Síndromes Demenciales
Síndromes Demenciales
Síndromes Demenciales
Las demencias pueden ser corticales, afectan la corteza (Seniles, Alzheimer, Pick,
Vasculares) o subcorticales, afectan a los ganglios de la base (Parkinson y Coreas).
DEMENCIA SENIL
El sujeto afectado va perdiendo muchas de sus capacidades psíquicas, especialmente las
cognitivas.
La demencia no es exclusiva para los adultos mayores, aunque se suele presentar más
en esta etapa y se refiere a un conjunto de síntomas adquiridos de tipo cognitivo
(confusión mental, pérdida de memoria, deterioro intelectual, desorientación, disturbios
en lenguaje, etc.) y conductual, pero no a una enfermedad específicamente, ya que se
puede dar debido a múltiples causas.
En la demencia senil se deterioran las funciones cognitivas, sobre todo la memoria. La
capacidad para almacenar nueva información se reduce en los pacientes que sufren de
demencia senil (amnesia anterógrada) y, al mismo tiempo, puede haber perdida de las
memorias que previamente se habían formado (amnesia retrógrada). Los pacientes
pueden presentar dificultades en el reconocimiento de caras o reconocimiento de lugares
conocidos. Otra función cognitiva que afecta al paciente con demencia senil es la
dificultad para producir y comprender el lenguaje. Este problema se nota cuando hay
una incapacidad de nombrar a personas u objetos conocidos, lo que pueden impedir una
buena interacción y relación con las personas de su entorno. En ciertos casos, se puede
llegar a perder el contenido semántico al momento de hablar.
Conductuales: Los cambios en la conducta pueden darse en cualquier momento de la
enfermedad. Su intensidad y frecuencia no es necesariamente progresiva y no aparecen
en todos los casos de demencia senil. Los más recurrentes son la deambulación errática
(desorientación), agitación-agresividad, reacciones catastróficas, desinhibición (Por
ejemplo, si el paciente siente excesivo calor, es capaz de desnudarse por completo.),
quejas, negativismo, intrusividad y trastornos del comportamiento alimentario y sexual.
Los cambios conductuales pueden afectar la vida diaria del paciente, dichos cambios
requieren de un ambiente apropiado para facilitar la adaptación del paciente.
ALZHEIMER
Enfermedad atrófica cerebral difusa de circunstancias hereditarias no aclaradas.
Demencia cortical, comienza a partir de los 50 años . Se caracteriza por provocar
apraxia, afasia y agnosia. La esperanza media de vida va de 10 a 15 años.
El cuadro clínico comienza con olvido de nombres que antes conocía, empobrecimiento
de la expresión verbal. Problemas en la memoria de fijación y de conservación.
Los pacientes mantienen interés en sus actividades y en las relaciones sociales pero
paulatinamente se observa una depresión que va inundando su personalidad.
En fases mas avanzadas los pacientes no pueden sobrevivir sin asistencia.
La desorientación temporoespacial se instala casi permanentemente. Puede recordar por
un tiempo mas los nombres de los seres mas queridos.
A medida que aumentan las afecciones se vuelven intransigentes (no consienten con lo
razonable) y pendencieros (propenso a peleas). Desarrollan delirios de persecución.
Se diferencia de una demencia senil solo cuantitativamente.
DEMENCIA VASCULAR
Su origen es una lesión cerebral a consecuencia de una isquemia o necrosis producto de
daño vascular. Tiene un comienzo brusco con una evolución irregular. Se reconocen
características similares a el Alzheimer.
Por su etiología:
1. Funcionales: genéticas, metabólicas.
2. Orgánicas: pre, peri o pos natales.
Clasificación internacional:
Según su etiología:
1. Idiopáticas: responde a un conjunto de criterios observados clínicamente y a un
registro electroencefalográfico.
2. Sintomáticas: producto de un trastorno conocido o sospechado del SNC. En la
historia clínica del paciente se observa una noxa que precede a la aparición de la
crisis y ha dejado una secuela que afecta a la corteza.
3. Criptogenicas: se agrupan a los que se les presume una causa pero esta
permanece oculta.
CRISIS GENERALIZADAS
1. Crisis del Gran Mal: perdida de conciencia y convulsiones generalizadas de tipo
tónico y clónico. Se pueden describir 4 periodos:
Pródromo.
Aura.
Convulsiones (tónico, clónicas).
Estado posconvulsivo.
En el periodo pródromo el paciente presenta síntomas motores, viscerales, sensitivos-
sensoriales y psíquicos. El paciente tiene conciencia y permite prevenir daños en las
crisis.
Las auras se presentan minutos o segundos antes de la perdida de conciencia cuando
comienza la crisis. Pueden ser motoras, viscerales, sensitivas, sensoriales, psíquicas o
automatismos.
El pródromo puede no aparecer, lo que si aparecen son las auras.
La fase tónica duran de 20 a 60 segundos.
En la fase clónica el paciente presenta sacudidas aisladas, relajación esfinterial y
perdida de saliva. Los ojos giran, se abre y cierra los maxilares y se proyecta la lengua
hacia fuera. Dura de 2 a 6 minutos.
Al pasar la crisis convulsiva en paciente recobra su estado de conciencia y presenta
amnesia total de lo sucedido, trastornos vegetativos y gran cansancio.