Resumen Del Alquimista - Reino Dennys
Resumen Del Alquimista - Reino Dennys
Resumen Del Alquimista - Reino Dennys
COORDINACIÓN DE ADMISIÓN Y
NIVELACIÓN
tuvo un sueño extraño sobre un tesoro, él sabía leer, había estudiado latín, español y teología,
pero decidió ser pastor por la razón de que ellos viajaban y cada día junto a sus ovejas cumplía
su sueño de viajar “Es justamente la posibilidad de realizar un sueño lo que torna la vida
interesante”. Una vieja leyó sus manos, él comenzó a contarle el sueño que ya era repetitivo y la
vieja le dijo que quería una décima parte del tesoro si lo encontraba e hizo un juramento frente al
corazón sagrado de Jesús. África quedaba a pocas horas de tarifa solo tocaba cruzar el pequeño
estrecho en barco, pero él no tomaba una decisión, un día lo encontró el rey de Salem, quien por
ayudarle a tomar una decisión le pidió la décima parte de sus ovejas y él le mostraría como llegar
al tesoro. Todos tenemos una Leyenda personal en la juventud, pero con el tiempo va perdiendo
fuerza, “cumplir la leyenda personal es la única obligación del hombre” dijo el rey. Estaba atado
a sus ovejas y no quería dejarlas pues habían pasado mucho tiempo junto a él, así que comenzó a
envidiar la libertad del viento ya que nada se lo impedía, las ovejas, la hija del comerciante, los
campos de Andalucía era apenas algunos pasos de su leyenda personal. Anduvo por 40 días y
llego a un hermoso castillo, allí vivía el sabio, el viejo le dijo no puedes confiar en un hombre si
no conoces su casa, después le dio un consejo “el secreto de la felicidad esta en mirar todas las
maravillas del mundo, pero nunca olvidarse de las dos gotas de aceite”. Viajó a África a un lugar
totalmente extraño para él, en un bar conoció a un árabe que supuestamente iba ser su guía para
viajar a las pirámides, cuando salieron del bar el árabe robo al muchacho, así que decidió no
confiar en nadie, cuando quiso renunciar a su sueño urim y tumim, dos piedras que le había
regalado el rey eligieron suerte por él, así que lanzo una pregunta clara y sencilla, saco una
piedra y supo que la bendición del viejo seguía con él, así que decidió seguir su camino. Pronto
se dio cuenta que estaba aplicando las mismas lecciones que le habían enseñado sus ovejas en el
mundo extraño. Sin dinero el muchacho entró a la tienda de un mercader y limpió los cristales a
cambio de un plato de comida, el mercader dijo que no hacía falta por que tenía que dar de comer
al hambriento y lo contrató. Mientras el muchacho limpiaba los cristales entraron dos personas a
la tienda. Durante su trabajo en la tienda las ventas habían subido y él tuvo la idea de hacer una
estantería para atraer clientes y el dueño le otorgó su permiso, pasaron los meses y las ventas
aumentaba, él pensaba en regresar a Andalucía con el dinero que había ganado. El muchacho
tubo otra idea para aumentar las ventas y acortar el día de regreso, pero el dueño de la tienda dijo
“toda bendición no aceptada se convierte en maldición” y sí, las ventas aumentaron. Después de
varios meses llego el día esperado para por fin regresar a España, pero sus piedras lo hicieron
entrar en duda, él ya sabía cuidar ovejas, pero no sabía si podría ir a través del desierto para
conocer las pirámides y encontrar su tesoro. El mismo día el muchacho conoció a un inglés, él
también tenía dos piedras urim y tumim, el inglés buscaba al alquimista y el muchacho quería ir
a Egipto así que partieron en una caravana. Mientras viajaban el muchacho terminó haciendo
amistad con el camellero y mutuamente contaban sus historias, en su ruta se encontraban con
otras caravanas y compartían información, también cosas que el otro necesitaba. Una noche el
inglés converso con el muchacho, tras contarle su historia el inglés dijo que el principio que
mueve todas las cosas en alquimia se denomina “el alma del mundo” y es una fuerza positiva. El
inglés le conversó sobre la alquimia y dijo al muchacho que la piedra filosofal puede transformar
muchacho leía libros en inglés y un día devolvió los libros entonces le dijo al inglés “aprendí que
el mundo tiene alma y quien entienda esa alma, entenderá el lenguaje de las cosas” también
aprendió que muchos alquimistas vivieron su leyenda personal. Después de varios días y noches
de travesía llegaron al oasis, ahí estaba el alquimista y vio que en la caravana venia el hombre al
que debía instruir, al día siguiente los dos buscaron al alquimista sin éxito. En el oasis, el
muchacho vio una mujer y entonces pensó que ahí estaba el puro lenguaje del mundo, el quedo
anonadado por aquella mujer, mientras tanto el inglés fue a buscar al alquimista. Cada uno tenía
su leyenda personal, el inglés quería convertir el plomo en oro y él encontrar su tesoro, pero un
parte ya la había encontrado en aquella mujer. Un día el muchacho tuvo una visión extraña y fue
donde los jefes triviales, les advirtió sobre un ataque y logro salvar el oasis. El alquimista le dio
un consejo: que tenía que seguir su leyenda personal y su mujer lo esperaría. Al amanecer
partieron rumbo a las pirámides todo el camino hablaron sobre el corazón, sobre el alma del
mundo y un día fueron capturados por una de las tribus en guerra, tuvieron 3 días para demostrar
que era mago, al tercer día contemplo al desierto para que lo ayudase a convertirse en viento,
entonces el viento soplaba más fuerte y el sol brillaba con más intensidad y todos quedaron
sonrieron. “El amor es la fuerza que transforma y mejora el alma del mundo”. Después el
Alquimista mostró como convertir el plomo en oro, pero esta ya era su leyenda personal no del
muchacho entonces le entrego un pedazo de oro y partió, el muchacho camino por el desierto,
llego a las pirámides de Egipto y lloro de felicidad y dio gracias a Dios por creer en su leyenda
personal. El muchacho cavó en el lugar donde cayeron sus lágrimas sin encontrar nada, un ladrón
le dijo que allí donde estaba cavando había tenido un sueño igual, tenía que viajar a España y
cavar en las raíces de un sicomoro que estaba en la antigua iglesia, al fin había encontrado su
tesoro. Él regreso a España, al lugar donde había tenido aquel sueño así que cavó y encontró el
tesoro, después guardo las piedras en el baúl porque también eran su tesoro. El viento trajo un