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Las Ibañez en La Construccion de Colombia

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OCAA Y LAS IBEZ EN LA CONSTRUCIN DE COLOMBIA

Mario Javier Pacheco Garca


OCAA Y LAS IBEZ EN LA CONSTRUCIN DE COLOMBIA
LA DOBLE EFEMRIDES DE NORTE DE SANTANDER

Durante el ao 2010 casi toda Latinoamrica inicia la celebracin de los 200 aos del
rompimiento de las cadenas del vasallaje y de la discriminacin racial, social, poltica y
econmica del coloniaje.

Es especialmente nortesantandereana la conmemoracin, porque la independencia tiene


en Pamplona una de sus primeras manifestaciones, el 4 de julio de 1810 contra el
corregidor Basts, prendiendo la chispa del grito libertario en los territorios dominados
y porque dirige la victoria el hombre de las Leyes, orgulloso de su nacimiento junto al
templo donde se firm la primera constitucin de Colombia, en Villa del Rosario.

Igualmente, porque Ocaa fue el fin de la campaa del Bajo Magdalena y el inicio de la
Campaa Admirable y, adems, porque con la Batalla de Ccuta del 28 de febrero de
1813, la capital nortesantandereana abri las puertas al Libertador para que pudiera
cumplir su sueo de liberar a Venezuela

Y es doblemente importante este 2010, porque el 14 de julio de 1910 se suscribi la Ley


25 que dio vida jurdica al departamento, de tal manera que junto al Bicentenario de la
Independencia, celebramos el Centenario departamental, y aqu es necesario hacer
retrospectiva histrica para generar un balance de los hechos trascendentes con los
cuales Norte de Santander aport a la construccin no solo de la libertad de Colombia,
sino a la misma esencia de la Repblica.

Aqu padecimos los cadalsos y suplicios que el Pacificador Morillo infringi a nuestros
antepasados; aqu resistimos la terrible guerrilla de los Colorados que despedazaba a los
patriotas al arrastrarlos amarrados de las colas de sus caballos: y aqu la estirpe delicada
y valiente de nuestras mujeres rubric el triunfo con Agueda Gallardo de Villamizar,
con Mercedes brego de Reyes, con Agustina Ferro y con las hermanas Nicolasa y
Bernardina Ibez, que enloquecieron a Bolvar y Santander y son ancestro de varios
presidentes de Colombia.

Norte de Santander, gracias a sus hijos es un departamento prspero, con recursos


naturales inimaginables en la enorme dimensin del Catatumbo; con futuro industrial
promisorio y apalancado desde nuestra administracin, con grandes expectativas en
salud y educacin, con identidad y sentido de pertenencia que afianzamos diariamente
con el ejercicio escolar de la Ctedra Norte de Santander y, con las ventajas
comerciales y tursticas que desde Ccuta se irradian a los restantes 39 municipios,
como primer puerto terrestre del pas.

Es nuestro departamento, uno de los principales artfices de la estructura histrica de la


patria y una de las ms grandes promesas del futuro.

WILLIAM VILLAMIZAR LAGUADO


GOBERNADOR
VISITA DEL PRESIDENTE ALVARO URIBE VLEZ A OCAA

30 de julio de 2010, las Fuerzas Armadas de Colombia escogieron a Ocaa para


despedir al Presidente lvaro Uribe Vlez con una gran Parada Militar precedida del
Desfile de los Genitores, patrimonio inmaterial de Colombia por Ley 1046 de 26 de
julio de 2006.

El Seor Presidente quiere que el pas sacie la curiosidad histrica sobre Bernardina y
Nicolasa Ibez las dos ocaeras de legendaria belleza que llenaron los sueos de amor
de los generales Bolvar y Santander y de sus ms enconados enemigos, colaboradores y
vctimas: Florentino Gonzlez, Antonio Nario, Jos Ignacio de Mrquez, Ambrosio
Plaza, y Miguel Saturnino Uribe Uribe Santos.

No es fcil, porque los descendientes de Nicolasa y Bernardina, en especial Margarita


Holgun y Caro y Pedro Mara Ibez Tovar, con el puritanismo medieval de las
dcadas pacatas de 1930 a 1950 recorrieron el pas para destruir, adulterar y desaparecer
cartas, archivos y cualquier vestigio de su vida amorosa, tratando de borrar toda huella
que pudiera manchar su reputacin.1

La historia de Colombia no fue protagonizada por ngeles ni demonios, ni por buenos y


malos, ni en blanco y negro como nos lo hicieron creer. Nuestros prceres fueron de
carne y hueso, seres humanos que en medio de sus debilidades lograron por sus
acciones legar su nombre a la posteridad.

Bernardina y Nicolasa, abuelas y trastarabuelas de la familia con mayor vocacin de


poder en Colombia: los Caro, los Michelsen Uribe, los Samper Uribe, Los Uribe
Holgun, hijos unos de la unin Caro Ibez, otros de la unin Uribe Ibez y los otros
de la Unin Uribe Maldonado2 ligados a seis presidentes de la Repblica3, al Fundador
del Partido Conservador Jos Eusebio Caro, al cofundador del M-19 Jaime Bateman, al
presidente de Caracol Pablo Laserna, el ex ministro Carlos Holgun Sardi y a muchos
personajes del panorama nacional, siempre tras la primera magistratura del Estado. En
las pasadas elecciones presidenciales contendieron tres de sus trastataranietos: Rafael
Pardo Vargas, por el partido Liberal, Clara Lpez Obregn a la vicepresidencia por el
Polo Democrtico y Juan Manuel Santos, que lleva en su sangre la de la herona
Antonia Santos, la misma del socorrano Miguel Saturnino Uribe Uribe Santos y, por
consiguiente, la de su hija Mara del Carmen Uribe Ibez.

Nicolasa y Bernardina vivieron vidas apasionantes, su belleza y su amor por la


independencia las hizo sufrir persecuciones, riquezas y pobreza, destierros, intrigas y
desamores. Y lo ms trascendente, al decir del Presidente Lpez: pareciera que el
partido liberal y el partido conservador responden a la necesidad de Jos Eusebio Caro
Ibez de vengar una tragedia con ingredientes helnicos y celos venecianos

Los episodios ms importantes e interesantes de la historia de Colombia no se


decidieron sobre doctorales escritorios sino entre las sbanas, a la luz de la pasin, de
los celos, de los sueos y de las ambiciones humanas.
1
Lozano Esquivel lvaro Santander 1792-1840 Editorial Printer Colombiana, Bogot, 1988
2
Lpez Michelsen Alfonso, Prlogo de Las Ibez de Duarte French Jaime. ncora. Bogot
3
Miguel Antonio Caro, Alfonso Lpez Pumarejo, Alfonso Lpez Michelsen, Jorge y Carlos
Holgun Mallarino y Roberto Urdaneta;
Ocaa y las Ibez en la construccin de la repblica

Campaa del bajo Magdalena


En la vspera de navidad de 1812 un joven de apariencia inusitada para el humilde
casero de Barrancas, cerca de Cartagena, se mueve nervioso entre sus setenta hombres,
que armados de machetes, lanzas y uno que otro trabuco no le quitan de encima la
mirada. Viene derrotado de Venezuela pero su vida es alucinante, trae de Madrid, de
Roma, de Paris, el aroma de las cortes, el combate de esgrima, y el baile de la
contradanza y el minu entremezclado con el recuerdo de las ms hermosas francesas,
espaolas, americanas, que sedujo al ritmo de su arrollador magnetismo.

Las apariencias engaan, tras el muchacho instruido, bajo de estatura, de porte


aristocrtico y mundano, viudo a los 20 aos y miembro de los mantuanos, la poderosa
casta venezolana, se esconde el magnfico guerrero que asombrar el mundo.

En sus facciones hay algo de mulato que la leyenda atribuye a una tatarabuela esclava,
ojos negros y penetrantes, frente amplia, cabello ensortijado y patillas largas y pobladas,
tiene 29 aos, el grado de coronel de la repblica y un don de mando inigualable. Su
nombre es Simn Bolvar.

De pronto, con agilidad felina monta un alazn, arenga a sus hombres, que en ese
momento le parecieran siete mil para apoderarse del mundo y contra las rdenes del
francs, Pierre Labatut, se lanza a desalojar de espaoles la ribera del ro; pasa la
navidad como jinete apocalptico y desbarata hispanos por Calamar, Tenerife, Momps,
el Banco, Chiriguan y Tamalameque, hasta que llega al Puerto Real de Ocaa y de all
a Ocaa. Porque l sabe que Ocaa es la ruta a su Venezuela, desde donde lo echaron y
a donde quiere regresar como Libertador.

Su bandera es un trapo negro con una calavera, como los piratas, l mismo tiene la
apariencia de uno de ellos, con sus cabellos aprisionados por una cinta.

Decret la guerra a muerte y desaloj los espaoles de las orillas del ro de la patria. En
su proclama a los ocaeros les dice, Nuestras banderas tremolan en todas las riberas
del Magdalena, sin que un solo espaol las holle con sus plantas ni uno solo de sus
buques navegue por sus aguas.

