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Sistema Urinario - Slide

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SISTEMA

URINARIO
ESTUDIANTE: JOSEMAR VINICIUS LIMA DO NASCIMENTO G2-A

DOCTOR: WILDER VACAFLOR MD

CODIGO: 1301608
El sistema urinario comprende los riñones, derecho e izquierdo, que elaboran la orina y la
evacuan por vías excretoras: los cálices y la pelvis renal. A partir de cada pelvis renal la orina
recorre el uréter correspondiente, que la conduce a la vejiga urinaria. Este reservorio es el
encargado de controlar la evacuación de la orina al exterior en períodos (micción), a través de la
uretra. Los riñones también tienen funciones de secreción endocrina.

Los dos riñones son semejantes, pero su situación retroperitoneal, paravertebral y


toracoabdominal les confiere relaciones diferentes a la derecha y a la izquierda.

RINÓN

CONFIGURACIÓN EXTERNA

El riñón (ren) tiene la forma de una semilla de haba (alubia, judía o poroto), cuyo hilio está
orientado medialmente (fig. 116-1). Su consistencia es firme y su coloración en el ser vivo, rojo-
violácea. En él se describen dos caras, dos bordes y dos extremidades.
CARAS

La cara anterior es lisa, algo abollonada, convexa en el sentido vertical y transversal. Está
ubicada en dirección anterolateral.

La cara posterior es casi plana.

BORDES

El borde lateral, convexo, reúne las dos caras en una curva regular.

El borde medial, cóncavo, está interrumpido por el hilio del riñón, limitado por dos
salientes, superior e inferior, que corresponden a las extremidades superior e inferior del
órgano; por un borde anterior, oblicuo abajo y en sentido medial; y un borde posterior,
oblicuo abajo y lateralmente. Entre esos bordes se encuentra el seno renal: excavación
romboidal limitada por el parénquima renal, ocupada por las vías excretoras, los
elementos vasculonerviosos de la raíz y el tejido adiposo.
EXTREMIDADES ( POLOS)

La extremidad superior es ancha, redondeada, algo inclinada en sentido medial.

La extremidad inferior es más alargada y más vertical.

Cada riñón mide de 10 a 12 cm de alto, 5 a 8 cm de ancho y 3 a 5 cm de espesor, en el


adulto. El peso es de 170 g término medio. El volumen de ambos riñones es
sensiblemente igual.

CONFIGURACIÓN INTERNA

Un corte vertical del riñón muestra, desde el exterior hacia el interior: una cápsula
fibrosa; luego, inmediatamente más profundo, el parénquima renal, prolongado hacia el
seno renal por las papilas, y las vías excretoras, formadas por los cálices renales y la
pelvis renal.
CÁPSULA FIBROSA

Es una membrana resistente de

parénquima
.
aproximadamente 1 mm de espesor, poco
elástica, que se puede decolar del
subyacente. Rodea por
completo el órgano y penetra en el hilio,
donde se invagina en contacto con los
vasos renales.

PARÉNQUIMA RENAL

El parénquima renal presenta, desde la superficie


hasta la profundidad:

Corteza renal: su ubicación es mássuperficial y de


color más claro; en ella se concentran los
corpúsculos renales y los túbulos contorneados.
Se encuentra cubierta por la cápsula fibrosa.
Tiene un espesor de 6 mm, aproximadamente.
Columnas renales [de Bertin]: son prolongaciones profundas del tejido que constituye la
corteza renal. Estas prolongaciones forman territorios alargados entre las pirámides renales,
y se extienden hasta el seno renal.

Médula renal: es más oscura y más profunda que la corteza renal. La médula renal
conforma las pirámides renales [de Malpighi], de forma aproximadamente cónica, con la
base orientada hacia la corteza y el vértice, hacia el seno renal. Las pirámides renales están
separadas entre sí por las columnas renales. Los vértices redondeados de las pirámides
protruyen en el seno renal constituyendo las papilas renales; cada una de ellas penetra en
un cáliz menor. En cada papila renal desembocan los túbulos colectores, a través de los
orificios papilares, formando el área cribosa (fig. 116-2). Dentro de la pirámide renal se
pueden describir una zona externa y otra interna.
El parénquima renal está organizado en lóbulos renales, cada uno compuesto por una
pirámide rodeada por corteza renal. Cada riñón tiene alrededor de nueve lóbulos renales.

CÁLICES RENALES

Los cálices renales marcan el comienzo de la vía excretora del riñón. Transportan la orina
entre las papilas renales y la pelvis renal.

CÁLICES RENALES MENORES

Son pequeños conductos membranosos que se insertan alrededor de cada papila renal y
desembocan en los cálices renales mayores. Su forma de cáliz cóncavo es la contraparte de
la superficie convexa de la papila renal que desemboca en él. Entre tres y cinco cálices
menores drenan en cada cáliz mayor.
CÁLICES RENALES MAYORES

Se trata de conductos más anchos que los anteriores. Su número varía de dos a cinco por
riñón. A menudo hay tres, situados en el mismo plano vertical-transversal:

A. Cáliz superior: con un eje mayor orientado en dirección oblicua hacia abajo y
medialmente.

B. Cáliz medio: es el más variable. Su dirección es transversal,medial y algo descendente.

C. Cáliz inferior: de dirección transversal, medial y algo ascendente.


La longitud de los cálices mayores
es tanto mayor cuanto más pequeña
es la pelvis renal, donde
desembocan.
PELVIS RENAL

La pelvis renal [bacinete] tiene la forma de un embudo aplastado de adelante hacia


atrás, orientado hacia abajo y medialmente (fig. 116-3). Se encuentra dentro del seno
renal y atraviesa el hilio del riñón.

