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Año III - N.° 63 REVISTA QUINCENAL ILUSTRADA 1.

° Noviembre de 1908

Rosita Torregrosa» primera tiple cómica del teatro Eslava. Fot.v««iü.

OíicínasiSan Mateo J, Madrid NUMERO 6 0 CÉNTIMOS Telefono Í.951 :: Apartido 389


DDD DDD
EL TEATRO EN AMERICA

HibHna. — Et acontecí mi en i o más interesante de la quincena ha autores, y es probable que perdure por mucho tiempo en los carteles.
sido el .Limt en el Nacional, de Knrique Borras y su excelente com- — kl rey del petróleo y Pepita López, fueron los estrenos ofrecidos
panfa. La Tana de que ve ni < precedido el ilustre actor, y ti gran éxito en el Lelo de Larrea, lin ambas obras han sido aplaudidas María Vi-
alcanzado rucien(emente en Puerto Rico, despertaron gran interés en lla rreal .Josefina Rosell y Enrique del Castillo.
este público y determinaron el hecho de que la función inaugural re- — También en el Cervantes se puso como estreno Pepita Lopes.
vistiera los caracteres de un aconit cimiento artístico de sin igual im- La interpretación fue mediana.
portancia. — Kl teatro liriseño nos ha ofrecido varios estrenos y dos debuts.
Ante un público selecto que llenaba el teatro representóse Tierra Los estrenos fueron: La bella Lucerito, mejicana, que fue un éxito;
baja, obra en cuya interpretación llega Borras á lo insuperable. El gran Fint, que obtuvo la misma suerte y La carne fl>ua, que también durará
actor fu¿ ovacionado :il terminar et primer acto, y las mismas mues- en los programas. Los debutantes fueron: la Srta, Ignacia Verástegui
tras de calurosa admiración repitiéronse al fuiali/ar la obra. y el tenor Luis Arroyo Gil. Ambos artistas gustaron al público de este
Hn funciones sucesivas ha representado Buena gente, AV mística, coliseo.
otra de las obras que constituyen mi triunfo pira el gran actor, Kl al- — Se anuncia en el teatro Orrin una temporada de zarzuela de
caide de Zalamea, El aJi-ersarto, hiaffies, El genio alegre. La alegría género grande, con elementos valiosos. Se ha contratado directamente
que pasa, fuan yosé y La ¡ata Je ¡n casa. para este objeto al tenor Ricardo Pastor. — Carlos M. Ortega.
La ductilidad del talento de Horras se ha comprobado en la re-
presentación de estas obras de tan distinta índole, y todas ellas ma- ws íse m
gistral mente sentidas por el.
1 >el resto de la compañía sobresale Enriqueta Palma, que es una Bueno.-* Aires. — La compañía dramática española María Gue-
buena actriz. rrero-Fernando Díaz de Mendoza ha inaugurado el nuevo y hermoso
Se asegura que Borras estrenará en la 1 laban.i la obra de Ru^iñol teatro de la Avenida, abriendo un abono por doce funciones.
El pródigo, aun no conocida eu Madrid. Las que hasta la fecha lleva dadas han constituido un gran triunfo
— Albisu continúa brillantemente la temporada con la compañía para los ilustres artistas. En las obras Castigo sin venganza, La estrella
de zarzuela, cuyos principales elementos son Julia Fons, Luisa Mos- de Sevilla y El loco Dios, María Guerrero fue ovacionada por su trabajo
cat, Sofía Romero y Valentín González. de gran actriz y Fernando Mendoza recibió también calurosas mues-
Últimamente hizo su d.-bt/t con Sangre moza y i'enus-.tulón, I? po- tras de admiración. Los demás artistas que constituyen la compañía
pular tiple Pura Martínez, obli-niendo una entusiasta acogida. han sido también objeto de unánimes elogios.
En San Juan de Luz han obtenido un verdadero triunfo Luisa — Kl popula!1 actor Rogelio Juárez celebró su beneficio en el tea-
Moscat y la Serra, que hizo su debut como li¡ib cómica. Ambas artis- tro de la Comedia.
tas gustaron mucho por su elegancia y su arte. En todas las obras representadas fue calurosamente aplaudido, y
Luisa Moscat se ha separado de la compañía para atender al res- sus numerosos amigos y admiradores le obsequiaron con esplendidez.
tablecimiento de su salud, algo quebrantada. — En el teatro Victoria se anuncia el estreno de la comedia F.l
Se asegura que la empresa de Albisu tiene el propósito <te orga- vendedor de cadáveres, consecuencia de las aventuras de «Skerlok IIol-
nizar un concurso de zarzuelas, con un premio de mil pesos. mes», cuyo éxito es mayor cada día.
Se ensaya con gran actividad la obra nueva de los Sres. Otero y — En el Nacional continúa actuando la compañía de Emilio Ca-
Krau Marsal La traviesa Mi-ni, en cuya interpretación tomarán parte rreras, y en las obras representadas últimamente han conquistado mu-
Julia Fons, Consuelo Muñoz, Mercedes Serra, Sofía Romero y |ose- chos aplausos, además del citado actor, cuyo trabajo gusta más cada
fina Pubill. día á medida que el público se acostumbra á él, las artistas Lola Mem-
— En Neptuno actúa una compañía de zarzuela en combinación brives, Angeles y María Moráis, San» l.uque, Dolores Kabré, Felisa
con el espectáculo cinematográfico. La estrella de esta compañía es Torres, y los Sres. Reforzó, Recober, Angelo, Bulfy, Marqués, Romero
Conchita Martínez, cuyo trabajo gusta al público. y Sanchíz.
La compañía Ortega-Ric^rt continúa su campaña en Payrei, re- De lo único que se lamenta el público que acude al U-atro es de
presentando obras dramáticas con aplauso y provecho. — file. la escasa novedad que ofrece el cartel, pues no se estrena ninguna
obra, y las que se representan son ya conocidas sobradamente.
258 Mg tfg — Clotilde Rovira no embarca para España como se aseguró. La
notable tiple, que tantos éxitos y tantas simpatías ha conquistado aquí,
México. — Desde hace pocos días ha comenzado en Abreu la accediendo A las reiteradas instancias que se le han hecho, continuará
temporada de conciertos vocales 6 instrumentales, que todos los años trabajando en el teatro de la Comedia.
organiza el infatigable maestro Carlos Meneses En el concierto inau- — La compañía lírica que actúa en el Marconi ha representado
gural se cantó la Misa tic Réquiem, del inmortal Verdi. Tanto los can- por primera vez la opera Fedora, cuya partitura, de Humberto Gior-
tantes como la orquesta del Conservatorio, fueron muy aplaudidos. dnno, fue objeto de unánimes elogios.
— La empresa del teatro Virginia Fábregas ha represetando '(Vier- En la interpretación alcanzaron aplausos nutridos por su exce-
midor, de S <rdou. La obra proporciona llenos todas las noches, no sólo lente trabajo la soprano Sra. jacobi, el tenor Bolis y el barítono Ga-
por el interés de su asunto, sino por el lujosísimo vestuario y decora- lazzi.
do con que ha sido presentada. — Con La Ce isha ha hecho su debut en el Politeama la tiple Ani-
— En el Principal se estrenaron La carabina de Ambrosio y Cata ta Rosselli, artista que con esta obra ha alcanzado recientemente gran-
de almas, lin el desempeño de esta nueva obra de Viérgol, se distin- des triunfos en San Pablo y Río Janeiro.
guieron la Romo y Eduardo Arozamena. lil público, que en gran número asistió al debut de la tiple, aplau-
Alberto Michel y José Castellanos Maff celebraron su beneficio dió calurosamente sus facultades, confirmando el buen juicio de que
en este coliseo, con la cincuenta representación de l.n Gehha. En vez la artista venía precedida.
del estieno .Je M tanto que atiente al santo, se puso A vuelo de pájaro, — En el Argentino se ha estrenado con buen éxito el boceto trá-
del mismo Sr. Michel. La obra obtuvo un éxito satisfactorio para los gico Hayitos de sol, original de D. Vicente Martínez Cutiño. — L. P.

ha n o m b r a d o C ü r r e s
CI AD T C r\V:\ T C AT D A P o n s a t exclusivo en París y Bru-
tlL A K 1 t, U t l L 1 L A 1 KL) selas al notable publicista D.Francisco de P. Alderete,
quien representa á este periódico tanto para los asuntos de redacción como administrativos.
Oficinas: II, Rué de l'Hótel de Ville-Neuilly-sur-Seine — París.
"" A R T U R O LA RIVA
primer actor del teatro Español.
Fot. Vrroué».
AÑO t i l NUM. 63

EL ARTE DEL TEATRO


Precios de suscripción: D
Publicación quincenal ilustrada Redacción, Adminis-
Madrid: Semestre. 6 pesetas. Afio. 1Z.
Provincias: Semestre, 7 Ptas. Afio. 12.50.
tración y Talleres,
Citranjero: A6». 20 ir apeos. DIRECTOR: E. CONTRERAS Y CAMARGO Calle de San Mateo, N.° 1
Número mello: 0,75 francos. Teléf. 1.951. - Apart. 389.
:: Madrid, I.1 de Noviembre 1908 ::

