Decalogo Del Abogado
Decalogo Del Abogado
Decalogo Del Abogado
El Derecho es una disciplina en constante cambios y debido a que las facultades se orientan a un
objetivo específico que es darle la mejor solución a los problemas legales a nuestro cliente. El
estudio y la capacitación constante es una herramienta fundamental para el desarrollo profesional
el cual hará de un buen Abogado.
Es importante para todo Abogado darse el tiempo de analizar muy detalladamente y detenida
para poder entender un supuesto evitando tomar soluciones de forma arbitrarias o por simple
analogía, para entender cada parte y poder manejar con nuestro cliente dándole solución al
problema.
A todo Abogado le espera una jornada de trabajo que tiene como finalidad en el que su
inteligencia y su destreza le permitirá afrontar diversas situaciones sociales y retos diarios en el
ejercicio de las actividades laborales inherentes a su profesión, es decir, que es poder dar solución
a los diferentes problemas que las personas nos presenten para que los podamos ayudar.
4º LUCHA: Tu deber es luchar por el Derecho; pero el día que encuentres en conflicto el Derecho
con la justicia, lucha por la justicia.
Es el deber de todo Abogado luchar por la justicia, aunque muchas veces esta entre en conflicto
con el mismo Derecho. Como Abogado tenemos la obligación de defender nuestro cliente y más si
se le viola sus garantías por el cual tenemos que perseguir que se cumplan nuestros derechos.
5º SE LEAL: Leal para con tu cliente, al que no debes abandonar hasta que comprendas que es
indigno de ti. Leal para con el adversario, aun cuando él sea desleal contigo. Leal con el juez, que
ignora los hechos y debe confiar en los que tú le dices; y que, en cuanto al derecho, alguna que
otra vez, debe confiar en el que tú le invocas.
Esta depende de la confianza tanto de ti como con tu cliente y, así mismo con la contraparte, con
el juez y con el derecho. Como Abogado debemos ayudar, apoyar al cliente con el problema que
este traiga ya que de nosotros depende la satisfacción del mismo.
6º TOLERA: Tolera la verdad ajena en la misma medida en que quieres que sea tolerada la tuya.
Aprende a escuchar y a valorar todas las opiniones, que siempre serán importantes y
trascendentes. Además valora las diferentes formas de ver y entender los sucesos, porque en
alguna medida serán de beneficio en el caso que te encuentres.
7º TEN PACIENCIA: El tiempo se venga de las cosas que se hacen sin su consideración.
La paciencia es una gran virtud que se debe cultivar, con mayor razón si somos Abogados.
Sabemos que todo proceso judicial lleva un tiempo que tenemos que respetar.
8º TEN FE: Ten fe en el derecho, como el mejor instrumento para la convivencia humana; en la
justicia, como destino normal del Derecho; en la paz; como sustitutivo bondadoso de la justicia; y
sobre todo, ten fe en la libertad sin la cual no hay derecho, ni justicia, ni paz.
9º OLVIDA: La abogacía es una lucha de pasiones. Si en cada batalla fueras cargando tu alma de
rencor, llegará el día en que la vida será imposible para ti. Concluido el combate, olvida tan pronto
tu victoria como tu derrota.
10º AMA TU PROFESION: Trata de considerar la abogacía de tal manera que el día en que tu hijo te
pida consejo sobre su destino, consideres un honor para ti proponerle que se haga abogado.
La abogacía es, por eso, al mismo tiempo, arte y política, ética y acción. Como arte, tiene sus
reglas; pero éstas, al igual que todas las reglas del arte, no son absolutas, sino que quedan libradas
a la inagotable aptitud creadora del hombre. El abogado está hecho para el derecho y no el
derecho para el abogado. El arte del manejo de las leyes está sustentado, antes que nada, en la
exquisita dignidad de la materia confiada a las manos del artista. Como política, la abogacía es la
disciplina de la libertad dentro del orden. Los conflictos entre lo