Apunte 1 RASSIGA
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1. Introducción
Actividad en el aula:
Antes de comenzar con el desarrollo de los temas y con la finalidad de testear
conocimientos previos y favorecer el intercambio de opiniones, se propone a los alumnos
dar respuesta a las siguientes preguntas:
¿Qué entiende por economía y por economía de mercado?
¿Qué percepción tiene de la economía y en particular de la economía de mercado?
¿Qué problemas económicos debe resolver la economía como ciencia?
¿Considera que la economía es importante en las ciencias humanistas?
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Cátedra de Elementos de Economía. Apuntes de clase. Fernando Rassiga. Versión preliminar, no citar.
sociales elevados en el sentido que buscan vivir en un mundo mejor, más inclusivo y
sustentable y perciben que el sistema actual no resuelve los problemas sociales que
enfrenta. Asimismo, este colectivo de estudiantes desarrolla la capacidad de comprender
los fenómenos sociales y humanos a partir del pensamiento abstracto y el razonamiento
verbal. Así, es frecuente observar cierta aversión por la economía como disciplina porque
utiliza modelos matemáticos para explicar los fenómenos económicos; incluso cuestionan
su utilidad en la vida profesional. Por lo tanto, antes de comenzar debemos comprender
por qué es importante la economía en las ciencias humanistas y por qué se utilizan
modelos matemáticos.
Si bien muchos profesionales de carreras humanistas sólo desarrollan tareas de
investigación y didácticas, otros pueden acceder o tener aspiraciones de acceder a cargos
jerárquicos o dirigenciales. La responsabilidad de gestión en cualquier ámbito implica
tomar decisiones sobre la administración de recursos escasos en pos de alcanzar ciertos
objetivos y esto es, en sí mismo, un problema económico que se plantea y se resuelve
con métodos económicos, independientemente de la experiencia y la pericia del decisor.
De la misma manera, el apoyo político que requiere un dirigente para obtener recursos e
implementar medidas que modifiquen un contexto se logra mediante argumentos
convincentes (no necesariamente veraces) que en muchos casos tienen base económica.
Así por ejemplo, preguntas como: ¿cuál debe ser el rol del Estado en la educación?, ¿la
educación debe ser pública, obligatoria y gratuita o bien privada, voluntaria y rentada?,
¿cómo, cuánta y para quién brindar educación? encuentran respuestas en la economía.
4. Definición
La economía es una ciencia que intenta explicar el comportamiento de los individuos, las
organizaciones y las sociedades respecto a sus decisiones de producción, distribución y
consumo, frente a situaciones de escasez; y el impacto que las mismas tienen sobre la
productividad del trabajo, el crecimiento económico, la distribución del ingreso y el
bienestar individual y general. Asimismo, analiza los diferentes enfoques que intentan
resolver el problema económico de asignar recursos materiales y financieros escasos
para brindar bienes y servicios que satisfagan las necesidades individuales y colectivas,
en pos de maximizar el bienestar social.
La economía puede ser abordada con un enfoque positivo, o bien con un enfoque
normativo. Desde lo positivo se busca dar explicaciones objetivas de los fenómenos
económicos. Así, se establecen proposiciones del tipo “si se dan tales circunstancias,
entonces tendrá lugar tales acontecimientos”. Generalmente se utilizan modelos para
explicar o predecir lo que es o lo que podría suceder bajo determinadas situaciones. Por
ejemplo, se puede explicar la pronta recuperación de Europa en la posguerra, en parte,
por la elevada educación de su población. También podríamos predecir que la
competitividad internacional de un país y su tasa de crecimiento aumentarían si se
invirtieran más recursos en educación, capacitación y adiestramiento de la mano de obra.
Por otra parte, el enfoque normativo ofrece prescripciones o recetas para la acción
basadas en juicios de valores personales y subjetivos, que responden a criterios éticos,
ideológicos o políticos y no necesariamente a razonamientos científicos. Lo normativo se
ocupa de lo que debería ser. Por ejemplo, alguien puede sostener que un país es más
justo en la medida que todos sus individuos reciban bienes y servicios de acuerdo con sus
necesidades y aporten recursos de acuerdo con sus capacidades. Así, propondrá
acciones tendientes a redistribuir recursos desde los sectores de mayores ingresos a los
de menos ingresos, con la finalidad de igualarlos. Otro individuo, en cambio, puede
sostener que un país es más justo en la medida que todos sus habitantes reciban las
mismas oportunidades para desarrollarse. Éste propondrá acciones que cubran las
demandas necesarias para el desarrollo de los ciudadanos considerando la restricción de
recursos disponibles para no comprometer el desarrollo de las generaciones futuras.
Estas acciones a la larga conducirán a diferencias en la distribución del ingreso.
5. Micro y macroeconomía
6. Aspectos metodológicos
Para explicar los fenómenos observados y hacer predicciones, la economía, como otras
ciencias, desarrolla teorías sobre el comportamiento de los agentes económicos a partir
de un conjunto de preceptos y supuestos básicos. Así, por ejemplo tenemos la teoría del
consumidor que explica las decisiones de consumo, esto es: qué y cuánto consumir de
cada bien, dado el nivel de ingreso, las necesidades y preferencias de las familias o los
individuos y los precios de los bienes. Por otra parte, las decisiones de producción, que
implican qué, cuánto, cómo y con qué producir, dado los precios de los bienes y lo
recursos productivos, se explican con la teoría de la empresa o de la producción.
