Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

Gofrado

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 10

Cuño

1)
El “cuño” consta de un sello macho y hembra de metal, madera y goma que mediante
presión deja impreso en el documento un logotipo, nombre, dibujo, etc.
Este procedimiento se realiza una sola vez pero puede ser utilizado en reiteradas
oportunidades si es guardado correctamente.
Se puede además imprimir con el mismo motivo arriba, lo que genera un efecto de
impresión sobre relieve.

La técnica del "Cuño en seco" permite dar terminaciones únicas a impresos como tarjetas
personales, carpetas, hojas A4, etc. Es aconsejable hacerlo en medianas y grandes
cantidades ya que lleva un costo inicial bastante alto por el “cuño o matriz” y luego el de la
“cuñada o aplicación” en una máquina troqueladora diseñada para esto.
La mayor nitidez del cuño se logra en gramajes pesados por lo que se aprecia mejor en
tarjetas personales y carpetas pero también se suele realizar en hojas membretadas de bajo
gramaje.

2)
“El parentesco que existe entre un dibujo y una escultura carece de fronteras precisas. De
hecho, se puede afirmar que un dibujo es una escultura mínima, al igual que podría decirse
que una escultura es un dibujo excesivo». (Monedero Isorna. I Congreso EGA, Sevilla
1986).

El gofrado es un proceso que consiste en producir un relieve en el papel por el efecto de la


presión. La palabra procede del verbo francés goufrer, repujar, y en su origen consistió en
estampar en seco sobre papel (o las cubiertas de un libro) motivos en relieve o en hueco.
También se le ha denominado troquel, cuyos ejemplos más populares son la impresión
Braille o los atractivos adornos que vemos en las tarjetas de visita; también el cuño (troquel
con el que se sellan monedas y medallas) está relacionado con esta forma de hacer,
aunque estos dos últimos términos son más propios del ámbito de la impresión industrial.

Adoptado por los artistas, el gofrado parte tanto de matrices en relieve como en hueco
trabajadas por los metodos tradicionales o construidas con técnicas aditivas. Es muy común
estamparlo sin tinta sobre papel blanco (o en la gama) y su finalidad es construir la imagen
con los relieves producidos por la incidencia de la luz.

Determinar su origen el difícil. Parece ser que el primer ex libris, un sello de cerámica
perteneciente a Amenhotep III, se basó en este proceso. Pero desde el punto de vista de la
gráfica los primeros ejemplos se encuentran en la estampa japonesa con Harunobu quien
combinó el gofrado con colores tornasolados, delicadas aguadas o profundos negros para
crear sus intimistas escenas. También Utamaro lo utilizó con refinamiento dándole el
aspecto preciosista que caracteriza sus estampas.

En occidente fue usado por el escultor Alexandre Charpentier y en la época contemporánea


comenzó a potenciarse por Hayter en su Atelier 17. Posteriormente, en la década de los 50,
fue Pierre Soulages en el taller de Lacourière quien jugó con los efectos lumínicos que
produjeron sus estampas creadas con planchas taladradas al ácido. Puedes observarlas en
Amorosart.com ; Pierre Courtin estampó en seco sus buriles y esculpió planchas de 2
centímetros con escoplos, punzones y mordientes; Raoul Ubac, también escultor, jugó con
los efectos tridimensionales desplazando varias veces la misma matriz en el tórculo y el
húngaro-francés Étienne Hadju creó inmaculadas y minimalistas imágenes para ilustrar un
texto de Heráclito. A ellos se unen Lucio Fontana quien utilizó este recurso enla serie
Concetto Spaziale en 1960, Omar Rayo y Gabor Peterdi quien lo definió en su conocido
manual Printmaking, methods olds and news (1980). Hoy en día prácticamente ya no hay
grabador que no lo haya probado.

