Humanidad de Cristo

Introducción

La humanidad de Jesús es tan importante como su deidad. Jesús nació como un ser
humano, pero seguía siendo una persona divina. Entender el concepto de la humanidad de
Jesús juntamente con sus atributos divinos es difícil de comprender para nuestra mente
humana y limitada, pero como creemos que la Palabra de Dios es infalible, encontramos
varios versículos que demuestran que Jesús es Dios Hombre, por lo tanto, a pesar que es
difícil para nuestra mente humana entender, creemos por fe, pues la Biblia nos asegura que
Jesús fue completamente hombre y completamente Dios.

Grupos contra la Humanidad de Jesús

Había grupos que rechazan estas verdades bíblicas que Jesús era Hombre y Dios, ellos son:

1. Ebionismo: Declaran que Jesús era un hombre, pero no Dios.

2. Docetismo: Jesús era Dios, pero no hombre.
3. Apolinarismo: Declaran que Cristo asumió un cuerpo humano pero que no tenía
Espíritu humano, aunque su cuerpo y su alma eran humano.

Ebionismo

Es un término patrístico (Es el estudio del cristianismo de los primeros siglos y de sus
primeros autores conocidos como padres de la iglesia. Se considera que el periodo corre
desde la parte final del Nuevo Testamento, específicamente desde los Hechos de los
Apóstoles o hasta el Segundo Concilio de Nicea, del siglo VIII.) que hace referencia a una o
varias sectas judeocristianas (también llamados cristianos hebreos o cristianos judíos,
fueron los miembros originales del movimiento judío que más tarde se convirtió en el
cristianismo) que existieron durante el cristianismo primitivo (es el período de la historia
del cristianismo anterior al Primer Concilio de Nicea).

Veían a Jesús como el Mesías pero manteniendo una cristología "baja", es decir, afirmaban
que Jesús era el Mesías pero rechazaban su preexistencia, esto es, que tuviera naturaleza
divina y que su nacimiento hubiera sido virginal e insistían en la necesidad de seguir
los ritos y leyes judías cumpliendo preceptos como la circuncisión, el sábado o las
prohibiciones alimenticias.
Los ebionistas solo utilizaban uno de los evangelios según los hebreos, reverenciaban
a Santiago y rechazaban a Pablo de Tarso como un apóstata de la ley. Su nombre sugiere
que otorgaban un especial valor a la pobreza voluntaria. Las últimas comunidades ebionitas
podrían haber desaparecido alrededor del siglo V.

Apolinarismo

El apolinarismo fue una doctrina considerada herética por la ortodoxia cristiana debida
a Apolinar de Laodicea y surgida como reacción contra el arrianismo

Esta doctrina afirmaba que en Cristo, el espíritu o intelecto no era humano sino divino al
encarnarse en un cuerpo sin alma que era sustituida por el mismo Verbo. Con este
presupuesto la naturaleza humana del Redentor quedaba mutilada ya que, al negarle un
alma humana, su figura quedaba reducida a una especie de marioneta manipulada por Dios.

La negación de la naturaleza humana de Cristo hizo que las enseñanzas de Apolinar fueran
oficialmente condenadas por el papa Dámaso I en sendos concilios celebrados
en Roma en 374 y 377, y posteriormente en el Primer Concilio de Constantinopla celebrado
en 381. En 388 sus seguidores fueron condenados al destierro por el emperador Teodosio.

Existieron comunidades apolinaristas en Constantinopla y Siria. A pesar de que los

discípulos intentaron perpetuar la doctrina a la muerte de Apolinar, acaecida en 392,
alrededor de 416 la mayoría había pasado a la fe de los Concilios de Nicea y
Constantinopla y el resto al monofisismo.

Docetismo

El docetismo constituye la herejía que niega la realidad carnal del cuerpo de Cristo. Por
su etimología viene de la voz griega dokéo, parecer, dókesis, apariencia. Sirve para
designar la creencia de los que no admiten que Jesucristo ha sido hombre verdadero, con
cuerpo de carne y hueso. Por consiguiente, sería solo apariencia lo que
los Evangelios cuentan y la Iglesia enseña sobre la concepción humana de Cristo, su
nacimiento y su vida, sobre su pasión, muerte y resurrección.

