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Pacto de San Jose

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2019

UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE LOS ANDES

FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS, SOCIALES Y


CONTABLES

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

DOCENTE:
MAG. PEDRO SEVILLANO MENDOZA
INTEGRANTES DEL GRUPO:

 MISHEEL H. SALDIVAR MANRIQUE


 EDA LUZ ROMAN FERNANDEZ
 FLOR MARIA E. CONDORI DURAND

UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE LOS ANDES |


PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

INDICE
DEDICATORIA ....................................................................................................... 3
INTRODUCCION .................................................................................................... 4
MARCO CONCEPTUAL ......................................................................................... 5
1. ¿Qué es el Pacto De San José de Costa Rica? .............................................. 5
1.1. Importancia del Pacto de San José de Costa Rica ................................... 7
2. Creación .......................................................................................................... 9
2.1 Quienes participaron ................................................................................ 13
3. Estructura ...................................................................................................... 16
3.1. Primera Parte Deberes de los Estados y derechos protegidos ............... 16
3.2. Segunda Parte Medios de protección ..................................................... 16
3.3. Tercera Parte Disposiciones transitorias ................................................. 17
4. Derechos que protege el Pacto de San José de Costa Rica ......................... 17
4.1. Derecho a la personalidad jurídica .......................................................... 17
4.2. Derecho a la vida .................................................................................... 18
4.3. Derecho a la Integridad personal ............................................................ 18
4.4. Derecho a la libertad personal ................................................................ 19
4.5. Derecho a indemnización ........................................................................ 20
4.6. Derecho a rectificación o respuesta ........................................................ 21
4.7. Derecho a reunión................................................................................... 23
4.8. Derecho al nombre.................................................................................. 23
4.9. Derecho a la nacionalidad ....................................................................... 23
4.10. Derecho a la propiedad privada ............................................................ 24
4.11. Derecho de circulación y residencia...................................................... 25
5. Estados que forman parte del Pacto de San José de Costa Rica ................. 25
5.1. Perú y la Decreto Ley que aprueba que Pacto de San José de Costa Rica
....................................................................................................................... 27
6. Protocolos Adicionales: ................................................................................. 28
6.1 PROTOCOLO DE SAN SALVADOR Y PROTOCOLO DE LA
ABOLICION DE LA PENA DE MUERTE 1990. ............................................. 28
6.2. Composición y Funcionamiento del Grupo de Trabajo para el Análisis de
los Informes Nacionales previstos en el Protocolo de San Salvador ............. 35

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

6.3. Protocolo a la Convención Americana Sobre Derechos Humanos Relativo


a la Abolición de la Pena de Muerte .............................................................. 37
7. Consecuencias de Salirse Del Pacto De San José de Costa Rica................ 39
7.1. ¿Si un Estado se retira de la Corte IDH deja de ser parte de la CIDH? .. 41
7.3. ¿Qué pasaría para si el Perú se decidiera retirarse del Pacto de San José
de Costa Rica? .............................................................................................. 41
CONCLUSIONES ................................................................................................. 43
BIBLIOGRAFÍA..................................................................................................... 44
ANEXOS............................................................................................................... 45

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

DEDICATORIA

El presente trabajo es dedicado a cada


una de las personas que día a día nos inspiran a
mejorar y nos motivan a transformar la sociedad
de hoy en una que gracias a nuestra ayuda esté
libre de todos los males transmitidos por
personas egoístas que no piensan en el futuro
de las generaciones que vienen después de
nosotros.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

INTRODUCCION

El presente trabajo de investigación está dirigido al estudio y mayor conocimiento


del Pacto de San José de Costa Rica, también conocido como Convención
Americana sobre Derechos Humanos, toda vez que este al gozar de gran
importancia es un tema central del curso de Derechos Humanos y Tribunales
Internacionales, debido a mediante este Pacto se acordó entre estados de
americanos reconocer derechos fundamentales para las personas parte de estos,
así también desarrollaremos su forma de creación, los derechos que son
protegidos dentro del Pacto de San José de Costa Rica, los estado que forman
parte, las consecuencias que acarrearía Perú si se saliere del Pacto y así de la
misma manera hacer mención a la Ley que aprueba esta Convención en el Perú,
todo ello en mención a poder tener un conocimiento profundo sobre el tema a
tratar, para poder reconocer los derechos que nos son reconocidos y de la misma
manera para poder hacer respetar nuestros derechos.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

MARCO CONCEPTUAL

1. ¿Qué es el Pacto De San José de Costa Rica?


El Pacto de San José de Costa Rica, también conocido mundialmente como
Convención Americana sobre Derechos Humanos, se llevó a cabo el 22 de
noviembre de 1969, y, entro en vigencia en 1978.

Citando a (Orbe, 2012) “el pacto es todo convenio o acuerdo entre dos o más
partes para establecer un actuar o comportamiento determinado”. Por otro lado,
conforme a (Torres, 2002) “convención proviene del Latín convetio, deriva de
convenire, convenium, es el convenio de dos o más personas sobre una misma
cosa. La convención es un acuerdo de voluntades, cuyo efecto puede constituir,
o no, una obligación.”

La Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de


Costa Rica, del 22 de noviembre del 1969), resalta que dentro de un estado de
derecho en el cual se rigen las instituciones democráticas, la garantía de
derechos de los seres humanos se basa en el establecimiento de condiciones
básicas necesarias para su sustentación (alimentación, salud, libertad de
organización, de participación política, entre otros)

La Corte Interamericana de Derechos Humanos (acrónimo: Corte IDH) es un


órgano judicial de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que goza
de autonomía frente a los demás órganos de aquella y que tiene su sede en San
José de Costa Rica. Su propósito es aplicar e interpretar la Convención
Americana sobre Derechos Humanos y otros tratados de derechos humanos a
los cuales se somete el llamado Sistema Interamericano de Derechos Humanos.

Los idiomas oficiales de la Corte son, al igual que en la OEA, español, francés,
inglés y portugués. Los idiomas de trabajo son los que acuerde la Corte cada
año. Sin embargo, para un caso determinado, puede adoptarse también como
idioma de trabajo el de una de las partes, siempre que sea oficial.1

La Convención Americana sobre Derechos Humanos (también llamada Pacto de


San José de Costa Rica) fue suscrita, tras la Conferencia Especializada

1
https://es.wikipedia.org/wiki/Corte_Interamericana_de_Derechos_Humanos

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

Interamericana de Derechos Humanos, el 22 de noviembre de 1969 en la ciudad


de San José de Costa Rica y entró en vigencia el 18 de julio de 1978, debido a
que en ese momento se reunió el número de países establecido por el
instrumento para el inicio de su vigencia. Desde ese momento, se produjo el
proceso de establecimiento de una estructura judicial que tiene como misión
principal, hacer eficaces los derechos humanos en el continente.

La CIDH tiene dos funciones específicas en el sistema regional. Una función


jurisdiccional, a través de la cual evalúa la responsabilidad de los Estados,
respecto a situaciones que sean planteadas como infracciones a la Convención
Americana de Derechos Humanos. El instrumento regional prescribe que sólo la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos y los Estados partes de la
Convención, están facultados para someter a consideración del organismo un
caso y que para que pueda ser tramitada una controversia contra un Estado,
éste debe haber reconocido o reconocer la competencia expresamente de la
Corte, para todos los casos o bien bajo la condición de reciprocidad, por un
período específico de tiempo o para una situación particular. Hasta hoy, los
países que han reconocido la competencia de dicho organismo son: Argentina,
Barbados, Bolivia, Brasil, Colombia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El
Salvador, Guatemala, Guatemala Haití, Honduras, México, Nicaragua, Panamá,
Paraguay, Paraguay Perú, República Dominicana, Surinam, Uruguay, y
Venezuela.

La otra función es la Consultiva, la cual el organismo ejerce según lo


preceptuado en el artículo 64 : "Los Estados miembros de la Organización
podrán consultar a la Corte acerca de la interpretación de esta Convención o de
otros tratados concernientes a la protección de los derechos humanos en los
Estados Americanos. Asimismo, podrán consultarla, en los que les compete a
los órganos enumerados en el capítulo X de la Carta de la Organización de los
Estados Americanos, reformada por el Protocolo de Buenos Aires. De la misma
manera, la norma señala que la Corte a petición de los Estados, podrá emitir

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

concepto entre la compatibilidad de una ley interna y los instrumentos


internacionales de derechos humanos.2

1.1. Importancia del Pacto de San José de Costa Rica

Los órganos judiciales del Pacto de San José entraron en vigor en 1978
cuando el conjunto de las naciones de Iberoamérica se sumaron los acuerdos
de 1969. De esta manera, se fundó la Corte Interamericana de DDHH, cuya
sede también se encuentra en la capital de Costa Rica.

En los artículos que forman este marco jurídico se hace hincapié en algunos
derechos fundamentales. En primer lugar, el derecho a la vida, ya que desde
el momento de la concepción ninguna persona puede ser privado del mismo.
Se prohíbe expresamente la pena de muerte para los menores de edad, las
mujeres embarazadas, los mayores de setenta años y los presos políticos.

Se abordan aquellos derechos relacionados con la integridad de las personas


(se prohíben las torturas y los tratos crueles y degradantes, los trabajos
forzosos y cualquier forma de servidumbre o esclavitud).

La libertad y la seguridad personal son protegidas. En este sentido, se


prohíben los encarcelamientos arbitrarios, se hace obligatorio comunicar a los
detenidos los motivos de su privación de libertad y se especifica que toda
persona arrestada puede solicitar de manera inmediata que un juez determine
la legalidad de su detención. En varios artículos se hace referencia al respeto
a las libertades individuales.
Para garantizar la seguridad, se impide cualquier forma de propaganda en
favor de la guerra o cualquier mensaje que fomente la violencia y el odio.

