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Investigación de Las Pruebas

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DEPARTAMENTO DE DERECHO

LICENCIATURA EN DERECHO

PROCESAL LABORAL
7-8 PM

ALUMNO: ROMERO GAMEZ JESUS FERNANDO


Investigación de las pruebas:

• 1.- punto de vista doctrinal (consultar dos autores)

Claudia Lizbeth Ramírez Juárez*

En el ámbito jurídico-procesal, la expresión prueba tiene dos significados: denota un sistema de


normas adjetivas —los ordenamientos procesales objetivos, dentro de los que normalmente se
contienen los procedimientos probatorios— y un sistema de conceptos: integradores de un
capítulo o rama de la ciencia del derecho procesal. Es de entenderse que ambos sentidos
concuerdan con los dos momentos del concepto, que es actividad pensante y a la vez como objeto
pensado.1

Según Carnelutti y Rocco la expresión prueba tiene un distinto significado en el lenguaje común y
en el lenguaje jurídico, pues prueba judicial es la comprobación, no de los hechos, sino de las
afirmaciones6, a ello podríamos agregar que en materia procesal se puede hablar de prueba solo
cuando se trate de comprobar hechos que están sujetos a contradicción y que no han sido
admitidos por ambas partes dentro del proceso judicial, es por eso que tiene características
propias que la diferencian de la prueba en sentido común.

• 2.- desde el punto de vista legal (ley federal de trabajo) artículos referentes a la
prueba.

CAPITULO XXII De las PRUEBAS artículos 776- 836

Desde el punto de vista de la jurisprudencia buscar 10 jurisprudencias de ese tema.

3. del punto de vista práctico:

• Fases de la prueba:

1.- ofrecimiento Claudia Lizbeth Ramírez Juárez*

El laboralista Miguel Bermúdez Cisneros señala que el ofrecimiento de pruebas…

Es el acto procesal, mediante el cual el actor pone a disposición del tribunal juzgador los
elementos de prueba con los que pretende comprobar su situación o acción, y el demandado a su
vez pone sus respectivas pruebas a fin de comprobar sus excepciones y defensas, es el que
corresponde a lo que Carnelutti llamaba la disponibilidad de la prueba. Según él, no bastaba que
las pruebas existan, sino que es necesario, además, que las partes y el tribunal dispongan de ellas,
es decir, presentarlas en el juicio para que sirvan de base a la sentencia y la normación de éste.

Un punto fundamental se va a referir a la carga de la prueba según corresponda a las partes. El


artículo 784 señala las causas que permitirán la eximición de la carga de prueba al trabajador, y se
refiere a la obligación patronal de contar con los documentos relacionados con el trabajador en el
desempeño de su trabajo; la falta de presentación de éstos presume como ciertos los hechos
alegados por el trabajador. Por otra parte, cuando el patrón logra revertir la carga de la prueba, es
porque negó la relación laboral, o porque el trabajador demandó en el ámbito de los riesgos de
trabajo.

En un procedimiento laboral, incluido el procedimiento ordinario, son admisibles todos los medios
de prueba que no sean contrarios a la moral y al derecho (artículo 776); que se refieran a hechos
controvertidos (artículo 777); que sean ofrecidas con todos los medios necesarios para su
desahogo (artículo 780); que se ofrezcan de manera oportuna, es decir en la misma audiencia,
salvo que se refieran a hechos supervenientes o que tengan por fin probar las tachas que se hagan
valer en contra de los testigos (artículo 778), y que sean de posible desahogo.

En el procedimiento laboral mexicano de carácter ordinario, la etapa de ofrecimiento y admisión


de pruebas se ha sujetado a las siguientes

a) Cada una de las partes tiene plena libertad para ofrecer pruebas siempre que estén
relacionadas con los hechos controvertidos;

b) En el momento de la diligencia se formularán las objeciones a dichas pruebas, que cada parte
tenga que hacer;

c) Mientras no se cierre el periodo de ofrecimiento de pruebas, las partes podrán ofrecer otras no
consideradas por ellas, siempre que estén relacionadas con las ofrecidas por la respectiva
contraparte;