El fondo de la pelvis renal se apoya en la abertura de los cálices mayores. Su borde


supero medial es convexo y oblicuo hacia abajo y medialmente. Su borde inferolateral
es casi horizontal.

Termina abajo y en dirección medial en el cuello de la pelvis renal, el que marca la


unión pieloureteral, a partir de la cual la vía urinaria se continúa con el uréter. La cara
posterior de la pelvis renal está más separada de los bordes del hilio renal, y es más
accesible quirúrgicamente que su cara anterior.
La forma de los cálices y de la pelvis renal (el conjunto pielocalicial) es muy variable;
existen pelvis renales ampulares muy voluminosas, en cuyo caso los cálices mayores
son muy cortos o faltan; en otros, los cálices se reúnen tardíamente. Entre estos existen
numerosas formas intermedias.

ANOMALÍAS

Existen anomalías de desarrollo, de posición, y anomalías de la pelvis renal.

Anomalías de desarrollo

Se pueden citar:

– Riñón único.
– Riñón atrofiado: atrofia renal unilateral.

Riñón en herradura: donde los dos riñones están unidos por una banda de parénquima
transversal inferior, que une las extremidades (polos) inferiores. Los dos riñones pueden
tener sus pelvis renales orientadas en sentido lateral y no medial.
ANOMALÍAS DE POSICIÓN

Son las ectopias renales que pueden ser: inferiores, lumbar baja o pelviana;
superiores, torácica; cruzadas, dos riñones del mismo lado, etcétera.

ANOMALÍAS DE LA PELVIS RENAL

A veces se nota la ausencia de la pelvis o, por el contrario, la existencia de una


pelvis con dos uréteres.

TOPOGRAFÍA Y RELACIONES

Los riñones están situados en las fosas lumbares, a los lados de la 12.ª vértebra
torácica y de las dos primeras vértebras lumbares, detrás del peritoneo (fig. 116-4).
El hilio del riñón y la pelvis renal corresponden al espacio que separa el proceso
costal de la 1.ª y de la 2.ª vértebra lumbar. Su orientación es tal que el eje mayor es
oblicuo hacia abajo y lateralmente. Las extremidades superiores se encuentran más
próximas entre sí que las inferiores. Sus caras están orientadas, la anterior hacia
adelante y lateralmente, y la posterior, hacia atrás y medialmente. El riñón derecho
está algo más abajo que el izquierdo: la diferencia de altura es de media vértebra.
RELACIONES
INMEDIATAS

Los riñones están separados de


los órganos vecinos por una
envoltura fibrosa (distinta de la
cápsula renal) llamada fascia
renal. Es una hoja conectiva desarrollada a expensas del tejido extraperitoneal que
rodea el riñón a distancia, y constituye en él un compartimento, la celda renal. En el
borde lateral del riñón, ese tejido se condensa y se desdobla en dos hojas:
A. La hoja anterior de la fascia renal [fascia de Gerota], delgada, está reforzada adelante por
las fascias de coalescencia del peritoneo parietal posterior.

B. La hoja posterior de la fascia renal [fascia de Zuckerkandl] es más gruesa y resistente.


ARRIBA

Las dos hojas de la fascia renal pasan por delante y por detrás de la glándula suprarrenal y se
fijan en la cara inferior del diafragma. Se reúnen debajo de la glándula suprarrenal y encima de
la extremidad superior del riñón, formando la hoja interrenosuprarrenal, que separa los dos
órganos. Por este motivo, en los desplazamientos del riñón no resulta afectada la situación de
la glándula suprarrenal.

ABAJO

Las dos hojas permanecen independientes; no obstante, están unidas, por debajo de la
extremidad inferior del riñón, por tractos fibrosos interrumpidos, que permiten el pasaje del
uréter.
MEDIALMENTE

Las dos hojas de la fascia renal se confunden con el tejido conectivo que rodea a la raíz renal,
tanto adelante como atrás, lo que cierra medialmente el espacio perirrenal en forma incompleta
(fig. 116-8). La hoja anterior se prolonga por delante de la aorta y la vena cava inferior,
mientras que la hoja posterior lo hace por atrás.
EL ESPACIO PERIRRENAL

El espacio perirrenal (fig. 116-8) se interpone


entre la cápsula fibrosa del riñón y la fascia
renal; está ocupado por la grasa perirrenal,
denominada cápsula adiposa del riñón. Su
espesor es variable. No existe en el recién
nacido. Es gruesa en los sujetos adiposos. Es
delgada hacia adelante y arriba, y más gruesa
hacia abajo y atrás, y es aún más gruesa
lateralmente. Dispone de vascularización
propia. La cápsula adiposa del riñón reacciona
en relación con las infecciones renales:
perinefritis, abscesos perinefríticos.
RELACIONES POSTERIORES Y MEDIALES

Las relaciones posteriores del riñón son idénticas a la derecha y a la izquierda. Son
relaciones toracolumbares, de las cuales el riñón está separado por el espacio pararrenal.

ESPACIO PARARRENAL O RETRORRENAL

Está situado por detrás de la hoja posterior de la fascia renal. Esta hoja posterior se
encuentra interpuesta entre la celda renal y los planos posteriores. El espacio pararrenal
está ocupado por el cuerpo adiposo pararrenal [de Gerota].

RELACIONES TORÁCICAS

Corresponden al tercio superior del riñón derecho y a los dos tercios superiores del riñón
izquierdo que se aplican sobre el diafragma, por encima de los ligamentos arqueados
[arcuatos] medial y lateral. Más allá del músculo se encuentra el receso pleural y luego, la
11.ª y 12.ª costilla, con el 11.º espacio intercostal. El pulmón, que no sobrepasa hacia abajo
el nivel de la 10.ª costilla, queda por encima del riñón (fig. 116-9).
RELACIONES LUMBARES

Están constituidas por las partes blandas situadas entre la columna lumbar, la 12.ª costilla
y la cresta ilíaca. Medialmente, se encuentra el músculo psoas mayor, cubierto por la
prolongación de la fascia ilíaca. En sentido más lateral y posterior está el músculo
cuadrado lumbar, cubierto por la fascia transversalis.