Es una doctrina aparecida a finales del primer siglo de la era cristiana, que afirmaba
que Cristo no había sufrido la crucifixión, ya que su cuerpo sólo era aparente y no real.
Estos dos dogmas (Encarnación y Redención) han sido los verdaderos obstáculos con que
han tropezado los partidarios de la gnosis. Para algunos autores de esta teoría Cristo fue
simplemente el hijo de José y María, negando así su divinidad. Otros niegan su humanidad
y vieron en su concepción, nacimiento, muerte y resurrección solamente fenómenos
aparentes, sin la menor realidad objetiva.

Incluso el filósofo gnóstico Basílides afirmó, para explicar el traslado de la cruz, que
fue Simón de Cirene y no Cristo quien la cargó, de manera de argumentar a favor de la
presencia aparente y no real física de Jesús, pero éste argumento es erróneo, ya que en el
registro bíblico se manifiesta que Simón cargó con la cruz después de que a Jesús le
propinaron tanto golpes en la cabeza como azotes en el cuerpo, lo cual deja en evidencia
que Jesús no la cargó sencillamente por encontrarse demasiado débil y malherido (Mateo
27:26-32; Lucas 23:25-26), mas no por no hallarse en presencia corporal real.

Tres Padres de la Iglesia también combaten contra el docetismo:

1. S. Ireneo, contra los gnósticos en general, sale al paso de la distinción sutil de ver
dos personajes en Cristo. «Jesús y el Cristo, dice, no forman sino un solo hombre-
personaje: El Hijo de Dios encarnado».
2. Tertuliano contra los marcionitas. Sus afirmaciones más importantes van a probar
que Cristo ha nacido de la Virgen.
3. S. Agustín, contra los maniqueos. Sus afirmaciones principales tienden a rebatir las
pruebas que sacan de la S. E. para probar que Cristo no podía encarnarse, son
fantásticas e ilusorias.

Por otra parte ciertos Padres de la Iglesia fueron acusados de docetistas, concretamente
podríamos nombrar a dos: Clemente de Alejandría y Orígenes.

¿Porque Jesús tuvo que nacer como un ser humano?

Para revelarnos al Padre, para poder experimentar la muerte, y con su muerte
moriría por los pecados, porque eso era parte de su encarnación, Dios encarnado
y murió por los pecados del mundo.

- Gálatas 4:4-5
Cumplimiento de Tiempo: Es el tiempo señalado por Dios para la
venida de Cristo en semejanza de hombre.
Dios envió a su Hijo: Pablo da énfasis en la deidad de Jesús como Hijo
de Dios
Nacido de mujer: Pablo da énfasis en la humanidad de Jesús (nacido
de mujer y nacido bajo la ley)
Nacido bajo la ley: Jesús nació de una mujer, fue humano y estaba
sujeto a la ley de Dios.
Redimiese: Propósito de Dios al enviar a Cristo era rescatarnos de la
esclavitud de pecado.
Adopción: Convertirnos a los esclavos en hijos.

- Levíticos 17:11; Hebreos 9:22, 10:4, 10:10-14

Dios estableció la necesidad del derramamiento de sangre para la remisión
de los pecados. La sangre de animales fue aceptable de manera temporal,
pero la sangre de los animales no era suficiente para remisión de pecados.
Por eso, Jesucristo, el Cordero de Dios perfecto, se sacrificó y derramó su
sangre para cubrir los pecados de todo el mundo. 1 Jn 2:2, sí él no hubiera
sido hombre, esto era imposible.

- Hebreos 4:15
Sólo un ser humano podría compadecerse de nuestra debilidades y
tentaciones. En su humanidad, Jesús fue sometido a toda clase de pruebas
que nosotros tenemos, por eso, Él capaz de comprendernos y de ayúdanos.
Él fue tentado, perseguido, despreciado, sufrió dolor, soporto los dolores
de la muerte y una muerte terrible y cruel que es la cruz. Pero cabe
aclarar que Él no peco.