d) Si el actor necesita -ofrecer pruebas relacionadas con hechos desconocidos para él, pero los
cuales se desprendan de la contestación a la demanda, podrá solicitar la suspensión de la
audiencia a fin de encontrarse en condiciones de preparar las pruebas concernientes a tales
hechos;

e) las pruebas admisibles son: confesional; documental; testimonial; pericial; inspección;


fotografías; presuncional; instrumental de actuaciones y, en general, los medios aportados por los
descubrimientos de la ciencia (se aclara que en nuestro medio las cintas grabadas sólo se admiten
como pruebas bajo severas condiciones de convicción jurídica de su posible valor), y

f) Las pruebas deberán referirse a los hechos controvertidos cuando no hayan sido confesados por
las partes.

https://archivos.juridicas.unam.mx/www/bjv/libros/1/275/3.pdf
2.- admisión

La etapa de admisión de pruebas corresponde a una de las actuaciones de la junta, donde


determinará si las probanzas que le fueron ofrecidas cumplen con los requisitos que hemos
mencionado con anterioridad, y merecen ser consideradas para continuar con la secuela procesal.
La admisión de pruebas es de actuación exclusiva de la junta; es un acto procesal donde las partes
esperan el resultado de las consideraciones de la junta. La fracción IV del artículo 880 es muy clara
al señalar que: “Concluido el ofrecimiento, la Junta resolverá inmediatamente sobre las pruebas
que admita y las que deseche”.

Como podemos observar, la determinación de la junta puede ser admitiendo o desechando una
prueba, debiendo fundamentar y motivar cualquiera de las decisiones para evitar alguna violación
procedimental, la que desde luego puede ser combatida por los medios destinados para ello. Una
vez que la junta ha determinado si admite o desecha las pruebas, deberá dictar un acuerdo donde
señalará día y hora para la celebración de la audiencia de desahogo de pruebas, que por ley
deberá efectuarse dentro de los diez días hábiles siguientes (situación que tampoco ocurre en la
realidad); de igual forma deberá ordenar, si es el caso, se giren los oficios necesarios para recabar
los informes o copias que deba expedir alguna autoridad o exhibir persona ajena al juicio y que

3.- preparación

4.- desahogo

El desahogo de las pruebas es el momento procesal en que las partes manifiestan ante la
autoridad las pruebas que les fueron previamente admitidas, con la intención de probar su dicho y
fundamentar sus acciones o sus excepciones. En esta etapa, no sólo se requiere el apego a la ley,
sino también la habilidad de la persona que esté desahogando las probanzas, para obtener los
resultados esperados y probar aquello que verdaderamente se quiere probar. El desahogo de las
pruebas en el procedimiento ordinario laboral se considera en una audiencia especial regulada en
el artículo 884 LFT, debiendo seguir las siguientes reglas:

1) Una vez que se abre la audiencia se procederá a desahogar todas las pruebas que se encuentren
debidamente preparadas, procurando que sean primeramente las del actor e inmediatamente las
del demandado o, en su caso, aquellas que hubieren sido señaladas para desahogarse en su fecha.
Es decir, la intención primaria de la autoridad es que todas las pruebas se desahoguen en una
misma audiencia.

2) Si por algún motivo faltare por desahogar alguna prueba, por no estar debidamente preparada,
se suspenderá la audiencia para continuarla dentro de los diez días siguientes, haciéndose uso de
los medios de apremio a que se refiere esta ley. Por ejemplo, si un testigo no asiste a la audiencia.

3) En caso de que las únicas pruebas que falten por desahogar sean copias o documentos que
hayan solicitado las partes, no se suspenderá la audiencia, sino que la junta requerirá a la
autoridad o funcionario omiso para que le remita los documentos o copias; si dichas autoridades o
funcionarios no cumplieran con esa obligación, a solicitud de parte, la junta se lo comunicará al
superior jerárquico para que se le apliquen las sanciones correspondientes.

Desde el punto de vista de la jurisprudencia buscar 10 jurisprudencias de ese tema.

1.