Nicolasa, la Compaa Libres de Ocaa e inicio de la Campaa Admirable

En la ciudad todo es revolucin, los realistas huyen al enterarse de la cercana de


Bolvar, y los patriotas preparan lo que ser su inolvidable primer recibimiento como
hroe de guerra como Libertador.

Ha vencido en 17 das de sangrienta campaa y llega sin vestigio de cansancio, el 9 de


enero de 1813 hasta la Punta del Llano, donde lo espera una multitud que lo aplaude,
presidida por el Dr. Ibez, y los presbteros Cecilio Castro y Alejo Mara Buceta,
tambin se encuentran cinco preciosas nias, entre ellas Nicolasa Ibez, de 19 aos, la
ms linda de todas, con quien cruza mil miradas, hija del oficial real y jefe de puertos
en Ocaa, doctor Miguel Ibez y Vidal, quien dispone de los dineros espaoles bajo su
responsabilidad, para que Bolvar cumpla el sueo de emancipar su pas.
Es Ocaa el punto final de la Campaa del Bajo Magdalena y el punto de inicio de la
Campaa Admirable.

Nicolasa tiene palabra de matrimonio con el realista Antonio Jos Caro, preso por las
tropas de Bolvar en Momps, pero no puede sustraerse al encanto del guerrero, mayor
que ella diez aos y el idilio es inevitable, muy discreto, por el cercano compromiso
nupcial; Bolvar suspende su frentica carrera de guerra y por 38 das asiste con
Nicolasa a bailes y paseos en la quinta de Barbosa, t en las tardes, caminatas por el
ro, pero no pierde el tiempo, conforma la Compaa Libres de Ocaa con 70
riodorenses y 110 ocaeros, que los suma a los ciento sesenta hombres que reclut
durante su campaa del ro, estos y la tropa con que sali de Barrancas son los 400
momposinos a los que el Libertador debe su gloria, momposinos, porque Ocaa era el
cuarto cantn de la Provincia de Momps.

Con la Compaa Libres de Ocaa emprende el 16 de febrero el viaje que lo llevar a la


victoria en la batalla de Ccuta el 28 del mismo mes, contra las tropas del coronel
Ramn Correa y abre las puertas de su Venezuela; la nica autorizacin que recibe de
la Unin, le llega el 7 de mayo, restringindole a que debe pedir permiso para cada
ciudad o regin sobre la que quiera avanzar, as que dobla la autorizacin, la guarda y
emprende la campaa.

Antes del viaje, en un arranque de romanticismo, nada extrao en l, se traslada a


Momps y libera a Caro para que pueda casarse con Nicolasa, un ao ms tarde nacer
Manuela Caro Ibez, cuya partida de bautismo fue adulterada por Margarita Holgun y
Caro en la dcada de 1940, quien bastante molesta, porque algunos atribuyeron la
paternidad de Manuela a Bolvar, se desplaza desde Bogot hasta el archivo parroquial
de Ocaa y trata de modificar la fecha de su nacimiento.

Santander, el bal comprometedor y el terror de Morillo

A mediados de julio de 1815 aparece en Ocaa otro personaje con galones de coronel y
de tan solo 23 aos, 9 menos que Bolvar, y contemporneo de Nicolasa, de 21,
llega como Jefe de los ejrcitos del norte, es Francisco de Paula Santander y Omaa, al
mando de cien lanceros y doscientos fusileros, a reclutar quinientos hombres para tratar
de liberar a Momps, all conoce a Nicolasa y la atraccin que se sienten marcar la
vida de la ocaera y del guerrero.

El escenario poltico nacional se mova a ritmo de sainete, porque desde el 20 de julio


de 1810 nuestros jvenes dirigentes se ocupan ms en disputarse la burocracia
abandonada por los espaoles y a filosofar sobre federalismo y centralismo, que a
consolidarse militarmente. Hay mucho de pedantera y altisonancia en este perodo que
la historia denomina Patria Boba, y que dura hasta el 15 de febrero de 1815 cuando
sale de Cdiz el terror, el demonio, el Conde de Cartagena y Marques de la Puerta,
Mariscal de Campo, Teniente general de los ejrcitos espaoles. El pacificador don
Pablo Morillo y Morillo, quien bajar el teln del sainete a punta de balazos y fusilar y
decapitar a casi toda la generacin de nuestros imberbes patriotas. El Pacificador llega
a Margarita con 61 barcos, uno de ellos armado de 72 caones, pasa a Caracas y con
15.000 hombres emprende la pacificacin, para arrasar a todo aquel que se le impute un
mal pensamiento para su Rey.
Enva con mil hombres al Brigadier Ruiz de Porras para que tome Momps y prepare el
ataque a Ocaa, considerada vital para la guerra pues se encuentra a jornada y media del
ro Magdalena y a poco tiempo del ro Cauca, por lo que se puede acceder de manera
rpida al sur y al norte de la patria, o a Venezuela por los valles de Ccuta, o a Santaf
por el camino de Vlez o a Pamplona por el Pramo de Cachir, caminos todos
transitables por las tropas.

Pamplona en tanto, es tomada por el coronel realista Sebastin de la Calzada, venciendo


a Rafael Urdaneta y entonces queda Santander acorralado; por el Magdalena avanzan
las fuerzas de la pacificacin y por la va de Pamplona Calzada domina los caminos.
Todos lo tienen por perdido y el 22 de diciembre de 1815, con 300 hombres se interna
por una trocha desconocida, apareciendo sorpresivamente en Girn para reforzar las
tropas de Custodio Garca Rovira. El Gobierno de la Unin declara que la retirada de
Santander ha sido la ms estratgica de la guerra y le confiere el grado de Sargento
Mayor.4

Nicolasa, sola y aterrada ante la inminente llegada de los espaoles, recuerda que
conserva en un bal, un uniforme de Bolvar y 15 cartas suyas, que de ser descubierto le
acarreara la muerte, as que al da siguiente de la salida de Santander, el 23 de
diciembre, a las doce del da, llama al sacristn Francisco Chacn para decirle,
conteniendo la ansiedad:

- Ahijado, hgame el favor de guardarme en el convento, de donde es usted


sacristn, este bal, que contiene papeles y libros de mi padre.

Un esclavo del alcalde Pedro Guerrero, de nombre Juan Salvador, fue el encargado de
echarse al hombro el bal y lo deposit en una celda, pero estando sin cerradura,
Chacn curiose y al encontrar que eran cosas de Bolvar la increp. Nicolasa, llorosa le
pidi que quemara todo, pero Chacn le contest que no se atreva, por las graves
implicaciones que podra traerle.

Al da siguiente, 24 de diciembre entra a Ocaa el comandante realista Valentn


Capmany y a las seis de la tarde ya saba del bal, y lo comunica a Morillo, quien llega
el 25 de marzo, improvisa un cadalso sobre un montculo de piedras en la plazuela de
San Francisco y comienza a asesinar patriotas, el 9 de abril de 1816 van a morir Miguel
Carabao, Salvador Chacn e Hiplito Garca, quien deja escuchar su ltima arenga:

- Ocaeros, consolaos, porque estas piedras que hoy baar nuestra sangre, sern un
da smbolo de la libertad.5

4
Este grado era el segundo al mando del ejrcito, sobre otros oficiales.
5
En 1851, cuando ramos Provincia, el gobernador Agustn Nez recogi las piedras del viejo
cadalso y las puso como cimiento a la columna de la libertad de los Esclavos en el centro de la
plaza.
El proceso contra la familia Ibez se hace rpido y peligroso, Nicolasa se salva porque
Caro, certifica que fueron obligados, l es reconocido por realista y recuerda que ha sido
preso por su lealtad al rey en varias ocasiones, la ltima en diciembre de 1813, cuando
Nicolasa estaba en avanzado embarazo de Manuela, pero sus testimonios hunden al
resto de la familia, viajan entonces de manera subrepticia a Bogot el doctor Miguel
Ibez y su esposa doa Manuela Jacoba Arias, acompaados de sus hijas, pasan
penalidades y miseria, todo les fue confiscado.

La persecucin alcanza a la familia en Bogot y en la Relacin de personas que han


sido desterradas, firmada por Morillo, en agosto de 1816 aparece Manuela Arias y
familia, desterrada a La Mesa y Manuela Ibez (soltera) desterrada a Ocaa.

En medio de tantos avatares, la pareja Caro Ibez lleva una vida relativamente
tranquila, porque Antonio Jos Caro ha sido vuelto a emplear por los espaoles y, el 13
de marzo de 1817 nace el segundo hijo de Nicolasa, Jos Eusebio. Santander en tanto
combate y organiza con Bolvar la victoria definitiva.

A inicios de 1818 el doctor Miguel Ibez es sorprendido, puesto preso y condenado a


muerte, pero un da antes de ser pasado por las armas, logra escapar, Morillo lo resea
as: Llegu a esta capital, hice prender a Ibez, se le proces, fue sentenciado a
muerte, y el da antes de ir al suplicio se fug. Se mandaron requisitorias y previne al
gobernador de Ocaa

Doa Manuela y sus hijos no lo vuelven a ver y piensan que muri huyendo en algn
lugar de la selva, o ilusionan que se encuentre escondido, sin embargo la tecnologa que
hoy permite acceder a los archivos de Espaa, nos muestran el ingreso a las mazmorras
de la crcel de Cdiz, del anciano Miguel Ibez. Su familia nunca supo de su
desgraciada suerte.