- 1 Juan 4:2-3
Fue necesario que Jesús viniese en carne, pues creer en esa verdad es un
requisito para nuestra salvación, por lo tanto, declarar que Jesucristo ha
 venido en carne es la marca de un espíritu que viene de Dios, mientras lo
que niegan son los anticristos.

PROPOSITO DE LA HUMANIDAD DE JESUS

1. Para revelarnos a Dios – Juan 1:18; 14:7-11

El Evangelio de Juan lo escribió Juan (Jn 21:20-25), aproximadamente 95-100 d.C.,
y fue escrito en Éfeso.
Trasfondo histórico, Juan, fue el más joven de los doces apóstoles, escribió este
evangelio algún tiempo después de Mateo, Marcos y Lucas. El evangelio de Juan
trata de los asuntos más profundos de la vida de Cristo, presenta a Jesús como el
Hijo de Dios, el unigénito del Padre, dando como idea principal la deidad de
Jesucristo y que él en verdad es el hijo de Dios y la vida eterna esta en él.
El propósito del Libro es para que creemos que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios y
creyendo tengamos vida eterna. Jn 20:30-31.
Juan 1:18 – A Dios nadie vamos a ver, por eso, el unigénito que no significa uno,
pero si quiere decir único, entonces Dios reveló su naturaleza y esencia de una
forma que podía verse y tocarse, en Cristo, Dios se hizo hombre y habitó entre
nosotros.

2. Para proveer un ejemplo para nuestras vidas – 1 Pedro 2:21; 1 Juan 2:6
La Carta de Pedro fue escrita por el apóstol Pedro, aproximadamente en los años 64
d.C., fue escrito en Roma.
Transfundo histórico, bajo la persecución de Nerón a los cristianos, empezó en
Roma luego por el ejemplo de Nerón se estimularon los enemigos de los cristianos y
en todos lados los perseguían, la iglesia ya tiene unos 35 años y estaba pasando en
toda la iglesia de la época. Es principalmente una exhortación a permanecer firmes
en la persecución. La idea principal del libro era el ejemplo y él sacrificio de Jesús,
con la idea de animar y exhortar a una iglesia perseguida.
1 Pedro 2:21 – Pedro estaba rogando que debían abstener los deseos de la carne y
mantener una buena manera de vivir, para que los murmuraban de ellos, podría
Glorificar a Dios con sus buenas obras. Y también debemos vivir nuestra vida libre,
 pero no debemos usar nuestra libertad como pretexto para hacer el malo, al
contrario sino como siervos de Dios. Pues para eso fuimos llamados, y tenemos
nuestro Salvador como máximo ejemplo.

3. Para proveer un sacrificio efectivo por el pecado – Hebreos 10:1-10

El libro de Hebreos no se sabe quién fue el escrito, pero fue escrito
aproximadamente en los años 67-69 d.C., en la ciudad de Italia, Roma.
Trasfondo histórico, fue escrita a un grupo de judíos cristianos, que habían pasado
por persecución y se estaban alejando de su fe y estaban cediendo a la tentación de
volver al judaísmo. La idea principal era mostrar que Jesús es lo mejor, que su pacto
y sacrificio es insustituibles y corregir la idea, el concepto equivoca de los hebreos,
aclarando la superioridad de Cristo, el nuevo pacto, sacerdocios y advertencia.
Hebreos 10:1-10 – Esta aclarando que los sacrificios que ofrecían una vez por año
no podía hacer perfecto, pues si era, así no debería hacer los sacrificios una vez por
año, pues la sangre de los toros y machos cabríos no podría quitar los pecados,
entonces Ver. 6-7 muestra que Jesús vino hacer la voluntad del Padre, haciendo
sacrificio y ofrenda y holocaustos y expiaciones por el pecado, por lo tanto, somos
santificados mediando esa ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecho una vez y para
siempre.

