La Revolucin Haitiana (17911804) *

Una contribucin para superar el olvido y el abandono

Autor: Henry Boisrolin

Tabla de contenidos:

I. Introduccin
II. De la esclavitud a la Independencia
A. El Inicio
B. Explotacin Colonial Francesa
C. Pacto Colonial
D. Estructura Colonial de Clases en Saint-Domingue
III. Fechas Inolvidables
IV. Importancia de la Revolucin Francesa de 1789 y de la Revolucin Haitiana
V. Reflexiones Pertinentes
VI. Tres figuras importantes
Jean-Jacques Dessalines
Alexandre Ption
VII. Los olvidos de la Historia
VIII. Palabras finales

Instituto de culturas aborgenes, Crdoba Coordinador del Comit Democrtico

Haitiano en Argentina

*
Fuente: Ariadna Tucma, revista latinoamericana. Nueva maquetacin
por Demfilo. Ilustraciones varias, de internet.

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 I. Introduccin

Por distintos motivos, el inters

por el estudio de la problemtica
haitiana en Amrica Latina es es-
caso. Tan solo los analistas, en su
enorme mayora, ponen el acento
sobre los escalofriantes y reales
datos publicados por distintos or-
ganismos internacionales que con-
firman que ese pequeo pas cari-
beo detenta el rcord en analfabetismo (80%), en mortalidad infantil
(120 por mil nacidos vivos), en desocupacin (60% de la poblacin
activa) y todas las dems lacras del subdesarrollo crnico propio de un
pas perifrico sumamente dependiente del imperialismo norteameri-
cano. Inclusive, muchos reproducen los esquemas discriminatorios
provenientes de los grandes centros del poder mundial tambin acerca
de la religin del pueblo haitiano (el vod) asimilndola a la magia.
As, Hait aparece en numerosos textos como algo extico, fuera del
marco del sistema de dependencia predominante en Amrica Latina y
el Caribe a excepcin de Cuba -. El pueblo haitiano aparece tambin
desposedo de su cultura y, sobre todo, de su historia. Una historia
que, desde distintos puntos de vista, merece sin embargo un trato ne-
tamente diferente.
Pero sera injusto en esta breve introduccin, no reconocer tambin la
culpabilidad de la lite haitiana, la de los dirigentes polticos de mi
pas desde 1806 hasta nuestros das salvo algunas y honrosas excep-
ciones y la de las organizaciones de la izquierda haitiana, en ese mo-
do tan equivocado y tan divulgado de aprehender el drama haitiano.
A doscientos aos de la Proclamacin de la Independencia de Hait,
revalorizar aquella epopeya adems de ser un deber ineludible se
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torna indispensable a la hora de aportar una contribucin real y efecti-
va a la lucha por la transformacin de la realidad de ese pas sumergi-
do en el atraso, la miseria, el hambre, la indiferencia, el menosprecio y
la violencia.
Ojal que las lneas que siguen puedan servir a la puesta en marcha de
un proceso de lucha por el rescate de la identidad del pueblo haitiano,
la recuperacin de su dignidad; es decir por su segunda y definitiva
segunda liberacin.

II. De la esclavitud a la Independencia

Tengo plena conciencia de la imposibilidad de explicar cabalmente en

tan pocas pginas un proceso muy complejo y tan poco conocido co-
mo la Revolucin Haitiana producida en los albores del siglo XIX.
Asimismo, he optado por hacer hincapi en la contradiccin funda-
mental: Colonia vs. Metrpoli de aquel rgimen de opresin y explo-
tacin (la Esclavitud) resaltando al mismo tiempo la dinmica de la
lucha de clases en el seno de aquella formacin social. Estoy persua-
dido de que esto ayudar a una mejor comprensin del fenmeno que
pretendo aprehender fuera de todo tipo de nacionalismo obtuso, de-
formador y alienante.

