servicios pblicos, y por las normas del
Cdigo de Comercio y del Cdigo Civil.
Cuando haya conflicto entre las condiciones uniformes y las condiciones especiales, se preferirn stas. Al
definir los efectos fiscales del contrato de servicios pblicos, se tendr en cuenta que, a pesar de tener
condiciones uniformes, resulta celebrado con cada usuario en particular.
34 Sentencia C-558 de 2001, Magistrado Ponente: Jaime Araujo Rentera.
35 Ley 142 de 1994, art. 128. Sobre este tipo de clusulas el artculo 73-10 de la citada Ley 142, le otorga a
las Comisiones de Regulacin la facultad de: dar concepto sobre la legalidad de las condiciones uniformes
de los contratos de servicios pblicos que se sometan a su consideracin; y sobre aquellas modificaciones
que puedan considerarse restrictivas de la competencia (...).

40
Sentencia SU-1010 de 2008

presta a un usuario a cambio de un precio en dinero, de acuerdo a


estipulaciones que han sido definidas por ella para ofrecerlas a muchos
usuarios no determinados. En l se entienden incorporadas no slo sus
estipulaciones escritas, sino tambin todas aquellas que la empresa aplica de
manera uniforme en la prestacin del servicio.

En concordancia con lo anterior, y por mandato del artculo 129 del mismo
Estatuto36, este acto jurdico no se encuentra sometido a ningn tipo de
solemnidad para su formacin, razn por la cual -en cuanto a su celebracin-
sigue la regla general para la formacin de los negocios jurdicos, conforme a la
cual stos se perfeccionan por el slo consentimiento de las partes. En este
sentido, existe contrato de servicios pblicos desde que la empresa define las
condiciones uniformes en las que est dispuesta a prestar el servicio, y el
suscriptor, sea propietario, poseedor o tenedor a cualquier ttulo del inmueble,
presenta la solicitud de servicio, de lo cual se deriva entonces el carcter
consensual de este tipo de contrato.

Segn el artculo 130 del citado Estatuto, modificado por la Ley 689 de 2001,
las partes del contrato de servicios pblicos son: por un lado, las empresas de
servicios pblicos domiciliarios y, por el otro, los suscriptores y/o usuarios. El
suscriptor, tal y como lo define la propia ley (art. 14.31), es la persona
natural o jurdica con la cual se ha celebrado un contrato de condiciones
uniformes de servicios pblicos. Por su parte, el usuario es la persona
natural o jurdica que se beneficia con la prestacin de un servicio pblico,
bien como propietario del inmueble en donde este se presta, o como receptor
directo del servicio (art.14.33).

De acuerdo con la jurisprudencia constitucional, el contrato de servicios


pblicos se caracteriza por ser: (i) consensual; (ii) uniforme; (iii) de ejecucin
sucesiva; (iv) oneroso; (v) de adhesin y, finalmente, (vi) mixto, caracterstica
que se relaciona con la naturaleza de la relacin que surge entre el usuario y la
empresa de servicios pblicos domiciliarios y con el rgimen jurdico al cual se
encuentra sometida dicha relacin37.

Para lo que interesa a la presente causa y, particularmente, en relacin con el


carcter oneroso del contrato, debe recordarse que a pesar de que dentro de la

36 Disposicin declarada exequible mediante sentencia C-636 de 2000, Magistrado Ponente: Antonio Barrera
Carbonell.
37 Sobre el particular, la Corte Constitucional ha sealado: Entre las caractersticas esenciales reconocidas
a los contratos de condiciones uniformes adems de tratarse de un negocio jurdico consensual, se
encuentran su naturaleza uniforme, tracto sucesivo, oneroso, mixto y de adhesin. Es uniforme por someterse
a unas mismas condiciones jurdicas de aplicacin general para muchos usuarios no determinados. Es de
tracto sucesivo pues las prestaciones que surgen del mismo necesariamente estn llamadas a ser ejecutadas
durante un perodo prolongado de tiempo. Es oneroso ya que implica que por la prestacin del servicio
pblico domiciliario, el usuario debe pagar a la empresa respectiva una suma de dinero. Es de adhesin, en
el entendido que las clusulas que regulan el contrato, por lo general, son redactadas previa y
unilateralmente por la empresa de servicios pblicos, sin ofrecerle a los usuarios la posibilidad de deliberar
y discutir sobre el contenido de las mismas. Finalmente, como previamente se seal su naturaleza es mixta,
pues las disposiciones jurdicas que lo regulan corresponden a una relacin reglamentaria y contractual.
(Sentencia C-075 de 2006, Magistrado Ponente: Rodrigo Escobar Gil)

41
Sentencia SU-1010 de 2008

concepcin del Estado Social de Derecho los servicios pblicos domiciliarios


cumplen una funcin social, ello no significa que su prestacin deba ser
gratuita. En nuestro ordenamiento jurdico, el abandono del concepto de
gratuidad en materia de servicios pblicos, con excepcin de algunos servicios
como la educacin, encuentra fundamento, de manera particular, en los
artculos 95 y 368 de la Constitucin Poltica, de acuerdo con los cuales todas
las personas tienen el deber de contribuir al financiamiento de los gastos e
inversiones del Estado dentro de conceptos de justicia y equidad.

El carcter oneroso del contrato de condiciones uniformes se explica, en tanto


el pago que los usuarios o suscriptores realizan como contraprestacin a los
servicios recibidos, permite (i) asegurar el equilibrio econmico y financiero de
las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios; (ii) contribuye al
fortalecimiento de las mismas; (iii) incentiva la participacin de los particulares
en el mercado de los servicios pblicos, lo cual contribuye a la ampliacin de la
cobertura en la prestacin de los mismos, y (iv) permite que el Estado pueda
establecer polticas de orden social que permitan asegurar la prestacin de los
servicios domiciliarios a las personas de escasos recursos; lo anterior, se funda
en el principio de solidaridad, el cual, en esta materia, exige que aquellos que
gozan de una mayor capacidad de pago contribuyan econmicamente para
lograr la cobertura del servicio en los estratos menos favorecidos.

As las cosas, debe concluirse que la relacin contractual que existe entre las
empresas de servicios pblicos domiciliarios y los usuarios o suscriptores,
implica el reconocimiento de derechos y obligaciones recprocas que se
relacionan, de manera particular, con el deber de la empresa de prestar el
servicio en condiciones de eficiencia, regularidad, continuidad e igualdad 38 y
con el compromiso de los usuarios o suscriptores de pagar el precio
correspondiente al servicio consumido.

5.2. El carcter legal de la relacin entre el prestador y el usuario; los


privilegios y prerrogativas de las empresas de servicios pblicos domiciliarios.

Como ya se mencion, la relacin jurdica que surge entre el usuario y las


empresas de servicios pblicos domiciliarios es tambin de naturaleza legal y
reglamentaria. Ello significa que est orientada por normas de derecho pblico,
de imperativo cumplimiento, destinadas a asegurar la calidad y eficiencia en la
prestacin de los servicios y a garantizar el ejercicio, la efectividad y la
proteccin de los derechos de los usuarios; sin que ello implique excluir de
dicha relacin la aplicacin de normas de derecho privado respecto de aquellas
materias no reguladas en la ley.

38 ARTCULO 136 [ley 142 de 1994]. CONCEPTO DE FALLA EN LA PRESTACIN DEL SERVICIO. La
prestacin continua de un servicio de buena calidad, es la obligacin principal de la empresa en el contrato
de servicios pblicos.// El incumplimiento de la empresa en la prestacin continua del servicio se denomina,
para los efectos de esta ley, falla en la prestacin del servicio.// La empresa podr exigir, de acuerdo con las
condiciones uniformes del contrato, que se haga un pago por conexin para comenzar a cumplir el contrato;
pero no podr alegar la existencia de controversias sobre el dominio del inmueble para incumplir sus
obligaciones mientras el suscriptor o usuario cumpla las suyas.

42
Sentencia SU-1010 de 2008

La finalidad que persiguen los servicios pblicos domiciliarios y su adscripcin


al campo del derecho pblico, son factores que inciden en el reconocimiento de
funciones administrativas a las empresas prestadoras de tales servicios. En
efecto, teniendo en cuenta los intereses superiores que informan la prestacin
de los servicios pblicos domiciliarios, y en aras de cumplir con los objetivos y
fines propios de esta actividad, la Ley 142 de 1994 dot a las empresas
prestadoras de tales servicios, independientemente de su naturaleza pblica o
privada, de privilegios y prerrogativas que son propios de las autoridades
pblicas.

El reconocimiento de privilegios y prerrogativas en favor de quienes no tienen


la calidad de autoridades pblicas, tiene como antecedente normativo el artculo
1 del Cdigo Contencioso Administrativo (Decreto 01 de 1984), el cual, en
relacin con el universo de personas habilitadas para desempear funciones
administrativas, ya le haba reconocido a los particulares la eventual capacidad
para cumplir ese tipo de funciones y, por tanto, la posibilidad de acceder a la
condicin genrica de autoridades. En palabras de la Corte, tal reconocimiento
no correspondi a una gracia o ddiva otorgada por la ley a favor de los
particulares, antes bien, lo que se registr all (decreto 01 de enero 2 de 1984)
fue un reconocimiento a la creciente incursin del sector privado en la
prestacin de servicios pblicos tales como la enseanza, la salud, el
transporte, la banca, etc.39

Con la expedicin de la Carta Poltica de 1991, la funcin administrativa gan


especial configuracin y distincin, en particular, a luz de la vinculacin de los
particulares con su cumplimiento. A este respecto, el artculo 209 de dicho
ordenamiento la pone al servicio de los intereses generales bajo la aplicacin de
unos principios especficos -igualdad, moralidad, eficacia, economa, celeridad,
imparcialidad y publicidad-, destacando que la funcin administrativa est
llamada a desarrollarse mediante la descentralizacin, la delegacin y la
desconcentracin de funciones. Tal mandato es complementado por el artculo
210 del propio ordenamiento Superior, que, adems de reconocer en los
principios que orientan la actividad administrativa el fundamento en la gnesis
de las entidades del orden nacional descentralizadas por servicios,
expresamente habilita a los particulares para cumplir funciones administrativas
en los trminos que defina la ley; esto ltimo, sobre la base de que el propio
texto Superior promueve la participacin privada en el campo de las funciones
o potestades propias del Estado, como ocurre por ejemplo en el caso especfico
de los servicios pblicos (C.P. art. 365).

En ese escenario, ya se mencion, la Ley 142 de 1994, en los artculos 152 a


159, le reconoce a las empresas y entidades prestadoras de servicios pblicos
domiciliarios, estatales o privadas, una serie de derechos, poderes y

39 Sentencia C-558 de 2001, M.P. Jaime Araujo Rentera.

43
Sentencia SU-1010 de 2008

prerrogativas de autoridad pblica que las habilitan para cumplir funciones


administrativas que van, desde la resolucin de peticiones, quejas y reclamos,
hasta la definicin del recurso de reposicin el cual es finalmente
complementado con el recurso de apelacin, cuya definicin es asignada a la
Superintendencia de Servicios Pblicos para el agotamiento de la va
gubernativa. Sobre dicha potestades, esta Corporacin sostuvo que, por su
intermedio, se busca propiciar y favorecer la organizacin, el
funcionamiento, la continuidad, la eficiencia y la eficacia del servicio, al
amparo de la regulacin, el control y la vigilancia que el Estado se reserva
para s con exclusividad, en su tarea de asegurar la prestacin eficiente de
dichos servicios a todos los habitantes del territorio nacional. 40

De esta forma, es claro que las entidades prestadoras de servicios pblicos


domiciliarios -sean de carcter oficial o privado- cumplen funciones
administrativas en el contexto de la va gubernativa en la que actan, esto es, en
cuanto conocen y deciden sobre las peticiones, las quejas, los reclamos y los
recursos presentados por los suscriptores o usuarios. En este sentido, estn
facultadas para proferir actos administrativos y resoluciones, que, en el caso de
la prestacin del servicio por parte de un particular, no estaran habilitados para
adoptar de no ser por la labor que desarrollan. Ello indica que, en relacin con
los usuarios del servicio y respecto de este supuesto, las empresas de servicios
pblicos domiciliarios de naturaleza privada actan como verdaderas
autoridades pblicas.

A la luz de las consideraciones expuestas, surge como interrogante Si dentro


de dichas prerrogativas se encuentra el ejercicio de potestades sancionatorias?
Dicho en otras palabras, se cuestiona la Corte si las empresas de servicios
pblicos domiciliarios -independientemente de su naturaleza pblica o privada-
estn facultadas para imponer sanciones a los usuarios? De encontrarse que la
respuesta a este interrogante es afirmativa, la solucin del problema jurdico
planteado por las presentes acciones implicara establecer si dentro de dicha
facultad se encuentra la de imponer sanciones de contenido pecuniario frente al
incumplimiento del contrato.

Para dar respuesta a este cuestionamiento, es necesario analizar en qu consiste


la potestad sancionatoria como manifestacin del poder punitivo del Estado,
cuales son sus principales caractersticas, quienes podran ser titulares de la
misma y cul es la autoridad competente para otorgarla, lo que pasa la Sala a
establecer.

6.La potestad sancionatoria de la Administracin.

40 Sentencia Ibdem.

44
Sentencia SU-1010 de 2008

6.1. La concepcin del Estado moderno ha evolucionado hacia la bsqueda de


un mayor compromiso de las autoridades pblicas en la satisfaccin de las
necesidades de la sociedad y en la garanta y efectividad de los derechos
ciudadanos.

Con la introduccin de la clusula de Estado Social de Derecho, ste ha


asumido un papel activo y protagnico como promotor de toda la dinmica
social, lo que ha producido un incremento considerable de las funciones y
actividades que estn a su cargo, en aras de cumplir con los fines que le han
sido trazados. Dicho incremento tuvo lugar con particular intensidad en las
funciones administrativas del Estado, por lo que el aumento de las actividades
encomendadas al ejecutivo signific correlativamente el incremento de sus
poderes, entre ellos, el relacionado con la imposicin de sanciones.

Tal facultad es una manifestacin propia del poder punitivo del Estado que se
encuentra regulado en el llamado derecho sancionador, el cual, tal y como lo
ha sealado esta Corporacin, acogiendo la jurisprudencia de la Corte Suprema
de Justicia sobre el tema41, es una disciplina compleja que, como gnero,
recubre al menos cinco especies a saber: el derecho penal, el derecho
contravencional, el derecho disciplinario, el derecho correccional y el derecho
de punicin por indignidad poltica o impeachment.

En este escenario, la potestad sancionadora de la Administracin consiste en la


facultad de imponer sanciones de tipo correctivo y disciplinario, encaminada a
reprimir la realizacin de acciones u omisiones antijurdicas en las que incurren
tanto los particulares como los funcionarios pblicos, que surge como un
instrumento eficaz para facilitar el ejercicio de las funciones pblicas y un
medio para asegurar la consecucin de los fines estatales42.

De acuerdo con la doctrina ius publicista, ella se explica por cuanto si el


rgano est facultado normativamente para imponer un mandato, o regular
una conducta en servicio del inters pblico, su incumplimiento implica que
ese rgano tiene la atribucin para lograr la garanta del orden mediante la
imposicin de los castigos correspondientes.43, por lo que la posibilidad de
que la Administracin exija el acatamiento de las decisiones que adopta y est
facultada para imponer sanciones como consecuencia de su incumplimiento,
resulta ser un importante mecanismo a travs del cual se garantiza la
efectividad de las mismas y la satisfaccin del inters pblico.

Dentro de este contexto, esta Corporacin ha sido enftica en reconocer la


importancia de esta facultad para lograr los cometidos estatales; en efecto,
sobre este tema la Corte ha sealado:
41 Sentencia 51 de la Corte Suprema de Justicia, del 14 de abril de 1983, Magistrado Ponente: Manuel Gaona
Cruz, citada por la Corte Constitucional en la Sentencia C-214 de 1994, Magistrado Ponente: Antonio Barrera
Carbonell.
42 Al respecto pueden consultarse, entre otras, las sentencias C-214 de 1994, Magistrado Ponente: Antonio
Barrera Carbonell y C-229 de 1995, Magistrado Ponente: Alejandro Martnez Caballero.
43 Derecho Administrativo Sancionador. Ossa Arbelez Jaime, Legis Editores S.A., Bogot, 2000.

45
Sentencia SU-1010 de 2008

As, se ha expresado, en forma reiterada, que i) la potestad sancionadora


como potestad propia de la administracin es necesaria para el adecuado
cumplimiento de sus funciones y la realizacin de sus fines 44, pues ii) permite
realizar los valores del orden jurdico institucional, mediante la asignacin de
competencias a la administracin que la habilitan para imponer a sus propios
funcionarios y a los particulares el acatamiento, inclusive por medios
punitivos, de una disciplina cuya observancia propende indudablemente a la
realizacin de sus cometidos45 y iii) constituye un complemento de la potestad
de mando, pues contribuye a asegurar el cumplimiento de las decisiones
administrativas.46

Desde esta perspectiva, la facultad sancionadora de la Administracin Pblica


se diferencia de las dems especies del derecho sancionador particularmente
por las siguientes caractersticas:

(i) La actividad sancionatoria de la Administracin persigue la


realizacin de los principios constitucionales que gobiernan la
funcin pblica a los que alude el artculo 209 de la Carta ().47

(ii) La sancin administrativa, constituye la respuesta del Estado a la


inobservancia por parte de los administrados de las obligaciones,
deberes y mandatos generales o especficos que se han ideado para el
adecuado funcionamiento y marcha de la Administracin ().48

(iii) Dicha potestad, se ejerce a partir de la vulneracin o perturbacin


de reglas preestablecidas, pero que no obstante ese contenido
represivo presenta una cierta finalidad preventiva en el simple hecho
de proponer un cuadro sancionador, junto al conjunto de
prescripciones de una norma, lo cual implica una amenaza latente
para quien sin atender pacfica y voluntariamente al cumplimiento de
tales prescripciones las infringe deliberadamente.49

(iv) En relacin con la sancin aplicable, dentro del mbito sancionador


administrativo cabe destacar la aceptacin de la interdiccin de las
sanciones privativas de la libertad, la instauracin de la multa como
sancin prototpica y la necesaria observancia de un procedimiento
legalmente establecido.50

44 Sentencia C-597 de 1996, Magistrado Ponente: Alejandro Martnez Caballero.


45 Ibdem.
46 Sentencia C-214 de 1994, Magistrado Ponente: Antonio Barrera Carbonell.
47 Sentencia C-506 de 2002, Magistrado Ponente: Marco Gerardo Monroy Cabra.
48 Ibdem.
49 Sentencia C-597 de 1996, Ibd.
50 Sentencia C-827 de 2001, Magistrado Ponente: lvaro Tafur Galvis.

46
Sentencia SU-1010 de 2008

(v) Y, finalmente, la decisin sancionatoria adoptada por la


Administracin est sujeta a control judicial ante la jurisdiccin de lo
contencioso administrativo.51

A su vez, dicha potestad comprende dos modalidades: (i) la disciplinaria, que se


ejerce frente a la comisin de conductas antijurdicas en las que incurran los
servidores pblicos o aquellas personas que, sin tener tal calidad, han sido
habilitadas para ejercer transitoriamente funciones pblicas y (ii) la
correccional, que se aplica a los particulares que infringen las obligaciones y
restricciones que se les han impuesto, por ejemplo, en materia contractual,
financiera, de trnsito, fiscal, etc.

Ahora bien, distintas normas de la Constitucin Poltica sirven de fundamento a


la potestad administrativa sancionatoria en nuestro ordenamiento.

- As, por ejemplo, se encuentra el artculo 2 de la Carta Poltica, el cual


establece que el Estado tiene el deber de servir a la comunidad, promover la
prosperidad general y garantizar la efectividad de los derechos, deberes y
principios consagrados en la Constitucin; el ejercicio de la funcin pblica
encomendada a la Administracin implica que si sta se encuentra facultada
para imponer un mandato o regular una conducta en servicio del inters
pblico, tambin debe estar facultada para lograr la garanta del orden mediante
la imposicin de sanciones, frente al incumplimiento de tales mandatos.

- Tambin se tiene el artculo 29 constitucional, el cual consagra el derecho al


debido proceso como garanta fundamental de todas las personas. En relacin
con esta norma y la forma en que ella le sirve de fundamento a la potestad
administrativa sancionadora, esta Corporacin ha sealado: () el artculo 29
de la Constitucin expresa que el debido proceso se aplicar a toda clase de
actuaciones judiciales y administrativas. El debido proceso comporta una
serie de garantas como la publicidad y celeridad del procedimiento, el
derecho de defensa y contradiccin, el principio de legalidad del ilcito y de la
pena, la garanta del juez competente, etc., que slo tienen sentido referidas a
la actividad sancionadora del Estado. Es decir son garantas aplicables al
proceso de imposicin de sanciones. De esta manera, cuando la Carta habla
del debido proceso administrativo, implcitamente reconoce la facultad que
incumbe a la Administracin de imponer sanciones, es decir la potestad
sancionadora de la Administracin. (Se resalta)

- De igual forma, se tienen los artculos constitucionales referidos a la funcin


de polica administrativa, por virtud de la cual el Estado tiene la atribucin de
regular el ejercicio de las libertades individuales con el fin de garantizar el
orden pblico (artculos 67, 150 num.8, 189 nums. 21, 22, 24 y 26, 265, 370 y
372 de la C.P.).

51 Ibdem.

47
Sentencia SU-1010 de 2008

- Finalmente, se encuentra el artculo 334 de la Constitucin Poltica, el cual


establece que la direccin general de la economa estar a cargo del Estado y,
en tal razn, ste tiene el deber de intervenir por mandato de la ley en la
explotacin de los recursos naturales, en el uso del suelo, en la produccin,
distribucin, utilizacin y consumo de los bienes, y en los servicios pblicos y
privados, para racionalizar la economa con el fin de conseguir el
mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes, la distribucin
equitativa de las oportunidades y los beneficios del desarrollo y la
preservacin de un ambiente sano; de esta manera, correlativamente a la
expedicin de normas de intervencin, es necesario que el Estado cuente con
las herramientas necesarias para hacerlas cumplir.

6.2. Ahora bien, el ejercicio de la potestad sancionadora del Estado -referida al


conjunto de competencias que habilitan a diferentes rganos para imponer
sanciones de variada naturaleza jurdica-, est subordinado a las reglas propias
del debido proceso. De esta manera, cuando quiera que la Administracin
pretenda desplegar facultades de tipo sancionatorio dentro de la rbita de sus
competencias, es necesario que el procedimiento a travs del cual se encauce el
ejercicio de dicha potestad respete las garantas constitucionales del debido
proceso.

En efecto, esta Corporacin ha establecido:

5.1.2. En la doctrina52 se postula, as mismo, sin discusin que la


administracin o las autoridades titulares de funciones administrativas lo
sean de potestad sancionadora y que sta en cuanto manifestacin del ius
puniendi del Estado est sometida a claros principios generalmente
aceptados, y en la mayora de los casos proclamados de manera explicita en
los textos constitucionales. As, a los principios de configuracin del sistema
sancionador como los de legalidad (toda sancin debe tener fundamento en la
ley), tipicidad (exigencia de descripcin especifica y precisa por la norma
creadora de las infracciones y de las sanciones, de las conductas que pueden
ser sancionadas y del contenido material de las sanciones que puede
imponerse por la comisin de cada conducta, as como la correlacin entre
unas y otras) y de prescripcin (los particulares no pueden quedar sujetos de
manera indefinida a la puesta en marcha de los instrumentos sancionatorios),
se suman los propios de aplicacin del sistema sancionador, como los de
culpabilidad o responsabilidad segn el caso rgimen disciplinario o
rgimen de sanciones administrativas no disciplinarias- (juicio personal de
reprochabilidad dirigido al autor de un delito o falta53), de proporcionalidad o
el denominado non bis in dem.54 (Se resalta)

52 Principios de Derecho Administrativo. Juan Alfonso Santamara Pastor, Editorial Centro de Estudios
Ramn Areces, Madrid, Tomo II, Segunda Edicin, 2000.
53 Ver Ramn Parada Vsquez, Derecho Administrativo, Tomo I, Marcial Pons, Madrid, 1996. Luis Morell
Ocaa, Curso de Derecho Administrativo, Tomo II La actividad de las administraciones pblicas. Su
control administrativo y jurisdiccional, Arandazi, Madrid, 1996.
54 Sentencia C-827 de 2001, Magistrado Ponente: Alvaro Tafur Galvis.

48
Sentencia SU-1010 de 2008

Las garantas sustanciales y procesales a favor de la persona en contra de quien


se sigue el procedimiento tienen por objeto proteger los derechos
constitucionales del individuo y, al mismo tiempo, limitar la potestad
sancionadora del Estado. Por tal razn, la Constitucin establece que el debido
proceso se aplica a toda clase de actuaciones judiciales y administrativas (art.
29 C.P.). No obstante lo anterior, en relacin con el procedimiento
administrativo sancionador dichas garantas se aplican con unos matices
especiales.

En efecto, esta Corporacin ha establecido de manera reiterada que mientras en


el derecho penal las garantas del debido proceso tienen su ms estricta
aplicacin, ya que en ste no solamente se afecta el derecho fundamental a la
libertad sino que, adems, sus mandatos se dirigen a todas las personas, en
otros mbitos sancionatorios su aplicacin es atenuada en razn de la naturaleza
de la actuacin, de los fines que se persiguen con ella y del hecho de que sus
normas operan en mbitos especficos, actividades o profesiones para las que se
han establecido determinados deberes especiales55.

As las cosas, la actuacin requerida para la aplicacin de sanciones de esta


naturaleza est subordinada a las reglas del debido proceso administrativo, que
tiene unas caractersticas especiales que le son propias a la Administracin
Pblica.

6.3. Dentro de los principios esenciales del debido proceso, merece destacarse
para la presente causa el de legalidad.

El principio de legalidad como pilar fundamental del ejercicio del poder,


implica de manera general que no existe facultad, funcin o acto que puedan
desarrollar los servidores pblicos que no est prescrito, definido o establecido
en forma expresa, clara y precisa en la ley56, lo que resulta ser desarrollo del
artculo 6 constitucional, segn el cual, las autoridades son responsables, no
slo por infringir la Constitucin y las leyes, sino tambin por la
extralimitacin en el ejercicio de sus funciones.

Por su parte, como principio rector del derecho sancionador, la legalidad


significa especficamente que tanto la conducta como la sancin misma deben

55 En el mismo sentido, en la Sentencia T-145 de 1993, M.P.: Eduardo Cifuentes Muoz., la Corte sostuvo:
El Constituyente colombiano hizo extensivo el derecho al debido proceso a toda clase de actuaciones
judiciales y administrativas (CP 29). Las garantas mnimas del debido proceso penal son aplicables, con
algunas atenuaciones, a las actuaciones administrativas sancionatorias. () La no total aplicabilidad de
las garantas del derecho penal al campo administrativo obedece a que mientras en el primero se protege el
orden social en abstracto y su ejercicio persigue fines retributivos, preventivos y resocializadores, la potestad
sancionatoria de la administracin se orienta ms a la propia proteccin de su organizacin y
funcionamiento, lo cual en ocasiones justifica la aplicacin restringida de estas garantas - quedando a salvo
su ncleo esencial - en funcin de la importancia del inters pblico amenazado o desconocido.. Sobre el
mismo tema puede consultarse, entre otras, la sentencia C-597 de 1996, Magistrado Ponente: Alejandro
Martnez Caballero.
56 Sentencia C-710 de 2001, Magistrado Ponente: Jaime Crdoba Trivio.

49
Sentencia SU-1010 de 2008

estar predeterminadas; en este sentido, es necesario que exista una ley previa
que determine la conducta objeto de sancin y que sta contenga una
descripcin precisa de la accin u omisin objeto de reproche y de la sancin
que ha de imponerse. No obstante, debe recordarse que en materia
administrativa esta garanta, as como todas aquellas que hacen parte del
derecho al debido proceso, tienen una aplicacin ms flexible, en atencin a las
caractersticas especiales que presenta la Administracin Pblica57.

Ahora bien, el principio de legalidad se manifiesta en dos principios


fundamentales: el de reserva de ley y el de tipicidad.

6.3.1. El principio de reserva de ley implica que solamente el legislador est


constitucionalmente habilitado para establecer las acciones u omisiones que dan
lugar al ejercicio del poder punitivo del Estado, determinar cuales sern las
correspondientes sanciones -de naturaleza penal o administrativa segn el caso-
y fijar los procedimientos que deben seguirse para imponerlas.

As, la reserva de ley como principio fundante del ejercicio de la potestad


administrativa sancionatoria implica que slo el legislador puede otorgar dicha
prerrogativa y establecer los elementos fundamentales que determinarn su
ejercicio. Sin embargo, en el cumplimiento de dicha funcin el legislador no es
absolutamente libre, como no puede serlo el ejercicio de ningn poder en un
Estado Social de Derecho; en este sentido, tambin la definicin de una
conducta sancionable debe respetar los mandatos establecidos en el Texto
Superior y las garantas reconocidas a travs de los tratados internacionales, los
cuales limitan el ejercicio de la potestad de configuracin legislativa.

No obstante, debe sealarse que en materia de derecho sancionador por ley no


solamente debe entenderse la norma que expide el legislador ordinario sino
tambin la que profiere el Gobierno en ejercicio de facultades extraordinarias.
As, esta Corporacin ha establecido que corresponde entonces, al legislador
ordinario, en ejercicio de la clusula general de competencia (art. 150 C.N.), o
al legislador extraordinario, debidamente facultado para ello, dictar regmenes
penales de cualquier ndole (disciplinaria, contravencional, administrativa,
penal etc.) sealando el procedimiento para la aplicacin de las sanciones que
all se contemplen.58

6.3.2. Por su parte, en virtud del principio de tipicidad, el cual tiene tambin
una aplicacin ms flexible en materia administrativa, el legislador debe
establecer expresamente los elementos fundamentales del tipo, lo que implica
57 Sobre el tema, la Corte Constitucional ha sealado: Cuando se trata del derecho administrativo
sancionador, el principio de legalidad de las sanciones administrativas slo exige que una norma con fuerza
material de ley contemple una descripcin genrica de las conductas sancionables, las clases y cuanta de las
sanciones, pero con posibilidad de remitir a los actos administrativos la descripcin pormenorizada de las
conductas reprochables, sin que pueda decirse en este caso que las normas de carcter reglamentario
complementan los enunciados legales, pues se trata de una remisin normativa contemplada especficamente
por la disposicin legal de carcter sancionador. Sentencia C-860 de 2006, Magistrado Ponente: Humberto
Antonio Sierra Porto.
58 Sentencia C-052 de 1997, Magistrado Ponente: Carlos Gaviria Daz.

50
Sentencia SU-1010 de 2008

que se efecte: (i) la descripcin de la conducta o del comportamiento que da


lugar a la aplicacin de la sancin; (ii) la determinacin de la sancin, lo que
implica la descripcin de todos los aspectos relativos a ella, esto es, el tipo de
sancin a imponer, el trmino o la cuanta de la misma, la autoridad competente
para aplicarla y (iii) el procedimiento que debe seguirse para proceder a su
imposicin.

En este sentido, como quiera que las infracciones en materia sancionatoria


administrativa son variadas y diversas, adems de que en ocasiones responden a
criterios de carcter tcnico o especializado, no seria posible exigirle al
legislador que determine con absoluta precisin y detalle todos los elementos
del tipo. Por esta razn, la aplicacin matizada de este principio implica que el
legislador debe sealar los elementos bsicos para delimitar la prohibicin, sin
que le sea exigible la definicin de todos y cada uno de los aspectos de la
falta59.

Sin embargo, la flexibilidad del principio de legalidad no significa que se


permita la arbitrariedad de la Administracin en la imposicin de las sanciones,
por lo que en todo caso la ley deber establecer, como mnimo, los elementos
bsicos de la conducta tpica que ser sancionada, las remisiones normativas
precisas cuando haya previsto un tipo en blanco o los criterios por medio de los
cuales se pueda determinar con claridad la conducta, as como la sancin que
ser impuesta o los criterios para determinarla con claridad60.
59 Bajo tal premisa, la Corte Constitucional ha avalado en distintas oportunidades el contenido de normas que
establecen sanciones de tipo administrativo mediante el uso de conceptos indeterminados. As, por ejemplo, en
la sentencia C-921 de 2001 esta Corporacin se pronunci respecto de la demanda de constitucionalidad
presentada en contra de los numerales 23 y 24 del artculo 5 del Decreto 1259 de 1994; a juicio del actor, dichas
normas comportaban una vulneracin del principio de legalidad por cuanto facultaban a la Superintendencia
Nacional de Salud para imponer sanciones por el desconocimiento de las instrucciones u rdenes que ella
misma impartiera.
En esa oportunidad, esta Corporacin consider que la norma acusada era respetuosa del principio de reserva
legal y, adicionalmente, del principio de tipicidad, como quiera que en ella se establecan los sujetos sobre los
cuales poda recaer la sancin, el monto de la sancin pecuniaria, el procedimiento que deba seguirse para su
imposicin y la formulacin genrica de la conducta a sancionar, esto es, el desconocimiento de las rdenes
expedidas por la Superintendencia.
60 A partir de tal consideracin, la Corte Constitucional ha declarado la inexequibilidad de disposiciones
normativas que, por ser demasiado imprecisas, constituan una violacin del principio de legalidad. En este
sentido, por ejemplo, al efectuar el juicio de constitucionalidad del artculo 52 del Estatuto Orgnico del
Sistema Financiero, el cual trasladaba al ejecutivo la facultad de sealar las sanciones a imponer por la
infraccin de las disposiciones que dicte en ejercicio de su funcin de regulacin de las actividades financiera y
aseguradora, sin definir las infracciones ni precisar el monto de la multa, esta Corporacin consider: 10- Uno
de los principios esenciales en el derecho sancionador es el de la legalidad, segn el cual las conductas
sancionables no slo deben estar descritas en norma previa (tipicidad) sino que, adems, deben tener un
fundamento legal, por lo cual su definicin no puede ser delegada en la autoridad administrativa. Adems, es
claro que el principio de legalidad implica tambin que la sancin debe estar predeterminada ya que debe
haber certidumbre normativa previa sobre la sancin a ser impuesta pues, como esta Corporacin ya lo haba
sealado, las normas que consagran las faltas deben estatuir tambin con carcter previo, los correctivos y
sanciones aplicables a quienes incurran en aqullas 11- Las sanciones administrativas deben entonces estar
fundamentadas en la ley, por lo cual, no puede transferrsele al Gobierno una facultad abierta en esta materia,
como lo hace el artculo 52 del EOSF.. (Sentencia C-1161 de 2000, M.P.: Alejandro Martnez Caballero.)
En este orden de ideas, la Corte sostuvo que para establecer cuando se produce una vulneracin del principio de
legalidad, es necesario verificar si la norma legal permite determinar los elementos del tipo en forma razonable,
esto es, si a partir de la ley es posible concretar su alcance, bien sea en virtud de remisiones normativas o de
criterios tcnicos, lgicos, empricos, o de otra ndole, que permitan prever, con suficiente precisin, el alcance
de los comportamientos prohibidos y sancionados; de encontrarse que el concepto es a tal punto abierto, que no
puede ser concretado en forma razonable, entonces dichos conceptos desconocen el principio de legalidad, pues

51
Sentencia SU-1010 de 2008

6.4. Ahora bien, se plantea entonces el siguiente interrogante: Qu sujetos


pueden ser titulares de dicha facultad? Es decir, se trata de una prerrogativa
predicable nicamente de las autoridades administrativas o es posible que el
legislador la otorgue a otros sujetos distintos?

Tal como se estableci con anterioridad, por expresa disposicin constitucional


(art. 210, inciso 2 C.P.) en nuestro ordenamiento jurdico es posible que la
Administracin Pblica busque la consecucin de los fines estatales y de sus
cometidos, con la participacin de los particulares; para tales efectos el
particular es un agente que cumple funciones administrativas y coadyuva en la
realizacin de los cometidos estatales.

Por su parte, la potestad sancionatoria administrativa encuentra su razn de ser


en la necesidad de asegurar la realizacin de los fines de la Administracin
Pblica, que se concretan en la satisfaccin del inters pblico, por lo que dicha
facultad no est referida de manera exclusiva a las autoridades pblicas,
entendidas stas desde el punto de vista orgnico, sino que tambin puede ser
otorgada por la ley a particulares que ejercen funciones administrativas,
quienes, tal y como se seal con anterioridad, para efectos de la realizacin de
dichas tareas actan como verdaderas autoridades.

As lo ha reconocido en distintas oportunidades esta Corporacin. Por ejemplo,


en relacin con el ejercicio de la profesin de odontologa, la Ley 35 de 1989
dispuso en su cuyo artculo 59 la creacin del Tribunal de tica Odontolgica y
de los Tribunales Seccionales, rganos encargados de examinar y sancionar la
conducta de los profesionales de la odontologa; los miembros de estos
Tribunales son particulares que, con fundamento en los artculos 209 y 210 de
la Constitucin Nacional, ejercen una funcin pblica por expresa disposicin
legal. En este escenario y al determinar cual era la naturaleza de las sanciones
que ellos imponan, esta Corporacin sostuvo que las actuaciones realizadas
por los Tribunales de tica Odontolgica se pueden asimilar a actuaciones de
orden administrativo y que las sanciones que ellos imponen se pueden inscribir
dentro del mbito del derecho administrativo sancionador.61

Esa situacin tambin se presenta en materia de seguridad social en salud; as,


el legislador le otorg a las empresas prestadoras de estos servicios,
independientemente de su condicin de oficiales o privadas, la facultad de
imponer determinadas sanciones cuando quiera que los usuarios incumplan con
sus obligaciones y deberes para con el sistema. De esta manera, Las
facultades correctivas adoptadas por parte de las E.P.S. han sido avaladas en

la definicin del comportamiento prohibido queda abandonada a la discrecionalidad de las autoridades


administrativos, que valoran y sancionan libremente la conducta sin referentes normativos precisos.
Bajo tal consideracin, la Corte concluy que, en este caso, la norma comportaba una vulneracin del
principio de tipicidad y, por tal razn, declar la inexequibilidad de la disposicin.
61 Sentencia C-213 de 2007, Magistrado Ponente: Humberto Antonio Sierra Porto.

52
Sentencia SU-1010 de 2008

reiterados pronunciamientos de la Corte Constitucional, para sancionar


(...).62

De esta manera, siendo la potestad sancionatoria de la Administracin un


elemento indispensable dentro de un Estado Social de Derecho para la
realizacin de los fines estatales, esta potestad no solamente puede ser atribuida
por la ley a ella, sino tambin a los particulares que ejercen funciones
administrativas; ello por cuanto, independientemente de quien desempee la
funcin y siempre que el legislador lo haya establecido de manera expresa, su
reconocimiento se funda en la necesidad de asegurar el cumplimiento de los
fines que se ha trazado el Estado, por lo que nada obsta para que los
particulares que cumplan funciones administrativas puedan imponer sanciones
de la misma naturaleza bajo los estrictos y precisos trminos establecidos en la
ley.

En este punto, necesario es resaltar que ello no significa, de manera alguna, que
los particulares modifiquen su naturaleza y, por ese hecho, se conviertan en
servidores pblicos. En efecto, esta Corporacin as lo ha establecido en
reiterados pronunciamientos a los que ya se hizo alusin en esta providencia.
No obstante lo anterior, el hecho de que se les permita ejercer este tipo de
funciones s genera un incremento de sus responsabilidades y una sujecin
especial al Estado; en este sentido, la Corte Constitucional ha sealado:

La circunstancia de que se asigne a los particulares el ejercicio de funciones


pblicas no modifica su Estatus de particulares ni los convierte -por ese
hecho- en servidores pblicos. No obstante dicha salvedad, el ejercicio de
funciones pblicas por parte de particulares conlleva un lgico incremento en
el nivel de responsabilidades del sujeto a cargo de la prestacin que deriva en
una intensificacin de los compromisos adquiridos para con el Estado. Las
obligaciones que el particular asume por razn del ejercicio de una funcin
pblica son de tal relevancia que su responsabilidad se extiende ms all de
los lmites impuestos a los que no prestan servicio alguno. As, mientras los
particulares que no se encuentran vinculados al Estado mediante una relacin
de servicio pblico regulan su responsabilidad de acuerdo con la primera
parte del artculo 6 de la Constitucin Poltica, es decir que no son
responsables ante las autoridades por infraccin de la Constitucin y la Ley,
los que s lo estn se hacen responsables por omisin o extralimitacin en el
ejercicio de sus funciones.63

De esta manera, el hecho de que la potestad administrativa sancionadora


constituya un instrumento de realizacin de los fines que la Carta atribuye a
estas autoridades, es precisamente lo que justifica la posibilidad de que ella sea
atribuida a particulares que ejercen funciones administrativas. Sin embargo,
como quiera que el hecho de que el particular ejerza una potestad en tal sentido

62 Sentencia T-537 de 2004, Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.


63 Sentencia C-181 de 2002, Magistrado Ponente: Marco Gerardo Monroy Cabra.

53
Sentencia SU-1010 de 2008

no deviene de su naturaleza sino del hecho de que se lo ha habilitado por la ley


para el ejercicio de determinadas funciones pblicas, en este evento es
necesaria una mayor especificidad legislativa en cuanto a la posibilidad de
ejercer una potestad en tal sentido y en relacin con la determinacin de los
elementos estructurales de la falta, de la sancin propiamente dicha y del
procedimiento a seguir, toda vez que se trata de una facultad extraa a la
naturaleza del particular y, en este sentido, que responde a un especfico fin: la
consecucin de los objetivos de la Administracin Pblica.

Ello, adems, por cuanto de acuerdo con el artculo 210 de la Carta Poltica, a
pesar de que los particulares pueden cumplir funciones administrativas, en estos
casos su actuacin est sujeta de manera estricta a los trminos que le sealen
la Constitucin y la ley.

7.Las facultades de las empresas de servicios pblicos domiciliarios frente


al incumplimiento del contrato de condiciones uniformes.

Como se seal con anterioridad, una lectura de las normas que regulan el tema
de los servicios pblicos domiciliarios evidencia que, en efecto, las empresas
que prestan este tipo de servicios, independientemente de su condicin estatal o
privada, gozan de una serie de potestades y derechos, a travs de los cuales se
busca asegurar la prestacin eficiente de dichos servicios a todos los habitantes
del territorio nacional.

Especficamente en el caso de inobservancia de las obligaciones que surgen del


contrato de condiciones uniformes a cargo del usuario, sea cual sea la
obligacin incumplida y de acuerdo con las disposiciones de la Ley 142 de
1994, a las empresas de servicios pblicos domiciliarios les asiste el derecho de
(i) suspender el servicio o (ii) proceder al corte del mismo y tener por resuelto
el contrato. Por su parte, cuando el incumplimiento se relaciona con la
obligacin de pagar las facturas correspondientes, las empresas de servicios
pblicos domiciliarios estn habilitadas, adems, para efectuar el cobro (i) del
servicio consumido pero no facturado y (ii) de los intereses moratorios sobre
los saldos que los usuarios no cancelen oportunamente.

Adems, para lograr el pago de las obligaciones derivadas de la prestacin de


los servicios pblicos domiciliarios, el artculo 130 de la Ley 142 de 1994
establece que las empresas pueden acudir directamente al proceso ejecutivo
ante la jurisdiccin ordinaria o ejercer la jurisdiccin coactiva, cuando se trate
de empresas industriales y comerciales del Estado que presten este tipo de
servicios; para estos efectos, la factura expedida por la empresa y debidamente
firmada por el representante legal de la entidad presta mrito ejecutivo.

7.1. En primer lugar, en relacin con la suspensin del servicio pblico


domiciliario derivada del incumplimiento del pago de las facturas

54
Sentencia SU-1010 de 2008

correspondientes, sta es de carcter obligatorio para la empresa en el evento


establecido en el artculo 130 de la Ley 142 de 1994, esto es, en los casos en
que exista solidaridad en las obligaciones y derechos del contrato de servicios
pblicos entre el propietario o poseedor del inmueble, el suscriptor y el usuario
del servicio y se presente un incumplimiento en el pago del mismo por dos
perodos consecutivos de facturacin.

De igual forma, el artculo 140 de la referida Ley establece:

ARTCULO 140. SUSPENSIN POR INCUMPLIMIENTO. El


incumplimiento del contrato por parte del suscriptor o usuario da lugar a la
suspensin del servicio en los eventos sealados en las condiciones uniformes
del contrato de servicios y en todo caso en los siguientes:
La falta de pago por el trmino que fije la entidad prestadora, sin exceder en
todo caso de dos (2) perodos de facturacin en el evento en que sta sea
bimestral y de tres (3) perodos cuando sea mensual y el fraude a las
conexiones, acometidas, medidores o lneas.
Es causal tambin de suspensin, la alteracin inconsulta y unilateral por
parte del usuario o suscriptor de las condiciones contractuales de prestacin
del servicio.
Durante la suspensin, ninguna de las partes puede tomar medidas que hagan
imposible el cumplimiento de las obligaciones recprocas tan pronto termine
la causal de suspensin.
Haya o no suspensin, la entidad prestadora puede ejercer todos los derechos
que las leyes y el contrato uniforme le conceden para el evento del
incumplimiento. (Se resalta)

El contenido normativo de las citadas disposiciones fue avalado por la Corte


Constitucional mediante sentencia C-150 de 200364, bajo la consideracin de
que, a pesar de que evidentemente la suspensin del servicio tiene
implicaciones importantes sobre la calidad de vida de las personas, ello no
justifica que los usuarios de los servicios pblicos domiciliarios puedan
sustraerse del cumplimiento de sus obligaciones contractuales.

En este escenario, estim la Corte, las razones que justifican la suspensin del
servicio por la mora en el pago se relacionan con (i) el carcter oneroso del
contrato de servicios pblicos domiciliarios; (ii) el deber que tienen todos los
usuarios de no trasladar a los dems el costo o carga individual por el acceso y
disfrute del servicio; (iii) el componente de solidaridad en materia de servicios
pblicos domiciliarios, el cual implica que -tal y como se seal con
anterioridad- las personas que gozan de una mayor capacidad de pago
contribuyan econmicamente para lograr la cobertura y prestacin efectiva del
servicio en los estratos menos favorecidos y (iv) el hecho de que en muchas
ocasiones la suspensin del servicio constituye una garanta para los
64 Magistrado Ponente: Manuel Jos Cepeda Espinosa.

55
Sentencia SU-1010 de 2008

propietarios o poseedores de los inmuebles, ya que evita, en aquellos casos en


los que ostentan la calidad de arrendadores, que los arrendatarios incumplan de
manera sistemtica con su obligacin de pagar las facturas de los servicios y
dejen aumentar de manera desproporcionada la deuda que adquieran por esta
causa.

Bajo este entendido, la Corte sostuvo que la tantas veces mencionada norma
del artculo 140 de la ley de servicios pblicos puede ser entendida como una
'regla de equilibrio contractual', tal como lo asegura la Corte Suprema de
Justicia, en la medida en que tiende a proteger tanto a la empresa como a los
propietarios y a establecer la base sobre la cual se prestar el servicio a los
usuarios65.

No obstante lo anterior, la Corte precis que al momento de proceder a la


suspensin de un servicio pblico domiciliario, la empresa debe observar unas
reglas para su actuacin, las cuales se derivan directamente de los mandatos
establecidos en la Constitucin Poltica y en la ley; a este conjunto de reglas se
le denomin la Carta de derechos y deberes de los usuarios de servicios
pblicos domiciliarios, cuyo fundamento primario se encuentra en el principio
de la dignidad humana66.

As, esta Corporacin, sin pretender formular una enumeracin exhaustiva de


dichas facultades, consider que dentro de esta Carta se encuentran los
derechos a no ser discriminado por una empresa de servicios pblicos
domiciliarios, a ser clara y oportunamente informado de sus obligaciones y de
las consecuencias de incumplirlas y a la resolucin pronta de los recursos de
manera previa al corte el servicio, entre otros.

De lo anterior, este Tribunal concluy que cuando las empresas de servicios


pblicos domiciliarios van a suspender el servicio, deben: (i) observar los
parmetros procedimentales que permitan garantizar el derecho al debido
proceso de los usuarios y (ii) abstenerse de suspender arbitrariamente el
servicio a ciertos establecimientos usados por personas especialmente
protegidas por la Constitucin.

As las cosas, en relacin con el procedimiento para dar aplicacin a dicha


medida, la Corte ha sealado que ste se encuentra establecido
fundamentalmente en los artculos 130, 140, 152, 153 y 154 de Ley 142 de
1994, 18 y 19 de Ley 689 de 2001 y 44 y 47 del Cdigo Contencioso
Administrativo, disposiciones conforme a las cuales, la jurisprudencia ha
derivado las siguientes reglas67.

65 Ibdem.
66 Artculo 1 de la Constitucin Poltica.
67 Al respecto, puede consultarse, entre otras, las sentencias T-881 de 2002, Magistrado Ponente: Eduardo
Montealegre Lynett.

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Sentencia SU-1010 de 2008

a) Las deudas derivadas de la prestacin de los servicios pblicos pueden


cobrarse ejecutivamente, ante la jurisdiccin ordinaria, o mediante la
jurisdiccin coactiva si la prestadora es una empresa industrial y comercial
del Estado. La factura expedida por la empresa, debidamente firmada por el
representante legal de la entidad, prestar mrito ejecutivo.

b) Si el usuario o suscriptor incumple con su obligacin de pagar


oportunamente la facturacin emitida por la empresa, la prestadora est en la
obligacin de suspender la prestacin del servicio.

c) Los suscriptores o usuarios de los servicios pblicos domiciliarios pueden


presentar peticiones, quejas, reclamos y recursos, que tienen que ser debida
y oportunamente atendidos; para el efecto, las empresas prestadoras deben
mantener una oficina encargada de tramitarlas.

d) Contra el acto de suspensin del servicio que realice la empresa proceden


los recursos de reposicin, por tratarse de un acto administrativo, que se
interpone ante el gerente o representante legal de la empresa, y de apelacin,
que se ejerce ante la Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios;
stos deben tramitarse de conformidad con las normas vigentes sobre el
derecho de peticin.

De esta manera, la suspensin del servicio por parte de una empresa prestadora
de servicios pblicos domiciliarios exige la observancia estricta de las
anteriores reglas, las cuales se derivan de la aplicacin prctica de las
prerrogativas a las que tienen derecho los usuarios de estos servicios y
constituyen una garanta de su derecho al debido proceso.

Finalmente, y con relacin a la prohibicin de suspensin abrupta e


indiscriminada del servicio a ciertas instituciones en las que se encuentran
sujetos especialmente protegidos por la Constitucin, esta Corporacin sostuvo
que ello se debe a que, en estos casos, del normal funcionamiento de los
servicios pblicos domiciliarios depende la posibilidad del goce efectivo de los
derechos fundamentales de las personas que integran la comunidad, lo que
sucede, por ejemplo, en relacin con las entidades pblicas educativas, los
establecimientos penitenciarios o los centros hospitalarios68.

7.2. Ahora bien, tal y como se seal y de acuerdo a lo establecido en el


artculo 141 de la Ley 142 de 1994, frente al incumplimiento del contrato de
servicios pblicos, las empresas estn habilitadas para proceder a la resolucin
del contrato y al corte del servicio.

En efecto, el artculo en mencin establece:

68 Ibdem.

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Sentencia SU-1010 de 2008

ARTCULO 141. INCUMPLIMIENTO, TERMINACIN Y CORTE DEL


SERVICIO. El incumplimiento del contrato por un perodo de varios meses, o
en forma repetida, o en materias que afecten gravemente a la empresa o a
terceros, permite a la empresa tener por resuelto el contrato y proceder al
corte del servicio. En las condiciones uniformes se precisarn las causales de
incumplimiento que dan lugar a tener por resuelto el contrato.

Se presume que el atraso en el pago de tres facturas de servicios y la


reincidencia en una causal de suspensin dentro de un perodo de dos aos, es
materia que afecta gravemente a la empresa, que permite resolver el contrato
y proceder al corte del servicio.

La entidad prestadora podr proceder igualmente al corte en el caso de


acometidas fraudulentas. Adicionalmente, y tratndose del servicio de energa
elctrica, se entender que para efectos penales, la energa elctrica es un
bien mueble; en consecuencia, la obtencin del servicio mediante acometida
fraudulenta constituir para todos los efectos, un hurto.

La demolicin del inmueble en el cual se prestaba el servicio permite a la


empresa dar por terminado el contrato, sin perjuicio de sus derechos.

As, el artculo en mencin permite a la empresa prestadora de servicios


pblicos domiciliarios tener por resuelto el contrato y proceder al corte del
servicio cuando quiera que se presente incumplimiento del contrato de
condiciones uniformes: (i) por un perodo de varios meses, (ii) en forma
repetida; (iii) en materias que afecten gravemente a la empresa o a terceros o
(iv) cuando se presenten casos de acometidas fraudulentas. La norma prev,
adems, dos casos en los que se presume que se produce una afectacin grave
de la empresa, las cuales se relacionan con (i) la mora en el pago de tres
facturas de servicios y (ii) la reincidencia en una causal de suspensin dentro de
un perodo de dos aos, presunciones que son de carcter legal y por tanto
desvirtuables. As las cosas, es la propia ley la que se encarga de establecer los
eventos en los cuales procede la terminacin del contrato y el corte del servicio.

Esta Corporacin, al efectuar el juicio de constitucionalidad de la disposicin


referida, sostuvo que la posibilidad de dar por terminado el contrato y efectuar
el corte del servicio pblico, encuentra fundamento en la naturaleza misma de
la relacin jurdica existente entre la empresa de servicios pblicos y los
usuarios, ya que el hecho de que sta sea en parte contractual implica que el
suscriptor o usuario debe cumplir las obligaciones pactadas y no puede alterar
inconsulta y unilateralmente las condiciones de la prestacin del servicio, dado
el carcter bilateral que tiene esta clase de contratos. De ah que el
incumplimiento de las obligaciones pactadas por un perodo de varios meses o

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Sentencia SU-1010 de 2008

en forma repetida o en materias que afecten gravemente a la empresa o a


terceros, pueda acarrear, adems de la imposicin de las sanciones previstas
en la ley, la terminacin del contrato por parte de la empresa, pues siendo ste
contrato de carcter oneroso, es obligacin de todos los usuarios contribuir al
sostenimiento de los gastos e inversiones del Estado dentro de conceptos de
justicia y equidad.69

Sin embargo, bajo la consideracin de que la prestacin de servicios pblicos


domiciliarios involucra derechos de rango fundamental, esta Corporacin
precis que una decisin en tal sentido no puede adoptarse por la empresa de
manera automtica, es decir, una vez se den las circunstancias objetivas que
establece la norma, sino que ella debe estar precedida de un debido proceso que
le permita al usuario conocer sobre la eventual adopcin de estas medidas,
ejercer su derecho a la defensa y controvertir la decisin.

7.3. Respecto de la facultad de efectuar el cobro por el servicio consumido y no


facturado, el artculo 146 de la Ley 142 de 1994, el cual consagra el derecho
que le asiste tanto a la empresa como al suscriptor o usuario a obtener la
medicin de los consumos mediante los instrumentos de medida que la tcnica
haya hecho disponibles, establece:

ARTCULO 146. LA MEDICIN DEL CONSUMO, Y EL PRECIO EN EL


CONTRATO. La empresa y el suscriptor o usuario tienen derecho a que los
consumos se midan; a que se empleen para ello los instrumentos de medida
que la tcnica haya hecho disponibles; y a que el consumo sea el elemento
principal del precio que se cobre al suscriptor o usuario.

Cuando, sin accin u omisin de las partes, durante un perodo no sea


posible medir razonablemente con instrumentos los consumos, su valor
podr establecerse, segn dispongan los contratos uniformes, con base en
consumos promedios de otros perodos del mismo suscriptor o usuario, o
con base en los consumos promedios de suscriptores o usuarios que estn en
circunstancias similares, o con base en aforos individuales.

() La falta de medicin del consumo, por accin u omisin de la empresa, le


har perder el derecho a recibir el precio. La que tenga lugar por accin u
omisin del suscriptor o usuario, justificar la suspensin del servicio o la
terminacin del contrato, sin perjuicio de que la empresa determine el
consumo en las formas a las que se refiere el inciso anterior. Se entender
igualmente, que es omisin de la empresa la no colocacin de medidores en
un perodo superior a seis meses despus de la conexin del suscriptor o
usuario. () (Negrilla fuera de texto)

69 Sentencia C-389 de 2002, Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.

59
Sentencia SU-1010 de 2008

De la norma en mencin se desprende que dicha facultad puede ser ejercida por
las empresas de servicios pblicos domiciliarios, en aquellos eventos en los que
efectivamente se prest y consumi el servicio pblico respectivo, pero no fue
posible realizar la medicin con los instrumentos tcnicos establecidos para el
efecto y siempre que esta situacin no sea imputable a una accin u omisin de
la empresa, ya que en este ltimo supuesto, la prestadora perder el derecho a
recibir el precio correspondiente.

Adicionalmente, el referido artculo dispone que en estos casos el valor a pagar


podr establecerse con base en (i) los consumos promedios de otros perodos
registrados por el mismo suscriptor o usuario; (ii) los consumos promedios de
otros suscriptores o usuarios que estn en circunstancias similares o,
finalmente, (iii) en aforos individuales, segn lo dispuesto en el contrato de
condiciones uniformes.

La norma consagra los supuestos en los que la empresa puede hacer uso de esta
facultad de la siguiente manera:

(i) Cuando la falta de medicin no sea imputable al suscriptor o al usuario del


servicio ni tampoco a la empresa prestadora del mismo.

(ii) En el caso del servicio pblico de acueducto, cuando se acredite la


existencia de fugas imperceptibles de agua en el interior del inmueble.

(iii) Cuando la falta de medicin tenga lugar por accin u omisin del
suscriptor o usuario, caso en el cual, adems de que la empresa puede
determinar el consumo en las formas sealadas anteriormente, habr
justificacin para proceder a la suspensin del servicio o a la terminacin del
contrato.

De igual forma, el artculo 149 de la Ley 142 de 1994 le impone a las empresas
de servicios pblicos domiciliarios la obligacin de investigar las desviaciones
significativas frente a consumos anteriores, caso en el cual, mientras se evala
la causa, la factura se elaborar mediante los mecanismos atrs sealados. Una
vez se establezca la causa de la desviacin las diferencias frente a los valores
que se cobraron se abonarn o cargarn al suscriptor o usuario, segn sea el
caso. Pasados cinco meses a partir de la entrega de la factura respectiva, las
empresas no podrn cobrar bienes o servicios que no facturaron por error,
omisin, o investigacin de desviaciones significativas frente a consumos
anteriores, excepto en los casos en los cuales se compruebe dolo del suscriptor
o usuario70.

70 Artculo 150 de la Ley 142 de 1994.

60
Sentencia SU-1010 de 2008

As las cosas, es claro que el legislador facult a las empresas de servicios


pblicos domiciliarios para recuperar el costo del servicio que ha prestado pero
respecto del cual no ha recibido el pago, potestad que encuentra fundamento
precisamente en la onerosidad que le es propia a este negocio jurdico, la cual,
como se seal con anterioridad, implica que el hecho de la prestacin genere
para la empresa el derecho de recibir el pago del servicio prestado.
Adicionalmente, sta se deriva del deber que tienen todos los usuarios de no
trasladar a los dems el costo o carga individual por el acceso y disfrute del
servicio y de la obligacin contractual que stos adquieren al momento de
suscribir el contrato de condiciones uniformes.

7.4. Finalmente, el artculo 96 de la Ley 142 de 1994 prev que las empresas de
servicios pblicos domiciliarios pueden efectuar el cobro de intereses de mora
sobre los saldos que los usuarios no cancelen oportunamente, lo cual resulta ser
una consecuencia de la naturaleza contractual de la relacin jurdica existente
entre la empresa de servicios pblicos y el usuario. La expresin podr que
contiene la norma en cita, implica que la empresa prestataria de servicio
pblico domiciliario puede decidir si efectivamente realiza el cobro de dichos
intereses o si exonera a los usuarios del pago de los mismos.

Sobre el tema, la Corte Constitucional, al efectuar el juicio de


constitucionalidad de la disposicin en cita, consider que, como quiera que la
relacin jurdica resultante de la prestacin de un servicio pblico domiciliario
es, en parte, de naturaleza contractual, ello implica que, tal y como lo establece
la propia Ley 142 de 1994, dicha relacin se rija -en lo pertinente- por las
normas del derecho privado. Dicha circunstancia y el hecho de que se trate de
un vnculo jurdico de carcter oneroso, justifican el cobro de los intereses
moratorios sobre los valores que el usuario no satisfaga de manera oportuna,
toda vez que se trata de la responsabilidad patrimonial que le incumbe al
suscriptor o usuario como consecuencia del incumplimiento de la obligacin de
pagar una suma de dinero.

No obstante lo anterior, la Corte sostuvo que, teniendo en cuenta que los


servicios pblicos domiciliarios son inherentes a la finalidad social del Estado y
ello se materializa de manera palpable en aquellos eventos en los que el
servicio se recibe en los inmuebles de carcter residencial, la tasa de los
intereses moratorios debe ser la menos gravosa posible, razn por la cual esta
Corporacin condicion la exequibilidad de la norma en mencin, al entendido
de que la tasa de inters aplicable en estos casos es la prevista en el Cdigo
Civil y no la establecida en el Estatuto Comercial.

En ese orden de ideas, esta Corporacin sostuvo:

Sin embargo, como es en los inmuebles de carcter residencial donde la


prestacin de los servicios pblicos domiciliarios debe cumplir plenamente su
funcin social, la sancin que en este caso se imponga a los usuarios ante el

61
Sentencia SU-1010 de 2008

incumplimiento de su obligacin de pagar por el servicio recibido debe ser lo


menos gravosa posible, por lo que a ellos no se le debe aplicar para estos
efectos la tasa de inters moratorio del Cdigo de Comercio sino la del
Cdigo Civil, cuyas disposiciones al fin y al cabo tambin rigen el contrato de
servicios pblicos (Ley 142 de 1994 art. 132). De esta forma, no slo se
favorece a los usuarios al permitirles que solucionen ms prontamente dicha
obligacin, sino tambin a las empresas prestadoras que se beneficiaran con
la eventual reduccin de su cartera morosa.

Por lo anterior, la Corte declarar la exequibilidad del inciso segundo del


artculo 96 de la Ley 142 de 1994 bajo el entendido que tratndose de
usuarios o suscriptores de inmuebles residenciales la tasa de inters
moratorio aplicable es la prevista en el Cdigo Civil.71 (Se resalta)

Finalmente, en la misma providencia esta Corporacin declar la


inexequibilidad del aparte del artculo 96, que prevea la capitalizacin de los
intereses moratorios, como quiera que se vera seriamente alterado el equilibrio
que debe guardar la relacin contractual originada en la prestacin de un
servicio pblico domiciliario, en desmedro de los derechos del usuario, quien
estara expuesto potencialmente a perder su vivienda o a quedar privado de la
prestacin de los servicios pblicos domiciliarios, lo cual comporta una
violacin de su derecho constitucional a una vivienda digna.

As las cosas, la decisin adoptada por la Corte Constitucional en esa


oportunidad muestra que la naturaleza especial de la relacin que se genera en
virtud del contrato de servicios pblicos domiciliarios, conlleva consecuencias
especficas en cuanto a las potestades y facultades con las que cuentan las
empresas de servicios pblicos domiciliarios y con relacin a la forma en que
se deben aplicar las figuras propias del derecho privado en este mbito.

7.5. Ahora bien, la pregunta que surge es si dentro de dichas facultades se


encuentra la de imponer sanciones pecuniarias a los usuarios frente al
incumplimiento del contrato de condiciones uniformes.

Sobre el tema, la jurisprudencia constitucional no ha sostenido una posicin


uniforme, tal como se pasa a exponer.

8.Jurisprudencia constitucional respecto de la potestad de las empresas de


servicios pblicos domiciliarios para imponer sanciones de tipo
pecuniario.

Como se estableci en el acpite anterior, las empresas prestadoras de servicios


pblicos domiciliarios, en cuanto se relaciona con la prestacin del servicio,
actan como verdaderas autoridades y, en tal sentido, tienen una serie de
prerrogativas que resultan indispensables para garantizar el funcionamiento de
la actividad, y la eficacia, eficiencia y continuidad del servicio respectivo.
71 Sentencia C-389 de 2002, Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.

62
Sentencia SU-1010 de 2008

Bajo la anterior consideracin, las distintas Salas de Revisin de la Corte


Constitucional han tenido la oportunidad de pronunciarse respecto de dichas
prerrogativas, reconociendo de manera unvoca la existencia de un conjunto de
potestades especiales, en razn del carcter de autoridad que estas empresas
adquieren en cuanto hace a la prestacin del servicio.

Sin embargo, frente a la determinacin de si dentro de ese conjunto de


prerrogativas se encuentra la facultad de imponer sanciones de carcter
pecuniario, la posicin de las distintas Salas de Revisin ha sido variable.

8.1. En una primera fase, las distintas Salas de Revisin hicieron un


reconocimiento implcito de la facultad que tienen las empresas prestadoras de
servicios pblicos domiciliarios para imponer sanciones pecuniarias, en
aquellos eventos en los que se haga uso no autorizado o fraudulento del servicio
por parte del usuario o suscriptor.

Es importante precisar que en esta primera fase la Corte no se pronunci de


forma directa y concreta sobre el tema de las facultades sancionatorias de las
empresas de servicios pblicos domiciliarios. En realidad, el reconocimiento de
dicha facultad por cuenta de la jurisprudencia, deviene del anlisis que en sede
de Revisin se efectuaba en torno a si las empresas de servicios pblicos
respetaban el debido proceso en las actuaciones administrativas mediante las
cuales se imponan sanciones pecuniarias. En cuanto en dichos
pronunciamientos la Corte no cuestionaba el fundamento mismo de la
competencia para sancionar, pude inferirse que se gener una especie de
reconocimiento implcito de tal competencia.

En efecto, en una de las primeras decisiones que sobre el tema adopt esta
Corporacin, esto es, en Sentencia T-457 de 199472, la Sala Primera de Revisin
de la Corte Constitucional se pronunci respecto del caso de una usuaria del
servicio prestado a travs de la Empresa Antioquea de Energa S.A., a quien se
le impuso una sancin pecuniaria por un supuesto fraude en el medidor de su
vivienda. La accionante, estimaba vulnerados sus derechos fundamentales a la
igualdad y al debido proceso, toda vez que ella no haba manipulado dicho
medidor y, en consecuencia, no haba lugar a la imposicin de sancin alguna.

En esa oportunidad, la Sala en mencin aval el contenido normativo del


Decreto 1303 de 1989, por el cual se establece el rgimen de suspensiones del
servicio elctrico y las sanciones pecuniarias por el uso no autorizado o
fraudulento del mismo, refirindose especficamente a los artculos 22 y 26
del referido decreto, al tenor de los cuales las empresas de servicios pblicos
domiciliarios estn obligadas a comunicar a los particulares afectados el inicio
de la actuacin y, adicionalmente, a expedir una reglamentacin para efectos
del ejercicio de la facultad sancionadora a ellas atribuida.

