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Estructura, Clasificación y Codificación Del Plan de Cuentas

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ESTRUCTURA, CLASIFICACIÓN Y CODIFICACIÓN:

La estructura de los planes de cuenta sigue los lineamientos de cualquier


catálogo contable; es decir, está conformado por una lista de los nombres de
las cuentas que identifican a cada uno de los componentes de los estados
financieros, distinguiéndose entre estos: los activos, pasivos, patrimonio,
ingresos, costos y gastos, junto con una numeración o codificación apropiada
para cada cuenta.

La codificación del Plan de Cuentas está estructurada sobre la base de los


siguientes niveles:

 Grupos: son la categoría más amplia y general de un plan de cuentas.


Hacen referencia al activo, pasivo, patrimonio neto, ingresos y egresos
de determinado ente económico. 
 Subgrupos: son las categorías en las que pueden descomponerse los
grupos, como el activo corriente o el activo no corriente.
 Cuentas: aquí hablamos propiamente de los apartados que componen
los subgrupos. Por ejemplo, “Efectivo, caja y bancos” es parte del activo
corriente que, a su vez, pertenece al grupo activos.
 Subcuentas: hacen referencia a cada uno de los elementos que
componen una cuenta.
 Auxiliares: que son los elementos detallados que conforman una
subcuenta y hacen más sencillo el registro y sistematización de las
operaciones económicas.

La estructura va de lo más general a lo más específico, como se puedo ver


anteriormente, con el fin de cumplir con los requisitos descritos por mi
compañera hace un momento.

En este sentido, la clasificación de las cuentas contables podría hacerse de la


siguiente manera:

1. Grupo 1: tenemos los activos que son todos los bienes, inversiones y


derechos que tiene la empresa. Los activos que una empresa posee se
clasifican dependiendo de su liquidez, es decir, la facilidad con la que
ese activo puede convertirse en dinero. Por ello se dividen en:
a. Activo fijo o no corriente: Son los activos utilizados en el
negocio y no adquiridos con fines de venta, como maquinarias y
bienes inmuebles
b. Activo circulante o corriente: Son activos que se esperan que
sean utilizados en un periodo inferior al año, como las existencias.

2. Grupo 2: tenemos los pasivos que representan las deudas y


obligaciones de la empresa. Los pasivos deben clasificarse como: Pasivos
circulantes o de corto plazo, pasivos a largo plazo y Otros pasivos.
 Pasivos circulantes o a corto plazo: Son aquellas obligaciones
que deben cancelarse en un plazo menor a un año. En el
balance, deben ubicarse en el orden de su exigibilidad:
 Obligaciones bancarias
 Cuentas por pagar a proveedores
 Otras cuentas por pagar
 Prestaciones sociales por pagar
 Impuestos por pagar
 Asignaciones a proyectos

Pasivo fijo o a largo plazo, en esta categoría se ubican las


obligaciones que deben cubrirse en un plazo mayor a un año.
 Documentos por pagar
 Cuentas por pagar
 Asignaciones a proyectos
Otros pasivos: se refiere a los pasivos que no se clasifican como
pasivos corrientes, ni como a largo plazo, tales como: préstamos sin
interés y alquileres o arrendamientos cobrados por anticipado.

