Este documento es un himno en honor a Santa Escolástica, la hermana de San Benito. El himno describe a Escolástica como una paloma y esposa de Cristo que despreció los honores mundanos para seguir la regla de su hermano Benito. También habla de cómo sus lágrimas hicieron que Benito conversara con ella sobre los misterios del reino celestial, y ahora ella brilla en el cielo junto a Cristo su esposo. El himno pide a Escolástica que tenga piedad de los fieles y aleje
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Este documento es un himno en honor a Santa Escolástica, la hermana de San Benito. El himno describe a Escolástica como una paloma y esposa de Cristo que despreció los honores mundanos para seguir la regla de su hermano Benito. También habla de cómo sus lágrimas hicieron que Benito conversara con ella sobre los misterios del reino celestial, y ahora ella brilla en el cielo junto a Cristo su esposo. El himno pide a Escolástica que tenga piedad de los fieles y aleje
Este documento es un himno en honor a Santa Escolástica, la hermana de San Benito. El himno describe a Escolástica como una paloma y esposa de Cristo que despreció los honores mundanos para seguir la regla de su hermano Benito. También habla de cómo sus lágrimas hicieron que Benito conversara con ella sobre los misterios del reino celestial, y ahora ella brilla en el cielo junto a Cristo su esposo. El himno pide a Escolástica que tenga piedad de los fieles y aleje
Este documento es un himno en honor a Santa Escolástica, la hermana de San Benito. El himno describe a Escolástica como una paloma y esposa de Cristo que despreció los honores mundanos para seguir la regla de su hermano Benito. También habla de cómo sus lágrimas hicieron que Benito conversara con ella sobre los misterios del reino celestial, y ahora ella brilla en el cielo junto a Cristo su esposo. El himno pide a Escolástica que tenga piedad de los fieles y aleje
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Die 10 Februarii.
S. SCHOLASTICÆ, Virginis Sororis S. P. N. Benedicti
Himno a Santa Escolástica
¡Oh, feliz esposa de Cristo, Escolástica!
¡Oh dulce paloma! Los santos pregonan tus méritos, y nosotros también cantamos tus alabanzas con alegres, himnos y corazones plenos.
Despreciaste los honores y la gloria del mundo;
seguiste la vida de tu hermano en su Santa Regla; y rica en fragancias de virtud y gracia, solo te importaba conquistar el cielo.
¡Qué poder de tu amor y que grande tu victoria!,
cuando tus lágrimas hicieron llorar al cielo y obligaron a Benito a conversar por fuerza en dulces palabras los misterios del reino.
Y ahora brillas en el cielo que anhelabas;
eres como serafín en tu ardiente amor y celo, hermosa en gracia con Cristo descansas con el Esposo en el esplendor del cielo. Ten piedad de nosotros los fieles de Cristo, y aleja las miserias que nublan nuestros corazones; para que así el Sol de luz eterna brille dulce en nosotros y nos llene de las alegrías de sus rayos eternos.
Cantemos un himno de gloria al Padre y a su único Hijo;
demos homenaje igual de alabanza al bendito Paracleto: sí, a Dios, Creador y Gobernante de todos, sea la gloria sin fin ahora y por los siglos. Amén.
HIMNO DE I VÍSPERAS ANTIFONA DEL MAGNIFICAT
HIMNO DE LAUDES
Las sombras nocturnas desaparecen,
por fin llega el día anhelado, cuando la virgen Escolástica se une a su Esposo para siempre.
La tediosa penumbra del invierno
y las grises nubes se han ido; la primavera de la tierra anuncia hermosas flores en el cielo eterno.
El Dios de amor pide que ya te unas;
En celestial abrazo sempiterno, a Él vuelas con alas de paloma, deseando ardientemente el cielo. ¡Qué hermosa es tu subida hacia las nubes!, Preclara Hija del Rey de Reyes El abad de Nursia contempla con encanto aguarda agradecido su día también.
Recibes ya el abrazo del esposo
Y la corona que has merecido por tus obras, Plena eres ya de eterna gloria del torrente de Cristo tu alegría.
Que la creación de todas las edades
te adore, oh Jesús, lirio del valle, junto con el Padre y el Espíritu Santo te cante himnos infinitos. Amén. ANTIFONAS DEL OFICIO DIURNO ANTIFONA DEL BENEDICTUS ANTIFONA DEL MAGNIFICAT
