La Influencia Del Welzel en La Ciencia Del Derecho Penal Español.
La Influencia Del Welzel en La Ciencia Del Derecho Penal Español.
La Influencia Del Welzel en La Ciencia Del Derecho Penal Español.
(18) Tratado de Derecho penal, Ediar, Buenos Aires, I, 1980, II, 1981, II,I
1981, IV 1982 y V, 1983. Antes haba publicado una Teora del delito, Buenos Aires,
1973 y el Manual de Derecho penal. Parte General, Ediar, Buenos Aires, 1979. En
los ltimos aos ha publicado con sus discpulos Alejandro Alagia y Alejandro Slokar
un Tratado ms reducido Derecho Penal. Parte General, Ediar, Buenos Aires, 2000,
con otra orientacin completamente diferente, de carcter poltico criminal y fuerte-
mente politizada como consecuencia de las experiencias de las dictaduras militares
argentinas.
(19) Teora del delito y de la pena. 1 Fundamentacin de las sanciones penales
y de la culpabilidad, 2. ed. Astrea, 1996, 2 Imputacin delictiva, Astrea,1995.
(20) Derecho Penal. Parte General, Tomo I, Fundamentos-Teora de la ley
penal, Rubinzal-Culzoni, Buenos Aires, 2006.
(21) Enrique Cury, Derecho Penal. Parte General, 7. ed., Ediciones Universi-
dad Catlica de Chile, Santiago de Chile, 2005; antes haba publicado una Orienta-
cin para el estudio de la teora del delito, 1. ed., Valparaso, 1969, 2. ed., 1973,
Universidad Catlica de Chile, Santiago, 1973; Luis Cousio MacIver, Derecho
Penal Chileno. Parte General, Editorial Jurdica de Chile, Tomo I, 1975, Tomo II,
1979, Tomo III, 1992.
(22) 2. ed., Jos Bushatsky Editor, 1977.
(23) Volume 1. Parte Geral, 7. ed., Edit. Rev. Dos Tribunais, 2007.
(24) Editorial Cuzco, Sociedad Annima Editores, Lima, 1990.
(25) 3. ed., Ara editores, 2006.
(26) I Introduccin, 6. ed., 2004, II Teora jurdica del delito, 6. ed., 1998,
y III Teora jurdica del delito/2, 1. ed., 2001, Tecnos, Madrid. Mis Obras Com-
pletas, cuyo primer tomo es mi Parte General, han sido publicadas en Per, Mxico,
Colombia y Brasil por la editorial ARA, de Lima, en coedicin, en su caso, con
editoriales de los otros pases, en los aos 2006 y 2007. Mi discpulo Juan Felipe
Higuera Guimer ha publicado una Parte general del Derecho penal militar espa-
ol (Curso de Derecho Penal Militar Espaol. I Parte General, Bosch, Barce-
lona,1990).
(27) El Derecho Penal Espaol. Parte General. Nociones introductorias. Teo-
ra del delito, 3. ed., Dykinson, Madrid, 2002.
(44) Una nueva concepcin del delito. La doctrina finalista, pp.86-87. Segn
Crdoba Roda, la accin en sentido amplio, que comprende la omisin es la activi-
dad humana definida por la categora de la finalisdad; Comentarios al Cdigo penal,
por Crdoba Roda y Rodrguez Mourullo, I, Ariel, Barcelona, 1972, p.5 y Zum
Verbrechensbegriff im spanischen Strafrech, Festschrift fr R. Maurach, C.F. Mller
Verlag, Karslruhe 1972, p.630. Vase un anlisis crtico de su opinin en mi Curso de
Derecho Penal Espaol. Parte General, II, S. 40.
(45) Muoz Conde, Teora general del Delito, 2. ed., Tirant lo Blanch,
Valencia, 1989, pp.25 yss. (aunque en F. Muoz Conde-M. Garca Arn, Derecho
Penal, Parte General, 6. ed., Tirant lo Blanch, Valencia, 2004, pp.213 yss., toma el
concepto finalista de la accin nicamente como punto de partida y se inclina por el
concepto significativo de accin de Vives Antn).
(46) Alfredo Etcheberry, Derecho Penal, Tomo Primero, Parte General, 2.
ed., Editora Nacional Gabriela Mistral, Santiago de Chile, 1976, pp.125 ff.
(47) Derecho Penal, Parte General, pp.381 yss., y 394 yss. Aunque definen
la accin como un comportamiento humano (por ende, conforme a sentido) que se
exterioriza con efectos en cierto contexto mundano, exigen la finalidad como un
elemento imprescindible de este concepto jurdico-penal pretpico. Con ello se garan-
tiza del mejor modo posible la vigencia del principio de que no hay delito sin accin.