JUICIO LABORAL PROMOVIDO POR UN ADULTO MAYOR. SI ALEGA


DISCRIMINACIÓN POR SU EDAD O MANIFIESTA QUE POR ELLO SE LE DESPIDIÓ
INJUSTIFICADAMENTE, CORRESPONDE AL PATRÓN ACREDITAR QUE NO FUE ASÍ.

Cuando un juicio laboral ha sido promovido por un adulto mayor que alega


discriminación por razón de su edad o manifiesta que por esa razón se le despidió
injustificadamente de su trabajo, la carga de la prueba de demostrar lo contrario
corresponde al patrón, en atención al principio de "facilidad probatoria" con el que
cuenta, pues de conformidad con los artículos 784 y 804 de la Ley Federal del
Trabajo, le corresponde demostrar las condiciones básicas de la relación de trabajo,
dentro de las cuales se encuentra el ambiente laboral en el que se desarrollan los
empleados; aunado a su obligación general de brindar a los trabajadores las
condiciones óptimas para que puedan realizar su trabajo, incluidas las
herramientas para su desempeño, así como las medidas necesarias para evitar y
remediar cualquier situación de discriminación que pudieran sufrir, habida cuenta
que un ambiente de trabajo libre de violencia y discriminación constituye un
aspecto de interés social, de acuerdo con el artículo 3o., último párrafo, de la ley
aludida.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO DEL DÉCIMO


SÉPTIMO CIRCUITO.

Amparo directo 76/2019. Irma Yolanda Negrete Gavaldón. 13 de junio de 2019.


Unanimidad de votos. Ponente: Cuauhtémoc Cuéllar De Luna. Secretaria: Jessica
Ariana Torres Chávez.
Nota: En relación con el alcance de la presente tesis, destaca la diversa aislada 1a.
CDXXXII/2014 (10a.), de título y subtítulo: "DISCRIMINACIÓN POR RAZÓN DE EDAD
EN EL ÁMBITO LABORAL. JUICIO DE RAZONABILIDAD PARA DETERMINAR SI UN
ACTO CONTIENE UNA DIFERENCIA DE TRATO CONSTITUCIONAL.", publicada en el
Semanario Judicial de la Federación del viernes 5 de diciembre de 2014 a las 10:05
horas y en la Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Décima Época, Libro
13, Tomo I, diciembre de 2014, página 226, con número de registro digital:
2008093.

2.

PRUEBAS EN EL PROCEDIMIENTO LABORAL. PARA QUE PUEDAN VALORARSE


DEBEN ESTAR RELACIONADAS CON LOS HECHOS A COMPROBAR, EXPRESADOS
POR LAS PARTES EN LA DEMANDA O EN SU CONTESTACIÓN, SIN QUE SEA
SUFICIENTE LA CIRCUNSTANCIA DE QUE OBREN EN EL EXPEDIENTE.

Para que una prueba pueda y deba valorarse por el juzgador, inclusive, conforme al


principio de adquisición procesal, no sólo debe obrar en autos, de facto o de jure,
sino que debe estar relacionada con los hechos expresados en la demanda o en su
contestación, pero además, éstos deben ser propios de las partes; es decir, aun
cuando de acuerdo con el aludido principio, la prueba, una vez incorporada
jurídicamente al proceso, ya no pertenece a quien la ofreció, sino al juicio y, por
ello, deba valorarse en el laudo conforme a derecho y, aun así, para que pueda
atribuírsele eficacia convictiva dentro de la libre apreciación, que en la materia
implica la buena fe guardada y la verdad sabida, en términos del artículo 841 de la
Ley Federal del Trabajo, siempre se requiere de un hecho a comprobar, pues de
nada serviría una prueba respecto de una cuestión abstracta o ajena a la
controversia, sin que sea suficiente para realizar dicha valoración, la circunstancia
de que el hecho a demostrar lo haya aducido una parte a la que no le es propio, por
ser ajena a la relación que sostuvo con la contraparte, como ocurre, por ejemplo,
cuando un sindicato, incorporado al procedimiento como tercero interesado,
exhibe la renuncia del trabajador, y se advierte que el patrón no compareció a
contestar la demanda, pues él sería, exclusivamente, quien podría oponer como
hecho propio la inexistencia del despido reclamado sustentado en la renuncia de la
actora; por consiguiente, esa documental no merece valor probatorio alguno, a
pesar de obrar en el expediente.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL SÉPTIMO


CIRCUITO.
Amparo directo 183/2019. 3 de octubre de 2019. Unanimidad de votos. Ponente:
Jorge Sebastián Martínez García. Secretario: Juan Manuel Jiménez Jiménez.

