Texto Completo DHSD de Boris
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Texto Completo DHSD de Boris
DIVERSO
UNA REVISIÓN HISTÓRICO-CRÍTICA
Y PROPUESTAS DE POSDESARROLLO.
Boris Tobar Solano. Mtr
Introducción
Como toda palabra, desarrollo (que puede ser intercambiada con progreso) tiene su
historia que se remonta a varios momentos, no siempre cronológicos: sus antecedentes
arrancan en los siglos XVIII y XIX, se los encuentra en la filosofía de la historia de G. Hegel,
en la visión teleológica de la historia de K. Marx, el evolucionismo bilógico de C. Darwin y
en la visión evolucionista de las culturas de antropólogos como E. Taylor. A mediados del
siglo XX, la palabra desarrollo emerge de manera discreta, con economistas como J.
Schumpeter, inicia su encantamiento con el discurso de H. Truman y la propuesta de
modernización de los países de W. Rostow; y en los años 60, se vuelve práctica política
con la implementación del programa “Alianza para el Progreso” de J. F. Kennedy.
En esos mismos años, el discurso del desarrollo entra en crisis, sobre todo por la crítica
realizada por los representantes de la teoría de la dependencia como H. Cardoso o M.
Marini. A la par se vive otro momento de re-semantización y adjetivación del concepto
para posicionarlo como un discurso válido para los pueblos o gobiernos como lo plantean
los enfoques de desarrollo humano propuestos por Max Neef, el PNUD o el mismo
Amartya Sen. En el siglo XXI, para los más críticos, se está asistiendo a una fase del olvido
de la palabra como lo plantean, A. Escobar o A. Acosta, quienes posicionan la tesis del
posdesarrollo.
Por eso, en torno al desarrollo surgen preguntas provocadoras como ¿Hoy tiene un lugar
el discurso del desarrollo? ¿Es el camino necesario que deben seguir los pueblos? ¿Es un
referente válido que puede ser asumido críticamente? (Valcárcel, 2007, pág. 3) o ¿Acaso
no será como una estrella que ya murió y de la cual solo nos queda por el momento su luz?
En este marco, el texto aborda cuatro capítulos: El primero que abre la cuestión de
desarrollo como crecimiento económico y que divide el mundo entre países desarrollados
y subdesarrollados. Se sigue con la crítica desde América Latina, al plantear que no se
debe hablar de países subdesarrollados, sino países dependientes o periféricos, que
venden bienes primarios a bajo precio a centros industriales que a su vez venden
productos transformados a altos precios, en una lógica económica que impide el desarrollo
de los pueblos y reproduce la inequidad y la pobreza.
En el capítulo cuatro, se presentan las propuestas de pos desarrollo, como una necesidad
ética frente a los límites del “mal desarrollo” impuestos por la modernidad occidental y el
capitalismo, que requieren ser superados para que las diversas formas de vida pueden
mantenerse de manera indefinida en el planeta en el marco de sociedades justas,
sostenibles y diversas.
Este texto, tiene intención pedagógica, por lo que sin descuidar la dimensión teórica, se
expone didácticamente los temas, se dividen en sub temas, se escribe en cursiva palabras
clave de cada párrafo, etc. Todo con el objetivo de que el proceso de enseñanza
aprendizaje de la materia de Desarrollo Humano sea significativo y que aporte con un
marco conceptual sólido a los futuros profesionales de la Gestión social y Desarrollo.
CAPÍTULO I.
DESARROLLO, SUBDESARROLLO Y DEPENDENCIA
En este capítulo se abordan (1) diversas comprensiones sobre la palabra desarrollo, (2) se
presenta una visión esquemática de modelos económicos que transversalizan las teorías
del desarrollo, (3) se expone la teoría clásica de la Modernización propuesta por W.
Rostow como el camino que deben seguir las sociedades tradicionales para llegar a
constituirse en países modernos, léase volverse consumidores de los productos del
almacén norteamericano, (4) luego se expone la teoría de la Dependencia para la cual no
hay países subdesarrollados o en vías de desarrollo sino países dependientes, más aún, el
subdesarrollo sería la forma necesaria de vida que deben llevar muchos países periféricos
para que pocos países centrales pueden ser y mantenerse desarrollados; en este mismo
acápite se presenta la propuesta de la CEPAL que surgió con el propósito de que los
pueblos latinoamericanos sustituyan importaciones por exportaciones, (5) por último, se
expone una visión rápida de los modos de vida y modelos socio-económicos que
atraviesan la historia del Ecuador y que sobreviven hasta el presente en diversas
comunidades, pueblos y nacionalidades; recorrido necesario para que los Gestores
Sociales realicen una labor fundamentada y situada en el tiempo y en el espacio.
A nivel etimológico Desarrollo viene de la palabra latina des-arrollar, el prefijo “des” que
refiere a realizar una acción inversa y “rrollar” con significado de rollo o ruedita de allí se
entiende como “desenrollar” o “desplegar lo que está plegado, o desenvolver lo que está
envuelto”. Esta expresión era y es usada para referirse a los seres vivos. Bajo esta
perspectiva emerge una visión naturalista, o mejor naturalizada de la sociedad.
Aristóteles, en el siglo IV a.C. planteaba que la vida plena, la felicidad se alcanza con el
“florecimiento” del ser, es decir, como si las personas ya tuvieran una semilla que solo
requiere de unas cuantas condiciones para que llegue a madurar y dar su fruto.
El diccionario del desarrollo señala que “En el lenguaje ordinario, el desarrollo describe
un proceso a través del cual se liberan las potencialidades de un objeto u organismo, hasta
que alcanza su forma natural, completa, hecha y derecha. De aquí se deriva el uso
metafórico del término para explicar el crecimiento natural de plantas y animales” (Sachs,
1996).
Así, por extensión, el desarrollo tiene un significado de impulsar el potencial interno que
tienen las personas, los pueblos y los países para que alcancen su madurez. Por ello, se
puede hablar de desarrollo biológico de las especies animales, de desarrollo psicológico de
los seres humanos, de desarrollo social (de sociedades simples a sociedades complejas),
desarrollo económico (de sociedades tradicionales a sociedades de consumo), y de
desarrollo cultural (de salvajes a bárbaras hasta llegar a ser culturas civilizadas) (¡!). Sin
duda, este es el marco de comprensión eurocéntrico, que permea las primeras
definiciones de desarrollo.
La “inmadurez es total, física (hasta los vegetales y los animales son más primitivos,
brutales, monstruosos; o simplemente más débiles, degenerados); de igual manera África,
pues al referirse a los negros de ese continente dice “Entre los negros es, en efecto,
característico el hecho de que su conciencia no ha llegado aún a la intuición de ninguna
objetividad…es un hombre en bruto” (Dussel, El encubrimiento del Otro, 2008, págs. 17-
18).
Tambien esta presente en la visión marxista del desarrollo histórico por etapas
determinadas previamente por leyes históricas, que va desde el modo de producción
primitivo hasta llegar a la sociedad sin clases y sin estado, el comunismo. En la visión
evolucionista del pensamiento de C. Darwin, que prolonga a la realidad social lo que
acontece en el mundo natural. Por último, es evidente la influencia de la escuela
antropológica evolucionsita de L. Morgan para quien las culturas han pasado por tres
etapas: el salvajismo, modo de vida en que los seres humanos sobrevive de la caza y de la
pezca; la barbarie época que caracteriza a los pueblos agrícolas y alfareros, y la última
etapa llamada civilizacion, propia de las poblaciones urbanas y que han desarrollado la
escritura.
Siguiendo la línea de Habermas, Emilio Martínez, plantea que el lenguaje tiene una
función estratégica- ideológica-de racionalidad instrumental- y otra función comunicativa,
que permite acordar el significado desde el cual se comprende un término. En este marco,
para quienes apuestan por el desarrollo se entiende como el medio-camino “por el cual las
personas y pueblos pueden llegar a una vida buena” y fundamentalmente asociado a la
satisfacción de necesidades:
“el desarrollo es un proceso global económico, social, cultural y político, que tiende al
mejoramiento constante del bienestar de toda la población y de todos los individuos
sobre la base de su participación activa, libre y significativa en el desarrollo y en la
distribución justa de los beneficios que de él se derivan” (Asamblea general de Naciones
Unidas, 1986).
Más aún, autores como Arturo Escobar o Gustavo Esteva, consideran que el desarrollo es
solo una nueva versión del colonialismo, por el cual se imponen modelos de vida norte
céntricos a los países del Sur. Por tanto, se debe realizar un proceso de descolonización de
los análisis y propuestas elaboradas con categorías socio-económicas occidentales, ajenas
a la realidad de América Latina.
Desde el campo económico, articulada siempre a la política, en América Latina en los siglos
XIX, XX y XXI, se han aplicado modelos económico-sociales de corte Liberal, Keynesiano,
Cepalino, Neoliberal y en Cuba un modelo de tipo socialista. Estas teorías son necesarias
conocerlas, al menos esquemáticamente, porque han influido en la comprensión del
desarrollo que suele esconder su origen y pretende ubicarse “más allá” del debate
capitalismo vs socialismo, sin embargo, el alma del desarrollo deja entrever los modelos
económicos que lo inspiran y a los que combate. Por lo tanto, es necesario conocer los
principios antropológicos, económicos y políticos que subyacen en dichas teorías
económicas.
Adam Smith, padre de la economía clásica, funda la teoría liberal en algunos principios que
los considera naturales: El Ser Humano es egoísta por naturaleza, libre y creativo, por lo
que ninguna institución debe impedir la libertad y creatividad económica, por eso la
economía, no solo que tiene sentido en el valor de uso de los bienes, sino en el interés que
le mueve a la persona por la riqueza, por lo que da prioridad al valor de cambio.