Una herramienta legal que permite la protección jurídica de cualquier


ciudadano

2
https://www.monografias.com/trabajos76/convencion-americana-derechos-humanos/convencion-
americana-derechos-humanos.shtml

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

En síntesis, el Pacto de San José permite establecer una protección jurídica


sobre cuestiones fundamentales, como el respeto a los procesos judiciales, el
acceso a la justicia, la libertad personal y la presunción de inocencia. Con
estas resoluciones, los abogados defensores tienen una herramienta legal
para garantizar los derechos humanos de sus defendidos.
En 1969 la mayoría de países de Latinoamérica estaban gobernados por
sistemas totalitarios. Los acuerdos alcanzados en el Pacto de San José
fueron de gran utilidad para que los responsables de las dictaduras fueran
juzgados por los tribunales por el incumplimiento sistemático de los derechos
humanos.3

Los Estados Americanos signatarios de la presente Convención, Reafirmando


su propósito de consolidar en este Continente, dentro del cuadro de las
instituciones democráticas, un régimen de libertad personal y de justicia
social, fundado en el respeto de los derechos esenciales del hombre;
Reconociendo que los derechos esenciales del hombre no nacen del hecho
de ser nacional de determinado Estado, sino que tienen como fundamento los
atributos de la persona humana, razón por la cual justifican una protección
internacional, de naturaleza convencional coadyuvante o complementaria de
la que ofrece el derecho interno de los Estados americanos; Considerando
que estos principios han sido consagrados en la Carta de la Organización de
los Estados Americanos, en la Declaración Americana de los Derechos y
Deberes del Hombre y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos
que han sido reafirmados y desarrollados en otros instrumentos
internacionales, tanto de ámbito universal como regional; Reiterando que, con
arreglo a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, sólo puede
realizarse el ideal del ser humano libre, exento del temor y de la miseria, si se
crean condiciones que permitan a cada persona gozar de sus derechos
económicos, sociales y culturales, tanto como de sus derechos civiles y
políticos, y Considerando que la Tercera Conferencia Interamericana
Extraordinaria (Buenos Aires, 1967) aprobó la incorporación a la propia Carta

3
https://www.importancia.org/pacto-san-jose.php

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

de la Organización de normas más amplias sobre derechos económicos,


sociales y educacionales y resolvió que una convención interamericana sobre
derechos humanos determinara la estructura, competencia y procedimiento
de los órganos encargados de esa materia.4
2. Creación
Después de que finalizó la Segunda Guerra Mundial se comenzaron a elaborar
tratados internacionales cuyo propósito ha sido la protección de los derechos
humanos, uno de los más importantes es la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, aprobada en San José, Costa Rica, en 1969. Se conoce
también como el “Pacto de San José” (CNDH, 2016).

Al finalizar la Segunda Guerra Mundial se comenzaron a generar sistemas de


protección internacional para los derechos humanos, tanto en Naciones Unidas,
como en Europa, América y África. En América, la protección regional surgió en
el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA), en donde se aprobó
la Declaración de Derechos y Deberes del Hombre en 1948 y más tarde, en
1956, se creó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), cuya
sede se ubica en Washington, D.C., como órgano encargado de vigilar la
protección de derechos humanos, está integrada por siete miembros que actúan
a título personal y que deben ser de diferente nacionalidad y partes de la región.
Para cumplir con sus labores puede realizar visitas in loco con la autorización de
alguno de los Estados de la OEA; también se han generado relatorías temáticas
sobre cuestiones que se han considerado prioritarias en la región. Asimismo,
desde 1965 puede conocer de denuncias, nombradas peticiones individuales, de
personas sobre la violación de algún derecho humano. En 1969 fue aprobado el
tratado base del sistema, la Convención Americana de Derechos Humanos, que
contempla tanto la protección de derechos como el mecanismo de protección de
los mismos. Además de la Comisión Interamericana, dispuso la creación y
funcionamiento de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Co IDH), que
se instauró en 1979, la cual tiene su sede en San José, Costa Rica. El tribunal
interamericano está integrado por siete jueces que actúan a título personal y
deben ser de diferentes nacionalidades y partes de la región. Tiene una facultad
4
Democracia joven Mx Movilizar, participar, transformar-Convención Americana Sobre Derechos Humanos

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

consultiva acerca de la interpretación de la Convención Americana o de algún


tratado internacional de derechos humanos que sea parte un Estado Americano.
Igualmente tiene una competencia contenciosa que deriva de los casos
individuales que le remita la Comisión Interamericana sobre la violación de
derechos humanos, para ello el Estado sobre el que verse el caso debe ser
parte de la Convención Americana y haber aceptado la competencia
contenciosa del tribunal interamericano. México la aceptó en 1998. La Corte
Interamericana en su caso emite sentencias en las que puede determinar la
responsabilidad internacional del Estado por la violación de derechos humanos y
en su caso establecer medidas de reparación del daño a las víctimas. 5

El desarrollo institucional y normativo del Sistema Interamericano comenzó en


1948 con la adopción de la Carta de la Organización de los Estados Americanos
y de la Declaración Americana y se fortaleció con la adopción, en 1969, de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, conocida como “Pacto de
San José de Costa Rica”, tratado que entró en vigor el 18 de julio de 1978. El
transcurso del tiempo trajo consigo la adopción de una diversidad de nuevos
tratados, declaraciones y otras normas internacionales de la más amplia
naturaleza, desde aquellas que tienen como fin la protección y erradicación de
graves violaciones de derechos humanos, a la protección de grupos o personas
en situaciones de vulnerabilidad, quienes requieren de una protección
diferenciada y reforzada por parte de los Estados.

Los antecedentes de la Convención Americana sobre Derechos Humanos se


remontan a la Conferencia Interamericana celebrada en México en 1945, la cual
encomendó al Comité Jurídico Interamericano la preparación de un proyecto de
Declaración. Dicha idea fue retomada en la Quinta Reunión de Consulta de
Ministros de Relaciones Exteriores que se reunió en Santiago de Chile en
agosto de 1959 y decidió impulsar la preparación de una convención de
derechos humanos.

5
CNDH-México y el sistema Interamericano de los Derechos Humanos- Periférico Sur-México-2016 página
4-5-6.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

El proyecto elaborado por el Consejo Interamericano de Jurisconsultos fue


sometido al Consejo de la OEA y sujeto a comentario por parte de los Estados y
de la Comisión Interamericana. En 1967 la Comisión presentó un nuevo
proyecto de Convención. A fin de analizar los diferentes proyectos, la OEA
convocó a una Conferencia Especializada Interamericana sobre Derechos
Humanos, la cual se reunió en San José de Costa Rica del 7 al 22 de noviembre
de 1969. El 21 de noviembre de 1967 la Conferencia adoptó la Convención
Americana sobre Derechos Humanos. La entrada en vigencia de la Convención
el 18 de julio de 1978 constituyó un paso fundamental en el fortalecimiento del
sistema de protección y permitió incrementar la efectividad de la Comisión,
establecer una Corte y modificar la naturaleza jurídica de los instrumentos en los
que se basa la estructura institucional. Según establece el primer párrafo de su
Preámbulo, la Convención Americana tiene como propósito “consolidar en este
Continente, dentro del cuadro de las instituciones democráticas, un régimen de
libertad personal y de justicia social, fundado en el respeto de los derechos
esenciales del hombre”. En su parte primera, establece la obligación de los
Estados de respetar los derechos y libertades en ella reconocidos, así como su
deber de adoptar las disposiciones de derecho interno que sean necesarias para
hacer efectivo el goce de tales derechos. A continuación, la Convención define
los derechos y libertades protegidos, principalmente, los derechos civiles y
políticos. En cuanto a los derechos económicos, sociales y culturales, al
momento de adoptar la Convención los Estados solo se comprometieron a
“adoptar providencias tanto a nivel interno como mediante la cooperación
internacional, especialmente económica y técnica, para lograr progresivamente
la plena efectividad de los derechos que se derivan de las normas económicas,
sociales y sobre educación, ciencia y cultura, contenidas en la Carta de la
Organización de los Estados Americanos, por vía legislativa u otros medios
apropiados” (artículo 26). En su segunda parte, la Convención Americana
establece los medios de protección: la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a los que declara
órganos competentes “para conocer de los asuntos relacionados con el
cumplimiento de los compromisos contraídos por los Estados partes de la

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

Convención”. Las funciones y facultades de la Comisión aparecen enunciadas


en los artículos 41 a 43 y los artículos 44 a 51 establecen el procedimiento
referido al régimen de peticiones individuales6

Previo al "Pacto de San José de Costa Rica", se habían establecido otras piezas
legales para la protección de los derechos del hombre, entre estos podemos
destacar la Conferencia Interamericana sobre los Problemas de la Guerra y de
la Paz, está el texto oficial de dicha conferencia celebrada en México en los
meses de febrero y marzo de 1945, se proclama la adhesión de las repúblicas
americanas a los principios consagrados para la vigencia de los derechos
esenciales del hombre y se encomendó al comité Jurídico Interamericano la
redacción de un ante proyecto de declaración de los derechos y deberes
internacionales del hombre. Este comité presentaría el fruto de su trabajo
durante la Novena Conferencia Internacional Americana y sería aprobada la
Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre como un
instrumento de carácter no obligatorio, como una mera declaración.

También la conferencia aprobó la resolución número XXXI mediante la cual


recomendó que el Comité Jurídico Interamericano elaborara un proyecto de
Estatuto para la creación y funcionamiento de una Corte Interamericana
destinada a garantizar los derechos del hombre, "ya que no hay derecho
propiamente asegurado sin amparo de un tribunal competente". Esta es la
primera vez en la historia de los derechos humanos en el continente americano
en la cual se menciona de manera directa un organismo jurídico para regular los
derechos humanos. En la quinta reunión de consulta de ministros de Relaciones
Exteriores, se creó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos,
organismo que estaría reafirmado y con funciones más claras en la redacción de
la Convención.

