Radios Mineras2
Radios Mineras2
Radios Mineras2
By dheimann
Created 2002-03-14 01:00
País: Bolivia
Medios: Radio
Anecdotario
Julio de 1980... El golpe militar del General Luis García Meza habíatriunfado dos
semanas antes; muchos fueron asesinados o encarcelados, otros escaparon hacia el
exilio. El ejército logró controlar totalmentelas ciudades. El primer objetivo militar
fueron los medios de información: todas las radios, los canales de televisión y los
diarios fueronclausurados y cuando salieron a la luz nuevamente, fue bajo
estrictacensura militar. En realidad, no todas las emisoras de radio... Lacadena de
aproximadamente veinte emisoras de los distritos minerosde Potosí y Oruro, en el
altiplano de Bolivia, continuó su transmisiónbajo una presión muy grande. Para saber lo
que realmente estabasucediendo en Bolivia después del golpe, la gente buscaba en sus
radiosla frecuencia de La Voz del Minero Radio Animas o Radio Pío XII.Incluso los
corresponsales extranjeros basaban en las radios mineras susdespachos noticiosos. El
ejército lo sabía, por ello cada día las tropasse acercaban más a los distritos mineros,
quebrando poco a poco laresistencia de los trabajadores que defendían sus emisoras con
supropia vida.
Una de las últimas emisoras mineras en caer bajo el control militarfue Radio Animas.
Hasta el último minuto la radio transmitió encadena con Radio Pío XII y Radio
Nacional de Huanuni. Ésta es latrascripción de su dramática transmisión final en
directo: Las tropasestarían aproximadamente a cinco kilómetros de Siete Suyos y muy
cerca deSanta Ana... por tanto nos aprestamos a defendernos... La cifra de
detenidosalcanza a 31, que han sido trasladados a la ciudad de Tupiza de acuerdo a
losinformes que han llegado a nuestra redacción... Ésta es Radio Animas paratodo el
sur del país... Estamos en esta hora crucial, estamos en constantemovilización, las
señoras amas de casa también han coadyuvado grandementeen la preparación de la
defensa... Estaremos hasta las últimas consecuenciascompañeros, porque ésa es
nuestra misión, defendernos...
Eso fue cerca del final. Minutos más tarde se escucharon disparosa través de Radio
Animas. Lo último que el locutor logró transmitirfue un mensaje a las otras emisoras
para que tomaran la señal y continuaran con las transmisiones en directo de la cadena
minera. Otrascontinuaron hasta que el ejército acalló la última, destruyendo losequipos
y matando a quienes defendían su derecho a la comunicación.
Descripción
Todo comenzó hacia 1949, con una emisora que se instaló enel distrito minero de
Catavi. Durante los siguientes 15 años, otros distritos siguieron el ejemplo: compraron
equipos, capacitaron a gentejoven de los campamentos, y los propios trabajadores
financiaron laexperiencia entregando un porcentaje de su salario para sostener
lasemisoras de radio.
Las radios empezaron de manera precaria, equipadas con lomínimo necesario. Algunas
lograron obtener apoyo internacional yse convirtieron en emisoras más sofisticadas, con
mejores equipos einstalaciones. Varias edificaron incluso un salón de actos junto a
laemisora, para poder transmitir en directo las reuniones sindicales. Radio Vanguardia
decoró su salón con un gran mural que narra la historia del centro minero de Colquiri.
Una escena en el mural describelos bombardeos de aviones de la Fuerza Aérea
Boliviana en 1967, cuando el país estaba sometido a una dictadura militar.
A principios de los años 70 había 26 emisoras en funcionamiento, casi todas ellas en los
distritos mineros del altiplano de Bolivia. Porentonces, los sindicatos de mineros eran
todavía muy importantes, considerados como la vanguardia política en América Latina
En tiempos de paz y democracia –que no eran los másfrecuentes– las radios mineras se
integraban en la vida cotidiana delas comunidades. Fungían eficientemente como
alternativas de losservicios de teléfono y correo. La gente de los centros mineros
recibíasu correspondencia a través de la radio y enviaba mensajes de todasuerte, que
eran leídos varias veces al día: convocatorias para lasasambleas del Comité de Amas de
Casa, mensajes de los dirigentessindicales sobre sus negociaciones con el Gobierno en
la capital, mensajes de amor entre jóvenes, invitaciones para asistir a una nuevaobra del
grupo teatral Nuevos Horizontes (que hacía sus representaciones sobre la plataforma de
un camión, bajo la iluminación improvisada de las lámparas de los cascos mineros),
actividades deportivas, entierros, nacimientos y festividades locales.
Durante las crisis políticas las radios mineras en cadena transmitíaninformes sobre la
situación del país. También se unían en cadena entiempos de paz para transmitir eventos
deportivos que tenían lugar enlos centros mineros. Aparte de ello, cada emisora tenía
absolutaindependencia de las otras.
Las radios mineras fueron importantes en la medida en que losmineros eran importantes
en la economía y en la política de Bolivia.Pero también la influencia de los mineros
creció durante las décadasen que tuvieron a su disposición este poderoso medio de
comunicación para expresar sus ideas. A medida que la importancia de laminería
declinó en los años 80, los sindicatos se debilitaron y muchasde las emisoras
desaparecieron, al mismo tiempo que se cerraronlas minas.