Asume la máxima económico-política de los fisiócratas “dejar hacer, dejar pasar que el
mundo se mueve por sí solo” que desde la concepción liberal propuesta por A. Smith
significa que el Estado no intervenga ni en el momento de la producción, en donde el
obrero y el empresario deben acordar bilateralmente el salario, ni en el momento de la
distribución o comercialización, es decir, evitar la imposición de tributos o impuestos y
peor aún definir los precios de los productos. El Mercado como parte del orden natural,
tiene una “mano invisible” que regula los precios de los productos y de la mano de obra.
El papel del Estado es garantizar el “contrato social”, ser un buen policía que cuida la
propiedad privada y permite la creatividad de los ciudadanos. Hoy dirían que debe
garantizar la seguridad jurídica, léase la defensa de los bienes e inversiones de las
empresas.
Desde esta visión, los encargados de enriquecer a las naciones son los sectores
progresistas “visionarios” de la sociedad, que con apoyo externo, reconvierten la riqueza
acumulada del capital en el aumento de producción de bienes primarios, por medio de la
extensión de la frontera agrícola, para la exportación o por medio de la implantación o
desarrollo tecnológico de industrias ofrecen productos básicos como vestido, alimentos,
para el mercado interno, que en conjunto da como resultado el crecimiento económico de
los países.
Este modelo es propuesto por John M. Keynes, para quien el motor de la economía es el
consumo, por lo que a los empresarios hay que pedirles que produzcan y al estado que
preste las condiciones para que la gente consuma, por ejemplo a través de la construcción
de carreteras, obras de infraestructura que permitan la circulación de capital; la compra-
venta de bienes y servidos producidos por las empresas, con lo que los trabajadores
tienen capacidad de consumir y darle dinamismo a la economía.
Keynes reconoce que el mercado no tiene capacidad para auto regular las relaciones
económicas y requiere del Estado como un agente regulador de la dinámica económica de
inversión, producción y consumo.
Para las economías liberales en crisis, Keynes propone reformas estructurales en las
naciones como el control de la emisión de la moneda, impulsar la producción de bienes y
aumento de salarios para que las grandes masas tengan acceso al consumo y así dinamicen
la economía. Además, propuso que las naciones cuenten con flujos estables de capital
provenientes de los organismos de crédito para inversiones que garanticen trabajo, y
circulación de capital de cara al consumo.
Este modelo fue muy útil para superar la crisis o gran depresión norteamericana de finales
de los años 20 del siglo pasado, generada por un lado por la crisis de sobre-producción
industrial y especulación de la bolsa de valores de Nueva York, y por otro, por la falta de
dinero en los “bolsillos” de la gente, que sin empleo no podía comprar bienes para activar
la economía. En ese contexto el presidente Roosevelt, se entrevistó con Keynes, lo escuchó
y generó fuentes de trabajo, elevó los salarios, impulsó la producción que dio como
resultado la reactivación económica.
Este modelo es aplicado en algunos países cada vez que hay crisis cíclicas del capitalismo
liberal, y contra la lógica del dejar hacer dejar pasar, los empresarios y banqueros
reclaman los salvatajes de sus empresas por parte del Estado. Esto volvió a ocurrir en la
crisis del 2008, en Estados Unidos, donde nuevamente el gobierno de J. Bush inyectó
capitales, en empresas, bancos e incluso dio a muchos ciudadanos norteamericanos un
bono económico para que vayan a los centros comerciales a consumir para de esta forma
superar la crisis.
Los gobiernos progresistas de América Latina de la primera y segunda década del S. XXI se
caracterizaron por ser económicamente neo-keynesianos. En el Ecuador por ejemplo el
periodo de gobierno 2007-2017 el Estado se convirtió en el primer agente de la economía
por medio de la inversión de capitales en la construcción de carreteras, edificios,
hidroeléctricas dando como resultado un alto nivel de circulación de dinero, consumo y
sensación de bienestar, sin afectar a la propiedad privada de los medios de producción,
léase empresas, industrias y bancos, que en aquel periodo resultaron muy beneficiados.
La teoría neoliberal del austriaco F. Hayek se ubica en la línea del liberalismo económico,
para quien el ser humano es libre por naturaleza y cualquier limitación (en la esfera
económica) contradice a la naturaleza. Las países necesitan un “Estado mínimo”, pues la
intervención del Estado distorsiona la dinámica económica, más aún, afirma que la justicia
social no es logro de la intervención del estado, sino del libre juego de los actores
económicos en el mercado (!). Considera que las clases medias con sus planteamientos
fiscalistas son un problema para la redistribución de la riqueza, porque la quieren hacer
desde el Estado y no desde la dinámica del mercado.
Carlos Marx, en siglo XIX, en su libro fundamental “El Capital”, hizo una aguda crítica al
capitalismo, desvelando la esencia del sistema económico burgués, que en primera
instancia, no considera al ser humano como fin de la economía, sino solo como un recurso
en medio de otros recursos para producir bienes de consumo; en segunda instancia
descubre la contradicción capital trabajo, que se da por medio de la explotación de la
mano de obra del trabajador, a quien se le paga un salario mínimo, por un tiempo de
trabajo, pero que el capitalista se apropia de otra parte del trabajo del obrero que no lo se
le paga, es decir que se apropia de manera privada del plusvalor generado por el obrero,
quien progresivamente sufre un proceso de empobrecimiento.
Marx desde la visión dialéctica de la historia, consideró que la clase obrera está llamada a
realizar la revolución que lleve adelante el camino al comunismo, pasando por la estación
del socialismo.
Para la teoría marxiana, el rol del estado es protagónico, para lo cual políticamente debe
instaurar la dictadura del proletariado y económicamente, debe producirse una
apropiación y gestión comunitaria de los medios de producción que permita la
reproducción de la vida material y espiritual del conjunto social, siguiendo la máxima de
“a cada uno según su capacidad y a cada uno según su trabajo”.
En la teoría marxista, el mercado consumista desaparece, pues una vez satisfechas las
necesidades fundamentales de la sociedad, el excedente debe ser canalizado para mejorar
el sistema de salud, educación, recreación, lo que Marx llamó el desarrollo espiritual de las
personas.
Por otro lado, el socialismo fue el inspirador para que los países liberal-capitalistas
busquen corregir el capitalismo, darle “rostro humano” o alcancen un estado de
bienestar que en alguna medida se organizó en Europa Occidental bajo la dirección de los
partidos social demócratas, demócrata cristianos o por los partidos “Euro-comunistas”.
El análisis crítico del capitalismo y su lógica de acumulación descrito por C. Marx sigue
vigente, sin embargo, el socialismo real en la práctica, tomo una línea burocrática del
partido único, sin protagonismo del proletariado; con políticas de represión a los que
pensaban de manera diversa al poder del Estado. Este modelo – del socialismo real - por
sus límites propios y por las presiones estratégicas de las potencias occidentales terminó
sucumbiendo simbólicamente con la caída del muro de Berlín en 1989.
Para concluir este punto, se puede decir que todos estos modelos de manera directa o
indirecta han inspirado y siguen inspirando las teorías y enfoques del desarrollo humano,
unos enfoques más sociales que buscan el bienestar y otros más liberales, que sin duda,
solo buscan el crecimiento económico sin redistribución de la riqueza.
Hay algunos acontecimientos históricos del S. XX, que inspiran y/o son la causa de la
emergencia del desarrollo como propuesta a ser aplicada en los diversos países:
La Segunda Guerra mundial, que dejó ver el lado bárbaro del capitalismo alemán cuando
pretendió controlar el mercado mundial por la vía bélica (la xenofobia contra el pueblo
judío solo fue una estrategia política); esta experiencia humana dejó cerca de cincuenta
millones de víctimas, pueblos desarticulados y países destrozados. En este marco de
posguerra la Organización de Naciones Unidas consiguió que los países firmaran la
declaración universal de los derechos humanos en 1948, que permitió contar con un
marco referencial ético-político guía para el “desarrollo” de los pueblos.
Otro hecho no menor es el surgimiento del “tercer mundo” como un imaginario de países,
que por sus huellas coloniales o neocoloniales, o por la falta de estructuras institucionales
internas, sufren pobreza, injusticia y que son foco de “interés” tanto de los países del
primer mundo como del segundo mundo.
Estas realidades fueron el caldo de cultivo donde surgieron los debates sobre el desarrollo,
que en última instancia, se interesó en los modos de cómo sacar a los pueblos
descolonizados de sus modos de vida tradicional para que se incorporen a la modernidad
“racional” y de consumo.
Adán Smith S. XVIII. Es considerado el padre de la Economía clásica, escribió el libro “El
origen de la riqueza de las naciones” donde afirma que es el trabajo lo que da prosperidad.
Arthur Lewis: En 1945 en su “teoría del crecimiento económico” Habla de naciones pobres
y ricas y no de desarrollas y subdesarrolladas.
La ONU en 1945 planteó que los pueblos pueden salir de su situación de pobreza
acogiendo el desarrollo como un derecho.
Ragnar Nurkse, afirma que los países pobres viven encerrados en el círculo de la pobreza:
bajo nivel de ingresos, no existe capital para dedicar a la inversión productiva y
tecnológica, con lo que se hace imposible salir de la pobreza. Por ello, Nurkse, propone la
transferencia de capitales y ayudas al desarrollo para que se aumente la productividad,
aumenten los ingresos y se rompan el círculo de la pobreza (Koldo, 2000, pág. 27)
La primera etapa identificada como Sociedad Tradicional y se caracteriza por ser una
economía agraria, con producción para el auto consumo o máximo para el mercado local.