72 Magistrado Ponente: Jorge Arango Meja.

63
Sentencia SU-1010 de 2008

As las cosas, la Sala analiz el contenido del reglamento expedido por la


Empresa Antioquea de Energa S.A en materia de sanciones pecuniarias, a
partir de lo cual concluy que en este caso efectivamente se haba presentado
una vulneracin del derecho al debido proceso de la actora, toda vez que dicho
reglamento no fij pautas para la comunicacin a los interesados de la
existencia de las actuaciones de oficio y del objeto de las mismas, lo que
comportaba un obstculo para el ejercicio del derecho de defensa de los
afectados. La Sala resalt adems el hecho de que la empresa accionada haba
presumido el dolo o fraude como fundamento para adoptar la decisin
sancionatoria.

Sin embargo, se estim que dichas irregularidades no hacan procedente la


accin de tutela como mecanismo de proteccin del derecho fundamental al
debido proceso de la accionante, toda vez que sta tena a su alcance los medios
ordinarios de defensa ante la jurisdiccin de lo contencioso administrativo,
especficamente la accin de nulidad y restablecimiento del derecho, para
controvertir la decisin mediante la cual se le impuso la sancin. No obstante,
consider que el mecanismo de amparo constitucional s resultaba procedente
para proteger de manera transitoria los derechos al buen nombre y a la honra de
la demandante.

En dicha providencia la Sala Primera de Revisin aval de manera implcita la


posibilidad de que las empresas de servicios pblicos domiciliarios impongan
sanciones pecuniarias a los usuarios, cuando se presentan eventos de uso no
autorizado o fraudulento del servicio; en efecto, ese reconocimiento dio lugar a
que en esa oportunidad la Sala pasara a efectuar el anlisis del desarrollo
mismo del trmite sancionatorio, para verificar si se haba dado la alegada
vulneracin de los derechos fundamentales de la peticionaria en el caso
concreto.

Posteriormente, en la Sentencia T-1204 de 2001 73, la Sala Novena de Revisin


se pronunci respecto de ocho demandas de tutela interpuestas contra la
empresa comercializadora y distribuidora de energa Codensa S.A. E.S.P., en
las que se alegaba la vulneracin del derecho fundamental al debido proceso de
los demandantes, en tanto la empresa accionada les haba impuesto el pago de
unas sumas pecuniarias por las supuestas irregularidades encontradas en las
instalaciones elctricas de los inmuebles de los peticionarios.

En esa oportunidad, esa Sala de Revisin nuevamente efectu un


reconocimiento implcito de la facultad de las empresas de servicios pblicos
para imponer sanciones pecuniarias, para lo cual reiter los argumentos
expuestos en la Sentencia T-457 de 1994 y, adicionalmente, estableci que el
otro medio de defensa judicial con el que cuentan los demandantes, esto es, la
accin de nulidad y restablecimiento del derecho para controvertir la decisin
mediante la cual se impone la sancin, permite al interesado solicitar la
73 Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.

64
Sentencia SU-1010 de 2008

suspensin provisional de dicho acto administrativo incluso de manera previa a


la presentacin de la demanda, como una medida cautelar aplicable a casos
excepcionales de vulneracin manifiesta de normas superiores. As las cosas,
frente a la existencia de otro medio de defensa judicial, la procedencia de la
accin estara ligada necesariamente a la existencia de un perjuicio de carcter
irremediable, caso en el cual la proteccin tendra un carcter transitorio, en los
trminos del artculo 86 de la Constitucin Poltica.

Respecto de la regulacin del ejercicio de la facultad sancionatoria de las


empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios, se seal:

Las sanciones que impone Codensa son de carcter pecuniario por remisin
a las clusulas contenidas en el contrato de condiciones uniformes para la
prestacin del servicio de energa elctrica, elaboradas con fundamento en lo
dispuesto sobre la materia en la Resolucin 108 de 1997 expedida por la
Comisin Reguladora de Energa y Gas.

Sobre esta base, la Sala Novena de Revisin consider que las sanciones
pecuniarias que pueden imponer las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, son una consecuencia del incumplimiento del contrato de
condiciones uniformes y, bajo tal perspectiva, no se requiere de la intervencin
del juez penal para efectos de establecer la ocurrencia de un delito como
instancia previa a la imposicin de la sancin, tal y como lo planteaba la
Defensora del Pueblo en su intervencin en el proceso, ya que a la autoridad
judicial no le corresponde dilucidar si el cliente, suscriptor o usuario incumpli
o no el contrato y se hace acreedor a la sancin, sino determinar quin fue el
responsable de una conducta punible y si ese hecho acarrea la imposicin de
una pena.

Bajo la misma lnea interpretativa, la Sala Cuarta de Revisin de la Corte


Constitucional, en Sentencia T-270 de 200474, se pronunci respecto de
diecisiete demandas de tutela presentadas por usuarios de la empresa prestadora
de servicios pblicos, ELECTRICARIBE S.A. E.S.P., quienes consideraban
que dicha entidad haba vulnerado su derecho de defensa como consecuencia
del cobro de sumas de dinero por concepto del presunto incumplimiento del
contrato de condiciones uniformes, al haberse establecido por parte de la
empresa en mencin la existencia de irregularidades en las instalaciones
elctricas y equipos de medicin de algunos de los inmuebles de los actores.

En ese fallo, respecto de la posibilidad de controvertir las decisiones adoptadas


por las empresas de servicios pblicos domiciliarios mediante la accin de
tutela y luego de efectuar un amplio recuento de la jurisprudencia
constitucional sobre el tema, la Sala Cuarta de Revisin concluy:

74 Magistrado Ponente: Jaime Crdoba Trivio.

65
Sentencia SU-1010 de 2008

Por ello puede afirmarse que: i) por regla general la accin no resulta
procedente para entrar a dirimir controversias entre el usuario y/o suscriptor
y, las empresas de servicios pblicos domiciliarios, por cuanto para ese fin
existen otros medios de defensa judicial, ii) que excepcionalmente y solamente
atendiendo las circunstancias de cada caso resulta procedente la accin de
tutela para proteger derechos fundamentales del administrado como por
ejemplo la honra, el derecho de peticin, el derecho a la igualdad, el derecho
de defensa y el debido proceso cuando stos han sido amenazados o
vulnerados por las empresas de servicios pblicos domiciliarios.

Fijada la regla general en materia de procedencia de la accin de tutela en estos


casos, en la providencia en cita se reiter que el derecho al debido proceso
administrativo resulta necesario como una garanta de contrapeso al poder del
Estado, en las actuaciones que desarrollen las autoridades pblicas en contra de
los particulares, razn por la cual su efectividad implica no solamente su
reconocimiento formal, sino la observancia material que de ellas debe tener
toda decisin adoptada por la Administracin. En este sentido, se concluy que
las actuaciones de las empresas de servicios pblicos domiciliarios y, en
particular, los procedimientos sancionatorios que se adelanten en contra de
usuarios del servicio, deben ser respetuosos de los mandatos, principios y
valores establecidos en la Carta Poltica, de tal manera que cuando estas
pautas fundamentales son inobservadas se est frente a un ejercicio arbitrario
del poder que hace que la indefensin tenga transcendencia constitucional,
puesto que es de tal intensidad que lesiona el ncleo o contenido esencial de la
garanta al debido proceso administrativo tornando en absoluto el poder de las
autoridades, con lo cual se desconocen los lmites impuestos por el orden
jurdico y especialmente por el marco constitucional.

Bajo las anteriores consideraciones, la Sala de Revisin efectu un anlisis del


procedimiento administrativo establecido por ELECTRICARIBE S.A. E.S.P.
para la imposicin de sanciones de tipo pecuniario, como consecuencia de las
irregularidades o anomalas que se encuentren en las instalaciones elctricas de
los inmuebles de los usuarios, a partir del cual concluy que la empresa
accionada vulner el derecho al debido proceso de quince (15) de los
demandantes, como quiera que en estos casos no se les inform a los afectados
el inicio de la actuacin administrativa, ni se les garantiz un periodo
probatorio, ni la posibilidad real de controvertir el contenido tcnico del acta de
anomalas y, finalmente, en cuanto la empresa aplic una presuncin de dolo o
de culpa para efectos de establecer la responsabilidad del administrado, por las
irregularidades encontradas en las instalaciones elctricas de los inmuebles
objeto de revisin tcnica.

En este escenario, la Sala consider que si bien exista otro medio de defensa
judicial al cual podan acudir los accionantes, en los casos objeto de revisin
los actores haban sido sometidos a un estado de total indefensin desde el
inicio de la actuacin administrativa, toda vez que la entidad no respet las

66
Sentencia SU-1010 de 2008

garantas fundamentales de los usuarios e impuso una sancin pecuniaria que,


de no ser cancelada, llevara a la suspensin del servicio de energa, razn por
la que en los asuntos sub examine la accin de tutela resultaba procedente para
proteger de manera inmediata los derechos al debido proceso, a no ser sometido
a indefensin y a la presuncin de inocencia de los afectados. Bajo la anterior
consideracin, la Sala orden a la empresa de servicios pblicos demandada
que reiniciara el procedimiento sancionatorio, observando para el efecto los
mandatos que impone la Carta Poltica y garantizando materialmente los
derechos a los que se hizo referencia.

Como se puede advertir, si bien en esta oportunidad la Sala Cuarta de Revisin


de la Corte Constitucional no se ocup en concreto respecto de la naturaleza de
la facultad de las empresas de servicios pblicos domiciliarios para imponer
sanciones de tipo pecuniario, s aval el ejercicio de dicha potestad, bajo la
consideracin de que cuando sea posible establecer que un usuario ha incurrido
en algn tipo de alteracin de los equipos de medida o de las instalaciones
elctricas de los inmuebles que se benefician con ese servicio, [ste] no solo
debe ser sancionado conforme lo disponga la ley penal sino obligado a
responder pecuniariamente por los perjuicios que se hayan causado con esa
actuacin a la empresa de servicios pblicos domiciliarios, por ejemplo por
concepto de recuperacin de energa, pero inclusive esas sanciones
pecuniarias deben ser impuestas respetando el debido proceso, el derecho de
defensa, la presuncin de inocencia y dems garantas que consagra la
Constitucin. Las autoridades, entonces, no estn facultadas para sancionar
por sancionar puesto que uno de los lmites de su actuar frente a los
administrados es el respeto de los derechos constitucionales.

Esta lnea de interpretacin fue reiterada, entre otras, en las Sentencias T-975 de
200475 -proferida por la Sala Primera de Revisin- y por la Sala Tercera de
Revisin en las sentencias T-1214 de 200476 y T-455 de 200577.

8.2. Con posterioridad a estos pronunciamientos y en lo que podra


denominarse una segunda fase, la Sala Sptima de Revisin de la Corte
Constitucional, en la Sentencia T-720 de 200578 plante una posicin distinta a
la inicialmente aceptada por las distintas Salas de Revisin, ya que sostuvo que
las empresas de servicios pblicos domiciliarios no tienen competencia para
imponer sanciones de tipo pecuniario a los usuarios.

En esa oportunidad, el pronunciamiento se relacion con el caso de dos


usuarios de la empresa ELECTRICARIBE S.A. E.S.P., quienes estimaban
conculcado su derecho fundamental al debido proceso, como consecuencia del
procedimiento administrativo adelantado por la entidad accionada y que
termin, segn alegaban los actores, con la imposicin de sanciones pecuniarias

75 Magistrado Ponente: Jaime Araujo Rentera.


76 Magistrado Ponente: Manuel Jos Cepeda Espinosa.
77 Magistrado Ponente: Manuel Jos Cepeda Espinosa.
78 Magistrado Ponente: Humberto Antonio Sierra Porto.

67
Sentencia SU-1010 de 2008

por anomalas o irregularidades encontradas en las instalaciones elctricas de


sus inmuebles.

En la providencia en mencin, la Sala sostuvo, en primer lugar, que frente a las


actuaciones u omisiones de las empresas de servicios pblicos domiciliarios los
usuarios cuentan con otro medio de defensa judicial, especficamente, las
acciones ante la jurisdiccin de lo contencioso administrativo, tal como lo ha
precisado la jurisprudencia constitucional sobre el tema, por lo que la
posibilidad de solicitar la suspensin provisional del acto administrativo
controvertido en el curso de la accin de nulidad y restablecimiento del
derecho, desplaza a la accin de tutela como mecanismo protector de los
derechos fundamentales de los usuarios.

Sin embargo, especficamente con relacin a las decisiones mediante las cuales
las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios imponen sanciones
pecuniarias, la Sala de Revisin consider que stas no tienen el carcter de
actos administrativos, puesto que no estn contempladas de manera expresa en
la Ley 142 de 1994 ni tampoco en la Ley 143 del mismo ao.

En ese sentido, la Sala de Revisin nmero Siete sostuvo:

Si se examina la jurisprudencia constitucional en la materia es posible


sealar que en la primera oportunidad que la Corte Constitucional debi
resolver la procedencia de la accin de tutela frente a actuaciones
sancionatorias adelantadas por las empresas pblicos domiciliarios afirm
que tales actuaciones correspondan a actos administrativos79, empero cabe
destacar que en la fecha en que se produjo la mencionada decisin el ao de
1994- estaba vigente el Decreto 1303 de 1989, normas que estableca el
rgimen de suspensiones del servicio elctrico y las sanciones pecuniarias por
el uso no autorizado o fraudulento del mismo, cuyo artculo 22 prevea
expresamente que las decisiones proferidas por las entidades prestadoras de
dicho servicio eran actos administrativos. Empero, tal decreto carece
actualmente de fuerza ejecutoria80 porque las expidi el Presidente de la
Repblica en ejercicio de las facultades legales que le conferan las leyes
1134 de 1928, 109 de 1936 y 126 de 1938, las cuales fueron derogadas
expresamente por el artculo 97 de la Ley 143 de 199481.

Desde este punto de vista, no resulta por lo tanto acertado citar el precedente
sentado en la sentencia T-457 de 1994 para justificar la improcedencia de la
accin de tutela frente a las decisiones sancionatorias adoptadas por las
empresas de servicios pblicos domiciliarios, porque los supuestos

79 Se trata de la sentencia T-437 de 1994, decisin en la cual la Corte otorg el amparo transitorio para
proteger el derecho al buen nombre y a la honra de la actora quien haba interpuesto accin de tutela contra la
sancin pecuniaria impuesta por una empresa prestadora del servicio de energa elctrica.
80 De conformidad con el artculo 66 del Cdigo Contencioso Administrativo una de las causales de prdida
de fuerza ejecutoria de los actos administrativos es la desaparicin de sus fundamentos de hecho o de derecho.
81 Salvo los artculos 17 y 18 de la Ley 126 de 1938 preceptos que en todo caso no tienen ninguna relacin
con la materia reglamentada en el Decreto 1303 de 1989.

68
Sentencia SU-1010 de 2008

normativos que dieron lugar a dicha decisin han variado sustancialmente a


raz de la expedicin de las leyes 142 y 143 de 1994.

Ahora bien, podra argumentarse que si bien no hay disposicin legal que les
confiera el carcter de actos administrativos a estas decisiones
sancionatorias existe una disposicin de carcter reglamentario (la
Resolucin 108 de 1997 de la CREG) que indirectamente se los otorga y que,
adems, de una interpretacin sistemtica de la Ley 142 de 1994 se desprende
que las empresas de servicios pblicos domiciliarios cuentan con potestad
sancionatoria sobre los usuarios y las decisiones proferidas en ejercicio de tal
potestad son materialmente actos administrativos, sujetos al agotamiento de
la va gubernativa e impugnables ante la jurisdiccin de lo contencioso
administrativo. No obstante, una argumentacin en tal sentido exige detenerse
sobre los fundamentos sustanciales de la potestad sancionatoria de las
empresas prestadoras, aspecto que ser tratado en un acpite posterior de la
presente decisin.

As las cosas, la Sala concluy que la procedencia de la accin de tutela en


stos casos se encuentra estrechamente ligada a la determinacin de un aspecto
sustancial, cual es si las empresas prestadoras de servicios pblicos
domiciliarios pueden imponer sanciones pecuniarias a los usuarios por
incumplimiento de las condiciones pactadas en el contrato de condiciones
uniformes.

Para dar solucin a este interrogante, la Sala Sptima de Revisin seal que,
desde el punto de vista teleolgico y con fundamento en lo establecido en el
artculo 365 de la Carta, las actividades catalogadas como servicios pblicos
implican el ejercicio de funcin estatal, lo que justifica que los sujetos que
desarrollan estas actividades, bajo determinados supuestos y aun cuando se
trate de un particular, puedan imponer su voluntad de manera unilateral, lo cual
se materializa a travs de la expedicin de actos administrativos.

Sin embargo, teniendo en cuenta que de acuerdo con el artculo 210 de la Carta
los particulares pueden cumplir funciones administrativas en las condiciones
que seale la ley, la Sala de Revisin sostuvo que el ejercicio de prerrogativas
pblicas por parte de particulares, especficamente con relacin a la posibilidad
de expedir actos administrativos, debe ser necesariamente prevista de manera
expresa por el legislador.

Partiendo de esta consideracin, la Sala concluy que en materia de imposicin


de sanciones pecuniarias a los usuarios, dicha prerrogativa no fue establecida en
la ley y, por tanto, las empresas de servicios pblicos domiciliarios carecen de
tal facultad. En efecto, la Sala Sptima de Revisin expuso dicha conclusin en
los siguientes trminos:

69
Sentencia SU-1010 de 2008

Ahora bien, en lo que respecta a la prerrogativa pblica de imponer


sanciones pecuniarias a los usuarios, cabe sealar que dicha prerrogativa
carece de asidero expreso en la Ley 142 de 1994. En efecto, si bien el artculo
140 de la citada ley establece que es causal de suspensin del contrato de
prestacin de servicios pblicos domiciliarios el fraude a las acometidas,
medidores o lneas, y el artculo 142 contempla que para restablecer el
servicio suspendido el usuario debe satisfacer las dems sanciones previstas,
de los anteriores preceptos no se desprende la prerrogativa sancionatoria de
las mencionadas empresas, como tampoco del artculo 145 del mencionado
cuerpo normativo el cual se limita a autorizar tanto a la empresa como al
suscriptor o usuario a verificar el estado de los instrumentos que se utilicen
para medir el consumo; y a adoptar precauciones eficaces para que no se
alteren.

Se podra argumentar que de una interpretacin sistemtica de los


anteriores preceptos se deriva tal potestad sancionatoria, pues si el artculo
140 autoriza a las empresas a suspender el servicios en caso de fraude de los
usuarios y el artculo 142 supedita el restablecimiento del servicio suspendido
al pago de las sanciones previstas todo de acuerdo a las condiciones
uniformes del contrato, implcitamente las empresas prestadoras cuentan con
la prerrogativa de imponer multas a los usuarios, siempre y cuando tales
sanciones estn previstas en el contrato de condiciones uniformes. No
obstante, esta Sala considera que una prerrogativa de esta naturaleza,
mxime cuando es ejercida por particulares, debe ser expresa al igual que
las restantes establecidas por la Ley 142 de 1994 y no puede derivarse
implcitamente de las restantes prerrogativas legales. (Se subraya)

En este sentido, para la Sala las distintas reglamentaciones que han sido
expedidas por diferentes autoridades administrativas, mediante las cuales se ha
establecido que las empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios s
tienen la potestad de imponer sanciones de carcter pecuniario, no pueden
constituir el fundamento normativo de tal facultad, ya que se trata de una
materia sometida a reserva legal y, en consecuencia, una atribucin en este
sentido slo puede ser otorgada por el legislador. En efecto, sobre el tema, la
Sala Sptima de Revisin seal:

Ahora bien, diversas entidades administrativas han expedido disposiciones de


carcter reglamentario que facultan a las empresas prestadoras de servicios
pblicos domiciliarios a imponer sanciones pecuniarias a los usuarios. Se
trata especficamente de la Resolucin 108 de 1997 expedida por la Comisin
reguladora de Energa y Gas, la cual en su artculo 54 consigna que el
contrato de prestaciones uniformes deber contemplar las conductas del
usuario que dan lugar a la imposicin de sanciones pecuniarias 82. No
82 La disposicin en comento prev: Artculo 54. Sanciones pecuniarias. En el contrato de condiciones
uniformes se deber establecer en forma clara y concreta, qu conductas del usuario se consideran
incumplimiento de ste y dan lugar a la imposicin de sanciones pecuniarias por parte de la empresa, la
manera de establecer su cuanta y el procedimiento para demostrar dichas conductas y para imponer la
sancin a que haya lugar. En todo caso, la actuacin deber adelantarse con la garanta plena del derecho
que tiene el usuario a la defensa, y con sujecin a lo que los Cdigos Civil y de Comercio y la Ley 142 de

70
Sentencia SU-1010 de 2008

obstante se trata de una norma de carcter reglamentario que en ningn


caso puede subsanar el evidente vaco legal que existe en la materia. En todo
caso cabe recordar que de conformidad con la jurisprudencia de esta
Corporacin este tipo de organismos slo cuentan con una potestad
reglamentaria residual y en ningn caso pueden regular materia que tiene
reserva de ley83.

Del anterior anlisis se desprende, por lo tanto, que las empresas


prestadoras de servicios pblicos domiciliarios carecen de la prerrogativa
pblica de imponer sanciones pecuniarias a los usuarios. Esa misma razn
permite colegir que las decisiones por medio de las adoptan decisiones de
esta naturaleza no constituyen actos administrativos, sino meras vas de
hecho, las cuales son impugnables por medio de la accin de tutela, mxime
cuando estn en juego los derechos fundamentales de los usuarios.
(Negrilla fuera de texto)

Adicionalmente, en el fallo en mencin la Sala delimit y diferenci los


conceptos de cobro de energa consumida dejada de facturar y sancin
pecuniaria, estableciendo que mientras el primero de ellos se relaciona con la
facultad de la empresa para cobrar los servicios no facturados en caso de
desviaciones significativas frente a consumos anteriores -posibilidad que se
encuentra expresamente establecida en los artculos 149 y 150 de la Ley 142 de
1994-, la imposicin de sanciones de carcter pecuniario es una potestad que,
como se estableci en la providencia en mencin, carece de fundamento en el
ordenamiento legal.

Bajo la anterior consideracin, la Sala Sptima de Revisin de la Corte


Constitucional neg el amparo solicitado en los casos objeto de revisin, por
considerar que, en primer lugar, en los asuntos sub exmine los cobros
1994, en su artculo 133, prevn en relacin con la carga de la prueba. // Pargrafo 1. Cuando no haya otra
forma de establecer el consumo realizado, se tomar el mayor valor de la carga o capacidad instalada o, en
su defecto, el nivel de carga promedio del estrato socioeconmico correspondiente al respectivo usuario, y se
multiplicar por el factor de utilizacin y por el tiempo de permanencia de la anomala, tomado en horas. De
no ser posible establecer con certeza la duracin de la misma, se tomar como rango 720 horas,
multiplicado por seis meses como mximo. El factor de utilizacin para cada caso y el nivel de carga
promedio del estrato socioeconmico, sern establecidos por la empresa. // Pargrafo 2. Adems de cobrar
el consumo realizado en esa forma, la empresa podr aplicar una sancin pecuniaria mxima equivalente al
consumo no autorizado, valorado a las tarifas vigentes al momento en que ste haya sido encontrado.
83 En la sentencia C-1162 de 2000 sostuvo esta Corporacin: En materia de servicios pblicos
domiciliarios, debe resaltarse que la regulacin -como funcin presidencial delegable en las referidas
comisiones- no es lo que ha considerado alguna parte de la doctrina, es decir, un instrumento normativo para
completar la ley, o para llenar los espacios que ella pueda haber dejado, y menos para sustituir al
legislador si ste nada ha dispuesto, pues ello significara la inaceptable y perniciosa posibilidad de entregar
al Presidente de la Repblica -y, ms grave todava, a sus delegatarios- atribuciones de legislador
extraordinario, distintas a las sealadas por la Carta, en manifiesta contravencin de los postulados del
Estado de Derecho, entre los cuales se encuentran el principio de separacin de funciones de los rganos del
Estado, el carcter singular del Presidente como nico funcionario que puede ser revestido de facultades
extraordinarias temporales y precisas y las estrictas condiciones exigidas por la Constitucin para que a l
sean transferidas transitoria y delimitadamente las funciones legislativas. En efecto, completar segn el
Diccionario de la Real Academia de la Lengua Espaola, significa aadir a una magnitud o cantidad las
partes que le faltan, y ello implica que regular ha sido errneamente asimilado a legislar, en tanto ha
sido entendida como la funcin de llenar los vacos legales. Y como se vio, el artculo 370 de la Constitucin
condiciona la potestad reguladora del Presidente a que ella se haga con sujecin a la ley, no para
completar la ley.

71
Sentencia SU-1010 de 2008

efectuados por la empresa accionada no correspondan al ejercicio de facultades


sancionatorias por parte de la entidad, sino simplemente al de energa elctrica
que los usuarios haban consumido y dejado de facturar, para lo cual la entidad
se encuentra expresamente facultada en los trminos de la Ley 142 de 1994 y,
en segundo trmino, porque durante el trmite del procedimiento administrativo
se haban respetado los derechos fundamentales de los accionantes.

8.3. Sin embargo, con posterioridad a este pronunciamiento y apartndose de


las consideraciones efectuadas en la Sentencia T-720 de 2005, viene a
configurarse una tercera etapa en la jurisprudencia, en la cual se avala
expresamente la facultad que tienen las empresas de servicios pblicos para
imponer sanciones de tipo pecuniario, a diferencia del reconocimiento implcito
que se haba producido en la primera fase.

La posicin adoptada por la Corte en esta etapa, se sustent en la decisin que


haba sido adoptada previamente por la Seccin Primera del Consejo de Estado
en Sentencia del ocho (08) de julio de dos mil uno (2001), en la que se aval la
vigencia del Decreto Reglamentario 1303 de 1989, el cual, a su vez, le
reconoca facultades sancionatorias a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios. En dicho fallo, el Consejo de Estado consider que dicho decreto
no entraba en contradiccin con la Ley 142 de 1994 y que, por contrario, se
complementaban.

En esa lnea, mediante Sentencia T-224 de 200684 la Sala Novena de Revisin


sostuvo que las empresas de servicios pblicos domiciliarios s tienen
competencia para imponer sanciones de tipo pecuniario.

En esa oportunidad, la Sala se pronunci respecto del caso de un usuario de la


empresa ELECTRICARIBE S.A. E.S.P., a quien la entidad le impuso una
sancin pecuniaria por existir una irregularidad en el medidor de energa de su
inmueble. Segn afirm el accionante, si bien la entidad le haba manifestado
que haba revocado la decisin sancionatoria y que adelantara de nuevo todo el
procedimiento administrativo en aras de garantizar su derecho al debido
proceso, lo cierto es que posteriormente, sin ningn tipo de comunicacin, la
empresa suspendi el servicio de energa del inmueble por existir una deuda
por sancin debidamente ejecutoriada.

Para dar solucin al asunto objeto de revisin, la Sala consider, en primer


lugar, que la Ley 142 de 1994 dot a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios de ciertas prerrogativas o facultades, particularmente, en relacin
con los actos de facturacin, suspensin y corte del servicio y con el
procedimiento para la imposicin de sanciones, las cuales resultan ser
privilegios indispensables para garantizar su funcionamiento y permitirles la
prestacin de dichos servicios de manera continua, eficiente y eficaz.

84 Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.

72
Sentencia SU-1010 de 2008

En segundo trmino y, especficamente, con relacin a la facultad de imponer


sanciones de tipo pecuniario, la Sala sostuvo:

3.3. Desde el Decreto 1303 de 198985 hasta la ley 142 de 1994 en su artculo
142, a las empresas de servicios pblicos domiciliarios se les ha reconocido
una facultad sancionadora. As, en materia de recuperacin de energa
frente a las anomalas o irregularidades que se presenten en los equipos
medidores, las empresas pueden hacer efectivo el cobro del consumo real
del servicio elctrico como imponer sanciones pecuniarias derivadas de
dicha situacin fraudulenta, siempre con respeto del debido proceso.

Ciertamente, el artculo 142 de la Ley 142 de 1994, confiere a las empresas


que prestan servicios pblicos la potestad de definir e incluir en las
condiciones uniformes de los contratos, las sanciones pecuniarias, es decir,
las multas, que son aplicables en razn del incumplimiento del contrato
imputable al usuario.

Dice la norma: Para restablecer el servicio, si la suspensin o el corte fueron


imputables al suscriptor o usuario, ste debe eliminar su causa, pagar todos
los gastos de reinstalacin o reconexin en los que la empresa incurra, y
satisfacer las dems sanciones previstas, todo de acuerdo a las condiciones
uniformes del contrato (subraya por fuera del texto).

Igualmente, la Comisin de Regulacin de Energa y Gas CREG, en el


artculo 5486 de la Resolucin N 108 de 1997, consagr la aplicacin de
sanciones por parte de las empresas prestadoras del servicio de electricidad,
similares a las contenidas en los artculos 20 y 22 del Decreto 1303 de 1989 y
142 y 152 de la Ley 142 de 1994 mencionados.

85 Consejo de Estado. Seccin Primera. Sentencia de julio 8 de 2001. M.P. Olga Ins Navarrete Barrero:
el Decreto 1303 de 1989 es una norma especial que, como tal es de preferente aplicacin frente a las
disposiciones de la ley 142 de 1994, que si bien estableci el rgimen de los servicios pblicos domiciliarios,
no se refiri a todos los aspectos relativos a esta prestacin quedando vigentes, por lo tanto, las
disposiciones de carcter especial y aquellas que no fueran contradictorias con sus mandatos. De
conformidad con lo anterior, las normas de la ley 142 de 1994 son complementarias de las contenidas en el
Decreto 1303 de 1989 que, en cuanto no sean contrarias, mantienen su vigencia y deben interpretarse
sistemticamente como un todo, por cuanto no existe contradiccin entre las prescripciones de la ley 142 de
1994 y las disposiciones del Decreto 1303 de 1989 explicadas para el caso concreto, las cuales contemplan
situaciones que fueron cobijadas por la primera y mantienen, por tanto, su vigencia y eficacia.
86 Resolucin N 108 de 1997 Por la cual se sealan criterios sobre la proteccin de los derechos de los
usuarios de los servicios pblicos domiciliarios de energa elctrica, y se dictan otras disposiciones.
Art. 54: En el contrato de condiciones uniformes se deber establecer en forma clara y concreta, qu
conductas del usuario se consideran incumplimiento de ste y dan lugar a la imposicin de sanciones
pecuniarias por parte de la empresa, la manera de establecer su cuanta y el procedimiento para demostrar
dichas conductas y para imponer la sancin a que haya lugar.

73
Sentencia SU-1010 de 2008

La anterior normatividad conduce a asegurar que las empresas de servicios


pblicos s estn facultadas para imponer sanciones pecuniarias a los
usuarios, en relacin con hechos constitutivos de incumplimiento
contractual, por parte de estos y por hechos que afecten gravemente la
prestacin del servicio y la ejecucin del contrato. No sobra recalcar que
esta facultad sancionadora est limitada por la garanta del debido proceso
contenida en el artculo 29 de la Constitucin Poltica87. (Se resalta).

De tal manera que, en esa oportunidad, la Sala sostuvo que la facultad de


imponer sanciones pecuniarias a los usuarios se encuentra soportada en diversas
normas del ordenamiento jurdico, especficamente, en el artculo 142 de la Ley
142 de 1994 y en la reglamentacin expedida por la Comisin de Regulacin de
Energa y Gas sobre el tema.

Adicionalmente, la Sala Novena de Revisin destac el hecho de que en este


tipo de actuaciones administrativas debe respetarse el derecho al debido
proceso del usuario, por lo que es necesario que ste tenga la posibilidad
efectiva de participar en el proceso y de ejercer su derecho a la defensa. En este
sentido, seal que en materia de expedicin de actos administrativos
sancionatorios, las actuaciones administrativas deben desarrollarse con arreglo
a lo dispuesto en las disposiciones especiales de la Ley 142 de 1994, en los
reglamentos y, en lo no previsto por estos, en las normas del Ttulo I del Cdigo
Contencioso Administrativo.

Con fundamento en lo anteriormente expuesto, la Sala encontr que la entidad


accionada no haba vulnerado derecho fundamental alguno del actor, ya que se
le dio la oportunidad de participar en todo el procedimiento administrativo
sancionatorio, aportar pruebas, controvertir las que fueron recogidas por la
entidad y, en fin, ejercer su derecho a la defensa. As las cosas, teniendo en
cuenta lo anterior y el hecho de que el accionante no hizo uso de los recursos en
la va gubernativa para impugnar la decisin adoptada por la empresa
demandada, la Sala concluye que la accin de tutela en el caso objeto de
revisin resulta improcedente.

8.4. No obstante, con posterioridad a este pronunciamiento, la Sala Sptima de


Revisin en la Sentencia T-558 de 200688 reiter la posicin planteada en la
Sentencia T-720 de 2005. En esa oportunidad, se analiz el caso de un usuario a
quien la empresa ELECTRICARIBE S.A. E.S.P. le impuso una sancin
pecuniaria por supuestas irregularidades encontradas en su medidor de energa.
El accionante estimaba vulnerado su derecho al debido proceso, bajo la

87 Sentencia T-270 de 2004: Debe recordarse que el ejercicio de la autoridad que ostentan las empresas de
servicios pblicos se ajusta a la Carta Poltica dependiendo de la proporcionalidad y racionalidad de las
medidas y decisiones que adopten stas frente a los usuarios y usuarias y, sobre todo, del estricto
cumplimiento de las reglas del debido proceso (Art. 29 C.P.).
88 Magistrado Ponente: Humberto Antonio Sierra Porto.

