Ritual OV 2018
Ritual OV 2018
Ritual OV 2018
Miembros de la O.V.S
Pueden ser miembros de la Obra los siguientes:
- Los Sacerdotes
- Las comunidades religiosas
- Los seminaristas
- Todos los fieles cristianos
Socios Activos:
- Hacer oración por la santificación de sacerdotes y seminaristas
- asistencia, de preferencia los jueves, a los diversos actos de piedad: Misa, hora santa
o Rosario
- Reuniones mensuales de estudio
- Propagación de la Obra
- Ayuda económica
Socios espirituales
Su obligación es ofrecer a Dios, en forma habitual, sus trabajos, sus oraciones y
sufrimientos por las intenciones de la Obra; de manera especial los jueves sacerdotales.
Dirección y gobierno
El primer encargado es el Obispo de la Diócesis de Tacámbaro; su gobierno es a través de:
- Consejo diocesano
- Consejos parroquiales
- Secciones filiales
Consejo Diocesano
Integrado por: El padre director, un presidente, secretario, tesorero y tres vocales. (duración
3 años) Su deber es:
- Fomentar la Obra en las parroquias
- Participar en la promoción de colecta del Seminario
- Impulsar la Jornada Mundial de Oración por las vocaciones, a celebrar el IV
domingo de pascua.
- Promoción de la Obra en centros de catequesis y centros de educación.
- Visitar a los diferentes grupos parroquiales.
- Elaboración del Boletín.
- Asamblea Diocesana
Padre Director Diocesano:
- Cuidar de la buena marcha de la OVS
- Acompañar las reuniones del consejo
- Visitar junto con el Consejo a los diferentes grupos.
Presidente:
- Presidir las reuniones del consejo
- Informar al Obispo
- Velar por los centros parroquiales
Secretario:
- Libro de actas de las sesiones del consejo, así como las estadísticas de actividades
- Actualizar listas de socios
- Estar atento sobre la elaboración del Boletín
Tesorero:
- -administrar los fondos de los grupos y de los bienhechores
- Economía de la Obra
- Corte de caja, en conformidad con el padre director
- Elaborar el informe anual del movimiento económico de la Obra
Vocales:
- Auxiliar a los primeros en todo lo necesario
Interrogatorio
Recepción del distintivo de Jesucristo, Buen Pastor, que los socios van a recibir por primera
vez.
El Presidente de la celebración, de pie y dirigiéndose a los socios los interroga diciendo:
Queridos hermanos y hermanas que por el bautismo forman parte de la Iglesia, ¿quieren
ahora formar parte de la Obra de las Vocaciones Sacerdotales?
R. Sí, quiero.
¿Se comprometen a trabajar según los estatutos que rigen nuestra Obra, en comunión con el
Párroco y los demás grupos de nuestra comunidad?
R. Sí, me comprometo.
Dios nuestro, te pedimos que hagas descender la abundancia de tu bendición +¿ sobre estas
cruces de Jesucristo, Buen Pastor, que tus hijos van a llevar como distintivo de su amor por
las Vocaciones Sacerdotales; concédeles la gracia de dar un buen testimonio de vida
cristiana, y que el Espíritu Santo suscite sacerdotes dignos del altar, por medio de la oración
y apostolado de estos hijos tuyos. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.
Consagración
Una vez realizada la bendición e imposición, todos los socios hacen su consagración con la
cual manifiestan su permanencia en la Obra.
Esta consagración se renovará cada año.
Señor Jesús, hoy me ofrezco a ti y como muestra de mi amor te consagro para siempre todo
mi ser, para que, atendiendo tu invitación de pedir al Padre que envíe operarios a su mies,
ofrezco mis capacidades, cualidades, esfuerzos, sacrificios y oraciones en la siembra de las
vocaciones sacerdotales y en la formación de tus sacerdotes. Que tu Santo Espíritu inflame
nuestro corazón en el amor y nos mantenga firmes en tu santo servicio.
Amén.
Este rito tiene lugar dentro de los ritos iniciales de la Celebración Eucarística.
Después del saludo, el presidente de la celebración introduce a los fieles con estas o
semejantes palabras:
La celebración que hoy nos congrega, nos invita a unirnos a la Iglesia triunfante para pedir
juntos por el eterno descanso de N., quien durante su vida rogó con sus súplicas y acciones
apostólicas al dueño de la mies, acrecentar y santificar el ministerio sacerdotal, formando
parte de la Obra de las Vocaciones Sacerdotales en nuestra Diócesis de Tacámbaro.
Se enciende el Cirio Pascual colocado a un lado del ataúd, mientras tanto el presidente de la
celebración dice:
Junto al cuerpo, ahora sin vida de nuestro hermano (a) N., encendemos, Señor Jesucristo,
esta llama, símbolo de tu cuerpo glorioso y resucitado; que el resplandor de esta luz ilumine
nuestras tinieblas y alumbre nuestro camino de esperanza hasta que lleguemos a ti Claridad
eterna, que vives y reinas, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos. Amén.
Cerca del distintivo se colocan los estatutos de la Obra de las Vocaciones Sacerdotales,
mientras tanto el presidente de la celebración dice:
Que tu hijo (a) que tuvo en este mundo la gracia de formar parte de la Obra de la
Vocaciones Sacerdotales, que conoció y se dejó guiar por los estatutos de dicha Obra,
alcance la gracia prometida.
Algún miembro de la Obra de las Vocaciones Sacerdotales coloca cerca del ataúd el
estandarte, mientras tanto el presidente de la celebración dice:
Te suplicamos Dios de infinita misericordia que recibas a tu hijo (a) que en vida formó
parte de esta Obra, en el servicio y oración por las Vocaciones Sacerdotales. Sal ahora a su
encuentro, para que junto con tu Hijo Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, tome parte en la
Patria Celestial.
El presidente de la celebración prosigue con la oración colecta de la Misa.
CORO:
¡Oh Jesús nuestro Hermano y amigo!
de las almas se escucha el clamor
ya en los campos maduro está el trigo
a la mies manda obreros, Señor (bis)
LEÍDO:
“Caminando, pues, junto al mar de Galilea
vio Jesús a dos hermanos, y les dijo:
venid en pos de mí y os haré
pescadores de hombre”. (Mt. 4, 19)