La Conferencia Interamericana Especializada sobre derechos Humanos, nacería


en San José, Costa Rica, del 7 al 22 de noviembre de 1969, adoptando la
Convención Americana sobre Derechos Humanos o "Pacto de San José de

6
Corte Interamericana de Derechos Humanos-Documentos básicos en materia de Derechos Humanos en el
sistema Interamericano-periférico-2018

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

Costa Rica". La promoción y protección internacional de los derechos humanos


de la población americana era el trabajo de instrumentos de naturaleza
declarativa por lo que ninguna acción de dichos instrumentos u organismos era
realmente vinculante para los estados. Luego de la entrada en vigor de la
Convención Americana el año 1978, la evolución normativa del sistema de
protección de los derechos humanos en América ser vería completa. Ya no lo
hará sobre instrumentos de naturaleza declarativa si no que lo hará sobre
instrumentos que tendrán una base convencional y obligatoria.7

El sistema interamericano de derechos humanos es el conjunto de tratados,


instituciones y personas que en el marco de la Organización de Estados
Americanos (OEA), como organismo regional que reúne a los 35 Estados
independientes de América, ha sido instituido para velar por la protección y
garantía de los derechos humanos en este Continente. El sistema
interamericano de derechos humanos tiene su sustento legal en la Carta de la
Organización de Estados Americanos, que es el tratado por el cual se crea dicho
organismo regional, pero principalmente encuentra su base legal de 44 La
protección de los derechos humanos de niñas y niños funcionamiento en la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, también conocido como
“Pacto de San José”, además de otros tratados que posterior a éste han sido
aprobados por la OEA. Los órganos principales de este sistema lo son la
Comisión (CIDH) y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH),
pero además de éstos, es fundamental la participación de los Estados y, por
supuesto, de todas las personas a quienes se dirige la protección de los
derechos humanos en América.8

2.1 Quienes participaron

En la Segunda Conferencia Interamericana Extraordinaria, celebrada en Río


de Janeiro en noviembre de 1965, se dispuso encomendar al Consejo de la
OEA que actualizara y completara el proyecto de Convención sobre Derechos

7
https://es.wikipedia.org/wiki/Convención_Americana_sobre_Derechos_Humanos
8
Carlos Castillo-La protección de los Derechos Humanos de niños y niñas en el sistema interamericano de
derechos humanos- Universidad Pompeu Fabra.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

Humanos elaborado por el Consejo Interamericano de Jurisconsultos en 1959


y, una vez revisado, previo dictamen de la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos, el proyecto fuera sometido a los gobiernos para que
formularan las observaciones y enmiendas que consideraran pertinentes
para, después, convocar a una Conferencia Especializada Interamericana
sobre Derechos Humanos. La actualización y complementación del proyecto
se presentó, la primera parte, el 4 de noviembre de 1966, y, la segunda, el 10
de abril de 1967. Asimismo, los gobiernos de Uruguay, Chile, Argentina,
República Dominicana, Estados Unidos, México, Ecuador, Guatemala y Brasil
formularon observaciones a partir del 7 de junio de 1967 y durante tres
meses. Así, el 12 de febrero de 1969, el Consejo de la OEA decidió convocar
a la Conferencia Especializada sobre Derechos Humanos “para que
considere el proyecto de Convención Interamericana sobre Derechos
Humanos que ha sido elaborado de acuerdo con la resolución XXIV de la
Segunda Conferencia Interamericana Extraordinaria, así como las
observaciones y enmiendas que formulen los gobiernos y decida sobre la
aprobación y firma de la aludida Convención”. Finalmente, el 21 de agosto de
1969, dicho Consejo aprobó “señalar para la celebración de la Conferencia
Especializada sobre Derechos Humanos la ciudad de San José, Costa Rica,
[durante] el período del 7 al 22 de noviembre de 1969”. Durante los días en
los que tuvo lugar la Conferencia Especializada sobre Derechos Humanos en
la ciudad de San José, Costa Rica, según se advierte en las actas de dicha
Conferencia, se vertieron agudas y prudentes opiniones por parte de los
representantes de las veintiséis naciones que asistieron a este trascendente
foro, a las cuales nos referiremos en el siguiente apartado, con especial
énfasis en las referentes a la formación del Preámbulo de la Convención
Americana. Concretamente, los especialistas que participaron en la citada
Conferencia fueron: Gonzalo García Bustillos (Venezuela), Antonio Martínez
Báez (México) y Juan Isaac Lovato (Ecuador) –respectivamente, presidente,
vicepresidente y relator de la Conferencia–, así como los señores Manuel
Castro R. (El Salvador), Pedro Pablo Camargo (Colombia), George Collymore
(Trinidad y Tobago), Richard D. Kearney (Estados Unidos), Eliseo Pérez

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

Caldaso (Honduras), Juan Alberto Llanes (Paraguay), Narciso E. Garay


(Panamá), Raúl A. Quijano (Argentina), Carlos A. Dunshee de Abranches
(Brasil), Mario Artaza (Chile), Julio César Lupinacci (Uruguay), Luis Aycinena
S. (Guatemala), Santos Vanegas Gutiérrez (Nicaragua), Víctor Fernández
Dávila (Perú), Ignacio Arcaya (Venezuela), Alfosina de Chavarría (Costa
Rica), Rafael Urquía (Secretario General Adjunto de la OEA), Guillermo
Cabrera (Asesor Técnico de la Conferencia) y Alfredo Pérez Zaldívar
(Secretario de Actas).

Los Estados Americanos signatarios de la presente Convención, Reafirmando


su propósito de consolidar en este Continente, dentro del cuadro de las
instituciones democráticas, un régimen de libertad personal y de justicia
social, fundado en el respeto de los derechos esenciales del hombre;
Reconociendo que los derechos esenciales del hombre no nacen del hecho
de ser nacional de determinado Estado, sino que tienen como fundamento los
atributos de la persona humana, razón por la cual justifican una protección
internacional, de naturaleza convencional coadyuvante o complementaria de
la que ofrece el derecho interno de los Estados americanos; Considerando
que estos principios han sido consagrados en la Carta de la Organización de
los Estados Americanos, en la Declaración Americana de los Derechos y
Deberes del Hombre y en la Declaración Universal de los Derechos Humanos
que han sido reafirmados y desarrollados en otros instrumentos
internacionales, tanto de ámbito universal como regional; Reiterando que, con
arreglo a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, sólo puede
realizarse el ideal del ser humano libre, exento del temor y de la miseria, si se
crean condiciones que permitan a cada persona gozar de sus derechos
económicos, sociales y culturales, tanto como de sus derechos civiles y
políticos, y Considerando que la Tercera Conferencia Interamericana
Extraordinaria ( Buenos Aires, 1967 ) aprobó la incorporación a la propia
Carta de la Organización de normas más amplias sobre derechos
económicos, sociales y educacionales y resolvió que una convención
interamericana sobre derechos humanos determinara la estructura,
competencia y procedimiento de los órganos encargados de esa materia.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

3. Estructura

Conforme a lo en ella estipulado, la Convención entró en vigor el 18 de julio de


1978. En su redacción actual consta de 82 artículos agrupados en tres partes y
estas a su vez en once capítulos. El artículo 1 compromete a los Estados
signatarios a reconocer los derechos regulados en la Convención “a toda
persona sujeta de su jurisdicción”, lo que supone que no se limita a los
ciudadanos ni a los residentes.

3.1. Primera Parte Deberes de los Estados y derechos protegidos

 El Capítulo I (artículos 1 y 2) aparte de comprometer a los estados a


respetar lo estipulado en la Convención les insta a crear leyes acordes a lo
establecido.
 El Capítulo II (artículos 3 al 25) enumera los derechos civiles y políticos y
sociales
 El Capítulo III (artículos 26) este artículo cita el compromiso de los estados
a crear legislaciones “que se derivan de las normas económicas, sociales y
sobre educación, ciencia y cultura, contenidas en la Carta de la
Organización de los Estados Americanos”.
 El Capítulo IV (artículos 27 al 31) explica la suspensión de garantías, la
interpretación y la aplicación de todo lo establecido en la Convención.
 El Capítulo V (artículo 32) establece los deberes de las personas.

3.2. Segunda Parte Medios de protección

 El Capítulo VI (artículo 33) crea los órganos responsables por velar por la
protección y promoción de los Derechos Humanos: la Comisión
Interamericana de los Derechos Humanos y la Corte Interamericana de los
Derechos Humanos.
 El Capítulo VII (artículos 34 al 51) dicta la organización, funciones,
competencia y procedimiento de la Comisión Interamericana de los
Derechos Humanos.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

 El Capítulo VIII (artículos 52 al 69) dicta la organización, funciones,


competencia y procedimiento de la Corte Interamericana de los Derechos
Humanos.
 El Capítulo IX (artículos 70 al 73) menciona las disposiciones generales de
ambas instituciones, como dar la inmunidad diplomática, según el derecho
internacional, a los miembros de ambos organismos.

3.3. Tercera Parte Disposiciones transitorias

 El Capítulo X (artículos 74 al 78) sobre la firma, ratificación, reserva,


enmienda, protocolo y denuncia.
 El Capítulo XI (artículos 79 al 82) Disposiciones Transitorias9
4. Derechos que protege el Pacto de San José de Costa Rica
La Convención Americana sobre Derecho Humanos o también conocido como
Pacto de José de Costa Rica fue creado a función de proteger derechos
fundamentales para las personas y es por ello que haremos mención a los
derechos que se encuentran integrados dentro de este y desarrollaremos uno a
uno a fin de conocer cada uno de ellos.

4.1. Derecho a la personalidad jurídica

El Derecho es la manera de ordenar las relaciones humanas dentro de una


sociedad. Para que exista una armonía y el respeto a unas normas entre los
individuos que forman parte de una comunidad, es necesario desarrollar
reglas que organicen la convivencia. El Derecho desarrolla diversos
reglamentos, códigos y ámbitos de aplicación (código civil, código penal,
derecho administrativo, mercantil). Uno de los elementos clave son los
principios básicos del derecho, es decir, aquellas ideas generales a partir de
las cuales se desarrollan las leyes: la igualdad, la libertad o la justicia. A partir
de estos principios se empiezan a concretar los conceptos del derecho; hay
conceptos generales, imperativos, coercitivos, etc. La personalidad jurídica es
uno de los conceptos básicos propios del derecho.