La Patria triunfa y Bernardina enloquece la capital

El hado de la guerra vuelve a favorecer a la familia Ibez el 7 de agosto de 1819 con el


triunfo de los patriotas en el puente de Boyac. El virrey y los espaoles abandonan
Santaf y se prepara un apotesico recibimiento a Bolvar, bajo los acordes de una
preciosa danza que se compone para homenajear a los hroes de Boyac: la
Vencedora y as como Nicolasa Ibez es la encargada de colocarle la corona de laurel
al inicio de la guerra en Ocaa en 1813, la deslumbrante Bernardina Ibez, de 16 aos
es la encargada de coronarlo en la ltima batalla de la guerra, en Bogot. Bolvar
reconoce a la familia y recordando que en una escena parecida su corazn se desboc
por Nicolasa quien lo coronaba, en esta ocasin le sucede lo mismo, con ms fuerza an
por la bella Bernardina que lo corona. Das ms tarde, despus de apreciar el estado
lamentable de las finanzas de la familia Ibez, obsequia de sus salarios una casa a doa
Manuela en el barrio de la catedral, calle de Santa Clara, carrera 8 entre calles 8 y 10,
para que pueda vivir con sus hijas.
La tranquilidad de la victoria solo se ve rota, meses ms tarde por el surgimiento de la
peligrosa guerrilla realista de Los Colorados precisamente en Ocaa, conformada por
espaoles y sus criados, cuando el grueso del ejrcito peninsular se embarca derrotado
hacia Europa. Son muchas sus vctimas y mucho el terror que siembran hasta 1822.

Desde su recibimiento, Bolvar solo tendr pensamientos para su melindrosa


Bernardina que no le corresponde por estar enamorada del coronel Ambrosio Plaza de
28 aos. Ella es ahora la reina, el Libertador le escribe desde Cali el 15 de enero de
1822: "Para la melindrosa y ms que melindrosa bella Bernardina. Mi adorada B lo
que puede el amor. No pienso ms que en ti y cuanto tiene relacin con tus atractivos.
Lo que veo no es ms que una imagen de lo que imagino. T eres sola en el mundo para
m. T, ngel celeste, sola animas mis sentimientos y deseos ms vivos. Por ti espero
tener an dicha y placer, porque en ti est lo que yo anhelo.

El capitn ingls Charles Stuart Cochrane, quien recorri el pas entre 1823 y 1824, dej
en su diario la siguiente anotacin sobre Bernardina Ibez: "Tena unos diecisiete aos
cuando la vi, alegre y agradable, con buena figura y ms alta que la estatura mediana;
unos ojos asombrosamente finos, cuya influencia ella conoca muy bien; cabellos
negros como el bano y muy abundantes, que ella mantena arreglados con elegancia y
esmero; facciones finas regulares, con una encantadora mezcla de rojo y blanco; y unos
dientes aperlados que brillaban entre sus labios bermelln.

Los miembros de la sociedad bogotana eran felices invitndola a sus fiestas, que en
ocasiones parecan de carnaval, Richard Bache escribe en sus Notes on Colombia,
taken in the years 1822 18236 Escasamente habamos llegado cuando las bromas de
los seores comenzaron a producirse. Venan todos provistos de pintura roja y negra, y
de redomas de lquidos de diferentes colores, con los que fumigaban y manchaban los
rostros y los trajes de las damas. Encontramos a los paseantes en la quinta, ya
entregados a la danza. Al entrar al saln, los huspedes reunidos con bulliciosa alegra
expresaron su bienvenida rociando las caras de los recin llegados, hasta el punto de no
poderse ver partcula alguna de la piel. Un coronel tuvo en un momento, como una
pugna entre su dignidad y su urbanidad, pero finalmente acept la broma con bonhoma,
no ocurri lo mismo con el Secretario de Guerra, que lleg poco despus. El director de
la justicia, al tratar de embadurnar su cara, fue accidentalmente araado por el
secretario, al defenderse. Como esto no sucedi delante de las damas, sino en el patio,
temimos penosas consecuencias de su ardor, pero todo se super y el ministro mantuvo
su rostro y su dignidad inmaculada.

La siguiente persona en llegar fue la hermosa Bernardina, quien es a la vez una jolie
femme et una belle femme. Su figura es finamente redondeada y hermosamente
proporcionada, su continente lnguido y vivaz alternadamente. Aunque no la haba visto
antes se dirigi a mi del modo ms amable, pidindome destapar una botella de colonia,
llena de cierto lquido rojo; lo que, no bien tuve la simplicidad de llevar a cabo, y para
mi sorpresa, ocasion que brotara tal lquido, bandome de pies a cabeza. Entr en el
6
Duarte French, Jaime, Las Ibez. Litografa Arco, Bogot 1982
saln, en traje de baile. En un momento las rosas y lirios de su faz, y su nuca (en el ms
amplio sentido del trmino), se tornaron rojos, azules y verdes, impresos no muy
delicadamente por veinte fornidas manos. Lament grandemente esta desfiguracin; por
no haber tenido manos en el asunto, no fui en manera alguno indemnizado por la
prdida, que con la metamorfosis sufrieron mis ojos. La bella no se mantuvo
ciertamente ociosa durante la ceremonia de su introduccin: dispuso sin medida del
lquido de su botella de colonia, y como fue lo suficientemente bribona como para usar
alguna mezcla picante, los caballeros se vieron obligados a escapar, para salvar sus ojos.
Finalmente, tras de no pocas splicas, por amor a Dios, se prepar para el baile,
encerrando sus pies chinos en un leve par de zapatillas. Al anochecer se permiti a los
asistentes lavarse manos y caras para sentarse a comer. El vicepresidente vino a los
postres, y se uni al baile despus de la cena.

En carta del 1 de agosto de 1820, Bolvar le dice a Santander: Dgale muchas cosas a
Bernardina y que estoy cansado de escribirle sin respuesta. Dgale usted que yo tambin
soy soltero, y que gusto de ella an ms que Plaza, pues que nunca le he sido infiel

Los amigos de Bolvar, creyendo que ella no le corresponda por estar enamorada del
coronel Plaza, hacen lo del rey David con Jesabel, la mujer de Uras a quien manda al
frente de batalla para que lo maten y l pueda casarse con la viuda, de cuya unin nace
el rey Salomn. As que los enemigos de Bolvar especularon sobre que Plaza fue
enviado al frente de combate con este propsito y efectivamente es muerto el 24 de
junio de 1821 en la batalla de Carabobo. Ya el Congreso haba aprobado su ascenso a
General de brigada que no alcanz a recibir. Bernardina al contrario de Jesabel, toma
repulsin profunda por Bolvar.

Nicolasa y los celos de Santander

La victoria del Puente de Boyac produce reacciones encontradas en el plcido hogar de


los Caro Ibez pues mientras Antonio Jos tiene que huir para evitar ser capturado por
los patriotas, el reencuentro de Santander y Nicolasa hace revivir la pasin y la relacin
se convierte en tema de comidilla picante. Se descubre un rasgo desconocido en la
personalidad de Santander, es extremadamente celoso de Nicolasa y a pesar de su
moderacin habitual, se descompone, inclusive en pblico cuando se deja llevar por los
celos; esta conducta produjo graves consecuencias no solo en la vida personal de los dos
amantes, sino en la historia de Colombia.

Nicolasa posea una personalidad encantadora y estaba al tanto del acontecer poltico y
social del momento, lo que unido a su natural coquetera, la converta en el centro de
todas las reuniones.7

7
"Las Ibez" Duarte French, Jaime El Ancora Editores 1988 p65
Antonio Nario, hijo del Precursor y concuado de Nicolasa,8 estaba enamorado de la
ocaera y no dejaba de acosarla con sus requiebros y piropos.

En 1822, durante un baile de mscaras en Palacio, Nario crey oportuno acercarse a


Nicolasa y galantearla en medio de la danza, pero el Presidente los segua, disimulando
su rabia y alteracin, hasta que de improviso, lvido de la furia, se quita la mscara y
arrebata el sable al coronel Lorenzo Ley y en medio de grandes voces e insultos lo puso
sobre el cuello del sorprendido Nario a quien arrincona contra una pared, la
intervencin de varias personalidades evit una tragedia, pero el suceso sirvi de
comidilla al pueblo durante mucho tiempo. En ese baile, dijo Ignacio Muoz, haba
unas tres mil personas que comentaron el episodio. (Ignacio Muoz afirm al Consejo
de Estado que la pareja no estaba en el saln de baile, sino que se diriga a una
habitacin cuando fueron interceptados por el vicepresidente. Este aparente amigo de
Santander era flojo de lengua y con sus comentarios sobre la honra de Nicolasa
ocasion un incidente que lleg a ventilarse en la Cmara de Representantes, con
desmedro de Santander.

Sucedi que el tal Muoz acudi al vicepresidente para que se le nombrara en el


Ministerio de Justicia, y Santander, molesto con el chisme no quiso contestarle, ni
mucho menos ayudarle. Poco tiempo despus Muoz, hombre de genio encendido se
involucr en el delito de duelo al retar a F. Negrn, de la Guarnicin del Socorro, y
entonces, inocente del enojo de Santander, le escribe nuevamente para que interceda
ante el gobernador de la provincia.

