La Prueba de Los Hechos, Taruffo
La Prueba de Los Hechos, Taruffo
La Prueba de Los Hechos, Taruffo
Captulo II
EL HECHO
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F
EL HECHO cHo coMo oBJETo D
chos. As, la prueba tambin sirve para establecer los lmites de los co- Siendo as, se intuye fcilmente que no se puede hablar del "he-
nocimientos .propios, que el juez puede introducir en el proceso y cho, separndolo completamente del "derecho" u olvidando sus impli-
utilizar a los efectos de la decisin, dando por supuesto que no puede caciones jurdicas. Con esto no se pretende hacer referencia aqu a toda
usar su propia nciencia privada" sobre los hechos que deben ser proba- la problemtica tradicional, en muchos aspectos agotada' de las "rela-
dos en;'uicio3, mientras que el principio iura nouit curia afecta nica- ciones entre el hecho y el derecho,T. Esa problemtica surga a menu-
mente a la identificacin de la norma aplicable para la decisina. do a partir de errores metodolgicoss y no tomaba en cuenta las pecu-
Sin embargo, el hecho de que la idea en cuestin sea algunas veces liaridades de los distintos ordenamientos, buscando definiciones
til no demuestra que est exenta de dudas y problemas; al contrario, absolutas donde era necesario' en cambio, tomar en consideracin si-
es discutible y discutida y, p9r otra parte, como se ver, est dotada tuaciones muy diversase; adems, abordaba numerosas cuestiones no
slo de una fuerza alusiva. Unicamente un anlisis profundo puede vinculadas con el problema de la prueba en el procesol0. Sin embargo'
mostrar cules son los lmites y las condiciones en los que puede es necesario tener presente un factor importante: en el proceso los
decirse que la prueba versa sobre los hechos y pretende establecer su hechos de los que hay que establecer la verdad son identificados sobre
existencia. la base de criterios jurdicos, representados esencialmente por las nor-
Al respecto, un primer tipo de problemas surge en la medida en mas que se consideran aplicables para decidir la controversia especfi-
que el proceso constituye un contexto "jurdico", regulado por nor-
mas, que adems afectan de una forma que no puede obviarse, preci-
7, Cf., par,a una panormica al respecto, los ensayos recogidos en el volumen /.
samente, a las modalidades de prueba de los hechoss. Adems, en el
fait et le droit. Etudes de logique juridique, Bruxelles, 1961. V. tambin en la literatura
proceso se demuestran hechos no para satisfacer exigencias de conoci- ms reciente, que no obstante no parece haber introducido perspectivas sustancialmente
'W.
miento en estado puro, sino para resolver controversias jurdicas acer- nuevas, J. Jackson, Questions of Fact and Questions of Ldw, e Facts in Law, ed. por
Twining, ARSP, Beiheft 16, Wiesbaden, 1983, pp. 85 ss.; llhite, Fact in the Lau, en Lau,
ca de la existencia de derechos: esto es, no se pretende determinar el
Interpretation and Reality. Essays in Epistemology, Hermeneutics and Jurisprudence,
hecho en s mismo sino en la medida en que ste es el presupuesto ed. por P. Nerhot, Dordrecht-Boston-London, 1,990, pp. 11 ss.; Troper, The Fact and
parala aplicacin de normas en el caso concreto6. the Law, iui, pp.22 ss.; fugaux, The Concept of Fact in Legal Science, iui, pp. 38 ss. Entre
lo ms reciente cf . Mazzarese, Cognition and Legal Decisions. Remarks on Bulygin's uiew,
en Cognition and Interpretation of Latu, ed. por L. Gianformaggio y S. Paulson, Torino,
1995, pp. 158 ss.
3. Sobre la prohibicin de recurrir a la "ciencia privada" del juez, que se sostiene 8. Los errores de la perspectiva tradicional derivan esencialmente de no emplear
que est enunciada en el artculo 115 cod. ptoc. civ. it., v., en la literatura reciente, nociones precisas de lo que se entiende por "hecho, y por oderecho". La consecuencie
Cavallone, Crisi delle oMaximen, e disciplina dell'istruzione probatoria, ahora en Id', // de ello es que a menudo los respectivos discursos son genricos, ambiguos y vacuos,
giudice e la proua nel processo ciuile, Padova, 1991, pp. 292,297 s., 3 1 I s, 322. Sobre los Ejemplos de este tipo pueden verse en Dekkers, Le fait et Ie droit. Problmes qu'ils po-
momentos importantes de la evolucin histrica del problema, v. Nrr, Zur Stellung sent, en Le fait et Ie droit, cit., pp. 7 ss.; Hallemans, Le iuge deuant la distinction du fait
des Richters im gelehrten Prozess der Frhzeit: Iudex secwndum allegata non secundum et du droit, iui, pp.70 ss.; Bayart, La distinction du fait et du droit. Le point de uwe de
conscientiam iudicat,Munchen, 1967. El texto clsico sobre este tema sigue siendo, en l'auocat,iul, pp. 89 ss.
todo caso, Stein, Das Priuate'Wissen des Rchters, Leipzig, 1893 [tr. cast., EI conocimien' 9. As, por ejemplo, habitualmente no se toma en cuenta que la distincin lawlfact
to priuado del juez, a cargo de A. de la Oliva, Madrid, 19901. en los odenamientos del common law no opera en absoluto sobre una pretendida natu-
4. Sobre este punto v., en particular, Grasso, Dei poteri del giudice, en Commen- raleza intrnsica de algo, sino sobre la distincin de las atribuciones del juez y del jurado:
tario del Codice di Procedura Ciuile, dirigido por E. Allorio, I, 2, Torino, 1'972, pp. v.' por ejemplo, Friedenthal, Kane y Miller, Ciuil Procedure, St. Paul, Minn., 1985, pp.
1282 ss.; Micheli, "Jura nouit curia,,en Riu. dr. proc',1961, pp. 575 ss'; Sapienza, I/ 476 ss.; lfilson, op. cit., y en particular'Weiner, The Ciuil Jury Trial and the Latu-Fact
principio ,,iura nouit curia" ed il problema della proua delle leggi straniere, en Riu. tim. Distinction, en Calif. . R 54, 1966, pp. 1 8 67 ss.; Id., The Ciuil Non-Jury Trial and the
dir. proc. ciu., 1961, pp. 41 ss.; Punzi, lura nouit curia, Milano, 1965; Carpi, Colesanti Law-Fact Distinction, iu,55, 1,968, pp. 1020 ss. En la literatura italiana, cf. Tatuffo,
y Taruffo, Commentario breue al cod. proc. ciu.,Padova,21988, pp. 198 s. Studi sulla rileuanza della proua, Padova, 1970, pp. 114 ss.
5. Cf., en particular, Varga, On Judical Ascertainmeltt of Facts, en Rntio Juris, 10. En realidad, la distincin era formulada principalmente con la finalidad de defi-
1,991,, p. 62, y ampliamente, infra, captulo V, 2. nir el mbito de los poderes de la Casacin y del Conseil d'tat: v., por eiemplo, los
6. Cf.Yarya, op. cit., pp. 63 s.; ld., The Non-cognitiue Charactet of the Judicial artculos de Foriers, Ascarelli, Rivero, Buch y Roland enLe fait et le droit, cit., pp. 51 ss.,
Establshment of Facts, ponencia presentada en el 15 World Congress on Philosophy of 1.13 ss., 149 ss., 175 ss.; tambin Rigaux, op. cit., y Marty, La distinction du
fait et du
Law and Social Philosophy, Gttingen, 1'8-24 de agosto, 1991, pp' 1 ss. (del manuscrito). droit. Essai sur le pouuoir de contr\le de la Cour de Cassation sur les juges du fait,Paris,
V., adems, captulo 1,2.2 y 4.2. 1,929.
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LA lNDlvlDUALtzActN DEL HEcHo
ca. Para usar una frmula sinttica: es el derecho el que define y cleter-
mina lo que en el proceso constituye .el hecho,11 o,:g:..'i"'i"t#;::'3,'#i:Ti;i::ffiiil'ff ;"ffi :Trff ff i::
Fsto no implica ni permite confusiones ente hecho y derecl.ro,
ni
mucho menos autoriza a quitarle autonoma_ al_ hecho para diluirlo
anularlo en la genrica dimensin jurdica de la controversiar2. EstI
frjnn'"",::'"3ilfiTff ;Ti1Lffi ,'i,'.Tx'fi Jfi nff 'l::n;.;
simple y unitaria de lo que constituye
claro' sin embargo, que en un contexto como el que aqu se to[ra en lr!".r'haber.una,definicin
del proceso. En consecuencia, no puede ha-
ll-,.'t r.ho" en el mbito
cuenta, la nocin de
"hecho" no es elemental e intuitiva en absoluto y
que es problemtica su conexin con la dimerrsin jurdica de ia con- ;:; ;;; definicin simple y unitaria de lo que representa el objeto de
de prueba" es, en cambio, una
troversia y de la decisin. As pues, no es necesario discutir en trnri- i^'ot"r1^..fls6he", en cuanto "objeto
*i;;"muy variable y problemtica, que requiere al nrenos algn in-
nos generales la distincin hecho/derechol3 sino que hay que tornar en
tento de anlisis ultertor'
consideracin las distintas modalidades con las que el hecho, destir.ra-
do a constituir el objeto y Ia finalidad de la prueba, es identificaclo a se planteara en trminos ge-
2. La indiuidualizacin del hecho.-Quien
travs de las normas aplicables al caso especfico. Se trata, en fin, de el problema de definir lo que constituye un "hecho" se,encon-
entender correctamente en qu consiste la denominada ucli.".i5,.,
llr"l.,
irara fteite a un problema muy complejo. Puestos a identificar de
jurdica del hechoo y de qu forma condiciona Ia identificacin clel
forma genrica y aproximada la situacin e l "porcin de experien-
hecho del que es necesario determinar la verdadla.
sio qu nos ocupa, el problema surge cuando se pretende definir ana-
Un segundo orden de problemas surge en la medida en que, en lticamente esta situacin y el uhecho, o los "hechos" que la compo-
realidad, no existe una nocin de *hecho, elemental y aceptable clue nen. En efecto, ninguna proposicin descriptiva es apta a priori pata
pueda asumirse sin discusin como punto de partida. Aunque hagamos captaf y agotar el nhecho" y ni siquiera se puede sostener que ste
abstraccin momentneamente del problema de la calificcin furdi- pueda ser descrito completamente por una serie, incluso extensa, de
ca, basta atender a la extrema variabilidad e indeterminacin de los proposiciones.
fenmenos del mundo real para percibir fcilmente que resulta mu,v Resulta intuitivo, en efecto, que cualquier situacin fctica puede
difcil definir de un modo no superficial qu se entiend por (hecho,rj. ser sometida a un proceso de descomposicinl6 en dos direcciones:
Por otra parte, el problema de la calificacin jurdica de los hechos no cualitativa y cuantitativa. Se est ante una descomposicin cualitativa
puede ser obviado por mucho tiempo, ya que es precisamente la di- cuando se individualizan aspectos distintos de la situacin en cuestin:
mensin jurdica del as, por ejemplo, describiendo un accidente de circulacin se pueden
"hecho de la causa, la que permite identificarl.,
distinguindolo y extrayndolo de la ilimitada variabilidad e inderer- distinguir sucesivamente diversos .pedazos, de la situacin: el tipo de
minacin de ia realidad. Del problema de la definicin del .hecho, re- coche, la velocidad, la marca, el color, la altura del conductor, el color
sulta, as, rpidamente el problema de las modalidades con las que l:rs de su corbata, etc. No es necesario destacar que esta descomposicin o
normas jurdicas seleccionan y determinan los irechos idneos para multiplicacin aumenta si se toman en consideracin ms puntos de
vista, es decir, descripciones de la misma situacin de hecho ofrecidas
1,1, El "hecho", por tanto, no est dado por s mismo y autnomamente anres cl.
por sujetos distintos o desde perspectivas diversaslT. Por descomposi-
que asuma relevancia jurdica. En el proceso es .hecho, lo que se define como tal eu
funcin de la norma aplicable para decidir la conrroversia. cf.yarga, on
Judicial Ascer-
tainment, cit., p. 61; Id., The Non-cognitiue Character, cit., pp. 2 ss.; Id., The Mentitl . 16. Sobre esta descomposicin, cf., en general, Toraldo di Francia, Lo stdtuto orlto-
logico degli oggetti nella
Transformation of Fact into Case, en ARSP LXXVII, 1,991, pp. 60 s. V. tambin, infrs, fisica moderna, enLiuelli di reabd, a cargo de M. Piattelli Palma-
apartados 2.'1. y 2.2. t^tli' Mil"no, 2L987, pp. 296 ss.; anlogamente, Id., Le cose e i loro nomi, Bari, 1986, p.
12. No faltan tendencias de este tipo, en las que se pierden las caactersticas espe- Zr. Sobre el problema de los niveles de realidad y de sus respectivas consecuencias en
cficas del uhecho" y de su respectivo juicio. v., por ejemplo,Nasi, Giudizio di terminos de metodologa del conocimiento v. tambin Yilla,Teorie della scienza giuridica
fatto (iir. e teorie delle
proc. ciu.), en Enc. dir., xYr, Milano, 1.967, pp. 967 ss. y consideaciones crticas en scienze naturali. Modelli e analogie, Milano, 1984, pp. 35 ss.
Taruffo, Note in tema di giudizio di fatto, en Riu. dir. ciu., l97l,I, pp. 33 ss. .17. Es lo que los cientficos denominan rototraslacin para indicar la serie de ope-
13. V, referencias, supra, en las notas 8,9 y 10. raclones medianre
las que el mismo objeto es observrdo desde distintos punros de vista:
14. V., infra, apartado 2.2. cf' Toraldo di Francia, Lo statuto ontologico, cir., p.299i ld., Le cose e i loro nomi, cir.,
15. V., infra, apartado 2.1,. PP. 27 s. Tambin fuera del contexto cientfico se reconoce habitualmente la posibilidad
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EL HECHO DvlDUALtzActN DEL HEcHo
dimental del fenmeno probatorio. 27. Entte los anlisis crticos de esta concepcin cf., en particular para lo que aqu
interesa, Engisch, Logisch Studien zur Gesetzesaiwendung 2 Aufl., Heidelbe rg, 1,960, pp.
19 ss.; Larenz, Methodenlehre der Rechtswissenscbaft, Berlin-Heidelberg-New York,
2.1. La releuancia jurdica.-Determinar el hecho en el contexto de "1'979, pp. 262 ss. [tr. casr., Metodologa de la ciencia del derecho, a cargo de M. Rod-
la decisin significa esencialmente definir cul es el hecho <concrero, guez Molinero, Barcelona, 1980, pp. 272 ss.l; Esser, Voruerstcindnis und Methodenwahl
tn der Rechtsfindung,Frankfurt am Main, 1.972, pp.31 ss., 48 ss., 106 ss.; Nerhot, 7e
o "histricoo al que se aplica la norma idnea para decidir el caso2s 9 t'aw and its Reality, en Law, lnterpretation and Reality, cit., pp. 50 ss.
bien, pero no es lo mismo, establecer cul es el hecho controvertido
para despus decidir cul es la norma que debe serle aplicada26. . .28. No es ste el lugar de analizar detalladamente los problemas relativos a la defi-
ntctn dogmtica de esos conceptos; para ello y para amplias referencias bibliogrficas v.,
en.la doctrina iraliana, Caraudella, Fattispecie e
fatto. I. Fattispecie, en Enc. dir., XYI,
lvlti:ano' 1967 , pp. 926 ss.; Falzea, Fattispecie e fatto. II. Fatto giuridico, iui, pp. 941 ss.;
rvrarorca,
25' sobre la insercin del hecho en la norma y en el contexto de la decisin, v., Fatto giuridico-t'attispecie, en Nouss. Dig. It., VII, Torino, 1961, pp. 111 ss.
supra, captulo I, 4.2.
- 19. Ct., entre otros muchos, Hruschka, op. cit., pp.20 ss.,4l ss.; Engisch, op. cit.,
PP'22ss.,37ss.,83ss.;Larenz,
26. Es el problema, no espec.ialmente examinado en la doctina italiana pero aguda- op.cit.,pp.266 ri.t.."rt., op.cit.,pp.275ss.l;
\erhot, op.
mente discutido en la alemana, de la individualizacin del .casoo somerido a la declsin. cit., pp. 52 ss., 58 ss.; Jackson, Questions of Fact, cit., pp. 87 ss. En la doc-
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LA lNDlvlDUALlzAclN DEL HEcHo
EL HECHO
planteada,en iuicio' este criterio furl- r " individualizacindel hecho jurdicamente relevante est eviden-
slo si, en la concreta situacin la norma es aplicable a ese de la "preparacin de las premiss' de la decisin y no
ciona con resultados t:"il;;;;1'l;;:;' de prueba'
,;;;;;, ."trosimple
*'',Jrir,
juego deductivo sino de una compleja operacin
decisin Y' Por tanto' obieto un
hecho y ste es obtto'' la forma silogstica - -^|o,,o 2la <constru.iin d.l caso>) es decir, a la individualizaci1n
Son numero'u' tu'l"'ot'ts
qut hactn crrre la de
de la decisin33. Esta ope-
;Jla relevat"i" iurdica del hecho sea ::i#J,;;;;.onrtituy. el objeto especfico
reDresentar lu attt'*in;;t la conexin entre norma y hecho, pero no en el sen-
muy discutible. Algunas de ellas (que no puedtn ser aqu analizadas 1".";rt; sobre consratar una correspondencia (que en realidad no
que' desde ;J;;, a
tot'stintosmotivos por los limitarse
de pretender constituir una corres-
detenidamen,r) "*1"i"" "
" racionalistas del d. por s), sino en el sentido
tiempo atrs, inclus"'lt' ti'"-Uito
de conceociones que norma' en
el'esquema sll:git''t" "'Jiit, entre hecho y norma que
_permita
decir esa
i'.,udttuuo
razonamiento tt iut', ""';;;;; "rn]a"ai"
i;; d;,"r significados resultantes de la interpretacin, califica iurdica-
d'a'ttt"-"'ie su funcin y su capacidad representativar0'
o se reduce que es relevante respecto a esa norma y que funda-
aq" en la medida en que afec- ;.i,,- ese hJcho,
otras razon., pt"at"""' *t"tio"ua
'rnturala
se trata esencialmente de decisin en la medida en que resulte probado en juicio.
tan directamente al ;;;;;
t" cuestin' '-'-
da'por descontado aquello que Laactividad mediante la que se instituye la correspondencia entre
constatar que la t""Jt;;;;togi"it" significado de la
del hecho y norma a los efectos de la decisin y
se identifica el hecho ju-
sera necesario ."priilf, ,J;;;;ientificacinsupuesto de hecho abs- ,-idi."-..tr. relevante escapa al esquema silogstico3a, que no est bien
del
norma concreta ,.rp*;t";;;iefinicin que permita estable- fundado pero sigue inspirando el "sentido comn" de los juristas. Esa
tracto y lacalificaci"lrJi" rl hecho.concretde aquella norma' E'n actividad-escapa tambin a los anlisis que se concentran sobre la lgi-
cer si ste entra o "pri*tinfuncioa' lo hace en la
"i'J;';i:;;;o-at silogstico ca de las normas y del ruzonamiento sobre normas' que -como suce-
otros trmino,' 'i t;;;;;it;to y de dere- de a menudo- olvidan tomar en cuenta que habitualmente las normas
medida en que t""T""i" pttttitlt dtt""du'' de hecho se aplican a hechos que es necesario identificar y definir para saber
'" lgica que funda la deduccin
cho, enrre las que #;i;;;;;.i"tin si se aplica, y cundo se aplica, una norma.
problema' resDecto del cual el
esquetna
silogstica. Pero- el ;td";;t el e la fiiacin de las premi- En cambio, una contribucin de gran importancia al anlisis del
es
silogstico no ot"ttltiput"''ulguna' por un lado' y la determt- problema que aqu nos interesa proviene del filn metodolgico hoy
-t1t1'
sas, es decir, la i*ttp"tt""t-i"".{r" tomar.en cuenta dominante en Alemania, pero que no carece de manifestaciones tam-
Es necesari'o' adems'
nacin del hecho, po'r el otro"' bin en Italia, que parte de los Logische Studien zur Gesetzesanwen-
t"*" y" tt ttu ltno' ning"na determinaci::,u'dttttt-
el hecho de que, no hav
tr iit- *oo que a priori
da del hecho est ;:^';ptt"''
q"" de la norma32'
un significado "u "piopio" teora general de la interpretacin. Esta eleccin no puede ser aqu analticamentejustifi-
cada, dado que requerirL una larga disgresin que no es relevanre a los efectos del dis-
Taruffo, Srr,rdi, cit.' pp' 23
curso que se est dsarrollando. Baste, pues, una justificacin opor remisin, a la docrri-
otras referencias biblioerficas,
trina italiana v., tambin para i"l A','n;;;;;"' 64 ss'; ld" T/r
na de la interpretacin que fundamenta esta eleccin y, en particular, a Tarello (cf.
i'9f 'it'' p'
ss. Entre lo fns
"*
"'ientl'i''v"^"'^"'
i,l| "i i, i"o, i"T:lt n" otio
"'o
pl o;' I
r
I l "'
?
"9 ; 3: I;
t :ru:':Lf !!' i:: ;; :;'c, ; L'interpretaziine delta legge,Milano, 1980, pp. 61 ss.; Id., Diritto, enunciati, usi,Bolog-
na, 1974, pp' 347 ss., 3s9 ss.) y a Guastini (cf' Id., en Castignone, Guastini y Tarello,
o p' il' s :^. H1.r ;::: ::',iJ'""'.: Tffi ,; ;;*d;;-;';;
a*d ec si n :
r i lntroduzione teorica allo studio del diritto, Genova, 1989, pp. 34 ss.,234 ss.). Cf. tam-
oarece evidente incluso e ,agio)amento giudiziario'
Bolognr' utn !roblew ski, Problems related to the one right answer thesis, en Ratio
Jutis 3 ' 1989 '
L;i;"i' Il giudice experto' Psicologia cogntttud PP' 240 ss.
1992, P' 216' B' Jackson' Law' Fact and Nanatiu 33. Cf., especialmenre, Larenz, op. cit., pp. 262 ss. [tr. cast., op' cit., pp. 272 ss.];
30. En la literatura reciente cf'' por ejemplo' ,.
t" is*'s'i' aP'Plichi atte nuschka, op. cit., pp.
i;;;:';p' :t "';'ci"nfo'i"fiT'"'i" gttr 11 ss., 52 ss., 70 ss., pero v. tambin Eberle, Zur Rethorik des
coherence,Mersevside] uot"ioipu una storia della-cultura ol ltutlptozessualen Beweises, Frankfurt a. M.-Bern-New York-Paris, 1989, pp. 76 ss.; Kau-
norme. In cerca del
v,ur.*,lil'"i{t t ):it"il^
"'"J;i;;;;;"''tan1,-'n
1e86, pp. 473,;;;; ;;';i;"1",
Rato'atitv
a,,d rmann, Preliminary
tnterpretaon
Remarks on a Legal Logic and Ontology of Relations in Law, en Law,
ridica,
'iiii"il*';in, ani Reality, cit., pp. i t I rt., I l+.
Re''ht'thiorie t' 1e74' pp' 33 ss'
rit" 34' Cf., .t p".ti.ul., Ct"" y Teschner, Semiotic Contrust betueen Trial and Dis'
'n ux., oj. 267 ss'li Esser' op' f P'
31. cf.. Larenz, op. cit., pp.257_ss. [tr. "n.,.pp. -^
ol 'r!3a, en l-aw por i. Keuelson, New York-London, 1989, pp.
s *.ilcirr"", op. cii';J' Jaikson'.Qzestions li''J;,til'u"r* , on Judicial Ascertain' t/'747 ss. ard Semioics,vol. 3, ed.
").jl,,"ij;;:;':?',jlli:,# Desde el ounto e uista heuistico de esta actividad v., adems, Yatga,The
I"i::;::;;t;:;iii'" l''' o?''''s 'Es'la r'lima arirn' tron-cognitiue
Character, cir., p. 4.
el plano de la
tlttti'# f "ti'"'pt' tuy pttft#ti*'y Ltutiblt' en
cin implica un"
99
98
-T--
dwng de Engisch pero utiliza especialmente la perspectiva y los concep- haciendo nicamente referencia a la abstrakte Tatbestan.
SAchuerhalt)
"lrnnd" por la norma4o; sta, a su vez, puede sef selecciollada para
tos de la hermenutica. Ms aII de la posible discusin sobre los fun-
damentos generales de la hermenutica, y de Ia versin gadameriana a los efectos de la concret:' aplicacin
en particular3s, no se puede desconocer que la epistemologa jurdica
lrgut^r.i .uro e interpretada
i"i.iut nicamente sobre la base de, y en la lnea repre-*entada por, los
de orientacin hermenutica ha situado como objeto privilegiado de 'h..ho, que identifican al caso a decidiral. La "construccitin del caso",
investigacin precisamente a la formulacin de las premisas de la deci-
Daravsaf la expresin de Hruschka, es' pues, una operacin compleja
sin, llegando a ofrecer anlisis refinados y aceptables del aspecto de-
,n l" que el iuez formula problemas y busca resptlesl" , procediendo
cisorio del razonamiento del juez.
oor grados, por hiptesis y control del anlisis de ios i-rechos, de las
En realidad, el anlisis de la llamada "subsuncino del hecho en la
nor*ur y de sus posibles conexiones4z' El problema fundamental resul-
norma, de forma mucho ms detallada de cuanto se realiza habitual- ta. entonces, el de las elecciones que el juez debe formular pafa fundar
mente en la doctrina que se ocupa de estos problemas, se remonta las premisas de la decisin: elecciones complejas, cambiantes e interre-
principalmente a Engisch, especialmente desde una perspectiva que lacionadas que afectan a la individu alizacin de la norma aplicable y
pretende captar la interrelacin dinmica entre hecho y norma, que se de su significado, que opera como regla de solucin de la controversia,
implementa en la "formacin" de la decisin36. De hecho, es suya la pero tambin a la determinacin de los hechos jurdicamente relevan-
famosa metfora del "Hin- und Herwandern des Blickes zwischen tes que individualizan la controversiaa3.
Obersatz und Lebenssachverhalt"3T, que abre el camino al estudio de 1a Es cierto que, como subraya Zaccaia, esta perspectiva encuentra
relacin entre hecho y norma, en el mbito del procedimiento deciso- su limitacin fundamental en su referencia a la imagen ideal del juez y
rio, como relacin de progresivo acercamiento entre la definicin del de la formacin de las premisas de la decisin ms que a la forma en
hecho y Ia interpretacin <concretizadora" de la norma, en particular que sta se produce en la experiencia concreta del proceso44. Esta es,
por lo que se refiere a la definicin del supuesto de hecho38. sin embargo, una perspectiva importante, especialmente si se toman en
Esta concepcin dinmica de la relacin norma/hecho que se ins-
taura en materia de decisin se convierte en la base de la tendencia
ms difundida en la doctrina alemana, como confirma) por ejemplo, la 40. Cf. Zaccaria, op. cit., pp. 54, 98 ss. En particular, sobre el "crculo, y sobre la
oespiral, hermenutica, cf.Larenz, op. cit., p. 183 [tr. cast., op. cit., pp.194 s.]; Hasse-
Methodenlehre de Larenz3e, y encuentra ulteriores desarrollos en el mer, op. cit., p. 1,07i Zaccaria, op. cit., p. 55; Baratta, op. cit., p. 60. Se trara, por otra
mbito de la doctrina hermenutica. En realidad, conceptos como el parte, de un concepto que los juristas toman, adaptndolo al problema Ce la interpreta-
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EL HECHO
LA INDIVIDUALIzACIN DEL
HECHo
102 103
LA lNDlvDUALlzAclN DE
-. 51. Cf., por ejemplo, Aarnio,The Rntional as Reasonable. ATreatise on Legal Justi'
Itcation, Dordrechr-Bosron-Lancaster-Tokio, 1987, pp. 10, 63 ss. [tr. cast., Lo racional
47. Cf. Zaccaria, op. cit., p. 52. como razonable, a cargo de E. Garzn Valds, Madid 1991, pp. 44-45, 107 ss.l, y espe-
48. Cf. Hruschka, op. cit., pp. 30 ss. ,
cralmente S7rblewski, Facts in Latu, enId.,Meanng andTruth in
49. V., en particular, Grace y Teschner, op. cit.,pp. 127 ss., 1,41ss., que analizan dc ludicial Decision,Hel-
tlgS, pp. 104 ss. Para un recienre anlisis lgico del concepto
lTkt' de relevancia v.
forma especfica la elacin hecho/norma como relacin de encodingldecoding entre dos Holdcroft, nirorrc in Legal Proof, en Facts in Law, cit., pp. 12i ss. El concepto de
sistemas lingsticos constituidos por el lenguaje ordinario y el lenguaje jurdico. Sobre l,r relevancia jurdica,
elevancia del aspecto lingstico de la elacin hecho/norma v., tambin, desde la pers- o de supuesto de hecho, representa, por otra parte, un tpos clsico
en la doctrina
pectiva herrnenutica, Esser, op. cit., pp. 32 ss., 50 ss., 106 ss., adems de J. del.hecho jurdico": para los aspectos dogmticos de ese concepto v., en
Jackson, particular en
la doctrina iraliana, Caraudella, op. ct.,pp.932 ss., 938 ss.l Falzea, op. cit.,
Questions of Fact, cit., pp. 92 ss.; Ockelton, Comments on John Jackson's oeuestions of pp' 942 ss.; Maiorca,
Fact and Questions of Latu", in Facts in Lau, cit., pp. 103 ss. op. cit., pp. 112 ss., 124 ss., 132 s.
52. Sobre este lnea rerica v., entre lo ms reciente, Pintore, La teoria analitica de
50. V., en particular, Yarga, op. cit., pp.364,371; Ockelton, op. cit., pp. 102 ss. concetti giuridici,
Napoli, 1990, pp. 89 ss.
104 105
tDtvtDUALtzAclN DEL HEcHo
106 t07
DIVIDUALIZACIN DEL HECHO
108 109
DtvtDUALtzAclN DEL HEcHo
110 11,1
IDIVIDUALIZACIN DE
extrajurdita exista slo cuando la 'orma emplea el lenguaje comn y onstatar la extrema variabilidad de l's caracteres que la determi-
jurdico o, ms nacin del hecho puede asumir, en funcin del
lenguaje utilizado por
.ro as c.rarrdo la norma emplea conceptos del lenguae
li nor^ , ofrece una confirmacin adicional de la inaceptabilidad de
an, que nunca exista, si seiostiene que la individualizacin del hechcr jurdicamente
7aid"^segn la cual el concepto de nhecho relevante" es
es siempre "jurdica".
simple o, en cualquier caso, reducible a una unidad.
En realiad, aqu el problema no es ontolgico sino lingstico, en
el sentido de que h".ho material que fundamenta la aplicacin de la Lamisma constatacin, sin embargo' conlleva el riesgo de disolver
"l
norma puede ser individualizado con lenguajes distintos en funcin de el problema que aqu se discute en la infinita variabilidad de los casos
si la noima urlliza o no (y de la forma en que lo haga) trminos
(pres- paiticulares, de los lenguajes y de sus posibles combinaciones, de las
icnicas interpretativas y de las semiticas jurdicas y no
jurdicas. El
tadoso del lenguaje comn'
Esto no i-"pii. ya se ha destacado- que el hecho sea slo riesgo es que dentro de esta variabilidad se pierda de vista el "hecho"
fun- (o, mejor, .los hechos"), es decir, la circunstancia de que, en todc caso'
el indicado poi l" .ro.-a y, por tanto, que sea individualizado en
cin del significado de la'norma (es decir' en funcin de los criterios la individualizacin del supuesto de hecho se realiza en secie de inter-
pretacin en el proceso concreto) a los efectos de establecer lo que debe
semnticos aplicables a la misma), pero esto significa nicamente que
ser probado en ese caso.
el hecho .elerrante puede ser X o Y segn la forma en que la norma lo
Una vez constatado que "el hecho" no es unitario, es conveniente
defina. No significa' en cambio, que no exista ningn hecho material
buscar algn criterio orientativo que, al menos en alguna medida, re-
relevante slJ porque la norma empiee el lenguaje jurdico para esta-
duzca su multiplicidaC. Es obviamente absurdo prefijarse la construc-
blecer en qu casos se verifican efectos jurdicos'
As pus, la determinacin del hecho jurdicamente relevante es un
cin de una tipologa coherente y completa de los "hechos" mismos.
Pero puede resultar ittil analizar alguna hiptesis particularmente rele-
problema semntico, en el sentido en que se trata de establecer qu
vante, aunque slo sea para mostrar per exempla la complejidad
significa la norma en lo que se refiere a la individu alizacn del hecho. -y
tambin la importancia- de los problemas referidos a la determina-
.r"d..ir, cul es el hecho que la norma define como presupuesto de srt
cin normativa del hecho.
, propia plicacin. En funcin del lenguaje empleado por la norma esta
op.r".io" puede resultar ms fcil o ms difcil, ms directa o ms 2.3. Hechos y enunciados sobre hechos.-Las observaciones que
mediata, ms intuitiva o ms compleia, ms "de sentido comn" o ms
preceden ponen en evidencia un aspecto del problema del "hecho, en
Obviamente, es ms fcil y directa cuando la.norma
"tcnico-jurdicar. el juicio que resulta obvio en muchos sentidos pero que, sin embargo,
usa (con;eptos fcticoso (por utilizar la expresin de Scarpelli) ms
debe precisarse expresamente.
prximos a l" experi.ncia omn y los formula con expresiones extra-
Cuando se habla de .construcsi$,, udefinicin" o "identificacin"
ias directament; del lenguaje comn ('muerte', 'vsl6sidd",- "convi- del hecho, o de individualizacin del nivel de realidad o del grado de
vencia,, etc.), mientru, qu. es ms compleja y mediata cuando el he- precisin en el que aqul es determinadoTT, o tambin del modo en que
cho es individualizado mediante lenguaje njurdico" (.dao grave>' las normas individualizan los hechos jurdicamente relevantesT8, parece
.hecho ilcito,, oposesinr, etc') o cuando no est exactamente deter-
evidente que no se hace referencia al hecho en cuanto ocurrencia de la
minado (como'sucede con las clusulas generales). Lenguajes,dis_tintos realidad emprica, sino a enunciados, de distinta naturaleza, que se re-
req'.rieren semnticas distintas y, obviamente, conducen a resultados in- tieren a ocurrencias que se supone que suceden en el mundo de la rea-
lidad emprica. Los hechos del mundo real existen (cuando existen)
As segn modalidades empricas absolutamente independientes de la esfe-
Incluso los tericos de los nhechos institucionales" no excluyen este aspecto'
76. nbru'
por ejemplo weinberger destaca que las tcnicas definitorias tpicas de los hechos
ior" o la definicin de los hechos oinstitucionales>' pero no excluye que tambin
"iorun
el hechoinstitucional tenga bases empricas (v. Facts and Fact-Descriptions, ct.,
pp. 82 77- v', supra, apartado 2.1.
ss.).
