Sobre La Influencia de La Tecnología - 2020
Sobre La Influencia de La Tecnología - 2020
Sobre La Influencia de La Tecnología - 2020
Bien se podría acuñar hoy la frase de Leonardo da Vinci: “No es una época de
cambios, sino un cambio de época”, que en su momento hizo alusión al proceso de
cambio entre la época medieval a la renacentista. Ciertamente, el devenir histórico
antes y después de Da Vinci hasta nuestros días son procesos relacionados con el
tiempo y la transformación de la realidad. Lo que va indicando que nada es estático
sino que hay una permanente corriente de cambio que dinamiza la vida en los
distintos escenarios humanos, sociales, científicos y ecoambientales. Y en ese
tránsito, lo que hoy es, bien podría mañana, dejar de serlo.
En este sentido, las ciencias humanas y sociales han venido señalando el cambio
entre la época moderna a la contemporánea. En otras palabras, es el paso del
universo sólido al universo líquido. De la sociedad que otorgaba seguridad al tener
todo bajo control por las estructuras e instituciones dominantes (estado, iglesia,
familia, etc.) a una sociedad que se percibe en lo subjetivo, diverso, plural y complejo.
Se agrieta lo homogéneo, ya no hay una única y oficial historia, sino que cada cultura
cuenta su propia historia, sus narrativas son otras maneras de concebir y comprender
al mundo. Son otras formas de ser y hacer las cosas, es la posibilidad de lo
alternativo.
Otro aspecto determinante de este cambio y que entra en relación con el interés de
este escrito, es el surgimiento del sistema capitalista, el desarrollo industrial
caracterizado por la globalización, descubrimientos científicos, las innovaciones
tecnológicas, la irrupción de medios masivos de comunicación y la abundancia en la
información.
Es lógico pensar que esta transición implica crisis, conflicto y confrontación de estilos
de vida e inclusive vacío tanto para los que están conscientes o no de entrar en lo
nuevo y desconocido de estas realidades que emergen. Lo cierto, es que esto
representa un coste; por un lado la necesidad de acomodarse y dejar de pensar que
tiempos pasados fueron mejores; y de otro lado, la brecha generacional que se marca
por los nuevos paradigmas, valores, comportamientos y avances que se asumen en
este tránsito.
Hay que caer en la cuenta que las generaciones finalmente son “hijas del tiempo” que
les correspondió vivir. Por eso de una forma irónica muchos se dicen vivir antes del
A.C., pero, no es propiamente al antes de Cristo, sino, al “antes de la Computación”,
se consideran rezagados de lo nuevo que aparece en el horizonte atropellándolos e
1
invadiéndolos. Es una realidad que yace en las familias, centros educativos, empresas
y organizaciones en general, que lastimosamente genera distancia, incompatibilidad y
exclusión entre unos y otros.
Hasta aquí, la época contemporánea es una nueva etapa del proceso histórico
caracterizado por: la industrialización y sus lógicas neoliberales; las tecnologías y
comunicaciones; así como de las nuevas narrativas epistemológicas que tratan de
incorporar nuevos conceptos que se ajusten y respondan a las exigencias de la vida,
implicando así, un dialogo situacional y un cambio de lenguaje
Pero propiamente, ¿qué es lo que está acelerando la vida?. Entre las posibles
respuestas hay dos factores que están incidiendo de manera directa sobre las
personas: las lógicas de mercado y las tecnologías. El siguiente fragmento tomado del
artículo “La relación del ser humano con la tecnología está en crisis”, expresa cómo
los productos tecnológicos van apareciendo de manera apresurada dejando rezagado
y psicológicamente afectados a quienes consumen estas tecnologías 1:
1
“La relación del ser humano con la tecnología está en crisis”. Consultado web:
http://andystalman.com/relacion-humano-tecnologia-crisis/
2
vida. El consumismo obsesivo es el reflejo subjetivo del paradigma tecnoeconómico
que más adelante se tocará. A propósito Romano Guardini señala: el ser humano
“acepta los objetos y las formas de vida tal como le son impuestos por la planificación
y por los productos fabricados en serie y, después de todo, actúa así con el
sentimiento de que eso es lo racional y lo acertado”.
