La Creación
La Creación
La Creación
La teología cristiana afirma que el mundo creado es bueno, porque procede del querer
divino.
La creación del mundo y del hombre por Dios es un misterio de fe. No es el simple
resultado de una deducción empírica-racional. De hecho, la reflexión pagana clásica no
se planteó jamás directamente la cuestión de la procedencia del mundo y su razón de
ser. Los griegos se adherían firmemente a la idea de un cosmos eterno, permanente e
inmutable, a un ser de períodos cíclicos.
La verdad sobre la creación aparece revelada con claridad el la Sagrada Escritura (Gen
1,1) e incluida en el Credo. Este artículo de fe nos enseña:
Que existe un único Dios, causa soberana del mundo, cuyo impulso es el amor.
La correcta relación entre Dios y las creaturas.
A la luz de estas consideraciones podemos entender mejor la importancia decisiva que
tiene este tratado en el edificio de la doctrina cristiana. No es un simple prólogo neutro
de la historia de la salvación, sino que es parte de la historia salvifica. Allí se nos
revelan los atributos de Dios, el sentido del mundo, la vocación a la vida del hombre a
quien es entregada la tierra como morada y tarea hasta la consumación escatológica, el
gobierno del mundo por parte de Dios mediante su Providencia hasta su perfección
última
Creo en un sólo Dios Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la Tierra. Hace
alusión a Dios, como Creador del universo. Todopoderoso, significa que todo viene de
El. Creador de cielo y tierra; expresión que muestra que Dios es el Creador de todo el
Universo.
Antiguo Testamento
A- En Gen. 1, 1ss, se destaca claramente la idea de que Dios es el Creador del mundo y
que crea en el tiempo (en el sentido de que las creaturas no son eternas: tuvieron un
principio en el tiempo). La creación tuvo un comienzo absoluto In principio creavit
Deus ceolum et terram . Ninguna criatura es colaboradora de Dios en el acto creador. La
creación es un acto libre de Dios. Dios crea de la nada (ex nihilo) es decir, es Dios quien
por su palabra, por un acto libre y espontáneo de su voluntad, atrae (tira, saca) de la
nada el universo entero. La aparición del hombre culmina el acto creador. Después de la
creación del hombre Dios vio que era muy bueno: este adjetivo muestra la excelencia
del hombre. La creación no es un acto generativo. Dios creó el mundo por su palabra,
Dijo Dios y lo hizo. El acto creador es un acto personal, es Dios mismo quien opera en
la creación.
1) Fase de separación:
1º. día: Dios separa la luz de las tinieblas, es la creación del día y la noche. Desde este
momento, comienza el tiempo, antes existía sólo Dios en su eternidad.
2º. día: Dios separa las aguas superiores de las aguas inferiores, es la creación del agua
encima del firmamento y del agua de bajo del firmamento.
3º. día: Dios separa agua y tierra, es la creación de los océanos y el suelo. Surge pues el
aire, el agua y la tierra. Empiezan a crecer las hierbas y las plantas.
2) Fase de decoración:
4º. día: Dios crea los astros: sol, luna y las estrellas.
(A diferencia de las religiones paganas en las cuales Dios y los astros se confunden se
enumeran los cuerpos celestiales. Hay un único Dios Creador, las demás cosas son
criaturas.)
5º. día: Dios crea los animales, adorna los mares de peces y los aires de aves.
6º. día: Dios puebla la tierra, crea los animales domésticos y el hombre a su imagen, le
pone encima de todas las criaturas.
7º. día: Dios descansa.
B- Relato Yahvista
(Gen. 2, 4b-25), este relato empieza con la creación del hombre y lo presenta en dos
estados diferentes:
Gen. 2, 7, Dios crea el hombre con polvo, sopla en sus narices para darle el soplo de
vida, así el hombre deviene un ser vivo. El hombre no ha sido creado por la palabra de
Dios según este relato, sino que fue modelado con barro del suelo. La creación del
hombre y de la mujer es el inicio de la creación. La creación del hombre es una
participación del ser de Dios.