78. V., supra, aparrado 2.2.
11.2 113
tDtvtDUALtzAcrN DE
114 115
DtvtDUALtzAcrN DE
indeterminacin con el que las normas individualizan los hechos a los Del mismo modo, y sustancialmente por las mismas razones' debe
que se refieren88. As, puede haber hechos "simples" o "complejos,, descartarse que exista una definicin o descripcin de un hecho que
"individuales" o "colectiyg5", "positivos> o "negativos", y as sucesiva- Dueda denominarse .buena) o <completa> a priori. Toda identificacin
mente, segn los criterios de clasificacin que en cada momento se o enunciacin de un hecho es siempre relativa a los criterios que un
consideren preferibles8e. determinado sujeto usa pararealizafla, de forma que el verdadero pro-
Est claro que estas variaciones y tipologas no se refieren a los blema concierne a la eleccin o al empleo de esos criterios, no a pre-
hechos, entendidos como ocurrencias empricas, sino a las enunciacio- suntas cualidades intrnsecas de la enunciacin y mucho menos de los
nes que versan sobre los hechos. No tiene sentido, por ejemplo, decir sucesos empricos que constituyen su objeto. Toda definicin o des-
que un hecho emprico es simple o complejo, porque slo puede ser cripcin de un hecho es, pues) relativa' convencional o "contextual,,e4,
simple o compleja su descripcin en funcin del grado de analiticidad Derc esto vale para las enunciaciones normativas o, en general' para las
y de precisin de la descripcin y de la extensin del "segmento de calificaciones jurdicas de los hechos, en las que opera un criterio de
realidad" que aqulla identifica y define como "hecho"eo. As, hay "fs- seleccin representado por la relevancia jurdica del hecho. Esto es' del
chos, muy elementales o puntuales, como la pronunciacin de una hecho slo importan los aspectos que corresponden a su respectivo
palabra por parte de un cierto sujeto en un momento determinado, y esquema legal; los otros aspectos, que tambin existen en el mundo
.hechos" muy amplios y complejos, como aos de vida conyugal. Es real, no (existen) en el mundo iurdico simplemente porque "no inte-
obvio, por otra parte, que estas distinciones se refieren a la forma en resan> desde el punto de vista del derechoes.
que el hecho es definido y descrito, no a su realidad emprica. Con En este contexto, debe hacerse una consideracin adicional acetca
mayor razn, vale el mismo discurso cuando las variantes y tipologas de la "verdad de los hechos". Se han visto ya algunos aspectos del pro-
no slrrgen desde el interior de las "descripciones" de los hechos en sen- blemae6 y ms adelante se presentar una posible solucine7. Lo que
tido estricto, sino que dependen del empleo de calificaciones no des- aqu se quiere subrayar es que tampoco las calificaciones en trminos
criptivas, como en el caso de las enunciaciones que implican valoracio- de verdadlfalsedad se aplican, obviamente, a los hechos entendidos
nes o atribuciones de relevancia jurdica. como sucesos del mundo material, sino slo a las enunciaciones que a
No hay, pues, nada "necesario" en ninguna definicin o enuncia- ellos se refieren. Los hechos materiales existen o no existen, pero no
cin de hecho, independientemente del sujeto del que provenga. Todo tiene sentido decir de ellos que son verdaderos o falsos; slo los enun-
enunciado fctico es siempre uno entre muchos enunciados posibles ciados fcticos pueden ser verdaderos, si se refieren a hechos materia-
acerca del mismo hechoel, que es seleccionado y upreferido> respecto les sucedidos, o falsos, si afirman hechos materiales no sucedidos. En
"verdad del hecho" es nicamente una frmula elp-
a los dems enunciados posibles en funcin de elementos del contexto consecuencia, la
en el que es empleadoe2: esto es, depende del sujeto que realiza la enun- tica para referirse a la verdad del enunciado que tiene por objeto un
ciacin (definicin, hiptesis, descripcin, etc.), de los criterios que hecho.
emplea para individualzar el hecho (grado de precisin, presencia o Por otra parte, debe destacarse que la verdad/falsedad no es pro-
ausencia de valoracin o de calificacin jurdicas) y del lenguaje que se piamente predicable de todas las enunciaciones que, en el proceso,
usa (comn o jurdico, vago o preciso, etc.)e3. versan de alguna forma sobre hechos. Por un lado, es necesario en efec-
to considerar que no todas las enunciaciones relativas a hechos van
acompaadas y son caracterzadas por
"pretensiones de verdad"es. El
88. Sobre estos conceptos cf. Luzzati, La uaghezza delle norme, cit., pp. 46 ss., 92
ss.; Guastini, Dalle fonti alle norme, cit., pp. 114 ss.
89. V., infra, apartados 4, 5.1, 5.2, 5.3,
90. Sobre estos problemas v., ms ampliamente, supra, apartado 2. 24. V., supra,captulol,4.3 y, en parricular, Yarga,The Fact and ltsApproach,cir.,
91.. Cf. especialmente Goodman, op. cit., pp. 130 ss. Pp. 369 ss., 371.
92. Y. una vez ms Goodman, op. cit., pp. 132 ss. y 164 ss. ?5. Al ,.rp..ro v., ms ampliamente, infra, apartado 2.4.
93. Esto es as tanto respecto de los enunciados en s mismos como respecto de las :f V., supra, caprulo I, apartados 2 y 4.
razones por las que stos pueden ser distintos. Otra cosa es el problema de la eleccin l/. V., int'ra, caprulos lll y IV.
98. Sobre l" prerensin de verdad correspondiente a actos lingsticos que represen-
entre enunciados diferentes, en cuyo caso puede entrar en iuego el problema de la verdacl .-
tan estados
(v., sobre este punto, supra, captulo I,2.1. y 4.1). d..or", v. Sbis), Linguaggio, ,ogiorr, interazione. Per una teoria pragmatica
1,1.6 117
rDrvtDUALtzActN DEL HEcHo
testigo que describe un hecho sostiene que dice la verdad y con ello ciones lingsticas. No es posible, en
efecto, entender que se refieren a
califica como verdaderas sus propias declaraciones, y lo mismo sucecle ."r"r o.uintot del mundo real y que a esas cosas o eventos se refieren
con el juez que sostiene que ha determinado el hecho. Sin embargo, es Iiffi.^.ion.s como Ia verdad, la determinacin, la complejidad y las
-drmat
discutible si las enunciaciones fcticas realizadas por los abogados tic- que se han mencionado y que sern analizadas en las pginas
nen realmente (pretensiones de verdad", aunque obviamente son pre- ,iguirntr. Es necesario, en cambio, considerar que las expresiones
sentadas como "verdaderasrtt, o si se trata ms bien de hiptesis que ,minrdut se pueden referir nicamente a las enunciaciones aceca
deben someterse a control y confirmacin mediante las pruebas. Por , n..ttor y que slo a nivel de las enunciaciones, y de las modalidades
otra parte, est claro que no tienen "pretensiones de verdad', las deter- .o' lur que stas se refieren a los hechos, tienen sentido aquellas cali-
minaciones fctcas contenidas en las normas, ya que se trata de la ficaciones.
definicin de supuestos de hecho destinados a funcionar como crite- Esto no significa que el problema de los hechos se plantee nica-
rios de seleccin y calificacin, no de afirmaciones acerca de la exis- mente en las enunciaciones que versan sobre hechos o slo en el mbi-
tencia de circunstancias concretas. Por tanto, no se podr hablar de la to de las normas que individualizan hechos, es decir, nicamente en el
verdad de las definiciones normativas de los hechos y, en cambio, s se mbito del lenguaje o de las narraciones, Y 9ue, por tanto, necesaria-
podr hablar de la verdad de los enunciados fcticos que pretenden ser mente deba abandonarse cualquier vinculacin significativa con el
verdaderos en la medida en que, precisamente, se presentan como des- mundo de las ocurrencias empricas' Esta consecuencia podra darse
cripciones verdicas de hechos concretos. slo en el mbito de perspectivas filosficas radicalmente antirrealis-
No todas las enunciaciones relativas a hechos pueden ser verdade- tas, que existen pero que no tienen que ser necesariamente comparti-
ras o falsas, porque no todas son descripciones de hechos. En efecto, la das102. Se trata slo, muy simplemente, de no caer en la trampa del
descripcin es tpicamenfe la enunciacin de un hecho realizada en realismo ingenuo y de no atribuir a los sucesos del mundo real carac-
trminos que implican la referencia a algn criterio de verdad (habi- teres y propiedades que nicamente tienen sentido si se atribuyen a las
tualmente la correspondencia con algn evento del mundo real)100; as enunciaciones acerca de hechos y no a los hechos sobre los que versan
pues, la descripcin puede ser verdadera o falsa en funcin de algrn las enunciaciones. Esto vale en general, pero especialmente cuando se
criterio de verdad. No se puede decir lo mismo de todas las enuncia- habla de enunciaciones que se realizan en el contexto del proceso'
ciones que se refieren a hechos: por ejemplo, un enunciado valorativo
(que exprese la valoracin de un hecho) podr ser fundado o infunda- 2.4. Hechos principales y hechos secundarios.-Las consideraciones
do, compartible o no (en funcin de los valores a los que se refiera), que preceden se han rcalizado con el punto de mira puesto en el pro-
pero no es en s mismo verdadero o falso como s lo es un enunciado blema de cmo se determinan los hechos por parte de las normas'
descriptivolol. . aunque el tema de los enunciados fcticos es mucho ms amplio y re-
Si se toma en cuenta lo dicho resulta bastante evidente que es lcito quiere ulteriores observaciones y distinciones acerca de la definicin
del
hablar de nhechos", de "hechos verdaderoso o de
"verdad de los he- "hechoo en el mbito del proceso.
chos", as como de determinacin o indeterminacin de los hechos, de Entre estas observaciones y distinciones hay una que merece espe-
hechos negativos o positivos, simples o comple;'os, y as sucesivamente, cial atencin no slo porque aparece muy a menudo en los discursos
con la condicin que esas expresiones sean entendidas como abrevia- de los juristas que se ocupan de las pruebas, sino tambin porque revis-
te una importancia fundamental que no se corresponde siempre con
una suficiente claridad de anlisis y de definicin.
Se trata de la distincin que identifica, por una parte' a los hechos
degli atti linguistici, Bologna, 1989, pp. 7 4 s., 104 ss., 1 75 ss., 27 6. Sobre las pretensio- que habitualmente se definen como (principales",
nes de verdad de los hechos narrados en el proceso cf. Jackson, Narratiue Models, cir., p. "jurdicos", "jurdi-
246. Cf . tambin Landowski, op. cit., pp. 51, 57.
camente relevantes> o (constitutivosu (y tambin extintivos, impediti-
99. Queda excluida cualquier pretensin de verdad en las stories narradas por los vos o modificativos), a los efectos de subrayar la funcin jurdica de las
abogados si se tienen en cuanta las tcticas etricas que usan para presentar sus vesiones ctrcunstancias que se indican en la prtasis de la norma aplicable y eue,
del caso; cf. al respecto Bennett y Feldman, op. cit., pp.93 ss., 116 ss., 150 ss.
100. V., por todos, rVeinberger, op. cit., pp.78 ss., 80-81.
101. Sobre las determinaciones valorarivas de los hechos v., infra, apartado 3. 102. V., supla, caprvlo 1,2.1.
118 119
DtvtDUALtzActN DE
por tanto, representan la condicin o el presupuesto para la verifica- de la controversia' Las respectivas alegaciones
ictora,sitan en la base
cin de los efectos jurdicos previstos por la norma. Como se ha visto l,rJ* estar configuradas de distintas formas por las normas que re-
ya, el supuesto de hecho abstracto definido por la norma opera como
,*i^"1^ demanda y la contestacin, de modo que pueden estar previs-
criterio de seleccin, dentro de un conjunto indiferenciado e indefini- l,l"lruot disrintos de precisin y de completud en la indicacin de los
integracio-
do de circunstancias, de los hechos relevantes para ia aplicacin de la i"..or, incluso en funcin de la posibilidad o exclusin de
No hay duda, sin embargo, de que las alegaciones es-
norma1o3. n!, ,urrriu"rl07.
El otro cuerno de la distincin est constituido por los hechos que r" constituidas por una serie ms o menos amplia
ilir cualquier.caso,
je enun.iados relativos a circunstancias de hecho que afirman la ver-
habitualmente se denominan "secundarios, o "simples", que se distin-
presu-
guen de los hechos principales en la medida en que no reciben califica- J"d o fdr.d"d de los mismos108. El conjunto de esos enunciados
cin jurdica alguna. Estos hechos adquieren significado en el proceso i.,.r. uru situacin de hecho y selecciona algunos aspectos de la misma
slo si de ellos se puede extraer algn argumento acerca de la verdad Ir. h, partes consideran relevantes; obviamente, la situacin de he-
o falsedad de un enunciado sobre un hecho principal. Jho no s descrita completamente por aquel conjunto (lo que, adems
Esta distincin es un lugar comn muy difundidol0a que resulta til e inr...r".io. resultara imposible), pero s es individualizada -de
a propsito de diversos problemas, como, por ejemplo, los que se re- forma ms o menos sumaria y parcial- scbre la base de algunos de sus
fieren a la relevancia de los medios de pruebal0s. Sin embargo, aunque aspectos que se consideran importantes.
no carece de fundamento, es una distincin que implica una simplificr- A pesar de la genericidad y las lagunas que puede presentar, esta
cin importante de los problemas que afectan a la identificacin del individualizacin del "hecho, sirve' en cualquier caso (al menos ten-
hecho. dencialmente), para conjeturar la aplicabilidad de una norma al caso
En realidad, si se observa cmo el hecho se identifica en el mbito concreto. Esto es lo que realzan las partes en sus alegaciones (hacien-
del proceso es fcil constatar que la distincin entre hechos principales do eventualmente referencia a normas distintas) y lo que realiza el juez
y hechos secundarios no est siempre claray, en cualquier caso, repre- en el momento en que suele decirse- determina el nomen
-como
iuris cotecto a atribuir a la relacin controvertida.
senta nicamente un aspecto de un problema ms complejor06.
El punto de partida est normalmente representado por la indivi- Se ponen as en evidencia dos *tipos" de hecho: el primer tipo est
dualizacin de una "situacin de hecho" que las partes, en especial la representado por las circunstancias del mundo material sobre las que
versan las alegaciones; el segundo tipo est representado por el "su-
puesto de hecho, delineado por la norma que se conjetura aplicable.
103. V., supra, apartado 2.1. El primer tipo de .hechoo consta de enunciados que versan sobre even-
104. Entre las muchas referencias que se podran sealar al respecto, v., en particu- tos concretos y particulares que se sostiene que han ocurrido con cier-
lar, Chiovenda, Principii di diritto processuale ciuile,Napoli, reed. 1965, p. 266 [tr. casL.,
Principios de derecho procesal ciuil, a cargo de J. Casais, Madrid, L977, r. I, pp. 33-5-
tas modalidades materiales. El segundo tipo de "hecho" consta de una
3361; Carnelutti, La proua ciuile,Roma,21947,pp. 16 n.2, 154 ss.,237 ss. [tr. cast., Lir
identificacin rcalizada en trminos generales, es decir, referida a una
prueba ciuil, a cargo de N. Alcal-Zamora, Buenos Aires, 1982, pp. 9 n. 10, 130 ss., 202 clase o categora de hechos: se trata de un criterio de atribucin de
ss.l; Grasso, La pronuncia d'ufficio, Milano, 1967, pp.367 ss.; Cappelletti, La testimo- relevancia jurdica y, por tanto, de seleccin de las circunstancias fc-
nianza della parte nel sistema dell'oralit, Ml\ano, reed.7974,I, pp. 342 ss.; Taruffo,
Studi sulla rileuanza della proua, cit., pp. 26 ss.,39 ss.; Id., Nore in tema di giudizio di
fatto, cit., p. 40. 107. Todo ello remitc a un tema extremadamente complejo que no puede ser afron-
La distincin examinada equivale a la que se traza en la doctrina del common lau' tado aqu: la naturaleza y los requisitos de las alegaciones de los hechos en la demanda y
entre material (o primary o ultitnate) facts y euidentary o secondary o circumstafiil ta contestacin,
as como sus efectos y el eventual rgimen cle preclusiones relativas a
facts.Esta distincin es tambin un lugar comn muy difundido sobre el que puede versc, aquellas alegaciones.
por ejemplo, Jackson, Questions of Fact, cit., pp. 88 ss.; Lempert y Saltzburg, A Modertt Sobe la funcin de la alegacin de los hechos v., entre lo ms re-
lente' Comoglio, Allegazione, en Digesto delle discipline priuatistiche. Sez. Ciuile, vol.I,
Approach to Euidence, St. Paul, Minn., 1977, pp. 1.41. ss.; Rothstein, Euidence. State dnd rortno, 1987, pp.272 ss. Cf. adems, Cerino Canova, Cotnmento agl artt. 163-174
Federal Rules, St. Paul, Minn., 1981, pp. 3 ss. cod' proc. ciu.,
105. V., por ejemplo, Taruffo, Studi, cit., pp. 23 ss., 27 ss.,52 ss. en Commentario al Codice di procedurn Ciuile dirigido por E. Allorio,
2'1, p. 277 de la separata, e ld., La domanda giudiziale e il suo contenuto' iui, pp.