CRÓNICA TEATRAL ,*
L número de obras nuevas que nos ofrecen los es- Asquerino y de las lleras, y lus Sres. La Riva, Calvo,
E cenarios madrileños es tan enorme, que segura-
mente los que juzguen no más que por el número
creerán que la villa dei oso es el recinto predilecto de las
Mendiguchía y Barbero.
La Zarzuela ofreció al público la anécdota dramática
de los Sres. Castro y Boada, con música de Barrera y
musas. Cuervos, Aretino, que no obstante el buen gusto literario
Pero por desgracia la calidad está en razón inversa que sus autores demuestran, no obtuvo un éxito comple-
de la cantidad, y de aquí que los que estamos en el secre- to. Carmen Domingo, Adelina Marinos, y los Sres. Alaria,
to podamos afirmar que las musas no prodigan sus dones López y Ontiveros merecieron aplausos.
por acá y que los autores de la mayor parte de estas obras En el Gran Teatro estrenaron Ángel Caamaño y el
están muy distanciados de ellas. maestro N'ieto un juguete cómico lírico, titulado Toros en
Kara es la voz que el estreno de una obra nos descu- Aranjuez, que obtuvo un éxito completo por la gracia de
bre alguna idea original, algún aspecto nuevo; mucho más las situaciones y del diálogo, por lo agradable de la mú-
rara aún la que revela alguna personalidad en quien la sica y por la acertada interpretación que obtuvo por parte
escribió. de las Srtas. Flores y Navarro, y de los Sres. Soler, Fovc-
¿Obedece esto á que escasean los autores que verda- dano y Román.
deramente merecen tal calificativo, ó á que las empresas La compañía que dirige Fernando Porredón estrenó
ó los que ejercen de jueces en los teatros no encuentran en el elegante teatro del Príncipe Alfonso la comedia de
admisibles y reprcsentables más que aquellas obras que, lienavente El marido de su viuda, en la que el insigne
por lo rutinarias y vulgares, están al alcance de su corta autor satiriza, con el ingenio en él característico, los in-
inteligencia? convenientes que la celebridad de un personaje acarrea á
Me inclino á suponer que obedece más á lo segundo los seres allegados que le sobreviven. La gracia con que
que á lo primero, porque entre las gentes de teatro está pinta los tipos que en la acción intervienen y la viveza é
muy generalizada la creencia de que lo nuevo es peligro- ingenio del diálogo, proporcionaron al ilustre autor de Los
so y de qi'pT P°r L*' contrario, el género de obras que im- intereses creados un nuevo triunfo. Porredón interpretó
pone la rutina es de éxito seguro aunque ofrezcan escasa admirablemente el principal personaje de la obra, y con
novedad. él conquistaron aplausos merecidos la Srta. Rodríguez, las
Lara, el teatro de la literatura selecta en dosis ho- Sras. Torres y L)e Siria, y los Sres. Montenegro, Infiesta
meopáticas, que es como lo selecto y lo clásico resultan y Valdivieso.
más agradables al paladar, ha ofrecido dos estrenos: el de El trust de las mujeres, de Asensio Más y Capclla, con
un gracioso juguete cómico de López Marín, titulado Ro- música del maestro Jiménez, estrenado en el Regio, obtu-
berto el diavolo, y el de la comedia en dos actos de los se- vo un éxito completo. Es una de esas obras que por la
ñores Alonso y Manzano, Lo que no muer?. Ambas obras gracia del asunto, por lo agradable do la música, por lá
merecieron el aplauso del público. La segunda, pertene- visualidad que ofrecen y por dar ocasión fiara lucir su be-
ciente al género en que han conquistado la celebridad los lleza y su gracia á las artistas que la interpretan, atraen
hermanos Ouíntero, es una felicísima imitación, en la que la atención del público y proporcionan grandes entradas.
abundan las situaciones cómicas hábilmente preparadas y Julia ilesa y Teresita Calvó fueron muy aplaudidas, y los
en la que, si mi con una espontaneidad absoluta, con bas- autores se presentaron innumerables veces al final de la
tante oportunidad fluyen algunas frases ingeniosas del representación á instancias del público.
diálogo. Romea ha estrenado dos obras con felicísimo éxito;
Al éxito de las dos comedias citadas contribuyó la el proverbio Cada oveja...,original del Sr.Dfaz Alvarez.que
interpretación primorosísima que le dieron los artistas de tiene interés y está hábilmente desarrollado, y la come-
Lara, incomparables en esto de ofrecer al público una eje- dia De corazón á corazón, del Sr. (¡arda Porcel, autor que
cución irreprochable. Matilde Moreno en primera línea, revela condiciones muy estimables y que ha obtenido un
por su espiritualidad, su elegancia y su arte; las señoras merecido triunfo con esta su primera obra.
y señoritas Rodríguez, Alba,.Pardo y Orliz, y los señores La interpretación de ambas obras fue excelente por
Rubio, Puga y Simó Raso fueron justa y calurosamente parte de las Sras. Valdivia, Corona, Ezquerra y Montalt,
aplaudidos. y de los Sres. Castilla, Palacios y Brochado.
El Español ha ofrecido, no un estreno, pero sí una También en el Salón Venecia obtuvo un éxito calu-
novedad interesantísima: el debut de lialbina Valverde en roso la comedia Sin nombre, del Sr. Ramos Padilla, y en
aquel teatro, cun la comedia de Moratín El si de las niñas. Barbicri el melodrama María Jesús, del que es autor Feli-
En el papel dé doña Irene estuvo admirable la gran ac- pe Pérez Capo, y para el que ha compuesto una partitura
triz, y la secundaron con exquisito acierto las señoritas muy inspirada el maestro Quislant.
Armando Gresca
PAC. 2 EL ARTE DEL TEATRO

Cuadro I, Carrero, Se VÍIICRÍ» Jote Ramón, Sr. Benito. Señorito Juan, Sr. Korrín.
Hog«a, Sr. Poved*no. Atactli, Sra Sanr.

EL CORTIJO
Boceto dramático en un acto, dividido en tres cuadros, en prosa y verso, original de Isidro
Solee y Ángel Custodio, música del maestro Joaquín Cassadó, estrenado en el Gran Teatro.

A dirección artística del Gran Teatro no se da punto arrendamiento el cortijo de que es propietario el señor
L de reposo [tara conquistar el favor del público.
Desde que comenzó la temporada, no deja pa-
sar cuatro días sin ofrecer una novedad en sus carteles.
Juan (Sr. Román).
Miguel es muy honrado y fiel á su amo, y una noche
que intentaron robar al señorito Juan, Miguel hizo fuego
Las obras más aplaudidas d d repertorio moderno de zar- contra el ladrón y consiguió herirlo, por cuya causa, y
zuela, interpretadas con esmero, sucedense frecuente- habiendo el señorito declarado que mi había visto nada,
mente, y de un estreno á otro rara vi:z transcurren dos es sentenciado a cumplir condena Miguel en un presidir».
semanas. El señorito Juan, aprovechando la ausencia de Miguel,
Así se explica que, no obstante funcionaren Madrid hace el amor á Araceli, la cual, por gratitud, cariño ó
veintiséis teatros de las más diversas índoles y catego- miedo, accede á las pretensiones del señorito, y entabla
rías, el de la calle del Marqués de la Ensenada se vea con- relaciones con éste.
curridísimo diariamente. Hogaza, criado del cortijo (Sr. Povedano), hombre
El último estreno que aquella dirección ha ofrecido honrao, de ideas socialistas é incapaz de ejecutar malas
al público, ha sido el del boceto dramático en un acto y acciones, sorprende las relaciones del señorito y Araceli,
tres cuadros, titulado El cortijo, de cuyo libro son auto- y lo pone en conocimiento de José Ramón; éste se indig-
res el primer actor y director de la compañía, Isidro So- na, pues no cree A Araceli capaz de semejante acción, y
ler, y el joven dramaturgo Ángel Custodio, y cuya parti- quiere pegar á Hogaza; pero éste le jura que es verdad
tura firma el notable compositor Joaquín Cassadó. lo que ha dicho, y le aconseja qui- vigile y se convencerá.
Por el interés que ofrece la fábula, por la intensidad José Ramón, por fin, sorprende al señorito abra/ando
de las situaciones dramáticas y por la belleza de la par- á Araceli y, convencido de la culpabilidad de su nuera,
titura, El cortijo alcan/ó un gran éxito en la noche de su trata de malaria, lo cual impide Hogaza, sujetando á José
estreno y proporciona tantos aplausos á tos artistas que Ramón, y termina el primer cuadro.
en su interpretación intervienen, como buenas entradas
á la Empresa.
La acción de la obra se desenvuelve en un cortijo
próximo á Sevilla. Canijo (Srta. Flores), gitanillo muy travieso, y el Man-
Miguel (Sr. Mora), hijo de José Ramón (Sr. Benito), co (Sr. Fuentes), en cuyo ventorro se hallan Miguel y José
está casado con Araceli (Sra. Sanz). Esta familia tiene en Ramón hablando de la acción de Araceli, pues Miguel,
EL ARTE BEL TEATÜC

por un indulto, ha que el fuego amena-


vuelto del presidio, za q u e m a r toda la
tienen una escena cosecha almacenada.
muy graciosa donde Todos corren hacia
Canijo cuenta á éste el lugar del siniestro,
lo que ha pasado en dejando sola á Ara-
el cortijo entre José celi.
Ramón, Araceli, Ho- Miguel entra en
gaza y el señorito, y el palio del cortijo y,
por la cual ha echa- tras una escena muy
do el señorito á José dramática entre éste
Ramón del cortijo; el y Araceli, en la que
Manco, á su vez, él reprocha á su mu-
cuenta á Canijo lo jer su traición, y ésta
que Miguel está di- pretende disculpar-
ciendo á José Ra- la, Miguel, cegado
món. Salen éstos del por los celos, mata á
ventorro, y en una José lía mói., Sf, Benito. - H o g j j j . Sr. Povcdano. Araccli, Sra. S j n i , Araceli con su faca;
escena, la más inte- acuden todos los
resante del boceto, trata José Ramón de convencer á Mi- personajes de la obra y varios obreros, los cuales, aterra-
guel que deje á Araceli y no vaya al cortijo; pero Miguel dos por la presencia de la escena que se ofrece ante sus
tiene hecho el propósito de malar á Araceli, y por más ojos, no saben qué hacerse; el señorito increpa á Miguel
súplicas y ruegos de José Ramón, aquél no accede y va y quiere matarle con su revólver; los campesinos lo impi-
hacia el cortijo, decidido á vengar la traición del señorito den, y Miguel, entonces, exclama: «Ahí tienes; esta es mi
y de su mujer. venganza; mi cuchillo ha terminado con mi deshonor, j> el
* fuego con tu riqueza; ella muerta, tú probé.»
* #
Como se ve por el ligeru bosquejo que del argumen-
Hn el cuadro tercero, después de unas escenas con- to hemos hecho, este dramita campesino tiene semejanza
cisas entre Hogaza, Canijo y varios campesinos, llegan el con otros de los que forman el repertorio del género á
señorito y Araccli; el señorito manda á Indos los trabaja- que pertenece.
dores que se retiren á descansar, pero lo impide la llega- F.l afán de ofrecer al espectador situaciones emocio-
da de José Ramón, para anunciar que Miguel ha vuelto nantes ha cundido tanto que no es fácil encontrar un
de presidio y que estén prevenidos para que no ocurra asunln nuevo sin salirse de los limites del melodrama, y
una desgracia; el señorito no hace caso de las palabras de aun á los que mayores éxitos han alcanzado de algún
José Mamón, pero viene á confirmarlas el cortijero [."(se- tiempo á esta parte habría que achacarles el defecto in-
ñor Villegas) anunciando que el cortijo está ardiendo y dicado.

