Unidad 1 - Qué Es La Filosofía
Unidad 1 - Qué Es La Filosofía
Unidad 1 - Qué Es La Filosofía
1. DEFINICIÓN DE FILOSOFÍA
Por lo tanto, esta pregunta (¿qué es la Filosofía?) en verdad será respondida hacia el
final de nuestro curso. Allí nos podremos cuestionar: al fin y al cabo, ¿qué es esto que hemos
hecho durante el año? Para saber qué es Filosofía primero hay que filosofar. Esto implica que
la Filosofía es una vivencia. No basta con tener una idea sobre la Filosofía, sino que también
hay que vivenciarla. Sin embargo, como dijimos antes, debemos tener alguna certeza, algún
marco de referencia sobre qué es la Filosofía, que nos oriente por lo menos en qué es lo que
estudia, dónde debo poner el foco de atención.
Nos daremos cuenta de que no se puede encontrar una definición en la que estén todos
de acuerdo.
Uno podría intentar una definición tan general que abarcara a todos:
Filosofía es "aquello que hacen los filósofos". Pero también los filósofos comen,
insultan en la cancha, etc. Y no parece ser eso filosofía. Bueno, acotemos un poco la
definici6n:
Filosofía es "aquello que hacen los filósofos en cuanto filósofos". Pero igual necesitamos
una definición de filosofía para saber quiénes son los fil6sofos y que cosas hacen en cuanto
filósofos. La definición abarca a todos porque no dice nada.
Ahora bien, si los filósofos discuten entre ellos es porque algo en común hay, algo en
disputa, un objetivo común. Un físico y un músico no se pelean, porque no pretenden tener
nada en común, pero los filósofos sí. Todos pretenden lo mismo, pero ¿qué es lo que
pretenden? La explicación última de la realidad.
Cuando se acusan entre corrientes distintas de la filosofía, ¿de qué se acusan?
1. O de no ser lo suficientemente profundos
2. O de no abarcar todos los temas, de ser incompletos.
Entonces, de estas críticas, pueden verse dos características que debería tener la
filosofía:
1. Conocimiento de la realidad total.
2. Radical profundidad de ese conocimiento.
Una definición puede ser nominal o real. La nominal (que se refiere a la palabra) puede
ser entre otras etimológica (una especie de genealogía de la palabra: se busca su origen) La
real trata de describir la esencia de la cosa.
Etimológicamente filosofía viene del latín philosophia que a su vez viene del griego. Filo:
viene del verbo griego: filein que quiere decir: amar, y sopho. quiere decir sabiduría.
Etimológicamente, entonces, filosofía quiere decir "amor a la sabiduría"
La palabra aparece por primera vez con Pitágoras (570-405 aC), quien deseaba oponerse
a los sofistas o sabios. La palabra aparece, entonces, como actitud de humildad: "no somos
sabios, porque la sabiduría es propia de los dioses". Esta actitud de humildad es propia de
quien sabe que lo que ama lo supera y no lo puede poseer. Es una tensión constante hacia el
objeto amado. El filósofo no es dueño de la verdad, sino esclavo.
Según la etimología, entonces, la filosofía, más que un conocimiento es una actitud
moral. ¿Cómo puede el hombre hoy por hoy consagrar su vida a la Filosofía?
Sócrates preguntaba a sus discípulos: ¿amas la sabiduría? Sócrates es más filósofo por su
actitud (beber la cicuta) que por lo que dijo.
Pero también se llama filosofía al objeto del deseo filos6fico, a la sabiduría. Entonces, la
filosofía es una actitud, pero también la sabiduría misma.
La definición real que veremos, la clásica, apunta justamente a la sabiduría, no a la
actitud:
Conocimiento cierto de todas las cosas a la sola luz natural de la razón, explicadas por sus
causas primeras o últimas.
Conocimiento cierto:
Hay una ciencia que estudia lo que es [ente] en tanto que algo es y los atributos que, por sí
mismo, le pertenecen. Esa ciencia no se identifica con ninguna de las llamadas ciencias
particulares, pues ninguna de éstas se ocupa universalmente de lo que es, en tanto que es [al
ente en cuanto ente], sino que, después de haber deslindado alguna porción de él, estudia lo
que le pertenece accidentalmente por sí a esa cosa, tal como ocurre con las ciencias
matemáticas. Mas, puesto que buscamos los principios y las causas supremas, es evidente que
han de ser causas de alguna naturaleza por sí misma. Y, ciertamente, si también buscaban
estos principios quienes buscaban los elementos de las cosas que son, también los elementos
tenían que ser necesariamente elementos de lo que es. De ahí que también nosotros hayamos
de alcanzar las causas primeras de lo que es, en tanto que algo es. La expresión “algo que es”
se dice en muchos sentidos, pero en relación con una sola cosa y una sola naturaleza y no por
mera homonimia, sino que al igual que “sano” se dice en todos los casos con relación a la salud
—de lo uno porque la conserva, de lo otro porque la produce, de lo otro porque ésta se da en
ello— y “médico” [se dice] en relación con la ciencia médica (se llama médico a uno porque
posee la ciencia médica), y podríamos encontrar cosas que se dicen de modo semejante a
éstas, así también “algo que es” se dice en muchos sentidos, pero en todos los casos en
relación con un único principio: de unas cosas (se dice que son) por ser entidades, de otras por
ser afecciones de la entidad, de otras por ser un proceso hacia la entidad, o bien corrupciones
o privaciones o cualidades o agentes productivos o agentes generadores ya de la entidad, ya
de aquellas cosas que se dicen en relación con la entidad o bien por ser negaciones ya de
algunas de estas cosas ya de la entidad. Y de ahí que, incluso de lo que no es, digamos que es
“algo que no es”. Así pues, del mismo modo que de todas las cosas sanas se ocupa una sola
ciencia, igualmente ocurre esto en los demás casos. Corresponde, en efecto, a una única
ciencia estudiar, no solamente aquellas cosas que se denominan según un solo significado,
sino también las que se denominan en relación con una sola naturaleza: y es que éstas se
denominan también, en cierto modo, según un solo significado. Es, pues, evidente que el
estudio de las cosas que son, en tanto cosas que son, corresponde también a una sola
[ciencia]. Ahora bien, en todos los casos la ciencia se ocupa fundamentalmente de lo primero,
es decir, de aquello de que las demás cosas dependen y en virtud de lo cual reciben la
denominación [correspondiente]. Por tanto, si esto es la entidad [ousía], el filósofo deberá
hallarse en posesión de los principios y las causas de las entidades.
Metafísica, Libro IV, capítulo I, “La ciencia de lo que es en tanto que algo es” y capítulo II,
“La entidad, la unidad y sus clases. Los contrarios”, Madrid, Gredos, 1994.