3.

PRUEBA PERICIAL EN GENÉTICA MOLECULAR. LA CONDUCTA EVASIVA DEL


DEMANDADO PARA SU DESAHOGO, CONTRARÍA EL PRINCIPIO DE LEALTAD
PROCESAL Y VULNERA EL DERECHO DEL MENOR DE EDAD PARA CONOCER SU
IDENTIDAD PARENTAL.

La acción de reconocimiento de paternidad constituye una garantía para proteger y


respetar el derecho humano que tienen los hijos para que en sede judicial se
declare quién es su progenitor biológico. Los motivos de índole laboral que esgrima
el demandado para justificar su inasistencia a proporcionar sus muestras para
llevar a cabo los análisis genéticos pertinentes, configuran una conducta de
deslealtad procesal, si a través de eventos académicos o laborales, el sujeto de
la prueba imposibilita que se rinda el peritaje correspondiente, haciendo nugatorio
el derecho del infante a conocer su filiación paterna, pues estuvo en aptitud de
ejercer frente a su fuente de empleo el derecho previsto en el artículo  47, fracción
X, de la Ley Federal del Trabajo, que da a los trabajadores la posibilidad de registrar
hasta tres faltas de asistencia a sus labores en un periodo de treinta días, aunque
no cuente con permiso del patrón o se presente alguna causa justificada, lo cual no
pone en riesgo su relación subordinada. Máxime que para entregar las muestras de
material genético, al enjuiciado se le impuso la carga de acudir un solo día, el cual
fue agendado y reprogramado en varias ocasiones sin que se lograra que cumpliera
con los requerimientos que se le hicieron, de modo que la conducta evasiva del
demandado para el desahogo de la prueba pericial en genética molecular contraría
el principio de lealtad procesal y vulnera el derecho del entonces menor de edad a
conocer su identidad parental, cuya atención debe ser prioritaria frente a los
derechos fundamentales de los adultos.

TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL PRIMER CIRCUITO

Amparo directo 492/2019. 4 de septiembre de 2019. Unanimidad de votos.


Ponente: Sofía Verónica Ávalos Díaz. Secretario: Víctor Hugo Solano Vera.
4.
PRUEBA DE INSPECCIÓN EN EL JUICIO LABORAL. POR REGLA GENERAL, NO ES
IDÓNEA PARA ACREDITAR LAS SEMANAS COTIZADAS NI EL SALARIO PROMEDIO
DE LAS ÚLTIMAS 250 SEMANAS DE COTIZACIÓN PARA LA OBTENCIÓN Y
CUANTIFICACIÓN DE LAS PENSIONES POR INVALIDEZ, VEJEZ Y CESANTÍA EN EDAD
AVANZADA, EXCEPTO CUANDO DE SU DESAHOGO SE ADVIERTE INFORMACIÓN
APTA Y SUFICIENTE QUE DEMUESTRE ESOS ELEMENTOS [INTERRUPCIÓN DE LA
JURISPRUDENCIA VII.2o.T. J/9 (10a.)].

Este órgano jurisdiccional en la jurisprudencia VII.2o.T. J/9 (10a.), de título y