74
Sentencia SU-1010 de 2008

consideracin de que las empresas de servicios pblicos domiciliarios no estn


facultadas para imponer este tipo de sanciones.

Al respecto, en la sentencia en cita se estableci que, en primer lugar, a


pesar de que distintas Salas de Revisin se han ocupado del estudio de los
procedimientos adelantados por las empresas prestadoras para la
imposicin de sanciones de carcter pecuniario a los usuarios, lo cierto es
que en ninguna de estas sentencias las Salas de revisin se detuvieron sobre
el punto de partida de tales actuaciones: el origen de la potestad
sancionatoria de las empresas prestadoras.

As las cosas, la Sala efectu un recuento de las decisiones proferidas en


torno a este tema, a partir del cual sostuvo89:

Podra argumentarse que los anteriores pronunciamientos se ocuparon de


manera implcita del tema, en la medida en que todos ellos se refirieron al
alcance del derecho al debido proceso administrativo en las actuaciones
adelantadas por esta empresas para imponer sanciones a los usuarios, y la
potestad sancionatoria sera un presupuesto previo para el ejercicio de tales
atribuciones. Empero tal razonamiento significara reconocer la existencia
de precedentes implcitos en la jurisprudencia constitucional e impedira
que las Salas de Revisin en un futuro examinaran materias que no han
sido objeto expreso de estudio por esta Corporacin.

De esta manera, la Sala consider que la primera decisin que abord


extensa y expresamente lo relacionado con la potestad sancionatoria de las
empresas de servicios pblicos domiciliarios fue la sentencia T-720 de 2005,
en la cual se concluy que estas empresas carecen de dicha facultad, bajo el
entendido de que el otorgamiento de una prerrogativa en el sentido
sealado es de reserva del legislador y que el rgimen legal de los servicios
pblicos domiciliarios actualmente vigente no confiere tal potestad a las
empresas de servicios pblicos domiciliarios.

Ahora bien, frente al pronunciamiento efectuado por la Sala Novena de


Revisin en Sentencia T-224 de 2006, en el cual se establece que el artculo 142
de la Ley 142 de 1994 es el fundamento legal de la potestad de las empresas de
servicios pblicos domiciliarios para imponer sanciones pecuniarias y que, por
tanto, plantea una posicin interpretativa contraria a la expuesta en la Sentencia
T-720 de 2005 tantas veces mencionada, la Sala Sptima de Revisin sostuvo
que, como quiera que en esa providencia el problema jurdico se limit a
establecer si en el caso de objeto de pronunciamiento Electricaribe S.A.
E.S.P. al efectuar los actos de integracin dentro de la actuacin
administrativa sancionatoria adelantada, lo hizo en debida forma o si por el
contrario se presentaron falencias que privaran del derecho de defensa al
89 En la sentencia se hace referencia a las sentencias T-457 de 1994, T-1204 de 2001, T-270 de 2004 y T-455
de 2005.

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Sentencia SU-1010 de 2008

usuario.90, dicha decisin no constituye un precedente vinculante, en la


medida en que el examen sobre el fundamento de la potestad sancionatoria
consignado en esta sentencia no constituye la ratio decidendi de la decisin
adoptada, ya que, de acuerdo con la jurisprudencia constitucional, el alcance
del problema jurdico examinado es un elemento que permite identificar la
ratio decidendi de una decisin previa91, al igual que el precedente aplicable
en la materia..

Bajo la anterior consideracin, la Sala de Revisin reiter ntegramente la


posicin adoptada en Sentencia T-720 de 2005 y, adicionalmente, seal
que la reserva legal de la atribucin de la potestad sancionatoria a las
empresas de servicios pblicos domiciliarios, no solamente emana de
diversos preceptos constitucionales, particularmente de los artculos 210 y
369 de la Carta, sino tambin de la naturaleza de la actividad
administrativa que ellos desarrollan y de los principios, valores y derechos
fundamentales que estn comprometidos en la prestacin de los servicios
pblicos domiciliarios.

En esta providencia, la Sala Sptima de Revisin de la Corte Constitucional


analiz, adems, uno de los argumentos expuestos por la entidad accionada
para fundamentar la potestad que estas empresas tienen en materia de
imposicin de sanciones de tipo pecuniario, segn el cual el sustento de la
facultad en mencin se encuentra en el Decreto 1303 de 1989, Por el cual se
establece el rgimen de suspensiones del servicio elctrico y las sanciones
pecuniarias por el uso no autorizado o fraudulento del mismo.

En relacin con este punto, la Sala seal:

Ahora bien, en los escritos presentados en el curso del trmite de la


presente accin de tutela ELECTRICARIBE S.A. ESP fundamenta su
potestad sancionatoria sobre los usuarios en una norma de carcter
reglamentario, el Decreto 1303 de 1989, reglamento que no slo es
infralegal sino que adicionalmente es preconstitucional porque fue expedido

90 Sentencia T-224 de 2006, Magistrada Ponente: Clara Ins Vargas Hernndez.


91 Sentencia T-292 de 2006. En materia de servicios pblicos domiciliarios, debe resaltarse que la regulacin
-como funcin presidencial delegable en las referidas comisiones- no es lo que ha considerado alguna parte de
la doctrina, es decir, un instrumento normativo para "completar la ley", o para llenar los espacios que ella
pueda haber dejado, y menos para sustituir al legislador si ste nada ha dispuesto, pues ello significara la
inaceptable y perniciosa posibilidad de entregar al Presidente de la Repblica -y, ms grave todava, a sus
delegatarios- atribuciones de legislador extraordinario, distintas a las sealadas por la Carta, en manifiesta
contravencin de los postulados del Estado de Derecho, entre los cuales se encuentran el principio de
separacin de funciones de los rganos del Estado, el carcter singular del Presidente como nico funcionario
que puede ser revestido de facultades extraordinarias temporales y precisas y las estrictas condiciones
exigidas por la Constitucin para que a l sean transferidas transitoria y delimitadamente las funciones
legislativas. En efecto, "completar" segn el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Espaola,
significa " aadir a una magnitud o cantidad las partes que le faltan", y ello implica que "regular" ha sido
errneamente asimilado a "legislar", en tanto ha sido entendida como la funcin de llenar los vacos legales. Y
como se vio, el artculo 370 de la Constitucin condiciona la potestad reguladora del Presidente a que ella se
haga "con sujecin a la ley", no "para completar.

76
Sentencia SU-1010 de 2008

con anterioridad a la Constitucin Poltica de 1991, cuando no estaba


contemplada la posibilidad de la libre entrada de los particulares en la
prestacin de los servicios pblicos domiciliarios.

Para fundamentar su postura la entidad accionada cita una decisin


proferida por el Consejo de Estado, especficamente el fallo de la Seccin
Primera de ocho (8) de septiembre de 200592. Sin embargo, al margen de la
discusin sobre la vigencia de la norma reglamentaria una vez derogadas
las leyes que sirvieron de fundamento a su expedicin, tal como se sostuvo
en la sentencia T-720 de 2005, y se reitera en esta decisin, la naturaleza
misma de la potestad sancionatoria sobre los usuarios exige su regulacin
legal, por lo tanto no puede tener fundamento en normas de carcter
reglamentario.

En conclusin, segn ELECTRICARIBE S.A. ESP el Decreto 1303 de 1989


la faculta a expedir actos administrativos, tales como la Decisin
Empresarial No.1511705, mediante los cuales puede imponer sanciones
pecuniarias a los usuarios de servicios pblicos domiciliarios. Tales actos
administrativos pueden ser demandados ante la jurisdiccin contencioso
administrativa, razn por la cual la accin de tutela es improcedente por
92 En las sentencia de la Seccin Primera de ocho (8) de septiembre de 2005 sostuvo esta Corporacin:
De otra parte la Sala en sentencia de 18 de julio de 2001 (Expediente 5344, Consejera Ponente doctora
Olga Ins Navarrete Barrero), precis y ahora lo reitera que el decreto 1303 de 1989 es una norma especial
que, como tal, es de preferente aplicacin frente a la Ley 142 de 1994 que, si bien estableci el rgimen de
servicios pblicos domiciliarios y en forma general regul lo relativo a los contratos de servicios pblicos,
no se refiri ntegramente a todos los aspectos relativos a esta prestacin quedando vigentes, por lo tanto, las
disposiciones de carcter especial y aquellas que no fueren contradictorias con sus mandatos.
Al efecto, dijo la Sala:
As lo seal en forma expresa el artculo 186 de esta ley cuando indic:
ARTCULO 186. CONCORDANCIAS Y DEROGACIONES. Para efectos del artculo 84 de la
Constitucin Poltica, esta ley reglamenta de manera general las actividades relacionadas con los
servicios pblicos definidos en esta ley; deroga todas las leyes que le sean contrarias; y
prevalecer y servir para complementar e interpretar las leyes especiales que se dicten para
algunos de los servicios pblicos a los que ella se refiere. En caso de conflicto con otras leyes sobre
tales servicios, se preferir sta, y para efectos de excepciones o derogaciones, no se entender que
ella resulta contrariada por normas posteriores sobre la materia, sino cuando stas identifiquen de
modo preciso la norma de esta ley objeto de excepcin, modificacin o derogatoria.
Derganse, en particular, el artculo 61, literal "f", de la Ley 81 de 1988; el artculo157 y el literal
"c" del artculo 233 del Decreto 1333 de 1986; el inciso segundo del artculo 14 y los artculos 58 y
59 del Decreto 2152 de 1992; el artculo 11 del Decreto 2119 de 1992; y el artculo 1 en los
numerales 17, 18, 19, 20 y 21, y los artculos 2, 3 y 4 del Decreto 2122 de 1992.
De conformidad con lo anterior, las normas de la Ley 142 de 1994 son complementarias de las
contenidas en el decreto 1303 de 1989 que, en cuanto no sean contrarias, mantienen su vigencia y
deben interpretarse sistemticamente como un todo, por cuanto no existe contradiccin entre las
prescripciones de la Ley 142 de 1994 y las disposiciones del Decreto 1303 de 1989 aplicadas al
caso concreto, las cuales contemplan situaciones que no fueron cobijadas por la primera y
mantiene, por lo tanto, su vigencia y eficacia
De tal manera que no es acertado el argumento de la entidad demandada en cuanto consider que
como en virtud de la expedicin de las leyes 142 y 143 de 1994 se derogaron las leyes que le
sirvieron de sustento al Decreto acusado ste perdi su fuerza ejecutoria.
Respecto del anterior pronunciamiento cabe sealar que el Decreto 1303 de 1989 fue expedido por el el
Presidente de la Repblica en ejercicio de sus facultades legales y en especial de las que le confieren las
Leyes 113 de 1928, 109 de 1936 y 126 de 1938,de tal manera que se trata de una norma de carcter
reglamentario que no tiene entidad normativa autnoma, por lo tanto, una vez derogadas las disposiciones que
sirvieron de fundamento a su expedicin es claro que pierde fuerza ejecutoria. Resulta por lo tanto pertinente
sealar que de manera expresa la Ley 143 de 1994 (y no el artculo 186 de la Ley 142 de 1994) deroga las
leyes que sirvieron de fundamento al decreto en cuestin. En efecto el artculo 97 de la Ley 143 de 1994
consigna textualmente: La presente ley rige a partir de la fecha de su promulgacin y deroga las
disposiciones que le sean contrarias, en especial, las leyes 113 de 1928, 109 de 1936, 126 de 1938, con
exclusin de los artculos 17 y 18 y el artculo 12 de la Ley 19 de 1990".

77
Sentencia SU-1010 de 2008

existir otro mecanismo de defensa judicial. No obstante, de conformidad con


los argumentos expuestos por esta Sala de revisin en la sentencia T-720 de
2005 y en la presente decisin, la potestad de sancionar a los usuarios tiene
el carcter de una funcin administrativa que requiere expresa autorizacin
legal no slo por razones formales sino tambin por motivos sustanciales
relacionados con la naturaleza de los servicios pblicos domiciliarios y en el
ordenamiento jurdico actualmente vigente no existen disposiciones legales
de las cuales pueda derivarse tal potestad sancionatoria, por lo tanto no
puede inferirse de una disposicin de carcter reglamentario y
preconstitucional, como lo es el Decreto 1303 de 1989. (Se subraya)

En consecuencia y bajo las anteriores consideraciones, la Sala concedi la


proteccin de los derechos fundamentales del accionante, por cuanto, bajo la
lnea interpretativa en mencin, la decisin empresarial mediante la cual se
impuso la sancin pecuniaria carece de fundamento legal y, en esa medida,
contraviene formal y sustancialmente el ordenamiento constitucional.

Esta posicin fue acogida y reiterada en recientes decisiones por distintas Salas
de Revisin, entre otras, en las Sentencias T-854 de 2006 93 (Sala de Revisin
Octava), T-041 de 200794 (Sala Primera de Revisin) y T-218 de 2007 95 (Sala
Sexta de Revisin). Sin embargo, ello no significa que esta ltima posicin sea
la aceptada de manera uniforme por todas las Salas de esta Corporacin, ya que
las diferencias aun persisten frente a la ausencia de una lnea de interpretacin
uniforme sobre el tema96.

Del anterior recuento jurisprudencial se concluye, entonces, que en relacin con


la facultad de las empresas de servicios pblicos domiciliarios para imponer
sanciones de carcter pecuniario, son distintas las posiciones que han sido
adoptadas por las Salas de Revisin de la Corte Constitucional. As, (i)
93 Magistrado Ponente: lvaro Tafur Galvis.
94 Magistrado Ponente: Jaime Araujo Rentera.
95 Magistrado Ponente: Nilson Pinilla Pinilla.
96 En va de ejemplo, en la sentencia T-041 de 2007 anteriormente citada, el Magistrado Jaime Crdoba
Trivio present una aclaracin de voto por cuanto, si bien estuvo de acuerdo con la decisin adoptada en el
caso concreto, a su juicio la Corte debe mantener la posicin conforme a la cual las empresas de servicios
pblicos domiciliarios s tienen competencia para imponer sanciones pecuniarias. Sobre el tema, expres:
() se argumenta que las empresas de servicios pblicos carecen de potestad sancionatoria frente a
eventuales conductas irregulares de sus usuarios, pues no existe fundamento legal, razn por la cual se
califica las actuaciones de la Empresa como autnticas vas de hecho administrativas. // Si bien es cierto la
sentencia apoya esa conclusin en decisiones recientes de las Salas Sptima y Octava de Revisin de la
Corte, en especial las Sentencias T- 558 y 815 de 2005, en las que se reitera la tesis de la carencia de
fundamento legal de la potestad sancionatoria de las empresas prestadoras de servicios pblicos, lo cierto
es que en otras decisiones, pero de modo particular en la Sentencia T-270 de 2004 proferida por la Sala
Cuarta de Revisin, con ponencia del suscrito Magistrado, se llega a conclusin diversa, pues se sostiene
que diversas normas (Decreto 1303 de 1989, la ley 142 de 1994 en su artculo 142 y la Resolucin 108 de
1997 de la Comisin de Regulacin de Energa y Gas) permiten concluir que dichas empresas tienen
facultades para imponer las sanciones correspondientes a los usuarios en las hiptesis expresamente
previstas, siempre y cuando se sujeten al debido proceso en especial a la garanta del derecho de defensa y
dependiendo de la proporcionalidad y racionalidad de las medidas impuestas. // Por manera que en mi
criterio debe mantenerse la tesis ya expresada por la Corte en esta Sentencia, reiterada luego por la Sala
Novena de Revisin mediante Sentencia T-224 de 2006 - Magistrada Ponente doctora Clara Ins Vargas
Hernndez-.. Adicionalmente, respecto de la misma decisin, el Magistrado Manuel Jos Cepeda Espinosa
present salvamento especial de voto.

78
Sentencia SU-1010 de 2008

inicialmente las distintas Salas efectuaron un reconocimiento implcito de la


potestad de imponer sanciones como prerrogativa de las empresas sealadas y,
bajo tal consideracin, el anlisis efectuado se relacionaba con la verificacin
del respeto por las garantas constitucionales en el trmite del procedimiento
administrativo sancionatorio; (ii) posteriormente, la Sala Sptima de Revisin
sostuvo que la atribucin de dicha prerrogativa est sujeta a reserva legal, razn
por la cual, como quiera que no existe en el ordenamiento jurdico una ley que
consagre de manera expresa una facultad en tal sentido, debe concluirse que las
empresas de servicios pblicos domiciliarios no pueden imponer sanciones de
tipo pecuniario; (iii) finalmente, a travs del pronunciamiento efectuado por la
Sala Novena de Revisin, se aval de manera expresa la facultad de las
empresas de servicios pblicos para imponer sanciones de tipo pecuniario,
decisin que, sin embargo, no fue reiterada.

As las cosas, resulta indiscutible que no existe una lnea jurisprudencial


uniforme y consolidada en torno a este tema, por lo que, bajo ese entendido, se
hace necesario que la Sala Plena de la Corte Constitucional adopte una posicin
definitiva en relacin con la potestad de las empresas prestadoras de servicios
pblicos domiciliarios para imponer sanciones de tipo pecuniario, tal como se
pasa a establecer.

9.Unificacin de la jurisprudencia constitucional en relacin con la


facultad de imponer sanciones pecuniarias de las empresas de
servicios pblicos domiciliarios.

9.1. Las sanciones pecuniarias constituyen una de las modalidades de condena


que, de manera general, tiene aplicacin como consecuencia o efecto de la
infraccin de una norma jurdica, que, de ordinario, se materializa en la
imposicin de una multa.

En el campo del derecho administrativo, las sanciones pecuniarias se traducen


en las medidas que puede adoptar unilateralmente la Administracin,
consistentes en el cobro de una suma de dinero o en el decomiso de un bien,
frente al incumplimiento de las obligaciones y deberes que deben observar
tanto los particulares como los servidores pblicos97.

En este mbito, la aplicacin de una sancin pecuniaria implica que, en el


marco de un procedimiento administrativo a travs del cual se garantice el
respeto por las garantas propias del debido proceso, la Administracin efecta
una manifestacin expresa en relacin con la violacin de una prohibicin o de
un deber, o con el incumplimiento de una orden o una obligacin atribuible a un
sujeto determinado y, como consecuencia de ello, procede a imponer la sancin
pecuniaria que corresponda, sin que sea necesario para ese efecto acudir ante
las autoridades judiciales.

97 Al respecto, puede consultarse LOZANO CUTANDA, Blanca, La extincin de las sanciones


administrativas y tributarias, Estudio Preliminar de Ramn Parada, Editorial Marcial Pons, Ediciones
Jurdicas S.A., Madrid, 1990.

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Sentencia SU-1010 de 2008

La potestad que tiene la Administracin para adoptar su decisin de manera


directa, sin necesidad de solicitar previamente la intervencin del rgano
judicial, es lo que se conoce como el principio de la decisin unilateral y
ejecutoria, el cual se fundamenta en la posicin institucional de la
Administracin Pblica, como titular del poder del imperium, y gestora del
inters pblico. Dicho principio se encuentra consagrado, con alcance general,
en el artculo 64 del Cdigo Contencioso Administrativo, y como tal, comporta
la prerrogativa de poder pblico por antonomasia en cabeza de la
Administracin, en todas las relaciones jurdicas en las que se ha constituido en
parte, ya sean de naturaleza contractual o extracontractual. A este respecto, el
artculo en cita dispone que: Salvo norma expresa en contrario, los actos que
queden en firme al concluir el procedimiento administrativo sern suficientes,
por s mismos, para que la administracin pueda ejecutar de inmediato los
actos necesarios para su cumplimiento. La firmeza de tales actos es
indispensable para la ejecucin contra la voluntad de los interesados.

9.2. Ahora bien, en relacin con los casos objeto de revisin, la Sala encuentra
que las empresas de servicios pblicos domiciliarios han realizado el cobro de
sumas de dinero a ttulo de sancin pecuniaria, as denominado en las
decisiones administrativas y facturas que obran como material probatorio en los
distintos expedientes, en razn del supuesto incumplimiento del contrato en el
que han incurrido los usuarios.

Tanto la determinacin del supuesto incumplimiento de las obligaciones


contractuales como el establecimiento de la sancin correspondiente, fueron
cuestiones definidas por las empresas de servicios pblicos domiciliarios
mediante la expedicin de actos administrativos unilaterales, respecto de los
cuales se les inform a los usuarios la posibilidad de acudir a los mecanismos
previstos en la va gubernativa. En sus distintas intervenciones dentro de los
presentes asuntos, las empresas han manifestado que el cobro de estos valores
resulta necesario para evitar que se sigan cometiendo tales infracciones.

Sin embargo, en relacin con el fundamento para exigir dichos pagos, las
empresas de servicios pblicos domiciliarios accionadas han utilizado,
bsicamente, dos argumentos.

En un primer momento, las empresas demandadas sostenan, de manera


general, que ellas se encuentran habilitadas por la ley y por algunas normas de
carcter reglamentario para la imposicin de sanciones de contenido pecuniario.
Dicha potestad administrativa sancionadora, afirmaban, les fue atribuible por la
importancia de la funcin que desarrollan y por la necesidad de garantizar su
equilibrio financiero, a travs de lo cual se busca lograr la ampliacin de la
cobertura y la prestacin eficiente de los servicios pblicos domiciliarios.

80
Sentencia SU-1010 de 2008

En esta fase, las empresas calificaban dichos cobros como verdaderas sanciones
de contenido pecuniario, en ejercicio de las prerrogativas que, a su juicio, les
otorga la ley.

No obstante lo anterior, en un segundo momento y una vez se produjeron los


primeros pronunciamientos de algunas Salas de Revisin de esta Corporacin,
en el sentido de que las empresas de servicios pblicos domiciliarios no estn
facultadas por el legislador para imponer sanciones pecuniarias, las
demandadas han modificado su motivacin anterior. En efecto, con
posterioridad a estas providencias han sostenido que el cobro de dichas sumas
de dinero no corresponde a la imposicin de ningn tipo de sancin
administrativa, sino que se trata de la exigencia de una clusula penal de las que
se encuentran reguladas en el derecho privado, particularmente en los artculos
159298 y siguientes del Cdigo Civil y 867 del Cdigo de Comercio 99. Han
explicado al respecto que aun cuando se llegara a concluir que ellas no estn
facultadas legalmente para imponer sanciones de tipo pecuniario, las decisiones
administrativas que han sido proferidas en los asuntos objeto de revisin
resultan perfectamente vlidas, toda vez que stas son el resultado del ejercicio
de una facultad prevista en el mbito del derecho privado de los contratos.

9.3. En este contexto y en consideracin a los argumentos expuestos por las


accionadas, encuentra la Sala necesario determinar si las empresas de servicios
pblicos domiciliarios estn habilitadas para imponer el cobro de sumas de
dinero por encima de los costos de los servicios a ttulo de sancin pecuniaria,
bien sea (i) a ttulo de ejercicio de una facultad administrativa sancionatoria de
tipo pecuniario o (ii) por la va de que se trata de la exigencia de una clusula
penal de las previstas en el derecho privado.

i) Respecto de la primera de dichas vas, esto es, frente a la consideracin de


que estos cobros son el resultado del ejercicio de la potestad administrativa
sancionatoria que les ha sido otorgada a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, la Sala debe efectuar las siguientes precisiones.

Para empezar, es necesario establecer cuales son las principales caractersticas


de las actuaciones que, en esta materia, adelantan las empresas de servicios
pblicos domiciliarios:

98 El artculo 1592 define la clusula penal como aquella en que una persona, para asegurar el
cumplimiento de una obligacin, se sujeta a una pena que consiste en dar o hacer algo en caso de no
ejecutar o retardar la obligacin principal.
99 Artculo 867. Cuando se estipule el pago de una prestacin determinada para el caso de
incumplimiento, o de mora, se entender que las partes no pueden retractarse.
Cuando la prestacin principal est determinada o sea determinable en una suma cierta de dinero la pena no
podr ser superior al monto de aquella.
Cuando la prestacin principal no est determinada ni sea determinable en una suma cierta de dinero, podr
el juez reducir equitativamente la pena, si la considera manifiestamente excesiva habida cuenta del inters
que tenga el acreedor en que se cumpla la obligacin. Lo mismo har cuando la obligacin principal se haya
cumplido en parte.

81
Sentencia SU-1010 de 2008

a. En primer lugar, la actuacin es iniciada de oficio por la empresa frente


al supuesto incumplimiento de las obligaciones y deberes de los usuarios,
es decir, frente a la presunta ocurrencia de una infraccin.

b. La determinacin de si el usuario incurri efectivamente en la conducta


objeto de reproche, est precedida de un procedimiento que, segn
afirman las propias empresas, busca garantizar que se respeten las
garantas del debido proceso del afectado.

c. En el marco del procedimiento anterior y a partir de las pruebas


recaudadas durante la actuacin, la empresa expide un acto
administrativo unilateral en el cual se declara, o bien el incumplimiento
de los deberes por parte del usuario o la ausencia de conducta
reprochable. Si en dicho acto se determina que ste efectivamente
ocurri, las empresas imponen la obligacin de pago de una suma de
dinero determinada a cargo del afectado, cobro que se efecta en la
siguiente facturacin que realice la empresa.

d. Contra el acto administrativo con el que culmina la actuacin, caben los


recursos previstos en la va gubernativa y, adicionalmente, est sujeta a
control judicial por la jurisdiccin contencioso administrativa.

Como se observa, las actuaciones adelantadas por las empresas de servicios


pblicos domiciliarios corresponden a un pretendido ejercicio de potestad
administrativa sancionadora. En efecto, se trata de una actuacin que surge en
razn del incumplimiento de las obligaciones de los administrados en relacin
con los servicios pblicos domiciliarios, a travs del cual, segn lo han
manifestado las empresas durante sus intervenciones en los asuntos objeto de
revisin, se busca garantizar la consecucin de los fines estatales en esta
materia y preservar su estabilidad financiera.

Adicionalmente, la decisin sancionatoria es el resultado de un procedimiento


que debe respetar el derecho al debido proceso de los usuarios y est sujeta a
control judicial ante la jurisdiccin de lo contencioso administrativo.
Finalmente, la modalidad de la sancin, esto es su carcter pecuniario,
corresponde al prototipo de las sanciones en el mbito del derecho
administrativo sancionador.

Por tal razn, lo primero que debe concluirse es que nos encontramos frente a la
imposicin de verdaderas sanciones de carcter pecuniario, en ejercicio de una
potestad que, segn aducen las empresas, les ha sido otorgada. En este
escenario, la pregunta que surge entonces es: las empresas de servicios
pblicos efectivamente tienen la facultad de imponer este tipo de sanciones?

Para dar respuesta a este interrogante, debe recordarse que en nuestro


ordenamiento jurdico es posible que el legislador otorgue tanto a las
autoridades administrativas como a los particulares que ejerzan funciones

82
Sentencia SU-1010 de 2008

pblicas la facultad de imponer sanciones. En este escenario, es vlido que


dicha autoridad establezca que las empresas de servicios pblicos domiciliarios,
independientemente de su naturaleza oficial o privada, puedan sancionar
conductas que afecten la posibilidad de asegurar a todos los habitantes del
territorio nacional la prestacin eficiente del servicio y, en consecuencia, la
consecucin de la finalidad social del Estado en esta materia.

Pero, como se seal, la posibilidad de otorgar dicha facultad slo est en


cabeza del legislador. En efecto, la reserva de ley, como principio fundante del
ejercicio de la potestad administrativa sancionatoria, implica que slo l puede
establecer la existencia de dicha prerrogativa; adicionalmente, ello obedece a
que, por expresa disposicin constitucional, la regulacin de los servicios
pblicos domiciliarios es materia que est reservada al legislador, con lo que se
busca que ste sea el resultado de un proceso de deliberacin democrtica,
pblico, abierto y pluralista que permita la participacin de la sociedad, como
expresin del principio democrtico.

Como ya se ha dicho, a travs de diversas disposiciones de la Ley 142 de 1994


el legislador le otorg determinadas facultades y prerrogativas a las empresas
de servicios pblicos domiciliarios, las cuales resultan necesarias para asegurar
su prestacin eficiente a todos los habitantes del territorio nacional. As, en caso
de incumplimiento del contrato, tal como se anot con anterioridad, dichas
facultades se relacionan con la suspensin del servicio y la resolucin del
contrato y, en caso de que el incumplimiento se d en el pago de la factura, se
permite adems que puedan cobrar unilateralmente el servicio consumido y no
facturado y los intereses moratorios sobre los saldos insolutos.

Sin embargo, no sucede lo mismo con la posibilidad de que las empresas de


servicios pblicos domiciliarios impongan sanciones de tipo pecuniario a los
usuarios del servicio, ya que ninguna disposicin de la Ley 142 de 1994,
mediante la cual el legislador regul de manera especial el tema de los servicios
pblicos domiciliarios, establece una facultad en tal sentido, ni consagra
conductas frente a las cuales las empresas puedan ejercer dicha potestad, como
tampoco el procedimiento a seguir.

En efecto, en dicho Estatuto, ni expresa ni implcitamente, el legislador le


reconoce facultades a las empresas de servicios pblicos domiciliarios para
imponer sanciones pecuniarias, por razn del incumplimiento del contrato, y
por tanto, tampoco regul un procedimiento para ejercer dicha facultad. Por lo
tanto, de la Ley 142 de 1994 no se deriva la competencia de las empresas de
servicios pblicos para imponer sanciones pecuniarias a los usuarios.

No obstante lo anterior y a pesar de este vaco legal, las empresas accionadas


alegan que dicha facultad se deriva de una interpretacin integral de los
artculos 140 y 142 de la referida ley, en los cuales se establece que la empresa
tiene la facultad de suspender el servicio en caso de incumplimiento del
contrato (art. 140) y que el restablecimiento del mismo depender de que el

83
Sentencia SU-1010 de 2008

usuario elimine la causa que dio lugar a la medida, cancele los gastos de
reinstalacin y reconexin en los que la empresa incurra y, adems, satisfaga
las dems sanciones previstas, todo de acuerdo a las condiciones uniformes
del contrato (art. 142). Las mencionadas normas, alguna de las cuales ya ha
sido citada, son del siguiente tenor:

ARTCULO 140. SUSPENSIN POR INCUMPLIMIENTO. El


incumplimiento del contrato por parte del suscriptor o usuario da lugar a la
suspensin del servicio en los eventos sealados en las condiciones uniformes
del contrato de servicios y en todo caso en los siguientes:

La falta de pago por el trmino que fije la entidad prestadora, sin exceder en
todo caso de dos (2) perodos de facturacin en el evento en que sta sea
bimestral y de tres (3) perodos cuando sea mensual y el fraude a las
conexiones, acometidas, medidores o lneas.

Es causal tambin de suspensin, la alteracin inconsulta y unilateral por


parte del usuario o suscriptor de las condiciones contractuales de prestacin
del servicio.

Durante la suspensin, ninguna de las partes puede tomar medidas que hagan
imposible el cumplimiento de las obligaciones recprocas tan pronto termine
la causal de suspensin.

Haya o no suspensin, la entidad prestadora puede ejercer todos los derechos


que las leyes y el contrato uniforme le conceden para el evento del
incumplimiento.

()

ARTCULO 142. REESTABLECIMIENTO DEL SERVICIO. Para restablecer


el servicio, si la suspensin o el corte fueron imputables al suscriptor o
usuario, ste debe eliminar su causa, pagar todos los gastos de reinstalacin
o reconexin en los que la empresa incurra, y satisfacer las dems sanciones
previstas, todo de acuerdo a las condiciones uniformes del contrato.

Si el restablecimiento no se hace en un plazo razonable despus de que el


suscriptor o usuario cumpla con las obligaciones que prev el inciso anterior,
habr falla del servicio.

Para la Corte, del contenido normativo de las disposiciones transcritas no puede


deducirse que, por su intermedio, se estn reconociendo facultades
sancionatorias de tipo pecuniario a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios. Aun cuando dichas normas tratan aspectos relacionados con el
cumplimiento y prestacin del servicio (Ttulo VIII, Captulo III), las mismas
se limitan a regular temas concretos de los cuales no se puede derivar una
habilitacin legal para sancionar pecuniariamente a los usuarios. Tratndose del

84
Sentencia SU-1010 de 2008

artculo 140, como ya se ha dicho, ste consagra una de las consecuencias del
incumplimiento del contrato por parte del suscriptor o usuario: la medida de
suspensin del servicio, describiendo a su vez las causas en las que aplica, pero
sin prever derechos o prerrogativas adicionales o complementarias en favor de
las empresas. Frente al artculo 142, lo que all se regula es la manera como
debe procederse al restablecimiento del servicio cuando ha operado la
suspensin o corte del mismo y, por tanto, al margen de la manera como se
exprese normativamente la medida, por su intermedio tampoco se otorga
habilitacin alguna a las empresas de servicios pblicos.

Una interpretacin en sentido contrario llevara a concluir que los artculos 140
y 142 establecen una facultad genrica de sancionar en cabeza de las empresas
que prestan estos servicios, lo que incluira no solamente la posibilidad de
imponer sanciones pecuniarias, dado que la norma no se refiere a ningn tipo
de sancin en particular, sino cualquier tipo de sancin que, a su juicio,
resultara pertinente, siempre que as lo estableciera en el contrato de
condiciones uniformes.

Dicha conclusin sera inaceptable e inadmisible por cuanto ello constituira


una evidente vulneracin del principio de reserva de ley, y especficamente del
principio de tipicidad, el cual le impone al legislador la carga, no solo de tener
que reconocer la facultad para sancionar, sino tambin de sealar las conductas
constitutivas de infraccin, las sanciones aplicables y el procedimiento que
debe seguirse para su imposicin; aspectos stos que no pueden dejarse al
arbitrio o a la definicin discrecional de la autoridad administrativa.

