Este documento habla sobre cómo la música y la oración pueden ayudar a superar los miedos. Explica que tanto niños como adultos experimentan temores como la oscuridad, los animales o las inyecciones. Recomienda cantar himnos como "¿Cómo podré estar triste?" para mantener la paz de Dios aun en situaciones de miedo. Finalmente, cita Salmos 34:4 sobre buscar a Dios y ser libre del temor, y anima a los lectores a orar para sentir la protección divina.
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Este documento habla sobre cómo la música y la oración pueden ayudar a superar los miedos. Explica que tanto niños como adultos experimentan temores como la oscuridad, los animales o las inyecciones. Recomienda cantar himnos como "¿Cómo podré estar triste?" para mantener la paz de Dios aun en situaciones de miedo. Finalmente, cita Salmos 34:4 sobre buscar a Dios y ser libre del temor, y anima a los lectores a orar para sentir la protección divina.
Este documento habla sobre cómo la música y la oración pueden ayudar a superar los miedos. Explica que tanto niños como adultos experimentan temores como la oscuridad, los animales o las inyecciones. Recomienda cantar himnos como "¿Cómo podré estar triste?" para mantener la paz de Dios aun en situaciones de miedo. Finalmente, cita Salmos 34:4 sobre buscar a Dios y ser libre del temor, y anima a los lectores a orar para sentir la protección divina.
Este documento habla sobre cómo la música y la oración pueden ayudar a superar los miedos. Explica que tanto niños como adultos experimentan temores como la oscuridad, los animales o las inyecciones. Recomienda cantar himnos como "¿Cómo podré estar triste?" para mantener la paz de Dios aun en situaciones de miedo. Finalmente, cita Salmos 34:4 sobre buscar a Dios y ser libre del temor, y anima a los lectores a orar para sentir la protección divina.
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“Dios está Conmigo”
Versículo de la Biblia: “Oré al SEÑOR, y él me respondió; me libró de todos
mis temores. (Salmo 34:4).
¡Buenos días! ¿A cuántos de ustedes les gusta la música? ¿Y cantar?
¿Tocar un instrumento? ¿Escuchar un instrumento tocado por alguien más, o escuchar a alguien cantar? Esperar la respuesta. A mí me gusta mucho la música, Uno de mis himnos favoritos es “¿Cómo podré estar triste?” El coro de este himno dice: “Feliz, cantando alegre, yo vivo siempre aquí, si él cuida de las aves, cuidará también de mí”. ¿Cuántos de ustedes han sentido temor alguna vez? Esperar la respuesta. Yo conozco niños que le tienen miedo a la oscuridad y otros que tienen miedo de que los dejen solos. Algunos niños le tienen miedo a un animal y otros le tienen miedo a las personas que los han lastimado. Yo ya soy una persona adulta, pero también tengo mis temores. ¿Pueden adivinar qué me hace sentirme un poco temerosa? Esperar la respuesta. Se los voy a decir: Me da miedo algo tan sencillo como ir a ver al médico, porque no me gustan las inyecciones. ¿A quién de ustedes le gusta que le pongan una inyección? Esperar que levanten la mano para responder. ¡Parece que a nadie le gusta que le entierren una aguja en su piel! Otra cosa que me da un poco de miedo es tener que estar en un espacio pequeño y cerrado, particularmente si no puedo moverme por mucho tiempo. Algunos exámenes médicos, tales como una tomografía o escaneo computarizado (CT scan) o una imagen de resonancia magnética (MRI), funcionan solamente cuando estás acostado sin poder moverte dentro de una angosta cámara durante un largo tiempo. Lo que hago para calmar mis temores en una situación como esa es cantar aun cuando solamente pueda cantar silenciosamente en mi mente. Algunas veces nos sentimos abandonados, pero algún canto que tengamos en el corazón nos ayuda a vencer sobre nuestros miedos y temores. ¿Sabías que una parte de la promesa del Club de Conquistadores es “mantener una canción en mi corazón”? ¿Cómo podemos guardar una canción en el corazón? Cuando sabemos que estamos siendo bendecidos por Dios, queremos bendecirlo alabándolo a él. Entre más alabamos a Dios, más hacemos que la alabanza a él sea parte de nuestra vida. Pero, ¿qué significa alabar a Dios? En inglés, la palabra alabar se dice praising y la palabra orar se dice pray. Las dos palabras comienzan igual, así que alabar suena entonces como si estuviéramos orando y cantando al mismo tiempo. El orar a Jesús y el cantar acerca de su amor nos ayuda a vencer nuestros temores. El versículo bíblico que dice: “Busqué al Señor y él me respondió; me libró de todos mis temores” (Salmo 34: 4), debemos tenerlo siempre guardado en nuestra memoria. Estamos orando con las palabras mismas de un versículo de la Biblia cuando repetimos esas palabras del Salmo 34:4. El himno “Cómo podré estar triste” nos habla acerca de la bendición de la protección de Dios aun para un pequeño pajarillo. Los niños son también pequeños, pero Dios vela sobre cada uno de nosotros. Podemos tener miedo de que nos golpeen o de caernos mientras jugamos un deporte. Podemos sentirnos temerosos cuando no nos escogen para jugar en un equipo, o cuando se burlan de nosotros y nos ridiculizan. Podemos tener miedo cuando nos regañan o cuando no podemos aprender algo tan rápido como otros pueden hacerlo. En esas ocasiones, podemos pedirle a Jesús que esté con nosotros y entonces entonar nuestro canto. El cantar nos va a ayudar a sentir la paz de Dios y que él está a nuestro lado. Dios conoce nuestros temores y se preocupa por lo que pueda pasarnos. Nos da a sus ángeles como guardianes para que cuiden de nosotros y nos promete estar con nosotros siempre La próxima vez que sientas miedo, recuerda que Dios puede cuidar aun de las avecillas más pequeñas y que va a cuidar también de ti, pero en forma todavía más diligente. Pedirle a una niña que cante la primera estrofa, o simplemente repitan las palabras del coro. “Feliz, cantando alegre, yo vivo siempre aquí, si él cuida de las aves, cuidará también de mí”. Vamos a orar: Querido Padre que estás en el cielo, gracias por cuidar siempre de mí. Ayúdame a no tener miedo sabiendo que vas a estar conmigo en dondequiera que esté. En el nombre de Jesús. Amén.