Origen de La Ciencia
Origen de La Ciencia
Origen de La Ciencia
Desde que Heráclito el oscuro definiera la realidad cambiante que nos rodea, la
filosofia inició un camino de incesante discurrir. Cuando volvemos a los mismos
parajes para bañarnos de nuevo en el río, siempre hay un cambio aunque sea
imperceptible. No es la misma agua y no será el mismo baño. Con un poco más de
perspectiva que la duración de una vida humana, nada permanece.
Para empezar confundieron la ciencia con el método y pensaron que todo aquello que
era experimental era bueno. Y que, por contra, todo lo que sonaba a ciencias sociales
era meramente especulativo. Empezaron por cargarse los estudios clásicos con el
criterio de su utilidad. El latín no era una lengua muerta a mediados del XIX, porque
aún se hablaba latín en las universidades y habían escrito en la lengua de Roma los
tratadistas, ya fueran biólogos como Linneo, filósofos como Descartes o eminentes
astrónomos y matemáticos como Copérnico o Newton. Empero, desapareció de los
estudios obligatorios de la enseñanza secundaria. No eran conocimientos prácticos,
según la argumentación de los ignaros gobernantes. Claro que, según esa misma
dogmática, tampoco son útiles ni el estudio del arte, ni el de la historia, ni el de la
lengua y literatura, uno por pasado, otro por evanescente y el del idioma, porque ya lo
hablamos todos y porque a buen entendedor, con pocas palabras basta. Por eso se
inventó después el lenguaje de género, para hacerlo ininteligible, pero, eso sí,
haciendo visibles las diferencias sexuales.
De esta manera, se separaron las ciencias de las letras, hoy llamadas humanidades.
En el colmo de la estulticia, se crearon asignaturas como la Educación para la
Ciudadanía, que remedaba a aquella Formación del Espíritu Nacional; o se hacía
curricular la Religión. Se insiste en dar las clases en un segundo idioma, cuando no se
conoce el propio y se suprime el arte en los estudios de arquitectura, porque la luz, el
color y las concepciones espaciales –siempre cargadas de ideología– son
incompatibles con el cálculo de estructuras.
Desterremos algunos tópicos: cada ciencia tiene unas características que le son
propias, en general condicionadas por el objeto de estudio y por el método. Sin
embargo el método de todas las ciencias experimentales no es el mismo, como
tampoco lo es el objeto. La zoología tiene sus peculiaridades que la distinguen de la
biología, lo mismo que la botánica de la meteorología, la física de la química y, dentro
de ésta, la orgánica de la inorgánica. Sin embargo, las matemáticas, ciencia básica en
los conocimientos científicos, suelen usar una metodología distinta para el desarrollo
de sus demostraciones científicas. Será que las ciencias se rebelan.
LA TECNOLOGIA
EL ARTE
LA RELIGION
Ciencia y religión son las dos grandes visiones del mundo más importantes. Son
fenómenos globales presentes a lo largo de toda la historia de la humanidad. Las
relaciones entre ciencia y religión se pueden enfocar desde tres puntos de vista:
histórico, epistemológico y sociológico. La primera pregunta que se plantea es si
son entre si compatibles o incompatibles. Dentro de la compatibilidad se puede
destacar su autonomía y desde ella el diálogo y la complementaridad.
OPIO DE LA CIENCIA
La miseria religiosa es a la vez la expresión de la miseria real y la protesta contra
la miseria real. La religión es el suspiro de la criatura oprimida, el sentimiento de
un mundo sin corazón, así como el espíritu de una situación sin alma. Es el opio
del pueblo.
ORIGEN DE LA CIENCIA
ESTUDIANTE:
MIGUEL ANGEL NOJ CHANCHAVAC