Al mirar estos relieves sin color, que casi quedan en el umbral de la visión, el espectador se
convierte en el coreógrafo que crea la imagen según la incidencia de la luz. Los factores
que el artista debe tener en cuenta a la hora de realizarlo aparecen desde el principio en la
concepción de la idea, durante el periodo de elaboración -ya que los condicionantes
técnicos y materiales son estrictos- y en la exhibición final. Son los siguientes:

La matriz: junto con el papel es el elemento protagonista del resultado final. Su composición
y forma determinarán el proceso de estampación. Puede hablarse de gofrados en relieve
-cuando el volumen sea convexo en el papel- y de gofrados en hueco cuando éstos sean
cóncavos. Ambos pueden mezclarse. Si se trata de una matriz aditiva los materiales
deberán ser muy duros y estar completamente secos para que resistan la alta presión a la
que se verán sometidos. Con respecto al tipo relieve que produzca, se encontrarán:

Matrices en bajorrelieve: Desniveles mínimos fáciles de estampar y conservar. Pueden


estamparse en seco en ausencia de color. El prensado posterior no presenta problemas.

Matrices en altorrelieve: Desniveles acentuados. Más llamativas que las anteriores


requieren mucho control técnico en la ejecución de la plancha, en la elección del papel y,
sobre todo, en la estampación. Una matriz con relieves pronunciados puede producir, en
sus formas más básicas picos o pozos en los que la convexidad o concavidad es en todas
direcciones.

En ambos casos pueden aparecer: crestas caracterizadas por bordes irregulares producidos
por entalladuras grabadas con ácido; laderas perpendiculares o no a la superficie del papel
responsables de crear las zonas de volumen; grandes zonas planas texturadas o no;
canales cóncavos o convexos consecuencia de tallas anchas y profundas o la unión de dos
o más planchas y por último toda suerte de texturas mixtas. En todos los casos hay que
vigilar las posibles torsiones del papel que pudieran producir arrugas. Las matrices en
altorrelieve llevadas al límite requieren lo que en el ámbito de la impresión industrial se
denomina contratroquel y habría que englobarlas dentro de otros procedimientos de
grabado tridimensional que se resuelve a base de moldes y contramoldes con papeles
especiales, pulpa de papel u otros materiales. Mención aparte merece también una original
técnica con denominación propia, cuyo punto de partida quizá fuese el deseo aún más
extremo de relieve: la mixografía. Echa un vistazo a mixografia.com. También puedes ver
en este enlace algunas mixografías realizadas por el emblemático Ed Rusha.

Matrices combinadas: si un mismo soporte presenta diferencias de desniveles muy


pronunciados, el estampador habrá de juzgar la presión y la conveniencia de realizar el
grabado en distintas fases. Hay ocasiones en que la solución es realmente compleja.

El papel: será el soporte desnudo de la imagen, por lo que su elección deberá ser muy
cuidada tanto desde el punto de vista técnico como estético.Un papel para gofrado debe
cumplir exigentes condiciones de flexibilidad para recoger fielmente las irregularidades de la
matriz. Ésta dependerá del tipo de papel y su encolado, de la longitud de sus fibras y del
tiempo de humedecido.

Las matrices en altorrelieve requieren de un papel de fibra larga y alto gramaje para evitar
roturas y un tiempo amplio de humedecido para adecuar la flexibilidad y eliminar el exceso
de cola . El color es una decisión absolutamente personal de cada artista, aunque
tradicionalmente se utilizan colores claros dado que sus cualidades para reflejar la luz son
mayores. Por este motivo habrá que mantener la matriz impoluta o intercalar entre ambos
un papel de seda en el momento de la estampación, cuidando que no queden arrugas.

Presión y mantillas: se elijen siempre en función de conseguir el registro más fidedigno de la


matriz. La presión debe ejecutarse al máximo sin que ésta o el papel se deterioren. Con
respecto a las mantillas funciona muy bien una combinación de dos (y hasta tres). La más
fina siempre en contacto con el papel; la intermedia, en contacto con el cilindro, ejercerá la
función de tracción.

Aplanado / prensado de la estampa: no es necesario en la estampación en seco. Los


altorrelieves deberán secarse al aire en los correspondientes stands o colgados con pinzas
según el procedimiento estándar. El peso puede deteriorarlos.