4. Para poder cumplir el pacto davídico – Lucas 1:31-33

El Evangelio de Lucas, lo escribió Lucas, aproximadamente en los años 58-62 d.C.,
en la ciudad de Roma.
Trasfondo histórico, Lucas era griego y una persona de buena educación, era
médico y había sido compañero de Pablo, el evangelio de Lucas fue escrito para los
griegos, y presenta a Jesús como el hombre perfecto, presenta a Cristo como el Hijo
del Hombre asi como el Hijo de Dios.
La idea principal era de un Dios justo y presentar la justicia de Dios y hablar a los
griegos sobre la justicia y misericordia de Dios.
 Lucas 1:31-33 – El Ángel Gabriel anuncia a María, que ella daría luz a hijo y que
deberá llamar Hijo del Altísimo, y Dios le dará el trono de David y que su reino no
tendrá fin.

5. Para destruir las obras del diablo – 1 Juan 3:8

La carta de 1 Juan, fue escrito por el Juan, posiblemente en el año 85 a 100 d.C.,
probamente en la ciudad de Éfeso.
Trasfondo histórico, estaba naciendo el gnosticismos y entrando a la iglesia
contradiciendo toda la fe cristiana, por eso fue escrita para desenmascarar a los
falsos maestros y para limpiar la iglesia de las enseñanzas gnósticas, que eran
totalmente anticristiana. Juan da características de los falsos y desmiente todas sus
enseñanzas y habla del amor práctico.
La idea principal del libro es una carta de amor, que alertar sobre los falsos y sus
doctrinas, el amor y la posición de hijos de Dios para guardarse de lo que no es de
Él, un llamado a permanecer en Jesús y conocer lo que él hizo por nosotros.
1 Juan 3:8 – en el Capítulo 3 de 1 Juan, no está hablando del amor que el Padre,
tiene para con el mundo que le conoce, dándonos el privilegio de hacer parte de la
familia de Dios de ser llamado Hijos de Dios, que todos aquellos que son Hijos de
Dios no practica el pecado, pues para eso vino el Hijo de Dios para deshacer las
obras del diablo.
6. Para poder ser un Sumo Sacerdote compasivo - Hebreos 4:14-16
Jesucristo puede entender nuestra debilidades, porque El fue probado como nosotros
en su naturaleza humana, pero debe aclarar que él nunca peco, pues es un ser divino,
pero en su naturaleza humana fue probado.
7. Para poder ser un Juez competente – Juan 5:22, 27
Todo el juicio será llevado a cabo por nuestro Señor, además ese Juez podrá refutar
todas las excusas que podemos dar, pues él fue Dios Humano y vivió en la tierra
como nosotros.

MINISTERIO DEL DIOS HOMBRE

1. Salvador – Romanos 1:3-4
 Pablo creía que Jesús era el Hijo de Dios, el Mesías prometido, y el Señor
resucitado. Pablo llamó a Jesús descendiente del rey David para enfatizar que en
verdad en El se cumplían las profecías del Antiguo Testamento en el sentido de que
el Mesías vendría del linaje de David. Con esta declaración de fe Pablo manifiesta
estar de acuerdo con las enseñanzas de las Escrituras y de los apóstoles.

2. Sumo Sacerdote – Hebreos 4:14-16

Jesucristo es el mediador entre Dios y nosotros. Como representante del hombre,
intercede por nosotros ante Dios. Como representante de Dios, nos asegura el
perdón de Dios. Jesucristo tiene mayor autoridad que los sumos sacerdotes judíos
porque Él es realmente Dios Hombre. A diferencia del sumo sacerdote que podía
estar delante de Dios solo una vez al año, Cristo siempre está a la diestra de Dios,
intercediendo por nosotros. Además, Cristo fue tentado en su naturaleza humana,
pero no peco y no podía pecar, porque Él era una persona divina.