Los datos de las encuestas de cultura digital de Colombia, realizadas por el Ministerio
de Tecnologías de la Información y la Comunicación, confirman un giro radical y
definitivo: del ecosistema3 mediático del pasado, se ha pasado al ecosistema digital,
una versión del llamado ecosistema comunicativo. Este giro tiene implicaciones
económicas (transformación de la industria, nuevos nichos de rentabilidad económica,
generación de empleo, necesidades de formación), políticas (desplazamiento paulatino
del poder de los medios a un poder digital, necesidad de nuevas políticas para la
promoción, por ejemplo, del sector de contenidos, discusiones sociales sobre los
derechos de autor y propiedad intelectual en internet, tensiones entre software libre y
software propietario, políticas comunicativas más allá de la conectividad, democracia y
gobernanza digital, ciudadanías digitales), sociales (brecha digital, infocomunicados,
diferencias de acceso y apropiación por sectores sociales, educación y nivel socio
económico, tamaño de las ciudades, hándicap de la participación digital rural, relaciones
de las nuevas tecnologías (nt) con la educación) y culturales (culturas juveniles y nuevas
tecnologías, relación de bienes y servicios culturales con nt, formas de la identidad y
tecnologías, imaginarios, memoria y tecnologías).
Dice este mismo artículo: “El equipamiento tecnológico de las personas, los hogares o
las instituciones, es tan solo una parte de la cultura digital, que no es tanto el conjunto
de los aparatos que se tiene, sino lo que hace la gente con ellos, es decir, las diversas
relaciones y sentidos que crea con dicho equipamientos”. En relación con el artículo
“Cómo la tecnología nos ha cambiado la vida” por Julián Isaza y Natalia Noguera,
permite corroborar lo anterior, pues las tecnologías, las redes sociales, los medios de
comunicación, el internet, si transforman la cotidianidad de la vida en sus distintos
escenarios y casi nadie escapa de ello. Lo cierto, es que se dan nuevas formas de
relacionarse entre las personas; se expresan nuevas sensibilidades en nuevos
lenguajes y simbólicas (ej. emoticones); se acortan las distancias y se conocen otras
2
Rey, Germán, Un texto red Comunicación, cultura y tecnologías en la Encíclica Laudato si’ del Papa
Francisco. Revista Javeriana. La universidad en diálogo con el mundo. Laudato Si´ El cuidado de la
casa Común. Este número fue publicado en septiembre de 2015 por la Fundación Escritores y/o
Revista Javeriana. Consultado en:
https://www.javeriana.edu.co/documents/15832/5510469/SEPARATA_LAUDATOsi.pdf/2ad8749c-
c5e1-428a-b6ff-ad1180e1fa60
3
El concepto de “ecosistema” apareció originalmente en la biología y la ecología pero fue adoptado por
los estudios de la comunicación para referirse a un sistema de interacciones entre medios, redes,
procesos y sujetos, que dan lugar a una compleja estructura de relaciones humanas y simbólicas que
tienen como propósito fundamental la comunicación.
3
culturas así se esté del otro lado de la pantalla; se asume el riesgo de lo desconocido
y se sale de lo seguro (“amigos” que nunca se han visto, circulación de información
personal, fotografías, ubicación en tiempo real, etc.); la información y comunicación
está a la orden de un click; la experiencia de la comunidad cambia ya no hay un
anclaje físico pero si una elección por afinidad e intereses (un “amor” a los iguales).
Claramente estos cambios han propiciado nuevas pautas de sociabilidad que alteran
los presupuestos de la vida comunitaria y que van fracturando lo que socialmente
había estado establecido. Pero por otro lado, es la oportunidad para aquellos que
saben cómo capitalizar estas nuevas realidades, y que sin mayores prejuicios, termina
por mercantilizar las diversas experiencias de los usuarios.
Por otra parte, el físico teórico Michio Kaku pone la tecnología en otro nivel “la cuarta
ola” o “cuarta era tecnológica” 4; para él el mundo está entrando en la revolución
tecnológica marcada por la inteligencia artificial, la biotecnología, la nanotecnología,
computación cuántica, la digitalización del cuerpo y redes neuronales. Asegura que en
las siguientes décadas, sin excepción, todas las industrias serán revolucionadas por el
análisis de big data y la IA, los cuales tendrán aplicaciones en manufactura, servicios,
industria y servicios militares. “En todas las industrias se están generando una enorme
cantidad de información por lo que necesitaremos la analítica para darle sentido a ese
vasto océano de datos”.5
Sus conferencias y libros presentan una serie de predicciones futuras que señala y
agita no solo la imaginación, sino, el hacia dónde camina la innovación tecnológica.
