Cavidad Oral PDF
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FACULTAD DE ODONTOLOGÍA
ESCUELA DE POSGRADO
TESISTA:
DIRECTOR:
CÓRDOBA, 2001
Esta obra está bajo una Licencia Creative Commons Atribución-
NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional.
UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA
Año 2001
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 2
Director:
Comisión Asesora:
A mi familia:
A mi esposo Alejandro,
A mis hijos Maximiliano, Nicolás y Agustín,
con el deseo de transmitirles todo mi amor y entrega.
San Agustín
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AGRADECIMIENTOS
Ernesto Sábato
Esta memoria agradecida nos ayuda a encontrar en el pasado, las claves que nos
dan las respuestas para enfrentar el mañana. Es por eso que deseo expresar mi sincero
agradecimiento a aquellas personas que con todo su corazón me acompañaron durante la
ejecución de este trabajo.
Al Prof. Dr. Alfredo Bass Plüer, quien como director supo guiarme en el desarrollo
de este trabajo.
A la Dra. Elda Cabanillas de Paolucci, Dr. Jorge M. Fordham y al Dr. Aquiles Sa-
linas, miembros de la Comisión Asesora, por su orientación y verdadero acompa-
ñamiento a lo largo de estos años.
A la Lic. Silvia Risler, amiga y compañera de cátedra, quien colaboró con la Eva-
luación Fonoaudiológica.
Al Lic. Julio Di Rienzo, quien con su experiencia y consejos colaboró con el Proce-
samiento Estadístico.
A Yaya, mi abuela quien con su perseverancia y ejemplo cotidiano evidenció los va-
lores importantes de la vida.
FUNDAMENTACIÓN
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INTRODUCCIÓN
Tan es así que esta integración nos obliga a ampliar nuestra óptica y a conside-
rar un verdadero sistema cráneocervical que a su vez se integra a toda la columna ver-
tebral, para mantener la estabilidad ortostática. Por esto es imprescindible ante todo
comenzar el diagnóstico de nuestro paciente desde el reconocimiento de su postura
natural, para luego poder analizar sus características estáticas y dinámicas.
Para este tipo de diagnóstico integral debemos apoyarnos en las demás espe-
cialidades médicas que nos permitirán ampliar nuestro campo para colaborar en el
diagnóstico preventivo de patologías, que comienzan siendo funcionales y luego modifi-
can indefectiblemente este equilibrio postural. La mala función respiratoria es una de las
patologías más comunes en la generación de alteraciones posturales, las cuales se re-
velan tanto al nivel de los maxilares como de la postura general. A nivel maxilar la malo-
clusión más frecuente en estos pacientes es la clase II 1º división, donde se manifiesta
además un gran compromiso de alteración del patrón vertical y sagital del crecimiento
del maxilar superior, y una rotación hacia atrás y debajo de la mandíbula para poder
adaptar el sistema a la incorporación del aire por la boca. Todo esto trae aparejado indu-
dablemente un cambio en esas estructuras que para nuestro entender guardan una re-
lación biomecánica. Para poder equilibrar estas relaciones es indispensable el trabajo
interdisciplinario que nos permitirá reeducar las funciones y el esquema corporal, lo-
grando un dominio afectivo motriz. El criterio de nuestra terapia debe ser entonces, Fi-
siológico e Interdisciplinario.
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Del primer arco derivan los procesos maxilar y mandibular a partir del cartílago
de Meckel, los huesecillos del oído: yunque y martillo, los músculos masticatorios y el V
par craneal. La primera bolsa branquial dará origen a la Trompa de Eustaquio y el oído
medio; la hendidura al conducto auditivo externo.
Figura Nº 1
Los procesos maxilares crecen hacia la línea media al encuentro del frontona-
sal. Cuando esta fusión se produce se separa definitivamente el tubo olfatorio de la cavi-
dad bucal aislando la vía aérea de la digestiva. Este proceso, se completa en la región
posterior, con la fusión de las prolongaciones horizontales de los procesos palatinos,
gracias al descenso de la masa lingual. Todo esto sucede aproximadamente entre la
sexta y octava semana de vida intrauterina. (Figura Nº 2 y Figura Nº 3) (45).
Figura Nº 2
Figura Nº 3
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Los tubos olfatorios evolucionan rápidamente para originar las fosas nasales, en
cuya cara externa aparecen los gérmenes de los cornetes. El primero en desarrollarse es
el cornete inferior o maxiloturbinal, que se origina del proceso maxilar; su cola gruesa y
libre se sitúa en las coanas próximas al orificio tubárico. El medio o etmoturbinal y el
superior derivan del etmoides.
Figura Nº 4
Para algunos autores como Romero Díaz, las analogías existentes entre el oído
medio y los senos paranasales, justifica que no sólo se lo incluya en el complejo anáto-
mofisiológico de las vías aéreas superiores, sino atribuirle la verdadera condición de
quinto seno paranasal (Figura Nº 5) (130, 160).
Figura Nº 5
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Figura Nº 6
Figura Nº 7
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Desarrollo de la Faringe
Se extiende desde la base del cráneo hasta la sexta vértebra cervical y conti-
núa con el esófago. Constituye una verdadera encrucijada de la vía aérea y digestiva
(Figura Nº 8) (160).
Las coanas marcan el límite posterior de las fosas nasales y la separan de la fa-
ringe. Su calibre generalmente equivale al de las narinas, aunque se ve reducido por la
presencia de la cola del cornete inferior. En casos de hipertrofia del cornete puede gene-
rar una verdadera obstrucción y para su diagnóstico es conveniente realizar una fibros-
copía (Figura Nº 9) (160).
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Figura Nº 8
.
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Figura Nº 9
La Laringe
Sus músculos permiten abrir o cerrar su luz, tensar las cuerdas vocales y/o
desplazarse verticalmente en el cuello (68). Para su diagnóstico es de gran utilidad la
imagen endoscópica como lo demuestra la Figura Nº 10 (160).
Figura Nº 10
Figura Nº 11
Todas estas estructuras descriptas mantienen desde su origen embriológico
una interdependencia anátomo funcional, que puede verse afectada durante todo el cre-
cimiento y desarrollo del ser humano.
Concepto Funcional
Funcion Respiratoria
Linder- Aronson (80, 78) consideró las diferencias prequirúrgicas entre niños
con obstrucción de la vía aérea nasofaríngea debida a adenoides y sus controles, como
causantes de respiración bucal, lo cual descendía la posición de la lengua en relación
con las estructuras faciales esqueletales. Él consideró los cambios pos quirúrgicos de-
bidos a la elevada posición de la lengua causada por la transición a respiración nasal,
que había sido posible por la adenoidectomía.
Mediante la variación de las resistencias nasales al paso del aire por la conges-
tión y descongestión de los vasos de la mucosa nasal, se consigue calentar y humede-
cer el aire inspirado. También filtra el aire a través del mucus y recoge información olfato-
ria.
“Breathing” que significa el acto de respirar o sea llevar una cierta cantidad de
aire a los pulmones y luego en un segundo tiempo devolverlo al medio ambiente.
“Respiration” que abarca a los anteriores (acto de respirar) más todos los fenó-
menos a nivel hemático y tisular que llevan a la oxigenación de cada célula en particular.
La nariz debe cumplir una serie de funciones para ser considerada como nor-
mal; si deja de cumplir con una sola de ellas, ya es índice de su mal funcionamiento.
Estas funciones se realizan normalmente en forma continua tanto de día como de no-
che, durante la vigilia como en el sueño y en todos los casos en forma inconsciente. Se
hace consciente solamente en caso de dificultad respiratoria y si ésta es severa, niveles
inferiores del árbol respiratorio toman su lugar.
El acto de respirar es la primera función nasal pues sin ella no se cumplen nin-
guna de las otras funciones.
Mediante el “olfateo” las fosas nasales orientan la ráfaga de aire hacia la mucosa
olfativa.
Acondicionamiento Térmico:
Acondicionamiento de Humedad:
Ya sea que el aire inspirado sea muy seco o por el contrario que esté sobresatu-
rado de humedad, la nariz se las arregla para que al pasar por el nasofarix tenga 95% de
humedad, y en bronquiolo 99%.
Función Purificadora:
El mucus que baña la mucosa, capta y fija todas las partículas vehiculizadas
por el aire; las que son vivas, son combatidas por la lisozima, poderosa bactericida, y las
inertes son eliminadas por las cilias vibrátiles. El movimiento de los cilios consigue que
la secreción mucosa vaya progresando desde el interior de los senos paranasales hacia
la cavidad nasal, por sus orificios de drenaje, y en el interior de las fosas, es sentido pos-
terior hacia la rinofaringe para poder ser deglutida. En la pared lateral de cada fosa exis-
ten dos vias de transporte mucociliar (119). El mecanismo de drenaje del moco es muy
eficaz, pero si la inflamación de las mucosas opuestas las mantuviera en contacto, se
produciría una obstrucción, falta de ventilación y drenaje del seno dependiente generan-
do un caldo de cultivo para la sobreinfección.
Que son las que movilizan el aire a todo lo largo del árbol respiratorio, pues sa-
bemos que todo fluido en el interior de un sistema circula de las zonas donde hay más
hacia donde hay menos presión.
El aporte sanguíneo a la cavidad nasal está dado por el sistema nervioso autó-
nomo simpático y parasimpático. El simpático a través de al adrenalina produce una
vasoconstricción de los vasos nasales. El parasimpático, a través de la acetilcolina, es-
timula sobre todo la secreción de mucus y también una vaso dilatación que el volumen
venoso y el flujo sanguíneo. Por lo tanto la estimulación simpática produce una descon-
gestión y la parasimpática una congestión (119).