subtítulo: "PRUEBA DE INSPECCIÓN EN EL JUICIO LABORAL. NO ES LA IDÓNEA
PARA ACREDITAR LAS SEMANAS COTIZADAS NI EL SALARIO PROMEDIO DE LAS
ÚLTIMAS 250 SEMANAS DE COTIZACIÓN PARA LA OBTENCIÓN Y CUANTIFICACIÓN
DE LAS PENSIONES POR INVALIDEZ, VEJEZ Y CESANTÍA EN EDAD AVANZADA.",
sostuvo que ese medio de convicción no es idóneo para tales fines, ya que esa
información no puede apreciarla a simple vista el funcionario que la realiza, sino
que para ello deben efectuarse determinadas operaciones aritméticas, esto es,
para obtener la cantidad total de semanas cotizadas deben sumarse cada una de
éstas y para determinar el promedio salarial, deben sumarse los salarios
registrados de las últimas 250 semanas de cotización, y después dividir la cantidad
resultante entre ese número de semanas; sin embargo, una nueva reflexión en
torno al tema, permite concluir y aclarar que existen excepciones a esa regla
general, como lo es cuando de la información que se obtenga en el desahogo de
la prueba de inspección practicada por el actuario de la autoridad laboral puedan
advertirse elementos suficientes para establecer con precisión tanto el salario
promedio de las últimas 250 semanas de cotización de la parte trabajadora, como
el número total de semanas que cotizó, como pudiera ser, a manera de ejemplos,
que de los documentos sobre los cuales se ofreció dicho medio de convicción,
consistentes en los avisos de inscripción, avisos de baja, avisos de modificación de
salarios, registros patronales, avisos de alta al régimen obligatorio del seguro
social, catálogo de avisos originales o del Sistema Integral de Derechos y
Obligaciones (SINDO), puedan apreciarse los periodos de cotización y el monto de
los salarios con los que estuvo dado de alta el trabajador y que el actuario refleje
dicha información en el acta que al efecto lleve a cabo o que anexe a la misma
documentos de los que se aprecien los datos en comento, para que con éstos, la
autoridad laboral, al momento de valorar el medio de convicción de que se trata,
pueda establecer con plena certeza el salario promedio y el total de semanas
cotizadas por la trabajadora. De ahí que, por excepción, la prueba de inspección sí
puede ser idónea para acreditar las semanas cotizadas y el salario promedio de las
últimas 250 semanas de cotización para la obtención y cuantificación de las
pensiones por invalidez, vejez y cesantía en edad avanzada, lo que conduce a
interrumpir la citada jurisprudencia.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL SÉPTIMO


CIRCUITO.

Amparo en revisión 129/2018. 12 de septiembre de 2019. Unanimidad de votos.


Ponente: Jorge Sebastián Martínez García. Secretario: Juan Manuel Jiménez
Jiménez.
Amparo directo 983/2018. 20 de septiembre de 2019. Unanimidad de votos.
Ponente: Jorge Sebastián Martínez García. Secretario: Juan Manuel Jiménez
Jiménez.

5.

OFRECIMIENTO DE TRABAJO. SU CALIFICATIVA TRATÁNDOSE DE ADULTOS


MAYORES COMO GRUPO VULNERABLE.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido en diversas tesis


jurisprudenciales que la naturaleza jurídica de la oferta del trabajo es la de una
propuesta conciliatoria para que continúe la relación laboral interrumpida, además
de que tiene el efecto procesal de revertir la carga de la prueba al trabajador para
demostrar el hecho del despido, si el ofrecimiento es de buena fe. También ha
sostenido que para calificar la oferta ha de atenderse al resultado de un análisis
lógico jurídico con base en las siguientes reglas: a) estudiar el ofrecimiento en
concreto; b) relacionarlo con los antecedentes del caso, la conducta procesal de las
partes, las circunstancias en que se da y con todo tipo de situaciones; y, c) concluir
de manera prudente y racional que la proposición revela la intención del patrón de
continuar la relación laboral. En este sentido, si se cumplen esas reglas la oferta es
de buena fe, pero si del análisis se advierte que el patrón pretende engañar y
burlar la norma que lo obliga a probar la justificación del despido o hastiar al
trabajador para hacerlo desistir de su reclamo, habrá mala fe. Tomando en cuenta
esos aspectos, en los casos en que el trabajador sea una persona mayor, la
autoridad al calificar la oferta del trabajo, debe poner especial cuidado y valorar la
situación de aquél y la conducta del patrón en torno a los términos en que le ofrece
regresar al trabajo. Por ello, cuando el trabajador tenga la condición de persona
mayor debe tenerse en cuenta que forma parte de un grupo vulnerable que
merece una especial protección por parte de los órganos del Estado y, por esa
razón, no es creíble que la demandada al ofrecerle el regreso al trabajo tenga una
sincera y honesta intención de reintegrar al accionante en su trabajo, aun cuando,
según sea el caso, el ofrecimiento pueda resultar de buena fe y, en esas
circunstancias, la oferta debe considerarse de mala fe, sin que ello implique que el
patrón esté impedido para demostrar la inexistencia del despido con diferentes
medios de prueba.