Enmarcado, iluminación y exposición: será la estética quien determine toda elección en este
apartado. Por lo que a mí respecta, aunque no olvide del todo la cuestión técnica, suelo
dejarme llevar por el aspecto sensual de la obra. Los gofrados suelen enmarcarse en cajas
para no deteriorar los relieves y la luz se estudia desde muchos puntos de vista para
potenciar los efectos, a sabiendas que la iluminación frontal afectará negativamente todo
esfuerzo de producir volumen. A partir de ahí sigue la estratagema del relieve y provoca la
combinación más adecuada entre la luz y la sombra: sombras punzantes, alargadas, cortas,
arrojadas, autoarrojadas, en semitonos, con luz natural, artificial, trémulas, fijas o
móviles…aplica toda tu sensibilidad e imaginación. “Nuestro pensamiento, en definitiva,
procede análogamente: creo que lo bello no es una sustancia en sí sino tan sólo un dibujo
de sombras, un juego de claroscuros producido por yuxtaposición de diferentes sustancias.
Así como una piedra fosforescente, colocada en la oscuridad, emite una irradiación y
expuesta a plena luz pierde toda su fascinación de joya preciosa, de igual manera la belleza
pierde su existencia si se le suprimen los efectos de la sombra». Junichiro Tanizaki, El
elogio de la sombra (1933)

Aunque hemos visto que la definición más estricta de gofrado refiere a estampas con
ausencia de color, se habrá comprobado que es frecuente ver imágenes entintadas que se
enriquecen con cierto relieve y a las que también hago referencia dentro de esta categoría.
Habría que distinguir si éste es un recurso estético buscado por el artista o simplemente
consecuencia de la presión del tórculo, ya que es conveniente conocer que la combinación
de cualquier técnica (aguafuerte, aguatinta…) con el gofrado precisa evaluar los desniveles
de la matriz para ajustar la presión. En ocasiones deberá realizarse en dos fases: imagen y
relieve.

Para ampliar información, te recomiendo un amplio capítulo de la autora Carmen Salazar


Pera, en su tesis doctoral de título El papel como soporte y matriz generadora de nuevas
imágenes a través de la sombra, pp. 299 a 304 (Universidad de Sevilla, 2012) Si quieres ver
más imágenes pincha en esta zona de worldpritmakers y como dato curioso, pincha en este
enlace en el que se realiza un gofrado a mano, puede que en alguna ocasión lo necesites.

🙂
Por último adjunto la imagen del almanaque realizado por Oscar Díaz, me ha gustado la
aplicación del gofrado

3)
¿Qué es el gofrado? Todo lo que necesitas saber (2021)
FEBRERO 16, 2021Antonio B. ANTONIO B.TIPOS DE ACABADOS6 MIN READ
Gofrado o impresión en estampación.
El proceso de gofrado en la impresión utiliza troqueles hechos a medida para crear el
levantamiento del papel según el diseño. El efecto contrario, crear hundimiento, también es
posible utilizando el mismo proceso. El gofrado también es conocido como estampación en
relieve. Como el gofrado se introduce en el papel, puede utilizarse para emular el grabado o
huecograbado.

El gofrado altera la superficie del papel o de otros materiales creando un efecto


tridimensional o de relieve en determinadas zonas. El proceso es extremadamente sencillo
y una forma rentable de mejorar el aspecto y la textura del papel.

El troquel es un conjunto de dos piezas de placas metálicas personalizadas creadas en


función de la imagen o el texto que se va a grabar.

Una de las piezas del troquel tiene la superficie del diseño en relieve y la otra el mismo
diseño empotrado en ella. Para crear el diseño en el papel, se presiona el papel entre ellas
y se calientan. La combinación de presión y calor da nueva forma a las fibras del papel.

El troquel puede ser de un solo nivel o tener varios niveles, según el nivel de detalle, la
complejidad o la altura o profundidad deseada del diseño.
Índice de contenidos
¿Cuál es la diferencia entre grabado y gofrado?
¿Qué tipos de estampación o gofrado existen?
Estampado ciego
Estampado combinado
Estampado registrado
Estampado de un solo nivel
Gofrado de varios niveles
Troquel escultural
Troquel con textura
Troquel de borde biselado
Troquel de cincel
Troquel redondeado
¿Por qué elegir el gofrado en tus trabajos de impresión?
¿En qué tipo de materiales puede utilizarse el gofrado?
Ejemplos de productos utilizando la estampación en relieve
¿Cuál es la diferencia entre grabado y gofrado?
Grabado. El proceso de grabado difiere del de gofrado. En lugar de un troquel que presiona
un diseño en el material, el grabado utiliza una herramienta o un láser para cortar
directamente un diseño en el metal.