Lateralmente, la aponeurosis de origen del


músculo transverso del abdomen, reforzada por
el ligamento lumbocostal, forma el fondo del
triángulo lumbar superior [cuadrilátero de
Grynfelt], situado por debajo de la 12.ª costilla y
cubierto por los músculos oblicuo externo del
abdomen y dorsal ancho. Entre los bordes de
estos dos músculos, el oblicuo externo por
adelante y el dorsal ancho por atrás, y teniendo
como límite inferior a la cresta ilíaca, se ubica el
triángulo lumbar inferior [triángulo de J. L. Petit]
(fig. 116-10), en cuyo fondo se encuentra la
porción posterior del músculo oblicuo interno.
Nervios y vasos cruzan en dirección oblicua la cara posterior del riñón, por delante del
músculo cuadrado lumbar: el nervio subcostal, los vasos subcostales y, por abajo, los
nervios iliohipogástrico e ilioinguinal.

La 12.ª costilla, de longitud muy variable, se relaciona con lacara posterior del riñón y
desborda más o menos sobre su borde lateral. Según su longitud, se constituye o no en un
obstáculo para el abordaje quirúrgico del riñón desde la región lumbar.

RELACIONES ANTERIORES Y LATERALES

Por intermedio de la fascia renal, las relaciones anteriores son diferentes a la derecha y a la
izquierda (fig. 116-11).

RELACIONES DEL RIÑÓN DERECHO


En la cavidad peritoneal se encuentran (fig. 116-12):

El hígado: su cara visceral cubre los dos tercios superiores del riñón; se trata de la
impresión renal en el lóbulo derecho del hígado. El peritoneo se interpone entre los dos
órganos. Hay contacto directo entre ambos cuando la reflexión del peritoneo se hace baja:
se crea así el ligamento hepatorrenal.
La flexura cólica derecha: se relaciona con la parte inferior del riñón. El mesocolon
transverso está separado del riñón, inferomedialmente, por la fascia retrocólica
ascendente. En el mesocolon se encuentran lasramas de la arteria cólica media.

El surco paracólico derecho se interpone entre el borde lateral del riñón y la pared lateral
del abdomen. En el abordaje posterolateral del riñón o lumbotomía se trata de evitar su
abertura.

La porción descendente del duodeno: se aplica por delante del borde medial del riñón, del
hilio y de la raíz renal. Está separada de ellos por la fascia retroduodenopancreática.

El abordaje transperitoneal del riñón derecho exige el descenso de la flexura cólica


derecha, el decolamiento coloparietal del mesocolon, y por último el decolamiento
duodenopancreático.

RELACIONES DEL RIÑÓN IZQUIERDO

La inserción oblicua hacia arriba y a la izquierda del mesocolon transverso, por delante del
riñón, en la unión del tercio superior y del tercio medio, divide sus relaciones en tres partes
(fig. 116-13):
A. Parte superior, supramesocólica: corresponde al bazo, que se aplica sobre la cara
anterior y el borde lateral del riñón (frecuencia de las lesiones traumáticas asociadas del
bazo y del riñón). Medialmente al bazo, la cola del páncreas y la raíz esplénica separan
a este nivel el riñón izquierdo de la bolsa omental y de la cara posterior del estómago.

B. Parte media, colomesocólica: corresponde a la parte izquierda del colon transverso,


provista de un meso cada vez más corto hasta la flexura cólica izquierda, fijada por el
ligamento frenocólico. Esta flexura cólica izquierda se relaciona con la hoja anterior y el
borde lateral de la fascia renal, a través de la fascia retrocólica descendente. El colon
descendente acolado desciende a lo largo del borde lateral del riñón.

C. Parte inferior, inframesocólica: por intermedio de la cápsula fibrosa, de la cápsula


adiposa, de la fascia renal, de la fascia retrocólica descendente y del mesocolon que
contiene a los vasos cólicos izquierdos, el riñón se relaciona con la cavidad peritoneal y
las asas delgadas.

El abordaje transperitoneal del riñón izquierdo es más dificultoso que el del riñón
derecho, debido a la variación de las relaciones, que depende del nivel.
RELACIONES DEL BORDE MEDIAL

El borde medial del riñón se proyecta hacia atrás por debajo de la 12.ª costilla, a los lados de
la columna lumbar. Entre los niveles de los procesos costales de las dos primeras vértebras
lumbares se proyecta el hilio renal.
Las relaciones del borde medial se diferencian por encima y por debajo del hilio renal; se
pueden describir relaciones suprahiliares e infrahiliares.

PORCIÓN SUPRAHILIAR

Por encima del hilio, el borde medial está bordeado por la glándula suprarrenal. A la
derecha, la vena cava inferior está ubicada delante del borde medial. A la izquierda, el pilar
izquierdo del diafragma separa el riñón de la aorta y de los nodos linfáticos preaórticos.

PORCIÓN INFRAHILIAR

En ella al borde medial lo sigue el uréter, que está unido a la extremidad inferior del riñón por
el ligamento ureterorrenal [de Navarro].

RELACIONES DE LAS EXTREMIDADES (POLOS)

La extremidad superior del riñón derecho está cubierta por la glándula suprarrenal, que
desciende medial a ella y la separa del diafragma
A la izquierda, la extremidad superior se relaciona, lateralmente, con el bazo y con el
fundus gástrico por arriba y adelante, y medialmente, con la glándula suprarrenal, que
desciende casi hasta la raíz renal.