En relacin con este asunto, debe recordarse que la jurisprudencia


constitucional ha sido enftica en destacar la importancia de garantizar el
respeto por los derechos y las garantas fundamentales de los usuarios de los
servicios pblicos, labor que por expresa disposicin constitucional le
corresponde asumir, en primer lugar, al legislador por va de la regulacin. En
este sentido, si el rgano legislativo considerara necesario reconocer facultades
en materia sancionatoria a las empresas de servicios pblicos domiciliarios,
sera imperativo que estableciera en forma expresa los elementos
fundamentales que dan lugar a su ejercicio como mecanismo para garantizar la
proteccin de los derechos de los usuarios.

Ahora bien, a pesar de que no existe un pronunciamiento de esta Corporacin a


travs del cual se haya definido si a partir de los artculos 140 y 142 de la Ley
142 de 1994, es posible concluir que las empresas de servicios pblicos
domiciliarios estn facultadas para imponer sanciones pecuniarias, s existe un
antecedente en relacin con la materia.

En efecto, mediante la Sentencia C-1123 de 2004100, la Corte Constitucional se


ocup de una demanda de inconstitucionalidad presentada en contra de las
referidas normas. El accionante sostena que estas disposiciones eran contrarias
100 Magistrado Ponente: Jaime Crdoba Trivio.

85
Sentencia SU-1010 de 2008

a los artculos 116, 228 y 250 de la Carta por cuanto, en primer lugar, a partir de
ellas se afirmaba que exista una autorizacin directa para que en la
imposicin de sanciones penales y pecuniarias por parte de las empresas de
servicios pblicos, stas se constituyan en juez y parte y, en segundo trmino,
en la medida en que se las habilitaba para el ejercicio de una funcin
jurisdiccional que no les es propia.

La Sala Plena de la Corte Constitucional estim que la demanda no cumpla con


los requisitos necesarios para efectuar el juicio de constitucionalidad, entre otras
razones, por cuanto de los artculos 140 y 142 de la Ley 142 de 1994 no se
infiere que se est autorizando a las empresas de servicios pblicos para
imponer sanciones de carcter penal y pecuniario. As, esta Corporacin
sostuvo:

() encuentra la Sala que las acusaciones planteadas contra la expresin


puede ejercer todos los derechos que las leyes y el contrato uniforme le
conceden para el evento del incumplimiento contenida en el inciso final del
artculo 140 de la Ley 142 de 1994 y de la frase y satisfacer las dems
sanciones previstas, todo de acuerdo a las condiciones uniformes del contrato
del inciso primero del artculo 142 ibdem, presentan una formulacin apenas
aparente del cargo de inconstitucionalidad.

Segn lo sostiene el demandante, las expresiones acusadas vulneran los


artculos 116, 228 y 250, no obstante confrontados los textos legales con los
reproches contenidos en la demanda no se encuentra ninguna relacin entre
stos.

En efecto, el aparte acusado del artculo 140 de la Ley 142 de 1994 que regula
lo referente a la suspensin del servicio por incumplimiento del suscriptor o
usuario establece que la entidad prestadora puede ejercer todos los derechos
que las leyes y el contrato uniforme le conceden para el evento del
incumplimiento. De este texto normativo no se infiere, como equivocadamente
lo indica el actor, que se est autorizando a las empresas de servicios pblicos
para imponer sanciones de carcter penal y pecuniario o a constituirse en
juez y parte, apreciacin por dems ambigua que impide a la Corte
identificar con precisin y certeza las razones que hacen la norma transcrita
violatoria de los artculos 116, 228 y 250 de la Constitucin.

El aparte sub examine se limita a reconocer a las entidades prestadoras de los


servicios pblicos la posibilidad de ejercer derechos de conformidad con la ley
y con el contrato de condiciones uniformes. Empero, en la demanda no se
indican de manera clara, cierta, especfica, pertinente y suficiente los motivos
de su inconstitucionalidad.

Por su parte, el artculo 142 de la Ley 142 de 1994, en lo acusado, establece


una regulacin ya no para la empresa prestadora sino para el usuario del
servicio en el sentido en que ste debe satisfacer las dems sanciones previstas,
todo de acuerdo a las condiciones uniformes del contrato.

86
Sentencia SU-1010 de 2008

() De esta manera, para la Sala es claro que no existe correspondencia entre


los textos demandados y los argumentos en que se fundan los reproches de
inconstitucionalidad dado que de su anlisis no se llega a las conclusiones que
son base de las acusaciones que formula el actor. (Se resalta)

En consecuencia, bajo la consideracin de que de los textos acusados no poda


entenderse que el legislador haba autorizado a las empresas de servicios
pblicos domiciliarios para imponer sanciones de carcter penal y pecuniario,
como lo sostena el demandante, la Corte Constitucional se declar inhibida por
ineptitud sustancial de la demanda.

Este pronunciamiento, proferido por la Sala Plena de esta Corporacin, apoya


la conclusin atrs expuesta, en el sentido de que no es posible derivar del
contenido normativo de los artculos 140 y 142 de la Ley 142 de 1994, la
potestad de las empresas de servicios pblicos domiciliarios para imponer
sanciones de contenido pecuniario.

Ahora bien, el 24 de julio del 2007 el Congreso de la Repblica profiri la Ley


1151 de 2007101, por la cual se expide el Plan Nacional de Desarrollo 2006-
2010, norma en la que se incluy una disposicin relacionada con el tema de
la facultad de las empresas de servicios pblicos para imponer sanciones de
contenido pecuniario. De esta manera, el texto del artculo 105 de dicha Ley, tal
y como fue aprobado por el legislador, era del siguiente tenor:

SECCIN VII
DESARROLLO URBANO Y POLTICA AMBIENTAL

() SECTOR DE AGUA POTABLE Y SANEAMIENTO BSICO.

() ARTCULO 105. SANCIONES Y PROCEDIMIENTOS EN SERVICIOS


PBLICOS. Las empresas debern establecer <sic.> condiciones uniformes del
contrato, las sanciones pecuniarias que impondrn a los usuarios o suscriptores
por el incumplimiento de las obligaciones que el contrato de prestacin de
servicios impone, de conformidad con la ley. As mismo, en el contrato, la
empresa determinar la manera de establecer la cuanta de las sanciones y el
procedimiento para su imposicin. En todo caso, la actuacin deber
adelantarse con las garantas propias del debido proceso.

Como se observa, a travs de esta disposicin el legislador facultaba a las


empresas de servicios pblicos para proceder a imponer sanciones de contenido
pecuniario a los usuarios, fuera que los servicios prestados tuvieran la
naturaleza de domiciliarios o no, e independientemente de su carcter oficial o
privado. Adicionalmente, la norma delegaba en dichas entidades la posibilidad

101 Publicada en el Diario Oficial No. 46700 de 25 de julio de 2007.

87
Sentencia SU-1010 de 2008

de determinar las conductas a sancionar, la cuanta de las sanciones y el


procedimiento para su imposicin.

Sin embargo, al efectuar el juicio de inconstitucionalidad de la disposicin en


cita, la Corte declar la inexequibilidad del artculo 105 de la Ley 1151 de
2007, bajo la consideracin de que esta norma no guardaba relacin de
conexidad directa e inmediata con los objetivos, programas, metas y estrategias
del Plan Nacional de Desarrollo, razn por la cual exista una vulneracin del
principio de unidad de materia102.

A juicio de la Sala, las normas instrumentales del Plan de Desarrollo deben


guardar una relacin de conexidad directa con las disposiciones de la parte
general, de suerte que aquellas que slo se encuentren ligadas por un vnculo
mediato, indirecto o eventual, comportan una trasgresin del principio de
unidad de materia. En el caso del artculo 105 de la Ley 1151 de 2007, la Corte
encontr que el tema de la potestad sancionadora de las empresas de servicios
pblicos all regulado no tena relacin directa con la posibilidad de realizar los
objetivos trazados en la parte general del Plan Nacional, ni tampoco resultaba
inequvocamente efectiva para obtener dicho propsito, por lo que en dicha
providencia la Corte Constitucional declar la inexequibilidad de la norma en
mencin.

De esta manera, de acuerdo a lo expuesto, es claro que no existe en el


ordenamiento jurdico ley o decreto con fuerza de ley que habilite a las
empresas prestadoras de servicios pblicos domiciliarios para ejercer potestades
sancionatorias, mediante la imposicin de sanciones de contenido pecuniario.

A pesar de lo dicho, la Corte encuentra que distintas disposiciones de carcter


reglamentario han avalado el ejercicio de dicha facultad. As, por ejemplo, se
encuentra el Decreto Reglamentario 1303 de 1989, la Resolucin 108 de 1997
proferida por la Comisin de Regulacin de Energa y Gas e, incluso, algunos
conceptos de la Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios.

Sin embargo, para la Corte es claro que estas reglamentaciones no pueden ser el
fundamento de la potestad sancionatoria en esta materia, por cuanto, como se
ha destacado en esta providencia, slo el legislador, ordinario o extraordinario,
est facultado para otorgar dicha prerrogativa y para establecer los elementos
fundamentales de su ejercicio, en virtud de los principios de reserva de ley y de
tipicidad.

En efecto, debe recordarse que aun cuando la aplicacin matizada del principio
de legalidad en el derecho administrativo sancionador implica que es posible
que exista un mayor campo de decisin respecto de las conductas que
comportan una infraccin y de la sancin, ello no significa que la prerrogativa
misma pueda ser otorgada por otra autoridad distinta al legislador o que ste
pueda habilitar a la Administracin para que establezca todos los elementos de
102 Sentencia C-539 de 2008, Magistrado Ponente: Humberto Antonio Sierra Porto.

88
Sentencia SU-1010 de 2008

su ejercicio. Es evidente que la facultad del ejecutivo para reglamentar la


materia exige que exista previamente una ley respecto de la cual ejercer dicha
facultad, y que en sta se establezcan los presupuestos bsicos que deben
respetarse para su ejercicio103.

La posicin anteriormente expuesta, es compartida por el Consejo de Estado


quien, en reciente pronunciamiento, sostuvo que slo el legislador, de manera
exclusiva y excluyente, tiene la potestad de definir qu autoridades pueden
ejercer facultades sancionatorias y de qu manera deben hacerlo104. En efecto,
mediante Sentencia del 30 de julio de 2008, la Seccin Tercera del Consejo de
Estado decidi la accin de simple nulidad formulada en contra del artculo 54
de la Resolucin No. 108 de 1997, proferida por la Comisin de Regulacin de
Energa y Gas, el cual estableca la facultad de las empresas de servicios
pblicos domiciliarios para sancionar pecuniariamente a los usuarios. En esa
providencia se declar nula la mencionada norma, bajo la consideracin de que
la facultad de imponer sanciones pecuniarias a los usuarios y suscriptores del
servicio, en tanto ejercicio de una potestad sancionadora, debe tener origen
legal.

En conclusin, las empresas de servicios pblicos domiciliarios no tienen


facultad para imponer sanciones de tipo pecuniario a los usuarios, por cuanto el
legislador no las ha legitimado para ello. En este sentido, la imposicin de
cobros a ese ttulo ha comportado una vulneracin del derecho al debido
proceso de los usuarios y suscriptores, por desconocer los principios de reserva
de ley, legalidad y tipicidad, en cuanto las conductas, las sanciones y el
procedimiento que informan el ejercicio de la potestad sancionadora y la
regulacin de los servicios pblicos domiciliarios, deban estar contenidos en la
ley.

ii) Ahora bien, establecido entonces que las empresas de servicios pblicos
domiciliarios no se encuentran facultadas para imponer cobros adicionales al
consumo como consecuencia del ejercicio de una potestad administrativa
sancionadora, debe la Sala determinar si las empresas podan imponer estos
cobros por la otra va alegada, esto es, mediante la consideracin de que la
habilitacin para efectuar estos cobros deviene del ejercicio de una facultad
prevista en el derecho privado en lo atinente a las clusulas penales.

1- Lo primero que debe sealarse es que, segn qued anotado en el apartado 7

103 Cabe destacar que, mediante Memorando nmero 20071300011223 de 12 de febrero de 2007, la
Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios adopt la posicin segn la cual las empresas de
servicios pblicos no tienen facultad para la imposicin de sanciones pecuniarias, modificando as el criterio
que inicialmente haba sostenido.
104 En efecto, mediante sentencia de 30 de julio de 2008, la Seccin Tercera del Consejo de Estado decidi la
accin de simple nulidad formulada en contra del artculo 54 de la Resolucin No. 108 de 1997 proferida por la
Comisin de Regulacin de Energa y Gas, el cual estableca la facultad de las empresas de servicios pblicos
domiciliarios para sancionar pecuniariamente a los usuarios.
El Consejo de Estado declar nulo el artculo acusado, bajo la consideracin de que la facultad de imponer
sanciones pecuniarias, en tanto ejercicio de una potestad sancionatoria, debe tener origen legal y no puede
fundarse en normativas de menor rango.

89
Sentencia SU-1010 de 2008

de esta providencia, es claro que la materia referente a los efectos que se


derivan del incumplimiento del contrato de servicios pblicos domiciliarios, fue
regulada ntegramente por el legislador a travs de la Ley 142 de 1994.

En efecto, la sealada Ley prev de manera expresa que en caso de que el


usuario incurra en inobservancia de las obligaciones que surgen del contrato de
condiciones uniformes, las empresas de servicios pblicos domiciliarios estn
facultadas para (i) suspender el servicio (arts. 130 y 140), (ii) proceder al corte
del mismo y, en ltimas, (iii) para dar por terminado el contrato (art. 141).
Cuando el deber incumplido se relaciona concretamente con la falta de pago de
la factura correspondiente, las empresas estn habilitadas, adems, (iv) para
cobrar los intereses moratorios sobre los saldos insolutos (art. 96) y (v) para
facturar el servicio efectivamente consumido y no facturado (art. 146).

Como se extrae de las normas citadas, el legislador estim necesario regular de


manera especfica lo concerniente a las facultades que tienen las empresas de
servicios pblicos domiciliarios en caso de incumplimiento del contrato de
condiciones uniformes, frente a las normas generales que se establecen en el
derecho privado para estos mismos eventos. El hecho de que el rgano de
representacin popular haya decidido consagrar previsiones especiales en este
mbito responde, fundamentalmente, al reconocimiento de la naturaleza
especial del contrato de servicios pblicos domiciliarios y a la importancia del
objeto contractual en l involucrado, por su inescindible relacin con la
satisfaccin de las necesidades bsicas de la comunidad.

Las disposiciones especiales previstas en la Ley 142 de 1994 en relacin con


los efectos derivados del incumplimiento del contrato de condiciones uniformes
y con las facultades de las empresas prestadoras en estos casos, agotan la
regulacin de este tema en materia de servicios pblicos domiciliarios. En
efecto, dado que estas disposiciones responden a las particularidades propias de
este tipo de contratos y regulan de manera especial e integral este asunto, no es
posible que por va de la analoga o de la remisin normativa, se recurra a
figuras jurdicas previstas en el derecho privado, como, en este caso, a la
clusula penal pecuniaria.

Sobre esto ltimo, cabe precisar que la remisin que hace el artculo 132 de la
Ley 142 de 1994 a las normas del derecho privado, se relaciona con la
posibilidad de incorporar en el contrato de servicios pblicos domiciliarios,
reglas establecidas en el Cdigo Civil o en el Cdigo de Comercio respecto de
aspectos generales que no se encuentren previstos o regulados en la Ley 142 de
1994, esto es, siempre que se trate de situaciones no reguladas de manera
especial en dicha legislacin. Una interpretacin diversa a la sealada llevara a
considerar que, a pesar de que el legislador haya establecido una regulacin
especfica e integral de determinada materia, es posible modificarla o derogarla
tcitamente a travs de la remisin a figuras previstas en otras normas de
carcter general, en este caso del derecho privado de los contratos, generando

90
Sentencia SU-1010 de 2008

una modificacin de las previsiones especiales.

En este sentido, debe recordarse que, de acuerdo con el artculo 5 de la Ley 57


de 1887, el cual contiene reglas de hermenutica en materia de aplicacin de
normas jurdicas, cuando exista una ley especial que regule determinada
materia, se preferir para su aplicacin sta frente a otra que tenga carcter
general. As, el artculo en mencin establece:

ARTICULO 5o. Cuando haya incompatibilidad entre una disposicin


constitucional y una legal, preferir aqulla.
Si en los Cdigos que se adoptan se hallaren algunas disposiciones
incompatibles entre s, se observarn en su aplicacin las reglas siguientes:
1) La disposicin relativa a un asunto especial prefiere a la que tenga
carcter general;
2) Cuando las disposiciones tengan una misma especialidad generalidad,
y se hallen en un mismo Cdigo, preferir la disposicin consignada en
artculo posterior; y si estuvieren en diversos Cdigos preferirn, por razn
de stos, en el orden siguiente: Civil, de Comercio, Penal. Judicial,
Administrativo, Fiscal, de Elecciones, Militar, de Polica, de Fomento, de
Minas, de Beneficencia y de Instruccin Pblica. (Se resalta)

En esta misma direccin y en relacin con las remisiones normativas que, en


ocasiones, introduce el legislador en el texto de algunas leyes, la jurisprudencia
constitucional ha sealado que ellas se refieren a aspectos no regulados
expresamente en la legislacin especial, ya que slo de esa manera es posible
armonizar las disposiciones especficas y la remisin a normas de contenido
general.

Esta fue precisamente la consideracin expuesta por la Corte al efectuar el


juicio de inconstitucionalidad del artculo 171 del Cdigo Contencioso
Administrativo, norma referida a la forma de imponer la condena en costas en
este tipo de procesos y en la cual el legislador estableci una remisin a las
disposiciones del Cdigo de Procedimiento Civil. Dentro de los argumentos
expuestos en esa oportunidad por el demandante, se encontraba la supuesta
contradiccin existente entre la norma acusada y la legislacin ordinaria, ya que
mientras en la primera de ellas se exiga la valoracin de la conducta asumida
por las partes como requisito para la imposicin de las costas, en el Cdigo de
Procedimiento Civil ello obedeca simplemente a la ocurrencia de un hecho
objetivo, esto es, a que la parte fuera vencida en juicio.

Adelantado el anlisis correspondiente, la Corte concluy que no era posible


estimar que en virtud de la remisin normativa, exista algn tipo de
contradiccin entre la norma especial y la general, ni tampoco que se haba
presentado una violacin del principio de igualdad por la diferencia de trato
establecida entre los juicios que se siguen entre particulares y aquellos en los
que se involucra el Estado. En este sentido, la Corte sostuvo:

91
Sentencia SU-1010 de 2008

Por ello, debe entenderse que esta disposicin [el artculo 171 del Cdigo
Contencioso Administrativo] define un carcter subjetivo de la
responsabilidad por el reembolso de dichas costas, es decir una
responsabilidad que slo opera cuando existe una conducta reprochable
atribuible a la parte vencida. Por ser una disposicin especial, prevalece
sobre cualquier otra que regule el mismo asunto en otros asuntos.

Ahora bien, la remisin al C.P.C. debe entenderse hecha para regular de


acuerdo con sus normas aquellos aspectos relativos a la condena en costas
no contemplados en el C.C.A, tales como la oportunidad para proferirla,
las normas que se aplican para su liquidacin, los recursos que proceden
contra la providencia que las decreta y todos aquellos asuntos a que se
refieren los artculos 392 y 393 del C.P.C. As, su aplicacin es de carcter
supletivo, es decir, solo opera en ausencia de norma expresa en el
C.C.A.105

En consecuencia, al encontrar que los elementos de valoracin que deba


considerar el juez al momento de imponer las costas en los procesos
contenciosos administrativos, haban sido establecidos de manera especfica por
el legislador en la ley especial aplicable, la Corte estim que no poda alegarse
una remisin a la legislacin ordinaria en este asunto.

En este orden de ideas, como quiera que la Ley 142 de 1994 establece una
regulacin especial e integral en torno a las consecuencias que se generan por el
incumplimiento del contrato por parte de los usuarios y a las facultades que
pueden ejercer las empresas en estos eventos, no es posible alegar una remisin
a las normas generales del derecho privado en este tema, dentro de las cuales se
encuentra aquella que habilita a las partes para pactar clusulas penales
pecuniarias, por cuanto se trata de una situacin que encuentra una regulacin
especfica e integral en la ley especial aplicable al contrato de servicios
pblicos domiciliarios, y all no se contempl la posibilidad de pactar la
clusula penal.

No se discute que, en virtud del postulado de la autonoma de la voluntad, sea


posible que en los contratos en que es parte la Administracin se pueda pactar
la clusula penal. Sin embargo, tratndose del contrato de servicios pblicos
domiciliarios, por ser tales servicios inherentes a la finalidad social del Estado y
comprometer intereses superiores de la colectividad, el Estado est en la
obligacin de intervenirlo, en procura de mantener el equilibrio contractual
frente a la situacin de privilegio en que se encuentra una de las partes. Bajo
ese entendido, el ejercicio de la autonoma de la voluntad est sujeto a la
regulacin especial que sobre la materia expida el legislador, quien en
representacin del Estado, tiene a su cargo la funcin de fijar el rgimen

105 Sentencia C-043 de 2004, Magistrado Ponente: Marco Gerardo Monroy Cabra.

92
Sentencia SU-1010 de 2008

jurdico que les es aplicable a los servicios pblicos (C.P. art. 150-23, 365, 367
y 369).

Este criterio ya haba sido expresado por la jurisprudencia constitucional. En


efecto, mediante Sentencia T-197 de 2007106, la Sala Quinta de Revisin de la
Corte Constitucional sostuvo que, como quiera que los servicios pblicos son
inherentes a la finalidad social del Estado, lo que implica que sea necesaria la
intervencin estatal en este mbito para regular las relaciones que se generan
entre las empresas prestadoras y los usuarios, no es posible reconducir estas
decisiones al simple ejercicio de una facultad de las previstas en el derecho
privado, y que no ha sido prevista en el rgimen especial de los servicios
pblicos.

En este sentido, la Sala sostuvo:

Finalmente, no le asiste razn al apoderado de la empresa acciona[da], en


el sentido de que la imposicin de sanciones pecuniarias por incumplimiento
del contrato no es una funcin administrativa sino que hace parte del derecho
privado de las empresas de servicios pblicos domiciliarios, por lo siguiente:

1. La garanta de la prestacin de los servicios pblicos domiciliarios


corresponde a la finalidad social del Estado, de conformidad con lo dispuesto
en el artculo 365 de la Constitucin Poltica.107

2. En consecuencia con lo anterior, el Estado debe intervenir en la relacin que


existe entre las empresas (bien sean de carcter pblico o privado) y los
usuarios, con el fin de regular las relaciones contractuales contenidas en el
Contrato de Condiciones Uniformes.

3. A pesar de que entre las empresas de servicios pblicos domiciliarios y los


usuarios surge una relacin contractual de carcter privado que supone
situaciones estatutarias y regladas, sus actuaciones se encuentran sujetas a
los mismos controles a los que el ordenamiento jurdico somete a las
autoridades pblicas. En consecuencia, los actos proferidos por estas
empresas estn sujetos al control de la jurisdiccin Contencioso
Administrativa.108 (Subraya en texto)

106 Magistrado Ponente: Marco Gerardo Monroy Cabra.


107 El artculo 365 de la Constitucin Poltica establece que: Los servicios pblicos son inherentes a la
finalidad social del Estado. Es deber del Estado asegurar su prestacin eficiente a todos los habitantes del
territorio nacional.
108 Al respecto se puede consultar, entre otras, las sentencias C-236 de 1996, Magistrado Ponente: Antonio
Barrera Carbonell; C-558 de 2001, Magistrado Ponente: Jaime Araujo Rentera y, particularmente, la
sentencia T-1150 de 2001, Magistrado Ponente: lvaro Tafur Galvis.

93
Sentencia SU-1010 de 2008

A partir de tales consideraciones, la Sala concluy que los cobros efectuados


por las empresas de servicios pblicos domiciliarios, no pueden ampararse en
disposiciones pertenecientes al mbito exclusivo del derecho privado de los
contratos.

2- En apoyo de lo expuesto anteriormente, debe resaltarse adems, el hecho de


que en el contrato de servicios pblicos domiciliarios no se est frente al
acuerdo de voluntades de dos particulares que se encuentran en un mismo plano
de igualdad y que han celebrado un contrato con objeto que involucre intereses
netamente privados.

Por el contrario, de un lado, es evidente que en el contrato de condiciones


uniformes, la autoridad administrativa o el particular a quien se le ha habilitado
para su prestacin, se encuentra en una posicin de privilegio en relacin con el
usuario, ya que el primero de ellos goza de unas prerrogativas y potestades
especiales que el legislador le ha otorgado, con el fin de asegurar la prestacin
eficiente de dichos servicios a todos los habitantes del territorio nacional.

Esta posicin de privilegio se manifiesta, adems, en una de las caractersticas


que identifica el contrato de servicios pblicos domiciliarios, el de ser un
contrato de adhesin, lo que significa que las clusulas que regulan el
contrato, por lo general, son redactadas previa y unilateralmente por la
empresa de servicios pblicos, sin ofrecerle a los usuarios la posibilidad de
deliberar y discutir sobre el contenido de las mismas 109; caracterstica que,
como lo ha sostenido esta Corte, hace necesario que estos contratos deb[a]n
ser objeto de la intervencin estatal para introducir en ellos el equilibrio.110

Pero adicionalmente, y de otra parte, es claro que el objeto de este acuerdo no


involucra intereses de contenido netamente privado, sino que se trata de un
contrato a travs del cual se busca el cumplimiento de una funcin pblica que,
por expresa disposicin constitucional, es inherente a la finalidad social del
Estado, esto es, la prestacin de servicios pblicos de carcter domiciliario.

Precisamente, a partir del reconocimiento de la importancia de este objeto


contractual, la Corte Constitucional ha sealado que el contrato de prestacin
de servicios pblicos no queda plenamente librado a la absoluta autonoma de
la voluntad, puesto que, aun si se trata de personas privadas, por involucrar
intereses superiores por los cuales ha de velar el Estado, se encuentra
sometido a la intervencin de ste, a travs de la ley, en todo lo relativo a la
determinacin de los derechos y deberes de los usuarios, el rgimen de su
proteccin y su forma de participacin en la gestin y fiscalizacin de las
empresas que asumen esa funcin. Adems, segn lo dispuesto en el artculo
365 de la Constitucin, los servicios pblicos estarn sometidos al rgimen

109 Sentencia C-075 de 2006, Magistrado Ponente: Rodrigo Escobar Gil.


110 Sentencia C-1162 de 2000, Magistrado Ponente: Jos Gregorio Hernndez Galindo.

94
Sentencia SU-1010 de 2008

jurdico que fije la ley, y, como anteriormente se indic, el Estado mantendr la


regulacin, el control y la vigilancia de dichos servicios.111

As las cosas, el desequilibrio en el que se encuentran las partes y el hecho de


que el objeto contractual se relacione con una actividad inherente a la finalidad
social del Estado, en los trminos del artculo 365 constitucional, tambin
llevan a concluir que tratndose del contrato de servicios pblicos
domiciliarios, existen razones objetivas para justificar la exigencia de que ste
se encuentre regulado por un ordenamiento especial, lo que implica que
medidas como las adoptadas por las empresas accionadas no puedan estar
circunscritas al mbito exclusivo del derecho privado, en este caso, a la
aplicacin analgica de la clusula penal.

La asimetra de poder que existe entre las empresas de servicios pblicos


domiciliarios y los usuarios o suscriptores, descarta entonces cualquier
posibilidad de aplicacin analgica de la clusula penal en el contrato de
prestaciones uniformes.

9.4. En consecuencia, para la Corte es claro que las empresas de servicios


pblicos domiciliarios no estn facultadas para imponer sanciones de tipo
pecuniario a los usuarios, ni por la va del ejercicio de una potestad
administrativa sancionatoria, ni tampoco como consecuencia del ejercicio de
una potestad de las previstas en el derecho privado, esto, a travs de las
clusulas penales.

En consecuencia, los cobros que se han hecho a ttulo de sancin comportan


una clara y evidente violacin de los artculos 6, 29 y 210 constitucionales, en
tanto constituyen una extralimitacin de las funciones y prerrogativas que les
han sido reconocidas por la ley a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, independientemente de su naturaleza jurdica, ya sean pblicas o
privadas. Estas actuaciones, han comportado una vulneracin del derecho al
debido proceso de los usuarios, por haber sido impuestas con absoluto
desconocimiento de los principios de reserva de ley y de los principios de
legalidad y tipicidad, en cuanto las conductas, la sancin y el procedimiento
que informan el ejercicio de la potestad sancionadora y la regulacin de los
servicios pblicos domiciliarios, deban estar contenidos en la ley.

9.5. Procedencia de la accin de tutela para cuestionar las decisiones


administrativas a travs de las cuales las empresas de servicios pblicos
domiciliarios impusieron sanciones pecuniarias a los usuarios.

Finalmente, le corresponde a la Corte Constitucional establecer si la accin de


tutela es el mecanismo procedente para la proteccin del derecho al debido
proceso de los usuarios, a quienes las empresas de servicios pblicos
domiciliarios les impusieron sanciones de contenido pecuniario112.
111 Ibdem.
112 En relacin con los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-1.828.811 y T-1.836.549, la

95
Sentencia SU-1010 de 2008

De conformidad con lo previsto en el inciso final del artculo 86 de la


Constitucin Poltica, la accin de tutela procede para solicitar la proteccin
inmediata de derechos fundamentales, cuando stos resulten vulnerados o
amenazados por la accin o la omisin de cualquier autoridad pblica o de
particulares en los casos que defina la Ley, en particular, cuando quiera que: i)
estn encargados de la prestacin de un servicio pblico; ii) su conducta afecte
de manera grave y directa el inters colectivo o iii) cuando el peticionario se
encuentre, en relacin con el particular demandado, en estado de subordinacin
o de indefensin113.

En el mismo sentido, el artculo 42 del Decreto 2591 de 1991 establece las


causales de procedencia de la accin de tutela contra las actuaciones u
omisiones de los particulares; en su numeral 3, la norma dispone:

ARTICULO 42. PROCEDENCIA. La accin de tutela proceder contra


acciones u omisiones de particulares en los siguientes casos:

3. Cuando aqul contra quien se hubiere hecho la solicitud est encargado de


la prestacin de servicios pblicos domiciliarios. (). (Se resalta.)

As las cosas, es claro que, por expresa disposicin constitucional, la accin de


tutela es procedente frente a las empresas de servicios pblicos domiciliarios,
sean estas autoridades pblicas o particulares, cuando sus acciones u omisiones
comporten la vulneracin de los derechos fundamentales de los usuarios.

Sobre el tema, la jurisprudencia constitucional ha sealado que la procedencia


de la accin de tutela contra particulares a cuyo cargo se encuentre la prestacin
de servicios pblicos domiciliarios, se explica en razn de la posicin de
privilegio que stos ostentan y que rompe el plano de igualdad propio de las
relaciones entre particulares, al colocar a la empresa prestadora en una postura
de preeminencia similar a la que detentan las autoridades pblicas.

No obstante lo anterior, como quiera que el legislador ha previsto distintos


mecanismos, tanto administrativos como judiciales, para que los usuarios
puedan solicitar la proteccin de los derechos que estiman vulnerados, la
procedencia de la accin de tutela se encuentra supeditada al hecho de que se
est frente a la inminente configuracin de un perjuicio de carcter irremediable
o a que el otro medio de defensa se muestre ineficaz para la proteccin
inmediata del derecho fundamental que se alega vulnerado114.

Sala se referir a la procedencia de la accin de tutela, en el acpite correspondiente al caso concreto.


113 Al respecto consultar, entre otras, las sentencias T-695 de 2003 M.P. Alfredo Beltrn Sierra, T-484 de
2005 M.P. Alfredo Beltrn Sierra, T-595 de 2005 M.P. Alfredo Beltrn Sierra y T-769 de 2005 M.P. Clara Ins
Vargas Hernndez.
114 Ver la Sentencia T-509 de 1993, en el mismo sentido las sentencias T-617 y T-638 de 1998, T-693 de
1999.

96
Sentencia SU-1010 de 2008

En relacin con este asunto, la Corte Constitucional ha sealado:

() la regla general es que la constitucionalidad y legalidad de las


actuaciones de las empresas de servicios pblicos domiciliarios estn
sometidas al escrutinio del juez administrativo mediante el ejercicio de las
acciones de nulidad o de nulidad y restablecimiento del derecho, segn las
circunstancias.

() De esta manera, existiendo otro medio de defensa judicial idneo, la


tutela en principio es improcedente para controvertir los actos de las
empresas de servicios pblicos domiciliarios, inclusive aquellos que imponen
sanciones, salvo cuando las circunstancias concretas del caso y los derechos
fundamentales involucrados en el mismo tornan ineficaces las acciones
contenciosas administrativas o implican la inminencia de un perjuicio
irremediable para el actor. (Negrilla fuera de texto)

Y, en el mismo sentido, esta Corporacin sostuvo:

A partir del anterior rastreo jurisprudencial, puede inferirse que dada la


importancia y el impacto social que tienen los servicios pblicos domiciliarios
en el diario vivir de todos los habitantes del territorio nacional se ha hecho
necesario la intervencin excepcional del juez de tutela, en aras de
materializar los derechos contenidos en el ordenamiento superior entendido
ste no slo como el articulado de la Carta Poltica sino, adems, con la
integracin de los instrumentos internacionales sobre derechos humanos que
conforman el bloque de constitucionalidad.