Organizada en torno a nexos familiares que invierten muchos recursos en la actividad
productiva. Culturalmente conformista, por ello “las posibilidades de los nietos son las
mismas que tiene sus abuelos”. Esta etapa hay que superarla so pena de quedarse al
margen de los beneficios del desarrollo.
La segunda etapa que prepara las Condiciones Previas, requiere: La creación de un estado
nacional centralizado que se difunda la idea de progreso; formar nuevas personas que
puedan canalizar su capital en proyectos de riesgo; que los campesinos abastezcan de
alimentos y a la vez demanden productos industrializados; que las agencias
internacionales provean tanto al gobierno como a los sectores visionarios de fondos para
emprender proyectos modernizadores para exportar productos primarios.
La tercera etapa es el Tiempo del despegue, que irrumpe cuando se canalizan capitales en
inversiones en el sector privado para que aumenten las industrias. Se da una migración de
trabajadores agrarios hacia los centros industriales. Se superan “obstáculos” contrarios al
crecimiento permanente, por ello es necesario nuevas instituciones políticas y sociales,
estímulo al ahorro para inversiones futuras.
La cuarta etapa, La marcha hacia la madurez, es el momento en que la economía pugna por
hacer extensiva a nuevas áreas. Se impulsa el desarrollo tecnológico y la diversificación de
productos y líneas industriales. Se ofrecen bienes y servicios producidos al interior del
país, con lo que se reduce la dependencia externa.
La quinta y última etapa es la de Alto consumo. Ahora los sectores económicos, orientan la
producción hacia bienes y servicios de consumo masivo, como automóviles y línea blanca.
A la par, el gobierno debe asignar recursos para la seguridad social de la población.
«La verdad de la cuestión es que las necesidades de Europa para los siguientes tres o
cuatro años de alimento extranjero y otros productos esenciales —principalmente de
América— son mucho más elevadas que su actual capacidad de pagar, y … necesita una
sustancial ayuda adicional para evitar un deterioro económico, social y político que podría
llegar hasta un punto muy grave. Nuestra política no está dirigida hacia ningún país o
doctrina, sino contra el hambre, la pobreza, la desesperación y el caos. Su objetivo debería
ser el revivir de una economía dinámica en el mundo, capaz de permitir la emergencia de
condiciones políticas y sociales en las cuales puedan existir las instituciones libres.» (Koldo,
2000).
El objetivo que expresa Kennedy es: “Construir un hemisferio en el que todos los hombres
puedan tener esperanza de un estándar de vida apropiado, en el que todos los hombres
puedan vivir su vida con dignidad y libertad”.
La distribución per cápita, que es una sumatoria de total de los ingresos anuales que tiene
el país durante un año y que se divide para el número total de habitantes y el resultado
que da es el promedio de dinero que tiene cada habitante. Sin duda es un indicador
engañoso, porque solo es un artificio matemático, pues en la realidad esconde la inequidad
entre los ricos y los pobres.
La acumulación de bienes materiales son los que dan bienestar y felicidad. En los años
posteriores a la segunda guerra mundial, las industrias de la línea blanca, de automóviles y
de otros bienes suntuarios venden millones de productos garantizando que el bienestar y
la felicidad son posibles con solo comprar “Durex los artefactos de la familia feliz”, es decir,
se vende la idea de que a más bienes materiales se alcanza mayor es la felicidad.
F. Juicio crítico.
El pensador belga Jean Peemans desde una visión cultural considera que las visiones de
modernización tienen cuatro falencias:
La visión evolucionista, que considera que el desarrollo pasa por etapas casi naturales, en
una suerte de acenso de menor a mayor, de inferior a superior (Valcárcel, 2007, pág. 11)
Sin embargo, desde una visión optimista del desarrollo, se plantea que las políticas de
modernización que se aplicaron en otros continentes si han tenido éxito, el ejemplo fáctico
son los “tigres asiáticos”, que en los años sesenta eran sociedades agrarias tradicionales y
gracias a la aplicación rigurosa, de las propuestas modernizadoras como transferencia de
tecnología, educación de alta calidad y disciplina de sus habitantes hoy son países
industrializados, ricos y están a la vanguardia del desarrollo.
Desde países del tercer mundo, y en particular desde América Latina, surgieron análisis
críticos del desarrollo.
En este marco, a la periferia, se le asigna el rol de productos primarios, mientras que los
países del centro se especializan en la exportación de productos industriales. En la lógica
de precios los productos primarios, pierden progresivamente su valor en el mercado,
mientras que los productos industrializados, tienen precios cada vez más altos. Es decir, el
intercambio se realiza de manera desigual e inequitativa, más aún imposibilita el
desarrollo de la periferia y aumenta la dependencia frente al centro. Con lo que surge una
lógica de endeudamiento permanente de los países periféricos que necesitan más capital
para satisfacer las demandas de una sociedad de consumo periférica, la construcción de
infraestructura e incluso el pago de salarios.
Los países periféricos al producir bienes agroindustriales primarios o con algún valor
agregado para los países centrales, deben luchar entre ellos para ofertar productos más
baratos, vía mayor productividad o con mayor extracción de plusvalía absoluta al
trabajador.
La propuesta de la CEPAL impulsó el desarrollismo, pero sobre todo, sirvió en países que
ya tenían una burguesía nacional, que se beneficiaron con los créditos blandos y las
medidas proteccionistas del estado. Teóricos como Marini critican a la propuesta
Cepalina porque solo refuerza las condiciones de dependencia e inequidad de los países
periféricos frente a los países centrales, pues “el subdesarrollo no podía erradicarse con
simples políticas correctivas o con mayores dosis de inversión” (Katz).
En esta parte del capítulo, se presenta una breve reseña histórica de los diversos modos
socio-económico-culturales que se han construido al calor de la historia en lo que hoy es
el territorio ecuatoriano y los modelos igualmente socio-económico- político- culturales
impuesto en el Ecuador “desde arriba del poder”, desde la invasión inca de 1435, pasando
por los modelos de la época colonia, la época republicana conservadora, el liberal, el
periodo desarrollista, la época neoliberal, hasta la constitución del 2008 donde se intentó
dibujar una propuesta pos-desarrollista. Así presentado es una construcción lineal, sin
embargo, estos modos y modelos coexisten al mismo tiempo y espacio compartido en el
Ecuador.
La huella de estos pueblos se puede encontrar sobre todo en la costa ecuatoriana, donde
están vivos en sus rostros, en su producción de cerámica y en algunas tradiciones mítico-
religiosas.
De manera secundaria, este modo de vida coexiste hasta hoy en comunidades con alta
identidad étnica, propiedad comunal e idioma propio, que gracias a la lucha del
movimiento indígena, la Constitución los reconoce como pueblos y nacionalidades.
Hasta el día de hoy existen pueblos profundos que resistieron a la colonización y mantiene
sus formas culturales tradicionales, esto es sus formas de producción en armonía con la
naturaleza, sus relaciones comunitarias y familiares, sus formas de organización colectiva,
etc.
También empezó una tímida etapa de industrialización para el mercado local como las
fábricas de textiles, productos alimenticios con valor agrado como las fábricas de fideos, e
incluso de fabricación de llantas aprovechando el potencial del caucho natural.
En nuestro país por la explotación del petróleo se crearon empresas estatales como CEPE,
se construyó la refinería de Esmeraldas y se dio impulso a las áreas de educación, salud,
vialidad y vivienda. A la par el Estado “creció” y los gobiernos tuvieron que endeudarse
permanentemente para poder pagar inversiones y cubrir la brecha fiscal anual. Los
valores que impulsó ese modelo fueron la innovación, la creatividad, la modernización, el
desarrollo material, el progreso.
En general este modelo fue visto positivamente por ciertos sectores sociales que
consideraba legítima la intervención del Estado y el impulso de políticas de “desarrollo”
del país. Sin embargo, como contrapartida, se crearon cinturones de miseria en ciudades
como Guayaquil y Quito; la brecha entre el sector urbano y el rural creció y el anhelado
desarrollo industrial no resolvió problemas fundamentales como la pobreza.
Los valores que inspiran este modelo son los de la libre competencia, el éxito individual,
“el consumo luego soy”, “el tiempo es dinero”. Valores que tomados aisladamente son
contrarios a una visión humanista porque solo ven al ser humano como un ser para tener
no para compartir, y porque el éxito del individuo resulta del fracaso de la comunidad.
Se puede destacar, que por primera vez, desde el Estado se impulsan políticas de economía
solidaria, no tanto como un modelo alternativo, sino como otro que también entra en juego
dentro del modelo de mercado.
BIBLIOGRAFÍA
AA.VV. (1976 ). Ecuador Pasado y Presente . Quito: Universitaria.
Acosta, A. (2006). Breve historia Económica del Ecuador . Quito: Corporación Editora
Nacional .
Sachs, W. (1996). Diccionario del desarrollo. Una guía del conocimiento como poder .
PRATEC.
Valcárcel, M. (2007). Génesis y evolución del concepto y enfoques sobre el desarrollo.