3. Juez – Juan 5:22

Una vez mas, estamos teniendo la prueba que Hijo, no hacia las cosas por si mismo,
sino hace va hacer el Padre, pues todo lo que el Padre hace el Hijo también lo hace,
pues el Padre no nos dará el juicios, pero todo el juicio dio al Hijo.
4. Fuente de la Vida Cristiana – 1 Juan 2:6
Cristo es nuestro grande ejemplo de vida, pero no podemos imitar su vida en Cristo,
pues Él era Dios Humano, su misión especial fue morir por el pecado, cosas que
nosotros no podemos hacer, pero si podemos hoy seguir su ejemplo en obediencia a
Dios y a los servicios a las personas.

JESUCRISTO, VERDADERO HOMBRE

Nacimiento
El nacimiento de Jesús es una de las pruebas que tenemos de su humanidad, pues nació y
entró en la familia humana como todos nosotros. Mediante el nacimiento de Jesús nadie
podría cuestionarse su humanidad ni la permanencia en ella.
Pero es muy importante aclarar, que el nacimiento de Cristo fue el mismo de todos, pero su
concepción no, pues Él fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo. Mt 1:18; Lc
1:35. Él no podría ser hijo de un padre humano, pues si así fuera, heredaría el pecado. Rom
5:12 y sabemos que Él no conoció el pecado. 2 Co 5:21.
Por lo tanto, si Cristo no hubiera nascido de forma normal, no habría base para probar su
humanidad.
Mt 1:18
El matrimonio judío tenía tres pasos: 1. Las familias se ponían de acuerdo en la unión. 2. Se
daba a conocer públicamente, en ese momento la pareja estaba comprometida oficialmente,
eso se conocía como desposorio, que era considerado una unión que podía ser disuelta solo
por la muerte o el divorcio. 3. La pareja se casaba y comenzaba a convivir. Al estar
comprometidos, una aparente infidelidad conllevaba un estigma social severo, de acuerdo
las leyes civiles judías, el hombre tenía derecho de divorciarse y las autoridades judías
podrían apedrear la mujer hasta darle la muerte. Deu 22:23-24
Deposada: μνηστεύω, cortejar y ganar, desposar o prometer en casamiento. Se usa en la
voz pasiva.
Concebido: Cristo fue engendrado «por el Espíritu Santo». La enseñanza de la Escritura en
las palabras «concebido del Espíritu Santo, nació de la virgen María». El nacimiento
virginal de Cristo fue un milagro obrado por la Tercera Persona de la Trinidad, por el cual
la Segunda Persona de la Trinidad, el eterno Hijo de Dios, tomó para sí mismo una
naturaleza humana, de tal manera que «se hizo hombre». En este sentido Cristo fue
engendrado en un tiempo y lugar determinado. Este engendramiento no fue el origen de su
Ser, José no tuve nada que ver con el nacimiento de Cristo

Genealogía
La humanidad de Cristo, podemos también comprobar y dar evidencia por sus genealogías
que señalan su origen humano desde Abraham y Adán. Mt 1:1-17.

Infancia
En realidad, no encontramos muchas informaciones en la Biblia sobre la infancia del Jesús, pero
Jesús siendo humano y de descendientes de judío, tendría que cumplir la ley y así también
demostrando y comprobando su humanidad.
1- La circuncisión. Lc 2:21
2- La presentación. Lc 2:22
3- La confirmación. Lc 2:41-42
La circuncisión se realizaba a los ochos días del nacimiento. Lv. 12:3.
La presentación a la edad de 40 días. Lv 12:4-7.
La confirmación a la edad de 12 años y el niño varón comenzaba a ser enumerado a partir
de los 12 años. Ex 34:23; 23:17. El niño varón escogido para el servicio público, se hacía
un reconocimiento y una consagración, pero eso no sucedía antes de que el hombre tuviera
30 años de edad. Num. 4:3.
Además, encontramos en Lc. 2:40 que el niño (Jesús) crecía y se fortalecía, y se llenaba
sabiduría.