Por ello puede afirmarse que: i) por regla general la accin no resulta
procedente para entrar a dirimir controversias entre el usuario y/o suscriptor
y, las empresas de servicios pblicos domiciliarios, por cuanto para ese fin
existen otros medios de defensa judicial, ii) que excepcionalmente y solamente
atendiendo las circunstancias de cada caso resulta procedente la accin de
tutela para proteger derechos fundamentales del administrado como por
ejemplo la honra, el derecho de peticin, el derecho a la igualdad, el derecho
de defensa y el debido proceso cuando stos han sido amenazados o
vulnerados por las empresas de servicios pblicos domiciliarios. 115

Adicionalmente, la Corte Constitucional ha expresado que la valoracin de la


eficacia de los otros medios de defensa con los que cuenta el afectado, no debe
realizarse en abstracto, sino que debe ser considerada frente a cada caso
concreto, para lo cual el juez de tutela deber examinar si estos mecanismos
efectivamente pudieron ser utilizados por el afectado. Para tal fin, debe el
115 Sentencia T-270 de 2004, Magistrado Ponente: Jaime Crdoba Trivio.

97
Sentencia SU-1010 de 2008

fallador estimar que existen eventos en los cuales el usuario se encuentra en una
situacin de indefensin tal frente a la actuacin arbitraria de la empresa
accionada, que el hecho adquiere relevancia constitucional y exige la
intervencin inmediata del juez constitucional con el fin de proteger los
derechos fundamentales de los afectados.

Sobre el particular, esta Corporacin ha sostenido que:

puede afirmarse que existe una indefensin de relevancia constitucional


cuando el administrado de forma sistemtica es sometido por las autoridades a
una situacin que produce efectivo y real menoscabo del derecho de defensa,
por no existir materialmente dentro de la actuacin iniciada en su contra
oportunidades para la oposicin o contradiccin de las imputaciones que sobre
l recaen o incluso existiendo formalmente los mecanismos de defensa stos no
tienen ninguna incidencia en la decisin que adopta la autoridad en la medida
en que con o sin la intervencin del afectado la administracin adopta la
decisin en contra de los intereses de aqul.

As, cuando estas pautas fundamentales son inobservadas se est frente a un


ejercicio arbitrario del poder que hace que la indefensin tenga trascendencia
constitucional, puesto que es de tal intensidad que lesiona el ncleo o
contenido esencial de la garanta al debido proceso administrativo tornando
en absoluto el poder de las autoridades con lo cual se desconocen los lmites
impuestos por el orden jurdico y especialmente por el marco constitucional.
(Negrilla fuera de texto)

En este orden de ideas, dado que la relacin existente entre el usuario o


suscriptor y la empresa de servicios pblicos domiciliarios es, de suyo,
asimtrica, y a que el objeto contractual constituye un fin social del Estado -la
prestacin de los servicios pblicos domiciliarios-, pueden darse situaciones en
las cuales es necesaria la intervencin inmediata del juez constitucional, aun
sobre la base de que existan otros medios ordinarios de defensa
-administrativos y judiciales-. Ello ocurre, por ejemplo, frente al ejercicio
arbitrario del poder por parte de las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, cuando ello comporta una vulneracin de los derechos
fundamentales de los usuarios, particularmente de su derecho al debido
proceso, colocndolos en un estado de indefensin que no puede ser revertido
por otros medios de defensa y respecto del cual stos no tienen ninguna
incidencia.116

En consecuencia, cuando quiera que la actuacin de las empresas de servicios


pblicos domiciliarios frente a los usuarios se torne arbitraria y contraria al
orden jurdico, valindose de su posicin de privilegio, la accin de tutela
resulta procedente como mecanismo de proteccin de los derechos

116 Sobre el tema puede consultarse, entre otras, la sentencia T-854 de 2006, Magistrado Ponente: lvaro
Araujo Rentera.

98
Sentencia SU-1010 de 2008

fundamentales del usuario, frente a la ineficacia de los medios ordinarios de


defensa judicial para proteger de manera inmediata los derechos conculcados.

En los casos objeto de estudio, las entidades accionadas han impuesto


sanciones de contenido pecuniario a los usuarios frente al incumplimiento del
contrato de condiciones uniformes. A pesar de que la mayora de ellos
ejercieron el recurso de reposicin ante la propia entidad, e incluso en algunos
casos, los recursos de apelacin y queja ante la Superintendencia de Servicios
Pblicos Domiciliarios, lo cierto es que stos fueron decididos bajo la
consideracin de que las empresas de servicios pblicos domiciliarios s estn
facultadas para imponer sanciones de contenido pecuniario, conclusin que, de
acuerdo a lo anteriormente expuesto, resulta inaceptable.

En este sentido, es claro que los recursos administrativos con los que cuentan
los accionantes no resultan eficaces como mecanismo para solicitar la
proteccin de sus derechos fundamentales, puesto que el encargado de
decidirlos tiene como parmetro una interpretacin errada del ordenamiento
que regula la materia.

En el mismo sentido y en relacin con los medios de defensa judicial a los que
pueden acudir los accionantes, encuentra la Sala que stos tampoco resultan ser
eficaces para lograr la proteccin inmediata de los derechos conculcados, toda
vez que la mora en el pago de las sanciones pecuniarias arbitrariamente
impuestas, ha ocasionado que algunos accionantes se hayan visto privados de la
prestacin del servicio pblico domiciliario y otros se encuentren frente a la
amenaza inminente de que ello ocurra. Esta situacin pone en grave riesgo la
posibilidad de que los usuarios puedan ver satisfechas sus necesidades bsicas,
en tiempo presente, lo que exige la intervencin inmediata del juez
constitucional.

As las cosas, frente al ejercicio arbitrario de poder por parte de las empresas de
servicios pblicos domiciliarios que, sin tener facultad para ello, han impuesto
sanciones de contenido pecuniario a los usuarios, la accin de tutela es
procedente como mecanismo de proteccin directo e inmediato del derecho al
debido proceso de los afectados.

Establecido lo anterior, pasa la Sala a dar solucin a los casos objeto de


revisin.

10.Casos concretos.

10.1. Expedientes T-1.410.120, T-1.540.637, T-1.541.417, T-1.541.805, T-


1.546.704, T-1.546.830, T-1.548.002, T-1.550.439, T-1.550.854, T-1.553.717,
T-1.557.174, T-1.559.660, T-1.570.640, T-1.572.628, T-1.572.853, T-
1.573.598, T-1.573.600, T-1.573.681, T-1.573.787, T-1.574.070, T-1.574.078,
T-1.574.079, T-1.575.094, T-1.575.659, T-1.579.196, T-1.618.168, T-
1.619.105, T-1.619.182, T-1.621.210, T-1.621.497, T-1.621.963, T-1.622.627,

99
Sentencia SU-1010 de 2008

T-1.622.802, T-1.622.835, T-1.622.894, T-1.623.944, T-1.624.749, T-


1.625.827, T-1.631.213, T-1.632.319, T-1.632.544, T-1.635.364, T-1.639.727 y
T-1.639.736.

1. Tal como se rese en el acpite de antecedentes de la presente providencia,


en todos los procesos de tutela sub exmine, salvo en el caso de los expedientes
radicados con los nmeros T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-1.828.811
y T-1.836.549, los actores manifiestan que las empresas accionadas han
efectuado el cobro de unas sumas de dinero que van ms all de la
contraprestacin por el servicio consumido y que corresponden a la imposicin
de una sancin pecuniaria, actuacin para la cual las empresas de servicios
pblicos domiciliarios no se encuentran expresamente facultadas por la ley.

Segn afirman, dicha situacin comporta una vulneracin de su derecho al


debido proceso y, adems, de otros derechos de rango fundamental como el
derecho a la vida digna, ya que la mora en el pago de los cobros impuestos ha
generado, en algunos casos, que la prestacin del servicio pblico domiciliario
respectivo haya sido suspendida y, en otros, que los accionantes se encuentren
frente a la amenaza inminente de que ello ocurra.

Por su parte, las accionadas sostienen que ellas s se encuentran habilitadas para
imponer el cobro de sumas de dinero por encima del costo del servicio, tanto
por la va del ejercicio de una potestad sancionatoria administrativa que les ha
sido conferida por la ley, como por la de la exigencia de una clusula penal de
las previstas en el derecho privado. En todo caso, afirman que en la mayora de
los expedientes objeto de revisin, las sumas de dinero cobradas no responden
al concepto de sancin, sino al de recuperacin del servicio efectivamente
consumido pero dejado de facturar.

De manera general cabe sealar que, de acuerdo con el material probatorio que
obra en los expedientes, dichos cobros fueron facturados por las empresas
accionadas, luego de realizar procesos administrativos que concluyeron con la
expedicin de decisiones empresariales en las que se declar el
incumplimiento del contrato de condiciones uniformes y, como consecuencia de
ello, se impuso a los usuarios el cobro de sumas de dinero adicionales al valor
por el consumo del servicio.

Establecida la situacin fctica que dio origen al presente asunto, la Sala


encuentra necesario, en primer lugar, fijar las premisas a partir de las cuales se
decidirn los expedientes objeto de revisin:

1.1. Para empezar, debe recordarse que, de acuerdo con las consideraciones
expuestas en la presente providencia, las empresas de servicios pblicos

100
Sentencia SU-1010 de 2008

domiciliarios no se encuentran facultadas por la ley para imponer sanciones de


contenido pecuniario.

En efecto, ninguna disposicin de la ley de servicios pblicos domiciliarios o


de otra normatividad de ese mismo rango, establece la potestad de las empresas
prestadoras para imponer sanciones pecuniarias a los usuarios, en razn del
incumplimiento del contrato de condiciones uniformes. En igual sentido y
segn se expuso en el acpite 9.2. de esta providencia, las caractersticas de la
actuacin que han adelantado las empresas accionadas no permiten
circunscribirla en el mbito exclusivo del derecho privado en materia de
clusulas penales, por lo que tampoco por esta va podran imponerle a los
usuarios cobros adicionales al consumo.

En este escenario, los actos mediante los cuales las empresas han efectuado
cobros a ttulo de sancin, constituyen actuaciones arbitrarias e injustificadas
que comportan una vulneracin del derecho fundamental al debido proceso de
los usuarios, por haber sido expedidas sin tener facultad para el efecto.

Adicionalmente y dado que como consecuencia de dichas actuaciones y frente a


la imposibilidad de pagar las sumas ilegalmente cobradas, algunos usuarios se
han visto privados de los servicios pblicos domiciliarios que prestan las
empresas accionadas y otros se encuentran frente al riesgo inminente de que
esto suceda, es claro que esta situacin tambin genera una violacin de otros
derechos de rango fundamental de los usuarios, tales como el derecho a la vida
en condiciones dignas, a la salud y a la dignidad humana.

1.2. Ahora bien, en relacin con el cobro del servicio consumido pero dejado de
facturar, tal y como se expuso en el acpite 7.3 de esta sentencia, las empresas
de servicios pblicos domiciliarios s se encuentran facultadas para realizar
dicho cobro.

En efecto, el artculo 149 de la Ley 142 de 1994 establece que cuando se genere
una desviacin significativa del consumo frente a periodos anteriores, las
empresas debern establecer la causa de la misma y, posteriormente, podrn
cobrar la diferencia entre el valor efectivamente pagado por el usuario y el que
debi cancelarse, o abonarla a la cuenta del suscriptor si llegaran a presentarse
saldos a su favor.

As las cosas, es claro que el legislador s facult a las empresas de servicios


pblicos domiciliarios para recuperar el costo del servicio que se ha consumido
pero respecto del cual no se ha recibido el pago.

1.3. Por ltimo, debe sealarse que, tal y como lo establece el artculo 96 de la
Ley 142 de 1994, las empresas de servicios pblicos domiciliarios pueden
efectuar el cobro de intereses de mora en caso de incumplimiento de los
usuarios en el pago de los servicios, facultad a la que ellas, si as lo estiman

101
Sentencia SU-1010 de 2008

conveniente, podran renunciar en aras de facilitar la cancelacin de los saldos


insolutos.

De esta manera, frente al incumplimiento en el pago del servicio consumido,


las empresas pueden realizar la liquidacin de los intereses moratorios que se
causen. No obstante lo anterior, y en los trminos de la sentencia C-389 de
2002, cuando quiera que se trate de usuarios o suscriptores de inmuebles
residenciales, las empresas no pueden aplicar la tasa establecida en el Cdigo
de Comercio, sino que deben acudir a la tasa menos gravosa, esta es, a la
dispuesta en el Cdigo Civil.

Bajo las anteriores premisas, pasa la Sala a analizar la situacin que se present
en los casos objeto de revisin.

2. El anlisis de los actos administrativos a travs de los cuales las empresas


dieron por terminado los procesos que se le siguieron a los accionantes, indica
que las decisiones adoptadas por las demandadas pueden clasificarse, en razn
de los conceptos que en ellas se cobraron, fundamentalmente en tres grupos:

i) Aquellas en las que la parte resolutiva del acto contempla como nico
concepto de cobro el de sancin. As, por ejemplo, en el expediente T-
1.541.805 la empresa Electricaribe S.A., E.S.P. dispuso:

RESUELVE: () Imponer una sancin pecuniaria por la suma de


$3.883.380 de conformidad con el contrato de condiciones uniformes y
dems normas concordantes. (Se resalta)

En esta misma situacin se encuentran los expedientes T-1.548.002,


T-1.572.853117 T-1.623.944, T-1.632.319 T-1.632.544, T-1.635.364 y
T-1.639.727118.

ii) Aquellas en las que las decisiones contemplan un valor total que
incluye un cobro por la imposicin de una sancin pecuniaria y otro
por el servicio consumido y dejado de facturar.

Dentro de estas, hay unas en las que las empresas no discriminan la


suma correspondiente a cada uno de estos conceptos y otras en las que
s se presentan los rubros de manera independiente.

De esta manera, en el expediente T-1.574.079, la empresa accionada


impuso un cobro global, sin manifestar qu porcentaje de dicha suma
representa el concepto de sancin y cul el de servicio consumido y
no facturado; en efecto, en la decisin sancionatoria la entidad

117 En la decisin de 28 de agosto de 2006.


118 En la decisin de 8 de octubre de 2004.

102
Sentencia SU-1010 de 2008

resolvi () Cobrar la energa dejada de facturar correspondiente


e imponer una sancin pecuniaria por una suma total de
$2.883.950,00 (Negrilla fuera de texto)

Igual frmula fue utilizada en los expedientes T-1.410.120, T-


1.572.853119, T-1.573.600, T-1.574.070, T-1.574.078, T-1.575.094, T-
1.575.659, T-1.579.196, T-1.618.168, T-1.621.210 y T-1.624.749.

Por su parte, en los expedientes T-1.540.637, T-1.541.417, T-


1.546.704, T-1.546.830, T-1.550.439, T-1.550.854, T-1.557.174, T-
1.559.660, T-1.570.640, T-1.572.628, T-1.573.598, T-1.573.681, T-
1.619.182, T-1.621.497, T-1.621.963, T-1.622.627, T-1.622.894 y T-
1.625.827, las decisiones presentan los rubros de manera
independiente. As, por ejemplo, en el expediente T-1.573.598 la
empresa Gases del Caribe S.A., E.S.P., dispuso:

() Imponer al servicio de gas natural del inmueble ubicado en () una


sancin equivalente a $1.690.284,36, por concepto de infraccin del
artculo 49 del Contrato de Condiciones Uniformes, en lo referente a
manipulacin de equipos, redes y acometidas, como se demostr durante
la actuacin adelantada, discriminados as:

Consumo no facturado $150.858,00


Contribucin 8.9% $13.426,36
Sancin por manipulacin de equipos $1.526.000,00
Total $1.690.284,36

iii) Y, finalmente, aquellas en las que las decisiones administrativas


contemplan nicamente un rubro por concepto de servicio consumido
y dejado de facturar, tal como sucede, por ejemplo, en el caso del
expediente T-1.639.736, en el cual la empresa accionada resolvi:
() Informar al usuario que debe cancelar la suma de
cuatrocientos once mil novecientos sesenta y dos pesos
($411.962.oo), de conformidad con lo expuesto en la presente
decisin, por consumos dejados de facturar. (Se resalta)

Esta es la situacin que se presenta en los expedientes T-1.553.717, T-


1.573.787, T-1.619.105, T-1.622.802, T-1.622.835, T-1.631.213 y T-
1.639.727120.

Todas las decisiones administrativas adoptadas por las empresas en los casos
objeto de revisin, se encuadran en uno de los grupos atrs sealados, lo que
exige entonces que esta Sala efecte un anlisis de cada uno de ellos, a fin de

119 En la decisin de 29 de septiembre de 2006


120 En la decisin de 16 de marzo de 2006.

103
Sentencia SU-1010 de 2008

establecer si las decisiones adoptadas comportaron una vulneracin de los


derechos fundamentales de los accionantes.

Cabe anotar, que en ninguna de las decisiones administrativas sealadas las


empresas mostraron a los accionantes de manera clara y expresa, las frmulas
utilizadas para calcular los valores finalmente cobrados y el clculo de los
mismos.

2.1. En relacin con los dos primeros grupos, es claro que la inclusin de
cobros a ttulo de sancin pecuniaria en las decisiones administrativas
adoptadas por las demandadas, constituye una extralimitacin de las funciones
y prerrogativas que les han sido reconocidas por la ley a las empresas de
servicios pblicos domiciliarios.

En efecto, como se ha reiterado en esta providencia, las empresas que prestan


este tipo de servicios no han sido facultadas por la ley para el ejercicio de una
potestad sancionadora de tipo pecuniario, razn por la cual ellas no podan
hacer efectivo el cobro de ningn tipo de sancin a los usuarios y mucho menos
hacer depender la prestacin del servicio al pago de estos valores. As las cosas,
debe concluirse que los cobros que se han efectuado a este ttulo son el
resultado de una actuacin arbitraria y sin ningn sustento legal, que, por tanto,
exige la intervencin del juez de tutela con el fin de proteger los derechos
fundamentales de los usuarios que se han visto vulnerados.

En este orden de ideas, para la Sala no es de recibo el argumento esgrimido por


algunas de las accionadas, en el sentido de que, en estos casos, a pesar de que
las decisiones y las facturas contienen el rubro sancin, lo cierto es que los
cobros corresponden nicamente al servicio consumido y no facturado, ya que
las empresas de servicios pblicos domiciliarios tienen la responsabilidad de
manifestar de manera expresa y clara por qu concepto se le est imponiendo al
usuario el cobro de una suma de dinero y cul es el sustento normativo y fctico
del mismo, lo que le permitir al afectado no solamente conocer de manera
detallada el comportamiento de su cuenta sino tambin ejercer sus derechos de
defensa y contradiccin.

En ese sentido, como quiera que las empresas accionadas consignaron en las
decisiones administrativas que se estaba imponiendo una sancin pecuniaria a
los usuarios, no es posible que ahora pretendan modificar la naturaleza jurdica
y el fundamento del cobro para validar su actuacin.

Lo anterior en cuanto a las sumas de dinero cuyo cobro se impuso bajo el rubro
de sancin. Ahora, en relacin con los valores que las empresas incluyeron en
las decisiones administrativas bajo el concepto de servicio consumido pero no
facturado (grupo ii), la Sala encuentra que las accionadas omitieron consignar
en estos actos los elementos necesarios para determinar con precisin y certeza,
cul es el monto al que asciende la deuda de cada usuario por concepto de
recuperacin del costo del servicio y cul es el de la pretendida sancin

104
Sentencia SU-1010 de 2008

pecuniaria que las empresas impusieron de manera ilegal.

As, en estas decisiones no se presentaron de manera clara, expresa y


especfica, las frmulas que se utilizaron para calcular las sumas de dinero cuyo
cobro se impuso y el clculo de cada uno de los rubros incluidos en los actos
administrativos sancionatorios, situacin que impidi que los usuarios
ejercieran con el pleno de garantas sus derechos de defensa y contradiccin, al
desconocer los fundamentos tcnicos y jurdicos de los mismos.

La necesidad de que el usuario sea informado por la empresa prestadora de las


razones por las cuales se efecta determinado cobro y de la forma en que ste
fue calculado, constituye precisamente uno de los derechos reconocidos por la
Ley de servicios pblicos domiciliarios a los suscriptores y/o usuarios de los
servicios. En efecto, de acuerdo con el artculo 148 de la Ley 142 de 1994, las
facturas que expidan las empresas deben cumplir con unos requisitos mnimos,
dentro de los cuales se encuentra la necesidad de consignar en ellas la
informacin requerida para que el usuario pueda establecer con facilidad los
fundamentos del cobro y ejercer los derechos que el ordenamiento jurdico les
reconoce.

El artculo en mencin dispone:

ARTCULO 148. REQUISITOS DE LAS FACTURAS. Los requisitos formales


de las facturas sern los que determinen las condiciones uniformes del
contrato, pero contendrn, como mnimo, informacin suficiente para que el
suscriptor o usuario pueda establecer con facilidad si la empresa se ci a la
ley y al contrato al elaborarlas, cmo se determinaron y valoraron sus
consumos, cmo se comparan stos y su precio con los de perodos anteriores,
y el plazo y modo en el que debe hacerse el pago. (Se resalta)

De esta manera, si bien las decisiones empresariales no constituyen en


estricto sentido un acto de facturacin, lo cierto es que ellas son el fundamento
para que, posteriormente, las empresas incluyan dentro de las facturas cobros
adicionales al valor del consumo del servicio y, adems, constituyen actos
administrativos susceptibles tanto de recursos en la va gubernativa como de
acciones ante la jurisdiccin contenciosa, razones por las que resulta necesario
que para su expedicin las empresas cumplan con los mismos requisitos de
precisin, suficiencia y especificidad que el artculo 148 de la Ley 142 de 1994
exige para los actos de facturacin.

Por todo lo anterior, la proteccin de los derechos de los accionantes exige que
las decisiones administrativas referidas a los grupos i) y ii) aqu sealados, sean
dejadas sin efectos, por constituir una extralimitacin de las prerrogativas
reconocidas por la ley a las empresas de servicios pblicos domiciliarios -al
imponer el cobro de una suma de dinero por concepto de sancin pecuniaria- y

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Sentencia SU-1010 de 2008

por cuanto ellas no contienen los elementos necesarios para establecer con
claridad y precisin, cul es el valor correspondiente al servicio efectivamente
consumido pero no facturado. De igual forma, se le ordenar a las empresas
accionadas que eliminen de las cuentas de los usuarios los valores all
consignados en virtud de los actos administrativos en mencin.

No obstante, dado que por expresa disposicin del artculo 149 de la Ley 142
de 1994, las empresas de servicios pblicos domiciliarios se encuentran
facultadas para cobrar el servicio efectivamente consumido pero respecto del
cual no ha recibido el pago, en estos casos las empresas accionadas podrn
realizar nuevamente el proceso de facturacin por este aspecto, trmite en el
que se le deber indicar a los usuarios de manera clara, precisa y explcita el
valor del servicio consumido y dejado de facturar y la frmula que se utiliz
para su clculo, sin que en ningn caso se puedan incluir o considerar valores
por concepto de sanciones pecuniarias.

Ahora bien, para los casos en los que se incluy en el proceso de facturacin un
cobro a ttulo de sancin pecuniaria, las empresas no podrn exigir el pago de
intereses de mora sobre las sumas que se adeuden por concepto de servicio
consumido y dejado de facturar. Considera la Corte que, en estos casos, la mora
de los usuarios se debe, en gran medida, al incremento desproporcionado de la
deuda como consecuencia de exigir el pago de altas sumas de dinero a ttulo de
sancin pecuniaria, sin que las empresas tuvieran competencia para ello. Sin
duda que tal hecho contribuy a que los afectados no pudieran cumplir con su
obligacin dineraria, mxime si los valores no facturados fueron tambin
afectados con el cobro de la sancin, lo que incremento arbitrariamente el costo
del servicio y de los propios intereses.

No desconoce la Corte que las empresas de servicios pblicos domiciliarios se


encuentran habilitadas artculo 96 de la Ley 142 de 1994 para cobrar intereses
de mora en los casos de incumplimiento de los usuarios en el pago de los
servicios. Sin embargo, tambin entiende la Corporacin que el ejercicio de
esta potestad encuentra el aludido respaldo legal cuando los cobros que se
afectan con tales intereses se encuentran ajustados a la ley y no son fruto del
ejercicio arbitrario del poder. En la medida que en estos casos el cobro incluy
valores no autorizados legalmente, cual es el porcentaje exigido a ttulo de
sancin pecuniaria, que adems incidi negativamente en el pago oportuno del
servicio y en el monto verdaderamente debido, entiende la Corte que las
empresas deben renunciar al cobro de dichos intereses para reestablecer el
equilibrio del contrato y facilitar la cancelacin de los saldos insolutos.

2.2. Finalmente y en relacin con aquellos casos en los cuales las decisiones
empresariales se refieren al cobro del servicio consumido y no facturado (grupo
iii), la Sala considera necesario aplicar la misma solucin atrs sealada, dado
que para el momento en que fueron expedidas estas decisiones administrativas
las empresas de servicios pblicos domiciliarios actuaron bajo la lgica de que
ellas s tenan facultades para imponer sanciones de contenido pecuniario, lo

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Sentencia SU-1010 de 2008

que implica que sea posible y probable que en estos casos las empresas hayan
considerado al momento de liquidar el monto del servicio consumido y no
facturado, algn tipo de sancin pecuniaria por el incumplimiento.

As las cosas, como quiera que en estos casos las empresas tampoco
presentaron de manera clara, expresa y especfica, las frmulas que se
utilizaron para calcular las sumas de dinero cuyo cobro se impuso y el clculo
de las mismas, lo que impide que sea posible establecer con precisin si en ellas
se incluyeron valores con concepto de sancin, estas decisiones tambin sern
dejadas sin efectos y se les ordenar a las entidades demandadas que eliminen
de las cuentas de los usuarios los valores all contenidos, pero con la
advertencia de que las empresas podrn reliquidar los cobros a que haya lugar
por razn del servicio consumido y no facturado, sin que en ningn caso se
puedan incluir o considerar valores por concepto de intereses moratorios o
sanciones pecuniarias.

2.3. En consecuencia, en todos los casos referenciados en este acpite, la Sala


dejar sin efectos las decisiones administrativas atacadas por los accionantes y
ordenar a las empresas de servicios pblicos demandadas que eliminen de las
cuentas de los usuarios aquellos cobros que figuren en razn de estas
decisiones.

No obstante lo anterior, si dentro de dichas decisiones se haban incluido cobros


por concepto de servicio consumido y no facturado, las empresas podrn
efectuar las reliquidaciones a que haya lugar nica y exclusivamente por este
concepto, para lo cual debern poner en conocimiento de los usuarios los
fundamentos tcnicos y jurdicos de la decisin, as como la frmula utilizada
para calcular el valor correspondiente y el clculo del mismo, con la
advertencia de que no podrn incluir, por ningn motivo, cobros a ttulo de
sanciones de contenido pecuniario.

En dichas liquidaciones las empresas no podrn incluir el cobro de intereses de


mora sobre las sumas que se adeuden por concepto de servicio consumido y
dejado de facturar.

En caso de que para la fecha de notificacin de esta sentencia, los accionantes


ya hubieren cancelado las sumas impuestas por las empresas demandadas
mediante las decisiones administrativas que sern dejadas sin efectos en esta
providencia, las empresas debern realizar la compensacin de saldos entre las
sumas que ya fueron pagadas por los usuarios y las que resulten de la nueva
reliquidacin. En caso de que las sumas pagadas hayan respondido al nico
concepto de sancin pecuniaria, las accionadas debern devolver estos dineros
a los actores.

Mientras se realizan los procesos de reliquidacin a los que haya lugar, las
empresas accionadas debern efectuar la reconexin inmediata de los servicios
pblicos domiciliarios respectivos, en los inmuebles en los cuales stos se

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Sentencia SU-1010 de 2008

hayan suspendido como consecuencia de las decisiones administrativas que


sern dejadas sin efectos en la parte resolutiva de esta providencia.

Del cumplimiento de las rdenes aqu consignadas, sern responsables los


representantes legales de las entidades accionadas, quienes debern dar cuenta
de ello a los jueces que conocieron de las acciones de tutela de la referencia en
primera instancia.

2.4. Ahora bien, en aquellos expedientes en los que peticionarios ya haban


firmado acuerdos de pago o contratos de transaccin, esto es, en el caso de los
expedientes referenciados con los nmeros T-1.548.002, T-1.618.168 T-
1.619.105 y T-1.632.544, la Sala ordenar a las empresas de servicios pblicos
domiciliarios accionadas que efecten un anlisis de estos casos, a fin de
establecer si lo que se les exigi a los peticionarios fue el pago de una sancin
pecuniaria. En caso de ser as, debern efectuar las devoluciones de aquellos
dineros que hayan recibido sin existir una causa jurdica vlida y eliminar de las
cuentas de los usuarios cualquier cobro que figure a ttulo de sancin.

Realizado tal estudio, debern informar a los jueces de tutela que conocieron de
estos procesos en primera instancia, dentro de los diez (10) das hbiles
siguientes a la notificacin del presente fallo, las conclusiones del mismo, los
valores que deban devolverse y la forma en que se realizarn dichos pagos.

En relacin con el expediente T-1.618.168, respecto del cual la Electrificadora


del Tolima S.A., E.S.P. manifest que no se encuentra en capacidad de devolver
dineros por encontrarse incursa en un proceso de liquidacin, esta Sala,
atendiendo a dicha situacin, le ordenar a la Compaa Energtica del Tolima,
Enertolima S.A., E.S.P, cesionaria de los derechos y obligaciones de la empresa
liquidada, que efecte el proceso atrs descrito, de tal manera que si llegara a
establecer que el dinero pagado por el accionante fue a ttulo de sancin
pecuniaria, impute estos valores como saldo a favor del accionante en las
siguientes facturas que ella expida. De lo anterior, la entidad tambin deber
prestar informe detallado al juez que conoci de la accin de tutela en primera
instancia.

2.5. Finalmente, la Corte debe dejar en claro que la decisin adoptada en esta
sentencia no busca patrocinar la cultura del no pago ni tampoco el fraude en los
servicios pblicos. El pago de los servicios pblicos recibidos y consumidos
constituye sin duda una obligacin a cargo de los usuarios y suscriptores, que
encuentra un claro fundamento constitucional en los artculos 95-2-9, 365 y 367
de la Constitucin Poltica, y en la propia ley de servicios pblicos (Ley 142 de
1994). Por su parte, el fraude en tales servicios o cualquier otra conducta
contraria a la ley que afecte su prestacin, puede ser perseguida a travs de las
respectivas acciones penales, a solicitud no solo de las empresas de servicios
pblicos sino tambin de los mismos usuarios. Lo que en esta sentencia se
protege, es el derecho de los usuarios y suscriptores a no ser afectados con

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Sentencia SU-1010 de 2008

cobros que no corresponde a los consumos de servicios y que no estn


autorizados por el ordenamiento jurdico.

10.2.Expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-1.828.811 y T-


1.836.549.

Como se anot en el acpite de antecedentes de la presente providencia, la


situacin fctica planteada en los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-
1.828.810, T-1.828.811 y T-1.836.549, difiere sustancialmente de la causa
general de los casos objeto de estudio en esta providencia, esto es, del debate
respecto de la facultad de las empresas de servicios pblicos domiciliarios para
la imposicin de sanciones de contenido pecuniario.

En efecto, el problema jurdico de estos procesos se relaciona, en realidad, con


el cobro promedio que realizan las empresas de servicios pblicos
domiciliarios, en aquellos casos en los que no se ha instalado el medidor de
consumo del servicio en los inmuebles.

Los demandantes sostienen que las empresas no han instalado los medidores de
consumo en sus inmuebles, por lo que desde hace un largo tiempo las facturas
de cobro del servicio se han expedido con fundamento en un promedio mensual
que ha sido definido por las propias entidades. Segn afirman, esta situacin
constituye un incumplimiento de la obligacin que tienen las empresas de
instalar los equipos de medicin en un plazo mximo de seis (6) meses
contados a partir de la instalacin de la acometida y se enmarca dentro del
supuesto establecido en el artculo 146 de la Ley 142 de 1994, segn el cual la
falta de medicin del consumo, por accin u omisin de la empresa, le har
perder el derecho a recibir el precio.

En este sentido, la Sala encuentra necesario efectuar las siguientes


consideraciones en relacin con los casos objeto de estudio.

Obsrvese cmo, en relacin con este asunto, es claro que en el ordenamiento


jurdico existen otros mecanismos de defensa judicial que resultan eficaces e
idneos para solicitar la proteccin de los derechos que los accionantes estiman
vulnerados. En efecto, los actos de facturacin de las empresas de servicios
pblicos domiciliarios son susceptibles de demanda ante la jurisdiccin de lo
contencioso administrativo, mediante el ejercicio de las acciones de nulidad o
de nulidad y restablecimiento del derecho segn el caso.

En este escenario, frente a la existencia de mecanismos judiciales apropiados


para solucionar el conflicto planteado, la procedencia excepcional y transitoria
de la accin de amparo constitucional estara ligada a la ocurrencia real y cierta
de un perjuicio irremediable que haga necesario que el juez de tutela ampare los

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derechos fundamentales de los actores121, perjuicio que esta Corporacin no


encuentra demostrado en los casos sub examine, tal como se pasa a establecer.

- En primer lugar, por cuanto del material probatorio que obra en los
expedientes objeto de revisin no se logra acreditar la razn por la cual la
determinacin de las entidades demandadas de calcular el valor del servicio
prestado con base en consumos promedios, afecta los derechos fundamentales
de los accionantes en una entidad tal que la no intervencin del juez de tutela
haga inminente la configuracin de un perjuicio de carcter irremediable.

En efecto, a pesar de que los accionantes argumentan que esta situacin


constituye un incumplimiento de la obligacin que tienen las empresas de
servicios pblicos domiciliarios de instalar los aparatos de medicin, lo cierto
es que esa sola circunstancia no constituye en s misma un perjuicio
irremediable que haga procedente de manera automtica y sin ninguna
consideracin adicional la accin de tutela, ya que la determinacin del
perjuicio debe efectuarse en concreto, razn por la cual las circunstancias que
se presentan en el caso deben permitir que el juez de tutela llegue a la
conclusin de que, en efecto, se est frente a la configuracin de un perjuicio de
estas caractersticas.