106. No se realizar aqu un anlisis de las vicisitudes del "hecho" en el proceso. Sc i'l':
tz7^s. de la
separata; Cappelletti, op. cit., I, pp. 48 ss., 77 ss.,318 ss.,339 ss.
mencionarn sintticamente, en cambio, algunos aspectos que permiten mostrar los con- tt'tu. C[ Comoglio, op. cit., p. 274.
tornos problemticos de la distincin en cuestin.
120 121
&
LA INDlvlDUALlzAclN DEL
il'?il:'r*'.t]li{i:hi{:'fu 'mtrl*.m:T"'',*
fflr":;:.^"men .
Este criterio de seleccin es aplicado por el juez
.al conjunto ds
enunciados relativos a los hechos empricos que consriruy.n t .unr.- i:TA'd"; raso segn criterios de utilidad y significacin'
nido de las alegaciones inicialesl0e. puede suceder qr-r. .rt" .p.r..ion ''Docnectoaesteconjuntoindeterminadoyeventualdecircunstan-
funcionar a su vez co-
no produzca resultados, es decir, que ninguna.circunstancio
,. -,""-'1" fi"uresis sobre el hecho principal.puede
corresponda con la definicin general contenida en la norma, "i.gri, du",
)i,i'li^ de seleccin. Es decir, puede suceder que entre las cir-
i,,
caso' aquella norma no es aplicable a esa situacin de hecho y ,.rult."*. f#;;; Je la situacin haya algunas que, una vez conocidas o
necesario conjeturar la aplicacin de otra norma. En cambio, si aqrrella como verdaderas, puedan ser empleadas como premisas
ilrrrri"""s
operacin tiene resultados positivos, significa que en la situacitin
gada existen hechos jurdicamente relevantes segn aquella norma.
ale_
se *:,li**;n:ffi :it'j::[:;r;:3;; jl'ff ::f ':"fi::J''ii
trata, precisamente, de los hechos principales de los que se ha hablaclo ffi;rt;itqrr. .rr. hecho exista, por medio de los criterios de for-
(o bien, inversamente' supuesta una
anteriormente ,tuf".iO" de posibles inferencias
110.
En realidad, se trata slo de conieturas acerca de la situacirin de se trata de ver si existe una posible inferencia que con-
iir.onrtu.r.i"
Si la seleccin tiene
hecho y de la posible aplicacin de una norma a esa situacin: los he- .i"'i.i."do algo sobre el hecho principal). una circunstancia de
chos concretos son nicamente alegados, es decir, .afirmados, como il; ;;;"il"do psitivo, se habr identificado
verdaderos, pero no han sido todava <determinados> como verclade- ff;; ;,;. ;. r lgicamente releuante para la determinacin del hecho
para la
ros. Las operaciones recin descritas son tiles precisamente para csra- ori.r.ipul Y 9ue' por tanto, podr sei usada como elemento
Las circunstancias de hecho que
blecer qu hechos deben ser probados en juicio para que la ctntrover- ;;;;b; in.rn.i"i de este liimo'13.
denominan 5sgudis5". Res-
sia pueda ser decidida segn aquella norma especfica. Dresentan esas caractersticas se "hechos
En un primer sentido, entonces, el
"hecho principal, equivale, en
pr.to d. ellas, debe observarse que se trata de una categora que es
realidad, a la conjetura de que en la situacin alegad hay circunstan- io-ogrr." so negatiuamente' es decir, nicamente en la medida en
cias potencialmente idneas para producir los efectos previstos por la qu. .J-p..rrde heJhos no principales: a ese nivel, en efecto, queda
norma que se ha usado como criterio de seleccin y calificacin. indet.r-inado el tipo de inferencia que califica al hecho secundario
En un segundo sentido, el como posible eleme.tto de prueba. Qued", pues' entre parntesis la
"hs.. principal" equivale a la conjctu-
ra verificada, es decir, a la situacin que se obtiene como resultado cie posible uariedad de los hechos secundarios, que puede determinarse,
la decisin cuando ese hecho est probado (esto es, cuando la corrcs- por ejemplo, en funcin de la diversa incidencia que stos pueden
pondiente afirmacin est confirmada por las pruebas). En ese senticlo, t.n.r'robr. u prrr.b" del hecho principal (es decir, en funcin de la
el hecho principal opera como presupuesto de ia decisin en el derecho. distinta eficacia probatoria de esos hechos, que) a su vez' est..vincula-
Planteado el hecho principal como hiptesis de decisin a verificar da con los distinios tipos de inferencias probatorias que aqullos per-
mediante las pruebas, la atencin puede volverse hacia las otras cir- miten formular).
que-se inclu-
cunstancias que componen la situacin alegada o que, de algn modo, Queda an una ulterior cate1ora de 'hechos', en la
estn vinculadas con ella. Esas circunstancias no pueden sei analtic- y.n tdu, aquellas circunstancias que pertenecen emprica o histrica-
mente predeterminadas, ni son tampoco predererminables, ya que nirr- mente a la situacin de hecho conirovertida, pero que la base
-sobre
de los criterios aplicados- resultan jurdica o lgicamente irrelevan-
tes, dado que no integran ningn hecho principal y tampoco resultan
109. Pueden verse anlisis detallados de este aspecto del juicio en Hruschka, op. rll.,
pp. 46 ss., 58 ss.; Holdcrofr, op. cit., pp. 127 ss.; Zuckerman Releuance in Legal procee-
,
dings,enFacts inLatu,cit., pp. 145 ss. V. tambin Taruffo, Studi,cit.,pp.46 ss.,52 ss.;
Yarga,The Mental Transformation, cit., pp. 63 ss.; rd., The Non-cogniti)i charac'ter, ctr., 111' V., suPra, apartados 2-l Y 2.3.
pp. 6 ss.
112. Soire'la .rrru.ru.u lgica y la tipologa de estas inferencias v., ms ampliamente'
infra, capitulo III, 3 y 4; captulo Y,2, 3 y 4.
110. Sobe las modalidades de deteminacin de la relevancia jurdica del hecho r,.,
ms ampliamente, supra, apartado 2.1, adems de las referencias indicadas en la nor 113. Sobrel^'..1u"n.i"lOgicacf.Taruffo,Studi'cit',pp'23ss',54ss', 128ss''163
ss', 247 ss.; Pizzi, op. cil., pp. 13 ss.
precedente,
t22 123
EL HECHO DtvlDUAttzAclN DEL HEcHo
tiles a los efectos probatorios que caracrerizan el hecho secundario. clel hechol15. Las tesis del actor y del demandado
--"ns) del problema
*llil"
Precisamente porque son irrelevantes, estas circunstancias no
e56n in sir no slo por ser de signo opuesto acerca de la misma
destinadas a desarrollar papel alguno en la decisin de la controversia
ryfi; J. lor"h".hos y de las normas aplicables, sino tambin -como
y, por esta razn, normalmente no son tomadas en cuentaira. :::J; porque cada una de ellas prescnte una versin dis-
En cambio, parece evidente que esta ltima categora de uhechos,, ^menudo- (sobre la base de la misma o de distintas
__
debe ser tomada en cuenta_, al menos, para un anlisis fctico completo
il;;, la siruacin dedehecho
calificacin de los hechos)'
de la controversia. Su irrelevancia, en efectc, es cstrictamente relltiv
i,i]r.rit normativas
""-po, que ninguna
otro lado, tambin es necesario tener en cuenta
a los criterios de relevancia que se usan en el anlisis y en la constrllc- de los hechos, con sus respectivas calificaciones normativas,
versin
cin del (casoD: basta conjeturar la aplicacin de una norma distinta vez por todas' Como puede
a irra ^^ a priori en el proceso y de una
la misma situaci' de hecho para encontrar la posibilidad de gue una l-rrruurtr fcilmente examinando el procedimiento de formacin de
circunstancia que de otro modo era irrelevante pase a ser califi.ada
ia declsit-t, la relacin hecho/norma es compleja y dinmica,. y est
como "hecho principal" o desarrolle el papel de .hecho secundarioo .ui.r" variaciones, ajtlstes y "concreciones> que dependen tambin de
relevante en el plano probatorio. En un cierto sentido, se puede clecir "
ia'lgica interna de esa relacin y de las elecciones que su formulacin
enronces que el conjunto indeterminado y residual de las circunsran- implica, adems de la propia dinmica del procesol16.
cias irrelevantes es, en realidad, una especie de .reserva de hechos, Otro tipo de problemas se refiere al hecho de que la clasificacin
potencialmente relevantes, a la que se puede recurrir (o que, en cual- mencionada, y tambin la distincin entre hecho principal/hecho se-
quier caso, entra en juego) en el momento en que se da un cambio en cundario que en ella se incluye' no siempre se presenta (o es aplicabie)
el criterio de reievancia, es decir, en la norma que se usa como sistema de forma clara y completa.
de referencia para el anlisis del caso concreto. Por un lado, puede suceder que el supuesto de hecho abstracto est
Resulta intuitivo, pot otra parte, que la clasificacin que ha siclo indeterminado en uno o ms de los elementos que sirven para calificar
trazada (supuesto de hecho abstracto hecho principal hecl.ro se- en trminos generales el hecho jurdicarnente relevante. Esto no signi-
cundario -- hecho irrelevante) debe ser- entendida en sentido - dinmico fica que la norma no pueda funcionar como criterio de individualiza-
una vez que se sita en el contexto del proceso. Por un lado, en efecro, cin de los .hechos principales", pero implica que io haga a travs de
la clasificacin puede presentarse en distintas versiones y, por txnto, una operacin en la que las elecciones del juez, y tambin las peculia-
con distintos contenidos en cuanto a los hechos calificados como juri ridades de la situacin concreta, tienen un papel mucho mayor respec-
dica y lgicamente irrelevantes, desde el punto de vista del d.l to a los casos en los que la norma determina el supuesto de hecho de
demandado y del juez. En este sentido, se puede decir que la".to.,
iderrifi- forma explcita, clara y completall7.
cacin de los hechos en el proceso deri-a de una suerte de sntesis de Por otro lado, puede suceder que el "hecho principal" est indivi-
las distintas versiones que aqulla puede tener: dado que la versin fi- dualizado slo formalmente pero no en trminos de correspondencia
nal y "dsfiitiva" es aquella que el juez adopta en su ecisin, sra es concreta y efectiva con hechos empricos pertenecientes a la situacin
en realidad ei resultado final de una compleja dinmica que en el curso controvertida. En algunas hiptesis, por ejemplo, el uhecho negativo>
del proceso asume distintos enfoques (en todo o en prte, segn los
115. Al respecto, cf. una vez ms el anlisis de Hruschka, op. cit., Iocc. uht. citt., y
tambin Yarya,The Non-cognitiue Character, cit., pp. 2 ss., 5 ss., y On Judicial Asce1ain-
1'1'4. obsrvese que esta categora puede incluir indistintamente hechos alegados - ment, cit., pp. 63 ss.
no alegados. En cuanto a los hechos alegados, se incluyen en la categora exami'nacl si 116. V., supra, apartado 2.1, tambin para otras referencias.
resultan excluidos del conjunto de los hechos jurdicamente releuaites y tambin clcl 117. El supuesto ms cvidente es aquel en el que hay normas que confienen clusulas
conjunto de los hechos lgicamente relcvantes. Su alegacin produce que estn sujetos rr generales, conceptos indeterminados o estndars. Sobre los problemas dc la decisin en
los.criterios de relevancia, pero esto no es obviamente suficiente prr" .-ortr", qua run esos casos cf. Taruffo, La giustificazione delle decisioni
fondate su standards, en Materiali
ealmente relevantes furdica y lgicamente) para la decisin. En cuanto a los hecios no P.e.r una storia della cuhura giwridica,lgEg. pp. 161 ss.l Vrblewski. Les standards juri-
alegados, al no ser inrroducidos en el proceso quedan tendencialmente .ms all dcl dtques: prohlnes thoriques de Ia legislation et de I'application du drait, en Droit pros'
pectif. Cahiers de Mtbodologie
hoizonte" de los trechos que el juez toma en consideracin; sin embargo, esos hechos Juridique 4, 1988, pp. 847 ss.; Orianne, Les standards et
existen en el mundo de las ocurrencias reales y forman pate en todo caso je la situacin Ies pouuoirs du juge, iui, ppl t:Z rs.; Pinard, Le roit et le fait dans I'application des
de hecho a la que el proceso se refiere. standards, iui, pp. 1.069 ss.
124 12s
DtvrDUALlzAclN DEL HEcHo
o el "hecho complejo" no son determinables directamente como even_ a medida que se aleja de esta hiptesis para afrontar situa-
Aescriptva
tos especficos pertenecientes a la realidad emprica del mismo nrodc)
en que esto sucede para el hecho simple y positivamente determinado. h";:xl1?ti,Tt"il'Ji; pena subrayar que lo que resulta excluido por
En estos casos, el hecho jurdicamente relevante es nicamente inclivi_ ,^ de los criterios de relevancia jurdica y lgica tampoco es,
dualizable (al menos en parte) como esquema formal, como enur.rcia_ ".1i.".in
'!.'r-^liua, absolutamente indiferente respecto del proceso. Por un
cin no directamente descriptiva de ur-r correlato emprico especfico. dicho, circunstancias irrelevantes pueden conver-
El hecho principal es individualizado ms bien realizando una espccie
i"i", ."-" ya se hacuando por alguna razn cambia el criterio median-
l?r".|'.n relevantes
de sntesis entre el supuesro de hecho abstracro definido pot l" nlrma establece la relevancia. Dado que estos criterios son dis-
en trminos generales y las consecuencias derivables de otros heciros
;; ;"r se versiones del 'cason que surgen en el proceso y
;;;r'r" las diversas
que pueden ser asumidas como premisa: se podr decir que el l-recl-ro adems, variar dentro de la misma perspectiva respecto de la
principal (existe), incluso si no es, en realidad, un evento concrero ""..n, irrelevantes
fJn,rourrtiu, resulta que la cate1oria de las circunstancias
empricamente determinado, si, y en la medida en que, esas premisas y de ninguna manera (vaca>' Por otro lado,
;;;r" categora.mvil'
se correspondan con el esquema abstracto de la normarr8.
iambin hay que tener en cuenta que forman parte de esta categora
En casos de esre tipo la distincin elemental enrre hecho principal nu-a.or", circunstancias que no Son irrelevantes porque carezcan de
y hecho secundario entra en crisis y puede acabar resultando ms nio- inters para el caso, sino slo porque (y en la medida en que) son con-
lesta que til. <El evento que no est determinado por la norma pero sideradas como presupuestos obvios y no discutidos o como asuncio-
est sujeto a la valoracin que aqulla prev (por ejemplo un hecho X, nes de fondo que se sitan en elbackground de los hechos que estn en
definido como contrario a las buenas costumbres) es un hecho princi- discusin. As, por ejemplo, aunque en el momento y en el lugar en
pal o secundario? Probablemente se definir como principal, porcue que ocurri un evento haba temperatura' puede suceder que sta sea
es objeto de prueba y no sirve para probar otro hecho, pero entonces iirelevante. Que esto sea as quiere decir simplemente que se presume
estamos ante un hecho principal que no es directamente calificaclo que la temperatura era .normalo y que no incidi de ningn modo en
como tal por una norma1le. ilos eventos que constituyen el inicio y el la ocurrencia del evento. Sin embargo, basta poner en duda una de estas
fin de los veinte aos de posesin de un bien son hechos principaies o asunciones implcitas para volver problemtica, y por tanto relevante,
secundarios? iSon principales, en la medida en que son *partes, del la circunstancia en cuestin.
supuesto de hecho posesorio, o secundarios, en cuanto que a partir cle Del mismo modo, hay muchas premisas generales implcitas que se
ellos se puede derivar la duracin intermedia de la posesin, o son sitan decirlo 5i- qs el fondo" de los hechos relevantes y que
ambas cosas (es decir, en realidad, ninguna de ellas)? Del mismo modo, -porpor tanto, directamente en la reconstruccin del supuesto
no entran,
iel dao sufrido por algunos sujetos a causa de un evento desastroso'r0 de hecho aunque estn en la base del mismo. Se trata de cuestiones de
forma parte del "hecho principal" o es tambin un hecho secundario, la naturaleza ms variada, como las que se refieren a la existencia y a
porque sirve para probar el hecho principal, o ms bien es la continuidad del mundo fsico y la posibilidad de percibirlo, la "nor-
"principal"
para algunos sujetos y .secundario, para otros? malidad" de los comportamientos ms diversos, nociones arquetpicas
La ejemplificacin podra continuar, pero estos pocos supuesros reladvas a los ms diversos objetos, etc.r21. As, se consideran circuns-
son probablemente suficientes para mostrar que tambin Ia distincin tancias irrelevantes muchsimos factores cognoscitivos, conceptos, no-
tradicional entre hecho principal y hecho secundario es en realidacl ciones y perspectivas culturales que, en realidad, son indispensables
"en pri-
aplicable slo si se parte de la hiptesis del hecho simple, clara y posi- para cualquier reconstruccin de un hecho pero que no estn
tivamente determinado; en cambio, pierde toda eficacia heurstica y mer planoo nicamente porque (y en la medida en que) no se ponen en
discusin. Se trata de lo que podramos denominar el contexto implG
cito de la reconstruccin del hecho, que determina su modalidad y
presupuestos incluso si no es explicitado y problematizado. Esto mues-
118. V., nfra, apartado 5.3.
11.9. Sobre los hechos valorativamenre determinados y sus respectivos problemas v.,
infra, aparrado 3. .
