Puente H Con MOSFET para Motores CC
Puente H Con MOSFET para Motores CC
Puente H Con MOSFET para Motores CC
Pero volviendo sobre la teoría, para que en el Source existan los 12Volts, en el
Gate debemos aplicar una tensión entre los 14 y los 16 Volts, es decir, 2 a 4 Volts
por sobre el Source. De lo contrario, la tensión necesaria para activar el
transistor a la máxima conducción se descontará de la tensión de alimentación
y al motor le llegarán 10 Volts o menos. De este modo, tendremos una máxima
circulación de corriente a través de Drain – Source para hacer girar el motor al
máximo, con una diferencia de potencial de 2 Volts o más entre estos dos
terminales del transistor. Esto equivale, según la fórmula de potencia, que 2 Volts
multiplicados por la máxima corriente del motor será una potencia que disipará
en forma de calor en el transistor. Cuanto mayor sea la corriente para hacer
funcionar el motor, mayor será el calor generado por los transistores, ergo, mayor
será el tamaño de los disipadores. Esto, por supuesto, hablará muy mal del
diseñador del circuito quien nunca comprenderá por qué calientan tanto los
transistores de las ramas superiores.
Como dijimos al principio, muchos diseñadores prefieren evitar estos
inconvenientes utilizando transistores de canal P en las ramas superiores del
puente H, pero ocurre que estos dispositivos son más caros y difíciles de
conseguir que los de canal N. En estos casos, se recurre a trabajar la sección
excitadora de los transistores de las ramas superiores con tensiones mayores a la
tensión de alimentación del motor. ¿Cómo logramos esto? ¡Máxime aún si sólo
disponemos de una batería de 12 Volts que se encargará de brindar la energía
para nuestro robot! Muy sencillo, el MC34063A viene a nuestro rescate una vez
más, entregando una tensión de 14 a 16 Volts (a partir de 12 Volts de entrada)
mediante una configuración Step-Up. Con una muy sencilla y pequeña placa,
obtendremos la tensión necesaria para activar de manera correcta los Gates de
los MOSFET asegurando un funcionamiento pleno de los transistores con máxima
potencia entregada al motor y menor disipación de calor en los encapsulados de
los transistores.
Para una aplicación donde se utilice un único puente H, puede parecer un trabajo
extra que no justifique la diferencia de costos respecto a la utilización de
transistores de canal P. Sin embargo, por pequeña que pensemos una aplicación,
siempre será necesario más de un sistema impulsor, sea en un vehículo, una
grúa, una CNC, un brazo robótico o cualquier otro desarrollo mecánico
motorizado. Por lo tanto, si se involucran muchos dispositivos de este estilo, el
ahorro se hará muy evidente, sobre todo cuando se realicen construcciones
seriales.
Ciclos de funcionamiento y ciclos de frenado
En el siguiente gráfico vemos de manera muy clara cuál es el circuito que seguirá
la corriente para los casos (seleccionados al azar) de giro en avance – forward
(arriba a la izquierda) y de retroceso – backward (abajo a la izquierda). Podemos
apreciar con claridad cómo el motor asume una polaridad en un sentido de
funcionamiento y cómo cambia el sentido de giro al invertir la conexión de positivo
y negativo según la manera en que se activen los transistores indicados en
color azul para cada caso correspondiente. Los potenciales de operación se
indican con la sigla “Vo” y adquieren una determinada polaridad de acuerdo a,
como mencionamos antes, la activación oportuna de los transistores indicados en
color azul.
En los motores de CC de imán permanente, como los que empleamos en este
artículo, al interrumpir el suministro de energía, continúan girando de acuerdo a la
inercia de los mecanismos que puedan tener acoplados a su eje. Es decir, si un
motor posee un gran volante en su terminación mecánica, puede resultar que, al
interrumpir la tensión de funcionamiento, la inercia del volante procure hacer girar
el eje del motor muchas vueltas más y esto ocasione un movimiento indeseado
de un determinado mecanismo. Por ejemplo, cuando se traslada una grúa puente
a lo largo de una nave (galpón) y de repente se le interrumpe el suministro
eléctrico o si se le corta la alimentación a los motores, la enorme inercia de tan
extraordinaria estructura provocará que siga corriendo hasta el final del trayecto
golpeando contra los parachoques de los extremos del recorrido. Quizás en su
libre derrotero logre aminorar un poco la marcha gracias al rozamiento, pero sin un
freno, aplicado de manera apropiada y a tiempo, el golpe puede ser muy duro al
final del recorrido. En esta aplicación en particular (una grúa industrial) se
utilizan motores AC, pero la comparación vale el ejemplo para demostrar la
necesidad de un freno operativo en cualquier sistema mecánico lanzado en
velocidad.
Frenado regenerativo
Una forma útil e inteligente de aplicar un freno dentro de un puente H es lo que se
conoce como frenado regenerativo. En lugar de provocar un puente eléctrico
entre los bornes del motor, utilizando los transistores de las ramas inferiores del
puente H, se aplica una técnica que permite utilizar la energía generada (Vfem)
por el motor, en el momento en que ya no se desea seguir impulsando el sistema
y se busca detener la marcha. Entonces, la energía que de otro modo se disiparía
en los transistores en forma de calor puede utilizarse para recargar la batería
durante el proceso de frenado. Cuando la tensión generada por el motor supera
al voltaje de la batería en más de 1,4 Volts, se producirá una circulación
de corriente que servirá para cargar la batería durante la operación del sistema.
La tensión de 1,4 Volts está justificada en que debe vencer la tensión de juntura
de cada uno de los diodos que intervienen en el circuito. Por supuesto que este
fenómeno dura un breve lapso de tiempo debido a que la propia circulación de
corriente provoca un frenado inicial al motor, perdiendo velocidad y en
consecuencia capacidad de generar energía. Luego, cuando ya no entregue una
Vfem suficiente como para cargar la batería, se procede a efectuar un frenado
tradicional, como vimos en el párrafo anterior, es decir, activando los transistores
de las ramas inferiores del puente H. De este modo, podemos deducir que el
frenado regenerativo no es tan eficaz desde el punto de vista mecánico, pero sí
tiene una gran importancia desde el punto de vista eléctrico y funcional del
sistema.