Proyecto de Grado
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A finales de 1980´s los antibióticos efectivos contra bacilos Gram negativos dieron
un breve respiro. Durante este tiempo emergieron los S. aureus meticilino
resistentes, enterococos resistentes a vancomicina.
En los 1990´s los tres principales cocos Gram positivos S. epidermidis, S. aureus y
Enterococcus sp. ocasionaron el 34% de las infecciones nosocomiales en E.E.U.U.
y los 4 bacilos Gram negativos E. coli, P. aeruginosa, K. pneumoniae
y Enterobacter sp. el 30% de las infecciones nosocomiales.
Luego de largos años de historia y trabajo en este campo, reconocemos que las
infecciones hospitalarias son un problema frecuente y multifactorial; que son un
evento relacionado con la práctica médica, y transversal al equipo de salud; que
presentan impacto en la salud a través de un aumento de morbilidad,
potencialmente en mortalidad y siempre en elevar los costos de atención (tan
cuidados hoy en día); son un muy buen indicador de calidad de atención de las
instituciones de salud; están presentes en cualquier ámbito de la atención de
pacientes hospitalizados o ambulatorios, y no hay áreas o sectores protegidos que
estén exentos de este evento adverso y además por la magnitud de carga en salud,
son un problema de salud pública a nivel país. Dadas estas características y el
conocimiento adquirido con mucho esfuerzo, es que podemos enunciar que la
estructuración y ejecución de programas de control de infecciones han demostrado
ser efectivos en reducirlas, lo que las transforma en un área necesaria del
conocimiento y práctica del equipo de salud en forma permanente. (Delpiano
Méndez, 2011)
Las infecciones son procesos que históricamente han acompañado a los hospitales
con mayor o menor incidencia, según la formación económico-social de que se trate,
y constituyen un importante problema de salud y un motivo de preocupación para
las instituciones y organizaciones de la salud a escala mundial, por las implicaciones
económicas, sociales y humanas que estas tienen.7 El problema de las IN se hizo
patente desde el comienzo de los hospitales como instituciones de caridad, en el
año 325 d.n.e, pero su presencia ligada a la cirugía es tan antigua como las
intervenciones quirúrgicas de trepanación de cráneo, reducciones de fracturas y
otras, practicadas por el hombre desde 3000 años a.n.e. El conocimiento
del problema mediante estudios aislados se inicia más recientemente en la década
de los 50 del siglo XX, con los estudios de focos de infección en hospitales, por
investigadores de Inglaterra, Escocia y del CDC. Posteriormente, en los años 60,
se llevan a cabo estudios más sistemáticos y organizados, y ya en la década de los
70 surgen en muchas partes del mundo programas de vigilancia y control de las
IN.(Lic. Lebeque,Yamila; Lic. Morris,Humberto; Lic. Calás, 2006)
Dado que las IN son complicaciones en las que se conjugan diversos factores de
riesgo que en su mayoría pueden ser controlados, las instituciones de salud deben
establecer medidas preventivas y correctivas para la disminución de esos
factores.4 Entre las medidas básicas del CCIN se incluyen: el lavado de las manos,
el control de equipos estériles y uso de desinfectantes, la limpieza de áreas físicas
y la prevención de sepsis en trabajadores de la salud. El lavado de las manos es un
método antiguo, sencillo y eficaz que reduce las IN hasta en un 50 %.31 Tanto este,
como el uso de guantes y el cumplimiento de técnicas asépticas, son
procedimientos que pueden prevenirlas.
Existen 3 rutas principales de transmisión de las IAAS: gotas, vía aérea y contacto
Transmisión por gotas: ocurre a través del contacto próximo con un paciente.
Las gotas respiratorias que transportan agentes patógenos infecciosos transmiten
la infección cuando viajan directamente de las vías respiratorias de la persona
infectada a la superficie de las mucosas sensibles del receptor, generalmente en
distancias cortas. El tamaño de las gotas es >5 micras y se generan cuando una
persona infectada tose, estornuda o habla o durante procedimientos como la
aspiración, intubación endotraqueal, la inducción de la tos de fisioterapia torácica y
la reanimación cardiopulmonar. La distancia máxima para la transmisión de las
gotas está actualmente sin resolver y depende de varios factores tales como la
velocidad y el mecanismo por el cual son impulsadas desde la fuente, la densidad
de las secreciones respiratorias, factores ambientales tales como temperatura y
humedad, y la capacidad del patógeno para mantener la infectividad sobre esa
distancia, sin embargo, se ha definido una zona de riesgo de más o menos 1 metro
alrededor del paciente.