121. Sobre el papel de esras conjeturas sobre la realidad v. Villa. Teorie della scienza
120. Paa este supuesro de "hecho colectivo" v., infra, apattado 5.2. gturidica, cir., pp. 207 ss.
126 1,27
EL HECHO LA lDENTlFlcAclN vALoRATIvA DEL HEcHo
tra, por si an fuera necesario hacerlo, que la nocin de relevancia y, de un hecho en el sentido propio del trmino' Postu-
simple existencia
especialmente, la de irrelevancia, son intrnsecamente relativas y varia- t-- pn reahdad,Ia existencia de hechos, comportamientos o. estados
tj':^.r,
bles en funcin de cmo se define la naturaleza y el horizonte del tro- i.idan, la conducta, la administracin, la convivencia),-pero
No
blema de la determinacin del hecho en el proceso. :,"";i;; ,u ,.t.uun.ia jurdica al resultado de una valoracinl2s.
., ,.l.u"nte sino slo el dao "grave"; no importa la
3. La identificacin ualoratiua del hecho.-Una de las formas ms inr-
:ffil;r-;"no
il"j""r.t" por s misma, sino su carcter de nintolerable", etc.
portantes de individualizar eI hecho por parte de las normas consisre, hecho al que la norma
En casos como estos' decir que existe.el
para usar la definicin de \Wrbiewski, que ha analizado particularme- determinadas consecuencias jurdicas significa realizar una
i. .rt" fenmeno, en la .identificacin valorativa,' del hecho122. tt" ,. ^rrru*
l"rr.L.io" compleia,ya que, en realidad, est formada de dos enun-
produce cuando la prtasis de la norma no se define usando trmil.ros un" de ellas afirma que el hecho ha ocurrido, la otra, que
ufcticos), o no slo mediante estos trminos, sino
#'i;t'
"descriptivos" o ,fi;;h; riene un cierto valor iegn un apropiado criterio de valora-
apoyndose en el uso de trminos nvalorativos". un cierto
,i";". As, por ejemplo, una afirma que se ha producido
Esto presupone evidentemente que se acepta la discutida distincin grave'
dafio, y otra que ese dao
-"--;"
es
entre hecho y valor y, por tanto, entre descripcin y valoracin, no distincin riene una importancia decisiva desde el punto de
slo en el plano ontolgico sino tambin en el lgico y el lingsticorI. uir," . la individualizacin de aquello que constituye el objeto de la
Las razones para aceptar esta distincin (y los argumentos para recha- ,..r.u". Si es verdad que la prueba versa sobre hechos, esto significa
zarla) no pueden ser discutidas aqu, aunque slo sea porque se trata lu.. .n realidad, tiende a esrablecer la verdad o falsedad de proposi-
de un problema que va mucho ms all de los obietivos de este anii- on., que describen hechosl27; pero esto significa tambin que no
sis12a. En todo caso, puede ser empleada como instrumento heurstic,t, puede establecer o .demostrar> juicios de valor acerca de hechos. Cier-
es decir, a los efectos de destacar algunas peculiaridades de una fortna tamente, una cosa es probar que el hecho (el .dao,,) se ha producido
particular de individualizacin del "hecho,. realmente y otra es establecer que se trata de un dao grave'
La forma ms elemental mediante la que una norma determina En otras palabras' slo puede ser objeto de prueba la enunciacin
valorativamente un hecho consiste en no configurario como ;'urdica- descriptiua referida a la existencia de una determinada ocurrencia, no
mente relevante en s mismo, sino slo en la medida en que se site en as la enunci aci6n ualoratiua que califica esa ocurrencia de una deter-
un contexto o indeterminado- de valores. La relevall- minada forma.
-determinado
cia jurdica del hecho depende esencialmente de su valoracin, como Aquello que puede y debe ser probado es que' en determinadas
sucede, por ejemplo, cuando se habla de udao grave>, de "justa cau- circunstancias, se-ha producido un dao; adems, dado que la.valora-
sr, de .conducta reprobable", de "administracin correcta>) de "con- cin requerida por la norma es de tipo cuantitativo' puede y debe ser
vivencia intolerable", etc. probad el -onto del dao' Por decirlo as, el objeto de prueba es la
Resulta fcil sealar, frente a normas que vinculan consecuencias base emprica de Ia valoracin conjeturada por la norma' es decir, el
jurdicas a .hechos, as definidos, que postulan algo ms que la pura v ohecho materialo que no ha sido an sometido a valoracin. Para po-
der decir que se ha producido un dao grave es necesario establecer (y
ste es un problema de prueba) que Ticio ha sufrido en el caso en cues-
1.22. Cf., principalmente, llrblewski, Facts in Law, en ld., Meaning and Truth, cit.,
pp. 108 ss. Sobe la incidencia de los juicios de valor en la determinacin del hecho v. tin un do de 1.000128; y siendo ste el uhecho' probado, el juez
tanrbin Taruffo, Value ludgments in the Judgtnent of Fact, en Archiuium Juridicum Crd-
couiense XVI, 1985, pp. 45 ss.
123. Para una reformulacin del problema cf. Putnam, Rnzn, uerdad e historia, cir., 125. Cf. Wrblewski, op. ub. cit., pp. 112 s.
pp. 1,32 ss., 199 ss. ld., Realismo e relatiuismo concettudle: il problema del fatto e del 1'26. Cf. '$trblewski, i1d..
ualore, en Liuelli di reabd, cit., pp. 39 ss. 1'27- v', suPra, aparrado 2.3.
lZ4. Es suficiente aqu con adherirse a las argumentaciones desarroladas por Scarpe- 128. Obviamente, tambin la determinacin monetaria de la cantidad del dao im-
l|i en Etica senza ueriti, Bologna, 1982, especialmente pp. 97 ss., 1 15 ss. Cf. en cualquier plica una valoracin segn una determinada escala de valores. La cantidad en cuestin
puede considerarse, nJobstante, oobietivamente determinad,, l menos a los efectos
caso tambin Carcaterra, Il problema della fallacia naturalistica, Milano, 1969,y, enve
lo ms reciente, sobre la "gran divisin", la sntesis de Jori y Pintore, Manuale di teori del discurso que se desarrolla en el texto, ya sea porque puede ser el resultado de pa-
generale del diritto, Torino, 1988, pp. 154 ss. rmetros ..l"riu"rn.nr. fijos (como. por ejemplo, los ndices ISTAT para la desvaloriza-
t28 1.29
I
&
LA IDENTI
130 t37
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LA IDENTIFICACIN VALORATIV/
la1
132 I -)-)
Fl LA tDENTtFtcActN vALoRATtvA DEL HEcHo
134 135
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LA lDENTlFlcAclN vALoRATIvA DEL HEcHo
1.37
t36
EL HECHO
Itr.cast., La carga de la prueba, a cargo de S. Sents Melendo, Bogot, 1989, pp. 31 ss.,
t ss.-). Sin embargo, no es ste el punto de vista que ms interesa aqu: en este punto
146. Sobre las modalidades de identificacin negativa del hecho cf. 'Slrblewski, Facls se trata, en realidad,
de anlizar los problemas que afectan a las modalides de prueba del
in Law, cit., pp. 115 ss., donde se especifica que ese tipo de identificacin puede afecrrr necho identificado en trminos negativos, independientemente del sujeto que fun-
a hechos individualizados descriptivamente o bien en rrminos valoarivos. cin del caso- renga Ia carga de probarlo. -en
147. Cf. \7rblewski, op. uh. cit., p. 1.16. 152. La nica diferencia entre las dos hiptesis es que el actor deber, en todo caso,
148. V., por ejemplo, el caso decidido por la Cass. 10 de marzo de 1986 n." 1614, en Probar el hecho negativo (salvo presunciones o inueriiones de la carga de la prueba),
N.G.C.C., 1986, pp.598 ss., con una nota de Dondi. mtentras que el demandado, si el actor fracasa cn probar el hecho positivo, puede evitar
L49. Cf. I7rblewski, op. y loc. uh. cit. ra Prueba
de su negacin.
138 139
incompatibre')o,",',-r-,,.,r),'*)0,;;:.'.
mo puede suceder, por ejemplo, con comportamientos omisivos preci- que ste no es,el meca-
resumen: se puede probar
samente individualizados. nirrno'. la coaftada, sino su contrario). En
No obstante, muy a menudo no se dan esas posibilidades. Enton- i')-farcrdad del hecho identificado negativamente si se demuestra que,
ces, la prueba del hecho negativo puede ofrecerse nicamente media- Jn'realidad, el hecho negado se ha producido o si se demuestra un
Es falso que Ticio nunca
te el mecanismo lgico de la coartada, es decir, mediante la prueba de l-echo positivo incompatible con la negacin.
un hecho distinto, incompatible con la existencia del hecho que se nie- liy^ ,rt^a" en el lugar L si se demuesrra qe una uez estyo all; es
ga. Si la ausencia de Ticio del lugar L en el momento 7 no puede ser qu. Ticio no sea propierario de terreno alguno en ningn lugar
i"iro
demostrada directamente, podr ser probada indirectarnente demos- ,i ," di-,t.ttra que es propietario de un terreno en el lugar L, etc-
trando que Ticio en ese mismo momento estaba en el lugar P. A los teta,
efectos de la prueba, pues, el hecho negativo no es ms que la conse- Por otra parte, frente a situaciones de este tipo es necesario poner
cuencia lgica de la demostracin de un hecho positivo incompatible de manifiesto que el problema de la incertidumbre del hecho se re-
con la existencia del hecho negado153. suelve en trminos de prueba nicamente en una de las dos hiptesis
El problema del hecho negativo resulta mucho ms complejo cuiln- lgicamente posibles. Supongamos que el problema sea establecer que
to ms vagas e indeterminadas son sus coordenadas espacio-tempora- Tio no es propietario de terreno alguno en ningn lugar. La incer-
les, como por ejemplo cuando se trata de no ser propietarios de urr tidumbre se resuelve en sentido contrario si se ofrece la prueba de que
terreno en lugar alguno o bien de no haber realizado nunca cierta de- Ticio es propietario de un terreno en el lugar L: la prueba de un
claracin o desarrollado cierta actividadl5a. hecho positivo incompatible conlleva la determinacin negativa
En casos de este tipo es muy improbable que funcione la tcnica de del hecho negativo. Pero si no se ofrece esa prueba, no hay otra
la coartada, ya que no es fcil imaginar hechos incompatibles con l.re- forma de resolver mediante pruebas la incertidumbre sobre el hecho
chos indeterminados en el tiempo ylo en el espacio si no es en formt negativo; podr resolverse de otro modo, por ejemplo' si las normas
de aproximacin genrica y no rigurosa. Por otra parte, la nica posi- en -ateti" de carga de la prueba endosan a la otra parte la carga de
bilidad de probar directamente hechos negativos indeterminados pare- probar el hecho positivo incompatible y, a falta de cumplimiento de
ce ser la de utilizar declaraciones del sujeto al que aqullos son atribui- esa carga, comportan la victoria de la parte que debera haber demos-
dos (nnunca he dicho e...,, (nunca he hecho..."). No parece, en trado el hecho identificado negativamente. Es decir, estaramos ante
efecto, que se pueda configurar al respecto una prueba testifical acep- un esquema del siguiente tipo: por hiptesis, Ticio debera demostrar
table ("S que Ticio nunca ha dicho...", "s que Ticio nunca ha he- que no-X, pero en realidad la ley endos a a Cayo Ia carga de demostrar
cho...r) ni mucho menos algn tipo de prueba documental. X. Si se obtiene la prueba de X, la incertidumbre se resuelve a favor de
Por tanto, en muchos casos el hecho negativo indeterminado no Cayo sobre la base de la prueba; si no se obtiene la prueba de X, la
puede ser probado ni directa ni indirectamentelss. En estos casos, slo incertidumbre se resuelve a favor de Ticio sobre la base de la regla de
puede resolverse la incertidumbre de la situacin de hecho de la qr're la carga de la prueba.
depende la aplicacin de la norma recurriendo a mecanismos distintos Por otra parte, est claro que en ambas situaciones la incertidum-
de la prueba del hecho negativo. Se trata, esencialmente, de dar la bre sobre Ia existencia del hecho identificado negativamente se resuel-
ve sin que ese hecho sea probado directamente' del mismo modo que
vuelta al problema para plantearlo en trminos de un hecho positivtr
en el caso de la coartada la determinacin del hecho negativo es slo la
consecuencia de la prueba de un hecho incompatible con el hecho que
153. Sobre la mayor facilidad de la prueba en este caso cf. Micheli, op. cit', p.298 se niega.
[tr. cast., op. cit., p. 264]; Patti, op. cit., pp.53 ss. Sobre la hiptesis de la incompatibi- La identificacin negativa del hecho pone' pues, en evidencia los
lidad entre hechos, v. captulo IV, 1.3. distintos mecanismos que pueden usarse para resolver la incertidum-
154. V., supra,nora149.Y^M^tt"oPescatore (enLalogicadeldiritto.Frdmmeitli
bre del hecho a cuya negcin se vinculan ciertos efectos jurdicos'
dottrina e di giurisprudenza,Torino,2lS83, pp. 100 ss.) destacaba las notables dificulta-
des que surgen cuando se trata de probar las denominadas "negativas indeterminadas", cs . Algunas veces, el hecho negativo puede ser directamente objeto
de prueba. Otras, Ia decisin sobre el hecho negativo se deriva de la
decir, precisamente, aserciones negativas genricas, carentes de un objeto exactamentc
individualizado. aplicacin de reglas que prevn las consecuencias de la falta de prueba
155. Cf. Dondi, en la nota cit., pp. 602 s.; Pescatore, op. cit., loc. cit.
140 141
tu
,LGUNOS TIPOS DE HECHO
del hecho positivo correspondiente. En otras ocasiones, la incertidr.rm- . Algunos tipos de hecho.-La doctrina
jurdica ha intentado desde siem-
J
bre sobre el hecho negativo se resuelve porque se prueba un l.recho ore Jominar la infinita variedad de supuestos de hecho previstos por las
positivo incompatible con la negacin de un hecho (si se prueba que nor1"r, elaborando las ms diversas distinciones y clasificaciones de los
Ticio es propietario de un terreno en L queda excluido que no se uhechos jurdicos" en funcin de las caractersticas que en cada caso
propietario de ningn terreno). Finalmente, la incertidumbre sobre el han sido consideradas como relevanteslsT. Precisamente por esa razn,
hecho negativo puede resolverse porque se pruebe un hecho positivo a1arte de la extremada variedad de aquellas clasificaciones, no es posi-
incompatible con el hecho negado (caso de la coartada: no es verdad ile realizar aqu un anlisis sistemtico al respecto. Por otro lado, mu-
que Ticio estaba en L en un determinado momento, porque est pro- chos de los puntos de vista que han sido empleados para elaborar tipo-
bado que en ese momento estaba en P). Debe observarse que estas dos logas de los hechos jurdicos no han tomado en consideracin la
ltimas hiptesis no slo no son coincidentes sino que son ms bicn problemtica dela prueba, de forma que no seran de inters alguno en
contrapuestas, en funcin de la distinta relacin que se produce entrc rt. prlnto. Es ms, es casi paradjico que, a pesar de la obvia vincula-
el hecho que en realidad se prueba y el hecho negativo: en la primera cin funcional de la prueba con la demostracin de los hechos jurdicos,
de ellas, en efecto, el resultado de la prueba demuestra un hecho el anlisis tipolgico de stos haya olvidado habitualmente los proble-
incompatible con la negacin deXy, por tanto, conlleva el rechazo de mas relativos a la individualizacn del hecho como objeto de pruebal58.
la tesis que se funda sobre esa negacin; en cambio, en la segunda el No obstante, remediar esta laguna de forma pretendidamente com-
resultado de la prueba demuestra un hecho incompatible con X y, por pleta y sistemtica sera un objetivo casi imposible, ya sea por la infinita
tanto, demuestra la negacin de X y la fundamentacin de la tesis que variedad de los supuestos de hecho regulados por las normas o bien
presupone esa negacin. porque, en todo caso, cualquier criterio de distincin y clasificacin
Por otra parte, aquellas hiptesis presuponen tambin vnculos de que tenga nicamente en cuenta la correlacin entre hecho jurdico y
incompatibilidad cualitativamente distintos entre el hecho que se prue- prueba del hecho sera relativo. Sin embargo) parece oportuno intentar
ba y el hecho identificado negativamente. En el primer caso estarnos abandonar, al menos en parte, elcarcter genrico que a menudo carac-
ante una incompatibilidad lgica: si resulta probado que el hecho X se terizala nocin de "hecho" que se usa para individualizar el objeto de la
ha producido, esto es lgicamente incompatible con cualquier asercin prueba, integrando el anlisis desarrollado en las pginas precedentes
que afirme que X no se ha producido (nunca o bien en las circunstan- con el examen de algunas hiptesis que presentan peculiaridades rele-
cias especficas relevantes en el caso concreto). vantes. Estas hiptesis son, en muchos aspectos) problemticas y sta es
En cambio, en el segundo caso estamos ante una incompatibilidacl la nzn por la que se toman en consideracin. Aunque obviamente
material o emprica: la prueba de la presencia de Ticio en un lugar cn stas no son las nicas hiptesis problemticas) son suficientes para de-
un cierto momento es empricamente incompatible con la presencia de mostrar que es errneo concebir el objeto de Ia prueba como un hecho
Ticio en otro lugar en el mismo momento (pero no hay en ello incom- material simple y bien definido.
patibilidad lgica alguna) y, por tanto, constituye una confirmacin
emprica de su ausenciars6. 5.1. El hecho complefo.-Normalmente, cuando se piensa en el
hecho como objeto de prueba o se esquematizala estructura de la nor-
1,56. Las dificultades lgicas y prcticas de configurar las modalidades de prueba dcl V. al respecto, entre los muchos ejemplos de clasificaciones de hechos juridicos,
^1,57. Teoria
Uarnelutti, generale del diritto, Roma, rl95 l, pp.20 I ss. lhay rr. cast. dc la prime-
hccho negativo han constituido tradicionalmente la iustificacin de la regla negatiua nott
raedicin de esra obra, Teora general del Derecho, a cargo de C. Posada, Madrid, if+t1;
sunt probandd, Sin embargo, esta regla es rechazada casi unnimemente en la docrin
ms reciente, en la medida en que se sostiene que la prueba del hecho negativo, aunquc lalzja, op. cit., pp.944 ss. Crticas eficaces y argumentadas a muchas de las tipologas
nabttuales pueden verse en Maiorca, op. cit.,pp, 1.14 ss,, 120 ss., 125
sea algunas veces difcil, no es 4 priori imposrble. Por ello, los problemas al respecto ss.
deben resolvese en la formacin del convencimiento del juez, pero no constituyen razo- ,.