En los asuntos sub examine, la Sala no encuentra elementos que permitan


concluir que se est frente a la configuracin de un perjuicio de carcter
irremediable, ya que, en primer lugar, la actuacin adelantada por las empresas
accionadas no se observa arbitraria, ya que en todos los casos objeto de
revisin, salvo en el identificado con el nmero T-1.836.549, los actores
aceptan que han efectuado conexiones fraudulentas para recibir el servicio, por
lo que, frente a esta situacin, el mecanismo que la ley prev para que las
empresas puedan calcular el valor a pagar por los usuarios de estos inmuebles,
es el del cobro estimado a partir del promedio del consumo.

Y, en segundo trmino, por cuanto, ms all de la controversia econmica que


plantean los asuntos objeto de revisin, lo cierto es que en ninguno de estos
casos se observa, en principio, que se encuentre comprometido un derecho
fundamental que haga procedente la accin de tutela. As, segn afirman los
propios accionantes, ellos continan recibiendo los servicios pblicos
domiciliarios que prestan las accionadas en los inmuebles en los que residen,
razn por la cual en este momento no existe una amenaza o vulneracin de
derechos de rango fundamental como, por ejemplo, el derecho a la vida en
condiciones dignas o a la salud. Cabe sealar que en el caso del expediente T-
1.836.549 si bien el accionante afirma que el predio respecto del cual se est
efectuando el cobro por parte de Electricaribe S.A., E.S.P., no cuenta con el
servicio de energa elctrica, tambin manifiesta que ste se encuentra

121 Al respecto, pueden consultarse, entre otras, las siguientes sentencias: T-1016 de 1999, Magistrado
Ponente: Eduardo Cifuentes Muoz; T-270 de 2004, Magistrado Ponente: Jaime Crdoba Trivio y T-712 de
2004, Magistrado Ponente: Rodrigo Uprimny Yepes.

110
Sentencia SU-1010 de 2008

desocupado, por lo que tampoco en este asunto se observa comprometido un


derecho de carcter fundamental.

En este sentido, ante la ausencia de elementos probatorios que permitan


demostrar la existencia de un perjuicio de tales caractersticas, el debate
planteado por las acciones de tutela de la referencia se restringe al mbito
puramente legal, al no evidenciarse las razones de procedencia del amparo
tutelar en los trminos previstos en los artculos 86 de la Constitucin Poltica y
6 del Decreto 2591 de 1991.

- Adicionalmente, existe otra circunstancia de la cual se infiere que la situacin


planteada por las acciones de tutela sealadas, no implica la configuracin de
un perjuicio irremediable y que se relaciona con la conducta desplegada por los
accionantes de estos procesos.

En efecto, a pesar de que en todos los expedientes de la referencia las empresas


han venido efectuando las facturaciones con base en estimados de consumos
promedio desde hace ms de cinco aos, slo hasta ahora los actores
manifiestan su inconformidad con el hecho de que no se les hayan instalado los
aparatos de medicin, sin que durante dicho lapso hayan elevado reclamaciones
formales ante las accionadas, ni tampoco hayan solicitado la intervencin de la
Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios para exigir de parte de
las demandadas el acatamiento de la obligacin legal que estiman incumplida,
lo que pone de manifiesto la actitud displicente y pasiva con la que los actores
han asumido las mnimas cargas que les corresponden para lograr la solucin
del problema planteado.

De tal manera que si durante ms de cinco aos los actores no estimaron


vulnerados sus derechos fundamentales, ni actuaron de manera diligente para
obtener la instalacin de los equipos de medicin, no pueden pretender ahora,
luego de un prolongado tiempo en el que se han mantenido inactivos y
mediante el ejercicio de la accin de amparo constitucional, que el juez de
tutela elimine de sus cuentas las deudas que presentan por un servicio que
efectivamente han consumido.

- Se destaca, adems, el hecho de que aun cuando los accionantes tenan la


posibilidad de interponer el recurso de reposicin contra los actos de
facturacin expedidos por las empresas accionadas y el de apelacin ante la
Superintendencia de Servicios Pblicos Domiciliarios, en los trminos del
artculo 154 de la Ley 142 de 1994122, los actores no lo han hecho, omitiendo

122 ARTCULO 154. DE LOS RECURSOS. El recurso es un acto del suscriptor o usuario para obligar a la
empresa a revisar ciertas decisiones que afectan la prestacin del servicio o la ejecucin del contrato. Contra
los actos de negativa del contrato, suspensin, terminacin, corte y facturacin que realice la empresa
proceden el recurso de reposicin, y el de apelacin en los casos en que expresamente lo consagre la ley.
No son procedentes los recursos contra los actos de suspensin, terminacin y corte, si con ellos se pretende
discutir un acto de facturacin que no fue objeto de recurso oportuno.

111
Sentencia SU-1010 de 2008

as el ejercicio de los mecanismos que el ordenamiento jurdico prev para estos


eventos, lo que evidencia una conducta pasiva de parte de los demandantes.

Cabe sealar que esta actitud se mantuvo durante el trmite de la presente


accin de tutela, ya que los accionantes no aportaron ningn elemento
probatorio que permitiera inferir la gravedad de la situacin por la que,
supuestamente, estn atravesando, ni tampoco el por qu debe considerarse que
ellos se encuentran frente a la inminente configuracin de un perjuicio de
carcter irremediable.

- Finalmente, esta Sala observa con preocupacin que en algunos de los


expedientes en mencin se aportaron copias de volantes que se entregaron a los
usuarios por parte de algunas organizaciones, donde se les invita a no pagar los
servicios pblicos domiciliarios y a acudir al mecanismo de amparo
constitucional con el fin de anular las deudas que presentan por este concepto.
Para esta Sala, dicha actuacin resulta absolutamente reprochable por ir en
contra del principio de solidaridad que informa los servicios pblicos
domiciliarios y que se constituye en pilar fundamental para asegurar la
ampliacin sistemtica de la cobertura en la prestacin de los mismos y el
equilibrio econmico y financiero de las empresas prestadoras.

Como se anot en el acpite 5.1. de esta providencia, los servicios pblicos


domiciliarios se rigen por el principio de onerosidad, lo que implica que los
usuarios deben pagar por el servicio prestado, cumpliendo as el deber
constitucional de contribuir con el financiamiento de los gastos e inversiones
del Estado y con la satisfaccin de sus propias necesidades. En este orden de
ideas, no existe justificacin alguna para que se promueva una cultura de no
pago entre los usuarios, situacin que, a la postre, terminara por afectar la
posibilidad de que ellos mismos continen siendo beneficiarios de los servicios
prestados.

En consecuencia, todo lo anteriormente expuesto muestra que el problema


jurdico planteado en los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-
1.828.811 y T-1.836.549, debe ser resuelto a travs de los mecanismos
ordinarios de proteccin judicial, por no existir motivo alguno que justifique la
intervencin inmediata del juez constitucional para solucionar los conflictos
econmicos que han planteado los usuarios.

El recurso de reposicin contra los actos que resuelvan las reclamaciones por facturacin debe interponerse
dentro de los cinco (5) das siguientes a la fecha de conocimiento de la decisin. En ningn caso, proceden
reclamaciones contra facturas que tuviesen ms de cinco (5) meses de haber sido expedidas por las empresas
de servicios pblicos.
De los recursos de reposicin y apelacin contra los dems actos de la empresa que enumera el inciso
primero de este artculo debe hacerse uso dentro de los cinco das siguientes a aquel en que la empresa
ponga el acto en conocimiento del suscriptor o usuario, en la forma prevista en las condiciones uniformes del
contrato.
Estos recursos no requieren presentacin personal ni intervencin de abogado aunque se emplee un
mandatario. Las empresas debern disponer de formularios para facilitar la presentacin de los recursos a
los suscriptores o usuarios que deseen emplearlos. La apelacin se presentar ante la superintendencia.

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Sentencia SU-1010 de 2008

Por lo tanto, dado que las acciones de tutela de la referencia son improcedentes
para definir el problema jurdico sealado, esta Sala confirmar las decisiones
judiciales objeto de revisin.

IV.DECISIN

En mrito de lo expuesto, la Sala Plena de la Corte Constitucional,


administrando justicia en nombre del pueblo y por mandato de la Constitucin,

RESUELVE

PRIMERO. LEVANTAR la suspensin de trminos ordenada dentro de los


procesos de la referencia.

SEGUNDO. REVOCAR las sentencias de tutela proferidas dentro de los


expedientes T-1.410.120, T-1.540.637, T-1.541.417, T-1.541.805, T-1.546.704,
T-1.546.830, T-1.548.002, T-1.550.439, T-1.550.854, T-1.553.717, T-1.557.174,
T-1.559.660, T-1.570.640, T-1.572.628, T-1.572.853, T-1.573.598, T-1.573.681,
T-1.573.787, T-1.574.070, T-1.574.078, T-1.574.079, T-1.575.094, T-1.575.659,
T-1.579.196, T-1.618.168, T-1.619.105, T-1.619.182, T-1.621.210, T-1.621.497,
T-1.621.963, T-1.622.627, T-1.622.802, T-1.622.835, T-1.622.894, T-1.623.944,
T-1.624.749, T-1.625.827, T-1.631.213, T-1.632.319, T-1.632.544, T-1.635.364,
T-1.639.727 y T-1.639.736, por los respectivos jueces de instancia. En su lugar,
CONCEDER la proteccin constitucional del derecho fundamental al debido
proceso de los accionantes.

TERCERO. CONFIRMAR PARCIALMENTE las sentencias proferidas


dentro del expediente T-1.573.600, pero nicamente en cuanto concedieron el
amparo tutelar solicitado.

CUARTO. DEJAR SIN EFECTOS las decisiones sancionatorias proferidas


dentro de los expedientes citados en los ordinales segundo y tercero de la parte
resolutiva de la presente sentencia y ORDENAR a las empresas de servicios
pblicos domiciliarios accionadas en los procesos referidos, que dentro de las
cuarenta y ocho (48) horas siguientes a la notificacin de la presente sentencia,
eliminen de las cuentas de los usuarios los valores all consignados en virtud de
los actos administrativos en mencin, que figuren a ttulo de sancin e intereses
de mora, o a cualquier otro que tenga la misma connotacin jurdica de stos.

QUINTO. ORDENAR a las empresas de servicios pblicos accionadas dentro


de los expedientes citados en los ordinales segundo y tercero de la parte
resolutiva de la presente sentencia, que como consecuencia de la decisin

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Sentencia SU-1010 de 2008

adoptada en el numeral anterior y dentro de los sesenta (60) das siguientes a la


notificacin de esta providencia, procedan a reliquidar las cuentas de los
accionantes que se hicieron parte dentro de los procesos de tutela enunciados en
los numerales segundo y tercero de la parte resolutiva de esta providencia,
incluyendo en esas liquidaciones nicamente lo correspondiente a los cobros
por concepto de servicio consumido y no facturado. Para tales efectos, la nueva
resolucin de cobro que se expida a los usuarios deber contener los
fundamentos tcnicos y jurdicos de la decisin, as como la frmula utilizada
para calcular el valor correspondiente y el clculo del mismo. En dichas
liquidaciones no se podrn incluir cobros a ttulo de sancin o de intereses de
mora sobre las sumas que se adeuden por concepto de servicio consumido y
dejado de facturar.

Una vez llevadas a cabo las respectivas reliquidaciones, para efectos del cobro
del servicio prestado y no facturado, las empresas de servicios pblicos
demandadas debern presentar a los usuarios alternativas de pago que consulten
su capacidad econmica.

SEXTO. ORDENAR a estas empresas que, en caso de que para la fecha de


notificacin de esta sentencia los accionantes ya hubieren cancelado las sumas
impuestas a ttulo de sancin e intereses de mora mediante las decisiones
administrativas dejadas sin efectos en esta providencia, procedan a realizar
inmediatamente la compensacin de saldos entre las sumas que ya fueron
pagadas por los usuarios y las que resulten de la nueva reliquidacin. En caso
de que las sumas pagadas hayan respondido al nico concepto de sancin
pecuniaria o se presenten saldos a favor de los usuarios, las accionadas debern
devolver estos dineros a los demandantes.

SPTIMO. ORDENAR la suspensin de los procesos ejecutivos que se


encuentren en curso, iniciados por las empresas de servicios pblicos
accionadas en contra de los usuarios que son parte dentro de los expedientes de
tutela enunciados en los numerales segundo y tercero de la parte resolutiva de
esta providencia, hasta tanto las empresas lleven a cabo la reliquidacin de que
trata el inciso primero del numeral quinto y presenten a los usuarios alternativas
de pago que consulten su capacidad econmica.

En el evento en que los usuarios se acojan a las frmulas de pago propuestas,


los procesos debern darse por terminados. En caso contrario, los procesos
debern continuar su trmite al trmino de treinta (30) das contados a partir de
la presentacin de la reliquidacin y de las alternativas de pago.

OCTAVO. ORDENAR a las empresas de servicios pblicos domiciliarios


accionadas dentro de los expedientes citados en los numerales segundo y
tercero de la parte resolutiva de la presente sentencia, que efecten la
reconexin inmediata de los servicios pblicos domiciliarios respectivos, en los
inmuebles en los cuales stos se hayan suspendido como consecuencia de las

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Sentencia SU-1010 de 2008

decisiones administrativas dejadas sin efectos en el numeral cuarto de la parte


resolutiva de esta providencia.

NOVENO. ORDENAR a las empresas de servicios pblicos accionadas


dentro de los expedientes T-1.548.002, T-1.618.168 T-1.619.105 y T-1.632.544,
que en el trmino de cuarenta y ocho (48) horas contadas a partir de la
notificacin de esta providencia, determinen si los acuerdos de pago suscritos
con los accionantes de los referidos procesos incluyeron valores por concepto
de sanciones pecuniarias e intereses de mora. En caso de que la respuesta sea
afirmativa, ORDENAR a las empresas accionadas dentro de los expedientes T-
1.548.002, T-1.619.105 y T-1.632.544 que, dentro de los cinco (05) das hbiles
siguientes, devuelvan esos dineros a los usuarios y eliminen de sus cuentas
cualquier cobro que figure a ttulo de sancin.

En el caso del expediente T-1.618.168, en el evento en que la Compaa


Energtica del Tolima, Enertolima S.A., E.S.P, determine que el acuerdo de
pago suscrito con el accionante incluy cobros por concepto de sanciones
pecuniarias, ORDENAR que se imputen estos valores como saldo a favor del
actor en las siguientes facturas que le sean expedidas.

Las empresas de servicios pblicos domiciliarios accionadas dentro de los


expedientes T-1.548.002, T-1.618.168 T-1.619.105 y T-1.632.544, debern
presentar un informe detallado de lo que se resuelva en cada uno de estos
procesos a las autoridades judiciales que conocieron de ellos en primera
instancia, dentro de los diez (10) das hbiles siguientes a la notificacin del
presente fallo.

DCIMO. Del cumplimiento de las rdenes aqu consignadas sern


responsables los representantes legales de las entidades accionadas, quienes
debern dar cuenta de ello a los jueces que conocieron de las acciones de tutela
de la referencia en primera instancia.

DCIMO PRIMERO. ORDENAR a las empresas de servicios pblicos


domiciliarios que hacia el futuro se abstengan de imponer sanciones
pecuniarias a los usuarios de tales servicios e, igualmente, de cobrar las
sanciones que se hayan impuesto con anterioridad a esta providencia y que no
hayan sido pagadas.

DCIMO SEGUNDO. Teniendo en cuenta las decisiones adoptadas en esta


sentencia, ORDENAR a la Superintendencia de Servicios Pblicos
Domiciliarios que imparta las instrucciones necesarias para que, en lo sucesivo,
las empresas de servicios pblicos domiciliarios se abstengan de imponer
sanciones y de cobrar aquellas que se hayan impuesto con anterioridad a esta
providencia y no se hayan pagado, cualquiera que sea el estado en que se
encuentre el cobro de dichas obligaciones, prejudicial, judicial o cobro
coactivo.

115
Sentencia SU-1010 de 2008

DCIMO TERCERO. CONFIRMAR los fallos de tutela proferidos dentro de


los expedientes T-1.621.898, T-1.828.809, T-1.828.810, T-1.828.811 y T-
1.836.549, los cuales denegaron el amparo constitucional solicitado.

DCIMO CUARTO. Por Secretara General, LBRENSE las comunicaciones


previstas en el artculo 36 del Decreto 2591 de 1991.

Notifquese, comunquese, publquese en la Gaceta de la Corte Constitucional y


cmplase.

HUMBERTO ANTONIO SIERRA PORTO


Presidente

JAIME ARAUJO RENTERA


Magistrado
Ausente en comisin

MANUEL JOS CEPEDA ESPINOSA


Magistrado
Ausente en comisin

JAIME CRDOBA TRIVIO


Magistrado

RODRIGO ESCOBAR GIL


Magistrado

MAURICIO GONZLEZ CUERVO


Magistrado

116
Sentencia SU-1010 de 2008

MARCO GERARDO MONROY CABRA


Magistrado

NILSON PINILLA PINILLA


Magistrado

CLARA INS VARGAS HERNNDEZ


Magistrada

MARTHA VICTORIA SCHICA DE MONCALEANO


Secretaria General

117
Sentencia SU-1010 de 2008

CUADRO ANEXO A LA SENTENCIA SU-1010 de 2008


123
Irregularidades en las que, segn
Expediente Demandante Demandado se alega, incurrieron las empresas Contenido de la Decisin Primera Segunda
durante el procedimiento Empresarial Instancia instancia

124
1 1.410.120 Armando Electricaribe -El acta no la firm el actor sino el Decisin empresarial No.Juzgado Segundo PenalJuzgado Penal del Circuito de
Diazgranados S.A., E.S.P. portero. 2154437-25871 de 28 de junioMunicipal de Soledad,Soledad, Atlntico.
Pretel -No se identificaron con el carn. de 2005. Atlntico.
-No se le inform que poda traer a REVOCA.
un tcnico. RESUELVE. () Cobrar la CONCEDE. Falta el requisito de inmediatez
-No se le inform el trmino para energa dejada de facturar Las empresas de serviciosporque ya ha pasado un ao
presentar descargos. correspondiente e imponer una pblicos domiciliarios nodesde que se emiti la decisin
-No estuvo presente testigo. sancin pecuniaria por una tienen facultad para imponerempresarial controvertida.
-No se expidi acto de apertura de suma total de 500.530 sanciones pecuniarias.
pruebas.

125
2 1.540.637 Armando Nel Gas Natural S.A. El actor sostiene que las presuntasDecisin empresarial No.Juzgado Sexto Penal MunicipalJuzgado Diecisiete Penal del
Pachn Can irregularidades se produjeron en10150143-C2577-2006, de 9 dede descongestin de Bogot. Circuito de Bogot.
1991, por lo que ya haba caducadojunio de 2006.
la oportunidad para imponer la NIEGA. CONFIRMA.
sancin. () Gas Natural S.A., E.S.P., y Existen otros medios deSostiene que el accionante slo
de conformidad con lo dispuesto defensa judicial y no setuvo servicio de gas desde
en el contrato de condiciones demostr la existencia de un1998, por lo que no puede
uniformes de la empresa, perjuicio irremediable. afirmar que la conducta que se
resuelve cobrar los siguientes pretende sancionar se cometi
conceptos: en 1991. Adems, la inspeccin
1.Servicio suministrado, no con la que empez el proceso
registrado y por lo tanto no administrativo se realiz en el
facturado, desde el da 20 de ao 2006.
agosto de 2005 hasta el da 16
de marzo de 2006, por valor de

123 Como se seal en el acpite de hechos de la presente providencia, en todos los expedientes objeto de revisin (salvo en los identificados con los nmeros de radicado T-1.621.898, T-1.828.809, T-
1.828.810, T-1.828.811 y T-1.836.549), se discute si las empresas de servicios pblicos domiciliarios tienen facultad para imponer sanciones de contenido pecuniario, lo que fue reseado en el texto de la
sentencia. En consecuencia, en el presente cuadro nicamente se detallan los argumentos adicionales expuestos por los demandantes.
124 Folio 36, cuaderno 1.
125 Folio 61, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

$565.574.oo
2. Sancin anomala por valor
de $272.000.oo equivalente a
diez salarios mnimos diarios
legales vigentes.
3. Sancin uso indebido por
valor de $136.000.oo
equivalente a diez (10) salarios
mnimos diarios legales
vigentes.
126
3 1.541.417 Everardo AragnElectrificadora -No cont con la presencia de un Resolucin sancionatoria No.Juzgado SptimoNo hubo segunda instancia.
Jaramillo del Meta S.A.tcnico. 628 de 19 de septiembre deAdministrativo del Circuito de
E.S.P. (EMSA) -No se le notific la decisin que 2006. Villavicencio.
impuso la sancin.
() RESUELVE. () Imponer NIEGA.
una sancin pecuniaria por la Existen otros medios de
suma de setecientos cincuenta y defensa judicial y no se
un mil ciento noventa y cuatro demostr la existencia de un
pesos m/cte ($751.194.oo), perjuicio irremediable.
correspondiente a los siguientes
factores:
293.997 Valor de la energa
293.997 Valor de la multa
136.000 Valor de los sellos
27.200 Revisin
127
4 1.541.805 Rafael Gonzlez Electricaribe S.A. -No se tuvieron en cuenta las Decisin empresarial No.Juzgado Sptimo PenalJuzgado Octavo Penal del
E.S.P. pruebas aportadas por l al proceso. 1974481 de 23 de junio de 2006. Municipal de Barranquilla Circuito de Barranquilla.
-No se le notific la decisin que
impuso la sancin. RESUELVE: () Imponer una CONCEDE. REVOCA.
-El actor fue el que solicit la sancin pecuniaria por la suma Las empresas de serviciosExisten otros medios de
revisin porque el medidor se habade $3.883.380 de conformidad pblicos domiciliarios nodefensa judicial y no se
quemado. con el contrato de condiciones tienen facultad para imponerdemostr la existencia de un
uniformes y dems normas sanciones pecuniarias. perjuicio irremediable.
concordantes.

126 Folio 82, cuaderno 1.


127 Folio 42, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

128
5 1.546.704 Martha Luca Enertolima S.A. La accionante nicamente alega queResolucin sancionatoria No.Juzgado Cuarto PenalNo hubo segunda instancia.
Durn, en E.S.P. las empresas de servicios pblicos3040 de 27 de julio de 2006. Municipal de Ibagu.
nombre de su domiciliarios no tienen facultad para
madre, Licelia imponer sanciones pecuniarias. () el valor discriminado de NIEGA.
Varn de Durn la liquidacin de la sancin es - Existen otros medios de
el siguiente: defensa judicial y no se
() Sancin por fraude y/o demostr la existencia de un
manipulacin: $965.111 perjuicio irremediable.
Recuperacin de energa: -En el procedimiento
$965.111. administrativo no se
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
129
6 1.546.830 Luis Arturo Codensa S.A. -La madre del accionante nunca Decisin empresarial No.Juzgado Diecisiete CivilJuzgado Once Civil del
Mndez Ortiz, E.S.P. alter el medidor. 436105 de 25 de agosto de 2006. Municipal de Bogot. Circuito de Bogot.
en nombre de su -No cont con la presencia de un
madre, Lelia tcnico. Valor consumo no registrado: NIEGA. CONFIRMA.
Ortiz de Mndez -A pesar de que la Superintendencia $2.865.317.00 - Existen otros medios dePor las mismas razones del a
de Servicios Pblicos DomiciliariosValor sancin por consumo no defensa judicial y no sequo.
revoc la decisin adoptada por laregistrado: $2.865.317.00 demostr la existencia de un
empresa accionada, sta inici unValor contribucin sobre perjuicio irremediable.
nuevo proceso por los mismosreintegros: $517.063.00 -En el procedimiento
hechos y con fundamento enValor sancin por sellos: administrativo no se
idnticas pruebas. $119.330.00 presentaron irregularidades que
Total a cobrar al cliente: comportaran una vulneracin
$6.423.027.00 del derecho al debido proceso
del peticionario.
130
7 1.548.002 Fanny Electrocosta S.A. -No cont con la presencia de un No hay decisin empresarial.Juzgado Segundo PenalNo hubo segunda instancia.
Rodrguez E.S.P. tcnico. Hay un documento identificadoMunicipal de Montera.
lvarez -No se le avis de la visita. como Citacin para
-Se le oblig a suscribir acuerdo denotificacin imposicin deNIEGA.
pago y pagar. sancin de 29 de abril de 2004. - Ya se suscribi acuerdo de

128 Folio 11, cuaderno 1.


129 Folio 48, cuaderno 1.
130 Folio 6, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

pago.
All se establece que la- Existen otros medios de
accionante debe la suma dedefensa judicial y no se
$1.058.250. demostr la existencia de un
perjuicio irremediable.
131
8 1.550.439 Rosa Lilia Enertolima S.A. La actora nunca alter el medidor. Resolucin sancionatoria No.Juzgado Sexto Civil MunicipalNo hubo segunda instancia.
Vargas de E.S.P. 2081 de 20 de junio de 2006. de Ibagu.
Crdenas
() el valor discriminado de NIEGA.
la liquidacin de la sancin es Existen otros medios de
el siguiente: defensa judicial y no se
() Sancin por fraude y/o demostr la existencia de un
manipulacin: $996.636. perjuicio irremediable.
Recuperacin de energa:
$996.636.
132
9 1.550.854 Sandra MaraEnertolima S.A.-No est demostrado que l hubieraResolucin sancionatoria No.Juzgado Tercero PenalJuzgado Segundo Penal del
Casabuenas E.S.P. alterado el medidor. 1953 de 10 de julio de 2006. Municipal de Espinal, Tolima. Circuito de Espinal, Tolima.
Pinzn -Slo conoci del proceso cuando se
le impuso la sancin. () el valor discriminado de CONCEDE. REVOCA.
la liquidacin de la sancin es Las empresas de servicios- Existen otros medios de
el siguiente: pblicos domiciliarios nodefensa judicial y no se
() Sancin por fraude y/o tienen facultad para imponerdemostr la existencia de un
manipulacin: $1.293.782. sanciones pecuniarias. perjuicio irremediable.
Recuperacin de energa: - Sostiene que frente a la falta
$1.293.782 de unificacin de la
jurisprudencia constitucional en
torno al tema de la facultad de
las empresas de servicios
pblicos domiciliarios para
imponer sanciones, les es dable
a los jueces fallar conforme a
su propio criterio. A su juicio,
estas entidades s han sido
habilitadas por la ley para el

131 Folio 13, cuaderno 1.


132 Folio 18, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

efecto.
133
10 1.553.717 Toribia CuetoElectricaribe S.A.No estuvo presente el usuario en laDecisin empresarial No.Juzgado Primero PenalNo hubo segunda instancia.
Ospino E.S.P. visita tcnica. 2275753-87723 de 31 de mayoMunicipal de Soledad,
de 2006. Atlntico.

RESUELVE. () Cobrar la NIEGA.


energa dejada de facturar - Existen otros medios de
correspondiente por una suma defensa judicial y no se
total de $430.130,00 demostr la existencia de un
perjuicio irremediable.
- En el procedimiento
administrativo no se
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
134
11 1.557.174 Jos EdgarEnertolima S.A.El accionante alega genricamenteResolucin sancionatoria No.Juzgado Octavo PenalNo hubo segunda instancia.
Rengifo Acosta E.S.P. que durante el trmite se produjeron4688 de 20 de octubre de 2006. Municipal de Ibagu, Tolima.
distintas irregularidades, que
comportaron una vulneracin de su() el valor discriminado de NIEGA.
derecho al debido proceso. Sinla liquidacin de la sancin es - Existen otros medios de
embargo, no las seala de manerael siguiente: defensa judicial y no se
especfica. () Sancin por fraude y/o demostr la existencia de un
manipulacin: $917.778. perjuicio irremediable.
Recuperacin de energa: - En el procedimiento
$917.778. administrativo no se
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
135
12 1.559.660 William RamiroEnertolima S.A.El accionante nicamente alega queResolucin sancionatoria No.Juzgado Promiscuo de FamiliaSala Civil del Tribunal Superior
Barragn Molina E.S.P. las empresas de servicios pblicos2222 de 6 de julio de 2006. del Circuito Judicial dedel Distrito Judicial de
domiciliarios no tienen facultad para Guaduas, Cundinamarca. Cundinamarca

133 Folio 33, cuaderno 1.


134 Folio 33, cuaderno 1.
135 Folio 56, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

imponer sanciones pecuniarias. () el valor discriminado de


la liquidacin de la sancin es CONCEDE. REVOCA.
el siguiente: Las empresas de serviciosEl debate sobre la facultad
() Sancin por fraude y/o pblicos domiciliarios nosancionatoria debe ser resuelto
manipulacin: $1.801.475. tienen facultad para imponerpor la jurisdiccin ordinaria,
Recuperacin de energa: sanciones pecuniarias. salvo que fuera necesario
$1.801.475. definirlo en esta instancia
frente a la inminente
configuracin de un perjuicio
irremediable, lo que no se
encuentra acreditado en este
caso.
Adems, en el procedimiento
administrativo aqu adelantado
no se presentaron
irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
136
13 1.570.640 Mara Ortiz deEnertolima S.A.La accionante nicamente alega queResolucin sancionatoria No.Juzgado Quinto CivilJuzgado Cuarto Civil del
Oyola E.S.P. las empresas de servicios pblicos2268 de 10 de julio de 2006. Municipal de Ibagu, Tolima. Circuito de Ibagu, Tolima
domiciliarios no tienen facultad para
imponer sanciones pecuniarias. () el valor discriminado de CONCEDE. REVOCA.
la liquidacin de la sancin es Frente a la falta de respuesta a- Existen otros medios de
el siguiente: la presente accin por parte de defensa judicial y no se
() Sancin por fraude y/o la entidad demandada, debendemostr la existencia de un
manipulacin: $495.478. darse por ciertas lasperjuicio irremediable.
Recuperacin de energa: $ afirmaciones de la actora en el - En el procedimiento
$495.478. sentido de que no seadministrativo no se
observaron las formas legalespresentaron irregularidades que
para la imposicin decomportaran una vulneracin
sanciones. del derecho al debido proceso
del peticionario.
137
14 1.572.628 lvaro Casas Codensa S.A., - El actor, propietario de unaExpediente 3000-39845-2004-U.Juzgado Treinta y Seis CivilJuzgado Trece Civil del

136 Folio 49, cuaderno 1.


137 Folio 25, cuaderno 2.
Sentencia SU-1010 de 2008

Murcia. E.S.P. bodega, no conoce a la persona queDecisin empresarial de 15 deMunicipal de Bogot. Circuito de Bogot
firma la diligencia. junio de 2006.
- Se quebranta el principio de NIEGA. CONFIRMA.
solidaridad porque la diligencia seValor consumo no registrado: Existen otros medios de- Existen otros medios de
llev a cabo mientras el inmueble$9.707.421.00. defensa judicial y no sedefensa judicial y no se
estaba arrendado. Valor sancin por consumo no demostr la existencia de undemostr la existencia de un
- Slo conoci del proceso cuandoregistrado: $9.707.421.00. perjuicio irremediable. perjuicio irremediable. - En el
se le impuso la sancin. Nunca se leValor contribucin sobre procedimiento administrativo
notific del proceso adelantado. reintegros: $1.941.484.00. no se presentaron
Total a cobrar al cliente: irregularidades que
$21.356.326.00 comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
- Hay solidaridad de las
obligaciones.
138
15 1.572.853 Orlando Vives Electricaribe El accionante cuestiona dos-Decisin empresarial No.Juzgado Sexto Civil MunicipalJuzgado Primero Civil del
Campo, S.A., E.S.P. decisiones administrativas distintas. 2036314 de 28 de agosto dede Santa Marta. Circuito de Santa Marta.
representante - En relacin con la primera de ellas 2006.
legal de la (de 28 de agosto de 2006), sostieneRESUELVE. () Imponer una CONCEDE. REVOCA.
sociedad que mediante fallo de tutela sesancin pecuniaria por la suma - Las empresas de servicios- Hay inconsistencias en
Orlando Vives orden anular el procedimiento porde $3.321.900 de conformidad pblicos domiciliarios norelacin con la calidad en la
Campo e hijos violacin al debido proceso; nocon el Contrato de Condiciones tienen facultad para imponerque acta el accionante, ya que
limitada. obstante, la empresa lo volvi aUniformes y dems normas sanciones pecuniarias. primero afirma actuar a nombre
El usuario iniciar con fundamento en lasConcordantes. - Hubo violacin del derecho alpropio y luego en
registrado es el mismas pruebas. debido proceso. representacin de una sociedad.
Edificio - Respecto al segundo acto-Decisin empresarial No.- Hubo violacin del derecho- Concede en relacin con el
Posihueica. administrativo (de 29 de septiembre2080034 de 29 de septiembre dede peticin. derecho de peticin.
de 2006) el actor afirma no haber 2006.
tenido conocimiento del proceso. RESUELVE: Cobrar la energa
dejada de facturar
Adicionalmente, manifiesta que lcorrespondiente e imponer una
present peticin para obtener copiasancin pecuniaria por una
del expediente, pero que sta no fuesuma total de $12.828.271.
resuelta.
139
16 1.573.598 Enrique OteroGases Del Caribe-No cont con la presencia de unResolucin No. 06-0431 de 18Juzgado Sexto Penal MunicipalJuzgado Segundo Penal del

138 La primera decisin, a folio 59 del cuaderno 1; la segunda, a folio 124 del mismo cuaderno.
Sentencia SU-1010 de 2008

Ramrez S.A. E.S.P. tcnico. de abril de 2006. de Barranquilla. Circuito de Barranquilla


-No se le garantiz la posibilidad de
aportar pruebas. RESUELVE. () Imponer al NIEGA. CONFIRMA.
servicio de gas natural del - Existen otros medios dePor las mismas razones del a
inmueble ubicado en () una defensa judicial y no sequo.
sancin equivalente a demostr la existencia de un
$1.690.284,36, por concepto de perjuicio irremediable.
infraccin del artculo 49 del - En el procedimiento
Contrato de Condiciones administrativo no se
Uniformes, en lo referente a presentaron irregularidades que
manipulacin de equipos, redes comportaran una vulneracin
y acometidas, como se demostr del derecho al debido proceso
durante la actuacin del peticionario.
adelantada, discriminados as:

Consumo no $150.858,00
facturado
Contribucin $13.426,36
8.9%
Sancin por $1.526.000,00
manipulacin
de equipos
Total $1.690.284,36
140
17 1.573.600 Darly BeatrizElectricaribe S.A.-No cont con la presencia de un Decisin empresarial No.Juzgado Sptimo PenalJuzgado Segundo Penal del
Gonzlez E.S.P. tcnico. 2290292-111075 de 26 de agostoMunicipal de Barranquilla. Circuito de Barranquilla
-No se comunic el auto de aperturade 2006.
a pruebas. CONCEDE. CONFIRMA.
RESUELVE: () Cobrar la Las empresas de serviciosLas empresas de servicios
energa dejada de facturar pblicos domiciliarios nopblicos s tienen facultad para
correspondiente e imponer una tienen facultad para imponerimponer sanciones pecuniarias,
sancin pecuniaria por una sanciones pecuniarias. pero en este caso se present
suma total de $718.213,00 una violacin del derecho al
debido proceso, como quiera
que no se comunic

139 Folio 5, cuaderno 1.


140 Folio 81, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

debidamente el auto de apertura


a pruebas a la accionante.
141
18 1.573.681 Rosa MaraEtaservicios S.A.La accionante nicamente alega queResolucin No. 87 de 8 deJuzgado Tercero PromiscuoJuzgado Civil del Circuito de
Echavarra E.S.P. las empresas de servicios pblicosseptiembre de 2006. Municipal de Apartad,Apartad, Antioquia
Usuga domiciliarios no tienen facultad para Antioquia.
imponer sanciones pecuniarias. () el valor total est CONFIRMA.
compuesto de un 20% NIEGA. Los derechos que se alegan
correspondiente a la sancin - Las empresas de servicioscomo vulnerados, no se
pecuniaria y el otro 80% pblicos s tienen facultad pararelacionan con los hechos
correspondiente a la energa imponer sanciones pecuniarias. expuestos por la actora.
recuperada durante el tiempo en - En el procedimiento
que se present la irregularidad administrativo no se
() presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
RESUELVE: () Imponer una del derecho al debido proceso
sancin administrativa del peticionario.
pecuniaria por violacin del
contrato de condiciones
uniformes, () por la suma de
un milln ciento treinta y cinco
mil setecientos noventa pesos
m.l. ()
142
19 1.573.787 Sara Coavas Electrocosta S.A., No se le notificaron las decisionesDecisin empresarial No.Juzgado Promiscuo MunicipalJuzgado Penal del Circuito de
Gmez E.S.P. porque el predio estaba desocupado.1851579 de 31 de marzo dede Momil, Crdoba. Lorica, Crdoba
Slo se le enter del pliego de2006.
cargos. NIEGA. CONFIRMA.
RESUELVE. () Cobrar la En el procedimientoPor las mismas razones del a
energa dejada de facturar administrativo no sequo.
correspondiente a una suma presentaron irregularidades que
total de $ 354.230,00 comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
143
20 1.574.070 Gustavo Adolfo Electricaribe -Las fotografas no muestran laDecisin empresarial No.Juzgado Primero PenalJuzgado Penal del Circuito de

141 Folio 5, cuaderno 1.


142 Folio 19, cuaderno 1.
143 Folio 25, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

Hernndez S.A., E.S.P. irregularidad. 2129395-119442 de 22 deMunicipal de Soledad,Soledad, Atlntico.


