1 - Capitalismo Miguel
1 - Capitalismo Miguel
1 - Capitalismo Miguel
El capitalismo es un sistema económico y social basado en que los medios de producción deben
ser de propiedad privada, el mercado sirve como mecanismo para asignar los recursos escasos
de manera eficiente y el capital sirve como fuente para generar riqueza. A efectos
conceptuales, es la posición económico-social contraria al socialismo.
Propiedad privada
El interés personal
El individualismo económico
Trabajo asalariado
Acumulación de capital.
Ventajas
El capital privado puede generar mucha riqueza, algo difícil en otros sistemas.
Se tiene acceso a la propiedad privada.
Todos pueden ejercer tanto sus derechos individuales como los del sector al que pertenecen.
Las fuerzas de trabajo se han modificado hasta alcanzar la figura del libre asalariado .
Desventajas
La descentralización del poder permite que la producción no se reparta, por lo que el sistema
no siempre va a satisfacer las necesidades básicas de la población ni va a ofrecer las misma
posibilidades de participación en la distribución de la riqueza.
Existe una enorme competencia por el dinero, pues este es el único motor social.
Se dan malas condiciones de trabajo como la explotación o el despido, justificables para que el
capitalismo ofrezca y logre lo que promete (libertad del hombre y desarrollo económico).
Neoliberalismo
El neoliberalismo surge como reacción a la intervención del Estado como garante de una mayor
justicia social (es decir, del Estado benefactor), y toma fuerza gracias a las debacles de la
economía capitalista del siglo XX, particularmente las registradas a finales de los años 20 y la de
la década de 1970.
Esta doctrina favorece la privatización de empresas y servicios que estaban en manos del sector
público, bajo la premisa de que el sector privado es más eficiente. Es partidario de la reducción
del gasto social, de propiciar la libre competencia, de las grandes corporaciones, y de debilitar y
desintegrar los sindicatos.
Propiedad privada
El liberalismo fruto del desarrollo de la burguesía capitalista antes que nada fue y en ello puso
su mayor énfasis un sistema económico que amplió el mercado en una dimensión mundial.
(Manifiesto Comunista, Marx y Engels)
Libertad
La libertad como valor absoluto, pero en manos de esa minoría. Libertad, fundamentalmente,
de los mercados de capitales para decidir el sentido de la opinión pública; para comprar, vender
o competir sin trabas burocráticas ni fronteras; para adquirir los máximos beneficios e
invertirlos donde plazca. Lo que lleva a imponer los intereses de esta minoría privilegiada "caiga
quién caiga" por encima de las necesidades de la mayoría de la sociedad y de la voluntad de los
estados nacionales.
Libre mercado
El neoliberalismo apuesta por un libre mercado, argumentando que es la forma más eficiente
de asignar los recursos.
La principal característica del libre mercado es que los precios de los bienes y servicios son
acordados por los vendedores y compradores, según la demanda y la oferta, debido a que las
regulaciones o intervenciones gubernamentales son mínimas, o incluso inexistentes.
El neoliberalismo plantea desregular el comercio, en los ámbitos nacional e internacional, y dar
lugar un mercado auto regulado.
Privatización
La ideología neoliberal indica que es necesario que el sector privado tenga una participación
activa en ámbitos tradicionalmente dominados por el Estado.
Los neoliberales consideran que ámbitos como la salud, la educación, la seguridad, la banca, los
servicios eléctricos, entre otros, deben estar privatizados.
Desregulación.
La intención es que las empresas vean reducidos los impuestos que se les aplican y las
regulaciones que pudieran interferir, de una u otra manera, en la oferta de sus bienes y
servicios a nivel nacional o internacional.
Competencia,
Algunos detractores de este modelo indican que la disminución de los impuestos trae como
consecuencia una menor cantidad de recursos del Estado para programas sociales destinados a
las poblaciones más susceptibles.
El deseo de que los mercados laborales se conciban de manera que les permitan mayor libertad
en la contratación de empleados.
En algunos casos, en la posibilidad de realizar sus actividades fuera del país de origen.
La crítica ante esta demanda del neoliberalismo es que los trabajadores quedan absolutamente
desprotegidos, porque dejan de existir regulaciones que les garanticen un ambiente laboral y
salario adecuados, entre otros beneficios.
Según el neoliberalismo, los individuos son iguales ante la ley pero, al mismo tiempo, tienen
distintas habilidades y capacidades que deben reconocerse y dejar que prosperen, para que
sean los propios individuos quienes generen el progreso en los ámbitos económico y social de
un país.