El 22 de octubre de 1822 le responde Santander.

"Mi estimado Muoz:

"Tena resuelto no escribirte porque he sabido que has hablado algunas cosillas de mi y
de las seoritas Ibez, cosa muy indigna de quien se diga amigo, y que yo a decir
verdad, no merezco. A pesar de todo, no haba hecho el propsito de dejar de servirte
en lo que pudiera.

Te he dicho mil veces que tu genio te conducira siempre a un precipicio, y siento


mucho ver realizado mi pronstico. No es decente que el Poder Ejecutivo se mezcle en
negocios particulares, porque si tiene justicia el Gobernador de esa, no debe ser
privado por mi de ella, y si no la tiene, tampoco te debo quitar la tuya."

De esa manera le participa su negativa, y Muoz no se queda con la medicina, toma


debida venganza de Santander, cuando presentando descargos ante la Cmara de
Representantes, relata en documento suscrito el 9 de diciembre de 1825: (3)

"Por ella ver la Honorable Cmara que mis calumniadores supieron tocar muy bien el
corazn de Su Excelencia, hacindole creer que yo haba hablado de las seoritas
8
"Las Ibez" Duarte French Jaime El Ancora Editores 1988 p65
Ibez y de l mismo, cosa a la verdad inciertsima, por lo menos en el Socorro, en
donde yo no tena otras relaciones que las de amistad honrada con las seoritas Platas,
y estaba en mi inters afirmar que era amigo del General Santander, a fin de que se me
tuviese mayor consideracin" Y ms adelante agrega: "Pero supngase que hubiese
sido cierto que yo hubiese hablado del concubinato de la Ibez con el General
Santander, era este un motivo para que me proscribiera como me ha proscrito su
excelencia? Soy yo el nico que ha hablado de esto, cuando hay quien lo murmure en
Inglaterra y Francia? No haba sobre tres mil personas en el coliseo el ao de 20,
cuando Su Excelencia, quitndose la mscara, trat de arrebatar el sable al Teniente
Coronel Lorenzo Ley para dar con l al seor Antonio Nario Ortega, que se retiraba a
un cuarto con dicha (seora)? Se ha olvidado el General Santander que haba muchas
personas en el palacio la noche del baile del casamiento del seor Ministro Azuero,
cuando insult al bravo General Valdez, ofrecindole despus toletazos, solo porque
dijo a dicha seora Ibez que si le haban impedido bailar? No han visto todos los
pueblos del Magdalena que el seor Antonio Jos Caro, marido de dicha seora, a
pesar de traer salvoconducto del Excelentsimo Seor Libertador Presidente, fue
devuelto desde Nare hasta Momps con un par de grillos?"

Este ltimo acto, que desvirta en nuestros das la ilustre familiar del Vicepresidente,
doa Cecilia Fernndez de Pallini, es corroborado en la poca por Rafael Caro, hermano
de Antonio Jos9

En 1825 Santander enva a Antonio Jos Caro a los Estados Unidos con la misin de
imprimir las leyes que hasta entonces haban dictado los congresos de la repblica,
siendo este un trabajo engorroso y largo, que por otro lado se poda imprimir en
Bogot, con esto aleja al cornudo esposo de Nicolasa durante un ao, y al regreso de su
misin, para remate de males, Antonio Jos queda ciego, lo que redunda en el trastorno
econmico de Nicolasa y sus hijos, que vivan de lo que devengaba Caro.

Es entonces cuando el gobierno de Santander concesiona con Nicolasa la


comercializacin de la sal de Zipaquir, Nemocn y Chmeza.

Bolvar viaja al sur, a Quito, a libertar a Per y a Bolivia y a olvidar a Bernardina entre
los brazos de su bella Manuelita Saenz de Thorne, quedando al frente del ejecutivo el
General Santander, y es en 1824 cuando la amistad de los creadores de la patria se
resquebraja. Santander dice que la Constitucin le impide financiar la guerra en pases
ajenos, para Bolvar ninguna constitucin es ms importante que asegurar la
independencia y terminar de vencer a los enemigos de Colombia. La ruptura es
inminente, se habla de los atentados a Bolvar y del conocimiento que tena de ellos el
general Santander, El Libertador regresa a Bogot, llamado a conjurar la rebelin de
Pez en Venezuela, pero llega con un ejrcito y en la capital se asustan, porque viene
precedido de las actas de aclamacin de Guayaquil y Quito que le exigan aceptar la

9
Las Ibez" Duarte French, Jaime El Ancora Editores 1988
dictadura y de la constitucin Boliviana que el mismo haba presentado en Lima el 25
de mayo de 1826

Lo reciben en Fontibn con tablillas en las puertas de las casas donde se lee Viva la
Constitucin inviolable por diez aos las cuales son despedazadas a culatazos por los
soldados de Bolvar y entra a la capital casi solo, despus de responder acremente a
quienes lo reciban: Cuando yo esperaba que se me felicitase por mi llegada a la capital
y se me encomiase de las glorias del ejrcito, se me habla de obediencia a la
constitucin y de la violacin de leyes inicuascon l llega la amable loca que no
demora en invitar a un baile en su casa, donde fusila un mueco disfrazado de
Santander, mientras se rumora que en la casa de las Ibez se renen los conspiradores,
entre el pueblo, gustoso de coplas picarescas y amenazantes circula una que dice:

Solo habr paz en Colombia


El da que mueran
Nicolasa y Bernardina Ibez
Brbara Leyva y Mariquita Roche

La constitucin se encuentra desprestigiada y es cada vez ms fuerte el clamor popular


para que se convoque una convencin nacional en donde con el concurso de las
diferentes tendencias polticas y de regiones se elabore la nueva carta fundamental. La
polarizacin entre bolivaristas y santanderistas es notoria y el vicepresidente, que la
defenda por inviolable hasta 1831 de acuerdo a su propio texto, finalmente es
convencido de la conveniencia de convocarla, por sus amigos, ya que los diputados
seran designados por eleccin, y que para l sera ms fcil que para Bolvar elegir a
sus amigos, y entonces acept, no sin antes eliminar el artculo que ordenaba: No
podrn ser diputados a la Gran Convencin el Presidente y el vicepresidente de la
Repblica, y tampoco podrn estar en la ciudad de Ocaa, por otro en que se
restringiera solo a quien ejerciera el poder ejecutivo, con lo cual el nico que no podra
asistir sera Bolvar, y as sancion la Ley de 29 de agosto de 1827.

Bolvar escribe Yo no examinar con qu fines se ha pensado engaar al Congreso


hasta inducirle a sancionar un decreto que sella nuestra ruinasi se niegan al ejecutivo
las facultades indispensables para salvar la repblica, yo no me encargar de la
presidencia. No est bien a quien ha envejecido antes de tiempo porque Colombia
tuviese existencia y leyes, el presidir sus funerales, ni entregar sus miembros
ensangrentados a los enemigos que ha vencido o ha libertado. 10 Igualmente logr que
para postularse a diputado no tendra que renunciar a la vicepresidencia de la repblica.
Firm la convocatoria y comenz el proselitismo, era Santander mucho ms avezado en
las lides polticas que Bolvar y logr 57 escaos para sus seguidores, incluyendo el
suyo propio, en tanto que el libertador tan solo consigui 17 diputados.

10
Guerra Jos Joaqun, La Convencin de Ocaa.
Bolvar emite un decreto el 26 de febrero de 1828 organizando la administracin
pblica que ejercer el mando durante su prxima ausencia y encarga del conocimiento
de todos los negocios a los secretarios de Estado y no a Santander, como reza la
constitucin, con lo que deja por fuera a Santander, sin advertir en parte alguna que deja
de ser vicepresidente, no lo menciona ni como miembro del Consejo de Estado ni como
encargado del poder ejecutivo, as que queda libre para aceptar su curul en Ocaa.

Ocaa fue escogida como sede de la Gran Convencin por una serie de factores, adems
de los afectivos que la unan tanto a Bolvar como a Santander, y que se debatieron tres
aos atrs en el Congreso durante el ao legislativo de 1824, cuando el diputado,
General Judas Tadeo Piango present un proyecto de Ley que ordenaba que la Capital
de la Repblica fuera Ocaa y no Bogot y que finalmente termin derrotado. Ya en
1821, durante el Congreso de Ccuta se haba asomado su nombre para capital de
Colombia, junto a Pamplona, Villa del Rosario y Bogot.

Bogot fue descartada como sede de la gran convencin casi desde el comienzo, en
primer lugar por la presencia de Bolvar y la influencia de su enorme prestigio en las
decisiones de los diputados y en segundo lugar se habl de una ola de fanatismo
religioso, que estaba afectando la capital y que pudiera interferir con la marcha de las
sesiones.

En el congreso de 1827 fueron varios los nombres propuestos como sede de la


convencin, entre ellos Caracas, rechazada por los problemas con Pez y porque entre
las manifestaciones de protesta contra la constitucin, fueron las ms altisonantes.
Cartagena, rechazada por las permanentes revueltas, adems de estar muy distante de
Bogot y en especial de los pueblos del sur. Y Funza, rechazada por encontrarse muy
cercana a la capital. Ocaa fue el nombre preferido.

