Trabajo Grupal 1
Trabajo Grupal 1
Trabajo Grupal 1
Carrera:
Mecanica Automotriz – I semester, Turno Noche
Curso:
Alumnos
: -Jose Andres Concha Taya
Fecha:
25/05/2021
INDICE DE TEMAS
Resumen
Introduccion
Conclusiones
Bibliografia
INTRODUCCION
El sistema de suspensión de un auto tiene como objetivo absorber las desigualdades del terreno sobre el que se
desplaza, a la vez que mantiene las ruedas en contacto con el pavimento, proporcionado un adecuado nivel de
confort y seguridad de marcha. A continuación, en el mundo de motor, hablaremos acerca de este sistema, su
misión, funcionamiento, partes y como estás partes están desarrolladas y a su vez como a partir de estos elementos
hay variaciones en el sistema de suspensión. Un sistema de suspensión en el automóvil cumple con generar la
cómodidad necesaria durante la marcha a los pasajeros, evitando que las oscilaciones del terreno se transmitan a la
carrocería. Además, contribuye a la estabilidad del vehículo, manteniendo en contacto las ruedas con el terreno,
mejorando la adherencia y la respuesta de la dirección.
Todo sistema de suspensión objetivos deberá proveer dos propiedades importantes: elasticidad, que evita que las
diferencias en el terreno se transmitan al vehículo en forma de vibraciones secas; y amortiguación, que impide un
movimiento excesivo de la carrocería además de que mantiene los neumáticos en contacto con el terreno.
Elementos de la suspensión Todo sistema de suspensión debe disponer de un conjunto elástico, formado por barras
de torsión y otro de amortiguación, ballestas, muelles helicoidales. Además, dispone de otros elementos
constructivos, como los silentblocks, brazos, rótulas, etc., y elementos que mejoran indudablemente el
comportamiento de la suspensión, como barras estabilizadoras, tirantes de reacción, barras transversales, etc.
Elementos elásticos de la suspensión En la actualidad, se utilizan cuatro tipos de elementos elásticos en sistema
de suspensión:
1. Ballestas.
2. Muelles helicoidales.
3. Barras de torsión.
4. Suspensión hidráulica(de citroen).
Los elementos comentados impiden que las irregularidades del terreno se direccionen al vehículo en forma de
golpes, mejorando el confort. Además, mantienen las ruedas en contacto constante con el terreno, Haciendo así
una mejora en la estabilidad y la capacidad para dirigir el vehículo.
Ballestas
La mayoria de las ballestas están formadas por un conjunto de láminas de acero especial para muelles (1) ,
unidas mediante unas abrazaderas (2), que posibilitan el deslizamiento entre las hojas cuando éstas se deforman
por el peso que deben soportar. La hoja superior, llamada hoja maestra, va curvada en sus extremos, formando
unos ojos en los que se montan unos casquillos (3) para su acoplamiento al soporte del bastidor, por medio de
pernos o bulones. El número de hojas y su espesor está en función de la carga que han de soportar. Todas las
hojas se unen en el centro mediante un tornillo pasante con tuerca, llamado «capuchino» (4). El sistema de
suspensión por ballestas suele emplearse en vehículos dotados de puentes delantero y trasero rígidos. La ballesta,
que presenta cierta curvatura, tiende a ponerse recta al subir la rueda con las desigualdades del terreno,
aumentando con ello su longitud. Por este motivo, su unión al chasis deberá disponer de un sistema que permita
su alargamiento. Generalmente, este dispositivo se coloca en la parte trasera de la ballesta y consiste en la
adopción de una gemela que realizan la unión al chasis por medio de un tornillo pasante. Además, en el ojo de la
ballesta, se coloca un casquillo elástico, llamado silentblock, formado por dos manguitos de acero unidos entre sí
por un casquillo de caucho, que se interpone a presión entre ambos. De esta manera, el silentblock actúa como
articulación para movimientos pequeños, como los de la ballesta en este lugar, sin que se produzcan ruidos ni
requiera engrase.
Averias y Fallas en el Sistema de Suspenciones.