9
Convención_Americana_sobre_Derechos_Humanos

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

La idea fundamental de personalidad jurídica consiste en reconocer que


alguien (una persona) o una entidad (empresa, asociación o fundación) tiene
unos derechos y unas obligaciones. Con otras palabras, la personalidad
jurídica atribuye la titularidad de deberes y obligaciones en cuanto que el
poseedor de los mismos los tiene por el simple hecho de existir y sin que sea
necesario su aceptación. Al tener la titularidad de derechos y obligaciones, la
persona o entidad ya puede obrar legalmente. (Navarro, 2014)

4.2. Derecho a la vida

La vida es un derecho fundamental consagrado en documentos


fundamentales internacionales y nacionales de diversos países del mundo. El
primero de todos los derechos si consideramos al titular de éste como
generador de cualquier otro derecho posible. En este sentido, es inviolable y
no admite excepción alguna, es decir, se tutela tanto en el ámbito privado
como en el público a fin de cubrir la dimensión personal. Lo anterior exige
tener conciencia de que el ser humano en gestación es persona en simbiosis
transitoria y no deja de serlo por depender provisionalmente del organismo
materno. Pensar lo contrario y decidir quién y cuándo es humano resulta
verdaderamente grave; lo peor que podría sucederle a una comunidad que se
precie de ser democrática en esta primera década del siglo XXI, es decidir
quién puede decidir si vive quien ya está vivo, como acertadamente señalaba
Carlos Castillo Peraza10 . En ese sentido es necesario entender que un sujeto
de derecho no se constituye por ser deseable o no para alguien. Los agentes
políticos del país, que hemos participado en la construcción de nuestra
transición democrática, estamos llamados a no permitir que nadie pueda
constituirse en creador de sujetos de derecho, porque hacerlo atenta contra la
esencia misma de la democracia. (Martinez, s.f.)

4.3. Derecho a la Integridad personal

10
El aborto en México; mesa redonda transmitida en el programa nexos TV 03-02-91 Disponible en:
http://www.nexos.com.mx/?p=13654

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

El derecho a la integridad personal es aquel derecho humano fundamental y


absoluto que tiene su origen en el respeto debido a la vida y sano desarrollo
de ésta. Es el derecho al resguardo de la persona, en toda su extensión, bien
sea en su aspecto físico como mental.

El ser humano por el hecho de ser tal tiene derecho a mantener y conservar
su integridad física, psíquica y moral. La Integridad física implica la
preservación de todas las partes y tejidos del cuerpo, lo que conlleva al
estado de salud de las personas. La integridad psíquica es la conservación de
todas las habilidades motrices, emocionales e intelectuales. La integridad
moral hace referencia al derecho de cada ser humano a desarrollar su vida de
acuerdo a sus convicciones.

El reconocimiento de este derecho implica, que nadie puede ser lesionado o


agredido físicamente, ni ser víctima de daños mentales o morales que le
impidan conservar su estabilidad psicológica.

Este derecho se encuentra consagrado en el derecho internacional desde el


Estatuto del Tribunal Militar de Nuremberg de 1945, la Declaración Universal
de Derechos Humanos de 1948 (artículo 5), los Convenios de Ginebra de
1949 relativos a los conflictos armados (protocolo II, artículo 4).

No es sino hasta mediados de los años 60, cuando tienen origen los tratados
generales de derechos humanos como el Pacto Internacional de los Derechos
Civiles y Políticos de 1966 (artículo 7) y la Convención Americana sobre
Derechos Humanos "Pacto de San José de Costa Rica" de 1968 (artículo 5),
que este derecho pasará a tener un mayor desarrollo legislativo internacional.
(Arriens, s.f.)

4.4. Derecho a la libertad personal

El derecho a la libertad personal consagrado en el artículo 7 de la Convención


Americana sobre Derechos Humanos plantea un importante abanico de
protección. Si bien ya se encuentra ampliamente superada la inicial
clasificación o división de los derechos humanos, teniendo en cuenta la

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

conferencia de Viena de 93, es imposible negar la especial relevancia que


tiene el derecho a la libertad y la que adquiere aun más cuando se pierde.

El artículo 7 protege este derecho desde las diferentes aristas con las cuales
el ismo se puede vulnerar. Asimismo, recorre un amplio espectro de figuras o
situaciones jurídicas, como la desaparición forzada, el hábeas corpus, la
detención ilegal, la detención arbitraria, la prohibición de la detención por
deudas excepto alimentarias, el derecho a ser informado de los motivos de su
detención, el control judicial de la misma por un juez y el ser juzgado dentro
de un plazo razonable o ser puesto en libertad, entre otras.

El estudio de este derecho en el marco de la Convención Americana puede


llevar a realizar distintos análisis de construcciones jurídicas trascendentes,
que han realizado los organismos del sistema interamericano protección de
derechos humanos y que deben se usados por nuestros tribunales
nacionales. (Alonso Regueira, 2013)

4.5. Derecho a indemnización

El artículo 10 de la Convención Americana de Derechos Humanos prescribe:


“Toda persona tiene derecho a ser indemnizada conforme a la ley en caso de
haber sido condenada en sentencia firme por error judicial11”.

Mediante este artículo toda persona que fue condenada por un error judicial
tendrá derecho a recibir una indemnización.

Para Emilio Fernández la responsabilidad del Estado por actos


administrativos, trata, esencialmente, de restituir el equilibrio económico roto
por hechos o actos del poder público en detrimento de un particular, por
medio del resarcimiento de los daños y perjuicios ocasionados" 12. Así, como
anticipáramos, el Estado tiene la obligación de reparar pecuniariamente de

11
El " error judicial" sigue siendo definido conforme a altos estándares o estándares
prácticamente imposibles de verificarse, por lo que la reciente jurisprudencia no innova en la
materia. Más aún se asocia esta acepción muy restrictiva del concepto " error judicial" al carácter
más garantista del nuevo proceso penal y a las garantías que revisten la actividad investigativa y
persecutora de la responsabilidad por el Ministerio Público.
12
Fernández, Emilio (1981): Diccionario de Derecho Público (Buenos Aires, Editorial
Astrea), p. 665.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

modo de restablecer la situación patrimonial que, con anterioridad al hecho o


acto ilícito, tenía el damnificado, o sea, que haga desaparecer los efectos de
la lesión sufrida por alguien en su patrimonio.

Habrá también responsabilidad del Estado siempre que éste, por disposición
legal expresa, deba indemnizar el daño que haya causado directamente a un
particular con motivo del ejercicio de la potestad administrativa lícita. (Urbina,
s.f.)

Tocando el tema del derecho a la indemnización podemos observar cómo en


ciertos casos no es suficiente la libertad que se otorga a una persona luego
de que se llega a la conclusión que esta a sido encerrada en prisión por un
error judicial.

La libertad otorgada por el Estado no es suficiente para reparar plenamente


las consecuencias de las violaciones de derechos humanos perpetradas
contra la víctima […], la Corte ha tenido en cuenta el tiempo que la víctima
permaneció encarcelada y los sufrimientos que padeció, derivados de los
tratos […] a los que fue sometida, como su incomunicación durante la
detención, su exhibición con traje infamante a través de los medios de
comunicación, su aislamiento […]. Por lo que resulta necesario buscar formas
sustitutivas de reparación, como la indemnización pecuniaria, que se refiere
primeramente a los perjuicios sufridos y, como esta corte ha expresado,
comprende tanto el daño material como el daño moral.13

4.6. Derecho a rectificación o respuesta

En el articulo 14 de la Convención Americana de Derechos Humanos


prescribe que:

1. Toda persona afectada por informaciones inexactas o agraviantes emitidas en


su perjuicio a través de medios de difusión legalmente reglamentados y que

13
Sentencia del caso Loayza Tamayo con Perú, Corte Interamericana de Derechos Humanos, 27 de
noviembre de 1998, párrafo 123.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

se dirijan al público en general, tiene derecho a efectuar por el mismo órgano


de difusión su rectificación o respuesta en las condiciones que establezca la
ley. 2. En ningún caso la rectificación o la respuesta eximirán de las otras
responsabilidades legales en que se hubiese incurrido. 3. Para la efectiva
protección de la honra y la reputación, toda publicación o empresa
periodística, cinematográfica, de radio o televisión tendrá una persona
responsable que no esté protegida por inmunidades ni disponga de fuero
especial.

El derecho de rectificación o respuesta integra el amplio contenido del


derecho a la información y a la comunicación, vigorizando el diálogo público y
fortaleciendo la democracia. Su estudio requiere un abordaje jurídico-
comunicacional que tenga en cuenta su estatus legal y su proyección en la
información, permitiendo escuchar otra versión de los hechos. Este instituto
posee una histórica raigambre en la normativa europea, y en particular se
abordará el caso de España, con una perspectiva de derecho comparado.
Podemos preguntarnos si es útil, adecuado y pertinente comparar dos
sistemas jurídicos que en principio son tan diferentes como el español y el
argentino, que, de movida, pertenecen a dos continentes distintos y tienen
trayectorias normativas muy disímiles desde su forma de gobierno, una con
monarquía parlamentaria y la otra como república federal. Y la respuesta, es
positiva, sí es posible, en principio por las contribuciones históricas del
derecho indiano y español en las colonias del Río de la Plata, y en las huellas
de pensamiento indelebles del derecho continental europeo que presenta la
legislación civil y comercial argentina, las fuentes de derecho comparado
español presentes en las sentencias que se analizan en el presente trabajo y
en los fundamentos de los proyectos de ley sobre el derecho de rectificación
o respuesta que consideran y retoman la experiencia y la normativa española.
A diferencia del Convenio de Roma de 1950, el sistema interamericano de
derechos humanos, posee una consagración específica del derecho de
rectificación o respuesta en el artículo 14 de la Convención Americana de
Derechos Humanos. (Sanchez de Diego Fernandez de la Riva)

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

4.7. Derecho a reunión

El derecho de reunión es la libertad pública individual que faculta a un grupo


de personas a concurrir temporalmente en un mismo lugar, pacíficamente y
sin armas, para cualquier finalidad lícita y conforme a la ley. Se considera una
libertad y un derecho humano de primera generación.14

4.8. Derecho al nombre

El nombre es el signo que distinguirá de por vida a cada una de las personas,
permitiendo su identificación e individualización.