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El Ciclo Nasal
Este fenómeno es continuo y constante durante toda la vida del individuo, te-
niendo siempre la misma duración. Como la huella digital, que es siempre la misma para
un mismo individuo, no hay dos personas que tengan el mismo ciclo nasal. Este ciclo
nasal está regulado por el sistema nervioso autónomo (ganglio esfenopalatino y estrella-
do), y a un nivel más superior por el hipotálamo. Se ha descripto también la influencia
de este ciclo nasal en el relax corporal explicando que al dormir el sujeto pone la cabeza
de tal manera que la fosa nasal más permeable esté hacia arriba. Con el transcurrir del
Ciclo Nasal tiene que ir moviendo la cabeza para mantenerse en esa condición y como
todo el cuerpo sigue a los movimientos de la cabeza, de esta manera paradojal, contri-
buye al mayor relajamiento corporal durante el sueño.
observar una de las causas más importantes de insuficiencia nasal, como es la insufi-
ciencia alar.
Por ello, el estudio debe hacerse primero a simple vista y luego con un espécu-
lo de oído que no altere la morfología de la válvula vestibular, para poder observar cómo
funciona. En segunda instancia, con el espéculo nasal para efectuar una rinoscopía clá-
sica.
Los cornetes son responsables del 30% de la resistencia mientras que la válvu-
la vestibular es la responsable del 70%.
Rinomanometría
Cottle es evidentemente el rinólogo que se ocupó más del tema, y diseñó el ri-
nomanómetro de más uso.
Figura Nº 12
4) Pausa en la cumbre espiratoria que dura un segundo y que llega a una pre-
sión máxima de más de 8 ml de agua.
Es muy útil para fines de diagnósticos el utilizar dos canales y obtener registros
simultáneos flujo / presión; por ejemplo en un caso ideal tendremos: una presión de 20
mm de agua acompañada de flujo de 20 l/min o sea cociente flujo/presión 20/20. Si la
nariz es normal al aumentar la presión tendremos un cociente de:
38 l/min
35 mm de agua
Pero si hay una alteración anatómica funcional en dicha nariz tendremos por
ejemplo un cociente de:
10 l/min.
35 mm de agua
Debemos remarcar que cuando ponemos la oliva nasal en una narina, estamos
midiendo lo que sucede en la fosa nasal del lado opuesto. Lo que sucede es que la fosa
donde pusimos la oliva se comporta como una prolongación del aparataje que nos regis-
tra los cambios de presión que suceden en la coana del lado opuesto. Si se desean me-
dir ambas fosas nasales juntas, se ubica la boquilla terminal en la parte más posterior de
la boca, con lo cual se registran las variaciones de presión en el nasofarinx.
Conviene estudiar primero cada fosa nasal por separado, luego ambas juntas. A
continuación lo mismo pero en los distintos decúbitos y también ensayar con el uso de
gotas vasoconstrictoras para probar el factor cornetes.
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A todo ello se deben agregar dos pruebas que a nuestro entender son impres-
cindibles:
Figura Nº 13
Figura Nº 14
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Figura Nº 15
Figura Nº 16
Gráfico que los autores sajones describen como “Mid Cycle Rest”, en el cual
aparece una pausa después de cada acto respiratorio, en la línea de base, que dura de
5 a 18 segundos, nunca es normal y aparece en sujetos con dificultad respiratoria cróni-
ca y sin molestias aparentes (Figura Nº 17).
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Figura Nº 17
Además de estos grupos, en los niños con adenoides es frecuente ver gran
aumento de la frecuencia. En cambio en los adolescentes con obstrucción nasal, pero
excelente estado general, se ve lo contrario, es decir, disminución marcada de la fre-
cuencia.
Exploración endoscópica
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Figura Nº 18
Figura Nº 22
Concepto Estructural
Las formaciones linfoides de la faringe son parte del tejido hematopoyético cor-
poral, que según su localización puede ser dividido en mieloide (médula ósea) y linfoide
(correspondiente al sistema linfático).
Además, cuando los antígenos llegan a la sangre, su paso por el bazo, consti-
tuye el tercer mecanismo de defensa debido a la abundancia de células fagocitarias en
esta área.
Estos tres niveles del sistema linfático son complementados por el Timo desde
el nacimiento hasta la pubertad. El timo constituye el mayor depósito de tejido linfoide.
Proporciona un aporte de linfocitos y células plasmáticas, para ser distribuidas por la
sangre y por la linfa a los sitios en donde sean necesarias.
2-Ganglios linfáticos.
3-El bazo.
4-El timo.
Ganglios linfáticos
A diferencia de los nódulos linfoides de las mucosas, los ganglios linfáticos son
estructuras mayores, de forma ovoide o reniforme, cuya cápsula de tejido conectivo se
introduce al interior del estroma subdividiendo su masa en lóbulos. Cuando se seccio-
nan se pueden reconocer dos porciones, una periférica subcapsular que es la zona cor-
tical, y otra central, medular, que contiene espacios llamados senos medulares. En la
porción cortical del estroma se aprecian unas áreas claras, en donde las fibras de sostén
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son menores y los linfocitos más escasos. Estas áreas se denominan centros germinati-
vos.
Con estas consideraciones, resultan obvias las dos funciones del ganglio linfáti-
co. Una, la producción de linfocitos y de células plasmáticas y otra, la filtración de la linfa
por el doble sistema descrito.
El bazo
Sin embargo, a pesar todas estas funciones, al igual que cada porción aislada
del sistema linfoide, el bazo no es esencial para la vida. Este concepto es importante, ya
que permite su extirpación sin consecuencias graves, siempre y cuando las estructuras
linfoides residuales permanezcan funcionando.
El timo
El timo es parte del sistema linfático corporal y, a diferencia del resto, la forma-
ción de linfocitos ocurre en espacios totalmente encerrados por cubiertas epiteliales. Por
esta característica se designa con el nombre de linfoepitelio a los centros productores de
linfocitos. La estructura del timo hace que sea el único órgano linfoide totalmente prote-
gido del impacto de los antígenos ambientales o circulatorios. En conjunto constituye
una estructura bilobulada que se encuentra colocada en el tórax, por detrás de la por-
ción superior del esternón.
Al igual que los ganglios linfáticos y el bazo, el timo está rodeado por una cáp-
sula propia de tejido conectivo. Su tamaño varía según la edad, pues crece desde el
nacimiento hasta la pubertad. En esta época de la vida se inicia una involución ponderal
y de tamaño, ya que se hace progresivamente más pequeño. Se ha observado que las
enfermedades graves producen una involución temprana, pero siempre se mantiene un
tamaño sustancial hasta la vejez.
Cada lóbulo tímico está subdivido por expansiones o tabiques de tejido conecti-
vo provenientes de la cápsula, con lo cual queda subdivido en lobulillos de uno a dos
milímetros cada uno. La porción periférica de cada lobulillo aparece llena de linfocitos y
corresponde a la corteza, en tanto que la porción central o medular tiene menor numero
de linfocitos.
El desarrollo del sistema linfoide humano varía mucho en los diferentes perío-
dos de la vida. Es poco manifiesto en el nacimiento y crece progresivamente hasta los 8
o 12 años de edad, época en la que se inicia su regresión gradual. Conserva un tamaño
constante durante la edad adulta, después de la cual se señala un nuevo aumento en la
vejez. Las fases de crecimiento y regresión del sistema linfático no son paralelas con las
corporales ni con las específicas a los demás órganos y sistemas de la economía.
Actualmente se sabe que tanto las hormonas sexuales como las suprarrenales
inhiben el crecimiento del tejido linfoide, lo que se relaciona con su disminución progre-
siva a partir de la pubertad. En forma semejante, su desarrollo hormonal es estimulado
por la exposición a las infecciones de cualquier tipo.
Anillo de Waldeyer
Muy frecuentemente se extienden hacia la fosa de Rosenmuller, por detrás del orificio
tubario.
Es importante hacer notar que las amígdalas palatinas carecen de vasos linfáti-
cos aferentes, pero tiene vasos eferentes que llegan hasta los ganglios linfáticos cervica-
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Figura Nº 23
Figura Nº 24 - Paciente Nº 24
Es importante recordar que algunas glándulas mucosas aparecen entre los fo-
lículos linfoides y que sus conductos secretorios se abren en la superficie mucosa. Esto
explica que durante el proceso inflamatorio puedan ser comprimidos los conductos glan-
dulares, produciendo quistes de retención que por lo general no llegan a ser muy gran-
des.
Actualmente se acepta que el anillo de Waldeyer, como parte del aparato linfoi-
de del individuo, participa sin duda en la producción de linfocitos y de células plasmáti-
cas, función que parece activarse durante los brotes infecciosos agudos.
Los senos paranasales son cavidades originadas en las fosas nasales y dis-
puestas a su alrededor. A pesar de sus innumerables variantes, se agrupan formando
cuatro espacios cavitarios accesorios a cada fosa, que corresponden al seno frontal, el
etmoidal, al esfenoidal y al maxilar. Estas cavidades, junto con las fosas nasales, son
vecinas de la boca, los pisos anterior y medio del cráneo y la cavidad orbitaria. Su for-
mación se inicia entre el final del tercero y el cuarto mes de la vida intrauterina, cuando
en cada fosa nasal aparece una evaginación de la mucosa primitiva que prolonga la futu-
ra cavidad nasal en el mesodermo que la rodea. Su crecimiento fetal o postnatal es su-
mamente variable para cada seno y para cada individuo, pero debe recordarse que el
recién nacido está provisto de dos cavidades maxilares, que como el oído medio, se
llenan de aire durante las primeras horas de vida. En igual forma aparecen los senos
etmoidales, cuyo contenido mesodérmico residual es rápidamente eliminado.