•"•oriijero 1.°, Sr. GomíUz. Mocitt 1. a , Stta. Amar. Catnro, Sr. Villcgai. MociU 3 - \ Sra. Ltyus.
CotUÍ«ro 2 °. Sr. Rico. C*iü¡o. Srla. FJwe». Mocita 2 ". Srti. Hernández.
CortiJ*» 3 °. Sr. R»Iart.
PAG. 4 ÉL ARTE DEL TEATRO

Canijo, Srta. Flores. Miguel, Sr. Mora. M, Sr. Povedano. Cuadro II!. Fort. Franzcn.
Afaceli, Sfi. Sant. Jo«í Ramón, Sr. Benito. El señorito, Sr. Romín,

No es de extrañar, pues, que los autores de El cor- estrenado, convenció al auditorio por la e x a c t a y justa
tijo, dejándose llevar por la corriente, dieran un nuevo manera de sentirlo y por el buen gusto con que cantó su
golpe al drama pasional, hoy tan en boya en el teatro; y parte.
la prueba más concluyente de que no se han equivocado Muchos aplausos alcanzó también la Sria. Flores en
en su obra es el éxito que ha obtenido. el simpático tipo de Canijo, que interpretó con su habi-
Como éste no puede atribuirse á la novedad del asun- tual desenvoltura y con el gracejo y la picardía que exige
to, no creemos sufrir error al afirmar que se debe princi- el tipo.
palmente á la habilidad con que los autores han desarro- También los Sres. llenito, Román, Povedano, Fuen-
llado la fábula, haciéndola más interesante por la prepa- tes y Mora estuvieron muy acertados en los suyos, con-
ración feliz de las situaciones, la justa pintura de los tip'os tribuyendo á que el conjunto resultara excelente los se-
y la soltura del diálogo. ñores Rico, Ral'art, (.ionzález y Villegas.
También debe apuntarse en el haber del músico una El cortijo es de las obras que se representarán con
parte no escasa del éxito alcanzado, pues aunque la par- aplauso en todos los teatros de España, y de las que si
titura no es de las que asombran por su extraordinaria no proporcionan á sus autores renombre universal con-
inspiración, es de las que, tribuyen eficazmente á su
ajustándose á las situacio- provecho.
nes del libreto, sírvenlas Algunas con menos
satisfactoriamente y de- atractivos y menos méri-
muestran en el composi- tos sirvieron, no solamen-
tor espontaneidad y ta- te para proporcionar á sus
lento. a u t o r e s una liquidación
Todos los números importante sino también
que la constituyen fueron para sacarlos de la obscu-
aplaudidos. ridad en que vivían; pero
Los artistas del Gran aunque El cortijo no au-
Teatro, esmerándose en la mente en una proporción
interpretación de la obra, considerable la fama lite-
dieron gran relieve á sus raria que los Sres. Soler
respectivos papeles. y Custodio han sabido
La señora Sanz en el conquistarse con o t r a s
personaje de Araceli, del obras, aumentará su res-
que se encargó al separar- pectiva recaudación, que
es lo que en primer tér-
Isidro Soler, se de la compañía la seño- mino se propusieron. Ángel Custodio»
autor <j«i libro. rita Karinós, que lo habla autor dil libro.
A. G.
PJ. ARTE DEL TEATRO

Informaciones El t e a t r o ^
DID
extranjeras ^c «¿e en P a r í s

París, Octubre igoS. res, á partir del 1900. Estas


obras n u e v a s , desde la
Sr. Director de EL ARTE ópera hasta la más peque-
I>LL TF.ATRO. ña de las piezas, parece
Mí distinguido amigo: que serán presentadas con
Al reanudar mis trabajos mises en scine tout ti fatt
para informar á los lecto- rentarquables.
res de esc periódico de Aquí, la preparación de
cuanto por aquí ofrece la temporada teatral, me com- las obras cuyas primicias han de ofrecerse al público en
place mucho hacerlo con una nota altamente simpática la temporada, constituye la principal preocupación de las
del último viaje de S. M. el Rey de España I). Alfonso a empresas, que en esto cifran el. mayor éxito del ne-
su paso por París. gocio.
Yo estoy dispuesto también á abrir esta sección con
toda clase de entusiasmos, dando cuenta á los lectores de
// est gentil le petit roí. EL ARIT: DEL TEATRO, con la mayor fidelidad que me sea
Esta era la exclamación general que en la noche del posible, de todo lo bueno y de todo lo malo que se dé
domingo, iS del corriente, se oía salir espontáneamente á conocer en estos teatros, pues este París, tan renom-
de todos los labios en el teatro de La Renaissance. brado por lo bueno, se distingue también por lo muy malo.
El público que llenaba el teatro, lo mismo el de pal-
cos y butacas que el de las galerías, tenía fija su atención
en la persona de Don Alfonso, con mucho más interés * *
que en la escena.
Nuestro Rey había asistido á la representación de Y no dudo que la temporada, como se anuncia, sea
L Emigré, verdadero succés del gran artista I.ucien tluitry. muy buena; pero una de las primeras obras que se han
S. M. se mostró encantado de la interpretación de la estrenado en teatro tan importante como Palais Royal, ha
obra, y con su espíritu demucrático, que admira á estos sido una verdadera decepción para el arte y para la mo-
franceses á pesar de su republicanismo enragé, llamó á su ral. Aquí, donde las costumbres son tan libres y donde
palco al notable Guitry para felicitarlo. Después, aperci- nadie se asusta de nada, la obra ha sido calificada por la
bido de que el autor de la nbra, M. Paul liourget, se ha- Prensa en general de demasiado alegre.
llaba en el teatro, le felicitó también, y parece que dio su Uheure de la bergh-e, comedia vaudeville en tres actos
opinión sobre el deber militar y la obediencia pasiva, que de Maurice Ordonneau, es un tejido de cosas que quieren
es el asunto principal del tercer acto. formar un argumento y que muy difícilmente se llegan á
Tratándose de la disciplina, se debe suponer lo que comprender.
diría el jefe supremo de los soldaditos españoles, honra Una riquísima y coquette parisiense, viuda de un ame-
y prez de todos los ejércitos del mundo. ricano, es solicitada en matrimonio por M. Rcnú Frober-
Y el público que asistía á la representación, sin dis- ville, joven lleno de aventuras amorosas. La dama, que
tinción de clases, repetía sin cesar: había quedado muy poco satisfecha de su primer marido,
Ak, quH est gentil le petit roi (tEspagnel quiere, antes de conceder su mano y su dinero al don
Realmente no tiene nada de pequeño nuestro Rey; Juan, ponerlo á prueba, observando su conducta para
pero para ios franceses, y sobre todo para los parisienses, convencerse de si realmente la ama. Esta prueba resulta
es y será siempre le petit roi gentil et brave. desastrosa. Froberville seduce á una preciosa criadita y
Esto se debe al saludo militar y á la serena sonrisa reanuda relaciones con una antigua querida. Enterada de
con que saludó al público parisién al acabar de explotar estas proezas, la rica viuda otorga su confianza y su mano
la bomba de la rué de Rohan. al seductor.
Desde aquel momento angustioso, Alfonso X11I es Las escenas de la comedia están llenas de juegos de
admirado y querido en París como ningún otro Monarca. palabras alegres, hasta donde puede llegar la alegría.
La presentación soberbia, pues para esto nadie como
los franceses.
Aquí es difícilísimo que caiga una obra al foso, pre-
La vida de este pueblo renace con los fríos, y cosa cisamente por eso: la mise en scine saca adelante lo más
rara, pero cierta: el gran calor, en todos los negocios, em- malo.
pieza cuando llegan los hielos. Así, hoy que los gabanes La interpretación muy buena. Mlle. Irven y messieurs
de pieles salen á la calle, pues aquí se pasa de golpe del le (¡alio, Diamanol y I.amy han respondido con exceso á
traje de alpaca á las pieles, principia el gran movimiento, sus papeles.
y todas las empresas teatrales rompen el fuego, presen- *
tando lo más lucido en obras y actores.
Durante esta saüon, que promete ser lucidísima, el En mi carta para el número próximo daré cuenta de
repertorio de obras á estrenar con que cuentan los tea- diferentes estrenos, todos importantes, que se preparan
tros de París, es superior con mucho á los años anterio- para esta quincena.
Alderete
r.4(7. 6 EL ARTR DFJ. TEATRO

Acto I. - Adtiín, Sr Totírs. Don Matías, Sr. Piado. Ángel, Si. Soto. Eí cura. Si. La Riv«.
Paulina. SrU. Aaqutiino. . Padre Pidcl, Si. Reig. Don* Petronila, Sia. Tubau.

LA NUBE
Comedía dramática en tres actos y un epílogo, original de D. Ceferíno Patencia,
estrenada en el teatro Español.

ha inaugurado brillantísimamen- una compañía en la que figuran artistas de tan sólido re-
C
E;I-I:KI\<> FALENCIA
te la temporada en el teatro F.spañol. nombre como las Sras. Tubau, Va!verde y Ferrí; las seño-
Su comedia, La nube, estrenada en la función ritas Asquerino y l.uz de las lleras, y los Sres. La Kiva,
inaugural, obtuvo un éxito completo, y el ilustre drama- Reig, Calvo, Mendiguchía, Frado y Lagos, entre otros de
turgo ha sido unánimemente elogiado como autor de tan indudables méritos, sino que ha podido reunir también un
hermosa obra y como director de tan notable compañía. número de obras nuevas que, por la fama literaria de sus
Los que conocen íntimamente la vida teatral, saben autores, garantizan el éxito de la temporada.
con cuántas dificultades ha tropezado el Sr. Falencia y el Los comienzos no han podido ser más felices. La co-
cúmulo de obstáculos que ha tenido que vencer su peri- media del celebrado autor de La charra, de que venía
cia y su constancia para organizar una compañía digna, hablándose en los círculos literarios con la insistencia y
por los méritos y por la historia de las principales figuras el interés que despiertan siempre las obras de combate,
que habían de constituirla, de los prestigios de aquel tea- en las que además de la teatralidad se ofrecen á la consi-
tro, y mucho más en las circunstancias en que lo ha he- deración del público problemas de indudable transcenden-
cho, cuando en funciones ya casi todos los coliseos, eran cia, que por lo que le afectan lian de atraer su atención,
escasísimos los actores de algún valer que podían escri- produjo el efecto que esperaban los que la conocían y el
turarse. contrario del que supusieron los que, sin conocerla, apre-
A pesar de esta enorme dificultad y de que la pre- suráronse á afirmar que por su impía tendencia, por el es-
mura con que debía resolver 1< is complejos problemas que carnio que en ella se hacía de la religión y de sus minis-
se le presentaban habían do dificultar su feliz gestión, tros, podía considerarse acreedora al anatema délos sa-
puede afirmarse que el Sr. Falencia ha conseguido un bios y de los justos.
triunfo completo, pues no solamente ha logrado reunir Estos equivocáronse lamentablemente, porque ni la
FL AKTR DEL TF.tTKO PAC.y