158. Un ejemplo interesante de esto puede .n.ont."rr. en uno de los mximos estu-
otosos de la prueba
nes suficientes para cambiar el reparto de las cargas de la prueba entre las partes quc Francesco Carnelutti, enlaTeoia generale, analiza la tipologa de los
neclos jurdicosyladelaspruebas (op.cit.,pp.372ss.),peronorelacionalosdostemas;
resulta de la configuracin normativa del supuesto de hecho. En este sentido, v., especial-
cn h Proua
mente, Micheli, op. cit., pp. 298 ss. ciuile analiza la prueba en funcin del hecho (op. cit., pp. 13 ss. casr.,
[tr. cast., op. cit., pp. 264 ss.], y tambin un comer.], oP' cit., pp.7 -rr.
tario en Yerde, L'onere della proua n"l proc"ssb ciuie',apoli, ti+, p. +lS. ss.-), p..o n toma en cuenta la tipologa de los heci-tos iurdicos.
142 143
--
ma individualizando la prtasis referida al hecho, se asume como mo- Pero, como ya se ha mencionado, en muchos casos estn presentes
delo un tipo de hecho simple constituido por un evento concreto pre- ambos factores de complejidad. Esto es lo que sucede en los frecuentes
cisamente situado entre determinadas coordenadas espacio-tempora- lrro, .n los que el "hecho" est constituido, en realidad, por un com-
les. Se est, as, ante el hecho ilcito H sucedido en el momento T y er.r nortamiento (no momentneo sino) prolongado en el tiempo o por una
el lugar L; el contrato C estipulado en TL, etc. Hechos de este ripo lcdvidad o por una situacin que duran en el tiempo. Pinsese, por
son, precisamente por sus propias caractersticas, fcilmente identifica- .irmplo, en el uso de una cosa con la diligencia normal, en la buena fe
bles tanto si se trata de individualzar eI hecho jurdicamente relevante lu e..u.in de un contrato o en la posesin caracterizada por el
sobre la base de la norma como si se trata de definir esa base- "n
anirnus de poseer uti dominus, donde a la duracin se aade la com-
-sobre
las circunstancias especficas destinadas a constituir el objeto de la prue- oleiidad del comportamiento material y del elemento subjetivo. An
ba. En realidad, si se est ante una situacin de hecho concreta bien ms, pins.se en la administracin de una empresa, que es una activi-
determinada, normalmente no es difcil seleccionar aquellos de sus as- dad compleja en s misma adems de articulada en el tiempo. Y pin-
pectos que asumen significado desde el punto de vista de la norma de sese, por ltimo, en la convivencia de los cnyuges o en la educacin
la que se conjetura su aplicabilidad. As pues, es posible definir el he- de los hijos, que son actividades tpicamente compuestas por una mul-
cho jurdicamente relevante, y por tanto el objeto de la prueba, rne- titud de comportamientos distribuidos en el tiempo y vinculados por
diante una o una pocas proposiciones descriptivas del tipo "el hecho H conexiones subjetivas y materiales de la ms variada naturaleza.
se ha producido en Ty L con las modalidades Ml ....... Mn,lse. El problema fundamental que afecta a los hechos complejos, y que
Sin embargo) son muy frecuentes los casos en los que el hecho re- resulta, obviamente, ms grave conforme aumenta su complejidad, pro-
levante parala aplicacin de una norma no puede reducirse a un eve n- viene de que son difcilmente identificables con precisin analtica;
to simple y especfico, bien delimitado en el espacio y en el tiempo, consecuentemente, puede ser muy difcil establecer qu constituye ob-
sino que se trata de un hecho complejol60. Se puede hablar de "hecho jeto de prueba (es decir, qu debe ser probado para que se d la con-
complejo", al menos, en dos sentidos principales, aunque la mayor dicin de aplicacin de la norma). Algunas veces este problema puede
parte de los hechos complejos lo son en ambos sentidos. resolverse o, al menos, su dificultad puede reducirse en alguna medida,
En el primer sentido, es complejo el hecho de que aunque sea iden- sobre la base del supuesto de hecho jurdico al que se reconduce el
tificado de forma simple por la norma aplicable, est compuesto de hecho complejo. En esos casos sucede que frente a una situacin de
distintas .parteso161. Un contrato puede estar constituido por numero- hecho estructuralmente compleja evocada como tal por una norma se
sas clusulas y muchas de ellas pueden ser relevantes en el mismo crso pueden emplear, sin embargo, criterios de seleccin que permiten in-
concreto; un accidente (o un desastre) puede ser muy complejo desde dividualizar algwnos aspectos especficamente relevantes (que como
el punto de vista de la dinmica con la que se ha producido; una nego- tales sern los nicos que debern ser probados)162. As por ejemplo,
ciacin puede ser muy compleja si las posiciones de las partes son rir- para usar un caso ya examinado, el juez de la separacin no tendr que
vergentes y articuladas; compleja puede ser tambin la redaccin de un determinar todos los infinitos comportamientos y eventos que consti-
balance, etctera. tuyen la convivencia de los cnyuges: es suficiente, en cambio, que se
Una segunda dimensin relevante de la complejidad est constitui- prueben algunos eventos o comportamientos, idneos para valorar la
da por la duracin en el tiempo. Por ejemplo, slo la posesin prolor.r- mtolerabilidad de la convivencial63. Del mismc modo, puede no ser
gada por el perodo establecido puede producir la adquisicin de la
propiedad y la faha de ejercicio de un derecho por un tiempo estable-
cido produce la prescripcin. 16'- Algunas veces la seleccin es realizada por la propia norma: se est entonces
^ el mecanismo que se denomina de .simplificacin analitic, del supuesto de hecho,
11te
159. Sobre el esquema del hecho simple descriptiva y positivamente individualizrdo, u.,,"rnbin para ulteriores indicaciones, Verde, op. utt. cit., pp. 181 s.,
l1;to..ro,
cf. $lrblewski, Facts in Law, cit., pp. 1.09, 1.17.
160. En general, sobre la distincin entre hecho simple y hecho complejo, cf. Mior' ,^.t,"' En casos de este tipo, opera algunas veces el criterio de la normalidad, que es-
cit., p. 125.
ca, op. :111e:e
que no se prueba aq,,ello
cottdiano iue ," iru-. como (normal,, por ejemplo el desarrollo
161.. En general, sobre el problema de la "descomposicin de la realidad" v., stt|li|, de la convivenci". y, cambio, se prueba aquello que es "anoimal., por eiem-
Pro los fsqhq5
apartado 2. especficos qre"n
prede.r fundamentar una val,oracin de intoleiabilidad.
144 145
3'
.LGUNOS TIPOS DE HECHO
necesario conocer todos los aspectos de la gestin de una empresa, .6mDoner ese ripo de hecho compleio en una serie de hechos simples,
pudiendo ser suficiente seleccionar los aspectos concretos que identifi-
."Ju u"o de los cuales puede representar un objeto de prueba adecuado.
can el fraude de acreedores o la lesin de los derechos de los socios. A menudo, sin embargo, el problema del hecho complejo no es
Tambin puede no ser necesario establecer todos los detalles de una superable de este modo. El comportamiento que se prolonga en el
complicada relacin contractual si, por ejemplo, se discute acerca de la
validez de una determinada clusula o de un incumplimiento especfi-
,ipo (la posesin por veinte aos, por eiemplo) no puede ser des-
cornpuesto en instantes, sobre cada uno de los cuales verse una
prueba
co en un contrato de prestacin peridica. espe'cfica; lo mismo ocurre en el caso de actividades
(como la educa-
En casos de este tipo, la complejidad intrnseca del hecho perma- cin de los hijos) que no pueden ser descompuestas en actos que pue-
nece, por decirlo as, fuera del problema de Ia prueba: el hecho com- dan probarse uno por uno. Y' sin embargo, el comportamiento o la
plejo est presupuesto y constituye la base o el substrato sobre el que acdvidad son como tales los "hechos relevantes. en situaciones jurdi-
se funda la controversia, pero entran en juego criterios jurdicos de cas determinadas, aunque como tales no puedan ser probados. EI pro-
seleccin en funcin de los cuales slo algunos aspectos relativamente blema del hecho complejo es precisamente ste: o bien, como sucede
simples del hecho complejo son, en realidad, relevantes. El hecho com- en algunos casos, es reducible a hechos simples o bien no puede ser
plejo no slo es materialmente existente fuera del proceso, como cual- probado. Al menos, no puede ser probado con las modalidades y con
quier situacin material no relevante: es evocado por la norma (que, ia precisin con las que habitualmente se prueba el hecho simple.
por ejemplo, se refiere a la convivencia, a la administracin, a las ne- En efecto, frente al hecho irreduciblemente complejo, el problema
gociaciones, al contrato, etc.) que, sin embargo, se interesa nicamente de la prueba se transforma respecto de la situacin unormal,>' porque
por algunos de sus aspectos, a los que atribuye relevancia especfica. slo transformndose puede ser resuelto de algn modo. Esencialmen-
Hay, pues, una suerte de seleccin en dos grados. Por un lado, se indi- te, las soluciones posibles son dos: la primera puede denominarse prue-
vidualiza un hecho o una situacin compleja (la convivencia, la gestin ba por muestreo (proua per campione) y la segunda prueba por falta de
de la empresa), mientras que, por otro, se identifican dentro de ese prueba contraria (proua per mdncanza del contrario). Ambas pueden
contexto algunos aspectos al modelo del hecbo relati- operar por separado o conjunramente.
vamente simple- que son -reconducibles
los nicos que deben ser probados. Se est ante una prueba por muestreo cuando, en realidad, se prue-
En muchos casos, sin embargo, este tipo de "reduccin de la com- ba algn <momento) de un hecho que se prolonga en el tiempo. La
plejidad" no funciona, ya que es relevante jurdicamente el "hecho prueba de los otros momentos no es directamente ofrecida, de forma
complejo" en cuanto tal. As, es la posesin continuada uti dominus lt que se puede decir que el hecho no es
"integralmente, probado; se
que da lugar a la usucapin; es la totalidad de la ejecucin del contrato obtiene slo por extrapolacin de la prueba parcial y de la falta de
la que se debe desarrollar con buena fe; es el uso continuado de la cosa prueba contraria. En el caso de la posesin por veinte aos, por ejem-
el que debe realizarse con la normal diligencia; es la dinmica comple- plo, est claro que no se prueba concretamente cada da de posesin:
ta del accidente o del desastre la que debe ser determinada, etc. en cambio, se prueba que aqulla se daba hace veinte aos y se da to-
Desde el punto de vista de la prueba, es posible superar algunas dava veinte aos despus. Estos (segmentos de tiempo,, conjuntamen-
veces la complejidad no reducible del hecho. Es el caso del hecho qr,re te con la ausencia de demostracin del cese de la posesin durante ese
es complejo porque est compuesto por muchos eventos concretos o perodo, son considerados normalmente suficientes para derivar la
por una dinmica complicada: si los eventos concretos o los distintos prueba de la posesin por veinte aos. As pues, sta no se prueba in-
momentos de la dinmica son identificables (y a menudo lo son segn tegralmente de forma directa: se prueba por extrapolacin, en la me-
los criterios de relevancia habituales), entonces el nico problema es dida en que los <segmentos de tiempo" directamente probados permi-
que habr muchos hechos por probar y, por tanto, muchas pruebas o tan defender la duracin continuada y completa de la posesin16a.
pruebas con objetos mltiples o complejos. En ese caso, pueden surgir
dificultades de tipo procesal, pero en lnea de principio es posible des-
, 164. El legislador italiano ha percibido el problema que aqu se ha planteado a modo
oe ejemplo, previendo drectamente la
"educcin de la complejidd" probatoria del
n:cho constituido por la duracin ininterrumpida
Sobre el criterio de la normalidad v. Chiovenda, Principii, cit., p.789 [tr. cast., Princi- de la posesin. El instrumento em-
pios, cit., t. II, pp. 269-2701 y, en particular, Verde, op. ub. cit., pp. 469 ss. pleado es la
presuncin de la posesin intermedia, previsro cn el artculo I 142 cod. civ.
146 1.47
TLGUNOS TPOS DE HE
Se est ante una prueba por falta de prueba contraria siempre qr.re
vo. aunque obviamente de una forma menos segura, si falta la prueba
la existencia de una determinada situacin de hecho no es directamen-
de'cualqui.r suceso incompatible con la existencia del hecho complejo
te demostrable y es derivada de la falta de prueba de circunstancias en cuestin.
incompatibles con aqu11a165. Por ejemplo, la diligencia normal en el Tanto la prueba por muestreo como la prueba por falta de prueba
uso de una cosa es difcilmente demostrable de forma directa, siendo confiaria son (ms la segunda que la primera) formas "dbiles" de re-
muy improbable que se disponga de testigos de las modalidades con solver la incertidumbre sobre la existencia de hechos cuya complejidad
las que Ticio ha usado la cosa en todas las ocasiones y todo el tiempo
no sea reducible. A menudo, ambas pruebas se usan conjuntamente' lo
en que la cosa ha sido usada. Es, en cambio, ms fcil probar la falta de que permite obviar en alguna medida su debilidad intrnseca. Por otra
la diligencia normal (o la mala fe o la incorreccin), es decir, un hecho ;arrc, parece que resultan inevitables o' en todo caso, es inevitable el
incompatible con el hecho complejo en cuestin, aunque slo sea por- i..urro a tcnicas de prueba incompleta, aproximativa e indirecta, en
que normalmente el hecho incompatible est dado por una o varias los casos no infrecuentes en los que el hecho jurdicamente relevan-
circunstancias identificadas en el tiempo y en el espacio. Algunas veces te es complejo y no se puede descomponer en una serie ms o menos
es el propio legislador quien realiza esa inversin (de forma que, por amplia de hechos simples. Como consecuencia' no slo la complejidad
ejemplo, se deba probar la mala fe y no la buena fe en el proceso)166, Duede ser una caracterstica irreducible del hecho sino que sta impo-
pero en muchas ocasiones sta se produce simplemente por necesidad, ne el planteamiento de la prueba del hecho con exigencias y modalida-
es decir, porque no hay otro modo de resolver la incertidumbre acerca des peculiares.
de la existencia de un hecho complejo que no es susceptible, como tal,
de prueba directa. Esa incertidumbre se resuelve de forma ms segura 5.2. El hecho colectiuo.-Un caso particularmente interesante de
(y obviamente en sentido negativo) si se obtiene la prueba de un hecho hecho complejo se produce cuando la anomala respecto de la idea-
incompatible (por ejemplo la interrupcin por parte del propietario o base de hecho simple no se da en la estructura o en la duracin de la
el cese de la posesin)167. Tambin puede resolverse en sentido positi- situacin de hecho sino en su dimensin swbjetiba. Una de las caracte-
rsticas implcitas en la idea del hecho simple es, en realidad, que ste
se desarrolle tendencialmente nicamente entre las partes o, al menos,
que slo sea relevante aquella parte del hecho que afecte a una o am-
it., segn la cual basta probar la posesin actual y la posesin inicial (en la literature
reciente v. Sacco, en Commentario al codice ciuile, d:.rigido por P. Cendon, vol. III, To- bas partes. Naturalmente, esto no es vlido de forma rigurosa, ya que,
rino, 1991., p. 59 1 ; Cian y Trabucchi, op. cit., p. 7 87). En cualquier caso, siempre que se por un lado, la identificacin de los sujetos que asumen el rol formal
trate de probar la duracin de un situacin y no se disponga de presunciones legales, la de partes depende en amplia medida de las elecciones individuales de
nica posibilidad disponible es la de probar un cierto nmero de momentos de esa dura- esos suietos y no de lanaturaleza de la situacin de hecho que est en
cin a partir de los cuales se pueda deduci su continuidad.
la base de la controversia; y, por otro lado, existen situaciones en las
165. Al respecto, es vlido tambin el ejemplo de la duracin de la posesin. La pre-
suncin de posesin intermedia es, en efecto, iuris tantum y decae en el momento en quc que el hecho relevante para las partes puede producir efectos jurdicos
se prueba lo contrario, es decir, se prueba un hecho que implique la interrupcin de la respecto de sujetos distintos de las partes. La referencia subjetiva a las
posesin. Del mismo modo, la extrapolacin acerca de la duracin, que puede extraerse partes es, en cualquier caso, fuerte y explica fenmenos como los lmi-
razonablemente a partir de la prueba de algunos de sus momentos, rige hasta que se cle- tes subjetivos de la cosa juzgadal68, mientras que la posibilidad de que
muestre lo contrario, es decir, la interrupcin.