Contexto y antecedentes
Durante tres siglos la plata extraída de Potosí fue llevada a España, hasta que la
montaña perdió su forma original y se desmoronópaulatinamente. Se ha escrito que seis
millones de indios aymara yquechua, más un número considerable de esclavos
africanos, perdieronla vida en las minas durante ese período. Potosí era entonces una
delas grandes urbes del mundo occidental. En 1625 tenía una poblaciónmayor que
Londres o París, y más iglesias que cualquier otra ciudaddel nuevo mundo. Aunque
aislada en el altiplano, a 4.200 metros dealtitud, en Potosí podían encontrarse los más
lujosos bienes importados desde Europa.
Unos cuantos miles de trabajadores de los centros mineros teníansobre sus hombros la
responsabilidad de sostener la economía del paísy sus cinco millones de habitantes.
Ningún gobierno podía permitirseignorar la opinión política de los mineros, más aún
cuando sussindicatos tenían fama de ser los más democráticos y políticamentemás
avanzados de América Latina.
Impacto social
Obstáculos
Aunque las radios mineras estaban orientadas por la ideología de lossindicatos, ello no
representó un obstáculo para la participación en lamedida en que estos reflejaban la
voluntad de los trabajadores. En lospuestos de responsabilidad del sindicato eran
elegidos dirigentes dediferentes partidos políticos, pero ninguno de ellos pretendía
romperel sentido de unidad que se reflejaba en los programas de radio.
El verdadero desafío de las radios mineras fue la represión política, la misma que
afectaba a la clase minera en su conjunto. Algunasemisoras fueron destruidas por el
ejército seis o siete veces en el cursode su existencia. Varias optaron por preservar en
sus muros las huellasde la resistencia: los impactos de bala recibidos. Una y otra vez,
losequipos destruidos fueron remplazados por nuevos equipos comprados con el aporte
de los trabajadores. Empobrecidos pero dignos, ofrecían un día de su salario a su
emisora.
Desde el punto de vista técnico, las radios mineras sufrierondeficiencias materiales. Los
equipos de la mayoría de ellas eran muyelementales, aunque suficientes para realizar el
trabajo. Cuando losequipos se dañaban eran reparados por técnicos locales que
carecíandel instrumental necesario pero abundaban en creatividad. La pocacapacidad
para pagar salarios a productores hizo que la calidad de laprogramación fuera baja,
especialmente en cuanto a los contenidoseducativos.
Lo que finalmente hizo que las radios mineras se apagaran en losaños 80 fue el cambio
abrupto en la economía del país. La mineríatradicional dejó de ser central en las
exportaciones y el costo deproducción del estaño resultaba más alto que el precio
internacional.El Gobierno cerró las minas estatales; los trabajadores se trasladarona las
ciudades en busca de empleo, dejando detrás campamentosfantasmas. La influencia de
los sindicatos decreció, y pocas emisorassobrevivieron la transición hacia el nuevo
siglo.
Referencias
Las Radios Mineras de Bolivia, por Alfonso Gumucio Dagron y Lupe Cajías. CIMCA,
La Paz, 1989
La Voz del Minero (film) dirigido por Alfonso Gumucio Dagron y Eduardo Barrios.
UNESCO, 1984.
Artículos: Las Voces del Coraje: Radios Mineras de Bolivia, por F. Lozada y G.
Kúncar(1984). En inglés: The Bolivian Miners' Radio Stations, por Alan O
'Connor(Ohio State University).
Source URL:
http://www.comminit.com/en/node/150017
Links:
[1] http://www.comminit.com/la/cambiosocial/lahaciendoolas/lasld-368.html
[2] http://www.comminit.com/la/cambiosocial/lahaciendoolas/lasld-361.html
Renace la histórica "Cadena Radios Mineras" de
Bolivia
Otros artículos
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la producción de programas de radio. Con este objeto, el proyecto
contempla la dotación de cabinas regionales para la producción
radiofónica,
previa capacitación de los participantes voluntarios.
Por su juventud destaca la experiencia comunitaria de Radio
Mallku Kiririya
nacida el 21 de julio de 1990 en la comunidad Irupata del Norte
del
Departamento de Potosí. Reyes la define como una emisora "de
campesinos para campesinos" y narra que todo el equipo humano
de la
emisora, incluido el director, es de extracción campesina y la
financiación
se obtiene de la venta de productos agrícolas, siendo su lengua el
quechua. Está mantenida por un generador que funciona con
petróleo ya
que la región carece de energía eléctrica. La emisora emite en
fines de
semana y en ciertos tramos horarios para ahorrar energía; su
programación
es participativa y presencial y los habitantes tienen que realizar
largas
caminatas para llegar al estudio. Pretende ser un centro de
integración para
mantener la unidad social de los habitantes (unas 10.000 personas
que
habitan en un altiplanicie a 3.800 m de altura). La sala contigua al
estudio
se utiliza para auditorio de la emisora y para reuniones de grupos
y
sindicatos y dispone de una farmacia herbolaria que es atendida
por el
director de la emisora.