A. El Inicio
Esta terrible historia empez en diciembre de 1492 con la conquista
espaola de toda la isla, hoy dividida en dos Repblicas: la Repblica
Dominicana al este y la Repblica de Hait al oeste. Para realizar el
pillaje de su principal riqueza, el oro, los conquistadores sometieron a
los primeros habitantes (Tainos, Caribes, Arawacs, etc.) a trabajos
forzados en las minas donde yaca ese metal precioso y tan importante
para el posterior desarrollo del rgimen capitalista de produccin.
Rpidamente aplastadas las rebeliones indgenas por la fuerza y supe-
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rioridad de las armas espaolas, esos grupos tnicos fueron extermi-
nados. As se produjo el primer genocidio en nuestra regin. Es a par-
tir de all, que en 1517 los vencedores decidieron el transporte de me-
lanoafricanos como esclavos para reemplazar a los indgenas. Haba
comenzado la Trata Negrera, y luego su producto, la Esclavitud. Este
ltimo fue, sin duda alguna, uno de los pilares fundamentales para el
desarrollo y prosperidad del capitalismo.
En este punto, recalco nada ms que la historia jams registr algo
peor en cuanto a crueldad, sometimiento y tragedia humana. Como el
rigor de aquel sistema de dominacin es por todos conocido, me exi-
mo de mayores comentarios.

B. Explotacin Colonial Francesa

En 1697, por el Tratado de Ryswick, Espaa cedi a Francia la tercera
parte de la isla. Los franceses la llamaron Saint-Domingue; y a travs
del tiempo se transform en la colonia ms prspera que tuvo Francia.
Su produccin gracias a la mano de obra esclava lleg a representar
las dos terceras partes del comercio exterior de la metrpoli. Pero di-
cha riqueza fue nicamente para los dueos de los medios de produc-
cin ya que la principal fuerza generadora de esa colosal masa de ri-
quezas (el esclavo) vivi como animal. Su rendimiento no llegaba a
los diez aos.

C. Pacto Colonial
Fue un mecanismo que asegur a Francia los mximos beneficios en
el intercambio con sus colonias. En efecto, el pacto Colonial exiga
que toda la produccin de las colonias tena que ir a parar exclusiva-
mente al mercado metropolitano, y a su vez todos los productos que
stas consuman deban provenir de Francia. De hecho, estableci una
divisin del trabajo de tal modo que la produccin colonial no pudo
competir con la de la metrpoli, ya que las colonias tuvieron que con-

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centrarse nicamente en la produccin primaria. Por tanto, toda indus-
tria estuvo prohibida en la isla. Adems el Pacto Colonial exigi que
el transporte martimo de los productos desde y hacia las colonias de-
biera hacerse utilizando exclusivamente buques franceses.
La primera contradiccin principal entre las clases dominantes y ex-
plotadoras surgi sin embargo del mismo Pacto Colonial, a pesar de su
eficacia. Pues el colono que vivi en las colonias y manej los hilos de
la explotacin mantuvo siempre una relacin de subordinacin total
con respecto, por ejemplo, a un importante negociante que vivi en
Francia. Tal situacin provoc el contrabando martimo, ya que los
colonos carecieron muchas veces de productos indispensables, sobre
todo en pocas de guerra en Europa. Situacin que provoc tambin la
idea de la Autonoma con respecto a la metrpoli. As, los colonos
tuvieron que atacar al poderoso aparato poltico, administrativo y mili-
tar que asegur durante mucho tiempo la subordinacin de la colonia
de Saint-Domingue a Francia, para lograr mayor margen de maniobra
y conservar en sus manos una cuota muy superior de la riqueza prove-
niente de la Esclavitud.

D. Estructura Colonial de Clases en Saint-Domingue

1.- Existieron grandes terratenientes y grandes comerciantes. Fueron
los principales propietarios no slo de muchos medios de produccin,
sino tambin de la principal fuerza de trabajo: el esclavo. Fueron cerca
de 28.000 en el momento del estallido de la Revolucin, y casi todos
europeos.
2.- Existi tambin un sector intermedio no homogneo formado por
pequeos propietarios de tierra explotando por supuesto mano de obra
esclava. Fueron cerca de 30.000. Entre ellos se destacaron los hijos de
los europeos con algunas esclavas (los mal llamados mulatos) y euro-
peos de bajos recursos y dedicados especficamente a pequeas activi-
dades comerciales.

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3.- En el polo diametralmente opuesto existi un inmenso sector to-
talmente oprimido y explotado, formado por los esclavos provenientes
de frica y sus descendientes. Fueron ms de 455.000 al estallar la
Revolucin.
Obviamente, se trat de una formacin social integrada por clases an-
tagnicas. Y si se tiene en cuenta la existencia del formidable aparato
poltico, administrativo y represivo que asegur el sometimiento de
todos los habitantes de la colonia a los intereses de los sectores domi-
nantes de la metrpoli, es fcil comprender que la lucha por la libertad
no pudo hacerse por medios pacficos. La violencia revolucionaria fue
el nico medio capaz de asegurar el triunfo. As lo entendieron los
lderes polticos de los esclavos y las propias masas al rebelarse en
agosto de 1791 quemando plantaciones y ajusticiando a sus verdugos.