Departamento de Ciencias Sociales PUCP, 40. Obtenido de
epartamento.pucp.edu.pe/ciencias-sociales/sociologia/sociologia-
publicaciones/sociologia-documentos/genesis-y-evolucion-del-concepto-y-
enfoques-sobre-el-desarrollo/
CAPÍTULO II
Introducción
Los campos social, político o cultural no se los considera en los procesos de planificación
macro o micro económica, pues estos solo son un subproducto del desarrollo económico,
es decir, solo se implementaron modelos de desarrollo de crecimiento sin bienestar, cuyo
interés radica en el desarrollo de las cosas, de los indicadores de bienes materiales y no en
el desarrollo de las personas y los pueblos. A partir de los años sesenta en adelante
empezaron a emerger, tanto desde la periferia del pensamiento como desde el centro,
críticas al reduccionismo unidimensional y posicionar otros campos como el social, el
político, el ecológico y el cultural incorporando enfoques del desarrollo adjetivados como:
integral, cooperativo, de satisfacción de necesidades, sostenible, de ampliación de
oportunidades entre otros.
En este texto se hace una recapitulación de los enfoques de desarrollo con bienestar más
significativos para América Latina y en particular para el Ecuador, porque desde las
comunidades eclesiales, organizaciones de cooperación internacional, instituciones
estatales o supra estatales y de la sociedad civil se impulsan políticas, programas,
proyectos desde algún enfoque determinado y es necesario que un estudiante de Gestión
Social maneje con solvencia estas categorías del desarrollo para explicar, comprender,
criticar e incluso hacerlos operativos en su ejercicio profesional. Así desde una visión
histórica se plantean al menos siete enfoques: (1) el desarrollo como humanización
propuesto por J. Lebret y D. Goulet; (2) el desarrollo como cooperación y solidaridad de
los países ricos hacia los países más pobres planteado por la ONU, evaluado por Lester
Pearson y teorizado desde el concepto de ayuda por P. Singer; (3) el desarrollo como
satisfacción de necesidades humanas, especialmente desde el concepto de Desarrollo a
Escala Humana propuesto por el chileno M. Max Neef; (4) el Desarrollo Sostenible que
plantea la perspectiva de la solidaridad con las futuras generaciones propuesto por la
Comisión Bruntland; (5) el desarrollo como ampliación de los niveles de bienestar que
viene desde el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo; (6) el desarrollo
comprendido como libertad y cultivo de capacidades del economista Amartya Sen y por
último, (7) el desarrollo local como una forma de potenciar las fortalezas locales
posicionado sobre todo por Vásquez Barquero.
Desde una mirada económica, en los años 60, los dos tercios de la humanidad sufren
hambre y miseria. Millones de personas viven en condiciones infrahumanas y la brecha
entre ricos y pobres cada vez es más creciente. El texto de Populorum Progressio en ese
contexto afirma “mientras que en algunas regiones una oligarquía goza de una civilización
refinada, el resto de la población, pobre y dispersa, está «privada de casi todas las
posibilidades de iniciativas personales y de responsabilidad, y aun muchas veces incluso,
viviendo en condiciones de vida y de trabajo, indignas de la persona humana” (Paulo VI,
1967, pg. 2).
Todas estas realidades se convierten en caldo de cultivo para que teóricos de diversas
corrientes filosóficas, económicas o sociológicas busque corregir, cambiar o proponer
alternativas al desarrollo estándar.
b. Representantes
José Luis Lebret, economista, marino y sacerdote, Fundador de la revista francesa
“Economía y Humanismo”, autor de textos como: “Dinámica concreta del desarrollo” y
coautor con Paulo VI de la Encíclica “Populorum Progressio” 1967, consideran que el
“desarrollo” debe ser humanizador y posible desde el valor de la solidaridad. Lebret fue
asesor de países como Brasil y Senegal donde propuso salidas prácticas para que su
población eleve su dignidad. Influyó en el pensamiento de Dennis Goulet, autor de “Ética
del desarrollo”.
Dennis Goulet, autor de “Ética del desarrollo” quien en la década de los 60 critica la
insuficiente del desarrollo economicista y plantea la necesidad de una economía humana
que permita la “ascensión de todos los hombres en todas sus dimensiones”.
c. La propuesta de desarrollo
Pero también desde un enfoque social, “El desarrollo es el paso para cada uno y para todos
de condiciones de vida menos humanas a unas nuevas condiciones de vida más humanas”
… al ritmo más rápido posible, con los menores costos-afectaciones posibles, con la
solidaridad de los pueblos. Menos humanas significa, existencia de: estructuras opresoras,
carencias de un mínimo vital (pan, trabajo, salud, vivienda, vestido), explotación laboral,
injusticia en las transacciones. Más humanas significa: Mayor dignidad, remontarse de la
miseria a la posesión de lo necesario, La victoria sobre las calamidades sociales. (Paulo VI,
1967).
Fundado en el derecho a unos bienes básicos como alimentación, salud, vivienda que le
permita a la persona reconocerse digno.
Que la economía esté al servicio del ser humano. ¡El ser humano sobre el capital! Con
crecimiento económico, industrialización y empresas responsables. Intercambio
comercial entre los países basados en la justicia. Con propiedad privada pero no como un
derecho absoluto. Reconociendo también la propiedad comunitaria como un medio para
alcanzar el desarrollo. La condición de posibilidad es el desarrollo de la solidaridad,
cooperación entre los países ricos hacia los países pobres para alcanzar el bien común. La
reforma agraria para que los campesinos tengan la tierra para su producción. El evitar la
acumulación material que termina empobreciendo en humanidad a la persona o sociedad.
Denis Goulet, incluso considera que el desarrollo debe comenzar dando prioridad a las
víctimas.
e. Aportes y límites
Este enfoque abrió el debate sobre las cuestiones sociales y el desarrollo en la Iglesia, que
todavía tenía una moral personalista y plantea la necesidad de una ética social.
Amplió la discusión sobre el desarrollo integral de todo el hombre, de todos los hombres.
Creó un fondo semilla llamado “populorum progressio” para impulsar el desarrollo de los
pueblos, el ejemplo emblemático se tiene en Ecuador, justamente con la organización FEPP
que sostenidamente invierte en humanidad durante más de 50 años.
El enfoque humanista, como producto histórico que es, tiene algunos límites: por ejemplo,
idealiza el desarrollo como la solución para la vida de los pueblos. Aunque, Goulet
lúcidamente considera que el desarrollo es el medio de los medios, una estrategia para la
vida de los pueblos. Es una propuesta eurocéntrica.
La guerra fría entre Estados Unidos y la ex URSS, pervierte el fin de la cooperación que
éticamente lo propuesto la ONU, que al menos declarativamente garantiza los derechos
humanos para todas las personas, ahora es vista como un instrumento ideológico para
consolidar sus áreas de influencia.
En los años 60 se crean las agencias de cooperación para el desarrollo, como OCDE, para
dar ayuda oficial al desarrollo y otras desde las iglesias y algunos partidos políticos.
Sin duda la ONU que entre sus fines se propuso el desarrollo de los pueblos. Incluso en la
trigésima cuarta asamblea general en 1980, los países ricos acordaron aportar con el 0.7%
de su PIB a los países pobres.
Los países ricos que desde una perspectiva de cálculo de interés, o por una deuda histórica
con sus ex colinas, instituyeron organizaciones de cooperación bilateral, incluso hacia los
años 80 los gobiernos locales también abren canales para la cooperación internacional.
Las ONG de las iglesias europeas, sean católicas o protestantes, que solidariamente
colaboran en tareas humanitarias o de difusión de su visión religiosa. ONGs de partidos
tradicionales europeos, que financian investigaciones, becas de estudios a líderes del
tercer mundo. ONGs de la sociedad civil que también colaborar para tareas humanitarias y
de transferencia de tecnología.
c. La propuesta.
Este desarrollo se comprende como asistencia o ayuda – financiera o técnica - de los países
ricos a los países en “vías de desarrollo”, por medio de los organismos multilaterales de
crédito, gobiernos nacionales o locales y otras organizaciones de la sociedad civil, para
sacar de la “pobreza absoluta” de la desnutrición, del analfabetismo y de las enfermedades
y garantizar la posibilidad del desarrollo de los países en vías pobres.
Dar ayudas y subsidios a los países pobres. Dar préstamos por medio de las
organizaciones como: Banco Mundial, FMI. Distribuir a más de 130 países ayudas
humanitarias. Aportar con al menos 0.7% del PIB a los países pobres, que sería suficiente
para eliminar la pobreza extrema.
Según Peter Singer, desde una visión utilitarista, la ayuda a los países pobres, es un
compromiso de los países ricos, argumenta con la siguiente lógica: (1) si los países ricos
pueden evitar que ocurra algo malo, sin sacrificar nada importante, hay que hacerlo (2) La
pobreza absoluta es mala, (3) hay una parte de la pobreza absoluta que los países ricos
pueden evitar sin sacrificar nada importante, por tanto se debe evitar la pobreza absoluta
(Singer, 1979).
El Informe Pearson1 en 1969, es decir un poco más de 20 años después del inicio de las
políticas de cooperación, juzgó que se había avanzado poco, con talante paternalista y que
faltaba coordinación entre los organismos de cooperación, y propuso algunas tarea para
corregir el camino de la “ayuda” a los países pobres.
Singer critica además a los países ricos y su doble moral, que de hecho dejan morir a los
pobres por no cooperar significativamente para el desarrollo, en promedio habían
aportado solo con el 0.3%. Denuncia que los países ricos reconocen, a los gobiernos
golpistas, amparan a dictadores en paraísos fiscales, toleran explotación laboral (Singer,
1979).
Luego de más de 50 años de cooperación, los países pobres siguen siendo tales, aunque
haya avanzado algunos indicadores.