Las características rudimentarias de estos senos durante los tres primeros años
de la vida, su circulación orbitocraneal común, su vecindad con las estructuras craneofa-
ciales, orbitarias y la labilidad de su epitelio respiratorio ante la infección son, entre
otras, causas determinantes de sinusitis etmoidomaxilares en los lactantes. En efecto,
los cuadros de sinusitis aguda se observan en ellos con cierta frecuencia, principalmente
durante los meses invernales y en épocas en las que aparecen brotes epidémicos respi-
ratorios. Más aún, los procesos de alergia respiratoria y digestiva son también capaces
de mantener un estado inflamatorio de esas estructuras, que fácilmente se complica o
predispone a infección. Por tanto, debe descartarse como falso el concepto de que las
cavidades sinusales aparecen a partir del tercero año de la vida y que por ello no es po-
sible el cuadro sinusal antes de dicha edad.
En forma semejante se comportan los senos frontales, que son las únicas ca-
vidades sinusales ausentes en el recién nacido. Su origen es la depresión frontal en el
meato medio, de donde la mucosa nasoetmoidal se expande para invadir el hueso fron-
tal. Al final del primer año el seno frontal ocupa aún una posición etmoidal y alcanza el
nivel frontal hacia el final del segundo año. A los tres años puede no advertirse en los
estudios radiológicos, pero llega ya al nivel del nasion. A partir del final del tercer año de
edad, ya se hace evidente en algunos niños y prosigue su crecimiento en forma muy
variable para cada individuo. Con estas características se explica la confusión clínica
durante la inflamación del seno frontal, que se confunde con afección etmoidal (160)
Figura Nº 26.
Figura Nº 25
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Figura Nº 26
Proetz explica magistralmente los mecanismos por los que los senos se desa-
rrollan y su funcionamiento, sin cometer el error de quienes lo precedieron, al querer
atribuirles un propósito funcional para justificar su presencia. Por el contrario, plantea él
que las cavidades sinusales se forman como resultado del proceso de crecimiento cra-
neofacial, constituyendo cavidades “accidentales” que carecen de propósito utilitario en
el funcionamiento nasal. En sus trabajos demuestra el sincronismo entre el desarrollo
sinusal y el proceso de remodelamiento de la cara y del cráneo, y concluye que los se-
nos rudimentarios del recién nacido se convierten en cavidades cada vez más amplias,
cuando el cráneo y la cara crecen con diferente rapidez y con diferente dirección. Esto
produce espacios ínter óseos hacia donde progresa la mucosa nasal.
Con las consideraciones señaladas es posible descartar todas las demás fun-
ciones atribuidas a los senos paranasales. Entre ellas, la de ser sitios para acomodar
órganos olfatorios, la de ser resonadores de la voz, la de aligerar los huesos del cráneo y
la de servir como cámaras de protección para estructuras nerviosas. De esta manera, la
cantidad mínima de moco sinusal y el intercambio aéreo lento con la cavidad nasal, des-
cartan su participación en las funciones olfatorias y de calentamiento. La velocidad de
intercambio aéreo entre cada seno y la fosa nasal (que parece completarse entre 30 y 60
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Esto hará que se altere de nuevo el crecimiento del cartílago. (Figura Nº 27)
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¿Cuándo y porqué debe operarse un niño con alteraciones del septum, de la pi-
rámide nasal o de ambos?
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Cuanto antes se corrija la deformidad, menor será la secuela. Debido a que és-
ta, además de influir en el crecimiento facial, tiene siempre repercusión sistémica.
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Está comprobado que la Apnea se produce por una obstrucción de la vía aérea
superior durante el sueño, sobre todo en el ámbito faríngeo.
Cuando se produce esta oclusión participan tanto las paredes laterales, el pala-
dar blando que cae póstero- inferiormente y la lengua que cae hacia atrás.
Figura Nº 29
Actitud o Postura
Para poder interpretar las relaciones biomecánicas posturales cráneo- cérvico-
mandibulares e hioideas, es necesario conocer qué es la postura y reconocer aquellos
factores que pueden alterarla como lo es la Respiración Bucal.
El cuerpo tiene dos bases de sustentación, los pies y la pelvis. Los pies adquie-
ren una gran importancia desde la vida intrauterina debido a que cuando el bebé hace
sus impulsos distales, las actividades de los pies se transmiten a través de cadenas
musculares en dirección craneal. Este impulso se detiene a nivel del complejo oro facial
donde se produce tensión del piso de boca, contacto labial, la lengua va hacia atrás, los
rodetes maxilares se ponen en contacto y la cabeza se retroinclina. Es decir que estos
impulsos desde los pies llegan al occipital y la onda de información se revierte y vuelve
en dirección caudal. Todos estos estímulos inciden en la respiración, deglución, el ritmo
cardíaco, el tono muscular de la columna vertebral y de la región abdominal, etc. Esta
evolución del tono muscular en dirección caudo craneal fue muy bien estudiada por el
Dr. Milkouwski.
Los pies poseen superficies y puntos de apoyos, y al igual que el sistema esto-
matognático cada una de ellos cumple una función biomecánica específica y poseen
receptores especializados. La evolución del hombre jerarquiza las manos, pero en mu-
chas patologías los pies continúan con esta función primaria. Los receptores plantares
son similares a los de las manos y del complejo orofacial (en especial los de la lengua),
está representados por: receptores tactiles, de temperatura, de dolor, de presión etc.
Ellos transmiten la información epigenética en sentido caudo cefálica. Es la evolución y
la maduración individual quien permite que se pase de verdaderas superficies funciona-
les a puntos de apoyo especializados tanto para los pies, las manos y la lengua; permi-
tiendo el cumplimiento de sus funciones de deglución y articulación de la palabra (Figura
Nº 30) (25, 160).
Figura Nº 30
Estas tres esferas, al unirse forman la cifosis de la columna vertebral, por que
están unidas entre sí por las lordosis cervical y lumbar. La cifosis tienen finalidad de pro-
tección.
Como línea de gravedad definimos a aquella que parte del tragus un poco por
delante de los cóndilos occipitales, roza la columna cervical por delante; pasa delante de
la región dorsal; cruza la columna lumbar al nivel de la 2ª vértebra lumbar, pasa por de-
lante del sacro; sigue el eje del fémur; pasa por delante de la rodilla; delante de la tibia;
delante de la articulación tibiotarsiana y cae al nivel de la interlínea de Chopart.
ción psicomotriz total. La respiración “constituye una de las bases comunes a todas las
reeducaciones” (73, 74).
Figura Nº 33
movimiento se expresará sobre todo en la columna cervical, pues la lordosis está al ser-
vicio del movimiento.
Figura Nº 34
El estudio de las cadenas cruzadas cervicales nos conduce al análisis del hue-
so hioides (Figura Nº 35) (160).
Figura Nº 35
Figura Nº 36
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Figura Nº 37
Omohiodeo quien sale del omóplato hacia el hioides, ejerce una acción de
bombeo sobre la tiroides en cada fase respiratoria torácica.
en las dos primeras costillas, mantiene la relación funcional con el tronco. Una demanda
importante del tronco generará una cifosis cervical y un posicionamiento del tronco, una
hiperlordosis (Figura Nº 38) (20).
Las actitudes escolióticas pasan por el sistema superficial, pero las escoliosis
pasan por el sistema cruzado profundo. En el plano horizontal los músculos esplenios
controlan a los escalenos. Esta relación escalenos-esplenios (inserción en el occipital y
primera vértebra cervical) ”parasitará la independencia cefálica” (20).
Figura Nº 38
estudios que demuestran que los niños respiradores bucales poseen bajo rendimiento
escolar y poca capacidad de atención, quizás la formación reticular no está activando
adecuadamente el cortex ante la baja concentración de oxígeno.
La actividad de estos músculos está en relación directa con los del cuello, tron-
co y el resto de la economía, como con la fuerza de gravedad actuando sobre todo este
sistema. Debe existir un equilibrio entre los planos bipupilares, ótico, oclusal de la ATM,
cintura escapular, cintura pélvica y base pédica (Figura Nº 39 y Figura Nº 40).
La mayor parte del peso del cráneo y su centro de gravedad, descansan por
delante de la columna cervical y de las ATM. La posición ortostática de la cabeza se ve
mantenida por un complejo mecanismo muscular. Los músculos de la región posterior
del cuerpo son más potentes que los de la región anterior, pues deben contrabalancear
las fuerzas de gravedad de todo el cuerpo. Esta acción protagónica y antagónica man-
tiene la postura y permite el movimiento. El equilibrio de la cabeza depende de los
músculos posteriores, cervicales y suboccipitales, que relacionan la cabeza con la co-
lumna cervical y la cintura escapular. Hacia delante, el equilibrio es mantenido por los
músculos de la masticación y la musculatura supra e infrahioidea.
La mandíbula se articula con el cráneo por medio de las ATM, articulación al-
véolo - dentaria, los planos oclusales, y el sistema muscular regido por el sistema ner-
vioso, regulado por el vascular y linfático que nutren y drenan todo el sistema Estoma-
tognático.
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El raquis cervical inferior comprende desde la cara inferior del axis hasta la su-
perior de la primera vértebra dorsal. Posee dos tipos de movimiento: flexión- extensión y
mixtos de inclinación- rotación. Estas vértebras se articulan por medio de sus cuerpos
vertebrales unidos por un disco intervertebral, sus apófisis articulares que se disponen
en un plano inclinado de 45º, apófisis espinosas y transversas.
El eje de las superficies articulares cervicales es oblicuo hacia atrás y arriba, pa-
ra adaptarse al movimiento de torsión- inclinación lateral (73, 74). Tienen íntima relación
con la arteria vertebral y los filetes simpáticos, de allí las manifestaciones patológicas.
Los ligamentos cervicales ayudan a controlar los movimientos, dan estabilidad a las arti-
culaciones y protegen estructuras de importancia vital como el Bulbo, la vía aérea, arte-
rias, nervios, etc.