DÉCIMO SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER


CIRCUITO.

Amparo directo 472/2019. 6 de junio de 2019. Unanimidad de votos. Ponente: Juan


Manuel Vega Tapia. Secretario: Jorge Dimas Arias Vázquez.

6.

DOCUMENTOS DIGITALES OBTENIDOS DE LOS ADELANTOS TECNOLÓGICOS O


DESCUBRIMIENTOS DE LA CIENCIA OFRECIDOS COMO PRUEBA EN EL
JUICIO LABORAL. PARA RECONOCERLES PLENO VALOR PROBATORIO, LOS
MEDIOS DE PERFECCIONAMIENTO PREVISTOS EN LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO
DEBEN SER ACORDES A SU NATURALEZA.

Los artículos 776, 780, 798, 807, 810, 836-A, 836-B, 836-C y 836-D de la Ley Federal
del Trabajo prevén las pruebas que las partes en el juicio pueden ofrecer, entre las
que se encuentran los documentos digitales obtenidos de los adelantos
tecnológicos y descubrimientos de la ciencia, siempre que no vayan contra la moral
y el derecho; obligan a las partes que las ofrezcan a acompañar los elementos
necesarios para su desahogo, y disponen que para su perfeccionamiento existen,
entre otras herramientas procesales, el cotejo o compulsa con su original. Sin
embargo, atendiendo a que la naturaleza de ese tipo de documentos es digital, el
medio de perfeccionamiento ofrecido para reconocerles pleno valor probatorio y
así desvirtuar diverso documento que sí tiene ese carácter, como en el caso la hoja
de certificación de vigencia de derechos que el Instituto Mexicano del Seguro Social
aporte al procedimiento, debe ser conforme a dicha naturaleza digital, como puede
ser la consulta de un portal electrónico o página de Internet, a través de un
dispositivo (computadora, tablet, teléfono celular inteligente o similares), con
acceso a estas herramientas tecnológicas, sin que necesariamente la oferente esté
obligada a aportar éstas al juicio (materialmente presentar el dispositivo
tecnológico); de ahí que el medio de perfeccionamiento ofrecido para este tipo de
documentos digitales no puede ser el mismo como si su origen se encontrara en un
documento cierto, físico y original y, por tanto, su falta de perfeccionamiento
mediante alguna de esas herramientas impide reconocerles valor probatorio
alguno.

DÉCIMO SEXTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER


CIRCUITO.

Amparo directo 263/2019. 22 de abril de 2019. Unanimidad de votos. Ponente:


Juan Manuel Vega Tapia. Secretario: Juan Carlos García Campos.

7.

PRUEBA PERICIAL EN EL JUICIO LABORAL. LA JUNTA PUEDE DESIGNAR PERITO A


FAVOR DEL TRABAJADOR AUNQUE ÉSTE YA HUBIERA REALIZADO DESIGNACIÓN,
CONFORME A LOS ARTÍCULOS 780 Y 824 DE LA LEY FEDERAL DEL TRABAJO, EN SU
TEXTO ANTERIOR A LA REFORMA PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA
FEDERACIÓN EL 1 DE MAYO DE 2019.

De los citados preceptos, interpretados conforme a lo establecido en el artículo 18


de la Ley Federal del Trabajo y de acuerdo con el principio de acceso a la justicia
establecido en el diverso 17 de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, se desprende que si bien las pruebas se ofrecerán acompañadas de
todos los elementos necesarios para su desahogo, la Junta puede designar perito a
solicitud del trabajador en la audiencia señalada para el desahogo de
la prueba correspondiente, no obstante que éste ya hubiere nombrado uno con
antelación, sin que tenga que justificar esa petición.
Contradicción de tesis 262/2019. Entre las sustentadas por el Tercer Tribunal
Colegiado en Materia de Trabajo del Primer Circuito y el Segundo Tribunal
Colegiado del Décimo Circuito. 9 de octubre de 2019. Cuatro votos de los Ministros
Alberto Pérez Dayán, José Fernando Franco González Salas, Yasmín Esquivel Mossa
y Javier Laynez Potisek. Ponente: Yasmín Esquivel Mossa. Secretaria: Zara Gabriela
Martínez Peralta.