1.66. V. el atculo 1747 cod. civ. it. y, al respecto, cf. Sacco, op. cit., p. 596; Cian.v
la situacin controvertida afecte tambin a sujetos distintos est en la
Trabucchi, op. cit., p. 795. Consideraciones anlogas a las que se refieren a la presuncin base de diversas instituciones procesales, como la extensin subjetiva
de posesin intermedia valen tambin para la presuncin de buena fe.
167. No por casualidad, se producen situaciones de este tipo en supuestos de hccho
en los que la ley no se ha enfrentado al problema de la prueba o, en cualquier caso, ste . 168. Paa una interpretacin restrictiva de estos lmites, adems de un anlisis sint-
ttco del problema, v. Monteleone, I limiti soggettiui del giudicato ciuile,Padova,7978,
no es resoluble claramente sobre la base de la norma. Se produce entonces el fenmeno
PP. 26 ss., 107 ss., 155 ss., 164 ss.
de las llamadas presunciones jurisprudenciales (respecto de las que puede verse, amplia-
mente, Verde, op. ult. cit., pp. 35 ss.) en el que es la.jurisprudencia, en lugar del legisla' . El aspecto ms interesante parece ser, sin embargo, el referido al caso en el que los
etectos de la
dor, quien no exige la prueba de un hecho e impone a la contraparte la prueba del hecho cosa iuzgada se extiendan de distintas formas, y por distintas razones, ms
al del mbito
incompatible. A menudo esto sucede, en realidad, cuando es particularmente difcil l subjetivo de las partes: al respecto v., especialmente, Carpi, L'et'ficacia
Kuttra partes,
demostracin de un hecho complejo. della sentenza ciuile,Milano, 1.974, pp.87 ss., 159 ss., 117 ss.
148 149
de los efectos de la cosa juzgada, la intervencin procesal, el litiscon- Ae-las reglas de legitimacin ordinaria o extraordinaria,Ia tipificacin
sorcio o la oposicin de tercero a la cosa juzgada*. r'lor rupu.stos de hecho de intervencin procesal o de litisconsorcio'
realidad, aparecer en
No obstante, debe destacarse que incluso cuando la dimensin sub- inffe otrastTr. El "suieto imprevisto",puede' en
jetiva de la situacin jurdicamente relevante se complica er-r funcir con una intervencin procesal o una oposicin de tercero a la
de aspectos que pueden implicar a terceros, se permanece lo "*rrn^,
cosa juzgada,
pero las posibilidades de que sea realmente "imprevisto"
neral- dentro de mbitos subjetivos limitados y -por porge-lo son absolutamente marginales. Naturalmente, en consecuencia, son
ge-neral- individualizados o individualizables. Por un-siempre
lado, en efeco, tendencialmente irrelevantes los sujetos indeterminados o indetermi-
no es <normal" que una situacin de hecho implique jurdicamente a nables que pueden tericamente estar implicados por la situacin que
un amplio nmero de personas; no por casualidad, la mayor parte cle dalugar a la controversia' pero que permanecen extraos a ella.
los conceptos y de las instituciones del procedimiento civil, en casi Una concatenacin de conceptos y de instituciones de este tipo,
todos los ordenamientos, est basada en el presupuesto ms o menos oue individu aliza una serie de caractersticas estructurales fundamenta-
implcito de que ese proceso tiene que ver con siruaciones que generll- les del proceso civil, presupone precisamente hechos subietivamente
mente implican a pocos sujetos, siendo el ideal que stos sean nica- simples. La consecuencia obvia es que el proceso es apto tendencial-
mente dos y desempeen los papeles cannicos de actor y demanda- mente para seleccionar y determinar hechos de ese tipo, que habitual-
do16e. No es casualidad tampoco que los sistemas tradicionales del menfe son los que ocurren.
proceso civil entren en crisis, o al menos encuentren notables dificulta- Sin embargo, existen tambin, y aumentan progresivamente aun-
des de funcionamiento, cuando la situacin controvertida es multipo- que an no sean habituales, situaciones en las que el hecho no es sub-
lar en lugar de bipolar o bien cuando el nmero de los sujetos interc- jetivamente simple en el sentido definido, ya que implica a muchos
sados supera las pocas unidadesrT0. Por otro lado, el nmero y la sujetos, con dimensiones numricas no reconducibles a la cate1oria
identidad de los su;'etos actual o potencialmente implicados est ten- imprecisa, pero limitada, de los (terceros> o de los "litisconsortes".
dencialmente determinado o es, al menos, determinable: funcionan, en Frente a estas situaciones, la reaccin del sistema procesal, basado
este sentido, instituciones como los lmites subjetivos de la cosa juzga- en las ideas del hecho simple y de la controversia bipolar, consiste
normalmente en limitarse a funcionar iuxta propria principia, es decir,
en provocar la fragmentacin de la situacin que implica muchos suje-
* Se trata de una institucin existente en algunos ordenamientos, como el italiano tos en una serie de controversias bipolares, de modo que cada una de
o el francs, que permite al tercero que puede verse perjudicado por una sentencia reci ellas pueda ser incluida en el esquema subjetivo habitual.
da en un proceso en el que no fue parte oponerse a la misma para que no le afecte la cos As, para usar un ejemplo elemental, si un solo hecho produce da-
juzgada. V. artculos 404 cod. proc. civ. it. y 474 cod. proc. civ. fr. En Espaa, la juri>' os a centenares o millares de personas, se tendrn centenares o milla-
prudencia ha admitido la extensin de la accin pauliana (arr.7177.2 C.C.) para com['.r- res de acciones individuales solicitando el resarcimiento del dafro, cada
tir esos mismos efectos. [N. del T.]
una de las cuales se desarrollar entre dos nicos sujetos: el damnifica-
169. V., en particular, Chayes, The Role of tbe Judge in Public Law Litigation, cn
Haru. L. k 89,1976, pp. 282 ss. do individual y el responsable. Puede suceder que estas acciones, o al-
170. Cf., al respecto, Chayes, op. cit., pp. 7289 ss.; Aldisert, The Role of the CotLrts gunas de ellas, se renan en un mismo proceso, pero sta es una even-
in Contemporary Society, en Un. Pitsb. L. k 34, 1977, pp. 462 ss. Y., adems, Taruffo, tualidad accidental que no afecta al carctef individual y bipolar de las
ll processo ciuile "aduersary" nell'esperienza americana, Padova, 1979, pp. 153 ss., 2-5'1 acciones concretas. Fragmentando as la situacin jurdica en otras tan-
ss., tambin para ulteriores referencias bibliogrficas.
tas situaciones individuales, tambin se elimina la complejidad subje-
Son diversas las situaciones en las que se puede manifestar la cisis del modelo bipo-
lar del proceso: un ejemplo es el de la complex litigation (sobre el que se puede ver, sitr- tiva o, al menos, se elude o esconde: desde el punto de vista de la
tticamente, Taruffo, Diritto processuale ciuile dei paesi anglosassoni, en Digesto tlellc controversia concreta) se olvida que el hecho ha producido daos a
discipline priuatistiche, Sez. Ciuile, VI, Torino, 1989, pp. 400 ss. y, en la amplia litcra- centenares o millares de personas, ya que al actor Ticio le interesa
tura sobre el tema, Marcus y Sherman, Complex Ciuil Litigation, St. Paul, Minn., 1985, nicamente el dao que l mismo ha-sufiido y, por tanto, para l exis-
y Brazil, Hazard y Rjce, Managing Complex Litigation, Chicago, 1983. Otro ejemplo es
el de la public law litigation (sobre el que se puede ver Taruffo, op. ult. cit., pp. 401 ss.;
Chayes, op. cit., pp. 1281 ss.). Un tercer ejemplo muy relevanre es el de las class actions
(sobre el que se puede ver, sintticamente, y para las indicaciones principales, Taruffo, 177. Cf.Denti, La giustizia ciuile. Lezioni introduttiue, Bologna, 1989, p. 1,1,3.
op. uh. cit., pp.403 ss.).
150 151
EL HECHO .LGUNOS TIPOS DE HECHO
te slo aquella <porcin del hecho" que directamente le afecta' Siendcr cen situaciones en las
que el hecho subjetivamente complejo entacomo
cada .orrtrouersia individual, no es necesario probar la efectiva dimen- ioi'r" Aproceso, correspondiendo eventualmente a este ltimo adaptar
sin subjetiva del hecho: es suficiente que se pruebe_ aq_uello que sea ,u, ptopint estructuras a esas nuevas situacioneslTa'
,,.cerari para fundar la demanda de Ticio. Por decirlo de otro modo, bbrri"-.ttt., esta situacin no es simple, lo que se demuestra por
no es importante, y nada cambia, que Ticio sea el nico damnificado o las importantes dificultades que en muchos ordenamientos (y de forma
sea uno entre miles de damnificados por el mismo evento' en el italiano) se oponen a la introduccin de modalidades
Esta modalidad de funcionamiento del proceso' basada esencial- "".tl.otut de rutela de los intereses y de los derechos que derivan de
lili.nr.r
menre en la negacin de la complejidad subjetiva del hecho siempre h..ho, con relevancia supraindividualrTs. Sin embargo, algunas expe-
que ste supere-los limitados esquemas de partes/terceros, ha ido per- ,irn.i"t estn bastante maduras (aunque en absoluto hayan concluido)
i.rrdo su xclusividad en los ltimos tiempos, a partir del momento como para permitir un primer anlisis de los hechos subjetivamente
en que en varios ordenamientos se ha empezado a reconocer
la nece-
compl;jos y de las consecuencias que stos pueden producir en el te-
sid de la turela jurisdiccional de los intereses supraindividuales, con-
rreno probatorio.
siderados en cuanto tales- Ante todo, conviene subrayar que los procesos dirigidos a la tutela
como es sabido, sta es una de las vicisitudes ms interesantes e de bienes e intereses con relevancia supraindividual no siempre impli-
importantes en la evolucin de los ordenamientos modernos, que ha can la identificacin y la prueba de hechos subjetivamente compleios.
,.rlido hasta ahora resultados muy diversos en los distintos sisten.ras y En efecto, puede suceder que esta dimensin del hecho no se presente
que ha implicado veces provocando su crisis- a una gran cantidad en un primer plano o bien que slo sea relevante de forma secundaria.
d.
-a
de la administracin de justicia civil172. Entre los numerosos Tmese, por ejemplo, la tutela del medio ambiente: no hay dudas de
"rp..ro,
urpaa,ot relevantes de este proceso de cambio an en cllrso' uno resulta que la contaminacin de un ro o la destruccin de un paisaje son he-
especialmente interesant. n.rtn sede. Se trata de una suerte de
invcr- .hot qn. tienen una relevancia supraindividual, ya que perjudican el
sin de la incidencia enrre la dimensin subjetiva de la situacin de
inters de grupos o comunidades muy amplias. Este aspecto, de gran
hecho y los esquemas e instituciones procesales. Desde la ptica tradi- importancia social y hasta poltica, no tiene necesariamente, sin em-
cional, como ya ha sido mencionado, esa relacin se produce de forma bargo, relevancia en el proceso desde el punto de vista de la identifica-
que
que el .rq,r." procesal determina la definicin del hecho: dado cin y de la prueba del hecho. Puede suceder tambin que el mbito
ese esquema presupone un hecho simple y bipolar, la situacin concretl subjetivo de la situacin daosa tenga algn inters para otros objetos
es reducida a-hechos simples y bipolares (multiplicando oportunamente como, por ejemplo, la individualizacin de los sujetos legitimados para
las controversias individualei). la inversin se produce cuando,
frente actuar o para intervenir, en la medida en que esa legitimacin puede
a una situacin de hecho que empricamente afecta a muchos sujetos, no ser reconocida a todos los sujetos realmente afectados por el hecho
esta dimensin se mantiene itramovible y se pretende modificar el
eqrri- daoso176; pero la consideracin de la dimensin subjetiva del hecho
librio institucional del proceso de forma que pueda afrontar hechos
subjetivamente complejbs con dimensiones que super.an ampliamente Taruffo, I limiti soggetiui del giudicato e le ,,class actions", en Riu. dir. ptoc., 1969, p.
l, cisic".o.tt.orr.rriu.o' po.", partesl73' En otras palabras, se produ- 619; Yeazell, Group Litigation and Social Context: Totuard A History of the Class Action,
en Co/. L. R 77 , pp. 8 67 ss.; Id., From Medieua! Group Litigation to the Modern Class
Actron, New Haven, Conn., 1.987;Bone,Personal and lmpetsonal Litigatiue Forms: Re'
conceiuing tbe History of Adjudicatiue Representation, en Boston Un. L. Reu' 70,1990,
1'72.E|fenmenoestancomplejoquenosepuedendarindicacionesexhaustiv.rs.
caso, Detrti' Pp.213
Enrre los escritos ms significativos .n l t.rutrrru italiana v., en cualquier ss.
Interessi diffusi, en Nourss. Drg. It. Appendice, Torino, 1983, pp' 305 ss';
Trocker' G 774, Cf., para algunas menciones sintticas a esas adaptaciones en el caso de las /ss
1987 , pp. 1 I I 2 actions y referencias bibliogrficas, Taruffo, Dirtto processuale ciuile, cit., pp. 404 ss.
interessi diffusi nelt'opera della'giurispridenza, en Riu. tti*. dir.'pror. ciu.,
,r.; C"r"uii", Interesiidiffusieiollettiui,enDir.esoc',1'982, pp' 36 ss';Vigotiti'Intets-
175. Paa una visin panormica, cf. Cappelletti y Garth, The Protection of Diffuse'
-
rragmenrcd
si collettiui e processo' Mtlano, 1979. and Collectiue lntercsts in Ciuil Litigation, en Effektiuer Rechtsschutz und
1,73. La raznpo. fu qt. t. prodrr.a .,'a fenmeno es, habitualmente' que la t.tcl;t
uetfassungsmcissige
Ordnung, ed. por V. J. Habscheid, Bielefeld, 1983, pp' I l7 ss.
fragmentaria de ."a posiiiOn iniividual se presenta difcil o imposible. sta es, en cfcc-
176. En Italia se ha adoptado, efectivamente, una solucin fuertemenre limitativa
por parte
to, [a exigencia que est en la base de la instltucin que aqu rerulta ms interesante ,
l'rs del artculo 18 de la ley n.349 de 1986, creadora del Ministerio de Medio
Ambiente. Cf. Taruffo, La legittiazone ad agire e le tecniche di tutela nella nuoua dis-
class actins: u., ,"rp..a,rJt. to, orgenes de la institucin, Vigoriti, op' cit'' p' 263l'
"l
152 153
EL HECHO
154 155
.LGUNOS TIPOS DE HECHO
En casos como stos, la incidencia de Ia dimensin subjetiva del o los daos analticamente demostrados significara reducir excesiva-
hecho es bastante clara: cambia la forma de identificar, por ejemplo, el situaciones. Para evi-
lrrnr..l mbito tutelado, excluyendo numerosas
efecto daoso y la cuanta del correspondiente resarcimientolss. Se llega J, ,r^limitacin, se acaba aceptando que el "hecho, est ampliamen-
a admitir, algunas veces, que esos aspectos del hecho no estn con.rple- ,l-ind.r.r-inado en su dimensin subjetiva y que esa dimensin sea
tamente determinados a priori o que lo estn en funcin de criterios o 6t' |
slo Parcialmente
r-
,rrobada
analticos, como sucede cuando no se identifican de forma inmediata En las acciones antidiscriminatorias, las reglas tradicionales exigi-
en los casos en que la
todos los miembros delaclss de los que tienen derecho a lo que fuere. ran que se impusiese una sancin nicamente
Surge as un aspecto aadido interesante: la posible indetermir.ra- Jiscriminacin resultara probada en perjuicio de sujetos especficos.
cin de la dimensin subjetiva, que no afecta nicamente a las acciones Tambin en ese caso, sin embargo, se obtendra como consecuencia
resarcitorias. una fuerte reduccin del mbito de la tutela iurisdiccional de la igual-
El problema de "dar por determinado" el hecho incluso a faita de dad de tfato,ya que a menudo sucede que la discriminacin no es de-
una prueba completa y analtica de sus consecuencias en el aspecto mostrable de forma directa. Para evitar esta consecuencia, se admite
subjetivo, es decir, de la individuacin exacta de los sujetos que sufren que el .hecho, representado por el comportamiento discriminatorio
esas consecuencias, se ha planteado, aparte de en las mass tort class oued. tro ser exactamente o completamente identificado desde el pun-
actions, tambin en las acciones antidiscriminatorias. En el caso de las io de vista subjetivo: en otros trminos, puede incluso faltar la exacta
tnass tort) como en el famoso Agent Orange case) se pretende definir y completa individualizacin de los sujetos discriminados siempre que
las consecuencias daosas de un hecho (en el ejemplo la exposicin a i.u .otr.t,ttuble la existencia del comportamiento discriminatoriorss-
materiales peligrosos) sin que estn exacta y analticamente probadas, En situaciones como stas, se pone en evidencia un tipo de hech<
o mejor: ms all de los lmites en que estn analticamente probadasrta. que es complejo desde el punto de vista subjetivo porque tiene la pecu-
Aqu se trata) en realidad, de resarcir no slo a los sujetos que demues- liaridad de explicar efectos que se producen sobre grupos muy amplios
tren haber sufrido determinados efectos daosos sino tambin a aqlre- de sujetos, a veces amplsimos y a menudo parcialmente indetermina-
llos que probablemente los sufrirn. Esto es, se trata de determinar el dos. En algunas ocasiones, como ya se ha mencionado, esa compleji-
dao sin limitarse a sumar los daos individuales demostrados sino dad se resuelve en el campo de la identificacin del hecho, fragmen-
estableciendo la presumible cuanta total del mismo, es decir, definien- tndolo en una serie de "hechos individualesD o concentrando una serie
do de forma aproximativa el nmero de los sujetos que probablemente de acciones individuales en el mismo proceso. Sin embargo' surge la
han sufrido consecuencias perjudiciales del hecho daoso o que l:rs
sufrirn en el futuro185. En resumen, se pretende medir el remedio para
la dimensin subjetiva real del hecho daoso, pero 187. Cf., una vez ms, Giussani, en los lugares citados en las notas precedentes.