Bautismo de Jesús
Antes de comenzar el ministerio público de Jesús, fue a Galilea y Juan lo bautizo. Mt 3:13-
17; Mr 1:9-11; Lc 3:21-22; Jn 1: 31-34.
El bautismo de Juan era un bautismo de arrepentimiento Mt 3:11, pero como sabemos Jesús
era sin pecado, por lo tanto, no tenía necesidad del bautismo de arrepentimiento. Juan sabia
y reconoció que el no era apto para bautizar Él Mt 3:14. Pero Jesús Mt. 3:15
Por lo tanto, podemos concluir que era conveniente que Juan bautizara a Jesús para el
comienzo de su ministerio público, Jesús estaba a punto de empezar su gran obra y era
conviene que Jesús fuera reconocido públicamente, Juan al bautizar a Jesús, estaba
declarado a todos que ahí estaba lo que ellos estaban esperando, el Hijo de Dios, aquel que
Él había profetizado bautizaría con el Espíritu Santo y Fuego. Mt 3:11

Jesús llamado hombre

Encontramos varios versículos que comprueba la humanidad de Jesús.
- Mt 4:4 – Muestra claro, en ese versículo, que Jesús contesta a Satanás que “No solo
de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.”
- Mt 11:19 – Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe.
- Jn 1:14 – El verbo se hizo carne. Significa que se convirtió en humano, ósea, se
humanó, se tomó naturaleza humana.
- Jn 8:40 – Pero ahora procuráis matarme a mí, hombre que os he hablado la verdad.
- Hech 2:22 – Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús nazareno, varón aprobado
por Dios entre vosotros con las maravillas
 - Rom 5:15 - Pero el don no fue como la transgresión; porque si por la transgresión
de aquel uno murieron los muchos, abundaron mucho más para los muchos la gracia
y el don de Dios por la gracia de un hombre, Jesucristo.
- 1 Co 15:21 – Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un
hombre la resurrección de los muertos.
- 1 Tim 2:5 – Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres,
Jesucristo hombre
- 1 Tim 3:16 – E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue
manifestado en carne
- 1 Jn 4:2 – En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que
Jesucristo ha venido en carne, es de Dios;

Jesús con elementos de una naturaleza humana

- Un cuerpo Humano: Mt. 26:26, 28; Me. 14:8; 1 Tim. 3:16 (comp. con Jn. 1:14; 1 Jn.
4:2); Heb. 2:14; 1 Jn. 1:1. Este cuerpo es una realidad manifiesta, incluso después
de la Resurrección, como puede verse por Mt. 28:9; Le. 24:39-40: «un espíritu no
tiene carne ni huesos, como veis que yo tengo»;92 Jn. 20:17, 27;
- Un Alma humana: «Mi alma está muy triste, hasta la muerte» (Mt. 26:38; Me.
14:34);
- Un espíritu humano: ¿Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu» (Le. 23:46).
«Se estremeció en espíritu» (Jn. 11:33). «Y, habiendo inclinado la cabeza, entregó
el espíritu» (Jn. 19:30).

Jesús hacia actividades humanas

- Padeció hambre padeció hambre (Mt. 4:2), sed (Jn. 19:28), cansancio (Jn. 4:6),
sueño (Mt. 8:24), miedo (Mt. 26:37), tristeza (Mt. 26:38), llanto (Jn. 11:35, comp.
con Le. 19:41), sufrimientos físicos y morales (Mt. 27:46; Le. 22:44; Heb. 2:16;
5:7), muerte cruenta (Jn. 19:30; Hch. 3:15; 5:30)
 - Tuvo Emociones: amor (Jn. 11:5, comp. Con Me. 10:21), amistad (Jn. 11:3), ira
santa (Jn. 2:15), compasión entrañable (Mt. 9:36), enojo, mezclado con tristeza (Me.
3:5), sorpresa (Le. 7:9);
- Estuvo sujeto a las leyes del crecimiento: (Le. 2:52), de la obediencia (Le. 2:51), de
la limitación (Me. 6:5; 13:32), de la tentación (Mt. 4:lss.; Me. 1:13; Le. 4:2ss.; Heb.
4:15), aunque sin pecado ni «quinta columna». Hubo que enseñarle a hablar, a
andar, a leer y a escribir; preguntaba para saber y se asombraba de lo que no
sospechaba, pues en cuanto hombre no lo sabía todo63 (Le. 9:18; Jn. 4:52; 11:34;
Mt. 8:10; Le. 7:9).

