COMPORTAMIENTOS INSEGUROS AL VOLANTE POR PARTE DE ESQUEMAS

DE PROTECCION A PERSONAS EN COLOMBIA

Ensayo Presentado Para obtener el título de

Especialista en Administración de la Seguridad

Autor:

RUBY ESPERANZA MARTINEZ RUIZ

Tutor Temático:

JULIO CESAR GONZALEZ

Tutor Temático:

JULIO CESAR GONZALEZ

UNIVERSIDAD MILITAR NUEVA GRANADA

ESPECIALIZACIÓN EN ADMINSITRACION DE LA SEGURIDAD

FACULTAD RELACIONES ITERNANCIONALES, ESTRATEGIA Y SEGURIDAD

BOGOTÁ D.C

2018
 Resumen

Debido a las múltiples noticias donde se ha evidenciado el incumplimiento de las

normas de tránsito por parte de los esquemas de seguridad en Colombia, donde inclusive se

tiene reporte de 9 personas que han fallecido en accidentes con vehículos oficiales de

seguridad y generado 602 heridos en el 2006, así mismo, el desafío que tienen las empresas

de vigilancia y seguridad privada que proveen servicios de Escolta con conducción, con el

cumplimiento de la normatividad de seguridad vial, como el decreto 1465/2014 que

establece los planes estratégicos de seguridad vial (PESV), en este ensayo se proponen

buenas prácticas para la planificación de los desplazamientos de vehículos de seguridad que

permitan mantener desplazamientos seguros integrándolos con los pilares de los PESV

permitiendo tener un equilibrio entre los procedimientos de protección y seguridad vial

Palabras Clave: Seguridad Vial, Escoltas, Manejo Defensivo, Manejo Evasivo

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 Introducción

Los escoltas se han visto involucrados, desafortunadamente en varias noticias por

desobedecer las normas de tránsito como pasar un semáforo en rojo, uso de bus carril,

estacionamiento en sitios prohibidos entre otras infracciones estipuladas en el Código

Nacional de Tránsito (Ley 769, 2002), (Ley 1383, 2010) y estar involucrados en accidentes

de tránsito ( Motor, 2016).

Al revisar documentos como EL Manual de Protección a Personas por parte de la

Policía Nacional (2010), se evidencia que las recomendaciones dadas por este documento

indican que los desplazamientos en caravanas deben ser “rápidos y seguros”, no obstante,

no hace referencia a que se deben seguir las normas de tránsito y tampoco se dan

lineamientos precisos desde una óptica de evaluación de riesgos para tomar conductas de

manejo evasivo.

En procedimientos de seguridad, se indica que a pesar de dificultades de tránsito

se debe procurar ir lo más rápido posible (Zuluaga, 2005) y esa puede ser una de las

razones por los cuales los escoltas no respeten señales de tránsito incluyendo la solicitud

expresa del protegido de ir rápido para atender asuntos como reuniones, desconociendo los

riesgos que acarrea para la misma seguridad de la caravana y los demás actores viales.

Este documento tiene como objetivo proponer buenas prácticas para la

planificación de los desplazamientos de vehículos de seguridad que permitan mantener

desplazamientos seguros. Así las cosas, inicialmente se hará la revisión bibliográfica sobre

el diagnóstico de seguridad vial; en segundo lugar, se revisará los lineamientos normativos

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de seguridad vial y las prácticas de protección en desplazamientos con el fin de proponer

buenas prácticas que ayuden a la prevención de accidentes de tránsito y situaciones

peligrosas que expongan la integridad del protegido.