III. Fechas Inolvidables

Del 14 al 15 de agosto de 1791, en un lugar conocido como Bois-

Caman en el norte de Saint-Domingue, esclavos reunidos bajo la di-
reccin de un sacerdote vod, llamado Boukman, juraron durante una
ceremonia vod vivir libres o morir.
Una semana ms tarde se desat la rebelin de los esclavos condu-
ciendo luego de 12 aos de luchas incesantes a la Independencia.
1793 Proclamacin de la libertad de los esclavos por los emisarios
franceses enviados para restaurar la paz (nunca alcanzada hasta el
triunfo de los esclavos). Esta libertad fue ratificada en 1795, frente a la
imposibilidad de mantener la Esclavitud.
1801 Toussaint Louverture (esclavo y lder de la lucha por la liber-
tad) considerado como el precursor de la Independencia hizo promul-
gar una Constitucin que prcticamente signific el establecimiento de
la Autonoma de la colonia con respecto a Francia, ya que plante la
defensa de intereses diferentes a los de la metrpoli.
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1802 Napolen Bonaparte, consciente de que Saint-Domingue es-
cap de su control, de su hegemona, orden el envo de una formida-
ble flota de expedicin militar que lleg a la isla en febrero de 1802.
Dicha flota cont con 22.000 soldados que lucharon en varias campa-
as napolenicas en el continente europeo, y estuvo a cargo del gene-
ral Leclerc, cuado de Napolen. Tuvo como misin restablecer por la
fuerza la Esclavitud.
Al frente de las
fuerzas revolucio-
narias de 10.000
hombres estuvo
Toussaint, quien no
acept la orden de
rendicin impartida
por Leclerc al llegar
a las costas de
Saint-Domingue. Se
desat una guerra
de guerrillas que
termin el 7 de ju-
nio de 1802 con la
captura de Tous-
saint mediante una
maniobra engaosa. Deportado a Francia como prisionero Toussaint
muri el 7 de abril de 1803.
1802-1803- Jean-Jacques Dessalines asumi el mando de todas las
tropas revolucionarias. Cre la bandera y condujo los esclavos a la
victoria, y proclam al independencia el 29 de noviembre de 1803 y el
1 de enero de 1804 hizo la proclamacin oficial restableciendo el
nombre indgena de Hait (Tierra montaosa).
As naci la primera Repblica Independiente en Amrica Latina, la
primera Repblica afro en el mundo. Fue la nica revolucin anties-
clavista victoriosa de la historia.

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 IV. Importancia de la Revolucin Francesa de 1789
y de la Revolucin Haitiana

Indudablemente, las ideas

de Libertad individual,
Fraternidad e Igualdad
entre todos los hombres
tuvieron un impacto so-
bre el curso de los acon-
tecimientos de Saint-
Domingue, desde los
sectores dominantes hasta
los esclavos. Pero es un
grave error considerar
que la Revolucin bur-
guesa francesa de 1789
determin el triunfo de
los esclavos. Analizar de
esta manera lo acontecido
en la colonia conduce a
desconocer los aportes
concretos de la Revolu-
cin Haitiana.
En efecto, fue dicha Revolucin que aport y materializ la idea de la
abolicin de la Esclavitud. Idea que tuvo que ser adoptada por la
Asamblea jacobina. Esa Revolucin destruy el Pacto Colonial como
mecanismo de dominacin en Saint-Domingue. Y, en definitiva, fue la
epopeya de los esclavos que cristaliz la idea de la Independencia.
Por lo tanto, hay que hablar de mutuas influencias entre ambos proce-
sos que fueron, sin duda alguna, dos brillantes hechos polticos que
marcaron la historia del siglo XIX.