8.
PRUEBA PERICIAL EN EL JUICIO LABORAL. SI EL PERITO DESIGNADO POR UNA DE
LAS PARTES NO COMPARECE EN LA FECHA Y HORA INDICADAS PARA ACEPTAR Y
PROTESTAR EL CARGO, SIN CAUSA JUSTIFICADA, EL TRIBUNAL DE TRABAJO
DEBERÁ TENERLA POR DESAHOGADA ÚNICAMENTE CON EL DICTAMEN QUE, EN
SU CASO, RINDA EL PERITO DE SU CONTRAPARTE.

El artículo 825 de la Ley Federal del Trabajo no señala expresamente una sanción


para el caso de que los peritos, sin causa justificada, no comparezcan a aceptar y
protestar su cargo personalmente ante el tribunal en la fecha y hora que se haya
establecido, pero ello no implica que deba quedarse sin consecuencia alguna, pues
dada la envergadura de la formalidad de que se trata, el efecto lógico e imbíbito en
dicho numeral, es que se tenga por no aceptado y protestado el cargo al perito
designado y, por ende, que éste se encuentre impedido a practicar y rendir su
peritaje, debiéndose tener por desahogada la prueba únicamente con el dictamen
que, en su caso, rinda en la audiencia correspondiente el perito de la contraparte,
toda vez que el artículo referido dispone que la prueba se desahogará con el perito
que comparezca a la audiencia. Lo anterior, con independencia de que
la prueba pericial en el juicio laboral sea colegiada, pues no necesariamente debe
integrarse de esa manera, ya que la Ley Federal del Trabajo no prevé la designación
oficiosa de peritos en rebeldía de alguna de las partes; en tanto que para lograr esa
colegiación ambas partes deben nombrar un perito, que debe aceptar y protestar
el cargo, y rendir su respectivo dictamen; y, en caso de discrepar, nombrarse un
tercero en discordia que emita su parecer sobre el tema de que se trate. No
obstante, cuando una de las partes no nombra perito, o habiéndolo designado no
comparece, sin causa justificada, personalmente ante el órgano jurisdiccional a
aceptar y protestar el cargo; o bien, si en la audiencia de desahogo tampoco
comparece a rendirlo, entonces, se desahogará con el perito que comparezca, sin
que pueda señalarse nueva fecha para que el perito acepte y proteste su
designación, pues aunque la fracción III del precepto citado otorga la facultad para
señalar nueva fecha cuando alguno de los peritos no concurra a la audiencia, sin
causa justificada, ello solamente procede cuando en la audiencia previa
protestaron el desempeño de su encargo y solicitaron el señalamiento de una
nueva fecha para rendir su dictamen, pero no para que comparezcan a protestar de
inicio el cargo conferido. De ahí que el único peritaje que en tales condiciones se
haya recibido y desahogado, podrá ser objeto de valoración en la resolución que se
dicte en el juicio laboral.

SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL SÉPTIMO


CIRCUITO.