La mala postura puede ser uno de los principales factores etiológicos del dolor
músculoesquelético y de las disfunciones de ATM (5). Tanto el estrés emocional como
las anomalías posturales producen hiperactividad muscular que altera la normal relación
entre la cabeza, cuello y escápula, convirtiéndose en factores de dolor craneomandibular
y disfunción. Cuando los pacientes relatan dolor bucofacial y no reconocemos disfunción
de ATM, debemos buscar el origen en le tercio superior de este complejo sistema.
Existen dos explicaciones para el dolor facial de origen cervical. Los núcleos ge-
latinosos del trigémino descienden por los cordones posteriores medulares hasta los
segmentos cervicales enviando junto con las ramas oftálmicas y mandibulares, sensa-
ciones dolorosas debido a la disfunción cervical (Figura Nº 44) (160).
Figura Nº 42
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Figura Nº 43
Figura Nº 44
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Barret y Hanson (6) sostienen que “si el hueso hioides es elevado y la respira-
ción bucal complica la situación, la lengua asume una posición baja y un patrón degluto-
rio anormal”.
Para ello es indispensable ampliar nuestra óptica de trabajo más allá del cono-
cimiento del Sistema Estomatognático, incluyendo “ todo el sistema craneocervical y su
estabilidad ortostática sobre la columna vertebral” (2).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 76
Debido a que la posición craneal puede ser alterada por muchos factores, y
principalmente por las obstrucciones respiratorias, es importante poder determinar cuál
es la verdadera postura de nuestros pacientes y recién a partir de ella estaremos en
condiciones de alcanzar un correcto diagnóstico biomecánico.
Los métodos utilizados para determinar la posición natural de la cabeza han ido
cambiando. Algunos incluyeron la utilización de un espejo (147, 102, 103), o una fuente
de luz frente al paciente (26, 27). Otros, no tomaron ninguna referencia externa, es de-
cir, sólo la posición erecta del paciente.
preta el crecimiento como una verdadera explosión en forma polar. Este crecimiento po-
lar se visualiza en las telerradiografías laterales como una dispersión a partir del agujero
redondo mayor. En la telerradiografía frontal, el fenómeno bipolar fue descripto con su
centro en el foramen rotundum de cada lado; pero por una razón de practicidad, se bus-
có el comportamiento gnómico y fueron determinadas en el Nasion para la mandíbula y
a nivel supraorbitario para el maxilar superior. En la parte más ancha de la cavidad na-
sal, el crecimiento por año es de 0,5 mm mientras que para el maxilar superior es de 1
mm. El ancho de las ramas mandibulares a la altura del maxilar, crece tres veces más
siguiendo la Proporción Divina. De esta forma el autor predice el crecimiento de las cáp-
sulas cuando existe una normofunción.
Figura Nº 45
Otra alternativa fue la reducción del vector de desplazamiento anterior del maxi-
lar superior, mediante la utilización de la fuerza ortopédica de tracción cervical. Ricketts
recomienda su utilización, para lograr la rotación horaria del complejo maxilar superior, y
reducir la protrusión maxilar e inclinar hacia abajo del plano palatino. En los dólicofacia-
les se produce una respuesta extrusiva molar y una respuesta negativa mandibular. A
medida que el complejo maxilar se moviliza, la cápsula nasal y todas las suturas conti-
guas sufren cambios. Según su opinión, con bastante frecuencia se pueden delinear las
apófisis pterigoides inclinadas hacia atrás, cuando se ha comprimido la porción media
de la cara (125). Los huesos palatinos actúan como zona de ajuste entre los huesos
maxilares y el esfenoides. Además, cualquier fuerza que realice una compresión distal
sobre este complejo crea simultáneamente una expansión en la sutura media palatina.
Figura Nº 46
Debido a esto, otra línea de investigación sustentada por Teuscher, sugiere en-
tonces controlar con fuerza ortopédica el componente anterior y vertical del maxilar supe-
rior (157).
Toda aparatología intra o extra oral produce cambios en los distintos componen-
tes del Sistema, pero los cambios verticales, son los que mayores consecuencias a nivel
de la ATM pueden producir.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 83
Entonces, si los factores de crecimiento de las fosas y los cóndilos son mante-
nidos a un nivel constante, los componentes verticales del maxilar superior y de los pro-
cesos alveolares superior e inferior influirán fuertemente sobre el desplazamiento inferior
de la sínfisis mandibular, y con ello de su posición anteroposterior. Las magnitudes de
estos procesos fueron muy bien estudiadas por Björk y Skieller (13), Luder (89), Stölkli
y Teuscher (Figura Nº 47) (55, 153, 157)
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 85
Figura Nº 47
La experiencia clínica sugiere que se necesitan fuerzas moderadas o mayores,
para impedir el crecimiento anterior del maxilar superior. Las fuerzas extraorales aplica-
das sobre los dientes, se irradian a las suturas del maxilar superior donde pueden alterar
el patrón de crecimiento.
Por lo tanto nuestro Objetivo de Tratamiento debe ser la corrección del proble-
ma esquelético y el restablecimiento de la función para poder utilizar las fuerzas del
crecimiento natural.
OBJETIVOS
Objetivos Generales
A.- Analizar las relaciones biomecánicas craneofaciales, craneocervicales e
hioideas, y valorar la vía aérea, en pacientes de clase II esquelética con problemas respi-
ratorios.
Objetivos Específicos
A.- Determinar la correcta relación postural de los maxilares antes y después de
nuestra intervención.
C.- Comprobar la eficacia del control sagital y vertical del crecimiento del maxilar
superior, para el tratamiento de la clase II esquelética, ante la utilización de Fuerza Ex-
traoral de Tracción Alta.
MATERIAL Y MÉTODOS
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 89
Todos los datos fueron consignados en una Historia Clínica completa, donde
constan antecedentes hereditarios y personales; ambientales, locales y generales.
Valoración Ortodóncica
Figura Nº 48
Para observar la simetría facial frontal se trazó la línea media facial y se obser-
varon las proporciones a partir de ella.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 90
Esto nos permitió inferir el patrón morfogenético, que fue corroborado en el aná-
lisis cefalométrico mediante la determinación del VERT y de la tipología facial según
Björk- Jarabak.
Examen Bucodental
Examen Funcional
En el Examen Funcional tuvimos en cuenta todas las funciones del Sistema Es-
tomatognático: masticación, deglución, fonación, características respiratorias, presencia
de cefaleas, actitud postural del niño en reposo y en actividad, Laxitud Ligamentosa,
Síntomas de ATM y examen Gnatológico (Figura Nº 51).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 91
Valoración Fonoaudiológica
Evaluación y Reeducación Fonoaudiológica de las praxias orales con la co-
laboración de la Fonoaudióloga de la Cátedra de Integral Niños. Aquí se examinaron y
habilitaron o rehabilitaron todas las funciones del sistema en forma precisa. Los pacien-
tes realizaron su rehabilitación en su lugar de origen, y la Lic. Silvia Risler los supervizó.
Valoración Respiratoria
El Examen Otorrinolaringológico y tratamiento pertinente fueron realizados por
el mismo equipo de profesionales, en el Instituto Romero Díaz en primera instancia, y
luego en el Servicio de Otorrinolaringología de la Clínica de la Familia. Constó de un
examen rinológico completo, Rinomanometrías Computarizadas, evaluación radiográfi-
ca de la vía aérea en las telerradiografías craneales en posición natural de la cabeza; Rx
de Senos Paranasales, Rinofibroscopía y Audiometría en los casos necesarios.
Rinomanometrías Computarizadas
Funciona bajo Windows, respondiendo a todos los comandos a los que esta-
mos acostumbrados.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 93
Figura Nº 53
Todos estos datos fueron valorados por dos profesionales experimentados para
calificar el grado de Insuficiencia Respiratoria Nasal.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 94
Valoración Postural
Para la Evaluación Postural contamos con la colaboración de la Dra. Hebe Cas-
tillo, Médica especialista en Medicina Física y Rehabilitación. Evaluó a los pacientes si-
guiendo el orden de una ficha especialmente confeccionada para este trabajo y le solicitó
estudios radiológicos a los que lo requirieron.
En una segunda sección se consignan los datos del Examen Físico, contem-
plando Mediciones Generales, Cabeza y Cuello, Tronco, Extremidades y Evaluación
Nerviosa.
Valoración Radiológica
El estudio clínico del paciente se complementó con Ortopantomografías, Te-
lerradiografías Craneales de frente y perfil, las cuales fueron tomadas en el Servicio
de Radiología de la Facultad de Odontología y en el Servicio Privado del Dr. Chaud.
Según estas investigaciones, las pequeñas variaciones que pudieran surgir del
registro de la posición natural de la cabeza, son menores en comparación con la varia-
ción de las referencias intracraneales.
Figura Nº 54
Valoración Cefalométrica
Para realizar la descripción facial de los pacientes utilizamos las siguientes va-
riables:
Figura Nº 55 Figura Nº 56
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 98
Distancia del labio superior a la vertical verdadera que pasa por Sn:
Se traza una vertical verdadera que baje desde subnasal y se valora la distancia
horizontal. Su norma es de 2mm,+/- 2mm, para Viazis y es aproximada a la encontrada
por Epker (43) Figura Nº 57 - medida LS).
Distancia del labio inferior a la vertical verdadera que pasa por Sn:
Distancia del labio inferior a la vertical verdadera que baja de subnasal. Su nor-
ma es de 0mm +/- 2mm. (Figura Nº 57 - medida Ll).
Distancia del pogonion blando a la vertical verdadera que pasa por Sn:
Figura Nº 57
Figura Nº 58
1. Relación molar - 3 mm 3 mm
2. Relación canina - 2 mm 3 mm
3. Overjet incisivo 2,5 mm 2,5 mm
4. Overbite incisivo 2,5 mm 2 mm
5. Extrusión incisivo inferior + 1,25 mm 2 mm
6. Ángulo interincisivo 130º 10º
CAMPO II – MAXILOMANDIBULAR
7. Convexidad 2 mm 2 mm
8. Altura facial interior 47º 4º
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 101
Se trazaron tres paralelas a la Vertical Verdadera, una que pase por el punto
AA, otra por el punto PRE de registro Etmoidal (22) y otra por el punto Na, para compa-
rar las relaciones espaciales esqueletales craneales, cervicales, maxilares y de la Vía
Aérea.