u
obra es impía, ni que hace de la reli-
atenta á los princi- gión el más indigno
pios religiosos, ni si- de los comercios,
quiera pone en la pi- ofrécese la del cura
cota á los que del bondadoso, todo fe y
sacerdocio suelen caridad, todo abne-
hacer un comercio gación y dulzura, que
indigno. Kl respeto i n t e r p r e t a n d o los
;í la fe católica, á !a santos principios en
virtud y al bien en- que se tunda la ver-
cuentran en el autor dadera religión pre-
de La nube el tribu- dicada por el Cruci-
to debidu. Xi en la ficado, no puede ver
obra se plantea pro- un dolor sin acudir
blema alguno d e en su consuelo, y no
conciencia, ni se dis- acierta á explicarse
cute cuestión que en v i r t u d de qué
afecte á las doctrinas doctrina cristiana se
del catolicismo. Trá- deja morir de ham-
tase de una punzan- bre á tantos infeli-
te sátira, mejor dire- ces, mientras en los
mos, de la pintura templos se celebran
fiel y s o b r i a m e n t e fiestas esplendoro-
presentada de uno sas en honor del que
de esos íntimos dra- ym y , ... ., predicara la humil-
mas á que da ocasión dad y la pobreza.
la fanática intransi- AcioII. Fidel, Sr. Reís- - Paulina, Srta. Atquefino.
gencia de los que,di- Entre estas dos
ciéndose ministros del Señor, constituyen una sociedad figuras, que el autor
acaparadora de almas y dispensadora de favores divinos ha trazado con firmeza admirable de líneas y con impon-
á cambio de la posesión absoluta y del dominio completo derable brillante/ de color, desenvuélvese la escena más
de los bienes terrenales. interesante del drama, la que de un modo más claro y
concluyente demuestra su tendencia.
Kl drama se desarrolla en el seno de una familia ca- La lucha entre el sacerdote mundano, elegante, as-
tólica merced á la intromisión de un jesuíta, que al en- tuto, hipócrita, y el ingenuo, generoso, humilde cura de
contrarse con la felicidad, no vacila en su completa des- aldea, que en su sencillez sublime simboliza la religión
trucción ante el propósito de ejercer su ambicioso domi- que representa, viene á demostrar que el propósito del
nio. Kn nombre de las santas doctrinas de Jesús destruye autor al escribir La nube no ha sido otro que condenar
la ventura de aquel hogar honrado, y ni ante el dolor y la los procedimientos de que se valen los hijos de Loyola
ruina se conmueve su alma ni experimenta un movimien- para apoderarse de la humanidad en contra de la religión
to de piedad. de que se dicen ministros, y qje, lejos de predicar, vul-
[•Vente á la figura rígida, dominante, del hijo de I.oyola, neran y escarnecen.

.! I IIIIIIIIIIIIIH

Acó II. Paulina, Stto, Asqucrino. Pad.e F K M , Sr. RÍÍR. Doña Petronila, Sr*. Tufeau.
Adrián, Sr. Torrea, Ángel, Sr, Solo.
PAC S EL ARTE DEL TEATRO

El padre Fidel, St. R«ig. Dcñd PcUoniU, Sia. Tubau. - bl cura. Sr. La Riva.

No es, pues, La nube obra en que se combate la reli- La boda de Paulina ha de verificarse muy pronto, y
gión; es obra que ataca directamente al jesuitismo. Pone cuando todo parece prometer á la madre un porvenir ri-
de manifiesto el afán desapoderado de los que aspiran á sueño, penetra en la casa un jesuíta, que en comisión de
hacerse dueños de la vida terrenal, dominando en los ho- un servicio que le ha encomendado la Compañía, ha de
yares para que no exista tuerza de (pie un puedan dis- permanecer algunas semanas en la población.
poner. Doña Petronila, ignorante de los procedimientos de
I.a nube que avanza lentamente, que entolda el ho- que suelen valerse estos señores, le brinda hospitalidad
rizonte y amenaza privarnos de la luz del sol; la nube en su casa, hospitalidad de que se aprovecha para inten-
negra que destruye la ventura humana á nombre de un tar la conquista de cuantas almas jóvenes tiene á su al-
amor divino que sólo ha de alcanzarse á costa de una ab- cance.
soluta abdicación de todo sentimiento y de toda idea, es La de Paulina, enamorada de su novio, no puede
la que produce el drama íntimo, conmovedor, que se nos conseguirla.
présenla en la obra. Es aparentemente demasiado superficial, y tiene mu-
Ll hogar honrado y feliz que olrece el dramatur- cho apego á las venturas terrenas la joven para que el je-
go á la observación déla udítorio, es el de una familia suíta pueda catequizarla.
que, dentro del más exacto cumplimiento de las doctri- Pero esta resistencia de Paulina no evitará el mal ni
nas cristianas, puede conjurará la tragedia,
aspirar á la ventura. pues el padre Fidel
Forman aquel logra hacer suyos al
hogar una viuda y sus hermano y al novio
dos hijos: Paulina y de la muchacha, ejer-
Ángel. ciendo en el ánimo de
Kducados ambos ambos una tan pode-
en los más sanos y rosa sugestión, que á
virtuosos ejemplos, todo renuncian por
encuéntranse en esa seguirle: al amor de
edad juvenil en que su prometida, Adrián,
la natural vehemen- y al de su madre y el
cia del espíritu invita de su hermana, Án-
á sanar con las ale- gel.
grías de la vida. Pau- Paulina, cuando
lina tiene novio, en conoce su desventu-
cuyo amor cifra su fe- ra, enferma y muere,
licidad. Ángel no ha y la infeliz viuda que-
sentido aún en su co- da sola, sin el consue-
razón el anhelo de lo del amor de su
consagrar su vida á hijo, que de ella se
este sentimiento. aparta para encerrar-
Padre Fidel, Sr. Rt\g. Don Matía*, Sr. Prado. El cu«, Sr. La Riva,
EL ARTE DET. TEATRO

se en el claustro, sin que su corazón, petrificado por las encontróse en la actitud, en la dicción y en el gesto como
doctrinas jesuíticas, tenga un movimiento de piedad filial un gran actor.
para la infeliz que le dio el ser. En las principales escenas de la obra hízose aplaudir
Con la maestría y el arte propios de tan ilustre, dra- con entusiasmo, por el arle con que interpretó el hermo-
maturgo, ha desarrollado el Sr. Patencia el asunto de su so tipo creado por Palencia.
obra de modo tal, que las principales situaciones dramá- Luis Reig hizo, con la dignidad y el empaque ade-
ticas son de una intensidad imponderable. cuados, el tipo del padre Fidel. En uno de los mutis fue
En cuanto á la forma literaria, resplandece en toda aplaudido por todo el público, y este es el mayor elogio
la obra el estilo sobrio y castizo, la aguda sátira de que que puede hacerse del actor, puesto que demuestra que
tan brillantísimo ejemplo dio Falencia en Las alegres co- su arte logró sobreponerse á la natural antipatía que ins-
madres. pira el personaje.
El público que asistió al estreno y el que en las su- El Sr. Lagos compuso con acierto la figura campe-
cesivas representaciones ha llenado el teatro, siguió con chana del médico, y el Sr. Prado, en la de Uon Matías, se
ínteres y emoción el desarrollo de la obra, y en algunos mostró el actor serio > concienzudo de siempre.

Epílogo. Ángel, Sr. Soto. - Doña Petronila, SrJ. Tubíii. El cura, !ár. La Riva. - El médico, Sr. Lagos. Fots. Fratizcn

pasajes interrumpió á los actores con sus frenéticos aplau- Completaron el conjunto la Srta. Várela y los seño-
sos, obligando al autor á presentarse en el prusecnio. res Torres y Soto, que tenían á su cargo, respectivamente,
Seguramente la hermosa producción del Sr. Palencia los papeles de Juana, Adrián y AngeJ.
recorrerá triunfalmente los escenarios de España, obte- La obra ha sido presentada con exquisita propiedad.
niendo en todos el éxito que merece por su tendencia y Los escenógrafos Sres. Amorós y lilancas, autores
por sus méritos como obra teatral. de la decoración de los actos primero y segundo, mere-
cen elogios por tan bella obra.
Como detalle curioso del estreno, debemos consig-
La interpretación que dieron á La nube los artistas nar un hecho.
del Español fue irreprochable. Temiéndose, como se temía, que la representación de
María Tubau, con su arte de gran actriz, dio caracte- esta obra, acalorando las pasiones, diera ocasión á algún
res de realidad á la figura de doña Petronila, y en los disturbio entre clericales y anticlericales, dióse el caso
momentos culminantes del drama tuvo la inspiración que estupendo de que una nutrida Comisión de los primeros,
en su vida artística le ha valido tan brillantes triunfos. lejos de indignarse con la obra, pretendió hacer al señor
También laSrta. Asquerino estuvo acertada en el tipo Palencia una calurosa manifestación de simpatía, condu-
ingenuo y simpático de Paulina, y en la escena con el pa- ciéndole desde el teatro á un centro donde celebran sus
dre l-'idel mereció aplausos calurosos. reuniones los jóvenes pertenecientes á una conocida ins-
De ellos merece el lugar preferente Arturo La Kiva, titución religiosa, lo que evitó el autor de La nube salien-
que hizo primorosamente el papel del cura de aldea. do por la puerta posterior del teatro, en tanto que los ma-
Caracterizando el personaje de un modo insuperable, nifestantes aguardaban su salida ante la puerta principal.