La extremidad inferior derecha se relaciona por delante con la flexura cólica derecha,ya la
izquierda, con las asas delgadas

Debajo de este polo inferior, en la separación de las dos hojas de la fascia renal, el tejido
adiposo perirrenal se comunica con el de la región lumbar baja y la fosa ilíaca: es la vía que
sigue el riñón cuando se desplaza por debajo de su posición normal (ptosis renal).

VASCULARIZACIÓN, INERVACIÓN Y RAÍCES RENALES

ARTERIAS RENALES

En general, existe una arteria renal para cada riñón, procedente de la aorta abdominal (fig.
116-14).
ARTERIA RENAL DERECHA

Se origina de la cara derecha de la aorta abdominal a nivel de la 1.ª vértebra lumbar, algo
por debajo del origen de la arteria mesentérica superior. Mide de 3 a 5 cm de longitud y su
diámetro varía entre 4 y 7 mm. Transcurre lateralmente, algo oblicua hacia abajo y atrás,
amoldándose al cuerpo vertebral, al pilar del diafragma y a la saliente del músculo psoas
mayor. Pasa por detrás de la vena cava inferior y en general se sitúa por detrás de la vena
renal derecha. Rodeada por un rico plexo nervioso, proporciona sus ramasterminales algo
antes de llegar al hilio del riñón.

ARTERIA RENAL IZQUIERDA

Es tan voluminosa como la derecha, pero algo más corta. Se origina en la cara izquierda de
la aorta abdominal y su trayecto es, como a la derecha, oblicuo hacia abajo, atrás y
lateralmente. Se ubica por delante de la columna lumbar, del pilar del diafragma y del
músculo psoas mayor; por adelante se relaciona con la vena renal izquierda y el cuerpo del
páncreas.
RAMAS EXTRARRENALES

Las ramas que dan ambas arterias renales


antes de llegar al hilio son las arterias:

– Suprarrenal inferior [capsular]: para la


glándula suprarrenal.

– Ramas ureterales: que descienden para


irrigar la primera
porción del uréter
– Capsuloadiposas: que se anastomosan con arteriolas provenientes de las arterias suprarrenales,
ováricas o testiculares, lumbares, frénicas inferiores, hasta de la aorta, para formar una red
perirrenal, materializada por el arco arterial exorrenal que sigue el borde lateral del riñón.

RAMAS INTRARRENALES O INTRASINUSALES

Estas ramas nacen en las proximidades del hilio renal o en el seno renal. Se disponen en una o
varias ramas anteriores y una rama posterior, en relación con la pelvis renal (fig. 116-15):

Rama anterior de la arteria renal [prepiélica]

Se dirige levemente hacia abajo, distribuyéndose por delante de la pelvis renal. Da de 3 a 5 ramas
en el hilio o en el seno renal; estas son las arterias segmentarias: superior, anterosuperior,
anteroinferior e inferior.
RAMA POSTERIOR DE LA ARTERIA RENAL [RETROPIÉLICA]

Pasa sobre el borde superior de la pelvis renal, ubicándose por atrás y dejando libre una gran
parte de su cara posterior. Se divide en el seno renal y da una arteria segmentaria posterior.

EN EL INTERIOR DEL RIÑÓN

En la periferia del seno renal las arterias segmentarias se dividen en ramas, relacionadas con
los cálices menores. Las ramificaciones terminales de las arterias segmentarias son las arterias
interlobulares que penetran en las columnas renales, rodeando las pirámides renales, y se
dirigen hacia la corteza renal. No existen anastomosis entre las arterias interlobulares. A nivel
de la base de la pirámide renal, estas arterias dan origen a las arterias arqueadas (arcuatas), y
estas a las arterias corticales radiadas o interlobulillares, de dirección perpendicular con
respecto a las anteriores. En la corteza renal, las arterias radiadas originan las arteriolas
aferentes del glomérulo.
SEGMENTACIÓN ARTERIAL DEL RIÑÓN

Existen dos territorios arteriales distintos; uno anterior, dependiente de la rama anterior, y otro
posterior, dependiente de la rama posterior de la arteria renal (figs. 116-16 y 116-17). Estos
territorios están separados por un plano transversal que termina en la superficie en una línea
paralela al borde lateral del riñón, situada a 1 cm por detrás de este borde: es la línea exangüe
[de Hyrtl]. Ese plano, relativamente avascular, puede utilizarse para la abertura del riñón:
nefrotomía.

Se ha dividido al riñón en cierto número de territorios, los segmentos renales, que disponen de
una vascularización y de un drenaje urinario propios. Esto permite resecciones renales
parciales anatómicamente regladas.

Cada segmento renal está irrigado por una arteria segmentaria. Encontramos los siguientes
segmentos renales: segmento superior, segmento anterosuperior, segmento anteroinferior,
segmento inferior y segmento posterior.
VARIACIONES

Son muy frecuentes. Pueden ser:

– En el origen: pueden existir dos o tres arterias renales distintas para cada riñón, generadas de
la aorta abdominal. La arteria de la extremidad inferior, aislada, que cruza el cuello de la pelvis
renal, puede molestar su evacuación: hidronefrosis de origen arterial.

– En la distribución: el equilibrio entre los sistemas anterior y posterior no es siempre el que se ha


descrito antes. Una de las dos arterias puede adquirir más importancia en detrimento de la otra.
La circulación arterial del riñón ha sido
objeto de numerosos trabajos, que pueden
consultarse para mayores detalles (Trueta,
Merklin y Michels, Ternon, Cordier y Nguyen
Huu, Calas y Convert, Alves y Presa).