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 Desarrollo

Diagnóstico de seguridad vial

Los accidentes de tránsito se han convertido en un gran desafío para la Salud Publica por

su alta incidencia y graves consecuencias para la población, su relevancia radica en que son

claramente prevenibles; según la Organización Mundial de la Salud (OMS) constituye una

de las causas de muerte más importantes en el mundo y la principal causa de muerte entre

personas de edades comprendidas entre los 15 y los 29 años. En el año 2013 se produjeron

1,25 millones de muertes por accidentes de tránsito, de las cuales el 90% corresponden a

países de ingresos bajos y medios, no obstante, al informe de la OMS indica que a pesar del

aumento de la población y el parque automotor este valor se ha estabilizado desde el 2007

debido al fortalecimiento de las intervenciones en seguridad vial. Para las Américas la tasa

de mortalidad en el 2013 por accidentes viales corresponde a 15,9 muertes por cada

100.000 habitantes (World Health Organization, 2015)

La principal causa de ocurrencia de accidentalidad vial en Colombia año 2016 sigue

siendo el choque con otro vehículo con el 42,66 % de los casos registrados, seguido del

atropello (27,75%) y el choque con objeto fijo (12,63%) (Forenses, 2017). Respecto a las

circunstancias asociadas al accidente de transporte, Valbuena en 2011 indica que en las

muertes el desobedecer las normas de tránsito causó el mayor número de hechos (42%),

seguido del exceso de velocidad (32%) y posibles fallas mecánicas (8%). En cuanto a las

lesiones no fatales, el desobedecer las normas de tránsito, el exceso de velocidad y la

embriaguez aparente fueron las causas que originaron este tipo de lesiones con 64%, 21% y

7%, respectivamente (INMLCF - Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias

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Forenses, 2012) lo anterior nos lleva a deducir que el comportamiento del conductor juega

un papel importante en el causalidad de los accidentes de tránsito.

Un estudio realizado por Norza Céspedes, Granados León, Useche Hernández, Romero

Hernández, & Moreno Rodríguez, (2014), cuyo objetivo fue analizar la incidencia del

factor humano en la accidentalidad vial en el territorio colombiano dentro de sus resultados

encontraron que desobedecer señales de tránsito es la principal causa de accidentalidad.

Infortunadamente, no existe ningún reporte oficial de entidades como la

Superintendencia de vigilancia y seguridad privada o Unidad Nacional de Protección

(UNP) que indiquen el número de accidentes o infracciones que han cometido los escoltas

en los últimos años en Colombia. Sin embargo, se pudo encontrar noticias de periódicos

como El Tiempo (2006), donde se indica que a la Policía se le solicitó por parte del

Ministerio de Transporte, inspeccionar a controles a vehículos y caravanas de seguridad. El

resultado de esta revisión arrojo 123 escoltas multados por diferentes tipos de infracciones

al Código Nacional de Tránsito (2002). Así mismo el artículo revela que la Policía

Nacional indico que de enero a octubre de 2006, se registraron 9 personas muertas por

accidentes con carros de seguridad oficiales, 602 resultaron heridas y 831 choques simples

con estos vehículos.

Entidades públicas como la Secretaria Distrital de Movilidad de Bogotá, en el año 2016

emitió un artículo en su página web, informando que los esquemas de seguridad deberán

hacer curso de normas de tránsito ante las reiteradas faltas a las normas de tránsito según

manifestó el secretario de esta entidad (Secretaria Distrial de Movilidad, 2016)

Por otra parte, la opinión pública en medios como El Tiempo, ha realizado serios

cuestionamientos sobre la forma en la que actúan los escoltas frente la normatividad que

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regula estás caravanas, rechazando comportamientos abusivos como parar el tráfico e

intimidar a los otros vehículos para abrirse paso, inclusive hacen cuestionamientos

relacionados con la mejoría de los indicadores de seguridad en ciudades como Bogotá, lo

cual se debe ver reflejado en la reducción de esquemas de seguridad y este tipo de

comportamientos (Quintero, 2016).

Lineamientos normativos de seguridad vial y buenas prácticas en desplazamientos de

esquemas de protección a personas.