Algunos opositores de esta doctrina indican que esto genera mucha presión en los individuos,
debido a que, por ejemplo, se responsabilizan a sí mismos por los fracasos laborales sin
considerar que el contexto puede haber influido en dicho fracaso.
Uno de los principales preceptos del neoliberalismo es la intención de recortar el gasto público;
esta acción permite que se reduzcan los impuestos.
Sin embargo, algunos críticos del neoliberalismo consideran que la reducción del gasto público
puede traer descontentos en la población y desestabilidad económica y social.
Los neoliberales demandan una apertura de las fronteras mayor y una reducción de métodos
proteccionistas como los aranceles, aduanas y demás impuestos pensados para proteger el
producto interno frente al externo.ni
Sin embargo, los neoliberales argumentan que estas medidas solo logran disminuir las
posibilidades de comercio y encarecer los bienes y servicios. Es decir, va muy vinculado al
concepto de competencia, aplicándose a nivel internacional.
El neoliberalismo entiende el sindicalismo como un obstáculo incluso mayor que los partidos políticos.ni
Ejemplo de ello podría ser cuando Margaret Thatcher hizo frente a los trade (sindicatos británicos) en
una pugna con el sector de la minería como campo de batalla. La «dama de hierro» se puso de lado de
los empresarios y, finalmente, los sindicalistas cedieron ante sus presiones.
Ventajas:
Estabilidad macroeconómica.
Desventajas:
Restricciones presupuestarias;
Reducción del poder adquisitivo del salario para contener los niveles de inflación;
El proyecto neoliberal en América Latina tuvo su origen en la crisis del capitalismo de los años
1960. El anticomunismo de la Guerra Fría y el repudio de las políticas públicas keynesianas, que
otorgan un papel decisivo al Estado en el desarrollo económico, fueron sus fundamentos. Si
para Keynes el desarrollo dependía de políticas sociales dirigidas a asegurar el pleno empleo y
la redistribución de la riqueza por medio del control estatal de precios, de la inflación y de los
salarios, para los neoliberales fue la oposición y la crítica a dichos principios lo que hizo surgir su
doctrina.
La hegemonía keynesiana descartó por cuatro décadas (1930-1970) las teorías clásicas y
neoclásicas de David Ricardo, Adam Smith, Alfred Marshall y Walras. Los centros de producción
de conocimiento, los empresarios y la elite se socializaron en el lenguaje keynesiano. Pocos
llegaron a cuestionar el papel dinámico del Estado en el crecimiento del Producto Bruto Interno
(PBI) y en el desarrollo técnico-científico. Sus opositores ocuparon un lugar secundario en los
debates y permanecieron al margen de las principales propuestas. A pesar de ello, sentaron las
bases de lo que sería el neoliberalismo de fines del siglo XX.
La primera agrupación, surgida en Francia poco antes de la Segunda Guerra Mundial, fue el
Centro Internacional de Estudios para la Renovación del Liberalismo y tuvo como finalidad
atacar la planificación y el colectivismo estatal.ni De corta duración, fue el precedente utilizado
por Hayek para crear en Mont-Pèlerin –un pequeño centro suizo de veraneo– la sociedad de
mismo nombre. Constituida en 1947 para luchar contra el Estado social europeo y el New Deal
norteamericano, se reunió por primera vez en abril de aquel año. Hayek buscó unir y organizar
a quienes abdicaban del keynesianismo y querían expresar su rechazo por las políticas basadas
en una concepción social de la democracia.
En la década de 1970 se dan las manifestaciones más evidentes de las deformaciones que en nuestro
país han producido la magnitud de los ingresos petroleros, así como de las diferencias que nos separan
del resto de los países de América Latina. Mientras en los demás países se hace insostenible la crisis de
agotamiento del modelo de sustitución de importaciones, periodo de decrecimiento y sucesivo
estancamiento, en Venezuela, por el contrario, se vivió en medio del desenfreno que produce el alza en
los precios del petróleo, que paradójicamente agudizan la crisis de los países vecinos.