Cont la facilidad de llegar hasta Ocaa para los pueblos del sur a pesar de la ostensible
distancia, por la navegabilidad de los ros Magdalena y Cauca, la cercana de los
pueblos del norte y los de Venezuela al oriente.

En el tempo de San Francisco se encontraron los diputados, no como salvadores de la


patria sino como contendores y muy pronto los gritos y las injurias entre santanderistas
y bolivaristas solo hacen prever el fracaso, se presentan dos proyectos constitucionales,
el centralista de Castillo y Rada y el federalista de Vicente Azuero. Los bolivaristas
entienden que no hay nada que hacer, que son vencidos numricamente y que su
presencia lo nico que hace es convalidar con el qurum los resultados, as que
resuelven huir en nmero de 20 hasta la Cruz y dejan a la Convencin sin el qurum
reglamentario para deliberar. El desespero de Santander y sus partidarios es grande, ni
haciendo levantar a los enfermos logran completar el qurum con lo que deben
reconocer el fracaso.

En medio de la rabia, el Secretario Luis Vargas Tejada deja escrito en un pupitre:


Yace aqu la convencin del pueblo colombiano
Que muere con honor despus de haber actuado en vano
Su corazn vi herir con pual asesino
Por el mismo enemigo que a su recinto vino
Pero renacer, no pierdo la esperanza
Ms grande y ms ilustre el da de la venganza.

Venganza que no demora en planearse y que se ejecuta la noche del 25 de septiembre de


1828. Hasta su alcoba penetraron, entre otros, su rival de amores con Bernardina
Ibez, Florentino Gonzlez y los convencionistas Mariano Escobar y el secretario de la
Convencin Luis Vargas Tejada. Por ser considerados peligrosos fueron desterrados los
diputados Francisco Soto, Vicente Azuero, Diego Fernando Gmez, Francisco Esteban
Gmez, Juan Nepomuceno Chvez, Gmez Durn, Lpez Aldana, Martn Tobar,
Iribarren, Livano y Gmez Plata, todos ellos recin llegados de Ocaa y resueltos
santanderistas.

A Santander se le condena a muerte y es Nicolasa Ibez quien lo salva. Se dirige a


Bolvar escribindole: La idolatra sin trmino que he tenido por V.M. me dan derecho
a tomarme esta libertad. Recuerde V.M. mi cario, y recuerde ms que todo que no
puede haber en el universo quien lo haya adorado ms. Santander es quien me obliga a
molestarlo, l es incapaz de cometer una felona, Santander es sensible y honrado, yo no
quiero ms general, que mande a poner libre a este hombre desgraciado, que no sufra la
pena de un criminal y que inmediatamente salga para los Estados Unidos, fuera del pas.
Yo soy la que descanso de tantos pesares Nicolasa Ibez 11

Bolvar conmuta a pesar de Urdaneta, la pena de muerte por la de destierro y Santander,


luego de un penoso encierro en las mazmorras de Bocachica viaja a los Estados Unidos.
Nicolasa era de Santander, y una vez sabe que su hombre est fuera de peligro y lejos de
las influencias del Libertador, se convierte en una leona, se declara enemiga de Bolvar
y Urdaneta y su casa se convierte en el foro de apoyo a la rebelin de Crdoba en
Antioquia.

Los partidarios del libertador son ms bolivaristas que el mismo Bolvar, as que
Urdaneta inicia su persecucin y ordena su destierro, ella logra con en Consejo de
Ministros que se aplace su salida, pero Urdaneta entra en clera y renuncia en oficio de
2 de octubre de 1829. Tanta era la importancia que se daba a las Ibez. Nicolasa
produjo la renuncia del dictador, lo que no pudieron los ejrcitos, los alegatos ni las
revoluciones.

La carta en mencin dice as:

Honda, 2 de octubre de 1829 (a las 12 de la noche)


11
Pacheco Garca Mario Javier El Fin del Imperio Latinoamericano, la Convencin de Ocaa
Corcas Editores, Bogot, 2008
S.S.E. El Consejo de Ministros

Acabo de saber por comunicacin del seor Prefecto del Departamento que se ha
suspendido por orden de V.E., o bien del seor Presidente, la de expulsin que exped
contra la seora Nicolasa Ibez.

No es mi nimo ahora preguntar siquiera cual sea la razn porque se introduce el


Consejo a contrariar una disposicin que est en la esfera de mis facultades
naturales...Mi objeto es solo hacer presente al Consejo, que de este modo es imposible
(para mi al menos) responder de la seguridad pblica.

El Consejo cree que haciendo una gracia con agravio de mi autoridad, salva la
repblica, y yo creo que el Consejo, por este medio ayuda indirectamente a los
facciosos y sanciona la disolucin del gobierno.

Me confieso intil para continuar ms en el desempeo de mis deberes pblicos.


Renuncio, pues, formalmente a un destino que a todo momento me compromete, y que
solo sirve en mis manos para proporcionar al Consejo ocasiones de pasar por
generoso".

Rafael Urdaneta.

La perentoriedad de Urdaneta hace que el Consejo de Ministros, d orden para que el


destierro de Nicolasa a las selvas de Usme se verifique de manera inmediata. La
desgracia y la pobreza cubren otra vez el hogar de las Ibez.

En tanto Antonio Jos Caro llora su desgracia, ciego, empobrecido, humillado con el
escarnio pblico y con la helada indiferencia de su esposa a quien ama
desesperadamente. Para colmo de sus desgracias es obligado a recibir de su rival no solo
empleos sino prestamos en efectivo, como lo deja consignado Santander en su
testamento.

Jos Eusebio recuerda en Ocaa los lamentos de su padre:

Aqu nac, bajo este hermoso cielo


Por vez primera vi la luz del sol
Aqu nacieron mis abuelos todos,
Adis Ocaa, adis Ocaa, adis.

Aqu mi padre, de boca de mi madre


El dulce si por vez primera oy
Aqu de amor el a sus pies lloraba
Adis Ocaa, adis Ocaa, adis.

Pero es pattico el poema de Antonio Jos, ya ciego y enfermo, a Nicolasa:

Hallndome del mundo retirado,


En mi honrado, aunque pobre, humilde nido,
Donde al fin entregar logr al olvido
Cuanto por ti he sufrido y he llorado.

Excusa, ingrata, el brbaro cuidado


De recordarme que tu amante he sido;
Ay! Eso es refregar en un herido
La antigua llaga de que est curado.

Hubo un tiempo en que pude agradecerte


El ms leve recuerdo de tu parte:
Hoy tus memorias para mi son muerte.

Yo me atrevo seora a suplicarte,


Si algn favor alcanzo a merecerte,
Que de mi amor no vuelvas a acordarte.

El 1 de diciembre, a los 47 aos deja su apesarada vida Antonio Jos Caro, se dice que
el dolor moral afecta al cuerpo y lo enferma. Sus hijos que lo amaron entraablemente
odiaron a Santander y su odio lo hered su nieto, el presidente Miguel Antonio Caro.

Santander en el exilio lleva un diario con constantes menciones a la falta que le hace
Nicolasa, como en las siguientes citas:

1829
Noviembre 15. Hoy hace un ao que sal de Bogot para Cartagena, hoy me desped de
mis amigos, de mi familia, de mi idolatrada Nica y de mi querido Bogot, quien sabe
hasta cuando.
1830:
Febrero 25. He recibido carta de mi seora Nicolasita.
Marzo 1. He escrito a mi seora N.
Mayo 4. He recibido dos cartas de mi seora Nicolasa, de Guaduas, de Octubre.
Mayo 30. Escribo a mi seora N.
Junio 16. Escribo a mi seora Nicolasa
Agosto 9. He recibido carta de mi seora Nica del 21
Nov. 23. Escrib a mi seora Nica
Dic. 29. He escrito a mi seora Nicolasa Ibez
1831
Abril 11. He escrito a mi seora Nicolasa Ibez
Abril 13. He escrito a mi seora N.
Abril 14. He recibido carta de mi seora Nicolasa, del 7 de enero, con los apuntes
de los trastos que se han vendido
Abril 18. He recibido carta de mi seora Nica, del 7 de febrero de Bogot.
Abril 30. He escrito a Josefita, a doa Manuela Ibez y a mi seora Nica,
acusando recibo de sus cartas hasta enero ltimo.
Mayo 13. He escrito a mi seora Nicolasa
Agosto 3. He escrito a mi seora Nicolasa
Septiembre 4. He escrito a mi seora Nicolasa

El 17 de diciembre de 1830 muere Bolvar y la dictadura de Urdaneta cae el 28 de abril


de 1831, cuando ste, en Apulo firma con el Vicepresidente Domingo Caicedo, el pacto
para dejar la dictadura. El 10 de junio de 1831 se emite un decreto que ordena en su
artculo 1
El General de Divisin Francisco de Paula Santander queda restablecido a sus
grados y honores militares y a todos los derechos de la ciudadana en los propios
trminos que los gozaba en el ao de 1828, antes de su injusta proscripcin, que
solo ha sido y ser para l nuevo ttulo de gloria.

Firman el decreto el encargado del poder ejecutivo Domingo Caicedo y el Ministro de


Guerra Jos Mara Obando.

