La Ética en Las Familias
La Ética en Las Familias
La Ética en Las Familias
La ética en las instituciones públicas se refiere a una serie de posturas y normas que
adopta una institución pública. La importancia de dichas posturas éticas adoptadas por
las instituciones públicas radica en el hecho de que afectan e influyen de una u otra
manera en las personas que entran en contacto con estas instituciones día a día. Esto
quiere decir que algunas de las posturas éticas adoptadas por las instituciones públicas
se verán reflejadas en nuestra sociedad y en la vida cotidiana.
Hay alguitas posturas éticas que todas las instituciones públicas deben de tener como
son:
••• Equidad: Esta se refiere a que las instituciones públicas les deben dar el mismo
trato a todas las personas sin importar su género, color de pie, religión, etc.
••• Respeto: Se refiere a que las Instituciones públicas deber tomar en cuenta,
apreciar y valorar los derechos y cualidades de las personas.
••• Honestidad: Se refiere a que las instituciones públicas le deben de dar un trato
justo a las personas que entren en contacto con la institución pública sin abusar
de estas.
••• Responsabilidad: Se refiere a que las instituciones públicas deben de
comprometerse a que sus servicios sean los adecuados.
LA ÉTICA LAS INSTITUCIONES PRIVADAS
La ética es, con frecuencia, proclamada por instituciones privadas, pero no aplicada en
hechos concretos que reclama la ciudadanía.
El poder constituye la gran tentación de los partidos políticos por esa tentación, muchos
de ellos gastan a menudo sus mayores esfuerzos y suelen incurrir en sus peores
recursos para alcanzarlo o conservarlo.
Pero una vez logrado el objetivo, se olvidad de las promesas a la ciudadanía con lo que
viene el desengaño, la desilusión y la falta de credibilidad de los partidos políticos.
Se debe admitir que la política, en cuanto forma de actividad humana, esta regida por la
política, que se ocupa precisamente de los actos humanos en cuanto el bien o al mal que
ellos entrañan, tendremos que admitir que el fin de ella no es el poder si no el bien
común, con respecto al cual el poder no es más que un medio a sus servicio y que este
medio es siempre limitado por la dignidad de la persona humana, cuyos derechos
esenciales debe no solo respetar, sino también promover.
Hoy en día observamos que la ética es muy escasa en los partidos
políticos así como esta puede ser nula, regularmente prometen y
no cumplen, esto se debe a la educación que han recibido
anteriormente y si esta se basa en el materialismo regularmente se
traduce en corrupción; pues muchos de nosotros decimos que si
estuviéramos en el poder ayudaríamos y apoyaríamos a la gente
pero al estar arriba solo velamos por nuestros propios intereses,
como la familia y los seres que nos rodean.
Los partidos políticos son organizaciones que se caracterizan por
su singularidad, de base personal y relevancia institucional,
creadas con el fin de contribuir de una forma democrática a la
determinación de la política …ver más…
En las democracias, el riesgo de estas tentaciones es
generalmente débil, por el freno que imponen las reglas propias
del Estado de Derecho, el ejercicio de las libertades de información
y de opinión y los mecanismos de fiscalización o control político y
jurídico a que está sometida la actuación del gobierno. En la
misma medida en que estas libertades y controles son cercenados
o suprimidos, crece inevitablemente la tendencia al abuso del
poder.
La lógica inevitable de la política del poder, en que el fin justifica
los medios y para cuyo éxito maquiavélico a conseja a su príncipe
“aprender a no ser bueno”.
El anhelo del poder, junto con la avaricia o inmoderado afán de
enriquecimiento fácil, se convierten en los principales factores de la
corrupción que tanto amenaza y daña a los Estados y a las
sociedades. Para defenderse de esas lacras son necesarios
mecanismos políticos, administrativos y jurídicos como la
separación de los poderes, base de todo ordenamiento
democrático, que Montesquie propuso precisamente para que el
poder detenga al poder
4.3 ÉTICA Y MERCADO
Más allá de los viejos paradigmas sobre el capital (capital físico, financiero, humano e
intelectual), en el mundo globalizado actual cobran una importancia diferencial factores
intangibles de carácter ético, como la asunción de deberes por parte de los ciudadanos,
el cumplimiento de compromisos y acuerdos o la generación de confianza. Para ello, es
necesario el compromiso y la corresponsabilidad e todos los actores (Estado, mercado y
sociedad civil) con estos valores, creando así una identidad compartida.
La equidad no es lo justo legal, como decía Aristóteles, sino dar una dichosa
rectificación de la justicia, en ciertos casos es malo seguir la ley constituida; más es
bueno, dejando un lado las palabras de la ley, seguir lo que pide la razón de justicia y la
unidad común. Y esto es un ordenador.
Ética y cultura, entendida ésta en sus diversas acepciones, son factores que
frecuentemente han sido soslayados al configurar estrategias de desarrollo,. Enfrentados
a economías que, a pesar de su crecimiento, no logran mitigar las alarmantes cifras de la
pobreza, del desempleo y de un creciente régimen de exclusión.
Para tener una mejor ética en la cultura hay que tomar los siguientes puntos: