Cervera - El Galeón de Manila
Cervera - El Galeón de Manila
Cervera - El Galeón de Manila
Resumen Abstract
El Galeón de Manila, o Nao de China, constituyó The Manila Galleon, or Nao de China, was the
la ruta transpacífica más importante entre los most important transpacific route between the
siglos xvi y xix. La ciudad de Manila se convirtió 16th and the 19th centuries. The city of Manila
en el lugar donde numerosas mercancías chinas y became the place where commodities from China
de otros países asiáticos eran intercambiadas por and other Asian countries were exchanged for
plata americana y donde se embarcaban rumbo a American silver. These goods were loaded and sent
Acapulco, desde donde se distribuían después al to Acapulco, from where they were distributed
resto de la América hispana y a Europa. El presente to the rest of Hispanic America and Europe. This
artículo aporta una visión panorámica de la historia paper provides a panoramic vision of the history
de esta ruta transpacífica. Además de servir de of this transpacific route. In addition to serving as
estado del arte de las investigaciones que se han a state of the art of the current research about this
llevado a cabo acerca del tema, se realiza un enfoque topic, a comprehensive approach is carried out by
integral al incluir, no sólo el tráfico de mercancías, including not only the traffic of goods, which most
en el que se ha centrado la mayoría de los autores, authors have focused on, but also the movements
sino también los movimientos de personas e ideas, of people and ideas, as well as the regulations for
así como las regulaciones al comercio y la distribu- trade and distribution among the main actors of
ción entre los principales actores de las ganancias the profits extracted from this transpacific journey.
extraídas de este viaje transpacífico. El acento en The exchange of texts and ideas between both sides
el intercambio de textos e ideas entre ambos lados of the Pacific Ocean is emphasized in this paper.
del Pacífico constituye uno de los puntos más no-
vedosos de este artículo.
Palabras clave: Galeón de Manila, océano Pacífico, Keywords: Manila Galleon, Pacific Ocean, New
Nueva España, Filipinas, siglos xvi-xviii Spain, Philippines, 16th-18th centuries
Introducción
Durante dos siglos y medio, la ruta del Galeón de Manila o Nao de China
constituyó un puente entre los continentes asiático y americano. México
quedó “en el centro del mundo”,2 al situarse el virreinato novohispano en una
posición clave entre Europa y Asia. Este texto pretende ser un breve relato
sobre el establecimiento de esta ruta transoceánica, así como de su papel para
el intercambio de mercancías, personas e ideas, como expone el título, entre
ambas orillas del Pacífico.
El reino de Castilla buscó la ruta a Asia cruzando el océano Atlántico desde
la época de los Reyes Católicos. A pesar de la llegada al nuevo continente ame-
ricano, los españoles no dejaron de soñar con llegar a las ricas tierras del mítico
Cathay, así como a las islas de la Especiería –como se conoció a las Molucas–,
de donde provenían las especias más preciadas en los mercados europeos. Du-
rante el siglo xvi hubo varias expediciones castellanas a Asia Oriental. Las dos
primeras partieron de España (la protagonizada por Fernando de Magallanes
y Juan Sebastián Elcano, que partió de Sanlúcar de Barrameda en septiembre
de 1519 y llegó a Filipinas en 1521; y la dirigida por García Jofre de Loaisa, que
partió de La Coruña en julio de 1525 y llegó a Filipinas y las Molucas a finales
de 1526). Las siguientes expediciones (dirigidas por Álvaro Saavedra Cerón,
1527; Hernando Grijalva, 1537; y Ruy López de Villalobos, 1542) partirían
ya desde el virreinato de la Nueva España. Sería la expedición comandada por
Miguel López de Legazpi, que partió del puerto de la Navidad en noviembre
de 1564, la que llegaría a establecer un asentamiento español permanente en
el archipiélago filipino, concretamente en Cebú, en abril de 1565. El nieto de
Legazpi, Felipe de Salcedo, junto con el fraile agustino Andrés de Urdaneta,
consiguieron encontrar el tornaviaje o ruta de navegación de Filipinas a Nueva
España. El derrotero que siguieron se dirigió primero hacia el norte, bordeando
Japón. A unos 38 o 40 grados de latitud Norte, entraron en la corriente de
Kuroshivo, que los llevó en dirección Este hasta la costa americana a la altura
de California, para ir costeando después hacia el Sur hasta llegar al puerto de
2. A principios del siglo XVII, Bernardo de Balbuena se refería a México en su poema Grandeza
Mexicana de la siguiente forma: “en ti se junta España con la China, / Italia con Japón y, finalmente,
/ un mundo entero en trato y disciplina; // en ti de los tesoros del poniente / se goza lo mejor; en ti,
la nata / de cuanto entre su luz cría el oriente” (Balbuena, 1604/2014, p. 223).