El 20 de octubre de 1831 se rene con sesenta diputados la convencin constituyente


que el 29 de febrero de 1832 expide la nueva constitucin de Colombia y se elige como
presidente a Santander por 49 votos.

La felicidad de Nicolasa, ya de 37 aos, no tuvo lmites, Regresa Santander con la


dignidad de Presidente y vuelve Nicolasa enamorada a Bogot,

NICOLASA Y EL NACIMIENTO DE LOS PARTIDOS POLITICOS

Las escenas de celos incontrolables de Santander tendrn un nuevo y gravsimo


episodio cuyas consecuencias afectan todava a los colombianos.

El Presidente Santander y el Vicepresidente Jos Ignacio de Mrquez, eran viejos


amigos que compartan el poder y saban que el futuro se deparaba llano en 1835.
Estaban en la cumbre y no exista ms partido poltico que el santanderista luego de la
arremetida que hizo desaparecer a los bolivaristas.

A pesar de los reconocidos celos del Presidente, Jos Ignacio de Mrquez se atreva, -
subrepticiamente desde luego- a galantear a Nicolasa.

El 30 de abril de 1835 ella cumpla 41 aos, no era la muchacha de 19 aos que coron
a Bolvar en Ocaa, pero segua deslumbrante y atractiva. Ese da el Vicepresidente
consider que era la oportunidad para visitarla en su casa, pretextando su onomstico, y
al mismo tiempo reiterarle sus requiebros amorosos, conociendo el carcter celoso de
Santander, esper verlo ocupado en su despacho y sali para la casa de la ocaera a dos
cuadras, pero los chismosos estn en todas partes y no falt quien le dijera a Santander:
- El Vicepresidente se fue para la casa de Nicolasa y, Nicolasa est sola.
Como movido por un resorte Santander abandona lo que est haciendo y sale disparado,
las piernas le tiemblan, los celos lo enceguecen, atraviesa la distancia que lo separa de la
casa y, resollando sube la escalera, en la sala, en el sofasito, est Jos Ignacio de
Mrquez entregndole el regalo a Nicolasa y a Santander le dio la vuelta el mundo, asi
de las solapas a su vicepresidente, que era bastante ms dbil y bajo de estatura y en el
forcejeo trata de quitarle la vida arrojndolo por la ventana pero Nicolasa se lo impide,
que hubiera sido de Colombia si en medio de esta escena de celos el Presidente acaba
con la vida del Vicepresidente?. Jos Ignacio de Mrquez regres al palacio maltrecho y
herido en su amor propio, muy pronto anunci su enemistad con Santander y conform
un movimiento poltico que llam de los Moderados. Santander preside el de los
Exaltados, y son esos dos movimientos los genitores de los dos partidos polticos
tradicionales de Colombia, el Liberal y el Conservador.
Comienza a perfilarse nacionalmente el pensamiento de Jos Eusebio, quien escribe en
1842. Desde 1821 estamos divididos: primero entre nariistas y santanderistas, muerto
Nario los nariistas se hicieron bolivarianos y la discordia continu entre bolivarianos
y santanderistas, muerto Bolvar y ausente Santander los bolivarianos se hicieron
urdanetistas, derrocado Urdaneta y vuelto Santander los santanderistas subieron al
gobierno y la divisin fue entre marquistas y santanderistas, que despus se convirtieron
en ministeriales y progresistas, despus en amantes del orden y en facciosos. La muerte
de Santander entre nosotros ha apresurado el triunfo definitivo de la igualdad
democrtica. (El Granadino 16 de septiembre de 1842)

En 1835 las elecciones favorecen de manera sorpresiva a Jos Ignacio de Mrquez


contra el candidato de Santander, Vicente Azuero.
El Presidente Alfonso Lpez Michelsen, tataranieto de las Ibez, insina, con el humor
inteligente que le caracteriz, durante un memorable discurso en 1975, en la Plazuela de
San Francisco de Ocaa, que los partidos polticos nacionales surgieron de un problema
de alcoba.
El partido conservador es fundado por Jos Eusebio Caro, y redacta sus estatutos. Jos
Eusebio odi con todas sus fuerzas a Santander, porque destruy su hogar y fue testigo
del sufrimiento de su padre, encarcelado, perseguido y desterrado, para evitar que
estuviera cerca de su madre.

El odio de Caro se exacerba cuando Santander, despus de tanto celar a Nicolasa, la


abandona cuando ya tiene 44 aos cambindola por Sixta Pontn y Piedrahita de 21,
accin que vuelve trizas a Nicolasa. Han pasado diez meses de la bochornosa escena
entre el presidente y el vicepresidente, y el idilio finaliza irremediablemente. Lino de
Pombo escribe en una carta dirigida a Rufino Cuervo el 22 de enero de 1836: "La
noticia particular ms notable que hay, y que voy a dar a usted, no dejar de
sorprenderle. El General F.de P. Santander une dentro de pocos das su blanca mano con
perpetuo e indisoluble lazo con la mano agraciada aunque un poco morenilla de Sixta
Pontn, vulgo Villa. No lo s todava oficialmente, pero el hecho es cierto"
Meses despus del matrimonio de su ilustre amante, el 22 de julio de 1836, Nicolasa
Ibez firma escritura pblica devolviendo la casa de la calle de San Juan de Dios a
Santander, al igual que la Quinta de Santa Catalina. Estas casas le daban arriendo, y por
otra parte Santander haba sido su sustento, pero ante el matrimonio se ve obligada a
cerrar su casa en Bogot y a Jos Eusebio trasladarse a una pensin, mientras ella viaja
con su hijo Diego a Girn, regresa a Bogot tiempo despus y coloca un negocito de
venta de mercancas que le permite volver a ver por su familia.

Jos Eusebio le va a llenar de alegras porque sus atributos intelectuales lo colocan


como uno de los idelogos ms importantes del pas. En 1848, de 31 aos, fue ministro
encargado de Hacienda y en 1849 fund con Mariano Ospina Rodrguez el Partido
Conservador; escribi su filosofa, public el semanario La Civilizacin, que se
caracteriz por la oposicin al gobierno de Jos Hilario Lpez. Varios editoriales en
contra del gobierno le ocasionaron una condena a prisin que Caro logr evitar huyendo
del pas a travs de los Llanos Orientales. Viaj a Nueva York, donde permaneci dos
aos.

Del temperamento celoso y machista de Santander nos queda otro testimonio en su


testamento, clusula 6a, sobre el hijo que tuvo en Paz Piedrahita y Murgueitio Sanz de
San Pelayo: declaro que en 1833 siendo soltero tuve un hijo en persona tambin soltera
que fue bautizado en agosto de aquel ao. Se llama el nio Francisco de Paula y lo
reconozco por hijo natural mo y lo legitimara tambin si hubiese otro medio legal,
sustituido al de las leyes espaolas, pero nunca lo habra legitimado por subsiguiente
matrimonio porque cuando yo conoc a su madre, ella ya haba sido conocida por otros

Nicolasa tendra que sufrir otro duro golpe. El 28 de enero de 1853, cuando su hijo
adorado Jos Eusebio solo contaba con 36 aos y el reconocimiento nacional, fallece en
Santa Marta, vctima de la fiebre amarilla.
Ya Nicolasa es una mujer madura de 56 aos, pero la vida la ha dotado de una energa
inagotable y emprende viaje a Europa, a sus aos ha sido amenazada por el famoso
delincuente Russi y no encuentra en su patria las garantas suficientes para su seguridad,
as que viaja a Londres tras su hija Manuela, escapa de su pasado, de los recuerdos, de
Santander y eso la libera, escribe a Blasina, su nuera, que En este pas ya no tiene
tormentos continuos. Esto si es gobierno, aqu se disfruta de la ms completa libertad y
seguridad

Cuando en 1860 es puesto preso el pretendiente al trono de Espaa, don Carlos Luis de
Borbn, Nicolasa abri su casa en Bayona, Francia, para las tertulias de apoyo. En El
Tiempo de Bogot de 11 de febrero de 1940 aparece un artculo de Ricardo Santa
Mara, bajo el ttulo Las conspiraciones carlistas de una colombiana en Francia
Despus del fracaso de la rebelin legitimista, miles de carlistas atravesaron los Pirineos
y se refugiaron en la Varsovia francesa, unos para ocultarse de las persecuciones y otros
para reorganizar el partido, luego de la derrota que les infringieran los soldados de la
reina Isabel II. Para estos refugiados, con el tiempo la vida en Francia se les hizo penosa
y es cuando aparece la ocaera, con cerca de setenta aos, elegante aun, inteligente y
llena de vigor, como si fuera una jovencita, para elevarles la moral, para aconsejarles la
reagrupacin. Para saber como estaban las tropas, que detenan a los carlistas, ella
personalmente iba hasta la frontera y descubriendo unos pasos desconocidos en los
Pirineos, los inform y pudieron los carlistas pasar en pequeos grupos la frontera.

Muri llena de reconocimientos en Paris, en enero de 1873, a los 79 aos de edad.