Luego, aplicando ciertas técnicas, se construyen modelos a partir de las teorías. Los
modelos son expresiones matemáticas que se emplea para hacer predicciones
cuantitativas y eventualmente tomar decisiones. Una teoría o un modelo son válidos
cuando las predicciones derivadas del mismo son coherentes con la evidencia,
independientemente de que realice o no una descripción completa del fenómeno que
pretende explicar o que los supuestos empleados sean o no realistas. A su vez, cuanto
más simple sea el modelo, siempre que sea válido de acuerdo con sus predicciones, más
útil es, porque se requiere menos información para aplicarlo.
Cabe destacar que los modelos que vamos a desarrollar en este curso son modelos
neoclásicos. La economía neoclásica no se tiene que entender como una posición
ideológica, pro-mercado, como generalmente se la interpreta, sino como un enfoque
metodológico que incorpora el análisis marginalista (curvas de oferta y demanda) a la
teoría clásica, con la finalidad de resolver los problemas de asignación de recursos
escasos entre diferentes alternativas, aceptando el individualismo metodológico (supuesto
de racionalidad y egoísmo) y la teoría del valor subjetivo.
Hoy todas las escuelas de economía, y al hablar de escuelas podemos hablar de
posiciones ideológicas, han adoptado en mayor o menor medida el enfoque metodológico
neoclásico para analizar los problemas económicos y proponer soluciones. Todas usan,
por ejemplo, el modelo de mercado con una función de demanda con pendiente negativa.
Con esto queremos decir, que los modelos que vamos a ver en este curso nos permiten
analizar la posición de todas las escuelas en cuanto a la explicación de las causas de los
problemas económicos y las soluciones.
Se entiende por escuelas de pensamiento económico a los diferentes enfoques con los
que se intenta explicar el comportamiento de los agentes económicos (familias, empresas
y gobierno) y sus consecuencias sobre la economía en general. Las escuelas han
aportado a lo largo de la historia explicaciones sobre diferentes problemas económicos y
alternativas de solución. No todas las escuelas son contemporáneas entre sí, sino que
algunas han evolucionado a partir de los desarrollos de otras. Varias están
intelectualmente enfrentadas.
A riesgo de caer en un reduccionismo, podríamos agrupar a las actuales escuelas del
pensamiento económico en tres grandes categorías de acuerdo con la posición que
toman respecto de cuál debe ser la función del estado en la economía.
Un primer grupo, que podríamos llamar escuelas liberales e incluye como principales
exponentes a la austríaca y la monetarista, confía en el mercado como mecanismo de
distribución y asignación de recursos y limita el rol del estado al de hacer cumplir las leyes
y proteger la propiedad privada. Alguna de ellas acepta además la intervención estatal
sólo para solucionar fallas del mercado, como proveer bienes de carácter público y evitar
pérdidas de eficiencia por ejercicio del poder de mercado. En el plano macroeconómico,
algunas están en contra de toda política económica implementada por el gobierno porque
profundiza los ciclos y afecta negativamente la distribución del ingreso; otras sostienen
que la política económica no debe ser discrecional sino previsible y estable.
En el otro extremo podemos identificar la escuela socialistas, entre ellas, el socialismo
utópico con sus principales exponentes Fourier, Saint-Simon y Owen) y el socialismo
científico o marxista que recoge las ideas plasmadas en la obra de Karl Marx: El Capital.
Marx observó contradicciones en el sistema de producción y acumulación capitalista que
lo llevó a predecir su colapso y posterior reemplazo por un régimen social basado en la
propiedad colectiva, donde se aboliría la propiedad privada y se reemplazaría el
mecanismo de mercado como sistema de asignación y distribución de recursos por un
sistema de planificación centralizada donde el estado decide qué, cómo, con qué y para
quién producir, con la finalidad de alcanzar la igualdad de ingresos entre los individuos y
evitar las crisis económicas.
Entre ambas, se encuentra el grupo escuelas que denominaremos “intervencionistas”, que
incluye la escuela keynesiana y la estructuralista latinoamericana, entre otras. Estas
escuelas proponen que el Estado además de solucionar fallas del mercado, realice
políticas económicas discrecionales para alterar la distribución del ingreso y la marcha de
la economía. Algunas proponen además intervenir y regular los mercados sean o no
competitivos, proteger a la industria nacional de la competencia internacional aplicando
barreras al comercio y hacer política industrial dirigida para desarrollar algunos sectores
industriales en detrimento de otros.
Las escuelas liberales e intervencionistas son compatibles con un sistema de
organización económica capitalista de mercado con mayor o menor participación estatal.
La escuela marxista, en cambio, implica la propiedad y administración colectiva o estatal
de los medios de producción, recurriendo a la planificación centralizada como mecanismo
de asignación y distribución de los recursos.