En tal sentido, todas las personas tienen derecho a tener un nombre, lo cual
se hace efectivo a través de la inscripción del nacimiento en la Oficina de
Registro de Estado Civil, este hecho es un requisito indispensable para que el
Estado reconozca a la persona como ciudadano peruano; a partir de la
inscripción de nacimiento la persona adquiere existencia y legal y por tanto la
posibilidad de ser protegido por el Estado y de ejercer sus otros derechos.15

4.9. Derecho a la nacionalidad

El derecho a la nacionalidad del ser humano está reconocido como tal por el
Derecho internacional. Así lo recoge la Convención en su artículo 20, en un
doble aspecto: el derecho a tener una nacionalidad significa dotar al individuo
de un mínimo de amparo jurídico en las relaciones internacionales, al
establecer a través de su nacionalidad su vinculación con un Estado
determinado; y el de protegerlo contra la privación de su nacionalidad en
forma arbitraria, porque de ese modo se le estaría privando de la totalidad de
sus derechos políticos y de aquellos derechos civiles que se sustentan en la
nacionalidad del individuo.

La nacionalidad puede ser considerada como el vínculo jurídico Político que


liga a una persona con un Estado determinado por medio del cual se obliga

14
https://es.wikipedia.org/wiki/Derecho_de_reuni%C3%B3n
15
https://www.mimp.gob.pe/webs/mimp/mi_nombre/nombre.htm

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

con él con relaciones de lealtad y fidelidad y se hace acreedor a su protección


diplomática. Con distintas modalidades, la mayoría de los Estados ha
establecido la posibilidad de que personas que no tenían originariamente su
nacionalidad puedan adquirirla posteriormente, en general, mediante una
declaración de voluntad manifestada previo cumplimiento de ciertas
condiciones. La nacionalidad, en estos casos, no depende ya del hecho
fortuito de haber nacido en un territorio determinado o de nacer de unos
progenitores que la tenían, sino de un hecho voluntario que persigue vincular
a quien lo exprese con una determinada sociedad política, su cultura, su
manera de vivir y su sistema de valores.

Siendo el Estado el que establece la posibilidad de adquirir la nacionalidad a


quien originariamente era extranjero, es natural que las condiciones y
procedimientos para esa adquisición sean materia que dependa
predominantemente del Derecho interno. Siempre que en tales regulaciones
no se vulneren otros principios superiores, es el Estado que otorga la
nacionalidad, el que ha de apreciar en qué medida existen y cómo se deben
valorar las condiciones que garanticen que el aspirante a obtener la
nacionalidad esté efectivamente vinculado con el sistema de valores e
intereses de la sociedad a la que pretende pertenecer plenamente. Es
igualmente lógico que sean las conveniencias del Estado, dentro de los
mismos límites, las que determinen la mayor o menor facilidad para obtener la
nacionalidad; y como esas conveniencias son generalmente contingentes, es
también normal que las mismas varíen, sea para ampliarlas, sea para
restringirías, según las circunstancias. De ahí que no sea sorprendente que,
en un momento dado, se exijan nuevas condiciones, enderezadas a evitar
que el cambio de nacionalidad sea utilizado como medio para solucionar
problemas transitorios sin que se establezcan vínculos efectivos reales y
perdurables que justifiquen el acto grave y trascendente del cambio de
nacionalidad. (Derechos Human Rights, s.f.)

4.10. Derecho a la propiedad privada

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

El derecho a la propiedad como derecho humano esta conformado, entonces,


por dos aristas principales: la primera es ese grupo de cosas necesarias, en
términos razonables, para el desarrollo del sujeto; mientras que la segunda es
el producto del trabajo personal e intelectual de la persona, es decir, las
cosas maeriales o inmateriales que a partir de su interacción con el mundo
externo son creadas o producidas. (Alonso Regueira, 2013)

4.11. Derecho de circulación y residencia

Según lo ha definido la Corte Interamericana, el derecho de circulación y de


residencia es una condición indispensable para el libre desarrollo de la
persona y contempla, entre otros, el derecho de quienes se encuentren
legalmente dentro de un Estado a circular libremente en él; escoger su lugar
de residencia; e ingresar, permanecer, y salir del territorio sin interferencia
ilegal. Asimismo, la Corte ha mantenido que el disfrute de este derecho no
depende en ningún objetivo o motivo en particular de quien desea circular o
permanecer en un lugar. (UNAM)

5. Estados que forman parte del Pacto de San José de Costa Rica
Los países que han firmado y ratificado la Convención Americana de Derechos
Humanos o "Pacto de San José" son: Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Chile,
Colombia, Costa Rica, Dominica, Ecuador, El Salvador, Grenada, Guatemala,
Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú,
República Dominicana, Suriname, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela.

1. Argentina: Firmó el 2 de febrero de 1984 en la Secretaría General de la OEA.

2. Barbados: Firmó el 20 de junio de 1978 en la Secretaría General de la OEA.

3. Chile: (Declaración hecha al firmar la Convención) La Delegación de Chile


pone su firma en esta Convención, sujeta a su posterior aprobación
parlamentaria y ratificación, conforme a las normas constitucionales vigentes.
Dicha aprobación parlamentaria fue posteriormente realizada, y la ratificación
depositada en la Secretaría General de la OEA.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

4. Ecuador: (Declaración hecha al firmar la Convención) La Delegación del


Ecuador tiene el honor de suscribir la Convención Americana sobre Derechos
Humanos. No cree necesario puntualizar reserva alguna, dejando a salvo, tan
sólo, la facultad general contenida en la misma Convención, que deja a los
gobiernos la libertad de ratificarla.

5. Estados Unidos: Firmó el 1 de junio de 1977 en la Secretaría General de la


OEA.

6. Grenada: Firmó el 14 de julio de 1978 en la Secretaría General de la OEA.

7. Jamaica: Firmó el 16 de septiembre de 1977 en la Secretaría General de la


OEA.

8. Perú: Firmó el 27 de julio de 1977 en la Secretaría General de la OEA.

9. República Dominicana: Firmó el 7 de septiembre de 1977 en la Secretaría


General de la OEA con la siguiente declaración: La República Dominicana, al
suscribir la Convención Americana sobre Derechos Humanos, aspira que el
Principio sobre la Proscripción de la Pena de Muerte llegue a ser puro y simple,
de aplicación general para los Estados de la regionalidad americana, y mantiene
asimismo, las observaciones y comentarios realizados al Proyecto de
Convención citado y que hiciera circular ante las delegaciones al Consejo de la
Organización de los Estados Americanos el 20 de junio de 1969.

10. Uruguay: (Reserva hecha al firmar la Convención) El artículo 80, numeral 2


de la Constitución de la República Oriental del Uruguay establece que la
ciudadanía se suspende "por la condición de legalmente procesado en causa
criminal de que pueda resultar pena de penitenciaría". Esta limitación al ejercicio
de los derechos reconocidos en el artículo 23 de la Convención no está
contemplada entre las circunstancias que al respecto prevé el párrafo 2 de dicho
artículo 23 por lo que la Delegación del Uruguay formula la reserva pertinente.

a. Argentina: (Reserva y declaraciones interpretativas hechas al ratificar la


Convención) El instrumento de ratificación se recibió en la Secretaría General de
la OEA el 5 de septiembre de 1984, con una reserva y declaraciones
interpretativas. Se procedió al trámite de notificación de la reserva de

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

conformidad con la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados


suscrita el 23 de mayo de 1969.

5.1. Perú y la Decreto Ley que aprueba que Pacto de San José de Costa
Rica

Considerando que durante la Conferencia Especializada Interamericana


sobre Derechos Humanos, realizada en San José, Costa Rica, del 7 al 22 de
noviembre de 1969, se adoptó la “Convención Americana sobre Derechos
Humanos”, suscrita por el Gobierno de la República del Perú, el 27 de julio de
1977, se crea el Decreto Ley N°22231 que aprueba la Convención Americana
de Derechos Humanos, haciendo así que entre en vigor el 27 de Julio de
1997, a cargo del Presidente de la Republica del Perú, E.P Francisco Morales
Bermudez Cerruti, donde mediante su artículo único prescribe Apruébase la
“Convención Americana sobre Derechos Humanos”, suscrita por el Gobierno
de la República del Perú, el 27 de julio de 1977.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

6. Protocolos Adicionales:

6.1 PROTOCOLO DE SAN SALVADOR Y PROTOCOLO DE LA


ABOLICION DE LA PENA DE MUERTE 1990.

6.1.1.¿Qué es el Protocolo De San Salvador?


Adoptado en San Salvador, El Salvador, el 17 de noviembre de 1988, en el
Décimo Octavo Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General.

La Convención Americana sobre Derechos Humanos establece


expresamente la posibilidad de que se adopten protocolos adicionales a la
misma, a solicitud de un Estado Parte o de la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos16.

Sobre la base de esta disposición, el 17 de noviembre de 1998 la Asamblea


General de la Organización de los Estados Americanos reunida en El
Salvador adoptó el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre
Derechos Humanos en materia de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales (también conocido como Protocolo de San Salvador).

El principio de inherencia de los derechos humanos está contenido en el


propio Preámbulo del Protocolo, que indica que los derechos esenciales no
nacen del hecho de ser nacional de determinado Estado, sino que tienen
como fundamento los atributos de la persona humana17.

La interdependencia e indivisibilidad de los derechos humanos también son


subrayadas expresamente en el Protocolo de San Salvador:

[...] Considerando la estrecha relación que existe entre la vigencia de los


derechos económicos, sociales y culturales y la de los derechos civiles y
políticos, por cuanto las diferentes categorías de derechos constituyen un
todo indisoluble que encuentra su base en el reconocimiento de la dignidad
de la persona humana, por lo cual exigen una tutela y promoción

16
Convención Americana…, artículo 77
17
Protocolo de San Salvador, Preámbulo, párrafo 2

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

permanente con el objeto de lograr su vigencia plena, sin que jamás pueda
justificarse la violación de unos en aras de la realización de otros [...]18.

