Mateo 14
Mateo 14
Mateo 14
EL CONTEXTO:
APARTADO
MIEDO!
24Y ya el barco estaba en medio del mar, atormentado de las ondas; porque el
viento era contrario.25Mas á la cuarta vela de la noche, Jesús fue á ellos
andando sobre la mar. 26Y los discípulos, viéndole andar sobre la mar, se
turbaron, diciendo: Fantasma es. Y dieron voces de miedo. 27Mas luego Jesús
les habló, diciendo: Confiad, yo soy; no tengáis miedo.
DUDASTE?
• Es, en parte, una historia que tiende un puente entre la desesperación de los
temerosos discípulos de versículo 26, y la fe de los discípulos que adoraban de
versículo 32.
Ninguno de los Evangelios nos dice qué tanto avanzó Pedro caminando sobre
el agua, pero cuando flaquea, está lo suficientemente cerca de tal forma que
Jesús puede estirarse y sostenerlo. Jesús le dice“¡Hombre de poca fe! ¿Por
qué dudaste?” Este es el único lugar en que Jesús aplica lo de “poca fe” a uno
de sus discípulos más que a todo el grupo. Notemos que Jesús primero salva a
Pedro, y solamente después lo reprende.
LO ADORARON
Como ya se hizo notar antes, el final de esta historia es muy diferente al del
Evangelio de Marcos, donde los discípulos terminan confundidos y con el
corazón endurecido.
(2 Timoteo 1:7) si bien la biblia nos dice que Dios nos ha dado un espíritu
de dominio propio, si bien nuestra lucha es constante pero podemos
vencerlas, no debemos dejarnos oprimirnos, no debemos dejarnos vencer,
por un enemigo que es derrotado y que nosotros somos más que
vencedores, si bien el primer campo de batalla es la mente y si podemos
vencer en ese campo podemos vencer en los otros.
Sabemos que no podemos hacerlo con nuestras fuerzas, pero si Cristo nos
ayuda podemos vencer las tentaciones, (Filipenses 4:13) nos dice que todo
podemos en Cristo que si nosotros confiamos en Dios podemos lograr
vencer la pruebas, las luchas, las aflicciones, etc.
Mateo 26:41
“Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad
está dispuesto, pero la carne es débil.”
Lucas 22:40
“Cuando llegó a aquel lugar, les dijo: —Orad para que no entréis en
tentación.”
Lucas 22:46
“y les dijo: —¿Por qué dormís? Levantaos y orad para que no entréis
en tentación.”
La tentación es descrita aquí como algo en lo que los discípulos
podrían caer y para ello la respuesta adecuada sería la oración. Luego,
oración y tentación se colocan una contra la otra. “Oren para que no
caigan en tentación”, dijo el Señor. Obviamente, si ellos no oraban
efectivamente caerían en tentación. Oración, comunión con Dios,
mantener los canales de comunicación abiertos y recibir de Él el coraje
y apoyo necesario por medio de la oración, es un escudo de protección
contra la tentación. Eso no necesariamente significa que la tentación
no vendrá, pero lo que de seguro significa es que cuando/si llega, nos
hallará inquebrantables en la fe en vez de listos para caer en su trampa.