VENAS RENALES

EN EL RIÑÓN

El sistema venoso renal se origina en la


zona subcapsular de la corteza, a través de
las venas estrelladas [estrellas de
Verheyen], de disposición radiada paralela
a la superficie renal (fig. 116-18). Estas
venas estrelladas drenan en las venas
corticales radiadas o interlobulillares de
dirección perpendicular a la cápsula fibrosa
del riñón.
Se dirigen a la región profunda de la corteza, donde desembocan en las venas arqueadas
(arcuatas), de dirección paralela a la base de las pirámides renales. Las venas arqueadas
(arcuatas) también reciben la sangre proveniente de las vénulas rectas desde la médula renal.
Desde los lados de las pirámides parten las venas interlobulares que reciben a las venas
arqueadas y se profundizan por las columnas renales hasta el seno renal. Allí forman,
alrededor de los cálices, coronas venosas que terminan en dos o tres troncos gruesos que se
reúnen por delante de la pelvis renal, para constituir la vena renal

VENA RENAL DERECHA

La vena renal derecha es corta, prearterial, de dirección transversal. Termina en el lado


derecho de la vena cava inferior.

VENA RENAL IZQUIERDA

La vena renal izquierda es más larga, puesto que debe franquear el plano mediano para alcanzar a
la vena cava inferior. Pasa por delante de la aorta abdominal y debajo de la arteria mesentérica
superior. Recibe a las venas izquierdas suprarrenal y ovárica o testicular.

El abocamiento de las venas renales en la vena cava inferior delimita dos sectores funcionales muy
diferentes: por debajo y por encima de las venas renales.
AFLUENTES EXTRARRENALES

Las venas renales reciben:

– Vena suprarrenal izquierda.


– Venas de la cápsula adiposa: como las arterias, estas constituyen un arco exorrenal que
comunica con otras venas además de las renales: venas frénicas inferiores, capsulares, etc.
Además, están relacionadas con las venas intrarrenales a través de la cápsula renal por venas
perforantes (fig. 116-19).

A la izquierda es necesario destacar:

– La llegada de las venas testiculares u ováricas.


– La participación de la vena renal en la constitución de la vena hemiácigos, por una rama que
la une a la vena lumbar ascendente izquierda, anastomosis renohemiácigos [Tuffier y Lejars].

Las vías de drenaje extrarrenal pueden ir al sistema ácigos a través de la vena subcostal, o al
sistema porta hepático, mediante las venas cólicas. Así, se encuentra establecido un sistema
venoso de drenaje de las venas del riñón en caso de trombosis o de obliteración de la vena
renal.
LINFÁTICOS

Se originan en el parénquima renal y siguen el mismo camino que las venas (fig.
116-20). Acompañan a los vasos en el seno renal y se agrupan, tanto a la derecha
como a la izquierda, en colectores anteriores, medios y posteriores:
– Las vías anteriores, prevenosas, alcanzan los nodos linfáticos aórticos laterales, sea en forma
directa o a través de un nodo linfático intermediario, radicular a la izquierda, precavo a la derecha.

– Las vías medias están situadas entre las arterias y las venas; van también a los nodos linfáticos
aórticos laterales.

– Las vías posteriores, retropiélicas y retroarteriales, drenan en los nodos retrocavos a la derecha o
aórticos laterales a la izquierda, cerca de la arteria mesentérica inferior.

Estas vías se encuentran en relación directa con los nodos linfáticos cólicos, ureterales, testiculares u
ováricos y frénicos inferiores por intermedio de vías linfáticas desarrolladas en el espacio perirrenal.

Las circulaciones sanguínea y linfática en el riñón revisten gran importancia, pues son una circulación
funcional mucho más que nutricia. Sus alteraciones repercuten en la filtración urinaria, la tensión
arterial, etc. La vena renal izquierda se puede utilizar para derivar la circulación porta hepática:
anastomosis esplenorrenal de Blakemore y Lord.
NERVIOS

Los riñones disponen de una inervación muy abundante que proviene de los ganglios
aorticorrenales, de los ganglios renales, del plexo renal, de los nervios esplácnicos mayor y
menor, del plexo celíaco, del ganglio mesentérico superior y, a veces, del tronco simpático
lumbar (Mitchell) (fig. 116-21). Algunos de los nervios originados del plexo celíaco y de los
nervios esplácnicos pasan al ganglio aorticorrenal, situado encima de la arteria renal,
derecha e izquierda, cerca de su origen. Estos nervios, en su mayoría, contienen fibras
simpáticas y también parasimpáticas (provenientes del nervio vago).

A partir de esos orígenes, e interrumpidos por pequeñas masas ganglionares, los nervios del
riñón se disponen de cada lado en plexos alrededor de la arteria renal. Con ellas penetran en
el hilio y siguen sus ramificaciones en el parénquima. De esta descripción surge que la
inervación del riñón, si se la limita a la resección del ganglio aorticorrenal, es incompleta. La
resección de los plexos nerviosos periarteriales es teóricamente más valedera.
RAÍCES RENALES

A la derecha, como a la izquierda, la raíz renal [pedículo] está constituida por el conjunto de
las formaciones vasculares, nerviosas y excretoras que penetran en el hilio o salen de él: la
arteria y la vena renales, los linfáticos, los nervios renales y la pelvis renal. Esta última,
oblicua abajo y medialmente, cruza a los otros elementos en la parte distal de la raíz.