El Protocolo reafirma, tal como lo destacara la propia Convención, que sólo


puede concebirse como ideal del ser humano libre, exento del temor y de la
miseria, si se crean condiciones que permitan a cada persona gozar de sus
derechos económicos, sociales y culturales, tanto como de sus derechos
civiles y políticos. Así, como indica Zerbini Leao, el Preámbulo del Protocolo
de San Salvador sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales
constituye “un elemento vital para la tesis de la integralidad e indivisibilidad
de los derechos humanos”.

La parte dispositiva del Protocolo de San Salvador comienza determinando la


obligación a cargo de los Estados Partes de adoptar las medidas necesarias
hasta el máximo de los recursos disponibles, y tomando en cuenta su grado
de desarrollo, a fin de lograr progresivamente la plena efectividad de los
derechos allí contenidos19.

La expresión “hasta el máximo de los recursos disponibles”, descubre el


propósito evidente del instrumento de señalar que no alcanza, para cumplir
con las obligaciones que emanan del mismo, el hecho de que un Estado
Parte simplemente adopte medidas, sino que la acción de política pública de
los gobiernos, llevada a cabo por sí o con la cooperación de otros Estados,
tiene que esforzarse al límite de sus posibilidades para lograr
progresivamente la plena efectividad de los derechos reconocidos en el
Protocolo.

El Protocolo establece para los Estados, la obligación de adoptar, con arreglo


a sus procedimientos constitucionales y a las disposiciones vigentes, las
medidas legislativas o de otro carácter que fueren necesarias para hacer
efectivos los derechos, cuando el ejercicio de estos no se encontrare
garantizado.

18
Ibíd. Preámbulo, párrafo 4.
19
Protocolo de San Salvador, artículo 1.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

La obligación de garantizar el ejercicio de los derechos reconocidos en el


Protocolo, debe ser asumida bajo el respeto del axioma medular de la no
discriminación, principio rector del derecho internacional de los derechos
humanos.

La aplicación de cláusula más favorable a la persona humana encuentra su


recepción en el artículo cuatro del Protocolo. En virtud de dicha cláusula, no
cabe alegar este instrumento para restringir o menoscabar el ejercicio de un
derecho reconocido tanto en el plano interno como en otro instrumento
internacional.

Derivado de este principio, deviene insostenible cualquier postura que


pretenda realizar una mirada restringida de la protección de los derechos
económicos, sociales y culturales desde la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, utilizando como argumento la adopción o la letra del
Protocolo de San Salvador.

Sustantivamente, el Protocolo no puede negar la influencia que ha recibido


del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la
Organización de las Naciones Unidas, aunque cabe marcar algunas
diferencias entre ellos, tanto en los mecanismos de protección como en la
recepción de derechos20.

El Protocolo reconoce como contenido del derecho al trabajo el de obtener


los medios para llevar una vida digna y decorosa a través del desempeño de
una actividad lícita libremente escogida o aceptada.

Un grupo de medidas tendientes a lograr el pleno empleo, y brindar


orientación vocacional y para el desarrollo de proyectos de capacitación

20
Así, por ejemplo, la libre determinación de los pueblos que inaugura el catálogo de derechos del Pacto de
Naciones Unidas no encuentra analogía en el Protocolo de San Salvador; por el contrario, el derecho al
ambiente sano establecido expresamente por este último, no se receptaba en el Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas. En cuanto a los mecanismos de
protección hay identidad en el llamado “mecanismo de informes”, desarrollado más en profundidad dentro
de la Organización de las Naciones Unidas. El Protocolo de San Salvador tiene, como valor agregado, el
expreso reconocimiento del sistema de comunicaciones individuales para algunos de los derechos
contenidos en él.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

técnico-profesional, son identificadas por el Protocolo para hacer plenamente


efectivo el derecho al trabajo.

Asimismo, se establece la obligación de ejecutar y fortalecer programas de


atención familiar, encaminados a permitir que la mujer cuente con una
efectiva posibilidad de ejercer el derecho al trabajo.

Esta previsión pone a la luz el diagnóstico de una situación que debe

Revertirse, por el cual la mujer se encuentra llevada a ocuparse


principalmente del ámbito de lo privado; la cláusula forma parte de una
tendencia de “generización” progresiva e irreversible en el derecho
internacional de los derechos humanos21.

El Protocolo señala que el derecho al trabajo implica el de gozar de


condiciones justas, equitativas y satisfactorias de empleo, las cuales
requieren una remuneración que asegure la subsistencia digna y decorosa
para quien trabaja y su familia; salario equitativo e igual por igual trabajo;
estabilidad; indemnización en casos de despido injustificado; derecho al
ascenso; derecho a la seguridad social e higiene en el trabajo; limitación
razonable de las horas de trabajo; derecho al descanso; prohibición del
trabajo nocturno o insalubre para menores de dieciocho años.

Respecto a los derechos sindicales, se reconoce que las personas que


trabajan pueden formar sindicatos, y ejercer el derecho a huelga.

La norma vino a llenar un vacío en el sistema interamericano, ya que la


Declaración Americana no contempla previsiones similares, y la Convención
Americana tan sólo hace mención a la libertad de asociación con fines de
distinta índole, entre ellos laborales22.

Aunque desde una interpretación pro persona el artículo 16 de la Convención


Americana debe ser comprendido como abarcativo del derecho a sindicarse,

21
García Muñoz, Soledad, “Mujer, empleo y no discriminación desde la perspectiva del derecho
internacional de los derechos humanos”, en Trabajo, género y ciudadanía en los países del cono sur,
Montevideo, Ed. OIT y Universidad de la República, 2001, p. 221.

22
Convención Americana sobre Derechos Humanos, artículo 16.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

la previsión del Protocolo enriquece y precisa el marco de protección


interamericana a los derechos de asociación sindical y de huelga.

La seguridad social, tal y como se ve reflejada en el Protocolo de San


Salvador, adquiere una triple dimensión en el marco de la protección
internacional de los derechos humanos; en sí misma conforma un derecho
humano básico (frente a las consecuencias de la vejez o la incapacidad);
puede ser la consecuencia del ejercicio del derecho humano al trabajo propio
o ajeno (jubilación o pensión), y finalmente es, en algunos casos, una
herramienta indispensable para el ejercicio de otros derechos sociales, como
la salud.

En este sentido el Protocolo destaca la protección que los Estados deben


brindar frente a las contingencias derivadas de la vejez, y las enfermedades,
de tal forma que aquella cubra la atención médica y el subsidio o jubilación
en casos de accidente de trabajo o de enfermedad profesional, y la licencia a
las mujeres antes y después del parto.

El Protocolo de San Salvador entiende el derecho a la salud como el disfrute


del más alto nivel de bienestar físico, mental y social. Los Estados se
comprometen a garantizar la atención primaria de la salud, y ponerla al
alcance de todas las personas sujetas a su jurisdicción.

Es destacable la previsión del Protocolo de San Salvador (no establecida por


el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales) que
establece el compromiso de los Estados a considerar a la salud como un
bien público. Ello indica que los gobiernos no pueden desentenderse de la
atención y garantía del derecho a la salud de forma equitativa para todas las
personas sujetas a sus jurisdicciones.

Según el Protocolo de San Salvador deben tomarse las siguientes medidas a


efectos de garantizar este derecho: total inmunización contra las principales
enfermedades infecciosas; prevención y tratamiento de las enfermedades
endémicas, profesionales y de otra índole; educación de la población para la
prevención y el tratamiento de los problemas de salud; satisfacción de las

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

necesidades de salud de los grupos de más alto riesgo, y que por sus
condiciones de pobreza son más vulnerables.

Otra previsión particular del Protocolo de San Salvador es el reconocimiento


convencional del derecho de toda persona a un ambiente sano 23, al expresar
que todo ser humano tiene derecho a vivir en un medio ambiente saludable y
a contar con los servicios públicos básicos, y que los Estados Partes
promoverán la protección, preservación y mejoramiento del medio ambiente.

El derecho a un medio ambiente sano posee una interrelación especial con


otro conjunto de derechos, tanto civiles como sociales; así, en palabras de
Cançado Trindade aparece como una extensión natural de los derechos a la
vida y a la salud, en cuanto protege la vida humana tanto en el aspecto de la
existencia física y la salud de los seres humanos como en el de las
condiciones y la calidad de vida dignas.

El Protocolo consagra el derecho de toda persona a una nutrición adecuada


que le asegure el más alto nivel de desarrollo físico, emocional e intelectual.
Para ello, los Estados se obligan a perfeccionar los métodos de producción,
aprovisionamiento y distribución de alimentos; el propósito de la previsión es
garantizar el ejercicio del derecho humano a la alimentación, a efectos de
que todas las personas obtengan la nutrición necesaria para alcanzar al
menos un desarrollo suficiente en términos de dignidad humana.

En materia educativa, los Estados Partes del Protocolo de San Salvador


acuerdan que la educación es un derecho de todas las personas, y un medio
para capacitarlas a efectos de participar activamente en la vida democrática.
Los objetivos de toda educación, según el Protocolo de San Salvador, deben
orientarse hacia el pleno desarrollo de la personalidad humana y del sentido
de su dignidad, el fortalecimiento del respeto por los derechos humanos, el
pluralismo ideológico, las libertades fundamentales, la justicia y la paz.

23
En el plano de las convenciones regionales generales, solamente la Carta Africana de Derechos Humanos
y de los Pueblos recepciona el derecho al medio ambiente satisfactorio y global, pero como un derecho
cuyo titular son los pueblos como sujeto colectivo: Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos,
artículo 24. Esta Carta, adoptada en 1981 en Nairobi (Kenia), es el principal instrumento de derechos
humanos con que cuenta la Unión Africana (antiguamente llamada Organización de la Unidad Africana).