¿Cuáles son las principales fallas de la suspensión neumática?
Cuando conducimos un vehículo, nuestro principal objetivo es llegar al lugar de destino. Sin embargo, no
queremos llegar a ese sitio de cualquier manera, sino de un modo seguro y confortable. Por este motivo, en esta
nota te diremos más sobre las fallas de la suspensión neumática.
La llanta puede sufrir daño por los baches, estas se pueden desgastar en su vehículo con el tiempo, y ese desgaste
puede hacer que las ruedas se desajusten. Los problemas con la alineación pueden hacer que los neumáticos de su
vehículo se desgasten de manera desigual y también afecte su dirección.
Amortiguadores
Los amortiguadores en su vehículo le evitan sentir cada golpe que su vehículo pasa al mantener sus ruedas en el
suelo. Cuando experimente problemas con los amortiguadores de su vehículo, notará más rebote después de los
golpes y sacudidas mientras conduce en carreteras difíciles.
Muelles
Los resortes de su vehículo soportan todo su peso, por lo que no es de extrañar que puedan caerse o romperse con
el tiempo. Una forma fácil de detectar este problema es revisar su vehículo cuando está estacionado en un terreno
nivelado. Si nota que su vehículo está más bajo en una de sus esquinas, eso es una señal clara. Otro síntoma de
problemas con los resortes de su vehículo es un ruido de golpes al conducir sobre baches o al girar.
Brazos de control
Como las bisagras que sujetan las ruedas al bastidor y conectan la dirección a las ruedas, los brazos de control
son una parte integral de la suspensión de su vehículo. Por eso es importante que se dé cuenta de que los cojinetes
se desgastan. Los cojinetes (buje) generalmente son piezas de goma y de metal que absorben el impacto, por lo
que si oye ruidos de traqueteo y se siente una dirección floja, es probable que tenga este problema.
¡Repare la suspensión de su automóvil en Mora Automotriz!
Si experimenta alguno de estos problemas con su suspensión, contáctenos aquí en Mora Automotriz. Nuestro
personal de servicio experto estará más que feliz de ayudarlo a identificar los problemas que está experimentando
y ayudarlo con cualquier reparación que deba realizarse
Mantenimiento y reconocimiento de las Fallas y averías en cada elemento del sistema de
suspensión
1. Amortiguador manchado de aceite. La falta de estanqueidad en la junta del vástago
provoca esta avería que se soluciona con una ligera capa de aceite con la que volver a
lubricar el vástago de pistón.
2. Vástago de pistón dañado. Por problemas en el montaje, guardapolvo defectuoso o
falta del mismo se produce este problema que se manifiesta en corrosión del
componente y que provoca falta de estanqueidad o pérdida de aceite.
3. Vástago de pistón rayado. El síntoma de este problema es la formación de profundas
huellas de rodadura en el componente a causa de un mal montaje o material
incorrecto, en una avería que provoca un desgaste importante del amortiguador o
ruidos al comprimirse y extenderse la suspensión.
4. Rosca desgarrada. Por la falta de fijación del amortiguador se produce este
problema que puede provocar ruidos en la suspensión, tableteo fuerte, reducción de la
eficacia del sistema o incluso el fallo total. Para evitarlo, el mecánico debe evitar la
atornilladora de percusión y observar el par de apriete.
5. Válvula de flujo floja o desgarrada. Si el rendimiento del amortiguador se ve
notablemente reducido e incluso provoca el fallo total, puede ser por esta avería
causada por problemas en el montaje y que la tuerca de la válvula se haya aflojado o
por topes defectuosos.
6. Casquillos de goma fisurados o deformados. El síntoma de este problema es un
ruido como de golpeteo o chirrido, aunque simplemente puede deberse al desgaste
normal y a la fatiga del material. Eso sí, es un peligro para la conducción y afecta al
sistema de frenado.
7. Holgura y ruidos al comprimirse y extenderse la suspensión. Si los elementos de
suspensión y amortiguación están desgastados pueden provocar este problema que se
materializa, por ejemplo, en comportamientos de dirección inestables, ruidos o
desgaste anormal de los neumáticos.