Araque -La visita se hizo mientras dorma. septiembre de 2006. Atlntico
CONFIRMA.
RESUELVE: () Cobrar la NIEGA. Por las mismas razones del a
energa dejada de facturar En el procedimientoquo.
correspondiente e imponer una administrativo no se
sancin pecuniaria por una presentaron irregularidades que
suma total de $331.713,00. comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
144
21 1.574.078 Eduardo Noriega Electricaribe - La visita se hizo mientras dorma. Decisin empresarial No.Juzgado Segundo PenalJuzgado Penal del Circuito de
Herrera S.A., E.S.P. 2127205-92995 del 23 de junioMunicipal de Soledad,Soledad,
de 2006. Atlntico. Atlntico.

RESUELVE. () Cobrar la CONCEDE. REVOCA.


energa dejada de facturar Las empresas de servicios- Existen otros medios de
correspondiente e imponer una pblicos domiciliarios nodefensa judicial y no se
sancin pecuniaria por una tienen facultad para imponerdemostr la existencia de un
suma total de $396.502,00 sanciones pecuniarias. perjuicio irremediable. - En el
procedimiento administrativo
no se presentaron
irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
- El cobro no responde a la
imposicin de una sancin, sino
a recuperacin de energa
consumida y dejada de facturar.
145
22 1.574.079 Miguel Salas Electricaribe El accionante nicamente alega queDecisin empresarial No.Juzgado Primero PenalJuzgado Penal del Circuito de
S.A., E.S.P. las empresas de servicios pblicos2126335-59827 de 29 deMunicipal de Soledad,Soledad, Atlntico.
domiciliarios no tienen facultad para septiembre de 2006. Atlntico.
imponer sanciones pecuniarias. CONFIRMA.
RESUELVE. () Cobrar la NIEGA. Por las mismas razones del a

144 Folio 13, cuaderno 1.


145 Folio 4, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

energa dejada de facturar Existen otros medios dequo.


correspondiente e imponer una defensa judicial y no se
sancin pecuniaria por una demostr la existencia de un
suma total de $2.883.950,00 perjuicio irremediable.
146
23 1.575.094 Edgar Penagos Electricaribe No se le notific la decisinDecisin empresarial No.Juzgado Doce Civil MunicipalNo hubo segunda instancia.
Berrio S.A., E.S.P. sancionatoria. 2347777-107887 de 16 dede Barranquilla.
agosto de 2006.
NIEGA.
RESUELVE. () Cobrar la Existen otros medios de
energa dejada de facturar defensa judicial y no se
correspondiente e imponer una demostr la existencia de un
sancin pecuniaria por una perjuicio irremediable.
suma total de $1.481.750,00
147
24 1.575.659 lvaro Osma Electricaribe El actor alega que laDecisin empresarial No.Juzgado Quinto Penal delNo hubo segunda instancia.
Rodrguez S.A., E.S.P. y Superintendencia de Servicios2255873-58038 de 26 deCircuito de Barranquilla.
Superintendencia Pblicos Domiciliarios no ha dadodiciembre de 2005.
de Servicios solucin al recurso de apelacin, a NIEGA.
Pblicos pesar de que ya han pasado 4 meses. RESUELVE. () Cobrar la La entidad incurri en mora en
Domiciliarios. energa dejada de facturar el envo del expediente a la
correspondiente e imponer una Superintendencia de Servicios
sancin pecuniaria por una Pblicos Domiciliarios, pero
suma total de $16.601.930,00 debido a que la remisin se
produjo durante el trmite de la
accin de tutela, se configur
un hecho superado.
148
25 1.579.196 Arstides Bello Electrificadora -No cont con la presencia de un Resolucin No. 819 de 19 deJuzgado TerceroNo hubo segunda instancia.
Castellanos del Meta. tcnico. septiembre de 2006. Administrativo del Circuito de
-No se le notific debidamente la Villavicencio.
decisin sancionatoria. Se cobra energa dejada de
facturar, una multa, unos sellos NIEGA.
y una revisin en cuanta de Existen otros medios de
$2.295.032. defensa judicial y no se
demostr la existencia de un

146 Folio 51, cuaderno 1.


147 Folio 18, cuaderno 1.
148 Folio 30, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

perjuicio irremediable.

149
26 1.618.168 Cenayda Medina Electrolima S.A., La accionante nicamente alega queResolucin No. 127 de 25 deJuzgado Primero Civil delTribunal Superior de Ibagu.
Arias E.S.P. en las empresas de servicios pblicosfebrero de 2002. Circuito de Honda, Tolima.
liquidacin, domiciliarios no tienen facultad para REVOCA.
Enertolima S.A., imponer sanciones pecuniarias. RESUELVE. () Sancionar al CONCEDE. Existen otros medios de
E.S.P. y cliente Roberto Medina y/o - Las empresas de serviciosdefensa judicial y no se
Superintendencia Por su parte, Electrolima S.A.,propietario del inmueble y/o pblicos domiciliarios nodemostr la existencia de un
de Servicios E.S.P. en liquidacin aduce que si enusuario responsable del tienen facultad para imponerperjuicio irremediable.
Pblicos este momento se produce un falloinmueble ubicado en (), sanciones pecuniarias.
Domiciliarios. favorable a los intereses delcobrando las obligaciones - No existe un problema de
peticionario, no sera posiblegeneradas frente a la empresa, inmediatez porque las
devolver dineros. por el servicio suministrado y sentencias en las cuales la
La actora realiz acuerdo de pago no registrado y dems Corte Constitucional estableci
con Enertolima, pero esa entidadconceptos. que las E.S.P. no tienen
afirma que slo es un recaudador de potestad para sancionar
una sancin y que esos dineros los pecuniariamente a los usuarios,
est recibiendo Electrotolima. son del ao 2006 y antes de esa
fecha la actora no tena por qu
conocer ese hecho.
150
27 1.619.105 Oscar Marn Electricaribe No estuvo presente en la diligencia. Decisin empresarial No.Juzgado Once Penal MunicipalJuzgado Sexto Penal del
Rodrguez S.A., E.S.P. 2079786-114403 de 1 dede Barranquilla, Atlntico. Circuito de Barranquilla,
septiembre de 2006. Atlntico.
Hay acuerdo de pago. NIEGA.
RESUELVE. () Cobrar la Existen otros medios deCONFIRMA.
energa dejada de facturar defensa judicial y no seLas empresas no pueden
correspondiente a una suma demostr la existencia de unimponer sanciones pecuniarias
total de $436.130,00 perjuicio irremediable. pero en este caso ya se celebr
un acuerdo de pago. Por tal
razn, el accionante debe
acudir a la jurisdiccin
ordinaria-civil.
151
28 1.619.182 Jaime Trujillo Enertolima S.A., No conoci del proceso sino hastaResolucin Sancionatoria No.Juzgado Segundo CivilJuzgado Sexto Civil del

149 Folio 75, cuaderno 1.


150 Folio 54, cuaderno 1.
151 Folio 38, cuaderno 1
Sentencia SU-1010 de 2008

Cortes E.S.P que recibi la factura. 2201 de 5 de julio de 2006. Municipal de Ibagu, Tolima. Circuito de Ibagu.

El actor solicit a la() el valor discriminado de NIEGA. CONFIRMA.


Superintendencia de Serviciosla liquidacin de la sancin es - Existen otros medios deEl actor ejerce la accin por
Pblicos la revocatoria directa del el siguiente: defensa judicial y no seuna tercera persona pero no
acto pero se neg. () Sancin por fraude y/o demostr la existencia de undice por qu.
manipulacin: $401.037. perjuicio irremediable. - En el
Recuperacin de energa: procedimiento administrativo
$401.037. no se presentaron
irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
- No hay legitimacin para
actuar porque la actuacin se
dirigi en contra de otra
persona.
152
29 1.621.210 Ricardo Vergara Codensa S.A., -La diligencia no la atendi ni el No se encuentra la decisinJuzgado Diecisis PenalJuzgado Noveno Penal del
Snchez E.S.P. propietario ni el usuario. empresarial. Municipal de Bogot. Circuito de Bogot.
-No conoci del proceso sino hasta
que recibi la factura. Sin embargo, en el expedienteNIEGA. CONFIRMA.
obra un documento suscrito por- La accin de tutela es- El cobro no responde a la
la empresa accionada, en el que improcedente para definirimposicin de una sancin, sino
manifiesta que expidi el actocontroversias econmicas. a recuperacin de energa
administrativo No. 447790 de 26-No se ejercieron los recursosconsumida y dejada de facturar.
de septiembre de 2006, medianteen la va gubernativa. - En el procedimiento
el cual se le impuso al usuario el administrativo no se
pago de $59.708.012, por presentaron irregularidades que
concepto de recuperacin de comportaran una vulneracin
energa, contribucin por del derecho al debido proceso
reintegros y sellos. del peticionario.
- La accin de tutela es
Sin embargo en la contestacin a improcedente para definir
la demanda de tutela, la entidad controversias econmicas.
dirige parte de su

152 Folio 26, cuaderno 1.


Sentencia SU-1010 de 2008

argumentacin a exponer que las


empresas de servicios pblicos
domiciliarios s tienen potestad
sancionadora.
153
30 1.621.497 Alba Marina Enertolima S.A. La diligencia no la atendi ni elResolucin sancionatoria No.Juzgado Once Civil MunicipalJuzgado Sexto Civil del
Palma E.S.P. propietario ni el usuario. 4056 de 13 de septiembre dede Ibagu, Tolima. Circuito de Ibagu, Tolima.
2006.
CONCEDE. REVOCA.
() el valor discriminado de Las empresas de servicios-No se ejercieron los recursos
la liquidacin de la sancin es pblicos domiciliarios noen la va gubernativa.
el siguiente: tienen facultad para imponer- Existen otros medios de
() Sancin por fraude y/o sanciones pecuniarias. defensa judicial y no se
manipulacin: $2.127.324. demostr la existencia de un
Recuperacin de energa: perjuicio irremediable.
$2.127.324.
31 1.621.898 Amilcar Rafael Emdupar S.A., El usuario aduce que la empresa No hay decisin empresarial. Juzgado Tercero CivilJuzgado Primero Civil del
Carrillo Baquero E.S.P. perdi el derecho a cobrar esas Municipal de Valledupar,Circuito de Valledupar, Cesar.
sumas, por no haber cumplido con Cesar.
su obligacin de instalar el medidor. CONFIRMA.
NIEGA.
El problema jurdico se relaciona La accin de tutela tiene
En criterio del fallador, lacarcter residual y procede
con el cobro promedio de facturas
por parte de la empresa, frente a la accin de reclamacin decuando se est en presencia de
falta de medidor de consumo. facturacin slo puedela ocurrencia de un perjuicio
ejercerse dentro de los 5 meses irremediable, lo que no ocurre
siguientes a su expedicin, y,en este caso. Por otra parte,
encuentra el Despacho que en
debido a que en este caso este este asunto oper la
trmino expir, no resultaprescripcin de la accin de
admisible la solicitud delreclamacin de las facturas, al
accionante. haber transcurrido ms de 5
meses desde que fueron
expedidas.
154
32 1.621.963 Adiela Esther Electricaribe -La diligencia no la atendi elDecisin empresarial No.Juzgado Tercero CivilJuzgado Primero Civil del

153 Folio 12, cuaderno 1.


154 Folio 67, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

Hinojosa Rudas S.A., E.S.P. usuario. 2196566 de 21 de diciembre deMunicipal de Valledupar,Circuito de Valledupar, Cesar.
-No se identificaron con el carn. 2006 Cesar.
-No se le indica la norma especfica REVOCA.
en la que se basa la supuesta Impuesto de $4.592,00 CONCEDE. - Existen otros medios de
irregularidad, slo normas IVA Las empresas de serviciosdefensa judicial y no se
genricas. Costos de $28.700,00 pblicos domiciliarios nodemostr la existencia de un
inspeccin tienen facultad para imponerperjuicio irremediable. - En el
irregularidades sanciones pecuniarias. procedimiento administrativo
Consumo $1.039.163,58 no se presentaron
Subsidio $-6.275,74 irregularidades que
Sancin $3.098.663.52 comportaran una vulneracin
Aproximacin $-3.39 del derecho al debido proceso
a decenas del peticionario.
TOTAL $4.164.840

RESUELVE. () Cobrar la
energa dejada de facturar e
imponer una sancin pecuniaria
por una suma total de
$4.164.840,00
155
33 1.622.627 Pedro David Electricaribe S.A. No se le notific debidamente laEn el expediente no se encuentra Juzgado Sexto Civil MunicipalJuzgado Primero Civil del
Lizarazo Rubio E.S.P. decisin sancionatoria. la decisin empresarial proferidade Valledupar. Circuito de Valledupar.
por la entidad accionada.
CONCEDE. REVOCA.
Hay un pantallazo de la base de- Las empresas de servicios- Existen otros medios de
datos de la entidad, en el que se pblicos domiciliarios nodefensa judicial y no se
consigna que el accionante debetienen facultad para imponerdemostr la existencia de un
cancelar las siguientes sumas: sanciones pecuniarias. perjuicio irremediable. - En el
- Frente a la falta de respuesta aprocedimiento administrativo
Impuesto de $4.592,00 la presente accin por parte de no se presentaron
IVA la entidad demandada, debenirregularidades que
Costos de $28.700,00 darse por ciertas lascomportaran una vulneracin
inspeccin afirmaciones del actor en eldel derecho al debido proceso
irregularidades sentido de que no sedel peticionario.
observaron las formas legales

155 Folio 23, cuaderno 1.


Sentencia SU-1010 de 2008

Consumo $4.824.721,71 durante el trmite


Contribucin $964.902,28 administrativo.
por E. Activa
Sancin $5.789.623,99
Total importe 11.612.539,98
156
34 1.622.802 Marino Montes Electrocosta S.A. No cont con la presencia de unDecisin empresarial No.Juzgado Promiscuo MunicipalJuzgado Promiscuo del Circuito
Bravo E.S.P. tcnico. 1919749 de 31 de mayo dede San Bernardo del Viento. de Familia de Lorica, Crdoba.
2006.
NIEGA. CONFIRMA.
RESUELVE: () Cobrar la - No se cobra sancinPor las mismas razones del a
energa dejada de facturar pecuniaria sino energaquo.
correspondiente a una suma consumida y dejada de facturar.
total de $281.940,00 - En el procedimiento
administrativo no se
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
157
35 1.622.835 Yudit del Electrocosta S.A. La accionante nicamente alega queDecisin empresarial No.Juzgado Promiscuo MunicipalJuzgado Promiscuo de Lorica,
Carmen Ortiz E.S.P. las empresas de servicios pblicos2167110 de 30 de noviembre dede Momil, Crdoba. Crdoba.
Garca domiciliarios no tienen facultad para 2006.
imponer sanciones pecuniarias. NIEGA. CONFIRMA.
RESUELVE: () Cobrar la En el procedimientoPor las mismas razones del a
energa dejada de facturar administrativo no sequo.
correspondiente a una suma de presentaron irregularidades que
$293.315,00 comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
158
36 1.622.894 Hernando Devia Enertolima S.A. No tuvo oportunidad de controvertir Resolucin sancionatoria No.Juzgado Segundo PromiscuoJuzgado Primero Civil del
E.S.P. las decisiones adoptadas por la5212 de 11 de diciembre deMunicipal del Guamo, Tolima. Circuito de Guamo, Tolima.
empresa. 2006.
CONCEDE. REVOCA.
RESUELVE. PRIMERO. Las empresas de serviciosNo se ejercieron los
156 Folio 23, cuaderno 1.
157 Folio 23, cuaderno 1.
158 Folio 90, cuaderno 2.
Sentencia SU-1010 de 2008

Imponer el cobro por concepto pblicos domiciliarios nomecanismos existentes en la va


de recuperacin de energa y tienen facultad para imponergubernativa para controvertir
revisin del predio () por la sanciones pecuniarias. las decisiones.
suma de setecientos treinta mil
seiscientos ochenta y nueve
pesos moneda legal ()
SEGUNDO. Imponer sancin
pecuniaria a Hernando Devia
en calidad de suscriptor y/o al
propietrario y/o al usuario del
inmueble identificado con el
cdigo de cliente No. 99286, por
la suma de quinientos noventa y
cuatro mil seiscientos ochenta y
nueve pesos moneda legal ()
159
37 1.623.944 Jos Angel SernaSociedad de No cont con la presencia de unActo empresarial No. CLP 134Juzgado Octavo PenalNo hubo segunda instancia.
Arriaga Acueducto, tcnico. de 28 de agosto de 2006. Municipal de Barranquilla.
Alcantarillado y
Aseo de RESUELVE. () Imponer al IMPROCEDENTE.
Barranquilla S.A. usuario, suscriptor y/o usuario Existen otros medios de
E.S.P. del inmueble ubicado en (), defensa judicial y no se
pena por incumplimiento de los demostr la existencia de un
deberes del usuario o suscriptor perjuicio irremediable.
del servicio de acueducto,
alcantarillado y aseo por valor
de cuatrocientos ocho mil pesos
($408.000).
160
38 1.624.749 Luis Hernndez Codensa S.A., No se le inform de la posibilidadDecisin empresarial No.Juzgado Setenta y Cuatro PenalJuzgado Diecisiete Penal del
Guilln E.S.P. de presentar recurso de apelacin. 00450029 de 03 de octubre deMunicipal de Bogot. Circuito de Bogot.
2006.
NIEGA. MODIFICA- declara
Procedimiento de clculo. La accin carece del requisitoimprocedente.
Consumo no autorizado o de inmediatez, ya que laExisten otros medios de
consumo no registrado por empresa impone la sancin endefensa judicial y no se

159 Folio 15, cuaderno 1.


160 Folio 143, cuaderno 1.
Sentencia SU-1010 de 2008

periodo de facturacin () el ao 2006 y el actor slodemostr la existencia de un


12.3 Sanciones pecuniarias () acude a la tutela pasados seisperjuicio irremediable.
DECISIN. Fundada en las meses.
pruebas y razones expuestas,
dando aplicacin a lo dispuesto
en las condiciones uniformes del
contrato de servicio de energa,
y dando cumplimiento de las
obligaciones all sealadas a
cargo del suscriptor/ usuario/
propietario de la referencia se
establece a su cargo un cobro
por la suma de $4.439.205
161
39 1.625.827 Martha Giraldo Emcali E.I.C.E., La accionante nicamente alega queResolucin No. 332507-1 de 6Juzgado Sexto Civil MunicipalJuzgado Sexto Civil del
Orjuela E.S.P. las empresas de servicios pblicosde febrero de 2007. de Cali, Valle. Circuito de Cali, Valle.
domiciliarios no tienen facultad para
imponer sanciones pecuniarias. RESUELVE. () Cobrar al NIEGA. CONFIRMA.
suscriptor No. 10-264473-0, - La jurisprudencia de la Corte- En el procedimiento
La entidad accionada alega que el consumos no facturados Constitucional, segn la cualadministrativo no se
pronunciamiento de la Corte es sloequivalentes a 2.430 kWh con las empresas de serviciospresentaron irregularidades que
respecto de empresas privadas, perouna tarifa de ($250.6) pblicos domiciliarios nocomportaran una vulneracin
que en su calidad de personacorrespondiente a energa tienen facultad para imponerdel derecho al debido proceso
jurdica de derecho pblico, ella s recuperada por valor de sanciones pecuniarias, sedel peticionario.
est facultada. ($608.958) y sancin de refiere nicamente a las-No se ejercieron los recursos
(608.958) para un total de un prestadoras de carcter privado,en la va gubernativa.
milln doscientos diecisiete mil no a las personas jurdicas de - Aclara que estas empresas
novecientos diecisis pesos derecho pblico. slo pueden imponer las
m/cte ($1.217.916) - En el procedimientosanciones de la ley, a pesar de
administrativo no seser pblicas.
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
- -No se ejercieron los recursos
en la va gubernativa.

161 Folio 19, cuaderno 1.


Sentencia SU-1010 de 2008

162
40 1.631.213 Leopoldo Electrocosta S.A.No se le inform que poda traer a Decisin empresarial No.Juzgado Promiscuo MunicipalNo hubo segunda instancia.
Villadiego E.S.P. un tcnico o testigo. 2209110 de 3 de enero de 2007. de Pursima, Crdoba.
Cantillo
RESUELVE. () Cobrar la NIEGA.
energa dejada de facturar - El cobro no responde a la
correspondiente a una suma imposicin de una sancin,
total de $743.290 sino a recuperacin de energa
consumida y dejada de facturar.
- En el procedimiento
administrativo no se
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.
163
41 1.632.319 Rumualdo Electrocosta S.A.- Seala que por un accidente deDecisin empresarial No.Juzgado Segundo PromiscuoJuzgado nico Civil del
Turizo Galvis E.S.P. trnsito hubo interrupcin del2114750 de 23 de agosto deMunicipal de Santa Ana,Circuito de El Banco,
servicio de energa. Como la entidad2006. Magdalena. Magdalena
no acudi a solucionar el problema,
l y sus vecinos se reconectaronRESUELVE: () Imponer una CONCEDE. REVOCA.
directamente, pagando un consumosancin pecuniaria por la suma - En el procedimiento- Existen otros medios de
estimado. De esta situacin se le de [cifra ilegible] administrativo se presentarondefensa judicial y no se
inform oportunamente a la irregularidades quedemostr la existencia de un
empresa, quien no adelant ninguna comportaron una vulneracinperjuicio irremediable. - En el
actuacin para dar solucin al del derecho al debido procesoprocedimiento administrativo
problema. del peticionario, ya que no seno se presentaron
-La decisin de considerar plena notificaron debidamente lasirregularidades que
prueba las obtenidas en la visita, se decisiones administrativascomportaran una vulneracin
le notific vencido el trmino para adoptadas. del derecho al debido proceso
impugnar. -La entidad saba de ladel peticionario.
reconexin porque los propios
usuarios le informaron.

164
42 1.632.544 Stella JaramilloElectrificadora deLa indujeron a renunciar a losResolucin sancionatoria No.Juzgado Primero Promiscuo deNo hubo segunda instancia.

162 Folio 40, cuaderno 1.


163 Folio 67, cuaderno 1.
164 Folio 22, cuaderno 1. La liquidacin se encuentra en el folio 24.
Sentencia SU-1010 de 2008

de Martnez Santander
S.A.trminos para interponer los1261338 de 31 de mayo deFamilia de Barrancabermeja,
E.S.P. recursos y a celebrar un contrato de2006. Santander.
transaccin.
RESUELVE: () Ordenar el NIEGA.
Hay un contrato de transaccin. pago solidario por la suma de - En el procedimiento
TRES MILLONES administrativo no se
TRESCIENTOS CUARENTA Y presentaron irregularidades que
SIETE MIL DIEZ PESOS comportaran una vulneracin
M/CTE () por concepto de del derecho al debido proceso
IRREGULARIDAD EN LAS del peticionario.
CONEXIONES Y ROTURA DE - La inconformidad con el
SELLOS y por revisin de contrato de transaccin debe
instalaciones elctricas y/o ser conocida por el juez
equipo de medida, de ordinario.
conformidad con la parte motiva
de la presente decisin.
165
43 1.635.364 Pedro JoaqunElectrificadora de-No se identificaron con el carn. No est la decisin empresarial Juzgado Tercero CivilJuzgado Sexto Civil del
Martnez Santander S.A.,-No se le inform que poda traer apero s un documentoMunicipal de Bucaramanga. Circuito de Bucaramanga.
Naranjo E.S.P. un tcnico. denominado Preliquidacin de
-No se demostr que la energaenerga y sanciones. NIEGA. CONFIRMA.
facturada haya sido consumida por - Existen otros medios dePor las mismas razones del a
l. SANCIONES. defensa judicial y no sequo.
-No es obligacin del usuario queCambio de uso () $211.253. demostr la existencia de un
los medidores funcionen bien. Adulteracin Conexin/Equipos perjuicio irremediable. - En el
() $4.956.232. procedimiento administrativo
Total $5.167.485 no se presentaron
irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario.

166
44 1.639.727 Ana Luca DazElectricaribe No se le inform de la iniciacin del - Decisin empresarial No.Juzgado Segundo PenalNo hubo segunda instancia.
Sarmiento S.A., E.S.P. trmite administrativo, por eso no1293123 de 8 de octubre deMunicipal de Soledad,
pudo oponerse. 2004. Atlntico.

165 Folio 3 y 39, cuaderno 1.


166 La Decisin de 2004, a folio 8 del cuaderno 1; la de 2006, a folio 41 del mismo cuaderno.
Sentencia SU-1010 de 2008

RESUELVE. () Imponer una


La accin de tutela se dirige ensancin pecuniaria por la suma NIEGA.
contra de dos decisionesde $363.660. - En relacin con la decisin
empresariales. del ao 2004, el juez niega por
-Decisin empresarial No.falta de inmediatez en el
1834747 de 16 de marzo deejercicio de la accin.
2006.
RESUELVE. () Cobrar la - En relacin con la decisin
energa facturada proferida en el ao 2006, se
correspondiente por una suma niega la accin por las
total de $94.830,00 siguientes razones: (i) - El
cobro no responde a la
imposicin de una sancin,
sino a recuperacin de energa
consumida y dejada de facturar;
(ii) en el procedimiento
administrativo no se
presentaron irregularidades que
comportaran una vulneracin
del derecho al debido proceso
del peticionario y (iii) la
accionante puede acudir a otros
medios de defensa judicial.
167
45 1.639.736 Jess EmilioAguas de-Las fotografas se tomaron sin suDecisin Empresarial PQRJuzgado Primero CivilJuzgado Segundo Civil del
Vergara Girardot, Ricaurtepresencia. 2006-388937, de 29 deMunicipal de Girardot,Circuito de Girardot,
Quimbayo y la Regin S.A.,-No hubo testigos en la diligencia. noviembre de 2006. Cundinamarca. Cundinamarca.
E.S.P. -El actor ya haba informado de las
irregularidades. Decide: () Informar al NIEGA. CONFIRMA.
usuario que debe cancelar la En el procedimientoPor las mismas razones del a
suma de cuatrocientos once mil administrativo no sequo y, adems, por cuanto el
La Superintendencia confirm lanovecientos sesenta y dos pesos presentaron irregularidades queactor present los recursos de
decisin administrativa ($411.962.oo), de conformidad comportaran una vulneracinmanera extempornea.
con lo expuesto en la presente del derecho al debido proceso
decisin, por consumos dejados del peticionario.
de facturar.

167 Folio 5, cuaderno 1.


Sentencia SU-1010 de 2008

46 1.828.809 Rosa IsabelEmdupar S.A.,El usuario aduce que la empresa No hay decisin empresarial. Juzgado Quinto CivilJuzgado Primero Civil del
Tern de Castillo E.S.P. e Interaseo. perdi el derecho al cobro del Municipal de Valledupar,Circuito de Valledupar, Cesar.
servicio, por no haber cumplido con Cesar.
su obligacin de instalar el medidor. REVOCA.
CONCEDE. La accin de tutela es
La empresa incumpli con elimprocedente para debatir
El problema jurdico se relaciona deber de instalar el medidor,asuntos de naturaleza
con el cobro promedio de facturas por lo que perdi el derecho alpuramente contractual o
por parte de la empresa, frente a la pago. patrimonial.
falta de medidor de consumo. Adems, la accionante cuenta
con otros medios de defensa
judicial.
47 1.828.810 Lester Quintana Emdupar S.A.,El usuario aduce que la empresa No hay decisin empresarial. Juzgado Tercero CivilJuzgado Primero Civil del
E.S.P. perdi el derecho al cobro del Municipal de Valledupar,Circuito de Valledupar, Cesar.
servicio, por no haber cumplido con Cesar.
su obligacin de instalar el medidor. CONFIRMA.
NIEGA. Por las mismas razones del a
La accin de tutela esquo.
El problema jurdico se relaciona improcedente para debatir
con el cobro promedio de facturas asuntos de naturaleza
por parte de la empresa, frente a la puramente contractual o
falta de medidor de consumo. patrimonial.
Adems, la accionante cuenta
con otros medios de defensa
judicial y no se demostr la
existencia de un perjuicio de
carcter irremediable.
48 1.828.811 Deudis Quintana Emdupar S.A.,El usuario aduce que la empresa No hay decisin empresarial. Juzgado Segundo CivilJuzgado Primero Civil del
E.S.P. perdi el derecho al cobro del Municipal de Valledupar,Circuito de Valledupar, Cesar.
servicio, por no haber cumplido con Cesar.
su obligacin de instalar el medidor. CONFIRMA.
NIEGA. Por las mismas razones del a
La accionante cuenta con otros quo.
El problema jurdico se relaciona medios de defensa judicial y no
con el cobro promedio de facturas se demostr la existencia de un
por parte de la empresa, frente a la perjuicio de carcter
falta de medidor de consumo. irremediable.
Sentencia SU-1010 de 2008

49 1.836.549 Navis AlbertoElectricaribe El usuario aduce que la empresa No hay decisin empresarial. Juzgado Segundo CivilJuzgado Tercero Civil del
Oviedo S.A., E.S.P. perdi el derecho al cobro del Municipal de Valledupar,Circuito de Valledupar, Cesar.
servicio, por el paso del tiempo. Cesar.
Adems, sostiene que la facturacin CONFIRMA.
se refiere a un inmueble que est NIEGA. Por las mismas razones del
vaco y no recibe el servicio. El accionante cuenta con otrosquo. Adicionalmente, sostiene
medios de defensa judicial y noque la empresa no ha incurrido
El problema jurdico se relaciona se demostr la existencia de unen ninguna conducta violatoria
con el cobro promedio de facturas perjuicio de carcterde los derechos fundamentales
por parte de la empresa, frente a la irremediable. del accionante.
falta de medidor de consumo.

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