Tambin en los delitos imprudentes y en los delitos de omisin (aliud agere) hay
una accin finalista.
(48) Aun cuando su concepto finalista difiere del formulado por Welzel; para
Donna la accin no es solo una conducta finalista sino tambin libre. Para nosotros
libertad, finalidad y voluntad son sinnimos en el sentido de direccin del proceso
causal. El toma su concepto de accin libre de Hruschka. Una accin no es libre
cuando la necesidad o la ignorancia impiden la imputacin del proceso o la accin.
Como ejemplos cita l los casos de vis absoluta, del error de tipo, del estado de nece-
sidad exculpante, del error de prohibicin o de una enfermedad mental. Vase Dere-
cho Penal, Parte General, S. 55 yss. Su opinion no me parece convincente. Las
acciones de los inimputables, por ejemplo, no son libres, pero su estructura sigue
siendo finalista. La libertad de la voluntad no es un presupuesto de una accin fina-
lista, sino de su imputacin.
(49) Lecciones de Derecho Penal, Parte General, p.111 yss.
(50) Derecho Penal, Parte General, pp.22 yss.
(51) Lioes de Direito Penal, Parte Geral, pp.167-168.
(52) Aunque considera que cada asignacin de un fin incluye una relacin
valorativa. Junto a la finalidad aparece, por tanto, como elemento esencial de la
accin una intencionalidad conforme a sentido El fin es siempre un valor
actualizado. La accin tiene una naturaleza axiolgico-finalista, que constituye
su estructura ontolgica. La imputabilidad es, por ello, para Reale un presupuesto
de la accin y no de la culpabilidad. Vase, Instituioes de Direito Penal, Parte
Geral, I, Edit. Forense, Rio de Janeiro, 2006, pp.128 y ss., y especialmente
pp.131-132.
Walter de Gruyter, Berln-New York, 1974, S. 154 ff. La pertenencia del dolo al tipo
de lo injusto de los delitos dolosos es sustentada tambin, por ejemplo, por Crdoba
Roda, El conocimiento de la antijuridicidad en la teora del delito, pp.79-80, notas a
la traduccin del Tratado de Derecho Penal, de Maurach, I, pp.301 yss. y 370 yss.
Una nueva concepcin del delito. La doctrina finalista, pp.93 yss., Muoz
Conde-Garca Arn, Derecho Penal, Parte General, pp.265 yss., Mir Puig, Dere-
cho Penal, Parte General, 7. ed., B. de F, Montevideo-Buenos Aires, 2004, pp.259
yss., Luzn Pea, Curso de Derecho Penal, Parte General, I, Editorial Universitas
S.A., 1996, pp.331-332 y 390, Bacigalupo, Principios de Derecho Penal, Parte
General, 4. ed. Akal Iure, Madrid, 1997, pp.223-224, J. J. Bustos Ramrez-H.
Hormazbal Malare, Lecciones de Derecho Penal, tomo. II, Trotta, Madrid,
1999, pp.59 yss., Nuevo sistema de Derecho Penal, Trotta, Madrid, 2004, p.83,y J.
M. Zugalda Espinar, Derecho Penal, Parte General, 2. ed., Tirant lo Blanch,
Valencia, 2004, pp.486 yss.
(56) Vase, por ejemplo, E. Ral Zaffaroni, Tratado de Derecho penal, III,
pp.27 y 295 yss., E. R. Zaffaroni, A. Alagia, A. Slokar, Derecho Penal, Parte
General, pp.495 yss., E.A. Donna, Teora del delito y de la pena, 2, Imputacin
delictiva, S. 12 yss. y 89, Moiss Moreno Hernndez, El finalismo y sus implica-
ciones en la Dogmtica Penal y la Poltica Criminal, en Hans Welzel en el pensa-
miento penal de la modernidad, pp.191 yss., E. Cury, Derecho Penal, Parte General,
7. ed., p.303, L. Cousio, Derecho Penal Chileno, I, pp.642 yss., Heleno Claudio
Fragoso, Lioes de Direito Penal, Parte Geral, pp.173-174, 180 y 190, L. Regis
Prado, Curso de Direto Penal Brasileiro, 1, Parte Geral, pp.355 yss. y 364 yss.,
Miguel Reale junior, Instituoes de Directo Penal, Parte Geral, I, pp.136, 140 y 149
ff. (aunque para l, el dolo no es solo querer, sino querer con una intencionalidad
axiolgicamente significativa, en el sentido de una disminucin del valor), Fernando
Velsquez Velsquez, Derecho Penal, Parte General, 3. ed.,Temis, Bogot, 1997
p.406, Manual de Derecho Penal, Parte General, 2. ed. Temis, Bogot, 2004,
pp.282-284, F. Villavicencio Terreros, Lecciones de Derecho Penal, Parte Gene-
ral, p.132, y especialmente pp.137-138 y 143-144, Ral Pea Cabrera, Tratado de
Derecho Penal. Estudio Programtico de la Parte General, 3. ed., Grijley, Lima,
1997, pp.292 y 362-363, Alonso Pea Cabrera Freyre, Derecho Penal Peruano, I.