Distancia vertical milimétrica desde ENA a Me: valora la altura del tercio in-
ferior de la cara. (Figura Nº 61).
Figura Nº 61
Ángulo del incisivo central superior con el plano palatino: Ángulo formado
por la intersección del eje largo del incisivo central superior y el plano palatino (Figura Nº
62).
Ángulo del incisivo central inferior con el plano mandibular: Ángulo for-
mado por la intersección del eje largo del incisivo central inferior y el plano mandibular.
Tweed llamó a este ángulo IMPA y le dio un valor promedio de 87º. Se puede considerar
como norma como lo afirma Gregoret 90º (55). Este ángulo es una verdadera guía que
nos permitirá evaluar la posibilidad de protruir o no un incisivo inferior sin poner en riesgo
su estabilidad (Figura Nº 62).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 107
Figura Nº 62
Altura del Triángulo Hioideo: Este triángulo queda determinado por la unión
de los siguientes puntos: -C3: punto más anterior e inferior de la tercera vértebra cervi-
cal; -Retrognation RGn: punto más posterior e inferior del contorno de la sínfisis; Hioi-
deo, H: punto más ánterosuperior del hueso hioides.
El triángulo hioideo permite determinar la posición del hueso hioides en tres di-
recciones, sin depender de una referencia craneal como lo hace Ricketts. Por lo tanto su
medición no está sujeto a cambios posturales de la cabeza (11). Se medirá además la
distancia entre el punto H y H’ ( perpendicular al plano C3-Rgn, que parte de H cuyo
valor promedio es de 4.8mm DS +/- 4.64 (Figura Nº 63).
Distancia horizontal del Hioides a la vertical que pasa por AA, para su
ubicación espacial. Distancia lineal desde el punto hioides a la vertical que pasa por
AA, en forma perpendicular (Figura Nº 63).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 109
Distancia horizontal del Hioides a la vertical que pasa por PRE: Distancia
lineal desde el punto hioides a la vertical que pasa por PRE, en forma perpendicular
(Figura Nº 63).
Figura Nº 63
Son muy numerosos los trabajos que existen en la literatura con relación a la
medición de la vía aérea. Handelman y Osborne (57) estudiaron la evolución de la vía
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 110
aérea de pacientes con adenoides desde uno a los 18 años. Para ello utilizaron un pla-
nímetro para medir la superficie aérea libre.
Mc Namara para valorar la vía aérea sólo tiene en cuenta dos medidas lineales:
el Diámetro faríngeo superior y el inferior. Pero debe quedar muy claro que esto es sólo
un simple e incompleto indicador (93).
Lo primero que debemos remarcar es que cualquier intento por mensurar esta
vía es insuficiente, pues no podemos determinar medidas exactas para una anatomía
tan diversa, anfractuosa y especializada.
Podemos inferir que ante déficit de crecimiento de esta cápsula, la función res-
piratoria podrá verse alterada. De todas maneras, es la sumatoria de la valoración clíni-
ca, el análisis radiográfico, la visión de la fibroscopía, y las pruebas funcionales quien
podrá acercarse a un diagnóstico certero.
- Valoración del cornete medio: Distancia milimétrica del extremo del corne-
te medio a la vertical del PRE (Figura Nº 64).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 111
Figura Nº 64
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 112
El análisis se realiza sobre una toma radiográfica frontal del cráneo con una
proyección pósteroanterior; por lo cual, el lado izquierdo de la radiografía se corresponde
con el lado izquierdo del paciente. El mayor problema de la cefalometría frontal es que
las tomas radiográficas son aún deficitarias. Muchos estudios han demostrado la dificul-
tad tanto de la toma radiográfica (115) como la localización de los puntos craneométri-
cos.
Figura Nº 65
Figura Nº 66
Estético faciales: lograr una relación armónica de los labios en el perfil facial y
un cierre bucal sin esfuerzo.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 116
Figura Nº 67
Se utilizó un arco extraoral con arco externo corto y tracción alta, con fuerza or-
topédica. El promedio de fuerza fue de 500 a 600 gs. durante 12 a 14 horas diarias; el
promedio total de empleo varió de 18 a 24 meses. Luego se redireccionó el vector de
fuerza del casquete para que la resultante produjera un movimiento coronario dentario.
Luego se mantuvo el anclaje con Barra Transpalatina tipo Goshgarian, para el control
dentoalveolar. Continuamos con la mecánica ortodóncica convencional para tratamiento
de Dentición Mixta (Figura Nº 68).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 117
Figura Nº 68
Figura Nº 69
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 119
Además, debemos considerar los efectos del crecimiento de todas estas estruc-
turas. El vector de crecimiento sumado al de la fuerza aplicada, determina el vector de
desplazamiento espacial del complejo.
Figura Nº 70
Los controles clínicos se realizaron cada tres semanas, con el fin de evaluar la
marcha del tratamiento.
Consentimiento Informado
Procesamiento Estadístico
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 120
RESULTADOS
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 122
Evaluación Funcional
La tipología facial según Bjork-Jaraback, tuvo un promedio de 0,60% y varió
desde 0,51% a 0,69%. La distribución según Ricketts está representada en la Figura Nº
71.
Mesofacial: 9(31%)
Valoración Otorrinolaringológica
El 93% de los pacientes tenía antecedentes alérgicos y en el 48% de los mis-
mos su grado de manifestación alérgica alcanza una máxima expresión (++++) como lo
demuestra la Tabla 1. El 90% de los pacientes tuvo manifestaciones de Rinitis alérgicas,
el 60% relató antecedentes de Laringitis. Sólo un 10% de los niños tienen patología
asmática.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 123
Operado (14%)
Hipertrofia I (34%)
Hipertrofia III (10%)
Hipertrofia II (42%)
Figura Nº 73 - Distribución de frecuencias relativas de pacientes según Hipertrofia adenoidea.
operado (14%)
Normales (28%)
hipertrófica (58%)
Figura Nº 74 - Distribución de frecuencias relativas de pacientes según estado de las amígdalas.
D e svia d o ( 4 8 % )
Normal (52%)
Figura Nº 75 - Distribución de frecuencias relativas de
pacientes según características del Tabique nasal
Valoración Fisiátrica
Desde el punto de vista postural, el 52% de los niños tenía características de
Hiper- Laxitud Ligamentosa (Tabla 3).
La postura general corporal estaba alterada en el 100% de los casos. Las Es-
cápulas se presentaban aladas en la totalidad de los pacientes, siendo de mayor severi-
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 126
dad(++++) en el 66%. Todos los niños presentaban pérdida de la Relación Mentón- Es-
ternal.
Valoración Fonoaudiológica
El 100% de los niños presentaba Incompetencia Oral Anterior. El paladar se
presentó profundo y triangular en todos los niños, con una severidad máxima (++++) en
el 55%. La Deglución se presentó Disfuncional y la Masticación deficiente en el 100% de
los casos. La Musculatura Masticatoria era deficiente en el 97% de los niños y la Pre
Laríngea en el 100%. A pesar de ello, la Fonoarticulación sólo se presentó deficiente en
el 21% de los niños.
Para aquellas variables cuyos valores normales dependen de la edad del indivi-
duo, la estadística descriptiva presenta también los escores de desviaciones estándar
(SDE) con respecto al valor esperado para la edad. Para la comparación antes y des-
pués de tratamiento se utilizaron estos escores para reflejar sólo el efecto del tratamien-
to, ya que la estandarización por los valores esperados para la edad, elimina el potencial
de crecimiento.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 127
Las Tablas conteniendo los valores obtenidos en todas las evaluaciones cefalo-
métricas, se encuentran disponibles en el Apéndice al final de este trabajo. A continua-
ción describiremos los hallazgos más importantes de cada una de las evaluaciones.
La distancia del PgB a Sn, aumentó su valor, es decir que su distancia al plano
E disminuyó, pero no fue significativa (p= 0,1160).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 128
3.0 0.0
2.0 -1.5
1.5 -2.3
1.0 -3.0
PRE POS PRE POS
4.0
3.0
GAP
2.0
1.0
0.0
PRE POS
Con relación al Ángulo Nasolabial Total, se determinó una media pre trata-
miento de 107,31º, DE=14,92º, no observándose diferencias significativas por efecto del
tratamiento (p=0,4620; Figura Nº 80). La mitad superior reflejó una ligera disminución
de su valor de casi 2º, aunque estadísticamente no fue significativa (p=0,422; Figura Nº
81). La inferior tuvo una media de 79,45º con DE=8,56º; el pos tratamiento demostró un
aumento del valor angular significativo (p=0,0001; Figura Nº 82).
111.0 29.4
108.0 26.7
106.5 25.4
105.0 24.0
PRE POS PRE POS
Figura Nº 80
Figura Nº 81
84.2
Angulo nasolabial-mitad inferior
82.6
80.9
79.3
77.6
PRE POS
Figura Nº 82
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 130
El Ángulo del Eje Facial expresa la dirección del crecimiento del mentón, no
cambia con el crecimiento pero sí es influenciado con nuestras maniobras. En este caso,
aumentó significativamente su valor angular (p=0,0060), por lo tanto los pacientes tuvie-
ron una rotación antihoraria en su crecimiento (Figura Nº 83). El eje de la cara se cerró.
90
89
87
86
PRE POS
Figura Nº 83
Los escores de desvíos estándar del Ángulo de la Profundidad Facial demues-
tran un aumento significativo del valor angular por adelantamiento posicional del mentón
con relación a su base craneal anterior (p=0,0120; Figura Nº 84, Figura Nº 85).