BERNARDINA

Bernardina tuvo una vida sin los tropiezos de Nicolasa, su belleza despert en los
hombres que la conocieron, las ms encendidas pasiones, pero la ocaera fue cauta,
desde a Bolvar y se iba a comprometer con el coronel Plaza cuando ste fue muerto
en la Batalla de Carabobo. El mismo Santander, su cuado, deja percibir desde el exilio
lo tanto que le atraa, y que su cuada fue realmente un verdadero amor platnico,
cuando escribe a Juan Manuel de Arrubla, unas frases que son ms romnticas para
Bernardina que para Nicolasa: "Dgale a Bernardina que hoy he visto el sepulcro de
Elosa y Abelardo en esta capital y que al instante me acord de ella, no se porqu: que
llevo un diario muy curioso, el cual la divertir mucho cuando yo se lo lea sentados
bajo algn arboloco A Bernardina le mandar un poco de tierra del sepulcro de
Elosa y a mi seora Nicolasa unos limones del Lago de Como en Miln". 12

Los enamorados de Bernardina son muchos, y ella que se sabe hermosa los desdea,
pero no es indiferente al soltero ms codiciado de Bogot, se trata del joven socorrano
Miguel Saturnino Uribe, un seductor empedernido, que tiene fama de haber engendrado
180 hijos y de ser uno de los hombres ms ricos del pas.

Miguel Saturnino Uribe Uribe Santos

Miguel Saturnino Uribe Uribe, hijo de Blas Jos de Uribe y Mara Josefa Catalina
Uribe Santos, Naci en El Socorro en 1801, fue congresista por tres perodos,
vicepresidente de la Cmara y protagonista nacional en lo social, en lo poltico y en lo
econmico, pero especialmente conocido por su soltera impenitente y sus incontables
conquistas femeninas.

Sus mujeres fueron de todas las clases sociales, desde las ms sencillas hasta las ms
encopetadas de la sociedad santaferea y reconoci a cinco de los ciento ochenta hijos
que dicen tuvo, a los dems no les dio su apellido pero los protegi y a muchos los
incluy en su testamento. Reconoci nicamente a los que consider de mejor familia,
aunque parezca un disparate.

Autor de importantes iniciativas parlamentarias, sin ser gran orador, ni activista, supo
colocarse por sobre todos sus compaeros por una gran simpata personal adems de su
porte apuesto y su habilidad en los negocios. Se le consider como uno de los hombres

12
Lpez Michelsen, Alfonso. Prlogo Las Ibez Litografa Arco, Bogot 1988
ms ricos del pas, galn entretenido, irreverente en cuanto a religin y familia y sin
escrpulos en el trato con las mujeres.

Los puntillosos peridicos de la poca le cobraron lo apuesto, lo rico, porque la


acumulacin de dinero en la pauprrima Santaf de Bogot, era un sueo prcticamente
inalcanzable, los jugosos contratos con el Estado, entre los cuales se encontraban la
compra de vales oficiales, la explotacin de las minas de Sal de Chmeza, Tpaga,
Zipaquir, Nemocn y Tausa, y las factoras de tabacos, adems de las propiedades
como Sibat o el Pramo del Ruiz, que se contaban entre sus haberes y que comparta
con sus socios igualmente ricos, el cnsul dans Carl Michelsen y Raimundo
Santamara, le cobraron as mismo el xito obtenido en los cargos que ocup, como
Gobernador de la Provincia del Socorro, y en 1839 en la Secretara general de la
Direccin General de Instruccin Pblica, le cobraron lo socorrano, porque algunos
santafereos vean con resistencia a los ciudadanos de esa provincia, por impos,
licenciosos y egostas. Ser socorrano significaba ser excluido de algunas sociedades, se
deca que en nombre de las ciencias y las artes, penetran y daan todo y que quitaron a
Bogot la paz octaviana en que se viva. Personajes como Vicente Azuero, Diego
Fernando Gmez, Florentino Gonzlez y Miguel Saturnino Uribe fueron socorranos y
aportaron sus luces a la repblica, y le cobraron lo mujeriego.

Los frailes capuchinos o capachos le solicitaron una donacin para reconstruir un


colegio, como lo establece el decreto 15 de enero de 1826 en su artculo 1, firmado por
Santander: Se establecer en la Villa del Socorro un colegio que se denominar
Colegio del Socorro y se le adjudica la casa del hospicio de capuchinos que ha reparado
y compuesto el vecindario. Miguel Saturnino Uribe fue el mayor donante de la obra, y
entonces se le compuso esta cuchufleta:

Miguel Saturnino Uribe


Amigo de los capachos
Reconstruy este plantel
Pero hizo antes los muchachos
Que haban de educarse en l

En 1833 el acaudalado y Famoso Miguel Saturnino Uribe cuenta con 32 aos cuando
logra lo que no logr Bolvar, ni Plaza, ni Santander, ni otro ninguno, seduce a
Bernardina, y la reina de Cundinamarca, de 29 aos se rinde a las pretensiones del
Vicepresidente de la Cmara de Representantes y el episodio hubiera quedado oculto,
sino es porque Bernardina queda embarazada y en 1834 nace su hija, Mara del Carmen
Uribe Ibez. La decepcin y la vergenza de Bernardina debieron ser muchas, pues el
socorrano, despus de gozar su cometido le dice en la cara que no est dispuesto a
casarse, entonces Mara del Carmen es dejada en un convento de monjas, localizado en
la calle 17 con carrera sptima de Bogot, al cuidado de las monjas y bajo la cercana
supervisin de su padre.
Es en ese momento que Florentino Gonzlez, tal vez enamorado, en un acto de
caballerosidad desposa a Bernardina, como reza la partida de matrimonio:

En Santa Fe de Bogot a 20 de febrero de 1836, yo el cura rector de esta Santa Iglesia


Catedral presenci el matrimonio que in facie eclessia contrajeron el Sr Doctor
Florentino Gonzlez y la Sra. Bernardina Ibez, de esta vecindad, siendo testigos los
S.S. Esequiel Rojas, Telsforo Rendn y Jos Mara Escobar

Y a partir de ese momento Bernardina se esconde, no vuelve a saberse de ella a no ser


por algunas comunicaciones oficiales, como si la hubiera condicionado el orgulloso
paisano de Miguel Saturnino Uribe, quien tampoco estaba pintado en la pared, y que en
ese momento lideraba, como amigo y seguidor de Santander, la oposicin poltica al
Gobierno.

Jos Ignacio de Mrquez nunca olvid los agravios que le hizo Santander, por sus celos
con Nicolasa y esto deriv en las secuelas polticas que subsistieron despus de muerto
Santander, el marquismo atacaba al liberalismo en ese entonces encabezado por
Florentino Gonzlez.

Florentino Gonzlez al decir de Jos mara Samper, era alto de cuerpo, de gallardo
porte, la talla esbelta, la cabeza erguida y poderosamente conformada, el cabello y la
barba negros y ligeramente rizados; la tez de un blanco mate, casi plido; los ojos
grandes, hermosos y expresivos, la frente magnfica y abierta y como iluminada, la nariz
firmemente perfilada y recta, el rostro anguloso y lleno de lneas de vigor. La boca
grande pero fina en la que vagaba siempre muna sonrisa como de superioridad y desdn
y una expresin de confianza en si mismo, una voz de entonacin suave pero enrgica,
el andar digno y libre y en toda su figura un sello patente de inteligencia superior.

Florentino Gonzlez se desterr a Europa con Bernardina y las dos pequeas hijas del
matrimonio, Soledad y Beln, Bernardina pas por Honda con sus dos hijas el 19 de
abril de 1841 y ya en Paris, las dos mellizas son centro de atencin por su belleza, como
antes lo fueran Nicolasa y Bernardina.

Regresa al pas en 1845 y el presidente es ahora Toms Cipriano de Mosquera,


Gonzlez se promete no volver a incursionar en la poltica y abre un almacn de
artculos importados en la calle del Comercio, con muy buen resultado, dejando que lo
administre Bernardina, a quien le repugnaba la idea, al contrario de Nicolasa a quien
gustaba este tipo de negocios,

Imprime un peridico especializado en economa, importaciones y exportaciones y muy


pronto el presidente Mosquera, olvidando los rencores le ofrece la Secretara de
Hacienda, que acepta y ya en 1847 la entrega a su sucesor Jos Eusebio Caro, enemigo
de las ideas de su to poltico porque recordemos que eran las mismas de Santander y
segn el, l partido causante de las desgracias de la patria.
Santa Fe estaba asolada por una banda de malhechores dirigida por el doctor Jos
Raimundo Russi maestro en la simulacin y el engao y una noche Bernardina termina
labores y cierra el almacn, cuando oye abrir la puerta de la calle y cree que es
Florentino pero se encuentra de frente con los malhechores, unos diez enmascarados a
quienes enfrenta: Se que ustedes son ladrones, roben pero no me ultrajen. Les prometo
que no saldr de esta pieza mientras ustedes roben, porque prefiero que se lleven el
dinero a que me manchen con tocarme

Esto motiv a que Florentino convocara a los habitantes de Santaf a una reunin en la
cual, con la firma de ms de mil vecinos, pide al presidente Lpez, que implemente el
juicio de jurados, los asesinos han sido capturados por la infidencia de uno de sus
compinches. El 4 de julio se expide la ley y fueron condenados a una pena mxima.
Los delincuentes haban diseado una lista seleccionando cuidadosamente las prximas
vctimas de sus fechoras, entre las que se encontraba Nicolasa y su hija Manuela.