C- Los profetas:
Los profetas contribuyen decisivamente a hacer cada vez más explícita y a desarrollar la
fe en el misterio de la creación. Mención especial merecen los profetas del exilio, sobre
todo Jeremías (32,17;33,25-26) y el Deutero Isaías (Is 40 ss), que presentan a Yahvéh
como Creador y Salvador al mismo tiempo. El Creador todopoderoso del mundo de
también autor compasivo de la Alianza con el pueblo elegido y, a través de éste, con
toda la humanidad. La doctrina de la Creación y sus consecuencias se hace ahora un
mensaje claramente universalista.
En los libros de los proverbios se relata la creación como obra divina en su aspecto
objetivo: se destaca su orden y su racionalidad. Es considerada como una obra
magnífica (Prv. 3, 19-20; 8, 31-32). Pasa a un segundo plano su aspecto histórico-
salvífico.
E- 2 Macabeos 7, 28:
Dios crea el mundo de la nada. Hay una relación entre creación y escatología. Dios es
Consumador por ser Creador y es Creador por ser Consumador. El misterio de la
creación es en definitivo un estímulo para la confianza en Dios y una prueba de la
fidelidad divina a la Alianza.
Creación en el N. Testamento
A- Evangelios sinópticos:
La predicación de Jesús acerca del Reino de Dios, que llega con El, arranca de la fe
bíblica en Dios Creador. Esta resulta tan evidente en el ambiente religioso judío, que
Jesús no necesita insistir en ella. Aún así, Jesús acude expresamente a la doctrina de la
Creación en diversas ocasiones manifestando que es la Creación un hecho fundamental.
Mc. 10, 6: Al principio del mundo Dios les hizo varón y hembra.
Mt. 6, 25_30: Jesús pide a los judíos que no se preocupen de su vida, de lo que
comerán, ni por su cuerpo, con qué se vestirán. Porque Dios, Creador del universo,
Padre celestial les nutrirá. Dios ejerce su providencia sobre todo lo que ha creado
(criaturas sensibles y los hombres)
C- San Pablo:
1Cor. 10, 26: S. Pablo dice que hay que comer de todo, porque todo viene de Dios.
Predica así que Dios es el Creador del mundo. Sólo existe un único Dios Creador (1Cor.
8, 5). Dios creó el mundo por medio de su Hijo Cristo (1Cor. 1, 15-20).
Rom. 4, 17: Dios ha creado el mundo de la nada, y ha dado existencia a todo lo que no
existía.
Rom. 8, 20-21: La creación fue sometida a la vanidad en la esperanza de que será
liberada. La creación toda entera sufre. S. Pablo nos presenta una creación que no
encuentra la plenitud en este mundo. Hace alusión a Jesucristo y muestra su función en
la creación en cuanto segunda Persona de la Trinidad.
LA CREACION EN EL MAGISTERIO
Por quien todas las cosas fueron hechas, Dios crea el mundo por medio de su Hijo.
Crea Dios al comienzo de los tiempos. Antes no había nada, con la creación empieza el
tiempo. Dios creó el mundo de la nada. Crea las creaturas espirituales y corporales. Dios
Creó todo bueno. El mal no ha sido creado por Dios, por que Dios creó el mundo
ordenado y en armonía. El mal entró en el mundo por la causa del hombre (pecado).
V) Concilio Vaticano I
(1869-1870): Afirma que Dios es el Creador del universo. Dios es perfecto, inmóvil,
inmortal, creó el mundo no por adquirir perfecciones, sino para que las criaturas
participen a su perfección (repartir su perfección a las criaturas). Condena los errores
modernos que niegan la existencia de Dios (ateísmo materialista, y panteísmo: Dios y
las cosas tienen una misma substancia); los que aceptan a Dios pero no admiten su
libertad creadora y su intervención en el mundo (deísmo);
VI) C.V.II.