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

El Protocolo dispone que la enseñanza primaria será obligatoria, asequible y


gratuita para todas las personas; la enseñanza secundaria debe ser
generalizada, y al igual que la superior, accesible a todas las personas por
cuantos medios sea posible, y en particular por su progresiva gratuidad.

Los Estados deben fomentar la educación básica para quienes no la


hubieren recibido o no hubieren concluido la instrucción primaria, así como
establecer programas de enseñanza diferenciada para las personas
minusválidas.

Por último, el Protocolo reconoce el derecho de los padres a escoger el tipo


de educación que deseen para sus hijos e hijas, siempre que aquella se
adecue a los principios establecidos. Con respecto al derecho a la cultura y a
formar parte de su construcción, el Protocolo de San Salvador posee una
previsión casi idéntica a la establecida en el Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales.

Los Estados Partes en el Protocolo se encuentran obligados a tomar


medidas tales como asegurar la conservación, el desarrollo y la difusión de la
ciencia, la cultura y el arte; y a respetar la indispensable libertad para la
investigación científica y para la actividad creadora24.

Seguidamente, el Protocolo desarrolla el derecho a la constitución y


protección de la familia, institución reconocida como el elemento natural y
fundamental de la sociedad. Los Estados asumen los compromisos de
adoptar medidas especiales de protección de las madres, los niños, las niñas
y las personas adolescentes.

Los órganos encargados por el Protocolo para efectuar recomendaciones


sobre dichos informes son el Consejo Interamericano Económico y Social y el
Consejo Interamericano para la Educación, la Ciencia y la Cultura, que han
sido eliminados de la estructura oficial de la Organización de los Estados
Americanos, la cual ahora cuenta con el Consejo Interamericano para el
Desarrollo Integral. Para casos de violaciones de los derechos de personas

24
Protocolo de San Salvador, artículo 14.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

trabajadoras, de la organización de sindicatos y de la libre afiliación al


sindicato de su elección, así como para violaciones del derecho a la
educación según se recepta en el Protocolo, el instrumento habilita la
aplicación del sistema de peticiones individuales establecido en la
Convención Americana sobre Derechos Humanos.

Por último, el Protocolo destaca que la Comisión Interamericana de Derechos


Humanos podrá formular las observaciones y recomendaciones que
considere pertinentes sobre la situación de los derechos económicos,
sociales y culturales establecidos, en todos o algunos de los Estados Partes,
y puede incluirlas en el informe anual que presenta ante la Asamblea General
de la OEA, o confeccionar un informe especial.

6.2. Composición y Funcionamiento del Grupo de Trabajo para el Análisis


de los Informes Nacionales previstos en el Protocolo de San Salvador

6.2.1.Composición del Grupo de Trabajo


El Grupo de Trabajo encargado de analizar los informes de progreso de los
Estados Parte al Protocolo de San Salvador estará integrado por:

a) Tres expertos gubernamentales, elegidos durante la Asamblea General de la


OEA por los Estados Parte de un listado conformado por los candidatos
propuestos por los Estados Parte y teniendo en cuenta en la elección una
equitativa distribución y rotación geográfica. Además, un experto
gubernamental suplente.
b) Un experto independiente de alta calidad profesional y reconocida
experiencia en la materia designado durante la Asamblea General de la OEA
por el Secretario General de la Organización, a partir de los candidatos
propuestos por los Estados Parte a razón de un candidato por país, que
deberán ser académicos, integrantes de organizaciones de la sociedad civil
del país respectivo o bien integrantes de organizaciones de la sociedad civil
acreditadas ante la OEA, que en el momento de su elección no estén

P á g i n a 35 | 50
PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

ocupando una función en el gobierno o en algún otro poder del Estado.


Además, un experto independiente suplente.
c) Un miembro de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Más un miembro en calidad de suplente.

6.2.2. Reglas Generales

a) La Secretaría General, a través de la Oficina de Derecho Internacional del


Departamento de Asuntos Jurídicos Internacionales, ejercerá las
funciones de Secretaría Técnica del Grupo de Trabajo.

b) Tanto los expertos gubernamentales como el experto independiente


tendrán un mandato de tres años, excepto en el primer período, en el
cual, a efecto de dar continuidad a los trabajos, se escogerá por sorteo a
uno de los expertos gubernamentales elegidos para que junto con el
experto independiente tengan un mandato de dos años. En ningún caso
los expertos podrán ser reelegidos.

c) Ninguna persona que tenga la nacionalidad del Estado Parte cuyo informe
deba analizarse podrá participar en dicho análisis.

d) Para llevar a cabo su cometido, el Grupo de Trabajo podrá reunirse cada


seis meses por cinco días en la sede de la OEA. El Grupo desarrollará
sus tareas por vía electrónica o por otros medios mientras no esté reunido
personalmente.

e) Los informes de los Estados Parte y el análisis del Grupo de Trabajo


serán presentados al Consejo Interamericano para el Desarrollo Integral
(CIDI), conforme a lo dispuesto por el artículo 19 del Protocolo de San
Salvador. Anualmente, el Grupo de Trabajo elevará un informe al CIDI,
para su presentación a la Asamblea General de la OEA, con copia al

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

Consejo Permanente, transmitida a través de la Comisión de Asuntos


Jurídicos y Políticos (CAJP).

6.3. Protocolo a la Convención Americana Sobre Derechos Humanos


Relativo a la Abolición de la Pena de Muerte

Adoptado en Asunción, Paraguay, el 8 de junio de 1990, en el Vigésimo


Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General.

Considerando:

Que el artículo 4 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos


reconoce el derecho a la vida y restringe la aplicación de la pena de muerte;
Que toda persona tiene el derecho inalienable a que se le respete su vida sin
que este derecho pueda ser suspendido por ninguna causa; Que la tendencia
en los Estados americanos es favorable a la abolición25 de la pena de muerte;
Que la aplicación de la pena de muerte produce consecuencias irreparables
que impiden subsanar el error judicial y eliminar toda posibilidad de enmienda
y rehabilitación del procesado;

Que la abolición de la pena de muerte contribuye a asegurar una protección


más efectiva del derecho a la vida; Que es necesario alcanzar un acuerdo
internacional que signifique un desarrollo progresivo de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, y Que Estados partes en la
Convención Americana sobre Derechos Humanos han expresado su
propósito de comprometerse mediante un acuerdo internacional, con el fin de
consolidar la práctica de la no aplicación de la pena de muerte dentro del
continente americano.

Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos

Relativo a la Abolición de la Pena de Muerte

25
Por abolición se entiende a la acción y a la consecuencia de abolir. Este verbo, de acuerdo a la Real
Academia Española (RAE), describe el hecho de dejar sin vigencia, invalidar, cancelar o derogar una
costumbre, un precepto o una ley.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

 Adoptado en: Asunción, Paraguay


 Fecha: 06/08/1990
 CONF/ASAM/Reunión: Vigésimo Período Ordinario de Sesiones de la
Asamblea General
 Entrada en vigor: De conformidad con el artículo 4, para los Estados que lo
ratifiquen o se adhieran a él, a partir del depósito del Instrumento de
Ratificación o Adhesión
 Depositario: Secretaría General OEA (Instrumento original y ratificaciones)
 Texto: Serie sobre tratados, OEA, No. 73
 Registro ONU: No. Vol.
 Información general del Tratado: A–53
 Países signatarios:
 Argentina 12/12/06 06/18/2008 09/05/2008
 Brasil 06/07/94 07/31/96 08/13/96 RA
 Canada
 Chile 09/10/01 08/04/2008 10/16/2008
 Colombia
 Costa Rica 10/28/91 03/30/98 05/26/98
 Dominica
 Ecuador 08/27/90 02/05/98 04/15/98
 El Salvador
 Guatemala
 Guyana
 Haiti
 Honduras – 09/14/11 11/10/11 AD
 Jamaica
 México – 06/28/07 08/20/07 AD
 Nicaragua 08/30/90 03/24/99 11/09/99
 Panama 11/26/90 06/27/91 08/28/91
 Paraguay 06/08/99 10/31/00 12/07/00
 Perú

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

 República Dominicana – 12/19/2011 01/27/12


 San Kitts y Nevis
 Santa Lucía
 San Vicente y las granadinas
 Suriname
 Trinidad y Tobago
 Uruguay 10/02/90 02/08/94 04/04/94
 Venezuela 09/25/90 04/06/94 07/09/94

7. Consecuencias de Salirse Del Pacto De San José de Costa Rica


Para entender mejor este tema, es necesario aclarar primero una cuestión: ¿qué
son los Derechos Humanos? Los Derechos Humanos parten del concepto de
dignidad humana, el cual está reconocido por muchas Constituciones al rededor
del mundo.

Es a raíz del reconocimiento de la dignidad inherente a cada individuo, y la


conciencia de que cada uno es un fin en sí y no un medio, que surgen los
Derechos Humanos como pilar de la democracia y los Estados Constitucionales
de Derecho.

Estos derechos son de suma importancia para el desarrollo de todo Estado


Constitucional de Derecho. Así, se ha expuesto que los derechos humanos
tienen principalmente dos funciones:

1. Sirven como límite al poder: sin estos derechos no habría nada que detenga
la actuación del Estado, y aquella persona que ostente el poder podría
ejercerlo de forma ilimitada causando grandes perjuicios a la sociedad; y
2. Orientan la actuación del Estado: los Estados no solo deben respetar o
abstenerse de vulnerar estos derechos, sino también que deben realizar acciones
concretas para promover y protegerlos. Son ambas funciones necesarias para
garantizar y preservar la dignidad de los individuos.
Sin embargo, a pesar de su importancia, es recién desde el término de la
Segunda Guerra Mundial y luego de que el mundo fue testigo de las atrocidades
cometidas por el régimen Nazi, que se comienza a incidir en la vigencia real de

P á g i n a 39 | 50
PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

los Derechos Humanos. En el contexto latinoamericano, La firma del Pacto de


San José de Costa Rica, conocido mundialmente como la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, marcó uno de los hitos en cuanto al
respeto y promoción de los derechos humanos en América Latina y El Caribe.