Respecto a la legislación sobre desplazamiento de caravanas de seguridad, la Ley

762/2002 o Código Nacional de Tránsito, no especifica nada relacionado con las normas

que rigen las caravanas de seguridad, salvo la del presidente que tiene el privilegio de

regular el tráfico a su paso. Por otra parte, esta ley establece en su artículo 55 el

cumplimiento de las normas de tránsito sin perjudicar o poner en riesgo a los demás. (Ley

769, 2002)

Debido al panorama de siniestralidad vial de Colombia con promedios de 16 muertes por

día y 111 lesionadas en hechos relacionados con el tránsito durante el 2002 y 2011

(Valbuena, 2012) y conforme estrategias solicitadas por las Naciones Unidas, Banco

Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Colombia empezó a adoptar

estrategias para la reducción de su accidentalidad vial adoptando un marco normativo

iniciando por la Ley 1503 de 2011 mediante el cual establece la obligación que las

empresas privadas deben diseñar un Plan Estratégico de Seguridad Vial (PESV). Estos

PESV se ajustaron al Plan Nacional de Seguridad Vial (2011-2021) (Resolución 2273 de

2014) y fueron reglamentados por el Decreto 2851 de 2013 y junto con la Resolución 1565

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de 2014 y 1231 de 2016. El plazo para elaborar e implementar estos PESV venció en

diciembre de 2016.

El PESV (Plan Estratégico de Seguridad Vial) se componen de 5 pilares fundamentales:

Gestión Institucional, Comportamiento Humano, Vehículos Seguros, Infraestructura

segura, atención a víctimas y tienen como objetivo la prevención de la ocurrencia de

accidentes de tránsito y en la mejora del desempeño de la seguridad vial en el país.

(Resolución 1562/14)

Por tal motivo, el desafío de las empresas de vigilancia y seguridad privada es articular

el PESV (Plan Estratégico de Seguridad Vial), con las necesidades de los esquemas de

seguridad, de tal modo que se integren elementos comunes que permitan desplazamientos

seguros y en cumplimiento de las normas de tránsito.

Al revisar las necesidades de los esquemas de seguridad en vehículo se encuentran

varios elementos comunes con el PESV (Plan Estratégico de Seguridad Vial), que permiten

una integración desde la prevención destacando a reducir la accidentalidad y consolidar una

cultura de mayor responsabilidad vial, entre los siguientes:

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 Gestion Institucional. Toda empresa de vigilancia y seguridad privada debe realizar la

conformación del comité de seguridad vial, con el fin de crear un mecanismo de

coordinación y seguimiento poniendo en marcha la política de seguridad vial. De esta

manera lograra focalizar acciones en favor de la cultura de seguridad vial y la prevención

de accidentes. Las funciones principales del comité son divulgación al personal de

seguridad la política de seguridad vial, diseñar cronogramas de capacitación, campañas de

autocuidado, investigación de accidentes e incidentes de transito donde se vean

involucrados vehículos y personal se seguridad de la empresa, seguimiento de indicadores

de accidentalidad y reuniones de seguimiento trimestral.

Vehículos Seguros. En este componente se establece la importancia de que cada empresa

de vigilancia y seguridad privada tenga un plan de mantenimiento preventivo y correctivo

para los vehículos asignados al personal de Escoltas. Además de esto otra buena práctica es

que el personal de Escotas realice el chequeo preoperacional de los vehículos de seguridad

todos los días antes de iniciar el desplazamiento previsto, con el objetivo de descartar

cualquier irregularidad en el vehículo que pueda generar un accidente o incluso atentar

contra la vida del protegido y/o terceros. Así mismo, la empresa puede articular con la ARL

un programa de capacitaciones para los escoltas pruebas de control preventivo para

conductores.

Atención a Víctimas. Como una buena práctica en este componente se recomienda que

la empresa de vigilancia y seguridad privada realice la divulgación a los escoltas con

frecuencia sobre los procedimientos de atención a víctimas en accidentes de tránsito y

capacitación de rimeros auxilios. Es decir, que el escolta tenga conocimiento de las líneas

de emergencia para comunicarse con policía o clínicas, además de esto información

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inmediata a su coordinador, aseguradora del vehículo entre otros. Tener un medevac sobre

la información de su protegido, datos importantes como tipo de sangre, seguro médico,

entre otros. En la experiencia se evidencias grandes errores por parte de los Escoltas pues

no tienen claros los procedimientos en la atención a víctimas y reporte de accidentes.