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Para precisar mis ideas, recalcar brevemente algunas de las conquis-
tas de la Revolucin Haitiana de 1791-1804 :
- El poder poltico detentado durante casi tres siglos por los esclavo-
cratas fue destruido y se construy uno nuevo basado en la clase ms
explotada, la de los esclavos.
- La completa eliminacin de toda desigualdad entre los diferentes
estamentos que existieron durante la poca colonial, ha sido un cam-
bio sustancial nunca antes producido.
- La abolicin total del sistema de dominacin y explotacin esclavis-
ta, ha sido una conquista fundamental no slo para los esclavos de
Saint-Domingue sino para la humanidad entera.
- Para preservar, asegurar y mantener dichas conquistas, la Indepen-
dencia fue imprescindible. As se resolvi de manera brillante la con-
tradiccin: Colonia vs. Metrpoli.

V. Reflexiones Pertinentes

A todas luces, la Revolucin Haitiana (1791-1804) ha sido un hecho

indito y jams repetido en la historia. No la caracterizo de revolucin
burguesa, como lo hacen muchos historiadores basndose nicamente
en las caractersticas de la poca. Pues entiendo que la inexistencia de
una burguesa desarrollada en Saint-Domingue, explica suficiente-
mente su incapacidad para desempear el rol dirigente que s cumpli
en Francia en 1789. Adems esa Revolucin no estableci luego de su
triunfo relaciones capitalistas de produccin, ms all que haya permi-
tido poner fin a un sistema precapitalista de produccin como lo ha
sido la Esclavitud. La Esclavitud fue ms bien uno de los pilares para
el posterior desarrollo del capitalismo, pero no son iguales.

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A mi entender, se trata de una Revolucin lo repito anticolonial y
antiesclavista en el marco de la lucha por la liberacin nacional y so-
cial.
Pero, desafortunadamente, ha sido una Revolucin que dur slo dos
aos. Pues luego de que el fundador de la patria, Jean-Jacques Dessa-
lines, hiciera promulgar una Ley de Reforma Agraria con caractersti-
cas revolucionarias, los sectores acomodados desde la poca colonial
que lo haban acompaado durante la lucha por la Independencia mon-
taron un golpe. Asesinaron a Dessalines el 17 de octubre de 1806, y
luego hicieron lo mismo con sus principales lugartenientes. La contra-
rrevolucin triunf y se consolid con la llegada al poder de un repre-
sentante del sector intermedio de la poca colonial: Jean-Pierre Boyer.
Este nefasto personaje fue quien acept pagar a Carlos X una indem-
nizacin de 150 millones de francos-oro para obtener de Francia el
reconocimiento de la Independencia de Hait. Fue la primera deuda
externa de un pas latinoamericano, cuyo pago durante dcadas contri-
buy al atraso del pas.

VI. Tres figuras importantes

Toussaint Louverture fue un esclavo domstico. Surgi en la lucha

poltica de manera notoria a partir de 1793. Domin el escenario pol-
tico, social y militar de Saint-Domingue demostrando una incompara-
ble habilidad poltica, diplomtica y militar. En efecto, Toussaint supo
dotar -como bien lo seal el historiador haitiano, Claude Mose, en
su ltimo trabajo acerca de las Constituciones Haitianas- al movimien-
to insurreccional de los esclavos de:
1.- Un objetivo: la libertad para todos.
2.- Una estrategia: la conquista de posiciones de poder susceptibles de
garantizar dicha libertad.

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Es a partir de ese planteo estratgico que desarrolla sus mtodos de
lucha y alianzas tcticas. Comprende que su objetivo no puede ser
alcanzado y que su estrategia no puede tener xito sin el aporte de una
organizacin. Es el rol de su ejrcito, que prepar cuidadosamente con
un gran objetivo poltico y militar y que constituy el ncleo duro del
partido de Toussaint. Claude Mose nos seala tambin: " gracias a la
intervencin extranjera (Franceses, Ingleses y espaoles pelendose
sobre el escenario de Saint-Domingue, el ejrcito de Toussaint se
transforma desde 1794 en un precioso instrumento para el movimiento
revolucionario negro y en un dato esencial en la ecuacin poltica en
Saint-Domingue. Peleando bajo la bandera espaola, los insurgentes
negros conducidos por Toussaint Louverture hacen el aprendizaje de
la tctica y la disciplina militar. El ejrcito de Louverture con 4.000
hombres bien entrenados y polticamente esclarecidos va, reforzndo-
se con el desarrollo de los acontecimientos, sacudir el escenario polti-
co de Saint-Domingue. Gracias a ese ejrcito, Toussaint Louverture,
pasando del campo espaol al campo francs, operar un cambio es-
pectacular de la presencia francesa fuertemente comprometida en
1794 por la penetracin anglo-espaola,. El jefe negro surge desde
esta fecha como el personaje clave del gobierno francs en Saint-
Domingue. Su influencia se extiende principalmente en el Norte y en
el Centro del pas".
Hace falta recordar que el Sur dominado por los "Affranchis" bajo la
direccin del "mulato" Rigaud, resisti tambin de manera exitosa la
invasin inglesa. Tal situacin demostr que la suerte de la colonia
francesa estuvo en las manos de las fuerzas indgenas.
Pero en 1800, una guerra civil estall entre Rigaud y Toussaint termi-
nando con la victoria de este ltimo. A partir de ah, Toussaint, trans-
formado en jefe absoluto, promulg en 1801 una Constitucin opuesta
a los intereses concretos de Francia. En los hechos, haba consolidado
su poder desarrollando la Autonoma de Saint- Domingue en lo que se
refiere a la administracin local y hasta en las relaciones con los pa-
ses extranjeros.