Resumiendo, diremos que en la década de 1970 se profundizan los males que ya acarreaban desde sus
inicios el modelo rentista y se convierte en la principal fuente de las causas de la crisis generalizada que
viviríamos desde 1983. Así, tenemos que los dos principales problemas de comienzos de la década de
1980, como lo son la caída de los ingresos petroleros y la deuda externa, tienen sus orígenes en la
década anterior. En general, en el periodo 1973–1983, mientras que el ingreso petrolero creció 350%,
los gastos lo hicieron 540% y el incremento de la deuda externa a corto plazo aumentó 2000%, llegando
al cierre del periodo a unos 29 millones de dólares, divididos en partes iguales entre los gobiernos de
Carlos Andrés Pérez (CAP) y Luis Antonio Herrera Campins (LHC) y de los cuales 60% tenía vencimiento
entre 1983 y 1984.
empresariales y el poder político no daban respuestas, por el contrario se produjo fuerte resistencia a
las luchas por reivindicaciones sociales y el gobierno de Jaime Lusinchi hizo gala del más engañoso
populismo. La sociedad civil que había tenido su mayor auge en 1936, a la muerte de Juan Vicente
Gómez, fue controlada por el poder del Estado y los partidos políticos gracias a la administración y
distribución de la renta petrolera. El apoyo popular al bipartidismo de Acción democrática y el Comité de
Organización Política Electoral Independiente (COPEI) —que caracterizaron el periodo 1958–1989— se
manifiesta con el bajo índice de abstención en las elecciones, máximo símbolo de la democracia
representativa venezolana. En 1993 se rompe el apoyo al bipartidismo al ser electo Rafael Caldera, con
el apoyo de un partido político nuevo, "Convergencia", formado por movimientos diversos, muchos
ligados a la izquierda moderada venezolana; sin embargo, en estas elecciones más de la mitad de los
venezolanos se abstuvieron de votar, y el presidente ganó con un porcentaje del 15% de las personas
con derecho a voto.
En 1989, Carlos Andrés Pérez (CAP) ocupa su segundo periodo presidencial, con el apoyo de un caudal
de electores quienes recuerdan de su primer periodo presidencial: la bonanza petrolera que permitió la
política de pleno empleo, aumentos salariales, subsidios, crecimientos del gasto social, créditos
agrícolas, nacionalismo económico, entre otros. Igualmente se había ofrecido en la campaña su imagen
de líder tercermundista y hombre dispuesto a enfrentarse a los desmanes que a nuestros países había
causado la deuda externa y las respectivas imposiciones de los organismos financieros internacionales.
Apenas logrado el triunfo y recién tomado el cargo el 2 de febrero de 1989 comenzó a implementarse
un plan económico radicalmente opuesto a lo que realmente se esperaba, más parecido al de su
opositor, Eduardo Fernández quien acusó a CAP de plagio. Los acuerdos con la banca internacional (2 de
febrero) y el anuncio de la aplicación del programa popularmente conocido como "paquete económico",
vinieron inmediatamente (16 de febrero), pero igual de rápido fue el rechazo popular que en rebelión
tomo las calles durante el 27 y 28 de febrero, sin que las fuerzas armadas del Estado pudieran
controlarlos.
Ya para 1992, al momento de los intentos de golpe, el país se había radicalizado en contra de las
estructuras vigentes, adquiriendo de paso un compromiso psicológico con cualquier opción, incluyendo
la violencia, que ofreciera alternativas a lo existente.2
Las medidas económicas eran más o menos las mismas que, desde principios de la década de 1980, se
venían produciendo en México y Chile y que a finales de la misma década se generaliza por todo el
subcontinente: privatización, reconversión industrial, disminución del gasto público, eliminación de los
aranceles de aduanas, liberación de los precios y de las regulaciones cambiarias, son algunas de las
principales medidas a tomar para equilibrar la economía y hacerla más productiva y competitiva.
Neocolonialismo.
Qué es Neocolonialismo:
Como neocolonialismo se denomina a una forma moderna de colonialismo, según la cual las antiguas
potencias coloniales del mundo, o las nuevas naciones hegemónicas, ejercen una influencia
determinante en materia económica, política y cultural sobre otras naciones independientes o
descolonizadas. La palabra, como tal, es un neologismo compuesto por el prefijo “neo-”, del griego νέος
(néos), que significa ‘nuevo’, y “colonialismo”, que se refiere al régimen de dominación de un territorio
por parte de un país invasor.
El neocolonialismo, en este sentido, es un sistema político basado en el dominio indirecto por parte de
las grandes potencias sobre otras naciones menos desarrolladas, y que está motivado, principalmente,
por razones geopolíticas, económicas y de supremacía militar.