1962-1965: Tres personas divinas son autor de la creación. El mundo fue creado bueno
por que Dios es Bueno y de El nada malo puede salir. La actividad del hombre debe
llevar a la perfección la obra creadora de Dios.
I - El acto creador:
La idea cristiana de creación es una idea precisa y bien determinada. Se refiere al acto
creador por el que Dios produce la totalidad de lo que existe. No hablamos ahora por
tanto de Creación como efecto o producto de ese acto creativo divino (lo haremos en
16.4). Nos ocupamos en este momento del acto creador, o creación activa.
Noción: la Creación se puede definir como la producción del ser entero de las cosas o la
producción de las cosas según toda su sustancia. En el acto creativo, Dios produce lo
que existe en cuanto que existe. Dado que lo que existe es tal en virtud del acto de ser,
que es perfección de toda perfección en todo individuo existente, producir lo que existe
en tanto que existe significa producirlo totalmente.
La creación activa puede definirse también como la emanación de todo el ser, realizada
por Dios. Emanación equivale aquí sencillamente a producción u originación. Lo que
emana en virtud del acto creador e toso el se, es decir, no este ser concreto. Si fuera así,
estaríamos en presencia de una generación.
Ser creatura significa poseer el esse participado, limitado por la esencia que lo recibe.
Dios, en cambio, no "posee" el esse, el ES el ESSE subsistente.
S. Agustín: No puede haber una criatura creadora, ni los ángeles, ni las demás criaturas.
S. Tomás dice que entre el efecto y la causa debe haber una proporción, por lo tanto, si
el efecto es universal la causa debe ser universal. Es necesario que la creación sea
producida por Dios porque sólo Dios es el Ser total que existe por sí mismo, el Ser
absoluto. Dios no puede crear a través de un ser finito porque crear es pasar del no-ser al
ser, lo cual requiere una potencia infinita.
b) Creación obra de la Trinidad:
Como toda actividad de Dios hacia afuera (ad extra) la creación es un acto libre de Dios,
y común por lo tanto a las tres Personas divinas.
El concilio II de Constantinopla (a. 553) afirma:"Un solo es Dios y Padre, de quien todo
procede; y un solo Señor Jesucristo, por quien todas las cosas han sido hechas; y un solo
Espíritu Santo, en quien todas las cosas existen".
Argumento teológico: así razona Santo Tomás: "Crear, es decir, producir el ser de las
cosas, conviene a Dios por razón de su ser, que es su misma esencia, la cual es idéntica
en las tres divinas Personas. Por consiguiente, crear no es principio de alguna Persona,
sino algo común a toda la Trinidad" (S.Th.1,45,6.).
LOS ÁNGELES:
Sagrada Escritura: a)AT: Los ángeles aparecen a lo largo de toda la historia salvifica, y
no solo después del destierro: se les designa en grupo (Gn. 28,12; 32,2-3;Jb 1,6), se
habla del "ángel de Yahvé (Gen 16,57, 22,11). Otros textos: Dn 10,13 (Miguel); Dn
8,16 (Gabriel); Tob 12,15 (Rafael); Gn 3,24 (querubines); Is 6,2 (serafines). En el N.T.
se llega al máximo de la revelación angélica: forman la corte de Dios, están presentes en
la tierra con mayor frecuencia (Anunciación, Zacarías, San José, etc.), se ve claramente
su subordinación a Cristo y su función de mediadores, así como la distinción entre los
ángeles buenos y los demonios, la limitación de su ciencia (desconocen la fecha del
juicio final), su posesión de la visión beatífica, etc.
La Tradición, en general, deja claro que no son "diosecillos", sino criaturas, y que hay
ángeles buenos y malos. Mas confuso es el tema de su perfecta espiritualidad. Fue Santo
Tomás el gran constructor de la teología angélica.