frente a desastres masivos con efectos daosos que pueden -especialmente
verificarse 188. Sobre estas situaciones y sobre la necesidad de abandonar la prueba especfica
incluso con posterioridad- esta dimensin no puede ser riguros:r y de la discriminacin en perjuicio de sujetos determinados, v., entre lo ms reciente, tam-
bin para orras referencias, Giussani, La proua statistica, cit., pp. 1032 s., 1044 s. Una
analticamente probada186. Por otra parte, limitar la tutela nicamente
situacin de ese tipo est ahora previsra expresamente en la ley de 10 de abril de 1991,
n' 125, en materia de acciones positivas para tutelar la paridad hombre-mujer en el pues-
to de trabajo, cuya rato fundamental es precisamente el de hacer posible la tutela contra
183. En numerosos casos de public law litigation, adems, las consecuencias dcl he- las denominadas discriminaciones indirectas. El artculo 4, prrafo 5, prev que el recu-
cho no slo son de tipo reparatorio o de resacimiento, sino que implican la modificacin rtente ofrezca elemenros de hecho
"obtenidos incluso de datos de caricter
estadstico"
de la situacin de hecho o la creacin de situaciones nuevas. Se deriva de aqu una visin idneos para funda una presuncin de existencia de la discriminacin. En ese caso' co-
prospectiua,ynosloreconstructiva,delasituacindehecho:cf.Chayes, op.ct.,p. rresponde al empleador demandado la carga de demostrar la inexistencia de l discrimi-
1296. nactn (al respecro
v., ms ampliamente, infra, captulo VI, 3.5). Por otra parte, el punto
184. Para un anlisis de esta situacin y amplias refeencias bibliogrficas cf. GiLrs- o del mismo artculo 4 prev que el recurso pueda ser planteado por el consigliere di
sani, La proua statistica nelle actions>, en Riu. dir. proc., 1,989, pp. 1033 ss. .t"tnbin cuando no se puedan individualizar de forma inmediata y directa los tra-
"class lolf
185. Cf. Giussani, op. uh. cit., pp. 1040, 1.042 s., 1.046. oaadores
afecrados por la discriminslf,, haciendo as posible la accin de tutela inclu-
186. Sobre la imposibilidad de la prueba especfica del nexo causal individual v., cn tt cuando
no estn individualizados los su;'etos concretos diectamente damnificados. [El
particular, Giussani, Le "mass tort class actions", cit., pp. 347 s.; Id., La Proua statistict, consiSliere
di parilA es un rgano pblico encargado de velar por la igualdad sexual y que
cit., p. 1043. Puede q en juicio
en defensa de ese objetivo. N. del T.l
1.56 1.57
'*"
LGUNOS TIPOS DE HE
158 159
\LGUNOS TIPOS DE HECHO
ca a uno de esos hechos se disponga normalmente de criterios que per_ prueba se simplifica radicalmente: la declaracin
rna, el problema de la
mitan definirlos. Esta operacin puede ser ms o menos problemtica l"'"n iralid^d, un hecho <material> que forma parte de los fenmenos
y puede dar resultados ms o menos seguros en funcin del tipo ds
,rnribl"r y verificables intersubjetivamentele5; esto es, la declaracin es
hecho psquico y del respectivo nivel de elaboracin alcanzado por la (al menos desde el punto de
un ,u.eso emprico que no se distingue
doctrina y la jurisprudencia, pero puede sostenerse que exisre una po-
uirt" d" la prueba y de una forma muy general) de otros comporta-
sibilidad razonable de individualizacin del hecho psquico que la nor-
rnientos materiales. El hecho de que Ticio haya realizado una especfi-
ma considera relevante. Aqu no interesa discutir, en realidad, en qu
ca declaracin no es distinto del hecho de que Ticio haya consignado
medida resulta simple y segura la individualizacin del hecho, ni trn-
una suma de dinero: ambos hechos (independientemente de las actitu-
poco establecer en funcin de cada caso la medida en que esa indivi-
des psicolgicas subyacentes) son demostrables "objetivamenteo. Esto
dualizacin es realizada por las normas y la medida en que es dejada facilita, por otra parte, la construccin de reglas probatorias especfi-
en manos de los intrpretes; lo que importa destacar es que incluso camente destinadas a regular la prueba de las declaraciones negociales;
cuando las normas son abiertas e indeterminadas en la definicin de adems, algunos ordenamientos privilegian algunas tcnicas probato-
los hechos no materiales relevantes se dipone normalmente de un cor- rias que consideran ms .seguras) hasta llegar a hacer incontestable el
pus de nociones y de conceptos que permiten definir el respectivo su- resultado y excluir la posibilidad de emplear pruebas distintas. Los ar-
puesto de hecho, resolviendo en va de integracin interpretativr la tculos 2721.-2726 del vigente cdigo civil italiano son un buen ejem-
falta de individualizacin de las definiciones normarivasle2. plo de cmo puede regularse la prueba de las declaraciones negociales
Surgen, en cambio, problemas relevantes desde el punto de visra . u.r" forma muy analtica, as como alcanzar niveles elevados de "cer-
de la prueba de los hechos no materiales por la buena y obvia raz6n de tidumbre jurdica" cuando la prueba documental privilegiada presenta
que puede no ser fcil en absoluto (y algunas veces imposible) ofrecer caractersticas particulares, consideradas idneas para garantizar la <se'
una demostracin (externa>) que sea de algna forma cognoscible y guridad"1e6.
verificable intersubjetivamente, de hechos que slo (existen> en la es- Por otra parte, debe subrayarse que, de esta forma) el problema de
fera psquica del sujetore3. Resulta, al menos, intuitivo que para esos la prueba de un hecho psquico como la voluntad negocial se resuelve
hechos no sirven automticamente las mismas tcnicas probatorias qr-re de un modo relativamente fctl porque se transforma en un problema
sirven para los hechos materiales o que, en todo caso, aqullas deben distinto, que se remite a la prueba de un hecho material: la declaracin
ser considerablemente adaptadas. y no la voluntad. Este mecanismo se mantiene, y el escamotage funco-
Algunas veces, el problema tiene soluciones que no son particular- na, mientras resulta vlido el presupuesto implcito en el que se basa'
mente complejas. Se trata esencialmente de los casos en los que, por esto es, la equivalencia funcional entre voluntad y declaracin, deriva-
ejemplo, siendo relevante la voluntad contractual de un sujeto, en rea- da de la suposicin de que la declaracin se corresponda con la volun-
lidad, se recurre a las declaraciones que aqul ha realizado o, en roclo tad del sujeto que la realiza: en otros trminos, se supone que cual-
caso, ha hecho propias en la estipulacin del contratolea. De esta for- quiera declara precisamente aquello y todo aquello que quiere declarar.
1.92. Cf. Scarpelli, op. y loc. uh. cit. reciente, Schlesinger, Dichiarazione. L Teoria generale, en Enc. dir., XII, Milano, 1964,
193. Scarpelli, op. ub. cit., p. 125, subraya que de esos hechos se puede tener irnic.r- pp.379 ss.; Torrenre y Schlesinger, Manuale d diritto priuato, Milano, 131990,pp. 117
mente un conocimiento indirecto basado en la observacin de comportamientos o de ss.'255ss.;ZattiyColussi, Lineamentididirittopiuato,Padova,2l9S9,p.382;Galga-
disposiciones a comportamientos. no, Diritto priuatto, Padova, 61990, pp. 247 ss.,332,337; L'interpretazione del con-
794. En la base de esta solucin est el clsico problema referido al conflicto entrc el tratto. L Orientamenti e tecniche della giurisprudenza, a c^rgo de G. Alpa, Milano, 1983,
pp. 145 ss. En senrido contrario, es decir, a favo de la prevalencia autnoma de la vo-
"dogma de la voluntad" y el "dq*rnr de la declaracin): en cualquier caso, ese problcrnrr
tiende a resolverse en el sentido de que el contenido del acto es determinado sobre l tuntad, cf. Trabucchi, Istituzioni di diritto ciuile, Padova, 3t1990, pp. 135 ss., 616 ss.
[hay
base del texto de la declaracin emitida, mienrras que la voluntad como hecho psquico tr' cast. de la 1." ed., Instituciones de derecho ciuil, a cargo de L. Martnez-Calcerrada,
puede servir eventualmente para definir el significado de la declaacin. En cualquicr Madrid, 19671.
caso, se excluye que la voluntad tenga relevancia autnoma como hecho psquico inrcr- 195. Cf. Schlesinger, op. cit., p. 374.
no al sujeto, debiendo siempre recurrirse a los trminos ob.jetivos en los que aqulla fLre 196. V., en particular, Taruffo, Proua testimoniale. a) Diritto processuale ciuile, en
manifestada en la declaracin, Sobre estos temas, cf. en particular, en la doctrina ns -
Enc. dir., xxx\'ll, Milano, 1988, pp.74l ss.
1.60 1.61
LGUNOS TIPOS DE HE
Una premisa de este tipo permite atribuir relevancia jurdica a la decla- rl^c --Dor decirlo
tYj.r"iion.t- as- "pertenecen>: sucede, as, que las respectivas
racin en s misma, desligndola de la relacin con la voluntad "subya- pueden tene, el dbil valor de las inferencias probato-
cente>>, y resolver sobre esta base el problema de la prueba. La volun- :il;a son emiiidas en el contexto "incontrolado" del interrogatorio
vinculante si son emitidas bajo la amenaza
tad como elemento psicolgico resulta as irrevelanlrt" y, por tanto, iirr;;, o, en cambio, valor
qu_e deberan garantzar la veridicidad del juramen-
no hay necesidad alguna de probarla, en Ia medida en que los efectos e las "sanciones>
jurdicos previstos por las normas se refieren a la declaracin entendi- liq-t*"""s veces, la ley impone, tambin, que se consideren verda-
contra se2ur o razonablemente- permite
da como hecho material que "incorpora)) y (reproduce) fielmente la i""ru, l"r"d..laraciones -msparte que haya dado
lonrl.tnt verdaderas las declaraciones de la
tes-
voluntad del declarante.
El problema de la prueba se resuelve, pues, en la medida en que i"onio de las mismas, eventualmente sometindose a la cross-exami-
sea suficiente probar la declaracin en lugar de la voluntad, pero no se nion'o'. Hay, pues, distintas posibilidades de utilizar a ttulo de prue-
'ba
trata obviamente de una solucin absoluta. Puede suceder, en efecto, drclut^ciones provenientes del sujeto; a ellas se reconducen tambin
que la voluntad retorne directamente a escena haciendo irrelevante o lrurb"t que en realidad provienen de terceros (como la declaracin
discutible la declaracin y replanteando, por tanto, el problema de la i.rrifi."t e quien dice: .s que Ticio ha dicho que 1...') si pretenden
prueba de un hecho psquico. Puede ocurrir, en efecto, que la voluntad demostrar o confirmar esas declaraciones'
est viciada y que el vicio haya afectado alavaldez de la declaracin; El problema, en cambio' se complica notablemente cuando no se
pro-
o bien que la declaracin corresponda a una voluntad vlidamente dispone de enunciaciones provenientes deun sujeto acerca de sus
expresada pero que sta estuviera dirigida a un contenido distinto del pios hechos psquicos y, por tanto, stos deben ser reconstruidos me-
que fue simulado; o bien que la declaracin no sea claray, por tanto, diante otras modalidades.
tenga que demostrarse cul es su nverdadero> contenido, es decir, cul La complicacin deriva esencialmente del hecho que no son razo-
fue la voluntad efectiva de los sujetos que realizaron la declaracinre8. nablemente posibles otras pruebas directas de esos hechos. Si bien es
De esta forma, el discurso retorna al problema fundamental, es posible ecl"racin testifical del tipo uS que Ticio ha dicho que
'.rna
decir, a las modalidades mediante las que puede ser probado un hecho quera X, que saba Y, etc., (es decir, una declaracin testifical sobre
no material y, especficamente, un hecho que "existe" slo en la esfera ina declarcin relativa a un hecho psquico por parte de su "autor"),
psquica y volitiva de un sujeto. no parece posible una declaracin testifical del tipo "S que Ticio quie-
Los hechos de este tipo, en realidad, slo pueden ser probados reXo sabi y". En efecto, si se analiza el fundamento de esta declara-
cin testifical, se descubrir que es una forma elptica de decir que Ticio
directamente de una forma: reconociendo algn valor probatorio a la
que es su (autor>. ha manifestado que quera X o que saba Y, y entonces se est ante un
"expresin" del hecho psquico por parte del sujeto caso de declaracin testifical sobre una declaracin de Ticio; o bien es
Estados de conocimiento, valoraciones, actos de voluntad, etc., pue-
una forma elptica para decir que existen hechos idneos para hacer
den ser demostrados si, y en la medida en que, un determinado orde-
pensar que Tiiio quiera X o que sepa Y' pero entonces es una declara-
namiento decida que el juez pueda o deba creer al sujeto al que aqu-
199. Cf. el artculo 11.6.2 del cod. proc. civ. it. Sobre el valor probatorio de las res-
197. En ese sentido, muy claramente, Galgano, op. cit., p.248. puestas ofrecidas por las partes en el interrogatorio libre, cf. Carpi, Colesanti y Taruffo,
198. Ni siquiera en este caso, sin embargo, segn la doctrina ampliamente mayoritr- oP- cit., p.214, y tambin Cappelleai, op. cit., I, p. 93; Vaccarella, Intellogatolio delle
ria, la declaracin es puesta entre parntesis para hacet prevalecer la voluntad conro Parti, en Enc. dir., XXII, Milano, 1972, pp. 394 ss.
hecho psquico interno. El conflicto entre voluntad y declaracin, que surge cuando es de la credibilidad del juramenro v., por todos, Nicoletti, 1/
dudoso el significado de la declaracin, es, en efecto, resuelto haciendo prevalecer una
.200. Sobre el problema
g-uramenb
della parte nell'attualit del processo ciuile,Nmini, 1982' pp. 12 ss', 25 ss.,
vez ms, en la medida de lo posible, el ndato" representado por la declaracin. Por un 38 ss., 55 ss., ilti ss., 2il ss.
lado, en efecto, se recurre a la voluntad nicamente como un elemento til para deter- 201. Cf. el artculo 2733.2 del cod. civ. it. y el artculo 2734.
minar el significado de la declaracin en sede de interpretacin del contrato. Por otro
lado, la "teora de la buena fe o de la confianza" supone que la declaracin prevalece en
,t!*202. Sobre la declaacin testifical de las partes en los ordenamientos de cornmon
u, l^ reconsrruccin histrica de Cappelletti, op. cit., ll, pp. 421 ss. [tr. cast. parcial,
cualquier caso sobre la voluntad ninterna' del declarante. Cf., al respecto, en la litera- ta oralidad y las pruebas en el proceso ciuil, a cargo S. de Sents Melendo, Buenos Aires,
tura ms reciente, Torrente y Schlesinger, op. cit., pp. 178,256; Zarti y Colussi, op. ril'' 1972, pp.
Js ss.l.
pp. 382, 423; Galgano, op. cit., pp. 249,262 s.,332.
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L-*
EL HECHO
LGUNOS TIPOS DE HE
panes en e[
negocio en fraudc de ley, cf. Gitti, 1/ contrato in frode alla legge: itinerari
aella^Siutisprudenza,
en Riu. crit. dir. priu., 1989, pp.702 ss.,726 ss.
203. Sobre las peculiaridades de la prueba indirecra y, en particular, de la prueba por uJ. Sobre la rendencia a
presunciones, v., infra, en el captulo YI, 2.1 y 3.1. "tipificar" los criterios de valoracin de las pruebas v., en
Eeneral, Schneider, Beweis und Eeueiswrdgung, Munchen, a1.987, pp. 34 ss.
204. Paticularmente significativas son las oientaciones de la jurisprudencia accrc,r tn particula. sobre la construccin de
_
del conocimiento del estado de insolvencia a los efectos de l" ,euc"tria ordinaria; al -Bender, "familias" o "combinaciones" de indicios cf.
Rder y ack, Tatsachenfeststellung uor Gericht. Band I. Glaubwrdigkeits- und
respecto' v. el agudo anlisis de Gitti, La ricostruzione indiziaria dell'elemento soggttiuo aeweislehre,
Mnchen. 1981, pp. 205 ss.; Schneider, op. cit.,pp.94 ss. En general, sobre
nella reuocatoria ordinaria, en Banca, borsa,1,997, pp. 54 ss. rf concepto de
Anscheinsbetueis, fiindado precisamente en la tipificacin de grupos de
Anlogamente, para el caso de la determinacin de la intencin fraudulenta clc Is cttcunstancias,
v., infra, captulo VI, 3.5.
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