Tras la liberación política de las colonias se mantuvieron generalmente las antiguas estructuras
económicas. La dependencia de las Importaciones de la metrópolis, la concentración de la producción
en ciertas Materias primas para exportar a Europa y la carencia de los médios técnicos y del capital, y la
conservación en ciertos casos de la propiedad de la industria en manos de colonizadores suponen la
continuación del control económico sobre estos países.
La devaluación de las materias primas que exportan y la venta de bienes manufacturados de mayor
valor añadido generan un Déficit comercial nocivo para estos países.
No tienen soberanía efectiva sobre su economía, la cual obedece las necesidades de los países
"desarrollados".
Muchos países latinoamericanos recurrieron durante la década de los años setenta a créditos de bancos
multinacionales, o empresas privadas de esos países se endeudaron y posteriormente su deuda privada
se convirtió en deuda pública. Esto fue posible por la clase dirigente con intereses extra nacionales, con
una visión neoliberalista, o por gobiernos militares impuestos desde afuera, en el caso de Latinoamérica
muchos de estos gobiernos fueron impuestos por los Estados Unidos, como en la denominado
Operación Cóndor. A estos países les resultó extremadamente difícil pagar la deuda externa y las
potencias aprovecharon estas deudas, junto con acciones militares, como por ejemplo el golpe a
Salvador Allende, o intimidación sindical, para convertir tales países en sus neocolonias, instalando
bases militares, obteniendo acceso a sus recursos naturales a precios marginalmente bajos o
implantando políticas que resultaran de beneficio para el país.
denominadas
Disputas Imperialistas.
1ª Guerra Mundial.
4* Neocolonialismo en Venezuela.
1. ENDEUDAMIENTO, CAÍDA DE LA
ECONÓMICA
, y la
. El elevado
, con ostensibles
efectos negativos sobre la inversión y el empleo.
autodinámico”4
en el mercado internacional”5
- y el
declaró
La primera rebelión popular contra el Fondo Monetario Internacional (FMI), nacía en Caracas el 27 de
febrero de 1989; se llamó entonces “El Caracazo”. Era el grito que sacudía a la nación contra la miseria,
el hambre y la pobreza creada por la receta del neoliberalismo que implosionó con el aumento de la
gasolina.
Los protagonistas: un pueblo que encendía la chispa de su propia liberación, que fue respondida por una
ráfaga de balas ordenadas por el presidente de entonces, Carlos Andrés Pérez. Dos resultados; el
primero, una masacre sin precedentes en la historia de la República y el segundo, el cambio de
paradigmas que se impulsó desde la conciencia social para cambiar el sistema de la democracia
representativa.
Este evento transformó radicalmente la vida política venezolana, introduciendo nuevos actores en la
escena: de estos cuatro protagonistas, el primero fue presidente de la república desde 1999 hasta 2013;
sin embargo, Arias también ha incursionado en política: fue electo gobernador del estado Zulia,
candidato presidencial en 2000 -compitiendo con su propio excompañero Hugo Chávez-, ha sido
nombrado embajador de Venezuela en la ONU, activista en la conformación del PSUV y desde 2012 es
nuevamente gobernador del estado Zulia. Acosta ha mantenido un bajo perfil, mientras que Urdaneta se
ha convertido en un crítico de las políticas llevadas a cabo por el gobierno de Chávez.
Todos los participantes en esta acción fueron llevados a prisión por su actuación en el hecho, siendo su
causa posteriormente sobreseída y puestos en libertad dos años después, durante la presidencia de
Rafael Caldera.
El golpe de Estado del 11 de abril de 2002 fue un golpe de Estado que se dio en Venezuela siendo
presidente Hugo Chávez. Precedido de un periodo de inestabilidad social y política en el que las fuerzas
contrarias al proyecto bolivariano lograron cohesionarse tras el éxito del conocido como paro cívico,
convocado para el 10 de diciembre de 2001, que logró cerrar una parte significativa del comercio
urbano;[1] una huelga general de 24 horas convocada por la Confederación de Trabajadores de
Venezuela (CTV) y la patronal Fedecámaras, iniciada el 9 de abril, que los convocantes prolongaron hasta
declararla indefinida el 10 de abril,[2] y los sucesos del 11 de abril de 2002.
