Los evangelios sinópticos de Mateo, Marcos y Lucas fueron escritos con propósitos diferentes pero complementarios. Mateo se enfocó en demostrar que Jesús era el Mesías para lectores judíos, Marcos destacó a Jesús como el siervo perfecto para lectores romanos, y Lucas presentó a Jesús como el salvador de todos para lectores griegos. El Evangelio de Juan también tiene diferencias con los sinópticos como su énfasis en la divinidad de Jesús y en la necesidad de creer en él para tener vida eterna.
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Los evangelios sinópticos de Mateo, Marcos y Lucas fueron escritos con propósitos diferentes pero complementarios. Mateo se enfocó en demostrar que Jesús era el Mesías para lectores judíos, Marcos destacó a Jesús como el siervo perfecto para lectores romanos, y Lucas presentó a Jesús como el salvador de todos para lectores griegos. El Evangelio de Juan también tiene diferencias con los sinópticos como su énfasis en la divinidad de Jesús y en la necesidad de creer en él para tener vida eterna.
Los evangelios sinópticos de Mateo, Marcos y Lucas fueron escritos con propósitos diferentes pero complementarios. Mateo se enfocó en demostrar que Jesús era el Mesías para lectores judíos, Marcos destacó a Jesús como el siervo perfecto para lectores romanos, y Lucas presentó a Jesús como el salvador de todos para lectores griegos. El Evangelio de Juan también tiene diferencias con los sinópticos como su énfasis en la divinidad de Jesús y en la necesidad de creer en él para tener vida eterna.
Los evangelios sinópticos de Mateo, Marcos y Lucas fueron escritos con propósitos diferentes pero complementarios. Mateo se enfocó en demostrar que Jesús era el Mesías para lectores judíos, Marcos destacó a Jesús como el siervo perfecto para lectores romanos, y Lucas presentó a Jesús como el salvador de todos para lectores griegos. El Evangelio de Juan también tiene diferencias con los sinópticos como su énfasis en la divinidad de Jesús y en la necesidad de creer en él para tener vida eterna.
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Propósito de los evangelios sinópticos [Mateo, Marcos y Lucas].
Mateo escribió su Evangelio principalmente para los lectores judíos. Su
propósito principal era probar a los lectores que Jesucristo era el Mesías. El árbol genealógico era muy importante para los judíos, así que Mateo comenzó su Evangelio con la genealogía de Jesús. Mostró que Jesús era hijo de David e hijo de Abraham (Mateo 1:1).
Marcos escribió su Evangelio principalmente a los lectores romanos. Él sabía
que los romanos y otros gentiles no comprendían la cultura judaica ni el idioma arameo que los judíos hablaban. Su propósito era mostrar a Jesús obrando como el *siervo del Señor*. En este Evangelio vemos 42 veces a Cristo haciendo sus obras en forma inmediata, esto nos muestra que el Siervo estaba ocupado haciendo la obra de su padre.
Lucas fue un griego que les escribió a los griegos. Su propósito principal era presentar a Jesús como el Salvador de todos y enfatiza que Jesús vino a buscar y salvar lo que se había perdido (Lucas 19:10).
El propósito del evangelio de Juan.
No es difícil descubrir el propósito del evangelio de Juan; el mismo nos dice en
‘‘20:31” Pero estas (señales) se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
Él quería que la gente creyera que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y
recibieran vida eterna al seguirlo.
Comparación del evangelio de Juan con los evangelios sinópticos.
Los evangelios sinópticos Nos permiten aprender sobre Jesucristo desde
tres puntos de vida distintos. Los evangelios sinópticos juntamente con Juan, nos dan un cuadro completo de Jesús. Mateo enfatiza que Jesús era un rey, pero Marcos muestra que Él era un siervo perfecto. Lucas explica que Jesús era el Hijo del Hombre, pero Juan enfatiza que Él era el Hijo de Dios.
El evangelio de Juan difiere mucho de los evangelios sinópticos (Mateo-Marcos
y Lucas), a pesar de que éstos describen a Jesús, claro está que, con sus propios acentos, pero la misma perspectiva.
El evangelio de Juan, sin embargo, presenta otros aspectos que lo hacen
diferente:
En vez de parábolas, Juan incluye largos discursos.
Juan relata sólo siete milagros, bien seleccionados, conocidos como
‘'señales'’ En los sinópticos los milagros muestran la realidad del reino de Dios, mientras que en Juan revelan siempre algo de la gloria de Jesús. Los sinópticos describen sólo un viaje de Jesús a Jerusalén, centrando su ministerio sobre todo en Galilea; en tanto Juan habla de tres fiestas de la Pascua en las que Jesús participó en Jerusalén, extendiendo allí también su ministerio. El evangelio de Juan contiene las famosas palabras "Yo soy", en las que Jesús se revela su divinidad. En los evangelios sinópticos oímos más de los discursos de Jesús acerca del futuro. En Juan el énfasis está en la decisión que cae aquí y ahora de acuerdo a la posición que cada uno tome frente a Jesús.
Se dice que Juan habla de un evangelio espiritual y los sinópticos de un
evangelio corporal.
El lenguaje de Jesús en los sinópticos es anunciar el reino de Dios con
imágenes, comparaciones y parábolas para que el oyente interprete.
El lenguaje de Jesús en Juan es la auto presentación de Jesús como
realidad de salvación es totalmente cristología.
Es de suponer que Juan haya conocido la tradición sinóptica, pero que cuando él escribió lo hizo desde otra perspectiva, según la iglesia de su tiempo lo necesitaba.
Juan fue escrito unos 30 años después que los Sinópticos y fue escrito desde Éfeso por lo tanto los lectores fueron inconversos y creyentes de esta ciudad.
Hay 26 paralelos entre juan y los sinópticos. Las mismas historias, pero más detalladas. Ejemplo: Marcos 15:24-32 y Juan 19:18-24.
Omisiones de Juan.
Juan omite cosas porque no cumplen su propósito. Ejemplo: Nacimiento
de Jesús, Bautismo, Tentación, Trasfiguración, Santa cena, Getsemaní y ascensión.
Juan habla del ministerio de Jesús en Jerusalén y no en Galilea.
Juan menciona el reino de Dios muy pocas veces.
Juan dice discursos y diálogos prolongados en vez de parábolas.
Juan habla solo de 7 Milagros. Entre estos incluyen los que solo están en Juan, Ejemplo: Cambiar el agua en vino, curación de un ciego de nacimiento y la resurrección de Lázaro En algunas ocasiones Juan concuerda con los tres sinópticos:
El dicho de que el Bautista no es digno de desatar la sandalia del que
viene tras él: Juan 1:27 = Marcos 1:7; Mateo 3:11; Lucas 3:16.
Cinco panes y dos peces en la multiplicación para los 5,000: Juan 6:9 = Marcos 6:38; Mateo 14:17; Lucas 9:3.
Nombre de Gólgota y la explicación (Juan 19:17 = Marcos 1:22; Mateo
27:33).
La burla: "Salve, rey de los judíos" (Juan 19:3 = Marcos 15:18; Mateo 27:29).
La frase: A los pobres los tendréis siempre con vosotros. Esta unción es un preparativo para mi entierro (Juan 12:8-7 = Marcos 14:7-8; Mateo 26:11-12).