Predicciones que se fundan en prototipos que los científicos ya han inventado y que
seguirán proyectando hacia el futuro. Impactan avances como: Internet e IA en la
4
“Primero, el descubrimiento del poder del vapor. Utilizando la termodinámica la humanidad creó
maquinaria y se adentró en la revolución industrial. Después, la revolución eléctrica. Gracias a la
profundización en el entendimiento del magnetismo las casas se iluminaron y se crearon la radio y la
televisión. La tercera, que hasta el momento ha marcado la agenda del mundo de la tecnología, se trata
de los transistores. Con la capacidad de procesamiento en cada vez un espacio más pequeño, se logró
impulsar programas espaciales y generar los dispositivos móviles modernos. Kaku aseguró que
estamos presenciando el surgimiento de una cuarta ola, que estará dominada por el desarrollo de la
inteligencia artificial, la nano tecnología y la biotecnología”. En el Manday Event Centre de Las Vegas,
EE. UU. durante el Think IBM. Consultado en:
https://www.eltiempo.com/tecnosfera/novedades-tecnologia/el-futuro-de-la-tecnologia-segun-michio-
kaku-201118
5
Tec Review, “10 predicciones tecnológicas del físico Michio Kaku”. Artículo, mayo 2, 2019. Las
Consultado en: https://tecreview.tec.mx/las-10-predicciones-tecnologicas-del-fisico-michio-kaku/
4
medicina -se creará una especie de lentes de contacto que integrarán tecnología de
reconocimiento facial con la que podrá tener acceso a la biografía e información
general de la gente-; viajes a Marte; vivir en el ciberespacio; encuentro con otras
civilizaciones; vehículos autónomos; mayor personalización del comercio -la ropa
inteligente, juguetes, órganos humanos y hasta tejidos se imprimirán en máquinas-; se
detendrá el envejecimiento de los cuerpos después de los treinta años; robots que
piensen por sí mismos; telequinesia; teletransporte, etc. Michio Kaku cambia en
quienes lo leen y escuchan la percepción sobre el tiempo, la vida, la muerte, la
libertad, el universo, el futuro, la sociedad…se abren los ojos hacia nuevas maneras
de ver y concebir la existencia humana.
Tiene una posición muy optimista sobre la tecnología y el papel que juega en el
desarrollo de la humanidad. Su visión futurista está marcada obviamente por el
desarrollo de la ciencia, especialmente de la física, y, de la capacidad humana de
predecir, imaginar, inventar y crear posibilidades de futuro. En su parecer la tecnología
crea conocimiento y empodera a las personas llevándolas a una participación más
democrática. Sin embargo, él mismo advierte que no siempre son bien recibidos estos
avances… “A menudo la gente rechaza los avances tecnológicos (…) cuando la
tecnología contradice la naturaleza humana.” A esto lo han llamado la teoría del
hombre de las cavernas y, según Michio, “al producirse un conflicto entre la tecnología
moderna y los deseos de los primitivos antepasados, estos últimos siempre ganan”.
Podría interpretarse como el temor a lo desconocido.
Sin embargo, no se puede negar la otra cara de la moneda: las inquietudes, las
situaciones por resolver, las denuncias, el reconocimiento de los desastres y la
deshumanización que han surgido como coste de tan prodigiosos avances. Es la
tecnología como espada de doble filo que puede llegar a cortar la ignorancia, la
pobreza y la enfermedad, pero también es cierto que puede llegar a matar. El Papa
Francisco con su Carta Encíclica Laudato Si´ (publicada el 18 de junio de 2015) ha
hecho precisiones y cuestionamientos en torno a este tema. Pero antes hay que
aclarar que Francisco no tiene problema con la tecnología, pues, la concibe como una
herramienta muy útil, como un gran fruto de la creatividad humana que ha recibido
como don de Dios, y que tiene la responsabilidad de desarrollar. A continuación, en
algunos a partes y aportes del Laudato Si´ se refiere en dónde está el problema:
Ahora, desde esta realidad de un mundo cambiante que propone nuevas dinámicas
(humanas, sociales, económicas, ecoambientales, tecnológicas, etc.) y que necesaria
y directamente va a afectar la vida de las empresas u organizaciones… ¿cómo asumir
el cambio?.
Obviamente esto implica contrastar, confrontar y entrar en conflicto con sus propias
propuestas de valor, modelos de negocios y la imagen que quiere proyectar.
Asimismo, en la línea de productos y servicios que ha de ofrecer, las estrategias, las
cadenas de suministro, las relaciones de mercado, etc. Las innovaciones tecnológicas
tienen sentido si ligan con una mayor inclusión y superación de la brecha de pobreza:
crear empleo digno, salarios justos, igualdad de oportunidades, redistribución de la
riqueza, humanización del sistema socio-económico. En otras palabras, la tecnología
debe servir a la humanidad, no al mercado.