1
Ex primer Ministro de Canadá y premio Nobel de economía
y los satisfactores infinitos”
Max Neef
a. Contexto
b. Representantes
Desde el mundo europeo, Paul Streeten en su libro “Primero es lo primero” decía “... el
objetivo de los esfuerzos a favor del desarrollo es proporcionar a todos los seres humanos
la oportunidad de vivir una vida plena...la incumbencia fundamental del desarrollo son los
seres humanos y sus necesidades”.
En primera instancia Max Neef hace una reflexión: si el desarrollo cuyo indicador mayor
es el PIB, de tipo cuantitativo, no puede ser el que guie A.L, se pregunta ¿cuál es el tipo de
desarrollo que requiere A. Latina? Y responde, el que eleve la calidad de vida de la gente,
Pero ¿qué significa elevar la calidad de vida? Y nuevamente responde, el que satisfaga las
necesidades fundamentales de las personas, con énfasis cualitativo. Y por fin se hace una
nueva pregunta? ¿Cuáles son las necesidades?
Los satisfactores son infinitos y culturalmente diversos, por tanto no son puramente
económicos sino amplios y contextuales. Pero atención, es necesario distinguir al menos
siete tipos de satisfactores:
Los satisfactores singulares que satisfacen individualmente una necesidad, por ejemplo, el
voto, que satisface la necesidad de participación de manera unidimensional, aislado de
otros procesos democráticos en los que se toma parte de la sociedad.
Por último, están los satisfactores sinérgicos de necesidades que se realizan de manera
simultánea, Max Neef pone como ejemplo el amamantar de la madre a su hijo, que de
manera concurrente satisface la necesidad de subsistencia, de protección de afecto y si se
le arrulla con una canción la de entendimiento.
Con esas premisas, el enfoque de DAEH puede ser entendido como un modelo de
desarrollo que propone:
Valora el amar, cuidar, criar como necesidades que en la economía de mercado son
invisibilizadas, pero que socialmente tienen mucho valor.
En general el enfoque del DAEH está vigente y abre líneas para la superación del
desarrollo entendido solo como utilidad, crecimiento y acumulación de bienes materiales.
Sin embargo, su propuesta emerge de la academia y le falta ser asumido por un sujeto o
actor social que lo viabilice históricamente y que pueda cambiar el sistema o al menos
hacerlo menos inhumano vía la construcción de políticas públicas en el marco del Estado
Social de Derecho.
a. Marco de realidad
Los efectos de la crisis ambiental se pueden evidenciar mirando la situación la que están
el agua, la tierra, el aire, el clima:
El clima, en estos últimos 40 años ha subido en un grado centígrado, no porque así sea el
ritmo cósmico, sino por causas antrópicas. Hoy existe la posibilidad real del cambio
climático por la “creación” del efecto invernadero que se produce por la eliminación de
gases a la atmósfera, como los generados por combustibles fósiles, o gas metano que
produce el ganado vacuno en el proceso alimenticio.
El análisis se realiza tomando en consideración desde los análisis más simples a los más
complejos:
Una causa sería la sobrepoblación, pues cada vez somos seres humanos en el planeta y al
parecer no hay los suficientes recursos alimentarios. Se presenta como un dilema ético,
entre la cantidad de recursos alimentarios y el número de habitantes a nivel planetario. Se
proponen políticas públicas que hagan control estricto de la natalidad. Recordemos que
Gandhi decía que si en el corazón del ser humano hay egoísmo, nunca los recursos serán
suficientes.
Otra causa podría ser el uso de combustibles fósiles en la industria, que como se ha dicho en
líneas anteriores es la causante de la contaminación. Se propone que los países continúen
con su compromiso de transitar a industrias que usen energías limpias;
Quizás también, el problema fundamental radica en la visión mecánica y fragmentada del
mundo moderno, que no ha visto al planeta como un todo inter-retro-conectado, sino
como un conjunto de piezas mecánicas unidas. Bajo esta visión se cree que lo que la
tecnología lo destruye, también la tecno-ciencia lo puede reconstruir; por ello, está
confiado en las inmensas posibilidades que la ciencia tiene para salvar el planeta.
Causas más profundas de la crisis están en la visión antropocéntrica de la modernidad
occidental que considera a la naturaleza como algo que debe ser dominado por el ser
humano, por lo que hay que volver a reconocer el lugar que el ser humano tiene como
hermano de otras especie y no de dueño de ellas.
Con más agudeza otros analistas consideran que el problema fundamental está en el
modelo económico que sacrifica la naturaleza y el ser humano al servicio de la utilidad y la
ganancia en el marco de una producción lineal. Y como correlato del modelo, el estilo de
vida consumista que requiere cada vez más recursos para satisfacer sus deseos, es decir,
en un planeta limitado se exacerba un modo de vida de deseos ilimitados.
Por último, la causa real de esta crisis ambiental es la falta de voluntad política de los
líderes de los estados para acordar convenios y protocolos vinculantes que efectivamente
hagan posible la conservación de las diversas formas de vida en el planeta de manera
indefinida, o al menos hagan más habitable la casa común.
La Conferencia sobre el medio ambiente en Estocolmo 1972, que creó el PNUMA. Realizó
una declaración sobre el medio ambiente. Definió principios: como “Los recursos
naturales de la Tierra, incluidos el aire, el agua, la tierra, la flora y la fauna y especialmente
muestras representativas de los ecosistemas naturales, deben preservarse en beneficio de
las generaciones presentes y futuras mediante una cuidadosa planificación u ordenación,
según convenga (Principio dos). Además definió unos principios para la evaluación y el
control de la contaminación de los mares.
El Informe Harlem Brundtland llamado “Nuestro futuro común” en1987, donde por
primera vez se habla de desarrollo sostenible.
Aporta las siguientes consideraciones:
- la protección medio ambiental ya no es asunto local, regional o nacional es un problema
global.
- el desarrollo y medio ambiente están totalmente ligados.
- El aporte más importante fue definir el desarrollo sostenible como aquel que satisface las
necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las generaciones futuras.
- Articula crecimiento económico, desarrollo social y sostenibilidad ambiental.
- Considera que se deben cambiar las estructuras institucionales y fomentar las conductas
individuales de cara a la sostenibilidad
La cumbre de Río de 1992 con su aporte “Agenda 21”, que posiciona y legitima
políticamente el término sostenible y se incluye la discusión de las comunidades indígenas
y la necesidad de mantener sus culturas, entendido como sostenibilidad social.
Los elementos significativos de la Agenda 21 son:
Los seres humanos son el centro de sus preocupaciones.
El derecho al desarrollo debe ser equitativo entre el presente y el futuro.
Propone la implicación de los Estados en el desarrollo de un sistema económico favorable.
La participación de la mujer en los pueblos indígenas por su modo de vida juega un papel
importante en la conservación del medio ambiente.
(2) “Hacer uso racional de los recursos para satisfacer las necesidades del presente sin
comprometer la capacidad del planeta para que las generaciones futuras puedan satisfacer
las suyas”. La sostenibilidad tiene que ver en este concepto con la capacidad de carga del
planeta.
(3) “Mejorar la calidad de vida humana sin rebasar la capacidad de carga de los
ecosistemas que la sustentan” (Segunda estrategia mundial para la conservación 1991), se
hace énfasis en la calidad de vida humana, es decir tiene un fuerte componente
antropocéntrico.
(4) Por último, se propone el concepto de sostenibilidad entendido como “El proceso
mediante el cual se satisfacen las necesidades económicas, sociales, de diversidad cultural
y medio ambiental de la actual generación sin poner en riesgo la satisfacción de las misma
a las generaciones futuras”(Johannesburgo 2002), que si bien no supera el
antropocentrismo, amplia la sostenibilidad a campos más amplios que el solo ambiental y
con ello deja abierta la teorización de un concepto clave de la Gestión Social, el Desarrollo
Humano Sostenible y Culturalmente Diverso.
d. Características
Siguiendo la pista al concepto pero sobre todo a los documentos ambientales que marca la
política mundial se pueden extraer algunas características:
El crecimiento económico debe estar marcado por el límite de la integridad del planeta y
de la vida humana.
Debe favorecer a los más pobres, comenzando por las víctimas, los pueblos profundos que
son los cuidadores del ambiente.
La opción política y económica por las mujeres que mantienen mayor conexión con la
producción reproducción de la vida.
Se propone la articulación del ámbito, social, económico y medio ambiental desde dos
tensiones clave, la sostenibilidad débil que sería la decisión ético política de optar por
privilegiar uno de los tres ámbitos sin descuidar los otros, y la sostenibilidad fuerte que
implica la decisión ético política de repensar el marco jurídico constitucional y planificar
programas y proyectos articulando los tres campos el social, ambiental y económico de
manera simultánea, sin privilegiar ninguna de las tres.
Respeto por diversas formas de vida que se dan en el planeta, y cuidado de la casa común
que pertenece a las presentes y futuras generaciones de personas, por medio de prácticas
amigables y de reconciliación ser humano naturaleza. A esto se debe sumar la Integridad
ecológica, justicia social y económica global y la democracia, no violencia y paz entre los
pueblos (Carta de la tierra, 2000)
e. Evaluación
Sin duda es positivo el desafío de armonizar los ámbitos económicos y medio ambiental,
que éticamente tiene legitimidad, pero política y operativamente falta aún ser trabajada.