E.C.
EL TEATRO EN BARCELONA
A A A A

Q UINCENA fecunda para el Arte y para los que del Arte viven, ha
sido la última. Desde Shakespeare A Meyer Yorster, pasando
por Guimerá y F-mil Fabrc, observa el cronista tina variedad
quien *e trata- Pero en conjunto, al público bonachón y condescen-
diente que frecuenta el llamado Cusoi áe las Letras catalanas, le pro-
dujo idéntico efecto que á los concurrentes del teatro Español de Ma-
asombrosa en los últimos recientes estrenos. drid, cuando la compañía Guerrero-Mendoza estrenó esta misma obra
Quizá el único éxito verdad (Oxito de taquilla se entiende), sea el la última temporada.
de jove-ntut de pritnep, la hermosa y sugestiva comedia de Meyer que Guimerá es maestro en el diálogo, en eso de amover» las figuras
triunfal mente recorre todos los escenarios de Kuropa. Pero esto no escénicas, y principalmente en caldear las pasiones. Sin embargo, el
quita para i|ue sean también muy estimables los esfuerzos de las em- público exige hoy algo más que rebuscados efectos: busca que la Irt-
presas ijiie en la actualidad explotan el teatro catalán. Falta que el gica acompañe á la acción, y que todo tenga, por lo menos, aspecto
público responda. El cronista, modestamente, se permite dudarlo. de verdad.
Aquí, en Barcelona, si se exceptúa los domingos, lamente no va al ¿Lo ha conseguido el ilustre autor de Tierra baja-... Kl cronista,
teatro. Ksla es la verdad. Los acaudalados burgueses del ensanche, humildemente sospecha que no. Esto no quita para que reconozca que
están sobradamente ocupados en sus negocios para que se preocupen la Aranya adquiere mucha más intensidad en catalán qu,e en caste-
de las cosas de Arte. llano, aun cuando los actores de Romea, salvo algunas excepciones,
V como ejemplo de ello, diré á ustedes que en dos funciones que poco hicieron para levantar la obra. Ksta se impuso porque era de don
din aquí hace tiempo M. Despres, estábamos en el teatro Novedades Ángel Guimerá.
hasta «una docena» de espectadores... — Y metido ya en harina, «1 cronista, siguiendo su peregrinación
SI la fíente «de dinero» se abona á algún teatro, es para que se pnr esos teatros, va á dar con sus huesos en el (eatro de Novedades.
«diviertan las chicas» . . . La clase trabajadora no hay quien la saque El debut de la compañía que dirige Adrián < iual, fue saludado por
de su Pándelo, la famosa calle donde en el corto espacio de zoo metros todos los intelectuales como una representación de arte verdadero. De
se levantan nueve teatros y de ah¡ deduce el cronista la vidü lánguida cómo cumple la empresa esta noble aspiración, el tiempo responderá.
que arrastran todos los teatros del centro. Todos, no. Ksta temporada Kl cronista se concreta por hoy á reseñar muy á la ligera el ciclo
hay que hacer una honrosa distinción en honor de lildorado, donde inaugural, compuesto de tres obras: í.a vida publi<a, de Kmil Fabre;
Balagucr y Larra, con los suyos, cosechan «honra y provecho.» La Jialduina, de Ángel Guitnerá, y El sottmi d'una ni/ d'estiu, de
liemos de desengañarnos, digan lo que quieran los regenerado- Shakespeare.
res de la I-Hga y las peñas c atalantantes: ni en Barcelona hay actores La primera de dichas obras no gustó al público. Tal vez no le
para formar tres compañías de verso catalanas, ni público para soste- fuera favorable el ambiente de la sala, y aun cabría decir que resultaba
nerlas. Pero, cavilaciones apañe, hablemos de los últimos estrenos; ha- aquello un poco exótico, interpretando traductor y actores la «cosa»
blcmos de juventut de frtncep, de /,,i aranya, <le /.a vida pública, El muy por lo mediano, Ks indudable que los preceptistas no tienen au-
sotaní duna nít d'estiu y de otras producciones grandes y chicas. toridad frente al respetable, y lo que conceptuó excelente la Acade-
Decía que el único éxito verdad ha sido el de Jtnvtttut deprincep. misi francesa, aquí pareció malo.
Probémoslo. Ksta obra, de arle romántico, sin ser la perfección mis- Tampoco la obra de < iuimerá fue muy aplaudida,
ma, reúne todos los elementos precisos para cautivar á los especta- Y finalmente, en Ei sotitni d'una nit d'estiu\ que era, por decirlo
dores. Hay ambiente, son humanas las pasiones, sugestivo y bello el así, la obra de prueba, faltaron actores para llenar el espléndido marco
lenguaje, y, sobre todo, adivínase un conocimiento de la técnica tea- del escenario. Porque, eso sí; la inisse en scene fue digna del inmortal
tral verdaderamente admirable. Los personajes, sin salirse de la cruda dramaturgo inglés.
realidad, muévensu con desembarazo; diríanse arrancados á la vida Hermosas decoraciones, y una nutridísima orquesta para ejecutar
misma. Y como por encima de lodo eso hay ti argumento, que resultó las ilustraciones musicales que Meudelshon puso á la shakesperiana
simpático é interesante, no se necesita más para triunfar, lis una obra creación: nada faltó.
humana. Con eso está dicho todo. Pero, fuerza es repetir lo que escrito qneda: faltan actores para
Imaginaos un príncipe joven, pletórico de salud, vegetando en el tres buenas compañías.
ambiente artificioso de un palacio, sin cariño, sin afecciones, sin nada Y como las empresas entre sí no se pueden ver, cosa muy huma-
de lo que hace amable la vida, y de pronto libre, libre entre la juven- na, veremos á la postre quién vence á quién.
tud, entre el amor, entre la alegría; sucede lo que es lógico que suce- Menos mal si de todo ello sale ganando el público y la dramática
da: el príncipe se enamora de la primera mujer que A su paso halla, catalana.
una humilde hostelera. V cuando el idilio se transforma en poema, y
el amor alienta aquellas almas juveniles, debe el principe volver al
viejo palacio de sus tristezas; el regente se está muriendo. Pele-mele
Rebelase el corazón, pero vence el raciocinio y lo fatal se cumple.
Kl joven príncipe heredó el cetro. Por los teatros de género chico y otros que en el Paralelo cultivan
Kl recuerdo de la bulliciosa I leídelberg, la ciudad de sus amores el drama, hay variedad de noticias.
y de sus únicas alegrías, perdura cu su mente, y antes de cumplir con Debutó con evito en el Cómico Felisa Lázaro, que cantó en su
el protocolo que acordó la boda del príncipe con una gentil princesa, presentación Gigantes y Cabezudos.
allá vuelve él para vivir unas pocus huras, todo un pasado de belleza También ha debutado la Albalat.
efímera y oxigenar el cuerpo con los efluvios amorosos de una dicha Palacios y Ernesto Ruiz de Arana complementan el cuadro del
que fuó... Nías todo ha cambiado en la ciudad de sus sueños; es de- Cómico, que es, á decir verdad, muy aceptable dentro del género.
cir, cambiaron los hombres, sus compañeros y enmaradas, que ya sólo Kn el Nuevo se estrenó, gustando, La bella Molinete.
aciertan á ver en él al príncipe reinante. Y cuando decepcionado y La aparición de Las bribotiiis, la preciosa zar/.uclita de Viérgol y
triste huye paia sepultarse de nuevo en su tétrico palacio, se le apa- Calleja, lleva al Nuevo numeroso público; Lamas hace un delicioso
rece la humilde hostelera, la espiritual Catalina, que sabe que el prín- Alcalde, y Amparo (iuillén una Jeresana graciosa y sugestiva.
cipe va á casarse, y le ana, le atn trá siempre.. . También él la ama, Los del livoli marcharon á Cartagena, y por el trágico fin del
y . . . la abandona. empresario Alegría se suspendió la temporada del Circo-ecuestre pa-
Todo esto es muy romántico, ¿verdad? Hites en este romanticismo sando al T-voli desde el Barcelonés, Cesar-i Gravin.i y su notabilísima
y en el ambiente y en los caracteres y en otra porción de cosas que compañía de opereta italiana.
no es posible detallar un pocas líneas, halla el cronista los lundamen- Apolo estrenó dos melodramas: /.a vendedora de honras, de Ayné
tos del ¿Kilo estruendoso de Jovtntut de pñncep. y Fuentes, y Tinieblas de amoi, de Jacinto Putgdengolas. Ambas gus-
La empresa del Principal presenta la obra aceptablemente. La taron, haciéndose aplaudir Federico Parrcño, la Sra. Pucho] y demás
traducción, muy cuidada por cierto, es debida á los culios periodistas elementos de Apoto.
Síes. Costa y Jordá. La compañía forma un buen conjunto. Merece Ahora han comenzado los ensayos de El rey de ¡os ladrones, obra
citarse con elogio la Srta. Xirg.i y los Krcs. Jiménez, Codina, Santpe- basada en aventuras de Kafrles, y para la que el escenógrafo Sr. Ainon
re, Guitart, Boy.no, Viñals y algún otio que el cronista no recuerda en pinta ya decoraciones.
este instante. Del Gran Vía pocas noticias: se estrenaron Los liberales, que fue-
— En el Romea se ha estrenado la última producción de IX Án- ron regularmente recibidos.
gel Guimerri, /../ .Iranya. Con todos los respetos que merece este in- í.a única representación de .-lida, en la función de gala en honor
signe dramaturgo catalán, me permito creer que la La Aranya es una de los Reyes, obtuvieron un señalado triunfo los cantantes y el maes-
lamentable equivocación. tro Masclícroni, que dirigió la orquesta de un modo magistral c inimi-
Hay en la obra de Guimerá bellezas, ¿Cómo no, tratándose de table.
Armando Oliveros
El, ARTE DEL TEATRO

Cuadro II. - Ludovico, Sr. GONZÁLEZ Manuel, Sr. ALCALÁ Amparo, Sru. SÁNCHEZ JIMENEZ Ramona, Sru. SANTA CRUZ

LA BALSA DE ACEITE
Saínete lírico en un acto y cinco cuadros» original de Sinesio Delgado, música del maestro Lleó,
• . estrenado en el teatro Eslava.

A J Í ARriis! ¡¡13!! [¡¡Estrena Sinesio en Eslava!!! ¡El có- vado hasta el final con un acierto poco común. Y para
/ * \ lera, caballeros!... que nada tallara á la nueva producción de Sitiero Delga-
/ V Y no pasó nada. Ni se hundieron las esfe- do, se desarrolla en un ambiente muy adecuado al teatro
ras, ni se cayó el teatro, ni La Cierva prohibió nada nue- donde se estrenó, sin recurrir para ello á la descarnada
vo, ni siquiera se dejó de grosería ni al chiste procaz
oir el «vagabundo.> y repulsivo.
Estrenó Sinesio y lo E s , en resumen, La
aplaudió el público, con baha de aceite u n a obra
justo y unánime aplauso. grata que agotará muchas
Ksta ve/ «dio en el «cla- noches el papel en Eslava
vo el notable escritor. Y y daráá sus autores aplau-
como o c u r r e cuando se sos á granel y pesetas á
acierta, el público, que va centenares.
siempre ó casi siempre al ¡Mi enhorabuena para
teatro libre de toda clase ellos!
de prejuicios y ajeno por
completo a las preocupa-
ciones triviales y al eterno Estamos en el portal
murmurar de la gente del de la casa X. Un reparti-
oficio^ batió palmas en ho- dor de periódicos deja va-
nor de quien supo hábil- rios en la portería, que son
mente procurar su rego- distribuidos entre los in-
cijo. quilinos por el portero ser-
Y esto lo consiguió vicial. Mientras este sube
sobradamente el autor de ;i dar cumplimiento á estas
La baha de aceite, ofrecién- funciones de su cargo que
dole un saínete bien visto, alterna con el importante
ato Delgado, »..tot dci i.bro. entretenido, gracioso y lle- de guardia del Orden, en- Vicentc Lkó, autor de 1A música.
PAG. ¡a El. ARTE PEÍ. TEATRO