Al respecto, el artículo 78º de la Convención señala que: “Los Estados Partes


podrán denunciar esta Convención después de la expiración de un plazo de
cinco años a partir de la fecha de entrada en vigor de la misma y mediante un
preaviso de un año, notificando al Secretario General de la Organización, quien
debe informar a las otras partes”.

No está permitido, como alegan algunos, desvincularse parcialmente del pacto.


Dicho acto está prohibido por el artículo 44° de la Convención de Viena sobre
Derecho de los Tratados:

“El derecho de una parte […] a denunciar ese tratado, retirarse de él o suspender
su aplicación no podrá ejercerse sino con respecto a la totalidad del tratado, a
menos que el tratado disponga o las partes convengan otra cosa al respecto”.

Ni el Pacto ni las partes han admitido la posibilidad de una denuncia parcial.

La denuncia de la Convención Americana de Derechos Humanos por parte de un


país miembro, implica que deja de ser parte del Pacto de San José y por ende se
retira de la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos
(Corte IDH), por lo que al acudir ante la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH), los casos no podrán ser vistos por el Tribunal.

Ante un eventual retiro de la Corte IDH, los casos que están en proceso
continúan siendo vistos por el Tribunal. Además, el organismo podrá recibir
nuevas denuncias, siempre y cuando hayan sido cometidas durante el tiempo en
que el país formaba parte de la Convención.

Las medidas dictadas por la Corte IDH no pierden vigencia una vez que un
Estado denuncia la Convención Americana de Derechos Humanos. El país en
cuestión debe acatar los fallos y el organismo internacional puede hacer
seguimiento de los casos que juzgó.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

7.1. ¿Si un Estado se retira de la Corte IDH deja de ser parte de la CIDH?

El retiro de un país de la Corte Interamericana de Derechos Humanos


(Corte IDH) no implica la salida de la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH), dado que esta última no fue creada por la Corte, sino que
depende de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Antecedentes:

En 1999 Trinidad y Tobago denunció la Convención Americana sobre


Derechos Humanos y así decidió retirarse de la Corte, con sede en San José
(Costa Rica), luego que ese organismo le ordenara abolir la pena de muerte
por considerarla violatoria del derecho a la vida, instrucción que el Gobierno
de Puerto España rechazó acatar por considerar que dicha sanción es una
pieza fundamental de su sistema de justicia penal.

7.3. ¿Qué pasaría para si el Perú se decidiera retirarse del Pacto de San
José de Costa Rica?

Por otro lado, denunciar el pacto supondría consecuencias graves para el


Perú en particular para el caso peruano. El Perú se retiraría de la jurisdicción
de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, por lo que los ciudadanos
que acudan a la CIDH para denunciar la vulneración de sus derechos por
parte del Estado, no podrán llevar sus casos ante este Tribunal. ¿Por qué es
especialmente grave para el Perú? Porque el Perú es el país donde se
comente los mayores atropellos a los Derechos Humanos.

Hasta marzo del 2014, la CIDH ha emitido 29 sentencias sobre el Estado


Peruano –somos el Estado respecto del cual la Corte se ha pronunciado en
mayor cantidad de veces, de las cuales 28 han condenado responsabilidad
del Perú por violar derechos humanos. Esta situación se hace aún más grave
considerando que los países que tienen un Poder Judicial deficiente como el
Perú, son aquellos cuyos ciudadanos más acuden a la Corte en busca de
justicia.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

La salida del pacto significaría un proceso largo y costoso para el Perú.


Incluso, la potencialidad de la aplicación de la pena de muerte podría incluso
generar desincentivos para la implementación de otro tipo de medidas
verdaderamente eficaces para luchar contra la violencia hacia la mujer.

Desvincularnos del Pacto de San José es muy perjudicial para la protección y


promoción de derechos humanos, más aún en un país como el nuestro donde
históricamente estos derechos no han sido -ni aun en la actualidad son-
plenamente garantizados.

El Pacto permite a los ciudadanos de los Estados parte, poder acceder a un


proceso internacional en caso de que su derecho no haya sido protegido de
forma adecuada por las instancias internas; por tanto, surge como una
garantía fundamental para la protección de los Derechos Humanos, y con
ello, para la vigencia de la dignidad inherente a cada individuo.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

CONCLUSIONES

 El pacto de San José de Costa Rica también conocido como Convención


Americana de Derechos Humanos, se llevó a cabo en 1969, entrando en
vigencia en 1978. El pacto de San José es un acuerdo entre varios Países
los cuales se obligan a respetar los derechos fundamentales de todo ser
humano, aboliendo toda pena de muerte.
 Después de la segunda guerra mundial se crearon varios instrumentos
internacionales para proteger los derechos fundamentales de las personas,
de esta manera es que se crea la convención americana de derechos
Humanos también llamado Pacto de San José de Costa Rica, por ser
Creada en la ciudad de San José, Costa Rica.
 Conforme a su estructura la Convención Americana de Derechos Humanos
consta de 82 artículos agrupados en tres partes y estas a su vez en once
capítulos. El artículo 1 compromete a los Estados signatarios a reconocer
los derechos regulados en la Convención “a toda persona sujeta de su
jurisdicción”, lo que supone que no se limita a los ciudadanos ni a los
residentes.
 Se le conoce como el “Pacto de San José” a la Convención Americana de
Derechos Humanos (tratado internacional). Fue el resultado de la
Conferencia Especializada Interamericana Sobre Derechos Humanos que
se dio en San José, Costa Rica en 1969. Entre los países que participaron
en la Conferencia y luego firmaron la convención.
 Los derechos que protege el Pacto de San José de Costa Rica, son
derechos que son inherentes a cada persona, es por ello que es
reconocido de manera internacional por los diferentes estados americanos.

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PACTO DE SAN JOSE DE COSTA RICA

BIBLIOGRAFÍA

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https://www.definicionabc.com/general/personalidad-juridica.php
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Sanchez de Diego Fernandez de la Riva, M. (s.f.). El derecho de rectificación o
respuesta: integrante del derecho a la información y a la comunicación.
Abordaje jurídico-comunicacional. Su aplicación comparada en el derecho
español y argentino. Universidad Complutense Madrid. Obtenido de
https://eprints.ucm.es/42344/
Torres, G. C. (2002). Diccionario Jurídico Elemental. Argentina: Heliasta.
UNAM. (s.f.). MOVILIDAD HUMANA, ESTANDARES INTERAMERICANOS.
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http://dx.doi.org/10.4067/S0718-52002008000100002

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ANEXOS

IMÁGENES
40 Aniversario de la entrada en vigor de la Convención Americana sobre
Derechos Humanos.

PRESIDENTE DE LA REPUBLICA DE PERÚ- El aprueba la entrada en vigor


en la Republica de Perú.

Francisco Morales Bermúdez Cerruti

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Países que forman parte del Pacto de San José de Costa Rica

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CONVENCION AMERICANA DE DERECHOS HUMANOS (PACTO DE SAN


JOSE DE COSTA RICA)

DECRETO LEY 22231

EL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA

POR CUANTO:

El Gobierno Revolucionario ha dado el Decreto-Ley, siguiente:

EL GOBIERNO REVOLUCIONARIO

CONSIDERANDO

Que, durante la Conferencia Especializada Interamericana sobre Derechos


Humanos, realizada en San José, Costa Rica, del 7 al 22 de noviembre de 1969,
se adoptó la “Convención Americana sobre Derechos Humanos”, suscrita por el
Gobierno de la República del Perú, el 27 de julio de 1977;

Que es conveniente a los intereses nacionales la aprobación de dicha


Convención;

En uso de las facultades de que está investido; y

Con el voto aprobatorio del Consejo de Ministros;

Ha dado el Decreto Ley siguiente:

Artículo Único:

Apruébese la “Convención Americana sobre Derechos Humanos”, suscrita por el


Gobierno de la República del Perú, el 27 de julio de 1977.

Dado en la Casa de Gobierno, en Lima, a los once días del mes de julio de mil
novecientos setenta y ocho.

General de División E.P. FRANCISCO MORALES BERMUDEZ CERRUTTI,


presidente de la República. General de División E.P. OSCAR MOLINA

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PALLOCCHIA, Presidente del Consejo de Ministros Vicealmirante A.P. JORGE


PARODI GALLIANI, Ministro de Marina

Teniente General F.A.P. JORGE TAMAYO DE LA FLOR, Ministro de Aeronáutica.

Embajador, JOSE DE LA PUENTE RADBILL, Ministro de Relaciones Exteriores.

Doctor JAVIER SILVA RUETE, Ministro de Economía y Finanzas.

Ingeniero GABRIEL LANATA PIAGGIO, Ministro de Industria, Comercio, Turismo


e Integración, General de División EP, JUAN SANCHE Z GONZALES, Mi-nistro
de Energía y Minas.

General de División E.P. OTTO ELESPURU REVOREDO, Ministro de Educación.

General de División E.P. ELIVIO VANNINI CHUMPITAZI, Ministro de Transportes


y Comunicaciones. Vicealmirante A.P. FRANCISCO MARIATEGUI ANGULO,
Ministro de Pesquería.

Teniente General FAP., JOSE GARCIA CALDERON KOECHLIN, Ministro de


Trabajo.

General de Brigada E.P. LUIS ARBULU IBAÑEZ, Ministro de Agricultura y


Alimentación.

Mayor General F.A.P. OSCAR DAVILA ZUMAETA, Ministro de Salud.

Contralmirante A.P. GERONIMO CAFFERATA MARAZZI, Ministro de Vivienda y


Construcción. General de Brigada E.P. FERNANDO VELIT SABATTINI, ministro
del interior.

POR TANTO:

Mando se publique y cumpla,

Lima, 11 de Julio de 1978.

General de División E.P. FRANCISCO MORALES BERMUDEZ CERRUTTI,

General de División EP, OSCAR MOLINA PALLOCCHIA.

Vice Almirante AV, JORGE PARODI GALLIANI

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Teniente General FAP, JORGE TAMAYO DE LA FLOR.

Embajador, JOSE DE LA PUENTE RADBILL

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