11 de abril había convocada una marcha por un sector de la oposición, en principio recorrería los
sectores caraqueños de Parque del Este, acabando en PDVSA Chuao, finalmente, arengados por los
convocantes, los manifestantes se dirigieron hacia al Palacio de Gobierno ubicado en Miraflores,
Caracas, donde se encontraban simpatizantes del gobierno concentrados en sus alrededores desde el 9
de abril. Enfrentados estos grupos, con la presencia de francotiradores, se produjeron 18 muertos y
unos 69 heridos[3] que los militares juramentados utilizaron como justificación del golpe momentos
después: «La Constitución nos obliga a evitar más derramamiento de sangre y esa obligación pasa por la
salida pacífica del presidente y la sustitución de alto mando».
El paro petrolero en Venezuela de 2002-2003, llamado también Paro Nacional o Huelga General,
consistió en una huelga o paralización de actividades laborales y económicas de carácter general e
indefinido contra el gobierno de Venezuela presidido por Hugo Chávez, promovido principalmente por la
organización gremial Fedecámaras, y secundado por la directiva y trabajadores de la nómina mayor de la
empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA), los partidos de oposición aglutinados en la coalición
Coordinadora Democrática, el sindicato Confederación de trabajadores de Venezuela (CTV), diversas
organizaciones como Súmate e incluso medios de comunicación privados de prensa, radio y televisión.
Uno de los motivos se inicia al pasar por encima de la meritocracia de la empresa cuando en febrero de
2002 Hugo Chavez designa una nueva directiva dirigida por el economista de izquierda Gastón Parra
Luzardo en reemplazo del General Guaicaipuro Lameda. En abril de 2002 en medios de television Hugo
chavez despidió a 7 altos funcionarios y amenazó con despedirlos a todos [1]. Luego vendría el 11 de
abril de ese año que culminó con un breve derrocamiento de Chávez que duró menos de 48 horas.
Que es el ALCA?
todo el continente.
nuestros pueblos.
asiáticos.
extranjeros. Las ventajas son siempre para éstos. Los grandes problemas
la población.
humanos.
b.. Igual trato para una pequeña empresa y para una gran
nacional aplicada por los países de la región podría ser considerada por
Todos los derechos para los grandes capitales, sin que el Estado pueda
barreras aduaneras- con irse a otro lugar donde puedan pagar menores
Hacia el fin de la Guerra Fría, pese a que la geopolítica y las tecnologías militares cambiaron y a que
declinó la importancia del Canal de Panamá, la preferencia estadounidense por esta estrategia
hegemónica se mantuvo. Para la década de 1980, se había vuelto difícil entender por qué los líderes
estadounidenses consideraban todavía importante ejercer un control férreo sobre Granada, El Salvador
y Nicaragua, pero aun así Washington seguía adelante con sus políticas altamente intervencionistas. Lo
que motivaba estas políticas no eran tanto consideraciones de «seguridad nacional», como se
proclamaba entonces, sino de «inseguridad nacional». En otras palabras, un impulso psicopolítico
basado en el temor a perder el control sobre aquello que EEUU había manejado durante mucho tiempo,
como las cuestiones internas y los vínculos externos de los países de la región caribeña. Este impulso
reflejaba la inercia de actitudes y políticas configuradas en una época anterior y que ya no resultaban
apropiadas a los nuevos tiempos (si es que alguna vez lo habían sido).
Desde el fin de la Segunda Guerra hasta mediados de la década del 70, y en algunos aspectos hasta el
término de la Guerra Fría, EEUU asumió a la mayoría de los países latinoamericanos como sus
seguidores casi automáticos.
El ALCA fue un acuerdo impulsado por EE.UU., que contemplaba la reducción de las barreras
arancelarias en 34 países de la región. El único excluido de la propuesta era Cuba.
El Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) fue un acuerdo impulsado por Estados Unidos que
pretendía asegurar la libre circulación de mercancías a través de la aplicación de normas comerciales
supranacionales, y limitar la capacidad de acción de los Gobiernos en sus propias economías, el poder
era para los inversores.
La idea nació en Miami (sureste) en diciembre de 1994 y en 1998 contó con la participación de Jefes de
Estado de 34 países del continente americano, excepto Cuba, pero con el pasar de los años y el triunfo
progresivo de la izquierda en América del Sur, las cosas cambiaron.