CONSTITUCIÓN ANATÓMICA

En la región yuxtahiliar se encuentran, de adelante hacia atrás: la vena renal, con los
linfáticos anteriores, luego los linfáticos medios, la rama anterior de la arteria renal, y por
último la rama posterior de la arteria renal. Estas arterias están rodeadas por los linfáticos
posteriores y los plexos nerviosos. Más profundamente se encuentran: la vena adelante, la
arteria atrás y arriba, acompañadas por los linfáticos y los nervios. La raíz renal está rodeada
por una vaina conectiva que prolonga medialmente la fascia renal. La raíz renal está
orientada en sentido lateral, hacia atrás y algo hacia abajo. Es más corta a la derecha que a
la izquierda. Su altura varía con la del hilio del riñón y con el modo de división de los vasos.
Su espesor depende del tejido adiposo que lo envuelve. Es extensible gracias a la elasticidad
de los vasos y a los desplazamientos laterales que se pueden
imponer, por tracción sobre la raíz, a la vena cava inferior
y a la aorta abdominal

RELACIONES

Se describen:

A. Atrás y medialmente: las raíces renales se aplican sobre


la cara anterolateral de la columna, luego sobre la fascia
que cubre el músculo psoas mayor, cruzando el tronco
simpático y los pilares principales del diafragma.
Corresponden al cuerpo de la 1.ª vértebra lumbar y al
disco intervertebral L1-L2.

B. Adelante: se distinguen: – La raíz renal derecha se


relaciona, por intermedio de la fascia
retroduodenopancreática, con la cara posterior de la
porción descendente del duodeno y de la cabeza del
páncreas,
con los arcos arteriales posteriores, el conducto colédoco y el origen de la vena porta hepática.
– La raíz renal izquierda, situada algo más alta, está detrás del cuerpo del páncreas y de la
flexura duodenoyeyunal.

C. Arriba: se encuentra por abajo y lateral a la extremidad medial de la glándula suprarrenal.

D. Abajo: la raíz está prolongada por el uréter hacia la región lumbar baja.

Las relaciones descritas aquí son válidas para la porción extrasinusal de la pelvis renal.

La forma de la raíz renal y su topografía dirigen las operaciones de exéresis del riñón: las
nefrectomías y las intervenciones sobre la pelvis renal o sobre los vasos renales. La mayor
longitud de la raíz izquierda explica que se extirpe con másfrecuencia el riñón izquierdo en caso
de un trasplante renal.
EN EL SER VIVO

Este punto se tratará en detalle más


adelante en el capítulo “Conjunto
renoureteral en el ser vivo”.
URÉTER

El uréter es un conducto largo y fino que se extiende desde la pelvis renal, ubicada a nivel
de la primera y segunda vértebra lumbar, hasta la vejiga urinaria, situada en la pelvis menor.

GENERALIDADES

TRAYECTO Y DIRECCIÓN

Originado en la región lumbar, el uréter se dirige verticalmente hacia abajo. Llega al nivel de
la bifurcación de la arteria ilíaca común, región sacroilíaca, y penetra en la pelvis menor,
dirigiéndose en forma oblicua hacia abajo, adelante y medialmente, llega al fondo de la
vejiga urinaria, atraviesa su pared y se abre en su cavidad. Los dos uréteres, primero
paralelos en el segmento lumbar, tienden a converger uno hacia el otro en la pelvis menor,
donde dibujan una curva de concavidad medial. Su posición es fija, pero a veces pueden ser
desplazados muy lejos de su posición normal por tumores abdominales o pelvianos
FORMA Y CALIBRE

Este conducto muscular, en el ser vivo, presenta movimientos peristálticos. Es estrecho en su


origen, la unión pieloureteral, y luego se dilata formando un huso lumbar: la porción abdominal,
que se estrecha nuevamente a nivel de los vasos ilíacos. Es seguido por la porción pélvica,
también en forma de huso alargado, que precede a la porción intramural, estrechamiento que se
produce cuando atraviesa la pared vesical.

El uréter mide de 30 a 35 cm de largo en el adulto. El izquierdo es algo más largo, 15 a 20 mm.


Su diámetro en el ser vivo y en estado normal no sobrepasa los 6 a 8 mm, pero puede
distenderse mucho por encima de un obstáculo.

La existencia de estas estrecheces en el trayecto del uréter explica la detención de la migración


de los cálculos (litos) provenientes de la pelvis renal: detención en la unión pieloureteral, en el
estrecho superior de la pelvis (detención más rara), en la unión ureterovesical (detención muy
frecuente).

Los cálculos ureterales pueden producir una obstrucción que provoca la distensión excesiva del
uréter o el espasmo de sus músculos, dando origen a un dolor intenso: el cólico renal.
ANOMALÍAS
Se describen:

– Uréteres dobles: dos orígenes y dos


terminaciones.
– Bífidos: dos orígenes y una
terminación.
– Terminaciones aberrantes, orificio en la
vagina o anorrectal.
– Megauréteres

Estas anomalías se explican por el


desarrollo embriológico del uréter a partir
de un brote yuxtacloacal del conducto
mesonéfrico [de Wolff].
ESTRUCTURA

El uréter comprende, de externo a interno, tres túnicas: adventicia, muscular y mucosa.

TÚNICA ADVENTICIA

Por arriba depende de la cápsula fibrosa del riñón. Se continúa hacia abajo con la capa
conectiva perivesical. Se prolonga alrededor del uréter hasta su terminación.

TÚNICA MUSCULAR

Incluye:

Fibras circulares: comienzan en la base de la papila renal, es el esfínter circumpapilar. En la


parte inferior pueden constituir un pequeño esfínter ubicado alrededor del orificio ureteral en la
vejiga urinaria. En realidad, la disposición de las fibras musculares es espiroidea; en razón de
la disposición de las espiras, cada fibra aparece circular cerca de la adventicia y longitudinal
cerca de la luz. Estas fibras musculares lisas dispuestas en fascículos presentan contacto
sintercelulares, que según aseguran algunostienen cohesión mecánica, mientras que otros
hablan de una acción de transmisión de potenciales eléctricos (Buzelin).
– Fibras longitudinales internas: terminan en el contorno
del orificio ureteral en la vejiga urinaria.

