1.2 - Zonas de Entrenamiento Aeróbico - Resumen - López Chicharro
1.2 - Zonas de Entrenamiento Aeróbico - Resumen - López Chicharro
1.2 - Zonas de Entrenamiento Aeróbico - Resumen - López Chicharro
Dentro del entrenamiento aeróbico nos encontramos con varias intensidades, que varían
desde condiciones de reposo hasta la máxima expresión de nuestro consumo de oxígeno
(VO2max). En los años 80, fueron Skinner y McLellan los encargados de proporcionarnos un
modelo trifásico de intensidad progresiva y, en 2013, López, Vicente y Cancino nos traen
éste modelo a través de su obra “Fisiología del entrenamiento aeróbico, una visión integrada”
con el fin de darnos a entender cómo responden fisiológicamente los sistemas integrados en
la resistencia aeróbica.
Para ello nos presentan tres fases, en la que cobran gran importancia los dos umbrales
(aeróbico y anaeróbico) los cuales nos marcan los puntos en los que pasamos de una fase a
otra. A continuación os explico de manera sencilla el funcionamiento de cada zona y las
adaptaciones que se producen cuando trabajamos sobre ella.
FASE I: AERÓBICA
Podemos hablar de la fase aeróbica como la base del entrenamiento. Esta zona va desde
nuestro estado de reposo hasta la intensidad en la que nos encontramos con el primer umbral
(umbral láctico/umbral aeróbico). Dentro de esta fase, realizamos una actividad de intensidad
ligera y moderada, donde las fibras I o fibras lentas, son las encargadas de gestionar
nuestras fuerzas, obteniendo la mayor parte de la energía a través del metabolismo aeróbico
(fibras oxidativas). El principal sustrato energético que usa nuestro cuerpo en esta fase son
los ácidos grasos libres
Si tomamos como referencia la escala de percepción de esfuerzo de Borg que podréis ver a
continuación, el trabajo en esta fase entraría entre los valores 0-1 (muy fácil) a 3 (moderado)
aproximadamente. Dentro del trabajo en esta fase, por ejemplo, si lo aplicamos a la carrera a
pie, llevaríamos un ritmo en el que pudiéramos mantener una conversación
perfectamente. A medida que comenzamos a entrecortar las palabras podemos decir que
estaríamos entrando en la siguiente fase.
¿Qué conseguimos entrenando en ésta fase? Entrenando en esta zona mejoraremos nuestra
capacidad para resistir trabajos prolongados, logrando así mantener una actividad durante
más tiempo retrasando la aparición de fatiga, reduciendo la frecuencia cardiaca asociada a
una misma carga de trabajo.