América latina como paraíso explotable recursos hidratos y recursos minerales petróleo biodiversidad
2La problemática de la explotación minera –y más ampliamente, de los recursos naturales− recursos
hidricos ocupa un lugar destacado dentro de los grandes cambios geopolíticos y la redefinición
asimétrica de las relaciones Norte-Sur : la apropiación, extracción y control de las riquezas que genera
esta actividad han sido importantes motores de los procesos coloniales y de expansión territorial que
han vivido las Américas desde los siglos XV y XVI. La « sed » de oro y plata ha alimentado una larga
experiencia de dominación socioeconómica, política y cultural, más allá incluso de las Independencias,
forjando hasta nuestros días una suerte de « tradición » de explotación de recursos de índole colonial, a
través de la cual las economías latinoamericanas extrovertidas se han vuelto dependientes de las
grandes potencias industriales que dominan el sistema internacional (véase « Domination et
extraversion de l’Amérique latine » en Géopolitique des Amériques, dir. Alain Musset, París : Nathan,
2014, 4ª ed.). Dicho modelo se plasma de norte a sur del continente, además de reflejarse en las
relaciones de América Latina con otros polos de la economía mundial (Europa, China), e incluso a nivel
interno dentro de los países, tanto al norte como al sur del continente. Así, la autora Lucie Genay («
Extracción de uranio y perpetuación del colonialismo interno en Nuevo México ») muestra hasta qué
punto la historia de la extracción de uranio en este Estado confirma que, si bien los retos de la actividad
minera han cambiado, siguen prevaleciendo algunos esquemas neocoloniales de la construcción
nacional estadounidense, perpetuando una herencia de desigualdad social y racial y generando a su vez
reacciones desiguales por parte de las naciones indias implicadas. Este « neocolonialismo extractivista »
también es denunciado con firmeza por numerosos movimientos sociales y medioambientales y
comunidades indígenas de América Latina, unas movilizaciones que han dado origen a diversos
conflictos con los gobiernos en el poder y las empresas mineras. Frente a la proliferación de dichas
movilizaciones, los gobiernos del continente han ensayado diversas estrategias, desde la represión o la
contención institucional hasta el establecimiento de moratorias o la declaración de partes del territorio
nacional como libres de explotación minera (María Teresa Gutiérrez Haces, « La inversión extranjera y la
actividad minera en América Latina. Las estrategias de los gobiernos en los conflictos con las compañías
mineras »). En efecto, ya se definan como progresistas, « nacional-populares » o conservadores, todos
los gobiernos han intentado sacar provecho del « boom » del precio de las materias primas y mineras de
los últimos años, aunque sea según lógicas a menudo distintas en términos de políticas públicas. No
obstante, la crisis mundial y la caída de la demanda desde 2007-2008 han puesto de manifiesto hasta
qué punto las economías americanas podían enmarcarse en una lógica de renta y reprimarización
contraria a cualquier perspectiva de desarrollo « sostenible » o virtuoso. Así pues, ¿es posible otro
modelo minero ? Así parece sugerirlo el gobierno bolivariano de Venezuela con su « Plan de acción
estratégica común para el desarrollo del cinturón y el arco minero del Orinoco » con el que pretende
articular crecimiento económico, alianza con las empresas multinacionales y desarrollo de servicios
sociales públicos, « controlando » al mismo tiempo la evolución del pionero frente minero. Con todo, el
estudio de Anne Péné-Annette sobre la extracción aurífera en el estado Bolívar (« ¿Reactivación de la
extracción minera en la Guayana venezolana ? ») subraya la magnitud de la « destrucción
medioambiental y los daños humanos » que puede suponer este extractivismo llevado a cabo a escala
de todo un país.
Recursos hidricos.
recursos hídricos. ... Los recursos hídricos son los cuerpos de agua que existen en el planeta, desde los
océanos hasta los ríos pasando por los lagos, los arroyos y las lagunas. Estos recursos deben preservarse
y utilizarse de forma racional ya que son indispensables para la existencia de la vida.
Recursos minerales.
Un recurso mineral o mena es una concentración natural de algún elemento o compuesto de la corteza
terrestre, que puede ser extraído o procesado con los medios tecnológicos disponibles. Los recursos
minerales se dividen en metálicos o no metálicos, según permitan la obtención de unos o de otros tipos
de elementos.
Petróleo.
El petróleo (del griego: πετρέλαιον, lit. «aceite de roca») es una mezcla de compuestos orgánicos,
principalmente hidrocarburos insolubles en agua. También es conocido como oro negro, petróleo crudo
o simplemente crudo.
Biodiversidad.
La biodiversidad es clave para la producción de alimentos y la seguridad alimentaria. ... América Latina y
el Caribe es una de las principales productoras de alimentos del mundo, gracias a su enorme riqueza de
recursos naturales y a su biodiversidad; mantenerla es fundamental para la seguridad alimentaria de
todos y todas.