86.5 -0.4
Anglulo de la profundidad facial (SDE)
Anglulo de la profundidad facial
85.8 -0.6
85.2 -0.8
84.5 -0.9
83.8 -1.1
PRE POS PRE POS
Figura Nº 84 Figura Nº 85
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 131
29.8 1.0
28.9 0.8
28.1 0.6
27.2 0.4
26.3 0.2
PRE POS PRE POS
Figura Nº 86 Figura Nº 87
59.9 2.3
59.2 2.0
58.4 1.8
57.7 1.6
56.9 1.3
PRE POS PRE POS
Figura Nº 88 Figura Nº 89
La Altura Facial Inferior disminuyó significativamente más de 2º (p=0,0020; Fi-
gura Nº 90).
47.3
Angulo de la altura facial inferior
46.3
45.3
44.3
43.3
PRE POS
Figura Nº 90
35.0 1.9
34.0
1.7
33.0
1.5
32.0
31.0 1.3
PRE POS PRE POS
Figura Nº 91 Figura Nº 92
1.89 5.00
Convexidad facial (SDE)
1.57 4.25
Plano palatino
1.25 3.50
0.94 2.75
0.62 2.00
PRE POS PRE POS
Figura Nº 93 Figura Nº 94
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 134
Los coeficientes de correlación entre las magnitudes del cambio pos tratamiento
entre escores de desvío estándar del ángulo del arco mandibular posterior, los escores
de desvío estándar del ángulo del plano mandibular y el ángulo de la altura facial inferior
se presentan en la siguiente tabla. La única correlación estadísticamente significativa es
entre el ángulo de la altura facial inferior y el ángulo del plano mandibular que cambiaron
en el mismo sentido con una correlación positiva pequeña (0.43). Por otra parte el ángu-
lo del arco mandibular posterior mostró coeficientes de correlación negativos, aunque no
significativos con las otras dos variables.
Tabla 4: Coeficientes de correlación (diagonal inferior) y valores p para la prueba de hipótesis de correla-
ción nula entre las magnitudes del cambio pos tratamiento entre escores de desvío estándar del ángulo del
arco mandibular posterior (AAMP), los escores de desvío estándar del ángulo del plano mandibular (APM)
y el ángulo de la altura facial inferior(AAFI).
AAMP APM AAFI
AAMP 10.00 0.10 0.56
APM -0.31 1.00 0.02
AAFI -0.11 0.43 1.00
Este análisis fue de mucha utilidad para determinar las características del cre-
cimiento desde el punto de vista cuali y cuantitativo, permitiendo definir dirección y po-
tencial de crecimiento. Debido a esto, contribuyó a una mejor determinación de la bioti-
pología facial.
130.0 54.0
128.0 53.0
Angulo goníaco superior
Angulo goníaco total
126.0 52.0
124.0 51.0
122.0 50.0
PRE POS PRE POS
Figura Nº 95 Figura Nº 96
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 136
76.0
75.4
74.2
73.6
73.0
PRE POS
Figura Nº 97
Los coeficientes de correlación lineal entre las magnitudes del cambio pos-
tratamiento de los ángulos goníaco superior e inferior y suma total de ángulos se pre-
sentan en la siguiente tabla. No se observaron correlaciones significativas.
Con relación a las medidas lineales, la longitud de la base craneal anterior tuvo
una media dentro de su norma 71 mm, aunque debemos aclarar que la muestra inicial
tiene una edad media de 9 años y la edad en que fue realizado este cefalograma es de
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 137
11 años. Lo mismo ha sucedido con la base craneal posterior, cuya media inicial es de
33,09mm y creció en un promedio de 35mm.
La relación entre la Altura Facial Posterior / Altura Facial Anterior aumentó sig-
nificativamente (p=0,0001) (60,21% a 61,52%) demostrando la redirección del creci-
miento hacia delante y arriba. El análisis de las correlaciones entre la magnitud del cam-
bio pos tratamiento de altura facial posterior/altura facial anterior y los ángulos goníaco
total, superior e inferior y con la suma total de ángulos mostró que la sólo estaba corre-
lacionada negativamente (r=-0.41, p=0.03) con la magnitud del cambio en el ángulo
goníaco total.
4.0 10.0
3.0 8.0
2.5 7.0
2.0 6.0
PRE POS PRE POS
Figura Nº 98 Figura Nº 99
2.0 -3.9
Distancia B - Pg sobre la HV
Distancia de B a V.V en Na
1.6 -5.6
1.3 -7.2
0.9 -8.9
0.5 -10.5
PRE POS
PRE POS
El Ángulo del Plano Mandibular aumentó su valor angular dejando de ser tan
inclinado hacia abajo y atrás, (p=0,0180; Figura Nº 103).
95.0 65.0
94.0
64.0
93.0
63.0
92.0
62.0
91.0 PRE POS
PRE POS
Figura Nº 103
Figura Nº 102
Las angulaciones dentarias se han mantenido en relación con sus bases óseas,
los cambios ortodóncicos han sido mínimos. No se ha compensado la discrepancia ósea
con movimiento dentario.
La relación vertical del Arco anterior del Atlas al Plano de Mc Gregor, también
se mantuvo en su unidad funcional superior.
15.0 6.0
Diferencia del raquis superior con el inferior
12.5 5.0
Angulo cérvico cervical
10.0 4.0
7.5 3.0
5.0 2.0
PRE POS PRE POS
Figura Nº 105
Figura Nº 104
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 141
3.0
2.4
1.2
0.6
0.0
PRE POS
Figura Nº 106
La distancia del hioides a la vertical que pasa por pre sufrió una disminución
significativa (p=0.012; Figura Nº 107) mientras que el Espacio Suboccipital aumentó
significativamente (p=0,006; Figura Nº 108).
3.1 9.0
Dist. hioides a la vertical que pasa por pre
8.4
0.3
Espacio suboccipital
7.8
-2.6
7.2
-5.5
6.6
-8.3 6.0
PRE POS PRE POS
La distancia del extremo de la cola del cornete inferior y del medio a la vertical
que pasa por PRE disminuyeron en forma significativa (p=0,0020).
14.0 60.0
58.0
Altura total de la vía aérea
11.5
Espacio aéreo libre
56.0
9.0
54.0
6.5
52.0
4.0 50.0
PRE POS PRE POS
50.0 0.7
48.5 0.5
47.0 0.4
45.5 0.3
44.0 0.1
PRE POS PRE POS
CASOS CLINICOS
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 145
Insertar aquí
los casos clinicos
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 146
DISCUSIÓN
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 147
DISCUSIÓN
Los resultados que presentamos, respaldan claramente la teoría de que las alte-
raciones de la respiración nasal pueden alterar la postura y la morfología cráneofacial,
constituyendo un factor dentro del complejo multifactorial. Esto ha sido corroborado en
los dos últimos años tanto por estudios clínicos, como de experimentación animal (106)
(140). Estas alteraciones son especialmente importantes dentro de los diez primeros
años de vida como lo remarca Mocelli (101) de aquí la importancia del planteamiento
del diagnóstico completo interdisciplinario, para la detección precoz de los síntomas a
través de la evaluación características anatómicas, funcionales, etc. (136).
Con relación a las Características Posturales, todos los niños presentaron alte-
ración con escápulas aladas y pérdida de relación mentón esternal (Rocabado) Lapierre.
Debido a este cambio postural es que aconsejamos partir de un análisis cefalométrico
verdadero, es decir de una toma radiográfica en posición natural del paciente. Ésta pue-
de ser reproducida sin error sistemático como lo demuestran Solow y Tallgren, quienes
encontraron que la reproducibilidad fue de 1,43º con la posición del espejo, como noso-
tros preconizamos (147, 149). Luego del tratamiento, se observó cómo la base de sus-
tentación pédica, la cintura pélvica y la escapular, se alinearon de la misma manera que
la mandíbula y la mirada.
Cuando nos encontramos con pacientes que tienen severos disturbios esquele-
tales; en estos casos es necesario tomar más de un plano de referencia, ya que los in-
tracraneales son muy variables y además están poco relacionados (77). En nuestra
muestra la angulación del Plano de Franckfurt con relación a la Horizontal verdadera
varió entre 1º y 9º. Bobadilla y col. en 1999 publicaron una variación de -10º a 10º. (18)
Esta posición de la cabeza en el plano horizontal altera la posición de los maxilares co-
mo lo han demostrado muchos autores. Inclusive la mandíbula ve alterado su patrón de
cierre y su posición de reposo. (92, 49, 79, 82, 80, 90); adquiriendo un patrón de creci-
miento rotacional posterior (148) y promoviendo una relación intermaxilar de Clase II.
ron distinta altura en sus hombros y desequilibrio en las cinturas escapular y pélvica, lo
mismo que en la postura mandibular. Es importante realizar un diagnóstico precoz de
estos síntomas, para lograr evitar asimetrías de todo este sistema biomecánico , que
pueden conducir a escoliosis y asimetrías faciales. De esta manera verificamos la exis-
tencia de una relación caudo-cefálica de las cadenas musculares.
Las distancias del labio superior e inferior a la vertical que baja de SN disminu-
yeron significativamente por efecto del tratamiento y del adelantamiento espacial del
mentón Tabla Nº 6.
Nuestros pacientes presentaron una media Pre de 57.45º, para la Altura del
Maxilar Superior cuando lo citado por Ricketts para los 9 años debería ser de 53º; esto
se contrapone con lo encontrado por otros autores quienes en pacientes con respiración
bucal observaron un aumento de la altura facial inferior, pero ningún cambio significativo
en la altura de la mitad superior de la cara (77).