Gofrado (estampado). El proceso de gofrado en relieve utiliza un juego de troqueles


personalizados para marcar la información en un sustrato metálico. Esta hendidura
permanente se crea utilizando un troquel macho-hembra en una prensa industrial. A
diferencia del grabado, la información en relieve se eleva en el material.

¿Qué tipos de estampación o gofrado existen?


Estampado ciego

Se trata de la utilización del proceso de gofrado en la impresión sin el uso de ningún otro
tipo de adorno de acabado de la impresión. Una forma de hacer que el gofrado ciego
destaque aún más es utilizar papel texturizado, ya que la zona que rodea al gofrado se
presionará de forma suave, creando más contraste.

Estampado combinado
Como su nombre indica, este tipo de troquel combina varios efectos en un solo proceso. Por
lo general, dado que los procesos son similares, la lámina y el estampado en relieve o el
gofrado se aplican juntos utilizando este tipo de troquel. Con este efecto combinado, toda la
zona en relieve queda plastificada.

Estampado registrado
Similar al gofrado combinado, combina el gofrado con otro adorno de acabado de
impresión, como la tinta, la lámina, el troquelado o incluso otro elemento en relieve.

Estampado de un solo nivel


Este proceso utiliza un troquel que cambia la superficie del papel en un solo nivel. Como el
troquel necesario para este tipo de estampado es sencillo, es la opción de estampado más
asequible.

Gofrado de varios niveles


Ejemplo de gofrado con estampación en varios niveles.
Este proceso de gofrado utiliza un troquel con distintos niveles para crear una impresión
más escultural o una textura en relieve más detallada.

Troquel escultural
Este tipo de troquel requiere un mecanizado manual personalizado para crear niveles y
detalles para un relieve que se asemeja a una escultura en bajorrelieve. Debido a que esto
requiere que alguien lo cree a mano, normalmente basado en una imagen proporcionada,
este es un método más caro de estampado.

Troquel con textura


Para crear este efecto, se fabrica un troquel con una textura grabada. Se diferencia de un
troquel multinivel o esculpido en que se trata de un troquel de un solo nivel con detalles
añadidos, como un simple dibujo.

Troquel de borde biselado


Este tipo de troquel es también un troquel de un solo nivel con un borde biselado. Los
troqueles profundos deben utilizar bordes biselados para evitar que el papel se dañe
durante el proceso de estampado. El bisel añadido por este tipo de troquel suele ser de 30 a
60 grados.

Troquel de cincel
Este tipo de troquel tiene forma de V, como un cincel, y también se conoce como troquel de
techo. Se utiliza con mayor frecuencia en el gofrado.

Troquel redondeado
Este tipo de troquel crea un efecto redondeado o abombado. Se suele utilizar para los
logotipos de las empresas u otros diseños con impresión tipográfica.

¿Por qué elegir el gofrado en tus trabajos de impresión?

La textura y la calidad superior que crea el estampado hacen que la estética de nuestro
producto mejore tanto a la vista como al tacto. Incluir un área en relieve en tu tarjeta de
visita, invitación a un evento o incluso en el embalaje, ayudará, sin ninguna duda, a captar
la atención y ofrecer una imagen mucho más profesional y creativa.

Aunque el estampado en relieve puede suponer un coste adicional para tu trabajo de


impresión, también le dará elegancia y un atractivo que no se consigue fácilmente con los
procesos de impresión habituales.

¿En qué tipo de materiales puede utilizarse el gofrado?


El efecto tridimensional creado por el proceso de gofrado en la impresión puede utilizarse
en muchos materiales. Además del papel, puede utilizarse en otros sustratos, como tela,
cuero, metal, acrílico y madera.