3. La historia de las expediciones hispanas a Asia Oriental del siglo XVI, así como el viaje de Legazpi-
Urdaneta, ha sido suficientemente estudiada por los investigadores. Destacan, entre otros, los
libros de Gil (1989), Bernabéu (1992), Molina (1992), Rumeu de Armas (1992), Hidalgo (1995), así
como dos obras colectivas, que contienen la aportación de numerosos investigadores filipinólogos
que se dedican actualmente a este tema: Truchuelo (2009) y Barrón (2012).
4. Esa indefinición aparece explícitamente en una carta de Legazpi, escrita en julio de 1570, donde el
“Adelantado” y primer gobernador de las Filipinas pregunta al virrey de la Nueva España si debe
permanecer en Cebú, en el caso de que se pretenda llegar a las Molucas, o bien establecerse en
Manila, si lo que se quiere es llegar a la costa china. La carta se encuentra en el Archivo General
de Indias (Patronato, 24), y está reproducida en: http://www.upf.edu/asia/projectes/che/s16/
lega1570.htm
5. El traslado de la “capital” filipina de Cebú a Manila indica que prevalecieron las pretensiones
sobre China, en lugar de la conquista de las islas de la Especiería. Este hecho, fundamental para la
posterior historia de Filipinas, hoy es aceptado por la mayor parte de los investigadores, tales como
Ollé (2002, p. 46), Folch (2008, p. 45) y Sánchez (2009, p. 624).
6. Este episodio es relatado por el propio Legazpi en una carta dirigida al virrey novohispano y fechada
en Manila el 11 de agosto de 1572 (AGI, Patronato, 24, reproducida en: http://www.upf.edu/asia/
projectes/che/s16/lega1572.htm).
7. Dos obras colectivas recientes que estudian el Galeón de Manila, sobre todo desde el punto de vista
económico y cultural, son la de Bernabéu (2013) y la de Bernabéu y Martínez Shaw (2013).
8. Dos libros que dan una buena información general sobre la historia de la Iglesia en Filipinas y el
papel que jugaron las órdenes religiosas en la evangelización y en la vida cultural, educativa y social
del archipiélago, son los de Gutiérrez (1992) y Moffett (2005).
9. Una obra que reúne buena parte de los documentos originales relacionados con Urdaneta y Rada es
la compilación de Rodríguez (1978, vols. 13 y 14).
10. Para la vida y obra de Rada, véanse Folch (2008) y Cervera (2013, pp. 136-203).
11. Miguel de Loarca fue uno de los soldados que acompañó a Rada en su viaje a China. Igual que Rada,
escribió una Relación sobre ese viaje que sería utilizada por el agustino Juan González de Mendoza
(1545-1618) para escribir su libro Historia del Gran Reino de la China, publicado por primera vez
en 1585. La obra de Mendoza sería traducida a varios idiomas antes de 1600 y se convertiría en la
principal fuente de conocimiento sobre China en la Europa de su época. Para un estudio sobre la
Historia del Gran Reino de la China, véase Sola (2016).
Ellos tienen aqui en Manila junto al rio vn Mercado que llaman Pariàn, que es
vna grande quadra de portales, en medio de los quales quatro paños esta vna
balsa de agua grande con vna puente al rio, por donde entra y sale el agua, aqui
12. Para la historia de la llegada de los franciscanos a Filipinas, véanse Sánchez y Fuertes (1979) y
Morales (2008).
13. La mejor obra para conocer la llegada de los dominicos a Filipinas es la crónica de uno de los
primeros miembros de la orden en el archipiélago, Diego Aduarte (1640/1962).