tra en escena Arturito; llama con el bastón en la puerta pueblo que vino en clase de sirvienta á Madrid, y, ¡cosas
del cuartu bajo y una voz femenina responde desde den- de las mujeres!, había hecho fortuna.
tro á los requerimientos de su pasión que se cuentan en Pero allí no vive positivamente, porque don Isidoro
un duetto cómico, l'onc fin al cuasi idilio la intervención es hombre severísinv> en asuntos de moral. Lo primero
de la madre de ella, quien viendo que Arturilo corre que exige á sus inquilinos es que paguen bien, que ob-
como un gamo al advertir su presencia, jura á la chica que serven y hayan observado una conducta intachable y que
al menor descuido sentirá el tenorio asustadizo el peso no tengan animales ni chicos.
de su mano vengadora. Interviene la seña Lorenza, mujer del portero, que
Ludnvieo entra en escena fugitivo. Corre de acá conoce al dedillo la vecindad. Tampoco orienta á Ludo-
para allá buscando dónde ocultarse, y por lin encuentra vico en la busca de Venancia, y se indigna ante el sólo
seguro escondite en la portería, cuya puerta cierra. Se- hecho de que aquél haya supuesto que allí vivían mujeres
guidamente aparece don Isidoro con e! bastón cnarbo- alegres, cuando aquella casa es una balsa de aceite.
lado y en ademán terrible. Busca por todo el portal, y no Ante la insistencia de Ludovico dudan un momento,
encontrando al que persigue sube la escalera en su se- y caen en la sospecha de que muy bien pudiera ser una
guimiento. muchacha que entró al servicio de don Isidoro hacía po-
El portero vuelve de repartir por los cuartos la pren- cos días. Ludovico tiembla ante la idea de encontrarse

Cuadro III. Soledad» Sru. ANDRÉS Petronila» Sru, GALIANO Ludovico, Sr. GONZÁLEZ

sa del día. Un número le queda que pertenece al cuarto frente á don Isidoro nuevamente, pero cede á las instan-
bajo, donde llama con los nudillos, y recibe por toda res- cias de los porteros que le aseguran que aquél es fácil
puesta una tremenda bofetada que la futura suegra de de convencer y se decide á subir, con lo que termina el
Arturito dedicaba á éste. cuadro primero.
El portero-guardia lamenta la equivocación y la so- El segundo ocurre en el piso principal, domicilio de
porta porque no está en funciones de autoridad, y al di- don Isidoro. El timbre llamador suena insistente, llevan-
rigirse á la portería se sorprende encontrarla cerrada. A do profundo desasosiego á Amparo, mujer de aquél; á su
sus instancias abre Ludovico, y explicándole el motivo criada Ramona, y á Manuel, amante de AmparpJque se
de su encierro cuenta que por venir buscando la casa encuentra en la casa. * "'•
número 40, y mirando, por consiguiente, la numeración, El constante sonar del timbre aumenta la zozobra de
un joven tropieza con él, le pisa y casi al mismo tiempo, las mujeres, que suponen que quien llega es don Isidoro,
de un portal vecino, un Ótelo con canas sale furioso en su y hace saltar los nervios de Manuel, que tira de revólver,
seguimiento amenazándole airado con un bastón que es- dispuesto á hacer blanco sobre el marido intempestivo.
grime trágico. l'or fin, las mujeres logran que acceda á ocultarse en
El celoso señor se ha cruzado en la escalera con el la carbonera; y ya Amparo, más tranquila, franquea la
porten) y es el dueño de la finca que precisamente es el puerta. Quien entra es Ludovico preguntando por Ve-
número 40, buscado por Ludovico. nancia que, en efecto, no vive allí, y por él sabe Amparo
El motivo de sus celos no es otro que el haberse ca- que su marido está en la casa buscándole á él, por supo-
sado con una mujer joven y guapa, á quien espía afanoso nerlo enamorado, circunstancia que aprovecha aquélla
mirando por su buen nombre. para poner en salvo á su amante.
Ludovico, según confesión del portero, viene á aque- Este agradece á Ludovico el favor, y le ofrece su
Jla casa equivocado. Buscaba á Yenancia, una chica de su ayuda para casos análogos.
EL ARTE DEL TEATRO PAG. i$

Desesperando Luduvieo de encontrar á Vcnancia, trar el cuarto, no sin haber cerrado la puerta salvadora.
se dispone á subir al segundo, donde vive, según le dice Vuelve á escena Ludovico con la doncella, azorado
Amparo, y antes los porteros, la viuda de un bolsista, lla- y nervioso. Ante la imposibilidad de huir, y mientras se
mada Soledad, cuando el timbre anuncia la llegada áe. busca la solución, Soledad echa la Nave á la puerta por
don Isidoro. donde entró don Isidoro buscando al visitante.
Enterado éste de la misión que llevaba ;i Ludovico, Arrecia el compromiso, y para evitarlo, aconsejan á
le ordena malhumorado que abandone inmediatamente Ludo vico que se escape, deslizándose por el canalón de
su cuarto y la casa, cosa que aquél no efectúa, porque su la casa, cosa que en otra ocasión hizo ya un primo de So-
obstinación en encontrar á Yenancia le hace subir al piso ledad. Se decide a olio Ludovico, y ya del Indo fuera del

Cuadro IV Luisa, Sra. TORREGROSA Manuel, Se ALCALÁ Ludovico, Sr. GONZÁLEZ

segundo. En efecto; allí encuentra á la paisana, que ante balcón, y cuando Soledad ha abierto la puerta á don Isi-
un espejo rinde culto á Tersícore. doro, se da cuenta aquél de que en el patio se encuentra
Venancia se llama ahora Soledad, y recibe contenta el portero, y se decide á seguir hacia arriba en lugar de
á Ludovico. Le cuenta los motivos de su prosperidad, y descender.
le informa de que don Isidoro, que es quien le paga el En su ascensión llega al piso tercero, donde en ira
cuarto, gusla mucho de verla bailar tangos y garrotines. por un balcón, y se encuentra con Luisa que, al verlo
También Ludovico se entusiasma con el baile que Sole- llegar asf, lo supone perdidamente enamorado de ella, y
dad le brinda, regocijada. aunque le agradece el sacrificio, le ruega que se vaya,
Pero como la tranquilidad ha muerto ¡tara el pobre porque ella, para su desgracia, es casada y su marido pue-
Ludovico, cuando más entusiasmado está con la paisana, de llegar de un momento á otro.
la doncella anuncia, entre sobresaltos, la vuelta de don En esta ocasión llega el marido, y el miedo de Ludo-
Isidoro, que no ha hecho más que salir de allí. vico se torna en sorpresa agradable al encontrarse con
Se procura la huida de Ludovico por una puerta de Manuel, y le recuerda la promesa que le hizo en el prin-
escape, utilizada ya con éxito otras veces; pero don Isi- cipal cuando, mediante él, se libró de un encuentro con
doro, que no le vio salir desde el balcón, supone que don Isidoro.
está en casa de Soledad y, celoso, se dispone á regis- Pero la situación para Manuel varía mucho, porque
PAC. ¡4 8L ARTE DEl TEATRO

ahora se trata de su mujer legítima, á quien supone per- pone fin al conflicto y á la obra, que termina Ludovico re-
seguida por Ludovico. Encolerizado saca el revólver y conociendo irónico que aquella casa es una balsa de aceite.
amenaza á éste, que desde que entro en aquella casa tan *
tranquila no tiene un momento de tranquilidad. * *
Volvemos en el último cuadro á la portería. Arturito No procuró, ciertamente, Sincsio Delgado al phmear
llama a casa de su novia y le propone que se fugue con su obra proporcionar al músico situaciones en que pudie-
él, proposición que acepta ella con la promesa del novio ra desarrollar su inspiración, y únicamente ha dado al
de que es el único medio de llegar á la felicidad. La ma- maestro las que se derivan del lógico desenvolvimiento
dre de la enamorada muchacha no está en la casa, y apro- <le la obra.
vechando esla circunstancia, se dispone á huir con Artu- Tero ha acertado al confiar la partitura A Lleó, por-
rito, que en un coche la espera en la esquina. gue es este uno de los músicos que siempre encuentran

Cuadros I y V. Sánchez, Sr. RofrÍRuei. Arturito, Sr. Llaneza. Don Iitdcro, Sí. Gamero. Doña Luciana, Sita. Blanc. FolJ. Franjen
Ludovico, Sr. González. Manuel, Sr. Alcalá. Seña Lorenza, Sta. Almur.itJ Modesta, !~'ra. MÜIÍO.

Cuando sale con su ropa, inquieta y asustada «por- ocasión para demostrar sus facultades, y que sabiendo
que es la primera vez que se fuga-, un tiro que suena en sacar partido de todo, consigue hacer un número agrada-
la escalera la detiene. ble del más prosaico de los motivos.
Ludovico baja descompuesto. NTo se atreve á salir á Aprovechando, con su habilidad acostumbrada, las
la calle en aquel estado por temor á que le confundan situaciones que le brindó el libretista, ha compuesto una
con algún criminal, y en esta incertidumbre encuentra á partitura graciosa, alegre, cuyos números fueron aplaudi-
la novia de Arturito, se entera de sus propósitos y, ce- dos por el público, conquistándole un legítimo éxito.
diendo á los ruegos de aquélla, se decide á acompañarla.
Doña Luciana, la madre, entra en este momento de
la calle. Ye á su hija con Ludovico; cree que éste es otro La interpretación fue muy acei tada por parte de to-
novio, y pensando en que iba á llevársela, arremete fu- dos los artistas. Antonio González hizo reír al público en
riosamente contra él, golpeándole con la sombrilla. el cómico pape! de Ludovico.
La portera sale al escándalo, y al reconocer á Ludo- Carmen Andrés cantó y bailó con la gracia en ella
vico, que trajo á aquella casa tranquila, decente, distur- habitual, y dieron gran relieve á los distintos personajes
bio sobre disturbio, le da también lo suyo con los zorros. que representaron Juanita Manso, Kosita Tonegrosa, An-
Manuel baja todavía empuñando el revólver; apunta tonia Sánchez Jiménez, Enriqueta Blach, Isabel Santa Cruz
á Ludovico, que se oculta detrás de la portera; don Isi- y la Sra. Cárcamo.
doro también baja iracundo con el bastón amenazador, y De ellos merecen también mención especial los seño-
la presencia del portero, en ejercicio de su autoridad, res Gamero, Llaneza, Rodríguez y Alcalá.
Rojyelio Pérez de Olivares
EL ARTE DEL TEATRO