4)
Gofrado: un relieve en el papel para marcar la diferencia
ASPECTOS TÉCNICOS
No es un secreto que el acabado de un papel puede marcar la diferencia entre pasar
desapercibido o llamar la atención de un consumidor a través del efecto visual que crea y el
tacto que ofrece. En este contexto, el gofrado de un material se puede convertir en el factor
clave para conseguir que un proyecto o diseño destaque. Pero, ¿cómo se realiza esta
marca y qué factores hay que tener en cuenta?

Para empezar, es importante saber que el gofrado es un proceso por el cual se le da una
textura a un papel u otro tipo de soporte, a través de la aplicación de presión gracias a los
moldes que contienen el dibujo o motivo correspondiente. Pero este proceso puede
realizarse de dos formas diferentes: en plano o en cilindro.

Diferentes procesos de gofrado

La principal diferencia por la que se elige normalmente un sistema u otro es por el formato
del material a gofrar. Si se debe aplicar sobre hojas ya cortadas, los cilindros son incapaces
de manipular este formato, por lo que debería realizarse en plano. En cambio, las hojas son
imposibles de gofrar en cilindro, pero si el formato de origen es una bobina, este sistema
conseguirá una mayor velocidad de producción. Esta diferencia se debe a que para gofrar
son necesarias unas tensiones en el material para poder ejercer la presión en el lugar
exacto, ya que sino el papel se puede arrugar y se consigue un mal resultado.

Por ello, el sistema en plano se suele relevar a la aplicación de pequeños motivos a


“estampar”, mientras que los grandes dibujos se aplican mediante bobina. Por estos
motivos, a nivel industrial y ante grandes cantidades de papel, el gofrado se suele realizar
en bobina y posteriormente se transforma el producto acabado en hojas.

Gofrado en cilindro

Este sistema, que es el que usamos en Guarro Casas, funciona como su nombre indica a
través de dos cilindros grabados con el motivo a gofrar en el material: uno de ellos metálico,
que contiene la imagen en positivo; y el otro está creado por goma dura o lana prensada y
forma el negativo. En función del material de esta contrapartida, el gofrado quedará más
marcado o menos, del mismo modo que el papel a manipular también limitará el uso de uno
u otro.

En Guarro Casas solemos usar el cilindro negativo de lana, ya que permite una mayor
definición en el resultado. Esto se debe a que, para producirlo, se moja la lana y este
cilindro se hace girar sobre el positivo, sin papel en medio, para que el motivo se transfiera y
se cree una contrapartida perfecta.
Pero además de la definición, como indicábamos el material a gofrar también afecta en la
selección del cilindro negativo. Del mismo modo que en estos rodillos, en el papel gofrado
queda un positivo, que es la cara que muestra el motivo grabado, y un negativo, que es la
cara que lo enseña en sentido contrario al original (por ejemplo, las letras gofradas pueden
leerse al revés). En determinadas aplicaciones, esta segunda superficie no queremos que
se vea marcada. En ese caso, los cilindros de caucho o goma dura son la mejor opción, ya
que al tener una mayor rigidez el papel se marca menos, aunque, al contrario que pasa con
la lana, la definición del motivo es menor al quitarle profundidad al papel.

También cabe destacar del gofrado en cilindro que, pese a este formato “sin fin” que permite
este proceso más industrial, no es verdad que no tenga inicio ni final el motivo gofrado.
Sobre el papel, solo los ojos más expertos pueden ver una señal casi imperceptible, llamada
marca de moleta, que indica el punto en el que el molde del cilindro vuelve a empezar, pese
a que esta pieza se fabrica con continuidad en el dibujo para que el consumidor no pueda
ver ese punto de unión.

¿En frío o en caliente?

Además de la diferencia en plano o cilindro, los gofrados pueden realizarse a dos


temperaturas: en frío o en caliente. En Guarro Casas aplicamos ambos formatos, pero hay
que seleccionar muy bien sobre qué material se usa cada uno. La principal diferencia es
que la opción en caliente puede modificar el color del soporte, ya que por la alta
temperatura aplicada a presión es posible que algunos reaccionen y cambien de tonalidad.
Este truco es especialmente usado cuando quiere conseguirse un efecto bicolor, de forma
que la parte en la que se ha aplicado la presión del motivo a gofrar queda más oscura.