14. Me refiero al Bian Zhengjiao Zhenchuan Shilu 辨正教真傳實錄, que se podría traducir como
Auténtico registro de la discusión de la verdadera propagación de la Religión Ortodoxa. Esta obra, una de
las primeras impresas en Filipinas, es el segundo libro escrito en chino por un europeo y constituye
la primera obra en ese idioma que introduce el cristianismo desde un punto de vista racional, y
también el primer libro en chino con ideas científicas occidentales. Hay una edición moderna del
Shilu, con traducción al español y al inglés (Villarroel, 1986). Para un estudio en profundidad de esta
obra de Cobo, véase Cervera (2013, pp. 393-481).
entran con sus barquillos y con sus champanes, que son como varcos pequeños,
y con sus bancas, que son vnos nauichuelos de ancho como vna vara de medir,
y de largo de ocho y diez varas, son sin cuento los que entran y salen. En este
Mercado ay mercaderias de seda, de lienço, de quantas cosas quieren los hombres.
Ay oficiales de quantos oficios quisieren, plateros, sastres, çapateros, carpinteros,
pintores cereros, &c. (…) Finalmente quantos oficios quisieren tantos ay. (Juan
Cobo, 1589, reproducido en: Remesal, 1619, p. 681).
15. La transcripción de las dos Cartas-relaciones citadas anteriormente (la de Cobo de 1589 y la de
Salazar de 1590), así como su análisis, forman el núcleo del libro de Cervera (2015).
frenos, y estribos, tan buenos y tan baratos, que algunos mercaderes quieren
de ellos hacer carga para México”, por no hablar del caso del encuadernador de
libros chino que aprendió el oficio y “salió tan excelente oficial, que al maestro
le ha sido forzoso dejar el oficio, porque todos acuden al sangley”, muestran
que en el siglo xvi existían prácticas y pautas de comportamiento que no nos
son extrañas en nuestro siglo xxi.
Personajes como Rada, Salazar y Cobo inauguraron dos siglos y medio
durante los cuales las ideas europeas cruzaron el Pacífico y modelaron la
realidad de países como Filipinas e influyeron en otros como China y Japón.
Pero esa transferencia de ideas, de cultura, de ciencia, no se dio solamente
en dirección a Asia. Los textos anteriormente citados son sólo un ejemplo
de los cientos que cruzaron el océano desde Manila hacia Acapulco y que
influyeron tanto en el virreinato novohispano como en Europa. Crónicas re-
ligiosas y seculares, cartas y relaciones, dieron a conocer China y otros países
asiáticos a autoridades, a hombres de Iglesia y a intelectuales de los países de
la América española y también europeos, llegando a desarrollarse una visión
profundamente positiva de países como China.16
Los textos llegados al virreinato novohispano desde Asia incluso colocaron
a México en el centro de algunas polémicas que se habían gestado en el otro
extremo del mundo. Uno de los ejemplos más claros tuvo como protagonista
al famoso obispo de Puebla y virrey Juan de Palafox y Mendoza (1600-1659),
uno de los personajes más destacados del siglo xvii novohispano. Hay que
recordar que la Capitanía General de Filipinas formaba parte del virreinato
de Nueva España, y también que los miembros de las órdenes religiosas con
presencia en Filipinas y otros países de la región estaban muy vinculados con
el clero afincado en México. Por eso, a pesar de la gran magnitud del océano
Pacífico, la Iglesia novohispana había desarrollado lazos estrechos con Asia
Oriental. Sintiéndose responsable en cierto modo de la evangelización de Chi-
na, el obispo Palafox tuvo un papel destacado en la Controversia de los Ritos
16. Véase, por ejemplo, la obra editada por Vega (2009), donde se recogen varias crónicas de viajes
a China realizadas por españoles y portugueses durante el siglo XVI, las cuales se difundieron
rápidamente por toda Europa.
17. La Controversia de los Ritos Chinos, que enfrentó a los jesuitas con los miembros de las órdenes
mendicantes, ocurrió durante buena parte del siglo XVII y principios del XVIII. Tras fuertes
enfrentamientos teológicos e incluso personales que tuvieron lugar en China y en Europa, la Santa
Sede al final dio la razón a los dominicos y franciscanos en su interpretación de los ritos chinos, y
esto llevó a la ruina a la misión católica en el Imperio chino. Un libro que abarca toda la historia de la
controversia es el de Minamiki (1985). El papel del obispo Palafox y Mendoza en esta controversia
se expone en el reciente artículo de Cervera y Martínez (2018).