: MENTIDERO TEATRAL :
— Amigo Dióscoro, ¿dónde camina usted? gros, aquella boca purpurina, aquel busto escultórico...
— A mi tertulia, al saloncillo, como de costumbre. — ¡Basta, bastal
Usted ya sabe que yo soy punto fuerte. Me gusta ente- — Pues ya no es la Belleza la Sra. Butier.
rarme de lo que ocurre por los teatros, y me interesa más — Eso es imposible; el poder de la empresa, ó de la
lo de dentro ;que lo de fuera: ln que no ve ni conoce el dirección, ó de los autores, no puede llegar hasta ese ex-
público, lo que se murmura, lo que se vaticina, lo que se tremo. Seguirá siendo la belleza...
comenta. Esto es mucho más sabroso que las obras m;is — Pero no en la obra, porque le lian quitado el papel.
cómicas de los autores de más ingenio, y cuando hay tela — Pues lo seguirá siendo entre bastidores.
cortada, como ahora, no dejaría yo de acudir á mí centro — ¿Y sabe usted á quién se lo reparten?
de información por nada de este mundo. — ¿Es decir, que no se lo dan todo?
— l'ero, ¿ocurren novedades?1 — Chistéalos, no. ¿Sabe usted á quién se lo dan?
— Muchísimas. — ¿A quién?
— ¿Qué me cuenta usted?... Yo suponía que los es- — A una tiple nueva que vino de América hace poco,
cenarios en estos comienzos de temporada eran balsas ele que ingresa en la compañía y que. . .
aceite. — Pero, .-quién es? •' • v
— Algunos es posible, aunque no lo son todos los — Ponga usted la Sánchez, la López, lo que usted
que lo parecen; pero ntms.. . quiera; porque de oslo no puedo decirle sino que afirman
— Cuente usted, rúenle usted. que por allá ganó mucho dinero, que posee una de alha-
— En la Zarzuela, por ejemplo.. . jas que dcslunibra y que pasca en automóvil propio...
— ¿En la Zarzuela?... Pues yo suponía que después ¡Ah!. .. creo que baila como los ángeles y que viste como
del cambio de empresa, todo marchaba á pedir de boca. don Magnífico, ó poco menos.
— Según á la boca que se reliera usted... Si es la de — Y la contrata, ¿es un hecho? • • •';'.'.
Vives, no digo que no. — La contrata no da una perra chica ya.
— De manera que aquello... '. , — Quiero decir la contrata de esa nueva tiple.
— Aquello es una verdadera delicia. Que Ontí veros — Como que se asegura, ó por lo menos se murmu-
se va... que í íntiveros se queda. Cada dos ó tres días, ó ra, que una persona muy allegada á la artista ha intere-
mejor diré, cada dos ó tres noches, se le ve salir furioso sado A la empresa en el asunto, y usted ya sabe que cuan-
de su cuarto marcándose unas sevillanas entre denuesto do median intereses...
*'• interjección, y gritando con voz enronquecida: — Ni una palabra más.
— ¡A ver!... ¡Que me busquen al empresario!... — Y hay una circunstancia muy curiosa: la nueva
¡Que me traigan al representante!... ¡No trabajo más!... tiple debía debutar con San Juan de Luz...
A mí lo que me sobran son teatros y empresas que me — (íbra de invierno. .
consideren.. . — Y se había pensado en la Esparza para el papel
— Pero, ¿qué le ocurre á usted? — interroga en voz de la otra tiple. Pero dicen que la Esparza no lo ha acep-
baja un compañero que salió del cuarto contiguo al oir tado.
las voces. — Temerá constiparse.
— Nada, que ya estoy harto y que voy á devolver — Dicen que no es eso precisamente lo que teme, y
ahora mismo mis papeles de A B C, y que me despido.. . lo que sea no lo sé; pero creo que la nueva piensa pre-
En efecto, llega el representante, pregunta, capotea, sentarse con una de pedrería tina, que ni el escaparate
sonríe... de La Cloche. 9
— ¡Nada, le dice usted á la empresa que ahí están — ¿Y qué dice la Butier á todo esto?
los papeles, y que yo me voy! — Nada, porque la Butier, como todas las que efec-
— Pero, ¡don José!... tivamente valen, es modesta, y si protestara de que le
— ¡Nada, nada! Trabajaré hasta el domingo para no hayan quitado el papel de la Belleza, parecería que era
causar una perturbación; pero el lunes, me voy. ella la primera convencida de su hermosura.
— Y en efecto, ha pasado el lunes, y el martes, y el — Es verdad... Pero es un feo...
miércoles y Ontiveros sigue en la Zarzuela. ¿El empresario?... ¡Que no le oigan á usted decir
— Pero, si esto ha ocurrido ya seis ú ocho veces en eso ni en broma!
la temporada, no puede considerarse una novedad. — No, hombre, no. Digo que es un desaire...
— En efecto, novedad no lo es, pero tiene sus atrac- — ¡Han!... En el teatro esas cosas no tienen impor-
tivos. Es una de las situaciones cómicas de entre bastido- tancia. .. Ya verá usted como todo se arregla en cuanto
res, que siempre producen efecto. intervenga Perrín con su ingenio y con su fácil palabra...
— ¿Y es esto todo lo que ocurre? — Y de los demás teatros...
— No, señor; hay algo más nuevo y más sabroso. — Otro día hablaremos, que también hay cosas que
Usted sabe que la obra de Perríu y Palacios estaba re- decir...
partida y que el papel de la Belleza le había sido confiado — Creo que una de las primeras tiples de Apolo y un
á la Sra. Buticr, que en clase de belleza es de lo más clá- popular compositor...
sico y sujestivo que hay en la casa, con aquellos ojos ne- — ¡Ni una palabra más!... líe dicho que otro día.
Dióscoro Pelma
ÜDD DDD
EL TEATRO EN PROVINCIAS