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Toussaint Louverture

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Sin embargo, Toussaint estableci un rgimen poltico lleno de con-
tradicciones, ya que garantiz la libertad general de los esclavos pero
reconstituy la gran explotacin con los trabajadores agrcolas esta-
blecidos en las plantaciones y militarmente organizados, con sectores
de antiguos colonos esclavocratas y la capa privilegiada de los recin
liberados como sectores dominantes de la nueva sociedad.
Dichas contradicciones explican en gran medida su posterior cada.
Consciente o no de sus aciertos y, sobre todo, de sus errores, lo cierto
es que antes de partir como prisionero hacia Francia pronunci esas
palabras profticas: "Al ponerme bajo arresto en Saint-Domingue us-
tedes lo nico que hicieron, fue cortar el tronco del rbol de la libertad
de los negros, ste volver a crecer porque tiene races profundas y
numerosas". Tanto en los hechos como en el discurso, Toussaint Lou-
verture ha de ser considerado como el Precursor de la Independencia
de Hait.
Indudablemente, la cada de Toussaint Louverture represent un duro
golpe para la lucha emancipadora de los esclavos. Sin embargo, el
retablecimiento de la Esclavitud en distintas otras colonias francesas
del Cribe abolida recin en 1848 en La Martinica y La Guadalupe
sumada a la crueldad del general Rochambeau - el reemplazante de
Leclerc quien falleci luego de una enfermedad conocida como fiebre
amarilla que afect a varios integrantes del ejrcito francs provoca-
ron el pase de varios oficiales mulatos que vinieron con la flota
francesa al bando de los esclavos alzados en armas. Entre ellos se des-
tac Alexandre Ption. Antiguo adversario de Dessalines, Ption supo
en mayo de 1803 aceptar el liderazgo de Dessalines. Esta unidad se
concret con la creacin de la bandera haitiana el 18 de mayo de 1803.
Fue una obra magistral de Dessalines. As la guerra que haba retoma-
do toda su virulencia desde enero de 1803 se desarroll con mayor
fuerza hasta su finalizacin el 18 de noviembre de ese mismo ao con
la brillante victoria militar de los revolucionarios sobre las tropas
francesas en la batalla de Vertires.

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Jean-Jacques Dessalines tuvo entonces el enorme mrito de conducir
la guerra a la victoria final, proclamar la Independencia fundando as
la primera Repblica Independiente en Amrica Latina. Por primera y
nica vez en la historia, una revolucin de esclavos haba triunfado.
Dessalines en otro gesto lleno de significacin retom para el pas el
nombre indgena de HAITI (tierra montaosa). Esa epopeya inaugur
el camino de la Liberacin en nuestra regin. Y si se tienen en cuenta
la decisin de Dessalines de promulgar una Reforma Agraria con un
inusitado espritu de equidad y de justicia social, y su ayuda desintere-
sada a Miranda, no existe la menor duda de que Jean-Jacques Dessali-
nes represent uno de los mximos exponentes revolucionarios del
siglo XIX. Un revolucionario injustamente olvidado por la historio-
grafa oficial.
Sin miedo a equivo-
carme, afirmo que de
las tres figuras men-
cionadas como im-
portantes, Alexandre
Ption es el ms co-
nocido. Esto se debe,
fundamentalmente, a
su ayuda en dos opor-
tunidades a Simn
Bolvar. En efecto,
Ption entreg a
Bolvar armas, muni-
ciones, vveres y or-
ganiz un grupo de
voluntarios para
acompaar al Liber-
tador en sus campa-
as emancipadoras.
La nica condicin
Alexandre Ption solicitada por el diri-
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gente haitiano fue: que Bolvar proclamara la libertad de los esclavos
en los lugares en los cuales llegara a triunfar. Solicitud que fue cum-
plida cabalmente por Simn Bolvar.
Es menester recalcar, que ese comportamiento internacionalista y re-
volucionario de Ption no fue producto de una actitud personal nada
ms, sino el fiel reflejo de la importancia y de la profundidad de la
Revolucin Haitiana de 1791-1804. Pues todos sus principales diri-
gentes comprendieron que la libertad para poder adquirir toda su ple-
nitud y consolidarse, no era slo una cuestin nacional sino tambin
continental, y haca a la esencia misma de la dignidad humana en
cualquier parte del mundo.