Teora General de la Imputacin del Delito, Rodhas, 2004, pp.177 yss., Javier Villa
Stein, Derecho Penal, Parte general, 2. ed., San Marcos, Lima, 2001, pp.252-254,
J. Hurtado Pozo, Manual de Derecho Penal, Parte General, I, 3. ed. Grijley, Lima,
2005, pp.447-448, Carlos Daza Gmez, Teora general del delito, 5. ed., Mxico,
2006, pp.99 yss. Alejandro Rodrguez Barillas, en J. L. Dez Ripolls-E. Jim-
nez-Salinas Colomer, Manual de Derecho Penal Guatemalteco, Parte General. Libre-
ras Artemis Edinter, Guatemala, 2001, pp.174 yss. 179, 183, 199-200, Zambrano
Pasquel, Derecho Penal, Parte General, pp.32 yss., 45-46, 65 yss., 75, y Fernando
Villamor Luca, Derecho Penal Boliviano, Parte General, I, 2. ed., La Paz, Bolivia,
2007, pp.210-211 (aunque al parecer vanse pp.167 y 233 atribuye al dolo una
doble posicin: el dolo sera un elemento de lo injusto, como forma de la culpabilidad
contendra, adems, un sentimiento de hostilidad o indiferencia frente al ordena-
miento jurdico). Alfredo Etcheberry, aunque sustenta el concepto finalista de la
accin rechaza la inclusin del dolo en el tipo de lo injusto de los delitos dolosos,
pues segn l la palabra dolo y sobre todo su denominacin como malicia significa en
la lengua espaola una voluntad valorada, una voluntad culpable (que en su opinin
gos penales. En el art. 14.3 del Cdigo penal espaol se regula el error
de prohibicin de acuerdo con la teora de la culpabilidad, pero nues-
tro legislador, como el alemn, ha dejado abierta la cuestin de si la
(97) En Espaa es seguida, por ejemplo, por Crdoba Roda, en las notas a su
traduccin del Tratado de Maurach (Tratado de Derecho Penal, II, p.310, nota 3),
J.Bustos Ramrez-H. Hormazbal Malare, Lecciones de Derecho Penal, II,
pp.287 y 289-290, F. Muoz Conde-M. Garca Arn, Derecho Penal, Parte Gene-
ral, pp.435-436, Bacigalupo, Principios de Derecho Penal, Parte General, pp.360
yss. (que seala que nuestro Tribunal Supremo sigue cada vez en mayor medida la
teora del dominio del hecho; vase p.364, nota 729), y parcialmente por mi Curso de
Derecho Penal Espaol, Parte General, III, pp.211 yss. En Iberoamrica la teora del
dominio del hecho es seguida, por ejemplo, en Argentina por E. R. Zaffaroni, Tra-
tado de Derecho Penal, Parte General, IV, pp.305 yss., E. R. Zaffaroni, A.Ala-
gia, A.Slokar, Derecho Penal, Parte General, pp.741 yss., y Ed. A. Donna, La
autora y la participacin criminal, 2. ed., Rubinzal-Culzoni, Buenos Aires, 2002,
pp.30 yss. y especialmente p.39; en Per por Ral Pea Cabrera, Tratado de Dere-
cho Penal, Estudio programtico de la Parte General, pp.336 yss., 339 yss. y 347
yss., y J. Villa Stein, Derecho Penal, Parte General, pp.294-296, 298 yss. y 303
ss; en Brasil por Luiz Regis Prado, Curso de Direito Penal Brasileiro, Parte Geral,
pp.487 (adhirindose, en parte, a mi opinin); en Chile por E. Cury, Derecho Penal,
Parte General, II, 1. ed., 1985, pp.234-235, 244 ss. y 246 ss. (aunque en la 7. ed.,
siguiendo a Roxin, mantiene el criterio del dominio del hecho nicamente para los
delitos de dominio, que distingue de los delitos de infraccin de un deber y de los de
propia mano; vase pp.591 yss. 595 yss., 616 yss., y 621-622); y en Colombia por
F. Velsquez, Derecho Penal, Parte General, pp.612 y 614 yss., Manual de Dere-
cho Penal, Parte General, pp.450-451 y 453 yss.