Por otro lado, algunos críticos del desarrollo sostenible, consideran que la propuesta sigue
anclado a una visión antropocéntrica, que tampoco cuestiona el modelo económico
consumista, solo busca mitigarlo. Consideran que el enfoque del desarrollo sostenible, en
la práctica es una apuesta por el crecimiento económico sostenible y por el medio
ambiente.
a. Contexto
El consenso de Washington surge por un lado por el agotamiento del estado de bienestar
que se da en los países del norte y el agotamiento del modelo de sustitución de
importaciones por exportaciones en los países del sur. En este escenario, Estados Unidos
y Gran Bretaña impulsan la nueva agenda política para los estados, caracterizado por el
ajuste estructural. Con las siguientes tareas que deben hacer los estados:(1) Equilibrio
entre gastos e ingresos, se plantea que máximo debe darse la brecha del 1% del PIB; (2)
Eliminación de subsidios y recortes presupuestarios en las áreas de salud y educación. (3)
Eliminación de la fijación de las tasas de interés para los bancos, pues el mercado es el que
debe decidir del costo del capital. (4) Eliminación de las trabas que obstaculizan el
comercio de bienes y servicios y la inversión extranjera. (5) Limitación de la tarea del
estado a la construcción de infraestructura pública; a estas tareas se las llamó la receta
neoliberal que fue impuesta por los organismos internacionales de crédito en la mayoría
de países de América Latina.
La Caída del muro de Berlín en 1989, que fue considerado por el PNUD como “el triunfo del
espíritu humano que reclamaba democracia y libertad”, que trajo cambió la geopolítica,
pues antes el mundo se dividía entre Este y Oeste y a partir del derrumbe de la URSS nace
un nuevo orden mundial global con la hegemonía de un solo sistema con pretensión de
legitimidad, pero aparece la división entre países del norte rico y los del sur pobre.
En América Latina, !Deuda social! después de que en los años 70 se vivieron dictaduras
generalizadas se pasó al ejercicio de una democracia formal. En los años 80 se generó un
proceso de endeudamiento (década perdida) de que se expresa en el crecimiento de la
pobreza de más de 200 millones de personas.
Brecha tecnológica. Entre países del Norte y países del Sur, el avance de la ciencia y la
técnica, sobre todo de la informática pueda abrir más la brecha, pues los países del sur
siguen produciendo bienes primarios mientras los del Norte vende bienes acabados,
bienes de capital.
b. Representantes
El Programa de la Naciones Unidas para el Desarrollo que se fundó en 1965. Pero fue en el
año 1990 que irrumpió con esta propuesta de un informe de desarrollo humano, como
referente para orientar las políticas públicas de los estados.
e. Evaluación
La propuesta del PNUD, es un intento de posicionar un modelo intermedio entre el solo
mercado o el solo estado, reconociendo el protagonismo de las personas. Por tanto, sigue
apostando por el crecimiento económico.
Tiene una fuerza simbólica porque surge de un organismo internacional con capacidad de
influenciar sobre las políticas públicas de los países, y más aún, de canalizar recursos para
determinados programas.
La Carrera de Gestión Social, nace inspirado en los postulados que propone el PNUD, que
se puede verificar en la malla curricular.
Sin embargo, la propuesta del PNUD, ha sido criticada por su eurocentrismo, nótese que
los países de alto desarrollo están en Europa.
a. Contexto
El contexto histórico político en que surge la propuesta de Sen es similar al enfoque del
PNUD, que es una atmósfera de triunfo del capitalismo y del mercado global sobre el
socialismo real, que deja de ser un referente posible para los países del Sur.
La globalización2 a finales del S. XX, se impone como un hecho evidente y cuasi natural,
fruto de una larga evolución de las sociedades a nivel mundial, pero en realidad es
consecuencia del deseo voraz del capital comercial y financiero por extender su dominio
en los países del globo sea como países consumidores y/o países proveedores de materias
primas.
b. Representantes
Amartya Sen, nace en la India en 1933, cuando todavía era colonia inglesa hasta, vive el
proceso de independencia de la India (1947). Presencia la separación de Pakistán. Vive la
experiencia de hambruna en la India, se da cuenta que la sociedad de castas no permite la
movilidad social, que la mujer sufre la dominación de estructuras patriarcales y culturales
que no le permiten escoger un plan de vida. Además se da cuenta que la falta de libertades
económicas, políticas, sociales, sumado a las experiencias de dictaduras y autoritarismos,
modelan su forma de ver e interpretar la realidad.
2
La Globalización lo entendido como la eliminación de trabas del estado y su marco legal para provocar la circulación acelerada de capitales, bienes y
servicios, por medios informáticos y los medios de comunicación y transporte con la finalidad de conseguir mayor ganancia al menor costo de
producción posible.
necesario un proceso de ampliación de las capacidades humanas que permiten gozar de
libertad para realizar proyectos de vida valiosos o para que cada persona pueda realizar
su plan de vida.
En este sentido, considera que hay que eliminar lo que impide el goce de las libertades
como son, la negación de libertades civiles y políticas, las tiranías y los estados represivos;
la pobreza, la escasez de oportunidades económicas, las privaciones sociales por falta de
acceso a servicios públicos, el acceso a medicamentos, más aún, la negación de un sistema
de salud y medicación (Sen, 2000)
d. Características
La libertad es un fin valioso y también un medio por el cual se alcanza el fin, en este
sentido es importante la libertad política en que los ciudadanos de un estado participan de
la vida política, es importante la libertad económica para que las personas desarrollen
agencia y la libertad de elección para que cada persona pueda escoger lo que quiere ser y
hacer de su vida.
Hay cuatro palabras clave con las que articula su discurso del desarrollo:
Los bienes, que son los medios materiales o sociales como contar con el acceso o la
propiedad que tiene una persona. En la sociedad del bienestar clásico, la preocupación es
que las personas cuenten con cosas, con los bienes, sin embargo, esto no es suficiente, pues
cada bien tiene una función… Las capacidades que son un set de dominios, cognitivos,
procedimentales y prácticos que le dan a la persona la posibilidad de usar correctamente
el bien o el servicio. El funcionamiento que es un “punto” en los dominios posibles y da
como resultado la utilidad.
Un ejemplo puede ser el contar con el bien, llamado centro de salud, sin embargo, la
persona puede hacer o no uso del centro, o hacer mal uso del centro, pero si desarrollo la
capacidad de cuidar, prevenir, sanar, curar, la persona puede contaré con el
funcionamiento del dominio de cuidar de la salud y se podrá conseguir la utilidad.
e. Evaluación
Construye un índice de desarrollo a partir de los derechos civiles y políticos y los derechos
económicos y sociales y no solos desde el nivel de ingresos, por lo que da criterios para
determinar el salario digno.
Redacción pendiente
BIBLIOGRAFIA
Max - Neef, E. &. (1986). Desarrollo a Escala Humana: una opción para el futuro . Santiago.
Por ello, los problemas del DHSD. no se dan solos porque hay unos límites de la
comprensión histórica que se tiene sobre el ser humano, la sociedad y la naturaleza que
no permite que en un solo momento “fotográfico” de la historia se pueda comprender los
diversos campos que implica la complejidad del desarrollo integral “de toda la persona” .
Tampoco por falta de recursos y medios que impiden realizarse el D.H.S.D. “al ritmo más
rápido posible y con los menores costos posibles” como lo soñó J. L. Lebret el inspirador de
la Populorum Progressio, sino sobre todo, porque hay enfoques contrapuestos sobre la
comprensión del desarrollo integral de pueblos y personas.
Así voy a desarrollar algunos campos del desarrollo integral que están en tensión
problematizadora en instituciones y personas que gestionan el desarrollo humano.
Desde las ciencias sociales la utopía se lo entiende como el horizonte de sentido, de vida
plena y felicidad, que se constituye en la razón motivacional de personas, comunidades,
movimientos sociales, partidos políticos e Iglesias comprometidas que buscan concretar
en la historia el sueño orientador. Desde luego, la utopía para los cristianos siempre es
mayor, es el “ya pero todavía no” que define al Reino de Dios.
El desarrollo, luego de las huellas de destrucción que dejó la segunda guerra mundial y la
descolonización de los pueblos de África y Asia emergió como un horizonte utópico para
que los pueblos puedan progresar, tener una vida digna. Sin embargo, el concepto de
desarrollo fue secuestrado por quienes vieron en este concepto “un caballo de Troya” para
equiparlo al crecimiento económico, más aún para dividir al mundo entre países
desarrollados y subdesarrollados, con el propósito de vender sus productos, prestar su
capital y transferir tecnología para que los países salgan del sub desarrollo. Se construyó
un imaginario de desarrollo comprendido como sinónimo de modernización, acceso a
bienes materiales de manera ilimitada y acumulación de capital.
El papa Paulo VI, haciéndose eco del pensamiento de J. L. Lebret y Denis Goulet posicionó
otro modo de entender el Desarrollo bien conocido por nosotros como “el paso para cada
uno y para todos de condiciones de vida menos humanas a condiciones de vida más
humanas”
Por ello, el desarrollo no es el fin, es el medio de los medios para que los pueblos de
manera colectiva puedan concretar un horizonte utópico mayor que les permita alcanzan
una vida buena por medio de instituciones y personas justas...
En este marco, los gestores del desarrollo integral, no pueden entender el campo utópico
trabajar para conseguir “Durex los artefactos de la familia feliz”, sino tener la sabiduría
para impulsar programas y proyectos que hagan posible la calidad de vida, la vida buena
de las comunidades.
El giro de una visión economicista a una centrada en el ser humano la posicionó Manfred
Max Neef en su obra “El desarrollo a escala humana”.
3. El campo social: De la sociedad de individuos aislados a la reconstrucción de
tejido social significativo.
La familia y la comunidad son el tejido primario que sustenta la vida social y afectiva de
toda persona, ellas ofrecen formas significativas de realizar la vida, sin embargo, la visión
social de la modernidad es entenderlo como sujeto individuo-aislado, “lobos esteparios” y
solitarios sin capacidad de solidaridad sino solo de cosificar las relaciones con otros.