Infraestructura segura. Este componente se destaca que la empresa debe realizar

estudio de rutas o rutogramas para levantar información de riesgos como: Características de

la vía, Zonas de exceso de velocidad, zona de alto riesgo de accidente, zonas de

alimentación, alojamiento, entre otros, de acuerdo con las necesidades de los vehículos de

seguridad esta información se puede complementar con los siguientes elementos:

Eventos de seguridad reportados en las diferentes vías analizadas

Amenazas recientes al protegido

Tiempos y distancia estimados de desplazamiento

Presencia de fuerza pública en la ruta y ubicación de puntos seguros

Intersecciones con cruces muy demorados o con facilidad de acorralamiento

Vías con escasa iluminación nocturna o poco transitada

Identificación de centros de salud o clínicas en el recorrido

Adicionalmente a estas medidas, se deben adoptar procedimientos para los

desplazamientos, de acuerdo a Zuluaga (2005) estos son algunos:

Cambio de rutas, frecuencia y horarios

Identificación de centros de salud cercanos en la ruta

Tener una ruta alterna o de escape en caso de atentado.

Briefing de seguridad antes del desplazamiento

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 Comportamiento Humano.

La importancia de este pilar radica en que se estima que la prevalencia del factor

humano en accidentes viales es de un 75 a 85% (Young & Salmon, 2012) . La legislación

para el desarrollo de este pilar solicita a la organización varios requisitos como

procedimiento de selección, pruebas de ingreso de conducción, capacitación en seguridad

vial, capacitación en manejo preventivo, documentación de los conductores, revisión de

comparendos, entre otros. Adicional a estos requerimientos de seguridad vial, es necesario

que se contemplen los siguientes para articularlos con las medidas de protección:

Capacitación en Manejo Defensivo

Schneider (2005), define la “Conducción Defensiva” como aquella en la cual se identifican

peligros potenciales antes de afrontar situaciones peligrosas, utilizando prácticas de

evitación como la identificación de errores de otros conductores, tomando medidas

preventivas para evitar que se materialicen estas amenazas y de esta forma buscando

garantizar la seguridad y buen viaje del protegido.

Una buena práctica que permite lograr un equilibrio entre seguridad vial y prácticas de

protección es la Técnica Smit, la cual es una serie de técnicas para evitar accidentes y que a

su vez, permite identificar el entorno y anticiparse a posibles ataques, esta técnica tiene 5

principios según el portal de National Driver Training (Tully, 2011).

Vea siempre hacia adelante.

Observar siempre un punto más lejano, vea y reaccione frente a posibles inconvenientes

de tráfico o inclusive de una amenaza antes de que se conviertan en peligros inevitables.

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 Mantenga sus ojos en movimiento. Inspeccionar todo el entorno de la conducción.

Mirar de izquierda a derecha. Revise los espejos laterales y traseros cada 20 a 30 segundos.

Tenga en cuenta lo que los otros conductores están haciendo y detecte si aparece un

vehículo sospechoso a lo largo de una vía arteria.

Obtenga el panorama general.

Debe asimilar todo lo que ve en una imagen general. Busque peatones, construcción de

carreteras y cambios en el flujo de tráfico. Tenga en cuenta cualquier cosa que pueda

bloquear su visión o aumentar su riesgo. Identifique posibles amenazas a la seguridad del

vehículo.

Deje siempre una salida.

Mientras conduce, coloque continuamente su vehículo para mantener un margen de

espacio a su alrededor. Usted tiene el mayor control sobre el espacio al frente de su

vehículo. Mantener un margen bueno y seguro hacia el frente lo ayudará a evitar una

colisión en la mayoría de las situaciones y tener una ruta de escape en caso de un ataque.

Asegúrese de que otros lo vean.

Comunicarse con otros conductores. Haga contacto visual si es apropiado. Use luces de

circulación diurna o luces bajas para aumentar su visibilidad. Use los intermitentes de

manera efectiva aplicando la señal al menos 3 segundos antes de su maniobra y deje la

señal encendida hasta que complete la maniobra.