Pero hay que tener en cuenta que hay soportes de origen no celulósico que no se pueden
trabajar en caliente, ya que pueden modificarse totalmente o porque una alta temperatura
puede llegar a deshacer el material.

Reventamiento

Además, como pasa con otras técnicas de manipulación, no todos los papeles se pueden
gofrar con las mejores condiciones. Esto se debe a que, en función del soporte elegido, se
puede producir una pérdida de las propiedades mecánicas, reduciendo su resistencia y
pudiendo causar la rotura de los futuros productos. Por ello, en Guarro Casas realizamos
una prueba de reventamiento cada vez que goframos, para garantizar los mejores
resultados en cada una de las producciones.

En esta prueba, una máquina desprende chorros de aire a presión por un cilindro de unos
dos centímetros de diámetro, hasta que rompe el papel cuando la intensidad ya es
demasiado alta. Así, es posible medir la resistencia que tiene ese material gofrado y se
puede saber si es apto para las aplicaciones a las que se destinará.

El gofrado y las fibras de celulosa


¿A qué se debe una mayor o menor resistencia del papel gofrado? La respuesta es sencilla:
al aplicar esta manipulación al papel, estamos rompiendo o modificando la estructura de las
fibras de celulosa que lo forman, y por ello se le resta resistencia mecánica. De hecho, los
materiales gofrados se incluyen dentro de la categoría de papeles especiales ya que, por
mucho que pierden propiedades en el proceso, siguen siendo totalmente aptos para
aplicaciones como recubrimientos de editorial o packaging.

Contra más detalles tiene el motivo del gofrado, más afectación tiene sobre las fibras, como
por ejemplo en el caso de las imitaciones de piel o tela. Así, como podemos ver, es muy
importante la calidad del papel. En Guarro Casas tenemos más de 70 gofrados, ya que
gracias a sus características son muy atractivos especialmente para las portadas de libros
por sus texturas y tacto, y la gran resistencia proviene de las fibras largas que usamos.

Un ejemplo en el que ocurre el contrario es el papel higiénico, que generalmente se vende


gofrado. En este caso, el material es de muy baja resistencia, ya que tendrá un solo uso,
debe ser suave y no está fabricado para resistir grandes manipulaciones. De hecho, su
gofrado va más allá de la estética: se aplica para unir las diferentes capas de papel que
conforman el producto final. Así, no importa cuánta resistencia tiene al final del proceso, ya
que se consumirá y desechará.

En dirección a la fibra

Como hemos visto en algún post anterior, el papel avanza por la máquina de fabricación en
dirección a la fibra, para que todos los procesos se realicen de forma correcta, y cuando
llega al final y se convierte en bobina acaba también en este sentido. El gofrado, por tanto,
se produce del mismo modo en dirección a la fibra, especialmente para evitar una
deformación del material al aplicar la presión.

De hecho, este se convierte en otro de los factores a tener en cuenta cuando se aplica esta
manipulación. El papel se puede encoger o expandir en el proceso. Por ello, es importante
contar con un cilindro para gofrar unos milímetros más largo que el ancho de la bobina, para
asegurar que, pese a que el material se expanda un poco, toda la superficie quedará
marcada. Además, existen unas tolerancias, que en el estándar rondarían entre +/- 1 mm en
transversal (contra fibra) y +/- 6 mm en longitudinal (en dirección de la fibra). Como
generalmente al final del proceso la bobina se corta en hojas, esta variación de milímetros
no se aprecia en el resultado final, ya que serán de las medidas originales y el sobrante
queda eliminado.

Un gofrado para cada material

Para acabar, recuperamos una idea que ya hemos apuntado: casi todos los materiales
admiten un gofrado, pero hay que trabajarlo con sumo cuidado para evitar la rotura del
papel o un mal acabado. Los motivos más pronunciados deben dejarse para los papeles de
mayor gramaje, ya que los que tienen menor grosor pueden llegar a romperse. Por el
contrario, los gofrados muy finos en gramajes altos pueden no llegar a marcarse
correctamente y el soporte “escupe” la marca. Existen guías, como la propia que hemos
elaborado en Guarro Casas a través de nuestros años de tradición, que ayuda a elegir la
mejor combinación para un gofrado excelente.
5)

También podría gustarte