…vna de las difficultades queste trato y comerçio tiene es que desta tierra ni
despaña, asta lo que agora sentiende, no se les puede lleuar nada, que ellos no
tengan, porque tienen abundancia de sedas y lençería: dizen asimismo que la
tienen; paños, por ser la tierra caliente, no los gastan ni los tienen en nada;
açúcar, ay gran abundançia; çera y drogas y algodón en las islas ay gran cantidad,
a donde ellos lo uienen a rrescatar. Por manera que se viene a resumir que la con-
trataçión desta tierra á de ser con plata, que es lo que ellos más estiman. (AHN,
Archivo Histórico Nacional de España, Doc. Ind., Secc. Div., n. 219, reproducido
en: http://www.upf.edu/asia/projectes/che/s16/virr1573.htm).
18. Un excelente estudio de la historia de la plata novohispana en Asia Oriental es el de Valdés (1987).
19. García de los Arcos (1996) ha estudiado la emigración de mexicanos a Filipinas durante la época
virreinal.
20. Véanse, por ejemplo, las obras de Oropeza (2011) y Seijas (2014).
21. Un caso paradigmático es el de dos japoneses, Luis de Encío y Juan de Páez, que vivieron en la ciudad
de Guadalajara durante el siglo XVII. Ambos llegaron a tener una presencia social poco común,
sobre todo el segundo de ellos, que llegó a codearse con los principales mercaderes, terratenientes y
miembros del alto clero de la ciudad. Sus vidas son analizadas en el apasionante libro de Melba Falck
y Héctor Palacios (2009).
22. Una de las investigadoras que más ha estudiado el funcionamiento de la ruta del Galeón de Manila
desde el punto de vista económico es Carmen Yuste (1984).
23. Dos libros recientes que estudian la dinámica del comercio transpacífico y su influencia en todo el
continente americano, desde México hasta Argentina, son los de Mariano Bonialian (2012, 2014).
24. Una obra que ha estudiado en profundidad el papel de los comerciantes novohispanos en el
comercio transpacífico, particularmente en el siglo XVIII y parte del XIX, es la de Yuste (2007).
distintos, mientras que dos siglos después, en 1786, la carga del galeón San
Andrés pertenecía sólo a 28 personas diferentes (De Miguel, 2008, p. 127).
El comercio transpacífico podía dar más ganancias que el del Atlántico.
Pero, al mismo tiempo, era también una empresa más aventurada. Entre 1580
y 1630, la mayor parte de los viajes no se realizó de manera totalmente exitosa.
Sin embargo, a partir de la mitad del siglo xvii, la ruta adquirió estabilidad y se-
guridad, hasta llegar a lo que Carmen Yuste denomina “dinamismo rutinario”
(2012, p. 204). Durante la segunda mitad del siglo xvii y la primera del XVIII,
es decir, durante la época central de funcionamiento de la ruta transpacífica,
hubo gran regularidad en las salidas y llegadas de los barcos a los puertos. El
galeón partía de Manila en junio o julio, con el monzón de verano, y llegaba
a Acapulco en noviembre o diciembre. Entre enero y febrero se descargaban
las mercancías en Acapulco. El barco salía de Acapulco hacia marzo o, como
mucho, abril, y llegaba a Manila entre junio y julio, justo cuando estaba sa-
liendo otro galeón con dirección a la Nueva España (Yuste, 2012, p. 202).
Al llegar el galeón a la Nueva España, se llevaba a cabo la feria de Acapul-
co (normalmente en enero o febrero de cada año). La feria duraba entre 20
días y dos meses y allí se vendían las mercancías asiáticas. El puerto adquiría
entonces una animación extraordinaria. Los productos que sobraban se en-
viaban a la Ciudad de México, llevados por los arrieros, siempre por caminos
oficiales.25 Allí se vendían en el Parián, mercado cuyo nombre evocaba al de
Manila. Algunas de las mercancías asiáticas permanecían en la Ciudad de Mé-
xico, pero otras iban a otros lugares de la Nueva España e, incluso, a España
por Veracruz, o también al Perú por cauces no oficiales.
25. Los arrieros tuvieron una gran influencia en el comercio de las mercancías asiáticas en la Nueva
España. Slack (2012, pp. 102-105) estudia como ejemplo el caso de un arriero proveniente de
Pampanga (Filipinas), Domingo de Villalobos, que transportaba mercancías asiáticas de Acapulco a
las ciudades de México, Colima y Guadalajara.
Conclusión
26. Un estudio muy completo sobre la Real Compañía de Filipinas es el ya clásico libro de María Lourdes
Díaz-Trechuelo (1965).
Referencias