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 Para detectar posibles seguimientos el manual de escoltas (Zuluaga, 2005) recomienda

Conducir a una velocidad más baja que la promedio en una vía arteria

Cuando llegue a un semáforo, use el carril más concurrido esperando que un vehículo

normal cambie de carril.

Así mismo, Rogers (2013), señala algunas buenas técnicas sobre conducción defensiva y

no defensiva; este autor define técnicas de conducción fundamentales para reducir el riesgo

de accidentes, lesiones y anticipar y evitar situaciones peligrosas en los desplazamientos.

La conducción defensiva será aproximadamente el 90 por ciento del tiempo, por lo cual se

deben emplear técnicas para evitas accidentes de tránsito y acciones para una conducción

considerada segura. Un Escolta que cumple funciones de conductor debe incluir en su

diario vivir los siguientes hábitos:

Aceleración (ligeramente, con aceleración de la luz)

Ralentización (incluso, segura y practicada)

Frenado (mantener un frenado seguro distancia, lo que le permite un montón de tiempo),

Dirección (suave y segura)

Giro (nunca brusco, use la aceleración de la luz y una línea de dirección uniforme).

Recomienda que los hombres de protección deben ser conscientes de la actividad de

conducción que están realizando, además de esto que son responsables por su vida, la del

protegido y de los terceros. Que las acciones de conducir de manera no defensivas o usar el

vehículo como un arma mortal para escapar, no lo eximen de responsabilidad antes las

leyes sancionatorias por el cumplimiento de normas de tránsito.

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 Por otra parte, se destaca la academia Abalar (2011), indica que las caravanas

independientemente de su clasificación durante los desplazamientos deben respetar la

señalización indicada por el tráfico.

Por último, se infiere que este componente Comportamiento Humano, es uno de los más

importantes en el Plan Estratégico de Seguridad Vial, pues en la práctica se evidencia que

los procesos de selección de Escoltas no son los más adecuados, se evidencia errores por

parte del área de Gestion Humana, ya que, por el afán de cumplir con la implementación de

esquemas de protección, contratan personal que no cumplen con las habilidades y

competencias para desempeñar la vacante de Hombres de Protección. Estas habilidades y

competencias que se deben evaluar por parte del área de Recursos Humanos son

conocimientos de normas de tránsito vigentes, manejo defensivo, prueba practica de

conducción para operar el tipo de vehículo de su competencia, manejo de crisis para

reportar un incidente, actitud positiva hacia la seguridad vial, conocimiento básico sobre

primeros auxilios, no consumo de alcohol, tabaco y sustancias psicoactivas, entre otros. De

seguro partiendo de este punto se contribuiría a la disminución de accidentes e infracción

de normas de tránsito por el personal de Escoltas que conforman esquema de protección a

personas.

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 Conclusiones

Es necesario que las empresas de vigilancia y seguridad privada realicen integración de

sus procedimientos de protección a personas en vehículo, con los lineamientos del plan

estratégico de seguridad vial, con el fin de establecer una estrategia integral de seguridad

que mitigue tanto los riesgos viales como amenazas externas.

Respecto al pilar de comportamiento humano es necesario que se trabaje en los

contenidos de formación en Manejo Defensivo para escoltas, con el fin de garantizar que

las técnicas de manejo defensivo sean bien entendidas por los colaboradores y sean

aplicadas en un contexto de anticipación y prevención integrando técnicas tanto de

protección a personas como de prevención a accidentes como la Técnica Smith.

Sin excepción todos los Escoltas de empresas de vigilancia y seguridad privada con

funciones de conductor de Esquemas de Protección, deben cumplir con todas las normas

vigentes de seguridad vial, cuando no exista ninguna amenaza real al protegido. De tal

forma, que la conducción evasiva se usará únicamente cuando exista peligro real de

emboscada y/o ataque.

El desafío más grande las empresas de vigilancia y seguridad privada está en la

administración de su personal, por ello la importancia en los procesos de selección que

14
contraten el personal con las competencias y habilidades adecuadas para desempeñar el

cargo requerido.

15
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El Tiempo (2006). Comparendos a 123 Escoltas. El Tiempo. Recuperado de

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