Jesús con una naturaleza perfecta

Su perfección humana resalta cuando se compara Sal. 8:4-8 con Heb. 2:6-10. También se ve
en 1 Cor. 15:45, 49; 2 Cor. 3:18 (comp. con Rom. 8:29; 1 Jn. 3:2-3); Flp. 3:21; Col. 1:18; 1
Ped. 2:21, como modelo cuyas huellas debemos seguir.
Hay quienes ven en la frase de Pilato: «/He aquí el hombre!» (Jn. 19:5) la expresión de la
ejemplaridad de Cristo, como si el gobernador romano hubiese dado testimonio de que
Cristo era el hombre por excelencia. El sentido verdadero es el siguiente: «¿Qué os parece?
¿No ha sufrido ya bastante este hombre inocente?» En cuanto a su atractivo físico, hubo
una época en la Historia de la Iglesia (siglos n y ss.) en que algunos escritores eclesiásticos
enemigos a ultranza de la cultura griega, como Tertuliano, opinaron que Jesús no había
poseído belleza física. Incluso apelaban a Is. 53:2: *No hay parecer en él, ni hermosura; le
veremos, mas sin atractivo para que le deseemos.» El contexto dice bien a las claras que se
trata del rostro de Jesús, desfigurado por los tormentos de la Pasión (V. vers. 3-5). Su
hermosura es profetizada en el Sal. 45:2: «Eres el más hermoso de los hijos de los
hombres.» A él se aplican con razón las alabanzas de la esposa en Cant. 5:10ss.: <tMi
amado es blanco y sonrosado, 65 señalado entre diez mil..., todo él codiciable.»
Por la atracción que ejercía sobre sus discípulos y sobre las multitudes que le seguían, no
cabe duda de que había tal brillo en su mirada, un tono tan dulce y firme en su voz y una
majestad tan grande en su rostro, en su andar y en todo su gesto, que bien podemos suponer
su perfecta belleza, teniendo también en cuenta que su cuerpo había sido formado por el
Espíritu Santo del vientre de una virtuosa
doncella hebrea, raza que siempre ha dado bellísimas mujeres. No olvidemos el encanto
que la virtud añade al atractivo físico.
Ya que los Evangelios no nos ofrecen ningún retrato físico de Jesús, los evangélicos nos
resistimos a plasmar en cuadros o imágenes su figura; en parte, por respeto a su persona
divina; en parte también, por el peligro de venerar cuadros e imágenes, con el probado
riesgo de fetichismo.
Sin embargo, es preciso poner espiritualmente ¿os ojos en él, para ir transformándonos en
su gloriosa imagen (2 Cor. 3:18; Heb. 12:2; 1 Jn. 3:2).
Otro aspecto que prueba su perfecta humanidad es que poseía un libre albedrío, con su
consiguiente juego de valores y motivaciones psicológicas. Alguien ha llegado a negar que
se pueda hablar de «psicología de Jesús», con lo que se pondría en tela de juicio la
declaración de Calcedonia y, más aún, la del Concilio III de Constantinopla acerca de la
espontaneidad de la voluntad humana de Jesucristo.
Juan 10:18, con el contexto del vers. anterior, nos muestra la plena libertad de Cristo. Para
demostrar que en el ejercicio de su libre albedrío entraba en juego el peso de los valores
distintos, en orden a una correcta y eficaz motivación, nos basta con Is. 53:11: «Vero el
fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho»; Le. 22:43: «Y" se le apareció un
ángel del cielo para fortalecerle»; y Heb. 12:2: «el cual (Jesús) POR EL GOZO PUESTO
DELANTE DE ÉL sufrió la cruz, menospreciando el oprobio*. Todos estos textos
demuestran que Jesús necesitaba, como todo ser humano, un valor satisfactorio (una
redención gloriosa) que compensase el desgaste enorme de energía psíquicofísica que
suponían los sufrimientos que había de arrostrar.
También lo demuestra el <zPor lo cual...» de Flp. 2:9, tras su contexto de los vers. 6-8.