– Fibras longitudinales externas: mucho más largas, se extienden por el trígono vesical debajo
de la mucosa.

Esta musculatura adquiere un aspecto particular a nivel de la


travesía vesical (véase Porción intramural).

TÚNICA MUCOSA

Prolonga hacia abajo la mucosa de la pelvis renal y se confunde con la de la vejiga. Es una
mucosa lisa y regular (urotelio).

RELACIONES

Se las estudia en las regiones atravesadas por las tres porciones del uréter: abdominal, pélvica
e intramural.
PORCIÓN ABDOMINAL

Es la porción del uréter que se extiende desde la pelvis renal hasta la línea terminal (a nivel del
estrecho superior de la pelvis). En esta porción se estudian lasrelaciones del uréter a
nivel lumbar y sacroilíaco:

URÉTER LUMBAR

Atrás. El uréter se apoya sobre la fascia ilíaca que cubre al psoas. Cubiertos por esta fascia, los
nervios cutáneo femoral lateral y genitofemoral cruzan al conducto. El uréter lumbar se proyecta
medial a la extremidad de los procesos costales lumbares 3.º, 4.º y 5.º. El psoas cruza al uréter
por atrás. En la parte inferior de esta región, el uréter pasa algo lateral al triángulo [de Marcille],
limitado por el borde medial del psoas, el ala del sacro y el cuerpo de la 5.ª vértebra lumbar.
Cubierto por los vasos ilíacos comunes, este triángulo está atravesado por el tronco
lumbosacro, la arteria iliolumbar y el nervio obturador.

Medialmente. El uréter sigue a la vena cava inferior a la derecha, y algo más lejos, a la aorta a
la izquierda, con los nodos linfáticos y los plexos nerviosos que las acompañan. Los troncos
simpáticos lumbares están dispuestos medialmente, aplicados sobre los cuerpos vertebrales.
Adelante. El uréter se relaciona con la cara posterior del peritoneo parietal, del que lo separan los
vasos ováricos o testiculares que lo cruzan por adelante. A la derecha está cubierto por la flexura
inferior del duodeno, adosado por la fascia retroduodenopancreática. Se relaciona en seguida con la
fascia retrocólica ascendente, ocupada por los vasos cólicos derechos. A la izquierda está
totalmente detrás del pliegue duodenoyeyunal [arco de Treitz] y de la fascia retrocólica descendente,
que contienen a los vasos cólicos izquierdos y luego a la arteria mesentérica inferior.

Lateralmente. Después de haber franqueado la extremidad inferior del riñón (ligamento renoureteral),
el uréter se relaciona a distancia con el colon ascendente a la derecha y con el colon descendente a
la izquierda.

El mesocolon derecho e izquierdo, con su contenido, se pueden separar del plano posterior:
mediante decolamiento coloparietal. Se puede abordar también el uréter lumbar por vía
posterolateral, a través del espacio extraperitoneal.

En su trayecto lumbar, el uréter se encuentra rodeado por una capa adiposa que prolonga hacia
abajo a la cápsula adiposa del riñón [grasa perirrenal]. El uréter puede experimentar aquí estenosis
debidas a la degeneración fibrosa de ese tejido adiposo.
URÉTER SACROILÍACO

Es corto, de 3 a 5 cm. El uréter se sitúa aquí en la parte más posteromedial de la fosa ilíaca
(fig. 117-4).
Atrás.

El uréter cruza a las arterias ilíacas comunes. Los uréteres están dispuestos de manera
simétrica en relación con el plano mediano. La bifurcación aórtica se halla desplazada hacia la
izquierda. Esta asimetría motiva que el uréter derecho deba cruzar el origen de la ilíaca
externa, mientras que el izquierdo cruza la terminación de la ilíaca común (ley de Luschka). Las
arterias ocultan a las venas ilíacas, que son más posteriores.

Lateralmente. El uréter es seguido por los vasos, la arteria ovárica o testicular y el nervio
genitofemoral.

Adelante. Siempre adherente al peritoneo parietal posterior, el uréter se relaciona con el


contenido de la fosa ilíaca: a la derecha, con la terminación del mesenterio, región
cecoapendicular; a la izquierda, con la raíz secundaria del mesocolon sigmoide. Más allá se
encuentran las asas delgadas.
PORCIÓN PELVIANA

Es la porción del uréter que se


extiende desde la línea terminal
(estrecho superior de la pelvis)
hasta la vejiga.

URÉTER PELVIANO EN LA PELVIS


MASCULINAS

Describe una curva que lo acerca primero


a la pared pelviana, el segmento parietal,
y luego lo conduce hacia adelante y
medialmente en contacto con la vejiga, el
segmento yuxtavesical
SEGMENTO PARIETAL

Siempre subperitoneal, el uréter está situado entre la pared lateral del recto medialmente y la
pared pelviana lateralmente. Cruza así el eje vasculonervioso obturador, la arteria umbilical,
proveniente de la ilíaca interna con los nodos linfáticos correspondientes. Estos elementos lo
separan del plano muscular del obturador interno y del elevador del ano.