Quiénes son los ángeles: San Agustín dice respecto de ellos: "El nombre de ángel indica
su oficio, no su naturaleza. Si preguntas por su naturaleza, te diré que es un espíritu, si
preguntas por lo que hace, te diré que es un ángel". Con todo su ser, los ángeles son
servidores y mensajeros de Dios. Porque contemplan "constantemente el rostro de mi
Padre que está en los cielos (Mt 18,10), son "agentes de sus órdenes, atentos a la voz de
su palabra".
D. José Morales resume así "la doctrina definida solemnemente por la Iglesia en torno a
los ángeles". "Abarca cinco afirmaciones principales: a) los ángeles existen; b) son de
naturaleza espiritual; c) fueron creados por Dios; d) fueron creados al comienzo del
tiempo; e) los ángeles malos o demonios fueron creados buenos, pero se pervirtieron por
su propia acción". (" El misterio de la creación", EUNSA,1994, pag 202).
HOMBRES
Las verdades reveladas acerca de la naturaleza y origen del hombre podemos resumirlas
en las siguientes:
1- El hombre es creatura.
2- Tiene una especial dignidad, es "imagen y semejanza" de Dios, lo cual lo constituye
en rey de la creación. Esa dignidad radica en estar dotado de inteligencia y voluntad.
3- es un ser a la vez corporal y espiritual, como totalidad ontológica querida por Dios.
El alma y el cuerpo se unen de tal manera que resulta una nueva naturaleza que es
persona.
4 - Nuestros primeros padres, en cuanto al alma, fueron hechos por Dios de la nada; en
cuanto al cuerpo, fueron hechos con una intervención especial de Dios. El alma de cada
hombre es creada inmediatamente por Dios cuando es infundida en el cuerpo.
4- Es sociable por naturaleza
5- Todo el género humano procede de una sola pareja.
6- La diferenciación de sexos es querida por Dios. Existe igualdad esencial entre varón
y mujer, y diferencia funcional.
7- Ha sido creado con la vocación de trabajar el mundo.
SERES MATERIALES
La condición fundamental de las cosas es que éstas no son naturaleza entendida como
algo último y supremo, sino creación, es decir, obra divina.
1º.) Las cosas creadas, por proceder de Dios según el conocimiento e intelección
divinos, poseen una naturaleza específica e inteligibilidad. Dado que Dios crea de
acuerdo a un designio divino inteligente, podemos hablar de la realidad como
susceptible de penetración intelectual.
2º.) Pero hay que afirmar a la vez que la mente humana es incapaz de penetrar
completamente la realidad, porque esta ha sido ideada y producida por un intelecto
mayor que el nuestro y posee entonces un carácter misterioso e inabarcable.
3º.) La contingencia de las creaturas nos habla de una voluntad libre creadora. Esa
voluntad divina origina en las cosas la bondad como aspecto esencial de su ser.
Ahondaremos en este tema en el próximo apartado.
"Salida de la bondad divina, la creación participa de esa bondad (y vio Dios que era
bueno...muy bueno": Gn 1,4.10.12.18.21.31). Porque la creación es querida por Dios
como un don dirigido al hombre, como una herencia que le es destinada y confiada, la
Iglesia ha debido, en repetidas ocasiones, defender la bondad de la creación,
comprendida la del mundo material (cf DS 286;455-463;800;1333; 3002)." (Cat. de la
Igl. Cat. n¼ 300).
La teología cristiana afirma sin ambages que el mundo creado es bueno, porque procede
del querer divino. Pero la afirmación neotestamentaria no menos importante es que, a
causa del pecado, el mundo se encuentra como en poder del Maligno (Jn 5,19). Esto
explica que las muchas implicaciones y consecuencias contenidas en la primera idea
hayan sido desarrolladas con gran lentitud por los teólogos de la Iglesia. (Se puede
consultar la evolución de tales explicitaciones en el libro de José Morales "El Misterio
de la creación", pag 299-302).