3. Grupo 3: tenemos el patrimonio que es la parte residual de los


activos una vez deducidos todos los pasivos e incluye las aportaciones
realizadas, ya sea al momento de la constitución o en momentos
posteriores, así como los resultados acumulados y está formado por
las siguientes cuentas:
 Capital social (que son las aportaciones de los socios).
 Reserva legal: es la parte obligatoria de los beneficios que se deben
acumular. No se puede disponer salvo compensación de ejercicios
negativos. Es decir, según la Ley de Sociedades de Capital el 10% de
nuestros beneficios deben ir destinados para la reserva legal, la cual
deberá tener un tamaño del 20% del capital social.
 Utilidades retenidas o acumuladas:  hacen referencia a una parte de
las ganancias que se reserva exclusivamente para la empresa. Así, son
los ingresos netos de una empresa después de haber contabilizado y
descontado las ganancias de los socios y accionistas (dividendos). Este
monto se da a conocer al final de un período contable. Si estas resultan
en una acumulación positiva, se estará hablando de una buena actividad
comercial. También puede ser negativa si hubo pérdidas que superaron
el monto de las utilidades retenidas.
 Utilidad (o perdida del ejercicio): La utilidad está definida como el
resultado del ingreso total menos los gastos totales, por lo que se trata
de la cantidad de dinero que una empresa “hace” durante un
período contable determinado. ... Por otro lado, si la utilidad es negativa
se considera como pérdida.
4. Grupo 4: tenemos los ingresos. Se denomina ingreso al incremento de
los recursos económicos que presenta una organización, una persona o
un sistema contable, y que constituye un aumento del patrimonio neto de
los mismos. Este término se emplea con significados técnicos similares
en distintos ámbitos del quehacer económico y administrativo.

Por ejemplo, el total que una empresa recibe por la venta de


sus productos se llama ingreso, pero también el total de las rentas
recibidas por los ciudadanos de una nación se llama igual. Es decir que,
dependiendo del sentido específico, el ingreso puede ser una variable
considerada a la hora de medir el desempeño económico y financiero, o
bien a la hora de diseñar planes contables y administrativos.

5. Grupo 5: tenemos los costos. El costo o coste es el gasto económico


que representa la fabricación de un producto o la prestación de un
servicio. Los costos tienen una amplia clasificación, entre ella podemos
destacar:

6. Grupo 6: tenemos los gastos que son las salidas o erogaciones en que
se incurre con el fin de mantener la empresa en funcionamiento. Es
decir, hace referencia al consumo de un bien o la expiración de un costo
con el fin de obtener ingresos. Los gastos producen doble circulación
económica debido a que al mismo tiempo que sale dinero (egreso), se
ingresa un bien, un producto o un servicio con lo cual se recupera el
desembolso inicial. Dentro de este grupo podemos encontrar lo que son:
a. Los gastos fijos: es un coste de empresa que no varía con los
volúmenes de producción. Los gastos fijos incluyen a menudo el
alquiler, acuerdos contractuales o licencias que son necesarios
para que el negocio pueda operar, los cuales no cambian de
precio en caso de que la producción crezca o disminuya. Estos
costes están vinculados a la duración del contrato o del
calendario de pago.
b. Gastos variables: en cambio de los gastos fijos, los gastos
variables son aquellos que sí que están directamente
relacionados con el volumen de producción y/o ventas de tu
empresa. Esto significa que, a medida que la producción y las
ventas aumentan, también lo hacen este tipo de gastos. Entre
estos podemos encontrar las comisiones de ventas, el costo de
las materias primas, los gastos de servicios públicos, etc.

Todo esto es solo un pequeño esquema de cómo se estructura, clasifica y


codifica un plan de cuentas contable. La extensión, densidad y complejidad del
mismo dependerá del tamaño de la empresa y la magnitud de operaciones que
realice en el período. No podemos olvidar que, para la asignación de las
cuentas a cada uno de los subgrupos, debemos tener claro la naturaleza de
cada uno de los mismos.

Es importante complementar el plan de cuentas con un manual de cuentas que


presente las instrucciones pertinentes para su lectura y utilización, facilitando
así el registro y análisis posterior.  

En la actualidad, los softwares contables más completos traen incorporado un


plan de cuentas estructurado bajo los más altos estándares de calidad. Así,
solo debemos preocuparnos por ingresar los datos correspondientes a cada
transacción, ya sea a nivel de las subcuentas o a nivel de las auxiliares.
El catálogo tiene las siguientes características: 

1. Sistematicidad en el ordenamiento.
2. Flexibilidad suficiente para permitir la incorporación de nuevas cuentas
cuando sea necesario.
3. Homogeneidad en los agrupamientos de las cuentas.
4. Claridad en la terminología utilizada. 

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