En 1856 asume la Procuradura General de la Nacin hasta 1859 cuando acepta la


embajada de Lima y all viaja con su familia. Ni Florentino, ni Bernardina ni sus hijas
mellizas Beln y Soledad volveran jams a su patria, de Lima se traslada a Buenos
Aires donde funda la Ctedra de Derecho pblico en la Universidad Central luego viaja
a Valparaso en Chile. Bernardina muere all en 1864 despus de 28 aos de
matrimonio.

Disipa la tristeza con sus hijas hasta que un marino francs, Albert Nogues se enamora
de Soledad y es correspondido, pero surge la pasin entre el marino por su hermana
Beln a la que desposa y lleva a Francia. Florentino escribe el 9 de enero de 1868 a
Carlos Michelsen Koppel: Soledad, Beln y la nietecita estn sin novedad, y saludan a
usted y a carmelita. Nogues anda viajando y no volver hasta mediados de este ao,
cuando debe partir para Europa con Beln. Si para entonces el pas presenta mejor
aspecto que ahora, es probable que yo me vaya con ellos para venirme despus por el
Atlntico a Santa Marta, porque ir en un buque de guerra que no me costar nada hasta
Francia, y de all a Colombia es ms barato el pasaje . Pero el final de su vida no es tan
grato, Soledad, decepcionada se refugia en un convento de monjas y all muere aos
despus. Beln muere en Francia en 1880, Florentino viaja a Argentina y all fallece
solo y pobre. El matrimonio de Beln y Nogues tuvo una hija, con casi nulas relaciones
con Colombia y el marino, luego de la muerte de su esposa se hizo monje capuchino.

La vida no dio oportunidad a Carmen Uribe para relacionarse ms con sus medias
hermanas, las mellizas, ella crece educada por las monjas y la cercana vigilancia de
Miguel Saturnino, hasta que a los 15 aos, acepta el noviazgo con Manuel Urrutia, de
amplia trayectoria social, pero pobre, su padre interviene, hace romper la incipiente
relacin y solo unos das despus la casa con su socio el dans Carl Michelsen quien
contaba con 31 aos el da de su matrimonio.

En Bogot a 4 de noviembre de 1849, el ilustrsimo Arzobispo de esta arquidicesis


Doctor Manuel Jos Mosquera, presenci y autoriz el matrimonio que contrajeron
Carlos Michelsen, Cnsul general de S. M. el Rey de Dinamarca en esta capital, y la
seora Mara del Carmen Uribe, de esta vecindad en la catedral. Siendo testigos los
seores Miguel S. Uribe, Indalecia Ricaurte de Azuero y doctor Jorge Vargas y otros

Miguel Saturnino Uribe nunca la desampar, como reza en su testamento:

Declaro que tengo 5 hijos naturales que son Elosa, Mara del Carmen, Toms
Guillermo, Zoila Virginia y Mara Francisca, quienes por partes iguales son nicos y
universales herederos.

Que soy dueo de la tercera parte de la empresa de elaboracin de sales de las salinas de
Zipaquir, Tpaga, Nemocn y Tausa

Declaro que tengo pleno dominio y propiedad de la estancia denominada Sibat y San
Fortunato,

Soy dueo de los terrenos denominados Pramo del Ruiz en la antigua provincia de
Mariquita

Declaro que deben dejarse cuatro mil pesos con un inters que no baje del 6% anual a
favor de las dos hijas y el hijo varn de Inocencia Hurtado, llamadas las dos primeras
Mara del Carmen y Narcisa y el tercero Nicomedes.

Declaro que se separen bienes para amparar a Eusebio Uribe Vidal, administrador de la
Estancia de Sibat, a Cleto Marcelino Luque y a un Jovencito llamado Pedro Alcntara
hijo de Cruz Guerrero, una criada que hubo en casa, con la cual vive. Y que este joven
reciba educacin y aprenda un oficio del cual pueda subsistir

Miguel Saturnino Uribe muri soltero el 27 de noviembre de 1864 a la edad de 63 aos

Colofn

El matrimonio del doctor Miguel Ibez y Vidal con doa Manuela Jacoba Arias tuvo
nueve hijos:

Pedro, quien muere joven y soltero, Miguel, mdico, diputado en el congreso de Ccuta
y alcalde de Bogot, cas con Juana Lozano, hija de Jorge Tadeo Lozano, marqus de
San Jorge; Antonio, acompa a Bolvar durante la guerra a muerte por Venezuela, cas
con Mercedes Nario, hija del precursor; Manuel, edecn de Bolvar, lo acompa a
Venezuela y condenado a muerte por los Colorados fue fusilado, pero en el momento
del entierro sus familiares se dieron cuenta que estaba vivo. Los ocaeros le llamaron el
siete dedos porque en la descarga de fusilera le tumbaron tres dedos de la mano
derecha, y el muerto vivo, muri soltero en Lima en 1859; Vicente, Nicolasa,
Carmen, Josefa, Isabel, Manuela y Bernardina.
Mario Javier Pacheco Garca
Miembro de las academias de Historia de Norte de Santander, Ocaa y en
posesin de la de Santander, del Centro de Historia de Convencin y de
la Sociedad Bolivariana de San Jos de Ccuta. Ejecutor de la Ctedra
local en 132 municipios de Colombia y autor de 50 libros publicados,
adems de ser guionista y conductor de la serie de documentales
Prceres de Carne y Hueso Los besos de la Independencia, las
Ibez, La Convencin de Ocaa, 180 aos y Desfile de los
Genitores, 50 aos es autor de la letra del himno de la ciudad de Ocaa.
Vicente Silvestre BlancaSofa
Ibez Arias Mercedes QuijanoTovar
Ibez Caicedo Ibez Tovar
Mara del Pilar ClaraTovar Alfredo
Caicedo Francisco Bateman(Tode
Quijano
JaimeBateman)

Manuel
Ibez Arias Camilo
Antonio
Manuela
Mara
Catalina
Pedro Ordez Julin MaraTeresa
Ibez Arias Ibez Caro Narvez Teresita MejaCaro
Manuela Caro Caro Tanco
MariaAzucena Ibez
Castro Teresita Tanco Rafael Gonzlez
Juan Clmaco Luis Meja
Pacheco
Ordez Miguel Antonio
Caro Tovar Clemencia
PRESIDENTE Holgun Caro
Nicolasa 1.892
Ibez Arias
Roberto
Antonio Jos Jos Eusebio Ana Narvez Urdaneta
Caro Caro Ibez Margarita PRESIDENTE
1951
Caro Tovar
Blasina Tovar Catalina
Pinzn Carlos Holgun Holgun Caro Carlos Holgun
Mallarino Holgun
Carlos Holgun
Manuela PRESIDENTE Lloreda Andrs Holgun
Miguel 1.888 Holgun
Ibez y Vidal Ibez Arias
Jaime
Pedro Luis HolgunCaro
Dousdebes Luis Caballero
Isa b e l
Beatriz Dvilla H o lg u in C a ro
Antonio
Carlos Ed u a rd o Caballero
Miguel Eusebio C a b a lle ro
Ma.del Carmen HolgunCaro
Ibez Arias Liborio C a ld e r n
Ibez Arias Caro Tovar EmiliaNieto
Manuel Lemus Susana
Narvez SusanaCaro Miguel Sanz
Narvez de Santamara Miguel
Santamara
GustavoSanz Blanca Dvila Dvia
Ma Josefa deSantamara
Ibez Arias
MargaritaCaro
Manuel M. Narvez Susana Rueda Rafael
Trigos Pardo
Caro
Toms Rueda Rueda
Miguel Vargas CANDIDATO
Alberto Pardo
Ibez Arias PRESIDENCIAL
Juana Lozano
( Hija d e Jo r g e Eduardo
Ta d e o L o za n o Lpez Clara Lpez
y Nie ta d e l
Michelsen Obregn
M a r q u s d e Sa n Alvaro Lpez
Jo r g e )
Holgun CANDIDATA
Mara Alfonso PERSIDENCIA
Michelsen Lpez
Lombana Michelsen
Isabel PRESIDENTE
Ibez Arias Carlos Alfonso Lpez 1974
Carmen Uribe Michelsen Pumarejo
Luis Picn Uribe PRESIDENTE Cecilia
Ibez 1934 Caballero
Antonia Jaime
Karl Ernesto
Michelsen Lombana Michelsen
Ernesto Michelsen Uribe
(Dans) Mantilla PRESIDENTE
Florentino Michelsen
GRUPO
Gonzlez Beln Gonzlez Uribe Mara GRANCOLOMBIA
Bernardina
Albert Nougez
Blanca Mantilla Uribe
Ibez Arias Alicia
Soledad
Miguel Saturnino Gonzlez Michelsen Rafael
Gustavo Mantilla
Uribe (Religiosa) Puyana
Michelsen
Uribe Ernesto Puyana
Antonio Natalia
Ibez Arias Kalchn Carmen Natalia Philips
Mercedes Nario Michelsen Pablo Laserna
(HijadeAntonio Kalchn Pablo Laserna Philips
Nario) PRESIDENTE
Oliverio DE CARACOL
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