8. Topes o guardapolvos desgastados. Muelles defectuosos, desgaste de determinadas
piezas de plástico o incorrecta combinación de muelle y amortiguador son las causas
de este problema que provoca salida de aceite o fallo total debido a la destrucción de
las válvulas interiores.
9. Apoyos de amortiguador desgastados. Una dirección dura o conducción inestable
son las consecuencias de este problema a causa de que el amortiguador queda
asentado debido al largo kilometraje.
10. Rotura de muelle. Si el vehículo se inclina hacia un lado y hace ruidos en la
suspensión, puede haber daños graves en este componente de la suspensión. Las
causas son diversas: desde golpes de piedras, daños previos de la pintura protectora o
incluso debido a un fuerte impacto con un bordillo.
11. Desgaste del perfil de los neumáticos por fricción. Este problema puede tener su
origen en amortiguadores defectuosos o desgastados o una geometría incorrecta,
motivo por el cual se aconseja revisar el chasis cada 20.000 kilómetros.
Cuando el sistema de suspensión presenta deficiencias claras es habitual que los amortiguadores
cuenten con manchas húmedas de aceite que, con el tiempo, se convierten en suciedad y tierra
alrededor de este elemento.
Estas fugas se deben vigilar puesto que se producen por la rotura o avería de los retenes del cuerpo
del amortiguador. La solución pasa por cambiarlo, aunque lo habitual es sustituir el par de
amortiguadores del mismo eje.
3 – Vibraciones en el volante
Tras esta situación puede encontrarse el mal estado del amortiguador delantero del coche, motivo por
el que es necesario su revisión.
Asimismo, si estas vibraciones se producen en las ruedas delanteras al acelerar, hay que tener cuidado
porque está en riesgo la adherencia del vehículo en carretera, como consecuencia de problemas de
suspensión del coche.
4 – Rebotes excesivos
En ocasiones, los amortiguadores se desgastan en exceso por circular por zonas con asfalto en
mal estado. Esa situación propicia que un rebote acusado.
Para comprobar este síntoma, empuja la carrocería de tu coche hacia abajo. Si el sistema de
suspensión está en óptimas condiciones, no debería producirse ningún rebote al soltar el coche.
Ante estas situaciones puede encontrarse una presión inadecuada de los neumáticos o unos
amortiguadores mal ajustados que originen ese problema en la suspensión del coche.
6 – Excesivo desnivel
Si notas que en terreno llano tu coche muestra una inclinación excesiva – tiende a irse hacia un lado
o está más hundido por delante o por detrás -, es probable que exista problemas en el sistema de
suspensión o en el sistema hidráulico.
Cuando pasas por un bache o una curva notas que el coche realiza ruidos extraños y no sabes por qué
se producen Tras este sonido inusual puede esconderse un desgaste en los cojinetes que pueden llegar
a romperse.
Operatividad y eficiencia de las suspenciones y los tipos de suspenciones
pocos eficientes en el mercado.
Sistema de Suspencion
• El sistema de suspensión se define como el conjunto de elementos que mantiene el contacto suelo-rueda,
mejorando así la adherencia del vehículo, y aumentando su seguridad al mejorar la respuesta de la
dirección y el sistema de frenado, contribuyendo por tanto a una mayor estabilidad y control
FUNCIONES COMPLEMENTARIAS:
TIPOS DE OSCILACIONES
• Cabeceo
Debido a las
frenada bruscas
• Bamboleo
Se genera al tomar
curvas a alta
velocidad.
• Empuje
Se produce al pasar
por terreno ondulado
BALLESTAS
• Las hojas que conforman la ballesta se deforman debida a las desigualdades del terreno y la carga del
vehículo, de manera que las hojas tienden a ponerse rectas al deformarse, por ejemplo, cuando la rueda
pasa por encima de cualquier irregularidad del terreno. Por este motivo, la forma de realizar el anclaje de
la ballesta al chasis deberá disponer de un sistema que permita su alargamiento.
MANGUETA Y BUJE