SEGMENTO YUXTAVESICAL

El uréter se encuentra en el espacio subperitoneal anterior, retrovesical, de la pelvis menor,


cada vez más profundo. El recto y luego las glándulas vesiculosas [vesículas seminales] se
encuentran mediales a él (Rochet). El uréter está acompañado por la fascia pelviana visceral,
que contiene: la arteria vesical inferior, rama de la ilíaca interna, que se divide lateral al uréter
en ramas prostáticas y ramas para la glándula vesiculosa; las venas correspondientes; los
nervios originados del plexo hipogástrico inferior; un tejido fibroadiposo condensado
alrededor de estos elementos. El uréter es cruzado adelante y arriba por el conducto
deferente, que pasa medialmente a él para alcanzar el pie de la glándula vesiculosa.
URÉTER PELVIANO EN LA PELVIS FEMENINA

Debido a la existencia del ligamento ancho del útero, que se extiende desde el útero hasta la
pared pelviana, se distinguen tres segmentos: retroligamentoso, infraligamentoso y
preligamentoso
SEGMENTO RETROLIGAMENTOSO

Corresponde al segmento parietal en el curso del cual, aplicado contra los vasos ilíacos internos,
es cruzado lateralmente por la arteria uterina. Medialmente, en el interior de la cavidad
peritoneal, se encuentra el ovario, sostenido por el ligamento suspensorio del ovario, que está
delante del uréter. Medialmente se encuentra el recto.

SEGMENTO INFTAGILIGAMENTOSO

El uréter penetra en el ligamento ancho con un


trayecto oblicuo hacia abajo, adelante y
medialmente. Se ubica en la base del ligamento
ancho [parametrio], a 2 o 3 cm del piso de la
pelvis, contenido en un tejido conectivo
dependiente de la vaina hipogástrica. Está situado
lateral al istmo del útero, en una pinza vascular
constituida por: la arteria uterina, que lo cruza en
sentido transversal por delante y por arriba, y la
arteria vaginal, que pasa por abajo, con las venas
profundas de la base del ligamento ancho. Se
halla acompañado por las ramas vaginales
de la arteria uterina y por los nervios del
plexo hipogástrico inferior situados
medialmente.

Estos dos segmentos tienen gran interés


práctico en patología y en cirugía: el uréter
puede ser comprimido en el cáncer del
cuello del útero, en el cáncer del ovario, o
desplazado por fibromas incluidos en el
ligamento ancho, o lesionado en el curso de
una histerectomía difícil.
SEGMENTO PRELIGAMENTOSO

Es el segmento yuxtavesical, marcado por un cambio de dirección del uréter hacia adelante
y en sentido medial. Después de haber seguido la porción lateral del fondo de saco vaginal,
se desplaza en el tabique vesicovaginal: su proyección en la pared anterior de la vagina
corresponde al trígono vaginal [triángulo de Pawlik]. En el momento de alcanzar la pared
vesical, los dos uréteres están separados uno del otro aproximadamente por unos 4
centímetros.

PORCIÓN INTRAMURAL

El trayecto del uréter en la pared vesical es oblicuo hacia abajo y medialmente (fig. 117-9).
Se abre en la vejiga urinaria por un orificio en forma de hendidura, el orificio ureteral, al
cual precede una pequeña dilatación ampular. A nivel del orificio, la mucosa ureteral se une
a la mucosa vesical formando un pequeño pliegue valvular. Los dos orificios ureterales
distan 2 cm aproximadamente uno del otro y forman junto con el orificio interno de la uretra,
en el cuello vesical, el trígono vesical [triángulo de Lieutaud]. Están unidos por una saliente
transversal, el pliegue interuretérico.
RELACIONES MUSCULARES

El uréter se desliza primero entre las capas longitudinal y circular del músculo vesical y
luego atraviesa esta última antes de llegar a la mucosa vesical. El uréter pierde susfibras
circulares al llegar a la vejiga. Conserva sus fibras longitudinales, las que se expanden en
abanico en la superficie endovesical del trígono. Queda separado del músculo vesical por
una vaina que constituye un plano de separación periureteral intramural (Juskiewenski).

VASCULARIZACIÓN E INERVACIÓN

Arterias

Según A. Latarjet y Laroyenne, se distinguen arterias ureterales largas y


cortas reunidas por numerosas anastomosis adventiciales

– Las arterias largas son: las ramas ureterales [superiores] que vienen de la arteria renal, y
las ramas ureterales [inferiores], originadas de la porción permeable de la arteria umbilical.

– Las arterias cortas llegan directamente al uréter a partir de la arteria testicular u ovárica,
o de la arteria uterina o la vesical inferior (en el sexo masculino). Los ramos anastomóticos
subadventiciales son ricos y escalonados en toda la longitud del conducto. Se puede
confiar en esa red en la cirugía del uréter (Pouilhes).
VENAS

Siguen a las arterias y establecen una vía anastomótica entre las venas ilíacas internas
y las venas renales.

LINFÁTICOS

Se distinguen un grupo superior, que alcanza a los nodos del riñón, un grupo tributario
de los nodos aórticos inferiores y un grupo inferior, pelviano, que drena en los nodos
ilíacos internos.

NERVIOS

Se observan: – Una raíz nerviosa superior, originada de los plexos renales. – Un nervio
principal inferior, proveniente del nervio hipogástrico, que llega a la porción sacroilíaca
del uréter.
FUNCIONAMENTO DEL URÉTER DENERVADO

Las terminaciones del sistema nervioso extrínseco, en el uréter, son insuficientes.

La propagación de los potenciales de acción es miogénica. El sistema nervioso autónomo


participa en los mecanismos de coordinación de los marcapasos pielocaliciales y de la
unión ureterovesical (Raney). Los nervios no son esenciales para la iniciación y
propagación de las ondas de contracción ureteral (peristaltismo ureteral).

Por estos motivos, el uréter del riñón trasplantado funciona normalmente (O’Connor,
Dawson-Edward).

BIBLIOGRAFIA: Latarjet - Ruiz Liard Anatomía Humana 5ª Edicion T2

file:///C:/Users/josem/Downloads/AHL5%20II%20tomo%20(1).pdf

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