Los indicadores de desarrollo humano propuestos por el PNUD desde 1990: la esperanza
media de vida, que se concreta en el acceso a salud, la ampliación de conocimientos que se
objetiva en los niveles de educación y la vida digna que se traduce por un ingreso que
permitan reproducir la vida, deben ser ampliados a la construcción de tejido emocional y
social significativo, donde las familias y comunidades se fortalezcan como personas no
solo como individuos.
La política se define como la gestión del poder del pueblo por delegación en personas e
instituciones sociales, comunitarias o estatales para canalizar los mandatos del soberano,
pero casi siempre el mandatario ha terminado traicionando el mandatado de sus
mandantes.
Por ello, el principio ético que debe informar la variable política en clave de desarrollo
humano es el de democracia participativa que se concreta no solo en el depositar el voto
sino en concretar el concepto “del poder del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”, Esto
es posible cuando los ciudadanos se apropian del principio de participación individual y
colectiva y toman parte en el diseño social desde la democracia política la democracia
social y económica. En otros términos, participar para construir instituciones políticas
justas que hagan posible la vida buena para mí, para ti y para todos ¡el bien común!
El indicador de democracia participativa no solo el ejercicio del voto, sino sobre todo la
creación de modos de participación individual y colectiva de los diversos espacios sociales,
comenzando por como el derecho a la revocatoria del mandato, la consulta popular entre
otros, que en caso ecuatoriano están recogidos en la constitución del 2008.
La cultura “ese todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral,
el derecho, las costumbres y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por la
persona en cuanto miembro de la sociedad” (Taylor, 1999) es lo que da sentido de
identidad y pertenencia a las personas y con ello, encuentran significado al mundo.
Solo desde hace pocos años se ha tomado en serio la dimensión cultural, que ha permitido
cuestionar, que en última instancia, los modelos de desarrollo social con frecuencia han
sido solo un canal de proyección de modelos culturales particulares con pretensión de
universalidad colonial.
En este marco, el principio ético del desarrollo integral exige incorporar las cosmovisiones
y prácticas cultuales de las comunidades al momento de diseñar las políticas de desarrollo.
Pero también debe incorporarse el criterio de interculturalidad para generar diálogo entre
los pueblos y compartir horizontes vitales.
Toda la realidad es ecológica en tanto que está en permanente relación entre los seres
bióticos y abióticos; los seres humanos como seres vivos también hacen parte de esta
dinámica, sin embargo, desde la modernidad, motivada por la ciencia, la técnica y los
modos de producción consumista han hecho que se cultive una relación de dominio y
sometimiento de la naturaleza frente al ser humano. Han radicalizado el antropocentrismo
que ve en la naturaleza solo una fuente de recursos que están al servicio humano y un
vertedero de los desechos del consumo humano.
Esta realidad ha hecho que desde 1987 la comisión Brundtland proponga como parte del
desarrollo el principio de sustentabilidad, que respete los ritmos y tiempos que requieren
los seres vivos para continuar su ciclo de vida y sobre que el uso de los recursos naturales
sea para satisfaga las necesidades de las generaciones presentes sin comprometer las
necesidades de las generaciones futuras.
Pero una sociedad o comunidad que aspire a superar el antropocentrismo no solo debe
plantear políticas para garantizar la sustentabilidad, sino trabajar por defender los
derechos de la naturaleza que como dice el art. 71 de la constitución ecuatoriana “es la
madre donde se reproduce y se realiza la vida y tiene derecho a que se respete
integralmente su existencia” . Desde esta consideración, se exige repensar el desarrollo
más allá del antropocentrismo y transitar por nuevos horizontes de reflexión más eco-
céntricos.
Sin embargo, en la sociedad posindustrial que se caracteriza como sociedad del riesgo, y
de la incertidumbre, surge la conciencia de vulnerabilidad de la humanidad frente a
variables que no tiene control la ciencia, el estado o la sociedad como pueden ser
catástrofes naturales, o el cambio climático, para lo cual se debe desarrollar políticas de
prevención que permitan garantizar la seguridad humana para que las personas puedan
vivir libres de la desesperación y disminuir el grado de incertidumbre en su vida cotidiana.
La sed de espiritualidad es cada vez más evidente en la sociedad. La gente busca saciar esa
sed en libros de autoayuda que tienen lugares destacados en centros comerciales y
librerías; en movimientos de la “nueva era”3 que invaden los medios de comunicación con
ofertas paz, tranquilidad, armonía interior y comunión light con la naturaleza; en prácticas
“mágicas” como la lectura de cartas, horóscopos, lecturas del café que descubren una
credulidad laica, pero también una inseguridad frente a sí mismos, a la sociedad y frente al
futuro. Estas ofertas que proponen el “desarrollo integral de la persona” en la mayoría de
los casos se convierten en un producto más de la sociedad de consumo que no logra saciar
la sed de sentido último de la vida, pero si les envuelve en una espiral de consumo.
También, quienes están trabajando bajo el horizonte del DHSD cuentan con diversas
espiritualidades religatorias con todo lo existente, caracterizadas por tener los pies en el
camino de la dignificación humana, animar la experiencia de organización comunitaria, y
desde luego sentirse para de la gran comunidad biótica del planeta. ¡Parte de la casa
común en la que se habita y que se requiere cuidar! Es una espiritualidad integradora de
la persona-familia-comunidad-naturaleza que busca dar sentido de totalidad trascendente
a la realidad humana, pues todo afán podría sucumbir si no cuentan con un sentido del
mundo.
3Se denomina “nueva era” a una nebulosa que contiene un poco de esoterismo, y un poco de ocultismo, un poco
de pensamiento mítico y mágico atinente a los secretos de la vida y un hilo de cristianismo, todo mezclado
conceptos provenientes de la astrofísica”. Dannels.
Por todo lo dicho anteriormente, concluyo que el problema no es el desarrollo integral
sino el contenido que se le da a cada campo del desarrollo integral desde una perspectiva
crítica, humanista y justa.
CAPÍTULO IV
ALTERNATIVAS AL DESARROLLO.
Introducción
La modernidad ha entrado en crisis y está en la etapa final, por al menos siete signos que
lo invalidan como época civilizatoria y dejan ver sus límites para dar respuesta a las
urgencias del mundo contemporáneo:
El desencanto social: la modernidad ofreció el sueño de un mundo feliz, sea desde la utopía
de T. Moro, pasando por los utópicos franceses, la utopía de la vida feliz del utilitarismo
ingles hasta el sueño de la sociedad sin clases, pero lo que ha podido construir, al menos
por un tiempo, es apenas la sociedad del bienestar, dejando intacto la inequidad, la
acumulación de capital, etc. Además, los sueños del mundo feliz, está marcado también por
las pesadillas de fascismo, estalinismo, dictaduras, y la realidad de pobreza de por lo
menos un tercio de la población mundial.
La racionalidad instrumental: La modernidad se especializó tanto en los medios, que
olvidó la razón teleológica, los fines, los para qué de largo aliento, por lo que como dice
Franz Hinkelamert, la modernidad puede cortar con rapidez y precisión la rama de un
árbol, sin darse cuenta que está cortando la rama en la que está sentado. Más aún, la
racionalidad se convirtió en criterio de verdad, y negó los modos de vida tradicionales que
no se ajuste a los cánones de su racionalidad considerándolas primitivas, irracionales,
emotivas, míticas. De esta forma, se excluyó al otro no occidental, léase a los pueblos que
viven desde patrones de pensamiento más vital.
La ciencia instrumento del poder: La ciencia se impuso como “real maravilloso” (Follari,
2012) con apariencia de objetividad, neutralidad y verdad, sin embargo, la ciencia como lo
profetizó D. Bacón es un instrumento del poder y su brazo ejecutor es la técnica, que como
realidad humana no es una cosa que tiene vida propia sino que está al servicio de los que
tienen el poder para imponer sus agendas, instrumentales. Por ejemplo, a los científicos y
sus producciones médicas, no les interesa el bienestar del ser humano sino ofrecer
medicación para que puedan sobrellevar el malestar. Más aún se lo fetichiza considerando
que la ciencia y la técnica son buenas por sí mismas y que si estas destruyen la naturaleza
también tienen poder para restaurarla.
Agotamiento intelectual de Occidente, Por último, como lo afirma desde las epistemologías
del Sur, (Sousa Santos, 2011) la crisis de la modernidad occidental se extiende a su
imposibilidad de ofrecer pensamiento renovador y crítico, para salir de la crisis. Por ello,
las salidas están surgiendo desde la periferia del mundo.
4
Teoría que afirma que la persona no puede ir más allá de los contenidos de su propia conciencia, por
tanto no se puede ir más allá de su propio yo.
necesario que se mantengan centros de desarrollo de acumulación de recursos y periferias
que sacrifican su bienestar. !El desarrollo exige siempre subdesarrollo! Tesis que fue
trabajada por la teoría de la dependencia, sobre todo por Mauro Marini.
Por tanto, la teoría y práctica del desarrollo capitalista es un mal desarrollo y lleva a un
mal vivir (Tortosa, 2010)
La emergencia de pueblos profundos con sus modos de vida y cosmovisión expresan que
no hay un solo modo de ser, estar y vivir en el mundo y ahora posicionan agendas ético-
políticas para buscar proponer alternativas.