Este análisis fue de mucha utilidad para determinar las características del cre-
cimiento desde el punto de vista cuali y cuantitativo, permitiendo definir dirección y po-
tencial de crecimiento. Debido a esto, contribuyó a una mejor determinación de la bioti-
pología facial.
rama; la mitad inferior describe la oblicuidad del cuerpo mandibular, un aumento deter-
mina la inclinación hacia abajo de la sínfisis. La media pre fue de 75,14º y la pos de
73,86º disminuyendo 2º su valor, lo que demuestra la acción rotacional anterior.
Con relación a las medidas lineales, la longitud de la base craneal anterior tu-
vo una media dentro de su norma 71 mm, aunque debemos aclarar que la muestra
inicial tiene una edad media de 9 años y la edad en que sus autores diseñaron este
cefalograma es de 11 años, por lo cual podemos inferir que ésta está aumentada como
también lo demuestra el cefalograma de Ricketts. Lo mismo ha sucedido con la base
craneal posterior, cuya media inicial es de 33,09mm y creció en un promedio de 35mm.
Para poder interpretar estos cambios es necesario confrontarlos con los actua-
les estudios sobre crecimiento. Ya en 1990 Delaire publica la diferencia entre el poten-
cial primario del crecimiento del cóndilo mandibular y el fenómeno secundario adaptativo
de la orientación de la apófisis condílea (35) y su relación con el cuerpo mandibular.
Remarca las diferencias entre estas dos unidades y las influencias de su angulación a la
cual denomina "ángulo esfigio"; además resalta la importancia de la relación de las uni-
dades microesqueletales y su capacidad de adaptación funcional.
Las teorías de crecimiento siguen progresando, sobre todo luego de los estu-
dios de Petrovic y Stutzman sobre cultivos de órganos y tejidos transplantados e in situ
(51). Según esta teoría del servosistema, los cartílagos de crecimiento reaccionan de
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 154
distinta manera. Los cartílagos de la sincondrosis de la base del cráneo (masas laterales
del etmoides, el que se encuentra entre las alas mayores del esfenoides y su cuerpo, y
del tabique nasal) al igual que el de la epífisis de los huesos largos que derivan de un
cartílago primario, parecen estar influenciados por factores extrínsecos de orden general
y específicamente por las hormonas STH, somatomedina, tiroxina y sexuales. En ellos,
los factores locales juegan un papel modelador del crecimiento, sin ser cuantitativa su
influencia. Los cartílagos de origen secundario, que se originan de precondroblastos y
su formación es secundaria durante la filo y ontogénesis, están sometidos a influencias
extrínsecas locales. Están representados por los cartílagos condíleos, coronoideo, angu-
lar del maxilar inferior, y de la sutura media palatina; en estos casos es posible modular
la magnitud del crecimiento (51).
"En los cartílagos condíleo, coronoideo y angular del maxilar inferior los efectos
indirectos corresponden a factores regionales y locales que influyen en mecanismos,
fundamentalmente neuromusculares, que actúan sobre el ajuste oclusal postural (es
decir influencia epigenética)" (51).
Los valores angulares de los incisivos a sus bases óseas no mostraron tanto
desvío de la norma. El ángulo del incisivo superior tuvo una media pre de 108.28º, sien-
do lo aconsejado de 110º a 120º. Para el inferior fue de 92.43º cuando la norma es de
90º. El tratamiento implementado no hizo variar significativamente estos valores debido a
que no apuntó a una corrección ortodóncica del overjet, sino a un equilibrio ortopédico.
De la misma manera, se extremaron las medidas del control vertical para no permitir la
extrusión molar que agravaría el patrón; por ello las distancias de las caras oclusales de
los molares al plano oclusal no superaron lo publicado como crecimiento normal por
Björk, Skieller, Riolo y Teuscher (55).
Este análisis fue diseñado para observar las relaciones biomecánicas de la pro-
pia columna cervical y de ella con la posición del cráneo. También se interpretó la ubica-
ción del hioides y su relación con la posición mandibular.
bado de 101º +/-5º. Este ángulo mantuvo estadísticamente su valor luego del tratamien-
to. Si este fuera menor indicaría una rotación posterior del cráneo, de lo contrario una
rotación anterior. Con relación al Espacio Suboccipital su media Pre también guardó
relación con lo indicado por el mismo autor y su media pos tratamiento aumentó signifi-
cativamente, permitiendo un mejor desempeño de este espacio funcional. Los Ángulos
Cráneo Odontoideo y Cráneo Cervical se mantuvieron estadísticamente iguales. Lo
mismo sucedió con el Odontoideo Cérvico Superior e Inferior. El que sí varió significati-
vamente fue el Cérvico Cervical, que valora la relación entre ambas unidades funcionales
de la columna cervical. Este ángulo tuvo una expresión máxima en la muestra que llegó
a 26º, demostrando la exagerada curvatura.
Con relación a la biomecánica del Hioides, la altura del triángulo fue pequeña y
en algunos pacientes se presentó invertido mostrando la hiperactividad inframandibular.
Esto se relacionó con la distancia del hioides al plano mandibular, en nuestros pacien-
tes esta distancia se mantuvo estadísticamente, afirmando la relación biomecánica con
la mandíbula, pero tengamos en cuenta que la mandíbula rotó hacia arriba y adelante.
Bibby y Preston, cuando diseñaron este triángulo citaron una media de la altura de
4.8mm y una distancia al plano mandibular de 25,63 en pacientes de clase I sin altera-
ciones verticales (11).
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 157
Blaker y col también encontraron que existe una relación entre la respiración
bucal y la posición descendida del hioides, citan una media del grupo control de
9.10mm y para el grupo problema de 18.96mm (16).
La distancia del hioides a la vertical verdadera que baja del arco anterior del
atlas aumentó y a la vertical que baja de PRE disminuyó con el tratamiento, demostran-
do el reposicionamiento del sistema.
Con relación al Velo del paladar es importante remarcar que su longitud y espe-
sor aumentaron significativamente. Esto cobra particular importancia porque denota una
posibilidad funcional de cambio con rehabilitación fonoaudiológica. Trabajos de AOS
publican la relación existente entre pérdida de elasticidad y delgadez del paladar blando
asociados a cambios patológicos en estos pacientes (166). Esto es sumamente impor-
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 158
tante, debido a que el velo forma con sus músculos como una cortina, para que las fun-
ciones de los aparatos respiratorio y digestivo puedan ser sincronizadas. Se encuentra
relacionado con las funciones de respiración, fonación y deglución; alterna entre el cierre
de la naso y la orofaringe. El primer estudio de anatomía velofaríngea y espacio aéreo
en pacientes de cara larga portadores de AOS, sometidos a una cirugía de doble proce-
dimiento de avance maxilar y cierre antihorario, fue publicado por Mehra en agosto del
2001 (96). Aquí se ratificaron características relacionadas con AOS y se remarcó la im-
portancia del pasaje aéreo disminuido; encontraron en estos pacientes una media de
11mm +/-2mm entre el velo y la pared faríngea.
De todas las variables analizadas merece una atención especial el Ancho Nasal
de Ricketts, el cual tuvo un significativo incremento teniendo en cuenta los escores de
desvíos estándar, y el Ancho del Maxilar superior experimentó la misma respuesta. Esto
remarca la interdependencia de las cápsulas nasal y oral, y la respuesta ante el estímu-
lo funcional.
Tratamiento Propuesto
Muchos son los autores que relatan sus éxitos con la utilización de la FEO alta
(97, 172, 159). Otros, preconizan su utilización como complemento para afianzar los
cambios producidos por mecánicas de distalización intraoral y lograr una correcta ubica-
ción radicular de los molares (60).
hioides, por acción de esta tracción cervical, lo que demuestra la existencia de un impor-
tante mecanismo neuromuscular para mantener la homeostasis de la respiración (62).
CONLUSIONES
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 162
CONCLUSIONES
El hecho de partir con nuestro diagnóstico desde una postura natural de los pa-
cientes, que puede ser reproducida sin error sistemático, como lo demuestran muchos
estudios, es sumamente importante. Además de utilizar como complemento, planos de
referencias extracraneales como lo es la Vertical y Horizontal Verdadera, que son menos
variables que los intracraneales. Nuestra muestra mostró una diferencia entre Franckfurt
y la Horizontal Verdadera que varió entre los 10º.
En el campo del perfil facial los cambios que sucedieron están relacionados al
cambio ortopédico del maxilar superior y al efecto rotacional del mentón; mejorando el
equilibrio estético de los tejidos blandos y su función.
La utilización de FEO de tracción alta y arco externo corto, demostró ser eficaz
a la hora del control ortopédico del maxilar superior en sentido anterior y vertical, lo-
grando una autorrotación mandibular. Esto quedó demostrado por los cambios en in-
numerables variables cefalométricas, entre ellas el Áng. del Eje Facial, Altura Facial Infe-
rior, Profundidad Facial, Convexidad Facial, Profundidad Maxilar, Áng. del Plano Mandi-
bular, Arco Mandibular Posterior, Áng. Goníaco, Wits verdadero, etc. Todos estos cam-
bios se produjeron gracias al papel modelador del crecimiento que poseen los factores
locales y su capacidad de modular la magnitud del mismo.
Los cambios demostrados a nivel del plano palatino tanto a través del cefalo-
grama de Ricketts como del propio diseñado, demuestran la efectividad ortopédica y
funcional.
Para David Turpin, editor en jefe del American Journal of Orthodontic and Den-
tofacial Orthopedics, con motivo del simposium de tratamiento precoz enunció que " la
mayor parte de las respuestas descansan en el cuidado interdisciplinario. Hemos inverti-
do más de 100 años en desarrollarnos como especialidad, y deberemos invertir los pró-
ximos 100 en interactuar más cercanamente con las otras disciplinas" (40).