VII. Los olvidos de la Historia

Hasta ahora, la historiografa oficial mantiene varios olvidos significa-

tivos. Lo ms grave es que no se trata de un comportamiento derivado
de errores casuales o accidentales. En este sentido, me parece correcto
y esclarecedor lo que plante el historiador haitiano, Michel-Roph
Trouillot, en su obra: Silencing the Past. Power and the Production
of History, donde analiza el carcter colonial de la historiografa oc-
cidental mediante el estudio de las formas como ha sido narrada la
Revolucin Haitiana.
Segn Trouillot, la Revolucin Haitiana fue silenciada por la histo-
riografa occidental, porque dados sus supuestos, esta revolucin tal
como ocurri, era impensable.
De hecho la afirmacin de que africanos esclavizados y sus descen-
dientes no podan imaginar su libertad y menos an, formular estra-
tegias para conquistar y afianzar dicha libertad no estaba basada
tanto en la evidencia emprica como una ontologa, una organizacin
implcita del mundo y de sus habitantes. Aunque de ninguna forma
monoltica, esta concepcin del mundo era ampliamente compartida

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por los blancos en Europa y las Amricas, y tambin por muchos due-
os de plantaciones no-blancos. Aunque dej espacio para variacio-
nes, ninguna de estas variaciones incluy la posibilidad de un levan-
tamiento revolucionario en las plantaciones de esclavos, y menos an
uno exitoso que condujese a crear un Estado independiente.
As, la Revolucin Haitiana entr en la historia mundial con la parti-
cular caracterstica de ser inconcebible an mientras ocurra.
En un orden global caracterizado por la colonizacin del mundo, la
esclavitud y el racismo, no haba lugar a dudas en cuanto a la superio-
ridad europea, y por lo tanto acontecimientos que la pusiesen en cues-
tin no eran concebibles.
Lo impensable es aquello que no puede ser concebido dentro del ran-
go de alternativas posibles, aquello que pervierte todas las respuestas
porque desafa los trminos a partir de los cuales se formulan las pre-
guntas. En este sentido, la Revolucin Haitiana fue impensable en su
tiempo: ret el propio marco de referencia a partir del cual sus propo-
nentes y opositores examinaban la raza, el colonialismo y la esclavi-
tud.
La visin del mundo gana sobre los hechos: la hegemona blanca es
natural, tomada como dada; cualquier alternativa todava est en el
dominio de lo impensable.
De acuerdo a Trouillot, el silenciamiento de la Revolucin Haitiana
es slo un captulo dentro de la narrativa de la dominacin global so-
bre los pueblos no europeos.

VIII. Palabras finales

En esta breve sntesis acerca de la importancia de la Revolucin Hai-

tiana, tengo un solo deseo: aportar humildemente algunos elementos
para aprehender correctamente dicho proceso histrico, que domin el

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escenario poltico de nuestra regin en los albores del siglo XIX. Un
proceso injustamente olvidado en los debates y distintas actividades
hasta de los sectores progresistas y revolucionarios latinoamericanos,
al hacer arrancar el camino de la liberacin de nuestros pases en 1810
y no en 1804 como lo ensea la verdadera historia. A doscientos aos
de aquella brillante victoria de los ms humildes y explotados de la
tierra haitiana, ojal que estas lneas puedan contribuir a la superacin
del olvido y del abandono que afectan al pueblo haitiano. Un pueblo
que, de distintos modos, sigue luchando por su definitiva y segunda
Independencia, y que necesita de la comprensin y solidaridad efecti-
va de sus hermanos latinoamericanos.

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