En este marco, desde los lejanos años 70 se proponen alternativas más o menos
respaldadas en fundamentos teóricos y en las prácticas de actores sociales críticos:
El modelo FIB que tiene como referente el país de Bután, que busca articular bienes
objetivos como salud, educación, desarrollo de habilidades y capacidades, cuidado del
medio ambiente, percepción del gobierno, participación de la gente y bienes subjetivos
como: bienestar psicológico, grado de bienestar y optimismo de la gente, tiempo libre,
vitalidad e interacción comunitaria entre otras.
a. Antecedentes
El buen vivir no es una agenda coyuntural de un gobierno, es sobre todo una respuesta
utópica, un horizonte de sentido social que nace en un contexto de realidad de fracaso del
socialismo real tan celebrado por Occidente y de crisis del capitalismo neoliberal, que en
su estado global, no ha podido dar respuesta a los problemas sociales de exclusión, de la
migración sur-norte, del aumento del desempleo, incluso en los países europeos, de la
inequidad mundial, sobre todo, por el dominio de las corporaciones que concentran
capital, tecnología, y conocimiento y menos aún ha podido dar respuesta a los problemas
ambientales generado por el mismo modelo, como la desertificación, la contaminación
de las aguas, la destrucción de la capa de ozono o el calentamiento del planeta.
En este ambiente, desde la periferia del pensamiento dominante, con la emergencia de los
movimientos sociales como los indígenas y los ecológicos, de prácticas alternativas
fundadas en la agroecología, y economía solidaria y de los sectores críticos de la sociedad
que buscan alternativas a los modelos de desarrollo clásicos, surge una propuesta con
identidad y nombre andino Sumak Kawsay o Sumak Qamaña que puede traducirse como
vida en plenitud o buen vivir.
La categoría vida en plenitud “ha sido retomada y recreada desde la confirmación de las
vivencias ancestrales de los pueblos indígenas y de su forma de construir tanto su
socialidad como su relación con la naturaleza (Dávalos, 2008), sin embargo, tiene unas
fuentes que la nutren y dan identidad a la expresión Sumak Kawsay: La primera, desde
luego, la cosmovisión y vivencia de los pueblos andinos que conciben al cosmos, a la
tierra, a la sociedad y a las personas como un todo interconectado y armónico. Esta
cosmovisión determina un modo de relación naturaleza-humanidad, donde la primera no
se ve como un simple recurso al servicio del ser humano sino como parte de ella, más aún
como sustento o matriz que hace posible la vida y se la llama Pachamama. La segunda, la
tradición occidental que teorizó sobre el desarrollo como florecimiento concebida por
Aristóteles y en “la vida buena para mí para ti y para los otros a través de instituciones
justas” (Ricoeur, 2000), que junto a los Derechos humanos inspiraron el estado de
bienestar europeo que en la actualidad está en crisis por la presión del modelo rentista
que prioriza el capital sobre el trabajo, la producción sobre la conservación. La tercera
fuente viene de la tradición crítica de la ética económica neo-marxista que considera que
la producción y reproducción de la vida humana en comunidades justas es condición
básica para que se construya cualquier discurso ético-político (Dussel, 1998).
Desde la coyuntura histórica y desde las fuentes que inspiran el Sumak Kawsay, se ha
configurado un pensamiento articulador y “religador” de campos como el ecológico, el
económico, el social, el cultural y el político que se condensan en el horizonte y agenda
política llamada vida en plenitud (Dávalos, 2008)
b. Aproximación conceptual
Delimitar una cosmovisión vital siempre será empobrecedor, sin embargo, desde el
ejercicio de la racionalidad comunicativa es necesario hacer una aproximación que
permita caracterizar y analizar las potencialidades de esta propuesta emergente. Por ello,
en primera instancia se recogen varios conceptos recopilados por Massoni (2013) para
luego extraer un concepto sintético.
Para el indígena boliviano Fernando Huanacuni, el Suma Qamaña que lo entiende por vida
en plenitud, “significa vivir en armonía y equilibrio; en armonía con los ciclos de la madre
tierra, del cosmos de la vida y de la historia y en equilibrio con toda forma de existencia”.
En esta misma línea Luis Macas, explica que “el Sumak es la plenitud, lo sublime, excelente
magnífico, hermoso (a) superior. Kawsay es la vida, es ser estando. Pero es dinámico,
cambiante, no es una cuestión pasiva. Por tanto el Sumak Kawsay sería la vida en plenitud.
La vida en excelencia material y espiritual”.
Desde una perspectiva económico-política, Alberto Acosta, ideólogo del Buen Vivir
plasmado en la Constitución del 2008 considera que el Buen Vivir es “una oportunidad
para construir colectivamente el desarrollo” más allá del crecimiento económico o la
acumulación ilimitada de bienes.
En la presentación del Plan Nacional del Buen vivir 2009-2013, René Ramírez desde una
visión poética define al Bue vivir como «la satisfacción de las necesidades, la consecución de
una calidad de vida y muerte dignas, el amar y ser amado, y el florecimiento saludable de
todos y todas, en paz y armonía con la naturaleza y la prolongación indefinida de las
culturas humanas. El Buen Vivir supone tener tiempo libre para la contemplación y la
emancipación, y que las libertades, oportunidades, capacidades y potencialidades reales de
los individuos se amplíen y florezcan de modo que permitan lograr simultáneamente aquello
que la sociedad, los territorios, las diversas identidades colectivas y cada uno —visto como
un ser humano universal y particular a la vez— valora como objetivo de vida deseable
(tanto material como subjetivamente, y sin producir ningún tipo de dominación a un otro).
Nuestro concepto de Buen Vivir nos obliga a reconstruir lo público para reconocernos,
comprendernos y valorarnos unos a otros— entre diversos pero iguales— a fin de que
prospere la posibilidad de reciprocidad y mutuo reconocimiento, y con ello posibilitar la
autorrealización y la construcción de un porvenir social compartido».
En este marco se puede conceptualizar al Sumak Kawsay como “una cosmovisión andina,
enriquecida con los aportes del pensamiento crítico latinoamericano, que en la crisis de la
modernidad y del capitalismo, por la actoría de un conjunto de movimientos sociales dentro y
fuera del Estado se ha convertido en un referente ético-político-constitucional, que busca
construir una nueva convivialidad en relación armónica entre humanidad-naturaleza,
individuo-comunidad en camino permanente hacia la vida en plenitud” (Tobar S, 2015)
c. Características
El Sumak Kawsay como cosmovisión tiene algunas señales de identidad nacidas del
núcleo de la cultura andina, también como propuesta ético-política tiene características
alternativas al capitalismo y a la cultura occidental y como propuesta teórica está en
construcción por tanto tiene que entrar en diálogo con las otras culturas y cosmovisiones
y proyectos históricos alternativos para enriquecerse y construir un corpus teórico
fundante y movilizador.
En tanto cosmovisión andina las características del Sumak Kawsay pueden identificarse
como: Un sistema comunitario en donde los nexos sociales se articulan alrededor de la
vida en común y de los bienes comunes, que supone y exige un saber convivir con y para
otros marcando un tipo de socialidad más o menos igualitario y de responsabilidades
compartidas.
La socialidad es posible dentro de un marco ético-mítico vivido al ritmo de los ciclos del
sol, la luna y los tiempos de siembra, cuidado y cosecha de los productos de la tierra que
son considerados realidades religadas a la vida cotidiana de la comunidad indígena.
Como proyecto ético-político, es una propuesta que emerge desde la periferia del
conocimiento científico y del poder político, porque surge de los que han resistido al
proyecto colonizador de la razón occidental.
Además es una crítica al capitalismo homogeneizador que quiere hacer del mundo
mercados, de la naturaleza mercancía, y los pueblos consumidores, por eso, propone la
diversidad como modo de ser de la naturaleza y los pueblos, la interculturalidad como la
forma de convivencia en respeto a los modos de vida de las comunidades en un marco del
estado plurinacional.
d. Corrientes
Aunque hasta el momento se ha expuesto el concepto de Sumak Kawsay de manera
general, es necesario expresar que no es una propuesta teórica única, sino que tiene al
menos tres corrientes:
La indigenista, propuesta entre otros por Atawallpa Ovideo, para quien la identidad del
Sumak Kawsay pasa por la ruptura de la cultura occidental, la distancia con las
propuestas del capitalismo y del socialismo y la recuperación de un modo de estar en la
vida – vitalismo- centrado en la armonía con la naturaleza y los valores ancestrales
andinos. Esta corriente de alguna manera apuesta por el retorno o conservación de los
modos de vida tradicionales de los andes o por no contaminar la cosmovisión indígena
desde la que vive la vida el mundo indígena. Esta posición es respetable hacia el interior
del movimiento indígena, pero puede caer en un cierto posmodernismo que absolutiza la
cultura tradicional pero no se compromete con un diálogo con otros horizontes culturales
y políticos.
Diálogo con otros imaginarios y teorías como sumak Qamaña (Bolivia), bienes comunes de
la humanidad (Houtart) y las otras búsquedas alternativas.
Repensar la ciencia y la técnica más amigable con la vida y liberada de la lógica del poder.
BIBLIOGRAFÍA
Acosta, A. (18 de noviembre de 2013). Presentación del Buen Vivir en Barcelona. Obtenido
de https://www.youtube.com/watch?v=5g4OwmDljOE.
Follari, R. (2012). La ciencia como real maravilloso. Rosario, San Fe.: Homo sapiens.
Obtenido de https://www.scribd.com/document/91687445/Roberto-Follari-La-
Ciencia-Como-Real-Maravilloso
Grupo permanente de trabajo sobre alternativas al desarrollo. (2011). Más allá del
desarrollo . Quito: Abya Yala / Fund. Roxa Luxemburgo .