RESUMEN
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 166
RESUMEN
SUMMARY
All the evaluations showed a satisfactory growth potencial with the interdiscipli-
nary treatment chosen. The functional and cephalometric variables were significant to
demostrate the biomechanical cranio-cervico-mandibular and hyoid change when reha-
bilitating the respiratory function, the body posture and to balance the intermaxilar rela-
tioship through the effort of an interdisciplinary team.
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MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 179
APÉNDICE
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 180
HISTORIA CLINICA Nº
PACIENTE:
ATENDIDO POR:
FECHA:
Paciente Nº
FILIACION
Peso: Talla:
ANALISIS GENERAL
Musculatura Perioral:
Posición de la Lengua: Alta Baja
ANALISIS ESTOMATOLOGICO
Observaciones:
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 182
Datos Personales
Fecha:
Nombre:
Fecha de nacimiento: Domicilio:
Estado Civil: Ocupación:
Derivación Dr./a. :
Diagnóstico:
Síntomas :
Tratamientos instituídos:
Tratamientos Ortopédicos:
Medicación:
Evolución:
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 183
Exámen Físico
Mediciones:
Edad: Sexo: Peso Actual: Peso Habitual:
Talla: FC: FR: TA:
Indice de masa corporal ( P/T2):
Tipo constitucional:
Cabeza y cuello:
Tipo de cráneo:
Conformación:
Perímetro cefálico:
Excursión articular de columna cervical:
Tono Muscular de columna cervical:
Linea bipupilar.
Linea bi-auricular:
Simetría:
Tronco :
Conformación:
Perímetro toráxico: Perímetro abdominal:
Cintura escapular:
Cintura Pelviana:
Columna dorsal:
Columna lumbo-sacra:
Cirugías:
Drenajes:
Otros:
Extremidades:
Test de Laxitud según Rocabado:
MM SS (mediciones, simetrías y asimetrías):
MM II (mediciones, simetrías y asimetrías) :
Retracciones tendinosas :
Excursión articular :
Valoración Muscular :
Cirugías:
Drenajes:
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 184
Otros:
SNC y SNP :
Sensibilidad:
Tono: Trofismo: Fuerza muscular:
Coordinación:
Equilibrio:
Postura:
Plano Posterior Plano Lateral
Marcha:
Plano frontal anterior:
Plano frontal posterior:
Plano sagital izquierdo:
Plano sagital derecho:
Longitud de los pasos:
Tipo de apoyo:
Talón- antepié: Antepié-talón:
Marcha con obstáculos:
Estudios Complementarios:
Tipo Fecha Comentarios
Rx.
Tac.
Rnm.
Ecografía
Otros
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 185
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 186
Diagnóstico Postural:
Tratamiento y Evolución:
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 187
CONSENTIMIENTO ORTODÓNCICO
LA ORTODONCIA:
La ortodoncia procura mejorar la oclusión ayudando a dirigir las fuerzas ejercidas sobre
los dientes, para protegerlos del trauma durante las actividades cotidianas como masticar y trit u-
rar. La ortodoncia distribuye la tensión de la masticación por toda la boca para minimizar la te n-
sión excesiva en los huesos, las raíces de los dientes, el tejido de las encías y las articulaciones
temporomandibulares.
Toda forma de tratamiento médico y dental, incluida la ortodoncia, tiene algunos riesgos
y limitaciones. Afortunadamente en la ortodoncia las complicaciones no son frecuentes y cuando
ocurren generalmente son de poca importancia. No obstante, deben considerarse al tomar la
decisión de someterse al tratamiento de ortodoncia. Los principales riesgos que se confrontan en
el tratamiento de ortodoncia pueden incluir:
2.- En algunos pacientes, la longitud de las raíces de las piezas dentarias puede redu-
cirse durante el tratamiento de ortodoncia. Algunos pacientes son propensos a que esto suceda,
otros no. Habitualemente esto no tiene consecuencias significativas pero, ocasionalment e puede
consituir una amenaza a la duración de las piezas en cuestión.
3.- La salud del hueso y las encías que sujetan los dientes puede ser afectada por el
movimiento ortodóncico de las piezas, si ya existe la condición, y en algunos casos raros, cuando
no parece existir una condición. En general, el tratamiento de ortodoncia disminuye la posibilidad
de pérdida de piezas o de enfermedad de encías, debido al mal alineamiento de las piezas de n-
tarias. La inflamación de las encías y la pérdida del hueso basal pueden ocurrir si la placa bacte-
riana no se desprende diariamente con una buena higiene bucal.
4.- Los dientes pueden presentar una tendencia a cambiar sus posiciones después del
tratamiento. Generalmente, esto es sólo un cambio menor y el fiel uso de los retenedores debe
reducir esta tendencia. Durante la vida, la oclusión puede cambiar de manera adversa por diver-
sas causas, tales como, cambios del crecimiento y/o madurez, el respirar por la boca, el tocar
instrumentos musicales, y otros hábitos orales, todos los cuales pueden estar fuera de control del
ortodoncista.
6.- A veces una pieza dental puede haber sido traumatizada por un accidente anterior o
puede que tenga restauraciones grandes que causen daño al nervio de la misma. En algunos
casos, el movimiento ortodóncico de la pieza puede agravar esta condición y en raras ocasiones
podría culminar en tratamiento de conducto de la raíz.
7.- A veces los dispositivos de ortodoncia pueden ser accidentalmente aspirados o inge-
ridos, o pueden irritar los tejidos bucales. Las encías, las mejillas y los labios pueden ser esc o-
riados o irritados por los aparatos rotos o sueltos, o por golpes en la boca. Debe esperarse una
sensibilidad después del ajuste, y este período de sensibilidad varía con cada paciente y el pro-
cedimiento realizado. La sensibilidad típica posterior al ajuste puede durar de 24 a 48 hs. Ud.
debe avisar a su ortodoncista sobre cualquiera de los síntomas anormales o sobre aparatos s uel-
tos o rotos, tan pronto los note.
10.- A veces la cirugía oral, la extracción de piezas o la cirugía ortognática son neces a-
rias en conjunción con un tratamiento de ortodoncia, especialmente para corregir el api ñamiento
o severo desequilibrio de la mandíbula y/o maxilar. Antes de tomar su decisión de continuar con
este procedimiento, debe consultar a su dentista general o cirujano oral sobre los riesgos implíc i-
tos de este tratamiento.
12.- El tiempo total requerido para completar el tratamiento puede exceder al estimado.
Un crecimiento excesivo o deficiente del hueso, la poca cooperación en el uso de aparatos duran-
te las horas requeridas por día, la higiene bucal insuficiente, los aditamentos rotos y el no acudir
regularmente a las consultas pueden demorar el tiempo de tratamiento y afectar la calidad de los
resultados definitivos.
13.- En casos en que se han empleados bracketts transparentes y del color de las pi e-
zas, hay informes de que algunos pacientes han experimentado la rotura de los bracketts y/o
lesiones a los dientes, incluyendo el desgaste y desprendimiento en escamas del esmalte al
despegarlos. Los soportes fracturados pueden resultar en pedazos que podrían ser nocivos para
el paciente especialmente si se ingieren o aspiran.
14.- Debido a la gran variacion de tamaño y forma de los dientes, el logro del resultado
ideal, (por ej. el cierre total de espacio excesivo) podría requerir tratamiento dental restaurativo.
Los tipos más comunes de tratamiento son la consolidación cosmética, el tratamiento restaurat i-
vo de coronas y puentes y/o terapia periodontal. Le instamos a que Ud. consulte a los odontólo-
gos encargados del cuidado dental y médico adjunto al tratamiento de ortodoncia.
MARÍA LAURA IRAZUZTA PÁGINA 190
Para la inmensa mayoría de los pacientes, el tratamiento de ortodoncia es un proceso electivo. Una
posible alternativa al tratamiento de ortodoncia es no someterse a tratamiento alguno. Ud. puede optar por
aceptar su condición bucal actual y decidir vivir sin correción o mejoría ortodóncica. La alternativa específica
al tratamiento de ortodoncia de cualquier paciente específico, depende de la índole de la dentadura de esa
persona, las estructuras de base y su apariencia. Las alternativas podrían incluir:
Por la presente confirmo que se me han comunicado las principales consideraciones y los posibles
riesgos del tratamiento de Ortodoncia. Se me ha explicado y he comprendido que pueden existir otros pro-
blemas que ocurren con menor frecuencia o son menos severos.
La Dra. Maria Laura del C. Irazuzta me ha expuesto el tratamiento de ortodoncia que considera
adecuado para .................................................................................................. por lo que se me ha pedido que
haga una elección sobre ese tratamiento. A tal fin se me ha presentado información para ayudarme a tomar mi
decisión y se me ha dado la oportunidad de hacer a la Dra. María Laura del C. Irazuzta todas las preguntas
que tenia sobre el tratamiento propuesto, el cual consiste en:............................................................................
.......................................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................................
.......................................................................................................................................................................................
.................................................................................................................
Por lo expuesto precedentemente, doy mi consentimiento para que la Dra. María Laura del C. Ira-
zuzta, proporcione citado tratamiento a .................................................................................. como así también a
utilizar los expedientes de ortondoncia, incluyendo fotografías, tomadas en el proceso de exámenes, trata-
miento, y retención con fines de consultas profesionales, investigación, educación o publicación en revistas
profesionales, a cuyos efectos deberían tener en cuenta las normas éticas correspondientes a dicho tipo de
publicaciones.
FIRMA: ............................................................
ACLARACIÓN: ...............................................
INDICE
FUNDAMENTACIÓN .................................................................................................................... 1
INTRODUCCIÓN ...................................................................................................................... 7
OBJETIVOS ............................................................................................................................. 87
Objetivos Generales ................................................................................................................ 87
Objetivos Específicos.............................................................................................................. 87
Para visualizar los casos clínicos deben acceder al ejemplar original en la Biblioteca de la Fa-
cultad de Odontología, UNC.
COMPAGINACIÓN E IMPRESIÓN
AÑO 2001