9.
PRUEBA DE MEDIOS ELECTRÓNICOS EN EL JUICIO LABORAL. OBLIGACIONES DE LA AUTORIDAD
RESPONSABLE EN SU DESAHOGO.

Tratándose de las pruebas de medios electrónicos que los avances de la ciencia ha incorporado a
la vida social, el legislador impuso a los tribunales laborales la obligación de designar a los peritos
oficiales que se requieran para determinar si la información contenida en el documento digital se
encuentra íntegra e inalterada. Por ende, deben llevar a cabo cuantas gestiones sean necesarias a
fin de cumplir su encomienda, sin que obste o sea impedimento la falta de un perito, porque ello
implicaría tornar nugatorio ese derecho, ya que en términos del artículo 776 de la Ley Federal del
Trabajo, debe admitirse, pues las partes pueden ofrecer los medios de prueba que estimen
pertinentes, siempre que no resulten contrarios a la moral y al derecho. Además, el artículo  836-D,
en su último párrafo dispone que: "Para el desahogo de la prueba a que se refiere este artículo, la
Junta en todo momento podrá asistirse de elementos humanos y tecnológicos necesarios para
mejor proveer.". Lo que determina las amplias facultades de la autoridad  laboral a fin de dar
respuesta a lo que se reconoció como una necesidad dentro del procedimiento laboral, esto es, el
proporcionar a las partes la posibilidad de recurrir a los avances de la ciencia a fin de acreditar sus
pretensiones en juicio y ofrecer los medios de convicción que estimen pertinentes, ya que el
derecho a ofrecer y desahogar pruebas, conforma también el derecho humano al debido proceso.
De ahí que, aunque no existe un término expreso para acatar dicho mandato legal, ello no exime a
la Junta de cumplimentarlo a la brevedad posible, atento a los principios rectores del
procedimiento, previstos en los artículos 685 y 735 de la ley referida, en cuanto este último
establece un término procesal general de tres días cuando no se prevea de manera expresa la
temporalidad para realizar la práctica de algún acto procesal.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIAS CIVIL Y DE TRABAJO DEL DÉCIMO SÉPTIMO
CIRCUITO.
Amparo en revisión 18/2019. Luz Cristina Aguilera García. 27 de junio de 2019.
Unanimidad de votos. Ponente: José de Jesús González Ruiz. Secretaria: Jessica
María Contreras Martínez.

10.
PRUEBA DE INSPECCIÓN EN EL JUICIO LABORAL. SU FINALIDAD CUANDO EL DEMANDADO NIEGA
LA RELACIÓN DE TRABAJO, PERO NO SU CALIDAD DE PATRÓN, ES QUE EL ACTUARIO DÉ FE QUE
EN LA DOCUMENTACIÓN GENERAL APARECE EL NOMBRE DEL TRABAJADOR.

La finalidad de la prueba de inspección cuando el demandado niega la relación de trabajo, pero no


su calidad de patrón, es que el actuario dé fe que el nombre del actor se encuentra dentro de
alguno o algunos de los documentos generales que contiene la universalidad de trabajadores,
como listas de raya o de nómina, listas de operarios inscritos al Instituto Mexicano del Seguro
Social, Instituto del Fondo Nacional para la Vivienda de los Trabajadores y Servicio de
Administración Tributaria, y cuyos documentos a inspeccionar, por ende, deben ser sobre la
totalidad de los empleados para que a partir de su verificación, pueda advertirse si obra o no el
nombre del trabajador. Por tanto, si lo que éste pretende acreditar son aspectos inherentes a él,
como categoría, fecha de ingreso, horario o salario, entonces el ofrecimiento en esos términos
lleva a concluir que los documentos respecto de los que ofreció la inspección se encuentran
personalizados, porque esos aspectos únicamente pueden advertirse de documentos relativos al
propio trabajador, por más que se haya ofrecido sobre todos los que el patrón está obligado a
conservar, pues no debe perderse de vista que lo que se busca con la prueba de que se trata, no
es acreditar cada uno de los elementos citados, sino que el nombre del actor se encuentra dentro
de alguno de los documentos a los que aluden las jurisprudencias 2a./J. 38/95 y 2a./J. 26/2004.
Estimar correcto el ofrecimiento para que el actuario dé fe de la categoría, jornada, fecha de
ingreso, salario o algún otro dato inherente al trabajador, sería obligar al patrón a exhibir
documentos respecto de cuya relación negó, lo cual sería ilegal en virtud de su postura defensiva
pues, al negarse el vínculo laboral, es lógico que el demandado no posea documentos del oferente
de la prueba.

TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA DE TRABAJO DEL PRIMER CIRCUITO.

Amparo directo 652/2019. 19 de septiembre de 2019. Unanimidad de votos.


Ponente: José Luis Caballero Rodríguez. Secretario: Víctor Raúl Camacho Segura.

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