En Italia, 6,7% de los pacientes desarrolló una IAAS, lo que equivale a entre 450.000
y 700.000 pacientes desde el 2000 a la fecha; aproximadamente Fallecieron entre
4.500 a 7.000 pacientes con una IAAS declarada.
En el Reino Unido, la tasa estimada de IAAS para ese mismo periodo fue de 8,2%.
En Suiza, un estudio nacional reveló una tasa de infección de 7,2% en 2004. En
Finlandia, se estimó́ que un 8,5% de los pacientes desarrolló una IAAS en 2005.
Los tres grupos de factores de riesgo para IAAS son: factores huésped, factor
agente y factores ambientales. A continuación, el detalle de cada factor de riesgo:
Factores huésped
Otros factores huésped asociados con un mayor riesgo de IAAS incluyen tumores
malignos, infección con el virus de inmunode ciencia humana, quemaduras graves
y ciertas enfermedades de la piel, desnutrición severa, coma, diabetes mellitus,
enfermedad broncopulmonar, problemas circulatorios, heridas abiertas y traumas.
Factores agente
Un agente infeccioso puede ser una bacteria, virus, hongo o parasito. La mayor
parte de las IAAS se asocian a una bacteria o virus; a hongos ocasionalmente y a
parásitos, muy rara vez. Hay 2 tipos principales de bacterias que causan IAAS:
cocos Gram-positivos (Por ej. Staphylococcus y Streptococcus) y bacilos Gram-
negativos (Por ejemplo, Acinetobacter, Pseudomonas, Enterobacter y Klebsiella).
Factores ambientales
En esta categoría entran los factores extrínsecos que afectan ya sea al agente
infeccioso o al riesgo de una persona de verse expuesta a este agente. Los factores
ambientales relativos a IAAS incluyen el ambiente animado e inanimado que rodea
al paciente. El ambiente animado se re ere al personal de atención en salud, otros
pacientes en la misma unidad, familia y visitas. El ambiente inanimado incluye el
instrumental y equipos médicos, así́ como las superficies ambientales. Otros
factores de riesgo asociados al ambiente de atención en salud son las condiciones
de salubridad, limpieza de la unidad, temperatura y humedad, así́ como las técnicas
de diagnóstico y maniobras terapéuticas empleadas. (Unahalekhaka, n.d.)
Neumonía, bacteriemia, tracto urinario, heridas quirúrgicas son los principales sitios
de infección nosocomial. El orden de estas infecciones varia de hospital a hospital.
Es difícil conocer la frecuencia real de estas infecciones nosocomiales, esto puede
deberse a el tipo de hospital, el sistema de vigilancia empleado, los criterios
empleados para el diagnóstico, el tipo de población estudiada,
Las Infecciones de vías urinaria se reporta como el primer lugar de sitio de infección
en la población adulta, llegando a ocupar hasta desde el 30 al 80% del total de las
infecciones nosocomiales, los microorganismos aislados con mayor frecuencia son
E. coli, mayor al 50% de los casos, seguida de Enterococcus sp, K. pneumoniae y
Pseudomonas aeruginosa.
Bacterias
Virus
Parásitos y hongos
Algunos parásitos (como Giardia lamblia) se transmiten con facilidad entre adultos
o niños. Muchos hongos y otros parásitos son microorganismos oportunistas y
causan infecciones durante el tratamiento prolongado con antibióticos e
inmunodeficiencia grave (Cándida albicans, Aspergillus spp., Cryptococcus
neoformans, Crypto- sporidium). Estos son una causa importante de infecciones
sistémicas en pacientes con inmunodeficiencia. La contaminación ambiental por
microorganismos transportados por el aire, como Aspergillus spp., originados en el
polvo y el suelo, también son motivo de preocupación, especialmente durante la
construcción de hospitales.
El Reto Mundial por la Seguridad del Paciente hace suyas estas estrategias y
promueve acciones e intervenciones específicas que tienen efectos directos en
términos de infecciones relacionadas con la atención sanitaria y seguridad del
paciente Estas acciones se combinan con la labor en pro de la aplicación de las
Directrices de la OMS sobre higiene de las manos en la atención sanitaria (borrador
avanzado), de acuerdo con el lema “Una atención limpia es una atención más
segura” (“OMS | Una atención más limpia es una atención más segura,” 2013)