Valladolld. — La compañía que dirige el reputado primer actor Divorcu-mottos fue la obra elegida por Rosario l'ino para su bene-
y director Emilio Duv.il, está realizando excelente y productiva cam- ficio, haciéndola de modo insuperable, ayudada eficazmente por los
paña en el teatro Lope de Vega, de la capital castellana. Sres. Thuillier y Llanos, Para los tres hubo palmas abundantes.
Cuantas reprises se lian verificado en este coliseo, han logrado Este teatro permanecerá cerrado hasta mediados de Noviembre,
feliz éxito por la excelente interpretación que han obtenido por parte que vendrá la compañía de García Ortega á dar una serie de sesenta
de los artistas que dirige el competente y laborioso Emilio Duval. funciones.
Recientemente se ha estrenado Las firifionas, con extraordinario — En el teatro Cervantes sigue actuando con éxito la cumpañfa
éxito. dirigida por D. Casimiro Orlas.
La interpretación, por parte de todos los artistas, fue verdadera- Con La noche del Pilar debutó el primer actor D. Francisco Alar-
mente esmerada. cón, que fue muy bien recibido.
Las Srtas. Albertos é Isaura muy guapas y elegantes, estudiaron La reprísse de La patria chica ha sido un triunfo para esta compa-
y dijeron bien sus papeles de <bribonas>; la Sra. Figuerola estuvo feliz ñía, siendo muy aplaudidos en ella todas las noches las Srtas. Iluguel,
en la «alcaldesa» definidora del domina, usos y costumbres de Es- Sobcjano y Juanita Pérez, y los Sres. Ortas (hijo), Cánovas, Atarcon
tropajosas —. Duval supo encarnar el tipo del alcalde conservador Caidoso y Ledesma.
con ribetes liberales, y los restan I es intérpretes contribuyeron al Iran- Se han estrenado con éxito Casa de almas y A/usetta, mereciendo
co éxito de la zarzuela. aplausos en la interpretación de ambas las Srtas. lluguet y Paradas,
Los cuplés del cuarto cuadro se repitieron diez ri doce veces, y si Sra. Colina, y Sres. Alarcón, Orlas (hijo) y Cánovas.
por gusto del público fuera, aún estaría cantándolos el Sr. Duval. ' ¿randes deseos tenia ya este público de conocer IMS bribonas, así
El público i(tie llenaba totalmente el teatro escuchando con an- es que, al anunciarse su eslreno, se llenó el teatro como pocas veces.
siosa expectación la obra, aplaudió con entusiasmo las primeras esce- La nueva producción de Viérgol alcanzó un éxito colosal, siendo repe-
nas, repitiéndose éstos al ti nal de cada cuadro y al terminar, en medio tidos lodos los números y levantándose el telón infinidad de veces al
de ovación estruendosa, se levantó varias veces la cortina. terminarla obra.
Las bribottat durará buena temporada en el cartel del teatro que La interpretación esmerada por parte de las Srtas. Paradas y So-
dirige Emilio Duval. bcjano, y Sres. Orlas (padre é hijo), Ledesma y Cardoso.
También se ha estrenado con excelente éxito El naranjal, en cuya Para muy en breve se anuncia el estreno de La rabalera.
interpretación alcanzaron muchos aplausos las Srtas. Isaura y Sanford, — Sigue actuando en el teatro del Duque la compañía que dirige
y los Sres. Duval y Navarro. D. Eugenio Casáis.
— En el Calderón ha debutado la compañía de Manolo Vico. El Se han estrenado con éxito La infanta de los bucles de oro y Rejas
alcalde de Zalamea valió muchos aplausos á este artista y á la señora y votos, esta última con asistencia de uno de sus autores. En ambas
Echevarría. Se anuncia el estreno de Las de Caín. — y. tasado Pardo. fueron muy aplaudidas las Srtas. Hordas y Herís, y los Sres. Cerbón,
Garro, Vallejo y Lino Rodríguez.
2se 2se zas Con Cinematógrafo nacional debutó la Cachaveva, que Iu¿ muy
bien acogida por el público y á quien se aplaude todas las noches.
Santander. — Cuando esta información sea leída por el público, Ignacio l^eón, tenor cómico, debutó con Sangre moza, demostran-
a habrá debutado en el teatro Principal la compañía de zarzuela de do ser un artista de valía y cosechando muchas palmas.
Íínrique Lacasa y el maestro Ventura, a cuyos prestigiosos nombres Se han reprisado ('Qua vadis? y l.a patria chica.
hay que sumar los de Dolores Maldonado, Nieves González, Dionisia En la primera se distinguieron las Srtas. Herís y Hordas, y los se-
la Hera, Candelaria Kiaza, Rafaela García, y los Sres. Ilervás, Ibatro- ñores Cerbón, Vallejo y Garro. En la segunda merecen especial men-
la, Garro, Muñoz, Velasco, Roldan y |ulián. ción la notable tiple cómica Juana B. Benitez, la Srta. Beris, y los se-
— En el Salón l'radcra, cuya empresa anuncia el próximo debut ñores ('asáis, Rodríguez y Vallejo.
del tenor Sr. Vinarl, ha dado principio la serie de estrenos con el me- Se anuncian los estrenos de La perra chica y Alma ¡U Dios.
lodramila lírico titulado La noche de Reyes. La obrita no llegó á entu- — El Salón Imperial ha cernido sus puertas. - X. Día: Clazñje.
siasmar; sin embargo, se aplaudieron los finales de los cuadros tercero
y cuarto, en cuyo último se estrenó una bonita decoración nevada,
del pintor montañés Sr. Ainiama. La compañía que en dicho Salón ?S8 ZS8 258
actúa bajo la acertada dirección de Valentín (iarcia y el maestro Vil-
ches, sigue gustando. Granada. — En el teatro Cervantes de esta capital, ha debutado
— La dirección artística de Variedades, no queriendo hacer me- la compañía Donato Jitnéneü-Villagnmez; puestas con éxito en escena
nos que la de Pradera, cambia casi á diario el cartel y también logran El adversario, liafies y ti estreno de El capitán estruendo, Los intere-
hacerse aplaudir los artistas que dirige el Sr. Morcillo. ses creados y El alcalde de Zalamea, valieron numerosos aplausos a los
• - Apolo está reformándose, y según mis informes se abrirá en el Sres. Jiménez y Villngóinez, Rivero y Rivns, y á las Srtas. Brernón y Al-
mes de Noviembre. — /'• Larrosa. vare/ Segura, que con tanto acierto desempeñan sus respectivos pa-
peles.
W V& W — En el teatro Isabel la Católica, actúa la compañía que dirige el
eminente primer actor Si. García Ortega.
Coruña. — Con un éxito muy lisonjero dio seis funciones en el A pesar de la esmerada interpretación con que son ejecutadas
teatro-circo Pardo Bazán la compañía de ('armen Cobefía, aprove- obras como El adversario. El amor que pasa y La fierecilla domada,
chando su paso por la Coruña para Canarias. la» funciones se dan en familia, gracias si la inexplicable antipatía que
En esta breve temporada puso en escena Lo positivo. La neila, IM el público granadino siente por este coliseo desde época inmemorial.
escondida senda, Jjts de Caín, ¿.os ojos de ¡os muettos y La anuiré. Sobresalen en la compañía los Sres. García Ortega, Serrano y
Las de Caín fue la obra que mayor ¿uto obtuvo. Más, y las Srtas. Nestosa, Seco, Garrigo é lnfiesta. - Román.
— El Pabellón Lino sigue cultivando con gran fortuna el género
de varietés. En estos días desfilaron por este teatro las mayores atrac- 258 Z9S
ciones, como los saltadores Syd Dorlare, los escéntricos Luna * Stip,
el ventrílocuo San/ y el clarinísta japonés Yank-hoe. Almería. - - Sigue actuando con gran ÜNÍIO en el teatro-circo Va-
riedades la compañía de zarzuela que dirigen La torre y Muñoz.
w. ue ye Se han estrenado algunas obras, alcanzando lisonjeros éxitos; en-
tre aquéllas, gustó mucho La sota de espadas, La fosca, l.a gran noche
Sevilla. - En el teatro de San Fernando di/> fin a su campaña ar- y los entremeses La pitanza, de los Quintero, y La Casa de So-.orro, de
tística la compañía Pino-Thuillier. En honor de la verdad, debemos Palomero y Moyrón.
decir que el público no ha correspondido como debiera, y sólo muy También se ha puesto en escena, como reprise, la bonita zarzuela
contadas noches se ha visto el teatro lleno. de Francos Rodrigue/, El señorito, y entre otras, de las ya conocidas,
Con Don Juan Tenorio celebró Thuillíer su beneficio, siendo La carne flaca, Las estrellas. La reina mora. El iluso Cañizares, La
aplaudidísimo toda la noche. El decorado estrenado por esta compa- patria chica, El barquillero, La vuelta de presidio y El ratón.
ñía en el Español de Madrid fue objeto de calurosos aplausos. Las obras, medianamente presentadas. — Teodoro Af, Arríela.
ímér actor del teatro Español*
Caricatura por Monta gud.
Mabón. — Las empresas de los teatros Principal v Consey, lian res, se han efectuado las de El último chulo, La revoltosa. La tempra-
publicado ya las listas de las compañías de ópera y zarzuela á que me nica. Las mujeres, trienio en Popa, Marina, Rejas y votos, Congreso fe-
refería en mi anterior noticia, y son á saber: minista, Patria chica y El chalan, todas con gran éxito, principalmente
Opera italiana. — Tiples dramática y ligera: María Darnis y Luisa para las tiples Sra. Alcacer, y Srtas. Gaicía Pastor y Peña y los señores
Bresanier; Contralto y coinpríinaria: Dolores Bordabio y Enriqueta Soler y Peña.
(¿¡novel; Tenores: Franco Rayer, Lorenzo Simonetti y José Ilalari; Ha- Se ha celebrado el beneficio de la primera tiple Sra. Alcacer y el
rítonos: Juan Romeu y Josc Fernández; Bajo absoluto, VicenteGaspa- del primer actor Ramón Peña, que estuvo admirable en las reprises de
rini; Maestro director y concertador: Esteban Puig; Maestro de coros /JJ Gañía y El pobre l'albuena, obteniendo regalos y ovaciones de sus
y suggeritore: José Vllaíonga. Coristas de ambos sexos, 2O. numerosos admiradores.
Zarzuela y ópera española. — Tiples: Enriqueta Benito, Vicentina La compañía anuncia el estreno de la opereta Mussetla, dando
Silvestre, Amparito A/nar y Lola Valor; Tenores: Francisco Monté y por terminadas sus tareas el día 2 de Noviembre, marchando con des-
Miguel R. Torres; Barítonos: Francisco Critelli y Ramón Meca; Bajo: tino á Canarias para hacer la temporada de invierno.
Ángel Fontanals; Otros actores: Salvador Salces y Manuel Valladolid; — En el Principal debutará el día 31 la compañía dramática de
Maestro director y concertador: Laureano Riba; Apuntador: Juan D. Teodoro RUÍJE, procedente de Sevilla, que debutará con el legen-
Prieto Vidal, y 12 coristas de ambos sexos. dario Tenorio.
La primera efectuará su debut con Lohengrin el día 12 de No- Además de las obras del repertorio dramático, antiguo y moderno,
viembre, y la segunda el 29 con La tempestad. — Roselló. se anuncian varios estrenos, entre ellos el de autores locales titulado
Telégrafo público.
S8 2SS HS — El aplaudido tenor Rafael Gil, embarcará el día 30 con destino
á México, para cumplir el compromiso contraído con la empresa del
Bilbao. — Kn el teatro de los Campos Elíseos ha debutado con teatro Principal.
Caballería rusticana el tenor Mario Cruz. Aunque su voz no es de gran M8 W W.
volumen, cania con afinación y agradable timbre, por lo que fue
aplaudido. Toledo. — La compañía cómico-drama tica que actúa en el teatro
Enriqueta Sala y Paquita Ciar y el barítono Eugenio Morales, Rojas bajo la dirección del primer actor Sr. Gómez Ferrer ha estrena-
completaron á satisfacción el conjunto, viéndose precisados á repeür do Floriana, que no agradó al público á pesar de la excelente inter-
á instancias del auditorio. pretación que obtuvo por parte del citado actor, de la primera actriz
Pepe Botellas, estrenada últimamente, gustó sin entusiasmar. Srta. Gómez Ferrer, del Sr. Miralles y del resto de la compañía.
Con El dúo de La africana, hizo su debut el tenor bilbaíno Fer-
nando Alonso, cuyos estudios en la corte han aumentado el volumen
de la voz y su arte al emitirla.
m Y& m
Fue muy aplaudido en unión de Carmen Casesnoves y Pepe An- Ferrol. — La compañía que dirige el notable primer actor señor
geles. Montijano continúa trabajando con muy buen éxito en el pabellón
En El pollo Tejada han alcanzado un verdadero triunfo el Sr. Vi- New England.
degain, las tiples .Slayendia, Oasesnoves, García Peres y Salvador, y
los Sres. Morales, Vera, Guillot, Morilla, Vallina y Pascual. m mm
— En el Amaga debutó la compañía cómico lírica dirigida por Orense. — La compañía Balinaña está trabajando con buen éxito
Pepe Berges y el maestro Liñán. en esta población. Se anuncia para muy en breve el debut de la com-
Estrenóse la zarzuela de Viérgol Las bribonas, obteniendo un gran pañía de zarzuela que dirige el Sr. Navarro Sola.
éxito, no obstante lo deficiente de la interpretación. Mayo florido, es-
trenada después, no agradó al público.
Kn el género sicalíptico, es en ul que mejor están los artistas de
m w zss
esta compañía, entre los que destacan Carmen Calvó, Julia Gómez, el Valencia. — En el teatro de la Princesa se ha estrenado con buen
tenor Castor, Pepe Berges, Arturo Espada, Cristóbal Sánchez y el ba- exito una zarzuela titulada Alma andaluza, libro de los Sres. Pérez
rítono Valle. Manglano y Reverter, música del maestro Asensí.
El teatro se ve muy concurrido por el sexo fuerte. — Jove. Tanto la letra como la música fueron del agrado del público, á
cuyo efecto contribuyó también la interpretación, que fue esmerada.
zss zss m Posteriormente se ha estrenado S M. el botijo, que alcanzó un ex-
celente éxito.
Cádiz. — Continúa la compañía Soler-Cabás cosechando aplau- — En Apolo se verificó el estreno de El pecado venial, libro de los
sos y dinero en el teatro Cómico. Sres, Thous y Cerda, música del maestro Asensio.
Un la última quincena se han estrenado Cata de almas, La carne La obra obtuvo un éxito excelente, y en su interpretación fueron
flaca y Los niños de Tetuán, que lian gustado mucho. El gran petardo muy aplaudidos las hermanas Tabíirner y los Sres. Miró, Jqrge y Can-
no satisfizo al público porque el asunto es anticuado. Los estrenos de sinos.
La vuelta de presidio. Historia de Cristóbal Colón y Felipe //, se han —Kn honor del popular maestro Vicente Lleó se ha dado en el
aplaudido, como asimismo el de Partía serrana, de la que es autor el teatro Ru/.afa una función que ha resultado brillantísima, y en la que
Sr. Rodríguez Cívico. se han evidenciado las simpatías que este público tiene por su pai-
Además de las reprises de que hablaba en mis crónicas anterio- sano. — y. /-.

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tumbran á quedarse con el importe de los ejemplares que venden, sin dignarse siquiera contestar á las
cartas que se les escriben reclamándoles la suma que adeudan, para que todas las empresas editoriales los
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